UNIVERSIDAD DE CUENCA.

FACULTAD DE CIENCIAS AGROPECUARIAS.

ESCUELA DE MEDICINA VETERINARIA.
ESCUELA DE INGENIERIA AGRONOMICA.

NOMBRE Y APELLIDO DEL ESTUDIANTE

Erika Pamela Alvarez Maldonado

CICLO:

Primer ciclo grupo 1, subgrupo1

PARALELO:

INVESTIGACIÓN:

LA ACÚSTICA

FECHA:

5/04/2022

PERIODO ACADÉMICO:

2022-2023
 LA ACÚSTICA

La acústica es la rama de la física que estudia la generación, propagación y propiedades

del sonido. La palabra, como tal, proviene del griego, que significa ‘oír’. En este sentido,
la acústica trata de la producción, el control, la transmisión y la recepción de las ondas
sonoras que se propagan a través de la materia, bien sea que se trate sonido,
infrasonido o ultrasonido.
La acústica define al sonido como una vibración, o sea, la propagación mecánica
de ondas a través de la materia, sea en estado sólido, líquido o gaseoso, y trata de
describir este desplazamiento a través de fórmulas y principios matemáticos.

La Bioacústica

Bioacústica consiste en el estudio del comportamiento de comunicación de los animales

a través de señales sonoras, disciplina que ha tomado auge en los estudios de
biodiversidad y conservación a nivel mundial gracias al desarrollo de nuevas
tecnologías.

TEMAS RELACIÓN ENTRE EL FENÓMENO DE ACÚSTICA Y LA QUÍMICA

El estudio de las señales acústicas, producidas por los seres vivos, es conocido como
bioacústica, y es fundamental para la comprensión de aspectos de su biología y
ecología. Las grabaciones de sonidos biológicos desempeñan un importante papel al
permitir conocer y reconocer nuestra gran diversidad biológica, y es uno de los primeros
pasos para poder conservarla. En el caso de las aves, las vocalizaciones que emiten
son de los sonidos más complejos y uno de sus principales medios de comunicación.
Un archivo sonoro, banco o colección de sonidos, consiste en una serie de grabaciones
o cortes realizados en condiciones naturales o en cautiverio, y cada uno corresponde
individualmente a un animal o grupo de animales que cantan en un lugar y tiempo
determinado.
La grabación de los sonidos emitidos por la vida silvestre inició en Europa y
Norteamérica a finales del siglo XIX, pero es hasta la década de los años cincuenta que
se inician algunos esfuerzos en América Central y Sudamérica. Sin embargo, las
regiones tropicales no han sido cubiertas adecuadamente y el registro es pobre para
muchas especies, por lo que se debe incrementar y realizar para que todos los grupos
de seres vivos, estén representados en los archivos o bancos de sonidos.

La bioacústica como instrumento en los estudios de biodiversidad y conservación

Emisiones acústicas animales representa una valiosa herramienta para taxonomía,

sistemática y estudios sobre biodiversidad y conservación. En el momento actual de
discusión sobre cambio climático global y crisis de la biodiversidad, imprescindible
facilitar el conocimiento y la documentación de las señales acústicas en el reino animal.
Las señales bioacústicas suelen ser características de una especie, población, e incluso
organismos individuales. Posibilitan el estudio de la compleja diversidad de las
comunidades, medios o hábitats acuáticos o los bosques y selvas, pueden ahora ser
estudiados mediante la grabación de emisiones acústicas. Los datos bioacústicos
pueden ser utilizados para caracterizar especies de forma complementaria a las
características morfológicas y moleculares, y ya son ampliamente utilizados en varios
grupos zoológicos como mamíferos marinos y aves.
Tipos de comunicación

El mensaje puede ser transmitido por medios muy variados y de esta forma se pueden
diferenciar distintas formas de comunicación dependiendo del canal empleado
Comunicación acústica: Quizás el tipo de comunicación a la que estamos más
acostumbrados, dado que el lenguaje hablado del ser humano pertenece a esta
categoría. En este caso, el emisor emplea diferentes mecanismos para emitir sonidos
que se transmiten mediante la vibración del aire, agua o incluso sólidos y que son
percibidos por el receptor mediante un órgano auditivo de naturaleza muy variada.

