Está en la página 1de 250

Simón Hosie

Planos

rtad O
Pescaíto
Simón Hosie
(director)
Planos Vivos Pescaíto. Edición, diseño y www.panamericanafei.com.co
Investigación participativa diagramación Todos los derechos reservados.
y desarrollo sostenible Impresol Ediciones Ninguna parte de esta publicación
Primera edición: agosto de 2017 Calle 78 n.o 29B – 44 puede ser reproducida,
Bogotá D. C., Colombia almacenada en un sistema
© Simón Hosie, 2017 PBX: (+57 1) 250 8244 reproductor o transmitida
© Financiera del Desarrollo www.impresolediciones.com en cualquier forma o por
cualquier medio, sea mecánico,
Territorial S. A. – Findeter, 2017
fotoquímico, electrónico,
www.findeter.gov.co Dirección editorial, edición
magnético, electro-óptico, por
y redacción del texto
fotocopia o cualquier otro, sin
ISBN: 978-958-56008-8-1 Federico Benninghoff Prados previa autorización por escrito
de los titulares del copyright.
Coordinación del
equipo editorial
Manuel Ruiz Montealegre

Fotografía
Gabriela Díaz Montealegre

Diseño y diagramación
Alejandro Medina y
Juan David Cáceres

Diseño de la cubierta
Alejandro Medina

Imagen de la cubierta
Plano a mano de flujos, lugares
de confluencia y recorridos de
la comunidad. Componente
del sistema de Planos Vivos
elaborado por Luis Miguel Marín Hosie, Simón (director).
Planos Vivos Pescaíto. Investigación participativa y
desarrollo sostenible / Simón Hosie (director).
Impresión Bogotá: Findeter, 2017.
248 págs., 33 × 24 cm.
Panamericana Formas
e Impresos S. A. Otros autores: Pablo Said Lissa, Liliana González Rojas, Omar
Calle 65 n.o 95 – 28 Cordero Durango, Luis Miguel Marín, Mariana Gil Arboleda, Ana
Bogotá D. C., Colombia María Palomo, Paola Macía Fernández, Viviana Ríos Pérez.
Teléfonos: (+57 1) 430 ISBN: 978-958-56008-8-1
2110 – 430 0355
P e s c a í t o Investigación
participativa
y diseño sostenible
Planos Simón Hosie
Creador de la metodología y director
del sistema de Planos Vivos
Diseños urbanos y arquitectónicos

Simón Hosie
Pablo Said Lissa
Liliana González Rojas
Omar Cordero Durango
Luis Miguel Marín
Mariana Gil Arboleda
Ana María Palomo
Paola Macía Fernández
Viviana Ríos Pérez
Autores de la investigación
de Pescaíto

rtad O
Instituciones comprometidas con la renovación
urbana y el desarrollo sostenible de Pescaíto

Ministerio de Hacienda Financiera del Desarrollo Banco Interamericano Unión Europea


y Crédito Público Territorial S.A. – Findeter de Desarrollo
Mauricio Cárdenas Santamaría Luis Fernando Arboleda González Luis Alberto Moreno Agencia Francesa
Ministro Presidente Presidente de Desarrollo
Ana Lucía Villa Rodolfo Enrique Zea Navarro Sergio Díaz-Granados
Jefe de Dirección de Apoyo Fiscal Secretario general Director ejecutivo BID para Alcaldía Distrital
Ana María Palau Alvargonzález Colombia y Ecuador de Santa Marta
Ministerio de Cultura Vicepresidente de Planeación Rafael de la Cruz Rafael Alejandro Martínez
Mariana Garcés Córdoba Gerente general del Departamento Alcalde
Gisela Labrador Araújo
Ministra de Países del Grupo Andino y Carlos Caicedo Omar
Gerente de Sostenibilidad
representante en Colombia
y Nuevos Negocios Alcalde 2012- 2015
Tras la Perla de la América María Paz Uribe Estrada Ramiro López-Ghio Francisco García Rentería
Especialista sr., coordinador
Carlos Vives Jefe de Banca Internacional Secretario de Planeación
CES para Colombia
Artista y líder de la iniciativa Erika Delgado Moncayo Diana Sierra
Directora de Comunicaciones
Juan Pablo López-Gross
Claudia Elena Vásquez Ex-secretaria de Planeación
Consultor, coordinador operativo
Directora ejecutiva Claudia Salamanca Velásquez del Programa BID UrbanLab
María del Pilar Galvis Profesional de Comunicaciones
Ellis J. Juan
Coordinadora general Juana Leal Simbaqueba Consultor externo
Profesional de la Gerencia de
Sostenibilidad y Nuevos Negocios
Oswaldo Aharón Porras Vallejo
Consultor Vivienda y
Desarrollo Urbano (HUD)
Natalia López Aguilar
Consultor Vivienda y
Desarrollo Urbano (HUD)
Contenido

Presentación 7

Prólogo y agradecimientos 14

Nota editorial 19

Introducción: Teoría y práctica de los Planos Vivos 22


El plano y la representación cartográfica: bosquejo teórico 23
Fundamentos metodológicos de Planos Vivos y su aplicación en Pescaíto 33

Perfil urbano y socioeconómico de Pescaíto 52


Estratificación y vivienda 55
Dinámicas económicas, empleo, pobreza y vulnerabilidad 56
Cobertura y calidad de los servicios públicos 58
Educación 62
Ficha 1. Acueducto 64

Pescaíto: desarrollo histórico y memoria viva 66


Pescaíto y sus relatos fundacionales 66
La construcción del territorio 73
El puerto y el ferrocarril en la formación de Pescaíto 84
Transformaciones urbanas de Pescaíto, siglos XX-XXI 89
Ordenamiento espacial en Pescaíto 102

Análisis urbano y arquitectónico 114


Plano de riesgos 115
Ficha 2. Inundaciones y escorrentías 117
Plano de conflictos urbanos y afectación por la industria y el comercio 122
Ficha 3. La actividad portuaria y comercial y sus muros, con énfasis en El Boro 124
Plano de tipología de la vivienda según su historia 127
Ficha 4. La vivienda de transición 130
Plano de tipología de la vivienda según su evolución espacial y materialidad 134
Ficha 5. La caja de aire 138
Plano de árboles en los frentes de las casas 140
Ficha 5. Trupillo 142
Comunidad, organización y liderazgos en Pescaíto 144
Panorama general 146
Ficha 6. Líder comunitario: René Henríquez Valderrama 153
Ficha 7. Lideresa humana: Graciela Mejía Cuello 157
Ficha 8. Junta de Acción Comunal de Villa Tabla 161
Carta de vida de Álvaro Gómez 164
Ficha 9. Fundación Pescaíto Dorado 166

Pescaíto: dimensión sociocultural 170


Ficha 10. Los pintores de Pescaíto 171
Ficha 11. La esquina y su tienda como lugares de encuentro 173
Ficha 12. Cocinar y comer en Pescaíto 175
Ficha 13. Las tamboras 179
Ficha 14. El Carnaval de Pescaíto 183

Conclusiones de la investigación 188

Propuesta urbana y arquitectónica 208


Plano de la propuesta urbana y arquitectónica 210

Bibliografía 238
Presentación

D
esde el inicio del Gobierno del Presidente
Juan Manuel Santos tuvimos clara la hoja
de ruta para reducir las brechas de des-
igualdad que han afectado a nuestras generaciones
desde hace décadas. Entendimos que con trabajo
en equipo, junto a las administraciones locales y la
comunidad, podíamos llevar a las regiones progra-
mas que introdujeran al territorio progreso, soste-
nibilidad, competitividad y calidad de vida.

En el Ministerio de Hacienda nuestra prioridad


ha sido la inversión social y la formación de una
clase media próspera y emprendedora. A partir de
2010 hasta la fecha, 4,6 millones de colombianos, el
equivalente a la población del Valle del Cauca, han
salido de la pobreza para integrar esta nueva clase
media a lo largo y ancho del territorio nacional. como la Financiera de Desarrollo Territorial (FIN-
Nuestro compromiso es proteger y mantener ese DETER) es el aliado estratégico para las regiones
enorme logro para que los colombianos se con- de Colombia, lo es también para el Gobierno Na-
viertan en el motor de nuestra economía. Es por cional, a través del Ministerio de Hacienda. Des-
ello que, a pesar de que debemos enfrentar una de 2012, FINDETER se transformó en un socio es-
fuerte reducción de ingresos del Gobierno Nacio- tratégico de las regiones, generando desarrollo y
nal a causa del choque petrolero, hemos protegido bienestar para la gente gracias a programas como
la inversión social a través de los programas de “Ciudades Sostenibles y Competitivas”, “Ciudades
reducción de la pobreza, cuidado a la primera in- Emblemáticas” y “Diamante Caribe y Santanderes
fancia y atención al adulto mayor. de Colombia”.

Con el Presupuesto General de la Nación que he- Estos programas, además de otorgar una visión
mos proyectado para 2018, el Gobierno Nacional de largo plazo al territorio, se han convertido en
cumple cuatro años destinando el mayor rubro una herramienta fundamental de planificación al
del presupuesto al sector educación. Necesitamos integrar dentro de estos estudios técnicos de emi-
invertir en la formación de nuevas generaciones sión de gases efecto invernadero, vulnerabilidad
preparadas para competir en la economía global. y riesgo y crecimiento urbano, componentes que
El ajuste a la nueva realidad fiscal lo está hacien- permiten integrar las condiciones ambientales y
do el Gobierno Nacional reduciendo sus gastos de urbanas que enfrentan las ciudades, en especial
funcionamiento. Ahora, hacemos más con menos. Santa Marta y su barrio emblemático, Pescaíto. El
Seguiremos priorizando inversiones clave que presente trabajo, una guía de la renovación urba-
crearán las bases de una nueva economía, más na, demuestra que entendimos que el territorio no
competitiva y con más oportunidades, hacia la es un pedazo de tierra, sino que por el contrario,
que nos dirigimos. es un lugar que tuvo un pasado, que tiene un pre-
sente y que lucha por un futuro mejor.
Para alcanzar esos ambiciosos objetivos de desa-
rrollo para todo el territorio nacional, se necesitan Mauricio Cárdenas Santamaría
aliados que trabajen desde y para las ciudades. Así Ministro de Hacienda y Crédito Público

9
P
ara Findeter es gran motivo de orgullo se-
guir apoyando una de las apuestas más em-
blemáticas para el futuro de Santa Marta,
pero sobre todo ver cómo uno de los proyectos
más innovadores del Plan de Acción Santa Marta
Sostenible prospera plenamente. Gracias a la con-
tagiosa convicción de la iniciativa Tras la Perla de
la América, Pescaíto se ha convertido en causa co-
mún, capaz de direccionar en un mismo sendero
los esfuerzos del sector público y privado.

En estos últimos seis años, en los que Findeter


como banca de desarrollo ha venido implemen-
tando una estrategia de desarrollo territorial in-
tegrado, he podido constatar que las ciudades claves del futuro. Además de invitarlos a conver-
más exitosas son aquellas que logran conciliar sar con los pescaíteros a través de estas páginas,
diferencias en torno a una visión común de ciudad quiero aprovechar esta oportunidad para resaltar
y, para ello, se empeñan en integrar a la sociedad el apoyo de la Agencia Francesa para el Desarro-
civil desde el momento mismo en que se gesta un llo, que tanto en este como en otros proyectos ha
proceso de planificación. aportado importantes recursos para sembrar un
futuro más equitativo y brillante para Colombia.
A pesar de que como país hemos avanzado sus- Quiero además extender este reconocimiento al
tancialmente en el reconocimiento de la partici- Banco Interamericano de Desarrollo, que en cabe-
pación como una de las piedras angulares en las za de su presidente, Luis Alberto Moreno, ha apo-
apuestas de desarrollo y sostenibilidad, existe un yado de manera constante a Santa Marta y Pescaí-
gran desconocimiento sobre la forma adecuada to mediante iniciativas que como el BID UrbanLab
de desarrollar este concepto para que se convierta han comprometido a la academia con la realidad
en un pilar dentro de la visión y la misión de las social y urbana de Latinoamérica.
entidades que trabajan por la prosperidad del te-
rritorio. El estudio de investigación participativa Quiero agradecer a todos los vecinos de Pescaíto,
realizado en Pescaíto, que sirvió como base de la que abrieron sus puertas al equipo de investiga-
propuesta de intervención urbana y cuyos princi- dores de Simón y a nuestro equipo de Findeter, lo
pales hallazgos son desarrollados en este libro, es mismo que al alcalde Rafael Martínez y su gabine-
un aporte de Findeter a este debate, pues incorpo- te por el compromiso que han adquirido para que
ra el aparato teórico y –como diría Simón Hosie– este proyecto siga avanzando. Finalmente, quiero
la “metodoilogicología” de Planos Vivos. expresar mi mayor agradecimiento a Claudia Ele-
na Vásquez, a Carlos Vives y a todo el equipo de
En este libro, los lectores encontrarán una guía la iniciativa Tras la Perla de la América, quienes se
aplicada a Pescaíto para ir más allá de la lectura han encargado de mover los hilos que nos conec-
tradicional en función de la clasificación socioe- tan con esta hermosa tierra samaria.
conómica, y así abrir campo a las texturas, los sa-
bores y los saberes de una comunidad de gran tra- Luis Fernando Arboleda González
dición, que guarda en la historia de sus calles las Presidente de Findeter

10
A
quiles trabajaba como mesero en el club
Santa Marta. Era un hombre educado, de
buen trato, reservado y paciente. Aunque
su ropa era humilde, siempre estaba limpio e im-
pecable y tenía un bigotillo bien recortado al mejor
estilo de Daniel Santos. Y es que Aquiles, a quien
todos llamábamos cariñosamente “muñequito”,
en realidad, era titiritero y manejaba unas mario-
netas que él mismo había fabricado. En las fiestas
para niños que organizaba el club, en las horas de
la tarde, Aquiles nos sorprendía con sus habilida-
des para manejar los hilos de sus muñecos y con-
tagiarnos de alegría con su auténtico cariño.

Pasaron algunos años que alejaron aquellos re- mismos derechos. Entendí que debía haber algo
cuerdos de mi infancia. Y me encontró la adoles- más allá de las condiciones de la gente para que
cencia sin tiempo que perder para correr detrás de el progreso, al menos en lo más fundamental, no
mis amigos, absortos en la búsqueda de la felici- llegara a los barrios más humildes.
dad y del primer amor. Llegaron las primeras to-
matas y parrandas, donde me empecé a distinguir Hoy, años después de aquella noche, me he pro-
por mi talento para el canto y la guitarra. Pero puesto encabezar los planes de transformación
fue una tarde, en las Fiestas del Mar, que junto del barrio de mi amigo Aquiles. El barrio de los
con mis amigos nos dirigimos al barrio Pescaíto pescadores, el barrio de los deportistas, el barrio
en busca de la famosa tambora de Colón y Ca- que ha mantenido viva la llama de la cultura local
rrucha, para llevarlos a El Rodadero, donde ya se y del Carnaval, uno de los barrios más icónicos
adelantaba una fiesta. Llegados al famoso barrio, de la ciudad: Pescaíto. Estoy seguro de que, con
nos bajamos del carro y caminamos buscando la el apoyo de todas las fuerzas vivas de la ciudad,
casa de uno de los integrantes de la tambora. En de las instituciones públicas y privadas, vamos a
eso andábamos cuando de repente escuchamos el lograr recuperar el tiempo perdido. Estoy seguro
llanto y la confusión proveniente de una humilde de que lograremos darle fuerza a la comunidad,
casa, ya muy cercana a la zona de Cuatro Bocas. cultivando su liderazgo, para entender entre todos
Un hombre desesperado daba gritos de angustia la verdadera importancia que el barrio tiene para
y se agarraba la cabeza. Pasó cerca de mí y lo re- la ciudad y así construir una infraestructura ins-
conocí. Era Aquiles, el mesero del club, el artista pirada en su talento, en su historia y en las nece-
de las marionetas, nuestro amigo “muñequito”. sidades reales de su gente. Para esto trabajamos
Me vio, se dirigió a mí y me dijo: “Ay mijo se mu- desde el comienzo con el arquitecto Simón Hosie y
rió mi nieto, no pude salvarlo, ayúdame por favor, su equipo interdisciplinario, que desarrolló la me-
no tenemos como enterrarlo”. Lo vi desmoronarse todología de los Planos Vivos y cuyo resultado se
ante mis ojos, el tiempo se detuvo y esos instan- presenta en este libro gracias al apoyo de Findeter.
tes cambiaron mi vida de ciudadano indiferente. Desde Tras La Perla sentimos que este es el ca-
Miraba atónito a ese amigo de los niños; las con- mino correcto para enfrentar una transformación
diciones de miseria en que vivían él y su familia positiva del barrio que lo proyecte hacia el futuro
nunca se fueron de mi mente. No entendía cómo con toda la fuerza de sus raíces. Estamos seguros
un hombre tan bueno, educado y trabajador, podía de que si lo logramos, estaremos dando pasos im-
vivir de esa manera. Creo que eso me enseñó a portantes para tener conciencia de una forma de
ver mi ciudad de forma diferente, entendí enton- pensar menos egoísta.
ces que no todos éramos felices en mi Santa Mar-
ta… Entendí que, al contrario de lo que hoy indica Carlos Vives
nuestra Constitución, no todos nacemos con los Líder de la iniciativa Tras la Perla de la América
11
S
in lugar a dudas Pescaíto es uno de los
barrios donde mejor se siente el latido de
nuestra ciudad. Es una de las zonas con
mas personalidad e identidad de la vieja Santa
Marta y por estar entre el puerto y el inicio del
camino hacia Taganga se convirtió desde su inicio
en cantera de hombres y mujeres que forjaron la
ciudad y su puerto.

El barrio también tiene muchos sonidos, especial-


mente de tambora, y tan pronto llega la tarde es-
pontáneamente brota la alegría entre niños y jóve-
nes. El pescaítero es franco, sincero, sin pelos en la
lengua para decir y expresar lo que siente. Quien Tan solo el año pasado, y como consecuencia de
se diga samario, no necesariamente por haber na- estos programas, el barrio Pescaíto recibió la bue-
cido en la ciudad, debe saber que sin este barrio en na noticia del apoyo de la Cooperación Japonesa
su corazón será difícil decir que lo es. para mejorar las condiciones del barrio, igual-
mente su inclusión en el concurso BID UrbanLab y
Pescaíto al igual que muchos otros barrios tradi- adicionalmente el gobierno de la ciudad recibió la
cionales de nuestras ciudades en América Latina, hoja de ruta para convertir la ciudad en sostenible
imaginémonos Chacarita en Asunción o Caminito entre otras acciones.
en Buenos Aires, sufrió las consecuencias del cre-
cimiento urbano desordenado y rápido. Hoy está Es por ello que como samario y como director por
en evidencia un pasivo social acumulado que se Colombia y Perú en el Banco Interamericano de
debe atender tanto en Pescaíto como en otros ba- Desarrollo es un gran honor haber colaborado a
rrios de Santa Marta. que el Banco se vincule más con mi tierra natal:
Santa Marta.
La ausencia de espacios públicos de calidad, la de-
ficiente cobertura de servicios básicos o la inexis- Pero mas relevante que la llegada de una caballe-
tencia de una buena estrategia que guíe y apoye ría de apoyo a la ciudad, o a Pescaíto, resulta el
un desarrollo económico sustentable para los ho- toque de trompeta dentro del barrio que anima a
gares de Pescaíto son algunas de las tareas que juntarse y decir qué se quiere y cómo se quiere.
con urgencia se deben acometer. Eso es justamente lo que generó la metodología de
Planos Vivos que está vertida en esta publicación
Frente a los inmensos retos generados por la rápida y que gracias a ella nuestro icónico barrio samario
urbanización en América Latina el BID promueve el cuenta ahora con una hoja de ruta clara elaborada
programa de Ciudades Emergentes y Sostenibles y a partir de una construcción democrática.
en el caso de Colombia se cuenta con el asocio de
Findeter en la continua promoción de esta metodo- Una gratitud y reconocimiento especial se merece
logía y el correspondiente financiamiento. por ello la banca de desarrollo nacional en cabe-
za de Findeter, equipo liderado por Luis Fernando
En paralelo y desde hace poco mas de dos años Arboleda, cuyo apoyo a la ciudad y a Pescaíto le
el BID junto con Findeter y la Fundación Tras la ha generado esta oportunidad, igualmente la in-
Perla han venido colaborando para ofrecerle a valuable Cooperación Francesa acompañada por
Santa Marta, y en especial a Pescaíto, una mano supuesto de la ejecución impecable y maestra de
adicional que ayude a preservar su carácter y per- Planos Vivos y la Fundación Tras la Perla.
sonalidad en medio del irreversible crecimiento y
preparación ante los afanes de esta época que nos Sergio Díaz-Granados G.
12 corresponde. Director ejecutivo BID para Colombia y Ecuador
U
na de las convicciones que provisión de servicios, quebrantando
con mayor fuerza nos mue- privilegios que usurpaban el dominio
ve en nuestra pretensión de de lo público y rescatando el derecho
transformar a Santa Marta como de todas y todos a gozar del espacio
Ciudad del Buen Vivir, es que el de- y de los recursos que nos pertenecen
sarrollo no ocurre de manera es- como patrimonio colectivo.
pontánea, sino que es producto del
esfuerzo planificado de recursos es- Por esta razón, la implementación
casos, de articular iniciativas públi- de la metodología Planos Vivos en
co-privadas orientadas hacia el bien Pescaíto, resulta ser un paso adelan-
común y la prosperidad colectiva, y te en la consolidación de la visión
por supuesto, de consolidar una so- común de una Santa Marta inte-
ciedad local. grada, próspera, equitativa, que encuentra en su
patrimonio material e inmaterial, así como en su
El Plan Santa Marta 500 años, el Plan de Acción riqueza popular, la oportunidad para adelantar
de Ciudades Sostenibles y Competitivas, parte de transformaciones de fondo. Todo sustentado en
las conquistas que en educación, finanzas sanas, un diálogo activo y constructivo entre sectores de
infraestructura y seguridad que nos ha permitido, gran importancia para la economía de la ciudad
como proyecto político, dos periodos de gobierno como el portuario y el turístico, con las comuni-
continuo por el cambio, primero Carlos Caicedo dades y los sectores que resguardan los valores y
y ahora el nuestro, no solo basados en el mode- la identidad samaria.
lo de gerencia de lo público, también, en la nueva
manera de conducir políticamente la ciudad a tra- Rafael Alejandro Martínez
vés de un diálogo franco y directo con sectores y Alcalde Distrital de Santa Marta
comunidades, recuperando bienes estratégicos de

E
ntender a Pescaíto es entender de inundaciones y deficiencias en el
la esencia misma de la cultura sistema de alcantarillado, por estar
samaria. Por el puerto y ferro- en la cota más baja de la ciudad, así
carril ha transitado el progreso de la como a problemas sociales, han he-
ciudad, en sus canchas se han for- cho necesaria la búsqueda de solu-
jado figuras emblemáticas del fútbol ciones que rescaten el legado histó-
y cada año sus calles se visten de rico y el potencial de Pescaíto para
fiesta con música y danza durante el sus residentes y para Santa Marta.
Carnaval. Pescaíto, también cono-
cido como Barrio Norte, es uno de El trabajo que se presenta en esta
los más emblemáticos de la ciudad publicación y que es fruto de un
de Santa Marta. Su historia está ín- riguroso proceso de investigación
timamente vinculada a la fuerte inmigración de que contempló las características más relevantes
personas atraídas por la oferta laboral que propor- de Pescaíto desde el punto de vista físico, etnográ-
cionaba el puerto. Es por esto que, si bien su origen fico, histórico, cultural, económico y ambiental se
es de larga data, su período de consolidación se constituye como insumo vital para la trasforma-
remonta a los inicios del siglo XX, momento en el ción que el barrio necesita. Es sin dudas, el núcleo
cual se expande la actividad portuaria en la zona de un programa integral y con una visión de me-
debido al auge del comercio bananero. diano plazo, que el BID apoya con diferentes ins-
trumentos de financiamiento y asistencia técnica
Sin embargo, luego de su época de esplendor el para contribuir con la mejora de la sostenibilidad
barrio ha sufrido un proceso de rezago respecto social, económica, urbana, y ambiental del barrio.
al desarrollo de otros barrios de la ciudad. Pescaí-
to presenta importantes retos urbanos, sociales y Ramiro López-Ghio
ambientales debido a un crecimiento que dividió Especialista sénior
parte de sus sectores y lo desvinculó de su entorno Coordinador del Programa Ciudades
inmediato: el mar y el centro histórico. Esta situa- Sostenibles en Colombia
ción, sumada a un profundo problema ambiental Banco Interamericano de Desarrollo 13
Departir en la calle, el frente
de la casa o la terraza: uno
de los pilares de la cultura
popular en Pescaíto.
Fotografías de Mariana Gil Arboleda
y Gabriela Díaz Montealegre

Prólogo y
agradecimientos
El libro que el lector o la lectora tiene en sus ma- te y auxiliar de oficina). En la edición de este libro
nos es la síntesis de un estudio realizado durante participaron además Manuel Ruiz Montealegre
el primer semestre de 2016 en el sector de Pescaí- (coordinación del equipo editorial), Alejandro Me-
to, en la ciudad de Santa Marta. Dicho estudio es dina (diseño y diagramación), Juan David Cáceres
el resultado de un contrato de consultoría entre (diseño y diagramación), Gabriela Díaz Montea-
el arquitecto Simón Hosie Samper y su equipo legre (fotografía) y Federico Benninghoff Prados
de trabajo, por una parte, y la Financiera del De- (dirección editorial; edición y redacción del texto).
sarrollo Territorial S.A.–Findeter, por la otra. La
Unión Europea, que a través de la Agencia Fran- A partir de una propuesta puntual para el diseño
cesa de Desarrollo (AFD) aportó los recursos LAIF de un centro cultural en el sector, la consultoría
para la consultoría, mientras que la iniciativa Tras debía profundizar en los problemas urbanos más
la Perla de la América prestó sus buenos oficios apremiantes de Pescaíto y presentar un diagnós-
para que este estudio pudiera ser llevado a buen tico integral sobre su situación actual. En último
término. En el trabajo de investigación participa- término, la consultoría debía elaborar una pro-
ron Simón Hosie Samper (director general de la puesta de renovación urbana que satisficiera crite-
consultoría), Pablo Said Lissa (coordinador de la rios de inclusión social, participación comunitaria
consultoría), Liliana González Rojas (profesional y sostenibilidad ambiental, urbana y económica.
en concertación con las comunidades), Omar Cor- Para tal efecto, el equipo de investigación recu-
dero Durango (investigador de campo en temas rrió a la metodología de Planos Vivos, concebida
históricos y etnográficos; coordinador de temas y desarrollada por Simón Hosie Samper a lo lar-
con la comunidad), Luis Miguel Marín (investiga- go de su trabajo con diferentes comunidades en el
dor de campo en temas arquitectónicos y urbanos; país.1 En la realización del Plano Vivo de Pescaíto,
coordinador del equipo en campo), Mariana Gil
Arboleda (investigadora de temas transversales 1 La metodología, la plataforma digital y el sistema de Planos Vivos
y universo objetual en campo), Ana María Palo- son una creación original de Simón Hosie Samper, con derechos de
mo (investigadora de red organizativa en campo), marca registrados. “Planos Vivos” es una marca registrada de Simón
Hosie Samper, con los certificados de registro 481280 y 481281, expe-
Paola Macía Fernández (elaboración de maqueta y dientes 13 036560 y 13 036565, resoluciones de concesión 67968 y 67969
14 fotografía de apoyo) y Viviana Ríos Pérez (dibujan- del 21 de noviembre de 2013 de la Superintendencia de Industria y
La construcción del territorio es un proceso en permanente
evolución: la propuesta arquitectónica y urbanística que
busque ajustarse a sus ritmos debe estar informada por
las vivencias de los habitantes y ofrecer respuestas a sus
principales preocupaciones”.

el equipo de investigación pudo sacar provecho sas fundamentales que subyacen a la metodología
de la experiencia acumulada en la elaboración de de investigación de Planos Vivos. Como se hará
los Planos Vivos de El Salado (Bolívar), San José evidente a lo largo de este trabajo, la convivencia
de Saco (Atlántico) y Morro (Casanare). El prime- efectiva de los investigadores con la comunidad
ro fue impulsado por la Fundación Semana y sus resulta aquí imprescindible, si es que realmente
aliados dentro del proyecto de reconstrucción de se quiere identificar sus necesidades más senti-
El Salado, arrasado por grupos paramilitares en das, pero también sus potenciales más promete-
febrero de 2000. Los dos últimos contaron con el dores de cara al futuro. En esta medida, el dise-
apoyo de la Agencia Nacional para la Superación ño y ejecución de obras físicas no constituye el
de la Pobreza Extrema (Anspe) y de la Corporación punto de llegada, sino apenas una etapa más –si
Compartamos con Colombia (CCC). bien crucial– en un proceso de largo aliento; uno
que debe abrir nuevos espacios –en su acepción
Planos Vivos pone el énfasis en la participación más amplia– a la participación, la construcción
activa de los pobladores como base de cualquier de identidad y el empoderamiento de la comuni-
propuesta de renovación del espacio que habitan, dad. La contribución de un proyecto urbanístico al
construyen y resignifican en su cotidianidad. Se bienestar se mide, en último término, por la ma-
trata de un enfoque analítico integral que busca nera en que los habitantes, quienes son a la vez
incorporar, en cuanto sea posible, las diferentes sus destinatarios y sus gestores, se apropian de él
dimensiones de la vida de una comunidad en un y le dan una nueva proyección de acuerdo a sus
lugar determinado. Identificar las dinámicas his- necesidades, prioridades, habilidades, intereses y
tóricas, culturales, socioeconómicas y urbanas del expectativas. La construcción del territorio es un
territorio, lo mismo que integrarlas en estrategias proceso en permanente evolución: la propuesta
de transformación de gran calado, son las premi- arquitectónica y urbanística que busque ajustarse
a sus ritmos debe estar informada por las viven-
Comercio. “Mapas Vivos” es una marca registrada de Simón Hosie cias de los habitantes y ofrecer respuestas a sus
Samper, con los certificados de registro 481321 y 475433, expedientes 13 principales preocupaciones.
036567 y 13 036570, resoluciones de concesión 72662 del 29 de noviem-
bre de 2013 y 52036 del 30 de agosto de 2013, de la Superintendencia
de Industria y Comercio. 15
Una escena
cotidiana en
Pescaíto: las madres
conversando en la
acera, pendientes de
Planos Vivos

sus hijos mientras


juegan fútbol calle.
Pescaíto

Fotografía de Mariana
Gil Arboleda
Prólogo y
agradecimientos


En consonancia con la propuesta metodológica en las fuentes estadísticas más relevantes con los
de Planos Vivos, el equipo de investigación fue testimonios de los habitantes y la presentación de
integrado con un criterio expresamente interdis- los planos correspondientes.
ciplinario; uno en el que estuvieron representa-
das disciplinas como la arquitectura, la historia, Los cuatro siguientes capítulos exploran las diná-
la antropología y la informática. Ahora bien, tan micas históricas, urbanas y socioculturales que
importante como la perspectiva interdisciplinaria han confluido en la formación y el desarrollo del
es la incorporación de experiencias y saberes lo- sector. El capítulo 3 aborda la dimensión histórica
cales; aquellas prácticas cuya utilidad, vigencia y en la construcción del territorio, no solo a partir
valor no son revalidados en las aulas (ni tienen por de los principales procesos que –desde una lente
qué serlo): Planos Vivos promueve un diálogo –no historiográfica– contribuyeron a moldearlo, sino
exento de contradicciones y conflictos– entre di- ante todo a través de la memoria viva de Pescaíto:
ferentes aproximaciones a los problemas urbanos; la manera en que sus habitantes reflexionan sobre
uno que se apoye en el conocimiento provisto por su pasado y se identifican con su territorio a través
disciplinas científicas y académicas, pero que a la de la narración de sus orígenes, sus vivencias y sus
vez rescate y realce el valor de la experiencia local, conflictos en el tiempo. El capítulo 4 profundiza
tallada y pulida al paso de las generaciones. en el análisis de la realidad urbana y arquitectóni-
ca de Pescaíto, y para tal efecto presenta algunos
El capítulo introductorio de este libro aborda dos de los planos que mejor comunican su trayectoria
dimensiones íntimamente interrelacionadas. Por urbana y las experiencias –positivas y negativas–
un lado, examina desde una perspectiva teórica y que han dejado una impronta duradera en sus ha-
a vuelo de pájaro las dificultades, las precauciones bitantes. El capítulo 5 se ocupa de los liderazgos
y los potenciales que hay que tener en cuenta a la y las organizaciones en Pescaíto, mientras que el
hora de darle anclaje al trabajo de investigación capítulo 6 presenta algunos de los resultados más
en la elaboración de planos. Por otro lado, esta representativos del análisis sociocultural y etno-
vez desde la praxis, el capítulo discute los prin- gráfico; aquellos que mejor retratan la vitalidad de
cipales fundamentos metodológicos de Planos sus gentes y la riqueza de sus prácticas y tradicio-
Vivos y la manera concreta en que estos fueron nes socioculturales.
aplicados para el caso de Pescaíto. Tras la discu-
sión de las principales premisas teóricas y meto- Para finalizar, los capítulos 7 y 8 se ocupan de
dológicas, el capítulo 2 ofrece un perfil urbano y las conclusiones generales de la investigación y
socioeconómico del sector a grandes trazos, en el de la propuesta de renovación urbana respecti-
que son presentados algunos indicadores relacio- vamente. Las conclusiones están organizadas en
nados con la estratificación y la vivienda, la pres- función de las raíces ambiental, sociocultural,
tación de servicios domiciliarios y la educación. socioeconómica, histórica, política y urbana, las
Fiel a la apuesta participativa de Planos Vivos, mismas que estructuran el análisis de Planos Vi-
16 este capítulo combina las información recopilada vos (tal como es explicado en el capítulo 1). En el
Planos Vivos promueve un diálogo –no exento de
contradicciones y conflictos– entre diferentes aproximaciones
a los problemas urbanos; uno que se apoye en el conocimiento
provisto por disciplinas científicas y académicas, pero que a
la vez rescate y realce el valor de la experiencia local, tallada y
pulida al paso de las generaciones”.

La esquina en
Pescaíto: lugar
privilegiado de
encuentro.
Fotografía de Gabriela
Díaz Montealegre

margen derecho del libro el lector o la lectora en- y como tal abre un abanico de nuevas posibilidades
contrará un ‘semáforo’ de seis luces, cuyos colo- de análisis en conjunción con los otros componen-
res identifican cada una de las raíces a lo largo del tes. La base –tal como fue mencionado más arri-
texto. Las luces se ‘encienden’ o quedan en blanco ba– la constituye el trabajo de investigación parti-
dependiendo de si la sección en particular hace cipativa e interdisciplinaria, que en el caso concreto
hincapié en la respectiva raíz o no. El ‘semáforo’ de Pescaíto se tradujo en un documento de más de
no solo ofrece un apoyo para la lectura, sino que 2600 páginas. El otro componente lo constituye la
además permite abordar el texto de diferentes plataforma virtual abierta de Planos Vivos (próxi-
maneras: los lectores pueden navegar las páginas ma a entrar en operación). Dicha plataforma per-
según sus intereses particulares hasta desembo- mite enlazar, de manera interactiva, el plano digital
car, en el capítulo 7, en la conclusión de las raíces de una población determinada con diversas fuentes
de su elección. Las raíces sirven de base a la con- de información, como documentos escritos, imá-
textualización de una propuesta arquitectónica y genes, fotografías o videos. En esa medida, la pla-
urbanística inclusiva, dialógica y sostenible; un taforma busca ampliar y potenciar la participación
proyecto que –tal como lo ilustra el capítulo 8– le comunitaria en el desarrollo del conocimiento, lo
apuesta a la innovación a partir del rescate y la mismo que ofrecer un “meta-nivel” para reflexionar
valoración de las tradiciones locales. sobre la construcción del territorio.

En este punto, la tentación de parafrasear a René El equipo de investigación desea expresar sus agra-
Magritte es irresistible: efectivamente, este libro no decimientos a Findeter, la Unión Europea y la Agen-
es un libro. O mejor aún, para no prestarle un flaco cia Francesa para el Desarrollo, sin cuyo respaldo
servicio a la lectura: no es solamente un libro; es a financiero esta investigación jamás habría visto la
la vez un componente del sistema de Planos Vivos, luz. El apoyo decidido y entusiasta del equipo de la 17
El fútbol calle:
patrimonio cultural
de Pescaíto.
Fotografía de Gabriela
Díaz Montealegre
Planos Vivos
Pescaíto
Prólogo y
agradecimientos


Las liderezas y iniciativa Tras la Perla de la América, en especial el concurso BID UrbanLab para la renovación de El
los líderes del de Carlos Vives y Claudia Elena Vásquez, resultó Boro y la zona de la vía Alterna, supervisado por
gran Pescaíto:
fundamental para resolver más de una dificultad Juan Pablo López-Gross y Horacio Terraza, que fue
su concurso es
fundamental para y aprovechar al máximo el trabajo con la comu- estructurado con base en la información provista
la formulación de nidad pescaítera. El respaldo resuelto de Findeter por la investigación de Planos Vivos y que contó
una propuesta de a través del Programa de Ciudades Sostenibles y con el acompañamiento de su equipo. El Ministerio
renovación urbana
Competitivas, en particular de Luis Fernando Ar- de Cultura, en cabeza de la ministra Mariana
participativa y
sostenible. boleda, Rodolfo Enrique Zea, Ana María Palau, Gi- Garcés, se ha sumado con convicción a esta apuesta
Fotografías de Ana María sela Labrador, Juana Leal, Erika Delgado, Claudia por la preservación y el desarrollo del patrimonio
Palomo o pertenecientes
a los archivos personales
Salamanca y Carlos Salazar, fue crucial para llevar urbano y cultural de Pescaíto, en un compromiso
de los líderes. este proyecto a buen puerto. Fruto del compromi- que incluye los recursos para financiar la ejecución
so de Findeter con el enfoque abanderado por Pla- de la primera fase. Por último, cabe extender estos
nos Vivos son los recursos que permitieron reali- agradecimientos a la Sociedad Portuaria de Santa
zar el trabajo de edición de este libro y darlo a la Marta, que acogió al equipo de Planos Vivos para
imprenta. En la Administración Distrital de Santa estudiar nuevas alternativas, compartir informa-
Marta, el alcalde Rafael Martínez y su secretario de ción y discutir temas neurálgicos.
Planeación, Francisco García Rentería, mostraron
siempre la mejor disposición para colaborar con el Sobra decir que el equipo de investigación contra-
equipo de Planos Vivos y prestaron una invaluable jo su mayor deuda de gratitud con los habitantes
ayuda en el proceso de investigación. En el Banco de Pescaíto, quienes no solo abrieron sus puertas a
Interamericano de Desarrollo (BID) la propuesta los que por entonces eran unos perfectos extraños:
que aquí presentamos recibió una calurosa acogi- con una generosidad extraordinaria, compartie-
da, en especial por parte de Luis Alberto Moreno, ron con el equipo sus preocupaciones, sus viven-
Rafael de la Cruz, Ramiro López-Ghio y Natalia cias y sus anhelos. A ellos, a los pescaíteros y a las
López Aguilar. Ese vivo interés se materializó en pescaíteras, está dedicado este trabajo.

18
Nota
editorial
Para garantizar la fluidez en la lectura, se ha prescindido
aquí del aparato de referencias documentales y biblio-
gráficas. Quien quiera consultar las fuentes empleadas,
puede remitirse al anexo bibliográfico, organizado por
capítulos. Dos excepciones fundamentales dictan el uso
de citas a pie de página en el texto: cuando aparecen re-
ferencias expresas a un libro o a un documento concreto,
o cuando se recurre a testimonios literales, ya sea que ha-
yan sido extraídos de una fuente escrita o que hayan sido
recogidos en el trabajo de campo. Este criterio refleja el
empeño de Planos Vivos por poner en primer plano las
voces de quienes han contribuido de una u otra forma a la
construcción de Pescaíto, independientemente de que se
trate de sus habitantes actuales, de observadores exter-
nos o de personas que en el pasado dejaron testimonio de
las impresiones que les dejó el territorio, mucho antes de
que el sector existiera como tal.

El uso de las comillas refleja ese mismo énfasis testimonial:


las comillas dobles son empleadas cuando se trata de una
cita textual de pocos renglones (las transcripciones más
largas están separadas del cuerpo principal del texto), o
cuando se trate de palabras o conceptos utilizados por los
pobladores mismos o por alguna de las fuentes, sean es-
tas primarias o secundarias. Además de indicar una cita
dentro de otra cita, las comillas sencillas son empleadas
para aquellos términos que conviene resaltar en el hilo
argumental (porque adolecen de cierta vaguedad, o por
tener un uso idiosincrático o deliberadamente ambiguo,
por ejemplo), sin que hagan referencia explícita o literal a
la utilización que les dan los pobladores, una comunidad
científica o algún otro grupo en particular.

En esa misma vena, las entrevistas han sido transcritas


aquí de la manera más fiel posible, respetando los giros
y modismos del habla pescaítera. En cuanto a las citas
de documentos escritos, se han conservado la ortografía
y la puntuación originales, y solo han sido introducidas
modificaciones menores allí donde eran indispensables
para una mejor comprensión.

19
Planos Vivos

La Castellana
vista desde los
Pescaíto

cerros del Norte.


Fotografía de Gabriela
Díaz Montealegre
Prólogo y
agradecimientos


20
21
Pantallazos de la plataforma
virtual de Planos Vivos.
Su versatilidad hace de la
plataforma una herramienta
imprescindible en la
investigación, el análisis y la
formulación de propuestas
de renovación urbana.
Fuente: Plataforma virtual
de Planos Vivos (2017)

1 Introducción: Teoría y
práctica de los Planos Vivos

22
pol í tica
R aiz
La propuesta de Planos Vivos se RP

alimenta de las polémicas y los disensos


que animan el debate, tanto como de los

R aiz socio -
econ ó mica
esfuerzos por reconciliar puntos de vista y
RE
encontrar denominadores comunes”.

ambiental
R aiz
El plano y la representación biante y contradictorio en el que se enmarca su RA

cartográfica: bosquejo teórico ejecución; la de los intereses en pugna que inciden


en su producción; o la de la trayectoria biográfi-
¿Qué es y para qué sirve un plano? Se trata de un ca del usuario actual, separado en el tiempo y el

urbana
artefacto tan común en nuestros días, tan fami- espacio de quien asumió la elaboración original.

R aiz
liar y ubicuo, que es fácil darlo por sobrentendido Leer entre líneas, distinguir estructuras narrativas
RU
y autoevidente. Esa familiaridad, lejos de facilitar e identificar diferentes niveles de significado: esa
su problematización desde la teoría, suele consti- es la prioridad de quien se asoma al plano con una
tuirse en un primer obstáculo en la discusión: el perspectiva hermenéutica (en su sentido más lato).

R aiz socio -
cultural
plano no parecería necesitar explicaciones adicio-
nales ni mucho menos elucubraciones superfluas. La lista de definiciones puede ser extendida a vo-
De acuerdo al prisma que sea empleado, el plano luntad, en un ejercicio digno de Las mil y una no- RC
puede ser definido de diferentes maneras. ches, sin que sea posible llegar a una que resulte
plenamente satisfactoria; una que abarque las di-
En su acepción más sencilla, el plano es un medio ferentes aristas que dan forma y sentido al plano.

hist ó rica
de orientación del que las personas pueden valerse Quien prefiera ahorrarse una tarea así de ardua,

R aiz
para guiar sus movimientos en diferentes entor- bien puede referirse al plano de manera sencilla
nos, ya sea que se trate de un edificio, un sistema (aunque no por eso menos vaga y ambigua) como RH
de transportes o una ciudad en su conjunto. Desde herramienta de conocimiento. Ahora bien, este
una perspectiva institucional, el plano puede ser atajo no necesariamente conduce por un camino
definido como uno de los instrumentos indispen- libre de sobresaltos, ni les ahorra a los lectores la
sables de planeación y control territorial en las so- necesidad de lidiar con definiciones básicas. Una
ciedades modernas. Si se prefiere resaltar uno de vasta bibliografía se ha ocupado en las últimas
sus fundamentos epistemológicos, cabría hablar décadas de los problemas, las limitaciones, los
entonces de un modelo geométrico-matemático sesgos, los potenciales y las ventajas de la carto-
del espacio geográfico; un modelo que, en la for- grafía como herramienta de conocimiento. Des-
ma que suele venir a la mente cuando se habla de de una perspectiva teórica es posible identificar,
un plano (aunque de lejos no es la única), descansa de manera por demás simplificada, dos grandes
sobre fundamentos euclidianos y cartesianos. problemáticas, cuya relevancia para la propuesta
de Planos Vivos no puede dejar de ser subrayada.
Si el énfasis en su cimiento matemático es con- Estas son, a saber:
siderado sospechoso o insuficiente, y se prefiere
resaltar su carácter de constructo sociocultural, • El plano y la precisión geométrico-matemática
quizás se opte entonces por definirlo como dis- • El plano: visión panóptica y contra-mapeo
positivo que enlaza saberes y constelaciones de
poder en su dimensión espacial. Un dispositivo Se trata de problemáticas interrelacionadas, que
que, en último término, contribuye a estructurar plantean interrogantes complejos y que no admi-
y reproducir las prácticas sociales que se expre- ten respuestas fáciles, conclusiones tajantes o ver-
san en la construcción del territorio. Habrá quien dades apodícticas. La propuesta de Planos Vivos
prefiera aproximarse al plano como si se tratara se alimenta de las polémicas y los disensos que
de un texto: la clave radicaría aquí en saber des- animan el debate, tanto como de los esfuerzos
entrañar los diferentes hilos argumentales (tanto por reconciliar puntos de vista y encontrar de-
como los vacíos) que convergen en su ejecución y nominadores comunes. Ahora bien, la propuesta
le confieren sentido. Entre la infinidad de tramas de Planos Vivos no plantea en ningún caso una
posibles cabría mencionar, en primer lugar, la de síntesis absoluta; una que resuelva todas las con-
la trayectoria biográfica de quien confecciona el tradicciones y no deje cabo sin atar: en esa medi-
plano; la del contexto intelectual siempre cam- da, la promesa de una panacea teórica no está en 23
Dos aproximaciones a la matriz hacer inteligibles las dinámicas
geométrico-matemática del socioespaciales sobre el terreno,
plano: como guía para implantar como en el plano de riesgos para
un modelo urbano desde arriba, Pescaíto (derecha; fragmento).
como en el Plan Piloto de Brasilia Fuentes: https://chicosantanna.wordpress.
com (2015) y archivo de Planos Vivos (2016)
Planos Vivos

de 1960 (izquierda; fragmento),


o como herramienta para
Pescaíto
Teoría y práctica de
los Planos Vivos
Introducción:
representación cartográfica:
bosquejo teórico
El plano y la

su horizonte. Quien se anime a leer las siguientes poder que son expresadas en él; igualmente facili-
líneas tendrá la oportunidad de comprobar que taría su naturalización, al definirlas primeramen-
no son pocos los casos en los que las premisas te en función de una realidad física más o menos
son mutuamente excluyentes y las conclusiones permanente y no de las estructuras sociales en su
diametralmente opuestas. Ello no es impedimen- constante transformación y flujo. Como produc-
to, por supuesto, para sacar pleno provecho de la to de la noción de espacio abstracto que subyace
discusión teórica; antes bien, Planos Vivos busca a la perspectiva euclidiana y cartesiana, el plano
posicionarse en los diferentes debates, dentro un –en su forma arquetípica actual– contribuiría en
esfuerzo permanente de autocrítica y desarrollo último término a la reificación del territorio que
de sus bases teóricas. pretende representar: este deja de ser un espacio
construido y apropiado socialmente, para trans-
formarse así en una suerte de contenedor inde-
El plano y la precisión pendiente de la experiencia y la acción humanas.
geométrico - matemática El espacio quedaría reducido a una especie de es-
En lo que se refiere a la primera de las problemá- cenario fijo sobre el que trascurre la vida de una
ticas, aquella que gira en torno al fundamento comunidad determinada.
geométrico-matemático del plano, son muchas
las voces que desde las ciencias sociales, huma- Como todo modelo que se respete, el plano de una
nas y de la cultura han puesto en tela de juicio su realidad geográfica entraña un mayor o menor
presunta objetividad: el énfasis en la precisión y el grado de abstracción frente a los rasgos concre-
rigor matemático de la representación del espacio tos y singulares de los fenómenos y los procesos
solo serviría para ocultar los sesgos, intereses y que busca aprehender. En esa medida, el riesgo de
prejuicios en la selección de las información pre- reificación del espacio no debe ser subestimado:
sentada en el plano. ¿Cuáles son los elementos que la selección de ciertas variables, lo mismo que la
deben integrar el plano? ¿Cuáles deben ser igno- representación de sus relaciones espaciales en tér-
rados? ¿Cuáles son los vínculos entre dichos ele- minos geométrico-matemáticos, pueden reforzar
mentos que deben ser resaltados? ¿Cuáles deben la noción del territorio como contenedor o sus-
permanecer ocultos a los ojos de quienes lo utili- tancia independiente de los sujetos que lo habitan
zan? No son –insisten los críticos– criterios mate- y construyen. En una perspectiva de este tipo, la
máticos los que en último término definen cuáles tarea de la cartografía se limitaría a refinar su
son las relaciones espaciales que deben ser objeto instrumental matemático para alcanzar una pre-
de representación gráfica: el ropaje científico que cisión cada vez mayor en la representación de las
24 ostenta el plano no solo ocultaría las relaciones de constantes físicas de este espacio objetivado.
pol í tica
R aiz
Quienes confeccionan planos, tanto como quienes RP

trabajan con ellos, son por lo general conscientes


de que su quehacer no se reduce a registrar de

R aiz socio -
econ ó mica
modo ‘literal’ las dimensiones objetivas de una RE
realidad exterior. Su labor implica un ejercicio de
recopilación, selección, abstracción y síntesis de

ambiental
información que denota una construcción activa de

R aiz
su objeto de conocimiento”.
RA

urbana
R aiz
Ahora bien, a la utilización de relaciones geomé- exacta de lo real; aquella que se ciñe plenamente
RU
trico-matemáticas en la representación y el análi- a un espacio reificado a la manera de contenedor
sis no le es inherente la cosificación de los fenóme- o medio ambiente independiente. Tal como queda
nos o las dinámicas representados (aunque como ilustrado con maestría en el célebre “Del rigor en

R aiz socio -
cultural
acabamos de advertir, el riesgo latente sí existe). la ciencia” de Jorge Luis Borges, basta con llevar la
El plano de base euclidiana y cartesiana, para re- premisa al absurdo:
tornar al modelo que goza de mayor difusión y RC
que ha sido sometido a la crítica más asidua, no …En aquel Imperio, el Arte de la Cartografía logró tal
entraña necesariamente la reducción del espacio Perfección que el mapa de una sola Provincia ocu-
a materia inerte. Quienes confeccionan planos, paba toda una Ciudad, y el mapa del Imperio, toda

hist ó rica
tanto como quienes trabajan con ellos, son por lo una Provincia. Con el tiempo, esos Mapas Desme-

R aiz
general conscientes de que su quehacer no se re- surados no satisficieron y los Colegios de Cartó-
duce a registrar de modo ‘literal’ las dimensiones grafos levantaron un Mapa del Imperio, que tenía el RH
objetivas de una realidad exterior. Su labor implica tamaño del Imperio y coincidía puntualmente con
un ejercicio de recopilación, selección, abstracción él. Menos Adictas al Estudio de la Cartografía, las
y síntesis de información que denota una cons- Generaciones Siguientes entendieron que ese dilata-
trucción activa de su objeto de conocimiento. Una do Mapa era Inútil y no sin Impiedad lo entregaron
construcción que postula una serie de relaciones a las Inclemencias del Sol y de los Inviernos. En los
entre fenómenos y procesos en función de su dis- desiertos del Oeste perduran despedazadas Ruinas
tribución espacial, pero que no plantea la repro- del Mapa, habitadas por Animales y por Mendigos;
ducción de una realidad esencial. en todo el País no hay otra reliquia de las Disciplinas
Geográficas.1
Así como el territorio remite a un espacio físico
determinado, pero no es equivalente a él, el plano Al recurrir a una matriz de índole geométrico-ma-
remite tanto a la geografía como al territorio, sin temática, el plano no se aboca –y valga la analo-
que pueda ser reducido a la mera imagen especu- gía– a una reproducción figurativa cada vez más
lar de ambos (en su práctica versión de bolsillo). El rigurosa; sí procura, en cambio, sacar a la luz cier-
territorio hunde sus raíces en el medio físico, pero tas relaciones que de otro modo permanecerían di-
está constituido por las acciones humanas que lo fusas o indeterminadas en el análisis. El plano no se
delimitan, lo transforman y le confieren significa- alimenta de sí mismo, por supuesto; las diferentes
do. De la misma manera, el plano no es la simple fuentes de información que confluyen en él definen,
copia a escala de un entorno petrificado. El plano en último término, la manera en que los fenómenos
tiende su red analítica sobre un entramado espa- y procesos estudiados son representados en su di-
cial y, de la mano de un instrumental cognitivo mensión espacial. Ello no significa, por otra parte,
que incluye operaciones geométrico-matemáticas, que el plano sea equiparable a las fuentes de las que
pero no se limita a ellas, postula una serie de re- se nutre, y que por lo mismo pueda ser considera-
laciones en clave espacial (así como ignora otras y do superfluo, o que constituya apenas un apéndice
las deja de lado). ilustrativo de levantamientos estadísticos, entrevis-
tas etnográficas, reconstrucciones historiográficas
La literatura nos ha provisto de ejemplos contun-
dentes de lo inconveniente que resulta pensar la 1 Jorge Luis Borges, “Del rigor en la ciencia”, en El hacedor. Madrid:
aproximación cartográfica como reproducción Alianza Editorial, 1987 [1960], pp. 143-4. 25
Plano 1.1
Plano de la epidemia
de cólera de Londres
(1854) de John Snow
(fragmento).
Planos Vivos

Fuente: https://en.wikipedia.org
Pescaíto
Teoría y práctica de
los Planos Vivos
Introducción:
representación cartográfica:
bosquejo teórico
El plano y la

o tipologías arquitectónicas. Si el plano no puede problema que terminaría por ampliar el horizonte
ser concebido como la simple imagen congelada de intelectual: al relacionar la difusión en el espacio
una espacialidad reificada, es precisamente porque del brote con las prácticas de la población, logró
desentraña y relaciona entre sí dinámicas socioes- identificar la fuente de la calle Broad, cuyas aguas
paciales de manera insustituible. tenían irónicamente la reputación de ser las más
potables del sector, como el foco de infección. Aun-
Un ejemplo paradigmático del potencial intrínse- que el paradigma epidemiológico reinante no le
co al plano lo constituye el famoso mapa de la epi- era favorable, los argumentos de Snow llevaron
demia de cólera de Londres de 1854, confeccionado a las autoridades –en una decisión no exenta de
por el médico John Snow. Tras diversos brotes de controversia– a retirar la palanca de bombeo de la
la enfermedad en la ciudad, a finales de agosto se fuente como medida de precaución. Aun así, en su
presentó un brote masivo en el barrio de Soho, que informe final la Junta General de Sanidad se aferró
en menos de dos semanas cobró la vida de casi a la teoría del miasma y descartó la posibilidad de
700 personas. La teoría del miasma, que postula- que el agua contaminada hubiera sido la respon-
ba la transmisión de la enfermedad a través de la sable de la epidemia.
“pestilencia” o un cierto “aire mefítico”, gozaba en-
tonces de aceptación mayoritaria. Entre sus con- La parroquia de St. James organizó una comisión
tradictores se encontraba Snow, quien atribuía el independiente para investigar lo sucedido, en ca-
contagio al consumo de agua contaminada. beza de Snow y del reverendo Henry Whitehead.
El religioso no solo gozaba de la entera confianza
Dados los recursos técnicos disponibles, el exa- de los habitantes del sector, sino que además había
men químico y microscópico del agua no arrojó llevado un registro exhaustivo del avance de la en-
resultados concluyentes (no hay que olvidar ade- fermedad. Aunque en un comienzo se había mos-
más que tendrían que pasar algunos años antes trado escéptico frente a la teoría de la transmisión
de que Pasteur hiciera sus contribuciones capita- a través del agua, con el paso de los días se rindió
les a la teoría del germen en la década de 1860). ante el peso de los argumentos del médico. No es
26 No obstante, Snow empleó una aproximación al improbable que la segunda versión del plano del
Plano 1.2
Plano a mano de flujos,

pol í tica
lugares de confluencia y
recorridos.

R aiz
Fuente: Archivo de
Planos Vivos (2016)
RP

R aiz socio -
econ ó mica
RE

ambiental
R aiz
RA

urbana
R aiz
RU

R aiz socio -
cultural
RC

hist ó rica
R aiz
RH

brote de cólera, que Snow había publicado para del brote (las filtraciones de un pozo séptico que
darle sustento empírico a su hipótesis, hubiera ter- habían contaminado el agua de la fuente) como el
minado de persuadir del todo al clérigo (plano 1.1). caso índice o paciente cero (una bebé contagiada).
El plano –de índole euclidiana y cartesiana– rela-
cionaba el patrón social de contagio con la distri- Lejos, pues, de soslayar las prácticas sociales en
bución espacial de la epidemia, y para tal efecto la construcción del territorio, o de reducir el espa-
recurría a una herramienta matemática conocida cio a una sustancia independiente de las personas,
hoy en día como diagrama de Voronoi. Dicha he- Snow consiguió sacar a la luz dinámicas socioes-
rramienta, empleada por primera vez en un plano paciales relevantes para entender la epidemia; di-
epidemiológico, le había permitido a Snow orga- námicas que de otra forma hubieran pasado in-
nizar la información sobre los casos de contagio advertidas. El plano no derribó de inmediato al
en función de la distancia a las diferentes fuentes Goliat miasmático, pero el tiempo se encargaría
de agua del sector. Ahora bien, si realmente que- de darle la razón a sus conclusiones. Aparte de su
ría cumplir su propósito, el plano debía dar cuenta indudable valor para el desarrollo de la epidemio-
no de las distancias abstractas entre dos puntos, logía, el plano se erigió en hito por excelencia de
sino de los recorridos efectivos de los habitantes la aproximación cartográfica a un problema de
para aprovisionarse del líquido. El trabajo al ali- investigación. El trabajo conjunto de Snow y Whi-
món con Whitehead rindió plenamente sus frutos, tehead permitió integrar niveles de observación
pues fue gracias a su conocimiento profundo de la macro, meso y micro en el análisis cartográfico,
comunidad que el plano pudo registrar con tanta lo mismo que conjugar diferentes disciplinas (epi-
precisión los hábitos de la población. La labor de demiología, demografía, estadística y sociología,
Whitehead no solo aportó nueva evidencia, sino entre otras) con el conocimiento sobre el terreno
que además permitió identificar tanto el origen de las prácticas de la comunidad. 27
Planos Vivos
Pescaíto
Teoría y práctica de
los Planos Vivos
Introducción:
representación cartográfica:
bosquejo teórico
El plano y la

Al resaltar aquí el potencial de la aproximación les a la movilidad, basadas por ejemplo en la oferta El registro de las
cartográfica, no dejamos de reconocer el peli- de transporte público o en el tipo de vías existen- múltiples facetas de
la experiencia urbana
gro latente de una cosificación y naturalización tes. Estas dimensiones de la vida urbana son en sí
y de la construcción
del espacio, pero hacemos hincapié en que la rei- mismas muy relevantes, y no en vano la propuesta social del territorio:
ficación no le es intrínseca a todo plano. El pris- de Planos Vivos las recoge en otros mapas, pero el horizonte del
ma cartográfico puede arrojar nueva luz sobre la claramente resultan insuficientes para compren- análisis cartográfico
de Planos Vivos.
construcción social del territorio, pero su eficacia der a cabalidad la manera en que los habitantes
Fotografía de Gabriela
depende en no poca medida de la capacidad de re- hacen suyo el territorio a través de la circulación. Díaz Montealegre
flexionar, en primer término, sobre la elaboración Solo un trabajo de observación exhaustiva sobre
misma del plano. Planos Vivos expone el proceso el terreno permite entender el espacio pescaítero
de construcción de sus mapas a todas las miradas, en función de las preferencias y los temores de los
incluso –o sobre todo– a las más críticas e inqui- habitantes en sus recorridos. Con un solo vistazo
sitivas: el lector o la lectora no se enfrenta aquí al al plano es posible identificar aquellos lugares que
plano como artefacto acabado, que deriva su cre- convocan a los habitantes y sirven de espacio de
dibilidad y su utilidad de la autoridad que suele ser encuentro y reunión, lo mismo que aquellos que
conferida al ejercicio cartográfico. Quien se aden- están afectados por diferentes problemas y que la
tre en las páginas de este libro (o decida recorrer la mayor parte de la comunidad rehúye sistemática-
plataforma virtual de Planos Vivos), podrá darse mente. Los diseños arquitectónicos que se precien
una idea bastante fidedigna de la manera en que de ser sostenibles tienen que tener en cuenta estos
esta propuesta echa mano de múltiples fuentes, patrones, si es que realmente quieren integrarse a
contrasta varios tipos de información, recurre a la cotidianidad de un lugar: su ubicación debe ser
diferentes técnicas de investigación y se apoya en escogida en consonancia con los flujos ‘naturales’
diversas disciplinas a la hora de emplear el entra- de movimiento de los pobladores.
mado geométrico- matemático del plano.
Como se puede apreciar, el recurso a la cartografía
En el caso concreto del estudio sobre Pescaíto, dentro del sistema de Planos Vivos no se reduce a
una muestra paradigmática de la combinación del un ejercicio de taxidermia para fijar con un alfiler
soporte cartográfico con la investigación de cam- los contornos exactos de una espacialidad subs-
po, en la mejor tradición de Snow y Whitehead, la tancializada. Por el contrario, se trata de integrar
constituye el plano de flujos, lugares de confluen- la expresión espacial de fenómenos y procesos
cia y recorridos de la comunidad (plano 1.2). En él sociales en un modelo dinámico y abierto a múl-
están registrados los sitios más frecuentados por tiples perspectivas. Este es precisamente el norte
los habitantes según edad, sexo y franja horaria, de los planos en cuanto vivos: su horizonte no es
lo mismo que las rutas que favorecen o evitan otro que el de la trama abigarrada y los múltiples
en sus desplazamientos cotidianos por el sector. ritmos de la construcción social del territorio.
Como se puede observar, la lógica de confección
28 del plano se aleja de las aproximaciones habitua-
pol í tica
R aiz
Con un solo vistazo al plano es posible identificar aquellos RP

lugares que convocan a los habitantes y sirven de espacio

R aiz socio -
econ ó mica
de encuentro y reunión, lo mismo que aquellos que están
afectados por diferentes problemas y que la mayor parte de RE

la comunidad rehúye sistemáticamente.

ambiental
R aiz
RA
El plano: visión panóptica y contra- mapeo relación de los pobladores con su entorno y subor-
Íntimamente ligada a la eventual reificación del dina su construcción del territorio a las necesida-
espacio a través de la cartografía (al menos de des y los intereses de grupos dominantes. Desde

urbana
aquella de índole euclidiana y cartesiana), la pro- esta perspectiva, el mapa enmascararía, bajo el

R aiz
blemática relacionada con lo que aquí daremos en manto de la objetividad geométrico-matemática,
RU
llamar la ‘visión panóptica’ del plano ha concitado la reproducción de las relaciones de poder que le
la atención de muchas disciplinas en las últimas confieren autoridad, vigencia y relevancia como
décadas. La metáfora del panóptico no es gratui- herramienta de conocimiento.

R aiz socio -
cultural
ta: se apoya –de manera libre y simplificada, y sin
entrar en una crítica exhaustiva– en algunas ideas Uno de los ejemplos que suele ser traído a cola-
de Michel Foucault. La analogía que sirve como ción para ilustrar este punto es el del plano ca- RC
punto de partida es la siguiente: con su principio tastral y su relación con el desarrollo capitalista:
de exposición constante a una vigilancia a la vez al proyectar el territorio sobre una cuadrícula
ubicua e invisible, el panóptico puede ser emplea- homogénea y abstracta, el plano catastral con-

hist ó rica
do como símbolo por antonomasia de las institu- tribuiría a romper el vínculo de la representación

R aiz
ciones que en la era moderna se han empeñado del espacio con las prácticas sociales que lo cons-
en disciplinar a los individuos en todos los aspec- tituyen. Esa ruptura sería un paso imprescindible RH
tos imaginables, empezando por sus cuerpos. En para despojar el territorio de toda seña de iden-
tiempos de la “biopolítica”, el mapa bien podría tidad, fraccionarlo y transformarlo en mercancía
ser concebido como uno de los instrumentos por libremente transable. Desde esta perspectiva, el
excelencia en el esfuerzo del Estado por trascen- mapa catastral contribuye a la formación de mer-
der el disciplinamiento individual: el poder se cados, de la misma manera en que esos mercados
constituye no solo a través de la intervención en sancionan su validez como herramienta de cono-
la conducta de los sujetos, sino además mediante cimiento. En una suerte de movimiento en espi-
la regulación y el control del comportamiento (en ral, una forma de saber se refuerza mutuamente
primer término –aunque no exclusivamente– de- con el proceso (en este ejemplo concreto la mer-
mográfico y biológico) de los colectivos humanos. cantilización) que ayuda a constituir. En líneas
La cartografía proveería un nuevo tipo de visión generales cabría identificar, pues, dos funciones
panóptica para ejercer poder ya no sobre indivi- interrelacionadas en el plano ‘moderno’, ya sea
duos concretos, sino sobre poblaciones enteras: como catalizador en la consolidación de sistemas
quien imagine al leviatán de Hobbes como un cí- de poder, o como dispositivo discursivo para le-
clope, sabrá reconocer que el lugar del ojo sobre su gitimar y a la vez apuntalar la reproducción de
frente está ocupado por un plano. mecanismos de dominación y explotación.

No es este el espacio para detenerse en el instru- No es necesario tomar a pie juntillas todo lo que
mental conceptual de Foucault y discutirlo exhaus- plantea esta perspectiva para reconocer que el
tivamente; lo importante aquí es constatar que plano ha sido un instrumento privilegiado de do-
buena parte de la teoría crítica que se ha ocupado minación. El plano no solo permite sacar a la luz
de la cartografía fundamenta sus observaciones relaciones entre fenómenos y procesos que de otro
en premisas inspiradas en su obra o al menos en modo permanecerían difusos; también facilita el
aproximaciones similares a ella. El plano es conce- despliegue coordinado de los medios de acción
bido aquí en primer término como instrumento de disponibles, ya sea que se trate de tecnologías bé-
control del poder estatal (o de las clases sociales y licas, formas de producción o sistemas de conoci-
grupos de interés en su ápice); como herramienta miento. No en vano, la cartografía ‘moderna’ se ha
de ingeniería social que simplifica (y empobrece) erigido en los último siglos en auxiliar imprescin-
la rica textura de la espacialidad local, modifica la dible de la expansión colonial, o de la marginación 29
En su análisis, Planos Vivos recurre a bosquejos
Planos Vivos

cartográficos elaborados por los habitantes, y en su


Pescaíto

trabajo de campo emplea técnicas de cartografía social


para examinar, con un plano desplegado sobre la mesa,
las oportunidades, los problemas y los hábitos puestos
Teoría y práctica de
los Planos Vivos
Introducción:

de relieve por miembros de la comunidad, funcionarios


de entidades estatales, integrantes de organizaciones no
gubernamentales o representantes de la empresa privada”.
representación cartográfica:
bosquejo teórico
El plano y la

P r of un di z a ci ó n e n
a s p e c to s cr í t i c o s

C o nv i v e n cia
i g a c i ó n p a r t i ci Figura 1. La tríada
est p at i
Inv va fundamental de
ox i m a ci ó Planos Vivos: la
A pr men n
o cu tac
ión comunidad, las
yd instituciones
públicas y la
empresa privada.
Metodología Planos Vivos®
Visión
población
s
cta
ire

O
sd

TR
ne
FIL
inio

SE ón
SIN

FA igaci

GE
Op

Ra R A L
I

SE ión

NE
t

íz
DE
es

FA igac
II
I nv

Ra L A D A
TA
SE ión
t

íz
L
ES
es

FA tigac
III
I nv

Ra Í F I C A
P
EC
íz
es
I nv

planos
vivos
cr í t n
s
a s p e c to s ci ó n e
ico

Ac
P r o c to s cr í t i c o s

al n
as

y
s

pe
y e ntr ev s

ó
f un d
e nt m
is t a

e r o cum
e
a

ye
A c o cum o f o r

Re u e v i s t a s
n
P r of un di z

ca
i

d
ac
Re u n i o

nt r
m i e e nt a c al

i z a ci ó n e n

Investigación
nione s
n t

ESPECIALIZADA Visión
nto f o r m
e

Visión
m i

EMPRESA
ESTADO
c a

Investigación PRIVADA
yd
e r

ión

DE CAMPO

Investigación
EN ARCHIVOS

30
pol í tica
R aiz
RP

R aiz socio -
econ ó mica
RE

ambiental
R aiz
RA
de sectores de la población en el marco de refor- ción pueden subvertir el mapa de la lonja de propie- El panóptico de
mas urbanas regresivas. El plano ha servido de dad raíz de la ciudad. Basta, por ejemplo, con que se Bentham.
soporte al tipo de homogeneización cultural pro- hagan con una copia digital, le superpongan sus Fuentes: http://www.

urbana
neoteo.com y https://
pugnado por el Estado nacional clásico, lo mismo experiencias personales de arraigo y desarraigo, y es.wikipedia.org

R aiz
que a la expropiación y al desplazamiento de po- ‘manipulen’ las relaciones espaciales del plano en
RU
blaciones enteras en la constitución de mercados función de su percepción subjetiva.
de tierras. Baste recordar aquí la intensa actividad
cartográfica que precedió y acompañó “el repar- A lo largo de este trabajo, los lectores tendrán la

R aiz socio -
cultural
to de África” en la era del imperialismo clásico, la oportunidad de apreciar la manera en que esta pro-
conquista de las “fronteras indias” en América y el puesta ha hecho suyos algunos de los fundamen-
exterminio de sus habitantes durante el siglo XIX, tos y las técnicas del contra-mapeo. En su análisis, RC
o la segregación racial en las ciudades del apar- Planos Vivos recurre a bosquejos cartográficos
theid durante el siglo XX . elaborados por los habitantes, y en su trabajo de
campo emplea técnicas de cartografía social para

hist ó rica
Atribuir al plano una lógica inherente de subyuga- examinar, con un plano desplegado sobre la mesa,

R aiz
ción es –como no podría ser de otro modo– obje- las oportunidades, los problemas y los hábitos re-
to de álgido debate: como en el caso previamente saltados por miembros de la comunidad, funcio- RH
discutido de la reificación del espacio, su potencial narios de entidades estatales, integrantes de orga-
como instrumento de dominación es perfecta- nizaciones no gubernamentales o representantes
mente evidente, pero la realización de dicho po- de la empresa privada. También apela a recorridos
tencial dista mucho de ser automática. Más que un calle por calle con diferentes individuos y grupos,
rechazo palmario a todo constructo cartográfico con el propósito de registrar sus experiencias, sus
como engranaje dentro un mecanismo hegemó- prácticas y sus perspectivas en clave socioespacial.
nico de poder, lo procedente es abrir el potencial Planos Vivos no ha explorado aún toda la amplia
del plano al examen de sectores más amplios de la gama de las técnicas de contra-mapeo, como por
población y someterlo a un escrutinio minucioso; ejemplo la ‘traducción’ de los bosquejos de los po-
uno que permita una reflexión franca y también bladores a las coordenadas del mapa cartesiano,
autocrítica de la relación entre cartografía y poder. o el mapeo en línea de acceso abierto e índole
colaborativa (cabe anotar que las siguientes fases
En esta línea, algunas corrientes de pensamien- de desarrollo apuntan hacia allá). Igual su com-
to han promovido activamente el que se ha dado promiso con la premisa básica del contra-mapeo es
en llamar contra-mapeo, esto es, la confección de inquebrantable: la cartografía puede contribuir al
planos a partir de la experiencia, los intereses y empoderamiento de las comunidades en el proce-
la territorialidad de grupos subalternos, sujetos a so de construcción de su territorio.
relaciones de poder profundamente asimétricas.
Comunidades indígenas que ven amenazados sus Ahora bien, si la participación comunitaria a tra-
derechos sobre un territorio dado pueden enfrentar vés de la práctica cartográfica es un propósito
los asertos de un mapa oficial mediante la repre- inobjetable, no es menos cierto que el mejor ca-
sentación cartográfica de su propia espacialidad, de mino para alcanzar esta meta es motivo de con-
la misma manera en que una organización cam- troversia. Algunas de las corrientes de contra-ma-
pesina puede desafiar la apropiación de ciertos re- peo plantean, de manera expresa o implícita, el
cursos por parte del Estado o de un conglomerado antagonismo con la cartografía “oficial” (en su
privado a través del acto de cartografiar sus propias sentido más amplio) como único principio váli-
reivindicaciones. Como parte integral de un proce- do. En esa medida, reproducen la idea del plano
so de reapropiación del territorio, los habitantes de como instrumento de la visión panóptica sobre el
un barrio expuesto a las presiones de la gentrifica- territorio, solo que la atribuyen a aquellos mapas 31
Planos Vivos
Pescaíto
Teoría y práctica de
los Planos Vivos
Introducción:

Contra-mapeo producidos por entidades estatales o


representación cartográfica:

en Pescaíto. por gremios y organizaciones privadas.


Fotografías de Gabriela
Díaz Montealegre Solo un plano ceñido a la perspectiva
y los intereses de la comunidad estaría
bosquejo teórico

en capacidad de ofrecer –en términos


El plano y la

del conocimiento espacial– una resis-


tencia efectiva contra la ‘expropiación
cartográfica’ del territorio.

El enfoque de Planos Vivos difiere de


esta perspectiva: el compromiso con el
empoderamiento de los habitantes, lo mismo que Estado en la articulación de las relaciones de poder
la incorporación de sus experiencias y saberes al en la sociedad. Más que como aparato que repro-
análisis, no suponen la reproducción del punto duce y amplia las bases de un poder hegemónico,
de vista comunitario con exclusión de todos los Planos Vivos concibe el entramado jurídico-ins-
demás. Ya hemos subrayado aquí que el valor del titucional del Estado como arena privilegiada de
plano como herramienta de conocimiento radica conflicto, cooperación y negociación entre los di-
en la posibilidad de desentrañar relaciones so- ferentes intereses públicos, privados y comunita-
cioespaciales que, de no mediar la aproximación rios. Como herramienta de conocimiento, el plano
cartográfica, permanecerían ocultas o tenue- debe contribuir a identificar las principales líneas
mente perfiladas. Esa posibilidad descansa en no de tensión en una realidad socioespacial que está
poca medida en la capacidad que tiene el plano de constituida precisamente por esos antagonismos
explorar, contraponer y –en la medida de lo po- y esas alianzas. Si se habla aquí de un plano vivo
sible– conciliar perspectivas divergentes sobre lo es justamente porque no asume la vocería acrítica
territorial. El uso de los planos, más allá de su pro- de una perspectiva única: se trata de un plano vivo
cedencia y de la lógica de su elaboración, exhibe en cuanto busca aprehender las diferentes lógicas
un componente situacional innegable: de acuer- espaciales que, tanto en oposición como en com-
do a las circunstancias y al balance de poder del plementariedad mutua, confluyen en la construc-
momento, diferentes actores pueden emplear un ción del territorio. La figura 1 muestra la manera
mismo mapa de maneras disímiles. Más aún: una en que Planos Vivos se aproxima a dicho proceso
vez cambia la marea, esos mismos actores pueden a partir del examen de las relaciones recíprocas de
llegar a desplegar estrategias cartográficas que la “tríada fundamental”: la comunidad, las institu-
se contradicen con sus posturas anteriores. Una ciones públicas y la empresa privada.
propuesta cartográfica debe estar en capacidad de
tomarles el pulso a esos cambios. Se trata de un empeño que encara grandes retos,
como bien lo habrán podido advertir los lectores.
En este sentido, vale la pena resaltar aquí las con- Es por eso que el sistema de Planos Vivos se ha es-
clusiones de algunos de los trabajos sobre con- merado por desarrollar una metodología que sea
tra-mapeo, que indican que la cartografía ‘alterna- consecuente tanto con los postulados como con
tiva’ puede ser adoptada por una entidad estatal los objetivos aquí planteados. Sin más preámbulos,
en su aproximación particular a un problema, así llegó el momento de examinar los principales fun-
otras instituciones del mismo Estado sigan aferra- damentos metodológicos de Planos Vivos, con par-
das a la cartografía oficial. La idea de una cartogra- ticular énfasis en su aplicación al caso de Pescaíto.
fía ‘polivalente’ y ‘polisémica’, que sin renegar de su
compromiso con la participación comunitaria y la
inclusión social, no se ciñe a una perspectiva única,
32 está inscrita en una visión más amplia del papel del
pol í tica
R aiz
RP

R aiz socio -
econ ó mica
RE

ambiental
R aiz
RA

urbana
R aiz
RU

R aiz socio -
cultural
Fundamentos metodológicos de Planos el proyecto no solo se puede estancar de forma RC
Vivos y su aplicación en Pescaíto irremediable; también puede reforzar de manera
inopinada la desigualdad o agudizar la discordia
Existe un consenso fundamental en torno a la dentro de la comunidad. No menos problemático

hist ó rica
necesidad inaplazable de formular proyectos de resulta el descuido de la fase de investigación y el

R aiz
transformación urbana comprometidos plena- énfasis casi exclusivo en el diseño y la ejecución de
mente con los principios de sostenibilidad, inclu- proyectos. Períodos de investigación muy cortos o RH
sión social y participación comunitaria. Ante la simplemente inexistentes no permiten aprovechar
magnitud de los desafíos que enfrentan los cen- los potenciales y saberes locales, ni afincar la pro-
tros urbanos alrededor del mundo, ya sea que se puesta urbanística dentro del contexto ambiental,
trate de megaurbes de millones de personas o de socioeconómico y cultural en el que se desenvuel-
pequeños caseríos con un centenar de habitantes, ve la vida de la comunidad. De la mano del poco
la urgencia de encontrar respuestas que sean in- interés por la investigación exhaustiva y partici-
novadoras y a la vez respetuosas de las diferentes pativa, los períodos de ejecución extensos termi-
tradiciones se ha hecho más imperiosa que nunca. nan por favorecer la corrupción, el despilfarro y la
ineficiencia.
Ahora bien, la formulación de propuestas concre-
tas que no solo adopten estos principios sobre el El sistema de Planos Vivos ha asumido un com-
papel, sino que además redunden realmente en promiso genuino con los principios de sostenibili-
un desarrollo urbano más equilibrado, ha enfren- dad y participación: sin ellos no es posible resolver
tado no pocas dificultades. Una de las taras más las deficiencias y los problemas aquí descritos. Sin
habituales es la adopción de una óptica homoge- esos dos imperativos complementarios, la realiza-
neizadora, ciega a las particularidades y las ne- ción de proyectos arquitectónicos y urbanísticos
cesidades del lugar donde se trabaja. El resultado que coadyuven a los procesos colectivos de trans-
salta a la vista: proyectos inconsecuentes con las formación urbana resulta inviable. Son esos dos
características geográficas, socioeconómicas y principios los que garantizan la articulación y el
culturales de una población dada, condenados al diálogo entre las realidades locales y las dinámi-
fracaso por la falta de conocimiento y compren- cas globales. Como se hará evidente a lo largo de
sión de la realidad local. Otro problema que aflora estas reflexiones metodológicas, la participación y
con frecuencia es la imposibilidad de conciliar los la sostenibilidad no pueden ser entendidas como
intereses divergentes de los actores involucrados, simples requisitos puntuales que deben ser cum-
o de encontrar una plataforma adecuada para en- plidos en algún momento del trabajo. Se trata, por
cauzar conflictos y desavenencias en función de el contrario, de dos ejes que estructuran la inves-
un objetivo común. Sin una metodología sensi- tigación en sus diferentes fases y que resultan de-
ble a las formas de organización comunitaria, a terminantes en los diseños de la propuesta urbana
los liderazgos y a las dinámicas locales de poder, y arquitectónica. 33
El oficio etnográfico es consustancial a la perspectiva
multidisciplinaria de esta propuesta: ofrece una mirada
ajustada a la visión particular de la comunidad y de cada uno de
Planos Vivos
Pescaíto

los actores involucrados en la construcción del territorio”.


Teoría y práctica de
los Planos Vivos
Introducción:
metodológicos de Planos
Vivos y su aplicación
Fundamentos

Participación y sostenibilidad da: la investigación misma debe ser planteada des-


La participación comunitaria es reconocida hoy en de un comienzo como un emprendimiento partici-
día como un elemento imprescindible en los pro- pativo; uno que amplíe el espacio de reflexión y de
cesos de transformación urbana. No hay una sola acción de la comunidad y que guíe y retroalimente
institución, desde los grandes organismos inter- las etapas del trabajo. El fundamento metodológi-
nacionales hasta la más pequeña de las entidades co que busca honrar este compromiso es el de la
locales, que no proclame su voluntad de integrar a alteridad, asumida con plena consecuencia en sus
la comunidad en la toma de decisiones y en la eje- más diversas facetas. La elaboración de un Plano
cución de proyectos. La participación comunitaria Vivo es una invitación a conocer al “otro” desde
está garantizada en el ordenamiento legal y apa- el “otro” y a dejarse conocer por “los otros”, en un
rece como exigencia indispensable en las licencias ejercicio de alteridad que supone la deconstruc-
de obras públicas y de proyectos de explotación ción de las valoraciones personales y los prejuicios
de recursos a gran escala. Ahora bien, en términos socioculturales. Se trata de un proceso de obser-
prácticos la participación sigue siendo concebida en vación recíproca, basado en la empatía crítica y el
buena medida como un mal necesario: en el mejor trato cotidiano y personal, en el que los miembros
de los casos, un requisito que hay que cumplir a re- de la comunidad y los integrantes del equipo de
gañadientes; en el peor de los casos, un obstáculo investigación tienen la oportunidad de conocerse
que hay que salvar a como dé lugar. No son pocos mutuamente, sin que medien el acartonamiento ni
los gestores de proyectos urbanísticos que reducen el tono aleccionador de los que suelen adolecer los
el momento de la participación a un par de “reunio- mecanismos formales de consulta.
nes informativas” con la comunidad; reuniones que
suelen privilegiar la visión de los poderes estable- La alteridad es un redescubrimiento continuo de la
cidos, o que se limitan a abrir canales de comuni- realidad desde diferentes perspectivas. El investi-
cación para que las personas puedan ventilar sus gador de campo del sistema de Planos Vivos debe
quejas y reclamos. Algunos gestores optan incluso estar en capacidad de retraer su punto de vista para
por negociar tras bambalinas con algunas de las or- observar las situaciones desde la mirada del habi-
ganizaciones locales más influyentes, sin escatimar tante. En un segundo momento debe poder con-
ningún medio para asegurar la aprobación. Las ins- trastar su propio enfoque con las múltiples pers-
tancias de participación se convierten entonces en pectivas que ha conocido en su trato diario con la
un mero formalismo, vaciado de todo significado. comunidad: así podrá registrar el significado pro-
fundo que los pobladores les confieren a las expe-
Planos Vivos se sitúa en las antípodas de esta vi- riencias y los lugares cotidianos, por más sencillos
sión que todavía impera en el país (y no solo en él). y simples que parezcan. Esta mirada múltiple es la
La participación no puede ser confundida con el que permite identificar y sopesar las riquezas ma-
consentimiento (más o menos informado), la con- teriales e inmateriales del lugar; aquellas que de-
sulta puntual o la cooptación (más o menos abier- terminan la calidad de vida de los habitantes. No
ta). Para garantizar la participación efectiva y au- en vano, la herramienta transversal del sistema de
tónoma de la comunidad en la transformación de Planos Vivos es la etnografía. El oficio etnográfico
34 su entorno urbano, otro debe ser el punto de parti- es consustancial a la perspectiva multidisciplinaria
pol í tica
R aiz
RP

R aiz socio -
econ ó mica
El equipo de Planos Vivos en RE
el trabajo y la convivencia
con la comunidad.
Fotografías de Lourdes Ruiz

ambiental
y Mariana Gil Arboleda

R aiz
cancha de fútbol de La Castellana y frente al par- RA
que principal. Esta oficina fue sede de importan-
tes reuniones con los distintos líderes y habitantes
del sector; reuniones que permitieron profundizar

urbana
en algunas de las problemáticas identificadas por

R aiz
los miembros del equipo en sus diálogos puerta a
RU
puerta con la comunidad.

de esta propuesta: ofrece una mirada ajustada a la El énfasis en la aproximación individuo a indivi-

R aiz socio -
cultural
visión particular de la comunidad y de cada uno de duo garantiza una visión más equilibrada y ma-
los actores involucrados en la construcción del te- tizada, menos permeada por las narrativas esta-
rritorio. El ejercicio etnográfico permite contextua- blecidas y los enfoques homogeneizadores. Esa RC
lizar la memoria viva y las costumbres de los ha- premisa de trabajo es la que previene la simple re-
bitantes dentro de los procesos socioeconómicos, producción acrítica, sin beneficio de inventario, de
políticos y culturales más amplios. En el ejercicio las visiones predominantes en el lugar. Como ya

hist ó rica
de alteridad a través de la aproximación etnográfi- fue explicado más arriba, la apuesta participativa

R aiz
ca, lo mismo que en la combinación de la etnografía de Planos Vivos no supone asumir a pie juntillas la
con el análisis cartográfico de perspectiva múltiple, perspectiva local; antes bien, el empoderamiento RH
queda plasmado el compromiso participativo del de la comunidad depende de una visión integral,
sistema de Planos Vivos. Ese es el mejor antídoto que sepa articular analíticamente las diferentes
contra toda lógica que promueva la reificación del voces –lugareñas y foráneas, afines y antagóni-
territorio o lo someta a una ‘visión panóptica’. cas– que construyen el territorio: esa visión es la
que permite formular proyectos de transforma-
La realización plena del principio de alteridad ción ajustados a la realidad del lugar.
exige abandonar la investigación de gabinete: el
trabajo de campo es el principal articulador del Sin una auténtica inmersión en la vida cotidiana,
análisis y del diseño urbano, y bajo ninguna cir- los investigadores difícilmente podrán sacar pleno
cunstancia puede ser concebido como simple provecho de los canales formales de participación
apéndice auxiliar. La convivencia con la comu- y las redes institucionales existentes. Ese no es,
nidad resulta aquí fundamental. Una convivencia empero, el mayor de los problemas: sin el conoci-
sin prisas, que pueda detenerse con calma en la miento íntimo que brinda la convivencia, es im-
contemplación de lo cotidiano; una que dé tiempo posible abrir espacio en el análisis a otros grupos
para el aprendizaje genuino, ajeno a todo aire de y asociaciones informales, cuya labor es vital en
suficiencia o juicio gratuito. En el caso concreto la vida de la comunidad, pero que no se han ani-
de Pescaíto, los investigadores de campo pasaron mado a asumir un rol protagónico en la toma de
más de cuatro meses en el sector, respaldados por decisiones. De ahí el esfuerzo del sistema de Pla-
las visitas continuas de los integrantes encargados nos Vivos por identificar y entrar en contacto con
de la coordinación, la articulación de los diferentes organizaciones formales e informales en los más
ejes de la investigación y la elaboración de la pro- diversos ámbitos, desde las juntas de acción co-
puesta urbanística y arquitectónica. Cada investi- munal y las asociaciones gremiales, pasando por
gador se alojó en la casa de una familia pescaítera los centros de formación y los comités barriales,
y se encargó de tejer una red de contactos que le hasta los grupos de danza y las escuelas depor-
permitiera conocer de primera mano las expe- tivas. Tanto o más importante resulta el trabajo
riencias y los puntos de vista de diferentes miem- cercano con los líderes comunitarios, aquellos
bros de la comunidad. El equipo de campo contó comprometidos con la política local e investidos
además con una oficina de trabajo ubicada en el de algún tipo de autoridad institucional, y con
centro simbólico y urbano de Pescaíto, junto a la los líderes que aquí denominamos “humanos”: 35
Planos Vivos
Pescaíto

La investigación
puerta a puerta
como fundamento
Teoría y práctica de

de la metodología
los Planos Vivos

de Planos Vivos.
Introducción:

Fotografía de Mariana
Gil Arboleda

aquellas personas queridas y respetadas por la sido planteados hasta la fecha. Ahora
metodológicos de Planos

comunidad, depositarias de una confianza a toda bien, en no pocos casos esas mismas
prueba y fuente de inspiración para todos por nociones han introducido disyunti-
Vivos y su aplicación

sus múltiples cualidades. No ejercen poder polí- vas problemáticas a la hora de planear
Fundamentos

tico, económico o religioso, ni defienden intereses y ejecutar proyectos de renovación y


particulares en relación con los procesos comu- transformación urbana. En efecto, aún
nitarios. No generan discordia ni divisiones en la hoy son muchas las propuestas que
comunidad; por el contrario, disfrutan del cariño conciben la relación entre desarrollo
y honran la confianza de las personas. En el caso urbano y sostenibilidad como la de dos
concreto de Pescaíto, el equipo de investigación caminos separados que corren en pa-
tuvo la oportunidad de intercambiar ideas y pun- ralelo. Cada camino opera bajo su pro-
tos de vista con cerca de cuarenta organizaciones pia lógica y solo en pequeños tramos
de toda índole. Además pudo conocer de primera llegan a unirse bajo fórmulas que mi-
mano las experiencias de vida de treinta líderes, tiguen excesos o conserven remanentes
entre comunitarios y humanos. Sus conocimien- de una realidad urbana en trance de
tos, observaciones y aspiraciones constituyen uno desaparición.
de los pilares de la propuesta que ponemos aquí a
consideración de los lectores. Así, por ejemplo, un proyecto pue-
de prometer un salto cualitativo en el
Sobra advertir que la participación exige como con- crecimiento económico de un lugar,
traprestación la confidencialidad en el manejo de a costa de un impacto ambiental des-
la información. Todos los participantes son instrui- proporcionado. El componente de sos-
dos sobre sus derechos al respecto, y la utilización tenibilidad constituye aquí una suerte
de la información dentro de la plataforma, lo mis- de compensación que, en la forma de
mo que su publicación en los diferentes formatos, zonas aledañas de reserva ecológica o de obras
dependen del consentimiento por escrito de las de mitigación, viene a aliviar –ex post facto– las
personas. Aquella información que pueda afectar la peores repercusiones ambientales. Otro proyecto
privacidad, o que pueda poner en riesgo a los en- hipotético puede, por su parte, satisfacer de forma
trevistados, es tratada con todo el cuidado y toda acomodaticia y parcial criterios de sostenibilidad:
la reserva, y su almacenamiento está protegido por bien puede asumir el saneamiento y la conserva-
los estándares más altos de seguridad. ción de un sector considerado como patrimonio
cultural, pero en el proceso de renovación contra-
Al rechazar la idea de la participación como mero venir principios de equidad e inclusión social al
requisito, y asumirla en cambio como piedra an- forzar la salida de los antiguos moradores.
gular del trabajo de investigación, Planos Vivos
está en capacidad de darle nueva proyección al se- Ejemplos como los que acabamos de mencionar
gundo de sus imperativos, el de la sostenibilidad. abundan en la práctica. Hoy más que nunca es ne-
En el plano discursivo, nadie pone en tela de juicio cesario insistir en las sinergias que el desarrollo ur-
la necesidad prioritaria de formular estrategias de bano pensado desde la sostenibilidad, tanto como la
desarrollo sostenible que realmente sean dignas sostenibilidad pensada desde el desarrollo urbano,
del nombre. No obstante, en la práctica el princi- pueden desencadenar. La condición necesaria para
pio de sostenibilidad sigue muy ligado a nociones realizar ese potencial no es otra que la de la investi-
como la conservación y la mitigación de impactos. gación participativa como soporte del diseño soste-
Estas nociones son en sí mismas muy valiosas, na- nible. No se trata aquí de plantear una armonización
turalmente, y han contribuido a poner en primer absoluta entre intereses, enfoques y prioridades que
plano las consecuencias indeseadas y las secuelas pueden divergir y que en no pocas ocasiones an-
36 negativas de los modelos de desarrollo que han tagonizan abiertamente: existen indudables puntos
pol í tica
La vocación turística de la región le abre

R aiz
RP
oportunidades insospechadas a Pescaíto,
pero su aprovechamiento depende de

R aiz socio -
econ ó mica
la capacidad de vincular una gestión
comunitaria ecológicamente consciente con el RE

saneamiento y la renovación urbana”.

ambiental
R aiz
de fricción entre el crecimiento urbano una huella medioambiental negativa. La vocación RA
y la sostenibilidad, y no es fácil alcanzar turística de la región le abre oportunidades insos-
un desarrollo equilibrado que satisfaga pechadas a Pescaíto, pero su aprovechamiento
las principales necesidades y expecta- depende de la capacidad de vincular una gestión

urbana
tivas de los actores involucrados. Igual comunitaria ecológicamente consciente con el

R aiz
es evidente que la investigación parti- saneamiento y la renovación urbana.
RU
cipativa sí puede contribuir a prevenir
salidas en falso, anticipar posibles difi- En la medida en que permite sacar a la luz las rela-
cultades, tramitar a tiempo conflictos la- ciones entre la sostenibilidad ambiental del hábitat

R aiz socio -
cultural
tentes y acercar posturas a primera vista urbano y las realidades socioeconómicas, Planos
opuestas. Limitarse a apagar incendios Vivos también está en capacidad de aportar elemen-
en la fase de ejecución con instrumentos tos de juicio para orientar el potencial organizativo, RC
ad hoc de participación y sostenibilidad económico y sociocultural de una comunidad ha-
ya no es una opción viable. cia nuevas actividades. Su plataforma permite vi-
sibilizar en clave socioespacial aquellas dinámicas

hist ó rica
La investigación y la formulación de que atentan contra la equidad y la inclusión social,

R aiz
proyectos de índole participativa puede lo mismo que identificar aquellos conflictos pro-
ser conjugada con prácticas sostenibles longados que constriñen las oportunidades econó- RH
en un círculo virtuoso de transforma- micas de los habitantes. La aproximación histórica
ción urbana. Al examinar los problemas propuesta por Planos Vivos permite vincular analí-
y los potenciales ambientales a través de ticamente las transformaciones económicas con el
la experiencia de los propios habitantes, desarrollo urbano, lo mismo que sopesar sus reper-
por ejemplo, la aproximación etnográfi- cusiones en el presente: la propuesta comprometida
ca de Planos Vivos promueve un diálogo con la creación de nuevas fuentes de empleo, en la
crítico dentro de la comunidad frente al agotamien- forma de trabajo digno y significativo para los ha-
to de recursos y las prácticas depredadoras del me- bitantes, solo tendrá oportunidad de prosperar en
dio ambiente. Ese mismo diálogo facilita, a su vez, un diálogo crítico con las fuerzas socioeconómicas
la identificación de aquellas estrategias que han que han moldeado el territorio. No menos impor-
permitido un aprovechamiento de recursos adap- tante, la aproximación histórica y antropológica
tado a los condicionamientos ecológicos. La plata- de Planos Vivos pone de relieve aquellos elemen-
forma de Planos Vivos permite además combinar tos que constituyen la memoria viva y las tradicio-
los resultados de la aproximación etnográfica con nes de un lugar: los hábitos, saberes, experiencias
la valoración de la riqueza ecológica del territorio, y habilidades locales deben ser integrados en una
sustentada en múltiples recorridos sobre el terre- estrategia que les garantice nueva proyección. Este
no y en la información provista por las fuentes se- camino permite fortalecer las capacidades de los
cundarias más relevantes. En esa medida, Planos habitantes desde la experiencia misma de la co-
Vivos favorece formas de comprensión y construc- munidad, en un ejercicio que, sin desconocer en
ción del territorio comprometidas con la sostenibi- ningún caso la importancia del sistema educativo,
lidad ambiental. trasciende la definición más restringida de capital
humano en función de la educación formal y la ca-
En el caso concreto de Pescaíto, su ubicación geo- lificación laboral acreditada.
gráfica privilegiada y el arraigo de sus habitantes
le han deparado un potencial ambiental envidiable, En lo que se refiere a su dimensión socioeconómica,
pero los desafíos derivados del poblamiento espon- Pescaíto se encuentra en un período complejo de
táneo, la precariedad en la vivienda o las graves transición. Aquellas actividades que en su momen-
deficiencias en el equipamiento urbano, por ci- to definieron la vida en el sector, como por ejem-
tar tres problemas acuciantes, también han dejado plo la actividad portuaria y ferroviaria o la pesca 37
Planos Vivos
Pescaíto

La convivencia con
la comunidad: la
celebración conjunta
del Carnaval en
uno de los patios
Teoría y práctica de

de Pescaíto.
los Planos Vivos

Fotografía de Mariana
Gil Arboleda
Introducción:
metodológicos de Planos
Vivos y su aplicación
Fundamentos

artesanal, han experimentado transformaciones No obstante, la precariedad que afecta al sector


profundas o están sumidas en un declive secular. en diferentes esferas de la vida urbana, las limita-
No son pocas las incertidumbres que pescaíteros y ciones de la presencia estatal y el –por momen-
pescaíteras enfrentan de cara al futuro. En cualquier tos– bajo nivel de responsabilidad política en la ór-
caso, la investigación de Planos Vivos ha revelado bita distrital y departamental, entre otros factores,
un rico acervo sociocultural, del que los habitantes subsumen en no pocas ocasiones las estructuras
podrán echar mano para adaptarse a los cambios comunitarias bajo redes clientelistas y “microem-
que se han ido perfilando en las últimas décadas. presas” político-electorales. No son raras las oca-
La propuesta de transformación urbana que sepa siones en las que la consecución de recursos para
aprovechar y potenciar esos insumos sociocultura- una obra, lo mismo que la intervención guberna-
les tiene las mejores posibilidades de contribuir a mental en la solución de algún problema puntual,
la solución de aquellos problemas socioeconómicos dependen de mecanismos complejos de intercam-
que no dan más espera. El lector o la lectora tendrá bio clientelista. Si bien estos mecanismos pueden
la oportunidad de seguir de cerca la manera en que resultar eficaces para alcanzar objetivos inmedia-
los diferentes niveles de análisis de Planos Vivos tos, en el largo plazo socavan irreparablemente la
convergen en una propuesta de transformación ur- autonomía organizativa y la capacidad de gestión
bana comprometida con la sostenibilidad social y de las comunidades.
económica del sector.
Propuestas como la de Planos Vivos promueven el
Por otro lado, es bien sabido que la sostenibilidad fortalecimiento de las redes y liderazgos locales,
ambiental, social y económica depende en no poca no solo al integrarlos como gestores (y no simples
medida del fortalecimiento de la gobernanza. No destinatarios) de los proyectos urbanísticos y ar-
en vano, uno de los pilares del enfoque participa- quitectónicos, sino además al entregarles un papel
tivo de Plano Vivos está en el trabajo mancomu- protagónico en su administración y ulterior desa-
nado: la investigación habrá logrado su cometido rrollo. La apropiación de los nuevos espacios pasa
si contribuye a fortalecer el potencial organizativo necesariamente por la consolidación de estructu-
de la comunidad y su empoderamiento frente a ras organizativas que le permitan a la comunidad
otras instancias de decisión y control. Ya adver- hacerse corresponsable de ellos y exigir de otros
timos más arriba que el énfasis de esta propuesta actores institucionales el cumplimiento de obliga-
radica en la colaboración de igual a igual tanto ciones y compromisos adquiridos.
con las organizaciones formales del lugar como
con las informales. La participación activa tanto El compromiso con la sostenibilidad en términos
de los líderes comunitarios y humanos como de la de gobernanza no se limita al involucramiento de
población en general en la concepción y ejecución las organizaciones y los liderazgos comunitarios
de proyectos es invaluable en el propósito de ga- en la concepción, construcción y administración
rantizar una transformación que sea sostenible en de proyectos concretos. Al registrar todo el pro-
términos de gobernanza. ceso de investigación y diseño en su plataforma
digital, Planos Vivos abre un espacio para que los
Pescaíto goza en este aspecto de un potencial ex- habitantes y demás actores involucrados reflexio-
traordinario: la capacidad de gestión y de lucha de nen críticamente sobre la construcción del terri-
sus gentes se ha plasmado en organizaciones ro- torio, incorporen nuevas fuentes de información a
38 bustas y en canales de participación dinámicos. la plataforma, contribuyan con un conocimiento
pol í tica
[…] Planos Vivos respalda la continuidad en el debate

R aiz
público y el seguimiento a las políticas urbanas. La RP

plataforma facilita […] la comunicación entre diversos

R aiz socio -
econ ó mica
actores, la toma de decisiones concertada y una rendición
de cuentas más transparente en todos los temas RE

relacionados con el hábitat urbano”.

ambiental
R aiz
cada vez más integral del lugar y amplíen el cam- el papel– apelan a indicadores homogéneos y mo- RA
po de acción de sus organizaciones. La plataforma delos generales creen poder reclamar para sí mayor
constituye en este sentido un repositorio archivís- relevancia y vigencia que aquellas que responden a
tico interactivo para almacenar los aportes de los particularidades locales y criterios que no se dejan

urbana
propios habitantes o de grupos académicos, así extrapolar sin más a otros contextos.

