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HISTORIA

El influjo norteamericano en el desarrollo de


la salud pública en Colombia
Juan Carlos Eslava
Resumen
El presente artículo intenta mostrar cómo la salud pública colombiana, al igual que la
del resto de Latinoamérica, se desarrolló bajo la profunda influencia de los modelos y
las pautas norteamericanas, pero condicionada, a su vez, por las particularidades na-
cionales. Esto permite reflexionar sobre los procesos diferenciales mediante los cuales
las políticas del "centro", representado por las directrices de la Fundación Rockefeller,
influyen los espacios "periféricos". La hipótesis de trabajo que se propone para explicar
la particularidad del caso colombiano, en el contexto latinoamericano, es la ausencia
de un movimiento nacionalista significativo de comienzos de siglo que contribuya a
forjar un movimiento sanitarista fuerte y enraizado en lo local y con posibilidades de
entablar negociaciones claras y contundentes frente a las posturas norteamericanas,
lo que hace que la salud pública colombiana adopte una forma diferente y más
dependiente que la de otros países de la región.

North American influence o n the development of public health in Colombia


The present article tries to show how Colombian public health, the same as in the rest
of Latin America, was developed under the profound influence of North American
models and norms, but conditioned, in turn, by national particularities. This allows
reflection about the differential processes through which the policies of the "centre",
represented by the Rockefeller Foundation's directives, influenced the "peripheral"
spaces. The working hypothesis which is proposed to explain the Colombian case's
particularity, in the Latin American context, is the absence of a significant nationalist
movement at the start of the century which could have contributed towards forging a
strong sanitary movement rooted in that which was local and having the possibility to
table clear and convincing negotiation faced with North American posturlng, as what did
happen was that Colombian public health took on a different and more dependent form
than that of the region's other countries.
El presente trabajo se inscribe dentro del proyecto En las Últimas sesiones del curso "Colonialis-
"Ei transito de la higiene a la medicina tropical Y la mo, ciencia, tecnología y medicina", en el cual
salud pública en Colombia". el cual es dirigido por
Emilio Quevedo y cuenta con el apoyo del Instituto
Se aspectos fundamentales del pro-
Nacional de Salud, la Universidad ~ ~y Ceso
~ de expansión
i ~ de la ~ciencia ~europeal y las
-
COLCIENCIAS. La versión oriuinal del texto fue dinámicas científicas l ~ ~ a len
i ?~~a í s e slatinoa-
presentada en el curso "Colonialismo, ciencia, mericanos, se puso en evidencia un campo de
tecnología y medicina", ei cual dirigió Diana Obregón,
durante el segundo semestre de 1997, en l a
estudio de gran interés que, en los
Facultad de Ciencias Humanas de la universidad años, ha ganado r e ~ ~ n ~ ~ i me iimportancia
ent~
Nacional. en la región. Dicho campo corresponde al estu-

Facultad de Medicina y Facultad de Ciencias Humanas, Universidad Nacional de Colombia, Santa Fe de Bogotá.
Recibido para su publicación: 22 de abril de 1998. - Aprobado para su publicación: 30 de abril de 1998.
dio de las estrategias mediante las cuales las intentará explorar cómo las condiciones particu-
sociedades se enfrentan a las diversas enferme- lares hacen del caso colombiano una singulari-
dades y construyen un saber acerca de lo sano dad inmersa en una tendencia general. Con esto
y lo enfermo a nivel colectivo o, de manera más se quiere poner en evidencia el hecho de que,
general, al estudio de la historia de la salud pú- pese a la similitud del influjo que los Estados
blica (1). Unidos tiene en los diferentes países latinoame-
En los diferentes trabajos que se vienen reali- ricanos, la experiencia colombiana es diferente
zando en la última década, de los cuales sólo de la peruana, la argentina o la brasileña. Esta
analizamos una pequeña muestra en el curso, diferencia bien puede estar asociada con la
se distingue el interés por mostrar el campo sa- ausencia de un significativo movimiento naciona-
nitario inscrito en amplios contextos socio- lista de comienzos de siglo que contribuyera a
políticos, económicos y culturales. Así, en el forjar un movimiento sanitarista fuerte y
texto de Nisia Trindade y Nara Britto (2), el inte- enraizado en lo local y con posibilidades de en-
rés se dirige al análisis de las concepciones tablar negociaciones claras y contundentes fren-
sanitaristas que orientaron a los miembros de la te a las posturas norteamericanas, lo que hizo
Liga Pro-saneamiento del Brasil a comienzos que la salud pública colombiana adoptara una
del siglo XX, para lo cual se elabora un marco forma diferente y una dinámica diversa a la de
político donde se pone de presente el papel fun- otros países de la región.