Desde un punto de vista físico, el sonido consiste en una vibración que se propaga en
un medio elástico, constituyendo lo que se denomina onda sonora. La comunicación
acústica puede emplear como canal el aire, el agua u otros líquidos e incluso un medio
sólido, transmitiéndose las señales mediante la vibración de las partículas de éste. Exige
la existencia de un órgano productor de sonido en el organismo emisor, así como otro
órgano detector en el individuo receptor.

La emisión puede consistir desde el simple golpeteo de una parte del cuerpo contra el
sustrato hasta el empleo de órganos fonadores altamente especializados como la
laringe humana. De igual forma, los receptores pueden ser desde simples pelos táctiles
que vibran al ser golpeados por las moléculas del aire en movimiento hasta el complejo
órgano de Corti de los mamíferos. Cualquier sonido sencillo puede describirse en su
totalidad especificando tres características de su percepción: el tono, la intensidad y el
timbre. Estas cualidades corresponden exactamente a tres características físicas: la
frecuencia, la amplitud y la composición armónica o forma de onda.

COMO DESDE EL PUNTO DE VISTA QUÍMICO BIOFÍSICO LA ACÚSTICA SE

PRODUCE EN LOS ANIMALES

La comunicación mediante señales acústicas está ampliamente difundida en el reino

animal. Junto con otras modalidades de comunicación, está presente en la práctica
totalidad de grupos zoológicos, habiendo surgido evolutivamente de forma
independiente en numerosas ocasiones.

Debido a esto, encontramos una gran diversidad tanto en la estructura de los órganos
productores y receptores de sonido como en la estructura y frecuencia de la señal.
Desde los infrasonidos emitidos por elefantes y algunas ballenas, hasta los ultrasonidos
de murciélagos y delfines.

Adaptativamente, no es extrañar esta reticencia en la aparición de órganos emisores de

sonido. Así podemos encontrar numerosos casos de órganos acústicos muy
elementales que van sofisticándose y ganando en complejidad a través de los distintos
grupos zoológicos.

La comunicación acústica es empleada para diferentes funciones en los distintos grupos

zoológicos, y aquí también observamos una gran variación en cuanto a la complejidad
de éstas: desde simples emisiones de alarma para avisar de un peligro inminente a otros
conespecíficos, hasta la compleja comunicación verbal humana.

La comunicación es una característica intrínseca en el mundo animal, y surge como

consecuencia inevitable del hecho de que todo ser vivo necesita comunicarse no sólo
con el medio físico en el que vive, sino también con el biológico. La comunicación es
indispensable en algún momento de la vida, ya sea para alimentarse, reproducirse o
evitar la depredación. También existe lo que podríamos denominar un modelo egoísta
de comunicación, donde una especie engaña a otra para su propio beneficio, por
ejemplo imitando el canto de llamada sexual o la coloración de los huevos de una
especie hospedadora. Existen muchas definiciones de comunicación, siendo la de
Wilson (1980) una de las más generalizadas: Acción por parte de un organismo que
altera la probabilidad de comportamiento de otro organismo, de modo adaptativo, o bien
para el emisor o para ambos, emisor y receptor

En las formulaciones más simples, para que exista comunicación deben darse al menos
los siguientes componentes:

• Mensaje: La información que se pretende transmitir.

• Emisor: El organismo que origina y envía el mensaje.

• Receptor: El organismo que recibe y procesa el mensaje.

• Canal: El medio físico por el cual se transmite el mensaje.

• Código: Conjunto de signos y reglas que conocen el emisor y el receptor y que se

utiliza para representar el mensaje.