R aiz
como los de instituciones, empresas y organismos
RU
privados y públicos. Al posibilitar un proceso de La metodoilogicología reivindica, en primera instan-
documentación activo y progresivo, en el que di- cia, un sano escepticismo frente a las pretensiones
chos aportes estén disponibles para su consulta y de validez universal de cualquier aproximación a

R aiz socio -
cultural
contrastación de forma permanente, Planos Vivos los problemas del desarrollo urbano. Una pizca de
respalda la continuidad en el debate público y el ironía –bien dosificada y carente de todo cinismo–
seguimiento a las políticas urbanas. La plataforma es indispensable a la hora de medir la distancia RC
facilita así la comunicación entre diversos actores, entre los objetivos de las recetas ecuménicas y los
la toma de decisiones concertada y una rendición resultados de su aplicación concreta. Las panaceas
de cuentas más transparente en todos los temas del urbanismo generan usualmente más problemas

hist ó rica
relacionados con el hábitat urbano. En esa medida, que soluciones, y en cualquier caso suelen obede-

R aiz
el Plano Vivo de un lugar se puede transformar en cer a estructuras de decisión rígidas y verticales,
una herramienta eficaz de gobernanza. que no consultan los intereses y las necesidades de RH
las comunidades afectadas. Dichas panaceas sue-
Tal como se desprende de las líneas precedentes, len imponer una idea sesgada de interés general en
el fomento de la participación comunitaria, la go- desmedro de la participación, la sostenibilidad y la
bernanza y la sostenibilidad depende de su arti- gobernanza. En este sentido, la metodoilogicología
culación temprana en la etapa de investigación. busca precaver contra toda metodología hermética,
Más adelante, en el aparte dedicado a la semilla impermeable al medio en el que debe ser desplega-
del sistema de Planos Vivos, abordaremos con da. Se trata de un principio que abre el horizonte
mayor detalle la manera en que estos principios de investigación a aquellas dinámicas y proble-
son integrados en las diferentes fases de la labor máticas locales que los enfoques prefabricados no
investigativa. Antes es necesario detenerse breve- saben aprehender ni valorar. La metodoilogicología
mente en el fundamento metodoilógico que orienta constituye un guiño a la inclusión de aquellos hábi-
el trabajo dentro de Planos Vivos, desde la con- tos, prácticas y percepciones locales que un marco
cepción inicial y las reuniones exploratorias con la homogeneizador e indiferenciado no consigue inte-
comunidad, pasando por la investigación partici- grar en su lógica de análisis.
pativa y la formulación de la propuesta de renova-
ción urbana, hasta su ejecución física y posterior No se trata, en ningún caso, de poner en tela de jui-
proyección en el marco de la plataforma virtual. cio el rigor en la investigación, la sistematicidad en
la recopilación de información o el cuidado en la
ilación lógica de los argumentos. La metodoilogi-
L a metodoilogicología dentro cología no es en este sentido una invitación al ma-
del sistema de P lanos Vivos nejo puramente intuitivo de la información (otra
Una de las mayores dificultades que enfrenta la rea- cosa muy distinta es sacar el máximo provecho de
lización de proyectos sostenibles y participativos se la intuición en el trabajo investigativo). Tampoco
deriva de la pretensión de encontrar modelos uni- promueve el uso más o menos idiosincrático de
versales que garanticen resultados uniformes, inde- las herramientas de investigación, o la renuncia
pendientemente del medio geográfico, socioeconó- al razonamiento sistemático frente a las múltiples
mico y cultural en el que dichos modelos deban ser ambigüedades y contradicciones del mundo social
aplicados. El supuesto que subyace a este afán es en sus diversas dimensiones. Su punto de partida
evidente: aquellas propuestas que –al menos sobre no es la oposición entre logos y pathos. Al acuñar el 39
Planos Vivos
Pescaíto

El fútbol calle:
componente
imprescindible de “la
ley y el orden de la
Teoría y práctica de

calle” en Pescaíto.
los Planos Vivos

Fotografía de Gabriela
Introducción:

Díaz Montealegre
metodológicos de Planos
Vivos y su aplicación
Fundamentos

término, la mira estuvo puesta antes que nada en crítica: la impertinencia del humor pone a prueba
contrarrestar una mera ‘visión panóptica’ de las los asertos y las premisas de un modelo, lo obliga a
dinámicas socioespaciales, tal como fue explicado bajar de la torre de marfil y lo empuja a la calle, de
en la sección teórica de este capítulo. El éxito del donde podrá regresar, maltrecho y enriquecido a la
enfoque metodoilógico no depende de una suerte vez, a la reflexión de escritorio. En su evaluación de
de ‘ludismo analítico’ que sustraiga los fenómenos la importancia del humor –que no lo simplemente
y procesos propios de un lugar al examen racional; cómico– para la literatura, Julio Cortázar dejó unas
exige, sí, un compromiso con nuevas herramien- observaciones que bien pueden ser extendidas a las
tas que permitan acercarse con rigor a la realidad cuestiones aquí discutidas:
urbana a partir del punto de vista y la experien-
cia de sus habitantes. El caso de la elaboración del Esos valores que se dan como aceptados y que suelen
plano del brote de cólera en Londres, descrito más merecer un tal respeto de la gente, el humorista suele
arriba, señala un camino a seguir: la “investiga- destruirlos con un juego de palabras o con un chiste.
ción detectivesca de pavimento” de Snow y White- No es exactamente que los destruya pero por un mo-
head recoge el principio metodoilógico que Planos mento los hace bajar del pedestal […]. El humor puede
Vivos abandera para hacer inteligibles las lógicas ser un gran destructor pero al destruir construye. […]
territoriales locales.2 El mecanismo del humor funciona un poco así: echa
abajo valores y categorías usuales, las da vuelta, las
En la raíz misma de la aproximación metodoilógica muestra del otro lado y bruscamente puede hacer sal-
está la apuesta por el humor como herramienta de tar cosas que en la costumbre, en el hábito, en la acep-
conocimiento. Su versatilidad y agudeza permiten tación cotidiana, no veíamos o veíamos menos bien.3
revaluar conceptos en apariencia autoevidentes a
través de la simple transposición de unas letras, lo Un buen ejemplo del potencial heurístico y ana-
mismo que deconstruir discursos establecidos con lítico del humor –en su vena cortazariana– lo
solo llevar alguno de sus supuestos hasta sus últi- ofrece el concepto de “la ley y el orden de la ca-
mas consecuencias. Todo modelo de análisis tiene lle”, tal como lo emplea Jane Jacobs en su célebre
sus puntos ciegos y recurre a simplificaciones, dis- Muerte y vida de las grandes ciudades.4 A primera
torsiones y especulaciones más o menos fundadas. vista, fuera de su contexto original, el término
El desenfado metodoilógico constituye una admoni- parecería hacer alusión a la violencia (latente y
ción –no hay que dar ningún esquema de investiga- efectiva), al crimen organizado y a la anomia pre-
ción por sobrentendido– y una invitación –siempre suntamente imperantes en los antiguos barrios
será posible poner en tela de juicio los conceptos y en decadencia y en los suburbios marginales de
métodos con los que se trabaja, en un proceso de
continuo refinamiento–. La postura metodoilógica 3 Julio Cortázar, Clases de literatura. Berkeley, 1980. Bogotá: Alfaguara,
es, antes que nada, una forma de irreverencia auto- 2014, pp. 159-60
4 Véase Jane Jacobs, Muerte y vida de las grandes ciudades, traducido
del inglés por Ángel Abad y Ana Useros. Madrid: Capitán Swing Li-
2 La expresión original de Steven Johnson es “shoe-leather detective bros, 2011 [1961], p. 67. La expresión original es “street law and order”,
work”, literalmente “trabajo detectivesco de suela de zapato”. Véase su que los traductores del libro traducen como “ley y justicia callejera”,
The Ghost Map: A Street, an Epidemic and the Hidden Power of Urban y que también podría ser traducida como “seguridad ciudadana de la
Networks. Londres et al.: Penguin Books, 2008. Las observaciones aquí calle” u “orden público de la calle”. En este contexto concreto, preferi-
40 planteadas sobre el trabajo de Snow y Whitehead se basan en este libro. mos emplear una traducción literal.
Plano 1.3
Los principales espacios del fútbol

pol í tica
calle en Pescaíto

R aiz
RP

R aiz socio -
econ ó mica
RE

ambiental
R aiz
RA

urbana
R aiz
RU

R aiz socio -
cultural
RC

hist ó rica
R aiz
RH

las grandes ciudades. En no pocos lugares de las encuentros casuales entre multitudes, añade “más
grandes aglomeraciones urbanas, las únicas leyes ojos” a los que normalmente están pendientes de
vigentes parecerían ser –al menos en la percep- la calle e invita a los habitantes de las viviendas
ción de muchos habitantes, aunque no necesa- adyacentes a que dirijan su mirada al exterior. El
riamente en la de los residentes de dichos sitios– movimiento espontáneo de la calle propicia así
la del más fuerte y la del talión. Las respuestas la autorregulación ciudadana, sirve de disuasivo
reflejas a los problemas de seguridad ciudadana contra el crimen y redunda, en último término, en
suelen reducirse a condenar el “caos en las calles”, el fortalecimiento de la confianza recíproca entre
clamar por un incremento sustancial en el pie de todos los que usan y disfrutan de las aceras.
fuerza policial y contratar seguridad privada en
caso de poder costearla. La animación en la calle no constituye, por su-
puesto, una panacea, ni suplanta el despliegue
En un gesto notable de prestidigitación verbal, que razonado de la policía, pero sin los intercambios
ilustra la capacidad del humor de jugar con el doble imprevistos, casi aleatorios, que el tráfico peatonal
sentido y revelar significados insospechados, Jane provoca, la calle se despersonaliza y se convierte
Jacobs les da un nuevo giro a “la ley y el orden de en presa fácil de la delincuencia. Ninguna medida
la calle”, pues los integra dentro de su elogio de las policiva puede compensar por sí sola el alto grado
aceras como garantes de la seguridad ciudadana, de exposición al crimen de las calles despobladas,
como foro privilegiado de la vida pública y como o de aquellas carentes de una vida urbana vibrante
aulas indispensables en la educación de niños y y variada. Frente al tema de la seguridad ciudada-
niñas. La vitalidad de aquellas aceras que encau- na, ningún proyecto de renovación se puede dar
zan flujos incesantes de personas, y que facilitan el lujo de ignorar la importancia capital del tejido 41
Planos Vivos

Ninguna medida policiva puede compensar por sí


Pescaíto

sola el alto grado de exposición al crimen de las calles


despobladas, o de aquellas carentes de una vida urbana
vibrante y variada”.
Teoría y práctica de
los Planos Vivos
Introducción:

social, tal como se genera y se fortalece en la calle que precisamente contribuyen a hacer de la calle el
sostén de la seguridad ciudadana. En el capítulo 4
metodológicos de Planos

a través de “[l]a suma de todos estos contactos ca-


suales y públicos en un nivel local, la mayoría de ahondaremos en el tema de las rejas en Pescaíto; por
Vivos y su aplicación

ellos fortuitos, la mayoría propiciados por recados lo pronto debemos subrayar que si bien la sensación
Fundamentos

que la gente hace para sí misma, no por encargo”.5 de protección que ofrecen resulta incuestionable, no
es menos cierto que su instalación priva a la calle de
Sin un énfasis metodoilógico comprometido con un muchos de los “ojos” que son indispensables en la
urbanismo de abajo hacia arriba, que subraye la autorregulación de una comunidad.
relevancia de “la ley y el orden de la calle”, las pro-
puestas urbanas corren el riesgo de naufragar fren- Este déficit se ve exacerbado allí donde interven-
te a los problemas relacionados con la seguridad de ciones urbanas desafortunadas han asfixiado la di-
la comunidad y la confianza entre sus integrantes. versidad propia del intercambio en las aceras, han
En muchos casos, por cuenta de la falta de elemen- truncado el flujo de personas y han dejado las ca-
tos de juicio, a dichas propuestas no les queda más lles a merced de las actividades delictivas, tal como
remedio que desentenderse por completo de estas sucedió en el sector de El Boro. El lector o la lectora
cuestiones, como si no fueran de su incumbencia y podrá apreciar a lo largo de estas páginas la mane-
les correspondiera a otros resolverlas una vez han ra en que, a través de la pasión por el fútbol calle en
sido ejecutados los proyectos. En otros casos, el Pescaíto, el enfoque metodoilógico de Planos Vivos
desconocimiento de las dinámicas sobre el terreno busca aprovechar “la ley y el orden de la calle” para
lleva a la formulación de soluciones arquitectóni- plantear una solución urbana sostenible a un pro-
cas y urbanísticas aferradas a visiones autoritarias blema que no da más espera.
y represivas de la seguridad que, lejos de ofrecer
respuestas transformadoras, contribuyen a erosio- El enfoque interdisciplinario y ecléctico de Planos
nar aún más el tejido social. Vivos depende de un alto grado de sistematicidad,
dado que busca desentrañar las relaciones entre
Pescaíto goza en este aspecto de un potencial ini- las diferentes dimensiones de la realidad urbana.
gualable, dada la vitalidad de sus calles y la acti- Bajo ninguna circunstancia se debe concebir el
va apropiación que de ellas hacen –al menos de la principio metodoilógico como simple contraposi-
mayor parte– los habitantes en su trasegar cotidia- ción entre la esfera local y las lógicas y procesos
no. Un indicador fehaciente de la buena salud de la globales, como si se tratara de realidades mutua-
que todavía goza la vida pública sobre el asfalto la mente excluyentes o de compartimientos estancos.
constituye la práctica difundida del fútbol calle, que Precisamente porque se trata de ámbitos conecta-
representa sin lugar a dudas uno de los patrimonios dos por múltiples vasos comunicantes, es necesa-
más valiosos del sector (plano 1.3). No obstante, los rio desarrollar una metodología que, al promover
pescaíteros y las pescaíteras han acusado con cre- la inmersión en la realidad material e inmaterial
ciente intensidad los efectos de la inseguridad. El de la comunidad, haga justicia a la dimensión local
recurso a las rejas –sobre todo a aquellas tipo jau- y permita así entender sus interacciones con la di-
la– para proteger las viviendas ilustra de manera mensión global.
elocuente la percepción de vulnerabilidad frente a
las formas de criminalidad de mayor impacto en el El impacto positivo de las iniciativas urbanas, tan-
sector. Las rejas no solo ponen de manifiesto el te- to como su apropiación y posterior desarrollo por
mor generado por la inseguridad, sino que de hecho parte de la comunidad, depende de su capacidad de
la acentúan, por cuanto tienden a aislar a los ha- incluir a los pobladores como aportantes de ideas,
bitantes de los flujos y los intercambios cotidianos conocimientos, experiencias y tradiciones. Sin una
metodología que se esfuerce por estudiar a fondo
los hábitos y las costumbres locales, los proyectos
42 5 Jane Jacobs, Muerte y vida de las grandes ciudades, p. 84. de renovación urbana mantendrán –más allá de sus
D i a gr a m a d e s e r y t e n e r p a r a P e s c a í t o

pol í tica
Una herramienta de cuño metodoilógico, como el diagrama de ser y tener, ofrece una lectura más equilibrada del

R aiz
sector. El contraste de los indicadores socioeconómicos y los análisis urbanos tradicionales, por un lado, con
las opiniones de los habitantes y los resultados de la investigación etnográfica, por el otro, permite ganar una RP
perspectiva mucho más balanceada de la realidad urbana de Pescaíto.

R aiz socio -
econ ó mica
RE

ambiental
R aiz
RA

urbana
R aiz
RU

tener ser

R aiz socio -
cultural
¿Las condiciones urbanas ¿Le gusta su barrio?
RC
y socioeconómicas ¿Quiere seguir viviendo
de Pescaíto son buenas? en Pescaíto?

hist ó rica
Desde el tener podemos concluir que las condiciones urbanas No obstante, una aproximación desde el ser revela que la percep-

R aiz
son deficientes, y que la situación socioeconómica es precaria en ción de los habitantes frente al sector es mayoritariamente posi-
muchos aspectos. Se trata del sector con mayor densidad dentro tiva. Ante la pregunta: “¿Si pudiera vivir en otro barrio, se iría?”, RH
de Santa Marta, con un agudo problema de hacinamiento, como el 78 % de los hombres y el 60 % de las mujeres respondió que no
lo reflejan las encuestas del Sisbén: casi el 60 % de los encuestados lo haría. Al indagar por las razones por las que los habitantes no
vive en cuartos. La cobertura del acueducto y del alcantarillado es están dispuestos a abandonar el sector, el 62 % de los entrevis-
insuficiente, y la prestación de los servicios domiciliarios está sujeta tados dijo estar amañado y a gusto en Pescaíto, en especial por
a un sinnúmero de problemas. La carencia de redes pluviales y la la buena convivencia. No en vano, un 60 % coincidió en afirmar
obsolescencia de las de alcantarillado exponen a los habitantes de que la amabilidad de los vecinos y la buena convivencia es lo que
Pescaíto a uno de los problemas ambientales más graves de Santa conservaría y dejaría tal cual se manifiesta hoy en día.
Marta, como lo es el de las inundaciones y el colapso del sistema de
alcantarillado cuando llueve intensamente. Pese a contar con una Al contrastar estos aspectos para observar la realidad urbana de
buena oferta de colegios en el sector, el nivel educativo no es alto: Pescaíto desde el ser y desde el tener, es posible llegar a conclu-
36.7 % de los habitantes tiene algún grado de educación prima- siones más matizadas. Pese a los graves problemas urbanos y
ria y 31.3 % alguno de educación secundaria. Un 22.6 % carece de socioeconómicos que aquejan a Pescaíto, el arraigo y la buena
educación formal, y solo 9.4 % ha accedido a la educación superior. convivencia son determinantes para los pobladores al momento
La situación laboral es crítica, pues casi el 50 % de la población no de evaluar sus perspectivas, considerar su permanencia y definir
ejerce ninguna actividad laboral, y solo el 13 % tiene un trabajo esta- su futuro dentro del sector. En las páginas de este libro, el lector
ble. Un alto porcentaje de la población se encuentra en situación de o la lectora podrá ahondar en los vínculos afectivos que definen
pobreza, y más de un 95 % de los encuestados por el Sisbén percibe la calidad de vida en Pescaíto; aquellos que se nutren del contacto
menos de un salario mínimo como ingreso mensual. (El lector o la en la calle y de las reuniones en los frentes de las casas y en los
lectora encontrará en el siguiente capítulo un análisis desglosado patios, y que se fortalecen al departir en las esquinas, jugar fútbol
de los indicadores que sustentan este panorama). Estos datos coin- o celebrar durante el carnaval. La posibilidad de sopesar cabal-
ciden con las opiniones negativas que los habitantes tienen sobre mente estos elementos en el análisis depende, en último térmi-
la situación urbana y socioeconómica de Pescaíto, como pudimos no, de una aproximación etnográfica capaz de desentrañar las
constatar en la investigación etnográfica al preguntarles por los múltiples interdependencias entro lo material y lo inmaterial. En
problemas más graves del sector o por aquellas cuestiones que más este sentido, la apuesta metodoilógica del diagrama de ser y tener
les disgustan o preocupan. rinde tributo al trabajo de investigadores como Jane Jacobs, Lina
Bo Bardi o Hassan Fathy.

Diagrama de ser y tener


Metodología Planos Vivos® 43
Planos Vivos
Pescaíto

Bosquejo de la
semilla de Planos
Vivos: sus seis raíces
trabajo de Planos Vivos está articulada en torno
Teoría y práctica de

le dan arraigo en el
al estudio de los seis fundamentos de los procesos
los Planos Vivos

lugar y le permiten
Introducción:

remontarse hacia socioespaciales: las raíces ambiental, sociocultu-


lo alto para ganar ral, socioeconómica, histórica, política y urbana.
diferentes niveles
En la semilla de Planos Vivos (fig. 2), el diagrama
de abstracción
y análisis. metodológico que ilustra de manera esquemática
Metodología Planos Vivos® las diferentes fases de la investigación, los lectores
metodológicos de Planos

pueden observar la manera en que esta propuesta


profundiza paulatinamente en el conocimiento de
Vivos y su aplicación

los pobladores e incorpora las experiencias y pro-


Fundamentos

cesos que moldean su hábitat. Se trata de tres fases


buenas intenciones– el carácter de imposición ex- diferentes, que permiten a los investigadores pasar
terna. El enfoque urbanístico que quiera involucrar sucesivamente de la contextualización general del
a la población en el acto de crear, de innovar y de lugar a la contextualización detallada y de ahí a
construir debe por tanto ampliar su mirada e in- la específica, soportada por la plataforma virtual
cluir en el análisis aspectos que otras aproximacio- de Planos Vivos. El nombre del diagrama resu-
nes suelen ignorar. En ese propósito, la metodoilo- me de manera gráfica la premisa fundamental de
gicología busca contrastar y articular en el análisis esta propuesta: el Plano Vivo de un lugar no es un
información cualitativa y cuantitativa, socioeco- modelo prefabricado que puede ser trasplantado
nómica y etnográfica, estadística y testimonial, en a discreción. Sus lineamientos generales ya están
un esfuerzo por aproximarse a la realidad urbana a estructurados ab ovo, pero es solo después de que
través de indicadores que den cuenta del tener y de su semilla es sembrada en el territorio que el Plano
indicadores que abarquen el ser, tal como lo ilustra germina y empieza a desarrollarse. Sus seis raí-
el diagrama de ser y tener para Pescaíto. ces conceptuales le permiten arraigarse al suelo:
ellas nutren sus diferentes fases de crecimiento y
La i que Planos Vivos intercala en su enfoque me- le sirven de ‘polo a tierra’ a medida que se remonta
todoilógico busca, pues, sumar y no restar pers- hacia lo alto para ganar diferentes niveles de abs-
pectivas al análisis de una realidad compleja: se tracción y de análisis.
trata de incluir y poner en un primer plano las
experiencias, los saberes y las percepciones de En consonancia con la apuesta participativa, la
los habitantes en la construcción del territorio. primera fase constituye una doble aproximación
Esa es la esencia del enfoque metodoilógico: el al lugar, a partir de un barrido preliminar de in-
conocimiento del lugar a partir de la cotidiani- formación archivística, bibliográfica y digital, por
dad y los testimonios de las personas; un tipo de una parte, y a través del contacto directo con la
conocimiento que solo puede ser adquirido en el comunidad y con los actores comprometidos con
trato diario con los habitantes. A partir de ahí la la transformación urbana, por la otra. La segunda
dimensión local puede ser integrada con mayor fase corresponde a la integración del equipo de in-
provecho en perspectivas que empleen otros len- vestigación en la comunidad y al trabajo de cam-
tes de aumento para una visión más panorámica: po interdisciplinario y participativo: se trata de un
al ahondar tanto en los aspectos que definen la proceso de índole colaborativa guiado tanto por
particularidad de lo local como en su relación con las diferentes perspectivas disciplinarias como
lo global, la metodoilogicología permite la orienta- por la experiencia y los saberes de los habitantes.
ción de los proyectos hacia procesos participati- La tercera fase contempla la transcripción, la edi-
vos y sostenibles. ción, el montaje virtual y el análisis de la infor-
mación recogida en campo y su articulación en el
Plano Vivo del lugar. Así mismo incluye la iden-
L a semilla de Planos Vivos: tificación de temas o problemáticas que ameriten
diagrama metodológico investigaciones especializadas y que por lo gene-
En la búsqueda de un desarrollo urbano equilibra- ral implican el diseño y la realización del trabajo
do y sostenible, el sistema de Planos Vivos pro- de campo correspondiente. La plataforma, por su
pone un enfoque integral e interdisciplinario que parte, permite combinar enfoques cartográficos,
abarque diferentes dimensiones de la vida social y estadísticos, históricos, urbanísticos y antropoló-
44 la construcción del territorio. La metodología de gicos en la formulación de una propuesta urbana
Figura 2. La semilla
de Planos Vivos.
Metodología

pol í tica
Planos Vivos®

R aiz
RP

R aiz socio -
econ ó mica
RE

ambiental
R
M

R aiz
RA

urbana
III

R aiz
I N V E S T I G A C I Ó N Y S U s T E N TA C I Ó N

RU

R aiz socio -
A

cultural
II

RC

A
I

hist ó rica
R aiz
FASE I FASE II FASE III RH
SPV GENERAL DETALLADA ESPECÍFICA

RH RP
G G
RE
RC G
G RU RA
G RP G
G
RH RP
D D

RC RE
I nvestigaci ó n de arc h ivo y de camp o

D D
Ru RA RP
RH D RP D
D

Raíz Raíz
hi s t ó ri c a RC RE política

RU RA
RP Raíz
Raíz socio- socio-
c ult ur a l e c o n ó mi c a
Raíz Raíz
urb a n a a mbi e n ta l
Raíz
pr oy e c t u a l

RH RC RU RP RA RE RP
45
AH AP
AP
Planos Vivos
Pescaíto

AH AE

AC AE
Figura 3. Fase 1: Figura 4. Fase 2:
Análisis general de AC AA Análisis detallado de
contexto contexto
Teoría y práctica de

AU
los Planos Vivos

AU AA
Introducción:

y arquitectónica participativa, sostenible y com- de la iniciativa, así como recoger las inquietudes
metodológicos de Planos

prometida con la gobernanza. A continuación pre- y expectativas que esta genere entre la población.
sentamos una breve síntesis de las tres fases de Al final de la reunión, las organizaciones comu-
Vivos y su aplicación

investigación de Planos Vivos. nitarias firman una carta de interés y un acta de


Fundamentos

aceptación, en la que quedan especificados los


Primera fase: Contextualización general. compromisos de parte y parte.
Acercamiento, proyección y validación (fig. 3)
El primer paso en la investigación consiste en un A su regreso, el coordinador o la coordinadora pre-
barrido de información en archivos públicos y pri- para un informe preliminar de campo que registre
vados, bibliotecas, dependencias institucionales sus primeras impresiones y sus experiencias en el
y repositorios digitales con el objeto de compilar, proceso de socialización de la propuesta. A partir
seleccionar y sistematizar la información más re- de la información provista por los informes preli-
levante sobre el lugar. Los resultados prelimina- minares, el director de Planos Vivos y su equipo de
res de la investigación archivística, bibliográfica trabajo evalúan la pertinencia, la factibilidad y el
y digital son consignados en un informe que or- grado de aceptación de la propuesta entre los habi-
ganice la información de acuerdo a las seis raíces tantes. Si el proyecto es juzgado como viable según
descritas anteriormente. Este primer balance per- estos criterios, se procede a conformar un comité
mite, entre otras cosas, determinar las caracterís- de acompañamiento en cabeza de la institución o
ticas geográficas y socioeconómicas del territorio dependencia pública responsable del proyecto. Este
estudiado; identificar los principales actores co- comité está integrado por los representantes de
munitarios, privados e institucionales; evaluar la los actores y organizaciones comprometidos con
situación de orden público y seguridad, así como el enfoque general de Planos Vivos y su propues-
sopesar el impacto de los problemas sociales y ur- ta concreta de renovación urbana para el lugar. A
banos que más afectan a la comunidad. dicho comité le corresponde la aceptación formal
de la propuesta, el seguimiento de las diferentes
Con base en la información recogida en dicho in- etapas del trabajo y el acompañamiento en la solu-
forme, se procede a contactar a los actores y orga- ción de los problemas que se presenten durante el
nizaciones de mayor importancia para involucrar- proceso de investigación y ejecución del proyecto.
los en el diseño y la planeación de las diferentes
etapas de la investigación. Miembros del equipo Una vez aceptada la iniciativa, el equipo de Planos
se reúnen con funcionarios públicos, con miem- Vivos, de consuno con el comité de acompaña-
bros de organizaciones no gubernamentales, con miento y con la comunidad, organiza talleres de
empresarios y con otros representantes del sector trabajo para definir y ajustar los componentes, he-
privado para recoger sus puntos de vista y expli- rramientas e instrumentos del Plano Vivo según
carles el tipo de aproximación propugnada por las particularidades del lugar y las necesidades y
Planos Vivos. El factor crítico lo constituye en esta expectativas de los actores involucrados. El ins-
fase el primer contacto con la comunidad. Para tal trumental analítico del que puede echar mano el
efecto, el coordinador o la coordinadora del tra- sistema de Planos Vivos es muy amplio, e incluye
bajo de campo se desplaza hacia el lugar, busca investigaciones especializadas realizadas por ter-
alojamiento en una casa de familia y adelanta una ceros, documentos de archivo digitalizados, ma-
investigación de campo preliminar, con énfasis en pas confeccionados por entidades oficiales, bases
la identificación de aquellos canales que mejor sir- de datos y proyectos multimedia de origen comu-
van al propósito de socializar el proyecto. En sen- nitario. No es este el espacio para inventariarlos
das presentaciones para la comunidad en general todos en detalle ni precisar su función dentro del
y las organizaciones comunitarias en particular, sistema; baste por ahora con describir brevemente
el coordinador o la coordinadora debe explicar los aquellos que hacen parte de su componente básico.
46 fundamentos, los procedimientos y los propósitos Su articulación interactiva en la plataforma digital
An tóric

po álisis
Conclusiones

his

pol í tica
co
áli o
históricas

líti
sis

An

R aiz
MV

HIS
RP

T
s
ult res

AC
ale

Sit olític
N
M

T
io c o

ES
ur
P

soc dicad
IV

p
ua a
AH AP TA PR

c ió
L M
CO

In

R aiz socio -
econ ó mica
n
AC AE CO G
N OR
PRO
AU AA Figura 5. Fase 3: HAB
LID
Análisis específico de
Análisis TRA GLO Análisis
contexto sociocultural SER EDV socioeconómico
SAL
RE
MOV
LAB
RIES

soci ndica
ING
INF VIL
TIP

oe do
ua na

I
RE

ambiental
C

c ió
AT

c
CO

o
M

S rb
U

nó res
FL

ES L
t

m
R
i

NA T
T

R aiz
NO

ico
A

L AC
IEU
S
PL

T
s

SA
POT
ERD

MA
POT
CONT
EST

AIRU

RIO
DES
AG
ED
permite contrastar diferentes tipos de informa- RA

An ient
urb álisis

am
o
ción, profundizar en temas específicos o realizar
ambiental

áli al
an

b
Diagnóstico

sis
An
análisis estadísticos, por citar tres ejemplos.

urbana
>> Plano madre: Plano digital del asentamiento que

R aiz
es objeto de estudio, elaborado por los arquitec-
RU
tos responsables de la plataforma interactiva. El
plano madre es confeccionado a partir de foto- >> Encuesta socioeconómica: Con base en la infor- Figura 6. Diagrama
grafías aéreas, mapas satelitales y la cartografía mación recogida en campo, la encuesta es elabo- que sintetiza las

R aiz socio -
cultural
conclusiones en cada
existente en diferentes archivos y publicaciones. rada por una empresa de consultoría o un equipo
una de las seis raíces
Contiene la información detallada de todas las de profesionales especializados en la materia. La de la investigación de
viviendas, construcciones, vías y características encuesta socioeconómica y sus indicadores de- Planos Vivos sobre RC
geográficas del lugar, y su nivel de detalle depen- ben ser ajustados en función de las condiciones Pescaíto.
de de la cantidad de información satelital, biblio- particulares de la región, las políticas públicas,
gráfica y de archivo disponible al momento de las relaciones laborales, las necesidades de los

hist ó rica
recolectar los datos. Sobre copias del Plano Ma- actores involucrados y los temas transversales

R aiz
dre se documentan los hallazgos de campo, hasta que serán explorados en la investigación. En su
completar la variada información que nutre los diseño final, la herramienta debe responder a los RH
Planos Vivos. estándares nacionales e internacionales. Dentro
de la plataforma interactiva de un Plano Vivo
>> Fichas de infraestructura: Fichas estándar del pueden ser incorporados estudios y encuestas
sistema de Planos Vivos que sirven de base a socioeconómicas anteriores, con el debido con-
la elaboración de los distintos mapas y planos. sentimiento de los responsables. En el caso con-
Describen y analizan el espacio urbano y el en- creto de Pescaíto, el tipo de investigación acor-
torno natural a partir de criterios técnicos, his- dado con los diferentes actores y organizaciones
tóricos y antropológicos. Incluyen la visión de no dejó espacio para la elaboración propia de la
los diferentes actores de la tríada fundamental, encuesta: la información socioeconómica pre-
tal como fue descrita más arriba. sentada en el capítulo 2 de este trabajo fue ex-
traída de las fuentes secundarias más relevantes,
>> Guía de conversación etnográfica: Guía que es- debidamente referenciadas.
tructura el trabajo etnográfico en campo para
la recolección de información de índole cualita- >> Fichas de temas transversales: Fichas estándar
tiva y la construcción de los indicadores corres- del sistema Planos Vivos para el estudio de los
pondientes. La guía busca entender el sustrato temas transversales desde una mirada antropo-
humano de la comunidad: sus hábitos, costum- lógica. La lista de temas transversales por ex-
bres, sentido del humor, intereses, sueños, pro- plorar es definida a partir del estudio prelimi-
blemas y temores, entre muchos otros aspec- nar de campo, pero es ampliada en el trascurso
tos. Su horizonte es el universo inmaterial de la de la investigación, a medida que el equipo va
comunidad, aquel que determina el sentido de reconociendo nuevos temas de interés para la
pertenencia y la manera en que el territorio es elaboración del Plano Vivo. En este punto re-
vivido y resignificado constantemente por los sulta fundamental la retroalimentación con las
habitantes. A través de la selección de palabras entrevistas etnográficas, pues son las vivencias
clave, las guías permiten realizar análisis esta- cotidianas de los habitantes las que permiten
dísticos sobre aspectos cualitativos y formular identificar aquellas tradiciones y prácticas que
los balances entre ser y tener. son consustanciales a la identidad de un lugar.
Las fichas transversales son –como todas las
herramientas de un Plano Vivo– maleables y 47
El trabajo
mancomunado
con las entidades
públicas, la
empresa privada
Planos Vivos

y la comunidad.
Fotografías de Pablo Said
Pescaíto

Lissa y Mariana Gil Arboleda


Teoría y práctica de
los Planos Vivos
Introducción:

tema. La ficha de un líder humano, por ejemplo,


metodológicos de Planos

puede materializarse en un video documental,


realizado por el equipo de investigación, por el
Vivos y su aplicación

mismo líder o por un grupo de comunicaciones


Fundamentos

local. Lo que resulta definitivo, sin importar qué


formato se maneje, es la descripción humana y
cercana de la persona en relación con su historia
de vida, sus intereses, principios y valores.

>> Fichas de grupos y organizaciones comunitarios:


Fichas estándar del sistema de Planos Vivos para
conocer a profundidad la historia, el perfil y el
campo de acción de los grupos y organizacio-
nes comunitarios. Las fichas son tan maleables y
adaptables como las demás herramientas de un
Plano Vivo, y no están atadas a un único forma-
to; lo importante es que no pierdan su carácter
adaptables según las circunstancias, y pueden descriptivo, histórico y antropológico. La profun-
ser orientadas bien sea hacia lo descriptivo o didad y el contenido de la ficha pueden variar de
hacia lo técnico, dependiendo de las necesida- acuerdo a las necesidades del proyecto: en casos
des particulares del proyecto. También permiten en los que el grado de formalidad de las organi-
ahondar, desde una perspectiva cualitativa, en zaciones y su estructura administrativa sean de
las dinámicas socioeconómicas y laborales del interés para el proyecto, por ejemplo, bien vale la
lugar. En concordancia con el énfasis acordado pena ahondar en aspectos técnicos y jurídicos.
con las partes para la investigación y la propues-
ta urbana, los temas transversales investigados >> Fichas descriptivas y de catalogación del universo
en el caso de Pescaíto giraron en torno a la di- objetual: Fichas estándar del sistema de Planos
mensión cultural. Entre ellos cabe mencionar el Vivos para conocer a profundidad las manifesta-
baile, hacer la siesta, las fiestas decembrinas, el ciones cultural-objetuales del universo material
carnaval, el mototaxismo, oír música de picó6, de una comunidad. Las fichas del universo obje-
los hábitos de los jóvenes, el fútbol en la calle y la tual pueden ser empleadas en la conformación
vida en el patio. de un catálogo que contribuya a la protección de
los derechos de autor sobre productos, artefac-
>> Fichas de líderes humanos y líderes comunitarios: tos, artesanías y demás manifestaciones autén-
Fichas estándar del sistema de Planos Vivos para ticas de la cultura material de las personas del
el conocimiento profundo de los líderes en la es- común, que por lo general no cuentan con los
fera política, administrativa y organizativa, así recursos y los instrumentos necesarios para ga-
como de las personas más queridas y apreciadas rantizar este derecho sobre sus creaciones.
de la comunidad, es decir, los potenciales líderes
humanos. Las fichas de líderes humanos y líderes >> Carta de vida: Constituye la herramienta metodoi-
comunitarios pueden ser ampliadas y desarrolla- lógica por excelencia. Se trata de un documento
das de acuerdo al alcance que se le quiera dar al escrito a mano en el que las personas narran su
historia de vida y describen los acontecimientos
6 Término derivado de la palabra inglesa pickup. Se trata de un siste- que las han marcado, los valores y principios que
ma de un sonido muchísimo más potente que un equipo casero, y su las definen, los intereses y la curiosidad que las
tamaño alcanza un metro y medio de alto por uno de ancho. Son tan
potentes que prenden la fiesta donde sea, pero no permiten que los motivan, los conocimientos que poseen y la for-
48 asistentes se comuniquen entre sí con facilidad. mación autodidacta que han alcanzado, los ofi-
En los casos en los que el texto se corresponda
puntualmente con una ficha, los lectores serán

pol í tica
R aiz
advertidos al respecto: así podrán darse una RP

idea más concreta del aspecto de algunos de los

R aiz socio -
econ ó mica
instrumentos de la investigación participativa de
Planos Vivos”. RE

ambiental
R aiz
podrán darse una idea más concreta del aspecto RA
de algunos de los instrumentos de la investigación
participativa de Planos Vivos.

urbana
Definido el instrumental de investigación y acor-

R aiz
dado su alcance, el director de Planos Vivos pasa
RU
a conformar el equipo de investigación y a fijar en
un cronograma de trabajo los tiempos de ejecu-
ción. Las actividades deben estar acompasadas al

R aiz socio -
cultural
proceso general de construcción de confianza y
de conocimiento mutuo entre la comunidad y el
equipo de investigación, de tal suerte que el tipo RC
de trabajo de campo propugnado por Planos Vivos
rinda sus mayores frutos.

hist ó rica
Segunda fase: Contextualización detallada.

R aiz
Integración del equipo en la comunidad y
trabajo de campo interdisciplinario (fig. 4) RH
Una vez se han verificado los viajes de aproxima-
ción y los talleres para el ajuste de los instrumen-
tos analíticos, así como la validación y aprobación
formal de la propuesta por parte del comité de
acompañamiento y de la comunidad, los encar-
gados de la coordinación y de la investigación ar-
quitectónica de campo se instalan en el lugar para
preparar la llegada de los demás integrantes del
equipo. En una reunión con la comunidad y las or-
ganizaciones comunitarias, a la que son invitados
los principales actores y aliados del proyecto, el
coordinador o la coordinadora de campo presen-
ta formalmente a cada uno de los miembros del
cios que han ejercido y los servicios que han pres- equipo de trabajo. Durante el encuentro se explica
tado, todo esto desde su propia voz, lenguaje y detalladamente el proceso de investigación, con
tono. La carta de vida abre posibilidades inéditas énfasis en las tareas y responsabilidades de la co-
para conocer y entender a los individuos como munidad para la correcta implementación del sis-
sujetos sociales en la construcción del territorio. tema. Al cierre de la reunión, se procede a firmar
el acta que da inicio a la investigación de campo y
Cabe anotar que la gran mayoría de estos instru- al proceso de contextualización detallada del lugar
mentos no aparece aquí en el formato previsto según las raíces de la metodología de Planos Vivos.
por el sistema de Planos Vivos. Para adecuar los Cada investigador porta una copia para identifi-
resultados de la investigación a la ilación argu- carse, en caso de ser necesario, y para recibir el
mental y la estructura expositiva propias de un respaldo de la comunidad en el trabajo de campo.
libro, ha sido necesario seleccionar y sintetizar
la información proveniente de diferentes fichas e Antes de emprender el trabajo propiamente dicho,
instrumentos de investigación. En los casos en los los investigadores deben pasar unos días con sus
que el texto se corresponda puntualmente con una ‘familias adoptivas’: son ellas y sus amistades más
ficha, los lectores serán advertidos al respecto: así cercanas las que deben tener la oportunidad de 49
Planos Vivos
Pescaíto
Teoría y práctica de
los Planos Vivos
Introducción:
metodológicos de Planos
Vivos y su aplicación
Fundamentos

El diálogo, el dar el primer paso e ‘investigar’ a los integrantes este trabajo, los lectores tendrán la oportunidad
principio de alteridad del equipo. Una vez roto el hielo y construidos los de juzgar por sí mismos el valor analítico de estos
y la observación
primeros lazos de confianza, el equipo se entrega planos en el estudio de Pescaíto, particularmente
participante:
imperativos de lleno al trabajo de campo. En una primera eta- en el capítulo 4, en el que son presentadas algunas
metodológicos de pa, el arquitecto o la arquitecta de campo hace un de las muestras más representativas y de mayor
Planos Vivos. reconocimiento sobre el terreno para completar importancia para comprender el territorio y eva-
Fotografías de Luis
Miguel Marín y Gabriela
y actualizar el plano madre y realizar el corres- luar la pertinencia de la propuesta urbana.
Díaz Montealegre pondiente registro planimétrico. En el plano ma-
dre actualizado es incluida además la numeración Paralelo al levantamiento y análisis cartográfico,
de todas las viviendas del lugar, con el propósito los demás miembros del equipo adelantan el tra-
de desarrollar la investigación puerta a puerta y bajo interdisciplinario de campo en sus diferentes
hacerle el debido seguimiento. Este plano sirve de áreas: la investigación etnográfica puerta a puerta,
soporte para el estudio detallado de carácter urba- la encuesta socioeconómica, la investigación his-
no y arquitectónico, que combina el quehacer tra- tórica y de memoria viva, la aproximación antro-
dicional del oficio de arquitecto con la observación pológica a los liderazgos y las organizaciones co-
de índole histórica y antropológica: la elaboración munitarios, el sondeo de los temas transversales y
de planos de campo a mano, confeccionados en el universo objetual, lo mismo que la realización
los recorridos sobre el terreno y en compañía de de talleres y visitas a los hogares para la elabora-
los vecinos interesados, es complementada con la ción de las cartas de vida. Cada investigador cuen-
documentación del uso que los habitantes les dan ta con varias copias del plano madre actualizado
y el significado que les confieren a los espacios, y un número ilimitado de cuadernos etnográficos
a las construcciones y al entorno natural en sus para adelantar su trabajo y registrar –en cualquier
actividades diarias. Dentro del enfoque de Planos tiempo y lugar– toda la información que considere
Vivos, la labor del arquitecto o la arquitecta de pertinente. El diálogo, el principio de alteridad y la
campo sobrepasa el alcance tradicional de la in- observación participante guían su labor y definen
vestigación arquitectónica y urbanística, pues se el uso que les da a los diversos instrumentos del
empeña en entender las dinámicas socioespacia- sistema de Planos Vivos.
les no solo desde su realidad material, funcional
y técnica, sino además a partir del sentido que les Tercera fase: Contextualización
atribuyen los habitantes del lugar en relación con específica. Edición, digitalización,
sus experiencias y su memoria viva. montaje virtual y análisis (fig. 5)
Cumplida la fase de trabajo en campo, se inicia
Las copias del plano madre actualizado, emplea- el proceso de digitalización de los diferentes pla-
das en el trabajo de campo arquitectónico y ur- nos y de transcripción, edición y digitalización
banístico, deben registrar, pues, las diferentes di- del material recogido durante la investigación. Así
mensiones del tejido urbano: los usos del suelo, la mismo, se procede a identificar aquellas proble-
tipología y el desarrollo histórico de las formas de máticas que exigen una investigación especializa-
vivienda, el acceso a servicios públicos, las fuentes da y un trabajo adicional de campo. La informa-
hidrográficas, las vías, los lugares de la memoria, ción es clasificada y organizada en función de las
los recorridos habituales y lugares de encuentro raíces del modelo de Planos Vivos y posteriormen-
de los habitantes, los riesgos urbanos o los lugares te vertida en las fichas estándar del sistema. Los
de peligro del imaginario colectivo, por citar algu- dibujos, las fotografías, los documentos de archivo
50 nos de los ejemplos más relevantes. A lo largo de y demás hallazgos que ameriten su inclusión en
Presentación del
Plano Vivo de
Pescaíto en el evento

pol í tica
anual de la iniciativa

R aiz
Tras la Perla de la
América en Santa RP
Marta (2016).
Fotografías de Carlos
Felipe Montoya

R aiz socio -
econ ó mica
RE

ambiental
R aiz
RA

urbana
R aiz
RU

pios de sostenibilidad, participación y gobernanza.


En los dos últimos capítulos de este libro, el lector o

R aiz socio -
cultural
la lectora podrá apreciar la manera en que, basados
en las conclusiones del trabajo de investigación, los
diseños se alimentan de las tradiciones y hábitos RC
locales para transformar de manera innovadora el
hábitat urbano.

hist ó rica
Presentación y entrega del Plano Vivo y

R aiz
de la propuesta de renovación urbana
Con la presentación general de los principales re- RH
sultados de la investigación, del Plano Vivo y de la
propuesta urbana y arquitectónica se cierra un lar-
go ciclo de presentaciones, reuniones y discusiones
con los actores involucrados en el proceso. En el
la plataforma deben ser escaneados y anexados a caso del Plano Vivo de Pescaíto, los buenos oficios
la ficha principal. El montaje de planos, fichas y de la iniciativa Tras la Perla de la América, la Agen-
documentos en la plataforma interactiva requiere cia Francesa de Desarrollo, Findeter y el Banco In-
del trabajo en conjunto del equipo de investigación teramericano de Desarrollo hicieron posible que la
de campo, del director de Planos Vivos y del equi- presentación se diera en un marco estimulante de
po de digitalización, conformado por arquitectos discusión con los representantes de la comunidad,
especialistas en sistemas y tecnologías digitales y las entidades estatales y la empresa privada.
por auxiliares de dibujo arquitectónico.
La credibilidad frente a la comunidad es el prin-
Una vez concluida la etapa de transcripción, edición cipal activo con el que cuenta Planos Vivos. Por
y digitalización dentro de los formatos estándar, se eso, para no crear falsas expectativas, la socializa-
procede a diseñar el sistema conceptual de enlaces ción final de la propuesta solo tiene lugar después
digitales que permita recorrer virtualmente el lugar a de que su viabilidad política, legal y financiera ha
partir de su propia lógica espacial, su sentido de te- sido plenamente garantizada. Una vez los diferen-
rritorialidad y su realidad específica. La plataforma tes actores se han reafirmado en su compromiso,
invita a hacer múltiples recorridos, y es a partir de y los encargados de resolver los diferentes aspec-
este ejercicio que es posible combinar y contrastar tos para la puesta a punto han dado luz verde, se
las diferentes perspectivas ofrecidas por la carto- abre el proceso de socialización en la comunidad.
grafía, la arquitectura, la etnografía y las ciencias Dicho proceso es fundamental a la hora de garan-
humanas y sociales. En este nivel de contextualiza- tizar que los principios rectores de la investigación
ción específica, el análisis cartográfico, socioeconó- y del diseño, que hemos discutido aquí en detalle,
mico, estadístico, urbano y etnográfico posibilitado también sean observados en la fase de ejecución
por el sistema de Planos Vivos arroja las conclusio- de la propuesta urbana y en la posterior apropia-
nes y parámetros para la elaboración de una pro- ción por parte de los habitantes.
puesta de renovación comprometida con los princi- 51
Venta de frapés
en la esquina:
escena cotidiana
del “rebusque”
en Pescaíto.
Fotografía de Gabriela
Díaz Montealegre

2 Perfil urbano y
socioeconómico
de Pescaíto
Introducción

Plano 2.1
El gran Pescaíto: Ensenada Olaya Herrera (rojo), Pescaíto (verde),
Olaya Herrera (amarillo), Barrio Norte (azul), San Martín (morado) y
Villa Tabla (naranja).

6.
a

era Vía A
rr
5. Ca
a
ltern
ra a
rr e Cal
Ca le 6
8. a

Ca
ra
Av

lle
rre

7
en

Ca
ida
de
lF
er
ro
ca

11
rri

ra
l

rre
Ca

52
pol í tica
R aiz
RP

R aiz socio -
econ ó mica
RE

ambiental
R aiz
RA

urbana
R aiz
RU

R aiz socio -
cultural
Ubicado en el norte de Santa Marta, al socaire do, hablaremos expresamente del barrio de Pescaí- RC
de los cerros del Norte o cerros de Taganga en su to. Cuando nos refiramos al sector en su conjunto,
descenso al mar, Pescaíto es quizá el sector más hablaremos de Pescaíto a secas o del gran Pescaíto).
emblemático de la ciudad. El testimonio de Elías La elección de estos barrios no es arbitraria; ella

hist ó rica
Henríquez Pardo, vecino del barrio, no deja lugar a obedece al arraigado sentido de pertenencia que los

R aiz
discusión: “Imagínate tú, Pescaíto es uno de los ba- habitantes comparten, y que los lleva a declararse
rrios más viejos de la ciudad. Pescaíto y Manzana- sin asomo de duda como pescaíteros y pescaíteras RH
res son los dos únicos barrios de Santa Marta que (un gentilicio elocuente en sí mismo y que sus ha-
pueden decir que tienen su historia. Lo demás es de bitantes ostentan como una insignia). Todos son
ahorita, de un tiempo para acá, cuando la ciudad enfáticos en afirmar que Pescaíto siempre fue uno
empezó a crecer; que se venían porque había traba- solo, y que fue el paso del tiempo el que se encargó
jo, y se fueron quedando y se fueron quedando. Acá de perfilar los contornos de los diferentes barrios
se originó la ciudad, al pie de los cerros, y mira que sobre la base de una identidad común. En el hori-
se dieron cuenta y la ciudad empieza de acá con la zonte de esta investigación también está incluido el
calle 1 y la carrera 1.a”.1 barrio San Martín, así sus habitantes no se consi-
deren –ni lo hayan hecho en el pasado– como par-
Aunque no se presta a grandes malentendidos ni te integral del gran Pescaíto. Su inclusión la dictan
evoca barrios homónimos en otras ciudades del dos consideraciones fundamentales: los relatos fun-
mundo, el nombre no es completamente unívoco. dacionales de San Martín se entrelazan de forma
El término Pescaíto puede designar diferentes en- indisoluble con los de los pescaíteros e incorporan
tramados urbanos, ya sea que sea empleado como los mismos referentes espaciales y simbólicos, de la
término genérico para referirse al norte de la ciu- misma manera en que la construcción de su terri-
dad, como subdivisión administrativa (como efec- torio descansa sobre procesos socioeconómicos y
tivamente sucedió hasta el 2015 con la comuna 3 o urbanos comunes a todo el sector (plano 2.1).
comuna de Pescaíto) o como barrio propiamente
dicho, con su junta de acción comunal constituida El gran Pescaíto se compone de una zona plana,
y sus límites urbanos formalmente definidos. Para donde se encuentran Barrio Norte, Pescaíto y Olaya
los propósitos de este trabajo, el término Pescaíto Herrera, y de una zona en las ensenadas interiores
comprende los barrios de Pescaíto, Olaya Herrera, y en las laderas de los cerros que alberga los barrios
Barrio Norte, Ensenada Olaya Herrera (en adelante San Martín, Villa Tabla y Ensenada. En el sector vi-
Ensenada) y un área de poblamiento espontáneo ven más de 16 000 personas, repartidas en unas 105
conocida como Villa Tabla. (Siempre que nos refi- manzanas de forma cuadrada o rectangular, dis-
ramos al barrio como tal, en su sentido más acota- puestas en forma de damero.2 Las carreras corren

2 El dato de la población del gran Pescaíto no es oficial. Para llegar al


1 Elías Henríquez Pardo, vecino del barrio de Pescaíto, 82 años de edad. número total de habitantes, calculamos a partir de la información del 53
Entrevista: 30 de marzo de 2016. Sisbén el promedio de hogares por vivienda (1.078864) y el promedio
Plano 2.2
Usos del suelo en
Pescaíto a mano
(fragmento)
Planos Vivos
Pescaíto
socioeconómico
Perfil urbano y

de Pescaíto
Introducción

Plano 2.3
Usos del suelo en
Pescaíto

Vivienda
Comercio
Lote comercio
Infraestructura pública
Lote de propiedad
del Distrito
Educación
Hotel o estadero
Templos
Apartamentos
Arriendo
Abandonado
Puerto
Lote puerto
R Ruinas

54
pol í tica
Todos son enfáticos en afirmar que Pescaíto siempre fue

R aiz
uno solo, y que fue el paso del tiempo el que se encargó de RP

perfilar los contornos de los diferentes barrios sobre la base

R aiz socio -
econ ó mica
de una identidad común”.
RE

en sentido sur-norte, y suelen tener dimensiones Barrio Norte, Ensenada, Olaya Herrera y Pescaíto.3

ambiental
menores a las de las anchas calles que van en sen- Igualmente aprovechamos la información conteni-

R aiz
tido oriente-occidente. Los principales ejes urbanos da en la presentación del Plan parcial del puerto de
del barrio son la carrera 5.a, la calle 6, la carrera 11 y Santa Marta y área de influencia (en adelante Plan RA
la vía Alterna, paralela a la avenida del Ferrocarril. parcial del puerto) de 2015, lo mismo que los datos
El centro de Pescaíto está constituido por las man- publicados en el Expediente para la revisión ordina-
zanas ubicadas entre las calles 5 y 7 y las carreras 6.a ria del POT – componente urbano (en adelante Expe-

urbana
y 8.a. En lo que se refiere al uso del suelo, predomina diente para la revisión del POT) del mismo año.4 Por

R aiz
el residencial, si bien el uso mixto –comercial y resi- último, nos remitimos al documento preparado por
RU
dencial– es frecuente. El comercio está concentrado Aecom y la Fundación Pro-Sierra Nevada de Santa
en el sector del mercado, al sur, mientras que la in- Marta como parte del proceso de revisión del Plan
dustria está agrupada principalmente en el puerto y de Ordenamiento Territorial de la ciudad (en ade-

R aiz socio -
cultural
la zona franca al occidente. Los edificios institucio- lante Modelación del ordenamiento territorial).5 

nales y los equipamientos urbanos están concentra-
dos en el centro de Pescaíto, si bien existen algunos RC
parques y canchas deportivas distribuidos en las
zonas periféricas. Los planos 2.2 y 2.3 muestran en Estratificación y vivienda
detalle los diferentes usos del suelo en el sector.

hist ó rica
De acuerdo con los datos del Sisbén, el 84 % de

R aiz
A continuación presentaremos un primer perfil los encuestados pertenece al estrato 1. En los ca-
urbano y socioeconómico de Pescaíto. Como lo sos concretos de los barrios de Pescaíto y Barrio RH
advertimos ya en la sección metodológica de este Norte, el Plan parcial del puerto señala que un 92 %
trabajo, el tipo de investigación acordado con las de sus habitantes pertenece a dicho estrato. Estos
partes no contempló la elaboración de una encuesta datos no concuerdan con la información provista
socioeconómica propia. Los datos que presentamos por la Secretaría de Planeación de Santa Marta, tal
a continuación no pueden ser tomados, por tanto, como aparece representada cartográficamente en
como plenamente representativos, ni pueden re- Modelación del ordenamiento territorial, que clasi-
emplazar el levantamiento estadístico exhaustivo. fica la mayor parte del gran Pescaíto en el estrato
No obstante, sí permiten hacerse una idea bastante 3 y los barrios de San Martín y Ensenada en el es-
fiel de la realidad socioeconómica y urbana en Pes- trato 2. Según los datos de la Secretaría, solo Villa
caíto. El que aquí ofrecemos es un perfil en trazos Tabla y la zona alta de San Martín pertenecen al
gruesos, en el que combinamos los testimonios que estrato 1 (plano 2.4).
recogimos en nuestras entrevistas de campo con
los datos compilados por instituciones privadas u En comparación con el centro histórico, situado
organismos estatales. Parte de la información ha inmediatamente al sur, Pescaíto presenta una baja
sido ya publicada en informes de diversa índole,
pero parte de ella es inédita y se encuentra en los
3 Las encuestas fueron realizadas entre marzo de 2011 y septiembre
archivos distritales. Las diferentes fuentes que sir- de 2015. El número de encuestados: San Martín (3306 encuestados),
vieron de base para la redacción de este capítulo Barrio Norte (27 encuestados), Ensenada (199 encuestados), Olaya He-
están citadas en la bibliografía anexa, tal como fue rrera (567 encuestados) y Pescaíto (3323 encuestados). Población por
género: El 48.4 de los encuestados son hombres; el 51.6 %, mujeres.
explicado en la nota editorial; por lo pronto nos li- Edad en el momento de la encuesta: 38 % de los encuestados eran
mitaremos a nombrar aquellas que aparecen men- menores de edad, 9.8 % eran adultos mayores y 52.2 % eran adultos
cionadas aquí expresamente. En primer lugar, nos entre los 18 y 55 años. Los resultados de las encuestas no están publi-
cados. Agradecemos a la Secretaría de Planeación de la Alcaldía de
apoyamos extensamente en las encuestas del Sis- Santa Marta por habernos facilitado la información.
bén de Santa Marta para los barrios San Martín, 4 Alcaldía de Santa Marta / Sociedad Portuaria de Santa Marta / Pro-
motora Urbana de Santa Marta – Prourbana S.A.S., Plan parcial del
puerto de Santa Marta y área de influencia [presentación]. Santa Marta:
2015; Geografía Urbana Ltda., Expediente para la revisión ordinaria del
POT – componente urbano. Bogotá/Santa Marta: 2015. 

de personas por vivienda (4.68265), cifra que multiplicamos por el nú- 5 Aecom / Fundación Pro-Sierra Nevada de Santa Marta, Entregable no.
mero de viviendas registradas en el plano base de 2016 (3528 vivien- 1: Modelación del ordenamiento territorial actual basado en herramien-
das). La población estimada corresponde así a 16 520 habitantes. tas tecnológicas especializadas. Julio de 2015. 55
Localización de Pescaíto en Santa Marta
Planos Vivos
Pescaíto

densidad de edificación: en este sentido, la avenida


socioeconómico
Perfil urbano y

del Ferrocarril constituye una auténtica frontera


de Pescaíto

urbana. Esta baja densidad de edificación contras-


ta marcadamente con la alta densidad poblacional:
167 personas por hectárea en la antigua comuna 3
o de Pescaíto, según la información presentada en
Modelación del ordenamiento territorial. Ello se tra-
Dinámicas económicas,

duce, en último término, en un mayor número de


empleo, pobreza y

personas por vivienda, con los consiguientes pro-


vulnerabilidad

blemas de hacinamiento e insuficiente cobertura


de servicios públicos y equipamientos urbanos. El tan a una realidad diferente, con cerca de 90 % de
alto porcentaje de personas que viven en cuartos, sus habitantes viviendo en arriendo o en modali-
tal como lo indica la información recogida en las dades diferentes a la de la casa propia. Las encues-
encuestas del Sisbén (fig. 7), es un indicador elo- tas del Sisbén parecen confirmar el poco peso de
cuente al respecto. la vivienda propia en el sector: mientras un 11.2 %
de los encuestados vive en casa propia (ya paga o
De acuerdo a Modelación del ordenamiento territo- todavía con deuda), el 46.4 % vive en arriendo.
rial, la tenencia de vivienda propia en Pescaíto es
alta y concuerda con la tendencia general en San- Según la información recogida en las encues-
ta Marta, que registra un 75 % de familias con vi- tas del Sisbén, los materiales predominantes en
vienda propia. Los datos del Plan parcial del puerto la construcción de las paredes exteriores de las
para los barrios de Pescaíto y Barrio Norte apun- viviendas son el bloque, el ladrillo, la piedra o la
madera pulida. En cuanto a los pisos, casi el 90 %
de las viviendas tiene pisos en cemento o gravi-
Figura 7. Tipo de unidad de vivienda lla, mientras que el 5.3 % de las casas tiene piso de
arena o tierra. El 73 % de las viviendas cuenta con
una o dos alcobas, mientras que el 81.5 % de los ho-
Cuarto gares ocupa uno o dos cuartos de forma exclusiva
(incluyendo sala y comedor). En lo que se refiere a
58.9 % la preparación de alimentos, solo el 46.8 % de los
60 %
hogares encuestados tiene un lugar exclusivo para
cocinar. Entre los hogares que disponen de cocina,
Casa o un 75.8 % goza de uso exclusivo, mientras que un
50 % apartamento 24 % comparte la cocina con otros hogares.

40.6 %
40 %
Dinámicas económicas, empleo,
pobreza y vulnerabilidad
30 %
De acuerdo al diagnóstico presentado en el Plan
maestro 500 años, el turismo es el principal renglón
20 % económico en Santa Marta, por encima de la acti-
vidad comercial, portuaria y agroindustrial. En la
Otro Casa región también existe una producción considerable
tipo* indígena de banano, café y –en menor escala– yuca, ñame,
10 %
frijol, tomate y frutas. La producción ganadera es de
0.3 % 0.1 % índole extensiva, y existe también un sector avícola
en proceso de expansión. La actividad industrial se
0 % concentra principalmente en la elaboración de em-
* Sin especificar en el formulario de encuesta del Sisbén butidos y conservas, lo mismo que en la producción
56 de materiales de construcción. Ante los altos niveles
pol í tica
R aiz
RP

R aiz socio -
econ ó mica
RE

ambiental
R aiz
RA

urbana
R aiz
Plano 2.4
Estratificación en Pescaíto de acuerdo a la
Secretaría de Planeación de Santa Marta. RU
Elaboración propia basada en Aecom / Fundación
Pro-Sierra Nevada de Santa Marta, Modelación
del ordenamiento territorial (2015)

R aiz socio -
cultural
RC

hist ó rica
R aiz
RH

Estrato 1
Estrato 2
Estrato 3
Estrato 4
Institucional

57
La proliferación de
cables y mangueras:
parte integral del
paisaje urbano
en Pescaíto.
Planos Vivos

Fotografías de Gabriela
Díaz Montealegre
Pescaíto

de desempleo y subempleo, la economía informal energía eléctrica, 99.7 % de la población encuesta-


ha experimentado un crecimiento importante, so- da; alcantarillado, 62.5 %; gas natural domiciliario,
socioeconómico
Perfil urbano y

bre todo en el comercio de alimentos. Según datos 67.9 %; telefonía, 9.4 %; recolección de basuras, 95.6 %,
de Pescaíto

de la Alcaldía de Santa Marta publicados en 2013, la y acueducto, 38.2 %. Por su parte, el Plan parcial del
tasa de desempleo de Santa Marta era entonces de puerto presenta la siguiente información para los
9.8 %, pero en términos generales el empleo tendía barrios de Pescaíto y Barrio Norte: energía eléctri-
–tal como sigue tendiendo hoy en día– a ser de baja ca, 99.2 %; alcantarillado, 72.3 %; recolección de ba-
calidad, con índices altos de subempleo y una alta suras, 97.8 %, y acueducto, 66.3 % (fig. 9). Los planos
participación en la economía informal. De acuerdo 2.5 y 2.6 muestran la cobertura de servicios en el
servicios públicos

al Banco de la República, un 72.55 % de los trabaja- gran Pescaíto, de acuerdo a la información recopi-
calidad de los

dores no cotizaba en la seguridad social ni recibía lada en el trabajo de campo de Planos Vivos.
Cobertura y

prestaciones sociales, mientras que los cálculos del


Departamento Administrativo Nacional de Esta- Tal como se puede colegir de los datos, la cober-
dística (DANE) indicaban que un 64 % se encontraba tura de energía eléctrica en Pescaíto es alta –al
en situación de completa informalidad.6 menos nominalmente–, sobre todo si es compara-
da con la del acueducto y la del alcantarillado. En
Según los datos publicados en el Plan parcial del la actualidad, los cinco barrios del gran Pescaíto
puerto, al momento del estudio un 49.2 % de la po- cuentan con el servicio, que es provisto por la em-
blación de los barrios de Pescaíto y Barrio Norte presa Electrificadora del Caribe, Electricaribe. No
no ejercía ningún tipo de actividad laboral, fren-
te a un 13 % que estaba empleado, un 12.5 % ocu-
pado en oficios del hogar y un 6.9 % en busca de
trabajo. Del restante 18.4 %, la gran mayoría (17.4 %) Figura 8. Ingresos mensuales de acuerdo al Sisbén
se encontraba estudiando, 0.8 % estaba jubilado
o pensionado y un 0.2 % incapacitado. Los datos
coinciden con la información provista por el Sis- El 95.4 % de los encuestados reciben
bén, según la cual el 43.3 % de los preguntados no menos de un salario mínimo.*
ejercía ninguna actividad laboral al momento de
la encuesta, frente a un 14.7 % que tenía trabajo. De
1.3 % Más de $1 000 000
aquellos encuestados sin trabajo, un 47.2 % era me-
nor de edad y un 44.4 % estaba entre los dieciocho 2.7 % $500 000 - $1 000 000
y los sesenta años. Entre los encuestados en bus-
ca de trabajo, el 83.2 % llevaba entre un mes y tres
años desempleado. Del total de los encuestados,
un 81.7 % no percibía ingresos regulares, ya fueran
salariales, en especie o por cuenta de arriendos,
subsidios o transferencias. En lo que se refiere a
los ingresos mensuales, al momento del sondeo
un 95.4 % de los encuestados recibía menos de un
salario mínimo (fig. 8).

Cobertura y calidad de los 70.7 % $100 000 - $500 000


servicios públicos

De acuerdo a los datos del Sisbén, la cobertura


de servicios públicos en el sector es la siguiente: 18.6 % $50 000 - $100 000
6.1 % $1 - $50 000
6 Tanto la información del diagnóstico económico como los datos so-
bre desempleo e informalidad fueron extraídos de Alcaldía de Santa * Calculado sobre la base del salario mínimo mensual
Marta / ONU-Habitat, Santa Marta. Plan maestro 500 años, 1525-2025. en Colombia en 2011: $535 600
58 Santa Marta: 2013, pp. 45-53.
pol í tica
R aiz
RP

R aiz socio -
econ ó mica
RE

ambiental
R aiz
RA

obstante, cabe recalcar que la trayectoria histórica las redes ni nada. No hicieron inversiones de cables ni

urbana
de los barrios resultó determinante en la manera postes. Antes pasaba la corriente en las casas cuando

R aiz
en que cada uno terminó por acceder a él. Mien- pasábamos la energía por la vía Alterna. La tienda una
RU
tras que un conjunto residencial planeado como vez se quemó, porque la energía era muy mala. Enton-
Barrio Norte, en su calidad de proyecto urbano ces se hizo un corto y pasó a la tienda. Entonces, como
bandera para la clase obrera emergente, gozó de el alcalde de la administración de ese momento era

R aiz socio -
cultural
energía eléctrica desde sus inicios, barrios de po- amigo mío, Juan Pablo [Díaz-] Granados, solucionamos
blamiento espontáneo en las laderas de los cerros, el problema. Además ya estaba la JAC [Junta de Acción
como Villa Tabla, accedieron tardíamente al servi- Comunal]. Entonces pasé los oficios y finalmente en- RC
cio, no sin antes entrar en complejas transacciones traron [...]. Entonces entró de lleno la administración de
políticas. El testimonio de Usmar Rebolledo, líder Juan Pablo y yo firmé e hicieron las redes y los postes
comunal de Villa Tabla, es elocuente al respecto: hasta allá arriba. Pusieron dos transformadores.7

hist ó rica
R aiz
Nosotros no teníamos luz. Pasábamos era un cable. Yo Las diferentes estrategias y las sucesivas luchas en
pasé la carta a los contratistas cuando estaban cons- torno a la electricidad han dejado una impronta RH
truyendo la vía Alterna para lo de los servicios y Elec- duradera en la manera en que los habitantes de
tricaribe dijo que no tenía cobertura para acá. Entonces Pescaíto acceden al servicio. Barrios como Pescaí-
solo pusieron una red, pero era insuficiente. Ni prendía to, Barrio Norte y Olaya Herrera cuentan con una
un televisor. Nos dieron el contador, pero sin poner distribución organizada de las redes principales,
pero aun así existen varias redes secundarias sa-
turadas de cables. En San Martín, Villa Tabla y En-
Figura 9. Cobertura de servicios públicos de acuerdo al Plan parcial del puerto (2015) senada, los habitantes afirman que se presentan
varios casos de piratería, con riesgo mortal para
las personas que manipulan el cableado. En lo alto
Energía eléctrica de los barrios de los cerros, donde no ha llegado
el servicio de energía oficialmente, los postes que
99.2 % llevan los cables de energía son improvisados. Al-
gunos son de madera y otros utilizan el tejado o
Recolección de basuras árboles para llevar la energía hasta su casa. La pi-
ratería afecta la prestación del servicio y ocasiona
97.8 % bajones abruptos en la tensión, que pueden dañar
los electrodomésticos en las viviendas. La utili-
Alcantarillado zación de conexiones ilegales para alimentar los
aparatos de aire acondicionado parece ser un fe-
72.3 % nómeno extendido en el sector. Selmira Ocampo,
vecina de Olaya Herrera, cuenta que “mucha gente
Acueducto tiene los aires acondicionados con pura trampa y
cada vez se baja la luz y nos dañan los aparatos,
63.3 % como el teléfono inalámbrico que se me dañó”.8

Alcantarillado pluvial

0% 7 Usmar Rebolledo, vecino de Villa Tabla, 61 años de edad. Entrevista: 1.o de


febrero de 2016.
8 Selmira Ocampo, vecina de Olaya Herrera. Entrevista: 4 de marzo de 2016. 59
Plano 2.5
Plano de servicios
públicos en Pescaíto a
mano (fragmento)
Planos Vivos
Pescaíto
socioeconómico
Perfil urbano y

de Pescaíto
servicios públicos
calidad de los
Cobertura y

Plano 2.6
Plano de servicios
públicos en Pescaíto

Electricidad
Alcantarillado
Gas
Basuras
Agua potable
Pozo séptico
Televisión satelital
Teléfono
Postes de luz
Torres de
telecomunicación
Pozos de agua
improvisados
Rejilla recolectora
Red de aguas lluvias
Paso del acueducto
según información
de la comunidad
Recorrido de la energía
Recorrido del camión
de la basura
Paso del alcantarillado
según información
de la comunidad
Alumbrado público
Recorrido del
transporte público
Proyección de colector
de aguas residuales
Red de gas
Tapas de alcantarillado
Tapas de acueducto
60
pol í tica
R aiz
En Pescaíto, la paradoja fundamental en el manejo RP
de las aguas negras es evidente: la iniciativa particular
ha suplido la falta de un sistema planificado, pero

R aiz socio -
econ ó mica
simultáneamente contribuye a su acelerado colapso”.
RE

Los cortes de luz son frecuentes. Usmar Rebolle- mantenimiento provocan la acumulación de se-

ambiental
do comenta al respecto: “La semana pasada San dimentos y taponamientos en épocas invernales,

R aiz
Martín duró como cuatro días sin luz. Y eso que es que a su turno generan desbordamientos de aguas
un barrio al lado del puerto. ¿Cómo es eso, ah?”.9 negras en el espacio público. Los rebosamientos RA
David Ruiz Ureche, vecino de Barrio Norte, atri- recurrentes y la persistencia de malos olores son
buye los cortes a la falta de mantenimiento de las motivo de profundo malestar entre los pescaíte-
redes: “Esas redes de energía no las cuidan. Eso ros. La densificación que en los últimos años han

urbana
deben echarles agua durante toda la época seca, experimentado la ciudad en general y el sector en

R aiz
porque si no, cuando llega la lluvia, esas redes es- particular ha desbordado claramente la capacidad
RU
tán todas malas y hay cortos. Por eso es que se del sistema. En Pescaíto, la paradoja fundamental
explotan esos transformadores y se va la luz”.10 en el manejo de las aguas negras es evidente: la
Es indispensable controlar y revisar las conexio- iniciativa particular ha suplido la falta de un siste-

R aiz socio -
cultural
nes ilegales, lo mismo que ordenar y simplificar ma planificado, pero simultáneamente contribuye
la cantidad existente de cables, pues de esta forma a su acelerado colapso: “El alcantarillado lo pone
podrían ser evitados los cortes de luz que resultan cada casa; cada uno compra los tubos y los lleva RC
tan perjudiciales para la comunidad pescaítera. hasta el tubo de la calle”, indica Beatriz Vidales
Mientras tanto, los habitantes seguirán apelando Morales, vecina del barrio de Pescaíto.12 Cada vez
a diferentes mecanismos de presión para que los que se construye una casa, ya sea en los patios de

hist ó rica
arreglos sean efectuados con celeridad, ya sea ta- las antiguas viviendas de la parte baja del sector

R aiz
pando las principales vías con llantas, quemando o en los barrios de los cerros, las personas se co-
basura o bloqueándoles el carro a los técnicos de nectan al sistema de alcantarillado sin ninguna RH
Electricaribe para hacer sentir su descontento. planeación ni autorización.

En lo que concierne al alcantarillado, Pescaíto La Alcaldía comenzó la construcción de un colector


está plenamente integrado a la red de la ciudad, sanitario para Pescaíto. Su diseño original contem-
de acuerdo al plano elaborado por la Alcaldía de plaba el tendido de un ducto de tubería de cuarenta
Santa Marta.11 No obstante, tanto Villa Tabla como pulgadas de diámetro que debía conducir las aguas
las zonas altas de Ensenada y San Martín carecen negras a la Estación de Bombeo Norte, ubicada en
de cobertura. Según los datos del Sisbén, el 60 % de la zona franca del puerto. Dichos trabajos fueron
los hogares encuestados tiene el inodoro conecta- suspendidos por irregularidades en la contratación
do al alcantarillado, mientras que un 37.7 % lo tiene y dificultades en las excavaciones. Un informe de la
conectado a un pozo séptico. La existencia de más Contraloría de Santa Marta del año 2012 identifica
de un sanitario en las viviendas es excepcional; en la saturación del sistema de alcantarillado uno de
en lo que se refiere a su ubicación, el número de los problemas más graves de Pescaíto: sobre todo en
encuestados con sanitario dentro de la vivienda época de lluvias, las aguas depositadas en la Estación
es casi igual al que manifiesta tenerlo fuera de la de Bombeo Norte se devuelven por el Colector Nor-
misma. Un 60 % de los encuestados comparte el te y siguen su curso por las redes secundarias hasta
servicio de sanitario con otros hogares, mientras provocar rebosamientos en los pozos del sistema del
que el 37.6 % tiene un uso exclusivo en su hogar. sector.13 Mientras no sean llevados a buen término
los trabajos del nuevo colector de aguas negras, que
La sola cobertura teórica del alcantarillado no promete descongestionar las redes, la situación en
constituye un indicador necesariamente robusto: Pescaíto seguirá siendo apremiante.
el servicio presenta altas deficiencias, ligadas al
rebosamiento de pozos y a diferentes daños en las
redes. La obsolescencia de las tuberías y la falta de
12 Beatriz Vidales Morales, vecina del barrio de Pescaíto. Entrevista: 3 de
9 Usmar Rebolledo, vecino de Villa Tabla, 61 años de edad. Entrevista: 1.o de marzo de 2016.
febrero de 2016. 13 Contraloría Distrital de Santa Marta. Auditoría gubernamental con
10 David Ruiz Ureche, vecino de Barrio Norte. Entrevista: 28 de abril de 2016. enfoque integral, modalidad especial al servicio publico domiciliario de
11 Alcaldía de Santa Marta. Plan de ordenamiento territorial Santa Marta alcantarillado sanitario en el Distrito Turístico, Cultural e Histórico de
5.to Centenario. Documento técnico de soporte. S/d, p. 168. Santa Marta. Vigencia 2011. Santa Marta: 2012, en especial pp. 21-23. 61
Figura 10. Servicio
de acueducto:
horas de agua al 30 %
día que reciben
los habitantes de 25 .2 %
25 %
Planos Vivos

acuerdo al Sisbén

Porcentaje de la población
Pescaíto

20 %
17.3 %
15.2 %
15 %

10 %
9.6 % 9.4 %
socioeconómico
Perfil urbano y

6.0 %
5.1 % 5.6 %
de Pescaíto

5 %
2.1 % 2.1 %
0.6 % 0.2 %
0 %
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 12 13-23

Horas al día
Educación

En lo que se refiere a la red de acueducto, de acuer- y solo el 0.5 % tiene algún tipo de formación téc-
do a los planos de Metroagua, la empresa pres- nica, universitaria o de posgrado (fig. 11). Entre los
tadora del servicio, la cobertura sobre el papel es encuestados que carecen de educación formal, el
casi total, si bien en Villa Tabla y en las partes altas 21.2 % se encuentra todavía en edad escolar (seis a
de Ensenada y San Martín no existen tuberías de diecisiete años), mientras que un 33.6 % es ya ma-
distribución. No obstante, según las encuestas del yor de dieciocho años.
Sisbén, apenas un 33.3 % de los hogares obtiene el
agua del acueducto, mientras que un 29.4 % la ob- En lo que toca al analfabetismo, los cálculos del
tiene de pozos con bomba. En términos generales, DANE para el año 2005, citados por el Expedien-
el 37.3 % de los hogares abarcados por las encues- te para la revisión del POT, arrojaron una tasa de
tas se ven obligados a proveerse del líquido fuera 9.82 % entre los samarios. En el gran Pescaíto, el
de la vivienda. Ahora bien, la discordancia entre la índice de analfabetismo por manzana para dicho
cobertura teórica y el disfrute efectivo del servicio año, que se situó entre 0 y 15 %, no difirió de forma
no es el único indicador relevante; la regularidad y perceptible de la tasa media de la ciudad, si bien
la calidad en la prestación del servicio para quie- algunas manzanas aisladas presentaron un índice
nes tienen acceso a él son igualmente determinan- mayor, que osciló entre 15 y 30 % de los habitantes.
tes. En Pescaíto, el servicio presenta deficiencias
notorias: baste señalar que un 76 % de los hogares Pescaíto cuenta con más de veinte colegios de edu-
no recibe agua los siete días de la semana. En los cación primaria, de los cuales quince son privados
días en los que está disponible, más de un 90 % de y siete públicos. Tres de estos colegios (públicos to-
los hogares disfruta del servicio por diez horas o dos) tienen también secundaria; además existe un
menos (fig. 10). Al final del capítulo presentamos la colegio que ofrece únicamente educación secunda-
ficha del sistema de Planos Vivos correspondiente ria. El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar,
al servicio de acueducto en Pescaíto. por su parte, tiene un hogar infantil, alrededor de
diecisiete casas que hacen parte del programa de
Madres Comunitarias y algunas más que perte-
necen al programa Fami para mujeres gestantes y
Educación lactantes. La cobertura en términos de la distancia
a los centros educativos (formales e informales) es
Pescaíto presenta niveles elevados de escolariza- bastante alta en términos globales, tal como lo ilus-
ción infantil, pero al mismo tiempo un alto por- tra el plano 2.7: ningún hogar está a una distancia
centaje de su población total sin ningún tipo de superior a los seiscientos metros. Este indicador
educación. Según los datos reportados por el Sis- contrasta con la relativa precariedad en el equipa-
bén, un 20.8 % de los encuestados asiste a un cen- miento escolar y la escasez de material didáctico y
tro educativo, de los cuales un 85.8 % está entre los académico, tal como lo manifiestan las directivas y
cero y los diecisiete años. Ahora bien, dentro de los docentes del grueso de los establecimientos. En
este mismo rango demográfico, un 9.5 % (555 me- ese sentido, los datos arrojados por la investigación
nores de edad) no recibe educación formal. En lo etnográfica son concluyentes: la enorme mayoría
que se refiere al nivel educativo alcanzado, el 32.4 % de los habitantes anhela un espacio que permita
de los encuestados no tiene ningún nivel educati- superar las limitaciones físicas y materiales que
62 vo; el 67.1 % tiene educación primaria o secundaria, lastran la labor cultural y educativa en Pescaíto; un
Figura 11. Nivel educativo
alcanzado por la población de
Primaria Secundaria acuerdo al Sisbén

pol í tica
Ninguno

R aiz
29.7 % 37.4 % 32.4 %
RP
Técnica o tecnológica

0.2 %

R aiz socio -
econ ó mica
Universidad
RE
0.2 %

Posgrado

ambiental
0.1 %

R aiz
RA

Figuras 12 y 13. Resultados de las


entrevistas etnográficas de Planos
¿Falta un espacio para la cultura?

urbana
Vivos en relación con los espacios

R aiz
para la cultura en Pescaíto
97.3 %

100 %

RU
100 %
Porcentaje de la población

80 %

R aiz socio -
cultural
entrevistada

60 %

40 %
RC
2.7 %

20 %
0 %

0 %

hist ó rica
Sí No sabe

R aiz
Hombres Mujeres
RH

¿Cuál espacio para la cultura falta?


27 %

30 %
Porcentaje de la población

20.5 %

25 %
19.2 %

18.1 %
16.2 %

15.7 %
entrevistada

20 %
13.5 %

14.2 %
15 %

15 %

10.8 %
10.8 %

12 %
11.7 %
9.6 %

15 %
8.4 %
7.2 %

7.5 %
6.7 %

6.7 %
5.4 %
5.4 %

5.4 %

5.4 %

4.8 %

10 %
4.2 %
3.6 %

5 %
0 %
Salón o Casa de Biblioteca Salón Salón para Salón o Teatro Parque Otros
espacio de la cultura comunal talleres escuela de varios
danza música

Hombres Mujeres Total

lugar que brinde renovado impulso a la actividades trabajo los lectores podrán evaluar la manera en
de formación en su sentido más amplio, y que les que el proyecto de la “Casa de Pescaíto”, uno de los
dé una mayor proyección a las múltiples manifes- ejes de la propuesta urbana de Planos Vivos, busca
taciones culturales del sector. Las máximas priori- solventar las carencias expresadas por los habitan-
dades para los pescaíteros y las pescaíteras en ese tes y dar respuesta a sus necesidades desde el dise-
ámbito las constituyen, en orden decreciente, un ño arquitectónico, así como fortalecer el indudable
salón para la danza, una casa de la cultura y una potencial educacional y cultural del sector.
biblioteca (figs. 12 y 13). En el último capítulo de este 63
Plano 2.7
Centros educativos en Pescaíto
Planos Vivos
Pescaíto
socioeconómico
Perfil urbano y

de Pescaíto
Acueducto

Ficha 1 Acueducto

El servicio de acueducto lo presta la construcción de pozos de alta capacidad satisfechos con la prestación del servicio,
empresa Metroagua, y aunque el tendido en diferentes puntos de la ciudad. Pese a como en el caso de Lourdes Ruiz Ureche,
de las tuberías abarca la mayor parte las iniciativas gubernamentales, sectores vecina del barrio de Pescaíto: “Afortuna-
del gran Pescaíto, la irregularidad en la como Pescaíto se han visto fuertemente damente aquí no nos ha faltado el agua.
prestación del servicio genera mucha afectados por la irregularidad y la insu- Llega siempre en las madrugadas; por
insatisfacción entre los pescaíteros. Los ficiencia en la provisión de agua, así la eso nos toca tener ese pozo y de ahí la
problemas no se limitan a la escasez de infraestructura esté disponible. Eduardo subimos al tanque con motobomba. Por
agua, que se agudiza en época de sequía, Goenaga, vecino de Ensenada, asegura ejemplo, la casa de al lado no tiene agua,
sino que además se agravan por cuenta nunca haber tenido el servicio de agua en pero nosotros sí, gracias a Dios”. 2
de la mala calidad de los tubos y la cul- su casa, a pesar de que el sector cuenta
tura de consumo de muchos de los usua- con las tuberías: “Por aquí pasan las La intermitencia en el servicio y la distri-
rios. El agua de Santa Marta proviene tuberías de agua, pero está muy viejo y bución desigual del agua han tejido una
básicamente de los ríos que bajan de la el agua ya no llega hasta acá. Nos toca compleja red de tensiones, conflictos y
Sierra Nevada, que en épocas de escasez traerla de la parte más baja o comprarla”.1 solidaridades dentro de la comunidad.
de lluvias se secan. Tanto el Gobierno En efecto, no son muchos los habitan- Como bien lo indica la misma Lourdes
distrital como el Gobierno nacional tes del sector que se pueden declarar Ruiz Ureche, las diferencias en el acceso
han realizado esfuerzos más o menos
sostenidos para subsanar el desabaste- 1 Eduardo Goenaga, vecino de Ensenada, 63 años de 2 Lourdes Ruiz Ureche, vecina del barrio de Pescaíto,
cimiento, con medidas que incluyen la edad. Entrevista: 1.o de junio de 2016. 55 años de edad. Entrevista: 10 de mayo de 2016.

64
pol í tica
R aiz
RP

R aiz socio -
econ ó mica
RE
La recursividad de los
habitantes de Pescaíto para
aprovisionarse de agua.

ambiental
Fotografías de Luis Miguel Marín

R aiz
RA

urbana
R aiz
generan todo tipo de suspicacias: “La de acceso al líquido. En palabras de El agua de estas albercas, abastecidas RU
gente dice que, por decir, en una casa Selmira Ocampo, “uno aquí tiene que por pozos o por la propia empresa, es
hay motobomba y alberca y absorbe el comprar el agua a la gente que tiene los conducida a través de mangueras y

R aiz socio -
agua de las redes, entonces no deja que pozos, y de todas formas llega el recibo motobombas hasta las viviendas.

cultural
al vecino le llegue el agua, y así pasa con del agua. Me cobran por llenar la alber-
Actualmente, ante la alta exposición al
mucha gente”. 3 El agua suele llegar de quita diez mil pesos”.4
riesgo de sequía urbana, los diferentes
madrugada por espacio de unos cuantos RC
>> Otra forma de acceso al agua la cons- entes gubernamentales adelantan discu-
minutos a las casas que tienen el privi-
tituyen los carrotanques provistos por siones sobre la mejor forma de abastecer
legio de recibirla. Aquellos habitantes
la Alcaldía de Santa Marta. Después de agua a la ciudad. Se ha contemplado,
que no tienen acceso directo, apelan a

hist ó rica
de largas filas a la espera de su turno, en una primera fase, captar agua de los
distintos recursos, a saber:
los habitantes pueden finalmente llevar ríos Toribío y Córdoba, para después

R aiz
sus botellones rebosantes de agua a aprovechar en una segunda etapa la
>> Las personas pueden abrir un agujero RH
sus casas. En algunos barrios han sido del río Magdalena. Cualquier solución
cerca del contador de agua en busca de
instalados tanques y albercas comuni- depende, en último término, del com-
alguna tubería madre. Una vez la en-
tarios con capacidad de diez mil litros, promiso institucional y ciudadano con
cuentran, construyen su propia ‘noria’
que la empresa Metroagua rellena oca- el cuidado de las cuencas fluviales, la
con una motobomba y mangueras para
sionalmente. Los habitantes de Pescaíto renovación de las redes del sistema de
absorber el líquido que está en la red de
han organizado un sistema de turnos acueducto y el fomento de la cultura del
tubería. En la mayoría de casos la técni-
para acceder al agua. La misma Lourdes buen uso del agua en los usuarios.
ca funciona, pero cuando mucha gente
Ruiz Ureche afirma que “nunca me ha
la emplea al mismo tiempo, se agota
tocado ir a hacer fila para llenar un
rápidamente el agua disponible en las
balde con agua, afortunadamente. No
redes.
nos ha tocado esa tarea. Esa tarea es de
>> También pueden cavar pozos en la hombres”.5 No obstante, en el trabajo de
tierra para extraer agua subterránea. campo pudimos constatar que es sobre
La mayoría de estos pozos está en los todo en las mujeres en las que recae
patios de algunas casas y en los frentes, esta responsabilidad.
pero este método no es tan común,
>> En barrios como San Martín, Villa Ta-
porque no es fácil determinar dónde
bla y Ensenada, la elevación constituye
hay agua subterránea. El agua extraída
un obstáculo adicional para acceder a
de estos pozos es de muy mala calidad.
la poca agua del sistema de acueducto.
>> Las personas que no pueden obtener Junto a las filas y los turnos frente a los
agua a través de motobomba o pozos carrotanques o a los tanques comuni-
en la tierra deben acudir a los vecinos tarios, los vecinos de las zonas altas
que sí pueden echar mano de alguno de recurren a la construcción de albercas
estos recursos. En Pescaíto se ha conso- exclusivas para cada vivienda, asegura-
lidado un mercado informal de agua, en das con tapa y candado, en los puntos
el que los dueños de los pozos ofrecen más bajos de los respectivos barrios.
botellones de agua a quienes carecen
4 Selmira Ocampo, vecina de Olaya Herrera. Entre-
vista: 4 de marzo de 2016.
3 Ibidem. 5 Lourdes Ruiz Ureche, op. cit.
65
Edward Walhouse
Mark, Hacienda
de San Pedro
Alejandrino en Santa
Marta (1843).
Fuente: http://www.
banrepcultural.org

3 Pescaíto: desarrollo
histórico y memoria viva
Pescaíto y sus relatos fundacionales neméritos y adelantados, o de una menos heroica
y accidentada, encomendada por la autoridad de
La obsesión en los anales y en las crónicas históri- turno al arrojo modesto y calculador de agrimen-
cas por las fechas de fundación de las poblaciones sores, notarios y arquitectos. La fundación se repi-
no es gratuita: ellas representan el anhelo de darle te una y otra vez en los relatos que los pobladores
al espacio geográfico un orden racional; uno que se transmiten de generación en generación para
separe de un tajo el mundo de los humanos de su hacer inteligible su pasado y proyectarse hacia el
entorno natural. (Ya en la práctica, en el otorga- futuro: en ellos refrendan su arraigo al territorio y
miento de licencias de construcción o en el mane- construyen su identidad colectiva. Los relatos fun-
jo del tráfico, tanto el orden como la racionalidad dacionales no tienen por qué ajustarse a las con-
pueden brillar por su ausencia: lo importante aquí venciones cronológicas o históricas (aunque bien
es la idea platónica, no su materialización defi- pueden asumir con mayor o menor rigor sus fór-
ciente en la realidad). mulas, como tendremos la oportunidad de expo-
ner más adelante). Tampoco tienen que concordar
Ahora bien, la fundación de poblaciones no se ago- con registros oficiales ni vestir el ropaje de la vero-
ta con las formalidades protocolarias que rodean similitud. El suyo es el campo mutable y proteico
la colocación de la primera piedra, independiente- de la ‘semántica socioespacial’; aquella que llena
mente de que se trate de una de carácter épico, lle- de significado la pertenencia de una comunidad a
66 vada a cabo contra todos los pronósticos por be- un territorio determinado.
Plano 3.1
Jacques-Nicolas Bellin, Plano de la bahía y villa de Santa Marta (1764).

política
Fuente: http://www.bibliotecanancional.gov.co

Raiz
RP

Santa Marta no era


sino monte; desde la

Raiz socio-
económica
[carrera 10] para allá RE
era trupillo, coco, unos
playones solos. Para

a m b i e n ta l
allá [al sur] hasta la 22

Raiz
había unas casas, y unos
RA

negocios por el centro,

urbana
después todo eso, de la

Raiz
avenida [al] río, eran unas RU

fincas donde sembraban

Raiz socio-
c u lt u r a l
hortalizas, verduras”.
RC

histórica
Raiz
L as vendedoras de Taganga
Tres son las tramas maestras que hemos podido RH
identificar dentro de los relatos fundacionales de
Pescaíto, aunque son múltiples las variaciones que
En lo que sí coinciden los relatos fundacionales y cada una admite. El primer gran relato que se ocupa
los registros históricos es en reafirmar la existen- del origen del nombre tiene como protagonistas a
cia –por incipiente que sea– de un orden humano las vendedoras de pescado de Taganga en su trán-
claramente distinguible, asimilado a la retícula ur- sito por los cerros del Norte. Los pregones de las
bana. Quizá el mayor blasón de Pescaíto sea preci- vendedoras –“el pescaíto, ya llegó el pescaíto”– y la
samente el de haber sido uno de los portadores de respuesta ávida de los habitantes –“vamos pa’l pes-
ese orden urbano en la zona que ocupa la actual caíto”– no son equiparables en modo alguno a un
Santa Marta, como bien lo indica el testimonio de acta formal de fundación, pero sí le extienden –al
Carmen Martínez, vecina de Barrio Norte: “San- menos en este relato– la partida bautismal al sec-
ta Marta no era sino monte; desde la [carrera 10] tor. Las diferentes variaciones de este primer relato
para allá era trupillo, coco, unos playones solos. difieren en lo que a las rutas tomadas por las tagan-
Para allá [al sur] hasta la 22 había unas casas, y gueras y su destinación final se refiere. Aquí recoge-
unos negocios por el centro, después todo eso, de mos tres de las más representativas. En la primera,
la avenida [al] río, eran unas fincas donde sembra- tal como lo narra Margarita Brekeman, vecina de
ban hortalizas, verduras. Por el camino [de Ma- Ensenada, “antes, cuando las tagangueras venían a
matoco] encontraban todavía iguanas, armadillos, vender el pescado, se venían por los cerros hasta la
y decían que veían venados”.1 A continuación rese- [carrera] 11 con [calle] 1, donde dejaban las poncheras.
ñaremos brevemente los relatos fundacionales de La gente que se acercaba a comprar pescado decía:
Pescaíto; aquellas narraciones –a caballo entre la ‘Vamos pa’l pescaíto’ o ‘ya llegó el pescaíto’ ”.2
historia y la libre creación colectiva– que buscan
dar cuenta de su surgimiento, en abierto desafío En la segunda, tal como es relatado por Carmen
a ese “monte” agreste que mantenía cercada a la Martínez, “las tagangueras se venían por un ca-
Santa Marta de antaño. mino viejo, se tiraban cerro a cerro hasta el barrio,

1 Carmen Martínez, vecina de Barrio Norte y oriunda de Mamatoco,88 2 Margarita Brekeman, vecina de Ensenada, 90 años de edad. Entrevis-
años de edad. Entrevista: 11 de febrero de 2016. En lo que al trupillo ta: 19 de febrero de 2016.

respecta, véase la ficha correspondiente en el siguiente capítulo. 67
Plano 3.2
Playa de
Las rutas de las tagangueras hacia el antiguo Pescaíto
mercado de la plaza de San Francisco
Planos Vivos
Pescaíto

Calle 1
Villa Tabla con carrera 11
desarrollo histórico y
memoria viva
Pescaíto:

Cancha de
La Castellana
fundacionales
sus relatos
Pescaíto y

Iglesia de
Parque San Francisco
Bolívar

llegaban y se iban gritando por toda la calle ‘pes- “Plano de la bahía y villa de Santa Marta, de la cos-
caíto, llegó el pescaíto’ hasta el mercado viejo que ta y sus alrededores” de 1764 (plano 3.1), comisionado
quedaba en la plaza de San Francisco”.3 Aunque al célebre geógrafo y cartógrafo francés Jacques-Ni-
no es fácil identificar plenamente el o los “cami- colas Bellin por Gregorio de Rosales Troncoso, go-
nos viejos” a partir de la información provista por bernador de la provincia.
las personas entrevistadas, estos bien pueden ha-
cer alusión al camino colonial que unía a Taganga En la tercera variación no es un camino sino el
con Santa Marta, o al menos a uno de sus ramales. mar mismo el que trae a las tagangueras al sec-
Cabe recordar aquí que la reducción de los indí- tor, tal como lo explica Marina Villar, vecina de
genas tagangueros a pueblo se verificó de mane- Olaya Herrera: “Detrás del cerro hay una playa
ra bien temprana, y que su vínculo con la ciudad que se llama de Pescaíto; por ahí era donde las ta-
se tornó particularmente estrecho. En palabras del gangueras llegaban en cayucos con las poncheras
cronista y sacerdote Antonio Julián, “[l]as primeras de pescado, bajaban el cerro y salían a la carre-
naciones de la Tierra Firme que se rindieron volun- tera”.5 Esta versión conjuga dos de los elementos
tarias á las armas de España, y abrazaron la Reli- de mayor peso en la estructuración del espacio
gion Christiana, fueron las de los Gayras, y la de los pescaítero, como lo son el mar y los cerros. Como
Tagangas, inmediatas á la ciudad de Santa Marta”.4 se hará evidente a lo largo de este trabajo, ambos
Esta subordinación temprana se tradujo en la inser- constituyen a la vez un límite y una extensión del
ción profunda del pueblo de indios de Taganga en la territorio de Pescaíto: así como circunscriben su
órbita de la economía samaria como proveedor de trama urbana, amplían el horizonte de experien-
víveres. Del vivo intercambio entre la ciudad por- cia de sus habitantes y median sus intercambios
tuaria y su población satélite da cuenta la atención con otros espacios.
privilegiada que recibe el camino que las une en el
A partir de los diferentes testimonios orales, pre-
3 Carmen Martínez, vecina de Barrio Norte. 88 años de edad. Entrevis- sentamos en el plano 3.2 una reconstrucción de
ta: 11 de febrero de 2016.
4 Antonio Julián, La perla de la América, Provincia de Santa Marta, re-
conocida, observada y expuesta en discursos históricos por el sacerdote 5 Marina Villar, vecina de Olaya Herrera, 73 años de edad. Entrevista: 16
68 don Antonio Julián. Madrid: Antonio de Sancha, 1787, pp. 6-7. de marzo de 2016.
Plano 3.3
Las antiguas salinas y las zonas que
Playa de

política
solían ser anegadas por el mar
Pescaíto

Raiz
RP
Playa de
Boquerón

Raiz socio-
económica
Playa de
San Martín

RE

San Martín

a m b i e n ta l
Raiz
Salinas
RA

Cerro de Salinas
la Salina

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH

las posibles rutas de las tagangueras en su cami- Esta disputa simbólica se manifiesta con particu-
no hacia el antiguo mercado de la plaza de San lar intensidad en aquellos barrios que han expe-
Francisco, tomando como punto de partida la pla- rimentado un crecimiento acelerado en tiempos
ya de Pescaíto. Cabe advertir que no se trata de recientes, como en el caso de Ensenada o Villa
un inventario exhaustivo, pues si algo caracteriza Tabla y su expansión sobre los cerros. El plano 3.2
a las tagangueras del relato es la ubicuidad: las registra una de estas disputas con suma elocuen-
diferentes versiones de los pescaíteros y las pes- cia. Las versiones que coinciden en la carrera 11
caíteras refieren múltiples puntos de arribo, en un con calle 1 como punto de llegada, y que lo resal-
esfuerzo por darles a sus respectivas manzanas el tan como el paso más bajo –y por lo mismo más
lustre propio de un núcleo fundacional. Identifi- propicio– para atravesar los cerros, gozan de rai-
car en la propia calle o en la esquina de encuentro gambre indiscutible. A estas versiones se contra-
el punto de llegada de las vendedoras no es una ponen aquellas que se inclinan por una ruta que
preocupación menor: se trata de asegurarles a los desciende por Villa Tabla y desemboca en la carre-
hitos urbanos más queridos un sitial de honor en ra 7.a; variaciones que pueden ser interpretadas –al
la jerarquía espacial del imaginario colectivo. En menos en parte– como la respuesta discursiva de
último término, los habitantes se juegan las cre- un “barrio de invasión” a la precariedad relativa
denciales de ‘primeros pobladores’ en estas dispu- de su posición en el ordenamiento urbano: con su
tas simbólicas y discursivas sobre las ‘auténticas’ versión particular del relato de las vendedoras, sus
rutas de las tagangueras: se trata de un proceso habitantes pueden blindarse contra la estigmati-
de permanente resignificación y construcción del zación como advenedizos, reivindicar su perte-
espacio; uno que modifica los límites lábiles entre nencia de pleno derecho a Pescaíto y reafirmar su
‘establecidos’ y ‘forasteros’. protagonismo en la construcción del territorio.
69
Plano 3.4
Plano anexo al Memorial sobre la reedificación y fortificación
del Puerto y Ciudad de Santa Marta (1660) de Sebastián
Fernández de Gamboa. El mapa está orientado hacia
el este, con los cerros ‘colgando’ en la parte inferior. Las
Planos Vivos

salinas aparecen justo debajo del brazo rocoso del Ancón. El


Pescaíto

resaltado es nuestro.
Fuente: Banco de la República, Museo del Oro Tairona – Casa de la Aduana
desarrollo histórico y
memoria viva
Pescaíto:

fundacionales
sus relatos
Pescaíto y

L as salinas patios; le daba a uno casi casi a la cintura. Dicen


El segundo de los grandes relatos fundacionales que así era todo el barrio porque se metía el mar
está igualmente ligado al pescado, pero su trama por todas las calles como hasta la [carrera] 5.a”.7
no descansa en la comercialización sino en la pes- Rosa Rojas Manjarrez la secunda: “Todo esto que
ca misma. Según este relato, en las salinas que se es San Martín era una salina, donde se sacaba la
formaban en las zonas anegadas periódicamente sal que dejaba el agua de mar que se metía; eso era
por el mar, los pobladores aprovechaban la opor- antes de que construyeran el puerto [...] y se hacían
tunidad de pescar en las charcas salobres que la unas charcas profundas llenitas de pescados que
evaporación y la marea baja dejaban al descubierto se traían las olas y la gente se metía a pescarlos: ‘El
(plano 3.3). Tal como lo cuenta Astrid Pérez, vecina pescaíto, cogieron pescaíto’ ”.8
del barrio de Pescaíto, “existieron unas salinas en
donde están el parque y el colegio, por los lados La propia Junta de Acción Comunal de San Martín
de la iglesia, y toda la [calle] 6 por el mar. Cuando se apoya en el relato de las salinas para explicar
las charcas se secaban, quedaban unos pescaítos los orígenes del barrio, tal como quedó registrado
muriéndose por falta de agua, y los niños del ba- en su reseña histórica:
rrio jugaban a pescarlos. Entonces decían: ‘Mira
los pescaítos, vamos donde el pescaíto’ ”.6 Donde se encuentra hoy el barrio San Martín, existió
a principios de siglo 20 una salina, señalada en un p[l]
En el barrio San Martín, por otra parte, los po- ano Frances que existió desde 1764, haciendo mención
bladores refieren la existencia de unas salinas que se encontraba al Norte de la ciudad, pegada a los
formadas por el agua del mar, que corría por la cerros [...]. En 1930 el barrio se fue organizando y exis-
actual vía Alterna desde la zona ocupada hoy por tían algunas viviendas o casas hechas con cartón y
el puerto hasta estancarse en una depresión al pie pedazos de laminas de zinc, el barrio comenzó pe-
del cerro que aquí llamamos de la Salina y que gado a la falda de los cerros parte nororiental don-
en otras fuentes es denominado de la Viuda. En de hoy en día es la carrera 4a. y 5a., al otro lado se
palabras de Denis Granados Parejo, “el barrio era encontraba el terreno fangoso y salitroso y algunas
todo como un pozo, eran huecos profundos que charcas, ya que la salina se estaba secando, este sitio
cuando llovía se venía toda esa agua del cerro y
durábamos hasta ocho días sacando agua de los
7 Denis Granados Parejo, vecina de San Martín,
 74 años de edad. Entre-
vista: 24 de febrero de 2016.
70 6 Astrid Pérez, vecina del barrio de Pescaíto, 55 años de edad. Entrevis- 8 Rosa Rojas Manjarrez, vecina de San Martín, 84 años de edad. Entre-
ta: 10 de febrero de 2016.
 vista: 23 de febrero 23 de 2016.
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

El paisaje urbano era donde se echaban las basuras de la ciudad, las ba- Más allá de la discusión en torno a la naturaleza
en Santa Marta suras del mercado publico, las del matadero munici- de las salinas del norte y su capacidad producti-

urbana
en la primera
pal, las basuras del cuartel militar, hasta allí llegaba la va, es indudable que los playones y las salinas se

Raiz
mitad del siglo XX:
inundaciones por el gente para esculcar las basuras y conseguir algo para constituyeron en un referente espacial de primer
RU
mar de leva (1940; comer y algunos objetos a los cuales les daban otro orden para los pobladores. El registro fotográfico
izquierda); playones uso de acuerdo a sus necesidades, se encontraban vís- da una buena idea del paisaje que aún tenían los
y salinas (1908;
ceras, materiales, pedazos de cartón, zinc, madera, habitantes frente a sus ojos a comienzos del siglo

Raiz socio-
c u lt u r a l
derecha).
Fuentes: http://www.
colchones, botas, correas, se puede decir que eran los xx. Antes de la construcción del puerto, Pescaíto
santamartaviva.blogspot. recicladores de hoy en dia, en las charcas se pescaba estuvo expuesto a los caprichos de la marea y a
com.co y Archivo de la
Fundación Periodistas y los Pescadores tiraban sus atarrayas, cogian chivo las inundaciones periódicas producidas por el mar RC
Bolivarianos de América
cabezón, mojarra, lisa […] entre otros.9 de leva, tal como lo estuvieron otros sectores de
la ciudad adyacentes a la bahía. Si bien la cons-
No existe unanimidad absoluta sobre las salinas trucción del puerto y el proceso de urbanización

histórica
en el registro histórico. En el mapa que acompaña transformaron la relación de Pescaíto con el mar,

Raiz
el Memorial sobre la reedificación y fortificación del tanto que la pesca en las salinas pertenece ya a un
Puerto y Ciudad de Santa Marta (1660), elaborado pasado que solo el relato fundacional puede recu- RH
por el capitán Sebastián Fernández de Gamboa perar, no es menos cierto que el desarrollo urba-
después de que el pirata inglés William Goodson no de las últimas décadas ha dejado expuesto al
saqueara la ciudad en el marco de la guerra an- sector a nuevas inundaciones y desbordamientos.
glo-española de 1655-1660, aparecen claramente Como parte del sector está edificado en un terreno
delineadas las salinas del norte (plano 3.4). En la deprimido en relación con las zonas circundantes,
cartografía de la Colonia tardía las salinas siguie- Pescaíto quedó encerrado en la práctica entre los
ron siendo resaltadas como un rasgo prominente diques de la avenida del Ferrocarril, la vía Alter-
de la geografía samaria, tal como lo revela el mapa na y las carreras 1.a y 4.a. Sobre todo en su costa-
ya mencionado de Bellin de 1764 (plano 3.1). Ahora do más oriental, hacia Barrio Norte, se presentan
bien, el cronista Antonio Julián fue igualmente en- serios problemas por inundaciones y desborda-
fático en descartar la existencia de explotaciones mientos de aguas lluvias y aguas negras. Ya en
salineras de gran envergadura –que él equiparaba el capítulo precedente nos referimos a las graves
a las “salinas de tierra”, esto es, minas de sal– en deficiencias del sistema de alcantarillado en Pes-
las inmediaciones de la ciudad o incluso en cual- caíto. En el siguiente capítulo, en la presentación
quier otro lugar de la provincia, si bien no dejó de del plano de riesgos del sector, abordaremos con
reconocer que sus habitantes sabían sacar prove- mayor detenimiento el problema de inundaciones
cho de la sal marina. Según la información provis- y escorrentías.
ta por Antonio Julián, el comercio de la sal en la
provincia se concentraba en Ciénaga, de donde era
sacada por comerciantes momposinos y de otros L as haciendas
lugares en canoa.10 Cabría deducir entonces de su El tercero de los grandes relatos es recogido por la
relato que las salinas del norte no eran explotadas memoria escrita de Pescaíto: “[El Barrio Olaya He-
comercialmente, al menos no a gran escala, y que rrera] [f]ue fundado el 20 de agosto de 1930 siendo
la actividad salinera era de importancia más bien el presidente de Colombia Enrique Olaya Herrera y
secundaria en la ciudad. alcalde de Santa Marta don Manuel Julián de Mier.
Este barrio fue construido dentro de unos terrenos
baldíos del sector Pescaíto, que hacían parte de
9 Junta de Acción Comunal del barrio San Martín, Reseña histórica bar-
rio San Martín, 1967-2007. S/d, 2007, p. 1. una hacienda que pertenecía a un ciudadano fran-
10 Antonio Julián, La perla de la América, pp. 109-10. cés de apellido Campmartín, es por esa razón que 71
El desarrollo urbano de Pescaíto fue definido, en efecto,
Planos Vivos

por la transformación del sector en nodo comercial y de


Pescaíto

transporte del enclave bananero, tal como tendremos


oportunidad de examinar más adelante. Antes conviene
desarrollo histórico y

echar un vistazo al papel actual del mar y de los cerros en la


configuración del territorio pescaítero”.
memoria viva
Pescaíto:

muchas personas dicen que es el mismo barrio”.11 En la versión pescaítera, el uso notable (aunque no
A diferencia de los relatos anteriores, en los que necesariamente deliberado) del anacronismo per-
la despreocupación por un acto formal de funda- mite echar mano de una legitimidad a dos bandas.
ción (legal, religioso o de otra índole) es evidente, Al utilizar la llegada a la presidencia de Enrique
fundacionales

y en el que la aparición del sector se remonta a su Olaya Herrera como acontecimiento epónimo,
sus relatos
Pescaíto y

bautismo popular, en este tercer relato el empe- este tercer relato apela, por un lado, a la legitimi-
ño por fijar una fecha exacta constituye un guiño dad republicana en uno de sus hitos más sobre-
al canon jurídico-legal. La existencia efectiva del salientes en el siglo xx: el que en la historiografía
sector depende aquí de un acto deliberado y con- colombiana es conocido como el paso de la He-
creto que, a pesar de constituir una apropiación gemonía Conservadora (1886-1930) a la República
irregular de tierras de dominio privado, inserta a Liberal (1930-1946). Por otra parte, al recurrir a Ma-
Pescaíto en la lógica del ordenamiento territorial nuel Julián de Mier (1820-1896), alcalde de Santa
legítimo y en regla. Marta, sí, pero 80 años antes, el relato asocia el
origen del sector a una de las estirpes más influ-
Como la aparición de Pescaíto no remite aquí, yentes de la región durante la Colonia tardía y el
pues, a un poblamiento espontáneo que encuentra siglo xix. Los De Mier contaron entre sus filas con
su consolidación definitiva en la formulación un varios alcaldes de la ciudad, propietarios de ex-
nombre distintivo y de amplia aceptación, no es de tensas haciendas y empresarios con intereses en
extrañar que el nombre ‘oficial’ –Olaya Herrera– la navegación marítima y fluvial, el comercio de
se superponga al popular –Pescaíto– sin solución importación y exportación, ferrocarriles y bancos.
de continuidad. La memoria oral rinde tributo a
esta superposición, ya sea que se refiera a Pescaíto En lo que se refiere al fundo Campmartín, en las
como preexistente a su ‘refundación’ oficial, o que obras históricas que hemos tenido oportunidad de
por el contrario considere que el nombre de Pes- consultar no aparece mención alguna a una ha-
caíto se popularizó con posterioridad a la creación cienda, estancia, hato o trapiche con ese nombre
de Olaya Herrera. Esa es la versión que sostiene en la ciudad o en sus inmediaciones. Los testimo-
Hermes Llanes, vecino de Olaya Herrera: “El nom- nios orales abundan en referencias a una propie-
bre del barrio es Olaya Herrera, sino que la gente dad con ese nombre, aunque hablan de una finca
se acostumbró a decirle Pescaíto, porque las tan- y no de una hacienda. Según recuerda Carmen
gangueras pasaban vendiendo pescado y gritaban Martínez, “esa finca era una coquera de un due-
‘pescaíto’ o ‘llegó el pescaíto’; es como un apodo ño que le decían Campmartín, allí tenían frutas
del barrio, pero uno va a Planeación y el nombre también. Había un encierro y daba de lado a lado;
es Olaya Herrera”.12 Sea como fuere, no cabe duda por ahí uno no podía pasar porque el señor se po-
de que en este tercer gran relato resuenan remi- nía bravo y sacaba una escopeta: amenazaba a la
niscencias del viejo ideal colonial, en el que la fun- gente porque creía que se metían a robarse los co-
dación formal de enclaves urbanos constituía el cos”.13 Miguel Brujés, vecino de Barrio Norte, co-
principio ordenador del territorio por excelencia. rrobora la existencia de la finca (y la bonhomía) de
En el acto de desplegar los símbolos del poder real Campmartín: “Nosotros nos le metíamos al viejo
en la recién delineada plaza central y de proyectar Campmartín a robarle los cocos, porque esa finca
la cuadrícula urbana, lo mismo que en el de fijar era puro coco. Se caían también para el lado del
por escrito la fecha del acontecimiento, se consu- camino y uno los recogía, de pronto se veían otros
maba la inserción de un territorio hasta ese mo- de lado adentro y uno se volaba la cerca. Ese señor
mento agreste en un orden racional y jerárquico. salía con una escopeta como de balín, gritando.
Había que salir corriendo, porque era un tipo bra-
11 Periódico barrial Pescaíto al día, n.o 1 (2015), p. 1.
12 Hermes Llanes, vecino de Olaya Herrera, 60 años de edad. Entrevista: 13 Carmen Martínez, vecina de Barrio Norte, 88 años de edad. Entrevis-
72 13 de marzo de 2016. ta: 11 de febrero de 2016.
Plano 3.5
Playa de
Ubicación de la antigua
Pescaíto

política
finca de Campmartín

Raiz
RP

Raiz socio-
económica
Playa de
San Martín

RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC
Finca
Campmartín

histórica
Raiz
RH

vo; decía: ‘Yo matándome para que otros vengan a inserción plena en el modelo agroexportador que
llevarse el trabajo’ y nos íbamos”.14 Los vecinos si- se cristalizó en el departamento de Magdalena en
túan la finca de Campmartín en los terrenos don- torno al banano. El desarrollo urbano de Pescaíto
de actualmente están ubicados la Escuela Normal fue definido, en efecto, por la transformación del
Superior María Auxiliadora y el barrio de Miraflo- sector en nodo comercial y de transporte del en-
res, en el límite suroriental de Pescaíto (plano 3.5). clave bananero, tal como tendremos oportunidad
de examinar más adelante. Antes conviene echar
No es este el espacio para discutir si la aparición un vistazo al papel actual del mar y de los cerros
simultánea de un alcalde del siglo xix y un pre- en la configuración del territorio pescaítero.
sidente del siglo xx le hace mella al relato, o si
la presencia de un finquero armado de escopeta
basta para devolverle toda verosimilitud. Lo que
importa subrayar aquí es el cambio de decorado: La construcción del territorio
si los relatos anteriores giran en torno a la pesca,
al mar y a los cerros, en este el nexo de Pescaí-
to con el interior rural constituye el tema prin- L a bahía de Santa Marta: la
cipal. El cambio de énfasis no es casual: en él se recreación y la pesca
ve reflejado el abandono definitivo de su antigua Es indudable que los habitantes de Pescaíto privi-
condición de caserío de pescadores, así como su legian el mar como lugar de recreación y esparci-
miento por encima de cualquier otro espacio. Los
pescaíteros y las pescaíteras desarrollan desde
Miguel Brujés, vecino de Barrio Norte, 65 años de edad. Entrevista: 15
14
niños el gusto por el baño en el mar y el juego en 73
de marzo de 2016.
El mar es de todos y cualquiera tiene derecho a pescar, en
alta mar o en la bahía. Cualquiera siempre ha podido pescar,
pero en las playas donde arriman los cayucos, donde componen
Planos Vivos
Pescaíto

los chinchorros, donde hacen las enramadas, eso sí que es


como de cada quien. Entonces uno de acá no puede ir y [decir]
‘yo pesco en Taganga’, si no ha ayudado a mantener las playas, a
desarrollo histórico y

hacer las enramadas. Eso uno lo ve hoy que está bien, pero para
memoria viva

que esas playas estén así se necesitó trabajo”.


