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© Hedwig Lewis
© 2003 Ediciones Mensajero, S.A.U.; Sancho de Azpeitia 2, Bajo;48014 Bilbao.
E-mail: mensajero@mensajero.com
Web: http://www.mensajero.com
ISBN: 84-271-2550-x
Depósito Legal: BI-2388-03
Impreso en Gestingraf, SAL - Camino de Ibarsusi, 3 - 48004 Bilbao
Printed in Spain
Prólogo
Tu camino va a la fuente
y la fuente es tu camino,
que tu Dios, camino y fuente,
a la vera contigo va.
¿Y si te quedases dormido?
¿Y si, dormido, soñases?
¿Y si, en tus sueños,fueses al cielo
y allí encontrases una flor bella y extraña?
¿Y si,al despertar,tuvieses
la flor en tu mano?
¿Entonces, qué? ¡Ah, entonces!
8
PRÓLOGO
9
EN CAMINO CON DIOS
10
PRÓLOGO
Te agradezco, Señor,
tus palabras que me animan:
«No eres perfecto,
pero tampoco quiero que lo seas,
te basta con mi gracia,
y eso es cosa mía.
Yo seré el camino,
la fuerza, la brújula».
J.M. Casasnovas
12
Introducción
13
EN CAMINO CON DIOS
S o b r e la felicidad
Características
14
INTRODUCCIÓN
Para unos,encantamiento;
para otros,estancamiento.
La f u e n t e d e la felicidad
15
EN CAMINO CON DIOS
16
INTRODUCCIÓN
La felicidad y el paraíso
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EN CAMINO CON DIOS
no» con cada uno de sus pasos e invitó una y otra vez a que se le
siguiese, todavía continúa siendo verdadero lo de «caminante, no
hay camino, se hace camino al andar». Pero siempre será con Él:
«Ven,sigúeme».Y esto,«hasta el fin de los tiempos»... pasando por
nuestros días.
Crear ese entorno de alegría, como ya te habrás apercibido,
comporta una dinámica por la cual haces felices a los demás. Una
atmósfera no puede encerrarse en un sitio concreto; no puedes
guardar y acumular la felicidad para ti solo, como la riqueza mate-
rial. Su frescura y su vitalidad tienen que estar al descubierto y
compartirse. Cuanto más das, más te enriqueces. Lo dijo ya Blas
Pascal: «La felicidad es un artículo maravilloso:cuanto más das, más
tienes».
18
La estructura de este libro
U n poco d e m a t e m á t i c a s
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EN CAMINO CON DIOS
que rumiar y rezar cada semana. ¿Sólo una idea para toda una
semana?
Es que esa idea se repite desde varios ángulos,y acabarías des-
bordado si quisieses asimilarlo todo en un solo día. O sea que dis-
tribuye la materia: hoy esto, mañana aquello.O, al contrario, a veces
querrás repetir el mismo punto, pues tuviste materia de sobra.Y, si
algún día deseas cambiar este plan y quieres reflexionar y hablar
con Dios sobre algo especial, podrás encontrar con facilidad diver-
sas ideas en los índices.
Y, sea lo que fuere, el objetivólo que importa es que reces, no que
leas y leas para enterarte de cosas nuevas. Se trata de enriquecer tu
vida, no tus conocimientos. Enriquecerla y llenarla d e . . . pues eso,de
alegría y felicidad.Todo un camino que andar,cada día... con Él.
No hay prisas, no hay obligaciones, no hay «deberes» que c o m -
pletar. Deja que sea Dios el que te guíe, según te sientas inspirado y
según lo necesites para rezar a gusto y con fruto.Tú,anda paso a pa-
so, día a día,con Él.
M o d o d e proceder
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LA ESTRUCTURA DE ESTE LIBRO
Isaías 43,4: «No temas, que estoy contigo; te aprecio y eres valio-
so a mis ojos.Te quiero».
Isaías 49,15: «¿Puede una madre olvidarse de su criatura, dejar
de querer al hijo de sus entrañas? Aunque ella se olvide,yo no
te olvido. Mira, llevo tu nombre tatuado en la palma de mis
manos».
21
EN CAMINO CON DIOS
3. Lee y reflexiona
22
LA ESTRUCTURA DE ESTE LIBRO
4. Da gracias
5. Despídete
6. Revisa
U n a sugerencia
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EN CAMINO CON DIOS
Dios mío,
aquí estoy yo
tal como soy.
Dios mío,
aquí estás tú
tal como eres.
Entonces,
¿qué puede
impedirme orar?
Andrew Costello
¡Señor, gracias!
Has mirado mi corazón,
has puesto en mí tu mano,
y me has mostrado el camino.
Entonces me has llamado:
«Ven aparte, ven conmigo».
John HalberiM.M.
LA ESTRUCTURA DE ESTE LIBRO
Piet Bremen
PRIMERA PARTE
La fuente de la felicidad
LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Esquema
1
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EN CAMINO CON DIOS
1. LA P R E S E N C I A A M O R O S A DE D I O S
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
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EN CAMINO CON DIOS
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1
Manantial
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EN CAMINO CON DIOS
Explora t u m e n t e
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Despierta t u corazón
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EN CAMINO CON DIOS
más solemne de la fiesta: «Quien crea en mí, que beba,y de sus en-
trañas manarán ríos de agua viva» (Juan 7,38).
— S i e n t e cómo la vida y el cariño de Dios te invaden, llenán-
dote con la simple alegría de estar vivo.
Eleva t u espíritu
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
¿Y si un día se cansara,
y nos dijera: ¡ya basta!,
porque ha tenido bastante
y su paciencia se gasta?
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EN CAMINO CON DIOS
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EN CAMINO CON DIOS
Explora t u m e n t e
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Despierta t u corazón
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EN CAMINO CON DIOS
Eleva t u espíritu
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
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EN CAMINO CON DIOS
Y vidas desafinadas,
olvidadas y empolvadas,
rotas por culpa o pecado
se dejan en el mercado
como indignas,despreciadas.
Myra B. Welch
46
3
Consolador
c
OÑE QUE IBA yo andando por la playa acompañado de Dios.
Y, como por ensalmo, las nubes claras del cielo comenzaron a re-
presentar mi vida,y cada escena se reflejaba en la arena como dos
pares de huellas; unas eran de mis pies, las otras del Señor.
Cuando la última escena se desvanecía en las nubes, miré las hue-
llas en la playa. No lo había notado en mi ensoñación: no siempre ha-
bía dos pares de pies. Precisamente en los momentos más difíciles de
mi vida, cuando yo me había sentido desalentado y solo, había un
par de huellas únicamente.
M e quejé al Señor:
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EN CAMINO CON DIOS
Explora t u m e n t e
Despierta t u corazón
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
— Ora con el salmo 145 (144): «Te ensalzaré, Dios mío, bendeci-
ré tu nombre por siempre jamás (...) El Señor es tierno y compasivo,
paciente y misericordioso. El Señor es bueno con todos, se compade-
ce de todas sus criaturas».
— Saborea estas palabras de la carta a los Romanos (8,31-39):
«Ni muerte ni vida, ni presente ni futuro, ni criatura alguna nos podrá
separar del amor de Dios, manifestado en Cristo Jesús».
— Con el corazón roto por la tristeza Jesús llora sobre Jerusa-
lén: «¡Cuántas veces intenté reunir a tus hijos, como la gallina reúne a
sus polluelos bajo las alas,yos resististeis!» (Lucas 13,4).
— «Cuando se multiplican mis preocupaciones, tus consuelos cal-
man mi ánimo; cuando tropieza mi pie, tú, Señor, me sostienes» (Sa I mo
94 (93), 18-19).
