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Historia del dinero

Como deben imaginar, desde hace miles de años el ser humano ha tenido que realizar compras de bienes, servicios, materiales o comida. Pero los
billetes y monedas no siempre han sido como hoy en día se conocen.
Lo cierto es que no hay total seguridad al respecto de dónde comenzó exactamente a utilizarse el dinero y tampoco se sabe con certeza dónde se
acuñó la primera moneda, por tanto es difícil saber cuándo fue el primer uso del dinero.
Con anterioridad a la existencia del dinero como hoy lo conocemos, se utilizaron metales como medio de cambio, en lingotes de oro y plata más o
menos regulares o en forma de pequeñas joyas u objetos menudos que se pesaban en cada transacción.
Ése fue el sistema mercantil que se implantó en Egipto, Asiria o Babilonia, cierta cantidad fija de un metal determinado representaba un valor fijo y
se correspondía con una escala ponderativa.
Medida de peso
Así en el mundo semítico antiguo, el siclo fue una medida de peso antes que una moneda, las cosas tenían un valor o estimación material que se
graduaba o medía en una cierta cantidad de oro o de plata en bruto.

La importancia del peso en las primeras monedas queda de manifiesto por el nombre de casi todas ellas en el mundo antiguo, antiguamente no se
contaba el dinero sino que se pesaba.
El as o libra se llamaba también pondo que dio lugar al sestercio, una de las monedas de cobre o de plata de más peso en el mundo romano,
también al denarius o denario cuyo valor equivalía a diez ases y es el término que ha dado lugar a la palabra “dinero”.
El denario era de plata y valía casi lo mismo que una dracma griega, en el campo semántico de pesos y medidas está la litra antecedente de la libra,
medida de peso o unidad de cuenta.
Otras monedas como el óbolo tenían origen campesino, equivalía a dieciséis granos de cebada o catorce y medio de trigo, vigésima parte del siclo,
la onza romana valía dos siclos.
También el talentumes nombre de moneda relacionado directamente con el mundo de pesos y medidas, el talento mayor judío valía doce mil
dracmas y el talento menor valía sólo cuatro dracmas.
Muchas de las monedas que fueron usadas en Europa antes de llegar el euro, como el rublo, la lira, la libra, el peso o la antigua peseta, seguían
expresando unidades de peso.
Pese a esto entre las sociedades primitivas siguió en vigor el trueque hasta tiempos recientes, actualmente en Abisinia la pólvora y la sal siguen
siendo forma normal de pago entre campesinos y pastores. En Haití circulan como moneda las cañas llenas de aceite de coco y aún hoy los
naturales de Fidji aceptan como moneda las nueces de coco.
Se dice que el usar el oro la plata y el cobre como dinero en la antigüedad, se realizó por la influencia de los nobles en Europa y en China por la de
los Clanes familiares que no conseguían que hacer con estos metales que poseían en gran cantidad y que mejor negocio sería que hablar con el Rey
o el Emperador para que este autorizará el uso de estos metales como dinero, lo cual les vino muy bien ya que le darían uso a algo que en aquella
época no tenía ningún valor.
Homero el Griego
El autor griego Homero, en el siglo VIII a. C., en su obra Ilíada no menciona el dinero directamente aunque en una parte de ella se habla de los
talentos de oro ofrecidos por Aquiles en la muerte de Patroclo. Según el léxico de Sudas recopilado hacia el siglo X, el talento era una cierta
moneda pequeña.
Homero habla más bien de un intercambio, un trueque de bienes, donde caben desde un esclavo a un ánfora de vino o cualquier otro tipo de
materias o enseres.
Lo mismo sucedía en Micenas, donde se habla de relaciones comerciales con permuta de objetos o intercambio de cosas, que funcionaban a modo
de dinero o moneda sin realmente serlo.
Pero parece que mucho antes los egipcios, conocieron ya en época muy temprana cierta clase de dinero, pero lamentablemente todavía hoy los
historiadores no han podido demostrarlo con pruebas irrefutables.
José
De hecho, en la Biblia se puede leer que José fue vendido por sus hermanos a unos ismaelitas por veinte siclos de plata. En el capítulo 62 del
Génesis hacia el año 1850 a. C., Jacob envía a sus hijos a Egipto a comprar grano y se hace hincapié en que en los sacos de trigo se incluyera el
dinero pagado.
Pero volvamos a Grecia, los griegos preurbanos utilizaron el buey como cantidad mayor y los carneros como “calderilla”. Homero dice que la
armadura de Diomedes costó nueve bueyes y la de Glauco cien. No tuvieron monedas con anterioridad al siglo VI a. C. en que se empezaron a
acuñar en las islas de Egina y Eubea.
La primera ceca conocida es la establecida por Candaules o Sadyattes rey de Lidia en Asia Menor, o por su sucesor Gyges a principios del siglo
VII a. C. precedente o ejemplo imitado por los griegos de las islas del Egeo, de hecho Heródoto atribuye su invención a los reyes lidios, aunque
habla de una época anterior el siglo IX a. C.
