Sonó el despertador a las 7 de la mañana. Me había levantado mas temprano
para ducharme, mi hermano y mi madre seguían dormidos. Cuando acabe mi hermano seguía durmiendo, el es mas pequeño que yo y entra mas tarde, yo voy al instituto a 1º de la ESO y el va a 5º de primaria. Mi madre ya estaba despierta y fue a preparar el desayuno. Salí del baño y fui a mi habitación, me prepare para ir al instituto y cuando ya tenia todo listo me llamo mi madre para que fuese a desayunar. Mama—Buenos días, que tal dormiste en tu nueva cama? Nerviosa por el examen de hoy? Yo—Buenos días, bastante bien me gusta mas que la otra. Y bueno no se, creo que saldrá bastante bien pero no me quiero confiar mucho. Mama— Que mas exámenes tienes esta semana? Yo— Hoy es jueves no? Mama— Si. Yo— Pues mañana tengo uno de historia, pero con todo este tema del Coronavirus no se si podremos hacerlo, ayer nos dijeron que igual nos confinaban en casa. Mama— Me informaron si, pero de momento no es nada fijo así que hoy repásatelo por si acaso. Yo— Vale Ya eran las 8 y mis amigas ya estaban abajo esperando por mi. Cogí la mochila y me despedí de mi madre. Yo— Adiós mama, te veo por la tarde. Mama— Adiós, suerte con el examen, te va a salir muy bien. Yo— Ojalá! Le hice un gesto con la mano y cerré la puerta. Cuando baje ya estaban ahí, mis dos amigas, Lucia y Sara. Sara— Hola, como vas con el examen? Yo— Hola, bastante bien, creo que suficiente para aprobar jajajaj. Lucia— Que suerte! Yo no pude estudiar nada, tuve que ir a entrenar y entre tantos deberes solo pude mirar pocas cosas. Sara— Pues yo no se que pasara, estudié pero no creo que apruebe, no entiendo nada. Yo— Pero si es muy fácil… Ibamos hablando de nuestras cosas por el camino y cuando llegamos cada una se fue a su clase, Lucia va a otra pero Sara y yo vamos juntas. Sara y yo— Te vemos en la cafetería. Lucia— Vale, allí os espero. Cuando entramos en clase, nuestro profesor no había llegado aun. Nuestra clase no era de las mas tranquilas, yo me atrevería a decir que era le peor de todo 1º. Aunque las notas no fuesen del todo malas, no hacíamos ni caso, estábamos casi siempre liándola, sea hablando con los de al lado o mandándonos notas e incluso tirándonos cosas unos a otros.Los profesores no podían aguantarnos pero en el fondo algunos no nos reñían como otros. Sara y yo estamos separadas como era de esperar, estamos todo el día hablando, y da igual donde estemos, si estamos cada una en una punta de la clase seguíamos hablando, pero claro, teníamos que hablar mas alto y eso molestaba aun mas a los profesores, entonces un día decidieron juntarnos. En clase nos lo pasábamos muy bien, nos reíamos muchísimo. Había profesores que nos caían mal y en sus clases especialmente pues nos portábamos peor, hasta que un día llego la jefa de estudios, cuando ella llega nadie se mueve ni dice nada, es como la abeja reina de los profesores, incluso le tenemos mas respeto a ella que a la propia directora. La jefa de estudios es mas seria, eso si, delante de los profesores, cuando estas con ella es super maja y a todos nos cae muy bien (a algunos mas que a otros) , en todas las clases cae un parte o dos a alguien, debe de estar harta de nosotros, y eso que es nuestro primer año, que se prepare cuando vayamos a 2º y conozcamos todo mucho mejor ahí si que va a ser divertido. A primera teníamos lengua, nuestro profesor se llama Xurde y es muy majo, aunque a veces nos pasamos con el. Yo—Había deberes? No hice nada. Sara—Me preguntas a mi? Si yo no abrí la mochila. Yo—Es verdad, que hago preguntándote a ti. Xurde había