Pescaíto:

sus playas. Tomás Fuentes, vecino del barrio de Con la construcción de dos espolones de protec-
Pescaíto, recuerda que ción en 2002, la Alcaldía de la ciudad precipitó
una transformación radical en la relación de los
La construcción

cuando uno era niño, nos íbamos a [la playa de] Los samarios con la bahía; una que tomó forma de-
del territorio

Cocos un grupo de pelaos. En la semana ahorrába- finitiva con la inauguración en 2011 de la Marina
mos unos pesos y el sábado nos comprábamos queso, Internacional de Santa Marta, construida sobre el
panela y bollo, nos los llevábamos en una mochilita y espolón de la calle 22 (una obra, por demás, de in-
con eso pasábamos el día. Desde temprano salíamos grata recordación para los habitantes de Pescaíto,
patio a patio allá a la bahía por la carrera 5.a, cami- pues las inundaciones de 2010 fueron asociadas a
nábamos por toda la playa, que se veía lejos, y nos la extracción de material de construcción en in-
íbamos metiendo y nos salíamos. Allá en Los Cocos mediaciones de la quebrada La Lata). Joaquín A.
era el baño largo, y si nos daba hambre a comer bollo Zúñiga Ceballos reflexiona así sobre su impacto:
con queso y panela.15
La construcción de dos espolones permitió ganar algo
En ese entonces las playas de Santa Marta se ex- de playa y con el relleno desapareció la depresión que
tendían desde el puerto, que no comprendía más permitía que el agua chocara en el extremo sur del
que los primitivos muelles, hasta más allá del malecón. Desapareció también el espectáculo, gratui-
actual Batallón Córdoba: una extensión de mar to por cierto, para propios y visitantes, a que me he
y playa de más de veinte calles. Todavía hoy los referido en los primeros párrafos. El espolón izquier-
pescaíteros y las pescaíteras prefieren las playas do, empero, siguió creciendo, porque así fue dispues-
de la bahía a las de Taganga, así estas últimas se to, y nada más tengo que decir, y se convirtió en la
encuentren muy cerca y estén atendidas por una “Marina internacional” con capacidad para 90 ó 100 ó
ruta permanente de buses, pues las de la bahía son más yates, lo mismo da. Ésta cosa se abrió como un
las playas públicas de mayor reconocimiento y es- abanico de piedras sobre lo que creíamos era nuestra
tima. Para los pescaíteros ese espacio de la bahía playa, en la que corrimos y nadamos desde niños, y
sigue siendo un lugar entrañable, tanto como para que, junto con otras cosas, nos llenaron la cabeza con
los samarios en general. Así lo recuerda Joaquín la esperanza de que Santa Marta tenía vocación tu-
A. Zúñiga Ceballos en su crónica de la historia de rística o que era la ciudad turística por excelencia. Se
Santa Marta: vino desde el Club Santa Marta hasta llegar casi a la
línea de la calle 18. Sin duda alguna buscan consolidar
Toda la playa era un espectáculo que gozaban tanto ba- alguna forma de turismo que muy pocos saben de qué
ñistas como observadores. En el malecón, al final de la se trata o como es. El saldo de la bahía de Santa Marta
calle Santa Rita, el reventar de las olas formaba diver- quedó comprendido entre las líneas de prolongación
sas figuras con la espuma que ascendía impulsada por de la calle 18 y la calle 13; es decir, nos dejaron un pe-
la fuerza del choque. Muchos muchachos utilizaban el dacito de 5 cuadras. Qué barbaridad.17
tajamar como trampolín para lanzarse al agua, hacien-
do figuras acrobáticas con el cuerpo antes de chocar Con las diferentes obras de infraestructura de las
con la ola. Por las noches, las figuras que hacía la espu- últimas décadas, la bahía no solo cedió su lugar
ma al esparcirse en el aire resaltaban brillantes por los como sitio predilecto de recreación; también se
reflejos de luz sobre el fondo oscuro del firmamento, vio afectada como espacio privilegiado para la
haciendo el espectáculo más fascinante y atractivo.16
 pesca. Antes del auge de la actividad ferroviaria
y portuaria que acompañó el desarrollo de la in-
dustria bananera en la región, la pesca representó
15 Tomás Fuentes, vecino del barrio de Pescaíto, 94 años de edad. Entre-
vista: marzo de 2016.
16 Joaquín A. Zúñiga Ceballos, Jirones de una historia en Santa Marta.
74 Santa Marta: S/d, 2012, p. 36.
 17 Joaquín A. Zúñiga Ceballos, Jirones de una historia en Santa Marta, p. 77.
Taganga

política
Raiz
Cerro de
Cerros
la Salina
del Norrte
RP
Abras de
Santa Ana

Raiz socio-
económica
Cerro del
Veladero

El Ancón RE
Cerro de
punta Betín

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
El Ancón, las abras una actividad económica de primer orden en Pes- tensas jornadas mar adentro o bordeando la costa.
de Santa Ana y los caíto. Sus habitantes coinciden en afirmar que en Tal como lo describe Julio Rodríguez, vecino de
cerros del Norte.
el pasado la pesca artesanal era practicada por la San Martín, RC
Fuente: Elaboración
propia basada en una mayoría de los hombres, ya fuera como fuente de
imagen extraída de htttp://
www.spsm.com.co ingresos o para el consumo de sus familias. En la por todo este mar circula la sardina y el lechero; ellos
actualidad, su práctica como actividad económica buscan siempre los pozos de aguas tranquilas que no

histórica
se restringe casi exclusivamente a los pescadores tengan mucha corriente: esas playas que forman las

Raiz
de San Martín. Para la habitantes de Ensenada, ensenaditas son las que más [les] gustan. Y detrás de
por ejemplo, la pesca constituye una diversión que las sardinas llega el bonito, la albacora, el ojo gordo. RH
practican en las playas de Pescaíto y Cagabuzo. Y ahí no era sino echar los chinchorros, que la pesca
Álvaro Gómez, vecino de San Martín, recuerda era segura en cualquier momento, incluso en agosto o
que “la pesca era muy buena hasta por ahí en el con los vientos del nordeste, porque la bahía la prote-
95, que ya los celadores del puerto no dejaban que gen los cerros. Eso sí, que acá no se pasaba hambre. 20
uno entrara a pescar al Boquerón, a Taganguilla.
Ya había controles antes, pero después ya pusieron Los frutos de la pesca eran comercializados en
cámaras y ni con permiso uno podía pasar. Dije- las mismas playas del Ancón, en la bahía frente
ron que era porque estaban encontrando droga en a los muelles y en el mercado de San Francisco,
la carga y todo el que se asomara por allá debía desde donde salía pescado para Barranquilla.
llevar permisos, papeles; le tomaban el nombre, la Junto a las aguas del Ancón, los pescadores de
firma. La gente dejo de ir por allá”.18 San Martín y Pescaíto pescaban en Los Cocos
y Playa Blanca. Taganga, por el contrario, tal y
Hasta los años 60, las ensenadas de las abras de como lo afirma el mismo Julio Rodríguez, estaba
Santa Ana (en sentido restringido) constituyeron fuera de su coto de pesca:
el principal nicho de pesca: frente a las playas
de Tinglao, el Mangle, Anconcito y Taganguilla El mar es de todos y cualquiera tiene derecho a pes-
los pescadores echaban sus chinchorros (fig. 14).19 car, en alta mar o en la bahía. Cualquiera siempre
Estas playas eran ideales para los pescadores de ha podido pescar, pero en las playas donde arriman
Pescaíto y San Martín tanto por la abundancia de los cayucos, donde componen los chinchorros, don-
peces como por su cercanía, que les ahorraba ex- de hacen las enramadas, eso sí que es como de cada
quien. Entonces uno de acá no puede ir y [decir] ‘yo
pesco en Taganga’, si no ha ayudado a mantener las
18 Álvaro Gómez, vecino de San Martín, 65 años de edad. Entrevista: 28
de febrero de 2016. playas, a hacer las enramadas. Eso uno lo ve hoy que
19 Durante la era colonial, el nombre de abras de Santa Ana designa- está bien, pero para que esas playas estén así se ne-
ba las colinas que conforman el brazo rocoso del Ancón, y que se
cesitó trabajo. 21
extienden entre el cerro del Veladero y el cerro de la Salina. En su
base estuvo emplazada la ermita de Santa Ana, de la que las colinas
habrían derivado su nombre. Hoy en día, las abras de Santa Ana sir-
ven de término genérico (poco frecuente) para designar la cadena de 20 Julio Rodríguez, vecino de San Martín, 81 años de edad. Entrevista: 10
cerros que delimitan a Pescaíto en su parte más septentrional, y que de marzo de 2016.
aquí reciben el nombre de cerros del Norte. 21 Ibidem. 75
ANCÓN
Planos Vivos
Pescaíto

Anconcito SAN
MARTÍN
Figura 14. Las
Tinglao
antiguas playas del
desarrollo histórico y

Ancón, rellenadas
para dar paso a Taganguilla
la ampliación del
memoria viva

puerto.
Pescaíto:

Fuente: Elaboración
propia basada en una
imagen de Google Earth

Con las obras de ampliación del terminal maríti- Los cerros del Norte y el mar de Pescaíto
mo a partir de 1959, que culminaron con la cons- Pese a las indudables restricciones que pesan sobre
La construcción

trucción de los muelles modernos, las antiguas la pesca y la recreación en la bahía, los habitantes
del territorio

playas fueron rellenadas (años más tarde iría a del gran Pescaíto tienen motivos de sobra para no
parar allí el carbón de exportación, almacenado sentirse sometidos al más puro ostracismo, pues
Playa de
a cielo abierto) (fig. 14). Las obras del terminal es- cuentan con un privilegio del que muy pocos ba- Boquerón
tuvieron acompañadas de un largo pleito entre la rrios de la ciudad pueden enorgullecerse: su propio
ciudad y los habitantes del barrio El Ancón, que mar y sus propias playas (fig. 15). En el recuento de
estaba situado en el extremo noroccidental de la los relatos fundacionales del gran Pescaíto ya ha-
bahía y que finalmente desapareció para dar paso bíamos podido subrayar la importancia capital de
a las nuevas instalaciones. las playas en las representaciones colectivas y en la
conformación de una identidad distintiva. Este pro-
Por otra parte, a través de una acción de tutela, un ceso de apropiación simbólica alcanza su máxima
grupo de pescadores entabló en 1994 una demanda expresión en la playa de Pescaíto. El acto de nom-
por la vulneración de los derechos fundamenta- brar la playa homónima del sector les permite a los
les al debido proceso, al trabajo y a la igualdad, habitantes reafirmar su sentido de pertenencia, ex-
lo mismo que por la afectación del derecho de tender del otro lado de los cerros su territorialidad
propiedad. Según el texto de la demanda, la pesca y articular toda la faja costera al Pescaíto cismon-
artesanal que por generaciones había sido practi- tano. Desde las alturas de los cerros del Norte es
cada en el Ancón sin ningún tropiezo, enfrentaba posible comprobar la naturaleza dual del territorio
obstáculos insalvables por cuenta de las obras de pescaítero, dominado por un lado por el estruendo
ampliación del terminal marítimo. En su revisión de la vida urbana y por el otro por una naturaleza
de la acción de tutela, la Corte Constitucional apacible, dueña del paisaje.
identificó un conflicto fundamental de derechos
entre la actividad portuaria y la pesca artesanal en Entre las prácticas de apropiación de este espacio,
la bahía. Frente a los derechos reivindicados por la principal la constituye el goce y disfrute de sus
los pescadores, la Corte conceptuó que la amplia- aguas y sus recursos, tal como lo indica el testimo- Puerto de
Santa Marta
ción del puerto tenía una mayor relevancia social, nio de David Ruiz Ureche, vecino de Barrio Norte:
dados los beneficios que la economía colombiana
podía esperar de un comercio internacional inten- Eso nos íbamos con toda la familia a bañar a la playa,
sificado. El fallo a favor de Puertos de Colombia a pescar con arpón, a puro pulmón, metidos en el agua
fue fundamentado en la primacía del bien común. sin tanque de oxígeno. Había unos que sabían bucear y
La actividad pesquera de los habitantes del sec- salían con unos pescados grandes, unos lecheros bien
tor encontró nuevos nichos, sobre todo frente a la gruesos [...]. Si no salía nadie más de la casa nos íbamos
playa de Los Cocos y Playa Blanca, pero es indis- todos los muchachos del barrio, después del colegio,
cutible que se vio fuertemente perjudicada por la sobre todo los sábados, porque los domingos venía
construcción del nuevo terminal marítimo. mucha gente a nadar a estas aguas, y si era en vacacio-
nes no se entendía de la gente [...]. También hacíamos
paseos, se llevaba las ollas y hacían sancocho; los pa-
pás se llevaban su botellita, su cava con hielo para la
cerveza y uno se pasaba su rato bueno. Ahí lo malo era
la subida y la bajada del cerro.22

22 David Ruiz Ureche, vecino de Barrio Norte. Entrevista: 28 de abril de


76 2016.
política
Raiz
Desde las alturas de los cerros del Norte es posible
RP

comprobar la naturaleza dual del territorio pescaítero,

Raiz socio-
económica
dominado por un lado por el estruendo de la vida urbana y
por el otro por una naturaleza apacible, dueña del paisaje”. RE

a m b i e n ta l
Raiz
Plano 3.6 Ni en la playa de Pescaíto ni en las playas de San RA
Los cerros tutelares de Pescaíto Martín tiene lugar la pesca como actividad econó-
mica; se trata más bien de una actividad recreati-
Playa de va, circunscrita a los momentos de esparcimiento

urbana
Pescaíto y tiempo libre. En palabras de Héctor Ortiz, vecino

Raiz
de San Martín, “aquí no se puede pescar, porque el
RU
viento golpea con fuerza y se va llevando [el cayu-
co] contra el acantilado; además el cerro se mete
Ensenada dentro del mar y tiene unas crestas que pueden

Raiz socio-
c u lt u r a l
Olaya Herrera
golpear y abrir el cayuco”. 23 Para la pesca recrea-
tiva los habitantes del sector echan mano del cor-
Playa de del o del arpón, pues en estas playas no se pesca RC
San Martín con chinchorros. Sacan chipi chipi y almejas de las
Villa Tabla 4 rocas, junto con caracoles y una variedad de pes-
cado conocido como lechero, muy abundante en

histórica
San estas ensenadas.

Raiz
Martín 3
Los caminos que conducen a las playas hacen RH
parte de la red caminera tradicional que unía a
Taganga con Santa Marta a través de los cerros
2
del Norte. Estos caminos parten de la bahía de
Taganga y bordean la costa hasta remontar poco
a poco los cerros, en sus pasos menos elevados.
Varios de los caminos conocidos hoy en día corren
Pescaíto
1 en paralelo a la carretera de Taganga, abierta en
Olaya Herrera
1956. Un acceso sale por el barrio Nacho Vives; un
ramal lo hace también por el barrio 20 de Julio, a
la altura de la carrera 14, y corresponde a un tramo
del antiguo camino real que descendía hasta el río
Manzanares a la altura del sector de “Pereguéta-
no”, hoy barrio Nuevo Jardín.

Los cerros albergan un ecosistema de condiciones


Barrio Norte ecológicas especiales, con vegetación de diversos
tipos que reverdece con las lluvias, especialmente
entre los meses de abril y agosto. La flora es muy
variada, y los habitantes le reconocen valor orna-
mental, medicinal, culinario y aromatizante. Se
destacan la bija, el orégano de cerro, la túa-túa, la
pringamosa, el guamacho, el guamachito y los di-
ferentes tipos de cactus, como el cardón, la tuna y
el aruñagato.

1 Cerro de la Salina
2 Cerro de la Virgen
3 Cerro de Rincón Guapo
23 Héctor Ortiz. Vecino de San Martín, 65 años de edad. Entrevista: 20 de
4 Cerro de Santa Marta febrero de 2016. 77
Planos Vivos
Pescaíto
desarrollo histórico y
memoria viva
Pescaíto:

Esta riqueza forestal se ve afectada por el impacto monio de René Henríquez Valderrama,
que en materia de conservación ha generado el po- vecino del barrio de Pescaíto:
La construcción

blamiento más reciente de los cerros. En primer lu-


del territorio

gar, cabe señalar que las viviendas que están siendo Cuando pelaos íbamos pero en canti-
construidas en sus faldas no responden a ningún dad y casi siempre los fines de semana.
tipo de planeación urbana. En su mayoría, no cuen- En vacaciones no había quien lo sacara
tan con servicios públicos ni saneamiento básico; a uno [...]. ¿Que por qué la gente casi no
algunas cuentan con letrinas, pero en la mayor par- va? Dicen que es muy lejos, que mucho
te de los casos la disposición final de desechos or- sol, que hay que subir el cerro. También
gánicos y residuos sólidos se hace al aire libre. Los que hay muchos “chirretes”, porque las
riesgos para la salud son evidentes, y se ven agra- playas están llenas de esa gente que no
vados en los días de lluvia, cuando las corrientes tuvo para donde más pegar después que
arrastran los desechos y los depositan en las calles los desalojaron de El Boro. Eso uno pasa
de la parte baja de Pescaíto y Barrio Norte, donde y se siente el olor del vicio, se ve donde
continuamente se represan las aguas negras y se dejan todo regado, hay basura y a la gente
acumulan las basuras. Se puede constatar con alar- le da miedo irse por allá a pesar de que es
ma que el poblamiento de los cerros sigue avanzan- el sitio más bonito que tiene el barrio. 24
do en las mismas precarias condiciones habitacio-
nales, sin ningún tipo de alternativas que mitiguen La presencia de nuevos pobladores, ya
las deficiencias en el equipamiento séptico. sea que se los considere como habitan-
tes temporales o permanentes, no ha
En algunos casos, las viviendas son simples cam- sido el único elemento que ha transfor-
buches o enramadas improvisadas, sin provisión mado el significado que los habitantes
de servicios ni seguridad, instalados en la par- de Pescaíto les atribuyen a sus cerros y
te alta de los cerros, lejos de los últimos núcleos sus playas en la construcción del terri-
de vivienda. En su gran mayoría tienen carácter torio. De hecho, este poblamiento más
provisional y son ocupados por personas ajenas reciente está inscrito dentro de un pro-
al sector, sin vínculos sólidos con la comunidad. ceso de desarrollo urbano más amplio;
Muchos líderes comunales definen a estos habi- un proceso de larga data que ha trans-
tantes como personas que están de paso por el formado físicamente la cadena monta-
sector, muchas de ellas consumidoras habituales ñosa que ciñe al sector por el norte, y que por lo El paseo familiar y de
de droga, que únicamente se quedan durante la mismo ha generado cambios de gran calado en la amigos a las playas
de los cerros del
noche y parten de madrugada: así como llegan de territorialidad pescaítera. Un factor fundamental
Norte: una tradición
repente, así también levantan un día su cambuche al respecto lo constituyen las grandes obras de in- que debe ser
y desaparecen para siempre. No obstante, otros fraestructura de mediados del siglo xx. En efecto, revitalizada.
líderes reconocen en ellos una presencia más per- los contornos de las antiguas ensenadas interio- Cortesía de Betis Robles,
vecina de San Martín
manente, y señalan que muchas de estas personas res, que conformaron los nichos originales de po-
tratarán poco a poco de hacerse con un lote: en blamiento, se desdibujaron con la ampliación del
esa medida, son los agentes más recientes en el puerto en los años 50 y de la vía férrea en los años
largo proceso de urbanización irregular que ha 60, pues las obras estuvieron acompañadas de de-
caracterizado el poblamiento de los cerros. moliciones parciales.

Este proceso ha transformado sin lugar a dudas


la percepción de los habitantes establecidos frente 24 René Henríquez Valderrama, vecino del barrio de Pescaíto, 50 años de
78 a los cerros y a las playas, como lo revela el testi- edad. Entrevista: 2 de abril de 2016.
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
Piedefoto

RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH

Los cerros del Norte, a caballo entre


una enorme riqueza ecológica y
una vibrante –pero también ardua–
vida urbana.
Fotografías de Gabriela Díaz Montealegre
79
La construcción Pescaíto: Planos Vivos
del territorio desarrollo histórico y Pescaíto

80
memoria viva

Díaz Montealegre
Fotografía de Gabriela
Los cerros del Norte
y el mar de Pescaíto.
Raiz Raiz socio- Raiz Raiz Raiz socio- Raiz

81
RE
RP

RA

RC

RH
RU

histórica c u lt u r a l urbana a m b i e n ta l económica política


Figura 15. Playas Figura 16. El cerro “Cambuche” en las
y caminos de los de Rincón Guapo, alturas, símbolo de
cerros del Norte. fracturado a la altura la precariedad, las TAGANGA
Fuente: Elaboración de la carrera 8.a. difíciles condiciones
propia basada en una Fotografía de Omar de vida y los
imagen de Google Earth
Planos Vivos

Cordero Durango riesgos asociados Cagabuzo

al poblamiento
Pescaíto

Aca
espontáneo de los Linda
cerros. Rube
Pescaíto
Fotografía de Omar San Martín
Cordero Durango Boquerón

ENSENADA
desarrollo histórico y

SAN VILLA
MARTÍN TABLA
memoria viva
Pescaíto:

La ampliación de la vía férrea, iniciada a mediados El otro fenómeno que ha dejado una huella honda
de los años 60, fue acometida desde la estación de en la relación de Pescaíto con sus cerros y sus pla-
tren, ubicada en la calle 10 (la actual avenida del yas es el de la apropiación de terrenos por parte de
Ferrocarril) con carrera 4.a, hasta los talleres fe- personas relacionadas con el narcotráfico durante la
rroviarios, situados entre las carreras 16 y 21. Esta bonanza marimbera en las décadas del 70 y 80, así
La construcción

obra, que se abrió paso a través de los cerros, rom- como durante el boom de la cocaína en el paso del si-
del territorio

pió los abrigos rocosos que mantenían separadas glo xx al xxi. Junto a las playas de Taganga, algunas
las ensenadas interiores y facilitó la comunicación de las playas de Pescaíto sirvieron para embarcar
entre los barrios. Con el trazado de la vía Alter- droga hacia Estados Unidos en barcos particulares.
na al puerto de Santa Marta, cuya construcción La práctica siguió de manera discontinua durante
comenzó en 1998, la fisonomía del conjunto de los la expansión y consolidación de los grupos parami-
cerros terminó de alterarse de forma sustancial: litares que se disputaron el control de la ciudad en
a primera vista, los cerros tutelares de Pescaíto los años 90. De esta época, alrededor de 1996, data la
(plano 3.6), que aquí llamaremos de la Salina, de apertura de la carretera que corre detrás de los ce-
la Virgen, de Rincón Guapo y de Santa Marta, así rros y que buscaba unir a Taganga con el puerto de
estos nombres no gocen de unanimidad absoluta Santa Marta a través de una ruta “clandestina”. Es
en el sector, parecen pequeños promontorios inde- un secreto a voces que se trataba de una “carretera
pendientes, aislados de la cadena conformada por segura” para el envío de droga y el tráfico de armas
los cerros del Norte. de grupos paramilitares y narcotraficantes:

La transformación del paisaje montañoso pescaí- Esa carretera la trabajaban de noche, se oían las má-
tero no ha sido dictada únicamente por la cons- quinas y las explosiones. Dijeron que uno no podía ir
trucción de infraestructura vial; la apertura de por allá. Eso como que era de una gente que quería
canteras también jugó un papel de primer orden. una carretera para ellos solos desde Taganga para salir
La extracción de piedra, grava y afirmado ha es- directo al puerto: que iban a embarcar desde allá; que
tado ligada no solo a las obras de infraestructura, iban a hacer unas bodegas, pero en Taganga; pero que
sino además a la edificación misma de los barrios, no lo siguieron porque hicieron la vía Alterna. ¡Eso de-
como lo recuerda Julio Rodríguez: “El cerro [de la cían! ¿Pero qué sería lo que iban a embarcar desde Ta-
Salina] botaba una grava muy buena que empeza- ganga? Porque por allá no se produce nada: el carbón
ron a echar del lado de San Martín, porque todavía lo traen del César. ¿El banano? Para eso está el tren.27
se veían algunas charcas de las salinas. Con ese
relleno se pudo afirmar parte del terreno, sobre Muchos habitantes coinciden en afirmar que los
todo del lado del parque, que era donde todavía predios por donde pasa la carretera pertenecen en
estaban los pozos; la parte pegada del cerro era la actualidad a un conocido traficante de estupe-
roca fina, ahí no había problemas con el terreno”.25 facientes de la costa Caribe. Están cercados y sus
Las constructoras también han dejado su rastro límites son los portones de acero y aluminio que
en lo cerros, como lo rememora el mismo Julio restringen la entrada a la playa de Pescaíto desde
Rodríguez: “Nos reuníamos por grupos de hom- los cerros.
bres, de diez o quince hombres, y salíamos a sacar
piedra, relleno, grava, que estaban comprando las Por último, pero no menos importante, hay que
constructoras que esos años hacían conjuntos ce- resaltar el continuo amontonamiento de basuras
rrados y hoteles del lado de Taganga y les quedaba en estas playas, producto del deficiente manejo y
más cerca comprar la piedra por estos lados”.26 disposición final de residuos, así como del pobla-
miento irregular en los cerros y en cercanías al
mar. Este problema es más notorio en inmediacio-
25 JulioRodríguez, vecino de San Martín, 81 años de edad. Entrevista: 10
de marzo de 2016.
82 26 Ibidem. 27 Vecino de Ensenada. Entrevista: 22 de febrero de 2016.
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

Pescaíto estaba constituido en esencia por núcleos urbanos


situados en las inmediaciones de los cerros o encajados en

urbana
Raiz
sus ensenadas. Desde los cerros, hacia el sur, podía divisarse RU

una amplia llanura en trance de urbanización”.

Raiz socio-
c u lt u r a l
nes de la playa de Pescaíto, debido a la presencia rros, hacia el sur, podía divisarse una amplia lla- RC
de un desagüe de las obras complementarias del nura en trance de urbanización.
colector Bastidas-Mar Caribe, que lleva no solo
las aguas lluvias, sino la basura acumulada en los Pese a las transformaciones de gran magnitud de

histórica
drenajes. De otra parte, los pobladores aseguran la segunda mitad del siglo xx, los cerros siguen

Raiz
que las corrientes arrastran una gran cantidad de cumpliendo la función de linderos informales
residuos sólidos desde Taganga y los depositan en para los diferentes barrios del gran Pescaíto. San RH
las costas de Pescaíto, sin que la marea pueda des- Martín se sitúa entre el cerro de la Salina y el cerro
pués arrastrarlos consigo fuera de sus playas. de la Virgen, que en la actualidad está cercenado
a la altura de la carrera 5.a. En su costado oriental
Más allá de los retos, las dificultades y los cambios se encuentra Villa Tabla, situada entre el cerro de
asociados al poblamiento precario de los cerros, la Virgen y el de Rincón Guapo, también fractu-
a la destrucción parcial de algunos de ellos, a la rado a la altura de la carrera 8.a (fig. 16). Ensenada
apropiación de grandes extensiones de terreno por de Olaya Herrera está ubicado entre éste último y
parte de personas involucradas en actividades ilí- el cerro de Santa Marta, entre las carreras 12 y 13.
citas, lo mismo que al mal manejo de las basuras, El barrio de Pescaíto se explaya en torno al cerro
lo cierto es que las relaciones entre Pescaíto y sus de la Virgen; Olaya Herrera, por su parte, lo hace
cerros y playas siguen siendo un factor fundamen- desde el cerro de Santa Marta.
tal en la construcción del territorio. Su importan-
cia como ordenador geográfico y como referente Los pescaíteros y las pescaíteras han podido cons-
identitario, mucho antes de que existiera Pescaíto truir y consolidar un territorio mucho más amplio
como tal, les asegura un potencial transformador que aquel demarcado por el ordenamiento admi-
indudable. A sus pies, los pobladores explotaban nistrativo local. Los límites establecidos históri-
las salinas, y entre sus faldas remontaban los ca- camente por los cerros del Norte han sido modi-
minos coloniales que unían a Santa Marta con ficados tanto en la esfera simbólica (apropiación
Taganga. En el actual Pescaíto, la impronta de los discursiva) como en la práctica (transformación
cerros es innegable: desde el punto de vista es- física), y ello ha repercutido en las relaciones de los
pacial, los diferentes barrios se desarrollaron de pobladores con sus cerros y con su mar. Se trata,
manera discontinua en torno a los cerros o entre pues, de un proceso de construcción territorial de
las pequeñas ensenadas interiores que, a la mane- largo aliento, que involucra el sentido de pertenen-
ra de anfiteatros, forman los cerros del Norte en cia al territorio y la capacidad de transformarlo
su descenso hacia la ciudad. Antes de las grandes en el tiempo. Cualquier propuesta de renovación
obras de infraestructura de mediados del siglo xx, urbana en sintonía con la experiencia de territo-
Pescaíto estaba constituido en esencia por núcleos rialidad de los habitantes debe potenciar el valor
urbanos situados en las inmediaciones de los ce- de los cerros y las playas de Pescaíto. En el último
rros o encajados en sus ensenadas. Desde los ce- capítulo de este libro, los lectores tendrán opor- 83
Planos Vivos
Pescaíto
desarrollo histórico y
memoria viva
Pescaíto:

tunidad de apreciar la manera en que


el enfoque de Planos Vivos asume este
El puerto y el ferrocarril

desafío y aprovecha esta oportunidad.


en la formación
de Pescaíto

los barcos que en él dan fondo. [...] El fondo es casi


El puerto y el ferrocarril en la insondable, grandisimo, limpio de baxos y arre-
formación de Pescaíto cifes; ni hay que andar á tientas, ni tropezando,
como en otros puertos, para entrar en él, ni co-
rrerlo de cabo á rabo”.29 El abandono relativo que
El puerto sufría el puerto de Santa Marta le resultaba tan
Desde los inicios mismos del proceso de conquista absurdo como a Herrera doscientos años antes, y
y colonización española, Santa Marta buscó publi- no en vano recurrió a su testimonio para darles
citar las ventajas de su puerto y convencer a la corte más fuerza a sus argumentos:
en Madrid para que diera fomento especial a la ac-
tividad portuaria, aunque en el marco de estas ges- Por razon del puerto no puede ser, porque el de San-
tiones fueron más los fracasos y las frustraciones ta Marta es mas vecino á España, mas a mano, y se
que los logros. Las bondades que celebraban al uní- avista regularmente primero que el de Cartagena. No
sono cronistas y funcionarios no se compadecían tiene, como dice Herrera, baxos, ni arrecifes, ni ha me-
con su rezago frente a otros puertos sobre el Caribe nester práctico para la entrada, ni se experimentan en
(léase Cartagena). Ya notaba a comienzos del siglo él torbellinos, y terribles uracanes, como en otros. Es
xvii el cronista español Antonio de Herrera que de fondo grandisimo, seguro, y tranquilo como una
balsa de aceyte. ¿Pues cómo asi se desprecia? Será por
[l]a ciudad de Santa Marta està poblada en sitio sano, la mayor dificultad en conducir los fardos y caldos
fundada a la orilla de la mar, con muy buen puerto, desde Santa Marta hasta Mompox, Honda, y Santa Fé,
muy grande, seguro, de suelo limpio, que haze una que desde Cartagena?30
caldera adonde se da carena; tendra media legua de
ancho; en frente del puerto tiene un morro grande, En la solución del enigma, Julián apeló a uno de
que le sirve de reparo; tiene mucho fondo, y sin cau- los expedientes más socorridos del patriotismo
sar bruma, sin arrazifes, ni baxos; su entrada es al local samario en cualquier época: el favoritismo
Poniente; tiene abundancia de agua, y leña, en tierra injustificado que gozaba su rival en la otra banda
llana, y tuvo muy gran vezindad, y despoblose por no del Magdalena:
acudir las flotas en aquel puerto, como solian. 28
[E]l dexar de aportar á Santa Marta las naves mercanti-
Dos siglos después, el sacerdote y cronista Anto- les de España, no es por defecto del puerto, ni porque á
nio Julián, al que ya hemos tenido la oportunidad los comerciantes no les estuviera mas á cuenta el trans-
de citar extensamente, volvió a romper una lanza porte de sus mercaderias al Reyno desde el puerto de
por el puerto de Santa Marta: “Digo sinceramente, Santa Marta que desde Cartagena. [...] No veo otra res-
que el puerto de Santa Marta es uno de los mas puesta que puedan dar los comerciantes, sino porque
apreciables que tiene su Magestad en todos sus ya se ha entablado el ir á Cartagena, porque alli hay
vastisimos dominios. Es un mar de leche, como comerciantes ricos, y caudales fuertes; y finalmente,
solemos decir, dulce, pacífico, que nunca se albo- porque las correspondencias del comercio de España,
rota, ningun viento perturba, ni da incomodidad á son con los Señores de Cartagena, Ciudad ahora mas
poblada y rica de quando las flotas iban á Santa Marta.

28 Antoniode Herrera y Tordesillas, Historia general de los hechos de los


castellanos en las Islas y Tierra firme del mar Oceano. Decada quarta. 29 Antonio Julián, La perla de la América, pp. 228-29.
84 Madrid: Imprenta Real, 1601, p. 274. 30 Antonio Julián, La perla de la América, p. 233.

política
Raiz
A. Slom, Santa Marta, “Coteros” en el puerto RP
vue générale, prise du de Santa Marta
nord (1894). Grabado (1914).
en madera que Fuente: http://www.

Raiz socio-
económica
muestra la ciudad encaribe.org


desde el norte.
Fuente: http://www.
antique-prints.de
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
Y esa es la verdad, y esa es la razon de haberse despo- disfrutar por mucho tiempo de su recién ganado
RU
blado y empobrecido Santa Marta, como dice Herrera.31 ascendiente dentro de la actividad portuaria co-
lombiana. Barranquilla, que a comienzos del siglo
Para los samarios, la independencia de España no xix era apenas un pequeño puerto fluvial sin una

Raiz socio-
c u lt u r a l
supuso la emancipación frente a las élites cartage- salida al mar digna de ese nombre, pues los ban-
neras, que supieron imponer su influencia política cos de arena de Bocas de Ceniza hacían la nave-
y su peso económico para asegurarse todo tipo de gación casi imposible, remontó rápidamente posi- RC
privilegios comerciales en detrimento de puertos ve- ciones en la competencia por la primacía urbana
cinos como Santa Marta o Sabanilla. Así, por ejem- en la costa Atlántica colombiana. Barranquilla se
plo, aunque el puerto de Sabanilla fue habilitado en consolidó definitivamente como el principal cen-

histórica
1820 para el comercio exterior, al año siguiente los tro industrial, comercial y portuario de la región

Raiz
comerciantes cartageneros lograron que su mue- gracias a la inauguración en 1871 de la línea férrea
lle fuera cerrado. En 1826 consiguieron incluso que hacia el puerto de Sabanilla, reabierto a mediados RH
el Congreso de la República declarara a Cartagena del siglo xix al comercio internacional, lo mismo
como el único puerto de bodegaje sobre el Caribe. que al traslado de su aduana a la ciudad en 1876.

Ahora bien, si en el corto plazo Cartagena supo Santa Marta acusó el impacto del ascenso de Ba-
mantener su preeminencia portuaria en la costa rranquilla, y sus ingresos aduaneros cayeron de
Atlántica, en el largo plazo el desarrollo económi- forma abrupta ya a mediados de la década de 1870.
co y el dinamismo del comercio internacional de- Sin el despegue de la producción bananera en la
cimonónico desbordaron en mucho su influencia década de 1880, y sin el impulso que el posterior
y su capacidad de cabildeo. La habilitación como boom bananero les dio a las actividades portua-
puerto de bodegaje, a la que Santa Marta se hizo rias y ferroviarias, Santa Marta habría caído en
acreedora en 1835, fue un primer campanazo de un letargo económico pronunciado. De hecho, el
alerta para el predominio cartagenero, que rápi- fortalecimiento del puerto estuvo ligado desde un
damente se erosionó ante el acelerado crecimiento principio a la construcción del ferrocarril. En efec-
de la actividad portuaria samaria. Fue así como en to, el primer contrato entre el Estado Soberano del
el año 1842-43 el valor en pesos de las importacio- Magdalena y Manuel J. de Mier y Roberto A. Joy
nes por Santa Marta fue casi cuatro veces superior para la construcción del ferrocarril desde Santa
al de las de Cartagena, mientras que para el año Marta hasta la ciénaga del cerro de San Antonio,
1856-57 lo fue casi nueve veces. Para finales de la suscrito en 1881, indicaba que “[l]os muelles que
década de 1860, el valor en pesos de las importa- habrán de construírse en Santa Marta y el punto
ciones por Cartagena representaba apenas un 10 % donde termine el Ferrocarril como anexidades de
del valor de las importaciones por Santa Marta, la Empresa, se ofrecerán al servicio público, me-
que en ese momento gozaba de la primacía en el diante un derecho que pagarán tanto los buques
comercio internacional colombiano. que lo ocupen, como las personas y efectos que
hayan de embarcarse y desembarcarse por ellos”.32
No obstante, en ese entonces ya era evidente que En 1893 la nueva concesionaria, la Santa Marta
el veloz ascenso de Barranquilla no le permitiría
32 República de Colombia, Ministerio de Obras Públicas, Documentos
relacionados con el ferrocarril de Santa Marta. Bogotá: Imprenta Ame-
31 Antonio Julián, La perla de la América, p. 236.
 ricana, 1911, pp. 7-8. 85
El puerto de Santa
Marta en 1915.
Planos Vivos

Fuente: http://www.
Pescaíto

santamartaviva.com

desarrollo histórico y
memoria viva
Pescaíto:
El puerto y el ferrocarril
en la formación
de Pescaíto

Railway Company, recibió autorización por parte miento, la compañía dispuso la construcción de
del Gobierno nacional para la construcción de un dos muelles provisionales de madera, para facili-
muelle en la bahía de Santa Marta, según consta tar el transbordo de la carga entre los buques y el
en el contrato 61 de dicho año: ferrocarril. Finalmente el Ejecutivo aprobó en 1901
y 1905 la construcción de dos muelles, que fueron
El Gobierno concede permiso á la Compañía, sin que entregados al servicio en 1908 y 1911 respectiva-
esto constituya privilegio, para construír en un pun- mente. Para entonces la actividad portuaria, de la
to de la bahía de Santa Marta un muelle cubierto, de mano de la conexión férrea con el hinterland ba-
doscientos metros de largo, trece metros de ancho nanero, se había convertido en un auténtico polo
y diez metros de calado, por lo menos, de madera de crecimiento económico que atraía un creciente
de buen clase, ó de hierro, provisto de rieles, cam- flujo de trabajadores a la ciudad y aceleraba así el
bia-manos, torna mesa, etc., y uno ó más edificios de proceso de urbanización. No en vano, entre 1905 y
hierro o de madera con techo de hierro, inmediatos 1938 la población de Santa Marta aumentó 3.5 ve-
al muelle, con compartimentos para pasajeros, depó- ces, y su paisaje urbano se vio transformado por
sitos de la carga de exportación y los talleres necesa- la progresiva diferenciación social generada por la
rios para la Empresa.33 prestación de servicios a la industria del banano.
Una gama variopinta de trabajadores asumió un
Las dimensiones del proyecto dan fe del dina- rol protagónico en la ciudad, desde los miles de
mismo de la floreciente industria bananera y su “coteros” (cargueros o estibadores), pasando por
impacto en Santa Marta: en la última década del los maquinistas y el personal auxiliar ferroviario,
siglo xix, las exportaciones a través de su puerto hasta los funcionarios contables y administra-
promediaron los 380 000 racimos por año, esto es, tivos de los muelles. En general, los trabajadores
el 90 % de la producción nacional. Tanto el ferroca- del puerto fueron conocidos como “muelleros”,
rril como la adecuación de los muelles rinden tes- en tanto que aquellos empleados en el ferrocarril
timonio de los esfuerzos por establecer un enclave eran denominados “ferroviarios”.
agroexportador, que dependía de la construcción
de un moderno sistema de transportes para mover Hubo que esperar hasta mediados de siglo para
el banano, sin dilaciones y a bajo costo, desde las que las obras de modernización del puerto, que
zonas de producción y acopio hacia el puerto. incluyeron nuevos muelles y la expansión del área
de carga hacia el barrio El Ancón, fueran lleva-
Con posterioridad, la Santa Marta Railway Com- das a cabo. La empresa encargada de los trabajos,
pany manifestó al Gobierno nacional su deseo de realizados entre 1953 y 1958, fue la firma francesa
traspasar la concesión para construir y operar los Campenon Bernard. Como ya advertimos más
muelles de la bahía de Santa Marta. El Ministerio arriba, las obras de mitad de siglo trajeron consigo
de Hacienda elevó consulta al Consejo de Estado, trasformaciones de envergadura en los cerros del
y mientras las partes aguardaban el pronuncia- Norte, pues la ampliación del puerto exigió la frac-
tura del cerro de la Salina y el relleno de las playas
33 República
de Colombia, Ministerio de Obras Públicas, Documentos de las Abras de Santa Ana. Igualmente impulsaron
86 relacionados con el ferrocarril de Santa Marta, p. 20.
política
Raiz
RP
De la mano del tráfico comercial
se dio un intenso intercambio

Raiz socio-
económica
cultural, que le deparó a
Pescaíto uno de sus tesoros más
RE

preciados: el fútbol. Más adelante

a m b i e n ta l
tendremos oportunidad de

Raiz
sopesar su contribución crucial a RA

la identidad pescaítera”.

urbana
Raiz
RU

J. Noguera Gnecco, las posteriores obras de ampliación de la red fé- biano. Darle una nueva proyección a ese legado es

Raiz socio-
c u lt u r a l
Ferrocarril tomando rrea a través de los cerros tutelares del sector. uno de los propósitos fundamentales de la pro-
frutos en la línea.
puesta arquitectónica y urbana que Planos Vivos
Fuente: http://
www.ebay.com La actividad portuaria no se limitó en ningún caso al pone a consideración de los lectores. RC
intercambio de bienes (en su sentido más restringi-
do): exportaciones de banano, pero también de café
y cacao, e importaciones de insumos, comestibles El ferrocarril

histórica
y maquinaria. De la mano del tráfico comercial se El ferrocarril que debía conectar a Santa Marta

Raiz
dio un intenso intercambio cultural, que le deparó a con el río Magdalena había sido ya concebido a
Pescaíto uno de sus tesoros más preciados: el fútbol. mediados del siglo xix para romper el aislamiento RH
Más adelante tendremos oportunidad de sopesar su en el que se encontraba sumida la región por vía
contribución crucial a la identidad pescaítera. Por lo terrestre. Con el paso de los años, su construcción
pronto, cabe subrayar que el auge portuario no hizo adquirió creciente urgencia, pues debía devolverle
sino ampliar los múltiples vínculos del sector con el competitividad al puerto samario frente al com-
mar, así como reforzar su condición de espacio de plejo conformado por Barranquilla, Sabanilla y
articulación entre el mundo atlántico, por un lado, Puerto Colombia. El contrato inicial entre el Esta-
y la ciudad y su hinterland rural, por el otro. El testi- do Soberano del Magdalena y la compañía cons-
monio de Marina Villar, vecina de Olaya Herrera, es tructora del ferrocarril, que data de 1881, contem-
elocuente al respecto: “Por el mar ha llegado de todo. plaba el tendido de la línea férrea hasta la ciénaga
El fútbol entró en barco, llegó primero a la playa. El del cerro de San Antonio, y aunque el Congreso
guineo se embarcaba en buque, la familia mía llegó dispuso después que fuera prolongada primero
en cayuco [...]. La primera vez que me sacaron fue en hasta Plato y posteriormente hasta El Banco, en
lancha, nos traían durmiendo entre los bultos, ese realidad la empresa nunca estuvo interesada en
era el colchón”.34 llevar la línea hasta el río Magdalena. Sus accio-
nistas, en efecto, tenían toda su atención centrada
La relación entre la actividad portuaria, la indus- en la comercialización del banano sembrado en
tria del banano, la migración laboral y la introduc- las tierras aluviales que se extendían entre la ca-
ción del fútbol solo se hace inteligible en el marco pital del entonces Estado Soberano y Fundación.
de la historia de Pescaíto.
La convicción de que “el
fútbol entró por Santa Marta” a Colombia es un Los trabajos fueron iniciados en 1882, y cinco años
patrimonio que la memoria viva de Pescaíto difun- después fue inaugurado el primer tramo entre
de de generación en generación: en la rememora- Santa Marta y Ciénaga. Los promotores origina-
ción de esos orígenes los habitantes reafirman su les del ferrocarril, Manuel Julián de Mier y Robert.
pertenencia al territorio y tienden un puente entre A. Joy, cedieron su licencia ferroviaria y los con-
el pasado de muelleros y ferroviarios y un presente tratos de muelles a la firma londinense The Santa
colmado de nombres célebres en el fútbol colom- Marta Railway Company. En 1886, el departamento
del Magdalena aprobó el traspaso de la concesión,
34 Marina Villar, vecina de Olaya Herrera, 73 años de edad. Entrevista: 16 que incluía la importación de materiales de cons-
de marzo de 2016. trucción libres de impuestos, la entrega de cien 87
Entrada del tren a
Fundación.
Fuente: http://
fundacionmagdalena.
blogspot.com.co
Planos Vivos
Pescaíto
desarrollo histórico y
memoria viva
Pescaíto:
El puerto y el ferrocarril
en la formación
de Pescaíto

mil hectáreas de baldíos y un subsidio anual de charon, en efecto, en sincronía con la extensión de
sesenta mil dólares. La compañía británica conti- las plantaciones, y los ramales fueron tendidos en
nuó la construcción, y en 1894 la línea férrea llegó función de la exportación de la fruta: cualquier otra
al pueblo de Sevilla, a 66 kilómetros de distancia consideración de índole económica, política o so-
de Santa Marta. En 1899 la empresa cambió nue- cial quedó enteramente supeditada al desarrollo del
vamente de manos al ser adquirida por el empre- enclave bananero.
sario norteamericano Minor C. Keith (1848-1929),
quien en 1906 completó la línea principal de 94.7 La fusión de los negocios bananeros de Keith con la
kilómetros entre Santa Marta y Fundación. Para Boston Fruit Company en 1899 dio origen a la United
entonces, el transporte de banano desde las plan- Fruit Company, una firma que desde sus inicios se
taciones al puerto operaba sin interrupción día y vio rodeada de polémica por su enorme influencia
noche, durante todo el año. En la bahía de Santa en la economía y su intervención activa en la polí-
Marta, la compañía del ferrocarril había construi- tica de las naciones centroamericanas y del Caribe.
do dos muelles de acero, en los cuales podían ser Con su integración en la órbita de la multinacio-
cargados dos vapores simultáneamente. nal, el poco interés de la compañía del ferrocarril
por honrar su compromiso contractual de tender
Keith acreditaba una experiencia nada desdeñable los rieles hasta el río Magdalena se hizo aún más
en materia ferroviaria: en 1871 se había unido a su patente. El Gobierno colombiano mantuvo una
hermano, que entonces administraba un ferrocarril postura ambigua y contradictoria frente a la com-
en Costa Rica, y juntos conformaron la Internatio- pañía. Por una parte, la economía de la región era
nal Railways of Central America, compañía que con dependiente de la explotación del banano y de las
el tiempo vendría a jugar que un papel de primer inversiones de la United Fruit Company, que además
orden en el transporte entre las costas Atlántica y gozaba de protección especial por parte del Gobier-
Pacífica, lo mismo que entre México y El Salvador. no estadounidense. Por otro lado, las autoridades
Ahora bien, los intereses ferroviarios no eran los de la región eran conscientes de que un desarrollo
únicos en juego en el ingreso de Keith a Colombia: diversificado y más equilibrado exigía un sistema
igualmente adquirió tierras a través de la Colombia de transportes que no estuviera completamente su-
Land Company, empresa que para 1875 era propie- bordinado a los intereses bananeros. Fue así como
taria de 12 500 acres en Riofrío, región de vocación en 1903 fueron aprobadas modificaciones al con-
bananera. Los negocios del empresario norteame- trato original, que incluyeron la fijación del año de
ricano oscilaron permanentemente entre la cons- 1911 como último plazo para llevar el ferrocarril al
trucción y administración del ferrocarril de Santa río Magdalena. En caso de incumplimiento de las
Marta y las explotaciones bananeras. El traspaso obligaciones contraídas, o de preferencias indebi-
del contrato de construcción del ferrocarril a una das en el transporte de carga en desmedro de otros
compañía con fuertes intereses en la industria del usuarios, los privilegios adquiridos por la empre-
banano no hizo sino reforzar la estrecha –y proble- sa serían limitados exclusivamente a los tramos ya
mática– compaginación del transporte ferroviario construidos. Así mismo fue obligada a devolver tí-
88 y la producción agroexportadora. Las obras mar- tulos de tierras baldías y subsidios adicionales. En
[E]l no cumplimiento de las obligaciones contraídas […] ha
redundado en perjuicio para el país y beneficio para aquélla

política
Raiz
[la compañía ferroviaria], pues al no llevar el ferrocarril hasta RP

el río Magdalena, se dejó en estado primitivo una vasta región

Raiz socio-
económica
que, aun cuando feraz y propia y para la cría de ganado, o
para establecer otras clases de industrias agrícolas, no podrá RE

desarrollarse mientras no tenga una vía de comunicación con


el litoral y con el río”.

a m b i e n ta l
Raiz
RA
1907 un nuevo contrato estipulaba la exención de mientras no tenga una vía de comunicación con el
impuestos por veinte años para todo el banano de litoral y con el río”.35
exportación producido en las tierras servidas por el

urbana
ferrocarril. A cambio, la compañía se comprometía La promoción de un desarrollo más diversificado a

Raiz
a construir nuevos ramales de menos de diez kiló- través del ferrocarril sucumbió ante el poder eco-
RU
metros, lo mismo que a reducir por veinte años el nómico y el cabildeo político del sector bananero.
flete para el banano producido en las cuencas de los La postura contradictoria del gobierno tampoco
ríos Sevilla y Fundación. contribuyó a orientar de manera decidida la polí-

Raiz socio-
c u lt u r a l
tica de transporte hacia objetivos más amplios. No
Estos serían los últimos acuerdos contractua- cabe duda, igual, de que la conjunción del ferroca-
les antes de que se iniciara un largo pleito legal rril y el puerto precipitó transformaciones de gran RC
por la nacionalización del ferrocarril. En vista del calado en la región. Como se verá a continuación,
incumplimiento de lo pactado, en especial en lo el surgimiento de Pescaíto y su desarrollo urbano
atinente al tendido de la línea férrea hasta el río fueron parte integral de este proceso.

histórica
Magdalena, el Congreso de la República llamó a

Raiz
la empresa a rendición de cuentas en 1915 y cinco
años después expidió una ley para que el Gobierno RH
pudiera proceder con la expropiación. La compa- Transformaciones urbanas
ñía apeló ante la Corte Suprema de Justicia, que en de Pescaíto, siglos XX-XXI
su fallo de 1925 confirmó que la compañía quedaba
en la obligación de vender toda la infraestructura Los estudiosos de la historia de Santa Marta coin-
y la maquinaria a la Nación o a la persona o em- ciden en afirmar que la ciudad mantuvo su fisono-
presa que el Gobierno señalara. mía colonial hasta bien entrado el siglo xx, con su
eje de crecimiento claramente orientado en sentido
El largo pleito no supuso, naturalmente, una trans- este-oeste, entre el centro y la bahía. La actual ave-
formación radical en la relación entre el transpor- nida del Ferrocarril y la avenida Santa Rita (calle 22)
te ferroviario y la economía bananera. Para el año constituyeron durante mucho tiempo sus límites
de 1922, por ejemplo, un 70.5 % de los ingresos de la urbanos hacia el norte y hacia el sur respectivamen-
compañía del ferrocarril provenían del transporte te. En el marco de la consolidación de la economía
de banano. Si a ese guarismo se suma un 15 % adi- bananera, las haciendas periurbanas presenciaron
cional por concepto de pasajeros transportados, la formación paulatina de los primeros barrios de la
que en esencia estaban representados por los tra- Santa Marta moderna, como Barrio Norte, Pescaí-
bajadores de la United Fruit y de los demás culti- to, La Castellana, Manzanares o Martinete.
vadores, cabe concluir entonces que por lo menos
un 85 % de sus ingresos dependían del banano. En En las líneas precedentes nos detuvimos en algu-
un informe contemporáneo sobre los ferrocarriles nos de los factores geográficos, ambientales, so-
colombianos, Alfredo Ortega llegó a una conclu- cioeconómicos y socioculturales más relevantes
sión palmaria: “[E]l no cumplimiento de las obli- en la conformación del gran Pescaíto y en la apro-
gaciones contraídas […] ha redundado en perjuicio piación simbólica del territorio por parte de sus
para el país y beneficio para aquélla [la compañía habitantes. Las páginas que siguen a continuación
ferroviaria], pues al no llevar el ferrocarril hasta abordan con mayor detalle las características de
el río Magdalena, se dejó en estado primitivo una su desarrollo urbano. Pescaíto nació como pro-
vasta región que, aun cuando feraz y propia y para ducto de un poblamiento doble, que tuvo lugar en
la cría de ganado, o para establecer otras clases
de industrias agrícolas, no podrá desarrollarse Ortega, Ferrocarriles colombianos. Resumen histórico, vol. 2.
35 Alfredo
Bogotá: Imprenta Nacional, 1923, p. 604. 89
Los patios fueron el lugar de socialización por excelencia,
tanto para la familia como para la comunidad. No en vano, las
viviendas se diferenciaban ante todo por el área construida y
Planos Vivos
Pescaíto

no por la extensión total del lote, puesto que los patios eran, por
así decirlo, ‘comunales’: como no existía una clara demarcación
entre una y otra vivienda, y el acceso desde la calle se daba
desarrollo histórico y

por una entrada lateral, era posible ingresar a cualquiera de las


memoria viva

propiedades a través de los patios”.


Pescaíto:

Ensenada Olaya Herrera y Barrio Norte simultá- palma en abundancia, esta no fue empleada en
neamente. El primero se dio al abrigo de la ense- los techos; solo ocasionalmente en las enramadas
urbanas de Pescaíto,
Transformaciones

nada interior conformada por los cerros de Rincón dentro de los patios o frente a las casas que care-
siglos XX-XXI

Guapo y de Santa Marta, y correspondió en esen- cían aún de terraza. La apropiación de baldíos de
cia a un poblamiento espontáneo y semiurbano, de los primeros años del siglo xx se dio en la parte
transición entre la vida rural y la vida citadina. El plana al pie de los cerros, a través de la repartición
segundo se verificó en torno a los antiguos muelles, de lotes de unos cuarenta metros de fondo por
en la forma de un poblamiento urbano planificado. unos diez metros de ancho. Ya para la década de
1910 la apropiación de lotes baldíos solo fue posible
en las laderas, ya que los proyectos inmobiliarios
Ensenada O laya Herrera: acapararon con éxito la tierra llana circundante.
la transición urbana
Los relatos que se remontan al pasado más antiguo En este lugar se originó el poblamiento de Pes-
hablan de una comunicación permanente por mar caíto de cuño semiurbano, caracterizado por un
entre Ensenada y los poblados de Camarones, Pun- proceso de migración gradual y por la continuidad
ta de los Remedios, Las Flores, Riohacha y sobre parcial con el mundo rural, pese a la rápida inte-
todo Dibulla, todos en el actual departamento de la gración de los habitantes a la economía samaria
Guajira. Los viajes de cabotaje, en estrechos cayu- como asalariados urbanos. Un primer elemento de
cos de vela, podían durar hasta veinte horas. Sus dicha continuidad lo constituyó el asentamiento
itinerarios, partiendo de las playas de Pescaíto, pa- en la costa: los pobladores mantuvieron relaciones
saban por las playas de Neguanje, Playa Cinto, Los estrechas con el mar, las playas, los caminos hacia
Naranjos, Don Diego, Guachaca, Buritaca y Palomi- Taganga y la pesca, así su relevancia como activi-
no, en tiempos en los que la ruta terrestre daba un dad económica se hubiera erosionado con relati-
rodeo por la Sierra Nevada y pasaba por Fundación va rapidez. Los viajes en cayuco hacia Taganga o
y Valledupar. Los primeros “dibulleros” llegaron a la Guajira continuaron, aunque con el tiempo no
Pescaíto cargados de huevos y carne de tortuga, solo perdieron su importancia comercial primige-
camarones y plátano, pero también traían consigo nia: también se hicieron menos frecuentes, en la
whisky, ron, perfumes y telas de contrabando. A la medida que el transporte terrestre se extendió por
vuelta regresaban con pescado de aguas profundas las carreteras costeras como la de Taganga, inau-
como la cabrilla y el mero, café, víveres, aceite de gurada en 1956, y la troncal del Caribe, abierta al
coco y gas para las lámparas Coleman. tráfico en 1974.

A comienzos del siglo xx, el crecimiento del mer- Un segundo elemento de continuidad está aso-
cado samario y –ante todo– el auge de la activi- ciado al asentamiento en baldíos del Estado, un
dad portuaria y ferroviaria transformaron a los rasgo que el poblamiento de Ensenada tiene en
mercaderes itinerantes en comerciantes estable- común con la colonización espontánea, sin reco-
cidos o en muelleros. En el proceso de asentarse nocimiento previo de derechos de propiedad, ca-
escogieron los terrenos baldíos al pie de los cerros, racterística de buena parte de la historia agraria
ocupados hasta entonces por trupillos y guama- colombiana. Esta forma de poblamiento contrasta
chos, y orientaron sus casas en sentido norte-sur, con la formación de Barrio Norte, en la que junto
con el frente hacia el mar. Las primeras casas fue- a la apropiación confluyeron procesos de adquisi-
ron construidas en madera y zinc, materiales que ción mediante la participación en proyectos inmo-
los habitantes conseguían en el comisariato de la biliarios o por compraventa de inmuebles.
compañía del ferrocarril. Los primeros pobladores
también levantaron viviendas de barro con varas Un último elemento que permite catalogar el pobla-
90 de trupillo y techos de zinc. A pesar de contar con miento de Ensenada como uno de transición está
Plano 3.7
Construcciones en serie

política
en Pescaíto en los años 30 y 40

Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH

relacionado con la disposición misma del espacio familiares o de compadrazgo. En estos patios los
en las primeras viviendas: una o máximo dos ha- árboles hacían las veces de linderos, no necesa-
bitaciones sin puertas y una sala que conducía al riamente a la manera de cercos vivos, sino como
patio. La cocina –una estufa de leña o carbón hecha hitos de demarcación, tal como lo indican expre-
en barro y posteriormente en ladrillo– estaba situa- siones como “el mango de Pedro Brekeman” o los
da fuera de la casa. En los fondos de los patios se “tamarindos de Ramona” (fig. 17). Los árboles de
disponía de un área enmontada que hacía las veces los espacios públicos, por el contrario, carecían de
de baño, si bien los habitantes instalaron con rela- nombre propio: bastaba con su nombre común –
tiva rapidez letrinas y pozos sépticos, gracias a la los almendros de la esquina o simplemente el palo
influencia de las urbanizaciones obreras. de uvita– para que cumplieran su función como
referentes espaciales.
Los patios fueron el lugar de socialización por ex-
celencia, tanto para la familia como para la comu- Estos grandes lotes fueron subdivididos a medida
nidad. No en vano, las viviendas se diferenciaban que crecían la familias y la demanda por vivien-
ante todo por el área construida y no por la exten- da. Como fue explicado más arriba, los terrenos
sión total del lote, puesto que los patios eran, por baldíos se agotaron rápidamente, y con el paso
así decirlo, ‘comunales’: como no existía una clara del tiempo –sobre todo a partir de la década de
demarcación entre una y otra vivienda, y el acceso 1950– la demanda y valorización de predios res-
desde la calle se daba por una entrada lateral, era tringió fuertemente el acceso a lotes para edificar
posible ingresar a cualquiera de las propiedades a vivienda propia. Fue así como el gran patio quedó
través de los patios. Esta organización del espacio, expuesto a un proceso de subdivisión para alojar
estructurada en torno al patio ‘comunal’, refleja- otras viviendas, similares a la casa original o de
ba y a la vez reforzaba los vínculos sociales, dado menores dimensiones, de acuerdo a la capacidad
que los habitantes solían estar unidos por lazos económica de cada familia. En el segundo de los 91
Planos Vivos
Pescaíto
desarrollo histórico y
memoria viva
Pescaíto:

patios que nos sirven aquí de ejemplo (fig. 18), los


primeros lotes laterales tienen una superficie de
Entrada lateral cinco por cinco metros, mientras que los últimos
urbanas de Pescaíto,
Transformaciones

del fondo, pegados al cerro, miden cuatro por cua-


siglos XX-XXI

Cuarto Cuarto tro metros. Así mismo, los materiales de construc-


ción exhiben una enorme variedad, desde tablas y
zinc en paredes y techo hasta bloques de cemento
y tejas de Eternit. Las nuevas unidades no tienen
Sala Cocina Baño
ya patio trasero, como la vivienda original, pero sí
comparten un espacio común en su frente.

Figura 17. El patio Figura 18. El patio Barrio Norte: el barrio obrero
de Gracia Ríos, en de Gina Brekeman, de muelleros y ferroviarios
Ensenada, conserva también en
El auge portuario y ferroviario que se registró des-
buena parte de Ensenada, ha sido
sus características paulatinamente de finales del siglo xix, concomitante con el boom
originales. subdividido para bananero en la región, impulsó un acelerado pro-
Fotografía de Omar albergar nuevas ceso de urbanización. El sector que inicialmente
Cordero Durango viviendas.
albergó a los nuevos pobladores fue el actual Ba-
Fotografía de Omar
Cordero Durango rrio Norte, que empezó a ser construido hacia 1914
como respuesta a las necesidades habitacionales
de los trabajadores del puerto. El eje de pobla-
miento lo constituyeron los terrenos adyacentes a
la vía férrea hacia el norte, en un área de la ciudad
dominada hasta los años 30 por baldíos, playones
y salinas. A diferencia del poblamiento espontá-
neo de Ensenada, el de Barrio Norte fue ejecutado
en gran medida a través de proyectos inmobilia-
rios de iniciativa privada, basados en la vivienda
arquetípica del periodo republicano (ca. 1880-1930)
en la arquitectura colombiana.

En líneas generales, cabe resaltar dos tipos de vi-


vienda: el “pasaje” y la que aquí denominaremos
simplemente ‘casa’. La principal diferencia –sin
que se haya tratado en ningún caso de una línea
divisoria inamovible– radica en las expectativas
de sus destinatarios. Mientras que los pasajes res-
pondieron a la demanda habitacional temporal de
Casa Casa Casa Casa
1980 2002 2002 2002 Casa los obreros (con o sin sus familias), sin proyección
2015
de largo plazo, las casas constituyeron soluciones
Patio común de vivienda para las familias que buscaban esta-
Casa
blecerse de manera permanente. Las diferencias
original Casa Casa Casa arquitectónicas entre un tipo y otro son menores,
2010 2014 2015 pues por lo general responden a una misma dis-
tribución del espacio y a una misma concepción:
92 viviendas de un piso sin antejardín, fachadas com-
política
Raiz
Algunas personas se resistieron a las ofertas de los RP
urbanizadores y optaron por montar tiendas y bares: en estos
casos, las subdivisiones tuvieron lugar varios años después,

Raiz socio-
económica
impulsadas las más de las veces por las necesidades de
vivienda de la familia del propietario”.
RE

a m b i e n ta l
Raiz
pletamente planas, cornisas de remate de la facha- en estos lotes de diez por veinticinco metros según RA
da, claraboyas para refrescar el interior y pisos el modelo arquitectónico republicano, tal como lo
altos respecto al nivel de la calle como precaución describe la arquitecta e historiadora Silvia Arango:
contra las inundaciones, entre otros elementos.

urbana
Más allá de las diferencias puntuales entre pasajes La casa-tipo que en esta época se propaga, puede

Raiz
y casas, salta a la vista un denominador común: describirse así: a) dos patios interiores: uno de recibo,
RU
el modelo estandarizado de construcción. De ma- ornamental, generalmente adornado con flores y otro
nera muy esquemática y a modo de ilustración, interno, de servicio, b) un salón, compuesto de uno o
presentamos en el plano 3.7 la distribución de las varios espacios, con ventanas a la calle, pero al cual se

Raiz socio-
c u lt u r a l
construcciones en serie que se difundieron en el accede indirectamente, a través del patio principal, c)
sector en los años 30 y 40. un comedor en el centro de la vivienda, separando los
dos patios, generalmente destacado por un tratamien- RC
En lo que se refiere a las casas, los lotes sobre los to diferente en sus muros y abierto con vidrieras al
que fueron edificadas no eran necesariamente ho- patio principal, d) una serie de alcobas, generalmente
mogéneos: de acuerdo a la forma de adquisición alineadas y comunicadas entre sí y a la vez con los

histórica
y su ubicación, sus dimensiones podían variar patios y corredores y e) unos espacios de servicio: una

Raiz
considerablemente. Los lotes podían ser adquiri- cocina grande (compuesta de uno o varios espacios) y
dos mediante compraventa o simple apropiación, un “W.C.” (un sanitario).36 RH
ya que en muchos casos se trataba de baldíos. Por
ejemplo, los lotes ubicados entre las calles 7 y 8, Para muestra, un botón: la casa de “Copacabana”,
entre careras 5.a y 6.a, que medían cincuenta me- situada en la calle 8 con carrera 6.a, ofrece un ejem-
tros de largo por veinte metros de ancho, fueron plo paradigmático del estilo republicano en Barrio
producto de procesos de ocupación informal du- Norte (fig. 19 en la siguiente página).
rante las primeras décadas del siglo xx, cuando el
límite de la ciudad hacia el norte lo constituía la En lo que a los pasajes respecta, estos aparecieron
calle 10, hoy avenida del Ferrocarril. En esos lo- en Santa Marta hacia 1910 y en Barrio Norte hacia
tes se asentaron principalmente los migrantes de 1930, ligados a la formación de la clase obrera, a la
los municipios bananeros, que llegaron a la ciu- especulación con suelo edificable y a los proyec-
dad para emplearse como coteros. Ahí levantaron tos de urbanización privados. La difusión de estos
viviendas rudimentarias en madera, sin sistemas pasajes fue un fenómeno nacional, como bien lo
sépticos ni de aprovechamiento de agua, que fue- señala la misma Silvia Arango: 

ron las últimas en ser reformadas.
Una de las modalidades arquitectónicas que se
La acelerada migración disparó los costos de vi- realizaron para la solución de vivienda para niveles
vienda y se constituyó por lo mismo en un alicien- de ingresos muy bajos fueron los “pasajes”, que
te de primer orden para la aparición de compañías consistían en un conjunto generalmente cerrado por
inmobiliarias y constructoras, que rápidamente se una puerta o verja, con una serie de piezas alineadas a
hicieron con muchos de los terrenos recién apro- lado y lado y cocinas, lavaderos y sanitarios comunes.
piados. Los terrenos adquiridos por las compañías Una familia ocupaba uno o dos cuartos y compartía
fueron subdivididos en lotes de diez por veinticin- los servicios con otras 10 ó 15 familias. Los intentos
co metros. Algunas personas se resistieron a las contemporáneos de diseñar inquilinatos, poseen,
ofertas de los urbanizadores y optaron por montar pues, un antecedente histórico en estos pasajes.37
tiendas y bares: en estos casos, las subdivisiones
tuvieron lugar varios años después, impulsadas
las más de las veces por las necesidades de vivien- 36 Silvia Arango, Historia de la arquitectura en Colombia. Bogotá: Centro
da de la familia del propietario. En líneas genera- Editorial y Facultad de Artes, Universidad Nacional de Colombia, 1993
[1989], p. 140.
les, las casas de Barrio Norte fueron construidas 37 Silvia Arango, Historia de la arquitectura en Colombia, pp. 144 y 146.
93
Precisar cuántos bares existieron entre los años
Planos Vivos
Pescaíto

20 y los 60 es motivo de frecuentes diálogos y


remembranzas. Muchos de estos lugares quedaron
impresos en el imaginario colectivo, y todavía hoy es
desarrollo histórico y

posible identificar unos cuantos, como ‘El 5 y 6’, ‘Arturo


memoria viva

Pinedo’, ‘El Internacional’, ‘Mercedes Batista’, ‘La Chifla’


Pescaíto:

o ‘La Konga’ ”.
urbanas de Pescaíto,
Transformaciones

siglos XX-XXI

En Barrio Norte, un ejemplo de estos pasajes, que La masificación de estos pasajes, que buscaba Figura 19. Planta
aquí llamaremos de ‘tipo inquilinato’, lo fue el no solo dar respuesta a la creciente demanda e imágenes de
“Copacabana”, casa
conocido como “El 5 y 6” de José Sierra, ubicado de vivienda, sino además mejorar la calidad de
arquetípica del
en la calle 8 con carrera 5.a, que fue también un vida de sus habitantes, se vio facilitada por las estilo republicano
bar durante varios años. Este pasaje llegó a tener ventajas en su construcción. Entre dichas venta- en Pescaíto.
quince unidades de vivienda en dos patios conti- jas cabe señalar la estandarización del diseño, la De izquierda a
derecha, en sentido
guos. El del fondo albergó los primeros cuartos, a introducción masiva del cemento y la sustitución
descendente: la
los que se sumaron dos segundos pisos hacia los del hierro por el acero. En Pescaíto, la presencia sala principal, el
años 40, pero son las habitaciones de ladrillo en el de maestros y albañiles atraídos por las obras patio, la fachada, los
primer patio las que están mejor conservadas (fig. públicas y la primera modernización del puerto, corredores, el techo y
20). Las habitaciones fueron modificadas por los tanto como los estímulos financieros provistos el comedor.
Fotografías de Omar
propios inquilinos, quienes por cuenta propia les por el Banco Agrícola Hipotecario, generaron un Cordero Durango
adaptaron algunos servicios, como baño interno y ambiente propicio para la masificación de este
cocina, una vez fue claro que su estadía se prolon- diseño constructivo. Los pasajes ‘tipo vivienda’
garía más allá de lo previsto, o después de tomar se convirtieron así en un eficiente modelo de
la decisión de traer a vivir consigo a sus familias. urbanización de playones y baldíos, sobre todo
porque encajaban bien en la política de vivienda
No obstante, en Barrio Norte fue más común el popular que el Gobierno nacional buscó promo-
pasaje ‘tipo vivienda’, es decir, unidades residen- ver a través de la Ley 49 de 1927.
ciales compuestas, con espacios internos diferen-
ciados, y no simplemente una serie de cuartos (fig. La estandarización y la construcción seriada pro-
21). Se trataba de soluciones habitacionales de vi- pia de casas y pasajes no fueron óbice para que
vienda para obreros con áreas reducidas, que con- la creciente diferenciación social en Pescaíto se
taban con una sala, un comedor, una alcoba, un viera reflejada en las viviendas. Los materiales de
patio de ropas y –en el fondo del lote– cocina y construcción empleados y el grado de elaboración
baño compartidos. En sus inicios, la gran mayoría de las fachadas constituyeron los principales ele-
de estas soluciones de vivienda no satisfacían las mentos de distinción. Particular mención merece
mínimas normas de higiene y salubridad. Estos aquí la práctica de ponerle nombre a las viviendas,
pasajes fueron habitados por familias de obreros, un gesto de personalización y distinción que se
mientras que los de ‘tipo inquilinato’ fueron ocu- difundió en todo el sector durante las décadas de
padas, en términos generales, por el obrero solo o 1940 y 1950, y que sin duda reforzó la apropiación
por grupos pequeños de dos o tres obreros, según simbólica del territorio en la fase de consolidación
el tamaño de la habitación. urbana. Muchas denominaciones respondían a los Figura 20. Los
nombres o apodos de los propietarios, así como a patios de “El 5 y 6” y
sus pasajes de ‘tipo
La participación cada vez más activa de las coo- los toponímicos que permitían identificar su pro-
inquilinato’.
perativas de trabajadores en proyectos de urba- cedencia, pero ni unos ni otros agotaron los temas Fotografías de Gabriela
nización, la promulgación de la Ley 46 de 1918 de inspiración de los pescaíteros y las pescaíteras Díaz Montealegre y Omar
Cordero Durango
para garantizar estándares mínimos de higiene a la hora de bautizar sus viviendas (fig. 22).
en la vivienda “para la clase proletaria”, así como
las mejores condiciones salariales gracias a la or- De todos los lugares de Barrio Norte, la calle 8,
ganización sindical, son todos factores que con- conocida también como la calle de Las Piedras y
tribuyeron a mejorar sustancialmente las condi- posteriormente como la de la Tolerancia, tuvo el
94 ciones sanitarias de los pasajes ‘tipo vivienda’. mayor significado en la construcción territorial.
política
Antiguo

Raiz
jardín
Patio
RP
Antiguo
Baño Antepatio granero
antepatio

Raiz socio-
económica
Cocina Corredor Comedor
Cuarto principal
Cuarto

RE
Sala Cuarto
Sala principal

a m b i e n ta l
Raiz
Puerta lateral Ventana Ventana Ventana

RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH

95
Figura 21. Pasaje
Angosto: un pasaje
‘tipo vivienda’
en la calle 9 con
carrera 5.a.
Planos Vivos

Fotografía de Gabriela
Díaz Montealegre
Pescaíto
desarrollo histórico y
memoria viva
Pescaíto:
urbanas de Pescaíto,
Transformaciones

siglos XX-XXI

Figura 22. Una


muestra de las
casas con nombre
en Pescaíto
(de izquierda a
derecha, en sentido
descendente): la
Nena Petra (calle 6
con carrera 5.a), 1917
(calle 7 con carrera
5.a), Gallo (calle 7 con
carrera 5.a), Buenos
Aires (calle 4 con
carrera 9.a), Olga
(calle 7 con carrera
8.a) y Riohacha (calle
6 con carrera 8.a).
Fotografías de Gabriela
Díaz Montealegre

96
Plano 3.8
Plano de Santa Marta del ingeniero Oswaldo R.

política
Bukcle (1930; fragmento).

Raiz
Fuente: http://www.elinformador.com.co

RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH

Por su cercanía tanto al puerto como a la vía férrea, daban unos meses, después se iban para Estados Uni-
esta calle pronto se convirtió en un espacio de con- dos, para Aruba o se devolvían para sus países. A esas
fluencia de obreros, marineros, comerciantes y toda mujeres le decíamos “las meretrices”, y habían unas
persona relacionada con la actividad bananera. No que no atendían sino a los que ellas decían.38
es casualidad, entonces, que en ella se asentara la
actividad comercial del sector, sostenida hasta la Estos lugares se convirtieron en el lugar de sociali-
década de 1940 por tiendas misceláneas en las que zación de los “vaporinos” (marineros y tripulación
se vendían todo tipo de víveres, productos de aseo, de los barcos), “muelleros” (trabajadores de los mue-
gas para las lámparas, etc. Junto a las tiendas, el lles, especialmente coteros) y “ferroviarios” (trabaja-
paisaje urbano de la calle 8 estuvo dominado por dores de los ferrocarriles), quienes emergían como
bares, cantinas y prostíbulos, en los que trabajaron una clase obrera alimentada por viejas tradiciones
mujeres de todas las regiones del país e incluso del organizacionales y nuevas corrientes contestata-
extranjero, como bien lo rememora Orlando Calero, rias. El hábito de frecuentar bares y prostíbulos no
vecino de Barrio Norte: se restringió al enclave bananero, aunque fue par-
ticularmente pronunciado en él, como lo explica el
Desde la carrera 2.a por toda la calle 8 eran bares; ha- historiador Mauricio Archila Neira:
bían mujeres, habían burdeles. En todas esas casas al-
quilaban piezas. Esto era lleno de marineros, de mue- De hecho, contra el querer de muchos sectores socia-
lleros, gente del mercado que quedaba en la plaza de la les y aun de dirigentes obreros, los bares y tabernas
iglesia de San Francisco [...]. Venían mujeres del interior, jugaron un papel cohesionador en la naciente clase
sobre todo; claro que habían costeñas de Barranquilla, obrera. Esto es más claro aún para las concentracio-
cartageneras, que venían de Fundación y Pivijay. Ha- nes obreras en aquellas actividades extractivas de
bían unas jamaiquinas, francesas, holandesas; habían
mujeres españolas que se venían en los barcos y se que- 38 OrlandoCalero, vecino de Barrio Norte, 84 años de edad. Entrevista:
28 de enero de 2016.
 97
Figura 23. Las sedes de algunos de
los antiguos bares emblemáticos
sobre la calle 8 (de izquierda a
derecha, en sentido descendente):
Planos Vivos

El 5 y 6, Arturo Pinedo, 7 de Agosto,


Pescaíto

Copacabana, El Internacional, El
Pereira, Río Bar, María Chiquita,
Mercedes Batista, El Nuevo Mundo,
La Konga y La Chifla.
Fotografías de Gabriela Díaz Montealegre
y Omar Cordero Durango
desarrollo histórico y
memoria viva
Pescaíto:
urbanas de Pescaíto,
Transformaciones

siglos XX-XXI

98
Trabajadores de la
nueva línea férrea en
1966.

política
Cortesía de Arturo Amador

Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
propiedad del capital norteamericano (especialmente Pescaíto: el nuevo territorio
en la zona bananera de la Costa Atlántica y en la pe- El éxito de Barrio Norte, que para mediados de la
trolera del Magdalena medio). Allí, por tratarse de una década de 1920 ocupaba unas treinta manzanas, RC
típica economía de enclave, los obreros, que vivían en dio impulso renovado a las iniciativas y proyectos
hacinamientos humanos de reciente formación, no te- de urbanización en el sector. En el costado oriental
nían más diversión que acudir a dichos sitios.39 de la plaza de La Castellana, por ejemplo, el club

histórica
cooperativo de Gabriel y César Donado asumió la

Raiz
La clausura de la zona de tolerancia en la calle de construcción de cien casas para obreros. La Uni-
Las Piedras se dispuso por decreto en el año de ted Fruit Company, por su parte, planeó la cons- RH
1961. Tal como lo recuerda Tomás Fuentes, vecino trucción de un barrio de cien casaquintas en los
de Pescaíto, “las hermanas y el obispo le venían terrenos de la coquera de Rafael Emilio Infante,
exigiendo al Gobierno que acabara con esa vaina, proyecto que finalmente no se concretó. El plano
porque ya se salía de las manos: los bares, los bur- del ingeniero Oswaldo R. Bukcle de 1930 (plano 3.8)
deles ya no estaban sólo en la calle 8, sino que se permite darse una idea del crecimiento urbano en
habían extendido por todo el barrio, hasta frente a el sector: el barrio de Pescaíto existía apenas en
la escuela por los lados de La Castellana, cerquita germen, en una zona con apenas ocho manzanas
a la iglesia por la [calle] 6. Entonces le dijeron al al- proyectadas entre los cerros del Norte y la calle
calde que cerrara todos esos negocios”.40 Precisar 4, entre las carreras 5.a y 10. La urbanización de la
cuántos bares existieron entre los años 20 y los 60 Sociedad Unión comprendía doce manzanas, si-
es motivo de frecuentes diálogos y remembranzas. tuadas entre las calles 5 y 9 y las carreras 7.a y 9.a.
Muchos de estos lugares quedaron impresos en Al este se encontraba ya loteado el barrio Olaya
el imaginario colectivo, y todavía hoy es posible Herrera, proyectado por la Sociedad Constructora
identificar unos cuantos, como “El 5 y 6”, “Arturo del Hogar entre las calles 3 y 9 y las carreras 9.a y
Pinedo”, “El Internacional”, “Mercedes Batista”, “La 11, si bien tendrían que pasar muchos años antes de
Chifla” o “La Konga” (fig. 23). En todos los sitios se que todas las casas hubieran sido edificadas, como
expendía licor, y en la mayoría de ellos funciona- lo recuerda Julio García: “Esto era puro solar. Has-
ban prostíbulos, con habitaciones acondicionadas ta este pedazo había casas, porque más para atrás
en los patios o pasillos. Las mujeres que trabaja- eran puros cocos, fincas. La gente tenía su peda-
ban en estos lugares vivían en los pasajes ‘tipo in- zo de patio, pero no había muchas casas, porque
quilinato’ que proliferaron alrededor de la calle 8, cuando llovía por acá se formaba un arroyo que
que para la década de 1950 se extendía de manera bajaba por la [carrera] 10, iba a dar a la [calle] 6 y
continua apenas hasta la carrera 8.a. bajaba hasta el mar [...]. De las casas que recuerdo
era esta, la del frente, todas en tabla y habían otras
39 Mauricio Archila, “La clase obrera colombiana (1886-1930)”, en Álva- de barro en la carrera 3.a. Las casitas mejores eran
ro Tirado Mejía (dir.), Nueva historia de Colombia, vol. III: Relaciones de los portuarios”.41
internacionales. Movimientos sociales. Bogotá: Planeta, 1989, pp. 219-
244, aquí 229-30.
40 Tomás Fuentes, vecino de Pescaíto, 94 años de edad. Entrevista: 30 de 41 Julio García, vecino de Olaya Herrera, 74 años de edad. Entrevista: 17
marzo de 2016. de marzo de 2016. 99
Planos Vivos

La construcción del Ferrocarril del Atlántico, que a partir


Pescaíto

de 1961 conectó el interior del país con Santa Marta, le


deparó a la región un inédito auge turístico por cuenta de los
visitantes que venían en el autoferro, el ‘Expreso del Sol’ y el
desarrollo histórico y

‘Expreso de Lujo Marubare’ ”.


memoria viva
Pescaíto:

Los proyectos de urbanización dirigidos por coo- desde Urabá en 1964, y un año después cerró todas
perativas y constructoras se concentraron en al- sus operaciones en la antigua zona bananera. Pese
urbanas de Pescaíto,
Transformaciones

gunos lugares, mientras que en otros se adelan- a la disminución de las exportaciones de banano,
siglos XX-XXI

tó un loteo más espontáneo, que aunque no fue otras actividades como la construcción de obras
mediado institucionalmente, se insertó en mayor públicas, la edificación de vivienda, la ampliación
o menor medida en la lógica del poblamiento pla- del ferrocarril y la modernización del puerto en-
nificado imperante. Hacia 1940, la ocupación del tre 1953 y 1958 evitaron que la fuerte caída en la
gran Pescaíto se había consolidado plenamente. demanda de trabajo se tradujera en un desempleo
En comparación con la fase de despegue, sobre generalizado.
todo en el actual barrio de Ensenada, en la fase de
consolidación tuvieron mayor peso los intereses Paralelamente, la naciente industria turística reo-
inmobiliarios formales, las sociedades y coopera- rientó de manera definitiva la economía de la ciu-
tivas, la oferta planificada de lotes y viviendas, así dad en los años 60. La construcción del Ferrocarril
como las nuevas exigencias de salubridad. del Atlántico, que a partir de 1961 conectó el inte-
rior del país con Santa Marta, le deparó a la región
En el plano 3.9 pueden ser apreciados los desarro- un inédito auge turístico por cuenta de los visitan-
llos en la urbanización del sector: Barrio Norte se tes que venían en el autoferro, el “Expreso del Sol”
encuentra plenamente consolidado; Pescaíto es y el “Expreso de Lujo Marubare”. Este primer im-
apenas una proyección en términos urbanos, con pulso sirvió de incentivo para la consolidación del
algunas ocupaciones dispersas; Ensenada, cuyo sector hotelero y para la aparición de incipientes
poblamiento es el más antiguo, solo se extiende servicios turísticos en la bahía, que más adelante
hasta las faldas de los cerros; y San Martín empie- fueron extendidos a otros lugares como Gaira y
za a conformarse como barrio propiamente dicho. Taganga. El auge turístico basado en el ferroca-
Cabe resaltar además las propiedades de la Curia, rril no podía durar indefinidamente, pues iba a
tanto en el lugar en el que estuvo emplazada anti- contrapelo del fomento especial que el transporte
guamente la cancha de La Castellana como en el por carretera recibió en todo el país en la segunda
sitio que ocupa en la actualidad. También sobresa- mitad del siglo xx, sobre todo desde los años 70,
len las fincas de Campmartín y la Coquera, los te- en claro detrimento del desarrollo ferroviario. Aun
rrenos de José Lacouture y los predios adquiridos así, el aumento del turismo que había facilitado el
por la Sociedad Unión y la Sociedad Constructora tren dejó sentadas las bases de un renglón econó-
del Hogar (urbanizadora del barrio Olaya Herrera). mico que supo sacar pleno provecho de las nuevas
Los terrenos circundantes siguen siendo baldíos, conexiones viales y aéreas con el interior.
esencialmente playones y solares. Los cerros si-
guen dividiendo el sector en pequeñas ensenadas En Pescaíto, los nuevos desarrollos económicos
interiores, todavía incomunicadas entre sí. estuvieron acompañados por un mejor equipa-
miento urbano, sobre todo en materia de bienes
El arraigo territorial y el sentido de pertenencia de públicos, infraestructura vial y servicios educa-
los habitantes de Pescaíto fue fundamental para tivos. La llegada a Pescaíto de las Hermanas Mi-
que el sector pudiera adaptarse a las profundas sioneras de la Madre Laura en 1953, encargadas en
transformaciones que el declive de la industria ba- un principio de la escuela anexa a la capilla del
nanera trajo consigo. En la década de 1950 las ex- Carmen, constituyó en este sentido un auténtico
portaciones provenientes del Magdalena se estan- hito histórico: su convento, ubicado entre las ca-
caron, y a partir de 1960 la United Fruit Company lles 5 y 6, al lado de la iglesia sobre la carrera 8.a, se
dejó de producir directamente en el departamento convirtió en el núcleo de la escuela que llevaría el
y se limitó a comprarles banano a sus asociados. nombre de Madre Laura, en honor de la fundadora
100 La compañía realizó las primeras exportaciones de la orden misionera, y que hoy en día es uno de
Plano 3.9

política
1 Cerro de la Salina

Raiz
2 Cerro de la Virgen
3 Cerro de Rincón Guapo
RP
4 Cerro de Santa Marta

Raiz socio-
económica
Playa de
Pescaíto
RE

Playa de
Boquerón

a m b i e n ta l
Playa de 4

Raiz
San Martín
Ensenada
RA

urbana
Pescaíto

Raiz
San 2
Martín
RU

La Castellana Curia
Sociedad

Raiz socio-
1 Constructora

c u lt u r a l
del Hogar
Curia
José
Lacouture

Puerto RC
de Santa Barrio Norte Sociedad
Marta Unión
Finca

histórica
Campmartín

Raiz
La Coquera

RH

los colegios femeninos más tradicionales y de ma- de ocio y esparcimiento, y constituía un sitio de
yor renombre en Pescaíto y en toda Santa Marta. encuentro no solo para los vecinos, sino para los
En el mismo año de 1953, la orden de las Hijas de samarios en general, sin distingo de edad o de
María Auxiliadora (Hermanas Salesianas) tomó clase social. Como tendremos oportunidad de ex-
las riendas de la nueva Escuela Normal Superior, poner a continuación, la historia y la identidad de
construida en predios de la finca Campmartín en- Pescaíto están ligadas indisolublemente a las me-
tre 1944 y 1951. Una década después, en 1964, el Cole- tamorfosis de La Castellana. El futuro urbano del
gio John F. Kennedy fue inaugurado en los predios sector debe ser pensado necesariamente a partir
donde estaba situada la –ya entonces legendaria– de esta estrecha relación.
cancha de fútbol de La Castellana.

