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Monedas aqueménidas

El imperio aqueménida en la época de su máxima expansión.123


Las monedas aqueménidas son la que se emitieron bajo el dominio del Imperio
aqueménida entre el año 520 a. C. y el 330 a. C. El dárico fue la primera moneda de
oro y, junto con su contraparte de plata, el siclo, representó el patrón monetario
bimetálico del Imperio aqueménida.4

Sin embargo, las monedas aqueménidas cubren no solo las emisiones oficiales en
dáricos y siclos, sino también otras acuñaciones realizadas por algunos
gobernadores aqueménidas (sátrapas), como las de Asia Menor (Anatolia).

Índice
1 Primeras acuñaciones de Asia occidental bajo el Imperio aqueménida
1.1 El tesoro de la Apadana (ca. 515 a. C.)
2 Dáricos y siclos
2.1 Actividad de las cecas
2.2 Patrones
2.3 Diseño
2.4 Extensión
2.5 Hallazgos arqueológicos
3 La moneda griega en el Imperio aqueménida
4 La moneda en Asia meridional en el Imperio aqueménida
5 Monedas de los sátrapas
5.1 Primeros intentos de retrato
6 Después de las conquistas de Alejandro Magno
7 Referencias
8 Bibliografía
9 Enlaces externos
Primeras acuñaciones de Asia occidental bajo el Imperio aqueménida

Tipo de moneda de Creso, la creseida, acuñada en Lidia durante los reinados de Ciro
II el Grande a Darío I. C. 545-520 a. C.5

Moneda de Licia, con un prótomo de toro en el anverso y con un motivo geométrico


incuso marcado con punzón en el reverso. C. 520-470 a. C.
Cuando Ciro II (c. 559-530 a. C.) llegó al poder, la moneda no era común en su
reino, sí en cambio, la plata. Los lingotes se utilizaban en las relaciones
comerciales, una práctica común en Asia Central después del siglo VI a. C.67

Ciro introdujo la moneda en su imperio a partir del 546 a. C., tras su conquista de
Lidia y la derrota de su rey Creso, cuyo padre acuñó las primeras monedas de la
humanidad. Con su conquista de Lidia, Ciro accedió a una región desarrollada, con
una metalurgia muy avanzada y medio siglo de acuñaciones, lo que convirtió a ese
territorio en una de las potencias comerciales de su época.6

Se supone que Ciro adoptó inicialmente la moneda de Lidia y luego continuó acuñando
sus propias creseidas con la tipología característica del león y el toro.6 El
estatero pesaba 10,7 gramos, un estándar creado inicialmente por Creso y adoptado
más tarde por los persas, conocido como el “estándar persa”. Los persas también
acuñaron medias creseidas, con un peso de 5,35 gramos, que luego se convertiría en
el patrón de peso de los siclos, introducido a finales del siglo VI a. C.89

Poco después del 546 a. C., Ciro también se apoderó de toda Asia Menor, incluyendo
otros reinos como Licia, Caria o Jonia, a partir de las conquistas de su general
Harpago.10

Con la conquista de Lidia y la adopción de su sistema monetario, el incipiente


Imperio aqueménida logró la supremacía económica. La ceca estaba ubicada en Sardes,
entonces la capital de todas las satrapías, una región que suministraba moneda
circulante.11

En cuanto a la tecnología de las monedas, ambas caras se grababan por separado.


Estas primeras monedas tenían un reverso incuso grabado a golpe de punzón, mientras
que los motivos del anverso consistían en una figura pictórica.12 Las monedas de
Lidia se acuñaban con un doble golpe de punzón en el reverso, una técnica que se
simplificaría en la época de Darío I, en la que se usaba un solo golpe de punzón.
Algunas de las primeras monedas de Licia bajo los aqueménidas también mostraban un
diseño animal en el anverso y marcas de punzón incusas en el reverso que
reproducían formas geométricas.1314

Moneda de Fasélide, Licia. Ca. 550-520 a. C.


Moneda de Fasélide, Licia. Ca. 550-520 a. C.

Moneda de Licia. Ca. 520-460 a. C.


Moneda de Licia. Ca. 520-460 a. C.