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EN CAMINO CON DIOS
Y si al fin
yo me canso, Señor, y te nombro,
me acercas el hombro,
me llevas sobre él.
Tú soportas mi carga ligera,
mi cruz de madera,
mi vaso de hiél.
Déjame, Señor, poner
sobre tus huellas mis pies.
«Descargad en Dios
vuestros afanes y agobios,
que él se preocupa por vosotros»
(1 Pedro 5,7)
50
Amigo
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EN CAMINO CON DIOS
Explora t u m e n t e
Despierta t u corazón
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Eleva tu espíritu
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EN CAMINO CON DIOS
En peligros y aflicciones
su gracia sublime me libró;
en trabajos, trampas y engaños
mis dudas siempre ahuyentó.
Seguro hasta aguí me ha guiado
y me llevará a casa su amor.
Y cuando allí por mil siglos,
brillando cual brilla el sol,
sus glorias esté aclamando
cantaré a su gran amor
gue de balde me salvó.
S4
LA FUENTE DE LA FELICIDAD
2. D E S C U B R I R L E
Padre bueno,
guiero que tú seas
el centro de mi ser.
Acrecienta en míese deseo
para que esté totalmente unido
a ti, mi Creador y Señor,
en todo tiempo y lugar.
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5
Más consciente
A
í\ PESAR DE sus preciosos 18 años, Amanda tenía una disca-
pacidad mental no muy grande, pero lo suficiente como para que
ella fuera muy simple e inocente... y sin complejos.
Un día se le ocurrió escribir una carta a Dios. Eligió el papel y el
sobre que más le gustaron, y escribió simplemente: «Te quiero».
Dobló el papel, lo metió en el sobre y puso las señas: Sr. D. Dios To-
dopoderoso, Calle del Paraíso, 00000 Cielo.
No puso remite porque, a pesar de su candor, sospechaba que,
si alguien lo leía, se reiría de ella. Pero de una cosa estaba segura:
con remite o sin él, recibiría respuesta.
Pasaron días y semanas y, al pasar todo un mes, Amanda deci-
dió consultar a un anciano sacerdote de la parroquia.
— H a s de tener paciencia. No es que Dios esté muy ocupado...
Es que es un amante muy tímido, ¿sabes?, un poco vergonzoso.
Amanda decidió esperar cuanto hiciera falta; pero, a pesar de
sus mejores propósitos, empezaba a impacientarse.
Un día habían ido de paseo. Amanda se sentó en una piedra a
la orilla del riachuelo y, con un palo, pegaba distraídamente en el
agua. De repente un pez asomó la cabeza y, al volver a meterse
en el agua, hizo cuatro burbujas,exactamente cuatro,y de distin-
to tamaño. Pero lo extraordinario fue gue a Amanda le pareció
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EN CAMINO CON DIOS
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
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EN CAMINO CON DIOS
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Brenda Rogers
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Más atento
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I N LA INDIA los «sadhus» son gente que lo ha dejado todo
para dedicarse a la meditación y al ascetismo. Por comodidad al
protagonista de la siguiente historia lo llamamos «monje».
Había un monje hindú llamado Corda, gran devoto del dios
Krisna. Era tal su fervor que llegó a convencerse de que en el a n -
cho mundo no existía nadie tan devoto como él.
Como no lo hacía por soberbia sino con toda ingenuidad, el
bondadosísimo Krisna quiso poner los puntos sobre las íes y darle
una buena lección al presunto santo.
Una mañana, mientras su devoto estaba enfrascado en una
meditación piadosa, Krisna le habló con dulzura:
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EN CAMINO CON DIOS
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Despierta t u corazón
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EN CAMINO CON DIOS
Eleva t u espíritu
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Carol Wood
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Más cerca
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EN CAMINO CON DIOS
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Despierta t u corazón
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
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EN CAMINO CON DIOS
Michel Quoist
Dios de la paz,
dame la gracia del silencio
y de la soledad de corazón
en medio de los torbellinos
y los ruidos gue llenan mis días.
Concédeme reposar
en el corazón de tu Corazón
sin cesar de darme por ti.
Catalina deHueck
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1
8
Más unidos
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EN CAMINO CON DIOS
muchos premios que había ganado, las Ilusiones que había so-
ñado, todo perdió sentido.
Rosa comenzó a preguntarse por el sentido mismo de la vida.
Un día encontró la respuesta, mientras estaba arrodillada delan-
te del sagrarlo. De repente le vino a la memoria la petulante res-
puesta de su niñez («yo seré monja»)... y entró en un convento
cuando cumplió sus dieciocho años.
Al hacer su profesión religiosa en 1817, siguiendo la costumbre
de aquel tiempo, tomó el nombre de Hermana María Eufrasia. La
destinaron a trabajar con niñas que necesitaban protección del
ambiente infeliz y malsano en que vivían.
Ese trabajo le vino a ella como el proverbial «anillo al dedo». Si
alguien sabía de desgracias y soledad era ella, que lo había vivido
en su propia carne. Pronto empezó a pensar: Este trabajo debería
extenderse al mundo entero. ¿Dónde no hay niñas desgraciadas?
Así que fundó la congregación de las Contemplativas del Buen
Pastor. En menos de cuarenta años había abierto 110 casas en 17
países. Las monjas hacían de maestras, enfermeras, asistentes socia-
les, consejeras y... «madres» para miles de niñas desafortunadas.
La Madre Eufrasia murió en marzo de 1868 y fue canonizada
por el papa Pío XII en 1940. Hoy hay más de siete mil hermanas del
Buen Pastor trabajando en 67 países.
Explora t u m e n t e
— ¿Te das cuenta de que Dios hace uso de tus talentos, o de las
circunstancias de tu vida, para extender su «Reino», para propor-
cionar alegría y felicidad?
— ¿Has pensado que con la «gracia» de Dios puedes hacer m u -
cho bien y gue eso te hará también a ti más feliz?
— En tus planes para el futuro... ¿hay un hueco para la misión
que Cristo encomendó a sus seguidores: extender la felicidad y la
verdadera libertad a todos?
— ¿Te causa un conflicto o un problema poner tus cualidades
naturales al servicio de Dios?
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Despierta t u corazón
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EN CAMINO CON DIOS
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
H.S.F.
3. D I O S C U I D A DE M í
Amaba yo resplandores
y buscaba yo grandezas,
un orgullo temerario
gobernaba mi querer:
no recuerdes esos años
pasados lejos de Ti:
sé tú mi guía, Señor.
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EN CAMINO CON DIOS
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Interviene
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EN CAMINO CON DIOS
Explora t u m e n t e
Despierta tu corazón
8?
LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
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EN CAMINO CON DIOS
Zaqueo se enriquecía
con robos y engaños.
Más de siete veces siete
a muchos ha defraudado.
Pero el Señor de los pobres
en su casa se ha hospedado.
Pecadores, pecadoras,
enfermos y gente impura,
los más desfavorecidos...
de Jesús obtienen cura.
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Cathy Henrie
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Me protege
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EN CAMINO CON DIOS
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Despierta t u corazón
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EN CAMINO CON DIOS
Eleva t u espíritu
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Himno de Laudes
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Me sostiene
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EN CAMINO CON DIOS
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
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EN CAMINO CON DIOS
William Cooper
El pozo de la providencia
es hondo y está lleno.
Es nuestro cubo
el que es pequeño.