Inaugurada en 1916, la cancha se había transforma-


do para entonces en un referente urbano de primer
orden en Pescaíto. La cancha gozaba del favor de
los pescaíteros y de las pescaíteras en sus ratos
101
Varias versiones coinciden en afirmar que a partir de 1908
los tripulantes de las navieras británicas saltaban a tierra con
balones de cuero bajo el brazo, con el propósito de jugar fútbol
Planos Vivos
Pescaíto

en la cancha que para tal efecto habían demarcado en dichos


playones. Ya en 1909 se registró un partido entre un equipo de
la United Fruit Company, conformado por ingleses, y un equipo
desarrollo histórico y

samario, que salió goleado”.


memoria viva
Pescaíto:

Ordenamiento espacial en Pescaíto Nada permite dimensionar mejor la importancia de


la cancha de fútbol de La Castellana en la historia de
Ordenamiento

Pescaíto que las palabras de Elías Henríquez Pardo:


espacial en

L a cancha de fútbol de L a Castellana:


Pescaíto

el ordenador simbólico Este es el verdadero templo del fútbol colombiano, por-


Pescaíto y la cancha de La Castellana están uni- que fue aquí en Pescaíto donde se empezó a jugar el
dos a una miríada de nombres ilustres en el fútbol fútbol, porque el fútbol entró por Santa Marta y viajó en
colombiano. Cualquier entrenador o entrenadora los mismos barcos con el banano. No digo que no ha-
tendría problemas para formar un equipo de alta yan otros lugares, pero esta cancha es la que tiene más
competición con los jugadores “históricos” de un historia, y no de ahora. Hace más de un siglo que en
único sector en una ciudad intermedia. En Pes- este barrio se viene jugando, al principio con unas pe-
caíto también se vería a gatas, pero no por sus- lotas hechas con vejiga de vaca, con pelotas de trapos, a
tracción de materia, como probablemente sería el veces con bolas que se le ponían cueros, ya después con
caso en cualquier otro lugar que venga a la mente, los balones, cuando los dirigentes miraron que había
sino por la profusión de jugadores de primer nivel: mucho jugador bueno [...]. Queremos esta cancha por-
quien se arriesgue a dar la alineación titular del que esto no lo hizo ningún gobierno, fuimos nosotros
equipo de Pescaíto de todos los tiempos, se ve for- mismos los que desmontamos el terreno, lo nivelamos
zado a dejar en el banco –de manera más o menos para que se no se inundara, pusimos unos troncos de
arbitraria– a uno o dos jugadores de primer nivel coco en las porterías. ¿Y cuál gradería? Eso al princi-
por puesto. No es nada fácil proponer el onceno pio tocaba meterse debajo de los trupillos, porque todo
ideal de los pescaíteros –nativos o por adopción–, esto era una trupillera, y así la gente venía a jugar, otros
sin que alguien encuentre inmediatamente repa- a molestar la vida, a echar risas, a verse con la novia;
ros válidos a la omisión de cinco o seis nombres. desde la mañanita ya había gente como hoy, hasta que
Aquí nos sumamos, en un esquema clásico wm, a lo venían a buscar las mamás porque a veces ni íbamos
un ejercicio que puede consumir tardes enteras en a comer por estar jugando [...]. La cancha es el símbolo,
Pescaíto, en medio de animadas discusiones: en el ícono de Santa Marta donde nació el fútbol: la gente
el arco, Maximiliano “Chimilongo” Robles; en la por fuera conoce a Santa Marta por las playas, por el
zaga, Alberto Gamero, Justo Palacio Llanes y Ós- Pibe, por Pescaíto y por el puerto; cuando llegan los
car Bolaño; los dos medios retrasados o halfbacks, turistas tienen que venir a ver La Castellana, se toman
los infatigables Eduardo Julián Retat y Oswaldo la foto y dicen: “Estuve en Santa Marta”.43
“Pescaíto” Calero; los interiores, que no necesitan
ninguna presentación, Alfredo “el Maestro” Aran- Entre las ciudades colombianas que se disputan el
go y Carlos “el Pibe” Valderrama; y en punta, An- reconocimiento como “cuna del fútbol colombia-
thony “el Pipa” de Ávila, Alex “Didí” Valderrama y no”, Santa Marta es sin lugar a dudas una de las
la Loca, la impredecible brisa samaria, letal en los que mejor ha sabido dar lustre a sus credenciales.
balones detenidos42. En el relato samario, la introducción del fútbol está
ligada a la presencia permanente de ingleses –sus
inventores– en la ciudad, involucrados en la cons-
trucción del ferrocarril y en la actividad comercial
que giraba en torno al banano: entre los ‘bienes’
42 Elesquema de juego wm fue concebido a mediados de la década de
1920 por el técnico del Arsenal, el inglés Herbert Chapman, como res-
importados a través del puerto a comienzos del
puesta a los cambios en la ley de fuera de lugar, y se constituyó en
una de las innovaciones tácticas más influyentes en el fútbol de la
primera mitad del siglo xx. El esquema contemplaba tres defensas,
dos medios retrasados o halfbacks, dos interiores o inside forwards y 43 Elías Henríquez Pardo, vecino del barrio de Pescaíto, 82 años de edad.
102 tres delanteros. Entrevista: 30 de marzo de 2016.
Dos momentos estelares Quant, Laborde y Charris.
del fútbol pescaítero: En cuclillas (izq.-der.):
Maiguel, Silva, Valderrama

política
la selección juvenil del
Magdalena, campeona (Yico), Henríquez,

Raiz
nacional en 1980, y la Valderrama (el Pibe), Mora
selección Colombia y González. RP
en el año de 1977. Los • Selección Colombia (abajo).
pescaíteros –de nacimiento De pie (izq.-der.): Retat,
o por adopción– aparecen

Raiz socio-
Caicedo, López (Pocillo),

económica
resaltados en negrilla. Calero, López y Zárate. En
cuclillas (izq.-der.): Vilarete,
• Selección Magdalena
Bolaño, Ortiz, Cáceres y
(arriba). De pie (izq.-der.):
Umaña. RE
Deluque, León, Hernández,
Cortesía de Elías Henríquez
Bolaño, Gamero, Zuleta, Pardo y http://caracol.com.co

a m b i e n ta l
Raiz
El fútbol gozó de un primer periodo de populari- RA
zación gracias a su práctica en espacios públicos
como los playones, a la vista de pescadores y obre-
ros, pero su organización y difusión corrió sobre

urbana
todo por cuenta de las élites de Santa Marta. Los

Raiz
jóvenes de familias adineradas, que eran los úni-
RU
cos que podían comprar los balones, los zapatos
y los uniformes reglamentarios, estaban plena-
mente conscientes del poder de convocatoria y del

Raiz socio-
c u lt u r a l
reconocimiento social aparejados a la naciente pa-
sión futbolera. No en vano, estos jóvenes fundaron
en el año de 1916 el club social Zamacois, dedicado RC
al fomento de las artes y el deporte.

Como la cancha en los playones de la Aduana se

histórica
había quedado pequeña para la práctica del fútbol,

Raiz
dada la creciente presencia de personas en bus-
ca de recreación, los miembros del club aprove- RH
charon sus conexiones políticas para hacerse con
un nuevo terreno de juego. El municipio de Santa
Marta le cedió al club un lote en los baldíos de Pes-
caíto, entre las calles 5 y 6 y las carreras 6.a y 8.a,
donde están ubicados en la actualidad el colegio
John F. Kennedy y el parque público de Pescaíto
(plano 3.10). El terreno, conocido en un primer mo-
mento como Ciudad Perdida, adoptó rápidamente
el nombre de La Castellana. En la adecuación de
siglo xx, el fútbol fue uno de los que causó mayor la cancha participaron los socios del club y los ha-
impacto no solo en la ciudad, sino en todo el país. bitantes del sector, y desde el momento mismo de
su apertura a finales de 1916 se erigió en referente
El cargue y descargue podía tomar varios días, de obligado para todos los amantes del fútbol en la
acuerdo al tonelaje de los barcos. El tiempo prome- Santa Marta. Como lo recuerda Carlos “Jaricho”
dio de carga de un barco era de cinco días, tiem- Valderrama Puche, vecino del barrio de Pescaíto,
po en el que la tripulación permanecía en tierra, “los arcos estaban uno en la carrera 6.a y el otro
mientras los coteros trabajaban sin descanso. Los casi en la 8. Tenía más de cien metros y el ancho
playones de la Aduana frente a la bahía, entre las todo lo que quisiera, porque en ese tiempo no ha-
calles 11 y 13, eran aprovechados por los marine- bían casi casas. Por las tardes, la cancha era el
ros para el ejercicio físico durante su estadía en la centro del barrio, y yo creo que de la ciudad, por-
ciudad (plano 3.10). Varias versiones coinciden en que se venían todos los portuarios, pescadores,
afirmar que a partir de 1908 los tripulantes de las todos los que terminaban de trabajar, y la gente de
navieras británicas saltaban a tierra con balones Manzanares y del centro, ricos y pobres, pendien-
de cuero bajo el brazo, con el propósito de jugar tes de los partidos”.44 La ubicación de la cancha en
fútbol en la cancha que para tal efecto habían de- Pescaíto contribuyó sin duda a la rápida difusión
marcado en dichos playones. Ya en 1909 se regis- del fútbol por fuera de los círculos de la élite sa-
tró un partido entre un equipo de la United Fruit
Company, conformado por ingleses, y un equipo “Jaricho” Valderrama Puche, vecino de Pescaíto, 84 años de
44 Carlos
samario, que salió goleado. edad. Entrevista: 5 de marzo de 2016. 103
Club Deportivo Santa
Marta (ca. 1917)
Fuente: José Rafael Dávila
(et al.), La historia de
Santa Marta a través de
la fotografía, en http://
Planos Vivos

www.banrepcultural.
org/blaavirtual
Pescaíto
desarrollo histórico y
memoria viva
Pescaíto:
Ordenamiento
espacial en

maria. Esta popularización se vio reflejada en la sindicalistas de la Sociedad Unión que se encon-
Pescaíto

aparición de equipos como el Boyacá, el Nariño, el traban encarcelados. Las autoridades accedieron a
Rápido y el Colón, conformados por jóvenes de los la petición y de ese modo recuperaron la libertad
diferentes estratos sociales. muchos detenidos.

Un hito en la historia futbolística de la ciudad, El triunfo olímpico sirvió de estímulo para la ha-
ligado de manera inextricable a la cancha de La bilitación de nuevas canchas –muchas de ellas
Castellana, lo fue la inclusión del fútbol en la pri- poco más que potreros y playones desbrozados–
mera edición de los Juegos Olímpicos Nacionales a lo largo y ancho de la ciudad. Pescaíto no fue
(hoy Juegos Deportivos Nacionales), celebrados en la excepción, y contribuyó a esta fiebre de fútbol
Cali en 1928. Ese año se conformó por primera vez con nuevos campos deportivos, como la cancha de
la selección de fútbol del departamento del Mag- Bermúdez en la calle 3 con carrera 10, donde tam-
dalena, que fue conocida como la “Olímpica” por bién se practicaba béisbol, o la ABC, en la calle 8
el carácter del certamen. Esta selección entrenaba con carrera 12, en predios de la actual Normal Su-
en La Castellana, que era el escenario más popu- perior María Auxiliadora, antigua finca de Camp-
lar y mejor adecuado de la ciudad, sin contar con martín. De los nuevos escenarios, el más impor-
que muchos de sus jugadores provenían del Club tante fue sin duda la cancha de “El Nuevo Mundo”,
Deportivo Santa Marta. El Deportivo, tal como fue adyacente a la de La Castellana, pero en sentido
conocido en la ciudad, había sido fundado por los norte-sur. Esta cancha fue instalada entre las ac-
socios del antiguo Zamacois, y tenía precisamen- tuales carreras 4.a y 5.a, y dio origen a un callejón
te como sede la cancha de La Castellana. Entre la que hasta finales de los años 90 se constituyó en
nómina que integró el equipo campeón se encon- un referente urbano en el sector: el “Rincón Gua-
traba un pescaítero, el defensor Aníbal “el Pollo” po”. El callejón partía de la actual calle 5, llegaba
Llanes, que pese a no ser titular terminó disputan- al pie de los cerros del Norte y los remontaba unos
do el partido crucial frente a Barranquilla. El título cuantos metros para adentrarse en la zona que
le valió a la cancha de La Castellana el remoquete hoy ocupa Villa Tabla.
de la “Olímpica”, y todavía hoy se afirma que “en
La Castellana se jugaron los Olímpicos”, aunque La proliferación de canchas refleja la entroniza-
en honor a la verdad sería mejor precisar que “en ción definitiva del fútbol en Pescaíto y su difusión
La Castellana jugaron los Olímpicos”, es decir, los como seña de identidad entre sus habitantes. No
campeones del torneo nacional de 1928. obstante, dos situaciones diferentes pusieron a
prueba el arraigo del “deporte rey” en suelo pes-
Magdalena se consagró campeón el 20 de diciem- caítero. Por una parte, la construcción del estadio
bre de 1928, en medio de un ambiente político mar- Eduardo Santos en 1950, así como el ascenso del
cado por la movilización sindical y enlutado por la Deportivo Santa Marta (el futuro Unión Magda-
masacre de las bananeras. Unas semanas después, lena) al fútbol profesional un año más tarde, le
el 4 de febrero de 1929, los campeones nacionales restaron protagonismo a Pescaíto como meca
llegaron a Ciénaga (Magdalena), lugar de la ma- del fútbol samario. Por otro lado, si en el sector
sacre. Allí les solicitaron tanto al general Carlos sobraba vocación deportiva, faltaba espacio para
Vargas Cortés, quien había ordenado el ataque a la expansión urbana. Ante el crecimiento pobla-
los huelguistas, como al jefe civil y militar de Cié- cional y la falta de equipamientos urbanos, los
104 naga, el capitán Luis Enciso, la libertad de algunos lotes ocupados por las canchas fueron destina-
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

La cancha de La dos, entre otros usos, para la construcción de La Castellana, que es el nombre de la cancha que
Castellana en la centros educativos, la instalación de parques y la existió donde está hoy el colegio Kennedy”.46

urbana
actualidad, con su
edificación de vivienda. Entre finales de los años

Raiz
grama sintética.
Cortesía del Banco
40 y finales de los años 50, Pescaíto tuvo que sa- El 16 de julio de 1968, Henríquez Pardo se reunió con
RU
Interamericano de crificar sus canchas más importantes en aras del un grupo de dirigentes deportivos, entre ellos Ru-
Desarrollo (BID)
desarrollo urbano, incluyendo la emblemática de bén Arango Medina, Jaime Jiménez Lubo, Alberto
La Castellana. Flórez, Luis López Castañeda y Moisés Moreno

Raiz socio-
c u lt u r a l
Carlos “el Pibe” Pinedo, para fundar La Corporación de Fútbol de
Valderrama y Elías Los pescaíteros no se quedaron de brazos cruza- Pescaíto. Entre las funciones que le fueron asigna-
Henríquez Pardo
dos, y un grupo de dirigentes deportivos, con Elías das cabe destacar el cuidado y el mejoramiento de RC
(primero de izquierda
a derecha) en La Henríquez Pardo a la cabeza, se comprometió con la cancha, el desarrollo de torneos de fútbol y la
Castellana, cuando la construcción de un nuevo escenario deportivo. búsqueda de nuevos talentos deportivos. Un año
todavía tenía su La nueva cancha, inaugurada en 1954, fue el re- después, algunos vecinos del sector invadieron la

histórica
campo de tierra y
sultado de la apropiación de un amplio playón de cancha, pues argumentaban que esos terrenos aún
arena.

Raiz
Cortesía de Elías
propiedad de la Curia de Santa Marta, ubicado al eran de la Curia y confiaban en que la administra-
Henríquez Pardo lado de la antigua cancha de La Castellana, entre ción eclesial no se opondría a sus reivindicacio- RH
las calles 6 y 7: nes. Gracias a la intervención de la Corporación y
del director de la Junta Administradora Seccional
Cuando ya dijeron que la cancha era para un colegio, de Deportes (Jundeportes Magdalena), Carlos An-
con otros hombres nos metimos de a poquito a lim- gulo Diazgranados, fue posible desalojar la can-
piar el lote, que estaba lleno de trupillos. Eso era una cha y llegar a un acuerdo con la Curia para que el
laguna, por eso mismo no se hizo antes la cancha ahí, lote pasara a manos del municipio.
pero esta vez tocaba, porque no había más lotes así de
grandes. Con la gente se limpió y se fue rellenando, se En 1971, la Corporación consiguió el apoyo de Jun-
le pidió permiso a la Curia y dijeron que sí podíamos deportes, del Instituto Colombiano del Deporte
jugar ahí, hasta que ya el terreno prestaba. Entonces (Coldeportes) y del parlamentario cienaguero Mi-
pusimos los arcos, que eran tres palos de cocos ama- cael Cotes Mejía para levantar muros de cerra-
rrados con cáñamo que conseguíamos en el puerto, miento y realizar obras de drenaje y alumbrado
y así se empezó a jugar, porque la gente quería jugar nocturno. Veinticinco años después de las prime-
en Pescaíto. Los curas no dijeron nada, porque ellos ras obras importantes de infraestructura, Colde-
pensaban que no íbamos a poder hacer nada.45 portes destinó una importante partida presupues-
tal para renovar la cancha. Los trabajos incluyeron
La cancha fue bautizada como “Scotland”, por la refacción de camerinos, la construcción de un
cuenta del patrocinio del empresario barranquille- depósito para almacenar agua, la instalación de
ro Pacífico Simán, dueño de una fábrica de camisas tanques elevados, obras de drenaje, la elevación
homónima. Con el paso del tiempo, fue rebautizada de las paredes, la compra de portones, el cambio
con el nombre de su antecesora, como lo recuerda de las mallas y el arreglo del alumbrado noctur-
el mismo Elías Henríquez Pardo: “La idea era con- no. Con recursos adicionales, gestionados nueva-
servar el nombre de la primera cancha, que tanto mente por el parlamentario Micael Cotes Mejía, se
le dio a Pescaíto y al fútbol colombiano; la idea era completó el relleno total del terreno.
que no se perdiera ese nombre, y entonces se puso
En 2005, la administración de La Castellana pasó
a manos de Coldeportes, que a su turno la cedió a
45 Elías Henríquez Pardo, vecino del barrio de Pescaíto, 82 años de edad.
Entrevista: 30 de marzo de 2016. 46 Ibidem. 105
Plano 3.10
Ubicación de la primera cancha en el playón de la
Aduana y de La Castellana a través del tiempo
Planos Vivos

Playón 1908 – 1916


Cancha 1916 – 1954
Pescaíto

Cancha 1954 – presente


Iglesia Virgen del Carmen
desarrollo histórico y
memoria viva
Pescaíto:

Calle 5

Calle 6

Puerto de
Ordenamiento

Santa Marta
espacial en
Pescaíto

la Junta de Acción Comunal del barrio Olaya He- Marta. El mayor cambio lo constituyó, de lejos, la
rrera. La Junta estuvo a cargo de la cancha hasta instalación de grama sintética. Carlos “Jaricho”
2010, cuando la Alcaldía Distrital de Santa Marta, Valderrama Puche recuerda las discusiones que
a través de la Secretaría de Deportes, asumió el suscitó la decisión:
control del escenario deportivo. Para tal efecto
nombró un comité local de control administrati- Hubo mucha polémica por el tema de la grama sintéti-
vo, que debía asumir las funciones de ente veedor ca. Muchos no querían ese cambio tan brusco, porque
e instancia consultiva, de acuerdo a lo previsto la cancha siempre fue de tierra, arenosa, dura, eso le
por el Decreto 18 del 22 de abril de 2009. El comité, daba una especialidad al campo. Los entrenadores de-
presidido por el representante legal, se compone cían que ese tierrero le servía mucho al muchacho para
además de un tesorero, un representante de las el control de balón, por eso los jugadores que salían
instituciones educativas del sector, un represen- de acá eran calidosos con el balón, y les daba mucha
tante de las escuelas de fútbol y uno de la fuerza fuerza en la patada. Y como era tan caliente y con esos
pública. Este comité coadministrador mantiene soles de acá, los que jugaban en La Castellana tenían
la gratuidad de la cancha para el uso de niños y buen físico, buen aguante [...]. [Otros decían que] se veía
escuelas de fútbol infantiles, al tiempo que busca bonita, que iba a quedar como un estadio, que no se iba
el apoyo de empresas que puedan ofrecer a las a inundar como antes, todo eso nos pusimos a ver, y
escuelas elementos deportivos y otros beneficios uno que ha tenido jugadores se da cuenta que el pelao
a cambio de publicidad. La meta es alcanzar pro- después de jugar en el tierrero le da duro la gramilla en
gresivamente la autosuficiencia financiera de la los estadios. La calidad nace con uno, el que va a ser
cancha de La Castellana. bueno es bueno, la cancha sirve para potenciarlos, pero
no salen jugadores buenos si no son buenos.47
En 2011, la Alcaldía y Ecopetrol aportaron los re-
cursos para la renovación de la cancha, encomen- “Jaricho” Valderrama Puche, vecino de Pescaíto, 84 años de
47 Carlos
106 dada a la Fundación Sociedad Portuaria de Santa edad. Entrevista: 5 de marzo de 2016.
Esquina donde
presumiblemente
vivía “la Catalana”.

política
Fotografía de Gabriela

Raiz
Díaz Montealegre

RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
En lo que se refiere al origen del nombre de la can- y burdeles se dividían entonces en dos tipos: los
cha, las versiones que ha recogido la tradición oral de la “perrata”, de menor costo, ubicados cerca del
en Pescaíto son tan variadas como los relatos fun- puerto, y los “de la alta”, que buscaban algo más de RC
dacionales del sector. Aunque algunos pobladores privacidad fuera de las inmediaciones de la bahía.
refieren la existencia de un bar llamado La Cas- Es de anotar que la palabra meretriz se empleaba
tellana frente a la antigua cancha, la mayoría de en Pescaíto para distinguir a aquellas mujeres que

histórica
la versiones hacen alusión a una mujer conocida ejercían la prostitución en los sitios “de la alta”;

Raiz
como la Catalana. Parecería como si la memoria cabe suponer entonces que la Catalana atendía
viva de Pescaíto hubiera decidido solucionar de un una clientela exclusiva, compuesta por capitanes RH
tajo el problema secular del nacionalismo catalán de buques, empresarios del banano, burócratas del
y su conflictiva relación con España a través de la Estado, comerciantes internacionales y algunos
libre asociación de ideas: la procedencia ibérica hombres de las familias adineradas de la ciudad.
parecería bastar para transfigurar a una catalana
en castellana, sin que los pescaíteros ni las pescaí- Algunos habitantes de Pescaíto recuerdan aún hoy
teras sientan que están mancillando la identidad el burdel de la Catalana, como Carmen Martínez,
colectiva de nadie o incurriendo en alguna inco- vecina de Barrio Norte:
rreción política.
Cuando era niña, mi papá me llevó la primera vez al
Algunos pobladores indican que la mujer que pres- mar y salimos para la playa del Boquerón y había que
tó su apodo como epónimo paradójico a la cancha pasar por el cerro. Yo vi una casa que era como un
era “una española que vivía frente a la cancha y era castillo; me llamó la atención, porque las poquitas
de las primeras casas que había por ahí, le decían casas que habían por allá eran pequeñas, eso eran
la Catalana”.48 Su casa la sitúan indistintamente en puro patio, y por la tarde, cuando regresamos, estaba
la esquina este de la calle 5 con carrera 7.a, por la iluminada. Yo le pregunté a mi papá sobre la casa, le
callejuela estrecha que actualmente llaman “de la dije que era bien bonita y que yo quería una casa así.
Calumnia”, o en la esquina oeste, al pie del cerrito Él no dijo nada, debió ponerse bravo o pensar: ¡esta
que cerraba el callejón de “Rincón Guapo” y que muchacha loca qué está diciendo! Ya después, cuando
desapareció definitivamente hacia 1940 para dar grande, fue que supe para qué eran esas casas, porque
paso a la cancha de El Nuevo Mundo, después de los papás a uno no le decían nada de eso.49
haber servido de cantera local para la extracción
de material de construcción. Por su parte, Tomás Fuentes, vecino del barrio de
Pescaíto, señala que “la Catalana era una casa en
Otros relatos señalan que el nombre de la Catala- el callejón de la [carrera] 6, que estaba pegada al
na aludía en realidad a una meretriz, cuyo burdel cerro. Era un castillo que dejaron los españoles,
abrió sus puertas en la década de 1930. Los bares era de dos pisos y tenía más de cien focos, y eso

48 AnaIsabel Pardo, vecina del barrio de Pescaíto, 66 años de edad. En- 49 Carmen Martínez, vecina de Barrio Norte, 88 años de edad. Entrevis-
trevista: 16 de marzo de 2016. ta: 11 de febrero de 2016. 107
Planos Vivos
Pescaíto
desarrollo histórico y
memoria viva
Pescaíto:

brillaba desde lejos toda la noche. Tenían mujeres está relacionada con la consolidación de la zona Los muros de El Boro
trabajando, ponían música y llegaban marinos de de El Boro, en Barrio Norte; la otra, con la confor- y su impacto en el
tejido social y urbano.
otros lados; por allá no lo dejaban ir a uno, en ese mación de una pequeña colonia procedente prin-
Ordenamiento

Fotografías de Gabriela
tiempo eso era solo, porque no había sino playo- cipalmente del corregimiento de San Pablo, en el Díaz Montealegre
espacial en

nes, trupillos, y no había luz en las calles”.50 departamento de Bolívar, y que ha girado en torno
Pescaíto

a la que en Pescaíto es conocida como la Casa de


Independientemente de que se haya tratado de la los Negritos.
propietaria de una casa cercana a la cancha, o de
la meretriz de un reconocido prostíbulo, lo cierto Vallecaucanos y chocoanos en
es que la metamorfosis de la Catalana en la Caste- la formación de El Boro
llana no solo revela la despreocupación de los pes- El Boro es una amplia zona de Barrio Norte, com-
caíteros –a dos siglos de la Independencia– por prendida entre las calles 9 y 10 y las carreras 3.a
los conflictos que levantan ampolla en la antigua y 4.a (plano 3.11). Como gran parte del barrio, con-
metrópoli colonial. La confusión sirve de alegoría serva la arquitectura de tipo republicano que ca-
para representar la condición de Pescaíto como racterizó la expansión urbana de Santa Marta a
punto de encuentro en el que confluyeron y se finales del siglo xix y comienzos del siglo xx. La
entremezclaron corrientes migratorias regiona- conformación de El Boro, tal como lo registra el
les, nacionales e internacionales. Para cerrar este imaginario urbano actual, se remonta a la llegada
capítulo, nos detendremos en el siguiente aparte de migrantes afrocolombianos a la ciudad en las
en dos de las corrientes más recientes y de mayor décadas de 1960 y 1970, provenientes del Valle del
significado para el sector. Cauca y de Chocó. La presencia de vallecaucanos
y chocoanos no era en absoluto novedosa, pero
alcanzó en ese entonces magnitudes inéditas. La
Migraciones Urbanas en Pescaíto mayoría de los inmigrantes eran trabajadores de
La historia de Pescaíto es la historia de las migra- las nuevas plantaciones de banano, que desde los
ciones, la historia de hombres y mujeres en busca años 60 venía promoviendo la Compañía Frutera
de mejor fortuna, atraídos por el boom bananero y de Sevilla (la antigua United Fruit Company) en el
el auge portuario y ferroviario de la primera mi- Urabá. Muchos de ellos se dirigieron hacia la zona
tad del siglo xx. Extranjeros de diferentes nacio- de El Boro y encontraron alojamiento en inquili-
nalidades, lo mismo que colombianos de todas las natos para obreros y trabajadores, en habitaciones
regiones del país, probaron suerte en las más di- arrendadas y en algunos hoteles en decadencia.
versas actividades e hicieron de Pescaíto su hogar.
Gracias a su trabajo, el sector se erigió en polo de A diferencia de las oleadas migratorias de prin-
desarrollo de la ciudad y de la región. La conso- cipios del siglo xx, que fueron absorbidas por la
lidación urbana de Pescaíto no supuso la termi- economía bananera y el sector de transportes, las
nación de los flujos migratorios, si bien el declive de este periodo se volcaron hacia la ciudad no
de la economía bananera y de la actividad ferro- tanto como estación final, sino más bien como
viaria, así como la transformación de la actividad lugar de paso en la ruta hacia Venezuela y los
portuaria y comercial, impusieron condiciones Estados Unidos. La nacionalización del petróleo
muy diferentes a la inmigración que se verificó en y del hierro en Venezuela, unida al salto abrup-
la segunda mitad del siglo. Dos olas migratorias – to del precio de los hidrocarburos tras la crisis
en esencia afrocolombianas– han dejado una im- de 1973, se tradujo en un crecimiento económi-
pronta profunda en la historia pescaítera: la una co sostenido y convirtió al país en el destino de
cientos de miles de colombianos. Estados Unidos,
50 Tomás Fuentes, vecino de Pescaíto, 94 años de edad. Entrevista: 30 de por su parte, buscaba responder a las necesida-
108 marzo de 2016. des de mano de obra de su economía, que no
Plano 3.11
El Boro y su contexto urbano

política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

Puerto

Carrera 5.a
de

a m b i e n ta l
Santa Marta

Raiz
Calle 8

RA
podía contar ya con las corrientes tra-
El
dicionales de migración europea para Boro
abastecer su fuerza de trabajo. La Ley

urbana
de Inmigración de 1965, que eliminó

Raiz
las trabas para las personas proceden- Mercado actual
RU
tes de regiones diferentes al continen-
te europeo, reforzó así la atracción que Mercado 1881
el país ejercía sobre los migrantes de

Raiz socio-
c u lt u r a l
toda América Latina. Calle 14

Muchos de los migrantes en tránsito RC


debían esperar meses y quizás años an-
tes de emprender el viaje, por lo que se
hacía indispensable conseguir sustento

histórica
en la ciudad. Algunos se emplearon como coteros deriva de “Borondongo”, una de las personificacio-

Raiz
en el puerto, a través de cooperativas de trabajo nes del ambiente agitado de enredos, confusión y
temporal o cubriendo turnos. Otros ejercieron peleas que retrata la canción “Burundanga”, popu- RH
empleos informales en el mercado, y otros más larizada por Celia Cruz y La Sonora Matancera en
vieron en el creciente negocio de la marihuana la la segunda mitad de los años 50. Para otros habi-
oportunidad de ganar dinero. Durante la bonanza tantes, El Boro se ha constituido en una suerte de
marimbera de la década de 1970, no pocos vecinos “república independiente” por cuenta del precario
e inmigrantes se integraron al boom, principal- control institucional y la proliferación de activida-
mente como jornaleros de las fincas marimberas des delictivas. En este sentido, el término se habría
en la Sierra Nevada de Santa Marta, o como car- referido originalmente al borough o municipio del
gueros en las playas de embarque. Otros más se mundo anglosajón: como castellanización del tér-
dedicaron al microtráfico en la zona: “Había mu- mino inglés, “Boro” denotaba la cristalización de
chos marimberos que se hacían ahí para vender o una dinámica urbana por fuera del ordenamiento
para hacer negocios con otros”, como lo recuerda regular de la ciudad.
Wilson Calero, vecino de Barrio Norte.51
La últimas versiones están imbuidas, en mayor o
En lo que respecta al nombre, el término “Boro” es menor medida, de la percepción más reciente de
objeto de diferentes explicaciones. Muchos sostie- los pescaíteros y de los samarios frente al lugar.
nen que se trata del apócope del regionalismo va- Actualmente, la zona de El Boro es sinónimo de
llecaucano “borondo”, que significa dar una vuelta indigencia, violencia, prostitución, microtráfi-
sin rumbo fijo o matar el tiempo caminando por co de drogas y compraventa de objetos robados.
las calles, y que habría hecho alusión a la actividad Su transformación en foco de delincuencia e in-
frenética que se vivía (y se vive) en el sector. Algu- seguridad hunde sus raíces en procesos urbanos
nos habitantes de la calle 8 dicen que el término de larga duración, aunque tampoco es producto
es una derivación de “borojó”, la popular fruta del de un destino inexorable: sin la combinación de
Pacífico colombiano, y que en este contexto habría violencia y narcotráfico que golpeó con particular
servido para hacer referencia al origen de los in- dureza a la región a finales del siglo xx y comien-
migrantes que hacían presencia masiva en el lugar. zos del siglo xxi, los males que aquejan a El Boro
En opinión de otros vecinos del sector, “Boro” se no se habrían expresado de manera tan virulenta.

51 Wilson Calero, vecino de Barrio Norte. 53 años de edad. Entrevista: 25 La zona ocupada por El Boro constituyó durante si-
de mayo de 2016. glos un arrabal extramuros de Santa Marta, pues la 109
Planos Vivos
Pescaíto

La bonanza marimbera de los años 70 y mitad de los 80 dejó


el terreno abonado para la posterior consolidación de grupos
paramilitares en la Sierra Nevada de Santa Marta”.
desarrollo histórico y
memoria viva
Pescaíto:

ciudad experimentó una expansión robusta hacia el La violencia paramilitar que azotó a Santa Marta
norte, más allá de la actual avenida del Ferrocarril, a finales de los años 90 y en la primera década del
solo desde comienzos del siglo xx, producto de la siglo xxi exacerbó la estigmatización y la margi-
creciente demanda de vivienda para la nueva clase nalidad de El Boro. La desmovilización de las AUC
Ordenamiento

trabajadora. La urbanización de Pescaíto no alteró dejó la zona en manos de sucesores menos pode-
espacial en

la condición ‘liminar’ del lugar, que siguió siendo rosos, pero no por eso menos interesados en el
Pescaíto

concebido como una frontera urbana; como zona microtráfico de drogas, la prostitución y el crimen
gris al margen del control institucional y carente organizado. En el año de 2013, después de suce-
de una provisión mínima de bienes públicos. Ni sivos operativos policiales y con asistencia de las
siquiera la construcción hacia 1947 de la avenida instituciones de protección social de la Alcaldía,
Campo Serrano (carrera 5.a), que conectó los nue- fueron desmanteladas las estructuras que habían
vos barrios del sur con los muelles de la bahía, convertido el lugar en foco de desestabilización y
pudo contrarrestar del todo el estigma de exclusión generación de violencia. Ahora bien, este tipo de
e ilegalidad que pesaba sobre la zona. El Boro se intervenciones no han logrado aportar solucio-
había convertido, de hecho, en una suerte de espa- nes de largo plazo para los graves problemas de
cio intersticial entre dos polos de intensa actividad la zona: El Boro ha quedado sumido en una suerte
económica, como lo eran el antiguo mercado en la de limbo, expuesto permanentemente a todo tipo
plaza de San Francisco y su sector comercial anexo de actividades ilícitas.
sobre la actual carrera 5.a, por un lado, y el puerto,
con su apéndice comercial en la antigua calle de Desde el punto de vista urbano, el muro que co-
Las Piedras (la actual calle 8), por el otro (plano 3.11). rre entre la esquina de la avenida del Ferrocarril
El fin del auge portuario y el traslado del mercado con carrera 3.a y la esquina de la vía Alterna con
en 1965 desnudaron la fragilidad del lugar ante los calle 6 constituye uno de los principales obstácu-
cambios estructurales experimentados en Pescaíto los para la transformación de la zona. Construi-
y lo dejaron expuesto a una mayor marginación. do por la Sociedad Portuaria para el cerramiento
de los predios adquiridos para su zona franca, ha
La bonanza marimbera de los años 70 y mitad de abierto una herida en el tejido urbano que está le-
los 80 dejó el terreno abonado para la posterior jos de cicatrizar. Como ya advertimos en la intro-
consolidación de grupos paramilitares en la Sierra ducción teórico-metodológica, la solución de los
Nevada de Santa Marta. El grupo de vigilancia y problemas de inseguridad y criminalidad exige
extorsión de Los Chamizos, luego las autodefensas respuestas integrales, que no apelen de manera
de Hernán Giraldo en Guachaca y las de Adán “el unilateral a salidas de corte autoritario o repre-
Negro” Rojas en Bonda, y finalmente el bloque Re- sivo. En el siguiente capítulo nos detendremos
sistencia Tayrona de las Autodefensas Unidas de con mayor detalle en los problemas asociados al
Colombia (AUC), se hicieron a sangre y fuego con muro del puerto, y al final del texto presentaremos
el control militar y político del Magdalena. Una de una propuesta puntual que, apoyada en la histo-
las prioridades de los diferentes grupos armados ria y en las costumbres pescaíteras, ofrece desde
fue la creación de redes delincuenciales de apoyo el diseño urbano una solución sostenible de largo
en Santa Marta, y la zona de El Boro se afianzó rá- plazo. Mientras tanto, los problemas de insegu-
pidamente como uno de sus ejes: allí se intercam- ridad y desintegración del tejido social seguirán
biaba información estratégica y se cerraban todo medrando a la sombra del muro, que terminó por
tipo de negocios relacionados con el narcotráfico, apuntalar –con bloques de cemento y alambre de
el contrabando y el tráfico de armas. A un par de púas– el estigma que separa la zona de El Boro del
calles reaparecieron sin ningún control los prostí- resto de Pescaíto.
bulos, mientras que el nuevo mercado público se
transformó en fortín paramilitar, como lo atesti-
110 guó la tristemente célebre “calle del crimen”.
La Casa de los
Negritos en Pescaíto
Fotografía de Gabriela

política
Díaz Montealegre

Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

La Casa de los Negritos res de los carritos cañeros, coteros, boyeros, obre-
Con este nombre se conoce la casa situada en la ros y maquinistas, entre otros.

Raiz socio-
c u lt u r a l
calle 4 n.o 8-15, en el barrio de Pescaíto. Por medio
siglo ha sido el lugar de arribo de una importante En la década de 1940, tras la muerte de sus funda-
corriente migratoria afrocolombiana procedente dores, se hizo patente el declive del ingenio, afecta- RC
de San Pablo y también –en menor medida– de do por la caída mundial en los precios del azúcar,
María La Baja y San Basilio en el departamento la competencia vallecaucana y una productividad
de Bolívar. Se trató de un proceso desencadena- comparativamente baja. En 1951 la asamblea de ac-

histórica
do por el cierre del ingenio Central Colombia, cionistas tomó la decisión de disolver la empresa,

Raiz
mejor conocido como el ingenio de Sincerín, y la que finalmente fue liquidada en 1953. La falta de
subsecuente crisis económica que afectó a toda buenas tierras y de trabajo provocó el éxodo de RH
la región. El ingenio, de propiedad de los herma- los habitantes hacia otros pueblos cercanos, pero
nos Vélez Daníes, se levantó sobre las tierras de sobre todo hacia Cartagena y Barranquilla, don-
la hacienda San Agustín, situada a unos cincuenta de se instalaron como vendedores ambulantes de
kilómetros de distancia de Cartagena. Sus cerca dulces y frutas. A partir de los años 60, ciudades
de ocho mil hectáreas de extensión, ubicadas en como Santa Marta, Riohacha y Maicao atrajeron a
un valle formado entre la serranía de San Jacin- los migrantes, dispuestos a aprovechar cualquier
to (Montes de María) y los playones del margen oportunidad de empleo. Muchos de ellos veían en
izquierdo del Canal del Dique, ocupaban una an- estas ciudades una simple estación de paso en su
tigua zona de palenques. El ingenio lindaba con camino hacia Venezuela.
los pueblos de Mahates y Malagana, San Basilio
de Palenque, San Pablo y Sincerín. Entró en pro- La primera persona oriunda de San Pablo en ins-
ducción en 1909 y para 1913 contaba con dos mil talarse en Santa Marta, en 1948, fue Zoyla Mejía,
hectáreas sembradas de caña y trescientas yuntas conocida como la niña Zoyla. Trasegó entre Ba-
de bueyes, mantenidas en los playones del Canal rranquilla y la zona bananera, y finalmente echó
del Dique. Con el tiempo, llegó a ocupar las mejo- raíces en Pescaíto. Zoyla Mejía y su madre, Bue-
res tierras de toda la región, pues adquirió grandes naventura Villamil, pudieron comprobar que las
extensiones en el margen derecho del Canal del playas de Santa Marta eran un buen lugar para la
Dique, la hacienda San Antonio de Aguas Vivas en venta ambulante, pues a diferencia de Cartagena o
los municipios de Arjona y Turbaco, y los playones Barranquilla, no había tanta competencia. Fue así
a orillas del Canal hasta la población de Rocha. El como se dedicaron a vender los dulces que ellas
ingenio tenía a su disposición una línea férrea que mismas fabricaban, práctica que todavía se man-
cubría 65 kilómetros, con 500 vagones y 6 carros tiene en el inmenso patio de la casa. Según lo re-
especiales. Junto a la fabricación de ron y mieles, lata Benita Mejía,
producía anualmente entre seis mil y nueve mil
toneladas de azúcar, que eran enviadas en su gran mi hermana Zoyla llegó primero, hace más de sesenta
mayoría al interior del país, con saldos menores años, cuando se vino con mi mamá de San Pablo, de
de exportación hacia Inglaterra y Estados Unidos. donde somos todas nosotras. Compraron la casa a la
Los pobladores encontraron empleo como jorna- dueña, que decía era la señora Sebastiana Pérez; ella
leros, cortadores de caña, capataces, enganchado- era de la zona bananera y tenía esta casa. Se vinie- 111
Planos Vivos
Pescaíto
desarrollo histórico y
memoria viva
Pescaíto:

ron porque allá en el pueblo ya no había trabajo. Yo del santo, que se celebran el 25 de ene-
me vine primero a Barranquilla, por allá en 1957; me ro. También se dejaba ver en las fiestas
fui vendiendo canastos, esteras, abanicos de paja que del “Negrito de Pescaíto”, nombre que
Ordenamiento

hacíamos nosotras mismas, pero después me fui a dieron los pescaíteros al Señor de los
espacial en

Venezuela, donde pagaban más. Trabajaba en casa de Milagros.


Pescaíto

familia haciendo aseo, cocinando, planchando; yo te-


nía doce años y me fui con una comadre de mi mamá Varios niños y niñas pasaron por las
[...]. Zoyla nunca se quiso ir de Santa Marta, porque manos de Zoyla Mejía, aquejados de
encontró muchos amigos, porque ella le gustaba ayu- “ojo seco” o mal de estómago. Josefa
dar a su gente. Cuando compró la casa, se regó la voz Sánchez, vecina de Pescaíto, narra así
allá en San Pablo: “¡Que miren, que ya teníamos donde uno de los episodios: “Estaba en el cen-
llegar a Santa Marta!”, y todo el que llegaba se bajaba tro de salud con mi hija, esperando que la atendie-
en esta casa. Algunos se quedaban vendiendo frutas ran, porque hacía dos noches que tenía fiebre. Allá
en el mercado, casi todas las que llegaban eran mu- estaba la niña Zoyla y me preguntó por la niña, se
jeres, vendiendo dulces, canastos, aceite de coco; ha- la pasé y me dijo que recogiera agua de flores de
bía unas que solo se quedaban un rato y se iban para la Virgen y le rezara a la Virgen: ‘Dígnate bende-
Venezuela. Aunque las que cogían para allá se iban a cir esta agua por mi fe, para que esta agua sirva
vivir a Cristo Rey, las mujeres de allá ya tenían familia de protección y salud’. Y esa noche se me alivió la
en Venezuela.52 niña; yo conservo esa oración”.53

Una vez instalada, con un buen mercado para sus La Casa de los Negritos consta de una sala, dos
dulces (además de las playas de la bahía, el mer- cuartos, cocina, un baño externo y un patio de se-
cado público, trasladado en 1965 a su actual ubica- senta metros, en el que fueron edificados sucesi-
ción, estaba muy cerca de Pescaíto), Zoyla Mejía vamente los ranchos con paredes de bahareque o
decidió comprar la casa donde había vivido des- madera, piso de tierra y techo de zinc o palma. De
de los doce años de edad, y que era propiedad de índole eminentemente familiar, estos ranchos son
la cienaguera Sebastiana Pérez, amiga y socia de ocupados temporada tras temporada por miem-
Buenaventura Villamil. La adquirió en los años 60, bros de una misma familia, e incluso pueden pa-
y desde entonces se ha convertido en un referente sar de una generación a otra:
obligado para los habitantes de San Pablo y otros
pueblos cercanos, pues constituye el lugar de lle- Yo soy de San Pablo. Llegué a esta casa en 1986, des-
gada para buscar trabajo en la ciudad, ya sea en el de entonces voy y vengo, buscando el pan diario. Me
mercado público, en las calles del barrio y la ciu- quedé trabajando porque hay menos competencia que
dad, o en las playas de Santa Marta y Taganga. Al en Cartagena: eso ya hay muchas de nosotras y pa-
morir la niña Zoyla en 2012, la casa pasó a manos lenqueras que han trabajado toda la vida en las playas
de su hermana, la ya citada Benita Mejía, quien ha y en los hoteles. Vine por la señora Zoyla, porque era
vivido allí desde 1986. Zoyla Mejía es recordada en amiga con mi mamá y se vino un tiempo para pro-
Pescaíto como servicial y alegre, pero muy seria bar. Ella y después yo levantamos este rancho para
en sus tratos; como experta en la viuda de pesca- tener donde quedarnos, porque eso habían meses que
do y en la medicina tradicional, particularmente llegaban hasta cincuenta mujeres y tocaba guindar
en los rezos contra el mal de ojo. Era devota de hamacas o dormir en el suelo. Eso sí, que la señora
San Pablo, y por eso regresaba cada año a su tierra
natal para participar en las festividades en honor

52 BenitaMejía, vecina del barrio de Pescaíto y oriunda de San Pablo 53 Josefa Sánchez, vecina del barrio de Pescaíto, 54 años de edad. Entre-
112 (Bolívar), 74 años de edad. Entrevista: 3 de mayo de 2016. vista: 12 de febrero de 2016.
política
Raiz
Por más de sesenta años, la Casa de los RP

Negritos ha sido un símbolo de inclusión y


diversidad en Pescaíto. Sus habitantes han

Raiz socio-
económica
visto siempre a los migrantes de San Pablo RE
como parte del sector, así ellos no se integren
plenamente durante las festividades y en época

a m b i e n ta l
de carnaval”.

Raiz
RA

Zoyla nunca nos dejó dormir en el piso pelao, de algu- traron algún trabajo informal de cierta estabilidad

urbana
na manera nos tenía a todas aquí.54
 en el mototaxismo, la construcción, el aseo, el tra-

Raiz
bajo doméstico y la venta de frutas en los puestos
RU
Cada rancho tiene sus dueños, y solo ellos lo ocu- de la plaza de mercado. Estas familias, que han
pan, ya que durante todo el año varios miembros decidido quedarse en Pescaíto definitivamente,
de la familia llegan a la ciudad. En esos ranchos han buscado ya un solar donde construir o se han

Raiz socio-
c u lt u r a l
mantienen sus escasas pertenencias, que en la postulado como beneficiarias de programas de vi-
mayoría de los casos se reducen a una cama sen- vienda de interés social.
cilla, un ventilador eléctrico, una mesa y utensilios RC
La convivencia y el de cocina. Dado que se trata de estadías cortas, y Por más de sesenta años, la Casa de los Negritos
trajín en los ranchos que la mayoría del tiempo sus habitantes trabajan ha sido un símbolo de inclusión y diversidad en
de la Casa de los
por fuera, no es de extrañar la ausencia de otros Pescaíto. Sus habitantes han visto siempre a los

histórica
Negritos.
Fotografías de Gabriela
implementos. migrantes de San Pablo como parte del sector, así

Raiz
Díaz Montealegre ellos no se integren plenamente durante las fes-
El patio es el lugar privilegiado de socialización tividades y en época de carnaval. Ellos prefieren RH
para hombres, mujeres y niños. Allí están los fo- quedarse en el patio con el picó encendido y unas
gones de leña –cuatro piedras dispuestas de for- cervezas heladas para festejar sus fechas especia-
ma simétrica para sostener las ollas– en los que les. A finales de enero la vivienda queda abando-
cocinan los dulces. La leña la guardan en cada nada, porque todos tienen una cita infaltable con
rancho o en la parte posterior del patio, arruma- el santo patrono de San Pablo. Vuelven a casa a en-
da contra la pared divisoria, donde están situados contrarse con los amigos y familiares que también
los servicios comunes: los baños y la alberca que retornan de las ciudades adonde fueron llevados
surte las viviendas de agua. Las calurosas tardes por el trabajo y el azar. En Pescaíto se mantienen
de Pescaíto las pasan frente a los ranchos, donde fieles a sus costumbres y sus valores; cultivan la
también toman el fresco de la noche. En esos mo- solidaridad que los mueve a prestarle el dulce a
mentos intercambian experiencias, se cuentan su quien no lo tiene, y la amistad que les asegura un
día; las mujeres se hacen las trenzas y los hombres sitio donde quedarse. Su presencia ha enriquecido
juegan dominó o a los dados. Las conversaciones la historia del sector y la vida de la comunidad.
se pueden extender toda la noche, mientras prepa-
ran el dulce de leche, las cocadas, los enyucados,
alegrías y caballitos. En una semana puede haber
hasta veinte personas compartiendo este espacio.

La gran mayoría de los habitantes se aloja en la


casa en los meses de diciembre y enero, en Sema-
na Santa y durante las Fiestas del Mar. El resto del
año la afluencia de personas es menor: grupos de
hombres y mujeres se quedan por temporadas que
pueden ir de una semana a un mes; algunas fami-
lias incluso viajan los fines de semana. En la casa
permanecen las mujeres y las familias que encon-

Inés Barrios, oriunda de San Pablo (Bolívar). Entrevista: 3 de


54 Clara
mayo de 2016.
 113
4 Análisis urbano
y arquitectónico

Plano 4.1
Plano de riesgos

Inundación
Escorrentía
Brisa fuerte
Derrumbe
Colector pluvial
Bastidas-Mar Caribe
Malos olores
Escorrentía fuerte
Muro de la zona franca
114 Tubería
La mala disposición

política
de las basuras: uno
de los factores de

Raiz
riesgo en el gran
Pescaíto. RP
Fotografías de Luis
Miguel Marín

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU
El análisis urbano y arquitectónico de Planos Vivos Junto a estos problemas, la investigación de Planos
se nutre de un exhaustivo trabajo de campo; uno Vivos identificó otras amenazas que menoscaban
que permite combinar el análisis cartográfico con la calidad de vida en Pescaíto y ponen en riesgo

Raiz socio-
c u lt u r a l
la “descripción densa” de índole etnográfica. Abar- la salud e incluso la vida de los habitantes. Cabe
ca, entre otros aspectos, la infraestructura y los mencionar, en primer lugar, los malos olores que
usos del suelo, la tipología de vías, los lugares de despiden las aguas estancadas, los contenedores RC
confluencia y los recorridos habituales de los po- de desechos sin tapa en el mercado o las basuras
bladores, así como los hitos y lugares de la memo- acumuladas en los alrededores del colector Bas-
ria. Parte de la información y algunos de los pla- tidas-Mar Caribe. Las alcantarillas, que tanta tela

histórica
nos del análisis urbano y arquitectónico han sido han dado que cortar en esta investigación, no dan

Raiz
ya empleados en las secciones precedentes de este tregua en ninguna estación: si en tiempo de lluvias
libro; otros más serán utilizados al momento de se rebosan y, además de agravar el problema de las RH
enunciar las conclusiones. En este capítulo presen- inundaciones, generan olores repulsivos, en tiempo
tamos algunos de los planos más relevantes en la seco emiten un fuerte hedor, como lo confirma Wi-
formulación de la propuesta de renovación urbana lson Calero, vecino de Barrio Norte:
para Pescaíto, acompañados de fichas selecciona-
das que ilustran ejemplarmente los temas tratados. Los malos olores son por la falta de agua. Todas las al-
cantarillas van a la casa bomba, pero como Santa Mar-
ta ha crecido tanto, hay más escorrentía [...]. Con los
aguaceros, Santa Marta no tiene alcantarillado fluvial.
Plano de riesgos El agua va por las calles y cuando se inunda se desbor-
da el agua sucia y también llegan los malos olores […].
El informe de riesgos naturales en Santa Marta Por falta de agua esas alcantarillas se secan y emanan
del año 2016, elaborado por el consorcio IHCanta- unos vapores por los tubos. Las empresas tienen que
bria-IDOM bajo los auspicios de Findeter, identifica verter unos químicos para diluir la materia fecal.2
en las inundaciones por lluvias y desbordamiento
de ríos, en la erosión de las playas y en la escasez Como los olores están asociados a la descompo-
de agua y sequía urbana las principales amenazas sición de materia orgánica, la mala disposición de
para la ciudad.1 El gran Pescaíto se ve afectado de los desechos y el rebosamiento de aguas negras,
manera aguda por dichos fenómenos, dadas las su presencia no solo afecta la calidad del aire, sino
graves deficiencias en el abastecimiento de agua, que además va acompañada de la proliferación de
la recurrencia de las inundaciones y la relación insectos y roedores como potenciales vectores de
estrecha del sector con las playas de la bahía: las enfermedad.
más frecuentadas, como la de Los Cocos, la de San
Fernando y la del Centro, han experimentado una Los derrumbes y deslizamientos de tierra consti-
notoria erosión. tuyen otro problema en Pescaíto. Las viviendas en
lo alto de los cerros o a orillas del mar, situadas en
lugares expuestos a la erosión, así como aquellas
1 Un resumen del estudio, titulado Informe inicial. Estudios base: Ries-
gos naturales y crecimiento urbano para el municipio de Santa Marta,
Colombia, puede ser consultado en Findeter, Plan de acción Santa 2 Wilson Calero, vecino de Barrio Norte, 53 años de edad. Entrevista: 3 de
Marta sostenible, 2016, pp. 157-170. junio de 2016. 115
El alto riesgo de derrumbes en los Las principales escorrentías de
taludes a lo largo de la vía férrea y aguas lluvias en Pescaíto.
en las zonas expuestas a erosión en Fuente: Elaboración propia basada
los cerros. en una imagen de Google Earth

Fotografías de Luis Miguel Marín


Planos Vivos
Pescaíto

SAN
MARTÍN C LL . 6

PESCAÍTO

C LL .9
arquitectónico

C LL . 9
urbano y
Análisis

C LL . 9

C RA . 11
CENTRO
HISTÓRICO

ubicadas en los predios de Fenoco, a la sombra de


los taludes que dejó la ampliación de la vía férrea,
son particularmente vulnerables. Nibia Pacheco,
Plano de
riesgos

vecina de San Martín, construyó su vivienda en


la servidumbre del ferrocarril. Una vez creció su
familia, sus hijos se establecieron en los alrede-
dores, al pie del talud: “Una vez empezó a llover
y me traje a mi hija que estaba recién parida, y al
momentico sentimos una piedra gigante que cayó
sobre su cama. Se salvó de milagro. Ahora ya no
vive ahí […]. Esto cuando llueve se viene todo. Esos
derrumbes le han dañado las casas ahí donde vi-
ven mis hijos. Aquí estamos tranquilos cuando no
llueve, pero cuando llueve...”.3

Por último, cabe mencionar el riesgo asociado a la


brisa fuerte, sobre todo en los meses de diciembre,
enero, julio y agosto. “La Loca”, como es conocida
popularmente, llega en horas de la tarde y sopla en
dirección nororiente hasta bien entrada la madru-
gada. En las ensenadas interiores de los cerros, los
vientos chocan con fuerza en las laderas y gene-
ran remolinos esporádicos; en su ímpetu pueden
llegar a desarraigar árboles y destechar viviendas.
Los daños causados por “la Loca”
en la casa de Alcides Rodríguez
El equipo de campo de Planos Vivos fue testigo
Galván. de los daños causados por “la Loca” en la casa y
Fotografía de Luis Miguel Marín el tejado de Alcides Rodríguez Galván, vecino de
Ensenada. En sus propias palabras, “se me daña-
ron dos televisiones que tenía, el equipo de soni-
do que le cayó una lámina, una olla donde hacía
el peto y eso pasó ahí derecho. Estábamos todos
durmiendo y gracias a la confianza que tenemos
con el Señor no nos pasó nada”.4

El plano de riesgos de Pescaíto (plano 4.1) muestra


la exposición de sus diferentes zonas a las inunda-
ciones y escorrentías, la brisa fuerte, los derrum-
bes y los malos olores. A continuación presenta-
mos la ficha del sistema de Planos Vivos que se
ocupa en detalle del problema de las inundaciones
y escorrentías en el sector.

116
3 Nibia Pacheco, vecina de San Martín. Entrevista: 29 de febrero de 2016.
4 Alcides Rodríguez Galván, vecino de Ensenada. Entrevista: 1.o de junio
de 2016.
Ficha 2 Inundaciones y escorrentías

política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA
La captación de aguas lluvias es un nares para dirigirse al otro punto bajo de
tema que le preocupa a los habitantes de la ciudad, esto es, la calle 8 en su termina-
Pescaíto, pues no existen redes pluviales ción en el puerto, que según el testimonio
en la mayoría de las calles: tan solo han de algunos vecinos fue originalmente una

urbana
sido construidos algunos colectores en las quebrada. Por otro lado, el crecimiento de

Raiz
principales vías, que no dan abasto para las urbanizaciones en los cerros y en el
RU
evacuar el volumen de agua que llega al piedemonte se tradujo en último término
sector cuando se desata algún aguacero en el aumento de las escorrentías en la
sobre la ciudad. Es importante resaltar parte plana de la ciudad. Las obras de

Raiz socio-
c u lt u r a l
que, junto a la desembocadura del río contingencia que los Gobiernos distrital
Manzanares, la parte llana del gran Pes- y departamental han emprendido en los
caíto constituye la zona más baja respecto últimos años no han impedido que secto-
RC
al nivel del mar dentro del núcleo urbano res como Pescaíto, particularmente en la
de Santa Marta (excluyendo Taganga, zona de El Boro, se sigan viendo afectados
Gaira y Bello Horizonte). La gran para- por inundaciones recurrentes. Tal como

histórica
doja es que las grandes precipitaciones lo comenta Héctor Ortiz, “el recorrido de
son más bien escasas en Santa Marta, tal las aguas que vienen a inundar el barrio

Raiz
como lo afirma Patricia Ruiz Ureche, ve- vienen desde el barrio Bastidas, pasa por
cina de Pescaíto: “Aquí ocurren uno o dos barrio Galicia, barrio Santa Fe, entra por RH

aguaceros fuertes en el año, pero ya no lo que uno llama la ‘vuelta del Burro’ y
más, aquí casi no llueve”.1 Si bien las aguas conecta con la avenida del Libertador. De
estancadas son evacuadas más rápido que ahí tira pa’bajo a partir de la carrera 24 o
en años anteriores, algunos habitantes del carrera 23. Entra al barrio Jardín, donde
sector insisten en que el volumen de agua viven los ricos, y sale por el frente del
que llega a Pescaíto desde otras partes de polideportivo. Baja por la carrera 19, sigue
la ciudad ha venido en continuo aumento. la carrera 11 y, con las aguas del mercado,
buscan la calle 10, la 9 y la 8”.3
La gente comenta que antaño las calles
sin pavimentar permitían una mayor fil- La principal escorrentía de aguas lluvias
tración de agua, sin contar con que las es- proviene del suroriente e ingresa al gran
correntías convergían naturalmente hacia Pescaíto por la carrera 11 y por la calle 9, a
el río Manzanares. “Las calles eran areno- un costado de la Escuela Normal Superior
sas y absorbían parte de las escorrentías María Auxiliadora. De allí, las escorren-
de aguas lluvias”, recuerda Héctor Ortiz, tías bajan, en dirección oeste, por la calle
vecino de San Martín. 2 La expansión de la 9 y sobre todo por la calle 8, que se consti- El karma de la
ciudad estuvo acompañada de la pavi- tuye en el principal cauce de las aguas en inundaciones en
mentación de las calles, aunque sin sus época de inundaciones. Otra escorrentía Pescaíto.
correspondientes redes de aguas pluvia- importante baja por la calle 6, provenien- Fotografías de Luis Miguel Marín

les: no solo aumentaron sustancialmente te de los barrios del oriente, en especial


las escorrentías sobre las vías, sino que de los que están al costado sur de la vía desde antes de la carrera 6.a, entre la calle
además comenzaron a tomar direcciones Alterna. Cuando las precipitaciones de 10 y la 5, hasta el muro que separa El Boro
distintas a la natural. Una parte de las lluvia son intensas y los ductos existentes de la zona franca del puerto. Unas once
escorrentías dejó de llegar al río Manza- no dan abasto para evacuar las aguas, manzanas, con más de quinientas vivien-
Barrio Norte y el barrio de Pescaíto se das, son las que se ven más afectadas por
inundan. Normalmente, la inundación se las inundaciones, que en las zonas más
1 Patricia Ruiz Ureche, vecina de Pescaíto, 45 años de extiende (en sentido oriente-occidente) altas alcanzan entre veinte y cincuenta
edad. Entrevista: 3 de junio de 2016.
centímetros de altura, mientras que en
2 Héctor Ortiz, vecino de San Martín, 65 años de edad.
Entrevista: 3 de junio de 2016. 3 Héctor Ortiz, op. cit. Entrevista: 7 de marzo de 2016. las más bajas se pueden acercar al metro
117
El rebosamiento
de alcantarillas y la
mezcla de aguas
Planos Vivos

lluvias con aguas


Pescaíto

residuales en
Pescaíto.
Fotografías de Luis
Miguel Marín
arquitectónico

y medio. Como ya lo hemos explicado, 8 no estaban los muros que actualmente lo, inundaba también por la avenida del
urbano y

estas inundaciones se ven agravadas por existen y que dividen el barrio con la zona Libertador y eso resultaba en la [calle] 8”,
Análisis

cuenta del rebosamiento de las alcanta- franca. Eran terrenos baldíos, en donde comenta el mismo José López.6
rillas y la mezcla de las aguas lluvias con estaban las líneas del ferrocarril. Por ahí
las residuales. Las aguas estancadas son el agua seguía derecho. También había El colector se encuentra destapado en la
evacuadas lentamente con la ayuda de como un box culvert y era como un caño mayor parte de su recorrido, de tal suerte
excavadoras, encargadas de remover la subterráneo que iba debajo de los muelles. que se ha convertido en un vertedero de
basura y el lodo acumulados en las rejas Era directo, tenía más o menos dieciséis basuras, tal como se puede observar en el
del sector. Deben pasar varias horas antes pulgadas y llegaba debajo de los muelles, tramo que pasa por Olaya Herrera entre las
de que el agua desaparezca por completo, que ahora son el muelle 2”.4 carreras 11 y 14. Para impedir el vertimien-
Plano de
riesgos

dejando a su paso una estela de barro y to de basuras se habló de la construcción


basura. En la actualidad son cuatro las principales de unos cerramientos, que hasta ahora
obras de infraestructura para la evacua- brillan por su ausencia: “Habían prometido
Otra pequeña inundación tiene lugar en ción de las aguas pluviales en Pescaíto: el ponerle barreras de protección, metálicas o
Ensenada, donde se rebosa el agua pluvial colector Bastidas-Mar Caribe, el colector vivas, como árboles, pero no se han hecho”,
que fluye por el colector Bastidas-Mar de la avenida del Ferrocarril, el colector lamenta Héctor Ortiz.7 Es común observar
Caribe e inunda cerca de dieciocho casas. transversal de El Boro por la carrera 3.a y sillas, sillones, colchones y muebles viejos
Antiguamente el barrio San Martín tam- el colector de San Martín. en el canal, aparte de bolsas de basura,
bién sufría inundaciones, pero gracias a material de construcción y sedimentos,
las obras de canalización realizadas en El colector Bastidas-Mar Caribe tiene entre otros desechos. En el último agua-
tiempos recientes, que incluyen un colec- una longitud aproximada de seis kilóme- cero (18 de noviembre de 2015), el colector
tor de aguas lluvias cuyo tubo desemboca tros desde su origen en el barrio Ondas se rebosó por culpa de la acumulación de
en el muelle de cabotaje, el problema es del Caribe hasta su desembocadura en basuras, inundó parte del barrio de Ense-
cosa del pasado. Ensenada, a la altura de la cancha de nada y multiplicó las escorrentías hacia la
fútbol, donde fue construido un túnel que zona de El Boro, como lo recuerda Carlos
Como respuesta a las inundaciones recu- atraviesa los cerros y deposita el agua Gómez, vecino de Olaya Herrera: “El
rrentes, los habitantes de las zonas afecta- en el mar (fig. 24). José López, vecino de colector Bastidas-Mar Caribe se rebosó el
das elevan los pisos de sus viviendas hasta Olaya Herrera, recuerda que “ese canal lo año pasado. Se taponó el túnel porque eso
poco más de un metro sobre el nivel de la hicieron hace más o menos en el perio- tenía colchones, barro y un poco de cosas
calle. Puertas y ventanas exhiben también do de [José Francisco] ‘Chico’ Zúñiga, […]. Hoy vi que el agua estaba corriendo
elevaciones similares a costa de la altura entre el 2004 y el 2008 [...]. Eso iba a bien, afortunadamente, porque hace poco
del entretecho, lo que por fuerza se traduce ser el separador de la doble calzada y lo limpiaron”.8
en espacios más calurosos de lo que origi- hubo inconveniente con Fenoco, pero en
nalmente eran. Es común ver puertas con medio de la construcción cambiaron el El segundo de los colectores menciona-
muros muy altos, que las personas deben curso y pasaron por una de las bodegas dos, el de la avenida del Ferrocarril, tiene
saltar cada vez que salen o ingresan a sus de la Sociedad Portuaria. La mayoría de una longitud aproximada de dos y medio
viviendas. También es habitual que las terrenos para construir el colector era kilómetros desde el centro comercial
personas instalen una especie de riel en de Invías”.5 Como recoge las aguas de los Ocean Mall hasta su desembocadura en
los marcos de sus puertas, que les permite barrios de los cerros, este colector ha ayu- la bahía de Santa Marta, a la altura del
instalar una tabla a la manera de muro de dado a disminuir el volumen de agua que muelle de cabotaje (fig. 25). Este colector
contención cuando aparecen escorrentías e periódicamente se desborda en Pescaíto. subterráneo recoge las aguas del suro-
inundaciones. También solucionó el agudo problema de riente de la ciudad. Como recuerda Elkin
inundación en el sector conocido como Darío Oviedo, habitante de la calle 8, al
Según el testimonio de los habitantes, la “la Poza”, en el barrio Bastidas. “Sí ha fun- hablar de sus dimensiones, “los tubos del
primera de las obras para la captación de cionado el colector Bastidas-Mar Caribe. ferrocarril son grandes; uno podía cami-
aguas lluvias en Pescaíto fue un colector El barrio Bastidas se inundaba y para nar por entre ellos”.9
que canalizaba las aguas provenientes de evacuar había que poner motobomba. Le
la calle 8, pasaba por debajo de los rieles decían ‘la Poza de Bastidas’. Al desocupar-
antiguos del ferrocarril (hoy zona franca) 6 Ibidem.
7 Héctor Ortiz, op. cit.
y las depositaba en la bahía de Santa Héctor Ortiz, vecino de San Martín, 65 años de edad.
4 8 Carlos Gómez, vecino de Olaya Herrera. Entrevista:
Marta, por debajo del puerto. Héctor Ortiz Entrevista: 3 de junio de 2016. 2 de junio de 2016.
recuerda que “en la carrera 3.a con calle 5 José López, vecino de Olaya Herrera. Entrevista: 2 9 Elkin Darío Oviedo, vecino de Barrio Norte. Entre-
de junio de 2016. vista: 2 de junio de 2016.
118
política
Pisos elevados sobre

Raiz
el nivel de la calle,
muros en puertas y
ventanas, “esclusas” RP
removibles:
recursos de los

Raiz socio-
económica
habitantes frente a
las inundaciones y
escorrentías.
Fotografías de Luis
Miguel Marín RE

a m b i e n ta l
Figura 24. El
colector Bastidas-

Raiz
Mar Caribe.
Fuente: Elaboración
propia basada en una RA
imagen de Google Earth
Fotografías de Luis
Miguel Marín

urbana
Raiz
RU

del franco deterioro que exhiben las rejas

Raiz socio-
que están en las calles 7, 8, 9 y 10.

c u lt u r a l
Túnel Ensanada
Olaya Herrera El más reciente de los colectores es el del
SAN barrio San Martín, construido gracias a RC
MARTÍN
la ayuda de la Sociedad Portuaria. Antes
PESCAÍTO de su construcción, varias de sus cua-
dras estaban expuestas a inundaciones

histórica
periódicas: como la vía Alterna corre a un

Raiz
CENTRO
HISTÓRICO Ondas nivel más alto en relación con el barrio,
del Caribe
las aguas lluvias se estancaban al occi- RH
dente, por la carrera 3.a. Las escorrentías
provenientes de la ensenada interior que
alberga a San Martín son recogidas en
un box culvert, situado en la esquina de la
carrera 3.a con avenida del Ferrocarril. La
tubería fue tendida a lo largo de la vía Al-
terna y la carrera 1.a hasta llegar al muelle
de cabotaje (fig.27).

A pesar de que las lluvias son escasas en


la ciudad, los habitantes de Pescaíto tie-
nen el hábito de aprovechar las escorren-
tías para deshacerse de las basuras, tal
como aprovechaban antes las mareas con
el mismo propósito, en épocas en las que
no existía el servicio público de recolec-
ción: “Cuando mi esposo construyó esta
casa, esto era solo, no había nada alrede-
El tercer colector, el de El Boro, cuenta 8. Ese colector se hizo con recursos de dor. En la esquina llegaba el mar cuando
con una longitud de seiscientos metros. Findeter y el ingeniero Gustavo Mejía. Se había marea alta; le decíamos el Boque-
Construido en la carrera 3.a, transversal a construyó por una acción popular por las rón. Allí era donde echábamos la basura
la dirección de las escorrentías pluviales, Juntas de Acción Comunal de 1998 hasta para que se la llevara el mar”, recuerda
conduce las aguas lluvias a la avenida el 2000, y lo hicieron como en el 2002 o Justa Pimiento, vecina de Barrio Norte.11
del Ferrocarril y, en paralelo al túnel de 2004”.10 Actualmente no tiene la capaci- Algunos habitantes ven en las escorren-
la vía Alterna, las deposita en el muelle dad suficiente para evacuar el volumen de tías de aguas lluvias la oportunidad de
de cabotaje (fig. 26). Cuenta Héctor Ortiz agua que llega al barrio, para no hablar deshacerse de la basura que la empresa de
que “en la calle 7 está el tubo transversal,
pero en tubería, no en concreto, que se
une con el box culvert de acá de la calle 10 Héctor Ortiz, vecino de San Martín, 65 años de edad. 11 Justa Pimiento, vecina de Barrio Norte, 92 años de
Entrevista: 3 de junio de 2016. edad. Entrevista: 11 de abril de 2016.
119
Figura 25. Colector
de la avenida del
PESCAÍTO Ferrocarril
Muelle de Fuente: Elaboración
Planos Vivos

cabotaje propia basada en una


imagen de Google Earth
Pescaíto

CENTRO Fotografías de Luis


HISTÓRICO Miguel Marín

Ocean >> La vía Alterna y la avenida del Ferro-


carril también operan como muros de
arquitectónico

Mall

contención, pues se encuentran a una


urbano y

mayor elevación que las zonas bajas del


Análisis

sector. Junto al muro de la zona franca,


estas dos vías forman una especie de
‘batea’ expuesta a inundaciones periódi-
cas (fig. 28). 

>> El hábito de algunos pobladores de
arrojar basura a la calle agudiza la
problemática, pues las rejas, los tubos
Plano de

y los túneles se taponan. Algunas per-


riesgos

sonas aprovechan las escorrentías para


arrojar basuras o “chécheres” que ya
no usan, y así se ahorran el esfuerzo de
recolección no acepta, como los “chéche- en más agua represada y en un mayor
acarrearlos hasta el sitio de disposición
res” viejos y los colchones. Otros arrojan tiempo de evacuación.
final. Cuentan los habitantes que por las
la basura a las escorrentías por la costum-
>> Ese mismo tubo que llega a la avenida escorrentías ven pasar colchones, sillas
bre inveterada que existía antes de que la
del Ferrocarril no está conectado al túnel viejas, sillones, etc. 

Empresa de Servicios Públicos de Aseo
más grande que viene por esta vía, sino a
de Santa Marta (ESPA) prestara el servicio. >> Las basuras no son arrojadas sola-
un túnel paralelo que termina igualmen-
Quienes recurren a las escorrentías para mente a las escorrentías, sino también
te en el muelle de cabotaje. Una conexión
deshacerse de la basura, no son conscien- al colector Bastidas-Mar Caribe. Para
con el túnel madre ayudaría a evacuar
tes de la contaminación y el daño que este impedir que las personas arrojen basu-
más rápido las aguas provenientes del
hábito causa en los desagües y en las ta- ras al canal, se planteó la construcción
tubo de Pescaíto. 

pas de los colectores de aguas lluvias. En de unos cerramientos que nunca se
lo que se refiere al colector Bastidas-Mar >> Las aguas lluvias de los barrios del hicieron. En la última lluvia fuerte, el
Caribe, José López comenta que “mucha suroriente no tienen desagües hacia colector se rebosó por causa de tanta
gente echa escombros, colchones, basura, la principal cuenca de la ciudad, el río basura e inundó el barrio de Ensenada.
y eso colapsa [...]. Hay muchas personas Manzanares, que se encuentra a menor
>> Como las redes del alcantarillado
sin civismo [a las que les] paga[n] unos pe- distancia que Pescaíto. Estas aguas
también son obsoletas y no tienen tanta
sos por botar los escombros de las obras, llegan al sector por culpa de una expan-
capacidad (es importante anotar que la
y esa gente lo echa en el colector”.12 sión urbana que no ha tenido en cuenta
Estación de Bombeo de Aguas Residua-
las cuencas naturales de la ciudad. 

les Norte de Metroagua recibe todas las
A continuación presentamos un diagnós-
>> Los tubos para conducir las aguas al aguas negras de la ciudad, incluyendo
tico resumido del problema de escorren-
colector Bastidas-Mar Caribe no han las de Mamatoco, Gaira y hasta las de El
tías e inundaciones en el gran Pescaíto:
sido aún tendidos, de tal suerte que se Rodadero), y las personas tratan de eva-
desaprovecha su capacidad, que en con- cuar las aguas lluvias por las rejillas de
>> Los tubos y túneles existentes en las
diciones óptimas es alta. Los trabajos sus casas o abriendo las tapas del alcan-
calles 7, 8, 9 y 10 no son los suficiente-
más urgentes deben ser realizados en tarillado de las calles, el sistema colapsa
mente grandes para evacuar la cantidad
los barrios al sur de la vía Alterna, pues y se rebosa. El resultado: las inundacio-
de agua lluvia que llega a estas calles. 

actualmente el colector solo recibe las nes se agudizan por cuenta de la mezcla
>> Las aguas que confluyen en la calle 8 no aguas de los barrios de los cerros al de las aguas negras y las pluviales. 

tienen salida directa al mar. Anterior- norte de la vía. 

>> Como si fuera poco, Metroagua ordena
mente existía un tubo que las evacuaba,
>> El gran muro que separa Pescaíto de cerrar las compuertas de la estación de
pero con el establecimiento de la zona
la zona franca actúa como barrera que bombeo a la primera señal de inundación,
franca y la ampliación del puerto, las
impide el paso natural del agua. Los para evitar que residuos sólidos causen
aguas son desviadas hacia la avenida
muros poseen en su parte inferior unas daños en la planta de tratamiento. De esta
del Ferrocarril y luego al muelle de
rejas, cuyas medidas no sobrepasan los manera, las aguas negras tampoco tienen
cabotaje. Ello implica un recorrido más
cincuenta centímetros de alto y los dos por donde salir durante lo más álgido de
extenso y en forma de L, que se traduce
metros de largo. Dichas rejas son insufi- la inundación y se derraman por calles y
cientes para la evacuación del agua. 
 casas.

12 José López, vecino de Olaya Herrera. Entrevista: 2 de
junio de 2016.
120
Figura 26. El colector de
SAN

política
El Boro. MARTÍN
Fuente: Elaboración propia basada

Raiz
en una imagen de Google Earth
Fotografías de Luis Miguel Marín PESCAÍTO
RP
Alcantarilla
cl. 7

Alcantarilla

Raiz socio-
económica
cl. 8
>> La capacidad de infiltración de los sue-
los de Santa Marta es baja, por ser prin- Alcantarilla
cipalmente roca. Así, los cerros no están cl. 9
RE
en capacidad de absorber mucha agua Muelle de Alcantarilla
cabotaje cl. 10
y contribuyen a acrecentar el caudal de
las escorrentías de la zona plana. CENTRO

a m b i e n ta l
HISTÓRICO

>> Los líderes de Pescaíto comentan que

Raiz
un conjunto de vivienda al oriente de la
ciudad levantó un policía acostado de RA
concreto muy alto para impedir que las
aguas lluvias inundaran las casas. La
escorrentía de agua que normalmente

urbana
corría por ahí se ha desviado por otras

Raiz
calles y contribuye a inundar el sector.
RU

Raiz socio-
La captación de aguas lluvias es una de las mente, cuando se desata un aguacero, “las

c u lt u r a l
Figura 27. El colector de la vía Alterna.
Fuente: Elaboración propia basada en
deficiencias más sentidas en la cobertura calles de por aquí parecen un río”, como
una imagen de Google Earth de servicios públicos en Pescaíto. La cons- bien dice Lourdes Ruiz Ureche, vecina
trucción de la red de aguas pluviales es del barrio de Pescaíto.13 O si se prefiere el RC
Figura 28. La “batea” formada por el
prioritaria para encauzar las grandes esco- laconismo escatológico de Carlos Gómez:
muro de la zona franca, la vía Alterna y la
avenida del Ferrocarril.
rrentías y prevenir inundaciones, lo mismo “Esto es horroroso cuando se inunda, es un
que para garantizar la movilidad vehicular mierdero”.14

histórica
Fuente: Elaboración propia basada en
una imagen de Google Earth y peatonal cuando esté lloviendo. Actual-

Raiz
A la hora de plantear soluciones, es
indispensable tomar en consideración las RH
SAN Box culvert de la cuencas naturales de la ciudad y conce-
MARTÍN cra. 3.a con vía Alterna bir los proyectos a partir de esta lógica.
En este sentido, opiniones como las de
Héctor Ortiz son tan certeras y concisas
como un buen axioma: “Yo pienso que
PESCAÍTO las aguas deberían encauzarlas al río
Manzanares”.15 Junto con las obras que
encaucen las aguas a las principales
cuencas hidrográficas en toda la ciu-
dad, es indispensable construir redes de
Muelle aguas pluviales adecuadas por las calles
de cabotaje
CENTRO y un colector con buena capacidad por
HISTÓRICO
la calle 8, así como aumentar el tamaño
del colector de la carrera 3.a, para que
las aguas sean evacuadas más rápido. El
control y el fomento de buenas prácticas
SAN a
para la disposición final de las basuras
rn
MARTÍN l te es fundamental. Mientras se plantea una
aA
Ví solución integral a la problemática, los
habitantes del barrio, haciendo gala de su
proverbial sentido del humor, seguirán
SECTOR DE PESCAÍTO
diciendo que “en Mamatoco mea una
EL BORO loca y baja por aquí”.
Y SU MURO

13 Lourdes Ruiz Ureche, vecina del barrio de Pescaíto,


Av.
del Fe 55 años de edad. Entrevista: 10 de mayo de 2016.
CENTRO rroc 14 Carlos Gómez, vecino de Olaya Herrera. Entrevista:
arri
HISTÓRICO l
2 de junio de 2016.
15 Héctor Ortiz, vecino de San Martín, 65 años de edad.
Entrevista: 7 de marzo de 2016.
121
Plano 4.2
Plano de conflictos urbanos y
afectación por la industria y el comercio
Planos Vivos
Pescaíto
arquitectónico
urbano y
Análisis

Plano de conflictos urbanos y afectación


urbanos y afectación por la

por la industria y el comercio


industria y el comercio
Plano de conflictos

Tal como lo hemos señalado a lo largo de estas


páginas, la vida en Pescaíto está marcada por
claroscuros acentuados. El arraigado sentido de
pertenencia, el orgullo de la identidad compar-
tida y la robusta organización comunal ofrecen
agudos contrastes con las graves deficiencias en
la prestación de servicios públicos, las carencias
en los equipamientos urbanos y la precaria situa-
ción socioeconómica de muchos de sus habitan-
tes. La expresión más elocuente de esta dualidad
en la experiencia urbana de los pescaíteros y las
pescaíteras la constituye el trazado de límites de
peligro en el imaginario colectivo. Espacios como
El Boro, la vía Alterna (entre las calles 5 y 6), la
carrera 9.a a la altura de Ensenada, la avenida del
Ferrocarril (entre las carreras 2.a y 3.a) y las zo-
nas de poblamiento espontáneo más reciente en
los cerros son concebidos por la gran mayoría de
los habitantes como zonas prohibidas, a las que
se ingresa por cuenta y riesgo propios. En ellas se
condensan muchos de los problemas y conflictos
urbanos más apremiantes del sector, como el con-
sumo de drogas, la indigencia, la inseguridad y la
prostitución.

En la percepción de muchos pescaíteros y pescaí-


teras, los operativos policiales de los últimos años
en El Boro distaron mucho de alcanzar su princi-
pal objetivo. Aunque las estructuras delictivas que
dominaban la zona pudieron ser desmanteladas,
y algunos vecinos registran una mejora significa-
tiva en la seguridad, El Boro sigue siendo vulne-
rable a las más diversas formas de criminalidad.
Es más, el grueso de los pobladores señala que la
intervención en El Boro abrió una caja de Pandora
y dejó expuestas nuevas zonas del gran Pescaí-
to a los problemas que habían erosionado allí el
Muro
tejido social y urbano. Los límites de peligro en Industria portuaria
el imaginario colectivo se han tornado más difu- Comercio
sos y dilatados, como bien lo indica el testimonio Invasión del espacio público
de Eduardo Goenaga, vecino de Ensenada: “Aho- Indigencia
ra mismo lo que está sucediendo es que como al Vivienda, edificio o lote abandonado
Boro lo acabaron, esa vendedera de drogas se ha Invasión de los predios de Fenoco
122 mudado para estos sectores. Más o menos hace
La invasión del
espacio público:
“chiveras” y talleres

política
en Pescaíto

Raiz
Fotografías de Luis
Miguel Marín
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

tres años es que se ha puesto así. Entonces la mis- pero eso era solo en la parte de abajo. Hace diecisiete
ma comunidad se ha metido en el vicio o en el ne- años más o menos que eso ocurrió. Paulatinamente

Raiz socio-
c u lt u r a l
gocio. Antes ese sector era más reservado. Ahora eso se fue llenando, y luego llegó gente de afuera y
eso está putiado. Ahora hay zonas invisibles, don- se consolidó poco a poco. Después de Ferrovías llegó
de unos bandos no pueden meterse en el territorio Fenoco y ya no pudieron hacer nada para el desalojo. RC
de los otros”.5 Fenoco ha hecho un censo, pero este problema se re-
pite igual en muchas partes de Santa Marta.6
Otros conflictos urbanos están asociados a la

histórica
invasión del espacio público por parte de vende- En el plano de conflictos urbanos y afectación por

Raiz
dores ambulantes y de los negocios establecidos la industria y el comercio (plano 4.2) presentamos
que extienden su actividad hacia la calle. Un caso un análisis de los problemas urbanos más apre- RH
en cuestión es el de las “chiveras” (chatarrerías) y miantes de Pescaíto en clave espacial: el levanta-
los talleres sobre la calle 8.a, entre carreras 9 y 10, miento de muros, la invasión del espacio público,
donde carcasas de automóviles, piezas de chasis, la indigencia, la ocupación de predios de Fenoco
ejes y demás componentes mecánicos, esparcidos y la presencia de viviendas, edificios o lotes aban-
sobre la vía, constituyen auténticas barricadas donados. Como ya lo hemos señalado a lo largo
que dificultan y por momentos impiden el paso de de esta investigación, la problemática ligada a los
vehículos y transeúntes. También cabe señalar la cerramientos con muros reclama una atención
existencia de lotes o viviendas abandonados, que especial por sus efectos sociales y urbanos, tal
son ocupados por habitantes de la calle o utiliza- como se puede constatar en la ficha que presenta-
dos como escondrijo por consumidores de drogas mos a continuación.
y atracadores. Mención especial merece, por últi-
mo, la paulatina ocupación de la servidumbre de
la línea férrea; un proceso que ha oscilado entre la
confrontación abierta, los acuerdos provisionales
y la simple inercia, como lo indica Usmar Rebolle-
do, vecino de Villa Tabla:

Uno de los que empezó [la invasión] fue mi hermano.


En ese tiempo estaba era Ferrocarriles Nacionales,
que no dejaban invadir. Tenían vigilantes que pasa-
ban todo el tiempo. Cuando se volvió Ferrovías, con
ellos se llegó a un acuerdo de que la gente podía hacer
sus casas en tabla, porque en ese sector, como roba-
ban tanto y mataban gente –porque eso por ahí era
muy solo–, entonces aceptaron que se construyeran
las casas temporales. De ahí el nombre de Villa Tabla,

5 Eduardo Goenaga, vecino de Ensenada, 63 años de edad. Entrevista: 6 Usmar Rebolledo, vecino de Villa Tabla, 61 años de edad. Entrevista:
1.o de junio de 2016. 1.o de junio de 2016. 123
Mercado de
Santa Marta

Ficha 3 La actividad portuaria y comercial y sus muros, con énfasis en El Boro


Planos Vivos
Pescaíto
arquitectónico
urbano y

Zona franca
Análisis

del puerto
y comercial y sus muros,
con énfasis en El Boro
La actividad portuaria

Mercado de
Santa Marta

Dos son los polos económicos de mayor Boro. En las páginas precedentes nos he- Los dos polos económicos
influencia sobre el territorio pescaítero: mos referido a él como una herida abierta de mayor influencia en
el puerto y el mercado público. En el caso en el entramado urbano de Pescaíto; una Pescaíto: el puerto y el
mercado público.
del puerto y sus instalaciones comple- herida que ha reforzado la marginalidad
Fuente: Elaboración propia basada
mentarias, como bodegas, parqueaderos que históricamente ha pesado sobre el en una imagen de Google Earth
y oficinas de logística, el actor preponde- sitio: no en vano, los habitantes lo con-
rante es la Sociedad Portuaria de Santa sideran como el lugar más conflictivo y Eso era tremendo: tú ibas caminando y
Marta. La actividad comercial que gira en peligroso de todo el sector. cuatro o cinco manes te esperaban en la
torno al mercado, por su parte, carece de esquina cuando te veían venir”.2
un actor dominante; son múltiples las em- Para la ampliación de las instalaciones
presas y los negocios que se han ido es- del puerto y el establecimiento de su zona Para la protección de sus lotes, la So-
tableciendo en el sector. La expansión del franca, la Sociedad Portuaria adquirió ciedad Portuaria levantó un muro de
puerto y sus instalaciones complemen- unas seis manzanas en la zona de El Boro, cerca de 4.5 metros de alto, coronado por
tarias se ha verificado hacia el oriente, ubicadas entre las carreras 2.a y 4.a y entre alambre de púas. Construido en bloques
sobre los lugares aledaños a los muelles la avenida del Ferrocarril con calle 5 y la de cemento, está reforzado por vigas de
que actualmente ocupa la zona franca. La vía Alterna. Las últimas cuatro manzanas amarre en la parte superior y por colum-
articulación con Pescaíto y con el resto de fueron compradas hace aproximadamente nas cada 3.6 metros. Su extensión de cara
la ciudad se da a través de la vía Alterna, cinco años. Además del uso residencial, a Pescaíto, desde la esquina de la avenida
por donde circulan los camiones que en- el lugar tenía gran importancia comercial del Ferrocarril con carrera 3.a hasta la es-
tran y salen del puerto. El crecimiento de como punto de llegada de los pasajeros quina de la calle 6 con la vía Alterna, es de
la actividad comercial ligada al mercado de tren y las tripulaciones de los barcos. más de mil doscientos metros. Este muro
es de índole radial, principalmente sobre Héctor Ortiz recuerda que “en el pasado, la bordea las manzanas, pero sin encerrar
la avenida del Ferrocarril y la carrera 11. carrera 3 era una calle importante, los bu- las calles públicas, lo que ha generado un
La expansión de la actividad portuaria ses pasaban hacia la plaza de San Francis- conjunto de tres ‘nichos’ en las calles 7, 8
y comercial ha estado acompañada del co y estaba la estación del ferrocarril sobre y 9. Aparte de eso, en el ‘nicho’ de la calle
levantamiento de muros de cerramiento la circunvalación”.1 Tras la adquisición y el 7 existen otros tres ‘subnichos’, situados
que, al alterar las dinámicas y los flujos cercamiento de los predios por parte de la perpendicularmente en sentido norte,
del sector, han precipitado en ciertos Sociedad Portuaria, la ruptura del tejido que corresponden a lotes que aún están
lugares una acelerado deterioro urbano. A social y urbano condujo al derrumbe de envueltos en pleitos legales (fig.29).
su sombra se han acentuado algunos de “la ley y el orden de la calle”, para emplear
los problemas sociales de mayor impacto el concepto de Jane Jacobs que discutimos El represamiento de aguas, que abor-
en Pescaíto, como el consumo de drogas, en la introducción del libro. En palabras damos en la ficha que se ocupa de las
la indigencia y la prostitución, para no de Wilson Calero, vecino de Barrio Norte, escorrentías e inundaciones, está lejos de
hablar del amparo que brindan a las más “eso se volvió puro monte, la carrera 3.a se ser el único problema que la presencia
diversas actividades delictivas. Entre los volvió un potrero; ahí violaban, atracaban.
distintos muros que han aparecido en los
últimos años, el que ha dejado una huella 1 Héctor Ortiz, vecino de San Martín, 65 años de edad. 2 Wilson Calero, vecino de Barrio Norte, 53 años de
más profunda es sin lugar a dudas el de El Entrevista: 25 de mayo de 2016. edad. Entrevista: 25 de mayo de 2016.
124
Figura 29. Los ‘nichos’ BARRIO

política
ciegos generados por los SAN CL . 6
MARTÍN
muros de la zona franca.

Raiz
Fuente: Elaboración propia basada BARRIO
PESCAÍTO
en una imagen de Google Earth
CL . 7 RP

CL . 8

Raiz socio-
económica
ZONA FRANCA
DEL PUERTO BARRIO
NORTE

CL . 9

RE

CRA. 3

CRA. 4

CRA. 4
CENTRO
HISTÓRICO

a m b i e n ta l
sostiene que “antes te atracaban, ya no.

Raiz
Si tú entras al Boro hoy, te van a ofrecer
RA
droga a ver qué vas a comprar, porque te
ven la pinta y saben a lo que vas, pero si
entras con cámaras y tomando fotos, ahí
sí se azaran, porque entonces…”.3

urbana
Raiz
No todos los pescaíteros y las pescaíteras
suscribirían la opinión de Wilson Calero RU
en lo que se refiere a la ausencia de atracos.
En lo que reina absoluto consenso es en la

Raiz socio-
c u lt u r a l
caracterización del muro como foco con-
sumo de drogas y microtráfico, asociados
en buena medida a la indigencia. Retoma-
mos aquí las palabras de Wilson Calero: RC
“Existen casas donde los indigentes pueden
pasar días haciéndole al bazuco, o [si] no, lo
consumen ahí en frente del muro, porque

histórica
como está escondido, nadie se mete a sa-

Raiz
carlos”.4 Lourdes Ruiz Ureche observa que
“últimamente se lo tomaron los indigentes RH
drogadictos. En las busetas veía uno el
poco de muchachos de la calle, pero eso ha
mejorado, antes los veía salir uno del Boro
hacia la circunvalación, ahora cogen para
un sector que le dicen ‘El Polvorín’ ”.5

Otro de los problemas que preocupan a


la comunidad, estrechamente ligado al
consumo y al tráfico de drogas en los al-
rededores de El Boro y su muro, es el de la
prostitución, ejercida no solo por adultos
sino también por menores de edad. Mu-
chos de los niños involucrados pertenecen
a familias de la zona que hacen parte de
los circuitos de compra y distribución de
del muro ha agravado. La inseguridad es estupefacientes. Héctor Ortiz recuerda un
El impacto de una preocupación para muchos de los caso especial: “Una pelaíta… era una fa-
los muros de habitantes del sector, pues con frecuencia milia que tenía cinco hijas, y siempre veía
cerramiento en el las personas que cometen un robo en el
tejido social y urbano
uno a una en una bicicleta, que la manda-
centro histórico buscan escondite en los ban a buscar y traer vicio, la compra y la
en Pescaíto.
Fotografías de Gabriela
‘nichos’ ya descritos. Ahora bien, no todos vende, y hoy en día uno la ve ejerciendo la
Díaz Montealegre los residentes del lugar coinciden en atri- prostitución ahí”.6
buir al muro un deterioro en la seguridad,
al menos en lo que al hurto se refiere.
Algunos de ellos afirman incluso que 3 Wilson Calero, vecino de Barrio Norte, 53 años de
ese tipo de delitos ha registrado una baja edad. Entrevista: 25 de mayo de 2016.
significativa desde que el muro fue cons- 4 Ibidem.
5 Lourdes Ruiz Ureche, vecina del barrio de Pescaíto,
truido, como es el caso de los ya citados 55 años de edad. Entrevista: 25 de mayo de 2016.
Héctor Ortiz y Wilson Calero. Este último 6 Héctor Ortiz, vecino de San Martín, 65 años de edad.
Entrevista: 25 de mayo de 2016.
125
Niños jugando
frente al muro de
la zona franca: un
remanente de “la
Planos Vivos

ley y el orden de la
Pescaíto

calle” en el lugar.
Fotografía de Luis
Miguel Marín
arquitectónico
urbano y
Análisis

La difusión de muros
de cerramiento en
y comercial y sus muros,

Pescaíto.
con énfasis en El Boro
La actividad portuaria

Fotografías de Luis
Miguel Marín

La percepción de inseguridad y deterio- adquiridas para la instalación de bodegas,


ro en la zona de influencia del muro ha chatarrerías, supermercados o edificios en
provocado el paulatino éxodo de familias altura. Muchos de ellos han apelado tam-
enteras y la desvalorización de los predios. bién a la construcción de muros.
Los lazos de amistad y compadrazgo, que
como hemos recalcado constituyen la Al interrumpir los flujos de personas y
columna vertebral de la vida en Pescaíto, limitar las expresiones de la vida en la
se han atrofiado irremediablemente. El calle, el levantamiento de muros atenta
muro se ha erigido en una barrera gris contra aquellas prácticas y hábitos que
que, lejos de restablecer la confianza entre definen la identidad del territorio pes-
los residentes, ha restringido todavía más caítero, los mismos que contribuyen a
la posibilidad de compartir con otros en fortalecer la confianza y la percepción de
la calle. “La gente honesta se quiere salir seguridad entre sus habitantes. En el caso
de ahí, quieren vender e irse, porque esa concreto de El Boro, sus residentes ya no
vendedera de vicio es muy jodida, esos son departen en el frente de sus casas, juegan
todos delincuentes”, afirma Wilson Calero fútbol solo durante el día y se recogen
al respecto.7 a más tardar a las cinco de la tarde. “Yo
antes me iba para el centro y a caminar a
A medida que las actividades y los nego- la playa por ahí, ya fuera por la 6 o por la
cios ligados al puerto y al mercado se han calle 8; ahora eso está todo maluco”, afir-
expandido en el territorio pescaítero, el ma Lourdes Ruiz Ureche8. “Esa era mi vía
recurso a la construcción de muros se ha favorita para coger para el centro, ahora
vuelto más frecuente. Bodegas, parqueade- a uno le toca meterse por la 5.a [...]. Todo
ros y demás locales reproducen a pequeña el mundo quiere vender ahí porque están
escala la experiencia en El Boro, y con sus como aislados”, sostiene Héctor Ortiz.9
muros de fachada corren el riesgo de dar
pábulo a los problemas que el cerramiento Urge encontrar una solución que com-
de la zona franca contribuyó a exacerbar. pagine las necesidades de la actividad
Los ejemplos que corroboran la existencia portuaria y comercial con las dinámicas
de una ‘fiebre’ de nuevos cerramientos residenciales que han caracterizado al
abundan: sobre el costado norte de la calle sector; una que garantice la delimitación y
5, entre carreras 5.a y 6.a, una empresa de la seguridad de los predios sin hacer mella
logística del puerto compró y demolió cerca en el tejido urbano y social de Pescaíto.
de ocho casas para utilizar el lote como Revertir el deterioro urbano provocado
estacionamiento de camiones, protegido por los muros pasa necesariamente por
por los respectivos muros. Una única casa, hacer compatibles los cerramientos con
que no aceptó vender, se encuentra como “la ley y el orden de la calle”.
un islote aislado a un costado del parquea-
dero. En las inmediaciones del mercado,
varias de las casas más grandes han sido
8 Lourdes Ruiz Ureche, vecina del barrio de Pescaíto,
55 años de edad. Entrevista: 25 de mayo de 2016.
7 Wilson Calero, vecino de Barrio Norte, 53 años de 9 Héctor Ortiz, vecino de San Martín, 65 años de edad.
edad. Entrevista: 25 de mayo de 2016. Entrevista: 25 de mayo de 2016.
126
Plano 4.3
Plano de tipología de la vivienda según su historia

política
Raiz
Espacio público
RP
Casa de autoconstrucción
Casa republicana (vivienda en serie)
Casa art déco

Raiz socio-
económica
Casa transicional
Casa moderna
Casa de los 60 y 70
Posible casa contemporánea C C
C C RE
C

No pertenece a ninguno de los C

principales estilos arquitectónicos


Modificado o remodelado y es

a m b i e n ta l
imposible reconocer el estilo original C

Viviendas que fueron modificadas

Raiz
para comercio y es imposible
reconocer el estilo original
RA
Comercio C

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
C C
C

C C

C
C
C
C C
C
C
C
RC
C C
C C
C C C
C

C
C C
C
C C C C
C
C
C

histórica
C C

C
C C C C C C C
C C
C C C C C
C C
C C
C

Raiz
C
C
C C C
C
C C

C C
C C C C C
CC C C
C C C
C C

RH
C
C C

C C
C C
C C C
C C
C C C C
C C C C
C C C C
C C C CC C C
C C C
C
C C
C C C
C CC C C C C
CC C C C C C
C C C
C C C
C
C C C C C
C
C C C C

C C C C
C C
C C C
C C CC C
C C C
CC C C C C C C
C CC C C C C C
C CC C C C C CC C C C C CC C C C
CC C C CC C C C
C C C C CC
C

C
C C C C
C C C C
C
C
C
C C
C
C
C C
C C C C
C

C C C CC C C C
C C
C
C C
C
CC
C
C C
C
C C C C
C
C CC C C

CC C

C
C
C C
C
C C
C C
C C C
C
C C
C C C
C C C C C C
C C
C C C C

Plano de tipología de la su historia (plano 4.3) enseña toda la riqueza ar-


vivienda según su historia quitectónica que atesora el sector.

Aquel que se tome el tiempo de recorrer Pescaíto Ahí están las viviendas de autoconstrucción en ma-
con morosidad se ve recompensado con creces: no teriales temporales, como el barro, la ceniza, la ma-
solo se hace partícipe de la vibrante vida barrial dera y la paja, cuya importancia en la consolidación
en sus calles, patios y tiendas de esquina; igual- urbana de la primera mitad del siglo xx difícilmen-
mente tiene la oportunidad de emprender un viaje te puede ser exagerada. Tal como lo explica Rodrigo
en el tiempo a través de la contemplación de sus “Chicho” Rodríguez, vecino de Olaya Herrera,
edificaciones. Las viviendas conservan y superpo-
nen testimonios de las diferentes épocas de Pes- anteriormente se cogía barro y ceniza. La ceniza la co-
caíto; ellas conforman la trama de un tapiz urbano gían de las quemas y el carbón, en esa época que coci-
que ilustra con elocuencia su devenir a lo largo del naba tanto con leña. Lo procesaban por un tiempo, y lo
tiempo. El plano de tipología de la vivienda según revolvían y lo ponían como a madurar. Luego se corta- 127
Como heredera parcial del estilo art déco encontramos
Planos Vivos
Pescaíto

en Pescaíto la vivienda de transición, que exhibe algunos


rasgos de las construcciones modernas”.
arquitectónico
urbano y

El patio y el interior de
Análisis

una casa tradicional


de autoconstrucción
en Pescaíto.
Fotografías de Luis
Miguel Marín
de la vivienda según
Plano de tipología

su historia

ba la madera en menguante, sobre todo de trupillo, que a continuación, nos detenemos con mayor detalle
era muy típico de por aquí, y se conseguían las varitas en este modelo).
de bahareque, que eran resistentes al clavo y al tiem-
po... eso duraban como 100 años [...]. Enterraba uno los De la vivienda moderna propiamente dicha, más
horcones de madera como cada dos metros y le ponían allá de las formas híbridas, son comparativamen-
la varita de bahareque como cada quince centímetros te pocos los ejemplos existentes. No obstante, con
(el tamaño de una mano abierta) y luego se rellenaban sus techos en placas de concreto planas, sus te-
con ese barro. Sobre los horcones se ponían las vigas rrazas, sus columnas delgadas de tubos de hierro
de carreto y encima iba el zinc [...]. A veces también se y sus ventanales amplios son una muestra para-
usaba el techo de palma de coco […]. [Luego] le ponían el digmática del legado moderno en la ciudad, que
mismo barro afuera. Lo lijaban con un saco mojado y alcanzó su apogeo a finales de la década de 1950.
quedaba liso. Esas casas no tenían cucarachas ni nada, Las viviendas de las décadas de los 60 y de los 70,
porque las cenizas espantan eso.7 por su parte, combinaron elementos de los esti-
los arquitectónicos precedentes, como las corni-
Dichas viviendas coexistieron (y coexisten) con sas, las fachadas planas y los techos en placas de
los pasajes y las viviendas en serie de estilo re- concreto, con elementos innovadores tales como
publicano que, como ya señalamos en el capítulo el techo a dos aguas, las cajas de aire en ambos
precedente, fueron consustanciales al estable- costados y materiales de fachada resistentes a la
cimiento de la nueva clase obrera en el mismo corrosión por salitre. Por último, la vivienda con-
período. También es posible encontrar viviendas temporánea, construida a partir de la década de La tipología de la
inspiradas en el estilo art déco, que con sus for- 1980, exhibe una enorme variedad de estilos, ma- vivienda según su
historia en Pescaíto
mas geométricas y sus ventanas alargadas gozó teriales y diseños. El denominador común lo cons-
(de izquierda a
de amplia difusión internacional en los años 20 y tituye la adaptación arquitectónica a la densifica- derecha, en orden
30, y que encontró arraigo en Santa Marta en las ción del sector, a la escasez de suelo edificable y a descendente): de
décadas de los 40 y los 50. Como heredera parcial la expansión hacia lo alto de los cerros. Ello se ha autoconstrucción,
republicana (dos
del estilo art déco encontramos en Pescaíto la vi- traducido en la edificación de los patios, la popula-
fotos), art déco,
vienda de transición, que exhibe algunos rasgos rización de viviendas estrechas tipo apartamento transicional,
de las construcciones modernas. Se trata del pri- y la proliferación de construcciones precarias en moderna, de los
mer tipo de vivienda que incorporó la terraza del zonas de poblamiento espontáneo. El bloque de años 60 y 70,
frente y las cajas de aire, elementos que se convir- cemento se destaca como principal material de contemporánea.
Fotografías de Luis
tieron en seña distintiva de la arquitectura del lu- construcción, e igualmente cabe resaltar –como Miguel Marín y Gabriela
gar (en la ficha correspondiente, que presentamos elementos característicos– la difusión de las rejas Díaz Montealegre

y la presencia de cornisas contemporáneas ricas


7 Rodrigo “Chicho” Rodríguez, vecino de Olaya Herrera. Entrevista: 4 en formas y colores, conocidas por los habitantes
128 de mayo de 2016. como “fachadas”.
Raiz Raiz socio- Raiz Raiz Raiz socio- Raiz

129
RE
RP

RA

RC

RH
RU

histórica c u lt u r a l urbana a m b i e n ta l económica política


Ficha 4 La vivienda de transición
Planos Vivos
Pescaíto
arquitectónico
urbano y
Análisis
de transición
La vivienda

Ejemplos icónicos de
la casa de transición
en Pescaíto.
Fotografías de Luis
Miguel Marín

130
Muros calados, La caja de aire,

política
uno de los rasgos otro de los rasgos
característicos de la característicos de la

Raiz
casa de transición. casa de transición.
Fotografía de Luis Fotografías de Luis RP
Miguel Marín. Miguel Marín.

