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SALA PENAL PERMANENTE

R.N. N° 3156 -2009

TACNA

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Lima, dieciséis de setiembre de dos mil diez.-

VISTOS; interviniendo como ponente el

señor Príncipe Trujillo; el recurso de nulidad interpuesto por el querellante Edilberto De La Cruz
Cesáreo Solazar Zender contra la sentencia de vista de fojas quinientos setenta y uno, del
veintidós de junio de dos mil nueve, en el extremo que por mayoría revocó la sentencia de
primera instancia de fojas cuatrocientos veintiocho, del veintiséis de febrero de dos mil nueve,
que declaró la reserva del fallo condenatorio a la querellada Flor María Collantes Tello, como
autora del delito contra el honor - difamación, en agravio del recurrente, y reformándola la
absolvió del referido ilícito penal; de conformidad con lo opinado por el señor Fiscal Supremo en lo
Penal; y CONSIDERANDO: Primero: Que el querellante Edilberto De La Cruz Cesáreo Solazar Zender
en su recurso formalizado de fojas quinientos setenta y ocho y quinientos ochenta y seis sostiene
que solamente pudieron obtener expresiones difundidas en periódicos y correos electrónicos por
parte de la querellada mas no en las emisoras por la sencilla razón de que no conocía el día y la
hora en que las efectuó; que sólo tomaron conocimiento que las emitió porque terceras personas
las oyeron y fue en esos programas radiales que expresó las frases injuriosas sobre el supuesto
acoso sexual del que fue víctima por parte del recurrente; que no se valoraron los documentos
notariales de las personas que se desistieron de haber expresado inicialmente que tomaron
conocimiento del acoso sexual qué supuestamente efectuó; que es un profesional que goza de un
buen prestigio; que en muchas ocasiones públicamente, incluso en presencia de su esposa e hijos,
le imputó hechos que jamás ocurrieron; que la reserva del fallo condenatorio que le impuso el
Juez Penal a la querellada fue

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una sanción benevolente al igual que la reparación civil; que no se valoró íntegramente la prueba
actuada en el proceso. Segundo: Que se imputa a la querellada Flor María Collantes Tello haber
presentado una falsa queja sobre hostigamiento sexual contra el querellante Edilberto De La Cruz
Cesáreo Salazar Zender -en su condición de Director de la Dirección Médica de la Red Asistencial
de Tacna-, que tuvo por objeto dañar su reputación y buen nombre sin medir las consecuencias
que la misma originó, pues en el mismo centro hospitalario labora su cónyuge; que detalló
circunstancias irreales como que el referido querellante pretendió utilizar su cargo para lograr
caricias de la querellada; que interpuesta la denuncia por hostigamiento sexual, la denunciante
concurrió en reiteradas ocasiones a medios de comunicación radial e incluso envió cartas cuyos
textos no guardan la cordura, menos el respeto que debe tener hacia el cargo desempeñado; que
posteriormente las autoridades de Essalud declararon improcedente la denuncia formulada por la
querellada por extemporánea. Tercero: Que conforme lo expone el propio recurrente en su
querella de fojas cincuenta así como en su respectivo recurso de nulidad la querellada "concurrió
en reiteradas ocasiones a medios de comunicación radial e incluso remitió cartas cuyos textos no
guardan la cordura menos el respeto que debe tener hacia su persona...", sin embargo, de los
recaudos que acompañó a su pretensión no se evidencia la existencia de medio probatorio alguno
que confirme lo expresado. Cuarto: Que si bien la querellada presentó una queja por acoso sexual
-véase fojas cuarenta- y ésta concluyó con el pronunciamiento de la autoridad administrativa en el
sentido de que no se acreditó la responsabilidad del ahora querellante -véase fojas doce-, hizo uso
de un derecho que a pesar de que le fue adverso no lo convierte en un hecho ilícito, máxime si la
pretensión del recurrente versa

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sobre la difusión de los mismos, extremo éste que no se acreditó pues del propio tenor de su
querella se advierte que ofreció: "/as cintas de grabación del programa radial Visión, las que
deben ser requeridas por vuestra judicatura...", es decir, no lo presentó oportunamente. Quinto:
Que, sin embargo, el querellante cuando prestó su declaración preventiva refirió que "tenía en su
poder las grabaciones efectuadas en distintos medios de comunicación radial y que las pondría a
disposición del Juzgado con la traducción notarial correspondiente..." -véase fojas ciento setenta y
nueve-; y sobre dicha base ofreció a fojas doscientos dieciocho la transcripción notarial de una
entrevista en "Radio Caplina" -emisora distinta a la ofrecida-, la que versó sobre una entrevista en
la que no se identificó a los interlocutores; y además ofreció una transcripción notarial de una
entrevista que se realizó en "Radio Edición" por parte de un periodista no identificado al
querellante -véase fojas doscientos cuarenta y seis-, consecuentemente no cumplió con presentar
el medio probatorio que ofreció primigeniamente. Sexto: Que, por otro lado, si bien de fojas
quinientos veinticuatro a quinientos veintinueve adjuntó notas periodísticas relativas a la denuncia
de acoso sexual, su autoría no corresponde a la querellada y sus respectivas publicaciones se
efectuaron con posterioridad a la interposición de su querella. Sétimo: Que para que se configure
el delito de difamación se requiere tres elementos concurrentes: a) la imputación de un hecho,
calidad o conducta que pueda perjudicar el honor o la reputación de una persona; b) la difusión o
publicidad de la imputación, y c) la imputación subjetiva a título de dolo. Octavo: Que, del análisis
de lo actuado, se advierte claramente que no se acreditó que la querellada Collantes Tello haya
actuado delictivamente porque no existe medio probatorio alguno que así lo determine, por lo
que este Supremo Colegiado logra concluir que la

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sentencia recurrida se encuentra arreglada a derecho. Por estos fundamentos: declararon NO


HABER NULIDAD en la sentencia de vista de fojas quinientos setenta y uno, del veintidós de junio
de dos mil nueve, en el extremo que por mayoría revocó la sentencia de primera instancia de fojas
cuatrocientos veintiocho, del veintiséis de febrero de dos mil nueve, que declaró la reserva del
fallo condenatorio a la querellada Flor María Collantes Tello, como autora del delito contra el.
honor - difamación, en agravio del recurrente, y reformándola la absolvió del referido ilícito penal;
con lo demás que al respecto contiene y es materia del recurso; y los de volvieron.-

SS.

SAN MARTÍN CASTRO

LECAROS CORNEJO

PRADO SALDARRIAGA

PRINCIPE TRUJILLO

CALDERÓN CASTILLO

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