Los Reyes
Los lidios, pudieron haber conocido esta práctica de los hititas. El lexicógrafo Pólux afirma en su Onomásticos que era difícil discernir si el
primero en emitir moneda fue el rey de Argos, Fidón o los reyes lidios. Los lidios acuñaban lingotes de oro y monedas de electro, una aleación
natural de plata y oro.
Aquí se puede observar que el dinero no se creó porque las personas confiaban en el, sino que fue por imposición de los reyes y emperadores en la
antigüedad, el dinero fue introducido en el comercio simplemente porque el dinero es el negocio más rentable que ninguna persona se haya
imaginado jamás, pues todas las personas lo demandan para el intercambio de sus bienes y servicios y para pagar sus deudas.
Como se observa su uso se extendió a la costa jonia, fueron estos jonios quienes llevaron la costumbre a Grecia continental desde la isla estado de
Egina, donde se acuñaron las famosas “monedas tortugas”, llamadas así por tener en el anverso la imagen de este animal.
A pesar de lo dicho el dinero parece que ya existía mil años antes de la época que contemplamos. Abraham nacido en Ur de Caldea Irak actual, en
el 2164 a. C. compró con dinero el enterramiento para su mujer Sara y para él, según nos relata el libro del Génesis en el capítulo 23. Respondió
Efron: “Óyeme, la tierra que pretendes, vale cuatrocientos siclos de plata”. (…) Abraham, oído esto, hizo pesar el dinero determinado por Efrón,
cuatrocientos siclos de plata, de buena moneda corriente.
Sicloes es, un término o una voz hebrea que significa peso y valía lo mismo que una estatera griega, de istanai es igual a pesar.
Guerras Médicas
No fue hasta el siglo V a. C., que los fenicios no usaron moneda en sus transacciones, comenzaron a hacerlo en la fecha indicada, coincidiendo con
las Guerras Médicas entre Persia y Grecia.
En Egipto, se generalizó y empezó a batirse moneda de forma habitual, durante la satrapía de Aryandes, como forma de pago entre comerciantes
griegos y fenicios de Menfis y Naucratis.
Fue Alejandro Magno, el primero que puso su efigie en una moneda, pues con anterioridad a él, los reyes se habían limitado a dejar constancia de
su nombre.
Lo más probable, es que el uso de la moneda surgió en el Mediterráneo y se extendiera luego por el interior de Europa y Asia, hasta convertirse en
un hecho imprescindible para la vida comercial.
Roma
En la Antigua Roma, la moneda acuñada se introdujo en el siglo V a. C., y tenía en el anverso, la cabeza de la diosa titular de la ciudad con el casco
alado, y en el reverso, a los Dioscuros a caballo. Entonces, una libra de plata, daba para acuñar cien denarios.
Hacia el año 500 a. C. empezó a circular la moneda de oro en Roma, cuya ceca, parece que estaba junto al templo de Juno, diosa apodada Moneta,
de donde por etimología popular, derivó a moneda.
Sin embargo, a lo largo de los siglos, el valor, la ley, la pureza de la moneda decayó, se adulteró. Durante el Imperio Romano, se añadió cobre al
oro, tanto que hacia el siglo III, las monedas supuestamente de oro, solo contenían un 2 por ciento de este mineral.
Se sabe que, en España, los íberos acuñaban moneda, pero fueron copia de las romanas de tiempos de la República. En ellas hay voces ibéricas que
alternan con palabras latinas, apareciendo numerosos elementos simbólicos, como la espiga de trigo, el pez, la palma, esfinges, la cabeza del
Hércules ibérico o caballos.
En la Europa medieval, se volvió a la pureza del metal, se rechazaron las aleaciones y el número de cecas fue asombroso, circulando un número
enorme de monedas distintas, ya que el poder de acuñar, no sólo lo tenía el Estado, sino también las ciudades y algunas familias importantes.
Eran monedas mal troqueladas, hechas con métodos rudimentarios, parece que la primera máquina para acuñar moneda, funcionó en París en 1553.
Origen e historia del billete
Pero la moneda resultaba pesada, en el sentido literal del término, era necesario sustituir el metal por el papel, probablemente, el billete se inventó
en Europa, como uso derivado de los recibos que entregaban los orfebres por la moneda fabricada.
En cambio, el primer billete de banco se usó en 1170 en China, por aquel entonces, el cobre escaseaba mucho y no era posible acuñar suficientes
monedas metálicas.
En cuanto a Europa, el primer uso de billetes fue en el siglo XVII, el banco de Suecia, lanzó a título provisional una serie de billetes en 1661.
Los billetes no tardaron en ser habituales en el mercado, y fueron aceptados como forma de pago, en el siglo XVIII muchos banqueros particulares,
comenzaron a emitir billetes que circulaban fiados, todos en la solvencia del emisor.