Moneda de Licia. Ca. 520-470 a. C. Acuñación con cuño del anverso gastado.[15]
Moneda de Licia. Ca. 520-470 a. C. Acuñación con cuño del anverso gastado.15

Moneda de Lesbos. Ca. 510-480 a. C.


Moneda de Lesbos. Ca. 510-480 a. C.

Moneda de Licia, con león y Pegaso en círculo. Ca. 480-460 a. C.


Moneda de Licia, con león y Pegaso en círculo. Ca. 480-460 a. C.

El tesoro de la Apadana (ca. 515 a. C.)


Artículo principal: Tesoro de la Apadana
En el momento de la fundación de la Apadana de Persépolis, alrededor del 515 a. C.,
los aqueménidas aún no debían tener ideados sus dáricos y sus siclos. Esto deriva
del hecho de que ninguna de estas monedas se encontró en el hallazgo monetario
debajo de las piedras de la Apadana. Sin embargo, en este tesoro aparecieron
grandes cantidades de creseidas de acuñadas en Sardes, probablemente durante el
reinado de Darío I, así como estatuas de plata importadas de la Grecia arcaica.4

Estos son los tipos de monedas más comunes presentes en el tesoro de la Apadana:

Creseida de oro.
Creseida de oro.

Estatero de Egina.
Estatero de Egina.

Moneda de Abdera, Tracia.


Moneda de Abdera, Tracia.

Dáricos y siclos

Siclo del tipo I (“rey con arco y flechas”), solo con la parte superior del
cuerpo), de la época de Darío I. Ca. 520-505 a. C.
Dárico del tipo II (“rey disparando flechas”), desde la época de Darío I hasta
Jerjes I, ca. 505-480 a. C. No se conocen siclos de este tipo.4
Los primeros cambios introducidos en las monedas aqueménidas que heredaron de los
lidios, se produjeron durante el reinado de Darío I (522-486 a. C.). En ese período
la acuñación de creseidas en Sardes fue reemplazando progresivamente por la de
dáricos y siclos. Desde alrededor del 510 a. C., Darío simplificó el procedimiento
de acuñación al limitar a un solo golpe de punzón el grabado de los reversos, que
en la acuñación de Lidia era doble, e introdujo la imagen del rey persa en lugar
del león y el característico toro.411

En una tablilla de arcilla datada en el año 22 del reinado de Darío I (c. 500 a.
C.), se reproduce un siclo con el característico guerrero disparando una flecha, lo
que demuestra que ya existía tal moneda en ese momento.1617 Debido a este y otros
descubrimientos, la creación del dárico y el siclo se remonta a la última década
del siglo VI a. C., durante el reinado de Darío I.4

Las primeras de estas nuevas monedas aqueménidas eran todas de plata, mientras que
las de oro implantadas por Creso se mantuvieron en circulación. Darío introdujo los
nuevos modelos de monedas de oro conocidas como dáricos, tomando el nombre de la
palabra daruiyaka, del idioma persa antiguo, que significaba “dorado”.11 A pesar de
haber desarrollado su propio sistema monetario, los aqueménidas continuaron
reconociendo y aceptando la producción monetaria local en los territorios
controlados por ellos, particularmente en Asia Occidental.18

Actividad de las cecas

Localización de Sardes, en Lidia.


Aunque los aqueménidas desarrollaron completamente la producción de moneda en Asia
Occidental, la economía basada en el trueque mantuvo su importancia en el corazón
de Irán durante todo el período aqueménida y no se implementaron cecas en esa zona.
La acuñación en Irán no comenzó hasta aproximadamente el 330 a. C., bajo Alejandro
Magno y durante el Imperio seléucida. La circulación de los dáricos se limitó
principalmente a la parte occidental del Imperio aqueménida.11

Parece que toda la actividad de acuñación de dáricos y siclos para todo el imperio
se centralizó en una, o quizás dos cecas: en Sardes y probablemente en Licia.19
Sardes siguió siendo la ceca central de la moneda aqueménida y no hay evidencia de
otras cecas para las nuevas monedas aqueménidas a lo largo de la duración del
imperio.20 Sobre la base de las conclusiones monetarias, Sardes se mantuvo como
ceca central de las moneda aqueménidas, pero no se puede descartar la posibilidad
de que existieran cecas secundarias en el suroeste y noroeste de Asia Menor.4