En el mundo animal, la comunicación juega un papel crucial en la reproducción,

alimentación y defensa ante predadores. Dado lo útil e insustituible de estos
mecanismos, no es de extrañar que hayan surgido de forma independiente en multitud
de grupos y ocasiones independientes a lo largo de la historia evolutiva. Los cantos de
cortejo, el marcaje de territorio, las pistas químicas y visuales hacia fuentes de alimento,
las señales de alarma en caso de peligro o las dirigidas a defenderse de predadores,
son solamente algunos ejemplos de la importancia de la comunicación en la vida de
cualquier grupo animal.

El conocimiento básico sobre las características de las especies, como los involucrados
en el comportamiento, la ecología o la distribución, son un elemento clave para ayudar
a múltiples disciplinas en la investigación científica. Es así que las pruebas de hipótesis,
el diseño experimental, los estudios de observación o el modelado en distintas ramas
de la biología se basan fuertemente en la información de la historia natural de cada
especie. Las señales acústicas tienen una gran utilidad taxonómica en varios grupos de
animales y son fundamentales en la comunicación de individuos de la misma especie.
La forma de las señales de la comunicación acústica depende de varios factores
relacionados con la información que transmitan, por ejemplo: con las características del
emisor, del receptor y del ambiente, como también de procesos biológicos y
sociobiológicos. Por otra parte, el estudio de la comunicación vocal en anuros ha servido
durante mucho tiempo como un parámetro modelo para comprender la evolución de los
sistemas sensoriales y los mecanismos subyacentes. Diversas características del canto
de los anuros pueden influir en la selección sexual, entre ellas la intensidad, la tasa de
emisión, la duración, el tono y los patrones temporales de interacción entre machos.
Adicionalmente, toda la maquinaria morfológica (por ejemplo, sacos vocales, fisiológica
y bioquímica involucrada en la producción de sonidos, se moldea por selección sexual.
En el campo de la bioacústica existe diversidad de estudios relacionados con el
comportamiento vocal de los anuros con la ecología, la evolución), y con aspectos
fisiológicos. La aplicación de análisis bioacústicos comparativos a nivel mundial, ha
resultado en el descubrimiento de muchas especies de anuros morfológicamente
crípticas durante el último tercio del siglo XX y en consecuencia, en un aumento del
número de especies. Adicionalmente, los estudios bioacústicos permiten determinar el
movimiento de los individuos, la identificación automática de especies sin necesidad de
verlas directamente, la estimación de la actividad reproductiva diaria, estacional y anual,
como también permiten realizar una evaluación rápida de la diversidad de anfibios de
un determinado lugar. Esto último, de realizarse a largo plazo, permite, sin necesidad
de colectar especímenes, o reduciendo al mínimo las colectas, analizar fluctuaciones
en la diversidad de especies a lo largo del tiempo, generando bases de datos
bioacústicos de vital importancia al momento de analizar cambios asociados, por
ejemplo, a modificaciones antrópicas u otras que puedan reducir y eventualmente
incrementar la riqueza y diversidad de especies en un determinado sitio. Asimismo, las
comparaciones de los cantos de advertencia inter e intraespecíficos también han sido
utilizados para analizar la influencia de la variación geográfica (dialectos), y el
establecimiento de patrones filogenéticos permiten atraer, en un lapso corto de tiempo
a las hembras, estrategia denominada fonotaxia. Sin embargo, en algunas especies de
anfibios el costo energético de cantar por la noche es menor, por lo que pueden extender
el período de vocalizaciones corales durante varios meses incrementando así las
probabilidades de éxito en el apareamiento. Los cantos pueden variar sustancialmente
en amplitud, duración y estructura de frecuencia, lo que afecta la distancia que recorre
el sonido en el entorno y la facilidad con la que el receptor puede localizar la posición
del emisor.

Bibliografias

https://www.revistahypatia.org/bioacustica-51.html

https://www.researchgate.net/publication/355854073_Estudios_especificos_4_-
_44_ESTUDIOS_BIOACUSTICOS

https://www.monografias.com/docs/Bioquimica-y-biofisica-FKFBWU7TPNS5

https://es.scribd.com/document/390576985/Bioacustica