damental del movimiento nacionalista brasileño.
En el documento de Diego Armus (3),política y Esta relativa debilidad de los actores sociales a
sanidad se entretejen en una intrincada red de nivel nacional en el campo sanitario permitirá
que, desde muy temprano, la salud pública de
relaciones la cual queda expuesta a partir del
análisis del discurso libertario argentino en su corte norteamericano sea el eje para el
vínculo con el saber acerca de la tuberculosis. desarrollo de la salud pública nacional y,
posteriormente, bajo la figura del Servicio
Diana Obregón, a su vez, muestra el uso político
que la profesión médica en Colombia de comien- Cooperativo Interamericano de Salud Pública
zos del siglo XX hace de los estudios sobre la (SCISP), pueda cumplir la función de
lepra (4). orientadora técnica del ministerio y líder en las
propuestas de transformación de la educación
Con un enfoque un poco diferente, pero bajo el médica en el país.
mismo propósito general antes enunciado, los
trabajos de Emilio Quevedo (5) y de María del Otra disimilitud que puede plantearse entre la
Pilar Guzmán (6) muestran a la salud pública experiencia de varios países latinoamericanos y
colombiana dentro de un complejo campo de re- la colombiana es que, en el país, el apoyo ex-
laciones donde los intereses económicos y polí- tranjero no se articuló fácilmente con los esfuer-
ticos norteamericanos tienen una importancia zos investigativos desarrollados por médicos na-
fundamental y las estrategias de cooperación cionales en el campo de su especial interés. De
técnica fundamentan modos de intervención ex- hecho, como queda de presente en el trabajo de
tranjera de gran impacto a la hora de señalar de- Diana Obregón, el estudio de la lepra fue primor-
rroteros para la acción. dial para la medicina colombiana; sin embargo,
los intereses extranjeros se centraron, en mu-
Siguiendo las directrices formuladas por todos cho, en el estudio de la anquilostomiasis
estos trabajos y bajo los efectos de una inicial (uncinariasis), la malaria y la fiebre amarilla l .
fascinación por el lúcido esfuerzo desplegado ' Esta afirmación puede ser relativizada al atender el
por Marcos Cueto en sus escritos (7-9), el pre- caso de la fiebre amarilla en el país. Sin embargo, la
sente artículo intentará mostrar, de manera bre- conservo como una de las grandes inquietudes que
ve, cómo la salud pública colombiana, al igual me surgen de la lectura del trabajo de Diana
Obregón. Si la investigación en lepra es tan
que la del resto de Latinoamérica, se desarrolla importante para el gremio médico en el país, como
bajo la profunda influencia de los modelos y las ella afirma, entonees los intereses extranjeros rele-
pautas norteamericanas. Sin embargo, también gan este gran interés "nacional". Aparentemente no
En todo caso, lo que evidencian estas diferen- dades ejecutivas en lugar de simples cuerpos
cias es que aun si los influjos de "políticas colo- colegiados de carácter consultivo y, por otra, se
nialistas" se despliegan de manera similar en tecnificó el proceso de intervención estatal en
diversos territorios, las especificidades locales y salud articulándose con la estructura económica
las tradiciones particulares tienen un papel fun- (10).
damental que genera procesos diversificados de
Argentina, Brasil y Uruguay son los primeros
adecuación, ajuste, transfotmación o resistencia.