En general, la acuñación de dáricos y siclos debe haber sido en pequeñas cantidades


en comparación con otras producciones en moneda local y la circulación de monedas
griegas en aquella zona.21 Aunque los dáricos de oro se convirtieron en moneda
internacional, circulando por todo el mundo antiguo, la circulación de siclos de
plata se limitó a Asia Menor: los hallazgos importantes de siclos solo ocurren en
esa zona, y han aparecido pocos en otras zonas. Siempre son muy marginales, en
comparación con las monedas griegas, incluso en los territorios aqueménidas.20

Según el numismático británico Martin Preice, no hay duda de que algunos tipos de
dáricos (que él llama tipo I y tipo II) fueron acuñados en Sardes, continuando
inmediatamente la producción de creseidas, ya que ambas monedas tenían un peso y
tipología similar. Price insiste en que los hallazgos de creseidas y los tipos de
dáricos y siclos que reproducen la figura del arquero no corresponden a cuestiones
imperiales, sino a la satrapía de Lidia.22

Patrones
Sistema bimetálico de la moneda aqueménida: el valor de un dárico equivalía al de
20 siclos.
Darío introdujo la reforma del sistema monetario c. 510-500 a. C., basado en el
dárico como moneda de oro y el siclo como unidad de plata, con un tipo de cambio
entre ellos de un dárico por cada 20 siclos (la relación entre el valor del oro y
el de la plata era de 1 a 13).411

El peso de la moneda de oro estaba entre 8,10 y 8,50 gramos, basado en el siclo
babilónico, ligeramente superior que el patrón utilizado por Creso, de 8,06
gramos.11 La pureza del oro estaba entre el 98% y el 99%. El valor de un dárico era
el mismo que el de 25 dracmas áticas, que representaban aproximadamente el salario
de un mes de un soldado.23 Esta nueva moneda ganó mucha popularidad en todo el
mundo antiguo durante más de 150 años.11

Alrededor del 395 a. C., los aqueménidas, encabezados por el sátrapa Farnabazo II,
sobornaron a los estados griegos para atacar Esparta mediante el pago de decenas de
miles de daricos, que en ese momento estaban desarrollando una campaña bélica en
Asia Menor dirigida por Agesilao II. Esto marcó el comienzo de la Guerra de
Corinto. Según Plutarco, el rey espartano Agesilao dijo al salir de Asia «Fui
expulsado por 10 000 arqueros persas», en referencia a los dáricos por los diseños
en su anverso, ya que esa cantidad de dinero se había pagado a los políticos
atenienses y tebanos para iniciar la guerra contra Esparta.232425

Por su parte, los siclos pesaban entre 5,40 y 5,60 gramos, y se diseñaron en base a
la mitad del siclo lidio de entre 10,73 y 10,92 gramos por unidad. La pureza se
encontraba al principio del 97% al 98%, pero hacia mediados del siglo IV a. C. se
redujo al 94% o 95%. En relación con la moneda ática, un siclo equivalía a siete
óbolos y medio.

Aunque la región babilónica nunca había acuñado dáricos o siclos, después de su


conquista por Alejandro Magno, el sátrapa Maceo, reconfirmado en su lugar por
Alejandro, emitió dáricos dobles de 16,65 gramos.26

Arquero de Heracles en una moneda de Chipre de finales del siglo VI o principios de


la V a. C. (izquierda) y siclo aqueménida tipo II (derecha).
Diseño
La tipología de arquero característica de la moneda aqueménida puede haber derivado
de otras monedas griegas similares de su época, en particular las flechas de
Heracles. La adaptación de este diseño para la representación del rey o del héroe
aqueménida en el anverso puede haber tenido el contenido de glorificación del rey
fácilmente inteligible para la población helenizada de las zonas occidentales del
Imperio aqueménida, para la que, precisamente, estas monedas fueron previstas.2728

Asimismo, en el arte sumerio se conocen otras representaciones del rey como un


arquero (por ejemplo disparando desde su carro), por lo que esta tipología también
sería natural para esa población.2728

El arquero de tipo II, menos hierático y rígido que el arquero de tipo I, puede
representar la fusión de la concepción oriental del rey como un cazador real y la
occidental como un héroe, presentando al rey aqueménida como un competidor olímpico
con un interés propagandístico cara al oeste.2728

Siclo de tipo I (rey con arco y flechas), de la época de Darío I. Ca. 520-505 a. C.
Siclo de tipo I (rey con arco y flechas), de la época de Darío I. Ca. 520-505 a. C.