Raiz socio-
económica
RE

La vivienda de transición, a caballo entre las ventanas. Antes eran dos aquí [en la

a m b i e n ta l
el modelo art déco y el estilo moderno, sala]. En el año ochenta y pico pusimos la

Raiz
se popularizó en el sector en las dé- nueva ventana”. 2 Este estilo arquitectóni-
cadas de 1950 y 1960. A diferencia de co conserva los calados en fachada para
RA
los estilos precedentes, la vivienda de permitir la salida de aire caliente.
transición prescinde de las fachadas
planas y paramentadas en favor de un En lo que se refiere a la distribución
juego de espacios suprimidos y elemen- espacial, cabe destacar en primer lugar la

urbana
tos superpuestos, articulados en función terraza de acceso cubierta, que pone en

Raiz
de la terraza del frente, que se erige así contacto directo la vivienda con la calle.
RU
en uno de los elementos distintivos de la Luego, al ingresar a la vivienda, se entra
vivienda pescaítera. La fachada art déco a una gran sala-comedor, iluminada a
transición contaban con lotes más anchos
se divide en dos cuerpos, tomando como través de una o varias ventanas alargadas

Raiz socio-
que permitían dejar un espacio para venti-

c u lt u r a l
eje el centro de la vivienda en sentido y verticales, relacionadas con la terraza.
lar e iluminar aquellas habitaciones ubica-
vertical. El cuerpo que contiene el acceso A un lado, izquierdo o derecho indistin-
das al fondo que no tenían relación directa
a la vivienda es desplazado hacia atrás; tamente, se ubica el cuarto principal, con
con el frente o con el patio. La mayoría de RC
un retroceso que quiebra toda la fachada, su ventana hacia la calle. La sala conduce
las casas dejaban solo una caja de aire en
incluyendo la cornisa, y abre espacio a a otro comedor o remata en un corredor
uno de sus costados, preferiblemente del
la terraza. La fachada, ahora tridimen- que comunica con más habitaciones y
lado donde estaban las habitaciones.

histórica
sional, conserva su zócalo en todas sus otros espacios funcionales como la coci-
paredes. El techo plano de concreto na, integrada definitivamente dentro de

Raiz
A continuación presentamos algunas de
cubre la terraza y se prolonga a lo ancho la vivienda. Entre los diferentes espacios
las características técnicas más impor- RH
de la vivienda en forma de alero. La se instalan calados que permiten ventilar
tantes de la vivienda de transición en
cornisa, ahora con tres y hasta cuatro toda la casa. El cuarto principal tiene otro
Pescaíto:
caras, remata los muros que cierran los acceso en su interior que comunica con
espacios interiores. En algunas viviendas un pequeño hall, que a su turno conduce
>> Materiales: El cemento se consolida defi-
se construye un muro bajo en la parte al baño y al cuarto secundario. Según lo
nitivamente como principal material de
delantera de la terraza, que enmarca este recuerda Lourdes Zambrano, la suya “era
construcción y su campo de aplicación
espacio de acceso y le confiere un carác- la única casa que tenía baño en la casa;
se amplía continuamente para abarcar
ter semiabierto: “Desde que mi mamá todas tenían era letrina. Mi papá buscó el
diferentes elementos de la edificación.
hizo esta casa, la hizo así con terraza alcantarillado lejos y hasta allá mandó el
Las paredes son fabricadas con ladrillo
[...]. Desde siempre ha tenido ese muro tubo”.3 Es importante resaltar que en las
rojo macizo (6 cm × 20.5 cm × 10 cm),
alrededor de la terraza, en la parte de la viviendas de transición el baño ya está
recubierto con mortero y estuco. El piso
entrada hasta la columna”, comenta Iris plenamente incorporado a los espacios
puede ser de cemento pulido o encha-
Rojas de Ariza, vecina de Barrio Norte y privados, a diferencia del estilo art decó
pado en baldosas de diferentes colores y
habitante de una vivienda de transición.1 o, más aún, de la vivienda republicana.
figuras, que comienzan a ser asequibles
En el primero, el baño estaba adosado a
para los pobladores. En el montaje del
Los vanos alargados al lado de la puerta la vivienda, pero en la parte posterior; en
techo se emplean vigas y correas de
de acceso, en el cuerpo de la fachada la segunda, en el patio. La integración del
madera de carreto, sobre las que se ins-
replegada hacia atrás, son de inspiración baño dentro de la vivienda fue posible
tala una capa de baldosas de barro que
art déco. En el cuerpo que se proyec- gracias al tendido de la red de acueducto
finalmente es recubierta con cemento.
ta hacia la calle se abre una ventana y alcantarillado en el sector.
Aparecen los techos en concreto reforza-
rectangular; en algunos casos, la pared
do con hierro, que sirven como cubierta
perpendicular a la calle que une ambos Uno de los grandes aportes de la vivienda
de la terraza. Justa Pimienta habla sobre
cuerpos contiene también una ventana, de transición al patrimonio arquitectónico
los materiales de su vivienda: “ ‘Bueno,
que ilumina y ventila el cuarto principal. de Pescaíto es el de la caja de aire (la ficha
ahora puede venir un terremoto y no la
Tal es el caso de la vivienda de Lourdes correspondiente puede ser consultada en el
tumba’, dijo el albañil cuando termina-
Zambrano, vecina del barrio de Pescaíto: siguiente apartado). Las construcciones de
ron de construir esta casa [...]. Aquí uno
“Han habido poquitas variaciones, como
clava una puntilla y se daña primero el
2 Lourdes Zambrano, vecina del barrio de Pescaíto, 64
taladro [...]. Los ladrillos eran grandes;
1 Iris Rojas de Ariza, vecina de Barrio Norte. Entrevis-
años de edad. Entrevista: 11 de abril de 2016.
ta: 11 de abril de 2016. 3 Ibidem.
131
El entretecho alto: La encorvadura de la
complemento de cubierta de la terraza:
la caja de aire y una patología
los calados para frecuente.
Planos Vivos

garantizar un Fotografía de Luis


Miguel Marín
Pescaíto

ambiente fresco.
Fotografía de Luis
Miguel Marín
arquitectónico

ahora con los ladrillos nuevos uno habla >> Patologías: El deterioro por salitre es la
urbano y
Análisis

y se escucha al lado”.4 patología que más afecta a estas vivien-


das, pues la parte inferior de las paredes
>> Técnica constructiva: Los muros son de
absorbe la sal del suelo. En el período
ladrillo a soga y mortero. Los marcos de
en que surge la vivienda de transición
los vanos son reforzados con alféizares
comienzan a aparecer nuevos materiales
y dinteles. En lo que a la cubierta plana
de fachada que ayudan a prevenir este
de concreto sobre la terraza respecta,
tipo de deterioro, como el granito y el
los perfiles de hierro se insertan en las
de transición

graniplast. Iris Rojas de Ariza cuenta que


La vivienda

paredes de ladrillo y, con la ayuda de


“primero la casa era lisa, creo que era de
formaletas, se procede a moldearla.
color amarillo; luego le apliqué grani-
En la esquina más alejada de la pared
plast, no hace nada, pero el salitre se lo
de fachada, la cubierta se apoya o bien
estaba comiendo, entonces puse granito
sobre muros con calados, o bien sobre
como en los años 80”.7 Estructuralmente
una columna de ladrillo, concreto refor-
se conservan bien, gracias a la calidad
zado o tubo de hierro. Al igual que en
de los ladrillos de la época; sus techos
el estilo art déco, la cubierta comienza
también son robustos, aunque la capa
detrás de las paredes de fachada, donde
de concreto de la parte superior suele
empieza la cornisa. De allí se despren-
exhibir fisuras que con el tiempo generan
den las principales correas, cada 45
goteras en la casa. Muchos de los habi-
centímetros aproximadamente, hasta
tantes de estas viviendas deben tapar
la pared de la parte posterior que da
estas grietas constantemente. Lourdes
al patio. Sobre ellas, otro armazón de El muro o la columna
Zambrano señala que “el salitre daña
correas de menor dimensión se encarga que sostiene la
las paredes. El techo fue bueno como 58
de soportar las baldosas cuadradas, de placa de concreto:
años; nunca tuvimos goteras, pero ya elemento distintivo
veinte centímetros de lado, que crean
hay goteras y le mandé a echar un manto de la casa de
una superficie plana (pero con una
de Edil”.8 Las fisuras en las cubiertas transición.
leve inclinación de menos de 20 %, por
planas sobre la terraza, por su parte, ex- Fotografías de Luis
tratarse del techo). Esta superficie es Miguel Marín
ponen los perfiles de hierro al agua y al
recubierta con una capa de concreto
aire, con el consiguiente debilitamiento y
para impedir el paso del agua.
encorvadura de la cubierta.
>> Confort: Cabe destacar los entretechos
Entre los elementos arquitectónicos más
altos de la vivienda, sobre todo en la
destacados de la vivienda de transición,
sala, lo mismo que la caja de aire y los
cabe mencionar:
calados entre los espacios, que hacen
que la vivienda se vuelva más fresca.
>> La terraza: Es el espacio que caracteriza
Gracias a su ancho, a la caja de aire y a
y define este estilo arquitectónico, en
su relación con la calle y el patio, la ma-
cuanto pone de relieve la relación cada
yor parte de la vivienda está bien ilumi-
vez más estrecha entre los habitantes de
nada. Lourdes Zambrano menciona que
la vivienda y la calle. Sus dimensiones
“esta casa era toda fresca, pero desde
en planta son aproximadamente de uno
que pavimentaron, ya no es tan fresco;
a dos metros de ancho por tres a cuatro
el patio es lo más fresco”.5 Iris Rojas de
metros de largo. Por regla general está
Ariza comenta por su parte que “la casa
enchapada en baldosas coloridas que
es muy fresca, pero cuando la tempera-
hacen juego con las del interior de la vi-
tura está muy fuerte, es calurosa”.6
vienda. Se llena de vida sobre todo en las
tardes calurosas, cuando los habitantes
4 Justa Pimiento, vecina de Barrio Norte, 92 años de se instalan en ella para “coger fresco”.
edad. Entrevista: 11 de abril de 2016.
5 Lourdes Zambrano, vecina de Barrio Norte, 64 años
de edad. Entrevista: 11 de abril de 2016. 7 Ibidem.
6 Iris Rojas de Ariza, vecina de Barrio Norte. Entrevis- 8 Lourdes Zambrano, op. cit. Entrevista: 11 de abril de
ta: 11 de abril de 2016. 2016.
132
El techo de la

política
vivienda de
transición: la trama

Raiz
geométrica formada
por las vigas, RP
las correas y las
baldosas.
Fotografía de Luis

Raiz socio-
económica
Miguel Marín

RE

>> La placa de concreto como cubierta de que la caja de aire permita un acceso cercanos. Sin renegar en modo alguno de

a m b i e n ta l
la terraza: Es el elemento que introduce directo al patio, suelen cerrarla con un la vida en el patio, la vivienda de transi-

Raiz
el lenguaje arquitectónico moderno en muro con calados que garantice el flujo ción se abrió hacia la calle, y su terraza se
el sector, y constituye a su vez el primer del aire (véase la ficha correspondiente constituyó desde entonces en lugar tanto RA
intento por apropiarse de los elementos en el siguiente apartado). de descanso como de socialización: en
de vanguardia en la arquitectura inter- ella, los pescaíteros y las pescaíteras no
nacional para adaptarlos a las condi- >> El muro que delimita el espacio de la solo se refrescan en las tardes más caluro-
ciones locales. Unifica la nueva fachada, terraza: Se extiende entre el muro o sas, sino que además entablan relaciones

urbana
columna que sostiene la cubierta de

Raiz
fracturada por el retroceso que da origen con conocidos y pasantes por fuera de su
a la terraza. Es perfectamente horizontal, concreto hasta el acceso de la terraza. círculo más íntimo. Cuenta Iris Rojas de
Puede ser un muro liviano, con cala- RU
sin ornamentos, y generalmente está Ariza que, de niña, la terraza con su muro
pintada de tal manera que se destaca dos decorativos que hacen juego con la era uno de sus lugares preferidos: “Yo
frente al resto de la fachada. Por ser pla- geometría y la estética de la vivienda, la quería así [la terraza] cuando se hizo

Raiz socio-
aunque también son comunes los muros

c u lt u r a l
na, las aguas lluvias suelen empozarse solo el muro; uno se hacía ahí y hacía las
en la parte superior de la cubierta, y con macizos. Ya sean macizos o livianos, recochas con los pelaos [...]. También nos
el tiempo generan filtraciones y goteras. los muros se convierten en un lugar de resbalábamos [...]. Lástima que estos [sus
Como respuesta, los habitantes suelen descanso para las personas que hacen hijos] no aprovecharon esto”.9
RC

instalar un pequeño tubo de desagüe visita en la terraza.


hacia la calle. >> El muro que delimita el antejardín: Con Las viviendas de transición reflejan la

histórica
la aparición del antejardín en algunas manera en la que los estilos internaciona-
>> El muro o la columna que sostiene la
viviendas, los habitantes delimitan el les y las modas arquitectónicas empiezan

Raiz
placa de concreto: Situado a un costado
espacio con muros pequeños y rejas de a ser adaptados al contexto cultural y
de la vivienda, constituye el elemento RH
mediana altura. Su función no va más ambiental de una ciudad caribeña como
en fachada que sostiene la placa de
allá de ‘amojonar’ el espacio, pues los Santa Marta. No se puede afirmar que
concreto que cubre la terraza. El muro o
muros permiten el contacto entre los sean plenamente representativas del gran
la columna se convierte en un elemento
transeúntes y las personas que están Pescaíto, pues eran las viviendas de las
distintivo, por momentos escultórico,
en la casa (y cualquier persona podría personas de mayores recursos en el sector,
que se conjuga con la estética de la
saltarlos en caso de querer ingresar a pero constituyen sin duda una parte muy
fachada. Por lo general, el muro contie-
la vivienda para robar). Otros muros significativa de su patrimonio arquitectó-
ne calados, que combinan su carácter
contienen calados decorativos que nico, por cuanto plantean un diálogo entre
funcional –permitir el paso de aire por
también hacen juego con la estética de las condiciones y prácticas locales, por
la terraza– con su valor decorativo. Las
la vivienda. un lado, y los lenguajes arquitectónicos
columnas pueden ser gruesas o delga-
cosmopolitas, por el otro. En ese sentido,
das, en diferentes materiales, y entre >> El techo con baldosas: Al igual que los
su valor trasciende lo puramente mate-
ellas se destaca la columna delgada techos del estilo art déco, este elemento
rial: la convivencia en las terrazas y en los
en tubo de hierro, que se anticipa a las le da lustre al interior de la vivienda y se
frentes de las casas es la quintaesencia de
características del estilo moderno. Es conserva en muy buen estado en la ma-
la vida pescaítera, volcada hacia la calle en
común ver columnas en forma de trape- yoría de los casos. Las vigas, correas y
las horas de la tarde, cuando sus habitan-
cio invertido, cuyo lado más pequeño es baldosas componen una trama geomé-
tes conversan con los vecinos o se reúnen
el que está apoyado en el piso. trica que le da un aspecto uniforme y
para jugar algún juego de mesa, mientras
>> La caja de aire: Espacio de sesenta agradable al espacio interior.
saludan a los transeúntes que caminan por
centímetros a un metro de ancho que se En este periodo de la historia de Pescaíto, el frente. Su conservación debe orientarse
deja libre entre vivienda y vivienda: per- cuando la consolidación urbana estaba no solo hacia la sustancia arquitectónica,
mite el paso de aire y luz a lo largo de bastante adelantada y los atajos e intersti- sino también hacia esos hábitos y costum-
la casa y refresca e ilumina los espacios cios entre patios cedían cada vez más te- bres que alimentan la cultura popular del
interiores. También tiene como función rreno a la edificación de nuevas viviendas, Caribe colombiano.
comunicar la calle con el patio, como la calle cobraba cada vez más importan-
acceso directo sin tener que atravesar el cia como espacio de encuentro. No es que
interior de la vivienda. Normalmente se el patio hubiera perdido protagonismo en
instala una pequeña puerta de madera el hogar, pero sí se fue perfilando como
o una reja hacia la calle por seguridad. espacio de mayor intimidad, reserva- 9 Iris Rojas de Ariza, vecina de Barrio Norte. Entrevis-
Aquellas personas que no necesitan do a los familiares y a los vecinos más ta: 11 de abril de 2016.
133
Planos Vivos
Pescaíto
arquitectónico

La vivienda no
consolidada en
urbano y
Análisis

Pescaíto.
Fotografías de Luis
Miguel Marín
Planodetipologíadelavivienda

espacial y materialidad
según su evolución

Plano de tipología de la vivienda según pal], porque para ese otro lado está el cerro y pues
su evolución espacial y materialidad pa’lante ni modo, queda en el aire [risas]”.8

Junto a la tipología histórica, es indispensable En un paulatino proceso de ampliación y recons-


acercarse a la realidad urbana de Pescaíto a tra- trucción, la vivienda no consolidada adquiere una
vés de una tipología que dé cuenta de la evolución creciente diferenciación espacial, que se manifiesta
espacial de las viviendas, desde el instante en el por lo general en dos o tres habitaciones separadas,
que los pobladores se establecen en el sector, mu- sala-comedor y cocina independiente. La diferen-
chas veces en construcciones que son concebidas ciación entre espacios privados, sociales y funcio-
como provisionales (si bien pueden ser habitadas nales, lo mismo que la construcción en materiales
durante mucho tiempo, si la escasez de recursos duraderos, no son, empero, el punto de llegada: para
no permite ampliarlas y renovarlas), hasta el mo- que una vivienda goce del carácter de consolidada,
mento en que las edificaciones son reconocidas debe tener todos sus espacios “en material”, es decir,
por propios y extraños como plenamente conso- en mampostería, con pañete, pintura y acabados en
lidadas. Como se puede apreciar en el plano de puertas, ventanas y fachada. Wilson Calero y su fa-
tipología según la evolución espacial y material milia vivieron todo el proceso de transformación a
(plano 4.4), la clasificación que Planos Vivos pro- lo largo de varias generaciones:
pone para Pescaíto abarca la distribución espacial
a la que las personas apelan desde la construcción Mi abuelo trabajó con la frutera. Era pescador tam-
original de la vivienda, pasando por las diferentes bién. Fue pensionado de la Compañía de Sevilla. Él
etapas de ampliación y remodelación, hasta al- construyó la casa donde vivimos toda la vida, que
canzar la que presumiblemente sea su ‘madurez’ tenía como 75 o 70 años de haberse construido y la
en términos constructivos. Tenemos, en primer había comprado mi abuelo cuando se ganó una lote-
lugar, la vivienda no consolidada, que por lo gene- ría. La casa era de barro, madera y techo a dos aguas.
ral nace como un único espacio, muchas veces en Se hacía con arena de mar y por eso esas casas tie-
materiales temporales, que concentra los ámbitos nen tanto salitre. La decidimos tumbar porque se nos
privados, sociales y funcionales, con el baño ado- entraba mucho el agua en las inundaciones y las pa-
sado a la edificación. Tal es el caso de la vivienda redes se dañaban mucho. Entonces hace como cinco
de Diana Yacomelo, vecina de Villa Tabla, quien o seis años tumbamos e hicimos la casa nueva que
construyó su casa en lo alto de los cerros: “Hace construimos entre todos mis hermanos. Construimos
nueve a diez años que construimos esta casa. La con el techo antiguo, tumbamos las paredes de barro
hicimos de tabla. Esto era puro cerro, aplanamos y subimos los muros de bloque de cemento, y luego
el terreno, la hicimos. Solo hicimos un cuarto y el frente de ladrillo. Ya después cambiamos el techo a
ahí vivíamos los cuatro. Estamos esperando tener eternit porque antes era de zinc. Tumbamos el techo
más platica para hacer un cuartico para los niños. por partes para seguir durmiendo en la casa.9
Nos toca hacerlo allá [detrás del cuarto princi-
8 Diana Yacomelo, vecina de Villa Tabla. Entrevista: 7 de junio de 2016.
9 Wilson Calero, vecino de Barrio Norte, 53 años de edad. Entrevista: 10
134 de mayo de 2016.
La vivienda consolidada en Pescaíto
(de izquierda a derecha, en orden
descendente): la casa consolidada

política
(cuatro fotos), el apartamento (al

Raiz
frente y en el patio, cuatro fotos), el
callejón-conjunto (dos fotos), la casa RP
de dos pisos (tres fotos) y el edificio de
apartamentos (dos fotos).
Fotografías de Luis Miguel Marín

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH

135
El cerramiento
completo de terrazas
y antejardines
con rejas altas en
Pescaíto.
Planos Vivos

Fotografías de Luis
Miguel Marín
Pescaíto
arquitectónico
urbano y
Análisis

Figura 30. Las tres


fases en la formación
1 2 3 del callejón-conjunto
Planodetipologíadelavivienda

espacial y materialidad

Apartamentos
según su evolución

Patios

Casas
madres

Calle Calle Calle

La vivienda consolidada tiene diferentes manifes- En el caso de las rejas, los primeros tipos de vi-
taciones en Pescaíto: puede tratarse de casas de vienda en el sector (autoconstrucción, conjuntos
uno o dos pisos, así como de viviendas tipo apar- o “pasajes” obreros, art déco) solo contemplaban
tamento, cuyos espacios se extienden linealmen- barrotes verticales o rejas ornamentales de hierro
te a lo largo del lote, uno detrás del otro, desde en los vanos de sus ventanas y puertas, como en
el frente de la calle o en los patios. Coexisten con el caso de las rejas curvadas hacia la calle en su
posadas y hoteles, edificios de apartamentos y los parte inferior, a la manera de una gota. El ámbito
antiguos conjuntos de vivienda obrera o “pasajes”, de aplicación de las rejas se amplía con el sur-
lo mismo que con lo que hemos dado en llamar el gimiento de la arquitectura de transición en Pes-
‘callejón-conjunto’. Este último surge a partir de la caíto, pues el antejardín y la terraza empiezan a
construcción de apartamentos en los patios, con ser delimitados a través de una combinación de
su respectivo acceso de un metro a través de la muros y rejas bajos. En los años 60 y 70 las re-
caja de aire. Cuando los propietarios de la casa co- jas (enriquecidas con los motivos geométricos de
lindante construyen de manera especular aparta- la época) y los muros exhiben alturas cada vez
mentos en su patio, de tal manera que sus frentes mayores, pero es solo en la década de 1980 que
quedan mirando hacia los de los apartamentos de el cerramiento completo de las terrazas y los an-
la casa contigua, se opta por eliminar las puer- tejardines con rejas altas se arraiga en el sector,
tas de acceso de las cajas de aire y por demoler como consecuencia de la creciente inseguridad:
el muro divisorio: aparece entonces un callejón de “Desde un inicio la reja era con unas columnas
dos metros, al que se accede por la calle, que uni- y unos barrotes atravesados [horizontalmente], y
fica el espacio ocupado por los apartamentos de ahí se sentaban los niños como pajaritos. Como
ambos patios (fig. 30). en el año 87 estábamos aquí en la terraza y salió
la gente corriendo, y era que habían robado a al-
La tipología aquí propuesta da cuenta igualmente guien y después el ladrón quería entrar para acá,
de la manera en que la distribución del espacio, y yo: ‘¡No! ¡Para mañana es tarde mandar hacer
los elementos constructivos y los materiales em- esa reja!’. La tratamos de hacer parecida a las re-
pleados interactúan con el entorno urbano, social jas originales de las ventanas”, recuerda Lourdes
y ambiental para adaptarse a las necesidades, Zambrano.10 Desde entonces, la instalación de
las expectativas y los temores de los habitantes:
el patio, la terraza, las rejas o las cajas de aire 10 Lourdes Zambrano, vecina de Barrio Norte, 64 años de edad. Entre-
136 constituyen aquí los ejemplos más significativos. vista: 11 de abril de 2016.
Plano 4.4
Plano de tipología de la vivienda según
su evolución espacial y materialidad

política
C

Raiz
Casa de un cuarto o no consolidada
RP
Casa consolidada
Apartamento (al frente y en el patio)
Casa de dos pisos

Raiz socio-
económica
Edificio de apartamentos
Posada y hotel
C

Conjunto de viviendas
Callejón-conjunto RE
Frente en la casa C

C C C C

Patio largo y compartido


C C

C
C

a m b i e n ta l
Casa en material temporal
C

Comercio

Raiz
RA
C
C
C

C
C
C

urbana
Raiz
C C

C
C

RU
Const.

Raiz socio-
C

c u lt u r a l
C
C

C C

C C
RC
Const.
C C
C C C CC C

C C
C
C C
C C C
C

histórica
C
C
C C C
C
C
C C C C
C C
C C
C

Raiz
C
C C C C C
C C C C
C C C C C CC C
C C C C
C C
C C C
C
C
C C C C
C
C C C C
C C

RH
C C
C C C
C
C
C C C C
C
C
C C
C
C C
C C
C C
C C C C C
C CC CC C C
C C C C C C
C C C C C C
C C C C C
C C C C C CC C C C C C C
C C C C C C C
C CC CCC
C C C C C C C
C CC
CC C C C C
C C C C
C C C C
C CC C CC CC C C C C
CC C C C C C
C C C C C C C
CC C C C C
C CC C C
C C C C
C C C
CC C C C C
C
C C
C C C
C C
C C C
C
C C C
CC C C C C C C
C C C C C C
C C C C C C C C
CC C C CC C C C
C C C CC C C C
C C C C
C C C C C
C

C
C C
C C C C
C
C C C
C C
C
C C
C
C C C C C C
C C
C C

C C
C C C
C C CC C C C C
C C C
C
C C
C C
C C
C C
C
C C C
C
C CC C C C
C C C
C
C
C C C
C
C C C C
C C
C C C C C C
C
C C C
C C
C C C
C C C
C C C C C
C CC C C C C
C C C C

rejas altas, tanto perimetrales como en forma de guras en la terraza enrejada mientras “cogen fres-
‘jaula’, se ha difundido en Pescaíto. Como queda co” en las tardes o en la noche, no son pocas las
dicho, la preocupación fundamental es la de la que igual prefieren sacar sus sillas al andén, fuera
seguridad, aunque otros factores también han co- del espacio protegido por las rejas, para tener más
brado creciente importancia: en el imaginario de contacto con la vida de la calle, que evidentemente
la comunidad, las rejas hacen parte fundamental es más dinámica allí donde las rejas no han pro-
de una vivienda consolidada y reflejan el estatus liferado aún.
económico de las personas.
Como ya hemos tenido oportunidad de mencio-
La instalación de rejas ha modificado la relación nar en las páginas precedentes, la caja de aire
entre los habitantes y los flujos urbanos. El espacio constituye otro de los elementos distintivos –si
exterior entre rejas de las viviendas es más fami- bien en trance de desaparición– del paisaje urba-
liar, reservado a los vecinos y a las personas de no pescaítero. Presentamos a continuación la ficha
confianza, y los padres de familia se siente más del sistema de Planos Vivos que se ocupa de ellas
tranquilos si sus hijos juegan en su interior. No en mayor detalle.
obstante, si bien las personas se sienten más se- 137
Ficha 5 La caja de aire
Planos Vivos
Pescaíto

Caja de aire
transformada
en acceso a un
apartamento en el
patio.
arquitectónico

Fotografía de Luis
Miguel Marín
urbano y
Análisis
La caja de aire

La caja de aire (llamada ocasionalmente sus alrededores, pues la densificación y la un poco más de espacio dentro de la
“cámara de aire”) es un espacio vacío consolidación de las manzanas llegaría vivienda. Con la consolidación de las
entre la casa y el muro que delimita el varios años después. No obstante, cuando manzanas y la densificación del sector, las
lote, con el doble propósito de permitir una casa era edificada en el lote contiguo, cajas cayeron en el olvido y dejaron der
que el aire y la luz entren a las habitacio- se dejaba un espacio libre con el único ser concebidas como elemento integral de
nes laterales, por un lado, y el de ofrecer objetivo de comunicar el patio con la la vivienda. En la actualidad son emplea-
acceso directo desde la calle al patio in- calle, sobre todo para permitir el paso de das antes que nada como acceso para las
terior, por el otro. “Yo le digo caja de aire, animales como burros, cabras y caballos. personas que viven en los apartamen-
y para mí es un espacio adicional a los Los conjuntos de vivienda o “pasajes” tos construidos en los patios traseros.
laterales, que sirve de ventilación o para tampoco contaban con cajas de aire, pues Cuando las cajas de aire se transforman
otra entrada adicional a la de la casa [...]. para ventilar e iluminar las viviendas ape- en corredor de acceso, son iluminadas
Inicialmente la caja de aire fue idea del laban a entretechos muy altos y calados. con focos. El transporte de muebles y
abuelo; él decía que así era el estilo [...]. electrodomésticos hacia los apartamentos
También servía para sacar las basuras Con la densificación del sector, las vivien- del patio se debe hacer a través de la casa
o sacar las cosas del taller cuando ahí das aisladas de estilo art déco comenza- madre que da a la calle, pues las dimen-
trabajaba mi papá. Algunos trabajado- ron paulatinamente a dejar espacios entre siones de la caja no permiten la entrada de
res también entraban por ahí”, cuenta sus muros y los de las construcciones sofás, neveras o lavadoras.
Idania Ruiz Ureche, vecina del barrio de colindantes, con el propósito de permitir
Pescaíto, quien posee una caja de aire en el tránsito entre el patio y la calle, mas La caja de aire oscila entre cuarenta centí-
su vivienda.1 Lo ideal es que existan cajas no para la ventilación, pues carecían de metros y un metro de ancho. El largo de la
de aire a ambos costados de la construc- vanos en las paredes laterales. La caja de caja corresponde al de la vivienda. Hacia
ción, pero la falta de espacio obliga a aire apareció en las viviendas de transi- la calle tiene un cerramiento que puede
gran parte de los habitantes a prescindir ción, junto a la terraza. Estas casas, que ser una reja o una puerta de diferentes
de una o incluso de ambas. se apartaron de las viviendas en serie y materiales. Hay casos en los que la caja
de sus fachadas planas, abrieron espa- de aire cumple netamente la función de
La caja de aire es un elemento que cio a la caja de aire al menos en uno de ventilar e iluminar la vivienda, pues solo
apareció a mediados del siglo pasado en sus costados. El costado elegido, a su se instala un calado como división hacia
Pescaíto. Las primeras construcciones turno, fue provisto de vanos para que la calle. La caja de aire tiene un aspecto
carecían de un espacio arquitectónico los espacios interiores se beneficiaran desnudo, pues su valor es netamente
semejante. Las viviendas de autoconstruc- de una mejor ventilación e iluminación. funcional: no en vano, la pared de la
ción, por ejemplo, disponían –al menos Los estilos arquitectónicos posteriores vivienda y el muro divisorio carecen de
en un comienzo– de bastante espacio a proyectaron cajas de aire a ambos lados todo acabado. Solía ser instalada en el
de las edificaciones, pero las dimensiones costado sobre el que estaban situadas las
cada vez menores de los lotes han llevado habitaciones, que carecían de la conexión
1 Idania Ruiz Ureche, vecina del barrio de Pescaíto, 48
a los habitantes a sacrificarlas para ganar que sí tenían las áreas sociales y la cocina
años de edad. Entrevista: 11 de abril de 2016.
138
política
Raiz
RP

La caja de aire:
elemento distintivo

Raiz socio-
económica
del paisaje urbano
pescaítero.
Fotografías de Luis
Miguel Marín
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH

con el frente, la terraza y el patio. La caída invaluable, sobre todo cuando se va la luz
de los tejados de muchas de las casas dan y la apertura de las celosías permite refres-
a la caja de aire, que por lo mismo es pro- car los cuartos. “Hace más fresca la casa y
pensa a la humedad y a las inundaciones da un poco de luz también”, asegura Idania
cuando llueve intensamente. Ruiz Ureche al ponderar su caja de aire.2

Los vanos que dan hacia la caja de aire


suelen tener celosías para controlar la
entrada de aire. A pesar de la existencia de
nuevas tecnologías para ventilar las habi-
taciones, como ventiladores y aires acon-
dicionados, las cajas de aire que subsisten
en el sector siguen ofreciendo un servicio 2 Idania Ruiz Ureche, vecina del barrio de Pescaíto, 48
años de edad. Entrevista: 11 de abril de 2016.
139
Plano 4.5
Plano de árboles en los frentes de las casas

Ac
Ac
Planos Vivos

Ac
Ac
Ac
Pescaíto

CLE

Ac

G
arquitectónico

CLE
urbano y
Análisis

TT

G LL

U
C

Mango
U
Guayacán Ac

Almendro CLE

Nim
Olivo
Plano de árboles
en los frentes de

Matarratón CLE

Maíz tostado
las casas

San Joaquín (árbol C


de navidad)
T

Trébol
Caucho/roble
Trupillo, reseda
Uva (macho y hembra)
Níspero
Laurel extranjero, suegra
Ac Acacia
E Eucalipto
CA Palo de caimito
LL Lluvia de oro
Cañandanga, Flor
amarilla, Cabalonga
Olivo negro
G Guásimo
Higuereta
Limón
Mamón
C Coral blanco
Palmas
U Uva
CLE Clemón
T Todo sombra

Plano de árboles en los de la comunidad la que explica la importancia que


frentes de las casas han ido cobrando los árboles en las calles con el
correr del tiempo. Entre las diferentes especies cabe
Los árboles sembrados en los frentes de las casas destacar el almendro, de rápido crecimiento y hojas
constituyen uno de los elementos más importantes anchas, ideal para protegerse del sol más intenso;
de la vivienda pescaítera: a su sombra, los habitan- el mango, que además de sombra ofrece su fruta; el
tes suelen pasar los días más calurosos y departir trébol, que combina la sombra que provee su follaje
con vecinos y pasantes. En los inicios del gran Pes- con la vistosidad de sus flores amarillas; y el trupi-
caíto, las viviendas no solían tener árboles en sus llo, conocido también como sombrillita, que aparte
frentes, pues la vida social transcurría en los gran- de dar buena sombra se presta para el juego de los
des patios interiores, colmados de los árboles más niños. Existen otros árboles menos representativos,
representativos de la región, como el mango, el nís- pero no por eso menos apreciados, como el maíz
pero y el mamón. La consolidación y densificación tostado, el guayacán, el olivo, el matarratón, el ro-
del sector restringió los flujos de personas entre los ble, el san Joaquín y la uvita. En el plano de árboles
patios, que terminaron por cederles a los frentes de en los frentes de las casas (plano 4.5), los lectores
las casas su lugar como espacio privilegiado de so- tendrán la oportunidad de observar la distribución
140 cialización. Es esta transformación en los hábitos de las principales especies en las calles de Pescaíto.
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH

Árboles de Pescaíto (de


izquierda a derecha, en
orden descendente):
almendro (tres fotos),
mango (dos fotos),
nim (dos fotos), olivo,
guayacán, matarratón,
roble, maíz tostado, trébol
y san Joaquín.
Fotografías de Luis Miguel Marín

141
Ficha 5 Trupillo
Planos Vivos
Pescaíto

El trupillo de José
González.
Fotografía de Luis
Miguel Marín
arquitectónico
urbano y
Análisis
en los frentes de
las casas
Trupillo

La relación de los habitantes de Pescaíto avance en la edificación del sector exigió nida. Sin lugar a dudas, es en los parques
con el trupillo está imbuida de gran ambi- el talado de estos arboles, y todos sus hitos donde la ‘domesticación’ del trupillo tiene
güedad, pues aunque es uno de sus árboles urbanos tuvieron que disputarles el terreno su manifestación más expresiva. En el
nativos más representativos, está asocia- palmo a palmo a las trupilleras, como fue parque del barrio de Pescaíto, ubicado al
do en el imaginario colectivo al “monte” el caso de la cancha de La Castellana en lado de la cancha de La Castellana, existe
agreste y rústico que recién desapareció sus diferentes ubicaciones. un trupillo añoso, de tronco inclinado,
con el trazado urbano del siglo xx. Cual- que hace las delicias de los niños en
quier relato que se remonte en el tiempo No obstante, el trupillo no fue concebido sus juegos. En el parque de San Martín,
culmina indefectiblemente en el trupillo, únicamente como parte de la maleza que situado junto a la vía Alterna entre las
que simboliza –junto con el playón– el había que desbrozar y de la que había que carreras 4.a y 5.a, los trupillos que crecen
estado prístino y silvestre del sector antes deshacerse para limpiar y delimitar los en sus jardineras gozan del aprecio de
de que las manos de los pescaíteros y las nuevos lotes. El proceso de urbanización los habitantes del sector. Así lo corrobora
pescaíteras lo hubieran convertido en un de Pescaíto sacó pleno provecho de su el testimonio de Héctor Ortiz: “A mí me
mundo habitable. Su presencia se hunde madera como material de construcción: gustaría que hicieran un parque distinto,
en los orígenes más remotos del gran las varas de trupillo se convirtieron donde la gente pueda llegar, donde haya
Pescaíto, y en las remembranzas aparece desde un primer momento en elementos un gimnasio moderno de esos que hacen
siempre como un recordatorio de todo el imprescindibles en las cercas de los patios ahora, que le dé la cara a la vía Alterna
trabajo que fue menester para adelantar su y en el armazón de paredes y techos, para que ese lugar no sea residual. Arbo-
transformación urbana. Quizá sea esta la como lo recuerda Rodrigo “Chicho” rizarlo con trupillos y almendros que son
razón por la que el trupillo rara vez apa- Rodríguez, vecino de Olaya Herrera: “Se los árboles nativos y dan buena sombra”.3
rece mencionado en singular: a diferencia usaban maderas cortadas en menguante; En el parque de Ensenada Olaya Herrera,
de otros árboles que se yerguen altivos eran carreto, trupillo y ceiba, pero esta situado en la calle 1, entre carreras 11 y 13,
y reclaman para sí un carácter icónico, era muy abundante y ya no se consigue”. 2 el trupillo ha alcanzado la mayor fama,
como el mango o el almendro, los trupillos El símbolo por antonomasia del “monte” no solo por el ejemplar que domina una
constituyeron para los primeros poblado- incivilizado quedó ligado así al desarrollo de las terrazas que lo componen y que
res un obstáculo que debía ser removido urbano de Pescaíto de forma indisoluble. derrama su sombra sobre el lugar. Como
para trazar vías, construir viviendas e lo relata Eduardo Goenaga, vecino de
instalar parques y canchas deportivas. El Ahora bien, más allá de la utilización de Ensenada, “a esto lo llamamos parque
testimonio de Carlos Correa Montenegro, su madera en las faenas de construcción, ‘El Trupillo de Olaya Herrera’. Algunos
vecino del barrio de Pescaíto, es elocuente el trupillo se ha integrado plenamente decían: ‘¡Ey, vamos al parque del burro!’.
al respecto: “Nadie quería venir aquí: esto en el paisaje urbano pescaítero, y su Le decían así por una figura de un trupillo
eran puros trupillos y agua salada; puro presencia en los frentes de las casas y en
olor a pescado y un lodazal”.1 Cualquier los espacios públicos es más que bienve-

3 Héctor Ortiz, vecino de San Martín, 65 años de edad.


1 Carlos Correa Montenegro, vecino del barrio de 2 Rodrigo “Chicho” Rodríguez, vecino de Olaya He-
Entrevista: 6 de junio de 2016.
Pescaíto. Entrevista: 7 de abril de 2016. rrera. Entrevista: 4 de mayo de 2016.
142
La ‘domesticación’ del

política
trupillo en Pescaíto y

Raiz
su transformación en
árbol urbano.
Fotografías de Luis RP
Miguel Marín

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH
seco que hasta le ponían bolas con una hace catorce años. Cuando tengo pico y
media velada [risas]”.4 placa me vengo para aquí, para donde mis
suegros, y lo corto así de esa forma. Lo
La ‘domesticación’ de los trupillos no corté por aquí porque creció hacia la calle,
solo ha tornado más compleja y ambigua y una vez pasó un carro y lo tumbó. Una
su posición en el imaginario colectivo y vez vi un bus de esos llenos de turistas y se
en la territorialidad pescaítera; también bajaron a tomarle fotos al árbol”.5
ha dejado una impronta profunda en los
hábitos y en las prácticas cotidianas de los Los pescaíteros y las trupilleras han
habitantes: ya hemos recalcado aquí que entablado una relación recíproca carga-
la predilección por la calle como sitio de da de matices y significados complejos,
encuentro sería impensable sin la sombra a ratos contradictoria, que trasciende el
provista por árboles como los trupillos. A simple interés utilitario: a través de ellas
la hora de jugar fútbol calle, la protección es posible seguir el rastro de las trans-
de un trupillo frente al sol canicular puede formaciones en el imaginario colectivo,
resultar definitiva en la elección del campo, en el entorno natural y en el desarrollo
como es el caso de la zona situada detrás urbano. En su triple condición de árbol de
del jardín infantil de Bienestar Familiar. En “monte”, de material de construcción y de
el testimonio de José González, quien visita árbol de ornato, el trupillo es un compen-
con frecuencia a sus suegros en el barrio dio viviente de la historia de Pescaíto: sus
de Pescaíto, encontramos un caso que diferentes identidades dan cuenta de la
ilustra a la perfección la manera en que manera en que los árboles y las personas
árboles como los trupillos pueden influen- interactúan en las transformaciones del
ciar las costumbres de los habitantes: “A medio natural y urbano.
este árbol le dicen dizque brasilero. Echa
una muy buena sombra. Este árbol tiene la
edad de mi hija; yo lo sembré así, chiquito,

4 Eduardo Goenaga, vecino de Ensenada, 63 años de


edad. Entrevista: 1.o de junio de 2016. 5 José González. Entrevista: 2 de mayo de 2016.
143
Figura 31. Diagrama
orbital de la red
organizativa y
de liderazgos en
Pescaíto.
Metodología Planos Vivos®

5 Comunidad,
organización
y liderazgos
Edi
son
Go
nzá
lez

en Pescaíto

Una de las mayores fortalezas del gran Pescaíto otra está dedicada a Graciela Mejía en su calidad de
radica sin lugar a dudas en la solidez de sus orga- lideresa humana. Dada la enorme riqueza de Pes-
nizaciones comunitarias, la presencia de liderazgos caíto en lo que a los liderazgos concierne, la elec-
robustos y la capacidad de lucha de sus habitantes. ción no resultó nada fácil: la vocación de servicio,
El surgimiento y el desarrollo de Pescaíto hubieran el compromiso y la dedicación son un patrimonio
sido impensables sin la solidaridad de sus pobla- compartido por todos los líderes que asumen res-
dores y la movilización en torno a las más diver- ponsabilidades en el ámbito de la acción comunal,
sas causas, desde aquellas propiamente urbanas, y en esa medida cualquiera de ellos hubiera podi-
ligadas a la titulación de lotes y el acceso a servi- do servir de ejemplo en el análisis del liderazgo a
ejí
cios públicos, pasando por las luchas sindicales y comunitario. (Quien quiera profundizar en la red a M ma
l
ie rr ésa
las conquistas laborales, hasta la reivindicación de de liderazgos de Pescaíto puede consultar la ac de rr
Gr Val anja
derechos económicos, sociales, culturales y am- plataforma virtual de Planos Vivos, que rto M
l be laín
bientales en su más amplia acepción. La figura 31 guarda las fichas de los dieciocho lí- sA A
muestra gráficamente la red de organizaciones y deres comunitarios identificados en a rlo
C
liderazgos de Pescaíto, tal como fue identificada la investigación). Junto con su trayec-
gracias al trabajo de investigación de Planos Vivos. toria en la política comunal, la selección
Sin duda alguna, los esfuerzos mancomunados con de la ficha de René Henríquez obedece a una
los líderes y las organizaciones del sector son indis- consideración fundamental: su labor como ad-
pensables para una propuesta urbana y arquitectó- ministrador de la cancha de La Castellana. No
nica comprometida con la participación comunita- hay que olvidar que la cancha constituye el hito
ria, la gobernanza y la sostenibilidad. espacial por excelencia del sector, y que la pro-
puesta de renovación urbana de Planos Vivos está
El primer apartado de este capítulo ofrece un pa- estructurada a su alrededor. En cuanto a Graciela
norama general de la organización y los lideraz- Mejía, quien ofició como directora del Colegio Pa-
gos en Pescaíto. El segundo presenta dos fichas de rroquial El Carmen por más de cuarenta años, el
líderes: la una aborda la vida y la labor de René amplio reconocimiento que disfruta y el enorme
144 Henríquez Valderrama como líder comunitario; la cariño que los habitantes le guardan son su mejor
política
Raiz
RP

Elías Hernández
René Henríquez

Raiz socio-
económica
lina
l Mo
Rei
Car

nal id Rui

o
ibe
Dav antillo

RE
los

can
do

Clar
C

Liz
Lar

ta
vio
a

ien
z

a m b i e n ta l
Sil

Pim
cancha La Castell

ar

Raiz
o
Comité de controa

er

g
l

Ed
Ca
Club DPescaíto

RA
on
Corp.

ils
FPSMPSM

W
Ma Rob

eport

SM

AN tiz
xim les

Or
an

TS
r
JVC

to

ra

urbana
ivo

MO
ilian

er n
c

re
Ba


l

a H ió

Raiz
ASO

ay ac
rce

to
o

Ol und
Ge


lon

ciones

sc
Institu
ne

RU
F

iz
Pe Ort
a
ra X

in istrativas
adm tor Calero
a
ci XI

Sa Juv c
bl

é
ón

H
son
Ha

n M ent De
Wil
co Ac es

ar ud re M
rtin sta

Raiz socio-
ch SS
cis Sara l Bruj
ez

tín

c u lt u r a l
o
o

CM
e

Ca
sc

s
a

gu

ste
llanLa iva und
í
M

ort
ole

Bak
Mi

a p
cti

e
l
bo

RC
d

vos

la
Or
fút

Valde Pibe ande


n
es

Fra

ga

rram on M
on

Nels
de

a
niz
aci
Escuelas

ació

histórica
Todo Bien,
Organiz

Todo Bien
n comunitaria

Gestión comunitaria con AFROSANMAG

Raiz
entidades y organismos
Unión públicos y privados RH
Delta Ángeles de Vida
I n s t u c a ti

illero
Sem caíto San
Mart
ed

s
it u c v a

e
una

P ín Yadir
Or

a
Carlo Rodrígu
al
io n s

ni
ga

ión
un

om

za s e
daclana Vill Rafa Vargas z
es

n cio aT
m

u l e
F ste abl Greg l Zambra
nC

nes
co

a a o
La C ico
c u lt u r a l e s
ic
a Héct rio Yane no

Da Ol
óg tual lít or Or s
cc

nz ay
ag
ed lec ay Po e
A aH tiz
ro P Inte ba mú sd En err Do
n t m ow sic a n ta Ol se era n
Us aldo
Ce u
R Sh Ju ay n ma O
C a rn a v al a ad r Re choa
nc l
Da pica

He a bol
e

Ba

rre led
Ed o
Pu tas
Tro

rri

ra
loy

Al gar
Pes

oN
gri

Ja án M Pim
Sam bor

RPES
ario

Pescaíto
Pescaíto

Fundación
Dorado

or
Ne

vie a ie
aíto
Tam

te

r R nja nta
FUNCA
Las

oja rré
no s
Ro in do
St a
cí so G
o
i
Ed
v
de n A oen
u

la rre ag
W inald Corv jés

Ho go a
Re vier l Bru
ils
Ja ue

z cé
on o La acho
Mi

Ca ra
g
Fra é Hen ández
Ren s Hern

ler

s
Elía

nci

o
Francisco Martínez

sco íquez
Miguel Brujés
Sara Acosta
rrés

Ma
r
Alaín Manja

rtín
ez

145
Planos Vivos

Fichero de lideresas
y líderes de la
Pescaito

plataforma virtual
de Planos Vivos.
Fuente: Plataforma virtual
de Planos Vivos (2017)
Comunidad, organización
y liderazgos


carta de presentación. Como en el caso de los lí-


deres comunitarios, cualquiera de los doce líderes
humanos que tuvimos oportunidad de entrevistar
durante el trabajo de campo podrían figurar aquí
en estas páginas (las respectivas fichas pueden ser
Panorama

igualmente consultadas en la plataforma de Pla- vo acordado con las partes, seleccionamos aquí la
general

nos Vivos). En cualquier caso, lo más probable es Fundación Pescaíto Dorado en representación de
que todos ellos coincidirían en afirmar que nadie las organizaciones comprometidas con el fomen-


mejor que la Seño Chela para representarlos. to de la cultura. Su labor rinde testimonio de la
riqueza del patrimonio cultural pescaítero y del
Un dificultad similar enfrentamos a la hora de compromiso cívico y comunitario de sus princi-
escoger las dos fichas que se ocupan de las orga- pales gestores, tal como se manifiesta en la orga-
nizaciones en la tercera sección de este capítulo: nización del Carnaval Infantil de Pescaíto y en la
Pescaíto tiene sobradas razones para enorgulle- entrega del Galardón Pescaíto Dorado, que busca
cerse de la vitalidad de sus fundaciones, escuelas, exaltar los méritos y la labor de los “hijos ilustres”
colectivos y demás asociaciones. (El repositorio del sector.
digital de Planos Vivos guarda las fichas de las 35
organizaciones que tuvimos oportunidad de ana- Por último, en la sección final de este capítulo pre-
lizar con mayor detalle). Sus ámbitos de acción sentamos la carta de vida de Álvaro Gómez, uno
son tan variados como la vida misma de Pescaíto, de los pintores de Pescaíto. Como ya lo explica-
y abarcan desde las escuelas de formación depor- mos en la introducción de este libro, la carta de
tiva y grupos de danza, pasando por las organiza- vida constituye la herramienta metodoilógica por
ciones gremiales y los colectivos de fomento a las excelencia dentro del instrumental analítico de
actividades culturales y cívicas, hasta las Juntas Planos Vivos. El lector o la lectora tendrá la oca-
de Acción Comunal y las asociaciones que pro- sión de leer, de puño y letra del propio Álvaro
mueven los derechos de las minorías. Gómez, la manera en que su historia personal se
entrelaza con la de Pescaíto. Su carta de vida es
En representación de las instituciones de la políti- un testimonio de la dureza, pero también de la vi-
ca comunal escogimos aquí la JAC de Villa Tabla. talidad de la experiencia urbana en el sector, y en
Esta elección puede suscitar polémicas, pues algu- su trayectoria vital se ven reflejados los talentos y
nos de los habitantes del gran Pescaíto cuestionan la capacidad de lucha de sus habitantes. Una pro-
la legitimidad del barrio y responsabilizan a sus puesta de renovación urbana realmente sostenible
residentes por el deterioro de la seguridad. Esta- y participativa debe saber aprovecharlos tanto
mos convencidos, empero, de que la breve trayec- como potenciarlos.
toria de la JAC de un “barrio de invasión” como Vi-
lla Tabla ilustra de manera ejemplar los retos, los
problemas y las oportunidades presentes en ma-
yor o menor medida en todo el sector, más allá de Panorama general
que se trate de las zonas ocupadas por las familias
establecidas, o que por el contrario se trate de zo- O rganización
nas de poblamiento espontáneo y precario. El tra- En lo que se refiere a las organizaciones, tres son
bajo de la JAC de Villa Tabla tiene una importancia sus principales esferas de acción: la cultura, el de-
cardinal en el empeño del barrio por afianzarse en porte y la política comunal. En nuestro trabajo de
el territorio, tender puentes hacia los otros barrios investigación identificamos catorce organizacio-
y potenciar la contribución de sus habitantes a la nes dedicadas a la promoción del deporte, entre
construcción de la identidad pescaítera. Por otra las que cabe destacar las escuelas de formación
146 parte, en consonancia con el énfasis investigati- deportiva, los organizadores de torneos y los co-
política
Raiz
La organización político-administrativa de cada uno RP

de los seis barrios del gran Pescaíto está estructurada

Raiz socio-
económica
en torno a su respectiva Junta, que funge como
intermediaria entre los habitantes, los entes RE

administrativos distritales y la empresa privada”.

a m b i e n ta l
Raiz
mités encargados de la administración de los crática, una junta directiva que incluye los cargos RA
escenarios deportivos. El deporte, en especial el de presidente, vicepresidente, secretario, fiscal y
fútbol, es quizás la actividad que goza de mayor tesorero. A dicho grupo se suman delegados y lí-
convocatoria y que dispone de la mejor infraes- deres de comités, quienes se encargan de ejecutar

urbana
tructura para su práctica en todo el sector. Las or- las labores propias de su competencia. La organi-

Raiz
ganizaciones dedicadas al fútbol giran en torno a zación político-administrativa de cada uno de los
RU
la cancha de La Castellana, cuya administración seis barrios del gran Pescaíto está estructurada en
recae en un Comité Local de Control Ciudadano, torno a su respectiva Junta, que funge como inter-
encargado de su mantenimiento y de fijar los ho- mediaria entre los habitantes, los entes adminis-

Raiz socio-
c u lt u r a l
rarios para las diferentes actividades que tienen trativos distritales y la empresa privada.
lugar en ella. En el ámbito futbolero, el Club De-
portivo Corporación Pescaíto tiene un ascendien- La naturaleza de las Juntas de Acción Comunal y RC
te indiscutible, pues es el encargado de organizar las actividades realizadas por cada una de ellas
el torneo anual en el que participan las escuelas de varían en función tanto del número de miembros
fútbol del sector y de otros lugares de Santa Mar- como del grado de reconocimiento y legitimidad

histórica
ta. Por último, vale la pena resaltar la labor de las que tienen entre los habitantes del barrio respecti-

Raiz
escuelas de formación, que constituyen el alma y vo. Algunas exhiben rivalidades internas que limi-
nervio del fútbol en Pescaíto y le dan proyección a tan la efectividad de su gestión, mientras que otras RH
su legado dentro del deporte colombiano. dan muestra de un trabajo altamente coordinado
entre sus miembros. El grado de consolidación de
En la esfera cultural, el Carnaval se ha establecido cada uno de los barrios y los problemas que los
como el evento más importante y representativo aquejan son sin duda determinantes en el desem-
del sector (la ficha del Carnaval puede ser consul- peño de sus Juntas. La antigüedad de las mismas
tada en el siguiente capítulo). Fue recuperado por es igualmente un factor para tener en cuenta en el
la Fundación Carnaval de Pescaíto (Funcarpes), análisis (la fecha entre paréntesis al lado de cada
la Fundación Pescaíto (Fundapescaíto) y la Fun- una, tal como se verá a continuación, correspon-
dación Pescaíto Dorado, tres entidades compro- de a sus respectivas fechas de conformación). Las
metidas con la preservación y el fomento de las Juntas de San Martín (1969) y Villa Tabla (2006), por
tradiciones culturales de Santa Marta. Estas fun- ejemplo, han mostrado ser muy activas cuando se
daciones ofician como “organizaciones paraguas” trata de impulsar el desarrollo de sus barrios: su
para otros colectivos de índole cultural, como es- compromiso e insistencia fueron determinantes
cuelas de danza, comparsas carnavaleras y gru- para la pavimentación de las calles y el acceso a
pos de tambora (la ficha correspondiente a estos los servicios de energía eléctrica, acueducto y al-
últimos puede ser consultada en el siguiente ca- cantarillado. Estas Juntas son asimismo las que
pítulo). La existencia de tres organizaciones inde- más se han preocupado por organizar talleres de
pendientes ha generado pequeñas rivalidades por formación y capacitación, jornadas de vacunación
los espacios y los recursos estatales destinados al y actividades para niños y adultos mayores. Sus
Carnaval, pero en ningún caso ha afectado su rea- dignatarios han estrechado vínculos con la Junta
lización: cada año los desfiles, las celebraciones en de Barrio Norte (1977) en el propósito de discutir
los patios y demás actividades cuentan con la asis- problemas comunes, promover la capacitación de
tencia masiva de los pescaíteros y los samarios. sus miembros y plantear objetivos compartidos.
La trayectoria de Juntas como la de Olaya Herre-
Como tercer pilar de la organización ciudadana ra (1967), Pescaíto (1984) y Ensenada (1985) abarca
en Pescaíto encontramos las Juntas de Acción Co- también varias décadas. En ese tiempo han sabido
munal (JAC). Estos organismos están conformados consolidarse como mediadoras entre los habitan-
por las personas inscritas en su libro de socios, tes, las instituciones distritales y la empresa pri-
quienes a su turno deben elegir, de manera demo- vada, y su aporte al desarrollo del gran Pescaíto 147
Muchos de los liderazgos asociados a la acción comunal
Planos Vivos
Pescaito

toman formas más amplias y se extienden fuera del ámbito


político-administrativo de las Juntas, y en algunos casos
Comunidad, organización

involucran –así sea tangencialmente–la participación


de los que aquí hemos llamado ‘líderes humanos’ ”.
y liderazgos


ha sido invaluable. Sus actuales dignatarios están Liderazgos


plenamente comprometidos con ese legado y no Las Juntas de Acción Comunal del gran Pescaíto
han escatimado esfuerzos para mejorar la calidad son un espacio de confluencia y a la vez semillero
Panorama

de vida en sus barrios. Ahora bien, no es menos de los líderes del sector. Su esfera de acción no se
general

cierto que adolecen de un poder de representación limita a la política comunal en sentido restringi-
más limitado, pues algunos de sus líderes han reci- do, pues en las JAC participan individuos que se


bidos fuertes cuestionamientos o están envueltos han destacado en ámbitos deportivos, culturales y
en pugnas internas que erosionan su autoridad. sociales: la mayoría de sus líderes e integrantes es-
tán involucrados en organizaciones locales de di-
La figura de presidente de la Junta de Acción Co- versa índole. Muchos de los liderazgos asociados
munal goza de prestigio e influencia dentro de la a la acción comunal toman formas más amplias y
organización social de Pescaíto, aunque también se extienden fuera del ámbito político-administra-
despierta suspicacias y en no pocos casos gene- tivo de las Juntas, y en algunos casos involucran
ra abierta resistencia entre algunos sectores de –así sea tangencialmente–la participación de los
la población. Cargan una gran responsabilidad a que aquí hemos llamado ‘líderes humanos’: aque-
cuestas, dada su labor de intermediarios entre la llas personas que gozan del aprecio y del respeto
comunidad y los diferentes actores que hacen pre- de la comunidad y que son vistas como ejemplos
sencia en la esfera local. a seguir por su vocación de servicio. El otro fac-
tor que tiene un peso determinante en la confor-
Además de los tres ejes descritos anteriormente, mación de los liderazgos en Pescaíto es el de los
existen otros campos en los que la comunidad ha clanes o dinastías familiares, tal como tendremos
dado muestras de su comprobada capacidad de oportunidad de explicar más adelante dentro de
organización. Cabe destacar, sin pretensión de este mismo apartado. A continuación presenta-
exhaustividad, las actividades realizadas por la mos una reseña a vuelo de pájaro de los liderazgos
Asociación de Afrodescendientes de Santa Marta –comunitarios y humanos– en los seis barrios del
y el Magdalena (Afrosanmag) y la Asociación Na- gran Pescaíto.
cional para el Desarrollo Integral de la Población
Afrocolombiana Bakundí. Otras agrupaciones es- San Martín
tán dedicadas al trabajo con los niños y los adultos En San Martín, el actual presidente de la Junta de
mayores, como la Fundación La Castellana y Ha- Acción Comunal es Héctor Ortiz, quien ha ocu-
bla Pescaíto. También sobresalen colectivos que pado el cargo en los últimos tres periodos admi-
promueven los derechos de la comunidad LGBTI y nistrativos y ha pertenecido a ella durante tres
las mujeres, como Ángeles de Vida y la Cooperati- décadas. Bajo su administración han sido creadas
va Multiactiva de Servicios del Magdalena. Por úl- diversas organizaciones barriales, que son el re-
timo, no hay que olvidar aquellas organizaciones sultado de procesos de formación y capacitación
de carácter gremial, como la Asociación de Moto- liderados por la Junta. Héctor Ortiz ha decidido
taxistas de Santa Marta (que representa a quienes dejar su cargo de presidente para abrirles espacio
se dedican a esta labor dentro y fuera del barrio) a nuevos liderazgos, aunque desea mantenerse ac-
y la Asociación de Pescadores de San Martín, que tivo en la política comunal para asesorar y servir
luchan por mejores condiciones laborales y velan de apoyo a su sucesor o sucesora.
por los intereses de sus afiliados.
Otros líderes que sobresalen dentro de la organiza-
ción comunitaria de San Martín son Rafael Zam-
brano, actual vicepresidente, y Gregorio Llanes, te-
148 sorero. Ambos han trabajado en llave con Héctor
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
La Junta de Ortiz. Los tres, como equipo, han promovido acti- que le ha valido el reconocimiento y el respeto de RC
Acción Comunal vamente el desarrollo del barrio. Tanto Rafael Zam- la comunidad y ha redundado, en último término,
de Villa Tabla.
brano como Gregorio Llanes mantienen posicio- en una mayor legitimidad de la JAC de Villa Tabla.
Fotografía de Gabriela
Díaz Montealegre nes firmes en su interacción con actores externos

histórica
al barrio; una postura que refleja el fuerte sentido Otro líder sobresaliente dentro del barrio es Do-

Raiz
de territorialidad de los habitantes de San Martín naldo Ochoa, líder del Comité de Cultura de la
y que se manifiesta en el énfasis con el que buscan Junta, quien se destacó en el pasado como gestor RH
diferenciarse de Pescaíto. Tenemos, por último, a cultural gracias a su trabajo con un grupo de dan-
Yadira Rodríguez, reconocida lideresa y candidata za para niños y adolescentes. A pesar de que ya
al cargo de presidente durante las próximas elec- no se encuentra activo, es reconocido como uno
ciones, quien ha participado activamente en las de los principales líderes del sector y como una
actividades de la JAC y es una de las personas con persona colaboradora y conciliadora. Como lí-
mayor poder de convocatoria dentro de la comuni- der humano de Villa Tabla encontramos a Carlos
dad. Su labor en el campo de la salud le valió gran Vargas, uno de los primeros residentes del lugar y
reconocimiento en toda la ciudad. antiguo miembro fundador de la Junta de Acción
Comunal. Carlos Vargas es reconocido por ser una
En lo que respecta a los líderes humanos de San persona solidaria, comprometida con el suminis-
Martín, cabe destacar a Claribel Molina, quien es tro de agua a los hogares del barrio. Afirma que se
conocida por su amabilidad y vocación de servicio. ha ganado la admiración de sus vecinos debido a
Claribel Molina participa activamente en la Junta su nobleza y vocación de servicio.
de Acción Comunal y en la Cooperativa Multiac-
tiva de Servicios del Magdalena. Buena parte de Pescaíto
su tiempo la dedica a trabajar con las personas de René Henríquez se desempeña actualmente como
la tercera edad del barrio, y se ha convertido en la presidente de la JAC de Pescaíto y, como lo men-
consejera de muchos de los habitantes del lugar. cionamos más arriba, encabeza igualmente el Co-
mité encargado de administrar la cancha de fútbol
Villa Tabla de La Castellana. René Henríquez se caracteriza
El líder más sobresaliente es sin duda Usmar Re- por su carisma y don de gentes, que le han valido
bolledo, único presidente de la Junta de Acción Co- aliados incondicionales dentro de la comunidad,
munal desde su creación en el año de 2006, quien un alto poder de convocatoria y un amplio recono-
se ha convertido en el principal abanderado del cimiento en la ciudad. Según sus propias palabras,
desarrollo de su barrio: gracias a su gestión se ha es el único líder del sector que mantiene estrechas
adelantado la instalación de redes de acueducto relaciones con la Administración distrital. No obs-
y electricidad, así como la pavimentación de las tante –o quizás por eso mismo– René Henríquez
calles. Junto a Héctor Ortiz, Usmar Rebolledo es ha encontrado oposición dentro de su barrio, y no
uno de los líderes más activos del gran Pescaíto, lo en vano miembros de su administración han de- 149
El compromiso
de la JAC de Villa
Tabla ha redundado
en la paulatina
consolidación del
Planos Vivos

barrio y en un mayor
bienestar para
Pescaito

sus habitantes.
Fotografía de Gabriela
Díaz Montealegre
Comunidad, organización
y liderazgos

Panorama
general


cidido optar por la presidencia y enfrentarlo en las de innumerables generaciones de pescaíteros y


próximas elecciones comunales. pescaíteras, sino que se extendió además a la pro-
moción del deporte en todo el sector. Maximiliano
Francisco Martínez, actual tesorero de la Junta y “Chimilongo” Robles es otra de las personas re-
rival de René Henríquez en las próximas eleccio- conocidas por su labor en el campo del deporte.
nes, es otro de los líderes sobresalientes en el ba- Como antiguo arquero del Unión Magdalena y
rrio. Se ha convertido en una figura paterna para entrenador de guardametas en su escuela de for-
los jóvenes del sector y su ayuda en la realización mación, Maximiliano Robles se ha convertido en
de trámites administrativos le ha valido la gra- una de las figuras emblemáticas de la cancha de
titud de sus vecinos. Rosa Alba Simancas, quien La Castellana. Respetado y apreciado por todos
ocupa el cargo de conciliadora dentro de la Junta, los entrenadores y dueños de escuelas deportivas,
es una de las personas más reconocidas en el ba- es considerado como una de las glorias del fútbol
rrio. Mejor conocida como la Tata Simancas, se ha pescaítero. Elías Henríquez, padre de René Hen-
desempeñado como presidenta de la Junta y como ríquez, bien puede ser catalogado como otro de
lideresa deportiva. No obstante, es su labor en la los líderes humanos más destacados en Pescaíto.
Asociación de Afrodescendientes de Santa Marta Su trayectoria está ligada a la cancha de La Cas-
y el Magdalena (Afrosanmag), de la que es pre- tellana, y su papel como dirigente deportivo lo lle-
sidenta, la que la ha dado mayor proyección a su vó a ocupar cargos en la Federación Colombiana
liderazgo tanto en Pescaíto como en Santa Marta. de Fútbol y en el Concejo de Santa Marta. Elías
Edison González Palacio, mejor conocido como Henríquez es, sin ninguna exageración, la memo-
Robapollo, se ha destacado por su labor en el de- ria viva del fútbol en Pescaíto; la suya ha sido una
porte: fue jugador del Unión Magdalena y de la contribución capital a la identidad y al sentido de
Selección Magdalena de mayores, ha organizado pertenencia de los habitantes de todo el sector. Por
múltiples eventos deportivos en la cancha de La último tenemos a Carlos “Jaricho” Valderrama, re-
Castellana, y actualmente encabeza el Comité de conocido educador del barrio, exjugador de la Se-
Deportes de la JAC. El mayor reconocimiento se lo lección Colombia y padre del Pibe Valderrama. La
ha deparado la Escuela de Fútbol Pibe Valderra- dedicación de la que hizo gala en más de cuarenta
ma, que después de casi treinta años de funciona- años de docencia es recordada en todo el sector.
miento goza de renombre en toda la ciudad. Su sencillez, su carisma y su generosidad lo han
convertido en una de las personas más queridas
Entre los líderes humanos de Pescaíto cabe men- en Pescaíto y en toda Santa Marta.
cionar, en primer lugar, a Graciela Mejía, directo-
ra del Colegio Parroquial El Carmen por más de Barrio Norte
cuatro décadas. Por sus aulas pasaron muchos El actual presidente de la Junta de Acción Comu-
de los personajes más influyentes y admirados nal de Barrio Norte es Reinaldo Lara. Sin embar-
de Pescaíto, entre ellos Carlos “el Pibe” Valderra- go, su elección como edil de la localidad 2 de Santa
150 ma. Su compromiso no se limitó a la educación Marta lo obligó a delegar sus funciones en Wilson
política
Raiz
Entre los líderes humanos de Pescaíto cabe mencionar, en RP

primer lugar, a Graciela Mejía, directora del Colegio Parroquial

Raiz socio-
económica
El Carmen por más de cuatro décadas. Por sus aulas pasaron
muchos de los personajes más influyentes y admirados de RE

Pescaíto, entre ellos Carlos ‘el Pibe’ Valderrama”.

a m b i e n ta l
Raiz
Calero, quien se reveló desde entonces como un catoria. Entre todos los líderes de Ensenada Olaya RA
líder muy capaz, dispuesto a asumir las responsa- Herrera, Rocío de la Hoz es quizás quien goza de
bilidades que la administración de la JAC acarrea. mayor reconocimiento, pues a pesar de no haber
Los comicios más recientes dejaron como presi- ocupado la presidencia de la JAC es la que organiza

urbana
dente electo a Joaquín Corvacho, candidato de Wi- el mayor número de actividades en el barrio.

Raiz
lson Calero, quien planea mantener su posición de
RU
delegado para seguir ejerciendo un liderazgo más Olaya Herrera
libre. David Ruiz, antiguo presidente de la Junta y Javier Rojano se desempeña como presidente de la
reconocido dirigente deportivo, es otro de los lí- JAC de Olaya Herrera, un barrio de marcado carác-

Raiz socio-
c u lt u r a l
deres importantes, reconocido por su empeño en ter residencial. A través de la Fundación Olaya He-
la promoción de escenarios deportivos (se ha des- rrera, Edgar Pimienta, vicepresidente de la JAC, ha
empeñado, por ejemplo, como administrador del tratado de impulsar las actividades que en su opi- RC
Coliseo de Pescaíto) y por el fomento del deporte, nión han sido descuidadas en el barrio, sobre todo
en especial del basquetbol. en lo que tiene que ver con la recreación y la for-
mación de niños y jóvenes. Su carisma y su conoci-

histórica
Miguel Brujés, cabeza del Comité de Cultura de miento de la política comunal le dieron el triunfo en

Raiz
la JAC, es uno de los líderes humanos de mayor las pasadas elecciones, así que a partir del segundo
arraigo en el barrio. Su fama de bailarín excelso lo semestre del año tendrá la oportunidad de poner RH
precede, y se ha ganado el reconocimiento de los a prueba su liderazgo. Otros de los líderes promi-
habitantes por su labor comprometida en el ám- nentes en Olaya Herrera es Alaín Manjarrés, uno de
bito cultural, para no hablar de la gratitud que le los responsables de la recuperación de la tradición
han granjeado los servicios de abogado que presta carnavalera en Pescaíto, así como de la creación de
a la comunidad. Su carisma y el respeto del que la Fundación Pescaíto (Fundapescaíto). Además de
goza tanto en la política comunal como en los es- desempeñarse como presidente de Pescaíto Dora-
cenarios culturales le han valido la admiración de do y ocupar el cargo de conciliador en la JAC, Alaín
los pobladores. Manjarrés dirige el Centro Pedagógico Intelecto,
colegio de preescolar y primaria comprometido
Ensenada Olaya Herrera con la innovación en la enseñanza.
La cabeza de la JAC de Ensenada Olaya Herrera es
Eduardo Goenaga, quien ocupa el cargo por prime- Dentro de los líderes humanos del barrio se en-
ra vez y fue reelegido en los comicios más recien- cuentra Silvio Lizcano, antiguo kinesiólogo del
tes. Stivinson Arregocés, actual vicepresidente de Unión Magdalena, reconocido por su don de gentes
la Junta y contrincante del presidente en funciones y su generosidad. Para muchos, Silvio es un com-
en las dos últimas elecciones, es un hombre muy pás moral, pues además de fungir como mediador
preparado y conoce a profundidad el trabajo comu- en los conflictos barriales, es consultado en situa-
nitario, pero en el último tiempo se ha alejado de la ciones que atañen a la política comunal. Su trato
escena comunal. respetuoso y su nobleza le han valido el respeto y el
cariño de la comunidad. Silvio Lizcano hace parte
Finalmente encontramos a Rocío de la Hoz, ac- de la Fundación Olaya Herrera, proyecto comunita-
tual fiscal de la Junta y futura vicepresidenta. Ro- rio que organiza actividades para niños y adultos
cío de la Hoz es una lideresa sumamente activa, mayores con el propósito de fomentar la educación
y su trabajo como cabeza del programa Familias y los valores. Otra lideresa humana dentro del ba-
en Acción le ha permitido organizar diversas ac- rrio es Sara Acosta, reconocida por su activa par-
tividades para el empoderamiento de las mujeres ticipación en el Carnaval y por la generosidad con
del barrio. Su vocación de liderazgo se manifestó sus vecinos. Sarita, como prefiere que la llamen,
ya desde su adolescencia, cuando comenzó a ser hace parte de Fundapescaíto y se ha dado a conocer
conocida por su iniciativa y capacidad de convo- en la ciudad de Santa Marta por sus dotes de come- 151
Los Valderrama,
uno de los clanes
familiares de
mayor prestigio
e influencia en
Planos Vivos

Pescaíto.
Cortesía de René
Pescaito

Henríquez Valderrama
Comunidad, organización
y liderazgos

Panorama
general


diante. Es ella quien mejor encarna los valores que Entre los clanes reconocidos por su participación Los líderes
las personas comprometidas con la organización en la política comunal y en el deporte se encuentra comunitarios Héctor
Ortiz (San Martín)
del Carnaval buscan fomentar entre la población. el de los Rebolledo, al que pertenece Usmar Rebo-
y Wilson Calero
lledo, presidente de la JAC de Villa Tabla, así como el (Barrio Norte).
de los Simancas, al que pertenece Rosa Alba Siman- Fotografía de Gabriela
L as familias cas, integrante de la JAC de Pescaíto y presidenta Díaz Montealegre

En Pescaíto existen auténticos clanes familiares de Afrosanmag. Otro tanto sucede con la familia
que han acumulado prestigio e influencia a lo lar- Alvarado, de importante presencia en la organiza-
go de varias generaciones. Su ascendiente se ex- ción comunitaria y en la vida deportiva de Pescaíto.
plica, entre otros factores, por su arraigo de larga Los Manjarrés son reconocidos por la huella que
data en el sector, por el nivel educativo de sus in- han dejado en la cultura y en la educación. Tanto
tegrantes, por su activa participación en la políti- los Ruiz como los Calero son reconocidos por su
ca y administración comunales, así como por el aporte al deporte, en especial esta última familia,
protagonismo de algunos de sus miembros en los que cuenta entre sus miembros con jugadores del
ámbitos deportivo, cultural y educativo. fútbol profesional colombiano. A estas dos familias
pertenecen David Ruiz y Wilson Calero, líderes co-
Entre las familias más importantes de Pescaíto se munitarios de Barrio Norte. Podemos mencionar,
encuentran los Valderrama, cuyo ‘patriarca’ es sin por último, a los Mejía, que han descollado gracias
lugar a dudas Carlos “Jaricho” Valderrama. Su ma- a su labor como docentes; a los Bolaño y a los Aten-
trimonio con Juana Josefa Palacio unió a los Valde- cio, de notable presencia en el fútbol colombiano; y
rrama a otro de los clanes de mayor prestigio, el de a los Del Valle, destacados por su contribución a la
los Palacio, que cuenta entre sus integrantes con música y a la cultura.
varios futbolistas profesionales. Los Henríquez,
por su parte, deben su prestigio a la labor de Elías
Henríquez Pardo, principal impulsor del fútbol en
Pescaíto. Su matrimonio con Alicia Valderrama
dio origen a la familia Henríquez Valderrama, de
la cual hace parte René Henríquez, presiente de la
JAC de Pescaíto. Otras familias de renombre son
la de los Llanes y la de los Arango: la primera es
reconocida sobre todo por su actividad en el cam-
po cultural; la segunda, por sus logros en el fútbol
profesional colombiano.

152
Ficha 6 Líder comunitario: René Henríquez Valderrama

política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
Familia de origen
René Henríquez Valderrama es el segundo
RE
hijo de Elías Henríquez Pardo y Alicia Val-
derrama Puche, oriunda del corregimien-
to de Bonda, ubicado a unos diez minutos

a m b i e n ta l
de la ciudad de Santa Marta.1 Cuando
todavía era una niña, Alicia se instaló con

Raiz
su familia en la calle de la Semaforía de
Pescaíto e inició sus estudios de prima- RA

ria. Elías, por su parte, había nacido en la


calle 8, antigua calle de las Piedras, lugar
que –como ya tuvimos ocasión de expli-

urbana
car– reunía algunos de los prostíbulos

Raiz
más famosos del sector. Como había que-
dado huérfano a muy temprana edad, se RU
vio obligado a trabajar desde muy peque-
ño en el puerto. Con el correr del tiempo

Raiz socio-
ascendió a capataz y le fue encargada la

c u lt u r a l
René Henríquez Valderrama
organización y supervisión de cuadrillas en su casa, delante de sus
de coteros. Elías se enamoró de Alicia en imágenes devocionales.
una fiesta del Carnaval, del que ella era Fotografía de Gabriela RC
Díaz Montealegre
reina, y decidió pedir su mano a su padre,
Julián Valderrama. La boda se celebró
en la iglesia de Pescaíto, que a decir de

histórica
René estaba rebosante de flores. La pareja rosquitas con el maíz que habían molido cado al mundo de la política y del fútbol,

Raiz
comenzó a vivir en casa de los padres de la noche anterior. La molienda se había y por eso no veía con buenos ojos que su
Alicia, pues a Elías le había caído el “pur- convertido de hecho en un ritual nocturno hijo vendiera fritos en la calle. Sin embar- RH
gón”, esto es, la mala fortuna que según la al que los Henríquez, sus primos e incluso go, la posibilidad de ayudar a su abuela le
tradición popular golpea a todo aquel que los muchachos del vecindario asistían servía de aliciente para continuar con las
contrae matrimonio. Como había perdido religiosamente. ventas; eso y las recompensas en espe-
su trabajo en el puerto, no tuvo más cie que recibía de ella por mostrarse tan
remedio que irse a vivir con sus suegros, La infancia de René transcurrió en un colaborador. Su éxito era notable, tanto
en una casa construida en bahareque por Pescaíto que se expandía al compás del como su lema comercial, un auténtico
el hermano de Alicia. Allí nació Elías, el tren que transportaba el banano y de la himno a las sutilezas de la mercadotecnia:
mayor; luego vino René, llamado así por incesante actividad de carga y descarga “El que no me compre, lo jodo”. Junto a su
uno de los tíos de Alicia, y a él le siguieron en el puerto, que constituía de lejos el indudable carisma, la creciente influencia
Walter y Gloria. principal empleador en el sector. René no de su padre le fue de gran utilidad en su
recuerda enemistades o rencillas entre ve- época de vendedor de fritos.
cinos: la comida preparada en los hogares,
Infancia y adolescencia servida en plato de peltre, era intercam- “Yo soy un enamorado de la gente”, afirma
René describe el tiempo que vivió con biada entre familias como muestra de René, pues siempre le ha gustado ayudar
sus abuelos como la época más feliz de amistad. Incluso la Vieja Clemen, pese a a las personas. Recuerda a una vecina
su niñez. Recuerda mucho a su abuela tener una fuerte competencia en la venta de su calle que vivía en una casa en muy
Clementina, mejor conocida como la de fritos, era amiga de aquellas otras malas condiciones: el techo tenía goteras,
Vieja Clemen, famosa por los fritos que señoras que se dedicaban a vender los las ventanas estaban desvencijadas y
vendía en la puerta de su casa. La Vieja suyos. “Eso hoy se ha perdido”, afirma con sus inquilinos dormían sobre pequeñas
Clemen se levantaba todos los días a las nostalgia.
Una vez su padre recuperó su colchonetas, que se mojaban por completo
dos y media de la mañana a preparar el trabajo en el puerto, la familia Henríquez en los días de lluvia. René recordó un fajo
fogón de leña, y al rato aparecía René para Valderrama se fue a vivir a una casa veci- de billetes que su padre guardaba en el
reclamar el bollo de queso y el pedazo na a la de Julián y Clementina, lugar en el clóset, lo tomó y –aunque todavía era un
de panela que su abuela siempre le tenía que hoy en día vive René con su familia. niño– contactó a un albañil vecino para
guardados. El pequeño le ayudaba a atizar En sus ratos libres, René vendía los fritos comprar los materiales y hacer los arre-
el fogón y preparar empanadas, bollos y de su abuela en la entrada del colegio John glos correspondientes. Cuando sus padres
F. Kennedy, labor por la que recibía de se enteraron, lo reprendieron por haber
ella una moneda de cinco centavos, que él tomado el dinero sin permiso, pero en
1 René Henríquez Valderrama, vecino de Pescaíto, 50
años de edad. La entrevista para la elaboración de gastaba en leche condensada y pan de sal. él primó la satisfacción de haber podido
esta ficha fue realizada el 20 de enero de 2016. Por aquel entonces su padre se había dedi- ayudar a un miembro de su comunidad.
153
Ante las dificultades que tenía su hijo para conseguir
trabajo, Elías le ofreció el pago de sus estudios universitarios.
Planos Vivos

René aceptó la propuesta y se trasladó con su esposa y su


Pescaito

hijo a Barranquilla, donde sus hermanos se encontraban


estudiando. Allí permaneció cinco años hasta alcanzar el
Comunidad, organización

grado en derecho, todo con el apoyo de su padre”.


y liderazgos


En la adolescencia temprana, René hacía llegaba la media noche y ella advertía que por Ingris Mazenett, su amiga de adoles-
lo imposible para participar en todas él aún no había regresado a la casa. Eso cencia, le dio un vuelco a sus planes: a sus
las actividades de su padre. No solo sí, nunca pensó en abandonar el fútbol, veintiún años, después de varios años de
se convirtió en su sombra en todas las pues integró varios de los equipos más acercamientos y requiebros, René logró
Líder comunitario:
René Henríquez

reuniones políticas y en la infinidad de importantes de la escena futbolera de finalmente conquistarla. El noviazgo duró
eventos a los que asistía, sino que incluso Pescaíto. Fue un accidente el que lo alejó poco, pues a la semana de haber oficiali-
Valderrama

empezó a vestirse como él. Pasaron tanto definitivamente de las canchas: durante zado su relación contrajeron matrimonio
tiempo juntos que Elías, famoso por sus unas Fiestas del Mar sacó su moto, que en la iglesia de Pescaíto.
dotes culinarias, le pudo enseñar todos guardaba en la casa de un primo para
los secretos de la buena mesa a su hijo. No esconderla de sus padres, perdió el control Gracias a los contactos que había estableci-
en vano, René es un reconocido cocinero y se lesionó gravemente la pierna. René do a través de su padre, René fue nom-
en el sector: “La cocina es amor y de in- pasó los siguientes meses hospitalizado brado inspector de catastro. Ingris y René
ventos, digo yo. Aquí me conocen porque en la ciudad de Medellín, en vilo perma- vivieron los dos primeros años de matri-
cocino sabroso, no porque haya termina- nente ante la posibilidad de tener que monio en la casa de un primo, un período
do derecho”, dice entre risas. Tal como él someterse a una amputación. de sus vidas que René describe como muy
mismo lo relata, su precoz carrera política bonito pero a la vez muy difícil, pues la
comenzó a los doce años de edad, cuando Su retiro prematuro del fútbol no fue maldición del “purgón” probó ser inexo-
a través de conocidos de su padre logró óbice para que dejara inscrito su nombre rable: René perdió su trabajo, y su familia
conseguir una motobomba para proveer en los anales del fútbol pescaítero. Para –engrosada por su primer hijo– dependía
de agua a las Cumbres Borrascosas, un ello bastó una única acción de juego: enteramente de la ayuda de Elías para
cerro cercano al barrio. Su desempeño como arquero de los Tragapeos se distrajo sobrevivir. Ante las dificultades que tenía
en el colegio fue muy bueno, y siempre en amena conversación con un defensa, su hijo para conseguir trabajo, Elías le ofre-
mantuvo las mejores relaciones con sus cuando sintió que una ráfaga de aire ció el pago de sus estudios universitarios.
profesores. Era un estudiante que se ponía a prueba sus reflejos. Una tapada de René aceptó la propuesta y se trasladó con
hacía sentir, y participaba activamente en antología, pensó al levantarse del suelo. su esposa y su hijo a Barranquilla, donde
todas las clases: “Yo era muy impetuoso Cuál no sería su sorpresa al advertir que sus hermanos se encontraban estudiando.
y siempre me mandaban a callar, porque había atrapado un murciélago, para admi- Allí permaneció cinco años hasta alcanzar
hablaba más de lo que los profesores me ración y regocijo de sus compañeros, de el grado en derecho, todo con el apoyo de
pedían”. En la organización de las sema- los rivales y de todos los espectadores en su padre. “Es un monstruo; yo tengo que
nas culturales y en las izadas de bandera La Castellana. Su hijo Walter, arquero del hacerle una estatua”, sostiene René con
ocupó siempre un lugar destacado. equipo de futsal Gremio Samario, podrá orgullo y agradecimiento.
mantener su valla invicta por años, y todo
Inspirado en la labor de su padre, René será en vano: no impresionará a amigos A su regreso a Santa Marta fue nombra-
fundó un equipo llamado Deportivo Cuco, ni conocidos, ni podrá ocupar la cabecera do secretario de despacho por el alcalde,
en honor del hijo del dueño del Unión de la mesa familiar, mientras no ataje un quien puso a su cargo la oficina de bienes
Magdalena, quien le correspondió el gesto mamífero volador. y rentas de Santa Marta. Su labor consis-
con un generoso patrocinio: “Fue una tía en legalizar escrituras y hacer regis-
época muy bonita de mi vida y del futbol tros inmobiliarios. René sostiene que en
acá, salió el Pibe y muchos otros jugado- Vida adulta su afán por ayudar a la gente, les dio trá-
res”. Siempre al lado de su padre, viajaba a “No fui un muchacho de muchas novias, mite expedito a los procesos represados y
menudo a otras ciudades para asistir a las pero tenía muchas amigas y muchos logró legalizar gran cantidad de escri-
reuniones de la Federación Colombiana amigos”. René recuerda que siempre turas. “Eso me valió que salí con amigos
de Fútbol. Departía con frecuencia con los se reunían en una tienda llamada Piso a montones”, señala con satisfacción. Su
jugadores del Unión Magdalena, a quienes Alto y allí pasaban el día hablando con carrera en los círculos políticos de Santa
les guardaba secretos de parranda. Con el “los pelaos”, entre ellos su primo, el Pibe Marta se vio truncada cuando renunció
correr de los días, las cosas cambiaron un Valderrama. “Yo quería estudiar derecho a su candidatura al Concejo a cambio de
poco, pues empezó a pasar más tiempo internacional y pensaba casarme a los la gerencia de la Lotería de la ciudad; una
con sus amigos. Salía a los estaderos treinta, cuando ya estuviera entero y su- promesa que no se materializó, pues el
locales y le sacaba canas a Alicia cuando piera pa’donde iba mi vida”. Pero su amor amigo que se la había hecho terminó por
154
El infaltable

política
paseo familiar.

Raiz
Cortesía de René
Henríquez Valderrama

RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
entregarle el cargo a otra persona. Desde espontáneo de la oleada de violencia; una Análisis contextual de liderazgo

Raiz
entonces decidió alejarse de la política opinión compartida por muchos vecinos
distrital, pues entendió el episodio como del barrio, quienes sostienen que han sido Características y contexto del RU
una lección de Dios: “El ego me sobresa- ellos quienes han “dañado” Pescaíto. La liderazgo
lió, me estaba volviendo ‘yoyista’ ”.
Pos- tragedia familiar llevó a René a aliarse El liderazgo de René se inscribe dentro

Raiz socio-
teriormente fue nombrado inspector de con la Alcaldía para implementar un plan de una amplia red de conexiones con las

c u lt u r a l
Policía de Santa Marta, cargo en el que de acción con la Policía metropolitana y autoridades distritales y con los círculos
permaneció un par de años y en el que trabajar por la mejoría de la seguridad políticos de Santa Marta. Gracias a los
tuvo que lidiar con riñas nocturnas y en el sector. “Yo le puse un tapón a eso”, amigos que hizo a través de las actividades RC
“personajes de la vida”, como él los llama. afirma enfáticamente. de su padre y de su propia labor como fun-
Afirma que era un trabajo muy pesado, cionario público, cuenta con los contactos
en el que trató siempre de hacer valer la En vista de su compromiso con el bien- necesarios para gestionar beneficios para

histórica
imparcialidad y en el que rechazó siempre estar del barrio y de la popularidad que el barrio. René es enfático en afirmar que

Raiz
todos los sobornos que le ofrecían. Su úl- goza entre muchos vecinos, un amigo le su única intención es la de restablecer las
timo empleo dentro del sector público fue propuso en las últimas elecciones que antiguas tradiciones barriales, tal como él RH
el de asistente del secretario general de la “armaran ficha” y que se lanzara como las vivió en su niñez, caracterizadas por la
Asamblea Departamental. Después de de- candidato a la presidencia de la JAC . René convivencia fraternal y el respeto. Ese pro-
jar este último cargo, René se dedicó a la aceptó porque consideraba que la gente pósito de servicio es el que, en su opinión,
cocina y montó un negocio de almuerzos del barrio estaba muy insatisfecha con la le impide dar un “no” como respuesta a
a domicilio para las personas que trabajan gestión de la Junta, y tras ganar los comi- los pedidos de los habitantes, lo que a su
en las oficinas del centro. Además lleva cios ha trabajado en llave con la Alcaldía turno le ha acarreado más de un malenten-
procesos de manera independiente, sin de Santa Marta, que lo nombró como ad- dido con algunos de ellos.
dejar de lado su participación en la escena ministrador de la cancha de la Castellana.
comunitaria: “Yo todavía hago política, Esa es una función que desempeña con
pero no ambiciono un empleo”. Con su el mayor de los gustos, ya que le permite Temas esenciales de su discurso y de
buena sazón sacó adelante a sus cua- retornar a una de las actividades que más su desempeño como líder
tro hijos: Dewis, Walter, Jimmy y Alicia gratos recuerdos le trae de su infancia y René afirma que ha hecho lo mejor
Milagros. A estas alturas René es abuelo adolescencia, como lo es la de organizar que puede y que su único propósito es
de tres niños, dos de los cuales viven en campeonatos de fútbol. René afirma estar el de ayudar a la gente. Sin embargo,
la casa que comparte con Ingris, sus tres satisfecho con los logros conseguidos en la impotencia de la Junta para poner
hijos menores y la esposa de uno de ellos. su carrera profesional y personal. A pesar cortapisas a las actividades ilegales le ha
de la pérdida de su hijo, un dolor que no valido algunas críticas. A esta inconfor-
Antes de su postulación al cargo de remite, la vitalidad de su vida familiar midad se suma la mala imagen que pesa
presidente de la Junta de Acción Comunal le da mucha fortaleza. Lo que más lo sobre el quehacer político en general,
de Pescaíto, la familia de René recibió un enorgullece es haber podido seguir los que para muchos se reduce a un simple
gran “trancazo”. En Pescaíto, la violencia pasos de su padre, si bien insiste en que intercambio clientelista, mediado por el
asociada al microtráfico de drogas se jamás alcanzará sus logros: “Yo apenas amiguismo. “Tenemos es que buscar la
había apoderado de las calles: “Todos los le llego a los talones”. Piensa postularse forma de respaldar al alcalde para poder
días los titulares del periódico decían: ‘El nuevamente a la presidencia de la Junta, sacarle algo para el barrio”, afirma René
balín está bajito en Pescaíto: tres muer- y asimismo desea continuar con su labor al respecto, y sostiene que algunos de
tos”. En uno de esos episodios de violencia como administrador de La Castellana. los líderes comunitarios de los barrios
cayó asesinado Dewis, su hijo mayor: Su sueño es que la cancha vuelva a ser la de Pescaíto simplemente carecen de la
“Yo decía ‘¡Dios mio!, ¿esto qué es?’. Me cuna de auténticos cracks como el Maes- preparación o la voluntad para negociar
estaba llenando de rabia”. René culpa a los tro Arango o el Pibe Valderrama. con las autoridades distritales.
habitantes de las zonas de poblamiento
155
Una fuente inagotable
de motivación para
René Henríquez:
la vitalidad de su
Planos Vivos

vida familiar.
Pescaito

Fotografía de Gabriela
Díaz Montealegre
Comunidad, organización
y liderazgos

Líder comunitario:
René Henríquez
Valderrama

Proyección de su ejercicio como líder val, en el que participaron equipos tanto bol es un elemento de importancia capital
René quiere continuar su gestión en cabeza de los barrios del gran Pescaíto como de en el ejercicio de su liderazgo, y no es ca-
de la Junta de Acción Comunal, y por eso otros sectores de Santa Marta. sual que haya consagrado tantos esfuer-
ha puesto su nombre a consideración de los zos a la administración de La Castellana.
afiliados en las próximas elecciones. Gracias René es un hombre amable y abierto a
Población que lo reconoce y sigue los demás; le gusta conversar y se siente
al apoyo de la administración municipal y
René goza de gran popularidad, reforzada muy orgulloso de pertenecer a dos clanes
de gran parte de la población de Pescaíto,
por el reconocimiento al que se ha hecho familiares emblemáticos, como lo son los
tiene altas probabilidades de salir reelegido
acreedora su familia como una de las de Henríquez y los Valderrama. Su carácter y
y consolidar su liderazgo como presidente
mayor raigambre en el barrio, lo mismo su linaje le han valido un amplio reco-
de la JAC.
que por el protagonismo de su padre en la nocimiento entre los círculos políticos
promoción del fútbol samario. René cuen- de Santa Marta, lo que en su opinión le
¿Cómo y cuándo convoca? ¿En qué ta con el apoyo de los dignatarios de la ha permitido conseguir recursos y obras
espacios y a través de qué medios Junta de Acción Comunal y de la mayoría para beneficio del barrio, pero también le
ejerce su liderazgo? de los habitantes de Pescaíto. ha ganado no pocos detractores.
“Cuando convoco, convoco; eso se llena”,
afirma René al referirse a La Castellana ¿Cómo se imagina a la comunidad en
como el principal escenario en el ejercicio el futuro?

de su liderazgo. Un episodio que permite
René se imagina un Pescaíto que ha sabi-
medir su influencia tuvo lugar durante
do revivir las tradiciones de antaño, basa-
el mes de enero de este año, en el marco
das en los fuertes vínculos comunitarios
de la remodelación del parque principal
y el respeto entre los vecinos. En términos
del barrio. El plan inicial contemplaba el
de infraestructura, su mayor desvelo es
reemplazo de la cancha de arena por una
el sistema de alcantarillado sanitario y
cancha múltiple pavimentada. Cuando el
pluvial. Uno de sus mayores anhelos es el
ingeniero encargado le comunicó que la
de restituirle a La Castellana la primacía
pavimentación no sería realizada, dada la
entre todos los escenarios deportivos de
solicitud de algunos habitantes de mante-
la ciudad.
ner la cancha en su estado original, René
mantuvo una oposición tenaz hasta que
consiguió que fuera construida de acuer- Conclusión
do al proyecto original. Otra muestra de
René Henríquez es un hombre carismá-
la influencia y liderazgo de René se mate-
tico, que disfruta de la estima de muchas
rializó en la organización del campeonato
personas en Pescaíto y en Santa Marta.
de fútbol que tuvo lugar durante el Carna-
Se muestra como padre, esposo y abuelo
amoroso y dedicado. Su pasión por el fút-

156
Ficha 7 Lideresa humana: Graciela Mejía Cuello

política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
Familia de origen
Los padres de Graciela fueron Rafael
Mejía Pérez y Carmen Cuello Hernández.1 RE
Rafael había nacido en Riohacha, pero sus
calidades como futbolista lo llevaron a
Santa Marta. En palabras de Graciela, “fue

a m b i e n ta l
figura que logró representar a Colombia

Raiz
en unos Juegos Centroamericanos y del
Caribe. Y tuvo gran popularidad, que lo RA
llaman el Gran Sapo Mejía, porque dizque
brincaba cuando estaba jugando”. Carmen
era oriunda de Santa Marta, y según

urbana
Graciela dedicó su vida a su crianza y la

Raiz
de sus dos hermanos, Gustavo y Efrén.
Aunque Graciela no sabe la historia de RU
cómo llegaron sus padres a conocerse,
subraya que su hogar estaba colmado de
amor y buenos valores.

Raiz socio-
c u lt u r a l
Infancia y adolescencia
RC
Durante los primeros años de vida de
Graciela o Chela, como es conocida popu-
larmente, la familia Mejía Cuello tenía su Graciela Mejía en el

histórica
residencia en el calle 10, entre carreras 3.a patio de su casa.

