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Abraham: porque tuvo que enfrentarse ante toda su familia por seguir a Dios y al final Dios lo

bendijo grandemente
Jose: porque fue vendido por sus hermanos como esclavo pero todo fue un plan de Dios. Dios lo
hizo segundo al mando de todo egipto y lo bendijo
eliseo porque se burlaban de el por su calvicie, pero Dios le dio poder para herir a los que le hacian
mal, y entonces Dios lo cuido y lo bendijo

La boda de Caná
El milagro de la transformación del agua en vino realizado por Jesús, según el relato de la boda en
Caná de Galilea, se considera el primero de los grandes signos del Señor Jesús, pues así nos lo
transmite el evangelio de Juan, como una de las señales reveladoras de su gloria (Jn 2, 1-11). Yo
quisiera resaltar su profundo sentido teológico en clave matrimonial desde el preludio gozoso del
amor que nos brinda el magnífico poema del libro de Isaías (Is 62,1-5). Este profeta canta la
excelencia del amor entre el hombre y la mujer y destaca la belleza y grandeza del amor
matrimonial de la pareja humana hasta el punto de ser ésta la experiencia humana que sirve de
referente comparativo al profeta para exaltar el amor de Dios a la humanidad: "Como un joven se
casa con su novia, así se desposa el que te construyó; la alegría que encuentra el marido con su
esposa la encontrará tu Dios contigo".

Jotán fue leal a Dios aunque su familia tenía problemas


otán era hijo del hombre más poderoso de Judá: el rey Uzías. Por muchos años, incluso
antes de que Jotán naciera, su padre había sido un buen rey. Pero, tiempo después, cuando
Jotán era joven, Uzías se hizo orgulloso y desobedeció la ley de Dios. Entonces Jehová hizo
que le diera lepra, una terrible enfermedad. ¿Sabes cómo reaccionó Jotán? *...

Jotán no dejó de servir a Dios. Tal vez lo ayudó su madre, Jerusah. Pero seguramente fue
muy difícil para él mantenerse leal después de saber que a su padre lo habían echado de la
casa de Jehová.

¿Te imaginas que alguno de tus padres dejara de servir a Jehová? Qué situación tan difícil,
¿verdad?... No tiene nada de malo que pienses que eso puede suceder. Ver lo que David
escribió en la Biblia nos ayudará a entenderlo.

Su padre, Jesé, era un hombre bueno y un fiel siervo de Dios. Y aunque podemos estar
seguros de que David lo quería mucho, amaba todavía más a Jehová. ¿Cómo lo sabemos?

 Pues bien, abramos la Biblia y busquemos Salmo 27:10. Allí, David escribió: “En caso de
que mi propio padre y mi propia madre de veras me dejaran, aun Jehová mismo me
acogería”. ¿Te fijaste? David nunca dejaría de servir a Jehová aunque uno de sus padres lo
hiciera.
Y tú, ¿seguirías sirviendo a Jehová si papá o mamá dejara de amarlo?... Es bueno que
pienses en esto, pues el mandato más importante que da la Biblia es: “Tienes que amar a
Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente”.

Estas palabras muestran que debemos ser fieles a Jehová incluso cuando se nos haga difícil.
Piensa: ¿quién quiere que dejes de servir a Dios?... Sí, su peor enemigo: Satanás. Jesús
dijo que él es “el gobernante de este mundo”. Y la Biblia también lo llama “el dios de este
sistema de cosas”. ¿Significa esto que debemos tenerle miedo al Diablo?...

Claro que no. Más bien, debemos recordar que Jehová es más poderoso que Satanás y que nos
cuidará si confiamos en él. ¿Por qué no lees la historia de David y Goliat? Allí descubrirás cómo
Jehová salvó a David de aquel malvado gigante. A ti también te protegerá si nunca dejas de
servirle.

(Éxodo 16:2-3) Israel murmura contra Moisés y Aarón.

Y toda la congregación de los hijos de Israel murmuró contra Moisés y Aarón en el


desierto; y les decían los hijos de Israel: Ojalá hubiéramos muerto por mano de
Jehová en la tierra de Egipto, cuando nos sentábamos a las ollas de carne, cuando
comíamos pan hasta saciarnos; pues nos habéis sacado a este desierto para matar de
hambre a toda esta multitud.

Cuando nos sentábamos a las ollas de carne, cuando comíamos pan hasta saciarnos:

Nos habéis sacado a este desierto para matar de hambre a toda esta multitud

(Éxodo 16:4-5) Dios anuncia a Moisés la llegada del pan del cielo.

Y Jehová dijo a Moisés: He aquí yo os haré llover pan del cielo; y el pueblo saldrá, y
recogerá diariamente la porción de un día, para que yo lo pruebe si anda en mi ley, o
no. Mas en el sexto día prepararán para guardar el doble de lo que suelen recoger
cada día.

Él ha oído vuestras murmuraciones contra Jehová… vuestras murmuraciones con


que habéis murmurado contra él… Vuestras murmuraciones no son contra nosotros,
sino contra Jehová: El pueblo pensó que estaban murmurando en contra de Moisés y de
Aarón (Éxodo 16:2). Pero en realidad ellos estaban murmurando en contra de Jehová.

d. Jehová os dará en la tarde carne para comer: En Éxodo 16:4, Dios prometió el dar
pan del cielo en la mañana. Aquí Él también promete el dar carne para comer en la tarde.

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