Siclo de tipo II (rey lanzando flechas), desde la época de Darío I hasta la de


Jerjes I. Ca. 505-480 a. C.
Siclo de tipo II (rey lanzando flechas), desde la época de Darío I hasta la de
Jerjes I. Ca. 505-480 a. C.

Siclo de tipo III (rey corriendo con lanza), de la época de Jerjes I.


Siclo de tipo III (rey corriendo con lanza), de la época de Jerjes I.

Siclo de tipo IV (rey corriendo con daga), desde la época de Artajerjes II hasta la
de Artajerjes III. Ca. 375-340 a. C.
Siclo de tipo IV (rey corriendo con daga), desde la época de Artajerjes II hasta la
de Artajerjes III. Ca. 375-340 a. C.

Dárico de tipo II (rey arrojando flechas), desde la época de Darío I hasta Jerjes
I.[4]
Dárico de tipo II (rey arrojando flechas), desde la época de Darío I hasta Jerjes
I.4

Dárico de tipo III (rey corriendo con lanza). Mediados del siglo IV a. C.
Dárico de tipo III (rey corriendo con lanza). Mediados del siglo IV a. C.

Dárico de tipo IV (rey corriendo con daga), desde la época de Artajerjes II hasta
la de Artajerjes III.
Dárico de tipo IV (rey corriendo con daga), desde la época de Artajerjes II hasta
la de Artajerjes III.

Doble dárico acuñado después de la conquista de Alejandro Magno, en Babilonia, ca.


322-315 a. C.
Doble dárico acuñado después de la conquista de Alejandro Magno, en Babilonia, ca.
322-315 a. C.

Extensión

Filipeo, o estatero de oro de Filipo II de Macedonia (359-336 a. C.) Supuso la


primera competencia real para el dárico aqueménida.
El dárico se convirtió en una moneda aceptada y deseada en todo el mundo antiguo,
ya que tenía el formato más conveniente para intercambiar y acumular riquezas. El
oro acuñado por los griegos era bastante escaso, pero sus tetradracmas atenienses
de plata también se convirtieron en una especie de moneda mundial a partir del
siglo V a. C.19

La primera competencia notable de oro notable para el prestigioso dárico como medio
para almacenar riquezas y para realizar pagos importantes incluso a nivel
internacional vino de la mano de Filipo II de Macedonia (359-336 a. C.), quien
introdujo su propia moneda de oro, el estatero, llamada por los griegos dareikos
philippeios (“dárico de Filipo”).19

Hallazgos arqueológicos
Se han encontrado dáricos en Asia Menor, Grecia, Macedonia e Italia. También se han
encontrado siclos en tesoros en Asia Menor, y monedas sueltas junto con otras
monedas griegas desde el antiguo Egipto hasta Afganistán y Pakistán (tesoro de
Shaikhan Dehri).19

La moneda griega en el Imperio aqueménida

Moneda del sátrapa de Egipto Sabaces, a imitación de una moneda ateniense. Ca. 340-
333 a. C.

Fragmentos y pequeños objetos de plata para uso como moneda de los aqueménidas del
Levante, que incluye joyas y monedas griegas. Ca. 425-420 a. C.
En todos los hallazgos monetarios del período aqueménida, la moneda imperial
(dárico y siclo) representa una pequeña parte de las monedas, entre una mayor masa
de monedas locales y, esencialmente, de emisiones de ámbito griego.29 Por ejemplo,
el descubrimiento del tesoro de Kabul en Afganistán incluye 30 monedas de varias
ciudades griegas, 33 monedas de plata atenienses (dracmas)y una imitación irania de
una moneda ateniense, 29 monedas locales y 14 monedas con contramarcas, junto con
solo nueve siclos imperiales aqueménidas.30 31

También se conocen acuñaciones a imitación de monedas atenienses de varios sátrapas


aqueménidas de Egipto, como es el caso de Sabaces (ca. 340-333 a. C.).