deberes? Xurde—Ayer os mande dos ejercicios de la pagina 80 el 3 y 4. Voy a pasar lista vale. Yo—Alguien que los tenga echo me los puede dejar? Sara—Y luego me los dejas a mi. Carla—Yo los tengo, toma. Yo—Gracias, ahora te los doy. Mientras yo copiaba, el profesor paso lista y empezó a sacar a gente para corregir los ejercicios. Sara—Venga copia rápido que nos va a ver. Yo—No te rayes, ya están toma. Sara—Menos mal. Al final nos dio tiempo a hacer los deberes mientras corregían, tuvimos suerte y no nos llamo para que saliésemos a la pizarra. En la segunda hora tocaba mate y teníamos examen la verdad, lo había preparado bastante pero siempre me pongo muy nerviosa y se me queda la mente en blanco con muchas cosas. Pero este examen lo tenia que aprobar, era el ultimo del 2º trimestre y no podía suspender. Minutos después de que Xurde saliese de clase entro nuestro profesor de mate, este nos caía bien, pero sinceramente solo porque nos reíamos mucho de el. Al entrar poso sus libros y nos dijo: Profesor—Quitar todo de encima de la mesa, ya sabéis boli y tipex sino tenéis se lo pedís a un compañero Sara—Estas lista? Yo–No, pero venga. Profesor—Es muy fácil, todo lo hemos hecho en clase. Paso la hora y al final no me salió tan mal, pensaba que iba a ser peor y que dejaría medio examen en blanco pero no. Sara—Que tal? Yo deje el ultimo sin hacer, no tenia ni idea. Yo—Bastante bien, pensaba que seria peor. En lo que quedaba de mañana no teníamos mas que hacer, todos los demás exámenes estaban hechos menos el de mañana, de historia. La siguiente clase es ingles, muchos días vamos a la sala de ordenadores para hacer actividades allí, y hoy fue uno de esos días. A la profesora no le hacia mucha gracia lo de sacarnos fuera de clase ya que íbamos hablando y eso le molestaba. Todo estuvo muy tranquilo hasta que acabo la clase, todos salimos corriendo a la cafetería para ser los primeros ya que los de 4º sino te empiezan a empujar y nunca consigues coger un bocadillo. Sara y yo esperamos allí a Lucia mientras nos comíamos nuestro bocadillo, ella llego enseguida. Lucia—Acabo de tener un examen y no tenia ni idea. Sara—Nosotras igual, tuvimos antes el de mate. Yo—Pues a mi me salió bastante bien. Lucia—Claro, tu estudias, yo no mire na. Sara—Yo estudie y aun así no creo que saque muy buena nota. Yo—Mientras apruebes. Lucia—Bueno, yo aprobare pero quería sacar mas nota. Estuvimos hablando en el tiempo del recreo hasta que volvimos a entrar en clase. Tocaba música, esa clase es tranquila no solemos hacer nada. Ese día teníamos una guardia, la profesora se encontraba mal y no pudo venir. Vino un señor que no conocíamos de nada y daba otra asignatura, sinceramente nos daba igual, la íbamos a liar fuese quien fuese. Cuando se sentó todos estábamos callados hasta que empezó a hablar, ahí ya todos nos pusimos a gritar y a hacer lo que normalmente mejor se nos daba, no dejar que el profesor hablase. El se quedo callado, creo que esperaba que nos diésemos cuenta y que no calláramos pero el no nos conocía, no sabia que nosotros no nos íbamos a callar como harían sus otros alumnos, a nosotros nos daba igual, ni mirábamos hacia el. Eso le hizo enfadar aun mas hasta el punto en el que dio un golpe en la mesa para que nos callásemos y al ver que no fue suficiente se rindió, se sentó y se puso a corregir unos exámenes que tenia pendientes. Al darnos cuenta nosotros fuimos bajando el tono y ya hablábamos normal, el ni miro pa nosotros. Capitulo 2 Cuando acabo el instituto nos juntamos con Lucia, para ir al quiosco como siempre. Allí estaba un niño que era guapísimo que