Pero no fue hasta 1833, que tuvieron reconocimiento oficial como moneda legal, los primeros en merecer este honor, fueron los avalados por el
banco de Inglaterra.
Historia de los Billetes Chinos
En el siglo II a.C., la dinastía Han de China, ante la falta de cobre y plata, decidió emitir moneda fiduciaria, imprimiendo su sello en las pieles
curtidas de los gamos sagrados de su palacio real, lo que se denominaba “moneda de piel”, sería el precursor del papel moneda.
Hacia el año 800 d.C., la dinastía Thang inventó el primer papel moneda, como transferencia de capitales, se depositaba el metálico en las cajas
públicas, y se entregaba un documento que era reintegrable en cualquier otra caja pública del imperio, a su presentación, lo que permitía la
transferencia de dinero entre provincias sin dificultad, estos documentos se llamaron “moneda voladora”, ya que se las podía llevar el viento.
En el año 998, el prefecto de la provincia de Chou, Chang Wing, junto con 16 ricos propietarios, creó una sociedad con autorización del
Emperador, por 65 años, para emitir billetes al portador, primer banco de emisión, los billetes estaban previstos para que conservasen su validez
durante 3 años, y su nominal era de 1.000 sapeques (moneda de cobre).
Como era de esperar, a los 35 años, la sociedad quebró, por no poder respaldar los billetes emitidos al dar créditos, por lo que el estado se hizo
cargo de ella ¿Le sugiere algo esta historia al lector? continuando con la emisión de billetes, para evitar posibles impagos, el gobierno determinó,
que no se pudiesen emitir billetes por un montante superior al 30 % de las reservas, idéntica cantidad, que la emitida por los gobiernos en el siglo
XX.
La dinastía Chin 1115-1234, continuó emitiendo billetes, cada vez en mayor número para pagar a los funcionarios y militares, hasta que los billetes
fueron incobrables, originando tal malestar que fue una, por no decir que la principal causa, de que Gengis Khan conquistara el país, ya que los
militares dejaron de guarnecer la frontera, porque el dinero no tenía el respaldo que prometían.
Gengis Khan, implantó una nueva dinastía, la Yuan, que encabezó su hijo 1279-1368, de esta dinastía ya se conocen algunos ejemplares de billetes,
aunque son muy escasos, prácticamente piezas de museo, durante esta dinastía, fue disminuyendo la emisión de billetes, al dejar de tener
aceptación, debido a su alto valor nominal.
Billete dinastía Ming
Se siguieron emitiendo billetes con la dinastía Ming 1368, billetes que ya se encuentran con relativa frecuencia, actualmente en el mercado.
Los primeros billetes de la dinastía Ming que se encontraron, fueron en 1900 durante la guerra de los Boxers, estos billetes, ofrecidos a un oficial
americano, acabaron en los museos de EEUU e Inglaterra.
En 1930, se descubrió un segundo grupo de billetes, al demoler unos trabajadores un templo en las afueras de Pekín, en dicho templo, se halló una
vasija con varios objetos como ofrendas y entre ellos un paquete de billetes, los descubridores no les dieron ninguna importancia a los billetes, y
los vendieron a los transeúntes por unas cuantas monedas, la mayor parte de los billetes se encontraban muy deteriorados, a causa de la humedad,
pero unos cuantos, los de mayor calidad, fueron adquiridos por un misionero noruego, a la muerte de éste, fueron adquiridos por un comerciante
londinense, que les mando hacer una experticia por el museo británico y posteriormente los puso a la venta.
Están impresos en xilografía, sobre papel de color gris azul, la pasta del papel está hecha a partir de corteza del árbol de la morera, no sobre corteza
de morera como ponen algunos artículos, lo que le da ese color especial, su tamaño es de 340 X 225 mm, a pesar de lo cual no se encuentran con
dobleces, ya que se solían llevar enrollados en cilindros, para evitar su deterioro.
El valor nominal del billete, era de 1 Kwuan equivalente a 1.000 Kash, piezas de cobre, que, a su vez, equivalían a 36,6 gr. de plata, en esta época
el valor de la plata, equivalía a 4 veces el oro, alrededor de esta época, se prohibió el empleo del oro y de la plata, por lo que se hizo casi
obligatorio el uso de billetes, si se quería trasladar una cantidad inmediatamente importante entre provincias.
Si se analizan esos billetes del emperador Hungwu de la dinastía Ming, veremos que no se diferencian, en cuanto a concepción y leyendas de los
billetes modernos, excepto en que no llevaban numeración.