El hecho de que las monedas griegas (tanto las del período arcaico como las del
comienzo del clásico) sean comparativamente más numerosas en los hallazgos en
comparación con las imperiales aqueménidas sugiere que la circulación monetaria del
sistema griego fue fundamental en el Imperio aqueménida.32 Seguramente el uso de
estas monedas griegas no tendría respaldo legal en el Imperio aqueménida, aunque
fueron valoradas por el valor de su peso en oro y plata. De hecho, la presencia en
los hallazgos arqueológicos de pequeños objetos, joyas y fragmentos de diversos
objetos, asimismo de monedas, también es frecuente para favorecer el intercambio
comercial en función de su peso.33

La moneda griega se extendió por todo el Imperio aqueménida. Por ejemplo, las
monedas griegas que se encuentran en el tesoro de Kabul incluyen los siguientes
tipos:3435

Moneda arcaica de Tasos. Ca. 500-463 a. C.


Moneda arcaica de Tasos. Ca. 500-463 a. C.

Moneda arcaica de Quíos, ca. 490-435 a. C.


Moneda arcaica de Quíos, ca. 490-435 a. C.

Moneda de Acanto, Macedonia. Ca. 470-430 a. C.


Moneda de Acanto, Macedonia. Ca. 470-430 a. C.

Tetradracma de Atenas clásica (la más común en el tesoro de Kabul). Ca. 454-404 a.
C.
Tetradracma de Atenas clásica (la más común en el tesoro de Kabul). Ca. 454-404 a.
C.

La moneda en Asia meridional en el Imperio aqueménida

Frontera oriental del Imperio aqueménida y antiguos reinos y ciudades de la antigua


India (ca. 500 a. C.).13
El Imperio aqueménida ya había llegado a las puertas de la India durante la
expansión original de Ciro II el Grande, y la conquista aqueménida del valle del
Indo se remonta aproximadamente al 515 a. C., bajo Darío I, tras lo cual se
estableció una administración en la zona conquistada. El descubrimiento del tesoro
de Kabul (también llamado Shaman Hazouri) ayuda a atestiguar y fechar estos
hechos.21363738

Según el numismático británico Joe Cribb, este hallazgo sugiere que la idea de la
acuñación y el uso de monedas fue introducida en la India por el Imperio aqueménida
durante el siglo IV a. C.39 Aparte de este hallazgo, también se encontraron más
monedas aqueménidas en Pushkalavati y Bhir Mound, ambas en el actual Pakistán..4041

Moneda acuñada con punzón. Valle de Kabul bajo administración aqueménida. Ca. 500-
350 a. C.[42][36]
Moneda acuñada con punzón. Valle de Kabul bajo administración aqueménida. Ca. 500-
350 a. C.4236

Siclo hallado en el valle de Kabul. Siglo V a. C. (monedas similares aparecieron en


el tesoro de Kabul).[36]
Siclo hallado en el valle de Kabul. Siglo V a. C. (monedas similares aparecieron en
el tesoro de Kabul).36

Barra marcada con punzón a modo de moneda. Gandhara bajo administración aqueménida
(tipo muy presente en el tesoro de Kabul).
Barra marcada con punzón a modo de moneda. Gandhara bajo administración aqueménida
(tipo muy presente en el tesoro de Kabul).

Monedas de los sátrapas

Moneda de Maceo, sátrapa de Cilicia. Ca. 361-334 a. C.


Durante el siglo IV a. C., tras el debilitamiento del poder imperial aqueménida, la
producción centralizada de siclos disminuyó y muchos sátrapas empezaron a acuñarlos
de forma autónoma en todo el Imperio, con muy buena calidad, dado el desarrollo de
las técnicas de acuñación. Las monedas de los sistemas aqueménida y griego
coexistieron en circulación, e incluso estos nuevos siclos de los sátrapas
combinaron rasgos característicos de ambas tradiciones.21

Algunos sátrapas egipcios incluso acuñaron imitaciones de los tetradracmas


atenienses.