países de América Latina que crean unidades
Para dar comienzo a la labor, se intentará esta- estatales de sanidad a finales del siglo XIX, se-
blecer una relación del caso colombiano frente guidos por Bolivia, Cuba, Ecuador, Paraguay y
al escenario brindado por los países Perú, ya a comienzos del siglo XX. En lo refe-
latinoamericanos, ubicando de forma muy rente a Colombia, la Ley 33 de 1913 creó el
general las afinidades que existen entre estos Consejo Superior de Sanidad dependiente del
países para luego presentar, de manera sucinta, Ministerio de Gobierno, el cual en 1914 se
algunas de las particularidades del caso transformó en la Junta Central de Higiene y, en
colombiano. En este sentido, el esfuerzo estará 1918, se convirtió en la Dirección Nacional de
orientado hacia la comprensión de la situación Higiene, dependencia del Ministerio de Instruc-
colombiana inscrita en un contexto latino- ción Pública (1 1). Esta organización sanitaria
americano. presente en los países respondió, en gran medi-
da, a la preocupación de las clases dirigentes
La transformación sanitaria
por superar las cuarentenas marítimas que au-
A finales del siglo XIX y comienzos del XX, los mentaban los costos de las importaciones y ex-
países latinoamericanos iniciaron un proceso de portaciones, evitar la introducción de enfermeda-
transformación profunda de sus estructuras sa- des del exterior y atender los llamados y exi-
nitarias, motivados por su creciente necesidad gencias de las potencias comerciales las cua-
de incorporarse al mercado internacional (10). les estaban en ese momento, justamente, nego-
Estas transformaciones condujeron. de manera ciando acuerdos internacionales para formular
discontinua en los distintos países, al surgi- convenios y reglamentos sanitarios en miras a
miento o consolidación de organizaciones esta- reducir al mínimo los requisitos de cuarentena
tales de carácter nacional lo suficientemente con relación a enfermedades como la peste, la
fuertes como para ser capaces de impulsar ac- fiebre amarilla, el cólera y la viruela.
ciones rápidas y eficaces en procura de solucio-
nar los grandes problemas sanitarios presentes Es importante mencionar, siguiendo a Foucault,
en la región y, en particular, aquellos que tuvie- que en occidente hubo hasta el siglo XVlll e in-
ran algún interés para la economía nacional y el clusive el XIX, fundamentalmente, dos modelos
comercio con el extranjero. de organización sanitaria: el primero, suscitado
wor la lewra. confiauró una medicina de- exclii-
~ ~~ ~

La creación de consejos de sanidad, juntas o di- ción, la cual privilegió como mecanismo "tera-
recciones nacionales de higiene orientadas a péutico" el destierro y la expulsión de los enfer-
solucionar problemas sanitarios específicos re- mos. El segundo, motivado por la peste, se des-
presentó, al decir de Juan César García, un plegó como un esfuerzo por distribuir a los indi-
cambio notorio con relación al papel jugado an- viduos uno al lado de otro, aislarlos y vigilarlos.
teriormente por el Estado. De una parte, se En palabras del mismo Foucault: "Hubo, pues,
crearon unidades burocráticas con responsabili- el esquema médico de reacción a la lepra, que
pasa lo mismo en el Perú donde el estudio de la era de exclusión, de exilio, de tipo religioso, de
enfermedad de Carrión tiene una importante aten- purificación de la ciudad, y el que suscitó la
ción por parte de investigadores norteamericanos
quienes, entre otras cosas, motivaron una fuerte peste, en el que no se aplicaba el internamiento
polémica en los círculos médicos peruanos (7); otro y el agrupamiento fuera del centro urbano sino,
tanto pasa en el Brasil con los estudios sobre la por el contrario, se recurría al análisis minucioso
uncinariasis. de la ciudad, al registro permanente. El modelo
religioso fue, pues, sustituido por el militar y es especialmente norteamericano, dadas las pre-
la revisión militar y no la purificación religiosa la carias condiciones sanitarias, el débil desarrollo
que en el fondo sirvió esencialmente de modelo técnico en el área y las acciones poco efectivas
a esta organización politica médica" (12). con las cuales se trabajaba desde tiempo atrás.