Marco Polo
En 1271, el veneciano Marco Polo, de tan sólo diecisiete años, llegó a China acompañando a su tío y a su padre, que eran comerciantes, durante 23
años permaneció al servicio de Kublai Kan, emperador de Mongolia y China y llegó a ser gobernador de Yangzhou, a su vuelta fue capturado y
encarcelado por los genoveses, con los que los venecianos estaban en guerra y fue en la cárcel donde le dictó a Rustichello de Pisa sus memorias,
“Los viajes de Marco Polo” que le hicieron famoso en toda Europa.
Hay quien dice que realmente no fue a China, sino que escribió lo que oyó relatar a su padre y a su tío, ya que en sus relatos no se habla de la gran
muralla, algo que tenía que haber llamado su atención, pero de lo que sí habló, fue de aquellos extraños billetes de papel que valían lo mismo que
la plata o el oro, por supuesto que sus contemporáneos se rieron de aquella noticia y no se creyeron aquel embuste, no podían existir otras monedas
que las de oro, plata o cobre, eso eran invenciones suyas.

Los primeros Billetes Europeos


Los primeros billetes europeos se imprimieron en Suecia, en 1657, aunque ya en Holanda existían algo parecido a los pagarés, en Suecia el patrón
monetario era el cobre, cuyo precio fluctuaba a menudo, y además las “monedas” eran unas incómodas planchas de cobre, de varios kilos de peso,
la plata era poco utilizada, Joham Palmstruch era un cambista espabilado de origen letón holandés y creó el Banco de Estocolmo, tras convencer al
rey Carlos Gustavo X, de la necesidad de tener bancos como los holandeses o los alemanes, y de prometer de paso, la mitad de las ganancias a la
corona, el rey a cambio le dio un título de nobleza, le hizo director del Banco de Suecia.
El problema que se presentó con los bancos de aquel entonces, era que la gente retiraba en cualquier momento su dinero, lo cual dificultaba los
préstamos a plazo fijo, Joham lo resolvió, creando un billete al que llamó “papel de crédito” equivalente al oro, plata o cobre, que indicaba el
billete, cayendo en el mismo error que los chinos, y en 1668, el banco quebró, ya que había emitido mayor cantidad de billetes, al depósito de
metales que el banco poseía como depósito de garantía.
El rey le retiró su título de nobleza, le destituyó de su cargo, condenándolo a muerte, aunque luego le conmutó la pena, por prisión perpetua, murió
pocos años después en la cárcel, que en aquellos tiempos era muy dura.

Billete Frances
El papel moneda llegó a Francia, con John Law, un economista escoces, en 1716, un año antes había muerto Luis XIV, el país estaba arruinado por
su participación en la guerra de sucesión al trono de España, por los enormes gastos que ocasionaba a la monarquía francesa, lo que produjo una
escasez de plata y oro, estancando la economía, eso le llevó a pensar, que si reemplazaba el oro por un billete de papel, que representara su valor
nominal, la economía mejoraría.
Así fue, Law como buen economista, exageró la riqueza de los territorios de Luisiana, haciendo correr la voz de la existencia de grandes minas de
oro, lo que hizo, que todo el mundo quisiera invertir en las compañías francesas que las explotaban, el papel moneda, igual que las acciones,
subieron como la espuma y la economía creció de una forma espectacular.
Los billetes llegaron a España en 1780, de la mano de Carlos III, debido a los gastos de la guerra de los siete años contra Inglaterra, esto había
empobrecido al tesoro real.

Peseta Española
A pesar de los fracasos de Suecia y Francia, el dinero de papel se generalizó en todos los países, con un mayor control de la banca, siempre con un
respaldo en oro, es decir, cualquier ciudadano podía acudir a su banco y cambiar sus billetes por oro o plata cuando quisiera. En los billetes
españoles, antes del euro, las pesetas, se podía leer “El banco de España pagará al portador…”, es decir, el billete se podía cambiar por oro
(teóricamente, claro, porque en la guerra se perdió todo el oro de los españoles).
Pero el regente Felipe de Orleans, que llevaba una vida escandalosamente lujosa, sin avisar a Law, mandó a imprimir nada menos que tres mil
millones de libras, la inflación se disparó, cuando el regente prohibió por decreto que los ciudadanos tuvieran en su casa joyas y más de 500 libras
en oro, éstos se dieron cuenta, de que el metálico era lo único que valía y no aquellos papeles, desde la alta nobleza hasta los más humildes
inversores perdieron su dinero. El regente, destituyó a Law, mostrándolo como el culpable de todo, el cual se vio obligado a huir a Venecia,
disfrazado de mujer para evitar su linchamiento, muriendo allí a los 57 años de edad, de neumonía y en la más absoluta pobreza.
Este sistema conocido como patrón oro, tuvo vigencia en la economía mundial, hasta la firma del Acuerdo de Bretton Woods, un año antes de dar
por finalizada la segunda guerra mundial.
Inicio Patrón dólar oro
El patrón dólar oro, se inicia por los acuerdos de Bretton Woods, hacen referencia a las decisiones tomadas en la convención que en julio de 1944
reunió a 44 países, con el fin de establecer un nuevo modelo económico mundial de posguerra.