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Sueña conmigo
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EN CAMINO CON DIOS
Explora t u m e n t e
Despierta t u corazón
Has estado meditando estos días sobre las mil maneras como se
trasluce la mano de Dios en los sucesos y avatares de la existencia. Es
importante que reflexiones también sobre las bendiciones «negati-
vas»,sobre cómo reaccionar ante ellas.Suelen presentarse entremez-
cladas con las positivas (que son las más numerosas).
Lo sabemos, hay momentos en la vida en que las rosas se toman
espinas, las nubes blancas se vuelven negros nubarrones y lo último
que uno pensaría es que eso es un «designio» amoroso de Dios.
Recuerda, sin embargo, que también Jesús se sintió abandonado
del Padre en la cruz. Hay muchos -quizás conozcas a algunos- gue
han sentido a Dios más cercano precisamente en momentos de
aflicción e infortunio.Y,ciertamente,es cuando más se le necesita.
La montaña no desaparece cuando la niebla no deja divisarla. El
sol no deja de ser vivificante cuando el humo sucio lo oscurece.
Dios sigue tan presente como cuando todo era alegría.
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EN CAMINO CON DIOS
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
4. R E S P U E S T A
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EN CAMINO CON DIOS
Ivie Bozeman
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Personal
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EN CAMINO CON DIOS
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
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— Éxodo 33,11: «El Señor solía hablar con Moisés cara a cara, co-
mo uno habla con su amigo».
— 1 Samuel 3,1-10: Dios llama a Samuel por su nombre.Según
vas leyendo, cambia su nombre por el tuyo.
— Salmo 139 (138), 1 -18: Dios te conoce mejor que tú mismo.
— Juan 17: relee la oración de Jesús,el hijo que se dirige a Dios
como padre.«Abba» le llamaba él.
— Mateo 15,8: «Esta gente me honra con sus labios -dice el Se-
ñor- pero su corazón está lejos de mí».
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EN CAMINO CON DIOS
John Oxenham
Anónimo
Clemente XI
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Testimonio
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EN CAMINO CON DIOS
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— ¿Se te hace fácil tratar con Dios? ¿Te sientes cómodo con Él?
— ¿Tienes miedo a lo que otros dirán si ven tus actitudes «reli-
giosas»? ¿Tratas de ocultarlas?
— ¿Das testimonio de tus convicciones espirituales y de tu in-
timidad con Dios con sencillez, pero sin reparos?¿También en p ú -
blico?
— ¿Cómo reaccionas cuando ridiculizan los sentimientos reli-
giosos de otros?
— ¿Es tu vida tal gue Dios puede hacer uso de ti para inspirar a
otros y acercarlos a Él ?
— ¿Has pensado que Dios ha puesto en tu camino a personas
que te han impactado y ayudado a vivir tu fe?
Despierta t u corazón
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
del monte y también Pablo a los Efesios (5,8): «Por un tiempo fuisteis
tinieblas, ahora gracias al Señor sois luz. Proceded, pues, como hijos de la
luz. Sus frutos son toda bondad, justicia y verdad».
No se trata de que hagas una exhibición de santidad o miseri-
cordia a cada paso. Se trata, simplemente, de vivir como hijo de
Dios.Tu estilo de vida,tus convicciones,tus valores... han de estar
Influidos por tu fe.
Se experimenta una satisfacción y una alegría especiales cuando
uno trata de ser fiel a sí mismo y coherente con sus principios...
cuando no se deja el camino emprendido simplemente porque, mi-
rando desde la cuneta, se ríen unos ociosos desocupados.
Eleva t u espíritu
El amor empieza en ti
como chispita fugaz,
mas resguardada del aire
y a soplos de humanidad,
poco a poco crece y enciende
una hoguera de verdad.
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EN CAMINO CON DIOS
Si el amor en ti prende
y arraiga en profundidad
ya nunca serás el mismo
y hasta el mundo cambiará.
Dolores Dahl
H.S.F.
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Mi vida
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EN CAMINO CON DIOS
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Arrodillado recé
cuando iba ya a acostarme,
-rutina mañana y tarde-:
«Bendice a todos, te pido
-dije con devoción sentida-,
al corazón desolado
dele aliento tu venida;
del enfermo abandonado,
cura y sana Tú la herida
y permanece a su lado
dando esperanza a su vida».
Al clarear la mañana,
¡oración al levantarme!
Luego me marché a lo mío
sin de los otros cuidarme,
el corazón seco y frío,
durante toda la tarde.
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EN CAMINO CON DIOS
Y al acabarse ya el día
otra vez me arrodillé:
«Bendice a todos», te dije
con gran devoción y fe.
Pero al marcharme a la cama
oí un murmullo en mi oído:
«¿Por qué repites de nuevo
tanto rezo sin sentido?
Hipócrita, deja tus preces,
¿a quién hoy has ayudado?
Las bendiciones se otorgan
a los servicios prestados».
Bajé mi cara dolido
y oré con todo recato:
«Perdóname, que he mentido,
en mi plegaria te engaño:
hazme vivir con sentido
y practicar lo que he orado».
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16
Los demás
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EN CAMINO CON DIOS
bordo. Pero, primero, había que avisar al pobre Dick. ¿Sí? ¿Y por
qué? Estaba claro que Dick no era un persona buena,ya que ni un
solo día Dios había escuchado sus oraciones.
Pero cuando iban a levar anclas,Tom oyó una voz imperiosa:
— P e r o ¿es que vas a dejar abandonado a Dick?
— T ú eres el que pareces haberle abandonado, Señor. No has
satisfecho ni una de sus oraciones.
— S i no hubiera sido por Dick, tú no habrías recibido nada.
Tom trató de ver quién era realmente el que le hablaba. Al no
ver a nadie, prosiguió:
— P e r o ¿qué le debo yo a él?
— D i c k sólo pedía una cosa: que te concediese a ti todo lo
que me pidieras.
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
— «Rezad unos por otros: mucho puede la oración solícita del jus-
to» (Santiago 5,16).
— «Rezad en toda ocasión por todos» (Efesios 6,18).
— Jesús nos encomienda a Dios: «Te ruego, Padre,por los que me
has confiado. ..y no sólo por ellos, te pido también por los que han de
creer en mí por medio de sus palabras...». Puedes leer todo el pasaje
en Juan 17,9 y 20-21.
— San Pablo pide que recen por él: «Rezad también por mípara
que, cuando abra la boca, se me conceda el don de la palabra y pueda
exponer el secreto de la buena noticia» (Efesios 6,19).
— Reza despacio y meditando las palabras del «Padre Nuestro»
(no es el «Padre Mío»).
— «Doy gracias sin cesar a Dios por vosotros {...) Él os confirmará
hasta el final para que el día de Nuestro Señor Jesucristo seáis irrepro-
chables» (1 Corintios 1,4-8).
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EN CAMINO CON DIOS
Enséñanos a estremecernos
con las páginas de los periódicos,
los libros de historia o geografía,
las películas y los documentales.
H. Perrin
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LA FUENTE DE LA FELICIDAD
El amor desinteresado
es la llave de oro
que abre los corazones.
EN CAMINO CON DIOS
1
i 1
1
^¿aceite
Jbey/umac¿& de mi viday
cmüe a¿óerwfia
c¿e¿0et
I
Elige amar-y no odiar
Elige reír-y no gruñir
Elige edificar - y no derruir
Elige perseverar - y no desistir
£2 Elige alabar - y no criticar
Elige curar - y no herir
Elige dar - y no acaparar
Elige actuar - y no diferir
Elige rezar - y no desesperar
1 ,,,,,, •
|| Elige perdonar - y no maldecir
PNoberi Webber
120
SEGUNDA PARTE
Paquetes de Atrevimiento,
botes de Amor e Indulgencia,
el Cariño y la Ternura
estaban allí de oferta,
en cajas, la Tolerancia,
envasada, la Paciencia,
125
EN CAMINO CON DIOS
había Fe en cantidad,
y no faltaban las esencias:
Caridad, Bondad, Confianza
y Misericordia inmensas.