Para el caso de América Latina, las estrategias Esta apertura permitió que América Latina se
sanitarias desplegadas por los países a lo largo convirtiera, por un lado, en un escenario proclive
del siglo XIX estuvieron bastante influidas por a la cooperación técnica norteamericana y al
estos dos modelos organizativos. El modelo de dominio neocolonial y, por otro lado, en un cam-
vigilancia y control, el cual fue instrumen- po de pruebas de los conceptos y las técnicas
talizado mediante la cuarentena, sirvió como desarrolladas por la salud pública estadinense.
fundamento de la incipiente sanidad portuaria; el Como bien lo señala Marcos Cueto: 'Entre 1918
otro, matizado por pautas aislacionistas, siguió y 1940 América Latina se convirtió en un campo
reglando los dictámenes médicos acerca de la de pruebas de uno de los conceptos más
lepra hasta bien entrado el siglo XX, por lo ambiciosos y controvertidos de la salud pública
menos, en el caso colombiano (4). moderna: la erradicación de enfermedades" (8).
A medida que los intercambios comerciales se La Fundación Rockefeller (FR) jugó un papel
desarrollaban con una rapidez cada vez mayor, fundamental no sólo en la aplicación del con-
dadas las exigencias de la producción capitalis- cepto erradicacionista a través de sus campa-
ta, la implementación de las cuarentenas, me- ñas sino también en la reorganización de las
canismo efectivo de control sanitario, comenzó instituciones de salud pública latinoamericanas,
a generar grandes dificultades al comercio inter- en la extensión de los servicios sanitarios a las
nacional en la medida en que le colocaba frenos zonas rurales y en la sustitución de los modelos
al desarrollo del libre comercio. Esta conciencia franceses por los norteamericanos como refe-
de los obstáculos que desde la esfera sanitaria rentes de acción. Para Colombia, la coopera-
se tenia para el desarrollo comercial, llevó a in- ción en salud pública por parte de la Junta Sani-
tensos esfuerzos por establecer una organiza- taria Internacional de la FR comenzó en 1917
ción sanitaria a nivel mundial y constituir un cuando por solicitud del gobierno nacional una
código sanitario internacional. Es en este proce- comisión norteamericana se encargó del estudio
so donde los paises "desarrollados" logran im- de la presencia de fiebre amarilla en el territorio
poner pautas al resto de países, bajo el doble nacional. Sin embargo, esta cooperación sólo
propósito de procurar la salud de los pueblos y se concretará de manera definitiva con la
regular las posibilidades de intercambio de pro- campaña en contra de la uncinariasis iniciada
ductos. La realización de las distintas en 1919 (5).
conferencias sanitarias internacionales a partir
Las campañas de erradicación
de 1851, la fundación de la Office lnternational
d'Hygiene Publique en 1907 y la creación de la Tal como lo señala Marcos Cueto, la FR fijó su
Oficina Sanitaria Panamericana en 1903, serán atención en tres enfermedades tropicales, las
una muestra de los esfuerzos por construir regu- cuales fueron consideradas técnicamente como
laciones internacionales frente a la salud pública susceptibles de eliminación mediante campa-
(13).
. . ñas directas de corta duración. Estas, por tanto,
se convirtieron en focos de erradicación y ejes
Para los países latinoamericanos, estos proce-
de acción sanitaria. Dichas enfermedades fue-
sos de organización sanitaria internacional im-
ron la anquilostomiasis, la fiebre amarilla y la
plicaron una fuerte exigencia hacia sus estructu- m3,3ri3
,,,U,U,,U.
ras administrativas y retos enormes para sus
propias organizaciones sanitarias. Estos retos, En lo que se refiere a la anquilostomiasis
si bien movilizaron grandes recursos nacionales, (uncinariasis), la FR entra en América Latina a
también abrieron la puerta al influjo extranjero, partir de una evaluación técnica realizada en
Brasil en 1916. Posteriormente, se desarrollan ca. Las actividades con las cuales inicia labores
campañas en Colombia (1920-1935), Paraguay este departamento se orientaron, básicamente,
(1923-1927), Venezuela (1927-1928) y México hacia el diagnóstico y tratamiento masivo de la
(1923-1928). Los gobiernos latinoamericanos población y hacia el saneamiento, mediante la
acogieron y apoyaron estas campañas las cua- construcción de letrinas en las viviendas de los
les fueron percibidas, en palabras de Cueto, campesinos (5).