Tuvo lugar en el Hotel Mount de Bretton Woods, en el Estado de New Hampshire EE. UU, entre los días 1 y 22 de julio de 1944, en plena segunda
guerra mundial.
Encima de la mesa había dos propuestas, la estadounidense de Harry Dexter White y la británica de John Maynard Keynes.
La propuesta del británico Keynes, se fundamentaba en: establecer un sistema monetario mundial, basado en la unidad monetaria internacional
mediante la creación del Bancor, moneda que estaría vinculada a las divisas fuertes y sería canjeable en moneda local, a través de un cambio fijo.
Crear un órgano internacional de compensación, la International Clearing Union (ICU), con capacidad de emitir la moneda internacional “Bancor”,
y cuyo objetivo sería mantener la balanza comercial equilibrada. Los países con superávit, tendrían que transferir su excedente a los países con
déficit, de esta manera, se conseguiría aumentar la demanda mundial y evitar la deflación.
La postura estadounidense a cargo de H. D. White, secretario adjunto del tesoro americano fue:
Sustituir el patrón oro por un patrón dólar oro, debido al gasto bélico de la segunda guerra mundial, las reservas de oro de los países se habían visto
mermadas, en consecuencia, no era posible asegurar la equivalencia en oro de sus monedas nacionales, de modo que, se establece una paridad de
las distintas monedas y el oro, siendo el dólar la moneda de referencia para el resto de divisas, desplazando a la libra esterlina, y se fija el valor de
una onza de oro en 35 $, por un lado, los bancos centrales de los países miembros, tienen el derecho de cambiar sus reservas en dólares por oro o
viceversa, al precio fijado, acudiendo a la Reserva Federal, por otro lado, EE. UU tiene el poder de proveer liquidez, mediante la emisión de
dólares basados en deuda, para salvaguardar el sistema.
Creación de un nuevo sistema
La Conferencia de Bretton Woods fue el mayor hito de ese proceso. Durante 22 días, delegados de los 44 países aliados mantuvieron frenéticas
reuniones en el Hotel Mount Washington de Bretton Woods, New Hampshire, con un único objetivo: crear un sistema de reglas que ordene las
relaciones monetarias, entre las naciones del mundo.
El acuerdo de Bretton Woods, expresó una visión compartida de que un sistema económico internacional liberal, basado en normas, podía
contribuir tanto a la paz como a la prosperidad, idea que pronto dio lugar a regímenes internacionales de comercio y desarrollo, el pacto también
contribuyó a consolidar el compromiso de Estados Unidos y de otras grandes potencias, con la provisión de los bienes públicos necesarios, para
apoyar un orden económico liberal.
El emergente más importante del acuerdo fue, la creación del Fondo Monetario Internacional, cuya misión original era, garantizar la estabilidad del
tipo de cambio y de los flujos financieros, el FMI que se fundó oficialmente el 27 de diciembre de 1945, era inseparable del abandono del patrón
oro y de la adopción del patrón dólar oro, como moneda de cambio internacional.
Hasta los años 60, el sistema monetario mundial funcionaba correctamente, o digamos que de la manera que se había estipulado, EE. UU emitía
dólares respaldados por oro, para mantener el equilibrio de las economías, como ya hemos explicado, capacidad que le había sido otorgada en el
Bretton Woods, en este periodo, el mundo se inundó de dólares.
Todo cambia a partir de mediados de los 60, cuando empieza a surgir la desconfianza en la fortaleza del dólar por los demás gobiernos del mundo.
La preocupación se materializó y los diferentes países empezaron a cambiar sus reservas de dólares por marcos alemanes y en oro en la Reserva
Federal, esta situación pone más en entredicho la salud del dólar, se inicia el efecto dominó, las reservas de oro americanas descienden
considerablemente, lo que supone una pérdida del oro de sus reservas, al haber cada vez menos oro para cambiar por dólares, hace que aumente la
inestabilidad del dólar, no existiendo en el mundo, cantidad de oro suficiente, para respaldar la magnitud exagerada de dólares que circulaban en
ese entonces en el mercado mundial.
Situación insostenible que EE. UU tiene que parar de alguna forma, llevando a Nixon a tomar la decisión expuesta por Milton Friedman, de
impedir la conversión del dólar en oro y devaluar la moneda, desoyendo así, la postura de Paul Samuelson, centrada en la devaluación del dólar
frente al oro, es decir, aumentar la cantidad de dólares necesarios para obtener una onza de oro y así frenar el frenético cambio de dólares por oro.
El nuevo patrón monetario había hecho que en todo el mundo creciera la demanda de dólares, que eran un sustituto del oro. Eso hizo que
progresivamente fuera aumentado su valor, lo cual era un problema para el comercio estadounidense. En un contexto de estanflación, el presidente
Richard Nixon decidió devaluar, de 35 dólares por onza, pasó primero a 38 y luego a 42.