Sacos grandes de Humildad
se amontonaban por tierra.
Hedwig Lewis, S J .
(inspirado en Heaven's Grocery
Store, de autor anónimo)
126
J
INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
5. U N A P E R S O N A L I D A D E Q U I L I B R A D A
Te pido,Virgen María,
un corazón abierto y nuevo
como el corazón de un niño,
como las aguas limpias,
transparente, claro y sencillo.
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17
Conocerte
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EN CAMINO CON DIOS
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Despierta t u corazón
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
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EN CAMINO CON DIOS
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Edgar Guest
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Estimarte
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EN CAMINO CON DIOS
Despierta t u corazón
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
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EN CAMINO CON DIOS
139
EN CAMINO CON DIOS
mámente generoso con su patria, con los músicos pobres y los re-
fugiados judíos.
Explora t u m e n t e
Despierta t u corazón
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
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EN CAMINO CON DIOS
Realidad y apariencia
ahora bien las distingo:
y sé que es tonto fingir
el valor que no he tenido.
Mi vocación he encontrado,
lo que yo tengo que ser,
y si los demás se mofan,
pues... ¡qué le vamos a hacer!
Grace E. Easley
142
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Aceptarte
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EN CAMINO CON DIOS
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Despierta t u corazón
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
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EN CAMINO CON DIOS
Ramona LAnderson
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
6. A C T I T U D E S P O S I T I V A S
No te pido en mi oración
ser rico, sabio, importante,
poderoso o incluso bueno,
simplemente, ser brillante:
irradiar salud y alegría,
valor, calma y buen talante.
Si he de ayudar a la gente,
sea de modo discreto,
sin órdenes ni lecciones,
sin que se pierda el respeto.
149
EN CAMINO CON DIOS
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Vivir el presente
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EN CAMINO CON DIOS
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
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EN CAMINO CON DIOS
No conozco yo el futuro
ni me atormenta saberlo.
Él me dice:«No receles,
ve alegre por el sendero».
Su voz me calma y apacigua:
«¡El hoy es ya suficiente!».
Cuando aparezca el mañana,
Él no me dejará inerme.
¿Apurarse y angustiarse
cuando Dios nos da a su Hijo?
Ningún mal puede ocurrirme
con lo que nos ha querido.
154
22
Los problemas en su contexto
F
I L SEÑOR CRASTA estaba amueblando su nueva casa y había
encargado la tarea a un joven carpintero. Una mañana el mozo lle-
gó tarde. Había tenido problemas en un paso a nivel y le pilló una
congestión de tráfico.
En pleno trabajo el taladro le falló y, por mucho que trató de
arreglarlo, tuvo que llevarlo al servicio técnico.Otro rato que es-
tuvo ausente y nueva pérdida de t i e m p o . . . y de dinero,ya que
se le pagaba por horas. Más tarde, tuvo que arrostrar otros pro-
blemas. Los paneles no estaban cortados correctamente y no
encajaban entre sí. El joven carpintero acabó el día agotado y
descorazonado. Y ya, para colmo de males, cuando se montó en
su coche descubrió que tenía una rueda pinchada.
El señor Crasta, que había sido testigo de las frustraciones repe-
tidas del pobre hombre, se ofreció a llevarlo a su casa. Al llegar,el
carpintero le invitó a que entrara a conocer a su familia.
Había un pequeño árbol a la entrada. El carpintero se paró a n -
te él y, con ambas manos, tocó las ramas. En cuanto se abrió la
puerta todo su ser pareció transformarse.Su rostro se iluminó con
una sonrisa alegre, besó a su mujer y sus hijos. Nadie hubiera sos-
pechado el día que dejaba atrás.
155
EN CAMINO CON DIOS
Explora t u m e n t e
Despierta t u corazón
Nadie puede vivir sin problemas, y hay días en que parece que
vienen en cadena, uno tras otro, sin darnos respiro. Es, por tanto, muy
importante que aprendas a ponerlos «en su sitio», es decir, a tratar de
resolverlos o capearlos en su terreno sin mezclarlos en una única bo-
la de nieve cuyo grosor y espesor crece y crece pesando sobre el
conjunto de tu vida.
Otra cosa que debes aprender es a tener imparcialidad y ser
justo: primero, has de discernir cuáles son las causas o quiénes son
los responsables de tus problemas; y, por consiguiente, no hagas
«pagar a justos por pecadores», no seas como aguel gue pegaba
156
INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
157
EN CAMINO CON DIOS
¿Cómo te encontraremos
al declinar el día
si tu camino no es nuestro camino?
Detente con nosotros,
la mesa está servida,
caliente el pan y envejecido el vino.
158
INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
No alimenté fantasías,
ni alenté huecas ambiciones,
y en vez de sembrar cizaña,
recogí unas cuantas flores.
161
EN CAMINO CON DIOS
Explora t u m e n t e
Despierta tu corazón
La vida tiene sus altibajos. Las cosas muchas veces no salen co-
mo nos gustaría. Hay obstáculos que saltar,fracasos que arrostrar.Y
nuestra naturaleza tiende a acobardarse a la primera de cambio
cuando ha de lidiar con todo eso.
Pero si cultivas en ti un espíritu fuerte y comprometido, no hui-
rás de la batalla sin luchar.Y si te ves débil o con pocos recursos, no
sentirás vergüenza de buscar ayuda.
La constancia y la perseverancia requieren una perspectiva positi-
va sobre el fracaso. Como repiten muchos de los que han triunfado
162
INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Eleva tu espíritu
163
EN CAMINO CON DIOS
De virajes y revueltas
llena está la vida toda,
si pendiente es la subida,
la bajada, más dañosa.
Más de un fracaso ocurre
cuando ya cantas victoria,
pero nunca alcanza el triunfo
el cobarde que abandona.
Sólo el constante se lleva
la medalla más gloriosa.
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24
Las emociones
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EN CAMINO CON DIOS
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Explora t u m e n t e
Despierta t u corazón
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EN CAMINO CON DIOS
Eleva t u espíritu
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
A donde vayas,
ve de todo corazón.
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
7. U N E S P Í R I T U I N D O M A B L E
Sé tú mi sabiduría,
es tuyo todo el saber.
Esté yo siempre contigo,
tú siempre a mi vera estés.
Tú eres mi padre y yo, tu hijo,
siendo uno y dos a la vez.
Sé tú mi espada y mi escudo
en el campo de batalla,
mi jardín y huerto apacibles
en los momentos de calma.
Dentro de mi corazón,
tú serás siempre el primero.
172
25
Aceptar retos
A
/ V L G O SE SUBLEVÓ dentro de Fréderic al oír aquellas palabras:
«Vosotros, los católicos, no servís para nada. Mucha oración, mucha
religión, pero no hacéis nada por las masas». La acusación se había
formulado en público, en el transcurso de un mitin. Corría el año
1833. Fréderic Ozanam tenía 20 años y estudiaba en la Facultad de
Derecho de París.Su primera reacción fue la de contestar allí mismo,
pero se dio cuenta de que el denunciante era un joven socialista, de
cara pálida, con gafas medio rotas, ropa raída y zapatos muy gasta-
dos. Se alejó con paso lento y con la cabeza llena de interrogantes.
Antes de dormirse aquella noche, había resuelto cambiar el mundo.
