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RESUMEN

CUENTO: LA SANTA

Presentado por: Nycole Alejandra Sandoval

Díaz, Juan Pablo Jiménez trujillo

Docente: Mónica Higuera Rueda /

2023

Veintidós años después Margarito Duarte regreso a

Roma, fue visto en una calle del Trastévere, lucia

de forma diferente, tenía cabello blanco, con aires

a romano antiguo, ya no quedaba rastros de

cuando fue a Roma por primera vez, Margarito


llegó cuando había una hermosa primavera, él

llevaba un estuche de violonchelo.

Margarito tomo una taza de café conmigo, una

vieja amiga, nos conocimos por haber vivido en el

mismo barrio llamado Panoli, le pregunté sobre La

Santa, él respondió que ella estaba esperando, solo

Rafael Rivero Silva y yo entendimos su respuesta,

lo conocíamos tanto, que hace mucho tiempo

pensé que Margarito Duarte era un personaje, en

busca de un autor que los novelistas esperaban

durante toda una vida.

Margarito nos contó sobre su pasión sobre las

Bellas letras, sobre cómo a los dieciocho años se


casó con una bella señorita que murió después del

parto de la primera hija, la cual murió por una

fiebre a los 7 años, les contó sobre cómo tuvo que

mover los huesos muertos de su esposa, pero se

llevó una sorpresa al ver que su hija once años

después de morir seguía intacta pero el cuerpo

carecía de peso. Las personas decían que era un

síntoma de la santidad, el obispo dijo que se debía

someterse al veredicto del Vaticano, lo que llevó a

margarito a viajar a Roma, Margarito nos mostró

el milagro, destapo la tapa del baúl y pudieron

observar a su hija, se veía como una niña vestida

de novia que estaba profundamente dormida, su

cuerpo no tenía rastros de muerte ni peso alguno.


La tarea de la diplomacia en el Vaticano tuvo sus

obstáculos, Margarito tuvo que contactar a

fundaciones y congregaciones para que lo

escucharan y lo ayudaran, pero ninguna de pudo.

En el mes de julio Margarito decidió afrontar las

cosas él mismo, al ver que no sucedería nada con

el Papa, envió una carta a la Secretaría de Estado,

la cual no tuvo respuesta.

Margarito permanecía en tus horas libres y

domingos deberán en su cuarto donde leía libros

que le ayudarán a su causa. Cada mes escribía de

forma ordenada los gastos que llevaban su estadía

para rendirle cuentas a los contribuyentes de su

viaje, cuando los precios superaban los recursos


que tenía de vivir, Margarito encontró refugio en

la casa de Antonieta, la hermana de María bella la

dueña de la habitación donde él vivía.

• María bella, Antonieta, Rafael Rivero Silva

y yo decidimos que era una buena idea

ayudar a margarito a resolver su soledad.

Rafael le pagó a una señorita para que le

diera una hora de buena compañía a

Margarito, le explico lo que debería ser y la

llevó a su habitación. La chica señorita

tocó la puerta, le habló con una voz

seductora, Margarito entendió lo que

pasaba y atendió a la señorita como debía

ser, con todo el respeto, él se sentó a su


lado e inició la conversación, la señorita

disfruto tanto la conversación que no le

hubiera importado pasar toda la tarde sin

cobrarle un centavo, la mujer descubrió el

estuche y le preguntó a Margarito, él solo

se levantó abrió la ventana y destapo el

estuche, la mujer se quedó con la boca

abierta y escapó al corredor pero se

encontró de golpe con Antonieta, quien

cambiaba una bombilla, la mujer pensando

que era la chica del estuche entró corriendo

hasta la habitación de Rafael y se quedó ahí

hasta muy tarde en la noche.

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