Raiz
y 4.a. Aquella calle, ubicada en el centro de Fotografía de Gabriela
Díaz Montealegre
la ciudad, era llamada la calle del Comer- RH
cio, pues concentraba los almacenes de
víveres y productos para el hogar. “Ahí tres hijos. Ante la estrechez económica, fascinaba ir a verlos jugar. Además ha-
veía uno a los turcos vendiendo cosas; en- Rafael decidió mudarse con toda la fami- bían muchos campeonatos y esa cancha
contraba calderos, ropa, comida, de todo”, lia a Pescaíto. Allí, la abuela de Graciela se llenaba, y ahí estaba yo los fines de
recuerda Graciela. Su primaria la cursó en se dedicó a lavar y planchar ropa para semana”. La relación con sus compañeras
la Escuela Primera de Niñas, ubicada en la contribuir con los ingresos familiares, y de clase era inmejorable: “Salíamos a la
calle 12. Recuerda que de niña disfrutaba también asumió el cuidado de los niños. playa a bañarnos o a caminar, o hacía-
del estudio, la lectura y el deporte, aunque Fue una época marcada por las priva- mos conversatorios sobre las clases y nos
solo como espectadora: “Nunca lo prac- ciones, tal como lo recuerda Graciela: ayudábamos en las tareas. Era una época
tiqué, pero eso lo llevo yo en la sangre, “Nosotros pasamos mucha hambre; había muy sana; los vecinos nos estimábamos
porque mi papá era futbolista”. Durante su una señora que nos regalaba sopa. Mi her- los unos a los otros”.
niñez, Graciela pasó mucho tiempo con su mano, cuando iba para el Liceo Celedón
abuela materna, Dielina Hernández, quien con los zapatos, la suela era de cartón. Yo Aunque la situación económica siem-
vivía en la casa de la familia y colaboraba iba con remiendos al colegio; mi abuelita pre fue difícil, Graciela y sus hermanos
con el cuidado de los niños. me hacía unos remiendos, pero a mí no lograron terminar sus estudios: Gustavo
me importaba”. y Efrén, en el Liceo Celedón; ella, en el
A la muerte de su madre, Graciela contaba Instituto Magdalena. La felicidad y el
apenas con 12 años de edad. La tragedia Graciela y su familia encontraron en orgullo que sintió cuando sus herma-
no solo representó un duro golpe emo- Pescaíto una comunidad de “gentes nos se graduaron de la universidad es
cional; también dejó muy mal parada a apacibles y dedicadas al deporte”. Du- indescriptible, y siempre asoman en la
la familia en términos económicos, pues rante su adolescencia continuó con sus conversación cuando se refiere a ellos:
Carmen trabajaba en el mercado y sus estudios de bachillerato en el Instituto “Gustavo era ingeniero civil, y Efraín,
ingresos eran parte esencial del sosteni- Magdalena. En sus ratos libres, Graciela ingeniero electrónico. Y cuando le
miento del hogar. A pesar de los esfuer- asistía con regularidad a la iglesia, pues entregaron a mi hermano, el que murió
zos de Rafael por proveer a su familia, el su abuela se encargó de fomentar en ella [Gustavo], la Cruz de Bastidas, el mayor
dinero no alcanzaba para mantener a sus la fe católica. También frecuentaba La reconocimiento que realiza la ciudad de
Castellana, pues le gustaba asistir a los Santa Marta a sus hijos, eso me puso muy
partidos de fútbol de los equipo locales: contenta: un orgullo muy grande”. Gracias
1 Graciela Mejía, vecina del barrio de Pescaíto, 78 años
de edad. La entrevista para la elaboración de esta fi- “Mis hermanos jugaban en esos equipos a la graduación de su hermano Gustavo,
cha fue realizada el 11 de mayo de 2016. que armaban en el barrio, y a mi me Graciela conoció Bogotá, pues él la invitó
157
Planos Vivos
Pescaito

Los inicios de
Comunidad, organización

Graciela Mejía en
su labor docente.
Cortesía de Graciela Mejía
y liderazgos


a la ceremonia para que fuera ella quien “Yo los reunía en el patio a todos, todos vivencias con los maestros y estudiantes.
recibiera el cartón: “Mucho frío por allá, los lunes de siete a ocho, entonces yo A través de su hermano Gustavo, Graciela
Lideresa humana:

pero me gustó el ambiente, la gente, todo les decía: ‘Cuando su padre o la mamá obtuvo los fondos necesarios para la cons-
Graciela Mejía

fue muy chévere. Pero mi vida estaba acá, digan malas palabras, ustedes les dicen trucción de las nuevas instalaciones del
en Pescaíto”. El camino que Chela tenía «mamá no digas eso, porque yo lo voy a colegio; una obra que su propio hermano
Cuello

por delante estaría sembrado de logros aprendiendo»’. Vea, eso fue la revolución; ejecutó. Por las aulas de la Seño Chela
y reconocimientos profesionales, tanto un día recibí como treinta padres que me pasaron incontables estudiantes, entre
como de cariño y respeto por parte de la decían: ‘Bonita cosa, Chela, ahora no digo ellos René Henríquez, actual presidente de
comunidad pescaítera. un ¡ajo!, porque ya me está diciendo que la Junta de Acción Comunal de Pescaíto, y
no diga malas palabras’. A mí me dio una el mismísimo Pibe Valderrama, de quien
risa”. Afirma también que su trabajo fue ella fue la madrina de matrimonio.
Vida adulta tan apreciado, que varios vecinos le han
“Mira, a través de toda mi existencia, yo comentado que desde su partida la educa- El aprecio y la admiración de la comuni-
me tracé como norte u horizonte de mi ción de los niños pescaíteros no ha vuelto dad se han visto reflejados en la manera
vida ser útil; entonces yo entregué mi a ser la misma. en que padres de familia, exalumnos y
capacidad de servicio a la comunidad”, vecinos en general le han pedido a lo
afirma Graciela. Siempre se inclinó por Además de mantener un buen nivel de largo de los años que oficie como madrina
la educación, aunque el deporte era otra disciplina, Graciela fomentó el deporte de bautismo de sus hijos, y no en vano
de sus pasiones, así que decidió estudiar y las artes en su escuela. Organizó, por cuenta hoy con 138 ahijados. Fue preci-
educación física, recreación y deporte ejemplo, varios equipos de fútbol que samente en un bautizo que conoció a su
en la Universidad Autónoma del Caribe, participaron en los campeonatos de La esposo, Jorge Rivera: “Lo conocí porque
donde obtuvo su título de licenciada. Castellana. “Tenía al Ringo Amaya, a los fui a hacer un bautizo allá en Aracataca y
Como primer trabajo en el área de la Amaya. Entonces ellos fueron jugadores él venía de Fundación, y ahí fue donde lo
educación le fue confiado el puesto de del Junior, y el odontólogo del puesto de conocí. Él es menor que yo; duramos dos
directora seccional de la Escuela Olaya salud un día me mostró el periódico que años de amores y luego nos casamos en
Herrera, en la que permaneció un año. decía: ‘Ringo Amaya, jugador que lo hi- 1980, pero no tuve hijos”. Su labor como
Sin embargo, sus buenas relaciones con cieron dos mujeres, Graciela Mejía Cuello educadora continuaría por veinte años
el primer párroco del barrio, Roberto y Fidelia Rocío Zúñiga’, y hablaron de más, tiempo en el que el reconocimiento
Toro, le valieron el nombramiento como mí muy bonito”. Recuerda que después de los estudiantes y profesores del colegio
directora del Colegio Parroquial en 1960: de cada práctica les daba mazamorra a no hizo sino aumentar: “Cada vez que
“Ahí duré cuarenta y dos años. Yo me los jugadores y les planchaba la camisas. cumplía una década en el colegio me cele-
inicié con quince alumnos y fui la direc- “Nos decían ‘pichones de cura’, pero ellos braban los profesores con un evento, y con
tora del bachillerato en el año 2002 con eran disciplinados. Nunca fuimos cam- pudín y todo”, recuerda mientras se ríe.
ciento treinta alumnos”, sostiene. peones, pero ellos jugaban bien”. Tal era
el compromiso de Graciela en la escena Sus largos años como directora del
Su labor como directora del Colegio del fútbol, que hizo parte de la Corpora- Colegio Parroquial tuvieron una peque-
Parroquial El Carmen es legendaria en ción de Fútbol Pescaíto, junto a Caballito ña interrupción en el año 2000, cuan-
el sector, pues supo ganarse el respeto, el Atencio y otros de los grandes promo- do fue elegida como concejal de Santa
cariño y la admiración de sus estudiantes: tores del deporte samario: “Con Calero, Marta: “No me gustó ser concejal, eso es
“Mira, cuando yo oía una bulla y llega- Henríquez Pardo, yo fui, sí. Y nosotros horrible; yo lloraba y renuncié a los tres
ba, decía: ‘No me tengan miedo, temor recibíamos en esa arena en diciembre, y meses. Yo era suplente de Aníbal Pacheco
tampoco; respeto’, porque yo llegaba y llegaba a la casa y me regañaban, pero yo de León, yo fui la que le di todos los
cerraba el puño, el puño de mi mano era algo ganaba”. votos”. Graciela afirma que la experiencia
el silencio, y yo les enseñé así”. Recuer- fue muy poco satisfactoria debido a que
da que como resultado de sus charlas Graciela conformó una banda de guerra no le permitían ejercer su funciones: “Yo
con los estudiantes, muchos padres se con los niños de primaria de la institu- tenía proyectos y llegaban y me decían
vieron corregidos por sus mismos hijos: ción, y organizaba periódicamente con- que no me metiera, que dejara eso así. La
158
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
La infatigable labor
de la Seño Chela
como educadora.
RE
Cortesía de Graciela Mejía

a m b i e n ta l
Raiz
RA

única mujer era yo, y me dijeron: ‘Doña desayuno. Jorge sale para el trabajo y ella ‘Seño Chela’, al mercado [y] ‘Seño Chela’:
Chela sálgase de ahí, usted no gusta ahí, se queda en casa: “Me quedo leyendo o eso me alegra”. Le gusta leer mucho y
usted es honesta, usted es una mujer viendo televisión, luego llega la seño- mantenerse informada sobre la ciudad:

urbana
honorable, usted no sirve para eso’. Yo ra que me ayuda en la casa y me hace “Yo soy fiel compradora de periódico; eso

Raiz
no hice nada, duré tres meses y tenía que compañía mientras ella lava la ropa y sí me mantiene interesada”.

RU
durar un año; no, no, no: eso fue horri- limpia”. A pesar de contar con esa ayuda
ble”. Después de su paso por el Concejo, en las labores domésticas, es Graciela
Graciela regresó a su escuela, lugar don- quien se encarga de la cocina. “Después ¿Qué es lo más difícil? ¿Qué la

Raiz socio-
entristece?


c u lt u r a l
de se sentía cómoda y útil: “Yo me vine del almuerzo, a mí me gusta dormir; ya a
para mi colegio, ahí sí sentía que estaba la una por ahí me coge el sueño –comen- Para Graciela las situaciones más tristes
haciendo algo y que no me menosprecia- ta–. Eso sí, me gusta mantener la casa de los últimos tiempos han sido los falle-
ban”. Dos años después llegó el momento siempre organizada; [durante las tardes] cimientos de su hermano Gustavo y de su RC

de su retiro, y la despedida fue con bom- me pongo a neciar, a arreglar cosas, a primo Eduardo Timms, quien murió en
bos y platillos: “Hicieron un evento muy organizarle los papeles a mi esposo o el mes de febrero del presente año. “Y la
ausencia de mi hermano Efraín, que vive

histórica
grande, con muchos agradecimientos, algo; si no, salgo a visitar a alguien o
eso fue muy bonito y vino gente de todas hacer una vuelta. Si tengo que ir al mé- en Medellín. Eso a mi me ha dado muy

Raiz
partes, exalumnos, profesores antiguos, dico o alguna otra diligencia, salgo, pero duro”, nos dice Graciela.
¡mejor dicho!”. Desde entonces la Seño por las tardes”. Como es costumbre en RH

Chela pasa sus días junto a su esposo en la Costa, Graciela come temprano, a eso ¿Qué es lo más importante para
su hogar en Pescaíto, donde disfruta de de las seis de la tarde, y después se pone usted ahora? ¿De qué se siente
su pensión y de las visitas que le hacen a ver las noticias. “La novela también es agradecida?
los vecinos y amigos. imperdible”, dice mientras se ríe. “Y ahí
Actualmente, lo más importante en su
me va cogiendo el sueño otra vez, a veces
vida es la tranquilidad: “Sí, yo ya no estoy
me acuesto a las nueve o a veces a las
Visión para nada más, sino para descansar. Ya
diez, pero cuando mi esposo vuelve del
estoy muy vieja, descansar es lo primor-
¿Por qué la gente la estima tanto? trabajo, ya yo estoy entre dormida”.
dial, vivir tranquila. Eso sí, manteniendo
Graciela cree que su labor como edu- buenas relaciones, porque no me voy
cadora y su vocación de servicio le han a encerrar hasta que me muera”. Dice
¿Qué es lo que más le gusta de su
valido el aprecio y el reconocimiento sentirse agradecida con Dios por haber
vida? ¿Qué es lo que más le gusta
de la comunidad: “Yo lo que más valoro contribuido a la educación de muchos de
hacer?
es haber participado por 42 años en la los niños de la comunidad, así como por
Graciela afirma que lo que más disfruta
educación de la niñez y la adolescencia de haber podido participar en las actividades
es el cariño de la gente, pues es conoci-
la gente del barrio Pescaíto. Hoy en día, deportivas. “Eso sí fue muy bueno, poder
da en todo el sector y muchas personas
los alumnos –para qué– me valoran, me participar de todos esos eventos; era muy
pasan por su casa a saludarla: “Eso acá
respetan […]. Yo creo que mucha gente me bonito y conocí a Carlos Vives, a Leonel
viene todo el mundo. Ah, bueno, esa es
quiere, me respeta, me valora por mi labor Álvarez, a muchas personalidades de la
otra parte de mi día: atender la visita,
de servicio, porque yo me dediqué toda época”, cuenta con una sonrisa.
aunque no todos los días, pero a menudo
la vida a ser útil para la comunidad y me
sí viene gente o amigos y nos sentamos
esforcé por educar buenas personas, que
a hablar en la terraza”. Su felicidad está 
¿Qué es lo que más necesita?
respeten y que sean honestos”.
ligada definitivamente al cariño que le
Su necesidad más urgente no es otra que
profesan las personas: “Las personas que
la de ver cómo las personas consiguen
Un día en la vida de Graciela Mejía me saludan, y que a veces no conozco.
superar sus dificultades y progresar,
“Pues yo ya no hago mucho, casi ni Voy al banco y oigo que me llaman; un
sobre todo aquellas que han caído en
salgo”, afirma Graciela. Su día comienza cajero, médicos: ‘¡Ay, si usted fue mi
la drogadicción: “Yo quiero ver a las
a las seis de la mañana, hora en la que se profesora!’. Abogados, médicos, ingenie-
personas mejor, no quiero ver ‘chirretes’,
levanta junto a su esposo para hacer el ros, de todo. Es decir, voy a una parte [y]
quiero que los ayuden. La droga… no
159
La Seño Chela con
uno de sus 138
ahijados de bautismo.
Cortesía de Graciela Mejía
Planos Vivos
Pescaito
Comunidad, organización
y liderazgos

Lideresa humana:

quiero que la legalicen. [Quiero] que haya ¿Cuándo recurren a usted los quiere trabajar y quieren ganársela fácil.
Graciela Mejía

hogares donde colocarlos; esas niñas, vecinos?
 Que no, que busquen la manera y que
cuando yo las veo, me da un pesar”. A la Seño Chela la buscan para toda clase trabajen, pero con honestidad”.
Cuello

de actividades, debido a su gran populari-


¿En qué cree y cómo lo aplica en dad y al respeto que toda la comunidad le
Observación participativa
su vida? expresa: “Mucha gente ha venido a pedir-
me que participe en la Acción Comunal; Características que la hacen una
Graciela rige su vida por los valores
me piden que sea madrina y yo, ya con 138 lideresa humana
católicos que le fueron trasmitidos desde
ahijados, les digo que me muero primero
muy pequeña: “Yo soy muy religiosa, Graciela Mejía Cuello es una de las
y el niño no va a conocer a la madrina.
soy de la Hermandad del Milagroso, soy personas más reconocidas y respetadas
Pero no, me piden que les haga refuerzos
de la Congregación del Carmen, soy del de la comunidad pescaítera. Durante los
a los niños y que me pagan, pero yo ya no
Corazón de Jesús; todos los domingos 42 años en los que se desempeñó como
quiero más nada […] Yo ya no estoy para
voy a misa. Yo soy católica, apostólica y directora de la Escuela Parroquial El
hacer cosas, acá vienen a buscarme, pero
pescaítera, digo yo”. Carmen, su labor como educadora le valió
no, yo creo que ya cumplí con mi labor ”.¡
la admiración y el cariño de las personas.
Las dotes pedagógicas de la Seño Chela; el
Comunidad
 trato amable con estudiantes, profesores y
¿Cuál es el mayor reconocimiento
¿Cuáles son las cosas positivas que que ha recibido de parte de la vecinos; y su compromiso con el depor-
más valora de la comunidad? comunidad? te y con el bienestar de la comunidad le
Para Graciela, la existencia de un li- “Cuando me entregaron el Pescaíto ganaron el corazón de los pescaíteros y
derazgo comunitario con vocación de Dorado, el otorgamiento del Pescaíto Do- las pescaíteras.
servicio es el rasgo más destacable de rado”, sostiene sin dudarlo un segundo.
Pescaíto: “Hay muchos líderes que están Graciela fue la segunda persona en reci- ¿Cómo establece su vínculo con las
interesados por hacer las cosas, para que bir el galardón, y no era para menos, si se personas de la comunidad?

la comunidad mejore, aunque hay otros toman en consideración su trayectoria y
Más allá de las constantes visitas de
que no, que solo están ahí por intereses el enorme cariño que sienten por ella los
amigos y familiares, Graciela interactúa
personales, pero esos que en serio quieren vecinos. Nadie con mejores credenciales
hoy en día poco con la comunidad. No
al barrio, diría yo que son lo positivo que para recibir el reconocimiento como una
obstante, los sólidos vínculos que forjó en
tenemos acá”. de las “glorias de Pescaíto”, según reza la
más de cuatro décadas de labor educativa
fotografía que ocupa un lugar especial en
se mantienen intactos.
su casa.

¿Cuáles son las problemáticas que
más afectan a la comunidad?

Contextos en los cuales querría y
Para Graciela, el mayor problema lo ¿Qué cree que es necesario fomentar
tendría posibilidades de participar en
constituye, de lejos, la pérdida de valores: en la gente?
un proyecto o proceso comunitario

“Es que ha cambiado mucho el barrio, ha Graciela afirma que la disciplina y la
Aunque insiste en que ya aportó todo
venido mucha gente horrible, me da pena honestidad son los valores que mayor
lo que podía aportarle a la comunidad,
decirlo, pero me gusta mucho decir la fomento deben recibir en Pescaíto, sobre
Graciela se desenvuelve bien en ámbitos
verdad. Ya no hay honestidad, se perdió el todo entre los jóvenes: “Con la disciplina
deportivos y educativos, pues cuenta con
respeto, mucho trago; no se justifica que se obtiene la excelencia; el que obedece
una invaluable experiencia en el campo de
en frente de la clínica haya un estadero. triunfa, el que desobedece fracasa, eso le
la gestión y organización, para no hablar
No lo dejan dormir a uno, hay vecinos que decía yo a mis estudiantes. Y en la educa-
de la extensa red de contactos que tejió a
no respetan. ¿Y cómo hacemos nosotros? ción y en el deporte que tengan siempre
través de su labor docente y de la promo-
Los valores se han perdido”. en cuenta la honestidad, porque ahora hay
ción del fútbol en Pescaíto.
mucha gente deshonesta y floja, que no
160
Ficha 8 Junta de Acción Comunal de Villa Tabla

política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH
Según el artículo 8 de la Ley 743 de 2002, gran Pescaíto: su propósito fundamental La JAC de Villa Tabla
las Juntas de Acción Comunal son “una es el de regularizar plenamente la situa- en plena sesión.
Fotografía de Gabriela
organización cívica, social y comunita- ción del barrio para garantizar el acceso Díaz Montealegre
ria de gestión social, sin ánimo de lucro, a servicios públicos y equipamientos ur-
de naturaleza solidaria, con personería banos básicos. En la tabla 1 presentamos
jurídica y patrimonio propio, integrada a los actuales dignatarios de la Junta de
voluntariamente por los residentes de un Acción Comunal de Villa Tabla.
lugar que aúnan esfuerzos y recursos para
procurar un desarrollo integral, sostenible abandono, sumado al crecimiento urbano,
y sustentable con fundamento en el ejer- Origen de la Junta
particularmente sobre la servidumbre de
cicio de la democracia participativa”.1 En Villa Tabla es un barrio formación re- la línea férrea, llevó a los habitantes del
el caso concreto de Villa Tabla, el ámbito ciente dentro del gran Pescaíto, aunque barrio en ciernes a buscar mayor autono-
de la acción comunal adquiere particular no hay que olvidar que una de sus calles mía en la gestión administrativa. Varios
relevancia, dado su carácter de barrio de más importantes, la de Rincón Guapo, ha vecinos, encabezados por Usmar Rebolle-
poblamiento espontáneo. Como no ha sido parte del sector por más de medio do, formaron un Comité Ciudadano como
sido reconocido dentro del ordenamiento siglo. El trazado del ferrocarril la separó preámbulo a la creación de la Junta de
urbano, no suele ser incluido dentro de las del entramado urbano pescaítero; un Acción Comunal, que finalmente obtuvo
políticas públicas promovidas por el Dis- aislamiento que se vio acentuado por la su personería jurídica en octubre de 2006.
trito ni es tenido en cuenta dentro de los posterior construcción de la vía Alterna.
planes de desarrollo. La Junta de Acción La marginalidad relativa a la que quedó
Comunal se ha erigido así en la principal sometida la zona de Rincón Guapo se Actividades y logros
instancia en la lucha de sus habitantes por tradujo, en palabras de Usmar Rebolledo, La Junta se reúne habitualmente en
el reconocimiento legal y la legitimación presidente de la JAC de Villa Tabla, en “una la vivienda de alguno de sus dignata-
del barrio. No en vano, la Junta de Villa falta de representatividad y de interés rios, en especial en la casa de Donaldo
Tabla es una de las más activas dentro del por parte de la Junta de Pescaíto”. 2 Este Ochoa, ubicada sobre la vía Alterna. En
otras ocasiones apelan a una de la más
veneradas tradiciones del sector, como lo
1 Ley 743 de 2002, título segundo, capítulo I, artículo 8. 2 Usmar Rebolledo, vecino de Villa Tabla, 61 años de
Disponible en: http://www.alcaldiabogota.gov.co/ edad. La entrevista para la elaboración de esta ficha
es la de la reunión en alguna esquina, en
sisjur/normas/Norma1.jsp?i=5301 fue realizada el 1.o de febrero de 2016. este caso particular en la calle de Rincón
161
T abla 1
Integrante Cargo
Dignatarios de la Junta de Acción
Usmar Rebolledo del Prado Presidente
Comunal de Villa Tabla
Jorge Luis Ponzón Llanes Vicepresidente
Planos Vivos
Pescaito

Raúl Enrique Vargas Brigantes Tesorero

Kelly Jiménez Montenegro Secretaria

Jairo Rossil González Fiscal


Comunidad, organización

Sugeris Ester Caldera Prasca Conciliadora 1

Miriam Mejía Medina Conciliadora 2


y liderazgos

Wilfrido Daza Machada Conciliador 3

Arturo Alberto Correa Soto Delegado 1

Lieinnis Niebles Siliehes Delegada 2




Lorena Canchila Cantillo Delegada 3

María Babativa U. Líder Comité Sisbén


Junta de Acción

Lilibeth María Tejada Muñiz Líder Comité de Educación


Comunal de

Fabián David Pertuz Ponzón Líder Comité de Deporte


Villa Tabla

José Manjarrés Rebolledo Líder Comité Embellecimiento del Barrio

Josefa Elvira Povea Amaya Líder Comité de Salud

Jonatán Gutiérrez Rey Líder Comité de Juventud

Donaldo Ochoa Salcedo Líder Comité de Cultura

Juliana Castro Vásquez Líder Comité de Festejos

Johnny Jiménez Pedrozo Líder Comité de Servicios Públicos

Guapo. Actualmente existe un proyecto blicos y en la pavimentación de las calles un pozo; nosotros nos gastamos por ahí
para la construcción de un salón comunal que la Junta se ha anotado sus mayores millón y piquito, porque lo hicimos con la
que haga las veces de sede para la Junta. éxitos. Para muestra, un par de botones: misma comunidad […]. Es que si el Distrito
Sus miembros participan con regulari- no llega, le toca hacerlo a uno mismo”,
dad en capacitaciones, charlas y talleres Energía Eléctrica: Durante la alcaldía de afirma Usmar Rebolledo.
dictados por la Alcaldía para fomentar Juan Pablo Díaz Granados, la Junta logró
la formación de los líderes comunitarios. que el servicio de energía fuera llevado Mercados para la comunidad: En el año
Entre las empresas y entidades que han hasta el barrio. Anteriormente, a las cinco 2014, y gracias a la gestión realizada
brindado su apoyo a la JAC de Villa Tabla de la tarde “ya los televisores no andaban, ante la Defensa Civil, la Junta consiguió
cabe mencionar la Sociedad Portuaria de ya la nevera se apagaba”, según lo relata trescientos mercados para el barrio (cien
Santa Marta, los Ferrocarriles del Norte Usmar. La Alcaldía proporcionó transfor- menos de los solicitados). Aunque la en-
de Colombia (Fenoco), el Servicio Nacio- madores, postes y redes. En palabras del cargada le manifestó que había reservado
nal de Aprendizaje (SENA), la Cruz Roja presidente de la Junta, “aquí pasaban unos 33 mercados para los dignatarios, Usmar
Colombiana, la Defensa Civil Colombiana cablecitos y pasaban era por arriba de los desistió de reclamarlos, pues a la llegada
y la Secretaría de Salud del Distrito. La techos; entonces logré que esa administra- del camión con los alimentos se formó un
Junta también ha contado con el apoyo de ción nos organizara todo bien, buscando la tumulto: “Llegó gente que ni yo había vis-
las conexiones políticas de su presidente, forma de cambiar la calidad de vida”. to por aquí; me tocó quitarme del camión,
quien prefiere mantener sus nombres en porque la gente lo iba a voltear por coger
reserva, lo mismo que con el de otros líde- Pozo: Debido a la escasez de agua, en el los mercados. La comunidad es así”.
res comunitarios del sector, como Héctor año
de 2015 se construyó un pozo
para
Ortiz y Wilson Calero, quienes han acom- proveer del líquido a
 la comunidad. Pavimentación del la
calle Rincón Gua-
pañado el proceso de formación de Usmar “Vecino con vecino, familia con familia, po: El cabildeo del presidente de la Junta
Rebolledo como líder comunitario. eso nos queríamos dar machete por el ante un candidato al Concejo permitió la
poquito de agua”, comenta el presidente pavimentación de Rincón Guapo. El can-
La Junta se ha mostrado muy activa en la de la Junta.
Una candidata al Concejo didato puso los materiales; Villa Tabla la
gestión de programas de salud, jornadas puso los materiales a disposición de los mano de obra. “Conseguimos el material
de capacitación organizadas por la Defen- habitantes, quienes construyeron el pozo con políticos y los hicimos nosotros mis-
sa Civil y talleres de artesanía, zapatería con sus propias manos. Este surte de agua mos”, afirma Usmar Rebolledo.
y belleza, entre otros. “A pesar de que tra- un tanque de cinco mil litros, del que se
bajamos con las uñas, logramos bastante”, proveen las diferentes casas a través de
afirma con orgullo Usmar Rebolledo. Es una red tubos. “El gobierno se gasta como
sobre todo en el acceso a los servicios pú- trescientos millones de pesos haciendo
162
La regularización del

política
servicio de energía
eléctrica: uno de los

Raiz
logros de la Junta.
Fotografía de Gabriela RP
Díaz Montealegre

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
La pavimentación de
Rincón Guapo: otro de
los éxitos de la Junta. RU
Fotografía de Gabriela
Díaz Montealegre

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH

Problemas y conflictos que enfren- comunidad: la Junta se ha opuesto con de- la historia que se remonta a los orígenes
ta la Junta de Acción Comunal cisión a la venta y al consumo de drogas, mismos del sector. En su propósito de
lo que le ha valido el reconocimiento de afianzar la legitimidad del barrio, la Junta
Usmar Rebolledo afirma que su cargo
mucho habitantes, pero también la hostili- ha andado ya un buen trecho, gracias
le ha causado problemas con algunos
dad de quienes viven del negocio. al respaldo de los vecinos y las buenas
vecinos, quienes lo tildan de ladrón, pues
relaciones que ha entablado con las Juntas
creen que la Junta de Acción Comunal
de San Martín y Barrio Norte, que le han
maneja dineros del Distrito. La situación La Junta de Acción Comunal de servido de guía y apoyo en muchos de
precaria de muchos habitantes aumen- Villa Tabla de cara al futuro sus procesos organizativos. La JAC de
ta el potencial de conflicto en el barrio,
La Junta de Acción Comunal de Villa Villa Tabla hace parte de la Asociación
como lo ilustran las tensiones en torno al
Tabla anhela un futuro en el que todos los de Juntas de la Localidad 2, lo que le ha
abastecimiento de agua: algunos vecinos,
habitantes tengan acceso a los servicios permitido estrechar relaciones y sellar
cuando encuentran vacío el tanque insta-
básicos, disfruten de una mejor calidad de alianzas con organizaciones barriales de
lado recientemente, emprenden acciones
vida y cuenten con mayores oportunida- otros sectores.
violentas contra dignatarios de la Junta.
des laborales. Sus dignatarios trabajan sin
Tanto o más graves son los conflictos que
descanso para regularizar plenamente la
giran en torno a la seguridad. El intento
situación del barrio y cambiar su imagen
de robo del carrotanque que proveía de
negativa como zona marginal, propensa
agua a un sector del barrio es un ejemplo
a la violencia y el delito. En cabeza de su
muy diciente al respecto. La intervención
presidente, la Junta reivindica la perte-
de la Junta de Acción Comunal evitó el
nencia cabal del barrio al gran Pescaíto: a
robo, pero motivó amenazas contra su
través de la calle de Rincón Guapo, cuna
presidente. El microtráfico es otro de los
de familias reconocidas como la de los
fenómenos que generan zozobra en la
Calero, Villa Tabla reclama un lugar en
163
Carta de vida de Álvaro Gómez

1
Planos Vivos
Pescaito

Álvaro Gómez en la
playa de San Martín.
Comunidad, organización

Fotografía de Gabriela
Díaz Montealegre

Dos episodios en la
y liderazgos

vida de Álvaro Gómez


ligados al fútbol: como
autor del retrato en el


homenaje de San Martín


a Radamel Falcao García
y como mascota del
Unión Magdalena.
Cortesía de Álvaro Gómez
Álvaro Gómez
Carta de
vida de

164
política
Raiz
3 5
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH
4

Fuy creciendo, y
en el barrio muchas
amistades de mi edad
cogieron caminos
equibocados, calleron
en la droga y la
delincuencia”.
Del puño y letra de Álvaro Gómez

165
Ficha 9 Fundación Pescaíto Dorado
Planos Vivos
Pescaito
Comunidad, organización
y liderazgos

Fundación
Pescaíto
Dorado

La Fundación Pescaíto Dorado es una la tradición carnavalera en Santa Marta.1


Comparsa de
“negritos”.
organización sin ánimo de lucro, dedica- En un comienzo, Alaín aunó esfuerzos
Fotografía de Mariana da a la realización de proyectos y eventos con otros miembros de la comunidad
Gil Arboleda culturales, artísticos, deportivos, cientí- para conformar, en el año de 2006, la
ficos y pedagógicos para niños y niñas. Junta Central del Carnaval de Pescaíto.
Está comprometida con la divulgación de Su objetivo primordial era el de revivir el
los saberes tradicionales y con la exalta- Carnaval del sector, después de años de
ción de la riqueza y la importancia del pa- no haber sido celebrado. Las divisiones
trimonio cultural inmaterial de Pescaíto, en el seno de la Junta llevaron a Alaín
Santa Marta y el Caribe. Igualmente está a crear la Fundación Pescaíto (Funda-
empeñada en rescatar y fortalecer las fies- pescaíto), mientras que los miembros
tas patronales de veredas, corregimientos restantes de la Junta se asociaron en
y municipios, así como en garantizar la torno a la Fundación Carnaval de Pes-
continuidad y el desarrollo del Carnaval y caíto (Funcarpes). Pese al éxito de las
de las Fiestas del Mar en Santa Marta. Sus fundaciones en la reorganización del
tres proyectos bandera, como tendremos Carnaval, Alaín sentía que aún había un
oportunidad de detallar más adelante, son vacío en las festividades: “Veía que había
el Carnaval Infantil de Pescaíto, la Escuela muy poco espacio para los niños, lo cual
Cantar de Tamboras y el Galardón Pescaí- internamente produjo molestias. Mi idea
to Dorado. En la tabla 2 presentamos a los era perpetuar el Carnaval a través de los
actuales integrantes de la Fundación. niños, sembrar la semilla para que en un
futuro sean protagonistas de su propio
Carnaval”. Decidió entonces en el año
Origen de Pescaíto Dorado
La Fundación Pescaíto Dorado surgió 1 Alaín Manjarrés, vecino de Olaya Herrera. La entre-
como parte del empeño de Alaín Man- vista para la elaboración de esta ficha fue realizada
jarrés, su actual presidente, por rescatar el 24 de mayo de 2016.
166
El Galardón Piedefoto

política
Pescaíto Dorado.
Fotografía de Gabriela

Raiz
Díaz Montealegre

RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Alaín Manjarrés
frente a la sede

Raiz
de Pescaíto
Dorado.
RA
Fotografía de Gabriela
Díaz Montealegre

urbana
2010 crear una nueva fundación dedica- ciones públicas y contacta diferentes me- La Escuela Cantar de Tamboras, por su

Raiz
da exclusivamente a promover valores dios de comunicación para la promoción parte, ofrece a los niños, niñas y ado-
RU
culturales en la niñez. Tal como reza uno de los diversos eventos que constituyen el lescentes del sector (entre los seis y los
de los volantes de la fundación, “Pescaíto Carnaval Infantil, a saber: dieciséis años de edad) clases de tambora
se ha distinguido como una comunidad samaria. Los talleres de formación tienen

Raiz socio-
c u lt u r a l
donde se conjugan una serie de sentires, >> Acto inaugural: La caravana llama- lugar entre los meses de mayo y octubre.
significados y actividades caracterizadas da “Los niños y el mundo mágico del La ficha del sistema de Planos Vivos dedi-
por el asentamiento en su tradición cul- Carnaval” da inicio oficial al festejo. cada a la tambora samaria puede ser con-
RC
tural [...]. Por ello, esta Fundación ofrece Adicionalmente se realiza una izada sultada en el siguiente capítulo. El lector
un espacio a los niños que responda a su de bandera en la que se resaltan los o la lectora podrá sopesar la importancia
derecho de expresión cultural propia”. símbolos patrios y la importancia del de la tambora como expresión cultural en

histórica
Alaín tomó el nombre de Pescaíto Do- Carnaval. 
 Pescaíto y en Santa Marta.
rado del galardón homónimo que había

Raiz
>> Desfile “Disfrázate pelao” y lectura del
venido entregando desde el 2004, y que En lo que al Galardón Pescaíto Dorado
bando: En este evento, la reina del Car- RH
desde entonces quedó a cargo de la nue- respecta, la ceremonia de entrega se reali-
naval Infantil lee el bando e inaugura el
va fundación. za en el mes de junio en el parque central
concurso de disfraces carnavaleros.
de Pescaíto, frente a la iglesia Nuestra
>> Talleres: La programación del Carnaval Señora del Carmen. En palabras de Alaín
La labor de Pescaíto Dorado incluye talleres culturales que tratan Manjarrés, “la esencia es un hijo ilustre del
Como lo indicamos más arriba, la labor temas diversos, tales como los mitos y barrio que haya nacido o vivido más de
de la Fundación gira en torno al Carnaval leyendas populares, la tambora samaria diez años acá, que se haya destacado en
Infantil de Pescaíto, la Escuela Cantar de o el Carnaval. Asimismo se organizan algún ámbito. Hay una junta conformada
Tamboras y el Galardón Pescaíto Dorado. talleres prácticos de maquillaje y orna- por todos los galardonados que se reúne
mentación corporal. 
 y escoge a quién se le da; si no, queda a
Las celebraciones del Carnaval tienen criterio de la Fundación”. A la ceremonia
>> Desfile y coronación de reyes y reinitas:
lugar en la semana previa a la Cuares- asisten diferentes personalidades del sector
Como su nombre lo indica, durante este
ma y se concentran en la “esquina de la y de la ciudad como líderes comunales, pe-
evento tiene lugar la coronación de la
Alegría”, en el cruce de la calle 7 con la riodistas, músicos y deportistas. De igual
reina central y de las reinas de los ba-
carrera 9.a. La organización de desfiles y el manera se hacen presentes el o la alcalde
rrios participantes. De igual manera se
montaje de tarimas tienen lugar durante de Santa Marta y en ocasiones el goberna-
hace un reconocimiento al Rey Momo y
las cuatro noches que anteceden el Miér- dor o la gobernadora de Magdalena. Entre
a los respectivos reyes de cada barrio. 

coles de Ceniza. Los desfiles se toman las las personas galardonadas con el Pescaíto
calles y espacios públicos del barrio, en >> “Desfile de la alegría”: Constituye el Dorado se encuentran, entre otras, el líder
especial la calle 6, la calle 7, la carrera 11 y evento central del Carnaval Infantil. En comunal Jaime “Currimbí” Mendoza;
la plaza central de Pescaíto. Alaín descri- él, las diferentes comparsas conforma- Graciela Mejía, a quien ya tuvimos oportu-
be así el papel de Pescaíto Dorado: “Bue- das por niños y adolescentes se lanzan nidad de presentar en la ficha correspon-
no, nosotros sólo somos un instrumento, a las calles de Pescaíto para presentar diente; Víctor Delgado y Pedro del Valle,
porque en sí el Carnaval es la gente, pero sus bailes y contagiar de alegría a los tamboreros; Carlos “el Pibe” Valderrama;
se buscan coreógrafos, vestuarios, músi- habitantes. 
 Silvio Lizcano, antiguo kinesiólogo del
cas. Nosotros lo que hacemos es convocar >> Desfile “Adiós al Niño Joselito”: Con este Unión Magdalena; los humoristas Sara
y organizar”. La Fundación dedica sus desfile se cierra el Carnaval Infantil de Acosta y Luciano Visbal; Manuelito Ber-
mayores esfuerzos a la organización de Pescaíto. En él se le da la despedida al múdez, dueño del insigne bar “El Mojón de
las comparsas de niños y adolescentes. Niño Joselito, a la espera de su retorno Oro”, y Maximiliano “Chimilongo” Robles,
Igualmente adelanta campañas de rela- el año siguiente. 
 exarquero del Unión Magdalena.
167
T abla 2 Integrante Barrio Cargo
Integrantes de la Fundación Pescaíto Dorado
Alaín Manjarrés Olaya Herrera Presidente
Darling Luna Olaya Herrera Secretaria
Planos Vivos

Aldo Méndez Barrio Norte Tesorero


Pescaito

Javier Manjarrés Pescaíto Director ejecutivo


Aramis Manjarrés Pescaíto Fiscal
Arien Meza Olaya Herrera Contador
Comunidad, organización

Juana Iguarán Barrio Norte Vocal 1


Carlos Montes Barrio Norte Vocal 2
y liderazgos

Dos de las Sostenimiento de Pescaíto Dorado




personalidades del
Los fondos para el sostenimiento de la
sector homenajeadas
con el Galardón Fundación provienen principalmente del
Pescaíto Dorado: Programa Nacional de Concertación Cul-
Carlos “el Pibe” tural del Ministerio de Cultura, que hasta
Valderrama y ahora ha respaldado la organización del
Graciela Mejía.
Carnaval Infantil. Recursos adicionales,
Fundación
Pescaíto

Fuente: Archivo de la
Dorado

Fundación Pescaíto Dorado en palabras de Alaín, provienen de “[la]


autogestión, fondos propios y tocando
puertas para ver donde nos colaboran”.
Entre las firmas y entidades que han dado
su apoyo, se destacan Molinos de Santa
Marta, que provee las tarimas y sistemas
de sonido para los eventos del Carnaval
Infantil; Graficolor, que brinda apoyo lo-
gístico a los talleres organizados durante
los festejos; y los medios de comunicación
(radio y prensa), que prestan su patrocinio
a través de la publicidad y ponen a dispo-
sición de la organización del Carnaval un
grupo de animadores para los eventos.

El mayor reto lo constituye, en palabras


de Alaín, “mantener un apoyo institucio-
nal permanente para asegurar los eventos;
la gestión no es fácil”. En efecto, la Funda-
ción no puede dar por sentada la partida
del Ministerio de Cultura, pues cada
asignación depende de la aprobación del
proyecto correspondiente a través de con-
curso abierto. Es por eso que el presidente
de Pescaíto Dorado está empeñado en
alcanzar la autosuficiencia de la entidad:
solo así es posible asegurar la continuidad
de los proyectos y realizar una planea-
ción de largo plazo. La trayectoria y el
reconocimiento de Alaín Manjarrés como
gestor cultural en el sector son prenda
de garantía: “Creo que hemos visto cosas
anticipadas y ya somos reconocidos en
la ciudad y el Caribe; entonces, contando
con eso, vamos a ver si conseguimos ese
autosostenimiento, creando una empresa
alterna que sea educativa y cultural”.

168
Creo que hemos visto cosas anticipadas y ya

política
somos reconocidos en la ciudad y el Caribe; entonces,

Raiz
RP
contando con eso, vamos a ver si conseguimos ese
autosostenimiento, creando una empresa alterna que sea

Raiz socio-
económica
educativa y cultural”.
RE

a m b i e n ta l
Raiz
Comparsa del
Carnaval Infantil.
RA
Fuente: Archivo de la
Fundación Pescaíto Dorado

urbana
Raiz
RU

Problemas y conflictos que

Raiz socio-
enfrenta Pescaíto Dorado

c u lt u r a l
En líneas generales, la Fundación ha
gozado de buen recibo entre los habi-
RC
tantes del sector, tal como lo confirma
su presidente: “La gente ha acompañado,
participado y apoyado la Fundación.
tro para los samarios, que sea el barrio para darle un mejor final”. El desfile de

histórica
Muchos padres prefieren que sus hijos
cultural de Santa Marta. En la medida despedida del Niño Joselito partió de la
salgan en comparsas acá, porque no

Raiz
en que eso se dé, se abren espacios para plaza central de Pescaíto, tomó la calle 6,
está el riesgo del alcohol y los eventos
hacer actividades”. En cuanto a la par- la carrera 5.a y la calle 4 hasta la carrera 12, RH
se terminan temprano […]. El Pescaíto
Dorado pues es un evento que ya lleva ticipación de Pescaíto Dorado en dicho para culminar su recorrido en el Centro
años y vienen personalidades de todas escenario, Alaín señala que la fundación Pedagógico Intelecto.
partes; gente reconocida de Pescaíto y se convertiría en una de las principales
de afuera”. Ahora bien, la participación gestoras de las actividades culturales: “Si
ya somos abanderados en el tema, en un Breve narración etnográfica del
de tres organizaciones diferentes en la “Desfile de la alegría” del año 2016
organización del Carnaval de Pescaíto futuro así, pues mucho más”.
ha generado tensiones y rivalidades, que La caravana de carros y comparsas de
necesariamente dificultan los preparati- Pescaíto Dorado se traslada por la calle 4
Descripción del desfile “Adiós al hacia la carrera 12. Unos cinco carros con
vos del Carnaval Infantil. Alaín lamenta, Niño Joselito” de 2016 por parte de
por ejemplo, que tanto Funcarpes como picós se ponen a la cabeza de los grupos,
la Fundación mientras los niños y las niñas, enfunda-
Fundapescaíto organicen desfiles y even-
tos para niños, incluyendo la elección En la más reciente edición del Carnaval dos en disfraces coloridos, presentan sus
de la reina infantil: “Eso le quita espacio Infantil de Pescaíto, diez comparsas y cua- bailes. Las niñas de Tambor Samario bai-
a mis niños, porque el Carnaval de los drillas infantiles participaron en su desfile lan “El taxi”. “Los negritos” marchan por
grandes es de gran tamaño y meten a de cierre, entre ellas la de Intelecto, colegio las calles vestidos con taparrabos, lanza
niños también; eso relega las actividades dirigido por Alaín Manjarrés: “Este año no en mano, cubiertos de pintura negra. De
que los niños de Pescaíto Dorado tam- alcanzamos a hacer comparsa, sino que pronto rompen filas y salen corriendo
bién quieren llevar a cabo”. hicimos una cuadrilla, y como tenemos hacia los espectadores con un grito de
ahora un himno del Carnaval, pues los guerra: un susto tremendo se llevan los
niños salieron a bailar ese. Se hizo una espectadores embestidos por esta estam-
Pescaíto y la Fundación Pescaíto pequeña coreografía que ensayamos en el pida. Las cumbiamberas continúan con
Dorado de cara al futuro colegio, y los niños trajeron sus disfraces su baile al son de una tambora, protegi-
de sus casas y salimos a la calle [..]. Había das por un cerco de padres de familia.
En opinión de Alaín, el futuro de Pescaíto
comparsas de Los Almendros, de San La reina central del Carnaval Infantil las
depende de su posicionamiento como
Jorge, de un colegio del sur; hubo una bue- lidera en su carroza; a su lado aparecen el
centro de las actividades culturales en
na participación. Ese desfile es especial, Rey Momo y una comitiva de bailarines.
la ciudad: “Me gustaría que la estatua
porque Joselito no se muere, uno le da un El desfile continúa hasta la carrera doce;
del Pibe estuviera en Pescaíto, porque el
adiós temporal, porque él vuelve el otro allí da un giro hacia la calle seis, donde
barrio puede ser un punto turístico, con
año. La idea ahí es no involucrar la muerte finaliza el recorrido.
gastronomía: que sea un lugar de encuen-
169
El Carnaval: una de las
máximas expresiones
de la cultura popular
pescaítera.
Fotografía de Mariana
Gil Arboleda

6 Pescaíto:
dimensión sociocultural

Tal como lo hemos señalado en las páginas pre- sin pretensión de exhaustividad, el baile, la música
cedentes, la investigación de Planos Vivos puso el de picó, la siesta, el fútbol en la calle, los paseos a
énfasis en el ámbito sociocultural, tal como había la playa, la vida en los patios, la venta de fritos y
sido acordado con la comunidad y con los actores comida en las casas, el mototaxismo, las ventas
comprometidos con la renovación urbana del sec- ambulantes, los juegos infantiles y los hábitos de
tor. El concepto de cultura empleado aquí difiere los jóvenes.
del que suele ser utilizado en iniciativas de esta
índole, pues no se limita a las manifestaciones ar- La selección de fichas que presentamos a conti-
tísticas, las tradiciones artesanales o las expresio- nuación constituye una pequeña muestra de la
nes folclóricas. riqueza sociocultural de Pescaíto. La propuesta
urbana y arquitectónica de Planos Vivos busca no
La dimensión sociocultural abarca aquí las prácti- solo recoger y resaltar su diversidad y vitalidad,
cas cotidianas, los hábitos y los oficios que consti- sino además ofrecerle nuevos espacio de proyec-
tuyen la quintaesencia de la identidad pescaítera. ción para que siga alimentando la construcción
170 Entre los temas de investigación cabe mencionar, del territorio pescaítero en el futuro.
La propuesta urbana y arquitectónica de Planos Vivos

política
Raiz
busca no solo recoger y resaltar su diversidad y vitalidad, RP

sino además ofrecerle nuevos espacio de proyección


para que siga alimentando la construcción del territorio

Raiz socio-
económica
pescaítero en el futuro”. RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

Ficha 10 Los pintores de Pescaíto

urbana
Raiz
RU

Actualmente viven en el gran Pescaíto dos

Raiz socio-
talentosos pintores: Álvaro Gómez y Óscar

c u lt u r a l
Enrique Redondo. En lo que se refiere a
Álvaro Gómez, su curiosidad e interés por
la pintura se manifestaron desde la más RC
temprana infancia: “Yo creo que nací con
ese poder o don que me dio Dios. La pin-
tura es empírica: yo era muy rebuscador,

histórica
yo aprendía viendo, y empecé mirando a

Raiz
otros artistas pintar, y a hacerles pregun-
tas, hasta que un día le dije a mi papá que RH
yo quería estudiar en Bellas Artes”.1 Álvaro
pudo realizar su sueño de estudiar en la
Escuela, aunque se retiró y nunca se gra-
duó: “Yo veía que mi talento era muy bueno
y por eso me retiré, porque veía que yo sa-
bía; yo veía que estaba bastante avanzado,
Álvaro Gómez
me veía atrapado y no avanzaba, me retiré frente al caballete.
y nunca me gradué, y después Bellas Artes Fotografía de Gabriela
desapareció”. Díaz Montealegre

Por su parte, Óscar Enrique Redondo de ingresar a Bellas Artes, donde terminó ya varios años que abandonó la pintura
también sintió una temprana fascina- sus estudios, aunque al principio no le fue como actividad principal:
ción por el arte: “Desde que nací pinto, fácil adaptarse: “Yo estudié en la Escuela
porque la esquina no me gustaba. Me de Bellas Artes. Nunca me salí, porque era He dejado a un lado los pinceles y me he
dediqué a hacer aquí mis cositas”.2 No como un puente. Solo recibían a diez, y dedicado más a la ebanistería, por no tener
obstante, fue en la adolescencia, después yo quedé. Yo conozco la Escuela de Bellas materiales: el óleo se ha encarecido mucho
Artes por Edison; entro a Bellas Artes en y no hay recursos ni pa’l sustento. Para
de haber conocido al artista barranqui-
ponerse a pintar tiene que tener uno segura
llero Edison Roa, que decidió seguir su 1970 a que me enseñen óleo, porque me
la cuestión alimentaria. Hay gente que
vocación: “Edison Roa vino a exponer y gustó como hobby. Yo también quería ser
puede dedicarse a pintar, pero yo no tengo
nos hicimos amigos, grandes amigos. Él mecánico, pero nunca lo hice, ya nunca espacio en mi casa ni tengo nadie que me
fue como mi mentor; si no hubiera sido dejé el arte”. ayude. Había un gremio y organizaba y
por él, no hubiera aprendido nunca arte”. tocaba puertas, a la Alcaldía y a los bancos,
Fue precisamente Roa quien lo convenció para patrocinio pa’l coctel, el brindis, las
Álvaro Gómez: pintor y ebanista invitaciones. Antes se hacían muestras de
Aparte de la pintura, Álvaro hace “de pintura, exhibiciones del periódico El In-
1 Álvaro Gómez, vecino de San Martín. La entrevista todo un poco”: trabaja como ebanista y formador y el Banco de la República, pero
para la elaboración de esta ficha fue realizada en tapicero, estampa camisetas y fabrica nadie ahí hablaba de arte; solo se hablaba
febrero de 2016.
anuncios de publicidad, entre otras co- de política, de críticas, de todo menos del
2 Óscar Enrique Redondo, vecino del barrio de Pes- arte. Nadie se preocupaba por preguntar
caíto. La entrevista para la elaboración de esta ficha sas. Tal como él mismo lo explica, hace
por precios de las obras, la gente se iba y ni
fue realizada en mayo de 2016.
171
Óscar Enrique
Redondo y su
obra pictórica.
Fotografías de Gabriela
Planos Vivos

Díaz Montealegre y
Mariana Gil Arboleda
Pescaito
Pescaíto:

se hablaba de las pinturas. Entonces decidí


no exponer más; eso me desmotivó.
Ahora
sociocultural

ya es por encargo, que venga alguien y


dimensión

me diga: “Señor Álvaro, ¿usted es capaz


de hacer la última cena?”. O bodegones
de fruta, o flores. Esas son obras comer-
ciales que hago en un día, mientras que la
artística me demoro dos y tres meses. Los
colegas venden a ochenta mil la comercial,
pero eso es un regalo. ¡Imagínese! Templar
el lienzo ya es trabajo y tiempo, no vale la
pena. Un día me ofrecieron cien dólares
Los pintores
de Pescaíto

por la última cena, y no amerita, es mucho


tiempo, una obra así vale más de un millón
de pesos, entonces no acepté. Solo le dicen


a uno que está bonito y eso es todo. Aquí,


nanay cucas, como dicen por ahí. Hace
más de quince años dije no más.


A pesar de que solo pinta esporádica-


mente y está dedicado a la ebanistería,
Álvaro señala que su verdadera pasión es
la pintura: “Para mí lo favorito para pintar
es el costumbrista, el pescador jalando su
red, los vendedores de fruta, el movimien-
to del ser humano buscando su sustento.
La pintura para mí es todo; si tienes un re-
corderis, lo plasmas. Digo: ‘¡Caramba!, ¡me
acuerdo cuando mi papá pescaba!’, y pues
lo plasmo”.
Trabaja en la terraza del frente
de su casa, sentado en un banquito y al
lado de una mesa de madera, en la que se
amontonan las herramientas con las que
repara y fabrica muebles. “También hago que eran más rentables. Ahora, a sus 69 Problemas y dificultades que en-
avisos de publicidad, pero no está tan años, ya no esculpe, pues el retumbar del frentan en su labor
bueno ahora, y hago también estampados martillo no es bueno para su cabeza y su
con plastisol y plancha”, agrega Álvaro, Álvaro ya no pinta, pues los costos de los
salud: “A mí lo que me gusta es la pintura
quien guarda la esperanza de reencon- materiales para pintar al óleo exceden
al caballete, y he aprendido escultura. He
trarse con la pintura a través de la ense- su capacidad económica. En su opinión,
hecho cosas en barro y cemento, y algu-
ñanza a los jóvenes: “Yo si he querido que las personas en general ya no compran
nas cositas en bronce vaciado, por encar-
una entidad me llame para dictar unas arte, y las pocas que manifiestan algún
go, claro, porque es costoso y perseguido”.
horitas de clase de pintura y dibujo, pero interés ofrecen sumas irrisorias: no hay
no me han llamado de colegios ni nada”. manera de que pueda derivar su sustento
Acompañado por el sonido de su radio,
de la pintura. Óscar no ha dado su brazo
que asoma de una repisa de madera que
a torcer, y aunque su situación económica
asemeja un palomar, disfruta plenamente
Óscar Enrique Redondo: pintor, está muy lejos de ser desahogada, aparta
de su reciente reencuentro con la pintura.
escultor y tallador en madera siempre unos cuantos pesos de cualquier
Además de hacer bodegones de flores y
En el taller que tiene en el patio de su ingreso que reciba para comprar materia-
frutas, porque “es lo que se vende”, pinta
casa, bajo un enorme árbol de níspero y les: la suya es una pintura contra todos los
lo que más le gusta: rostros, pescado-
rodeado de sus trabajos, sus herramien- pronósticos. Por otra parte, ambos artistas
res recortados contra el mar, mujeres y
tas, sus libros y su dálmata de ojos azules, expresan su tristeza por la desaparición de
hombres en primer plano con expresiones
Óscar Redondo pasa los días dedicado a la Escuela de Bellas Artes de Santa Marta,
cotidianas. Cuando no está pintando,
pintar. Aclara que la pintura no ha sido que ha dejado a las nuevas generaciones de
Óscar se mantiene ocupado repasando
siempre su prioridad, pues al salir de la artistas huérfanas de un lugar dedicado a
los libros de su tiempo de estudiante en
Escuela de Bellas Artes se dedicó sobre la enseñanza y el estudio del arte.
Bellas Artes.
todo a la escultura y la talla en madera,
172
Ficha 11 La esquina y su tienda como lugares de encuentro

política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
Tienda “La Ocasión”.
Fotografía de Luis
Miguel Marín
RE

a m b i e n ta l
de ellos, necesariamente debía pasar por

Raiz
la tienda.
RA

Como los testimonios lo indican, los adul-


tos que en su niñez y juventud disfrutaron
de las esquinas y sus tiendas como espa-

urbana
cios de socialización, registran en ellas

Raiz
cambios de no poca monta en tiempos
RU
más recientes. Es indudable que las es-
quinas conservan parte de la vitalidad de
Las esquinas –y sus tiendas– han sido Óscar Camargo, quien creció en la calle antaño, pero su primacía como lugar de

Raiz socio-
c u lt u r a l
tradicionalmente un lugar privilegiado de 7, resalta la importancia de la esquina en reunión se ha visto menoscabada: “Ahora
encuentro y reunión para pescaíteros y su niñez y adolescencia: “Nos reuníamos muy poco se concentran en esquinas, no
pescaíteras por igual. Ahír “Papa” del Va- en la esquina a mamar gallo. Éramos como antes”, observa al respecto Óscar
lle y su hermana, Libia del Valle, hijos del bastantes, todos los pelaos del pedazo, Camargo. La seguridad es en este punto RC

legendario tamborero Pedro “Te Veo” del a hablar ahí en la tienda. Comprábamos una preocupación primordial, como lo
Valle, fallecido en 2011, traen a colación que la gaseosa o que los panes, que los reconoce Ahír del Valle: “Sí se ve [departir

histórica
los recuerdos de su juventud: pudines. Nosotros los de por aquí nos a las personas en las esquinas], pero no
reuníamos en esta esquina, sobre la 7 con como antes; hay grupitos mínimos. Ahora

Raiz
Antes todos los pelaos del barrio se reunían 9.a [la esquina de la Alegría]. Esa tienda ya muy poco, ya se sientan con miedo que
en la esquina, ese era el sitio de reunión de ha tenido varios nombres o dueños, que vaya a venir una moto o un tiro y lo mate. RH
los pelaos. Se hacían gremios, a jugar fútbol, Capella, después Nacho, y al frente era la Eso antes no pasaba”. Su testimonio refleja
a jugar cartas o macana. De ahí salían los esquina de la señora Irene [hoy estanco los temores que han enturbiado la rela-
novios, los enredos, las comparsas; ahí se
Los Reebok], la tía de los Manjarrés”. 2 ción de los habitantes con sus esquinas:
formaban los campeonatos y los equipos
Óscar también recuerda otras tiendas “Hoy en día a nadie se encuentra uno en
de fútbol. Antes uno se podía sentar en una
esquina y tú bebías, gozabas, se echaban emblemáticas en el sector: “Donde es hoy la esquina. Es muy peligroso, los que se
cuentos toda las noches. Eso iba llegando la Clínica La Castellana estaba La Fe, y reúnen ahora en la esquina los amenazan
uno, se iba parando el otro, cuando ibas a más arriba estaba La Mano Poderosa, grupos de limpieza: ya no pueden ver
ver ya habían quince personas. Y se hablaba que era como de cristianos”. Así, pues, los pelaos en las esquinas, que porque de ahí
de política, de todo, y se terminaba jugando. grupos de amigos de las diferentes calles salen los ladrones”.
Ya no se puede, la juventud de ahora ya no tenía su tienda o su esquina de cabecera,
es la de antes, nosotros nos sentábamos – tal como lo señala el propio Óscar: “En Pese a las fundadas preocupaciones de
hombres y mujeres– en la esquina, no había esas esquinas siempre nos concentrába- muchos habitantes, la esquina mantiene
ni drogas ni peleas. Pasaba [el vendedor de] mos; las demás calles, en las esquinas de todavía su condición de espacio de con-
la yuca, el bollo, y uno [le decía]: ‘Ey, ven
sus pedazos”. fluencia y reunión, gracias a la presencia
acá’, y se compraba uno el bollo, se com-
continua de viejos y nuevos actores. Los
praba de todo […]. Antes no había celular,
entonces era: ‘Ey, ven acá, te espero en Mi Justamente la tienda de Irene, menciona- mototaxistas, a la espera de pasajeros o
Tesoro’, esa era una tienda. También estaba da en el testimonio de Óscar Camargo, en sus momentos de descanso, se instalan
La Finquita, La Catalana, Te Sigo Esperan- es la misma tienda de esquina en la que en esquinas como la de la calle 5 con ca-
do, Donde Pudín, El Tuche Rojo, Piso Alto, los beisbolistas de Las Estrellas de la 7 rrera 9.a, junto al puesto de salud, o la del
La Esplendorosa, Mi Buenos Aires; todas mataban el tiempo y departían con sus parque de San Martín en el costado de la
esas eran tiendas de esquina. En la tienda amigos, tal como lo cuenta Armando Dá- cancha polideportiva. También es posible
era donde se formaba la recocha, se com- vila, antiguo integrante de la novena.3 Allí observar grupos de adultos que se reúnen
praba la gaseosa, se jugaban o se apostaban tomaban refrescos, repasaban los juegos en torno a diversos juegos de mesa, como
las cervezas, se jugaba dominó. Les fiaban a y conversaban de lo divino y lo humano. la macana o el parqués: sacan sillas y
los padres de uno [risas]. Las tiendas hacen
Si alguien necesitaba hablar con alguno mesas a la calle y pasan horas enteras
cartones, un vale: ‘¡Anótale a mi papá ahí!’.1
con sus contertulios de siempre. La venta
2 Óscar Camargo, vecino de Barrio Norte. La entre- de fritos, ya sea en vitrinas móviles o con
1 Ahír y Libia del Valle, vecinos del barrio de Pescaíto. vista para la elaboración de esta ficha fue realizada estufas para freír en presencia de los com-
La entrevista para la elaboración de esta ficha fue en abril de 2016.
Armando Dávila. Entrevista: abril de 2016.
pradores (generalmente en las mañanas),
realizada en abril de 2016. 3

173
Planos Vivos
Pescaito
Pescaíto:

Las tiendas de
sociocultural

esquina como lugar


dimensión

de encuentro.
Fotografías de Luis
Miguel Marín
tienda como lugares
La esquina y su

de encuentro

es otra de las actividades que animan las Las tiendas de esquina poseen dos espa- líquido”.4 Algunos establecimientos bus-
esquinas: ¿qué mejor pretexto que una cios claramente diferenciados, pero que can atraer personas a través de potentes
arepa de anís o de huevo, un buñuelo, una congregan por igual a los pescaíteros y las picós, pero otros prefieren ser cataloga-
empanada, un patacón relleno, una cari- pescaíteras: dos como tiendas en sentido estricto y
mañola o un dedito de queso para entrar no como cantinas, como en el caso de
en conversación con vecinos y pasantes? >> Espacio interior: Las tiendas siempre la tienda de Carmenza Suárez: “Aquí no
tienen accesos por ambos costados hacia ponemos picó ni nada de eso; los fines de
Ahora bien, son las tiendas o panaderías un espacio interior, rectangular, enmar- semana solo abrimos hasta las diez.”
de esquina las que mejor han sabido pre- cado por los accesos y por las vitrinas
servar el antiguo gusto por el encuentro de venta. Las personas entran a comprar David Penny Tovar es un señor de edad
esquinero con propios y extraños. Bien diferentes cosas y aprovechan para ver que, según sus vecinos, “se la pasa en la
vale la pena examinar brevemente sus televisión, leer los titulares del periódico tienda haciendo na”. Al ser preguntado
principales características y resaltar los y comentar los acontecimientos más sobre la fidelidad incondicional que le
elementos que las hacen tan atractivas. recientes con los vecinos que allí se profesa al lugar, responde lo siguiente:
encuentran. Las tiendas más espaciosas “¿Que por qué me gusta ir a la tienda de
también ofrecen mesas y sillas en el inte- la esquina? Porque los estaderos ya están
Fisonomía y atractivo de la tienda o rior, para que la gente se siente cómoda- lejos, están por allá en la 30. Además se
panadería de esquina mente y converse con sus amigos. armaban muchas peleas. En cambio en
Las tiendas de barrio y panaderías, sobre las tiendas de la esquina uno toma con
>> Espacio exterior: Se trata de un espacio
todo las esquineras, tienden a congregar a la gente del barrio y no pasa nunca una
en forma de L, generalmente cubierto
los habitantes del gran Pescaíto, máxime pelea. Por ejemplo, ahí llega el compadre,
por un parasol, con bancas de madera o
cuando poseen algunas de las caracterís- llega prácticamente la familia y los ami-
concreto y algunas sillas y mesas Rimax.
ticas que invitan a sus clientes a perma- gos […]. Uno va allá hasta para comentar
Algunas tiendas tienen un muro que
necer por un tiempo prolongado. Cabe las noticias. Lo mejor son los fines de
delimita el espacio, y que a la vez sirve
destacar, en primer lugar, el techo alarga- semana, porque se llena más”.5
de asiento a las personas. Otras tiendas
do que bordea la tienda de esquina y que
tienen el piso elevado para prevenir
genera una especie de terraza. Las sillas Las tiendas de esquina buscan asegurar la
inundaciones, que se convierte así en
o los bancos en el exterior son ideales lealtad de sus habitués de diferentes ma-
lugar para sentarse desde la calle: es sin
para las conversaciones entre adultos. Si neras, tal como lo explica el propio David:
lugar a dudas el sitio más apetecido por
la tienda o panadería tiene muros o pisos “Ellos buscan la forma de vender: le ponen
los más jóvenes. Algunas tiendas plantan
altos, estos se transforman en el asiento el parasol, las sillas... Cuando hay partidos
árboles en el espacio exterior para que le
perfecto para los jóvenes. Si además está buscan la forma de poner televisor, para
den sombra y frescura al lugar.
bajo la sombra de un árbol, se convierte que la gente vea, compre cerveza y uno
en el espacio fresco ideal. Para rematar, si Carmenza Suárez, quien atiende uno de comente […]. Ellos también le fían a la
la tienda pone música, seguramente atrae- estos negocios en la calle 6 con carrera gente que saben que tienen sueldos fijos;
rá grupos de adultos y jóvenes dispuestos 8.a, señala que sus clientes “se quedan sen- entonces por eso la gente va diariamente
a pasar el rato. Las tiendas de esquina tados afuera por costumbre. Los fines de a comprar las cosas”.
más populares son las que se encuentran semana es cuando más se llena la tienda,
en las vías de mayor flujo peatonal y vehi- sobre todo por la noche. Cuando esta toda
cular, como las de la carrera 5.a, la calle 6 esa gente afuera, lo que más se vende es 4 Carmenza Suárez, vecina del barrio de Pescaíto. La
y la carrera 11. entrevista para la elaboración de esta ficha se reali-
zó en abril de 2016.
5 David Penny Tovar. La entrevista para la elabora-
ción de esta ficha se realizó en abril de 2016.
174
Ficha 12 Cocinar y comer en Pescaíto

política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
La tradición culinaria de Pescaíto ha sido RE
transmitida de generación en generación
alrededor de los fogones de leña, dentro

a m b i e n ta l
de los patios, en las cocinas. Cocinar en
casa y comer en familia, sin apuros, es

Raiz
una de las costumbres de mayor arraigo
en el sector. En torno a la comida, a su RA
preparación y consumo, se refuerzan
constantemente los vínculos familiares y
comunitarios. La cocina tradicional cons-

urbana
tituye un auténtico crisol de culturas, en el

Raiz
que es posible identificar contribuciones
indígenas, africanas y europeas. Entre la RU
infinidad de refrigerios, viandas y platos
que constituyen el patrimonio culinario

Raiz socio-
de Pescaíto, cabe mencionar, entre otros,

c u lt u r a l
el arroz de coco, el 
bistec de jurel, la are-
pa de queso, el arroz de camarón, la sierra
frita, la yuca cocida, el salpicón de pesca- RC
do, el plátano cocido, la sopa de pescado,
el 
guineo verde cocido, el bollo limpio,
La sola mención del maíz despierta en los Las carretas de venta
el cayeye (puré de guineo verde cocido)

histórica
hermanos Ahír y Libia del Valle recuerdos ambulante: parte
el bollo de yuca, el arroz de maduro, el integral del buen
vívidos, asociados a la memoria su padre,

Raiz
plátano melao, el 
bollo de queso, el arroz comer en Pescaíto.
el legendario tamborero Pedro “Te Veo” del
de bonito y el buñuelo de fríjol. Fotografía de Gabriela
RH
Valle: “Se sancochaba el maíz y mi papá Díaz Montealegre
tenía un mesón en el patio y allá ponía el
El maíz es el aporte indígena por excelen-
molino. Mi papá nos hacía las arepas, los
cia, y bien puede ser considerado como el
bollos y la cuajadera con el maíz, y tenía
rey de la cocina pescaítera. Lourdes Ruiz
también una hornilla en el patio y hacía
Ureche, a quien los vecinos le reconocen bollo de yuca no pueden faltar en la mesa.
pan”.3 El funche es otro de los platos que
una sazón excepcional, nos cuenta al La memoria culinaria de los hermanos
les viene a la mente: “Mi papá compraba la
respecto: “Moler el maíz… todavía algunas Del Valle también tiene un espacio reser-
harina de maíz y le echaba tomate, cebolla,
familias lo hacen, aunque ya eso lo ven- vado para el tubérculo insigne del Caribe:
ajo, aliño, condimento, y la ponía al fogón
den por kilo, ya viene preparado. Entonces “Papá sancochaba la yuca, la molía y la
como si fuera un pudín salado con con-
ahí se repartían los muchachos de la casa: amasaba, hacía las rosquillas y las fritaba;
dimento. Se hacía en caldero, le echaban
‘Hoy le toca a fulano moler el maíz’, y le después les echaba azúcar”.
grasa al caldero. Quedaba al aire libre y
brindaban el agua de maíz, se la peleaban.
hasta que no se endureciera, no se partía
El agua donde se cocina el maíz decían El guineo, por su parte, constituye la con-
[…]. Mi mamá y nosotros los hermanos ayu-
que era muy refrescante y se tomaba en tribución africana por excelencia a la dieta
dábamos ahí”. En su recuento, los herma-
las tardes; todavía se usa. Un día me rega- pescaítera. Libia del Valle recuerda en
nos Del Valle no pueden dejar de mencio-
laron una botella de agua de maíz, azúcar particular la colada de guineo verde: “El
nar la hojaldra: “Una arepa de maíz que
y hielo, heladita, fresca, fresca: era refres- guineo verde se hacía en tajaditas y se po-
queda tostada; parece pizza. Uno la estira,
cante”.1 Carlos Urbano, vecino de Barrio nían a secar en el techo, al sol; después se
la amasa como si fuera a hacer pizza, se le
Norte y jugador de dominó en la esquina molía y se hacía una colada con eso. A eso
echa azúcar y se la come”.
de Francisco Martínez, asocia siempre el se le echaba leche de vaca”. Su hermano
maíz con la cuajadera, un mecato (me- Ahír añade: “Mi papá lo ponía a secar en
La elegía al maíz no puede relegar a un
rienda) que comían con frecuencia en su el techo una semana, hasta que quedaba
segundo plano a la yuca, otro de los apor-
casa: “[Es una] masa de maíz con clavo de sequito, después lo molía con la canela en
tes indígenas fundamentales a la cocina
olor y dulce. La metían en el horno y era el molino y quedaba una harina, y con eso
pescaítera. La yuca cocida y sobre todo el
como una tortica”. 2 se hacía la mazamorra de guineo verde,
leche y azúcar. Aquí una la comprábamos
ta para la elaboración de esta ficha fue realizada en en harina y la otra líquida. Se le decía
1 Lourdes Ruiz Ureche, vecina del barrio de Pescaíto, mayo de 2016.
leche peona o leche senda”. A esta prepa-
55 años de edad. La entrevista para la elaboración 3 Ahír y Libia del Valle, vecinos del barrio de Pescaíto.
de esta ficha fue realizada en mayo de 2016. La entrevista para la elaboración de esta ficha fue ración, recalca Ahír del Valle, la llamaban
2 Carlos Urbano, vecino de Barrio Norte. La entrevis- realizada en abril de 2016. también mazamorra de guineo.
175
La venta de fritos
de fogón, en la que
se fríe en frente de
los compradores.
Planos Vivos

Fotografía de Gabriela
Díaz Montealegre
Pescaito
Pescaíto:

sociocultural
dimensión

Otro plato de guineo muy popular es el nada, pero antes yo servía el almuerzo y moscada, de leche, de tamarindo. Es como
cayeye, que las personas mayores conocen ponía a hacer la comida”. decir los bolis ahora, pero esas bolsas
como mote de guineo. Lourdes Ruiz Ure- plásticas no existían. Y bollo’e yuca con
che describe así su preparación: Si bien la comida casera ha sido altamente panela melcochada: uno compraba las dos
e iba mordiendo de uno y del otro. Cocada
valorada en Pescaíto desde siempre, sus
comer en
Cocinar y

Pescaíto

arrancamuelas, alfajores que venían en


Se cocina el guineo verde, en suficiente habitantes no han dejado de rendir tributo
forma de triangulitos con pimienta –el
agua. Luego se panga [aplana] el guineo, se a las especialidades que pueden conseguir alfajor de aquí no es dulce–. Cuajadera,
le echa buena mantequilla y punto de sal, en negocios reconocidos o en sus esqui- almojábana, pan de yuca: todo eso era el
hasta que quede una especie de puré, y se nas de confianza, tal como lo atestigua mecato de antes.
reparte rociándole queso. Se come preferi-
Carlos Urbano: “Había sitios de renombre,
blemente en los desayunos con chocolate
como La Morita; era un teatro y allá ven- Mención aparte merecen los fritos en Pes-
en leche. Hay personas que acostumbran
cuando hacen el mote [puré] ponerlo en un dían arepas asadas y carimañolas, avena caíto: cada esquina o frente de casa puede
plato hondo y echarle el café de leche o el Marsol. Entonces, como tenían renombre, transformarse en punto de venta. En líneas
chocolate. Queda como una mazamorrita la gente iba. Antes también había venta de generales son dos los tipos de venta que
o colada. Una delicia. Lo rico del cayeye pastel envuelto en hoja, había de masa y pudimos identificar en la investigación: por
es echarle un punto de vinagre. Algunas de arroz; el de masa tenía cerdo o carne un lado, las ventas en horas de la tarde y de
personas le dicen revolcado con el café, molida. La abuela del Pibe hacia carima- la noche, en vitrinas de bombillo o carritos
pero es una forma folclórica. ñola y la empanada, y él los vendía; todos ambulantes; por el otro, la ventas de fogón
vendían lo que hacía la señora Clementina en las mañanas, particularmente frente a
En lo que se refiere al guineo madu- y la señora Nacha”. los colegios, en las que se frita en presencia
ro, Carlos Urbano guarda recuerdos de los compradores. Niños y jóvenes se
imborrables: “Se pelaban y la mamá de Es evidente que los niños y las niñas han desviven por los fritos, tal como lo refiere
uno lo mandaba a que los montara en el hecho parte importante de la tradición Liliana Galván, vecina del barrio de Pescaí-
techo de zinc. Pasaban allá una semana culinaria en Pescaíto, en tanto ayudantes to, al comentar la fascinación de sus hijas
hasta que el sol los secara bien sequitos. de cocina, mandaderos y vendedores, por la comida rápida pescaítera: “A ellas les
Después se juagaban con agua’e panela y como lo confirma el testimonio de Lour- gusta mucho las salchi [salchipapas], las
se comía de mecato”. des Ruiz Ureche: más buenas son dizque de la 6 con 13. [Si]
por ellas [fuera], se las compraban todos
La forma de cocinar se ha transformado Mi mamá me llamaba a ayudar con cosas los días”.4
a la par que el sector, y sus cambios en sencillas: ‘Frite las tajadas, dé la vuelta
el tiempo permiten seguirles el rastro a a esto’. Mis hermanos iban al mercado
las fases del desarrollo urbano. En este también; aquí mi mamá mandaba por Tiempos y lugares
sentido, los recuerdos de Lourdes Ruiz turnos, un día uno y al otro, otro. En esos
tiempos se comía muy bien, era como más El desayuno en Pescaíto suele ser servido
Ureche constituyen el mejor de los testi- temprano, entre las seis y las siete de la
sana la comida; uno antes se dedicaba más
monios: “Primero se cocinaba con leña, mañana, aunque en los hogares en los que
a hacer un buen desayuno. Ya la gente se
y llegó el fogón de candela o querosene viven estudiantes de colegio de la jornada
acomoda, ves tú los restaurantes llenos, la
o gas. Después entonces trajeron las gente no cocina. Mi mamá le mandaba el de la mañana, que empieza hacia las
pipetas, las bombonas de gas propano: desayuno a mi abuela, y yo se lo tenía que seis y media, el desayuno tiene que estar
un burrito venía, un señor en burro; le llevar, o cuando preparaba algo delicioso listo aún más temprano. Sully Castañeda
llenaban a uno una botella, y valían qui- se lo mandaba. declara enfáticamente: “Aquí en la Costa
nientos pesos. ¡Era mucho en esa época! no se desayuna que un pancito con un
Llenaban botellas de litro de vidrio por En cuanto a la comida preferida por los cafecito, ¡aquí desayunamos salaooo!”.5
doscientos pesos; hasta las laticas donde niños y los jóvenes de antaño, el mismo
vendían manteca las llenaban”. Con pos- Carlos Urbano recuerda que
terioridad, agrega Lourdes, se difundió la 4 Liliana Galván, vecina del barrio de Pescaíto. La en-
trevista para la elaboración de esta ficha fue realiza-
estufa eléctrica en el sector: “Se cocinaba en esa época vendían paletas; le decían da en marzo de 2016.
con estufa eléctrica y era muy lenta; eso mantecado y venían en cubetas de alumi- 5 Sully Castañeda, vecina de Barrio Norte. Entrevista:
es ahora con el gas que no se demora nio: era como helado de chocolate, de nuez mayo de 2016.
176
La venta de fritos en
vitrina de bombillo.

política
Fotografía del equipo

Raiz
de Planos Vivos

RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA
No es ninguna exageración: en Pescaíto, rutinas de los habitantes las que marcan Por regla general, la terrazas o los frentes
un desayuno típico puede incluir bollo hoy los ritmos del almuerzo. de las casas no cuentan con una mesa:
limpio o bollo de queso, cayeye, arepa las personas simplemente se sientan con

urbana
de masa, yuca, plátano o guineo verde En Pescaíto se suele cenar temprano, su plato y se lo ponen en las rodillas o lo

Raiz
cocido. El desayuno va acompañado de entre las seis de la tarde y las ocho de la mantienen en una de las manos.
jugo, avena (fría o caliente) o batido de noche, aunque en últimas la hora depende RU
arroz. El café (con leche o en agua) ha sido de las jornadas laborales y los hábitos de
y sigue siendo una parte integral no solo cada familia. Las hijas de Liliana Galván, Compartir comida en Pescaíto

Raiz socio-
del desayuno, sino de la rutina diaria de por ejemplo, suelen cenar antes de que En Pescaíto, las viviendas suelen pasar

c u lt u r a l
los pescaíteros, tal como lo señala Libia caiga la noche: “Es más que todo bollo’e de generación a generación, así que no es
del Valle: “La cuestión del café o el tinto masa o de queso, patacón, arepa, mote, de extrañar que muchos pescaíteros vean
no fallaba. Todas las mañanas se hacía el cayeye con ahogado: a ellas les encanta a sus vecinos como parte integral de la RC
café hervido, se colaba el asiento del café, con eso y ya. La sirvo normal, a las seis o propia familia. Una tradición que honra
se envasaba en termo y todo el día pasaba seis y media”. y fortalece este lazo es la de compartir la
la gente tomando tinto. Es una tradición, comida con los vecinos y los amigos de

histórica
también, que los vecinos se encontraban En lo que a los espacios concierne, el la cuadra; un gesto de amistad y cari-

Raiz
y se ofrecían café: ‘Un tintico, vecino, ¡con patio fue durante mucho tiempo el sitio ño que era todavía más frecuente en el
pan de sal!’ ”. privilegiado para moler el maíz, cocinar pasado, cuando las cercas de los patios RH
y comer. Incluso después de que la cocina eran bajas y favorecían el contacto. Doris
En Pescaíto se solía almorzar con puntua- fuera integrada a la vivienda, algunas Villar recuerda junto a su vecina de toda la
lidad británica, en aquellas épocas en las familias conservaron en el patio un fogón vida, Elvia Arango, el vivo intercambio de
que buena parte de los hombres trabajaba (de leña, carbón o gas) para algunas pre- comida a través de la cerca de sus patios:
para el ferrocarril o el puerto. Tenían paraciones, como los dulces de Semana “Antes eran cercas de palo. Las mamás de
horarios estrictos de entrada y salida, y Santa, o para algunos productos destina- nosotras se pasaban los platos de comida:
la pausa del mediodía estaba igualmente dos a la venta. Todo aquello que tomara ‘Que mira que preparé la arepa de huevo
regulada: los trabajadores podían salir a mucho tiempo o exigiera mucha lumbre que te gusta. Que mira que hice esta sopita
almorzar a sus casa a las doce en punto seguía siendo preparado en el patio, al pa que pruebes’ ”.6 Hoy en día los vecinos
y debían regresar al trabajo a las dos de menos en aquellas casas que contaban suelen pasarse la comida por el frente de
la tarde. Así lo confirma Lourdes Ruiz todavía con este espacio. sus viviendas. Desde las terrazas se oye
Ureche: “Antes el horario de los almuerzos gritar con frecuencia: “¡Ey, una olla ahí pa
eran precisos, por lo menos yo me acos- Ahora bien, si el traslado de la cocina darte sopa!”.
tumbré a eso. Aquí los desayunos eran al interior de la vivienda transformó en
temprano, el almuerzo a la hora precisa, buena medida la preparación cotidiana de Las festividades de Semana Santa y de fin
a las doce en punto. Acá, por lo menos, a alimentos, no modificó sustancialmente de año son ocasiones en las que la genero-
mi papá había que ponerle sus comidas su consumo: los pescaíteros y las pescaí- sidad a la hora de compartir la comida es
a tiempo. A las doce del día ya sabía uno: teras siguen favoreciendo el exterior de proverbial, tanto como los cumpleaños de
‘Ay, ya viene mi papá’, cuando sonaba el sus casas para comer. (No en vano, nin- los niños: “Cuando un niño cumple años
pito del puerto, aunque él no trabajaba guna de las personas entrevistadas utiliza se hace una vaca entre los familiares, coge-
en el puerto”. El pito del puerto, en efecto, en el día a día la mesa del comedor para mos y ponemos todos para pudín, gaseosa.
dio durante mucho tiempo la campanada tomar sus alimentos). En consonancia con Se le canta el happy birthday y se toman las
que anunciaba la hora de almuerzo para las transformaciones socioeconómicas, fotos […]. Tú haces una fiesta y aquí no se
todo Pescaíto. El declive de la actividad urbanas y culturales que orientaron a bota a nadie; el que llegue se le atiende y
ferroviaria y los cambios en la relación los habitantes de manera más acentuada participa: hay comida pa todos”.
del puerto con el sector no dejaron de hacia la vida de la calle, la terraza o el
manifestarse en los hábitos alimentarios: frente de la casa constituye hoy en día el
la puntualidad del mediodía es cosa del lugar donde muchas familias desayunan,
pasado, y son las diferentes usanzas y almuerzan, cenan o toman sus meriendas. 6 Doris Villar y Elvia Arango, vecinas del barrio de
Pescaíto. Entrevista: mayo de 2016.
177
Preparación del
rasguñao de papaya.
Fotografía de Mariana
Gil Arboleda
Planos Vivos
Pescaito
Pescaíto:

sociocultural
dimensión
comer en
Cocinar y

Pescaíto

Del recetario de Lourdes Ruiz pocillos de agua con el azúcar o la panela precios y tamaños para todos los gustos
durante tres horas, destapado para que y bolsillos: siete onzas por mil pesos, diez
Ureche: rasguñao de papaya
vaya secando. Se le ponen clavitos de olor por mil quinientos y catorce por dos mil.
Compartir con los vecinos los famosos para ese saborcito. Cuando ya va estando,
rasguñaos durante la Semana Santa es una se le pone con la punta del cuchillo una
Vivía en Venezuela, y hace tres años, cuan-
auténtico mandamiento en Pescaíto, si bien pizca de bicarbonato para darle brillo. No
do llegó a Santa Marta, la competencia de
algunos vecinos afirman que la tradición debe quedar como una cocada, no como
un cabellito, no se debe pasar de punto de
vendedores de frapés se reducía a cinco o
se ha ido perdiendo con el correr de los
cocción. Todo dulce se come frío, porque seis carros ambulantes. Ahora, según él,
años. Lourdes Ruiz Ureche nos explica qué
caliente da diarrea; se sirve con galleta de hay más de cien en toda la ciudad. Camina
son los rasguñaos: “Así se le llama a todos
soda y debe quedar mojadito, debe quedar todo el día por las calles, pero el mejor mo-
los dulces que se hagan durante la Semana
melcochudo. Se hace para repartirlos a las mento para las ventas es, de lejos, la hora
Santa; si se hacen fuera de ella, ya se le
amistades más cercanas: uno les manda el de salida de los colegios. Sale de la casa a
dice dulce”. Su variedad es impresionante: rasguñao o cuando llega visita se le da ras- la una y media de la tarde directo para el
los hay de ahuyama, ñame con leche, piña guñao. Esa tradición se ha perdido, antes Madre Laura, después camina al Lorencita
con coco, coco con leche, batata, plátano nosotras teníamos la nevera llena de dul- Villegas, a veces sigue hacia la Normal
maduro y guayaba con leche, entre muchos ces, pero ya eso no se ve tanto, la tradición
y después continúa hacia el centro. En el
otros. Las mezclas dependen del gusto de se ha perdido un poco. El resto de dulces
mercado no lo dejan vender, pero en la
quien cocina y de las recetas que aprendió son muy parecidos, aunque al de papaya es
al único que se le bota el agua, los de bata-
cancha de La Castellana sí tiene permiso.
de sus mayores, como lo explica Lour-
des: “Aprendí viendo a mi mamá; uno va ta y auyama se cocinan primero, se licúan
y siguen el mismo proceso, aunque llevan Prepara todas las mañanas los frapés
cogiendo intuición. Me motiva y me alegra;
leche. Las frutas se rayan o se licúan, no se con la ayuda de su esposa. Primero pican
me hace falta hacerlos en Semana Santa,
cortan en lonjas. Los dulces por lo general el hielo y despulpan la fruta; luego los
es una tradición”. Los dulces favoritos de
se hacen en caldero, entre más viejito licúan, el hielo primero y la fruta aparte, y
Lourdes son los de ahuyama y batata, pero mejor, porque no se pega el dulce y queda después, en la misma licuadora, mezclan
como tiene una papaya perfectamente mejor terminado. La clave del dulce es no todo: el jugo, el hielo y los ingredientes
verde en la cocina, la va aprovechar para negarle el dulce y la candela, no negarle adicionales, como el azúcar (un kilogra-
mostrarnos la preparación del rasguñao. tiempo de cocción, no negarle la leche.
mo por quince litros, más o menos) y la
Le cedemos la palabra a Lourdes:
leche (en aquellos frapés que la incluyen).
Los frapés Los clientes siempre tienen la razón: “A
Entre más verde esté la papaya, mejor.
veces lo piden mezclado, como el cliente
Inicialmente se pone a cocinar las lonjas; En Pescaíto no todo es comida. Los frapés
el agua se pone en fuego alto alrededor de mande. He intentado otros sabores, pero
son bebidas ideales para matar la sed, no: el de coco, por ejemplo, y no”. Su nego-
una hora. Luego se bota esa agua, porque
especialmente cuando el calor sobrepasa cio requiere de una inversión inicial nada
sale como lechosa, y se procede a aplicar
los 35 grados centígrados. Son consumi- desdeñable: el carro, el aviso y el parasol.
nueva agua. Se hace con panela o azú-
car; si es con panela, queda marrón, si es
dos por lo general frente a los colegios, Además tiene expensas diarias de com-
con azúcar, queda blanca. A mí me gusta pues les gustan mucho a los niños. Rafael bustible: “Necesita gasolina para mante-
con panela, se hacen más con panela. Se Laguado, vendedor de frapés, cuenta que ner frío el producto. El motor de la nevera
le echa –para una grande– dos libras y entre su surtido tiene de tamarindo, ma- funciona a partir de gasolina: cuatro mil
media [de azúcar]; depende el tamaño se racuyá, fresa y mora, pero que el favorito [pesos] para un día”. El éxito de las ventas
aplica azúcar. Si uno le niega el azúcar de la gente es el de guanábana.7 Tiene es proporcional a la temperatura: “Hoy
queda feo, es decir, se debe ser muy ge-
estuvo flojo, porque el día estuvo opaco.
neroso con el dulce. Para que quede bien,
es dulce. Se pone en fuego medio en dos 7 Rafael Laguado. La entrevista para la elaboración de Ayer, que hizo esa calor, lo vendí todo”.
esta ficha fue realizada en marzo de 2016.
178
Ficha 13 Las tamboras

política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE
La tambora es, junto al fútbol, uno de los
pilares de la identidad pescaítera. Arquí-
medes Mendoza, músico de la emblemá-

a m b i e n ta l
tica tambora Te Veo, comenta al respecto:
“Lo autóctono de aquí es la tambora, lo

Raiz
que nos representa a nivel nacional e
RA
internacional es la tambora o guacherna
samaria […]. Pescaíto siempre ha sido cuna
de tamboras; la tambora samaria nació
fue aquí, en Pescaíto”.1 René Henríquez,

urbana
vecino del barrio de Pescaíto y presi-

Raiz
dente de su Junta de Acción Comunal, lo
RU
secunda: “Cuando yo oigo una tambora, a
mí se me mueve el cuerpo solo: es lo que
venimos oyendo siempre, es lo nuestro”. 2

Raiz socio-
c u lt u r a l
La historia de la tambora en Santa Marta
se remonta, según el mismo Arquímedes
Mendoza, a la llegada de los De Johng a la RC
ciudad: “Los que la trajeron fue la familia
De Johng. Ellos llegaron acá a Santa Mar-

histórica
ta y dejaron sus raíces, y sus hijos, nietos,
sobrinos, fueron los que conformaron

Raiz
la primera tambora, la de los De Johng”.
La primera generación de tamboras se RH
rigió por el canon tradicional, tal como lo
describe Leonardo del Valle, nieto del cé-
lebre tamborero Pedro “Te Veo” del Valle:
“La tambora más tradicional, la tambora
folclórica, tiene cuatro integrantes: un
tambor hembra, un tambor macho –am-
bos en madera–, un bombo y un guache,
que es el que le da el brillo a la tambora”.3
Adalberto Yánez Silvera, hijo del fallecido
Francisco “Matey” Yánez, fundador de
una de las tamboras más reconocidas de
Pescaíto, añade al respecto: “Esa tam- gaita, el clarinete, el saxofón o la caña de Tambora samaria en
bora era muy animosa, tocaba sin pito, millo que acompaña los tres tambores y el Carnaval Infantil.
¡dime tú, sin pito! Ahora el pito ayuda el guache. “A veces una flauta, pero esa la Fotografía de Mariana
Gil Arboleda
mucho a la tambora; bastante, porque le utilizan más en Barranquilla; lo que más
da las notas”.4 Leonardo del Valle señala se usa acá es el saxofón y el clarinete”,
que fueron las tamboras de la segunda explica el nieto de Te Veo.
generación, muchas de ellas pescaíteras,
las que incorporaron el “pito”, es decir, la Arquímedes Mendoza pasa revista a las
tamboras que siguieron a la de Manuel de
Jongh: “Sigue la de Pan Viejo, que era un
1 Arquímedes Mendoza, vecino del barrio de Pescaí- señor que tenía una tienda acá en el barrio
to. La entrevista para la elaboración de esta ficha fue
realizada en febrero de 2016.
y tenía su tambora; le decían Pan Viejo.
2 René Henríquez, vecino del barrio de Pescaíto, 50 Después la de Te Veo, que se llamaba
años de edad. Entrevista: febrero de 2016. Pedro del Valle, pero muy poca gente lo
3 Leonardo del Valle, vecino del barrio de Pescaíto.
conocía como Pedro del Valle, y forma su
La entrevista para la elaboración de esta ficha fue
realizada en marzo de 2016. tambora con el señor Germán Hernández,
4 Adalberto Yánez Silvera, vecino del barrio de Pes- el primer cantante que grabó un acetato
caíto. La entrevista para la elaboración de la ficha
de música de tambora con tromba sama-
fue realizada en febrero de 2016.
179
La tambora: una
herencia para las
nuevas generaciones.
Fotografía de Mariana
Planos Vivos

Gil Arboleda
Pescaito
Pescaíto:

La primera generación de tamboras


sociocultural

pescaíteras gozó desde un principio de


dimensión

gran éxito y reconocimiento. Arquímedes


Mendoza relata cómo a los músicos de Te
Veo “los vincularon a la empresa Puertos
de Colombia. Entonces cualquier evento
de la empresa, ellos iban con su tambora
y representaban a nivel nacional. Fueron
a Bogotá y a Medellín con la tambora, a
Las tamboras

encuentros portuarios y esas cuestiones.”


Adalberto Yánez recuerda cómo su casa,
ubicada en la calle 6 entre carreras 9.a y
10.a, era epicentro de la celebración de fin



de año: “La tambora animaba mucho; los


31 de diciembre se hacía una cumbiam-
ba aquí, en la puerta de la casa. Hacían
sancocho; la tambora la ponían el 31 de
diciembre, después de que todo el mundo
se felicitaba y eso, ya entraba el 1.o de enero,
ria. Es una voz prodigiosa que interpreta- Arquímedes Mendoza agrega al res- entonces se iba aglomerando aquí la gente,
ba las canciones: solo tamboras y él, sin pecto: “Pitán pitán es el ritmo, porque y las mujeres con velas, bailando. Eso era
ningún otro instrumento. Y luego viene la el [tambor] alegre va así: ‘pitán pitán’, muy bonito, no había pavimento ni circula-
de Matey, los Miranda y Yoni Viti, el Rui- el golpe dice ‘pitán pitán, pitán pitán’ ”. ban carros; cuando eso, esta no era la calle
señor de la Botella. En su estudio sobre la En palabras de Arquímedes Mendoza y principal”. El mismo Adalberto refiere así
tambora samaria, hecho en colaboración Leonardo del Valle, dentro del pitán pitán los orígenes del conjunto de su padre, una
con el folclorólogo y coreógrafo Roosevelt cabe distinguir: de las tamboras insignes en Pescaíto:
González, el antropólogo Mauricio Pardo
Rojas escribe: >> La tambora sentada: “Es un ritmo de La tambora primera inicia con mi papá,
pitán pitán, pero suave, armónico; se Matey. Matey es el apodo; él era Fran-
En un hecho peculiar en el contexto de los mantiene el goce, lo chévere, no va ni cisco Yánez y la tambora inicial estaba
grupos de tambores en la Costa, a finales rápido ni lento, va en un medio bacano”.
 conformada por Hipólito Yánez, William
de los 40, en el barrio Pescaíto, tamboras Méndez y Vitico Delgado (Yoni Viti). Esos
entre las que estaban las de Manuel de >> La guacherna: “Es una tambora rápida; eran los primeros; cuando eso, no había
Jongh, la de Francisco “Matei” Yanes y Juan el pitán pitán, pero rápido. Es lo más pito. Esa tambora duró con el viejo como
Brito, la de Rafael Antonio “Candelilla” rápido que se toca; es una danza pa veinte años en ejercicio [...]. Él empezó
Toncel, comenzaron a incorporar éxitos bailar rápido”. por ahí como en el año 50 hasta el 70.
discográficos, entre ellos los merengues La única tambora que iba al club social,
dominicanos de Ángel Vitoria y los temas >> La chalupa: “Es de los pueblos ribere- donde está la élite: la cremallera de aquí
más difundidos de las orquestas costeñas ños; es un aire no muy rápido, pero va de Santa Marta era la tambora de Matey.
[…]. Lo hicieron al compás del ritmo local tapado con el bombo y el alegre”. Él tenía su disciplina con sus músicos; los
llamado guacherna o fandango o tambora, llevaba uniformados, en coreografía, todos
>> El porro y el fandango: “Más relativo
que por su tempo tiene una versatilidad por lo menos iban en guaireñas y –por
a la papayera, porque tiene que llevar decir– con bluyín, camisa multicolores y
para adaptar diversas músicas […]. Desde
hace unas cuatro décadas, inicialmente en redoblante, que es lo que da ritmo de sombrero de esos vueltiaos.
los barrios Pescaíto, Los Troncos y Cundí fandango, y lo mismo con el porro”.
los percusionistas en el tambor alegre >> La cumbia: Conjuga el tambor llamador, Otro personaje destacado en la historia
implementaron una ejecución más vívida de la tambora de Pescaíto es Juan Brito,
el tambor alegre, la tambora (bombo),
de este ritmo, al cual se refieren con la tal como lo recuerda Adalberto Yánez:
la caña de millo o las gaitas macho y
onomatopeya “pitán pitán”. Este ritmo es “Juan Brito era el mejor repicador; era un
diferente de los aires homónimos llamados
hembra, las maracas y el guache.
africano y él mismo fabricaba su tambora.
fandango en Córdoba y Sucre, y guacherna
No maltrataba el tambor, y uno sabía que
y tambora en el río Magdalena.5
él la estaba tocando, él mismo armaba su
tambor y lo pulía y lo dejaba bien templaí-
5 Mauricio Pardo Rojas, “Localidad y cosmopolita- Colombia. Traslaciones, legitimaciones e identifica-
nismo en ‘la tambora’ de Santa Marta, Colombia”, ciones. Bogotá: Universidad del Rosario, 2009, pp. to. El murió hace ya mucho, primero que
en Mauricio Pardo Rojas (ed.), Música y sociedad en 333-367, aquí p. 344. mi papá”.
180
La tambora: elemento
indispensable de

política
cualquier celebración

Raiz
en Pescaíto.
Fotografía de Mariana RP
Gil Arboleda

Raiz socio-
económica
RE

tambora de allá del estadio, por toda la

a m b i e n ta l
avenida y por la playa a pie. ¡El pavimento
es caliente! Cuando yo llegué aquí, tenía

Raiz
los pies ampollaos, pero uno no le paraba
bolas a eso, eso fue en el 68, cuando el RA
Unión fue campeón. ¡Había bastantes
tamboras en el estadio!”.

urbana
Tal como lo afirman los conocedores

Raiz
de la música tradicional del Caribe, y lo
confirman las personas que la tocan, la RU
escuchan y la bailan en Pescaíto, la tam-
bora conjuga música y baile, y desarrolla

Raiz socio-
ritmos distintivos en cada región. La tam-

c u lt u r a l
bora hace parte integral de los festejos, e
incorpora danzas con coreografías que
fueron perfeccionadas en los desfiles del RC
antiguo carnaval samario. Todo este acer-
Para cerrar este breve recuento de la etapa con la reina, y la reina bailando. Como en vo se renueva y se proyecta hacia el futuro
fundacional de las tamboras, volvemos a Barranquilla”. El declive de la industria en la labor incansable de las tamboras

histórica
citar aquí in extenso al antropólogo Mau- bananera y de la actividad ferroviaria emblemáticas de Pescaíto, lo mismo que

Raiz
ricio Pardo Rojas: redundó en el estancamiento del carnaval en la enseñanza de la tradición musical a
samario, lo que a su turno tuvo repercu- las nuevas generaciones. RH
Cuando la primera generación nacida en siones importantes en las tamboras. En
los barrios obreros se hizo adulta, en los este punto le cedemos la palabra a Mauri-
años 40 y 50, sus referencias musicales no La tambora en el Pescaíto de hoy
cio Pardo Rojas:
eran solo ancestros de poblaciones rurales, La mayoría de las tamboras originales
sino también la música popular que proli- Con la salida de la United Fruit en 1960 siguen activas, gracias a los hijos y nietos
feraba en el Caribe, en Estados Unidos o en y la declinación del ferrocarril zonal se de los primeros tamboreros, como en los
las ciudades colombianas. Música escucha- extingue la movilidad subregional del casos de la tambora de Te Veo, la de los
da por veinte años en la radio y en los dis- carnaval y algunas de sus expresiones se hermanos Miranda, la de los Hernández
cos y con la que no tenían prejuicios para van al carnaval de Barranquilla, que para (sobrinos de Germán Hernández) y la del
incorporarla a sus repertorios en el espacio esta época era ya la principal ciudad de
abierto del carnaval y de la ciudad festiva. Cholo Valderrama, “el único Valderra-
la Costa […]. Después de los años 60, al ma que no juega fútbol y toca tambora”,
[…] Músicos veteranos y jóvenes coinciden decaer el carnaval y dejar de desfilar con
sobre la característica única del golpe como lo indica con un guiño Leonardo
los tambores terciados y al no necesitar
de guacherna samario del tambor alegre del Valle. La tambora de Matey también
instrumentos livianos, los músicos-arte-
frente a la percusión de otras partes de la sanos incrementaron el tamaño del alegre sigue activa, aunque hace tres años no
región caribeña, lo cual ha ido configuran- y del llamador y la tensión del bombo o toca, después de que le hubieran sido
do a este elemento rítmico como marcador tambora para lograr mayor volumen. Así, robados los instrumentos. Reponerlos es
identitario musical de la ciudad […].6 en el panorama actual de los tambores de muy costoso y hasta ahora no ha podido
la Costa, los samarios son los de mayor conseguir nuevos.
Los tamboreros de Pescaíto coinciden en tamaño y sonoridad.7
afirmar que la temporada de carnaval, Actualmente, las tamboras son contra-
cuando este era organizado en el centro El sonido de las potentes tamboras sama- tadas para animar fiestas privadas, el
de la ciudad, era la más importante para rias acompañó durante mucho tiempo a recorrido de las chivas rumberas y los
las tamboras. Así lo confirma el testimo- los equipos locales de fútbol que jugaban desfiles del Carnaval, así como para ame-
nio de Adalberto Yánez: “Era menester en La Castellana o en el estadio Eduar- nizar eventos en hoteles, supermercados
que la tambora estuviera preparada para do Santos. Adalberto Yánez atesora un y tiendas. También tocan en funerales, y
carnavales. Antes el Carnaval era en el recuerdo imborrable: “Cuando el Unión en los mítines políticos son imprescindi-
centro, se montaba uno en una carroza, Magdalena fue campeón, salimos con la bles. Arquímedes Mendoza comenta así
el amplio campo de acción de la tambora:
6 Mauricio Pardo Rojas, “Localidad y cosmopolitanis- “Reunión política que se respete tiene
mo en ‘la tambora’ de Santa Marta”, pp. 345 y 347. 7 Ibid., pp. 347 y 348. que llevar una tambora, porque si no,
181
La tambora:
patrimonio cultural
y seña de identidad
Planos Vivos

en Pescaíto y en
Santa Marta.
Pescaito

Fotografía de Mariana
Gil Arboleda
Pescaíto:

sociocultural
dimensión

¿cómo le va a llegar la gente? El gancho,


pues, es la tambora. Ahora se maneja la
tambora para todo, hasta para eventos
en los colegios, las fiestas prom, Carna-
val. Ahora se comercializó, acaparamos
todo lo comercial en la ciudad”. Tocan en
Las tamboras

tandas de cuarenta minutos, y cada tanda


vale alrededor de ciento cincuenta mil
pesos, es decir, unos treinta mil pesos por
tanda para cada músico. A veces el cliente



pide más de una tanda; por ejemplo, un


supermercado puede pedir cuatro tandas
durante un sábado.