A diferencia de la mayoría de los sueños, éste no se desvaneció
al despuntar el alba. Reunió a sus seis mejores amigos y les contó
lo que había pasado la tarde anterior,y concluyó:
— Y la mitad de la población de París vive todavía peor que
aquel joven socialista. Algo tenemos gue hacer.
Como ninguno de ellos tenía experiencia en estas lides,fueron
a ver a la Hermana Rosalía, hija de la Caridad, que se encargaba de
un «comedor de los pobres». Comenzaron por ayudar allí mismo.
Luego, se reunían y cada uno contaba sus experiencias... Todos
coincidían en que, de sus contactos con los pobres, ellos eran
quienes salían más beneficiados.
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EN CAMINO CON DIOS
Explora t u m e n t e
Despierta t u corazón
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
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EN CAMINO CON DIOS
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Hazte «posibilitario»,
descubre posibilidades:
¡siempre las hay!
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Hacer reales los sueños
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EN CAMINO CON DIOS
Explora tu m e n t e
Despierta t u corazón
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
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EN CAMINO CON DIOS
Eleva t u espíritu
I
Afina tus sentidos
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Enderezar lo Incorregible,
amar lo aborrecible,
aceptar lo Inadmisible,
perdonar lo inconcebible,
alcanzar lo inasequible...
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EN CAMINO CON DIOS
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No cansarse de explorar
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
187
EN CAMINO CON DIOS
A
i \ MITAD DE la centuria pasada, en 1950, un comité con re-
presentación de diecisiete países eligió a Albert Schweitzer «hom-
bre del siglo». Dos años más tarde, 1952, se le concedía el premio
Nobel de la Paz.
Antes y después de tales espaldarazos, las alabanzas y honores llo-
vieron en abundancia sobre él.Genio polifacético, respetado como fi-
lósofo, teólogo, historiador, músico y, muy especialmente, como mé-
dico misionero. La fuente y la causa de todas esas excelencias era su
fe profunda, una fe que influía en los menores detalles de su activi-
dad. Esa fe era también la que lo motivó a volver las espaldas al bie-
nestar y a la fama mundial para irse a trabajar con los más pobres en-
tre los pobres de África.
Él mismo explicaba cómo había sentido una inspiración espe-
cial cuando estaba meditando la parábola del rico y el pobre Lá-
zaro: «Fue como un golpe seco que me hizo recuperar la lucidez y
empezó a hacérseme incomprensible e inadmisible el que yo pu-
diera vivir una vida tan feliz y despreocupada mientras tanta g e n -
te se debatía en medio de tantos padecimientos».
A los 21 años prometió que acabaría sus estudios primero, pero
que el resto de su vida lo dedicaría a trabajar con los más necesi-
tados en la forma de servicio que se presentase. El 13 de octubre
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EN CAMINO CON DIOS
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Despierta t u corazón
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
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EN CAMINO CON DIOS
1
Una traducción más amplia de este poema: En casa con Dios. Bilbao, Mensajero,
l0
20 03,p.351-52.
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
H. W. Longfellow (adaptado)
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EN CAMINO CON DIOS
8. M A G N A N I M I D A D
Enséñame,Señor,a escuchar
a los que cerca de mí viven,
mi familia, mis amigos,
mis compañeros de trabajo.
Hazme caer en la cuenta
de que,digan lo que digan,
usen las palabras que usen,
su mensaje siempre es el mismo:
«Acéptame como soy,
escúchame cuando te hablo».
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Perdón
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EN CAMINO CON DIOS
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Judith Mammay
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EN CAMINO CON DIOS
La fogata se apagaba
mas nadie echaba ni palo:
no querían malgastarlo
con unos simples extraños.
El cura no se animaba,
pues era un poco tacaño.
Esperaba gue lo hiciera
uno de sus parroquianos.
206
INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
El último de la fila
lo tiene todo muy claro:
Si nadie me ayuda a mí
¿por qué dar el primer paso?
A la mañana siguiente
el fuego estaba apagado,
quedaron muertos los seis
con la leña en sus manos.
F
I L FAMOSO CANTANTE Cliff Richards,el «Peter Pan del Pop», na-
ció en la India pero fue educado en Inglaterra.Sus repetidos triun-
fos le hicieron un habitual de las listas de éxitos, copando en ca-
torce ocasiones el primer puesto durante muchas semanas y
logrando un montón de discos de oro.Y todo ello desde la década
de los 5 0 del siglo pasado.
Pero su vida profesional no lo era todo para él.Su preocupación
e interés en ayudar a la gente desgraciada le llevó a visitar uno de
los campos de refugiados en Bangladesh. Luego confesó que, el
primer día, se lavó las manos cientos de veces. No quería tocar na-
da ni a nadie por miedo a una infección: todos, aun los niños en
brazos, estaban cubiertos de llagas malolientes.
Un fotógrafo le pidió que se inclinase hacia un niño. Cliff lo hi-
zo con mucho cuidado para no llegar a tocarlo. Pero alguien pisó
por descuido al pequeño y el grito de dolor del chico desarmó a
Cliff. Llevado por un Impulso, tomó al niño en sus brazos, olvidán-
dose de su suciedad y sus llagas.
«Recuerdo aquel cuerpecito callente agarrándose a mí confia-
do. Sus lloros pararon c o m o por ensalmo. Me di cuenta en aquel
momento de cuánto me quedaba por aprender sobre el verdade-
ro amor cristiano. Pero, por lo menos, aquello fue el principio.»
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Despierta t u corazón
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EN CAMINO CON DIOS
Eleva t u espíritu
Dijiste no te atrevías
a embarcarte en algo nuevo,
mas aposté por tu triunfo,
y resultaste el primero.
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INGREDIENTES PARA LA FELICIDAD
Dijiste no te gustaba
en modo alguno tu aspecto,
pero logré demostrarte
que hay algo mucho más feo.
Todd Wielgos
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EN CAMINO CON DIOS
H.C.J.
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TERCERA PARTE
I 225
EN CAMINO CON DIOS
Bernard Boon
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
9. E L E G I R N O ES FÁCIL
Me pediste la vida
para trabajar a través de mí;
te di sólo una parte pequeña
para no comprometerme demasiado.
Perdóname, Padre,
y envíame de nuevo,
que ahora sí me tomaré en serio
tu cruz y la tarea.
J o e Saramane
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33
El bien mayor
Q
S I E M P R E SON UNA atracción para los que no los han visto an-
tes:esos puentes colgantes que se abren como dos manos dando
la bienvenida a buques lentos y majestuosos.
El de nuestra historia era un puente para el ferrocarril,y el guar-
dagujas vivía con su familia a las orillas de un gran río.
Siguiendo su rutina, el empleado entró en la salita de control y
apretó el botón correspondiente. El puente comenzó a cerrarse len-
to, como si estuviese desperezándose. A lo lejos ya se veían las luces
del tren y pronto sonó su silbato agudo en la noche. Pero el guarda
casi ni lo oyó. ¡Otra vez había ocurrido! A pesar de haberse cerrado,el
puente no había quedado del todo fijo. Existía el peligro de que el
tren descarrilase y cayese al río.
Salió corriendo hacia el otro lado, donde había una palanca ma-
nual que fijaba definitivamente el puente: tendría que sostenerla
fuertemente hasta que pasase el tren. Para estar más seguro, se re-
costó con todo su peso sobre la palanca: muchas vidas estaban en
sus manos.