Sin embargo, las tensiones llegaron en los años 60, se producen grandes adquisiciones de oro para especular, la finalidad de los especuladores, era
vender el oro cuando el valor se situase por encima de los 35 dólares, y comprarlo cuando cayese, así pues, tuvieron lugar importantes
conversiones de dólares a oro, aunado al aumento de la producción de bienes y servicios que demandó más dólares, los cuales salen al mercado sin
respaldo alguno por la falta de oro, lo que provocó la crisis de los 70.
Varios países se ponen de acuerdo, tratando de defender el valor del oro, y establecen que las transacciones entre los bancos centrales se llevarían a
cabo a un precio de 35 dólares la onza de oro, mientras que, en el mercado libre, el precio se determinaría en base a la ley de Say, la de oferta y la
demanda.
Este acuerdo para mantener el precio del oro en 35 dólares por onza, se conoció como pool del oro y estuvo suscrito por los bancos centrales de
Estados Unidos, Francia, Alemania, Suiza, Reino Unido, Italia, Bélgica y Holanda, no obstante, el pool del oro sólo duró pocos años, desde 1961 a
1968.
Final del Patrón dólar oro
Inicio del dinero Fiat. Llegado 1971, el presidente estadounidense Richard Nixon decidió tomar medidas drásticas al respecto, ya había intentado la
devaluación a 42 dólares la onza de oro, pero no frenó el temor de los países, lo que lo llevó a la extrema decisión de eliminar el respaldo del oro al
dólar, dando esto con el fin del tratado de Bretton Woods, suscrito por los 44 países.
Nixon, anunció esa decisión en un discurso televisado a la nación. "En las últimas semanas, los especuladores han estado librando una guerra total
contra el dólar americano", denunció. "He ordenado al secretario del Tesoro que adopte las medidas necesarias para defender al dólar frente a los
especuladores", continuó. "He ordenado al secretario John Connally que suspenda temporalmente la convertibilidad del dólar en oro u otros activos
de reserva", remató.
Se realizaron reuniones entre las autoridades económicas de las principales potencias del planeta, tras el anuncio del presidente Nixon, pero sólo
sirvieron para confirmar, que todos los países del mundo, que habían depositado sus reservas de oro en las arcas de los estadounidenses, lo habían
perdido todo. ¿Cómo podían explicar los líderes del mundo a sus ciudadanos, que sus reservas en oro, ahora se habían convertido en simples
papeles?, esto se tenía que callar, nadie debía de saberlo jamás, ya que, si se filtraba esta información, se desataría un caos económico mundial.
Ahora la realidad había cambiado, los EE. UU, de ser el líder económico mundial, pasaba a ser, el país más endeudado del planeta, los tiempos de
la cooperación cambiaria y financiera habían terminado.
Esta decisión de Nixon, marca un antes y un después, un antes marcado por la pervivencia del patrón oro, el posterior establecimiento del sistema
de Bretton Woods, y un después, en el que emergen los tipos de cambio flotantes en las divisas, lo cual trajo a la economía un desastre financiero,
que siempre van de la mano a los conos monetarios, utilizados por todas las personas del mundo e impuestos por los gobiernos.
Todo cambió, en efecto, todo cambió, el sistema económico mundial acostumbrado a moverse en unos parámetros distintos, con unas referencias
como el oro o el dólar estadounidense, ya tras la firma de los Acuerdos de Bretton Woods, levantó otro esquema muy distinto.
Desde 1971, y ya sin vuelta atrás, el mundo se adentró en un camino sin retorno, hacia un sistema de tipos de cambio de flotación libre, es decir,
una nueva realidad en la que el precio de una divisa en términos a otra, vendría determinado por los agentes del mercado, el tiempo de los tipos de
cambio fijos o rígidos quedó atrás, al menos para las mayores potencias en un principio, y con los años, para la mayoría de los países del mundo,
comenzaba la era de los cambios variables y sujetos a las fuerzas del mercado.
Destrucción Industrial
Especulación y destrucción del aparato productivo, ya nadie está exento, pues afecta tanto al pobre como al rico, se mueve como lo decidan unos
pocos, nadie se escapa de esta nueva realidad económica, la economía que floreció durante 29 años había terminado.
La fractura fue monumental, infinitamente superior a lo que ni Nixon ni sus asesores ni nadie hubiera podido imaginar en 1971. Para el mundo,
significó una nueva etapa, en la que el dinero ya no era la representación de algo físico “como el oro”, sino intangible, porque comenzaba el tiempo
del dinero basado su valor en el mercado de divisas, el dinero fiduciario.
Esto trajo para el aparato productivo mundial, un enorme caos, porque los tipos de cambio comenzaron a ser una amenaza fundamental en su
actividad de fabricar, comprar y vender productos.