"como unaoportunidad para terminar con el Frente a la fiebre amarilla, en 1916, la FR inició
dualismo en la administración de los servicios estudios para explorar la situación de esta en-
de salud entre el Estado y las municipalidades, fermedad en Suramérica (14) y, en 1918, realizó
caracteristico de la organización de la salud pú- su primera campaña en América Latina al con-
blica de varios paises latinoamericanos en la dé- trolar un brote epidémico en el puerto de
cada de 1910" (8). Guayaquil (9). Las actividades realizadas produ-
A pesar de extenderse durante unos años más jeron tanto optimismo que se reconoció desde
el trabajo en las campañas, a mediados de los muy temprano que, en el decenio de los años
años, veinte la FR decidió abandonar los progra- veinte, la fiebre amarilla había desaparecido de
mas de erradicación de la anquilostomiasis y las estadísticas en todos los paises infectados
convertirlos en servicios generales de salud ru- en los que la fundación había emprendido cam-
ral. Este hecho lo refiere Fred Soper en uno de pañas de erradicación (14). El ambiente de opti-
SUS escritos acerca de la lucha contra la mismo así generado descansó, tal como lo se-
- .
uncinariasis en Paraauav: ñala Cueto, en dos creencias cientificas que a
la postre resultaron erradas: la teoría de los cen-
"En la primera parte de 1923, se's u Ocho tros clave y el desarrollo de la vacuna y el suero
meses antes de la fecha en que yo iba a co- de Hideyo Noguchi,
menzar el programa de anquilostomiasis en Pa-
raguay, la fundación decidió poner término a los La teoria de los Centros claves consideraba que
programas de lucha contra esa enfermedad y 13
. fiebre amarilla era una enfermedad humana
convertirlos en servicios generales de salud ru- que se desarrollaba en los núcleos urbanos,
ral, medida que me causó gran sorpresa, Aun- producía inmunidad en las personas que sobre-
que esta política no era de inmediata, vivían a la primoinfección y era transmitida ex-
la suerte estaba echada y era evidente que en la clusivamente Por el Aedesaeg~PtLDe igual ma-
fundación no había posibilidades para dedicarse nera, la teoria asumía que la enfermedad era en-
toda la di,a a la de la anquilos- démica en puertos y ciudades costeras. Esta
tomiasis" (14). comprensión epidemiológica postulada por la
teoría de los centros claves y los hallazgos de
Entre los motivos señalados por Cueto que justi- ~ ~ ~quien ~ creyó h i , el germen de la
~ encontrar
fican este cambio, cabe mencionar los siguien- fiebre amarilla al cual le llamó ~~~~~~~j~~
tes: la gigantesca dimensión de esta enferme- jcterojdes, la sensación de que el co-
dad en algunos países, el elevado costo de las nocimiento necesario para la erradicación de la
campañas, la resistencia de curanderos Y algu- enfermedad estaba a la mano. Esto fundamentó
nos médicos, las tensiones entre los expertos el optimismo del momento,
extranjeros y los inspectores locales, la efímera
existencia de las letrinas, las complicadas con- Otras campañas Y actividades contra la fiebre
diciones políticas de ciertos países y la dificul- amarilla en la región se llevaron a cabo en Gua-
tad para convencer a los funcionarios locales de temala (1919), Perú (1920-1922), Colombia
que la anquilostomiasis era un problema nacio- (1923), Brasil (1923-1940) y México (1921 -
nai (8). 1923). Pese al entusiasmo desplegado en cada
una de estas actividades y al deseo manifiesto
En Colombia, en 1920 se crea el Departamento por lograr la erradicación, nuevos brotes epidé-
de Uncinariasis el cual inicia actividades en la micos aparecieron en la región a partir de 1928.
zona cafetera donde la enfermedad era endémi- En 10s años treinta, la FR comenzó a perder in-
ESLAVA J.C. Biomédica 1998;18(2):101-109

terés en la fiebre amarilla como un problema La salud pública colombiana made in USA
epidemiológico y de administración sanitaria.