Según los tamboreros entrevistados, cada


tambora tiene su identidad. Los cono- Por lo general en el grupo de tambora se talento se está perdiendo. Hay que montar
cedores no tienen ninguna dificultad en canta al unísono, todos juntos, no hay voz la casa de la cultura nuevamente. Aquí
líder como en otras agrupaciones, porque todo se está perdiendo […]. Ahora los carros
distinguir una de otra, como lo indica
por lo general son canciones de experien- con música en las comparsas; antes se res-
Leonardo del Valle: “Nosotros tenemos
cias que uno ha tenido, tanto dolorosas petaba eso, hoy en día todo es carro, carro,
ciertos cortes en ciertas canciones. De- carro. Ya no hay tamboras ni papayeras en
como humorísticas o jocosas. Y uno lo
pendiendo la música, montamos cortes; los desfiles […]. Se necesita el apoyo de la
lleva allá al tambor, plasma el sentimiento
eso nos identifica a nosotros, pero se ma- alcaldía, que dote de estos instrumentos
de uno, se desahoga y uno los canta. Se
neja la base del pitán pitán. De ahí se ha- improvisa; hay canciones también que ya a los colegios, para que se aprenda en los
cen los arreglos para las demás canciones están grabadas, por lo menos las de Checo colegios.
o los demás aires folclóricos”. Arquímedes Acosta nosotros las interpretamos, lo úni-
Mendoza declara enfáticamente: “La tam- co es que no tenemos la fusión de él, pero No hay que olvidar que el Festival de
bora es todo; yo vivo, lloro, gozo, soy feliz el pitán pitán nosotros lo tocamos igualito. Tamboras, organizado por Miguel Brujés,
con la tambora. Cuando nosotros estamos La de “Pitán pitán” de Carlos Vives tam- que contó con la presencia, entre otros
tocando, nos desinhibimos; parece que bién la tocamos; esa canción la sacó Carlos artistas, de Totó la Momposina, Germán
estuviéramos en otro planeta”. en base a la tambora, el partió de la base Hernández, Te Veo y Yoni Viti, desapa-
de la tambora samaria: mira que la can- reció por falta de fondos. Arquímedes
ción entra con el pitán pitán, de aquí es que
De la mano del mismo Arquímedes, le Mendoza subraya lo que está en juego:
parte, porque él quiso como resaltarnos y a
echamos un vistazo a la tambora de hoy:
la tambora en sí en Santa Marta.
la tambora o bombo se toca con palos de La tambora le aporta mucho a la cultura, a
madera y es el tambor más grande; hace la identidad de la ciudad. Aquí Santa Marta
las veces de bajo. El tambor macho “es se identifica en el mundo por la tambora:
Problemas que enfrentan las
el que alegra, el que adorna”. El tambor cultura, identidad y patrimonio que esta-
tamboras
mos perdiendo. ¿Qué más aporte que ese?
hembra o llamador es el más pequeño de
El principal problema que señalan los Ayuda al desarrollo social, cultural y econó-
todos y “es el que lleva la guía, la base, es
músico de Te Veo y de Matey es el de la mico, porque se mezcla: la cultura tiene que
el que entra todo el tiempo”. El guache es ver con todo; en lo religioso, en lo social,
falta de espacios y de apoyo institucional
un cilindro metálico, cerrado, relleno de en lo económico, en lo personal, en todo.
para fomentar la tradición de la tambora
semillas o piedritas, y es el que le da el Si tú apoyas la cultura, tú estás formando
en Pescaíto:
brillo a la música. El “pito”, usualmente una persona que mañana va a ser tremenda
un clarinete o saxofón, aunque también calidad de persona, generalmente hablando,
La casa cultural de aquí la acabaron. Con
se puede tratar de una gaita o una caña tanto talento que hay aquí, no podemos
pero si no lo apoyas, ¿qué esperas?
de millo, da la melodía. Finalizamos explotarlo, porque no tenemos una casa de
este recorrido a vuelo de pájaro por la la cultura que nos colabore como lo hacía
tambora contemporánea con las palabras antes, que nosotros íbamos y nos daban
de Arquímedes: los cursos de manera gratuita […]. Así como
vamos, esto se va a perder, vamos mal, el
182
Ficha 14 El Carnaval de Pescaíto

política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH

El Carnaval de Pescaíto, como sucesor de apertura de los primeros carnavales “Negrito” carnavalero.
del de Santa Marta, hunde sus raíces en samarios, leídos en 1581 y 1582. 2
 Fotografía de Mariana
Gil Arboleda
la Colonia temprana. En palabras de Raúl
Ospino Rangel, “el carnaval como fiesta Los relatos orales más antiguos se remon-
festivo-religiosa empieza en Santa Marta tan a las décadas de 1950 y 1960. Algunos
en los siglos xvi y xvii, expandiéndose de los entrevistados refieren que en esa
hacia Ciénaga y los pueblos ribereños del época existía una junta encargada de
Departamento del Magdalena. En el libro organizar la comparsa que desfilaba por
La Floresta [Floresta de la Santa Iglesia el centro de la ciudad. Tal como lo relata dos por su respectiva reina. En esas épocas
Catedral de la ciudad y Provincia de Santa Juan Gómez, los samarios compartían el tampoco existía la pretemporada: bastaba
Marta (1739), de José Nicolás de la Rosa], espacio con una multitud de comparsas con vivir los cuatro días de Carnaval a
que se puede considerar ‘La Biblia’ escrita provenientes de los pueblos del Magda- plenitud. En una época estuvo también
del periodo de la antigua Provincia de lena: “Las comparsas venían era de los abierta la posibilidad, para aquellos que
Santa Marta, se reseña que antes de 1681 pueblos, eran ellos los que traían disfraces”. tenían energía de sobra, de asistir a los así
ya existía carnaval en la ciudad sama- En aquel entonces no existía un concurso llamados carnavalitos, es decir, las fiestas
ria. Carnaval de origen europeo, traído como tal para la elección de una única que se celebraban el sábado que seguía a la
al Nuevo Continente por los españoles reina: había tantas como palacios hubiere. terminación de las festividades.
y portugueses”.1 Juan Gómez, vecino Dichos palacios no eran más que patios
de Barrio Norte y uno de los miembros en los que se instalaba un gran trono y Junto al desfile de carrozas, el otro gran
fundadores de la Fundación Carnaval se acomodaba a la respectiva cuadrilla evento del antiguo carnaval samario lo
de Pescaíto (Funcarpes), afirma que en o comitiva real. A su vez, cada cuadrilla constituían los bailes populares, organi-
el Archivo General de Indias de Sevilla tenía una virreina o capitana, disfrazada zados en patios y casetas. En el caso de
(España) están depositados los bandos de marinera. Se cuenta que las cuadrillas los bailes en los patios, los habitantes de la
podían tomarse otros palacios por asalto, u casa abrían sus puertas y preparaban su
honrarlos con una visita oficial, encabeza- patio para la parranda; vendían cerveza
1 Raúl Ospino Rangel, “¿Por qué el Carnaval del Mag-
dalena se fue para Barranquilla?”, blog Fundación y whisky, y en ocasiones carne asada o
Magdalena, entrada del 17 de febrero de 2015. Dis- fritos. El patio más representativo fue el –
ponible en http://fundacionmagdalena.blogspot. 2 Juan Gómez, vecino de Barrio Norte. La entrevista
ya desaparecido– patio de Corina, famoso
com.co/2015/02/porque-el-carnaval-del-magdale- para la elaboración de esta ficha fue realizada en
na-se-fue.html enero de 2016. por décadas hasta la muerte de la dueña de
183
Comparsas de
“negritos” y egipcios.
Fotografía de Mariana
Gil Arboleda
Planos Vivos
Pescaito
Pescaíto:

sociocultural

mido en un letargo profundo durante al-


dimensión

gunas décadas, el viejo Carnaval de Santa


Marta vive una nueva era en Pescaíto,
gracias a la iniciativa de personalidades
locales como Emel Fernández Pardo,
Alaín Manjarrés, Juan y César Gómez,
Víctor Orozco padre y Víctor Orozco hijo,
quienes conformaron la Junta Central del
Carnaval de Pescaíto en el año de 2006.
de Pescaíto
El Carnaval

Con el correr de los meses, la Junta se


dio cuenta de que carecía de los instru-
mentos idóneos para organizar un evento


de tal magnitud, por lo que sus miem-


bros empezaron a discutir la posibilidad
de reorganizarse bajo la figura de una
fundación. Quedaba un impedimento por
resolver: su presidente, Alaín Manjarrés,
se desempeñaba como edil de la ciudad,
lo que planteaba un conflicto de intereses
si permanecía como cabeza de la nueva
fundación. César Gómez afirma que ante
tal situación, Alaín propuso mantener
la figura de la junta, una opción con la
casa. En lo que se refiere a las casetas, para señala que durante los años 70 y 80 el
que varios miembros se mostraron en
que un espacio fuera clasificado como tal, Carnaval era organizado y publicitado
desacuerdo, pues implicaba “sacrificar a la
debía verificarse el cerramiento de la vía por la Alcaldía y las emisoras radiales:
comunidad a tener acceso a unos recursos
de toda la cuadra: los vecinos sacaban sus “Eso era pura recocha simplemente, y
que se necesitaban para hacer un mejor
sillas y al ritmo de una tambora reconoci- después eso se acabó. El Carnaval que
Carnaval”.6 Tal desavenencia llevó a que
da, o en ocasiones con un gran picó traído existía se estancó […]. Los Carnavales en
la Junta Central del Carnaval se dividiera;
desde Barranquilla, armaban la fiesta. En los años 70 y 80 fueron espectaculares,
una de las fracciones creó la Fundación
respuesta a las peleas y los atracos que pero empiezan a morir durante los 90”.4 El
Carnaval de Pescaíto (Funcarpes), enca-
solían presentarse, la Alcaldía expidió un estancamiento de los años 90 –que otros
bezada por César Gómez, mientras que la
decreto que prohibía el cerramiento de testimonios sitúan ya en los años 80– se
otra se mantuvo como junta, para luego
las calles. Orlando Calero, colaborador de extendió hasta mediados de la década del
convertirse en la Fundación Pescaíto
Funcarpes, recuerda al respecto: “Antes sí 2000, y entre las diferentes causas adu-
(Fundapescaíto). En el año 2007 se llevó a
cerraban las calles, pero hace mucho tiem- cidas, todos los entrevistados coinciden
cabo el primer Carnaval bajo la batuta de
po. La última caseta cerrada que yo vi fue en afirmar que la violencia jugó un papel
Funcarpes, que hasta la fecha ha conti-
por ahí en el 82, o así. ¡Uy!, eso tiene años preponderante. Una violencia asociada
nuado a cargo de su organización junto a
de no dar el permiso para cerrar”.3 Y añade: al microtráfico de drogas y la expansión
Fundapescaíto y, posteriormente, junto a
“Paysandú, ahora Donde Lola, fue la última paramilitar en la ciudad y el departamen-
la Fundación Pescaíto Dorado, creada en
que pudo cerrar, por ahí hasta el 2013. Pero to. Daniel Pinedo, vecino de San Martín,
el año de 2010 para darle vida al Carnaval
aun antes, eso de las casetas se fue aca- tiene los mejores recuerdos del Carnaval
Infantil (véase la ficha correspondiente a
bando”. Entre las casetas más reconocidas de los años 60: “Con paz las cosas eran
esta fundación y a su carnaval en el capí-
de la época cabe mencionar Paysandú, La muy diferentes, pues la fiesta se hacía en
tulo precedente).
Telaraña del Amor, Candelilla y Bailando pura caseta. Luego vino la violencia”.5
en la Sexta.
Como uno de los primeros Carnavales de Tiempos y lugares
Freddy Guerra, secretario de Fundapes- América, y después de haber quedado su-
El Carnaval tiene lugar durante los cinco
caíto y vecino del barrio de Pescaíto,
días que anteceden la celebración de la
4 Freddy Guerra, vecino del barrio de Pescaíto. Entre-
vista: Enero de 2016.
3 Orlando Calero, vecino de Barrio Norte, 84 años de 5 Daniel Pinedo, vecino de San Martín. La entrevista 6 César Gómez, vecino del barrio Pradito (en Olaya
edad. La entrevista para la elaboración de esta ficha para la elaboración de esta ficha fue realizada en Herrera). La entrevista para la elaboración de esta
fue realizada en enero de 2016. enero de 2016. ficha fue realizada en enero de 2016.
184
Las largas e intensas
noches de festejo

política
durante el Carnaval.

Raiz
Fotografía de Mariana
Gil Arboleda
RP

Raiz socio-
económica
RE

El Carnaval se vive y se siente especial-


mente a partir de las tres de la tarde: por

a m b i e n ta l
las mañanas los adultos se encuentran

Raiz
descansando o durmiendo para recupe-
rarse de las largas noches de baile y fiesta. RA
Los diferentes eventos del programa se
Cuaresma, es decir, desde el viernes ante- hacen parte de aquellos apasionados de realizan en la tarde y hasta la media
rior al Miércoles de Ceniza. A las semanas los aires tradicionales que manifiestan noche, que es la hora estipulada en los

urbana
que corren entre el 20 de enero y el co- preocupación por el relegamiento a un permisos extendidos por la Alcaldía a las

Raiz
mienzo de los festejos se las conoce como segundo plano de los ritmos autóctonos. fundaciones y a las tarimas. De ahí en
la pretemporada, y en ella se desarrollan Conocedores y gestores del Carnaval adelante los asistentes pueden seguir de RU
múltiples actividades para la preparación como Juan Gómez opinan al respecto: “El parranda en los estaderos, discotecas, pa-
del Carnaval: presentaciones en sociedad Carnaval es evolutivo y no puede esta- tios y calles. Entre los lugares que se des-

Raiz socio-
de reyes y reinas, conferencias, conversa- cionarse, no puede ser tradición: debe ser tacan tanto en los festejos oficiales como

c u lt u r a l
torios y talleres pedagógicos. La existen- sobre todo una manifestación cultural. en las fiestas y celebraciones informales,
cia de tres fundaciones independientes El Carnaval va cambiando; el deber del cabe resaltar los siguientes:
para la organización del Carnaval implica folclorista es mantener viva la tradición, RC
repetición de eventos, traslapos y cambio pero no contener la evolución. Por tanto,
Las tarimas
de fechas para procurar –en la medida de hoy en día, ritmos no tradicionales tales
Las tarimas son utilizadas para los gran-
lo posible– que los mismos eventos, orga- como el reguetón tienen total cabida […].

histórica
des eventos de las fundaciones, como lo
nizados por las diferentes fundaciones, no Los folcloristas se deben preocupar por-
son las lecturas de bando, las coronacio-

Raiz
se crucen. Todo indica que en la edición que el Carnaval tenga componentes de lo
nes de reinas, las muestras de danza o los
de 2016, por ejemplo, los organizadores se folclórico y tradicional, pero no cerrar la RH
conciertos. En palabras de Juan Gómez,
pusieron de acuerdo para que Funcarpes puerta a las nuevas cosas, nueva música,
“antes no existían las tarimas; ahora son
realizara sus eventos importantes los nuevas tradiciones”.
eventos centrales de las que debían ser
viernes y Fundapescaíto organizara los
fiestas culturales y populares”. Las tari-
suyos los sábados. Durante el carnaval se organizan los des-
mas no tienen nada que envidiarles a los
files de las comparsas, como el de la Ale-
escenarios de los grandes conciertos; son
En la antesala del Carnaval, los habi- gría o el de las Flores, acompañados en
altas, cuentan con juegos de luces y un
tantes decoran sus viviendas con cierta ocasiones por carrozas (carros, camione-
sonido potente, y suelen ser armadas en
profusión: cuelgan figuras de icopor de tas de platón o motos de carga engalana-
intersecciones o calles concurridas, como
personajes carnavaleros típicos, como la dos con adornos de fantasía). Igualmente
la esquina de la Alegría (calle 7 con carre-
Marimonda o María Moñitos, sombreros tienen lugar la coronación de las reinas
y las reinitas de cada una de las funda- ra 9.a), las esquinas de la plaza de Pescaíto
vueltiaos y carteles con alusiones a las
o la esquina cercana al antiguo patio de
festividades. La música, alma y nervio del ciones, así como las muestras de danza y
Corina (calle 7 con carrera 10). Frente a
sector, se toma por completo las calles y los concursos de comparsas sobre las ta-
la tarima son instaladas sillas Rimax, y
las casas, y saca a flote con toda nitidez rimas. Otro evento de gran tradición –en
en ocasiones los asistentes deben pagar
una de las tensiones más profundas y a versión doble– es el del reinado popular:
por su puesto. Por lo general, tal como lo
la vez más vitales en el sector: aquella cada una de las fundaciones del Carnaval
pudimos comprobar en la investigación
que se genera entre el apego a los ritmos de los adultos invita a las representan-
de campo, las tarimas son acordonadas
tradicionales y el gusto –especialmente tes de barrios como María Eugenia, 20
por la Policía.
entre los jóvenes– por los nuevos estilos de Julio, Manzanares, Nacho Vives, San
musicales. Los ritmos y géneros musicales Jorge y Santa Ana a su propio reinado.
tradicionales del Carnaval son la guacher- El martes previo al Miércoles de Ceniza La cancha de La Castellana
na, la cumbia, el vallenato y la salsa, pero se lleva a cabo el sepelio de Joselito (o en En La Castellana se realiza la Copa
en épocas recientes géneros modernos el caso del Carnaval Infantil, el adiós al Carnaval, una competición de catego-
como la champeta, el reguetón, la bachata Niño Joselito). Como en todos los demás ría abierta (cualquier persona mayor de
y la salsa choque se han ido abriendo eventos, las fundaciones rinden tributo dieciocho años puede participar) impul-
paso tanto en las tarimas y el baile popu- aquí también a la redundancia, pues sada por el actual administrador de la
lar, como en las comparsas y desfiles. Los organizan tres despedidas el mismo día, cancha, René Henríquez, y por su hijo
cultores de la tambora, tal como tuvimos aunque por calles diferentes. Jimmy. En el año de 2016 participaron
ocasión de explicar en la ficha precedente, catorce equipos barriales de la localidad
185
Comparsa infantil
en el Carnaval.
Fotografía de Mariana
Gil Arboleda
Planos Vivos
Pescaito

2 de la ciudad de Santa Marta y diversos Las tiendas de esquina


oncenos de empresas samarias. Muchos
Pescaíto:

Muchas tiendas sacan sus picós a las


de los equipos que estaban inscritos o que calles, y los vecinos se sientan alrededor
habían tomado parte en ediciones ante- de la tienda para conversar, tomar trago,
sociocultural

riores se abstuvieron de participar. Jimmy


dimensión

oír música y bailar. Las tiendas aledañas


Henríquez no duda a la hora de dar una a las tarimas cobran especial importancia
explicación: “Por ser Carnaval, como son durante las fiestas, pues se convierten en
tomadores, no se comprometen” 7. La Cor- los principales expendios de licor (no en
poración de Fútbol de Pescaíto organiza vano, las fundaciones las invitan a contri-
paralelamente una Copa Carnaval Infantil buir con los gasto de las tarimas). La única
para las categorías comprendidas entre la excepción la constituyen las tiendas en las
sub 8 y la sub 12. inmediaciones de la esquina de la Alegría,
sobre las que pesa la prohibición de vender
de Pescaíto
El Carnaval

El coliseo de Pescaíto
 alcohol hasta las diez de la noche, todo con


el propósito de proteger a los niños que
El coliseo David Ruiz Ureche es un esce-
participan en el Carnaval Infantil.


nario central tanto en la antesala como


durante las festividades del Carnaval. En genera reverberaciones que ponen en tela
él tienen lugar los bingos y las rifas para Los patios de juicio y contribuyen a transformar las
recoger fondos y financiar así el vestua- Históricamente, los patios han sido uno relaciones de poder. Las palabras de Joice
rio de las comparsas, la contratación de los lugares de fiesta de mayor convoca- Corbacho, vecina del barrio de Pescaíto,
de tamboras o el alquiler de carros con toria en Pescaíto, si bien su importancia resumen a la perfección la naturaleza de
picó, entre otras cosas. El coliseo presta se ha reducido dramáticamente en los la ‘transgresión carnavalera’: “El Carnaval
sus instalaciones para los ensayos de las últimos años. Los habitantes de las casas es alegría, desorden, colores, cambiar la
comparsas que participan en los desfiles, con grandes patios traseros los decoran rutina; es el momento para perder la pena,
e igualmente sirve de sede a diversos con banderines, instalan sillas y mesas y no hay moda, ¡es Carnaval!”.8
eventos, como la prueba de talentos de las abren sus puertas para acomodar a veci-
candidatas populares y las celebraciones nos, familiares y conocidos alrededor de La clave radica, sin duda, en la posibili-
privadas de los colegios John F. Kennedy y un gran picó. Aparte de whisky y cerveza, dad de cuestionar con un guiño burlesco
Madre Laura.
 las bebidas predilectas de los pescaíteros las normas aceptadas, todo en un marco
en época de Carnaval, los anfitriones que –por otra parte– exalta y lleva al
venden fritos, caldos y carne asada. Du- paroxismo aquellos usos y hábitos que
Las calles de Pescaíto
rante los festejos de 2016 fueron dos los son entrañables para buena parte de
Las calles de Pescaíto son el escenario por
patios que abrieron sus puertas: el de los la población. Desde que inicia la pre-
excelencia de los desfiles de las compar-
Miranda y el Carnavalero, ubicado al lado temporada, el ambiente en Pescaíto se
sas carnavaleras, pero su participación
del mítico patio de Corina.
 transforma; se oye música en casi todos
en los festejos está lejos de estar circuns-
los rincones y durante las tardes y las
crita a los eventos programados por las
noches se tiene la sensación de que todo
fundaciones. Muchas familias sacan sus La importancia del Carnaval el mundo está volcado hacia la calle. Una
equipos de sonido o sus picós al frente
El Carnaval está profundamente arrai- vez arranca el Carnaval, el movimiento
de sus casas, ponen algunas sillas y se
gado en el corazón de las pescaíteras y el ruido alcanzan cotas indescriptibles.
reúnen para tomar y bailar. Cuentan los
y los pescaíteros. La manera en que un La música se pone al volumen y a la hora
vecinos que en algunas ocasiones todos
habitante de Pescaíto se relaciona, camina que sea, y los vendedores ambulantes de
los dueños de picós de una gran calle se
y habla se ve reflejada en la manera en mango, chuzos, cerveza, crispetas, potes
han puesto de acuerdo para sintonizar
que baila, festeja, se disfraza y bebe: en de espuma, camisetas y sombreros carna-
la misma emisora y armar así una gran
este sentido, el Carnaval constituye un valeros se multiplican. Si en días norma-
parranda. Al ser una fiesta comunitaria
compendio de la idiosincrasia y las cos- les las pescaíteras y los pescaíteros tienen
y social (mucho más que la Navidad, por
tumbres de la comunidad. En la medida por costumbre sentarse afuera a tomar el
ejemplo, que se celebra en grande pero de
en que propicia un desorden controlado fresco, durante el Carnaval este hábito se
manera más íntima con la propia familia),
y festivo, permite subvertir por unos días acentúa: familias enteras sacan sus me-
el Carnaval propicia las celebraciones con
las convenciones sociales, étnicas y de cedoras o sus sillas Rimax para disfrutar
vecinos y conocidos en las calles.
género sin precipitar rupturas en el tejido del ambiente festivo que se respira en la
social. Ello no significa, por otra parte, calle. En época de Carnaval es usual ver
que los efectos disruptivos del Carnaval
carezcan de efecto alguno en la ‘vida 8 Joice Corbacho, vecina del barrio de Pescaíto, 24
7 Jimmy Henríquez, vecino del barrio de Pescaíto. En- real’: la transfiguración de rutinas y roles años de edad. La entrevista para la elaboración de
trevista: enero de 2016. esta ficha fue realizada en enero de 2016.
186
El rey Momo y la
reina de Funcarpes

política
en la tarima de dicha

Raiz
fundación (2016).
Fotografía de Mariana RP
Gil Arboleda

Raiz socio-
económica
La inseguridad sigue siendo una preocu-
pación central para un número impor-
RE
tante de entrevistados. Muchos deploran
la pérdida del espíritu de sano entrete-
nimiento y de camaradería que –en su

a m b i e n ta l
opinión– reinaba en el antiguo Carnaval.
Evitan sobre todo los estaderos cuando

Raiz
ha entrado la noche o en la madrugada,
RA
pues la embriaguez de los asistentes es
causa de frecuentes riñas, para no hablar
visitantes que, pese a no ser de Pescaíto, situadas en las rutas de los desfiles: no
de los atracadores que acechan la primera
son convidados a compartir unos tragos es ninguna casualidad que los tenderos
oportunidad para hacerse a su botín de

urbana
en familia o entre amigos. manden cartas a las fundaciones para
Carnaval.

Raiz
pedir que los desfiles pasen por la calle de
Cada generación vive el Carnaval de mane- su negocio. Como Orlando bien lo indica, RU
En términos organizativos, las fundacio-
ra diferente. En las noches, los adolescentes “muchas personas del barrio esperan todo
nes cuentan con el respaldo de Bomberos,
y jóvenes caminan por la calle con aire el año el Carnaval, porque su negocio
la Policía y el Distrito, pero la principal
desenfadado, relajado, entre risas y chistes. funciona solo en esa temporada”.

Raiz socio-
fuente de financiación estatal la constitu-

c u lt u r a l
Hablan duro, se ríen duro, mojados por la
ye el Programa Nacional de Concertación
espuma que se han arrojado unos a otros y
Problemas que enfrenta la organi- Cultural del Ministerio de Cultura. Como
con parches blancos de maicena en la cara.
zación del Carnaval ya tuvimos oportunidad de explicar en RC
Parejas jóvenes van en sus motos, frescas
la ficha dedicada a Pescaíto Dorado, la
y arregladas, listas para la fiesta. Niños y La existencia de tres fundaciones diferentes
asignación de los fondos depende de la
niñas entre los once y los catorce años de dedicadas a la organización del Carnaval
aprobación de los respectivos proyectos

histórica
edad deambulan en grupos, sin quedarse puede ofrecer más opciones y fomentar
en concurso abierto, por lo que resulta

Raiz
en un solo sitio; mientras caminan sin una mayor diversidad, pero también ge-
difícil planear a largo plazo y garantizar
rumbo fijo se echan espuma y maicena. nera tensiones, recelos y rivalidades. Cada
la continuidad de los eventos. Para el año RH
Los niños más pequeños van acompaña- fundación tiene su propia programación y
2016, por ejemplo, Funcarpes y Pescaíto
dos de sus padres –generalmente parejas sus propios desfiles, reyes, reinas y eventos.
Dorado recibieron veintiún y quince mi-
muy jóvenes–, que los llevan a ver los Asimismo cuentan con un número signi-
llones de pesos respectivamente, mientras
desfiles y los eventos. Los adultos mayo- ficativo de colaboradores y partidarios,
que la propuesta de Fundapescaíto fue
res viven de una manera más tranquila el casi como si se tratara de las hinchadas de
rechazada por puntaje.
Carnaval, repantigados en sus mecedoras, equipos de fútbol antagonistas. Los hora-
atentos a la diversión y el alboroto. rios de los desfiles y las tarimas se cruzan
En este contexto, el patrocinio de la em-
con frecuencia, y la competencia entre
presa privada puede jugar un papel funda-
Es gracias a su imbricación con los hábi- las fundaciones dificulta por momentos
mental, máxime si se tiene presente que
tos y tradiciones cotidianas, a su sintonía la obtención de patrocinios y recursos.
los costos de los nuevos escenarios –léase
con el sentir de la gente, que el Carnaval Numerosas voces en el barrio expresan
las tarimas– exceden la capacidad econó-
de Pescaíto alcanza semejante dimensión. su abierta inconformidad con la situación,
mica de las fundaciones. Los principales
Son precisamente su importancia, arraigo como es el caso de Joice Corbacho: “Para
patrocinios los reciben de cerveza Águila,
y tamaño los que generan múltiples opor- mí, las fundaciones están perjudicando […].
Aguardiente Antioqueño y algunas emi-
tunidades de trabajo para los habitantes. Desde que se institucionalizó la cosa, cada
soras de la ciudad, pero los organizadores
Las observaciones de Orlando Calero quien va por su lado, por eso ya no es algo
insisten en que, en comparación con el
al respecto son bien dicientes: “Con el de comunidad en la que los vecinos se reu-
carnaval de Barranquilla, la empresa
Carnaval, el trabajo o el rebusque, como le nían y se compartía para sacar su compar-
privada en Santa Marta ha mostrado muy
llama uno acá, aumenta. El trabajo infor- sa. Ahora uno ve como cinco comparsas
poco interés por los festejos populares de
mal, vender el sombrero, la maicena, el de no más en los desfiles; antes eran las JAC
Pescaíto. La Sociedad Portuaria, por citar
los potes de espuma, el vendedor informal quienes hacían eso, ahora las fundaciones
un caso en cuestión, se ha mantenido
de cerveza, todo se dispara antes y duran- acabaron con eso”. Presentación Martínez,
al margen. El reto más difícil lo afronta
te el Carnaval, o sea en la pretemporada y vecina de Barrio Norte y conocida en el
el Carnaval Infantil, dado que no puede
el Carnaval. Los coreógrafos, por ejem- sector como la Niña Martínez, sentencia:
recurrir a los jugosos patrocinios de cer-
plo, los diseñadores de vestuario, los que “Para mi deberían unirse las fundaciones,
vecerías y empresas licoreras.
alquilan los vestuarios de gala, hasta los dejar la joda y hacer una cosa buena, una
carros se alquilan para montar los picó sola”.9
pa los desfiles”. Orlando Calero señala
además que las tiendas aumentan osten- 9 Presentación Martínez, vecina de Barrio Norte. En-
siblemente sus ventas, sobre todo aquellas trevista: enero de 2016.
187
La Castellana: el centro urbano
y simbólico del gran Pescaíto.
Cortesía del Banco Interamericano
de Desarrollo (BID)

7 Conclusiones
de la investigación

188
R ai z
RH histórica

En términos históricos, el territorio pescaítero en Pescaíto, uno de los pilares de su identidad cul-
bien puede ser definido como un auténtico cruce tural, es en este sentido uno de tantos legados de
de caminos, en el que han confluido procesos de ese movido periodo de su historia.
muy diversa índole. Cabe mencionar, en primer
lugar, su rápida constitución en puerta de entrada El declive de la industria bananera y la actividad
a Santa Marta desde el norte, a la manera de una ferroviaria, sumado al profundo cambio en el an-
‘membrana espacial’ que reguló los intercambios tiguo vínculo entre el puerto y los habitantes de
de la ciudad colonial (el actual centro histórico) Pescaíto, precipitó transformaciones de gran cala-
con su satélite de Taganga. Como tuvimos opor- do en el tejido urbano y social. La dependencia en
tunidad de señalar en las páginas precedentes, la términos de empleo frente al complejo ferroviario
memoria viva recoge en sus relatos fundacionales y portuario dejó a los pobladores en una situación

histórica
la función de umbral que durante siglos le cupo vulnerable, apenas mitigada por la reorientación

Raiz
al territorio, mucho antes de que existiera Pes- de la ciudad hacia el turismo. El desarrollo del
caíto como tal. Asimismo, vale la pena resaltar la puerto y su zona franca como una suerte de en- RH
conformación de un núcleo poblacional dedicado clave, sin los sólidos vínculos orgánicos de antaño
principalmente a la pesca, a la venta al menudeo con el sector (y separado físicamente de él por mu-
y al tráfico de cabotaje menor. En su condición de ros), acentuó los problemas derivados de los desa-
lugar de paso y base de pescadores y mercaderes, rrollos socioeconómicos. Obras de infraestructu-
el estrecho vínculo del territorio del futuro Pescaí- ra como la vía Alterna y la avenida del Ferrocarril
to con el mar y los cerros dejó una impronta dura- se erigieron en barreras que no solo agravaron el
dera en el sector. problema de las inundaciones, sino que además
interrumpieron los flujos que históricamente ha-
La consolidación urbana de Pescaíto estuvo ligada bían vinculado a Pescaíto con el centro histórico
a la constitución de la zona bananera y al auge por- de la ciudad y con los cerros del Norte y sus playas.
tuario y ferroviario que el modelo agroexportador
propició. La formación de una clase obrera vincu- La violencia, la inseguridad y los problemas aso-
lada al sector de los transportes y a la comercia- ciados al tráfico de drogas golpearon con dureza al
lización de la fruta dejó una huella indeleble en la gran Pescaíto, particularmente durante la expan-
construcción del territorio y en la identidad colec- sión paramilitar de finales del siglo xx y comien-
tiva de la comunidad. El territorio pescaítero pasó zos del siglo xxi. En ese marco, los migrantes que
de mediar los intercambios de Santa Marta con la probaron suerte y se establecieron en el sector en
zona de Taganga y con los asentamientos coste- la segunda mitad del siglo xx tuvieron en muchos
ros del Magdalena Grande, que incluía los actua- casos un comienzo más difícil que el de los pobla-
les departamentos de Cesar y La Guajira, a fungir dores que los antecedieron, pues tuvieron que lu-
como nodo dentro de una extensa red comercial y char –y luchan todavía– por el acceso a servicios y
productiva que conectaba el enclave bananero con equipamientos básicos en un entorno caracteriza-
los mercados del mundo atlántico. Las corrientes do por la escasez de suelo edificable y opciones de
migratorias regionales, nacionales e internaciona- empleo. En un contexto laboral y urbano muchas
les que pasaron por Pescaíto o hicieron del sector veces adverso, el anhelo de una casa con todos su
su destino final, constituyen el mejor testimonio espacios “en material” demanda esfuerzos enor-
de las dinámicas (y los problemas) desencadena- mes de parte de los nuevos habitantes.
dos por el boom bananero de la primera mitad del
siglo xx. La adopción y popularización del fútbol 189
Una gran mayoría reconoce en el sentido de pertenencia
Planos Vivos
Pescaito

–y en los hábitos y tradiciones que lo nutren– el principal


patrimonio con el que cuenta la comunidad pescaítera para
encontrar las respuestas adecuadas a los interrogantes
que penden sobre su futuro”.
Conclusiones

investigación
de la

A vuelo de pájaro parecería como si en la historia clase, o como piñón dentro del dilatado engranaje
de Pescaíto los procesos sociales y urbanos se hu- de la economía agroexportadora. Esa experiencia
bieran conjurado para socavar aquellos elementos compartida, decantada en los relatos fundacio-
constitutivos de su identidad territorial: su fun- nales y en la memoria viva, se cristaliza en una
ción de portal de entrada hacia el centro histórico, profunda identificación con el territorio. Como lo
su estrecha conexión con los cerros y sus playas, ilustra el plano de hitos y lugares de la memoria
o su condición de núcleo obrero ligado al ferro- (plano 7.1), el territorio pescaítero está tachonado
carril y al puerto. La fragmentación relativa y el de lugares cargados de significado, en torno a los
desdibujamiento parcial del territorio, así como se cuales giran la convivencia y el forjamiento de los
han verificado por cuenta de las transformaciones lazos comunitarios (los lectores podrán encon-
socioeconómicas y las intervenciones urbanas de trar en el bolsillo del libro una versión ampliada y
las últimas décadas, han tenido su correlato en la más detallada). Esta densa urdimbre de sitios en-
persistencia de graves deficiencias en la prestación trañables y de lugares para la evocación, el culto,
de los servicios públicos, en la precarización la- el juego y el festejo rinde testimonio de la vitali-
boral y en el deterioro de la seguridad, cuando no dad de la cultura popular pescaítera, tanto como
en la pobreza extrema y la marginalidad de una de su capacidad para sobreponerse a la pobreza y
parte considerable de sus habitantes, tal como lo la estrechez, a las notorias deficiencias en la pro-
confirman los indicadores socioeconómicos y lo visión de servicios y equipamientos básicos, a la
reiteran los datos de las entrevistas etnográficas. inseguridad que tanto preocupa a los vecinos, o a
Ahora bien, pese a que –o precisamente porque– la fragmentación territorial causada por las obras
las condiciones de vida son particularmente difí- de infraestructura y los cerramientos con muros.
ciles para buena parte de la población, la identidad
colectiva y el sentido de pertenencia se han afian- En sus reflexiones sobre el papel de la estética po-
zado en torno a los usos y los hábitos ligados a la pular en la constitución de las ciudades colombia-
solidaridad y los vínculos comunitarios. En el dia- nas, Armado Silva llega a una conclusión de gran
grama de ser y tener para Pescaíto que discutimos pertinencia para cerrar este apartado:
en la introducción del libro, mostramos cómo la
situación de vulnerabilidad de una parte impor- En nuestra reflexión lo estético está vinculado a la
tante de la población contrasta, en los testimonios manifestación de mitologías colectivas, una dirección
que recogimos, con la exaltación del apego, los la- utópica en la que, ciertamente, lo popular ha cobra-
zos afectivos en el vecindario y la buena conviven- do gran presencia y que al preguntarnos las razones
cia. Una gran mayoría reconoce en el sentido de para tal evidencia creemos, casi elementalmente, que
pertenencia –y en los hábitos y tradiciones que lo se deba al amplio espacio que domina en nuestras
nutren– el principal patrimonio con el que cuenta ciudades el definido sector popular. No sólo arquitec-
la comunidad pescaítera para encontrar las res- tónicamente (se dice que apenas un 10% de nuestras
puestas adecuadas a los interrogantes que penden ciudades ha sido construido por profesionales), sino
sobre su futuro. que también en los entretejidos simbólicos que lo han
“ordenado” y “nombrado a su manera” […].1
Dicho arraigo es fruto –qué duda cabe– de una
cultura que ha sabido integrar las experiencias La observación de Silva sobre el estrecho vínculo
de lucha y organización de la comunidad en las entre la estética (en su más amplia acepción) y lo
diferentes fases de su historia territorial, ya fuera popular se puede extrapolar, en términos genera-
como espacio articulador entre el antiguo casco les, a la relación entre patrimonio urbano y cultu-
colonial y su hinterland más inmediato, como ni-
cho de pescadores y cayuqueros, como escenario
1 Armando Silva, “La perspectiva estética como estrategia comunica-
del tránsito de la vida rural a la vida urbana, como tiva en ciudades colombianas”, en Estudios sobre las culturas contem-
190 asentamiento obrero con una fuerte conciencia de poráneas I (2), 1987, pp. 123-44, aquí 142.
P la n o 7 . 1
Plano de hitos y lugares de la memoria

28 Centro Integral Comunitario


San Martín
03 31
16 29 Jardín infantil del
32 Bienestar Familiar
30 Mercado público
04 31 Parque de San Jorge
21
05
33 02 09 32 Cancha de Ensenada
15
28 33 Cancha de San Martín
25 41 29 12 45 39
36
34 Parque infantil de Olaya Herrera
40 37 42
23 35 Clínica La Castellana
26 22 36 Puesto de salud Olaya Herrera
43
27 10
35 37 Iglesia Nuestra Señora del Carmen
38
38 Iglesia Evangélica Cuadrangular
34
17 18 20
39 IED Madre Laura
08 44 40 IED John F. Kennedy
43
13 41 Colegio José Prudencio Padilla
24
01 07
06
14
42 Colegio parroquial Nuestra
Señora del Carmen
43 Colegio Vicuña
30 44 IED Normal María Auxiliadora
19 45 Convento de las lauritas

histórica
Recorrido - Caminos antiguos 12 Parque de Pescaíto

Raiz
Taganga-Mamatoco 13 Hotel Universal
Recorrido de las tagangueras 14 Antigua estación del tren
entre Pescaíto y la plaza RH
de San Francisco 15 Cerro de la Virgen

Principal recorrido del 16 Cerro de Santa Marta


desfile del Carnaval 17 Cuatro Bocas
01 Casa del Español 18 El Boro
02 Casa Embrujada 19 Iglesia de San Francisco
03 Parque de Ensenada 20 Calle de las Piedras
Olaya Herrera 21 Casa de los Negritos
04 Discoteca Tercer Nivel 22 La Castellana
05 Parque de San Martín Playas y caminos de los
06 Hotel Karimar cerros del Norte
07 Sede de la Sociedad Unión 23 Piso Alto
08 Pasaje Angosto 24 Teatro Popular
09 El Mojón de Oro 25 El puerto
10 Pescaíto Dorado 26 Coliseo cubierto
Tiendas de barrio que convocan 27 Ludoteca

ra popular en el caso de Pescaíto. Una propues- El proyecto que sepa tocar las fibras de la cultura
ta urbana y arquitectónica comprometida con la popular, tal como se manifiesta en el orgullo con
sostenibilidad y la participación debe esforzarse el que los habitantes portan el gentilicio de pes-
en incorporar las “mitologías colectivas”, iden- caíteros, así como en el gusto con el que departen
tificar la trama de los “entretejidos simbólicos” y con amigos, vecinos y pasantes en los patios, las
honrar la “dirección utópica” del acervo cultural calles y las esquinas, tendrá las mejores posibili-
e histórico del sector. Pensar la cultura popular dades de resolver los problemas más apremiantes
como patrimonio digno de ser realzado y como de los pobladores, ajustarse a sus necesidades y
insumo imprescindible para la renovación urbana anhelos, y abrir nuevos espacios de proyección a
es la mejor garantía para evitar, como sucede con ese patrimonio colectivo para que guíe e impulse
alguna frecuencia en este tipo de iniciativas, que el el desarrollo urbano y social en el futuro.
legado cultural sea reducido a una mera compen-
sación frente a condiciones de vida afectadas por 191

la precariedad material.
Planos Vivos
Pescaito

R ai z socio -
RC cultural
Conclusiones

investigación
de la

Tienda esquinera
Terraza
Árbol
Hamaca
Silla o banca
Cancha de
fútbol calle

Lejos están los días en los que alguien podía des- se mira la homogenización que viene de la industria
cartar de plano la idea de cultura popular como cultural, decir urbano es nombrar la antinomia de lo
un oxímoron inadmisible, sobre todo cuando se popular. Pero los pesimismos que allá llegan, vengan
hacía referencia a una cultura popular urbana de la derecha o de la izquierda, conservan fuertes la-
perfectamente diferenciada y consolidada dentro zos de parentesco, a veces vergonzante, con aquella
de la vida de una gran ciudad. Ahora bien, toda- “intelligentsia” para la que lo popular se homologa
vía son muchos los malentendidos y prejuicios que siempre secretamente con lo infantil, con lo ingenuo,
persisten en lo que a su significado, textura y ca- con lo cultural y políticamente inmaduro. […] Aparte
lado respecta. Las líneas que le dedicó Jesús Mar- de ese resto pertinaz de elitismo aristocrático el reco-
tín-Barbero al tema hace ya tres décadas siguen nocimiento e investigación de lo popular urbano debe
manteniendo su vigencia: enfrentar otro tipo de obstáculos, hasta epistemológi-
cos, que provienen de la romántica identificación de
Si ante lo indígena la tendencia es a pensarlo como lo popular con lo puro, esto es con lo inmediatamente
lo primitivo y por lo tanto como ese “otro” afuera de distinguible por la nitidez de sus rasgos. 2
la historia, frente a lo popular urbano la tendencia
más fuerte es a negarle lisa y llanamente la posibi- A lo largo de estas páginas hemos resaltado la im-
lidad misma de que exista culturalmente. Tan tenaz portancia de la cultura popular como el patrimonio
es el mito que decir popular evoca automáticamente más valioso de Pescaíto. La dimensión sociocul-
lo rural, lo campesino. Y sus dos rasgos identificato- tural que realzamos aquí trasciende nociones de
rios: lo natural y lo simple. Que sería lo irremediable-
mente perdido o superado por la ciudad, identificada
2 Jesús Martín-Barbero, “La comunicación desde la cultura: crisis de lo
como lugar de lo artificial y lo complejo. Y si a eso nacional y emergencia de lo popular”, en Estudios sobre las culturas
192 le añadimos la concepción fatalista desde la que hoy contemporáneas I (3), 1987, pp. 45-69, aquí 63-4.
Si ante lo indígena la tendencia es a pensarlo como lo
primitivo y por lo tanto como ese ‘otro’ afuera de la historia,
frente a lo popular urbano la tendencia más fuerte es a
negarle lisa y llanamente la posibilidad misma de que
exista culturalmente”.

cultura centradas exclusivamente en tradiciones procos entre los dos. La cultura pescaítera, para re-
artísticas, artesanales o folclóricas, pues incorpo- tornar al objeto de discusión, no puede ser transva-
ra prácticas cotidianas, oficios añejos y de nue- sada sin más a otros espacios, como si se tratara de
vo cuño, hábitos y visiones de mundo, entre otras un fenómeno surgido por generación espontánea o
cosas. Se manifiesta, por ejemplo, en el gusto por un medio de cultivo en un plato de Petri. Como lo
departir en las terrazas y en los patios, en el acto ilustra de manera elocuente el diagrama de patios
de compartir la comida con los vecinos, en los en- de Pescaíto (fig. 32), existe una estrecha interrela-
Figura 32. La vida cuentros de esquina o en los partidos de fútbol ca- ción entre las manifestaciones de la cultura pescaí-
en los patios y los lle, de preferencia a la sombra de un árbol añoso y tera y el espacio urbano en el que se desenvuelven.
frentes de Pescaíto
tupido. Alcanza una dimensión paroxística y a la En este libro hemos tenido la oportunidad de ras-
vez especular en el Carnaval: en la versión pescaí- trear, por ejemplo, las transformaciones en las cos-
tera del mundo al revés, allí donde las convencio- tumbres y las tradiciones propiciadas por cambios

Raiz socio-
c u lt u r a l
nes sociales son puestas en tela de juicio, es donde en la disposición de los espacios y en los lenguajes
emergen de manera más diáfana aquellos valores arquitectónicos, de la misma manera en que hemos
que definen el robusto sentido de pertenencia a la podido observar la manera en que nuevos hábitos RC
comunidad y a su territorio. precipitan cambios en los usos del espacio y en la
concepción de las viviendas.
La cultura popular en Pescaíto se nutre sin duda de
las experiencias de generaciones pasadas y de algu- La complementariedad entre patrimonio inmate-
nas de las presentes en su condición de migrantes rial y patrimonio material, tal como se puede cons-
del campo, pescadores, comerciantes itinerantes tatar en una perspectiva micro, cobra todavía más
por veredas y caseríos, o trabajadores estacionales vigencia desde un enfoque macro. El desarrollo del
con fuertes vínculos rurales. Ello no significa –si- legado cultural de una comunidad requiere de en-
guiendo a Jesús Martín-Barbero– que la cultura po- tornos urbanos que le sean propicios. Es por eso
pular urbana de Pescaíto sea un compendio arcaico que el corazón de la propuesta que ponemos a con-
de remanentes del pasado campesino o “premoder- sideración de los lectores, esto es, la renovación del
no”, en las antípodas del cosmopolitismo urbano. centro simbólico de Pescaíto en torno a la cancha
Tampoco puede ser contemplada como el arca que de La Castellana, busca darles nueva proyección a
guarda el último legado de una Arcadia prístina, los elementos constructivos, las tradiciones mate-
sacrificada a la aplanadora del desarrollo de las riales, la espacialidad y la estética local; aquellos
grandes ciudades contemporáneas. No es solo que elementos arquitectónicos y urbanísticos que a lo
la herencia obrera y el pasado portuario, que puso a largo de la historia se han retroalimentado mutua-
Pescaíto en íntimo contacto con corrientes migra- mente con la experiencia, los hábitos y la identidad
torias nacionales e internacionales, tengan un peso de los pescaíteros y las pescaíteras. El proyecto cul-
determinante en la identidad colectiva. Si la cultura tural de la Casa de Pescaíto, por ejemplo, contem-
popular pescaítera no es mera reliquia de un mun- pla la construcción de un patio de la Cultura que,
do –bucólico o anacrónico, como se prefiera– en como su nombre bien lo indica, busca aprovechar
trance de desaparecer, es porque ha mostrado una las tradiciones ligadas al patio interior de la vivien-
asombrosa ductilidad como agente de cambio y da pescaítera para convertirlo en sitio de encuentro
adaptación en el devenir urbano del sector. de propios y extraños. Los detalles de la propuesta
pueden ser examinados en el próximo capítulo; por
El énfasis en la cultura popular bien puede llevar a lo pronto es importante reiterar que la vitalidad de
pensar que nos hemos decantado aquí por el patri- la cultura popular en Pescaíto está indisolublemen-
monio inmaterial como eje de la propuesta urbana. te ligada a los espacios urbanos que la albergan.
Hay algo de verdad en la observación, siempre que Ninguna propuesta urbana y arquitectónica puede
no se plantee una dicotomía rígida entre patrimo- pasar por alto ese vínculo.
nio material e inmaterial. Las diferencias entre uno
y otro saltan a la vista y no requieren de explica- La relación de Pescaíto con su medio ambiente
ciones adicionales, pero un énfasis excesivo en sus está imbuida de marcados contrastes. En las pá-
particularidades distintivas vela los vínculos recí- ginas precedentes hemos hecho hincapié en la 193
Planos Vivos
Pescaito

R ai z
RA A M B I E N TA L
Conclusiones

investigación
de la

profunda identificación de los habitantes con su tor Bastidas-Mar Caribe con basuras y escombros
territorio; un arraigo que ha mostrado solidez a son una advertencia que debe ser atendida.
pesar de la relativa fragmentación causada, entre
otros factores, por las grandes obras de infraes- La ambigüedad en la relación de las pescaíteras y
tructura y el cambio en la relación del puerto con los pescaíteros con el medio ambiente hunde sus
el sector, lo mismo que por las condiciones preca- raíces en el proceso mismo de urbanización. Los
rias en las que ha tenido lugar el poblamiento más pobladores se extendieron sobre un espacio físico
reciente. Este arraigo territorial de los habitantes, colmado de referentes simbólicos e hitos territo-
unido a una ubicación geográfica privilegiada, le riales cargados de significado, pero que simultá-
han deparado a Pescaíto un potencial turístico neamente ejercía una resistencia por momentos
indiscutible. La realización plena de dicho poten- tenaz al avance del poblamiento: no fueron po-
cial se enfrenta, empero, a los graves problemas cos los esfuerzos que los habitantes tuvieron que
ambientales para los que no ha sido posible ha- empeñar para tornar habitables, con sus propias
llar soluciones satisfactorias. El plano 7.2 señala manos, los playones, las salinas y los baldíos.
los impactos ambientales más apremiantes, entre Como tuvimos ya ocasión de señalar, uno de los
los que cabe señalar las inundaciones, la defores- principales orgullos de Pescaíto consiste precisa-
tación de los cerros, el ruido, la mala disposición mente en haber sido uno de los primeros sectores
de las basuras y los problemas asociados a los ce- de la Santa Marta moderna que sometió el “mon-
rramientos con muros. te” agreste que la tenía cercada al ‘influjo civili-
zador’ de la traza urbana. No obstante, el pobla-
La respuesta a dichos problemas requiere de obras miento de Pescaíto no se efectuó únicamente en
de infraestructura concebidas de manera sistémi- desafío abierto al entorno natural (o plegándose
ca, que no se limiten a ofrecer remedios puntuales a sus imposiciones, ahí donde la voluntad de los
de forma inconexa, lo mismo que de soluciones pioneros no podía doblegarlo); el medio también
técnicas integrales, que se ajusten a los condicio- prestó su concurso a la consolidación urbana de
namientos naturales y geográficos y que no los manera por demás paradójica: sin el material de
ignoren o vayan abiertamente a contrapelo suyo, relleno y de construcción extraído de las entra-
como ha sucedido en el pasado. Ahora bien, tan ñas de los cerros, o sin las maderas y el carbón
importante como encontrar soluciones óptimas de su manto vegetal, la edificación del sector hu-
en términos técnicos es fortalecer los espacios biera sido impensable. La substancia urbana de
para una gestión comunitaria ecológicamente Pescaíto guarda en su médula parte de ese entor-
responsable. Algunos cambios en la forma en que no natural que la expansión de la ciudad estaba
los habitantes aprovechan los recursos, se apro- llamada a transfigurar.
pian del territorio o conciben su relación con el
entorno son indispensables: ninguna obra de in- Ahora bien, más allá del antagonismo, la adapta-
fraestructura y saneamiento está en capacidad de ción y el aprovechamiento de recursos, el nexo de
alcanzar los resultados esperados por sí sola. El Pescaíto con el medio ambiente está determinado
hábito de arrojar desechos en los canales y en las por su interrelación con los hábitos y las prácti-
escorrentías es un caso en cuestión: la aproxima- cas cotidianas que hacen parte de su patrimonio
ción al problema exige el concurso tanto de la in- cultural. En el libro nos hemos ocupado en varios
geniería como de la etnografía. Las inundaciones apartados de los árboles, un ejemplo que ilustra a
agravadas por cuenta del taponamiento del colec- la perfección la suerte de simbiosis que se ha es-
194 tablecido entre el entorno natural y las tradiciones
Algunos cambios en la forma en que los
habitantes aprovechan los recursos, se apropian
del territorio o conciben su relación con el entorno
son indispensables: ninguna obra de infraestructura
y saneamiento está en capacidad de alcanzar los
resultados esperados por sí sola”.

a m b i e n ta l
Raiz
P la n o 7 . 2
Plano de impactos ambientales RA

Inundaciones
Deforestación de cerros, invasiones
esporádicas, inseguridad, delincuencia
Franja de control de crecimiento
por autoconstrucción e invasión
Contaminación ambiental, polución
por cuenta de la vía Alterna
Ruido
Invasión de predios en el eje
ambiental proyectado
Muros
Vivienda, edificio o lote abandonado
Invasión del espacio público

195
P la n o 7 . 3
Propuesta de sendero ecológico, parque
longitudinal y sendero histórico
Planos Vivos
Pescaito
Conclusiones

investigación
de la

que han surgido en torno a los encuentros en las gitudinal sobre la vía Alterna, lo mismo que con
esquinas, el juego en las calles y la socialización un sendero histórico que recree las rutas de las
en terrazas y patios. En el capítulo que se ocupa tagangueras y revitalice la conexión de Pescaíto
del análisis urbano y arquitectónico señalamos con el centro histórico (la propuesta en conjun-
cómo el árbol de trupillo sintetiza, en los usos que to puede ser examinada en el siguiente capítulo).
los habitantes le han dado y en los significados Al facilitar la reapropiación física y simbólica de
que le han atribuido, la compleja y proteica rela- uno de los hitos espaciales de mayor significado
ción del sector con su nicho ecológico. El trupillo en la historia pescaítera, todo desde una perspec-
ha sido árbol de “monte”, condenado a la tala para tiva ecológica, la reforestación de los cerros y el
instalar canchas o colegios; material privilegiado trazado del sendero permiten articular las preo-
en la construcción de vivienda y en el cercamiento cupaciones ambientales con el legado histórico y
de patios; y árbol de ornato y lugar de juegos en el patrimonio cultural del sector. Su realización
los parques y en los frentes de las casas. promete impulsar la discusión entre los vecinos
sobre la sostenibilidad ambiental, empoderar a
Es precisamente esa mutabilidad en los usos y aquellos grupos comprometidos con una agenda
significados asociados a los árboles la que puede medioambiental, y fomentar una conciencia eco-
ser aprovechada por una propuesta de renovación lógica que facilite la implementación de las solu-
urbana comprometida con la sostenibilidad am- ciones técnicas requeridas y garantice su cuidado
biental. En el plano 7.3 presentamos un bosquejo por parte de la comunidad.
de la propuesta para un sendero ecológico sobre
196 los cerros del Norte, conectado con un parque lon-
R ai z
RU URBANA

P la n o 7 . 4

urbana
Raiz
La ‘tectónica’ del
gran Pescaíto
RU

1
1
2

1 El centro simbólico y urbano de


Pescaíto y su área de influencia
2 La zona de El Boro y
sus inmediaciones
3 La vía Alterna y los 4
barrios de los cerros
4 La avenida del Ferrocarril,
el mercado público y su
área de influencia

Pese al fuerte sentido de pertenencia y a la robusta mos, en primer lugar, la ‘placa’ que corresponde al
identidad comunitaria, Pescaíto –como cualquier centro simbólico de Pescaíto y su área de influencia.
otro colectivo humano– está atravesado por fuer- Ella guarda un enorme potencial transformador, y
tes clivajes sociales, políticos, económicos y terri- no en vano el planteamiento de Planos Vivos la
toriales. Establecidos y recién llegados, habitantes escogió como eje de la propuesta urbana (remiti-
de los cerros y de la zona llana, fracciones en el mos al lector o a la lectora al siguiente capítulo
poder y liderazgos de nuevo cuño en las Juntas de para más detalles). Su centralidad –tanto espacial
Acción Comunal, familias sin grandes pergaminos como simbólica– garantiza que dicho potencial
y clanes prestigiosos e influyentes: las posibles lí- transformador se irradie sobre todo el territorio
neas divisorias pueden ser ampliadas a discreción. en beneficio de la comunidad.
Estos ejes de tensión tienen su correlato en la estruc-
tura urbana, cuya composición interna se presta a La mayor ‘falla geológica’ la constituye sin lugar
lo que bien podría equivaler a un análisis tectónico a dudas El Boro, que como ya lo indicamos a lo
en geología, tal como lo ilustra el plano 7.4. Tene- largo de estas páginas, concentra los problemas 197
P la n o 7 . 5
Plano urbano de circulación de Bogotá (1950)
Fuente: O’Byrne (coord.), Le Corbusier en Bogotá: 1947-1951,
tomo 1: Elaboración del Plan Regulador de Bogotá (2010)
Planos Vivos
Pescaito
Conclusiones

investigación
de la

más graves en términos urbanos, sociales y am- actividades culturales en la playa de Pescaíto, pue-
bientales, agudizados por los callejones sin salida de contribuir decisivamente a romper el relativo
–tanto en sentido estricto como figurado– que ge- aislamiento al que están sometidos los barrios de
neraron los muros de cerramiento de la zona fran- las ensenadas interiores. En la medida en que res-
ca. El proyecto de fútbol calle en El Boro muestra tablece los vínculos de la zona llana con los cerros,
la manera en que, aprovechando el potencial de la el proyecto hace partícipes a sus pobladores de las
cultura popular pescaítera, la propuesta de Planos nuevas dinámicas generadas por la renovación del
Vivos puede contribuir a restañar las heridas en centro simbólico del sector.
el tejido social y urbano, restablecer los vínculos
entre El Boro y el centro simbólico del sector, y en- Nos resta abordar la cuarta ‘placa’ de la tectónica
tablar una discusión constructiva con el puerto. El pescaítera: aquella que comprende la avenida del
proyecto abre, en efecto, un espacio de diálogo para Ferrocarril, el mercado y su área de influencia. Esta
conciliar las necesidades funcionales, económicas y zona constituye sin duda uno de los dos polos de de-
de seguridad de la Sociedad Portuaria, por un lado, sarrollo económico más dinámicos en el sector (el
con una renovación urbana congruente con el pa- otro es, por supuesto, el puerto). Su expansión ofrece
trimonio urbano y cultural de Pescaíto, por el otro. nuevas oportunidades a los habitantes de Pescaíto,
Un espacio de diálogo que garantice un desarrollo pero al mismo tiempo ha traído consigo los consa-
sostenible y reparta de manera equitativa los costos bidos problemas derivados de la mala disposición
y los beneficios de las intervenciones en el sector. de las basuras, los cerramientos con muros, la inva-
sión del espacio público y la ruptura parcial de los
La vía Alterna, por su parte, constituye una suerte flujos que vinculaban la zona con el centro histórico.
de ‘línea de fractura’ que separa el centro simbó- En la propuesta de Planos Vivos está contemplada la
lico de la ‘placa’ que alberga los barrios encajados construcción de la plaza de la Sombra, asociada al
en las ensenadas interiores de los cerros. Esta nuevo mercado e inspirada en los callejones con po-
franja del territorio pescaítero ha experimentado lisombra adecuados por los vendedores del lugar. En
en los últimos años un acelerado poblamiento es- conjunción con la proyección de espacios urbanos
pontáneo, afectado por la precariedad urbana, la amplios y generosos sobre la avenida del Ferroca-
invasión de predios, la inseguridad y la vulnera- rril, integrados al proyecto de renovación de la vía
bilidad frente a los derrumbes, la brisa fuerte y las y al nuevo sistema de transporte SETP, la plaza debe
malas condiciones sanitarias. El proyecto de un contribuir a restaurar los flujos entre Pescaíto y el
sendero ecológico en los cerros del Norte, un par- centro histórico, así como a compaginar la expan-
que longitudinal sobre la vía Alterna y un sende- sión de las actividades comerciales con la preserva-
ro histórico, que vincule el antiguo casco colonial ción de los lugares que permiten la reproducción de
198 con La Castellana y con un nuevo escenario para la cultura popular pescaítera.
P la n o 7 . 6
Plano de tipología de vías de Pescaíto

Vía Alterna al puerto


Caminos en llantas
Avenida
Vías en escalinata
Vía grande
Vías con comercio informal
Vía pequeña (una y doble via)
Ferrocarril
Callejones (no pasan carros)

urbana
Raiz
RU

Policías en cemento
Vías pequeñas o callejones
sin salida (Por cuestiones
urbanas/no naturales)
Policías en guayas
Vía destapada
Reductores de velocidad
Calles en pendiente
Caminos en pendiente
Vías comerciales

Ahora bien, tan importante como restablecer los primero en mostrarse desconcertado con esta in-
flujos internos y procurar el desmonte de todas vitación). Ciertamente, la manera como encumbró
las barreras urbanas que los constriñen, lo es el el funcionalismo y el racionalismo, su definición
garantizar la plena integración del gran Pescaíto de la casa como “máquina para habitar”, o su de-
dentro de las dinámicas metropolitanas. En efec- bilidad por el buldócer y la tabula rasa, por citar
to, los propósitos de una propuesta urbanística unos cuantos ejemplos, no se avienen bien con el
que busca revertir la ‘deriva continental’ en el gran enfoque defendido por Planos Vivos. Ello no obsta
Pescaíto, así como recomponer la unidad entre igual para que podamos aprovechar aquí algunas
sus diferentes segmentos urbanos, pueden que- de sus observaciones más agudas y visionarias. La
dar a mitad de camino si el sector sigue afectado “analogía biológica de un ‘sistema cardiaco’ com-
por una movilidad restringida. Resulta inevitable puesto por arterias y arteriolas”, favorecida por Le
pensar aquí en Le Corbusier y su famosa “regla Corbusier para describir la importancia del siste-
de las 7 vías” de 1948, con la que buscaba articular ma vial en la estructuración del espacio urbano, es
funcionalmente diversas escalas y usos urbanos a muy pertinente para aproximarse al problema de
través de la racionalización de la red de vías de la movilidad en Pescaíto.3 El plano de tipología de
comunicación. En el plano 7.5 mostramos una de vías de Pescaíto (plano 7.6) muestra, en efecto, la
sus aplicaciones concretas, la que corresponde al potencial complementariedad entre la ‘circulación
Plan Piloto de Bogotá de 1949-1952).
3 La cita la extrajimos de Alejandro Lapunzina, “De la pampa al alti-
A quien esté familiarizado con la obra de Le Cor- plano: los planes directores de Le Corbusier en América”, en María
Cecilia O’Byrne Orozco (coord.), Le Corbusier en Bogotá: 1947-1951,
busier le parecerá extraña su presencia en estas tomo 2: Precisiones en torno al Plan Director. Bogotá: Universidad de
páginas (y, de estar aún con vida, quizás él sería el los Andes / Pontificia Universidad Javeriana, 2010, pp. 50-65, aquí 58. 199
P la n o 7 . 7 1 Centro histórico-Pescaíto: avenida
Conexiones metropolitanas del Ferrocarril con calles 4 y 5
2 San Martín-Pescaíto: vía
Alterna con calles 4 y 5
3 Ensenada-Pescaíto: vía
Alterna con calle 11
Planos Vivos

4 Mercado: avenida del Ferrocarril


Pescaito

con calles 9, 10 y 11
5 Vía Alterna-puerto-avenida del
3 Ferrocarril: punto de tensión
entre las necesidades logísticas
y funcionales del puerto y el
imperativo de la movilidad urbana
2
Conclusiones

investigación
de la

1
de Pescaíto
El Carnaval

capilar’ y la ‘circulación arterial’, para continuar Algo del arrojo corbuseano le vendría bien a Pes-
con la analogía corbuseana. La primera compren- caíto. De haber visitado Santa Marta, Le Corbu-
de, entre otros tipos, algunas calles anchas, la ma- sier no habría dudado en proponer algún tipo de
yor parte de las calles angostas y los callejones, es puente sobre la carrera 1.a para satisfacer, de un
decir, todas las vías que concentran flujos peato- solo trazo, las necesidades de la ciudad en cuanto
nales y se prestan para la reproducción de los há- a movilidad y las del puerto en cuanto a funciona-
bitos de la cultura popular pescaítera, como lo son miento. Tampoco habría tenido empacho alguno
la práctica del deporte, las reuniones de vecinos o en ampliar con generosidad la avenida del Ferro-
los festejos. La segunda incluye, entre otros tipos, carril y la vía Alterna, flanqueadas por arboledas
buena parte de las calles anchas, las avenidas y la y jardines que habrían conectado el resto de la
única vía de orden nacional, esto es, la vía Alterna. ciudad con el camellón (en el punto exacto –di-
cen los samarios– donde se jugó el primer parti-
La materialización de esta complementariedad y la do de fútbol en Colombia). Ni habría vacilado en
integración plena de Pescaíto a la ciudad, tal como prolongar el eje comercial de la carrera 5.a hasta
lo indica el plano de conexiones metropolitanas San Martín, en cuyo parque hubiera sugerido la
(plano 7.7), requieren de la remoción de todo obstá- construcción de la estación central del tren. Todas
culo a la movilidad en los ejes de circulación y en estas ideas visionarias para la ciudad de origen
los puntos críticos que los articulan. El sector ha hispánico más antigua de Colombia hubieran sido
sido desde siempre un lugar de intercambios (in- recibidas con admiración, pero también con algo
mediatos y de larga distancia), de tránsitos (cortos y de escepticismo por los costos y la dimensión de
largos) y de migraciones (temporales, estacionales y las obras, como sucedió en Bogotá a mediados
permanentes). Sin los antiguos vínculos orgánicos del siglo xx. Los taxistas habrían comentado en
con el puerto y el ferrocarril, urge más que nunca sus carreras que todo lo que dijo el míster, ellos
fortalecer las conexiones viales con el resto de la lo habían propuesto hace rato, pero que nunca les
ciudad: una circulación sin trabas es indispensa- quisieron parar bolas.
ble para que el potencial urbano de Pescaíto pueda
desplegarse a plenitud.

200
Raiz socio-
económica
R ai z S O C I O -
RE ECONÓMICA RE

Los profundos cambios en la actividad portua- la expansión del puerto, en un proceso que –de
ria y el declive de la actividad ferroviaria no solo manera inopinada– ha agravado los problemas
precipitaron transformaciones de gran calado en socioeconómicos que aquejan en mayor o menor
el tejido urbano; también dejaron una impronta medida a todo el sector. A través de su proyecto
profunda en el desarrollo socioeconómico de Pes- de fútbol calle para El Boro, la propuesta de Pla-
caíto. El puerto y el ferrocarril dejaron de ser los nos Vivos busca abrir un espacio para conciliar los
principales empleadores, mientras que el turismo intereses de la Sociedad Portuaria con el fomento
apenas si pudo mitigar el impacto del desmantela- de los potenciales que, en términos de patrimo-
miento del antiguo enclave bananero sobre el nivel nio cultural y urbano, permitirán a Pescaíto ganar
de empleo en el sector. La fuerte incidencia de acti- nuevas perspectivas de desarrollo.
vidades delictivas y del microtráfico de drogas en
décadas recientes refleja, entre otras cosas, la pre- La intersección marcada con la letra b, entre el
cariedad laboral y la falta de oportunidades para puerto y el centro histórico e institucional de Santa
buena parte de la población. El crecimiento expo- Marta, no deja de revestir una cierta ambigüedad.
nencial del empleo temporal y la informalidad es El peso indiscutible del puerto como actor econó-
igualmente otro fenómeno que pone de manifiesto mico de primer rango en la región le ha valido una
la contracción relativa del mercado formal de tra- gran influencia en los círculos administrativos de
bajo. En el capítulo 2 trazamos un perfil somero de la ciudad, pero no es menos cierto que sobre ellos
Pescaíto en términos urbanos y socioeconómicos recae justamente la responsabilidad de lidiar con
que no deja de ser elocuente: en lo que respecta al las consecuencias involuntarias e indeseadas de
empleo, las fuentes consultadas calculan que menos la expansión portuaria. Esa es la gran disyuntiva
del 15 % de la población tiene trabajo, mientras que del centro: en su calidad de núcleo institucional, el
entre un 40 y un 50 % no ejerce ningún tipo de acti- propósito y la indudable conveniencia de apoyar el
vidad laboral (de la población desempleada, cerca crecimiento de la actividad portuaria van a contra-
de la mitad está entre los dieciocho y los sesenta mano de la obligación de apechugar con los proble-
años). Según los datos del Sisbén, al momento del mas que dicho crecimiento ha traído consigo, como
sondeo un 81.7 % del total de los encuestados no las trabas a la circulación, el aumento de la insegu-
percibía ingresos regulares (salariales, en especie, ridad y el microtráfico en las zonas aledañas a la
o por algún tipo de renta derivada de arriendos, zona franca, o la erosión del tejido social y urbano.
principalmente), y cerca del 95 % recibía menos de
un salario mínimo al mes. Cabe identificar una ambigüedad similar entre el
centro de la ciudad y el puerto en el ámbito del
La vulnerabilidad socioeconómica en Pescaí- turismo. La Sociedad Portuaria no ha sido indi-
to está inscrita en una compleja constelación de ferente a la polémica que en años recientes se ha
poder, que se expresa con absoluta nitidez en tér- dado en tormo al impacto ambiental de algunas
minos territoriales, tal como lo ilustra el plano de sus actividades y los efectos de dicho impacto
de convergencias y conflictos socioeconómicos sobre el turismo. No en vano, en su Plan parcial
(plano 7.8). La intersección marcada con la letra a, de renovación urbana del puerto de Santa Marta y
entre el puerto y el área de influencia del centro su área de influencia, la Sociedad ha puesto de re-
simbólico de Pescaíto, comprende la zona de El lieve la posibilidad de conjugar la expansión del
Boro, a la que hemos dedicado ya varios pasajes terminal con la construcción de infraestructura
de este libro. Demoliciones, cerramientos con mu- hotelera y el turismo de cruceros. Reforzar la vo-
ros y ruptura de flujos urbanos han acompañado cación turística de Santa Marta es crucial para su 201
P la n o 9 . 8
Plano de convergencias y conflictos socioeconómicos
Planos Vivos

Zona institucional, comercial y


turística del centro histórico
Pescaito

Zona industrial de la
Sociedad Portuaria
Zona ecológica con potencial
industrial, turístico y recreacional
Zona residencial tradicional
de Pescaíto

d e
Conclusiones

investigación
de la

b c

desarrollo, de eso no cabe la menor duda, pero no logre compaginar el ímpetu expansivo de la activi-
es menos cierto que el potencial turístico del cen- dad comercial con las dinámicas residenciales que
tro histórico puede ser aprovechado a cabalidad nutren el patrimonio cultural pescaítero. Este es el
si se amplía el abanico de opciones, más allá de mejor expediente para restablecer los flujos entre la
las formas tradicionales de turismo, para ligarlo zona y el centro histórico, así como para garantizar
con un proyecto de claro énfasis ecológico y cul- que sus habitantes no quedarán al margen de los
tural. La materialización de esta propuesta en la beneficios que la conjunción de la renovación ur-
zona de conexión entre el camellón y el área admi- bana con el fomento de un espectro turístico más
nistrativa del puerto exige una solución que sepa amplio puede traer.
combinar usos industriales, residenciales, comer-
ciales, culturales y turísticos; una que dé cabida a La cuarta de las intersecciones, marcada con la le-
la ampliación del terminal portuario, a las priori- tra d en el plano, abarca la ‘franja fronteriza’ que
dades en términos administrativos y turísticos del separa el barrio de San Martín del puerto. Aquí se
centro, y a la proyección del patrimonio cultural y hacen patentes con toda severidad los dilemas casi
urbano de Pescaíto. insolubles en la constelación socioeconómica en la
que está inscrito el gran Pescaíto. En su Plan par-
Una dualidad similar a la que acabamos de exponer cial de renovación urbana, la Sociedad Portuaria ha
se presenta en la intersección marcada con la letra definido como una de sus máximas prioridades la
c, aquella franja territorial que comprende la zona ampliación de sus instalaciones sobre los terrenos
ubicada entre el centro y el área de influencia del ocupados por el barrio, de la mano de un plan de
mercado. La importancia socioeconómica del mer- reasentamiento voluntario, formalización produc-
cado es indiscutible, sobre todo para un sector que tiva y “acompañamiento social”. La perspectiva
como Pescaíto está ávido de alternativas de empleo. de reubicación ha dividido a la comunidad de San
Pero si bien la ampliación e intensificación de la ac- Martín, tal como lo pudimos comprobar en el tra-
tividad comercial en torno al mercado son priorita- bajo de campo, pues las potenciales ventajas de
rias para el Distrito, estas no se pueden realizar a un reasentamiento chocan con la fuerte identidad
cualquier precio: los desafíos administrativos plan- territorial y el sentido de pertenencia de los habi-
teados por la invasión del espacio público, la mala tantes. La solución de esta encrucijada impone un
disposición de las basuras y el deterioro del tejido marco de negociación más amplio; uno que tenga
urbano se pueden salir de las manos, e incluso de- en cuenta los procesos de reafirmación histórica,
rivar en la reedición de algunas de las experiencias cultural y material que han echado profundas raí-
202 más desafortunadas de El Boro, siempre que no se ces en el barrio. Al integrar a San Martín en la pro-
Traducir el potencial del patrimonio material e inmaterial
de Pescaíto en un desarrollo socioeconómico equilibrado y
sostenible exige una propuesta urbanística comprehensiva,
capaz de conciliar [...] los intereses –en ocasiones

Raiz socio-
económica
convergentes, en ocasiones divergentes, en ocasiones
diametralmente opuestos– de los distintos actores RE

territoriales involucrados”.

puesta global de renovación urbana, el proyecto conciliación de intereses es imprescindible en el


de Planos Vivos brinda nuevos elementos de juicio propósito de garantizar que las oportunidades
para facilitar el diálogo entre el puerto y el barrio, económicas derivadas de un turismo de nuevo
además de plantear alternativas que eviten que los cuño, que sepa aprovechar la riqueza cultural y
intensos contactos entre la Sociedad Portuaria y la urbana de Pescaíto, abarquen el mayor número de
Junta de Acción Comunal se estanquen por culpa personas posible, ya sea en el sector de la gastro-
de posturas maximalistas. nomía y la hotelería; en la prestación de servicios
turísticos diversos; en el cuidado y mantenimiento
La última de las intersecciones aquí examinada es la de la infraestructura física, las zonas verdes y el
que con la letra e designa el área de contacto entre sendero ecológico de los cerros; o en el desarrollo
la zona llana del gran Pescaíto y los barrios de Villa de actividades deportivas y culturales que propi-
Tabla y Ensenada. El primer gran reto lo constituye cien el encuentro entre la comunidad pescaítera y
el de restablecer el vínculo histórico entre Ensenada sus huéspedes, como en el caso del Carnaval.
y las antiguas urbanizaciones obreras de la zona pla-
na, lo mismo que aprovechar la raigambre histórica Ahora bien, la propuesta urbana integral que pone-
de Rincón Guapo como puente hacia la integración mos a consideración de los lectores es condición
plena de Villa Tabla a las dinámicas socioeconómi- necesaria, pero no suficiente, para impulsar una
cas en Pescaíto. La propuesta del sendero ecológico, auténtica transformación de largo plazo. El otro
el escenario del Mar en la playa de Pescaíto y el par- componente que Planos Vivos se ha preocupado
que longitudinal sobre la vía Alterna abre espacios por promover, en correspondencia con el énfasis
para articular un desarrollo en conjunto, que no con- investigativo que pone sobre el universo objetual
dene a los barrios de los cerros al rezago. Su mate- de las comunidades, es el de la iniciativa empresa-
rialización depende, empero, de la solución del que rial comunitaria. Bajo el concepto de libre de marca,
quizás sea el conflicto socioeconómico más sensible; acuñado por Simón Hosie para impulsar empren-
aquel que enfrenta los intereses urbanos y turísticos dimientos locales innovadores, se busca desarrollar
ligados a la reforestación y la preservación de los ce- productos que exalten los hábitos, las costumbres y
rros con el poblamiento espontáneo de quienes son, las dinámicas propias de cada lugar4. Para Pescaí-
en último término, las personas más vulnerables en to fueron concebidos dos productos: por un lado, la
todo el sector. Es indispensable frenar el poblamien- Sollera, que combina la cartera y el rodillero (tra-
to sin control de los cerros (lo mismo que el de la po que utilizan las mujeres que cargan productos
servidumbre del ferrocarril) con soluciones que bajo sobre su cabeza, para amortiguar el impacto de
ninguna circunstancia acentúen la marginalización las palanganas); por el otro, la Callejera, un dise-
de su habitantes, y simultáneamente adelantar la ño que fusiona la banca de calle, esa que las ma-
consolidación de todos los asentamientos que lo per- dres ubican en el frente de sus casas para cuidar
mitan. La cuadratura de este círculo es la que permi- a sus hijos mientras charlan con la vecina, con las
tirá aprovechar el potencial ecológico y turístico de porterías portátiles, hechas de varillas y tubos, que
los cerros, incorporarlos activamente a la renovación niños y jóvenes llevan al hombro hasta el lugar del
urbana y robustecer la posición socioeconómica de cotejo. En el siguiente capítulo los lectores tendrán
sus moradores. la oportunidad de darle un vistazo a la Callejera y
evaluar por sí mismos la manera en que su diseño
Traducir el potencial del patrimonio material e puede contribuir con un desarrollo sustentado en la
inmaterial de Pescaíto en un desarrollo socioe- cultura popular pescaítera.
conómico equilibrado y sostenible exige una pro-
puesta urbanística comprehensiva, capaz de con-
ciliar (hasta donde sea posible) los intereses –en
ocasiones convergentes, en ocasiones divergentes, 4 “Libre de marca” es una marca registrada de Simón Hosie Samper
con el certificado de registro 411900, expediente 10 055045, resolución
en ocasiones diametralmente opuestos– de los de concesión 58964 del 28 de octubre de 2010 de la Superintendencia
distintos actores territoriales involucrados. Esa de Industria y Comercio. 203
Planos Vivos

c
Pescaito

R ai z
RP POLÍTICA
a
Conclusiones

investigación

2
de la

Por su profundo y detallado planos

conocimiento de las redes vivos

de liderazgo, las estructuras


organizativas y las dinámicas
comunitarias, la propuesta 1
de Planos Vivos puede a
robustecer la gobernanza b
c
en Pescaíto y abrir espacios
de negociación y debate que
trasciendan las estrategias
tradicionales.

1
La Sociedad Portuaria es, de lejos, el actor privado habitantes, tal como lo registró la investigación
de mayor gravitación en el gran Pescaíto. Su capa- de campo de Planos Vivos, demuestra que la in-
cidad de cabildeo ante las autoridades distritales, fluencia de la que goza la Sociedad Portuaria no
departamentales y nacionales es considerable, y siempre basta para llevar a feliz término las ne-
en esa medida tiene buenas cartas en la mano a gociaciones más complejas. Se hace indispensable
la hora de defender y promover sus intereses eco- un marco político de negociación más amplio, que
nómicos y logísticos. Su músculo financiero incli- integre las dimensiones sociales y culturales de la
na todavía más la balanza a su favor y le permite vida en el gran Pescaíto y las concilie con el ám-
constituirse en agente político de primer orden en bito más restringido de los intereses económicos
las negociaciones sobre el futuro del territorio, así de las partes. En su empeño por ligar las consi-
como en socio estratégico de los proyectos de re- deraciones económicas con el contexto social y el
novación urbana. Ahora bien, las dificultades que patrimonio cultural, la propuesta de Planos Vivos
se han evidenciado en los diálogos con los líde- ofrece un marco integral para alcanzar consensos
204 res de San Martín en torno a la reubicación de sus fundamentales.
política
Raiz
2 RP

El patrimonio cultural no es simplemente un ción de su medio urbano y la mejora de las condi-


‘bien’ que pueda ser protegido por decreto des- ciones socioeconómicas en las que se desenvuel-
de arriba (lo que no implica, por supuesto, que el ve, lo mismo que el reconocimiento del legado
compromiso legal e institucional con su preser- histórico que lo nutre, le son consustanciales a
vación no sea crucial, como lo señalamos antes). su preservación y desarrollo. El patrimonio cul-
La savia del patrimonio cultural está constituida tural descansa, en último término, en la forma-
por los hábitos y las prácticas cotidianas, el saber ción de consensos fundamentales desde abajo; en
vivir y el “color local”, los saberes y oficios del la articulación de esfuerzos y la movilización de
lugar, la visión de mundo y la identidad compar- recursos en pos de un propósito común: se trata
tidas. En esa medida, tal y como lo hemos sub- de un acto de afirmación política (en su sentido
rayado a lo largo de esta investigación, el patri- más amplio), que propone una interpretación del
monio cultural necesita condiciones materiales y pasado para imaginar un futuro posible. La pro-
sociales específicas para mantener su arraigo y puesta de Planos Vivos puede constituirse en un
garantizar su proyección ulterior. La consolida- escenario abierto al diálogo y al debate, que le
permita a la comunidad superar diferencias y au-
nar esfuerzos en la búsqueda de un mayor bien-
estar. Ese mismo proceso puede afianzar su po-
sición como sujeto político y empoderarla en las
negociaciones con la empresa privada y las ins-
tituciones públicas, en un marco que trascienda
las estrategias de cooptación y los intercambios
clientelistas de miras más estrechas.

3
a
b
c

El Plan maestro 500 años aborda uno de los ma- congruente con el patrimonio samario, por el otro.
yores desafíos de las instituciones públicas de la No hay que olvidar que el turismo es “la activi-
ciudad, como lo es el de compaginar la expansión dad económica central de Santa Marta”, y que su
de la actividad portuaria con el propósito de con- futuro crecimiento depende en no poca medida
solidar a Santa Marta como “capital ecoturística de la creación de un marco legal, institucional y
del Caribe”, aprovechando para ello la riqueza de político que le dé proyección al patrimonio mate-
su patrimonio ambiental, histórico y cultural.5 El rial e inmaterial de la ciudad. La Ley de Distritos
reto no es nada sencillo, como lo reconoce el pro- Especiales (Ley 1617 del 5 de febrero de 2013), que
pio documento: “El Distrito tiene el mejor puer- declaró a Santa Marta como patrimonio cultural
to natural de aguas profundas del país, pero así de la Nación, y que le confiere al Distrito amplias
mismo cuenta con la limitación de estar rodeado facultades en materia de regulación portuaria y
por el tejido urbano más antiguo de Latinoamé- fomento turístico, ofrece una base robusta para
rica declarado zona de conservación por interés la negociación política y la toma consensuada de
general y por cerros a orillas de mar [sic]”. La pro- decisiones. Para el caso de Pescaíto, la propuesta
puesta urbana de Planos Vivos ofrece un espacio de Planos Vivos muestra, en el ámbito urbano, un
idóneo para conciliar, desde la perspectiva de las camino por seguir; uno que puede fortalecer la ca-
instituciones públicas, la ampliación del puerto pacidad institucional de la ciudad, en la medida en
como socio estratégico de la ciudad, por un lado, que posiciona a las autoridades distritales como
y el fomento de un turismo diversificado que sea mediadoras eficaces entre los interesados en la ex-
pansión del terminal portuario y quienes abogan
por el fomento de un turismo diversificado, respe-
5 Alcaldía de Santa Marta / ONU-Habitat. Santa Marta. Plan maestro 500
años, 1525-2025. Santa Marta: 2013. Las citas fueron extraídas de las tuoso del patrimonio pescaítero.
págs. 2 y 18. 205
c

b
Planos Vivos
Pescaito

POBLACIÓN
Conclusiones

investigación

DE PESCAÍTO
de la

Crecimiento económico
Ampliación y adaptación
de la actividad portuaria.

Expansión portuaria
Activación de un Plan
Parcial definitivo.

Optimización de
procesos
Articulación funcional,
incorporación de predios
privados y de las calles
cerradas de El Boro.
planos
vivos

ALCALDÍA
SOCIEDAD
DE SANTA
PORTUARIA
MARTA
a
b
c

La solución urbanística planteada por Planos Vi- troduce mucho antes de su ejecución una nueva
vos para la zona de El Boro es un ejemplo puntual dinámica en la mesa de diálogo: se trata de de-
de la manera en que los proyectos participativos batir una propuesta concreta, a la mano, que per-
y sostenibles pueden articular nuevos espacios de mite enfrentar, contrastar y conciliar diferentes
acción política –en el más amplio sentido– desde visiones de futuro, sin necesidad de reducir todo
su misma concepción. La situación de deterioro el proceso al cálculo de costos y beneficios en el
en El Boro no da espera, y el proyecto de fútbol más corto plazo. No todos los proyectos de Planos
calle ofrece una solución que, además de expedi- Vivos pueden ser puestos en marcha con la misma
ta, se alimenta del patrimonio cultural para ase- celeridad, pero en todos y cada uno está presente
gurar su sostenibilidad a largo plazo. Al tratarse el compromiso con el diálogo y el fortalecimiento
de una respuesta de aplicación inmediata, que no de la gobernanza.
exige extensos periodos de planeación y construc-
ción, ni requiere de la dispendiosa aprobación de
206 partidas presupuestales o créditos cuantiosos, in-
La propuesta de renovación

política
Raiz
urbana de Planos Vivos RP
Unión de líderes
Solución a los problemas fundamentales:
inundaciones, microtráfico y servicios.
abre un espacio de diálogo y
negociación para canalizar
conflictos y construir consensos
Activación económica
Turismo, puerto, mercado, emprendimientos,
negocios locales, frentes laborales.
fundamentales, basados en el
Consolidación barrial y renovación urbana
Infraestructura cultural, deportiva y
recreativa; conexión con la ciudad.
principio de la alteridad.

Plan maestro 500 años


Plan integral de desarrollo.

Solución de problemas fundamentales


Servicios públicos, desempleo, problemas ambientales
y sociales, riesgos, salud, educación, etc.

Crecimiento económico
Visión conjunta, desarrollo portuario y turístico.

a
b
c

Fútbol calle de El Plan parcial de renovación urbana de la Sociedad La propuesta urbana


Pescaíto. Portuaria contempla una intervención sustan- del Plan Parcial de la
Sociedad Portuaria
Fuente: Archivo de
Planos Vivos (2016) cial, que busca articular la ampliación del puerto
con proyectos inmobiliarios y turísticos de gran
envergadura.6 Constituye, sin lugar a dudas, una
apuesta ambiciosa que transformaría radicalmen-
te la realidad urbana de Pescaíto, pero que puede
llegar a reñir con la conservación y el desarrollo
de su patrimonio cultural y material.

6 Sociedad Portuaria de Santa Marta / Promotora Urbana de Santa


Marta – Prourbana S.A.S. Plan parcial de renovación urbana del puerto
de Santa Marta y su área de influencia. Documento técnico de soporte.
Santa Marta: Junio de 2014. 207
8 Propuesta urbana
y arquitectónica
P la n o 8 . 1
6.3

6 6.1

M
6.2
6.1
M
M 3
7.2
6.1 3.1 3

7.1
5

3
M
5.2

3.1 4 5

1 5.1
2

1 5.3

7.5 8 5

7.4

7.3

208
Las antinomias

política
bosque
“administrado”/

Raiz
natural entre
dos bosques de RP
álamo y ciudad
“hipermodernista”/
espontánea entre el

Raiz socio-
económica
Eje Monumental de
Brasilia (izq., 2009) y
la Praça da Sé (der.,
1984) de São Paulo. RE
Fuentes: https://
commons.wikimedia.org y
http://reino-de-clio.com.br

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
Al repasar los principales hilos argumentales y y la antinomia ciudad espontánea/ciudad “hiper-
énfasis analíticos, la lectora o el lector podrá ad- modernista” de cuño corbuseano (fig. 33).1 Desde RC
vertir que la visión de desarrollo urbano de Planos una perspectiva semejante, el propósito de Planos
Vivos navega entre dos aguas. Tenemos, por una Vivos de acercarlos –allí donde parezca viable– e
parte, el principio que privilegia la funcionalidad incluso conjugarlos –allí donde resulte impres-

histórica
y la técnica por encima de cualquier otra consi- cindible– será desestimado como una causa per-

Raiz
deración, y que no tiene empacho en recomendar dida. Ahora bien, incluso el más escéptico sabrá
demoliciones masivas para transformar radical- reconocer, sin necesidad de condescender en su- RH
mente la faz de una ciudad y recrearla de acuerdo percherías, que el hecho de que dos personas con
a los cánones estéticos y racionales de un mode- visiones tan disímiles como Jacobs y Le Corbusier,
lo visionario. Un modelo que solo alguien desde con lentes tan dispares para observar la realidad,
afuera, instalado en una atalaya a cierta distancia hayan optado por el mismo tipo de montura para
del núcleo urbano, estaría en capacidad de plan- sus gafas, constituye una señal auspiciosa.
tear y aplicar sin miramientos. En la otra orilla
tenemos el principio que aboga por un urbanismo No se trata aquí de ignorar los múltiples puntos
de base, que se nutra de las dinámicas sociales y de fricción entre aproximaciones tan diferentes y,
culturales de una comunidad, y que sepa recono- en no pocos aspectos, diametralmente opuestas.
cer desde adentro los espacios que les permiten Tampoco es conducente recurrir a una oftalmo-
florecer y ramificarse. Un urbanismo que valore in logía salomónica que formule un lente ‘jacobsia-
situ el sentido de pertenencia, las formas de la con- no’ y otro corbuseano, con la indicación de cerrar
vivencia y la identidad colectiva, y que promueva alternadamente uno de los ojos cuando la sensa-
proyectos de renovación respetuosos de su espíri- ción de mareo se haga intolerable. Planos Vivos
tu. Para ilustrar esta tensión hemos escogido, de la reconoce que toda aproximación comporta una
variopinta baraja a nuestra disposición, dos cartas distorsión particular (y necesaria), y en esa medi-
de reconocido carácter arquetípico en el tarot del da la disposición a emplear, contrastar y conjugar
urbanismo: la de Jane Jacobs y la de Le Corbusier. diferentes anteojos es la mejor manera de abordar
La defensa a ultranza del tejido urbano y social la complejidad de la realidad urbana. Más que dos
existente como base irrenunciable de un urbanis- dogmas mutuamente excluyentes, enfoques como
mo humano en ella, así como la predilección de él los de Jane Jacobs y Le Corbusier constituyen los
por la tabula rasa como fundamento de cualquier dos polos de un continuo epistemológico sobre
transformación que merezca el nombre, son de so-
bra conocidos. No son pocos los que ven en estos
James C. Scott, Seeing Like a State: How Certain Schemes to Improve
dos arquetipos un par de imperativos urbanísticos 1
the Human Condition Have Failed. New Haven/Londres: Yale Univer-
antagónicos, carentes de cualquier denominador sity Press, 1998, en especial pp. 11-22, 53-63 y 103-146 . Los términos en
común, tal como lo hace James C. Scott al estable- inglés son “managed forest” o “scientific forest” y “high-modernist
city”. En la figura 33 recurrimos a los motivos empleados por Scott
cer una analogía entre la antinomia bosque natu- para ilustrar sus ideas como apoyo gráfico a nuestra propia argu-
ral/bosque “administrado” (silvicultura científica) mentación. 209
Planos Vivos
Pescaito
Propuesta urbana
y arquitectónica
Plano de la propuesta

Dos visiones el que la investigación y el diseño deben despla- se derrama desde las ensenadas interiores de los
arquitectónica

diferentes y un zarse permanentemente en pos de las respuestas cerros sobre la zona llana. Con un rápido cambio
mismo marco:
que mejor se adecúen al problema que está siendo de gafas será posible observar –esta vez desde la
urbana y

Le Corbusier y
Jane Jacobs. estudiado. Soluciones sostenibles y participativas óptica corbuseana– la manera en que el restable-
Fuentes: http://www. como las que abandera Planos Vivos, congruentes cimiento de las conexiones metropolitanas le ha
taringa.net y http://
regeneracionurbanavalencia con el patrimonio material e inmaterial del lugar, permitido al patrimonio material e inmaterial de
.es deben combinar el rigor formal, funcional y técni- Pescaíto participar de nuevos circuitos de inter-
co con la incorporación del arraigo de la memoria cambio y generar eco en lugares insospechados.
viva, el potencial del patrimonio urbano y cultural,
la riqueza ambiental y las perspectivas socioeco- En ese cambio de anteojos siempre habrá algo
nómicas del lugar. de vértigo y visión borrosa, pero el malestar mo-
mentáneo se paga con creces al ganar múltiples
No es ningún secreto que la propuesta de Planos perspectivas de análisis y enriquecer el propio
Vivos tiende a orbitar mucho más cerca del polo horizonte, tal como lo podrán comprobar por sí
de Jane Jacobs, pero no es menos cierto que re- mismos los lectores al detenerse en el plano de la
conoce de buena gana las situaciones en las que propuesta urbana y arquitectónica que presenta-
es preciso desplazarse hacia el polo corbuseano. mos a continuación.
El principio metodoilógico que guía el trabajo de
Planos Vivos se manifiesta precisamente en esa
disposición a moverse desembarazadamente so-
bre ese continuo, sin dejarse atrapar por marcos Plano de la propuesta urbana y
teóricos rígidos, concepciones estéticas absolutas, arquitectónica (plano 8.1)
prácticas metodológicas inflexibles o soluciones
estandarizadas. La propuesta de renovación ur- 1) Red de drenaje y saneamiento urbano: Una de
bana y arquitectónica de Planos Vivos es, en este las necesidades más sentidas por parte de la comu-
sentido, una invitación a descubrir y recorrer el nidad pescaítera es la de la solución al problema de
territorio pescaítero desde una mirada ecléctica, las inundaciones periódicas, provocadas por el des-
libre de prejuicios, abierta a lo imprevisto y a lo bordamiento de aguas lluvias, mezcladas con aguas
que a bocajarro resulta inexplicable. El lector o la servidas. La propuesta de Planos Vivos promueve la
lectora sabrán sacarle el máximo provecho a la in- búsqueda de una solución técnica definitiva, diseña-
vitación si llevan a mano ambos pares de gafas y da por especialistas en la materia, que complemente
se disponen a realizar con ellos diferentes reco- la infraestructura existente con una red de colecto-
rridos a lo largo y ancho del sector. Una opción, res, drenajes y sistemas de bombeo. El énfasis debe
entre muchas, puede ser la de calarse las gafas de ser puesto en una respuesta de índole sistémico, que
Jane Jacobs para recorrer palmo a palmo los ca- se ajuste a los condicionamientos naturales y geo-
llejones estrechos, las esquinas y las terrazas de gráficos, y que no se limite a plantear remedios pun-
una remozada calle 3 en San Martín, maravillarse tuales, como ha sucedido en el pasado.
con la vitalidad de su patrimonio cultural y sentir
su vínculo estrecho con la riqueza ambiental del El plano de riesgos y la ficha sobre inundaciones
lugar a medida que se asciende por los senderos y escorrentías en Pescaíto ofrece un soporte ro-
ecológicos de unos cerros del Norte reforestados busto para la búsqueda de una respuesta óptima
con plantas y árboles nativos. Una vez en la cum- en términos técnicos. Ahora bien, la riqueza de la
bre, valdrá la pena apartar la vista del camino re- información contenida en dichas herramientas no
210 corrido y dirigirla hacia el gran Pescaíto, tal como solo sirve de apoyo a los especialistas; asimismo
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

Más que dos dogmas mutuamente excluyentes, enfoques

urbana
Raiz
como los de Jane Jacobs y Le Corbusier constituyen RU

los dos polos de un continuo epistemológico sobre


el que la investigación y el diseño deben desplazarse

Raiz socio-
c u lt u r a l
permanentemente en pos de las respuestas que mejor se
RC
adecúen al problema que está siendo estudiado”.

histórica
Raiz
La necesidad permite articular las soluciones técnicas con los Para garantizar la apropiación y el uso de la nue-
inaplazable de cambios en los hábitos y en la relación de las per- va infraestructura por parte de los habitantes, el RH
conciliar las
sonas con su entorno, sin los cuales no se puede proyecto integra activamente saberes, oficios y ta-
necesidades
funcionales con el garantizar la sostenibilidad de las obras en el lar- lentos locales, representados por los tejedores de
patrimonio urbano y go plazo. El problema de la disposición de las ba- redes de pesca de Taganga y San Martín, los pin-
cultural de Pescaíto. suras y el taponamiento de colectores y drenajes tores del gran Pescaíto y los ornamentadores del
Fotografías de Luis
Miguel Marín
así lo indica. sector, entre otros. El propósito fundamental es el
de darle nueva proyección al hábito de los niños
2) Transformación urbana de El Boro: La propues- y las niñas de jugar en la calle bajo el cuidado de
ta de Planos Vivos hace hincapié en la renovación sus madres, que suelen sentarse en las aceras y los
y el saneamiento de la zona de El Boro desde una frentes de las casas para hablar de lo divino y lo
perspectiva sostenible, congruente con el patrimo- humano mientras están pendientes de ellos. El di-
nio urbano y cultural de Pescaíto, que sea concer- seño incorpora el patrimonio cultural de Pescaíto
tada entre la Sociedad Portuaria, la comunidad y e involucra el trabajo y la participación directa de
las instituciones públicas. Para tal efecto plantea los pescaíteros –niños, jóvenes y adultos– durante
la transformación de los nichos ciegos, generados la ejecución y la puesta en marcha del proyecto.
por los muros de cerramiento de la zona franca, en Igualmente busca reducir a un nivel mínimo su
instalaciones deportivas para la práctica del legen- huella ecológica, en cuanto recicla, reutiliza y res-
dario fútbol calle y otros deportes, como el patinaje taura los materiales existentes. El diseño aprove-
(una de las actividades predilectas de las niñas del cha al máximo la luz diurna, en combinación con
sector), el boxeo y el baloncesto. Callejones sin sali- la sombra provista por las mallas tejidas por los
da, que sirven de caldo de cultivo a diversas activi- pescadores. La iluminación nocturna la proveen
dades ilícitas y delictivas, y en los que se condensan baterías alimentadas durante el día con energía
los problemas ambientales, urbanos y sociales más solar.
La infraestructura aprovecha los muros de
graves de Pescaíto, son transformados así en espa- cerramiento construidos por el puerto para con-
cios para la recreación y el esparcimiento, gracias a formar un espacio cerrado con un gran portón, en
una infraestructura deportiva de carácter renova- forma de reja, elaborado por los ornamentadores
dor y participativo, iluminada y protegida del sol, de la zona con material reciclado. Una vez solucio-
administrada por madres de la comunidad, que nado el aspecto técnico de los colectores y drena-
desde siempre han reclamado mayores espacios de jes para aguas lluvias y servidas, las calles deben
juego para los niños y las niñas del sector. ser rellenadas con recebo y tierra local. 
 211
Para el caso puntual de Pescaíto, el parque longitudinal
Planos Vivos
Pescaito

–enmarcado dentro de la propuesta integral de Planos


Vivos– constituye una contribución importante en el
propósito de conciliar el crecimiento de la actividad
Propuesta urbana

portuaria y la reactivación ferroviaria con la sostenibilidad


y arquitectónica

ambiental y social.”.
Plano de la propuesta

Las instalaciones deportivas de El Boro están en- zonas de riesgo y en las servidumbres de la vía Al-
marcadas dentro una propuesta urbana integral, terna y del ferrocarril (3.1). La ampliación de la vía
arquitectónica

que busca restablecer –desde un turismo de nue- férrea, en particular, es un proyecto crucial para el
vo cuño– los antiguos vínculos orgánicos entre el puerto, la ciudad y el país, como bien lo reconoció
urbana y

puerto y Pescaíto. En ese sentido, conviene reem- en su momento el Plan maestro 500 años: “Santa
plazar el muro en bloque de cemento y concertinas Marta es el único puerto sobre el Caribe colombia-
de alambre de púas por cerramientos que ofrezcan no que cuenta con servicio férreo que lo interconec-
transparencia y permitan el paso de la brisa, la luz ta con el interior andino, el valle del Magdalena y la
y el agua, y que propicien la vinculación del área zona carbonífera del Cesar. El Puerto de carbón y
del terminal portuario a unas carreras 4.a y 5.a re- el sistema ferroviario proyecta un eje logístico y de
vitalizadas como ejes comerciales y turísticos típi- Servicios de transporte multimodal (transporte de
cos del gran Pescaíto, con sus callejones estrechos, cargas y pasajeros) estratégico para el país, siempre
terrazas, tiendas esquineras y pisos altos. La expe- y cuando se garanticen los más altos estándares in-
riencia de otras ciudades portuarias en el mundo, ternacionales de cuidado ambiental y social”.2 Para
como Hamburgo, Ámsterdam o San Francisco, que el caso puntual de Pescaíto, el parque longitudinal
apelan a cerramientos transparentes que no obsta- –enmarcado dentro de la propuesta integral de Pla-
culizan la visibilidad o el paso de la brisa, demues- nos Vivos– constituye una contribución importan-
tra que una ciudad bien puede aprovechar la belleza te en el propósito de conciliar el crecimiento de la
intrínseca a la monumentalidad industrial de su ac- actividad portuaria y la reactivación ferroviaria con
tividad portuaria, con el movimiento de las grúas la sostenibilidad ambiental y social.
y el vuelo de los contenedores que la caracterizan.
4) Renovación del centro urbano y simbólico del
3) Restablecimiento del tejido urbano entre los gran Pescaíto: El corazón de la propuesta de Pla-
cerros y la zona llana: Desde el punto de vista ur- nos Vivos está en la renovación del centro urbano y
banístico, la única manera de garantizar un de- simbólico de Pescaíto en derredor de la cancha de
sarrollo sostenible y equilibrado en el gran Pes- La Castellana. El proyecto parte de la “ley y el orden
caíto es la de restablecer los vínculos históricos de la calle”, tal como la formuló Jane Jacobs, para
y reconstituir el tejido urbano y social entre los ofrecer diseños y soluciones urbanas que valoren y
asentamientos de la zona llana y los núcleos de fortalezcan aquellos aspectos inmateriales que son
poblamiento en los cerros. Una de las propuestas constitutivos de la cultura popular pescaítera. Junto
que apuntan hacia este objetivo es la del parque con su compromiso con el robustecimiento del teji-
longitudinal sobre la vía Alterna, que a la manera do social, cultural y urbano, la propuesta de Planos
de un corredor verde debe fortalecer la conexión Vivos plantea –con una convicción corbuseana–
entre los barrios, las canchas, los equipamientos transformaciones de gran calado en la manzana de
urbanos y los cerros tutelares de Pescaíto. El par- La Castellana, todo con el propósito fundamental
que longitudinal está llamado a resaltar el poten- de abrirla al público a través de un espacio urbano
cial ambiental; recuperar para el territorio la im- generoso, asociado a una infraestructura cultural y
portancia histórica de los cerros y las playas, tal deportiva innovadora que amplíe los horizontes del
como está registrado en la memoria viva, y articu- barrio hacia un turismo de nuevo cuño, animado
lar funcionalmente la renovación del sector de La por el deseo de conocer de primera mano y vivir
Castellana con el proyecto del sendero ecológico a flor de piel las manifestaciones originales de la
sobre los cerros del Norte. cultura de sus habitantes.