Mercado de Divisas
El desarrollo de los mercados de divisas y de derivados, de los mercados de capitales y de la banca de inversión sólo fue cuestión de tiempo, la
desregulación de los años 80 se encargó ya del resto, "marcó el inicio donde proliferan las oportunidades de la manipulación y especulación de las
divisas".
La onda expansiva de aquel mensaje televisado de Nixon, todavía es perceptible hoy, cincuenta años después, el mercado de divisas, donde las
divisas de cada país obtienen su valor, dependiendo de la oferta y la demanda de esta, es el heredero directo de aquella decisión, es el mercado de
los mercados, es el que más tiempo opera de domingo por la noche a viernes por la noche, ininterrumpidamente y el más global de todos, y, sin
duda, también el más líquido de todos, según un informe trienal del Banco Internacional de Pagos, BIS, por sus siglas en inglés, en 2013,
negociaba cada día 5,3 billones de dólares, al cambio actual, unos 4,5 billones de euros, o lo que es lo mismo, en apenas seis horas, mueve tanto
dinero, como la producción que la economía española genera en un año.
Este sistema que rige la economía mundial en la actualidad, suele verse afectado abrumadoramente en cada momento, y a cada instante por las
crisis o de algún accidente financiero, como los excesos que suelen precederlos habitualmente están vinculados a los movimientos de capitales, los
desequilibrios comerciales o a bruscos cambios en el valor de las divisas y como, además, no son pocos los países que cuando entran en problemas
intentan depreciar sus divisas como atajo para superarlos, devaluaciones o depreciaciones competitivas, se propone volver a edificar un modelo
común para poner orden donde no lo hay.
Criptomonedas o criptodivisas
Las criptomonedas son monedas virtuales, que se utilizan para transacciones de bienes y servicios, a través de un sistema de intercambio
electrónico, que no necesita intermediarios.
La característica diferenciadora de estas monedas virtuales, es que no están controladas por los gobiernos, por lo tanto, no necesitan de los bancos
como intermediarios.

Características de las criptomonedas


 Descentralización: No están vinculadas a ningún organismo gubernamental, ni financiero.
 Operabilidad: No están reguladas bajo ningún mercado oficial, hace que se pueda operar con ellas, durante los 7 días de la semana y las
24 horas del día.
 Minería y Blockchain: En las monedas fiduciarias se imprimen billetes y se acuñan monedas, pero en el caso de las criptomonedas, el
sistema es muy diferente. Las monedas virtuales, muchas de ellas se crean a través de la minería. Un sistema en el que los individuos
“mineros”, a través de la tecnología blockchain (cadenas de bloques), validan transacciones, a través de la resolución de problemas
matemáticos, a cambio de su recompensa, la misma criptomoneda que minan.
 Transparencia: Todas las transacciones se “registran en un libro” compartido (tecnología blockchain), imposible de manipular.
 Valor: Las criptomonedas mayormente basan su valor, en el mercado de compra y venta de criptomonedas, un sistema que se le aplica la
ley de Say, oferta y demanda, igualmente al usado para el dinero fiat.
 No dependen de la política: Al estar en el internet, son totalmente descentralizadas de instituciones, de los tipos de política monetaria,
fiscal, y económica en general. A pesar, que la intentan regular a través de las Exchange.
 Regulación: Hasta el momento, no existe ningún tipo de regulación sobre las criptomonedas.
Como en todo mercado, existen varios agentes que hacen que este cono monetario funcione. En el caso de las criptomonedas, los principales
protagonistas son: los Mineros, su trabajo se basa en la verificación de las transacciones que realizan las personas que las usan, como también son
los encargados de la creación de bloques, donde se resguardan las transacciones. También se encargan de “minar” algunas criptomonedas, que
dependiendo del creador del cripto, haya incluido el minado en la creación de la criptomoneda.
La criptomoneda más popular es el Bitcoin, pero existe un amplio número de criptomonedas. A partir de 2011, empezaron a desarrollarse nuevas
criptomonedas, sobre todo, después de la increíble evolución que ha experimentado el Bitcoin en los últimos años. Es un mercado en auge y cada
vez van apareciendo nuevos nombres en la lista de divisas digitales.
La primera criptomoneda nació en 2009 de la mano de Satoshi Nakamoto, el Bitcoin. Su creación surgió en respuesta a la crisis de 2008, para crear
un sistema descentralizado de los gobiernos e instituciones financieras.
Se dice que fue creada por una persona anónima, que usó un seudónimo el de Satoshi Nakamoto, al día de hoy, no se sabe quién es, y quien está
detrás del nombre del creador. La aparición del bitcoin, fue tan innovadora, que los términos de Criptomoneda y Bitcoin se funden en uno sólo, y
es indistinto hablar de una, sin la otra.