siempre se me quedaba mirando, tenia un año mas que nosotras se llamaba Alex. Cuando pasamos por su lao le mire y el también me miro. Lo peor es que tenia novia, pero bueno. Sara—Te esta mirando no te gires Yo—Ami? Lucia—Sisisi, esta viniendo hablemos de otra cosa Yo—Y de que? Sara—Cuidado Alex—Hola Yo—Hola Alex—Tienes instagram? Yo—Sí, es este Alex—Vale, luego te hablo Yo—Va Cuando Alex ya estaba lo suficientemente alejado para que no nos oyese Sara—PERO BUENOO Lucia—Estas segura de que tiene novia? Yo—Anda no digas tonterías, estoy segura Lucia—Igual lo dejaron Yo—Me da igual, tengo que hacer muchas cosas no me puedo distraer en un chico con novia o con una ex reciente me niego Sara—Tu veras, pero yo te digo que le gustas Lucia—No se para de girar para mirarte y ademas todos sus amigos están mirando para aquí Yo—Estarán hablando de mi? Sara—Hombre, te acaban de señalar Lucia—No te gires Yo—Que vergüenza vámonos, tengo hambre y quiero llegar a casa. De camino nos fuimos contando lo que nos había pasado en el instituto, estuvimos hablando de las notas, de algún cotilleo y también grabamos un par de tiktoks. Cuando llegue a casa mi hermano ya estaba en la mesa y mi madre también. Yo—Hola, que hay de comer? Mama—Hola, macarrones con tomate, deja las cosas y ven, ya esta todo listo. Yo—Voy Mama—Que tal el examen? Yo—Bastante bien, pensaba que saldría peor. Mama—Hoy tienes que ir a casa de la abuela, se encuentra mal y no puede ir a la compra. Yo—Vale, iré con Lucia y con Sara. Mama—Ok, cuando acabes los deberes vais. Yo—Vale. Cuando acabe de comer me fui a la habitación a hacer los deberes, tenia pocos así que no tardaría. Llame a Sara y a Lucia para coger el bus juntas. La casa de mi abuela no esta cerca, tienes que coger un bus y cruzar el centro de la ciudad. Estaba en la parada esperándolas y de repente me llego un mensaje de Alex, quería verme para hablar conmigo de un tema, yo no sabia muy bien que hacer. Decidí esperar a que llegasen mis amigas para preguntarles que podía hacer. Cuando llegaron las dos les conté lo que había pasado mientras esperábamos al bus. Yo—Chicas, me habló Alex Lucia—Y que te dijo, cuenta Sara—Eso, dejó a la novia por ti? Yo—Anda que dirás, me dijo que quería verme Lucia—Y que le dijiste? Yo—Que si quería venir con nosotras Sara—No por favor, es insoportable Lucia—Pero es guapo Sara—Y que, no hay quien lo aguante Yo—Bueno chicas, ya nos libraremos de el Sara—Y cuando piensa venir, el bus esta a punto de pasar Lucia—Por allí viene Y efectivamente, allí estaba, la verdad no me hacia mucha gracia que se nos acoplara así como así pero que remedio, ya no había nada que hacer. El niño era guapo, pero todo lo que tenia de guapo lo tenia de pesado, nada mas llegar empezome a mirarme y a hablarnos de su vida, como si nos importase. Alex—Bueno, y ahora que ya sabeis mucho sobre mi, vosotras que contais? Yo—Pues nose, mi vida no es tan interesante como la tuya. Sara—La mia si, pero no te importa y como puedes comprobar a nosotras la tuya tampoco. Lucia—Ay Sara no seas asi, el chaval intenta ser majo, encantada soy Lucia nos vemos a veces por los pasillos. Alex—A si? Pues no me suenas. Sara y yo nos empezamos a reír, Lucia se puso roja al ver que Alex no sabía de su existencia. Al poco empezamos a ver a lo lejos el bus y sacamos el dinero. Cuando nos montamos fuimos uno a uno pagando el pasaje, no notamos nada raro al subirnos. Ya sentados me empezó a sonar el movil, era mi madre, me dijo que al día siguiente no habría instituto, que nos habían confinado por un virus extraño que venia de china y que nos teníamos