Primeros intentos de retrato


Aunque muchas de las monedas más antiguas de la antigüedad mostraban imágenes de
divinidades o figuras humanas simbólicas, los primeros retratos de gobernantes
vivos aparecieron con estos temas satrápicos aqueménidas, en el siglo V a. C., en
particular con las monedas de Licia.4344 Ya antes del año 500 a. C., los
aqueménidas habían sido los primeros en representar la persona de su rey o un héroe
en sus dáricos y siclos, de manera estereotipada, mostrando un busto o cuerpo
completo, pero nunca con un retrato real.272844

Antes de las monedas de Licia con retratos dinásticos, pudo haber existido el caso
de un retrato de Temístocles, el general ateniense que se había convertido en
gobernador de Magnesia del Meandro dentro del Imperio aqueménida, alrededor del
465-459 a. C., aunque existen dudas de que sus monedas realmente puedan representar
a Zeus, en lugar del propio gobernador.45464748

A partir de la época de Alejandro Magno, la presencia en las monedas de retratos de


gobernantes emisores se ha convertido en un estándar hasta el día de hoy.44

Moneda de una dinastía aqueménida de Licia, con Atenea en el anverso y el rey en el


reverso con casco . Ca. 440-410 a. C.]]
Moneda de una dinastía aqueménida de Licia, con Atenea en el anverso y el rey en el
reverso con casco . Ca. 440-410 a. C.]]

Moneda de Temístocles como gobernador aqueménida de Magnesia del Meandro. Letras ΘΕ


en el reverso, iniciales del nombre (Θεμιστοκλῆς). Ca. 465-459 a. C.
Moneda de Temístocles como gobernador aqueménida de Magnesia del Meandro. Letras ΘΕ
en el reverso, iniciales del nombre (Θεμιστοκλῆς). Ca. 465-459 a. C.

Doble siclo de Farnabazo II (ca. 380-375 a. C.). Anverso: divinidad persa en el


trono. Reverso: cabeza de Ares.
Doble siclo de Farnabazo II (ca. 380-375 a. C.). Anverso: divinidad persa en el
trono. Reverso: cabeza de Ares.

Moneda de Pericles, último rey de Licia bajo la administración aqueménida. Ca. 380-
360 a. C.
Moneda de Pericles, último rey de Licia bajo la administración aqueménida. Ca. 380-
360 a. C.

Sátrapa de Asia Occidental del período aqueménida (probablemente Tiribazo). Siglo


IV a. C.
Sátrapa de Asia Occidental del período aqueménida (probablemente Tiribazo). Siglo
IV a. C.

Después de las conquistas de Alejandro Magno


Después de su conquista del Imperio aqueménida, Alejandro Magno estableció sus
propios sátrapas en los territorios conquistados, algunos de ellos aqueménidas que
eran favorables al invasor, como Maceo, y otros hombres cercanos a Alejandro que
habían colaborado con él, como Balacro. Varios de estos sátrapas, como Balacro,
continuaron la tipología de la moneda aqueménida en sus emisiones, que luego
influyó en las monedas imperiales de Alejandro, producidas, por otro lado, en las
mismas cecas.49

Incluso muchos años después de la muerte de Alejandro, se siguieron acuñando


monedas de oro de tipo aqueménida en Babilonia, en paralelo con las emisiones
imperiales de Alejandría. Algunas de estas monedas están datadas alrededor del 315
al 298 a. C. Estos dáricos continuaron usando los tipos aqueménidas, pero con los
reversos ligeramente movilizada para incluir patrones 5051

Doble dárico (16,65 g) de la ceca de Babilonia. Ca. 315-298 a. C.[50]


Doble dárico (16,65 g) de la ceca de Babilonia. Ca. 315-298 a. C.50

Moneda de Balacro, sátrapa de Alejandro Magno en Cilicia.


Moneda de Balacro, sátrapa de Alejandro Magno en Cilicia.

Tetradracma de Alejandro Magno. Tarso, Cilicia.


Tetradracma de Alejandro Magno. Tarso, Cilicia.

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