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Este documento discute la controversia entre los términos "desarrollo sostenible" y "desarrollo sustentable". Señala que aunque la RAE los considera sinónimos, existen diferencias semánticas y de enfoque. Mientras el desarrollo sustentable enfatiza el equilibrio ecológico a largo plazo, el desarrollo sostenible ha sido criticado por resucitar el modelo de crecimiento económico ilimitado. El documento también revisa la historia de estos conceptos y sus interpretaciones en documentos
Este documento discute la controversia entre los términos "desarrollo sostenible" y "desarrollo sustentable". Señala que aunque la RAE los considera sinónimos, existen diferencias semánticas y de enfoque. Mientras el desarrollo sustentable enfatiza el equilibrio ecológico a largo plazo, el desarrollo sostenible ha sido criticado por resucitar el modelo de crecimiento económico ilimitado. El documento también revisa la historia de estos conceptos y sus interpretaciones en documentos
Este documento discute la controversia entre los términos "desarrollo sostenible" y "desarrollo sustentable". Señala que aunque la RAE los considera sinónimos, existen diferencias semánticas y de enfoque. Mientras el desarrollo sustentable enfatiza el equilibrio ecológico a largo plazo, el desarrollo sostenible ha sido criticado por resucitar el modelo de crecimiento económico ilimitado. El documento también revisa la historia de estos conceptos y sus interpretaciones en documentos
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas a Jueves 29 de Agosto del 2022
¿Desarrollo sostenible o sustentable? La controversia de un concepto
En la Declaración de Vida "Por una Ética para la Sostenibilidad" (PNUMA, 2002),
establece que la ética del desarrollo sostenible debe comenzar con la conciencia de las limitaciones naturales y culturales y el potencial para el desarrollo sostenible, y se refiere a la toma de conciencia de las limitaciones de la naturaleza, nos puede ayudar a definir una nueva cosmovisión y comprensión del mundo para enfrentar los grandes desafíos de la humanidad y Debemos cambiar los conceptos dominantes de racionalidad económica y tecnológica que buscan hacer el progreso humano Legitimación. Dominación, insostenibilidad ecológica y desigualdad social.
Los términos "sustentabilidad" y "sustentabilidad" se usan indistintamente en
diferentes medios tales como publicaciones científicas, libros académicos, textos gubernamentales, leyes, revistas y artículos de divulgación, periódicos, Internet, cine, radio y televisión; asimismo, son utilizados a diario en el vocabulario de expertos en economía, turismo, biología y otras ciencias ambientales, así como en campos relacionados con el desarrollo.
Las preocupaciones por el medio ambiente y su sustentabilidad comenzaron con
las inquietudes de los ambientalistas, y el punto de partida parece corresponder a los siguientes momentos históricos:
A. La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) se
estableció en 1948 para ayudar a encontrar soluciones prácticas a los principales desafíos ambientales y de desarrollo que ya enfrenta el planeta. B. En 1955 se realizó un simposio titulado “El papel del ser humano en el cambio de la faz de la tierra”, analizando el papel del ser humano en el cambio de la superficie terrestre (Gracia-Rojas, 2015). C. La publicación de Carson (1962) “Primavera Silenciosa”, cuyo libro ayudó a generar una nueva conciencia ambiental a escala global (Barrios et al., 2007). La RAE establece estos verbos como sinónimos casi perfectos, por lo que, vistos desde esta perspectiva, hay que concluir que, estrictamente hablando, léxico y semántica, los verbos "sostener" y "sostener" son sinónimos y, por tanto, su uso es ambiguo. (Márquez, 2000). Al contrario del desarrollo sostenible, que se presenta como un concepto dual y confuso que resucita el desarrollismo y predica la falacia del crecimiento económico ilimitado sobre la naturaleza finita del planeta, entonces vuelve a ser lo que fue. ha sido llamado un concepto inherentemente cuestionable (Richmann, 1995).
La ética del desarrollo sostenible es diferente del enfoque del desarrollo
sostenible, que trata de conciliar la especificidad del mercado con los intereses del Estado y de los ciudadanos de a pie; por el contrario, la ética de la sostenibilidad implica que se deben tener en cuenta una serie de principios básicos. combinados en la ética del interés público, sin recurrir a la llamada racionalidad económica e instrumental, esta última se propone como un modelo en el que debe encajar el ser humano moderno, y son estos principios los que van en contra del propósito de la sustentabilidad.
La existencia de dicho sustantivo, aunque no esté en el diccionario, es
absolutamente lógica, ya que el verbo "gobernar" inevitablemente da un adjetivo derivado "manejable", que a su vez da necesariamente un sustantivo derivado, lo que es "gobernar" (Márquez, 2000). El discurso del “desarrollo sustentable” se basa en la idea de que sus políticas buscan conciliar los procesos económicos con la conservación de la naturaleza; facilita el equilibrio entre la satisfacción de las necesidades de las generaciones presentes y futuras; sin embargo, estas metas apuntan al avance del planeta reviviendo viejas mitos del desarrollo crecimiento económico sostenible de carácter limitado, es decir, la sostenibilidad sitúa el crecimiento económico por encima de la conservación de la naturaleza.
El desarrollo basado en la sostenibilidad del crecimiento económico siempre se
ha basado en paradigmas y comportamientos temerarios e insostenibles basados en los principios del individualismo y la competencia económica racional. De esta forma, el crecimiento relacionado con el desarrollo es un crecimiento económico continuo y regular en el tiempo, sin altibajos desiguales y, además, olvida cualquier contenido ecológico (García y Priotto, 2009).
Mirando hacia atrás en la historia reciente del concepto de "desarrollo
sostenible", desde que apareció por primera vez en el Informe Brundtland en 1992, se llevó a cabo la Cumbre de Río (Cumbre de la Tierra) y se anunció el desarrollo sostenible como una nueva meta de la humanidad para superar la globalización, problemas ambientales y crisis. La ética de la sustentabilidad predica el respeto a la diversidad, la diferencia, la diferencia y la alternativa. Un buen ejemplo es el sustantivo "gobernabilidad", que a su vez es una derivación natural del adjetivo "gobernable".
Vale la pena mencionar que el Informe Brundtland reflejó las discusiones en
curso sobre el desarrollo sostenible en ese momento e intentó explicar qué significaba asignar el adjetivo "sostenible". El informe tiene como objetivo crear un espacio de convivencia para políticas de consenso que puedan unir las visiones e intereses divergentes de las naciones, los pueblos, la sociedad civil y otros actores que conforman un mundo sostenible complejo.
La sustentabilidad nos hace considerar los elementos necesarios para
construirla, como el reconocimiento de la diversidad, de hecho, la sustentabilidad es una lucha por la diversidad ecológica y social en todas sus dimensiones (Barkin, 1998). " Cabe señalar que las condiciones de sustentabilidad se refieren al equilibrio de una especie con sus recursos ambientales, de ahí que el término tenga su origen en la biología de poblaciones, especialmente para temas pesqueros y forestales (Zúñiga, 2011). Por su parte, “sustentable” deriva del verbo “mantener”, y su significado se enfoca en un proceso independiente que no requiere de recursos externos para mantenerse.