Como se mencionó anteriormente, el comienzo
Pérdida de interés que puede relacionarse, entre
del siglo XX trajo para Colombia la exigencia de
otras cosas, con el surgimiento de una inclina-
transformar sus estructuras económicas y
ción nueva por los estudios de laboratorio. Al
tarias en miras al reto que le planteaba su
decir de Soper: 'El Programa de la fundación
vínculo con los mercados internacionales. Así,
para combatir la fiebre amarilla en las Américas
la necesidad de establecer una organización sa-
en el período de l91 a l928 había sido nitaria estatal se presentó ligada a la economía
esencialmente administrativo, dedicado en gran
cafetera, la cual creó una burguesía en alianza
parte a reducir los criaderos de mosquitos en
con el capital monopólico y requirió de un mane-
antes y en pequeñas
jo adecuado de los puertos marítimos y fluviales
comunidades hasta un nivel inferior al que
con el fin de restarle obstáculos a los intereses
permitía a la enfermedad perpetuarse. Los
agroexportadores
destacados resultados de la investigación de la
fiebre amarilla en Africa intensificaron el interés Se puede decir que el principal objetivo de los
de la Fundación en las investigaciones de labo- cambios establecidos en la estructura sanitaria
ratorio; en unos pocos años dejó de dedicarse en el país desde 1913 y, en particular, la crea-
únicamente a cortar la distancia entre los ción de la Dirección Nacional de Higiene fue el
conocimientos existentes y su aplicación en de superar las trabas de una organización sani-
beneficio de la población mundial"(l4). taria arcaica que, entre otras cosas, estaba a
cargo de la policía y era sumamente inefectiva
En Colombia, entre 1916 y 1917, la comisión de en el manejo de las epidemias y en el control de
la fiebre amarilla de la FR, formada por William
las enfermedades de la población trabajadora.
C. Gorgas, Henry Carter, Juan Guiteras y Dicha dirección se ubicó bajo el control del Mi-
Theodore Lyster entra al país por Buenaventura
nisterio de Instrucción Pública, lo cual significó
en viaje hacia Bogotá. Dentro del país, los
que se asumía a la higiene pública como una de
miembros de la comisión se enteran de casos
las funciones educativas del Estado. Sin embar-
informados en Buenaventura, Barbacoas,
go, en 1920, la dirección se traslada al Ministe-
Caldas, Honda y, especialmente, Muzo.
rio de Agricultura y Comercio, evidenciándose
Después del examen del litoral Caribe y de así el vínculo existente entre la sanidad y la
algunas averiguaciones adicionales, la comisión
economía (11).
concluve, aue
, en Colombia no existen centros
endémicos de fiebre amarilla (14). Sin embargo, En este proceso de constitución de una estruc-
nuevos brotes epidémicos en los años treinta tura sanitaria de carácter nacional, los intereses
llevaron al estudio de casos de fiebre amarilla norteamericanos entraron en juego de manera
rural estableciéndose la existencia de lo que se muy rápida. De hecho, la colaboración técnica
ha conocido como fiebre amarilla selvática. prestada por la Junta Sanitaria Internacional de
la FR empezó en 1917. En ese año, como ya
En lo que hace relación con la malaria, la parti-
se ha mencionado, el Instituto Rockefeller, por
cipación de la FR en los países latinoamerica-
solicitud del gobierno colombiano, hizo un estu-
nos inició con las primeras campañas en Brasil
dio para determinar la presencia de fiebre amari-
(1918-1928), Argentina (1925) y Venezuela
lla en el país, cuyo propósito último fue definir si
(1927-1928). En estos años, la labor fundamen-
era necesario mantener la cuarentena impuesta
tal de la FR se concentró en convencer a las au-
por la Oficina Sanitaria Panamericana a todos
toridades locales de la real posibilidad de con-
los barcos colombianos y a todos aquellos que
trol de la enfermedad y en el entrenamiento de
tocaran nuestras costas (5).