que quedar en casa. Como ya estábamos en el bus decidimos seguir con el viaje y así le llevábamos las compras a mi abuela. Pasaron diez minutos y éramos los únicos que viajaban en ese autobús, poco a poco se fue subiendo más gente hasta llenarlo por completo. Pasaron varias horas y todavía no llegaron a la parada que era, Alex no paraba de hablar y decidimos hacer que nos bajábamos en la parada siguiente para que se fuera y no nos alborotara más la cabeza. Conseguimos que se bajara y continuamos con nuestro camino hacia casa de mi abuela, me puse a pensar por qué el autobús tardaba tanto en llegar. Yo—Que autobús es este? Sara—Es el numero dieciséis, por qué? En ese momento se me abrieron los ojos como platos Yo—ESTE NO ES, LLEVAMOS DOS HORAS EN EL AUTOBUS EQUIVOCADO! Nos bajamos corriendo de él y comenzamos a caminar calle abajo. Vimos al final de una calle super larga un gran paso de peatones y al lado la estación de buses. Sara como es de costumbre es super ansiosa y corrió hacia las paradas sin mirar hacia ningún lado y de repente.... le atropelló un motorista q salía de un garaje, todo el tráfico se paró al ínstate, corrimos Lucia y yo hacia ella para ver como estaba, todo el mundo nos observaba, pero nadie hacía nada , el motorista se apresuro a llamar a una ambulancia y comenzó a acercarse hacia nosotras para comprobar si Sara seguía teniendo pulso, gracias a dios que si. Llegó la ambulancia y se la llevaron lo mas rápido posible ya que se rompió la pierna y tenían que operarla. Llegó su madre al hospital en menos de una hora y media y nos preguntó que había pasado, se lo explicamos todo con detalle y nos dijo que ya le había avisado varias veces que mirara hacia los lados antes de cruzar cualquier paso de peatones que podría pasar algo como lo de ese día. Ya llevábamos unas tres horas esperando en los incomodos asientos del hospital, poco a poco iban viniendo algunos de nuestros compañeros de clase para ver como estaba y firmarle la escayola ya que les hacia mucha ilusión. Eran las once de la noche y por fin salió el médico para decirnos que la operación había salido estupendamente y que podíamos entrar ya a ver a Sara a la habitación donde estaba, estuvimos hablando con ella durante dos horas y llegó el momento de irse a casa, ya volveríamos mañana a casa de mi abuela. Esta vez para ir a casa decidimos coger un taxi porque llegaríamos antes y así no nos volveríamos a confundir de autobús. Avise a mi madre de que me quedaba a dormir en casa de Lucia para que no se quedase preocupada. Ya en casa nos pusimos una película en el Netflix y pedimos un globo para que nos trajeran unas pizzas que estábamos hambrientas, ya cenadas y terminando de ver la película nos quedamos dormidas en el salón. Al día siguiente por la mañana operaban a Sara, con todo este tema querían sacarla del hospital lo antes posible para evitar posibles contagios. Al yo haber dormido con Lucia me tenia que quedar con ella el resto del confinamiento, lo cual era genial estaríamos todos los días juntas. Nosotras queríamos ir a ver a Sara pero no nos dejaron, nos podíamos contagiar y no queríamos eso, así que la llamamos por videollamada. Lucia y Yo—Holaaa Sara—Hola chicas Lucia—Que tal, como lo llevas? Sara—Bueno, ya mejor no me molesta Yo—Sabes cuando podrás volver a casa? Sara—Me vino a ver el médico y me dijo que dentro de una hora me operaran y que para las 5 de la tarde ya estaría en casa. Lucia—Mucho mejor Yo—Recupérate pronto ya veras, todo va a salir bien. Sara—Eso espero, gracias chicas os echo de menos Lucia y Yo—Y nosotras a ti!! Cuando