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Principal vía de transmisión del

coronavirus SARS-CoV-2
José Ramón Eguibar Cuenca

En este momento en todo el globo terráqueo se difunde la variante


ómicron del coronavirus SARS-CoV-2, y es ya la variante
dominante que ha desplazado a la variante delta. De hecho, ómicron es
una enfermedad infecciosa más potente que han conocido los humanos,
siendo más eficaz para infectar que el sarampión.

Un aspecto relevante en los dos últimos años es que se ha podido


determinar que el coronavirus SARS-CoV-2 se transmite primariamente
por vía aérea en pequeñas gotas de saliva menores a 5 micrómetros de
diámetro, las cuales pueden permanecer flotando en el aire por mucho
tiempo, hasta por 12 horas.

Esto implica que el ventilar los espacios cerrados, evitar


conglomeraciones donde la gente hable en voz alta, cante o grite es una
medida de prevención muy eficaz para no adquirir el coronavirus.
La variante ómicron es altamente infectiva, esto es capaz de enfermar a
muchas personas como lo mencione antes, De hecho, se ha estimado que
una persona enferma de COVID-19 ómicron puede infectar hasta 14
personas, comparada con tal solo 2 de la variante original reportada en
Wuhan, China.

Un aspecto para destacar es que al toser o estornudar se pueden expeler


partículas de saliva o moco hasta varios metros de distancia y estas gotas
de 5 y 10 micrómetros, y gotitas de 5 micras o menos pueden contener
cantidades de virus suficientes para enfermar a varias personas
particularmente en espacios cerrados como lo son un salón de clases o
una estética, un elevador, un baño sin ventilación, un antro o en un cine.
Es por esto que el otro aspecto que se debe considerar es que aquellos
espacios que tengan aire acondicionado deben garantizar que sus
equipos posean filtros de alta eficiencia, como son los de la agencia
ambiental de los Estados Unidos de América denominado EPA o los del
estándar europeo denominados EN 1822:2009, los cuales deben ser
reemplazados al menos cada seis meses.

Así que no olvidemos que la sana distancia y estar en espacios


abiertos o ventilar los cerrados son medidas que nos protegen de las
enfermedades respiratorias como la influenza, la gripa, los resfriados
comunes y del temido coronavirus.

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