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el pasaje de Jn 4, 19-21, dice: “Nosotros amamos, porque Él nos amó primero. Si alguno
dice: «Amo a Dios», y aborrece a su hermano, es un mentiroso; pues quien no ama a su
hermano, a quien ve, no puede amar a Dios a quien no ve.
Así, el amor a Dios para ser auténtico debe traducirse en amor al prójimo, según el
mandamiento que Jesús nos dio: “...que quien ama a Dios ame también a su hermano”
En el concepto de amor al prójimo se engloba la empatía por otro ser humano sin importar
su condición, se practica la consideración, la compasión, el altruismo, la ministración, la
filantropía y la amistad fraterna.
Altruismo - filantropía
Procurar el bien de las personas de manera desinteresada, incluso a costa del interés
propio.
Ministración
Servir o ejercer un oficio , empleo o ministerio
Amar al prójimo es también PREOCUPARME por los que están peor que nosotros,
por los que tienen hambre, los que se quedaron sin casa.
Amar al prójimo es SER AMABLE, es hablar bien y tratar a las personas con
cariño, y no a gritos o golpes.
Amar al prójimo es tener PACIENCIA con ellos. aceptar a los otros como son,
tolerar sus errores o sus equivocaciones y corregirlos con amor.
El verdadero amor al prójimo todo lo perdona, todo lo cree, todo lo espera, todo lo
soporta.
El amor no acaba nunca.