Al levantar la vista para ver si el tren se acercaba, un grito de horror
se le escapó desde lo más hondo de su ser: su hijo de cuatro años ve-
nía saltando y jugueteando sobre las traviesas para estar junto a su
papá. Y no había tiempo para ir y volver. Si abandonaba la palanca
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EN CAMINO CON DIOS
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
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EN CAMINO CON DIOS
John Oxhenham
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
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La mayor necesidad
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
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EN CAMINO CON DIOS
Evelyn Whitell
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
— Contempla a Jesús, que lava los pies a sus discípulos: Juan 13.
— «Cuando Simón y sus compañeros encontraron a Jesús le dije-
ron: «Todos te buscan». Pero Jesús les respondió: «Vamonos de aquí
a las aldeas vecinas para predicar también allí, que a eso he veni-
do». Y fue predicando...» (Marcos 3,35-39).
— «El que se aferró a la vida la pierde, el que desprecia la vida en
este mundo la conserva para la vida eterna. Quien me sirva que me si-
ga y donde estoy yo estará también mi servidor» (Juan 12,25-26).
— La mayor grandeza a los ojos de Jesús es el servicio: Mateo 20,
20-28.
— ¿Quién es el primero?: Marcos 9,33-37.
Me preguntaban de niño:
— ¿ T ú qué serás de mayor?
Les hacía un leve guiño:
— Y o quiero ser remendón.
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EN CAMINO CON DIOS
Si yo fuera un remendón
primero recosería
todo herido corazón,
y zurcido quedaría.
Remendaría familias,
parejas y amistades,
donde hay fobias y no filias
cambiaría voluntades.
Cansancio, padecimiento,
fatiga, desilusiones
remendaría al momento
con sonrisas y canciones.
Vejaciones y opresiones
remendaría valiente,
las llagas y las traiciones
curaría suavemente.
La grandeza no se mide
por cuántos te sirven,
sino por... a cuántos sirves.
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Lo más costoso
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EN CAMINO CON DIOS
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Despierta t u corazón
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
— «Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por los
amigos» (Juan 15,13).
— «Yo soy el buen pastor,queda la vida por sus ovejas» (Juan 10,11).
— Medita Filipenses 1,18-21: «Mi vida es Cristo y morir es ga-
nancia».
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EN CAMINO CON DIOS
Edward Crossby
Sean loados
los que tienen el valor y la ocasión
de dar su vida por los demás.
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
10. I N T E R E S E S G L O B A L E S
CatherineA. Hepburn
247
37
«Epidemia» de amor
r
v_UANDO SE CERRÓ la fábrica donde trabajaba, John encontró
empleo en un garaje. Una vez tuvo que ir,ya al atardecera probar
un coche en una carretera poco frecuentada. El cielo estaba enca-
potado y comenzaba a llover. Casi no pudo vera la mujer y su Mer-
cedes. Parecía ya anciana, indecisa y nerviosa en la cuneta de la ca-
rretera. A pesar de la poca visibilidad, J o h n se dio cuenta de que
necesitaba ayuda y salió del coche para ir a socorrerla.
Aunque trató de dibujar una sonrisa, se la veía preocupada. Na-
die había parado a ayudarla en más de una hora.Y el que ahora se
acercaba, ¿vendría a robarle y hacerle daño? Advirtió que vestía
pobremente y que sus vestidos estaban demasiado sucios para
poder fiarse de él. John se dio cuenta de la situación y, todavía a
cierta distancia, gritó preguntando si necesitaba ayuda, que él era
mecánico.
Se trataba sencillamente de una rueda pinchada y sin aire. La
cambió en un momento. Al ofrecerle la señora d i n e r o j o h n movió
la cabeza negativamente y, simplemente, le dijo:
— S i me quiere pagar, la próxima vez que encuentre a alguien
que necesite ayuda, échele una mano.
A los pocos kilómetros había un restaurante, bastante destarta-
lado y sucio, pero la señora necesitaba tomar un café caliente. La
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EN CAMINO CON DIOS
Explora t u m e n t e
Despierta t u corazón
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
El abuelo aconseja:
«Si quieres pasar un buen día,
empieza por dar algo».
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EN CAMINO CON DIOS
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
H.S.Phillips
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Hacer el bien
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EN CAMINO CON DIOS
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Despierta t u corazón
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
J.L.BIancoVega,S.J.
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EN CAMINO CON DIOS
Richard Wilton
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El ejemplo
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EN CAMINO CON DIOS
Explora tu m e n t e
Despierta t u corazón
Las obras hablan más alto que las palabras. Aunque no lo ha-
gas conscientemente, tu conducta y tus actitudes influyen en
los que viven contigo o en tu mundo. Y, a su vez, también ellos
influyen en t i . . . para bien o para mal. Es, pues, importante el
comprender la importancia del «ejemplo».
Es cierto que las figuras públicas, los actores, deportistas y atle-
tas, políticos y gente famosa, etc., tienen una mayor influencia y,
por lo tanto, mayor responsabilidad, que han de estar atentos a lo
que dicen y hacen con más cuidado que los demás. Pero también
la «gente ordinaria» tiene la obligación de no escandalizar o c o -
rromper a otros. Y, al contrario, han de incitar al bien a todos los
que viven en su radio de acción.
No pocas veces una vida «virtuosa» aunque poco notoria, vivi-
da en paz y sin ruido, ejerce sobre los que viven a su alrededor una
influencia poderosa.
Eleva t u espíritu
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
— Medita en lo que Jesús llama «tu fuente de luz» o «la luz del
cuerpo», según las traducciones: Mateo 6,22-23.
— Lee y «saca provecho»: Mateo 5,13-16 y 7,15-21.
tú escribes un evangelio
-que es noticia buena y patente-
con las obras y palabras,
con las manos y la cara.
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EN CAMINO CON DIOS
Ángel Calvo
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Los del techo
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EN CAMINO CON DIOS
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Despierta t u corazón
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
las cosas que haces.Cada uno aporta más o menos según sus po-
sibilidades. Es menor el sentido individual de la tarea y disminuye
el embarazo ante la persona a la que se ayuda.Y,finalmente, el fo-
co de atención es más el trabajo que se hace que lo que yo pue-
da conseguir al realizarlo.
Una última reflexión. Las organizaciones de laicos y laicas, las
comunidades religiosas han de procurar que su trabajo en equipo
se convierta en un trabajo de cuerpo, el cuerpo de Cristo.
Eleva t u espíritu
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EN CAMINO CON DIOS
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Dios mío,enséñame
a ser amable y buena
en todo lo que diga y haga.
Enséñame a irradiar,
como el sol, luz y calor
en los días tristones y fríos.
Enséñame a no detenerme
y continuar adelante
cuando la cruz se hace pesada.
Dios mío,enséñame
a compartir mis ojos
con aquéllos que no pueden ver.
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EN CAMINO CON DIOS
Catheñne Ryan
268
41
Nada a cambio
/\.J. CRONN
I , ANTES de ser escritor, había sido médico en una
compañía minera de Gales. Dejó escritas sus memorias de este pe-
ríodo de su vida en su libro Aventuras en dos mundos:Apuntes de mi
vida.
Narra allí cómo había «una enfermera de mediana edad que,
durante más de veinte años, había servido a la gente de Tregenny
con gran fortaleza y paciencia, con calma y espíritu alegre... A u n -
que era muy querida de todos, su salario era el más injusto».
A Cronin le admiraba la actitud desinteresada que la sanitaria
mostraba con toda naturalidad en cualquier ocasión. A él también
le parecía que la enfermera merecía una mejor remuneración. Un
día sacó el asunto en una conversación con ella.
— ¿ P o r qué no exige un aumento de sueldo? Es ridículo que
trabaje tanto portan poco.