colgamos los padres de Lucia nos dijeron que se tenían que ir a trabajar, ella y yo nos pusimos a mirar si algún profesor nos había dicho algo sobre el confinamiento y si teníamos algo que hacer, pero no nos llego nada. Mi madre me llamo para saber como estaba Sara y para asegurarse de que estábamos bien, yo hable con ella y después fui a desayunar con Lucia. Yo—Que tienes para desayunar? Lucia—Hay cereales y galletas, te hago un colacao? Yo—Si, voy preparando la mesa y poniendo música. Lucia—Vale Cuando acabamos de desayunar estuvimos haciendo tiktoks hasta que nos llego un mensaje del teams, ya tocaba, los profesores nos empezaron a mandar mensajes informándonos de lo que pasaba, y ademas nos pusieron un mogollón de cosas para hacer. Lucia y yo no sabíamos por donde empezar, tampoco sabíamos cuanto iba a durar esto ni si íbamos a volver a clase. Al cabo de unos meses yo ya había vuelto a casa, pero ese fin de semana me había quedado con Lucia en su casa. Por la noche empezamos a oír ruidos en la calle. Lucia—Lo oyes? Yo—Si, asómate. Cuando se fue a asomar se sorprendió, yo no sabia que estaba viendo. Lucia—Saray ven, tienes que ver esto. Cuando fui y me asome, todos los vecinos estaban en sus ventanas aplaudiendo, con música, parecía que les había tocado la lotería. Yo—A la gente se le ha ido la cabeza por completo. Lucia—Ya te digo. Cerramos la ventana y pusimos una serie para no escuchar los gritos y los altavoces que había en el calle, nos quedamos dormidas. Al día siguiente por la mañana, nos despertamos con otro ruido extraño, me asome y vi a los vecinos asomados de nuevo en las ventanas, pero además, estaban jugando al bingo, si, al bingo, entre ellos, uni cantaba los números con un bingo que tenia en casa y los demás apuntaban. Lucia seguía dormida y tampoco quería despertarla, así que me fui a desayunar y ya la levantaría después. Mientras desayunaba escuche un grito que decía “VIVA LOS NOVIOS” no me lo podía creer, al asomarme los vecinos de enfrente del tercero estaban vestidos como si estuviesen en una boda, y el hombre se arrodilló, supongo que pidiéndole matrimonio a la chica, no se veía muy bien por la ventana pero todos gritaban “Viva los novios” como locos así que corrí a despertar a Lucia para que lo viese porque luego sino no me iba a creer. Yo—Luciaaa despierta Lucia—Mmm déjame dormir estamos de vacaciones. Yo—Pero si llevamos tres meses mas de vacaciones y todavía quedan otros tres, levanta tienes que ver esto Lucia—El que? Yo—Los vecinos vuelven a estar asomados, y los del tercero están vestidos de boda, el chico le acaba de pedir matrimonio delante de todos. Lucia—Pero que dirás, tu sueñas como van a ser capaces de eso. Yo—Asómate y lo verás tu misma, estaban todos gritando “Viva los novios” mientras el le pedía matrimonio. Cuando Lucia se fue a asomar vio todo lo que yo había visto, no se lo podía creer, normal, imagínate que un día te despiertas, te asomas a la ventana y tienes a los vecinos gritando viva los novios como si estuviesen en plena boda y a los de enfrente vestidos de traje y vestido de boda blanco ahí, en la ventana. No hay quien se lo creyese sinceramente, a mi un día me lo cuentan y no me lo creo. Por la tarde volvieron a salir, pero esta vez estaban disfrazados, todos, no entendíamos nada parecía como si fuese una fiesta de disfraces a la que todos estaban invitados menos nosotras. Les fuimos a preguntar a los padres de Lucia y nos dijeron que habían creado un grupo con todos los vecinos y ahí organizaban las fiestas que iban a montar, efectivamente esa tarde tocaba, fiesta de disfraces.