Dinero Auricoin
En el año 2010 un joven estudiante de secundaria, de solo quince (15) años de edad, entusiasta de la tecnología Blockchain, comenzó a recopilar
toda la información que le era posible en sus ratos libres, y años más tarde, presentaba sus notas a un grupo de académicos jubilados (profesores
universitarios) logrando captar la atención de estos, y estos observaron el potencial que presentaba la tecnología Blockchain, para crear dinero,
pero no cualquier tipo de dinero, pues en la mente de estos, se quería crear un cono monetario distinto, que cambiara totalmente la paradoja de lo
que se tenía y se creía que es el dinero.
Aquí le pedimos al estudiante que ponga suma atención, porque el dinero Auricoin, no es dinero fiat, mucho menos se puede cometer el error
garrafal de confundirlo con dinero cripto, pues se creó precisamente para corregir los desatinos, que según estos académicos poseían los referidos
conos monetarios.
Político
Se da inicio a la investigación, y se comienza a estudiar si lo que causaba las crisis tenía que ver con la política que se desarrollara en un país y se
descubre, que el problema no es político, pues las crisis se presentan en países que tienen gobiernos democráticos, socialistas, comunistas o
dictatoriales, ningún país está exento de una crisis económica.
Patrón Oro
Se le da un giro a la investigación y se dirige esta, hacia los tres tipos de conos monetarios que se han utilizado en los últimos 150 años: dinero
patrón oro, dinero patrón dólar oro y dinero fiat. Pues varias personalidades creen erradamente que, si se volvía al patrón oro la economía se
libraría de las crisis económicas. Esta teoría también se descartó, pues también se pudo comprobar que cuando se utilizó el Patrón Oro se
presentaron crisis económicas.
Causas de las crisis económicas
Sigue en marcha la investigación y se descubrió para sorpresa de estos estudiosos, que la causa de las crisis económicas y de no haberse logrado un
desarrollo económico social sostenible y que perdure este, a través del tiempo, era causado precisamente por los conos monetarios que se han
usado y se usan en la actualidad, sin importar si son patrón oro, patrón dólar oro o dinero fiat o fiduciario. Siendo esto algo que nadie con
anterioridad lo había detectado jamás.
Y esto sucede porque estos conos monetarios que se han usado y se usan en la actualidad, no reúnen las características ni tienen las condiciones
necesarias para desarrollar naturalmente y a la perfección las tres funciones que indican los expertos de la Macroeconomía y son estas que ser:
Unidad de Cuenta, Depósito de Valor y Medio de Intercambio.
Este descubrimiento dejó perplejos a los investigadores, ya que no les quedó ninguna duda de que se estaba usando como dinero algo que, aunque
se le diga dinero, se le conozca como dinero, realmente no lo es.
Al haber usado las personas, estos conos monetarios para comprar, vender y pagar deudas, se ingresó ignorantemente a la economía
automáticamente la: Devaluación, Revalorización, Inflación, Deflación, Especulación, Manipulación y Usura. Y esto sucede porque al usarse un
bien (oro, plata, cobre, caracoles, etc.) como dinero, la unidad de estos bienes que se usan como dinero, se transforman automáticamente en
Devaluación, Revalorización, Inflación, Deflación, Especulación, Manipulación y Usura. Siendo estos agregados económicos los causantes de las
crisis económicas y son ingresados a la economía, por el sector productivo y comercial, cuando lo aceptan por la compra, venta y pago de las
deudas.
Error garrafal
Esto ha sido el desatino más grande que se ha cometido, pues al no haberse detectado que lo que se está utilizando como dinero, realmente no lo es,
se ingresó una máquina perfecta para destruir el valor del trabajo de las personas.
Siendo estos conos monetarios, los mayores responsables de las crisis económicas mundiales y de la imposibilidad que tienen los productores del
campo, manufactureros, industriales, comerciantes y por supuesto la masa trabajadora en general, de que a través de su trabajo se pueda generar
riqueza, progreso, desarrollo y prosperidad.
Era necesario crear un cono monetario que corrija todas estas imperfecciones y desatinos que contienen estos conos monetarios, que tanto daño le
han causado a través del tiempo a toda la Humanidad.
Auricoin (Moneda de Oro)
Por las razones antes señaladas se crea el dinero Auricoin el día 23 de noviembre del año 2018, el cual se creó con todas las características y
condiciones necesarias del deber ser del dinero, pues desarrolla a la perfección y de una forma natural sus tres funciones: Unidad de Cuenta,
Depósito de Valor y Medio de Intercambio y estas se encuentren entrelazadas entre sí, y para sí, dentro de su Unidad, armoniosamente unidas y
equilibradamente inseparables, sin contradicción ninguna entre ellas, como es el deber ser del dinero.
Con el dinero Auricoin se logra eliminar de la economía la devaluación, revalorización, inflación, deflación, especulación, manipulación y usura,
causada por el dinero, lo que beneficia a toda la Humanidad sin importar sus credos, razas o estratos sociales.

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