—Tengo suficiente para ir tirando -respondió ella sonriendo.
— N o , de verdad -insistió él-. Deberían darle por lo menos una
libra más cada semana. Bien sabe Dios que se lo merece.
Siguió una pausa. La sonrisa continuaba en el rostro de la e n -
fermera, pero su mirada se volvió pensativa y llena de intensidad.
Respondió por fin:
—Doctor, si Dios lo sabe, eso es lo que me importa.
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EN CAMINO CON DIOS
Explora tu m e n t e
Despierta t u corazón
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
Hermandad y humanidad
Habitantes de la Tierra,
todos nacemos iguales,
desterremos, pues, la guerra,
el odio y los demás males.
271
EN CAMINO CON DIOS
Ciudadanas, ciudadanos,
combatamos todos juntos
por los derechos humanos,
por los restantes asuntos
que harán de la Tierra entera
fraternidad verdadera.
Hombres nuevos,
hombres muertos a sí mismos
que viven en justicia,
en magnanimidad y en bondad,
en el Espíritu Santo
y en caridad sincera,
con próspera o adversa fortuna:
marchan ya en avance incontenible,
y arrastran a otros muchos con ellos,
con la mira puesta todo el rato
en la mayor gloria de Dios.
P. Ribadeneira
Señor,danos la gracia
de no serían cicateros,
de salir de nosotros mismos,
y de vivir en cualquier parte,
con tal que sea
lejos de nosotros mismos
y muy cerca de ti.
J. K. Huysmans
272
42
Entregarse de corazón
M
I V IARK LlNK, en una de sus homilías, cuenta la historia de una
estudiante de bachillerato que se apuntó a un grupo de su parroquia
para pasar un domingo con los ancianos e inválidos del hospital.
Al entrar allí, su primer impulso fue el de huir. Se quedó abru-
mada ante aquella gente en sillas de ruedas, al ver sus caras secas
y arrugadas. Ancianas encorvadas, viejos olvidados, parapléjicos, ni-
ños desnutridos que reclamaban mudamente atención y cariño.
No pudo soportarlo. Salió corriendo al jardín del hospital. Y allí,
sin saber por qué, empezó a descargar toda su rabia contra Dios,
por permitir tanto dolor y sufrimiento.
Pasó allí alrededor de una hora y, también sin saber cómo, su
actitud fue transformándose. Empezó a adivinar que, en realidad,
Dios quería a todas aquellas personas de una manera especial.
Volvió al hospital, donde sus compañeros de la parroquia esta-
ban ayudando a los discapacitados,dándoles de comer, empujan-
do las sillas de ruedas, arropando al que lo necesitaba. Se unió a
ellos con entusiasmo y comenzó a hablar con los pacientes.
Luego recordaba:
273
EN CAMINO CON DIOS
Explora t u m e n t e
Despierta tu corazón
274
NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
Afina t u s sentidos
A la noche en tu balanza
pesa paja y pesa grano:
¿mereces hoy alabanza
o pasaste el día en vano?
275
EN CAMINO CON DIOS
¿Afloró de ti un regato
de bondades y favores?
¿O dejaste con tu trato
heridas y resquemores?
Señor, no permitas
que vivamos felices y satisfechos
en nuestro pequeño rincón.
Que sintamos desazón
por la miseria universal.
Ésta es mi ardiente oración.
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43
Echar una mano
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EN CAMINO CON DIOS
Explora t u m e n t e
Despierta t u corazón
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
— No hay mayor amor que dar la vida por los amigos: Juan 15,13.
— El mejor ejemplo, por supuesto, es el de Jesucristo: 1 Pedro 2,
19-25.
— «Ya no vivo yo, sino que vive Cristo en mí. Mientras vivo en carne
mortal, vivo de fe en el Hijo de Dios, que me amó y se entregó por mí»:
Gálatas2,20.
— «Se entregó por nosotros» es uno de los estribillos más repeti-
dos en el Nuevo Testamento.
279
EN CAMINO CON DIOS
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Todo tu ser
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EN CAMINO CON DIOS
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Despierta t u corazón
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Eleva t u espíritu
I
Afina tus sentidos
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EN CAMINO CON DIOS
En mi uniforme de gala,
atestado de medallas,
yo solo, en mi rincón sentado,
escuchaba el griterío.
Oficial y con el mando,
cómoda guerra he tenido,
por eso siento en mi frente
el ardor de la vergüenza:
por mi nación y mi pueblo
¡qué poco he sacrificado!
En la batalla y el combate,
284
NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Edgar Guest
P. Doncoeur
285
NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
12. C O M P R O M I S O TOTAL
Tú le diste al emigrante
un gran deseo de puerto,
ganas de levantar casa
en un país extranjero.
A ti me vuelvo, Señor,
ojos y corazón abiertos,
esperando tu llamada:
haz de mí tu mensajero.
Enséñame a compartir
mi hogaza con el hambriento,
a darle al que tiene sed
de agua clara un jarro entero,
a cobijar en mi casa
a los que no tienen techo,
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EN CAMINO CON DIOS
a arropar al desnudo,
a visitar al enfermo,
a acoger al emigrante,
a reconfortar al preso.
Kate Compston
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Soltar amarras
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EN CAMINO CON DIOS
Explora t u m e n t e
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Despierta t u corazón
Eleva t u espíritu
Jeremías 1,4-10
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EN CAMINO CON DIOS
El Señor me dijo:-¡Ve!
Me quedé del todo frío.
Pregunté:-¿Qué dices? ¿Yo?
—Sí, tú mismo.Te he elegido.
Al instante respondí:
— N o estoy ni libre ni listo.
No soy la persona idónea.
Desconozco tus motivos.
Repitió su encargo:—¡Ve!
No me pongas pegas -dijo.
—Pero, Señor, que no quiero.
— L o sé, pero te necesito.
—Mira, Señor, no porfíes,
tengo asuntos, no es mi estilo,
me asusta hablar a la gente,
no me metas en más líos.
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Me pidió de nuevo:—¡Ve!
— A q u í me tienes, Dios mío.
Iré a donde tú me mandes,
indícame tú el camino.
I
— N o temas nada de mí.
Sólo quiero ser tu amigo.
—¿Temerte, mi amor, mi dueño?
De ti del todo me fío.
Louis Hodrick
Desocupa tu corazón
y tendrá alas para volar.
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Con todo el corazón
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EN CAMINO CON DIOS
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Despierta tu corazón
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Eleva tu espíritu
I
Aquí el bautismo proclama
su voz de gloria y de muerte.
Aquí la unción se hace fuerte
contra el cuchillo y la llama.
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EN CAMINO CON DIOS
Himno de Laudes
Himno de Vísperas
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EN CAMINO CON DIOS
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Despierta t u corazón
Eleva t u espíritu
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EN CAMINO CON DIOS
• Creer
Gerardo Diego
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
Soberana Majestad,
eterna Sabiduría,
Bondad buena al alma mía,
Dios, Alteza, un Ser, Bondad:
la gran vileza mirad
que hoy os canta amor así:
¿qué mandáis hacer de mí?
Teresa de Jesús
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Un espíritu valiente
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EN CAMINO CON DIOS
Explora t u m e n t e
Despierta t u corazón
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
dirección contraria. Por eso no hay sitio para medias tintas, se requie-
re una entrega completa.
A lo largo de la historia se ha ridiculizado no poco a los cristia-
nos, diciendo que ponen cruces, sí, en sus cuellos y en sus casas.