personal para los programas antimaláricos,
actividades que en Colombia se desarrollaron a En 1919, una nueva solicitud del gobierno nacio-
partir de los años treinta. nal a la Junta Sanitaria Internacional para iniciar
Biornedica 1998;18(2):101-109 INFLUJO NORTEAMERICANO EN LA SALUD PÚBLICA

la campaña de erradicación de la uncinariasis, buscaron, por un lado, orientar las estrategias


vincula de manera directa a la FR en el desarro- de acción sanitaria del país vinculando los
llo de la salud pública colombiana. Es interesan- intereses extranjeros con los propósitos de de-
te señalar que los cambios en la política norte- sarrollo nacional y, por otro lado, favorecer la
americana hacia los países productores de café reorganización de la estructura sanitaria. Esta
se reflejan en los programas de erradicación de reorganización se manifestó en la instauración
la uncinariasis. Las mayores inversiones en es- de servicios independientes por enfermedad, en
tos programas se realizaron en las zonas cafe- la ampliación de los servicios sanitarios a áreas
teras del Brasil en 1920 las cuales fueron decli- rurales y la centralización estatal de la autoridad
nando hacia 1923-1926 coincidiendo con la sanitaria. En lo referente al tercer punto, es im-
promulgación de la Ley de Protección del portante señalar el papel trascendental que jugó
Productor del Café y el préstamo concedido por el otorgamiento de becas de estudio en salud
Inglaterra al gobierno brasileño. A su vez, en pública en universidades estadinenses, estrate-
1926, el año en que el presidente Hoover propu- gia que sirvió para formar a los futuros funciona-
SO que se establecieran nuevas fuentes de rios de la salud pública en el país, quienes
abastecimiento de café, se acrecentó la inver- cumplieron la función de consolidar el modelo
sión en los programas de erradicación de la sanitarista norteamericano en Colombia.
uncinariasis en Colombia (15). Es importante señalar que en el período corres-
La cooperación de la FR también se efectuó a pondiente a los años anteriores a la Segunda
partir de trabajos dirigidos a la erradicación de la Guerra Mundial, del cual nos hemos ocupado en
fiebre amarilla en Bucaramanga (1922-1923), al este escrito, el influjo norteamericano se dio a
estudio de la malaria (1932), a la creación del través de las fundaciones privadas norteamerica-
Laboratorio de Higiene Pública de Barranquilla y nas, en particular la FR. Sin embargo, en años
la escuela de inspectores (1933), al estudio de posteriores, en el contexto de la guerra y bajo
la fiebre amarilla en zonas rurales y selváticas las nuevas políticas norteamericanas con rela-
(1933) y a la implementación de la Unidad Sani- ción a los países latinoamericanos, en especial
taria de Pereira (1934) (6). con la política del buen vecino del presidente
Roosevelt, se dio un viraje fundamental a la ac-
Frente a las asignaciones presupuestales he- ción de cooperación técnica entre Estados Uni-
chas en Colombia por la División de Salud Inter- dos y Colombia la cual, mediante el Instituto de
nacional de la FR entre 1913 y 1940, merece Asuntos Interamericanos, entidad gubernamen-
señalarse que se destinaron US$179.929 para tal con sede en Washington, generó nuevos pro-
las acciones en contra de la anquilostomiasis, gramas y proyectos.