La realización del parque longitudinal presupone 2 Alcaldía de Santa Marta / ONU-Habitat. Santa Marta. Plan maestro 500
212 la reubicación de aquellos habitantes asentados en años, 1525-2025. Santa Marta: 2013, p. 18.
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
En respuesta a los intereses y las necesidades de tiene en la Casa del Pueblo de Guanacas (Cauca) Maqueta de la

Raiz
los habitantes, tal como se hicieron manifiestos y en la Casa del Pueblo de El Salado (Bolívar) dos propuesta de
renovación urbana
durante el proceso de investigación participativa, antecedentes exitosos e inspiradores.4 Muchas RH
de Planos Vivos
el componente cultural de la propuesta gira en construcciones destinadas a proyectos educativos para Pescaíto.
torno a la Casa de Pescaíto, un edificio sobre el y culturales suelen distanciarse de manera invo- Fotografía de Paola
costado oriental de la cancha que debe funcionar luntaria, pero no por eso menos palpable, de las Macía Fernández

como centro cultural, biblioteca, museo del fútbol comunidades a las que justamente deberían con-
y casa comunitaria, abierto en forma de gran es- vocar y servir. Más allá de los problemas puntuales
quina hacia el centro urbano de Pescaíto y conec-
tado, por el costado sur, con el salón de Danza y la
con certificado de registro 508572, expediente 14 109409, resolución de
casa de la Música. Este complejo edilicio se sitúa concesión 83437 del 29 de diciembre de 2014 de la Superintendencia
en el centro de una plazoleta inclinada, flanquea- de Industria y Comercio.
La Casa del Pueblo de Guanacas recibió el Premio Fernando Martí-
da por casas restauradas de gran valor histórico 4
nez Sanabria al mejor proyecto arquitectónico en la Bienal Colom-
y patrimonial, que está concebida como un gran biana de Arquitectura de 2004: “Un proyecto que capta la esencia de
‘patio urbano’: más allá de sus usos específicos, los la función de la arquitectura como oficio colectivo entre el arquitecto,
el programa, el contexto y el usuario. […] La Casa del Pueblo funge
espacios del patio de la Cultura deben convocar a como un encuentro entre la arquitectura vernácula –su esfera cultu-
propios y extraños por su capacidad de evocar y ral y social– y la arquitectura moderna –su esfera estética y ambien-
tal– . El proyecto cumple fielmente con los conceptos de arquitectura
recrear, a gran escala, los rituales de la conviven- vernácula, donde no participa un arquitecto sino que confluye un he-
cia y la buena vecindad que son inmanentes a la rencia de costumbres, enseñanza y sabiduría que encuentra la forma
identidad colectiva de los pescaíteros y las pescaí- de la vida misma: su sencillez expresiva y no industrializada” (actas
del jurado, Sociedad Colombiana de Arquitectos, XIX Bienal Colom-
teras. Esa es la clave para una apropiación cabal biana de Arquitectura, 2004, p. 32). La Casa del Pueblo de El Salado
de la nueva infraestructura por parte de los ha- recibió el reconocimiento a la sostenibilidad y una mención de honor
en la categoría proyecto arquitectónico de la Bienal Colombiana de
bitantes: un diseño inspirado en los hábitos y las Arquitectura de 2014: “El Comité de Selección Nacional decidió otor-
costumbres locales, que ofrezca espacios para su garle el reconocimiento a la sostenibilidad, ampliando el concepto
reproducción dentro de un nuevo contexto. e incluyendo la dimensión cultural del mismo, a la Casa del Pueblo,
en El Salado, Bolívar. Se consideró que este es un ejemplo notable de
desarrollo sostenible que logra con sensibilidad y sencillez la confi-
La idea detrás de la Casa de Pescaíto se remite al guración, resignificación y apropiación de espacios públicos abiertos
y cubiertos en beneficio de la comunidad” (acta del Comité Nacional
concepto de casa del pueblo, empleado por Simón de Selección). “Estos procesos participativos, donde la comunidad
Hosie como columna vertebral de su trabajo con contribuye al resultado final de la arquitectura, diluyen el tradicional
distintas comunidades en el país.3 Dicho concepto concepto de autor. El desprendimiento que esto supone redibuja la
escala de valores que ha acompañado la arquitectura más mediática
de las últimas décadas” (consideraciones del jurado, Sociedad Co-
3 “Casa del Pueblo” es una marca registrada de Simón Hosie Samper, lombiana de Arquitectos, XXIV Bienal de Arquitectura, 2014). 213
Planos Vivos
Pescaito

Piedefoto
Propuesta urbana
y arquitectónica

La Casa del Pueblo


de Guanacas.
Plano de la propuesta

Fotografías de Simón
Hosie y Fabián Alzate
arquitectónica
urbana y

difusión y la recreación responde sin embargo a una


noble ambición: poner las bases de una democracia
cultural. […] [L]a cultura está en primer lugar en lo
cotidiano; está ligada a la vida humana en todas sus
formas. Por esto, la fórmula ‘cultura en las casas’ debe
orientar el pensamiento hacia actividades y fenóme-
en los mecanismos de participación escogidos, en nos que competen, ellos también, a la cultura.6
la duración y la profundidad de la investigación de
base, en la sensibilidad del diseño frente a los hábi- Estas observaciones pueden ser extrapoladas al
tos y las técnicas locales, o en el involucramiento proyecto de la Casa de Pescaíto, sustentado como
activo de los habitantes en la ejecución y adminis- está en la investigación participativa de Planos Vi-
tración, existe un obstáculo de primer orden que vos y en el compromiso de su equipo con la soste-
subyace a buena parte de la experiencias truncas: nibilidad, la gobernanza y el desarrollo del patri-
el prejuicio todavía muy arraigado que asocia la monio cultural y urbano del sector. El compromiso
cultura y la educación con ámbitos “elevados”, de con la “democracia cultural” en Pescaíto se ve refle-
acceso restringido y reservados en esencia a los jado en todas las aristas del proyecto. Su diseño, por
iniciados, sin mayores vínculos con las prácticas ejemplo, se inspira en la esquina y su tienda como
cotidianas y los saberes locales. Al comentar el lugar de encuentro y confluencia por excelencia. El
concepto de casa de la cultura propugnado por tipo ideal de la tienda esquinera se beneficia de su
André Malraux en Francia en la década de 1960, ubicación, recoge las visuales más amplias en las
Victor Hell señala cómo la “concepción intelectual distintas direcciones, y aprovecha al máximo la
de la cultura tiene por efecto desvalorizar las co- brisa y la sombra. La Casa de Pescaíto retoma es-
sas cotidianas y debilitar el dinamismo de la cul- tas características: resuelve la esquina en el punto
tura”.5 Prosigue Hell: de mayor sombra y mayor ventilación durante el
día, con la apertura en el costado norte del edificio,
La fórmula de André Malraux, que caracterizaba a las donde además se proyecta la visual hacia el par-
casas de la cultura como las ‘catedrales del siglo xx’, que central, la iglesia y la calle. En términos arqui-
parece un poco grandilocuente; la iniciativa de fundar tectónicos, el diseño recurre a técnicas, elementos
en provincia centros especializados en la creación, la y prácticas locales como las esquinas curvas, el

5 Victor Hell, La idea de cultura. México: Fondo de Cultura Económica,


214 1986 [primera edición en francés: 1981], p. 19. 6 Hell, op. cit., pp. 19 y 21.
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
La Casa del Pueblo primer nivel elevado sobre el suelo, las terrazas y entre otros, es fundamental en la decoración de la

Raiz
de El Salado el aprovechamiento de los árboles existentes: el le- cúpula y la contracúpula, en el tejido de chincho-
Fotografías de Simón
Hosie y maqueta virtual gado pescaítero se integra así en el espacio de una rros, hamacas y la gran red suspendida en el vacío RH
de Pablo Said Lissa gran biblioteca y en los recorridos del museo. central de la edificación para recostarse y leer, así
como en la elaboración del mobiliario requerido
El diseño bioclimático del edificio se sustenta para cada uno de los diferentes espacios. La parti-
igualmente en el acervo pescaítero, pues incorpora cipación no se reduce, por supuesto, al momento
el principio de las cajas de aire, tal como fue des- de la construcción: el proyecto ofrece la posibili-
crito en la ficha correspondiente, y lo conjuga con dad de fortalecer la “democracia cultural” y la go-
la piel perforada de la edificación y una claraboya bernanza en Pescaíto, siempre que los habitantes
de vidrio en la parte superior de la caja, encarga- sean integrados en su administración y funciona-
da de calentar el aire, generar un efecto de succión miento. El trabajo exhaustivo de Planos Vivos en
y conseguir la expulsión del mismo, de tal suerte la documentación y el análisis de los liderazgos
que se dé un flujo constante de aire fresco. La ven- y las organizaciones rinde aquí sus mayores fru-
tilación natural, que permite prescindir de aires tos, pues contribuye a estructurar esquemas ad-
acondicionados, encaja perfectamente en un dise- ministrativos y operativos incluyentes, que apelen
ño comprometido con la sostenibilidad ambiental. a los intereses y las prioridades de los diferentes
Paneles solares para accionar ventiladores comple- actores, y que permitan articular los esfuerzos de
mentarios, iluminación tipo LED, materiales locales los líderes humanos, comunitarios, culturales y
producidos en plantas con certificación ambiental, deportivos del sector. La información recopilada
la recolección de agua lluvia para el riego y el aseo, ofrece igualmente una base sólida para impulsar
la conservación de los árboles existentes y la refo- emprendimientos empresariales comunitarios,
restación: todos son componentes integrales de un que se pueden inspirar en la exitosa experiencia
proyecto preocupado por reducir su huella ecológi- de la Hamadora en El Salado (figs. 34 y 35).
ca a un nivel mínimo, por un lado, y por promover
con su ejemplo una agenda medioambiental de ca- El componente deportivo del proyecto busca for-
rácter transformador, por el otro. talecer el sentido de pertenencia ligado a la prácti-
ca del deporte, aprovechar el reconocimiento que
La construcción también honra el principio parti- el fútbol le ha deparado a Pescaíto en todo el país,
cipativo en la medida en que se apoya activamente y darle nueva proyección al legado histórico que la
en los saberes, oficios y talentos locales. El concur- cancha de La Castellana ha sabido atesorar a tra-
so de pintores, artesanos, pescadores y ebanistas, vés del tiempo. El proyecto contempla, en primer 215
La complementariedad entre los núcleos urbanos y el medio
Planos Vivos

natural de los cerros la subraya el proyecto de transformación


Pescaito

de la playa de Pescaíto, que incluye su conexión con


un sendero histórico que recree la antigua ruta de las
tagangueras, así como la construcción del escenario del Mar”.
Propuesta urbana
y arquitectónica
Plano de la propuesta

lugar, un edificio multideportivo en el costado oc-


cidental de la cancha, con plazoletas de acceso en
arquitectónica

los costados sur y norte, flanqueadas por los árbo-


les ya existentes. El edificio conjuga tres niveles de
urbana y

graderías hacia la cancha, por un lado, con un am-


plio espacio para la práctica de distintos deportes,
como baloncesto, fútbol sala y voleibol, por el otro.
Hacia la calle asume la apariencia de un edificio
deportivo moderno, sobrio y sólido, construido
en concreto, con una piel perforada que limita la
entrada del sol y permite la circulación del viento La Castellana. El hotel puede convertirse en piedra Figura 34. La
como principal factor bioclimático. angular de la activación del turismo en Pescaíto, Hamadora, diseño
original de Simón
con una propuesta que ponga el énfasis en los há-
Hosie.
El patio de la Cultura tiene su homólogo aquí en bitos y las prácticas ligadas a la vida en la calle y Fuentes: http://
el patio del Deporte, generado a partir de la am- el patio interior, así como en la estrecha relación artesaniasdecolombia.
com.co y http://
pliación de las zonas deportivas en la manzana del sentido de pertenencia de los habitantes con el www.tugo.co

del costado occidental de La Castellana, entre las fútbol. El proyecto plantea la construcción de un
carreras 5.a y 6.a y las calles 6 y 7. Se trata de una hotel levantado con primer piso en planta libre,
de las manzanas más deterioradas del sector, con ubicado en el centro de la manzana, dentro de un
una gran cantidad de lotes abandonados y casas patio interior, con juegos de agua, árboles, hama-
derruidas. La propuesta plantea la conservación cas, mecedoras, parasoles y zona de restaurante.
de las viviendas más representativas en términos Sus habitaciones siguen una línea contemporánea
históricos y arquitectónicos en el costado norte y y minimalista, con terrazas hacia el norte entre el
sur, sobre la calle 6, así como la construcción del segundo y el cuarto piso, con vista directa hacia la
Centro para el Talento Deportivo de Pescaíto, que cancha de La Castellana. Como complemento de
incluye un centro de alto rendimiento, un edificio la nueva edificación, el proyecto de Planos Vivos le
de servicios, una piscina, canchas de fútbol 8 y apuesta a la renovación del frente de la manzana
fútbol 5, y una cancha múltiple con cubierta para hacia la calle 8 (antigua calle de las Piedras), con
proteger del sol abrasante durante el día. De esta el objetivo de adaptar las casas de ese costado al
forma, el Centro para el Talento Deportivo pro- programa del hotel.
mete fortalecer el potencial del núcleo urbano y
simbólico de Pescaíto como centro de formación El Hotel del Encanto Pescaítero debe encarnar la
y aprendizaje en su sentido más amplio, así como hospitalidad proverbial de los pescaíteros; rendir
reforzar su identificación con la excelencia depor- tributo a la estética local y al goce de departir en
tiva y, por consiguiente, su capacidad para atraer a las calles, los patios y las esquinas; e iniciar a los
jóvenes de la región y de todo el país. El patio del visitantes en la riqueza de los saberes culinarios
Deporte plantea un contrapunto dinámico con el del sector, tal como fueron registrados en la ficha
museo del Fútbol: si este celebra el lustre del pasa- de investigación correspondiente. El hotel alimen-
do y lo vincula con la identidad pescaítera, aquel ta las sinergias de los componentes cultural y de-
proyecta este legado hacia el futuro. portivo en el propósito de transformar Pescaíto
desde su centro urbano y simbólico.
Finalmente, el componente turístico gira en torno
al proyecto del Hotel del Encanto Pescaítero, ins- 5) Consolidación del patrimonio material e inma-
crito a su vez dentro de la renovación urbana de la terial: Para garantizar que el núcleo de la propues-
216 manzana ubicada en el costado sur de la cancha de ta irradie a plenitud su potencial transformador, es
Vista inferior Vista superior Isonometria Isonometria

política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE
Vista posterior Vista lateral Vista frontal Vista lateral derecha
Izquierda

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU
Estructura tubular

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH

indispensable redoblar esfuerzos para revitalizar servicios de hotelería y turismo ligados al centro Figura 35.
los vínculos entre patrimonio urbano y patrimonio deportivo y cultural, así como al eje comercial de Planos y foto de la
primera Hamadora,
cultural en zonas estratégicas del sector. Proyectos la carrera 5.a, con sus pasajes estrechos y tiendas
fabricada en el
puntuales sobre vías emblemáticas, articulados con de esquina. Tenemos, por último, la renovación de taller de Manuel
la renovación de La Castellana, la construcción de la carrera 11 entre el mercado y la conexión urbana Velandia en Cajicá,
nueva infraestructura deportiva y la constitución con Ensenada, en el punto en el que se bifurcan el Cundinamarca, y
tejida a mano por
de un polo de actividad cultural en torno a la Casa camino hacia Taganga y el que conduce a la playa
Simón Hosie.
de Pescaíto, deben invitar a los habitantes a pres- de Pescaíto, allí donde la memoria viva sitúa uno Foto de la primera
cindir de las rejas, reabrir sus viviendas a la convi- de los hitos fundacionales del sector. Hamadora: María Cabal
(27 de enero de 2012)
vencia en la calle, sembrar sus árboles tradicionales
y evitar que los hábitos y costumbres que los defi- 6) Saneamiento de los cerros del Norte y sus pla-
nen languidezcan. yas y su transformación en parque urbano: Uno
de los propósitos fundamentales de la propuesta
Dentro de los proyectos complementarios a la re- de Planos Vivos para Pescaíto es el de restablecer
novación del centro urbano y simbólico cabe re- los antiguos vínculos históricos y culturales entre
saltar, en primer lugar, la restauración de la calle los cerros del Norte y los núcleos urbanos del Pes-
7, con su separador y sus árboles centrales (5.1), lo caíto cismontano, de tal suerte que los habitantes
mismo que la renovación de la calle 6 con andenes puedan reapropiarse de uno de los componentes
amplios y árboles, teniendo en cuenta que se trata más significativos y con mayores potenciales de su
de una de las vías más concurridas y “caminadas” territorio. El saneamiento de los cerros y sus pla-
de todo el sector, de acuerdo a la investigación de yas, y la transformación de la zona en un parque
Planos Vivos, y que su amplitud hace factible su urbano, con claro énfasis ecológico, son iniciati-
realización (5.2). Otro frente de trabajo de gran im- vas que se avienen bien con el objetivo de resaltar
portancia lo constituye la renovación de la calle su significado histórico, recuperar su importancia
8 con adoquinado en piedra, de tal suerte que se sociocultural y aprovechar al máximo su poten-
resalte el significado histórico y cultural de la an- cial ambiental.
tigua calle de las Piedras (5.3). La calle 8 debe bri-
llar con luz propia, gracias a su especialización en 217
Simón Hosie, Fútbol
calle de Pescaíto.
Fuente: Archivo de
Planos Vivos (2016)
Planos Vivos
Pescaito
Propuesta urbana
y arquitectónica

Urge, en primer lugar, adelantar la consolidación dad colectiva ha evitado hasta el momento que los
Plano de la propuesta

urbana de los barrios de los cerros y frenar el po- clivajes urbanos conduzcan a una fragmentación
blamiento espontáneo a través de proyectos am- irreparable, pero no es menos cierto que sin un
arquitectónica

bientales que fijen límites naturales a la expansión entorno espacial que le sea propicio, el patrimo-
(6.1); una respuesta a las afectaciones y los riesgos nio cultural compartido por los pescaíteros y las
urbana y

asociados al poblamiento precario que es consis- pescaíteras terminará por resquebrajarse. Ahora
tente con el objetivo de armonizar el desarrollo bien, también tuvimos ocasión de señalar que los
urbano y la preservación de la riqueza natural de esfuerzos por restablecer los vínculos históricos,
Pescaíto. Este cinturón verde es igualmente condi- urbanos y socioculturales dentro del sector serán
ción necesaria para la reforestación de los cerros en vano si no se consigue simultáneamente la re-
y el trazado de un sistema de senderos ecológicos constitución de los ejes de circulación metropoli-
que desemboquen en los miradores dispuestos tanos. La propuesta de Planos Vivos ha identifica-
en las cumbres y las diferentes playas del Pescaí- do cinco puntos neurálgicos que deben ser objeto
to transmontano (6.2). De esta manera será posible de atención privilegiada para restituir la unidad
revitalizar la antigua tradición de los paseos fami- del gran Pescaíto y contrarrestar la estasis poten-
liares y de amigos, ampliar los espacios de sociali- cial que pende sobre los flujos que lo ligan con el
zación comunitaria e invitar a los visitantes a reco- resto de la ciudad.
rrer, en el marco de un turismo de índole ecológico
y cultural, un territorio que ofrece por igual una El primer eje de articulación debe aprovechar la
vida urbana vibrante y un rico entorno natural. cancha y el parque infantil de San Martín, el cerro
de la Virgen y la manzana de la tienda de Lola (la
La complementariedad entre los núcleos urbanos tienda de Carlos “Jaricho” Valderrama, padre del
y el medio natural de los cerros la subraya el pro- Pibe) y la tienda Piso Alto, en el extremo norte de
yecto de transformación de la playa de Pescaíto, El Boro, para fortalecer la conexión entre los ba-
que incluye su conexión con un sendero histórico rrios de Pescaíto y San Martín (7.1). El segundo eje
que recree la antigua ruta de las tagangueras, así debe integrar la cancha, el puente peatonal y el par-
como la construcción del escenario del Mar (6.3). que infantil de Ensenada con los cerros de Rincón
El sendero histórico parte de la renovación de la Guapo y de Santa Marta en un espacio que sepa
calle que une el barrio de Ensenada Olaya Herrera resaltar su raigambre histórica, lo mismo que su
con la playa y su conversión en zona peatonal, ro- conexión con el camino de las tagangueras y las
deada de restaurantes, heladerías, tiendas y cafés, playas de los cerros (7.2). En el extremo surocciden-
que a su turno se conecta a través de ciclorrutas tal el proyecto de la plaza de la Sombra, asociado
con el centro urbano y simbólico del sector y con al nuevo mercado e inspirado en los callejones con
el centro histórico de la ciudad. El escenario del polisombra adecuados por los vendedores del lugar,
Mar, por su parte, está proyectado como un esce- debe garantizar la compaginación de las activida-
nario abierto al público para realizar conciertos y des comerciales con el carácter residencial del que
otras actividades culturales, o simplemente para se nutre la cultura popular pescaítera (7.3). Por su
disfrutar de la vista, del mar y de la brisa. parte, la proyección de espacios urbanos amplios y
generosos sobre la avenida del Ferrocarril, integra-

7) Conexión y articulación de los barrios del dos al proyecto de renovación de la vía y al nuevo
gran Pescaíto entre sí y con la ciudad: En la raíz sistema de transporte SETP, debe contribuir a res-
urbana pudimos identificar un creciente fenóme- taurar los flujos entre Pescaíto y el centro históri-
no de ‘deriva continental’ en la ‘tectónica pescaí- co, así como a revitalizar sus vínculos históricos y
tera’, que en el largo plazo amenaza con cercenar su integración económica (7.4).
El último de los ejes
los vínculos de los barrios entre sí y someterlos de articulación debe contribuir a deshacer el nudo
218 a un aislamiento pronunciado. La robusta identi- ciego que paulatinamente se ha constituido entre el
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC
Simón Hosie, Casa camellón del centro histórico, el área del puerto y compartida e integral de la ciudad que todos los Sa-
de Pescaíto. la vía Alterna. Aquí pueden ser retomadas algunas marios anhelan”.7
Fuente: Archivo de
de las ideas del Plan parcial del puerto, que contem-

histórica
Planos Vivos (2016)
plan zonas de conexión, amplios espacios urbanos La búsqueda de una figura idónea en el ordena-

Raiz
y edificios con vocación turística y comercial, para miento territorial es sin duda loable e imprescindi-
conjugarlas con el desarrollo de las dinámicas re- ble, pero se quedará en el papel si no es acompaña- RH
sidenciales y comerciales que informan la cultura da por un planteamiento urbanístico que aúne los
popular pescaítera (7.5). esfuerzos de la comunidad, la empresa privada y las
instituciones públicas, y dirima los conflictos y las
8) Diseño de una propuesta conceptual para res- divergencias entre ellas, en un proceso de diálogo
tablecer los vínculos entre Pescaíto y la bahía de acompañado por organizaciones independientes,
Santa Marta: Una de las tareas inaplazables dentro concursos internacionales y foros públicos. Una
de una propuesta integral de renovación urbana es solución urbana y arquitectónica consensuada per-
la de restablecer los vínculos orgánicos de Pescaí- mitirá conciliar la ampliación del terminal portua-
to con el puerto y con la bahía de Santa Marta. Se rio y las prioridades de las autoridades distritales
trata de un proceso no exento de conflictos y con- con el desarrollo del patrimonio urbano y cultural
tradicciones de fondo, lastrado por momentos por de la comunidad pescaítera. Es ese patrimonio, con
posturas maximalistas en las negociaciones y por sus fuertes lazos de convivencia y solidaridad en-
mecanismos de participación cerrados, que no con- tre vecinos, el que les ha permitido a los habitan-
sultan los intereses y las expectativas más amplias tes sobreponerse a las dificultades económicas, la
de todos los involucrados. No obstante, son preci- exposición a riesgos e inundaciones, la precariedad
samente la complejidad del problema y el tamaño en los servicios y equipamientos urbanos, los con-
de los obstáculos por remover los que permiten flictos internos y los tejemanejes políticos, para no
vislumbrar un papel de primer orden para este pro- hablar del temido “purgón” que les cae a los recién
yecto, a la luz de una nueva idea y visión de ciudad. casados. El mismo patrimonio que permite enfren-
El Plan Santa Marta 500 años había ya advertido la tar un futuro lleno de incertidumbres con la mayor
importancia capital de un proceso semejante para de las confianzas.
el futuro de la ciudad: “[…] por años la comunidad y
el país han estado visionando un mejor futuro para
Santa Marta, incluso formulando planes y proyec-
tos parciales y la consagración dentro del ordena-
miento constitucional de las entidades territoriales
como Distrito Especial Portuario, Turístico, Histó-
rico y Cultural. Sin embargo, por diversas razones, 7 Alcaldía de Santa Marta / ONU-Habitat. Santa Marta. Plan maestro 500

hasta la fecha no se ha logrado construir una visión años, 1525-2025. Santa Marta: 2013, p. 7. 219
Planos Vivos
Pescaito
Propuesta urbana
y arquitectónica
Plano de la propuesta

arquitectónica
urbana y

Transformación de los Transformación Renovación de las Hotel del Encanto Renovación urbana
cerramientos entre de El Boro carreras 4.a y 5.a Pescaítero de la manzana de
el puerto y el barrio Proyecto deportivo Corredor ambiental Edificio moderno La Castellana
Apertura visual y Fútbol calle de para la circulación diseñado en un patio La Casa de Pescaíto
circulación de aire. Pescaíto que modifica peatonal, con ciclorruta interior, enmarcado (biblioteca, museo del
la vocación de los y comercio, que conecta por casas históricas Fútbol, casa de la Danza
callejones sin salida. el gran Pescaíto con del barrio, para y casa de la Música) y
el centro histórico. activar el turismo. edificio multideportivo
con graderías hacia
La Castellana.

220
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH

Educación Sendero ecológico y Parques articuladores Renovación del Parque longitudinal


Nuevo centro para turístico de los cerros Tres parques que antiguo camino de sobre la vía Alterna
la pimera infancia y Miradores y playas conectan los barrios las tagangueras y la Parque con senderos
peatonalización de la adecuadas con muelles de los cerros con el playa de Pescaíto arborizados y
calle para conectarlo de uso recreativo. resto de Pescaíto y Corredor turístico que ciclorrutas, conjugado
con el parque. comunican los cerros conecta la ciudad con con la adecuación
con las canchas y los hitos fundacionales de la vía férrea.
parques existentes. de Pescaíto.

221
Transformación urbana de El Boro
Proyecto Fútbol calle de Pescaíto
Planos Vivos
Pescaito
Propuesta urbana
y arquitectónica

Espacio negativo Espacio positivo


Fútbol calle
Microtráfico Buena convivencia
Delincuencia Artes y oficios locales
Prostitución infantil Juego y deporte
Contaminación Orden
Plano de la propuesta

Basuras Limpieza
arquitectónica

Inundaciones
urbana y

El proyecto se inspira en un objeto omnipresente en la


zona, como lo es el contenedor o “conteiner”, símbolo
contemporáneo de los múltiples intercambios –mate-
riales y culturales– que el puerto ha propiciado. Las
canchas de tierra previstas por la propuesta se consti-
En la transformación urbana de El Boro, la propuesta de tuyen en una suerte de ‘contenedor urbanístico’, que de-
Planos Vivos da una respuesta integral a un vacío urba- vuelve al vacío urbano de los nichos en los muros todo
no, producido por unas calles sin salida, encerradas en- el contenido cultural condensado en el fútbol calle y los
tre muros de más de cuatro metros de altura y corona- hábitos asociados a su práctica. A través del movimien-
dos con concertinas de alambre de púas, que propician to y la algarabía de la práctica del fútbol, los habitantes
actividades ilícitas y delictivas. El proyecto busca llenar pueden reapropiarse de un territorio expuesto a la de-
este vacío con un contenido urbano que echa mano de lincuencia, la prostitución infantil y el tráfico de drogas.
uno de los componentes más preciados del patrimonio Se trata, en último término, de darle un robusto soporte
cultural pescaítero, como lo es el fútbol calle. Al instalar urbano a una estrategia integral que incluya –sin redu-
en estos nichos ciegos canchas para su práctica (y la de cirse a ella– la intervención coordinada de la Policía y
otros deportes), bien iluminadas, seguras y protegidas de las instituciones de protección social. Los diseños
del sol, el planteamiento arquitectónico contribuye a re- procuran devolverle a El Boro la tranquilidad que, para
vertir el deterioro urbano y a darle una nueva vocación a parafrasear a Jane Jacobs, solo la “ley y el orden de la
la zona. Se trata de una infraestructura deportiva de ca- calle” le pueden brindar al lugar. El proyecto le da una
rácter renovador y participativo, administrada por ma- nueva proyección al legado deportivo: no hay que olvi-
dres de la comunidad, que amplía los espacios de juego y dar que fue precisamente sobre las canchas de tierra de
esparcimiento para las niñas y los niños del sector. Pescaíto donde aprendieron a regatear algunas de las
222 leyendas del fútbol colombiano.
 
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Retomando experiencias de otras ciudades portuarias, Planos

Raiz
Vivos propone cerramientos abiertos que no limiten las RA

visuales ni el paso de la brisa. Se aprovechan los muros de la


calles cerradas para generar el espacio deportivo.

urbana
Raiz
RU

Durante la investigación participativa de Planos Vivos

Raiz socio-
c u lt u r a l
tuvimos la oportunidad de estudiar y documentar las
organizaciones deportivas formales e informales en Pes-
caíto. Cada una de estas organizaciones cuenta con su RC
ficha correspondiente, en la que se registran, entre otros
aspectos, su misión y su visión, sus antecedentes, su es-
quema organizativo y administrativo, y los perfiles de

histórica
sus principales líderes. Esta información permite evaluar

Raiz
la manera en que dichas organizaciones pueden ser vin-
culadas a los proyectos, no solo en lo que al uso y apro- RH
vechamiento de los nuevos espacios se refiere, sino en lo
que a la constitución de esquemas administrativos abier-
tos e incluyentes respecta.

La apuesta participativa de esta propuesta involucra a la


población no solo en el funcionamiento del complejo de-
portivo, administrado por una junta de madres del sec-
tor, sino desde la fase misma de construcción. Los oficios,
saberes y tradiciones artesanales del gran Pescaíto hacen
parte integral del proyecto: las grandes rejas en forma de
portales son fabricadas por los ornamentadores lugare-
ños con varillas recicladas. Los murales interiores, ins-
pirados en el paisaje, la cultura y la historia de Pescaíto,
son elaborados por niños y jóvenes bajo la guía de los
pintores más experimentados. Los tejidos para proveer
de sombra corren por cuenta de la Asociación de Pesca-
dores de Taganga Y de San Martín, de la misma manera
en que la fabricación de letreros y la iluminación quedan
a cargo de los especialistas del sector.

Aspectos antropológicos y sociológicos como el hábito de


reunirse en las calles para jugar fútbol mientras las madres
observan desde la terraza, la costumbre de pintar grafitis y
murales, o la práctica de tejer personalmente las redes con
las que se pesca son todas tradiciones que fueron docu-
mentadas durante la investigación y que fueron tenidas en
cuenta a la hora de concebir los diferentes diseños.

223
Proyectos productivos participativos
La Callejera
Planos Vivos
Pescaito
Propuesta urbana
y arquitectónica

El carácter participativo de los proyectos concebi-


dos en el marco del sistema de Planos Vivos no se
limita a comprometer activamente a la comunidad
en el proceso de investigación y diseño, a trabajar
de consuno con quienes están investidos de au-
toridad administrativa o política, a integrar a los
líderes humanos en su desarrollo, o a involucrar a
trabajadores, artesanos y creadores locales en su
ejecución. Otra de las apuestas participativas de
Planos Vivos radica en el fomento de la iniciativa
empresarial de los habitantes, a través de empren-
dimientos que logren posicionar productos repre-
sentativos de la riqueza cultural y material de un
lugar en el mercado nacional y en los mercados
internacionales.

Esta idea tiene su origen en el concepto libre de


marca, acuñado por Simón Hosie para impulsar
emprendimientos locales innovadores, con un po-
tencial transformador. Los productos desarrolla-
dos dentro del concepto libre de marca exaltan los
hábitos, las costumbres y las dinámicas propias
de cada lugar; aquellos que contribuyen a definir
la calidad de vida en cada hábitat. La Hamadora,
uno de los productos desarrollados bajo este con-
cepto para El Salado, celebra por ejemplo el hábito
de echarse al medio día, como suelen hacerlo los
habitantes de este corregimiento, uno de los más
calientes de Colombia. Para Pescaíto fueron con-
224 cebidos dos productos: la Sollera, que combina la
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

“De Pescaíto pa’l mundo”

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
+ =
RC

Silla de calle Portería viajera Callejera

histórica
Raiz
RH

cartera y el rodillero (trapo que utilizan las mu-


jeres que cargan productos sobre su cabeza, para
amortiguar el impacto de las palanganas); y la Ca-
llejera, un diseño que integra la banca de calle con
las porterías portátiles, hechas de varillas y tubos,
que los pelaos llevan al hombro hasta el lugar del
cotejo. Si la Hamadora le ofreció a un grupo de
soldadores jóvenes de El Salado la posibilidad de
montar una empresa que gira en torno al placer
de tumbarse bajo la sombra de un árbol o un ale-
ro, la Callejera abrirá un nuevo frente productivo
para un grupo de personas de Pescaíto, decididas
a ofrecerle al mundo un producto que reivindica la
importancia de la calle como lugar de encuentro.

La Callejera, el primer proyecto productivo que se


elaborará en Pescaíto, gracias a los buenos oficios
de la iniciativa Tras La Perla de la América, fusio-
na la banca de calle, que las madres ubican en el
frente de sus casas para cuidar a sus hijos mien-
tras charlan con la vecina, con la cancha de fútbol
calle que se improvisa sobre la tierra o el asfalto.
Estos elementos definen la identidad del barrio;
son dos símbolos arquetípicos de la ley y el orden
de la calle en Pescaíto.

225
Renovación urbana del centro
simbólico de Pescaíto
Planos Vivos
Pescaito
Propuesta urbana
y arquitectónica

7
1 El patio de la Cultura
2 Vía peatonal
3 La Casa de Pescaíto (biblioteca
pública y museo del Fútbol)
4 La casa de la Danza
5 La casa de la Música
6 Aeiotu-Fundación Carulla
7 Casas restauradas para restaurantes, fuentes de
soda y heladerías, entre otros servicios turísticos
8 Graderías orientales de La Castellana
9 El patio del Deporte
10 Plazoleta de acceso a la cancha y
al edificio multideportivo
11 Edificio multideportivo
12 Graderías occidentales de La Castellana
13 Casas restauradas, restaurantes y fuentes de soda
14 Cancha de fútbol calle en tierra (en
frente al multideportivo)
15 Hotel del Encanto Pescaítero
16 Patio del Hotel, enmarcado por casas históricas
17 Nuevo jardín infantil
18 Vía peatonal entre jardín y parque
19 Parque de Pescaíto
Nuevo cerramiento de La Castellana
21 Andenes ampliados y arborizados en los
costados sur y norte de La Castellana
226
2

2
1

1
3
4

19
5

20

18
21
21

17
15

16

12
12

11

13
10

9
14

13

Raiz Raiz socio- Raiz Raiz Raiz socio- Raiz

227
RE
RP

RA

RC

RH
RU

histórica c u lt u r a l urbana a m b i e n ta l económica política


Renovación urbana del centro
simbólico de Pescaíto
Planos Vivos
Pescaito
Propuesta urbana
y arquitectónica

Proyecto cultural

Casa de Pescaíto y patio de la Cultu-


ra: La Casa de Pescaíto se sitúa en una
plaza inclinada, enmarcada por las vi-
viendas tradicionales del barrio, y en
esa medida evoca el ambiente y la con-
vivencia en los patios interiores. Este
patio de la Cultura está abierto hacia
la cancha de La Castellana e integrado
orgánicamente a ella a través de unas
graderías que dan al campo de fútbol,
que a su vez tienen su correlato en las
plataformas inclinadas hacia las plazo-
letas culturales. El edificio está inspi-
rado en la esquina pescaítera como es-
pacio de confluencia y encuentro, y su
ubicación reúne condiciones óptimas
de asoleación y ventilación. Las preser-
vación de los árboles existentes consti-
tuye máxima prioridad.

228
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

Proyecto deportivo

histórica
La renovación del costado occidental de

Raiz
la manzana de La Castellana contem-
pla la ejecución de un proyecto depor- RH
tivo sustentado en dos ejes. El primer
eje parte de la conservación de las ca-
sas del costado norte en un complejo
de tiendas de soda, un espacio para fi-
sioterapia y unas oficinas que confor-
man una plaza/patio más íntima, bajo
las ramas de un gran mango, el árbol
más grande de esa manzana. El segun-
do eje lo constituye un edificio multi-
deportivo, con plazoletas de acceso en
los costados sur y norte, flanqueadas
por los árboles ya existentes. El edificio
conjuga tres niveles de graderías hacia
la cancha, por un lado, con un amplio
espacio para la práctica de distintos de-
portes, como baloncesto, fútbol sala y
voleibol, por el otro. En el primer piso
están situados los camerinos y un es-
pacio multifuncional para la organiza-
ción de diferentes actividades. Hacia la
calle asume la apariencia de un edifi-
cio deportivo moderno, sobrio y sólido,
construido en concreto, con una piel
agujerada que limita la entrada del sol y
permite la circulación del viento como
principal factor bioclimático.

229
Renovación urbana del centro
simbólico de Pescaíto
Planos Vivos
Pescaito
Propuesta urbana
y arquitectónica

Patio de la Cultura

El patio de la Cultura, que alberga la Casa


de Pescaíto en su centro, está inspirado
en los patios interiores, que constituyen
sin duda uno de los legados urbanos y
culturales más importantes del sector.
Se trata de un gran espacio abierto, en-
marcado por viviendas de gran valor
histórico y patrimonial, adecuadas para
alojar tiendas, restaurantes, puestos de
soda, heladerías y cafés que ofrezcan
especialidades de la tradición culinaria
local. El proyecto recrea el ambiente y
la cultura del patio pescaítero como lu-
gar de encuentro y reunión tanto para
los vecinos como para los visitantes. El
proyecto busca robustecer la identidad
urbana del gran Pescaíto como barrio La Casa de Pescaíto.
popular, fundada en la intensa vida en la
calle y la convivencia en las terrazas, los
patios y los frentes de las casas.

La Casa de Pescaíto, que en su diseño se


apoya en el tipo de la tienda de esquina
como lugar de confluencia, busca revi-
talizar el centro simbólico del sector. Su
biblioteca abre un espacio privilegiado
para la realización del potencial educa-
tivo del sector, y su museo del Fútbol
rinde tributo a uno de los pilares de la
identidad pescaítera.

El salón de la Danza y la casa de la Mú-


sica se abren hacia el costado sur del
patio de la Cultura y conforman así un
escenario para presentaciones de diver-
sa índole.

Patio de la Cultura

230
política
Raiz
RP

Raiz socio-
económica
Plazoleta de acceso al
edificio multideportivo RE
y a la cancha de
La Castellana

a m b i e n ta l
Centro para el Talento

Raiz
Deportivo de Pescaíto
RA
El proyecto de renovación incluye la am-
pliación de las zonas deportivas en la
manzana del costado occidental, entre

urbana
carreras 5.a y 6.a y calles 6 y 7, dado que

Raiz
se trata de una de las manzanas más
RU
deterioradas del barrio, con una gran
cantidad de lotes abandonados y casas
derruidas. La propuesta contempla la

Raiz socio-
c u lt u r a l
conservación de las viviendas más re-
presentativas en términos históricos y
arquitectónicos en el costado norte y RC
sur, sobre la calle 6; la construcción de
un centro de alto rendimiento, un edifi-
cio de servicios y una piscina, así como

histórica
la instalación de canchas de fútbol 8 y

Raiz
fútbol 5 y de una cancha múltiple con
cubierta, que proteja del sol abrasante RH
durante el día.

Edificio
multideportivo
y graderías

231
Casa de Pescaíto
Biblioteca pública, museo del Fútbol,
casa de la Danza y casa de la Música
Planos Vivos
Pescaito

Conceptos y referentes para un diseño arquitectónico basado en los


hábitos, las costumbres, las prácticas y las técnicas locales
Propuesta urbana
y arquitectónica

Callejón-conjunto
Referente antropológico
y arquitectónico.

Frentes con terraza y árbol


Referente antropológico y urbano.

Escultura en bronce del Pibe


y demás estrellas del fútbol de
Pescaíto. Las esculturas los
muestran jóvenes, cuando eran
como cualquier “pelao” del barrio.
Arquitectura viva

Uno de los factores determinantes para espacios de danza y música, así como
garantizar la sostenibilidad del comple- otros dirigidos tanto a los samarios
jo cultural es su versatilidad, entendida como a los visitantes provenientes del
como su capacidad para erigirse en un resto del país y del extranjero, como
hito urbano que atraiga continuamente en el caso del museo del Fútbol y las
a personas de diferentes edades e inte- plazoletas para presentaciones de ín-
reses. Para tal efecto, la propuesta in- dole cultural. El énfasis del proyecto
tegra diversos usos y actividades, pues en un uso mixto e intensivo garantiza
solo así es posible asegurar la constitu- que esta infraestructura, proyectada a Patios interiores
ción de un espacio urbano vivo, abierto partir del substrato cultural del sector, Referente antropológico
y arquitectónico.
a propios y extraños, que no langui- tenga repercusiones sociales y urbanas
dezca como lugar poco frecuentado y positivas en el desarrollo de Pescaíto.
con escasos dolientes. El proyecto con- La construcción recurre a materiales y
Tiendas de esquina
templa usos y espacios orientados en técnicas locales, y responde a los más Referente tipológico,
primera línea hacia la población local, altos estándares arquitectónicos. arquitectónico y antropológico.
232 como en el caso de la biblioteca y los
Saberes culinarios Pintores Tejido de redes
Talentos locales serán Talentos locales pintarán en la Talentos locales fabricarán la
aprovechados para ofrecer platos cúpula a las estrellas del fútbol. red/chinchorro del segundo piso.

política
locales en el patio de la Cultura.

Raiz
RP

Raiz socio-
económica
RE

a m b i e n ta l
Raiz
RA

urbana
Raiz
RU

Raiz socio-
c u lt u r a l
RC

histórica
Raiz
RH

Caja de aire Bloques perforados


Técnicas locales bioclimáticas. Técnicas locales bioclimáticas.

233
Casa de Pescaíto
La esquina como lugar de confluencia
Planos Vivos
Pescaito
Propuesta urbana
y arquitectónica

La Casa de Pescaíto,
inspirada en la tienda
de esquina como
lugar de confluencia.
Boceto de Simón Hosie

El diseño parte de un ejercicio intersubje- saca los mayores beneficios de su ubica- y prácticas locales como las esquinas
tivo que propugna un equilibrio entre las ción, recoge las visuales más amplias en curvas, la subida del primer nivel, las
tradiciones materiales y estéticas locales las distintas direcciones, y aprovecha al terrazas y el aprovechamiento de los
–asociadas a los hábitos– y el aporte máximo la brisa y la sombra. La Casa árboles existentes: los aportes verná-
subjetivo del arquitecto diseñador, desde de Pescaíto retoma estas características: culos se integran así en el espacio de
una visión contemporánea del oficio. El resuelve la esquina en el punto de mayor una gran biblioteca y en los recorridos
proyecto parte de una observación fun- sombra y mayor ventilación durante el del museo.
damental, el de la esquina como lugar día, con la apertura en el costado norte
privilegiado de confluencia. No hay un del edificio, donde además se proyecta la El color de la fachada cambia cada
lugar que convoque más a todos los sec- visual hacia el parque central, la iglesia diez años con el mantenimiento ge-
tores de la población que la tienda esqui- y la calle. En términos arquitectónicos, neral de la pintura, según la tradición
nera. El tipo ideal de la tienda esquinera el diseño recurre a técnicas, elementos pescaítera.

234
Raiz Raiz socio- Raiz Raiz Raiz socio- Raiz

235
RE
RP

RA

RC

RH
RU

histórica c u lt u r a l urbana a m b i e n ta l económica política


Propuesta urbana Planos Vivos
y arquitectónica Pescaito

236
Raiz Raiz socio- Raiz Raiz Raiz socio- Raiz

237
RE
RP

RA

RC

RH
RU

histórica c u lt u r a l urbana a m b i e n ta l económica política


Bibliografía y fuentes

Introducción: Teoría y práctica Escallón, Ana María. “Simón Hosie y la metafísica Hintjens, Helen y Dubravka Žarkov. Conflict,
de los Planos Vivos popular”. Museo de Artes Visuales de la Uni- Peace, Security and Development. Theories and
Libros, artículos y documentos versidad Jorge Tadeo Lozano, 2010. Disponible Methodologies. Abingdon, Oxon (UK)/Nueva
en https://revistas.utadeo.edu.co/index.php/ York: Routledge, 2015.
Abeledo, Guillermina. “Plataformas mestizas. BT/article/view/120/123
Arquitectura colombiana contemporánea”, Hodgson, D. y R. A. Schroeder. “Dilemmas of
Summa +87, septiembre de 2007. Findeter, Plan de acción Santa Marta sostenible. Counter-Mapping Community Resources in
Financiera del Desarrollo Territorial S. A. Tanzania”, en Development and Change 33,
Arango, Silvia. “Ciudad Fragmentada”. Entrevis- (Findeter), 2016. 2002, pp. 79-100.
ta de Santiago Vargas Acevedo en El Malpen-
sante 175, junio de 2016. Foucault, Michel. Discipline and Punish: The Birth Hosie, Simón. “La metodoilogicología”, Revista
of the Prison, traducido del francés por Alan Proyectodiseño 61, mayo de 2009, pp. 18-25 y
Aschner Roselli, Juan Pablo. “Siete intenciones/ Sheridan. Nueva York: Vintage Books, 1977.
 57-58.
tendencias/criterios de juicio para entender
y abarcar la arquitectura contemporánea en Foucault, Michel. The History of Sexuality, vol. 1: An Hosie, Simón. “Buenas”. Publicación de carácter
Colombia”, en Sociedad Colombiana de Ar- Introduction, traducido del francés por Robert etnográfico presentada en la exposición de
quitectos (SCA), XXV Bienal Colombiana de Ar- Hurley. Nueva York: Vintage Books, 1980. arte “ablando con la pared” del Museo de Ar-
quitectura y Urbanismo, 2016, pp. 50-74. Dispo- tes Visuales, curada por Ana María Escallón.
Foucault, Michel. Security, Territory, Population: Bogotá: 2010.
nible en http://www.academia.edu/29403906/ Lectures at the Collège de France, 1977-78, edi-
Seven_intentions_trends_ judgment_crite- tado por Michel Senellart y traducido del Hosie, Simón. “Lugar, cultura y comunidad
ria_to_understand_and_approach_contem- francés por Graham Burchell. Nueva York: como fundamento del diseño”, en Bibiana
porary_architecture_in_colombia Palgrave Macmillan, 2007. Arcos Arciniegas (ed.), El hacer del arquitecto
Benninghoff Prados, Federico. “La arquitectura javeriano. Primera muestra del ejercicio profe-
Foucault, Michel. The Birth of Biopolitics: Lectu- sional. Bogotá: Editorial Pontificia Universi-
como descubrimiento”, Revista +A, edición res at the Collége de France, 1978-79, editado
+Hábitat, 2002, pp. 60-65. dad Javeriana, 2010, pp. 34-37.
por Michel Senellart y traducido del francés
Borges, Jorge Luis. “Del rigor en la ciencia”, en El por Graham Burchell. Nueva York: Palgrave Hosie, Simón. “Guía metodológica para la elabo-
hacedor. Madrid: Alianza Editorial, 1987 [1960], Macmillan, 2008. ración de Planos Vivos en Colombia”. Elabo-
pp. 143-4. rada en el marco del convenio de asociación
García Ramírez, William. “Arquitectura partici- 323, suscrito entre la Agencia Nacional contra
Brotton, Jerry. Trading Territories: Mapping pativa: las formas de lo esencial”. Revista de la Pobreza Extrema (Anspe) y la Corporación
the Early Modern World. Londres: Reaktion Arquitectura (Universidad Católica de Colom- Compartamos con Colombia. 2013.
Books, 1997. bia) 14, 2012, pp. 4-11.
Hosie, Simón. “Ciudad marginal, la ilusión de
Buckland, Heloise y David Murillo. La innovación Godlewska, Anne. “To Surf or to Swim? Respon- ascender”, en Arquitectura y espacio urbano:
social en América Latina. Marco conceptual y se to J. B. Harley’s «Deconstructing the Map»”, memorias del futuro (memorias del Semi-
agentes. Instituto de Innovación Social de Esa- en Cartographica 26 (3/4), 1989, pp. 96-98. nario de Arquitectura Latinoamericana
de / Fondo Multilateral de Inversiones, Banco González Escobar, Luis Fernando. “Los otros ar- SAL 15). Bogotá: Alcaldía Mayor de Bogotá /
Interamericano de Desarrollo, septiembre quitectos, las otras arquitecturas en la Bienal Fundación Rogelio Salmona, 2013, pp. 145 -152.
de 2014. Disponible en http://proxymy.esade. de Venecia 2016”, Revista Universidad de An- Disponible en https://issuu.com/patrimonio-
edu/gd/facultybio/publicos/1431613105032_ESA- tioquia 325, 2016, pp. 94 -101. Disponible en ht- bogota/docs/arquitectura_y_espacio_urba-
DE-FOMIN-La-innovacion-social-en-Ameri- tps://aprendeenlinea.udea.edu.co/revistas no_ebook/150
ca-Latina-Marco-conceptual-y-agentes-1.pdf /index.php/revistaudea/ar ticle/viewFi- Hosie, Simón. “Un arquitecto en el Paraíso (I):
Cortázar, Julio. Clases de literatura. Berkeley, 1980. le/325298/20782710 proceso metodoilógico para abordar proyec-
Bogotá: Alfaguara, 2014. tos en lugares autoconstruidos”. Conferencia
González G., Mauricio. “Planos Vivos de Simón
en las jornadas científicas “Arquitectura,
Cosgrove, Denis (ed.). Mappings. Londres: Reak- Hosie. Arquitectura, diálogo y equidad”, Re-
educación y sociedad. Hacia una revolución
tion Books, 1999. vista Javeriana, vol. 813, abril de 2015, pp. 36-43.
dialógica en la educación crítica de la arqui-
Dodge, Martin, Rob Kitchin y Chris Perkins (eds.). González Rojas, Liliana y Simón Hosie. “Modelo tectura”, Universidad Politécnica de Catalu-
The Map Reader: Theories of Mapping Practice múltiple para la intervención en infraestruc- ña, Barcelona, 5 de junio de 2014.
and Cartographic Representation. Chichester, tura en Colombia, basado en la aproximación
Hosie, Simón. “Planos Vivos y la vivienda local
West Sussex (UK): Wiley-Blackwell, 2011. responsable a las comunidades y su hábitat”.
sostenible”, conferencia en el 4.to Congreso
Presidencia de la República, mayo de 2011.
Dunlop, Beth. “Exhibition celebrates often-over- de Arquitetura Des///orden, Tecnológico de
looked architecture of Colombia”, The Miami Harley, J. B. “Deconstructing the Map”, en Carto- Monterrey, México, octubre de 2014.
Herald, 3 de octubre de 2004. graphica 26 (2), 1989, pp. 1-20.
Hosie, Simón. “Un arquitecto en el Paraíso (II): el
Edney, Matthew H. “Cartography without «Pro- Harvey, David. The Condition of Postmodernity. sistema Planos Vivos y su aplicación en 3 po-
gress». Reinterpreting the Nature and Histor- Oxford: Blackwell, 1989. blaciones. Teoría y práctica”, ponencia en el
ical Development of Mapmaking”, en Car- XXXIII ENSEA – Encontro Nacional sobre En-
238 tographica 30 (2/3), 1993, pp. 54-68.
sino de Arquitetura e Urbanismo, Balneário Hosie, Simón. “Reflexiones generales sobre el Have Failed. New Haven/Londres: Yale Uni-
Camboriú, Brasil, octubre de 2014. sistema Planos Vivos”. Inédito, 2017. versity Press, 1998.
Hosie, Simón. “Arquitectura en el lugar del otro”. Hosie, Simón (dir.). “Proyecto ‘Pescaíto’. Caracte- Semana Sostenible. “Arquitectura con sabor lo-
Conferencia, Facultad de Arquitectura, Uni- rización sociocultural y diseño conceptual”. cal”, Semana Sostenible: 100 ideas que cambian
versidad de los Andes, abril de 2015. Documento final del contrato de consultoría el mundo, noviembre de 2013, p. 82.
000041 de 2015 entre la Financiera del De-
Hosie, Simón. “Planos Vivos, investigación y di- sarrollo Territorial S. A. – Findeter y Simón Sparke, Matthew. “A Map That Roared and an
seño participativo y sostenible”. Conferencia Hosie Samper. Inédito, 2016. Original Atlas: Canada, Cartography and the
en el seminario “La arquitectura como pro- Narration of Nation”, en Annals of the Associ-
ceso participativo en la obra de Simón Hosie”. Jacobs, Jane. Muerte y vida de las grandes ciuda- ation of American Geographers 88 (3), 1998, pp.
Maestría en Hábitat, Facultad de Arquitectura, des, traducido del inglés por Ángel Abad y 463-495.
Universidad Nacional de Colombia, sede Me- Ana Useros. Madrid: Capitán Swing Libros,
dellín, mayo de 2015. Texto introductorio del 2011 [1961].
Useche, Carlos Felipe. “Sustainable Business
profesor Luis Fernando González Escobar. Models for Open Information Platforms
Johnson, Steven. The Ghost Map: A Street, an with Social Value Proposition in Developing
Hosie, Simón. “Planos Vivos: soluciones soste- Epidemic and the Hidden Power of Urban Ne- Countries. The Example of Planos Vivos in
nibles desde la comunidad”. Conferencia y tworks. Londres et al.: Penguin Books, 2008. Colombia.” Tesis de maestría, MBA Sustai-
entrevista en el Foro Internacional de Diseño nability Management, Leuphana Universität
y Construcción Sostenible, Consejo Colom- Lemke, Thomas. Biopolitics: An Advanced Intro- Lüneburg, mayo de 2015.
biano de Construcción Sostenible, septiem- duction, traducido al inglés por Eric Frederick
bre de 2015. Trump. Nueva York/Londres: New York Uni- Wainwright, J. y J. Bryan. “Cartography, Terri-
versity Press, 2011. tory, Property: Postcolonial Reflections on
Hosie, Simón. “La arquitectura como descubri- Indigenous Counter-Mapping in Nicaragua
miento. Enseñanza, investigación y práctica”, Miño, Luis Alberto. “Un banco perdido. Crónica and Belize”, en Cultural Geographies 16 (2),
conferencia en el VII Seminário Projetar 2015: sobre el ‘banco de la república’, símbolo des- 2009, pp. 153-178.
Originalidade, Criatividade e Inovação no aparecido de la cultura rural colombiana”, El
Projeto Contemporâneo, Natal (Brasil), octu- Tiempo, 11 de abril de 2010. Winichakul, Thongchai. Siam Mapped: A History
bre de 2015. of the Geo-Body of a Nation. Honolulu: Univer-
Osorio, Ana María. “Si puó ottenere un pro- sity of Hawai’i Press, 1997.
Hosie, Simón. “Planos Vivos: Architecture and gresso basato sulle tradizioni” (entrevista a
Community Engagement in Colombia”, con- Simón Hosie con traducción de Alía Himat), Wood, Denis, con John Fels y John Krygier. Re-
ferencia en el seminario “Cultural and Hu- L’Universo 5, Corriere del Ticino, 14 de noviem- thinking the Power of Maps. Nueva York/Lon-
manitarian Agents”, Mahindra Humanities bre de 2005. dres: The Guilford Press, 2010.
Center, Universidad de Harvard, 23 de febrero Peluso, Nancy Lee. “Whose Woods Are These?
de 2016. Counter-Mapping Forest Territories in Kali-
Hosie, Simón. “Borrones. Carta de vida de una mantan, Indonesia”, en Antipode 27 (4), 1995,
Perfil urbano y socioeconómico
lavandera”. Presentación en el marco de la pp. 383-406.
de Pescaíto
exhibición Prosthetic Realities. Fake Truths Penagos García, Guillermo León (dir.). Guías de Libros, artículos y documentos
and True Lies in Colombian Contemporary Art, construcción sostenible. Guía 1: Caracteriza-
David Rockefeller Center for Latin American ción del lugar como base de la construcción Abello Vives, Alberto y Silvana Giaimo Chávez
Studies (DRCLAS), Universidad de Harvard, 25 sostenible. Universidad Pontificia Bolivaria- (comps.). Poblamiento y ciudades del Caribe
de febrero de 2016. Disponible en https://dr- na, diciembre de 2015. Disponible en http:// colombiano. Bogotá: Fonade / Observatorio
clas.harvard.edu/files/drclas/files/simon_ho- www.metropol.gov.co/ConstruccionSoste- del Caribe Colombiano, 2000.
sie_presentation_-_borrones_de_una_lavan- nible/Documents/GSCIC aracterizacionde-
dera.pdf Aecom / Fundación Pro-Sierra Nevada de Santa
llugar.pdf
Marta. Entregable no. 1: Modelación del ordena-
Hosie, Simón. “The marginal city, dreams of Planos Vivos. “Brochure de Planos Vivos”, presen- miento territorial actual basado en herramien-
upward mobility”, en Post. Notes on Modern & tado en el Foro Latinoamericano de Inversión tas tecnológicas especializadas. Julio de 2015.
Contemporary Art, MoMa, Museo de Arte Mo- de Impacto, Mérida (Yucatán), febrero de 2014.
derno de Nueva York, 5 de julio de 2016, traduc- Alcaldía de Santa Marta. Plan de ordenamiento
ción al inglés de Heather Cleary. Disponible en Revista Arquitecto. “La poética de lo comuni- territorial Santa Marta 5.to Centenario. Docu-
tario” (entrevista a Simón Hosie), Revista mento técnico de soporte. S/d.
http://post.at.moma.org/content_items/812-the- Arquitecto, Sociedad Colombiana de Arqui-
marginal-city-dreams-of-upward-mobility Alcaldía de Santa Marta. Plan de desarrollo 2012-
tectos, 2012 .
2015. Santa Marta: 2012. Disponible en http://
Hosie, Simón. “5 Questions with Simón Hosie”, Revista Proyectodiseño. “El paraíso según Hosie” www.santamarta.gov.co/docs/PDD.pdf
en Post. Notes on Modern & Contemporary Art, (entrevista a Simón Hosie), Revista Proyectodi-
Alcaldía de Santa Marta, Secretaría de Planea-
MoMa, Museo de Arte Moderno de Nueva seño 68, agosto-septiembre de 2010, pp. 34-39.
ción. Encuestas del Sisbén para los barrios
York, 13 de junio de 2017. Disponible en http://
Scott, James C. Seeing Like a State: How Certain San Martín, Olaya Herrera, Barrio Norte,
post.at.moma.org/content_items/997-5 -ques-
Schemes to Improve the Human Condition Ensenada Olaya Herrera y Pescaíto, marzo
tions-with-simon-hosie 239
Planos Vivos
Pescaito

de 2011 a septiembre de 2015. Documentos Hernández Camacho, Jorge, y Heliodoro Sán- Sitios web y blogs
inéditos. chez Páez. “Biomas terrestres de Colombia”,
en Gonzalo Halffter (comp.), La diversidad Alcaldía Distrital de Santa Marta: http://www.
Alcaldía de Santa Marta / Corporación Centro biológica de Iberoamérica I (Acta Zoológica santamarta.gov.co 

Histórico de Santa Marta (Corpocentro). Plan Mexicana, volumen especial). Xalapa: Insti-
especial de protección, centro histórico de Santa Dracamanda: http://deracamandaca.com

tuto de Ecología, A. C., 1992, pp. 153-173.
Marta. Proyecto piloto, Plan Nacional para la Re-
Google Maps: http://www.google.com.co/maps
cuperación de los centros históricos de Colom- Hosie, Simón (dir.). “Proyecto ‘Pescaíto’. Caracte-
bia. Documento técnico de soporte. Alcaldía de rización sociocultural y diseño conceptual”. Lattitude Studios: https://lattitude.co
Santa Marta / Corpocentro, octubre de 2004. Documento final del contrato de consultoría
Disponible en http://curaduriaurbana2smta. 000041 de 2015 entre la Financiera del De- Radio Magdalena: http://radiomagdalena1420am.
com/descargas/normatividad/Distrital/PEP_ sarrollo Territorial S. A. – Findeter y Simón com
CENTRO_HISTORICO_SANTA_MARTA.pdf Hosie Samper. Inédito, 2016. Tras la Perla de la América: http://www.tras-
Alcaldía de Santa Marta / ONU-Habitat. Santa Martínez, Rafael. “Programa de Gobierno 2016- laperla.org
Marta. Plan maestro 500 años, 1525-2025. Santa 2019”. Disponible en http://en.calameo.com/ Wikipedia en español: http://es.wikipedia.org 

Marta: 2013. books/00485507851aa72921e3d
Alcaldía de Santa Marta / Sociedad Portuaria Metroagua S. A. Plan operativo general “Colector
de Santa Marta / Promotora Urbana de San- pluvial Bastidas-Mar Caribe – iv etapa. Alcal-
ta Marta – Prourbana S.A.S. Plan parcial del día de Santa Marta / Embajada de España en Pescaíto: desarrollo histórico
puerto de Santa Marta y área de influencia Colombia, oficina Técnica de Cooperación / y memoria viva
[presentación]. Santa Marta: 2015. Metroagua S. A., 2011. Libros, artículos y documentos
Banco Interamericano de Desarrollo (BID). “Per- Ospino Valiente, Álvaro. Santa Marta. Urbanismo Abello Vives, Alberto y Silvana Giaimo Chávez
fil de proyecto (PP). Colombia. Programa de y arquitectura, 1525-1975. Santa Marta: Bastia- (comps.). Poblamiento y ciudades del Caribe
Sistemas Estratégicos de Transporte Público nos Editores, 2016. colombiano. Bogotá: Fonade / Observatorio
(SETP) (CO- L1091)”. 2010. Disponible en http:// del Caribe Colombiano, 2000.
idbdocs.iadb.org/wsdocs/getdocument.as- Posada, Blanca Oliva y William Henao. Diagnós-
px?docnum=35153089 tico de la erosión en la zona costera del Caribe Acemoglu, Daron (2003). “Raíz histórica. Un
colombiano (Invemar, serie Publicaciones enfoque histórico de la función de las ins-
Conferencia Episcopal de Colombia / Defensoría Especiales, n.o 13). Santa Marta: Invemar, tituciones en el desarrollo económico”, en
del Pueblo. “Informe de la Comisión de Ob- 2008. Revista Finanzas y Desarrollo 40 (2), junio de
servación de la crisis humanitaria en la Sierra 2003, pp. 27-30. Disponible en http://www.
Nevada de Santa Marta”, 17 de diciembre de Sociedad Portuaria de Santa Marta / Promotora
imf.org/external/pubs/ft/fandd/spa/2003/06/
2003. Disponible en http://www.acnur.org/t3/
Urbana de Santa Marta – Prourbana S.A.S.
pdf/acemoglu.pdf
uploads/media/COI_244.pdf
 Plan parcial de renovación urbana del puerto de
Santa Marta y su área de influencia. Documento Aguilera Díaz, María, Yuri Reina Aranza, An-
Contraloría Distrital de Santa Marta. Auditoría técnico de soporte. Santa Marta: junio de 2014. tonio Orozco Gallo, Javier Yabrudy Vega y
gubernamental con enfoque integral, modali- Rosemary Barcos Robles. “Composición de
dad especial al servicio público domiciliario de Sudgen, Andrew M. “The Vegetation of the Se-
la economía de la región Caribe colombiana”,
alcantarillado sanitario en el Distrito Turístico, rranía de Macuira, Guajira, Colombia: A Con-
Ensayos sobre Economía Regional (ESER) 53,
Cultural e Histórico de Santa Marta. Vigencia trast of Arid Lowlands and an Isolated Cloud
Banco de la República, 2013.
2011. Santa Marta: 2012.
Forest”, en Journal of the Arnold Arboretum 63
(1), enero de 1982, pp. 1-30. Disponible en http:// Alcaldía de Santa Marta. Plan de desarrollo 2012-
Findeter. Diamante Caribe & Santanderes, tomo www.biodiversitylibrary.org/page/9252631#pa- 2015. Santa Marta: 2012. Disponible en http://
1: El territorio: punto de partida para un nuevo ge/1/mode/1up 
 www.santamarta.gov.co/docs/PDD.pdf
desarrollo. Bogotá: Financiera del Desarrollo
Territorial S. A. (Findeter), 2014. Disponible en Arango, Silvia. Historia de la arquitectura en Co-
Entrevistas lombia. Bogotá: Centro Editorial y Facultad
https://issuu.com/findetersa/docs/diaman-
tet1-partida de Artes, Universidad Nacional de Colombia,
Beatriz Vidales Morales, vecina del barrio de
1993 [1989].
Findeter. Plan de acción Santa Marta sostenible. Pescaíto. Entrevista: 3 de marzo de 2016.
Financiera del Desarrollo Territorial S. A. Archila, Mauricio. “La clase obrera colombiana
David Ruiz Ureche, vecino de Barrio Norte. En-
(Findeter), 2016. Disponible en https://issuu. (1886-1930)”, en Álvaro Tirado Mejía (dir.), Nue-
trevista: 28 de abril de 2016.
com/findetersa/docs/plan_de_accion_sta_ va historia de Colombia, vol. III: Relaciones in-
marta-def-web/203 Eduardo Goenaga, vecino de Ensenada. Entre- ternacionales. Movimientos sociales. Bogotá:
vista: 1.o de junio de 2016. Planeta, 1989, pp. 219-244.
Geografía Urbana Ltda. Expediente para la re-
visión ordinaria del POT – componente ur- Elías Henríquez Pardo, vecino del barrio de Arias de Greiff, Gustavo. La mula de hierro. Bogo-
bano. Bogotá/Santa Marta: abril de 2015. Pescaíto, 82 años de edad. Entrevista: 30 de tá: Carlos valencia Editores, 1986.
Disponible en http://www.geografiaurbana. marzo de 2016.
Arroyave Arango, Gustavo y Alberto Hinestroza.
com/assets/recursos/documentos/expedien- La ciudad que se fue y los recuerdos que dejó.
Lourdes Ruiz Ureche, vecina del barrio de Pes-
te-del-pot-santa-marta.pdf Santa Marta: Fundación Periodistas Boliva-
caíto, 55 años de edad. Entrevista: 10 de mayo
Geografía Urbana Ltda. Memoria justificativa de 2016. rianos de América, 2014.
del Plan de Ordenamiento Territorial de Santa Bermúdez Bermúdez, Arturo. Materiales para la
Selmira Ocampo, vecina de Olaya Herrera. En-
Marta. Bogotá/Santa Marta: septiembre de historia de Santa Marta. Santa Marta: Acade-
trevista: 4 de marzo de 2016.
2015. Disponible en http://www.geografiaur- mia de Historia del Magdalena, 1997.
bana.com/assets/recursos/documentos/me- Usmar Rebolledo, vecino de Villa Tabla. Entre-
moria-justificativa-del-pot-santa-marta.pdf vista: 1.o de febrero de 2016.
240
Bernal, Ángela y Roberto Almanza. “El Ancón: ta / Instituto Colombiano de Antropología e Observatorio de Humanas: Mujeres, paz y seguri-
una identidad reterritoria en las fiestas de la Historia, 2002. dad. “Boletín n.o 5. Estadísticas sociodemográ-
Virgen del Carmen en la bahía de Santa Mar- ficas. Información regional Magdalena – Santa
ta”, Jangwa Pana (Universidad del Magdalena) Herrera y Tordesillas, Antonio de. Historia gene- Marta. S/d. Disponible en http://www.huma-
4 (1), 2004, pp. 91-98.
ral de los hechos de los castellanos en las Islas nas.org.co/mini-site/pdf/Boletin5Mag.pdf
y Tierra firme del mar Oceano. Decada quarta.
Brungardt, Maurice P. “La United Fruit Company Madrid: Imprenta Real, 1601. Ortega, Alfredo. Reseña general sobre la marcha
en Colombia”. Innovar. Revista de Ciencias Ad- y desarrollo que han tenido los ferrocarriles co-
ministrativas y Sociales 5, 1995, pp. 107-118. Hinestroza Llanos, Alberto. El aporte samario: lombianos desde 1835 hasta 1914. Washington:
60 años fútbol profesional colombiano. Santa
Imprenta del Gobierno, 1917.
Bucheli, Marcelo. “La crisis del enclave banane- Marta: Fundación Periodistas Bolivarianos
ro del Magdalena en los 60s”. Historia Crítica de América, 2008. Ortega, Alfredo. Ferrocarriles colombianos. Resu-
(Universidad de los Andes) 5, 1991, pp. 107-124. men histórico, vol. 2. Bogotá: Imprenta Nacio-
Hosie, Simón (dir.). “Proyecto ‘Pescaíto’. Caracte- nal, 1923.
Bucheli, Marcelo. “Enforcing Business Contracts rización sociocultural y diseño conceptual”.
in South America: The United Fruit Company Documento final del contrato de consultoría Ospino Valiente, Álvaro. “La última fundación
and Colombian Banana Planters in the Twen- 000041 de 2015 entre la Financiera del De- de la ciudad de Santa Marta (Colombia), año
tieth Century”, The Business History Review 78 sarrollo Territorial S. A. – Findeter y Simón 1662”, en monografías.com, s/d. Disponible
(2), 2004, pp. 181-212. Hosie Samper. Inédito, 2016. en http://www.monografias.com/trabajos26/
fundacion-santa-marta/fundacion-san-
Concejo de Santa Marta. Acuerdo n.o 005 del Julián, Antonio. La perla de la América, Provincia de ta-marta.shtml#propuesta
2000 por el cual se expide el plan de orde- Santa Marta, reconocida, observada y expuesta
namiento territorial de Santa Marta “Jate en discursos históricos por el sacerdote don An- Ospino Valiente, Álvaro. “Las fortificaciones de
Matuna” 2000-2009, Santa Marta, 28 de junio tonio Julián. Madrid: Antonio de Sancha, 1787. la ciudad de Santa Marta”, en monografías.
de 2000. Disponible en http://www.curadu- com, s/d. Disponible en http://www.mono-
ria1santamarta.co/pdf/POT_Santa_Marta.pdf Junta de Acción Comunal del barrio San Martín. grafias.com/trabajos38/fortificaciones-san-
Reseña histórica barrio San Martín, 1967-2007. ta-marta/fortificaciones-santa-marta.shtml
Correa, Juan Santiago. “El Ferrocarril de Bolívar S/d, 2007.
y la consolidación del puerto de Barranquilla Ospino Valiente, Álvaro. Santa Marta vista por
(1865 - 194)”, Revista de Economía Institucional. Lacera Rúa, Armando. Recuerdos propios y ajenos viajeros. Santa Marta: Bastianos Editores,
14 (26), 2012, pp. 241-266.
de Santa Marta: esquinas, ventas de comidas, 2005.
sector norte. Calle de Las Piedras, La Salina,
Corte Constitucional de Colombia. Sentencia Pescaíto y el fútbol. Santa Marta: Litografía Periódico barrial Pescaíto al día, n.o 1, 2015.
T-605 de 1992. Disponible en http://www.corte- Distrivarios, 2002.
constitucional.gov.co/relatoria/1992/T-605 -92. Polo Acuña, José, y Sergio Paolo Solano. Histo-
htm Laffite Carles, Christiane. La costa colombiana ria social del Caribe colombiano. Territorios,
del Caribe (1810-1830). Bogotá: Banco de la Re- indígenas, trabajadores, cultura, memoria e
Dávila, José Rafael, José Cotes Gnecco, Luis An- pública, 1995. historia. Medellín: La Carreta / Universidad
tonio Bonilla y Zarita Abello de Bonilla. La de Cartagena, 2011.
historia de Santa Marta a través de la fotogra- Mançano Fernandes, Bernardo. “Territorios en
fía. Bogotá: Banco de la República, 1993. Dis- disputa: campesinos y agribusiness”, en el blog Poveda Ramos, Gabriel. Carrileras y locomoto-
ponible en http://www.banrepcultural.org/ Control territorial en el siglo xxi, 29 de marzo ras. Historia de los ferrocarriles en Colombia.
blaavirtual/historia/stm/indice.htm de 2016. Disponible en http://www.landaction. Medellín: Fondo Editorial Universidad Eafit,
org/IMG/pdf/Bernardo_halifax_esp.pdf 2010.
Elías Caro, Jorge. “El desarrollo portuario de
Santa Marta y su incidencia en el crecimien- Mejía Ochoa, William. “Colombia y las migra- Reclus, Élisée. Viaje a la Sierra Nevada de Santa
to económico y social de la ciudad: 1770-1860”. ciones internacionales. Evolución reciente y Marta. Paisajes de la naturaleza tropical. Car-
Trabajo preliminar de la investigación “El de- panorama actual a partir de las cifras”, Revis- tagena: Tipografía Mogollón, 1935.
sarrollo portuario de Santa Marta y su inci- ta Interdisciplinar da Mobilidade Humana xx
(39), julio-diciembre de 2012, pp. 185 -210. República de Colombia, Ministerio de Obras
dencia en el crecimiento económico y social Públicas. Documentos relacionados con el
de la ciudad, a partir de un estudio cliomé- Meisel Roca, Adolfo. “La economía de Ciénaga Ferrocarril de Santa Marta. Bogotá: Imprenta
trico: siglos xviii-xx” auspiciada por el Fon- después del banano”, Documentos de Trabajo Americana, 1911.
do de Investigaciones de la Universidad del sobre Economía Regional 50, 2004.
Magdalena (Fonciencias). S/d. Disponible República de Colombia. Sentencia de la Corte
en http://www.um.es/ixcongresoaehe/pdfB9/ Meisel Roca, Adolfo. “Enfermedad holandesa y Suprema de Justicia en el juicio sobre el Ferro-
El%20desarrollo%20portuario.pdf exportaciones de banano en el Caribe colom- carril de Santa Marta. Bogotá: Imprenta Na-
biano 1910-1950”, Cuadernos de Historia Eco- cional, 1925.
Friede, Juan. Descubrimiento del Nuevo Reino de nómica y Empresarial 26, abril de 2010.
Granada y fundación de Bogotá (1536-1539). Bo- Ripoll de Lemaitre, María Teresa. “El Central
gotá: Banco de la República, 1960. Meisel Roca, Adolfo y Gerson Javier Pérez. “Geo- Colombia. Inicios de industrialización en el
grafía física y poblamiento en la Costa Cari- Caribe colombiano”, Boletín Cultural y Biblio-
Galvis Ramírez, Alberto. 100 años de fútbol en be colombiana”, Documentos de Trabajo sobre gráfico 34 (45), 1997, pp. 59-92.
Colombia. Bogotá: Planeta, 2008. Economía Regional 73, junio de 2006.
Sánchez Mejía, Hugues. “Haciendas de trapiche,
Henríquez Mazenett, Jimmy. “La vida pasada y Melo, Jorge Orlando. Historia de Colombia. El hatos, hatillos y rozas: el mundo rural en la
presente en Pescaíto”, documento de trabajo establecimiento de la dominación española. gobernación de Santa Marta (1700-1810)”. His-
para Planos Vivos. Inédito, 2016. Bogotá: Presidencia de la República, 1996. toria Caribe XI (28), 2016, pp. 241-274.
Herrera Ángel, Marta. Ordenar para controlar: Michelsen Uribe, Carlos. Ferrocarril de Santa Schoonewolf, Juan. Historia novelada del barrio
ordenamiento espacial y control político en las Marta. Bogotá. Imprenta de Vapor de Zala- Pescaíto (Santa Marta). Santa Marta: Univer-
llanuras del Caribe y en los Andes centrales mea Hs., 1889. sidad del Magdalena, 1995.
neogranadinos, siglo xviii. Bogotá: La Carre-
241
Planos Vivos
Pescaito

Soto, Roberto y Rafael Romero. La zona bananera Entrevistas Sitios web y blogs
del Magdalena: historia y léxico. Bogotá. Insti-
tuto Caro y Cuervo, 1979. Álvaro Gómez, vecino de San Martín. 65 años de Alcaldía Distrital de Santa Marta: http://www.
edad. Entrevista: 28 de febrero de 2016. santamarta.gov.co
Tovar Pinzón, Hermes, Camilo Tovar Mora y
Jorge Tovar Mora. Convocatoria al poder del Ana Isabel Pardo, vecina del barrio de Pescaíto, 66 Antique Prints: http://www.antique-prints.de
número: censos y estadísticas de la Nueva Gra- años de edad. Entrevista: 16 de marzo de 2016.
Banco de la República – Colombia. Actividad
nada 1750- 1830. Bogotá: Archivo General de la
Astrid Pérez, vecina del barrio de Pescaíto, 55 Cultural: http://www.banrepcultural.org
Nación, 1994.
años de edad. Entrevista: 10 de febrero de 2016.

Biblioteca Nacional de Colombia: http://www.
Vallée, Lionel. “Representaciones colectivas y
Benita Mejía, vecina del barrio de Pescaíto y bibliotecanacional.gov.co
sociales”, Cuadernos de Administración 20
oriunda de San Pablo (Bolívar), 74 años de
(Universidad del Valle), mayo de 1995, pp. Delcampe: http://www.delcampe.net
edad. Entrevista: 3 de mayo de 2016.
69-120. Disponible en http://bibliotecadigital.
univalle.edu.co/bitstream/10893/8127/1/repre- Carlos “Jaricho” Valderrama Puche, vecino de Dracamanda: http://deracamandaca.com
sentaciones%20colectivas.pdf Pescaíto, 84 años de edad. Entrevista: 5 de El SamarioNet: http://www.elsamarionet.blogs-
marzo de 2016 pot.com
Viloria de la Hoz, Joaquín. “Empresarios de San-
ta Marta: el caso de Joaquín y Manuel Julián Carmen Martínez, vecina de Barrio Norte, 88 EnCaribe. Enciclopedia de Historia y Cultura del
de Mier, 1800-1896”. Cuadernos de Historia años de edad. Entrevista: 11 de febrero de 2016. Caribe: http://www.encaribe.org
Económica y Empresarial 7, 2000.
Clara Inés Barrios, oriunda de San Pablo (Bolí- Fundación Magdalena: http://www.fundacion-
Viloria de la Hoz, Joaquín. “Historia empresarial var). Entrevista: 3 de mayo de 2016.
 magdalena.blogspot.com.co
del guineo: empresas y empresarios bana-
neros en el departamento del Magdalena, David Ruiz Ureche, vecino de Barrio Norte. En- Google Maps: http://www.google.com.co/maps
1870-1930”, Cuadernos de Historia Económica y trevista: 28 de abril de 2016.
La Monserga del Fútbol: http://www.lamonser-
Empresarial 23, mayo de 2009. Denis Granados Parejo, vecina de San Martín,
74 gadelfutbol.com
Viloria de la Hoz, Joaquín. “Comerciantes en años de edad. Entrevista: 24 de febrero de 2016.
Santa Marta Viva: http://www.santamartaviva.
economía de fronteras: el caso de la Guajira Elías Henríquez Pardo, vecino del barrio de blogspot.com.co
colombiana, 1870-1930”, Cuadernos de Historia Pescaíto, 82 años de edad. Entrevista: 30 de
Económica y Empresarial 32, 2013. marzo de 2016. The Prints Collector: http://www.theprintsco-
llector.com
Viloria de la Hoz, Joaquín. Empresarios del Caribe Héctor Ortiz, vecino de San Martín, 65 años de
colombiano: historia económica y empresarial edad. Entrevista: 20 de febrero de 2016. Wikipedia en español: http://es.wikipedia.org
del Magdalena Grande y del Bajo Magdalena,
1870 -1930. Bogotá: Banco de la República, 2014. Hermes Llanes, vecino de Olaya Herrera, 60
años de edad. Entrevista: 13 de marzo de 2016.
Viloria de la Hoz, Joaquín. “Santa Marta Real y
Republicana: el accionar político y económi- Julio García, vecino de Olaya Herrera, 74 años de Análisis urbano y arquitectónico
co de la Provincia de Santa Marta en los albo- edad. Entrevista: 17 de marzo de 2016. Libros, artículos y documentos
res de la independencia, 1810-1830”, Cuadernos
Julio Rodríguez, vecino de San Martín, 81 años Arango, Silvia. Historia de la arquitectura en Co-
de Historia Económica y Empresarial 36, abril
de edad. Entrevista: 10 de marzo de 2016. lombia. Bogotá: Centro Editorial y Facultad
de 2015.
de Artes, Universidad Nacional de Colombia,
Josefa Sánchez, vecina del barrio de Pescaíto, 54 1993 [1989].
White, Judith. Historia de una ignominia: la Uni-
años de edad. Entrevista: 12 de febrero de 2016.
ted Fruit en Colombia. Bogotá: Editorial Pre-
Findeter, Plan de acción Santa Marta sostenible.
sencia, 1978. Margarita Brekeman, vecina de Ensenada, 90 Financiera del Desarrollo Territorial S. A. –
años de edad. Entrevista: 19 de febrero de 2016. Findeter, 2016.
Zambrano, Fabio y Olivier Bernard. Ciudad y
territorio. El proceso de poblamiento en Colom- Marina Villar, vecina de Olaya Herrera, 73 años Hosie, Simón (dir.). “Proyecto ‘Pescaíto’. Caracte-
bia. Bogotá: Academia de Historia de Bogotá de edad. Entrevista: 16 de marzo de 2016. rización sociocultural y diseño conceptual”.
/ Instituto Francés de Estudios Andinos, 1993.
Miguel Brujés, vecino de Barrio Norte, 65 años Documento final del contrato de consultoría
Zorro Celedón, Joaquín. El fútbol del Magdalena, de edad. Entrevista: 15 de marzo de 2016. 000041 de 2015 entre la Financiera del De-
momentos estelares. Santa Marta: Editorial sarrollo Territorial S. A. – Findeter y Simón
Mejoras Ltda., 1987 Orlando Calero, vecino de Barrio Norte, 84 años Hosie Samper. Inédito, 2016.
de edad. Entrevista: 28 de enero de 2016.
Zuleta Jaramillo, Luis Alberto (director de estu- Ospino Valiente, Álvaro. Santa Marta. Urbanismo
dio), Alejandro Ovalle Gont y Juan Manuel René Henríquez Valderrama, vecino del barrio y arquitectura, 1525-1975. Santa Marta: Bastia-
Merchán Hernández (investigadores). ¿Por de Pescaíto, 50 años de edad. Entrevista: 2 de nos Editores, 2016.

qué no han sido exitosos los ferrocarriles en abril de 2016.
Colombia? Bogotá: Universidad Externado Rosa Rojas Manjarrez, vecina de San Martín, 84 Entrevistas
de Colombia, 2001. años de edad. Entrevista: 23 de febrero 23 de
2016. Alcides Rodríguez Galván, vecino de Ensenada.
Zúñiga Ceballos, Joaquín A. Jirones de una his-
Entrevista: 1.o de junio de 2016.
toria en Santa Marta. Santa Marta: S/d, 2012. Tomás Fuentes, vecino del barrio de Pescaíto, 94
años de edad. Entrevista: 30 de marzo de 2016. Carlos Correa Montenegro, vecino del barrio de
Pescaíto. Entrevista: 7 de abril de 2016.
Wilson Calero, vecino de Barrio Norte, 53 años
de edad. Entrevista: 25 de mayo de 2016. Carlos Gómez, vecino de Olaya Herrera. Entre-
vista: 2 de junio de 2016.
242
Diana Yacomelo, vecina de Villa Tabla. Entrevis- Marta: Fundación Periodistas Bolivarianos Colombia”, en Mauricio Pardo Rojas (ed.),
ta: 7 de junio de 2016. de América, 2008. Música y sociedad en Colombia. Traslaciones,
legitimaciones e identificaciones. Bogotá: Uni-
Eduardo Goenaga, vecino de Ensenada, 63 años Lopera, Manuela. “Los cantos nativos de la cié- versidad del Rosario, 2009, pp. 333-367.
de edad. Entrevista: 1.o de junio de 2016. naga caribeña”, en Carlos Vives (dir.), “Mi Co-
lombia fantástica”, Revista Cromos 100 años, 18
Elkin Darío Oviedo, vecino de Barrio Norte. En- de septiembre de 2014. Entrevistas
trevista: 2 de junio de 2016.
Hosie, Simón (dir.). “Proyecto ‘Pescaíto’. Caracte- Adalberto Yánez Silvera, vecino del barrio de
Héctor Ortiz, vecino de San Martín, 65 años de rización sociocultural y diseño conceptual”. Pescaíto. Entrevista: febrero de 2016.
edad. Entrevistas: 7 de marzo, 25 de mayo, 3 y Documento final del contrato de consultoría
6 de junio de 2016. Ahír del Valle, vecino del barrio de Pescaíto. En-
000041 de 2015 entre la Financiera del De-
sarrollo Territorial S. A. – Findeter y Simón trevista: abril de 2016.
Idania Ruiz Ureche, vecina del barrio de Pescaíto,
48 años de edad. Entrevista: 11 de abril de 2016. Hosie Samper. Inédito, 2016. Álvaro Gómez, vecino de San Martín. Entrevis-
Ospino Rangel, Raúl. “¿Por qué el Carnaval del ta: febrero de 2016.
Iris Rojas de Ariza, vecina de Barrio Norte. En-
trevista: 11 de abril de 2016. Magdalena se fue para Barranquilla?”, blog Arquímedes Mendoza, vecino del barrio de Pes-
Fundación Magdalena, entrada del 17 de febrero caíto. Entrevista: febrero de 2016.
José González. Entrevista: 2 de mayo de 2016. de 2015. Disponible en http://fundacionmagda-
lena.blogspot.com.co/2015/02/porque-el-car- Carlos Urbano, vecino de Barrio Norte. Entrevis-
José López, vecino de Olaya Herrera. Entrevista:
naval-del-magdalena-se-fue.html ta: mayo de 2016.
2 de junio de 2016.
Silva Vallejo, Fabio (dir.), Roosevel González y Es- Carmenza Suárez, vecina del barrio de Pescaíto.
Justa Pimiento, vecina de Barrio Norte, 92 años
peranza Ardila Beltrán. Informe final del pro- Entrevista: abril de 2016.
de edad. Entrevista: 11 de abril de 2016.
yecto de investigación “Formas simbólicas de
César Gómez, vecino del barrio Pradito (en Ola-
Lourdes Ruiz Ureche, vecina del barrio de Pes- resistencia en la tradición oral de Santa Mar-
ya Herrera). Entrevista: enero de 2016.
caíto, 55 años de edad. Entrevistas: 10 y 25 de ta”. Santa Marta: Universidad del Magdalena,
mayo de 2016. 2008.
Disponible en http://oraloteca.unimag- Daniel Pinedo, vecino de San Martín. Entrevista:
dalena.edu.co/wpcontent/uploads/2012/ 12/ enero de 2016.
Lourdes Zambrano, vecina de Barrio Norte, 64 FORMAS - SIMB%C 3%93LICAS -DE -RESISTEN-
años de edad. Entrevista: 11 de abril de 2016. CIA-EN-SANTA-MARTA .-2008.pdf David Penny Tovar. Entrevista: abril de 2016.
Nibia Pacheco, vecina de San Martín. Entrevista: Vives, Carlos (dir.). “Mi Colombia fantástica”, Re- Doris Villar, vecina del barrio de Pescaíto. Entre-
29 de febrero de 2016. vista: mayo de 2016.
vista Cromos 100 años, 18 de septiembre de 2014.
Patricia Ruiz Ureche, vecina de Pescaíto, 45 años Elvia Arango, vecina del barrio de Pescaíto. En-
de edad. Entrevista: 3 de junio de 2016. Entrevistas trevista: mayo de 2016.
Rodrigo “Chicho” Rodríguez, vecino de Olaya Freddy Guerra, vecino del barrio de Pescaíto.
Alaín Manjarrés, vecino de Olaya Herrera. En-
Herrera. Entrevista: 4 de mayo de 2016. Entrevista: enero de 2016.
trevista: 24 de mayo de 2016.
Usmar Rebolledo, vecino de Villa Tabla, 61 años Jimmy Henríquez Mazenett, vecino del barrio de
Graciela Mejía, vecina del barrio de Pescaíto, 78
de edad. Entrevista: 1.o de junio de 2016. Pescaíto. Entrevista: enero de 2016.
años de edad. Entrevista: 11 de mayo de 2016.
Wilson Calero, vecino de Barrio Norte, 53 años Joice Corbacho, vecina del barrio de Pescaíto, 24
René Henríquez Valderrama, vecino de Pescaíto,
de edad. Entrevistas: 10 de mayo, 25 de mayo años de edad. Entrevista: enero de 2016.
50 años de edad. Entrevista: 20 de enero de
y 3 de junio de 2016.
2016. Juan Gómez, vecino de Barrio Norte. Entrevista:
Usmar Rebolledo, vecino de Villa Tabla, 61 años enero de 2016.
de edad. Entrevista: 1.o de febrero de 2016. Leonardo del Valle, vecino del barrio de Pescaí-
Comunidad, organización y to. Entrevista: marzo de 2016.
liderazgos en Pescaíto
Libros, artículos y documentos Libia del Valle, vecina del barrio de Pescaíto. En-
Pescaíto: dimensión sociocultural trevista: abril de 2016.
Alcaldía de Santa Marta, Dirección de Cultura, Libros, artículos y documentos Liliana Galván, vecina del barrio de Pescaíto.
Recreación y Deportes. “Inventario prelimi-
Entrevista: marzo de 2016.
nar de patrimonio cultural para el D.T.C.H de Hosie, Simón (dir.). “Proyecto ‘Pescaíto’. Caracte-
Santa Marta”. Santa Marta: Alcaldía Distrital rización sociocultural y diseño conceptual”. Lourdes Ruiz Ureche, vecina del barrio de Pes-
de Santa Marta, 2015. Documento final del contrato de consultoría caíto, 55 años de edad. Entrevista: mayo de
000041 de 2015 entre la Financiera del De- 2016.
Aponte Mantilla, María Emilia. “La Historia del
sarrollo Territorial S. A. – Findeter y Simón
vallenato: discursos hegemónicos y disiden- Orlando Calero, vecino de Barrio Norte, 84 años
Hosie Samper. Inédito, 2016.
tes”. Tesis de grado para optar por el título de de edad. Entrevista: enero de 2016.
Magistra en Literatura, Pontificia Universi- Ospino Rangel, Raúl. “¿Por qué el Carnaval del
dad Javeriana, Facultad de Ciencias Sociales, Magdalena se fue para Barranquilla?”, blog Óscar Camargo, vecino de Barrio Norte. Entre-
2011. Fundación Magdalena, entrada del 17 de fe- vista: abril de 2016.
brero de 2015. Disponible en http://fundacion- Óscar Enrique Redondo, vecino del barrio de
Henríquez Mazenett, Jimmy. “La vida pasada y
magdalena.blogspot.com.co/ 2015/02 /por- Pescaíto. Entrevista: mayo de 2016.
presente en Pescaíto”, documento de trabajo
que-el-carnaval-del-magdalena-se-fue.html
para Planos Vivos. Inédito, 2016 Presentación Martínez, vecina de Barrio Norte.
Pardo Rojas, Mauricio. “Localidad y cosmopo- Entrevista: enero de 2016.
Hinestroza Llanos, Alberto. El aporte samario:
litanismo en ‘la tambora’ de Santa Marta,
60 años fútbol profesional colombiano. Santa 243
Planos Vivos
Pescaito

Rafael Laguado. Entrevista: marzo de 2016. Propuesta urbana y arquitectónica Revista Proyectodiseño. “La Hamadora” (entre-
Libros, artículos y documentos vista a Simón Hosie), Revista Proyectodiseño
René Henríquez, vecino de Pescaíto, 50 años de
86, agosto de 2013, pp. 12-14.
edad. Entrevista: febrero de 2016. Agencia Presidencial de Cooperación Interna-
Sully Castañeda, vecina de Barrio Norte. Entre- cional de Colombia (APC-Colombia) / Oficina Revista Semana. “Recuerdos del futuro”, Revista
vista: mayo de 2016. de las Naciones Unidas para la Cooperación Semana 1160, 25 de julio de 2004, pp. 100-102.
Sur-Sur (Unossc). “Reconstrucción de El Sa-
Revista Semana. “El Salado: regreso a la tierra
lado”, en Construcción de la paz a partir del
del olvido”, Revista Semana 1573, 25 de junio
conocimiento. Prácticas y perspectivas en los
de 2012, pp. 112-114. Disponible en: http://www.
territorios. APC-Colombia / Unossc, 2016, pp.
Conclusiones de la investigación semana.com/cultura/articulo/elsalado-re-
267-285.
Libros, artículos y documentos greso-tierra-del-olvido/259960
Alcaldía de Santa Marta / ONU-Habitat. Santa
Alcaldía de Santa Marta / ONU-Habitat. Santa Scott, James C. Seeing Like a State: How Certain
Marta. Plan maestro 500 años, 1525-2025. Santa
Marta. Plan maestro 500 años, 1525-2025. Santa Schemes to Improve the Human Condition
Marta: 2013
Marta: 2013 Have Failed. New Haven/Londres: Yale Uni-
Alcaldía de Santa Marta / Sociedad Portuaria versity Press, 1998.
Alcaldía de Santa Marta / Sociedad Portuaria de Santa Marta / Promotora Urbana de San-
de Santa Marta / Promotora Urbana de San- Sociedad Colombiana de Arquitectos. XIX Bienal
ta Marta – Prourbana S.A.S. Plan parcial del
ta Marta – Prourbana S.A.S. Plan parcial del Colombiana de Arquitectura. Sociedad Co-
puerto de Santa Marta y área de influencia
puerto de Santa Marta y área de influencia lombiana de Arquitectos, 2004.
[presentación]. Santa Marta: 2015.
[presentación]. Santa Marta: 2015.
Sociedad Colombiana de Arquitectos. XXIV Bie-
Arias, Carlos (director). “Biblioteca pública Casa
Hosie, Simón (dir.). “Proyecto ‘Pescaíto’. Caracte- nal Colombiana de Arquitectura. Sociedad
del Pueblo”, documental realizado por la co-
rización sociocultural y diseño conceptual”. Colombiana de Arquitectos, 2014.
munidad de Guanacas. Metacine, 2012. https://
Documento final del contrato de consultoría www.youtube.com/watch?v=c74WFZXt9K0 Sociedad Portuaria de Santa Marta / Promotora
000041 de 2015 entre la Financiera del De-
Urbana de Santa Marta – Prourbana S.A.S.
sarrollo Territorial S. A. – Findeter y Simón Díaz, Juan Carlos. “La Hamadora, A Chair that
Plan parcial de renovación urbana del puerto
Hosie Samper. Inédito, 2016. Heals Old War Wounds”, The Straits Times, 20
de Santa Marta y su área de influencia. Docu-
de septiembre de 2014. Disponible en http://
Lapunzina, Alejandro. “De la pampa al altipla- mento técnico de soporte. Santa Marta: Junio
www.straitstimes.com/world/a-chair-that-
no: los planes directores de Le Corbusier en de 2014.
heals-old-war-wounds
América”, en María Cecilia O’Byrne Orozco
(coord.), Le Corbusier en Bogotá: 1947-1951, tomo Hell, Victor. La idea de cultura. México: Fondo de
2: Precisiones en torno al Plan Director. Bogotá: Cultura Económica, 1986 [primera edición en
Universidad de los Andes / Pontificia Univer- francés: 1981].
sidad Javeriana, 2010.
Hosie, Simón. “El silencio de El Salado”. Palabras
Martín-Barbero, Jesús. “La comunicación desde de Simón Hosie durante la inauguración de
la cultura: crisis de lo nacional y emergencia la Casa del Pueblo de El Salado, El Tiempo, 13
de lo popular”, en Estudios sobre las culturas de julio de 2012.
contemporáneas I (3), 1987, pp. 45 -69.
Hosie, Simón (dir.). “Proyecto ‘Pescaíto’. Caracte-
O’Byrne Orozco, María Cecilia (coord.). Le Cor- rización sociocultural y diseño conceptual”.
busier en Bogotá: 1947-1951, 2 tomos. Bogotá: Documento final del contrato de consultoría
Universidad de los Andes / Pontificia Univer- 000041 de 2015 entre la Financiera del De-
sidad Javeriana, 2010. sarrollo Territorial S. A. – Findeter y Simón
Hosie Samper. Inédito, 2016.
Silva, Armando. “La perspectiva estética como
estrategia comunicativa en ciudades colom- Hosie, Simón. “La Casa del Pueblo: nuevo centro
bianas”, en Estudios sobre las culturas contem- de El Salado”, Dearq, número 19: Arquitectura
poráneas I (2), 1987, pp. 123-44. y antropología, diciembre de 2016, pp. 104-111.

Sociedad Portuaria de Santa Marta / Promotora Jaramillo, Mariana. “El Salado palpitando de
Urbana de Santa Marta – Prourbana S.A.S. nuevo”, Arquitectura Corona 11, agosto de 2012.
Plan parcial de renovación urbana del puerto pp. 10-15.
de Santa Marta y su área de influencia. Docu-
Minke, Gernot. “La Casa del Pueblo. Estaciones
mento técnico de soporte. Santa Marta: Junio
de Peaje de Autopistas del Café”, en Manual
de 2014.
de Construcción en Bambú. Cali: Merlín, 2010,
pp. 96-97.
Miño, Luis Alberto. “La biblioteca que soñó Gua-
nacas”, El Tiempo, 15 de agosto de 2004.
Muñoz, César. “Las hamadoras” (entrevista a Si-
món Hosie), Revista Latitud 1533, periódico El
Heraldo, abril de 2013.
Revista Cambio. “Hay un camino en la arqui-
tectura silenciosa. Entrevista con Simón Ho-
sie”, Revista Cambio 579, 2 de agosto de 2004,
244 pp. 58- 60.
Este libro, editado por Impresol Ediciones,
se terminó de imprimir en los talleres
gráficos de Panamericana Formas e
Impresos S. A. en el mes de agosto de 2017
para cumplir con la máxima de Alfonso
Reyes (tal como la refiere Jorge Luis Borges):
“Publicamos nuestros libros para librarnos
de ellos, para no pasar el resto de nuestras
vidas corrigiendo borradores”.
Plano de hitos, lugares de la memoria,
lugares de confluencia y recorridos

Planos

rtad O
Plano de tipología de la vivienda según su historia
y árboles en los frentes de las casas

Espacio público
Casa de autoconstrucción
Casa republicana (vivienda en serie)
Casa art déco
Casa transicional
Casa moderna
Casa de los 60 y 70
Posible casa contemporánea
No pertenece a ninguno de los
principales estilos arquitectónicos
Modificado o remodelado y es
Ac
imposible reconocer el estilo original Ac
Viviendas que fueron modificadas
para comercio y es imposible
reconocer el estilo original Ac
Ac
Comercio Ac

CLE

Ac

C C
C C

CLE

TT

G LL

U
C

Ac

CLE

CLE

C C
C

C C

C C
C C C
C

Planos
C C

C C
C C
C C C
C

C
C
Mango C
C C C
C
C
C
C
Guayacán C C
C

Almendro
C
C C C C
Nim C
C
C C C
C
C C C
C
C C
C C
Olivo C
C
C
C C C
C
Matarratón C C

Maíz tostado C
C C
C
C
C CC C C C
C C C
San Joaquín (árbol C
C
C
C
C
de navidad) C C
C C
C C
Trébol C
C C
C
C
C C C C
C C
C C C C
C C CC C C
Caucho/roble C C C
C
C
C C
C
Trupillo, reseda C CC
CC C
C
C C C C C C C C
C
C
C
C C C
C C
Uva (macho y hembra) C
C
C C C C

C C C C
Níspero C C C C
C C
C C C
Laurel extranjero, suegra CC
C C
C
CC
C
C C
C
C
C
C C C
C CC C C C C C
C CC C C C C CC C C C C
Ac Acacia C
CC C
C C C CC
C CC C C C
CC C C C

C
E Eucalipto C
C C C C
CA Palo de caimito C
C C C C
C
LL Lluvia de oro C
C
C
C

Cañandanga, Flor C C
C

C C C C
amarilla, Cabalonga C

Olivo negro C C C CC C C C
C C
G Guásimo C
C C
C
CC
C
Higuereta C
C
C

C C C C
Limón C CC C C
C

Mamón CC C

C
C Coral blanco C C
C
C
C C
C C
Palmas C
C
C C
C C
C C C
U Uva C C C C C
C
C C
C
C
C
C

CLE Clemón
T Todo sombra

rtad O
Plano de hitos y lugares de la memoria y ubicación
de la primera cancha en el playón de la Aduana y
de La Castellana a través del tiempo

03 31
16
32

04
21
05
33 02 09
15
28

Calle 5 36
41 29 12 45 39
40 37 42
Calle 6
23

26 22
43
27 10
35
Puerto de 38
Santa Marta

34
17 18 20

08 44
43
13
24
01 07
06
14

30

19

Planos

Recorrido - Caminos antiguos 13 Hotel Universal 29 Jardín infantil del


Taganga-Mamatoco 14 Antigua estación del tren Bienestar Familiar
Recorrido de las tagangueras 15 Cerro de la Virgen 30 Mercado público
entre Pescaíto y la plaza 31 Parque de San Jorge
de San Francisco 16 Cerro de Santa Marta
17 Cuatro Bocas 32 Cancha de Ensenada
Principal recorrido del
desfile del Carnaval 18 El Boro 33 Cancha de San Martín
01 Casa del Español 19 Iglesia de San Francisco 34 Parque infantil de Olaya Herrera
02 Casa Embrujada 20 Calle de las Piedras 35 Clínica La Castellana
03 Parque de Ensenada 21 Casa de los Negritos 36 Puesto de salud Olaya Herrera
Olaya Herrera 37 Iglesia Nuestra Señora del Carmen
22 La Castellana
04 Discoteca Tercer Nivel 38 Iglesia Evangélica Cuadrangular
Playas y caminos de los
05 Parque de San Martín cerros del Norte 39 IED Madre Laura
06 Hotel Karimar 23 Piso Alto 40 IED John F. Kennedy
07 Sede de la Sociedad Unión 24 Teatro Popular 41 Colegio José Prudencio Padilla
08 Pasaje Angosto 25 El puerto 42 Colegio parroquial Nuestra
09 El Mojón de Oro 26 Coliseo cubierto Señora del Carmen Playón 1908 – 1916
10 Pescaíto Dorado 27 Ludoteca 43 Colegio Vicuña Cancha 1916 – 1954
Tiendas de barrio que convocan 28 Centro Integral Comunitario 44 IED Normal María Auxiliadora Cancha 1954 – presente
12 Parque de Pescaíto San Martín 45 Convento de las lauritas Iglesia Virgen del Carmen

rtad O
Planos

rtad O

También podría gustarte