Pero son cruces de brillantes,de oro,artísticas y bonitas. Lo que J e -
sús anunció a sus seguidores era el patíbulo, un instrumento de
tortura mortal, una cruz de madera mal cortada, pesada y dura.Co-
mo la suya.
Sin embargo, no quiere eso decir que la vida cristiana haya de
ser triste, desdichada y sin consuelo. Los que siguen los pasos de
Cristo lo hacen voluntariamente,dan con alegría y sin pensar en
alabanzas ni medallas.
Al comentar cómo aquel joven bullicioso de Asís se convirtió en
un dechado de pobreza y desprendimiento, Chesterton explica que
Francisco lo dejó todo y se complacía en sufrimientos y dificultades
como lo hacen todos los enamorados del mundo: es una forma de
decirle a la persona amada que la quieren pase lo que pase y pese a
quien pese. Lo hacen sin darle ninguna importancia, porque están
enamorados y quieren demostrarlo.
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EN CAMINO CON DIOS
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
13. E N C U E N T R O CON EL S E Ñ O R
Querido Jesús:
ayúdame a esparcir tu fragancia por donde vaya.
Inunda mi alma con tu espíritu y aliento.
Penetra y posee todo mi ser tan completamente
que mi vida entera sea irradiarte a ti sólo.
Que pase tu luz a través de mí.
Habita tú en mí de tal manera
que todos aquéllos con los que me encuentre
puedan reconocerte en mí.
Que quien me mire te vea.
Cardenal Newman
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Reconocer su presencia
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Despierta t u corazón
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Eleva t u espíritu
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EN CAMINO CON DIOS
Llegando a la encrucijada,
tú proseguías, Señor;
te dimos nuestra posada,
techo, comida y calor;
sentados como amigos
a compartir el cenar,
allí te conocimos
al repartirnos el pan.
Andando por el camino
te tropezamos, Señor,
en todos los peregrinos
que necesitan amor;
esclavos y oprimidos
que buscan la libertad,
hambrientos, desvalidos,
a quienes damos el pan.
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En el prójimo
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EN CAMINO CON DIOS
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en el salón y en la mesa
¿cómo harías? ¿Lo de siempre
o una conducta insincera?
Lo que en tu familia charlas,
lo que os decís y comentas,
cómo tratas al vecino,
tus disputas y peleas
con marido, hijos y gato,
¿dejarías que salieran?
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Confiaren Él
r
v^UENTA Santa Margarita María Alacoque cómo en la octava
del Corpus Christi sintió grandes deseos de devolver al Señor todo
el amor del que fuera capaz para corresponder al que Él le había
dado. Entendió que el Señor quería explicarle que el mejor modo
de responder a su amor era propagando la devoción a su Corazón,
signo natural del amor.
La humilde religiosa no podía creer que el Señor confiase a
una monja c o m o ella tal misión. ¿ C ó m o podía ella llevar a cabo
una empresa que necesitaba teólogos, predicadores, artistas, es-
critores, organizadores... sin olvidar a los obispos y aun el mis-
mo papa?
Sumida en estas dudas, oyó la respuesta: Dios siempre elige a
los más humildes y débiles. Luego sintió que el Señor le daba un
compañero de tarea: el jesuíta Claudio de la Colombiére, hoy san-
to como ella. Pero le indicó que, para que este religioso fuera un
instrumento útil en las manos de Dios,debía confiar totalmente en
el Señor por más dificultades y oposición que encontrara.
Y sabemos que así fue y cómo la devoción se extendió con tan-
to fruto por todo el mundo.
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r
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Compromiso radical
F
I N LA VENECIA de canales,góndolas románticas y encantos
medievales hay un gran edificio antiguo, muy cerca ya del mar.
En una de sus esquinas una placa explica que en ese viejo hos-
pital cuidó enfermos San Francisco de Javier. El edificio se c o n o -
cía entonces y ahora c o m o «Los incurables». Allí se hacinaban
enfermos desahuciados,a los que nadie quería tener en casa,es-
pecialmente las víctimas del llamado «mal francés», la sífilis, que
sembraba la piel de llagas que destilaban pus en abundancia y
un hedor insoportable.
Poco después de ser ordenado sacerdote, Javier con otros dos
de sus compañeros -antiguos universitarios parisinos como é l -
fueron enviados a echar una mano en aquel infierno en vida.
Un día uno de los pacientes pidió a Francisco que, por favor, le
rascase la espalda, que le picaba mucho. Al volverlo, Javier enten-
dió el por qué. Pero fue tal la repulsión y el miedo que su primer
impulso fue el de desentenderse de aquel paciente. Además, ¿no
se contagiaría? Pero pasó por su mente, como un rayo, el recuer-
do de Jesús y los deseos que le había expresado de servirle en
los más desgraciados. No solamente le rascó con cuidado y cari-
ño sino que,al acabar la tarea,Javier se metió en la boca la mano
entera para vencer la repugnancia y el miedo al contagio.
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confianza absoluta, aceptan que el Señor les elija para ser de sus
amigos más cercanos y apuestan por Él de manera definitiva: sin
plazo ni condición.
En estos tiempos no es fácil asumir compromisos permanen-
tes. Hoy día todo es instantáneo, para usar y tirar. A lo más, recicla-
ble. El amor, en la pareja, sólo vale «mientras dure». Así nadie quie-
re adquirir obligaciones de por vida.
Pero el Espíritu de Jesús no deja de hacernos «indicaciones»,
nos interpela y llega a nosotros por medio de las personas y acon-
tecimientos de la vida. Hemos de acostumbrarnos a tomar en se-
rio,en la vida espiritual,estas «sugerencias»,impulsos y emociones
que el Espíritu suscita en nosotros. Es la manera en que Dios te
«habla» al corazón y te revela sus planes sobre ti. A lo mejor te ha
elegido para ser de los suyos, de aquéllos a los que «Él llamó para
estar con él y predicar el evangelio» (Marcos 3,14).Tú verás qué
respuesta le das.
Eleva t u espíritu
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NUESTRO NEGOCIO DE LA FELICIDAD
y al Padre de Jesucristo
enséñame a llamar abbá.
Sacrificio de alabanza
quiero que sea mi actuar,
promover lo que da vida,
combatir a muerte el mal.
Embriágame con tu copa,
que sea a tu amor leal,
hasta que llegue el momento
del gran abrazo final.
POR LA VOCACIÓN
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Pedro Arrupe
(con leves adaptaciones)
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índice
Prólogo
Oración para encontrar mi camino 11
Introducción 13
Sobre la felicidad 14
Características 14
La fuente de la felicidad 15
La felicidad y el paraíso 17
Un poco de matemáticas 19
Modo de proceder 20
1. Ponte en presencia de Dios 20
2. Reza la plegaria inicial 22
3. Lee y reflexiona 22
4. Da gracias 23
5. Despídete 23
6. Revisa 23
Una sugerencia 23
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EN CAMINO CON DIOS
PRIMERA PARTE
La fuente de la felicidad 27
2. Descubrirle 55
5. Más consciente 57
6. Más atento 63
7. Más cerca 69
8. Más unidos 73
3. Dios cuida de mí 79
9. Interviene 81
10. Me protege 87
11. Me sostiene 93
12. Sueña conmigo 97
4. Respuesta 101
13. Personal 103
14. Testimonio 107
15. Mi vida 111
16. Los demás 115
SEGUNDA PARTE
Ingredientes para la felicidad 121
342
ÍNDICE
8. Magnanimidad 196
29. Perdón 197
30. Respeto 203
31. Compasión 209
32. Sanar 215
TERCERA PARTE
Nuestro negocio de la felicidad 221
343
EN CAMINO CON DIOS
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