US$245.276 para las acciones en contra de la
fiebre amarilla, US$19.353 para las acciones en En este sentido, el influjo norteamericano, que
contra de la malaria y US$68.280 para servicios en un primer momento se efectuó mediante ac-
de salud pública y educativos (8). ciones del sector privado, se canalizó a través
de instancias gubernamentales estadou-
Con las ayudas prestadas por la FR, los referen- nidenses, conformando un vínculo más expedito
tes norteamericanos en salud pública tuvieron de intereses entre dos naciones.
un influjo determinante en la creación de los
modelos sanitarios institucionales adoptados En el marco de esta política del buen vecino, se
por los gobiernos nacionales. Este influjo estará lleva a cabo en Río de Janeiro, en 1942, la
presente en el establecimiento de las priorida- tercera reunión de consulta de Ministros de Re-
des nacionales, en la orientación de las políti- laciones Exteriores de las repúblicas ame-
cas y los planes sanitarios y en la formación del ricanas. Allí se plantea como objetivo general, la
recurso humano en salud pública. protección del hemisferio occidental y el estudio
de medidas para restablecer el orden mundial
Frente a los dos primeros puntos, las campañas destrozado por la guerra. Para dar cumplimiento
y las acciones emprendidas con apoyo de la FR a este objetivo, se establecen como puntos de
Biornédica 1998:18(2):i01-109

la agenda de discusión la solidaridad económi- comienzos de siglo (7). Sin pretender afirmar
ca, la ruptura de relaciones con Alemania y sus que aquí en Colombia se implantaron los esque-
aliados, la producción de materiales estratégi- mas salubristas propuestos por la FR -y por la
cos para la confrontación bélica, el desarrollo Escuela de Higiene y Salud Pública de Johns
del intercambio comercial y el mejoramiento de Hopkins que le sirve de sostén - en su totalidad
la salud y la salubridad pública (6). y sin ninguna dificultad, interesa dejar como
hipótesis de trabajo, después de esta sucinta
Después de esta reunión, se estableció un pro-
revisión, que los procesos de negociación con
grama cooperativo entre el Instituto de Asuntos
dichos modelos son precarios, dada la ausencia
lnteramericanos (IAl) y las repúblicas america-
de una fuerte tradición sanitaria nacional, y que
nas para implementar un plan de salubridad y
los procesos de resistencia se dan más por la
saneamiento, el cual, más que responder a un
vía de las disposiciones cotidianas de la vida de
diagnóstico concienzudo de los problemas es-
las poblaciones -y de algunos médicos particu-
pecifico~de la región, buscó contrarrestar cual-
lares- que pur una dinámica de construcción de
quier posible influencia que pudieran tener los
un modelo alterno propiciado por una comunidad
países del eje Berlín-Roma-Tokio en los paises
académica comprometida en pensar en torno a
latinoamericanos.
los grandes problemas sanitarios del país.
El gobierno colombiano inició, de manera muy
rápida, los trámites pertinentes para poner en Referencias
ejecución el programa de cooperación antes re- 1. Cueto M. Introducción. En: Cueto M, editor. Salud.
ferido y, después de recibir la visita de Nelson cultura y sociedad en América Latina. Nuevas pers-
Rockefeller, en ese momento coordinador de la pectivas históricas. Lima: IEPIOPS; 1996. p. 13-30.
Oficina de Relaciones Interamericanas del IAl, 2 Trindade N, B r i t t o N. Salud y nación: propuesta
autoriza la creación del Servicio Cooperativo In- para el saneamiento rural. Un estudio de la revista
Saudé 1918-1919. En: Cueto M, editor. Salud, cultura
teramericano de Salud pública (SCISP) en 1942 y sociedad en América Latina. Nuevas perspectivas
y, en 1943, se crea como organismo dependien- históricas. Lima: IEPIOPS; 1996. p. 135-58.
te del Ministerio de Trabajo, Higiene y Previsión 3. Armus D. Salud y anarquía: la tuberculosis en ei dis-
Social (11). curso libertario argentino, 1870-1940. En: Cueto M,
editor. Salud, cultura y sociedad en América Latina.
Con el progresivo desarrollo de SCISP, el cual Nuevas perspectivas históricas. Lima: IEPIOPS; 1996.
se convirtió en una especie de ministerio de p. 111-33.
salud pública dentro del Ministerio de Salud Pú- 4. Obregón D. De "árbol maldito" a "enfermedad
blica, se consolidó un proceso de influencia de curable": los médicos y la construcción de la lepra en
la salud pública norteamericana en la estructura Colombia, 1884-1939. En: Cueto M, editor. Salud,
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