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Cine policial Claroscuro y politica Por Elena Goity iivalagente onestat se ha afirmado que la primera historia policial fue el “Edipo" de Séfoctes, pues. jue luego caracterizarén el thriller cinemato- Con frecuer to que alli estén presentes todos los elementos a aratco: nada es lo que parece, un secreto, con frecuencia de carécter sexual, vuelve para re mover el pasado y [a corrupcién relacionada con él improgna toda la sociedad hasta los nive- les més altos. Historias de amor y de muerte 0, al menos, de transgresiGn y castigo. Si esto es realmente asi, estén dadas las bases para que una industria, en principio la editorial y mas tar- de la cinematografica, apueste a su creacién y difusién, porque el consumo esté garantizado, Por lo dicho, en la etapa de industrializacién del cine argentino (1933-1957), el género policial ‘alcanz6 un amplio desarrollo, igual que en los Estados Unidos, cuna del género. El policial, como todo género, responde a un verosimil que se va modificando con el tiempo, istérico-social, como por razones internas, sola- ya sea por cuestiones externas, la reelidad his ‘mente vinculadas con caracteristicas propias del género. Cubrir un period cinematografico tan vasto (24 afios) impide hablar en forma homogénea o sefialar rasgos uniformes en las peliculas que integran el corpus genérico. Como su homélo- g0 norteamericano, el policial argentino presenté variantes. Sobre un total de, aproximada- mente, ciento diez peliculas que contienen elementos del género, en tan sélo cuarenta y dos se guarda un contenido, una imagen, una estructura narrativa y une retérica propias de él. Y, sobre la cifra inicial, tampoco se observa una distribucién homogénea y regular a lo largo del lapso sefalado; por el contrario, se percibe que el numero se incrementa con el correr de las. décadas (20 en los afios treinta, 40 en los afos cuarenta y 50 en los aftos cincuenta). En cuanto a la representatividad de los estudios con relacién al policial, éstos tienen distinto peso, debido a la extensién de su propia existencia y al lugar concedido al género. Desarrollo industrial La organizacién del texto, siguiendo la produccién de los estudios, pretende poner de mani- fiesto que el género policial, en sus diversas lineas intermnas, alcanz6 durante el periodo indus- trial un amplio desarrollo. A diferencia de lo que ocurria simulténeamente en los Estados Unidos, aqui no hubo un sello productor preponderante, equiparable a Warner Bros., que haya impuesto tuna tendencia y un estilo, Por el contrario, aun dentro de la produccién del mismo sello, resulta dificil establecer lineas 0 ejemplos arquetipicos, coexistiendo, en la mayoria de ellos, come- , melodramas, policiales psicol6gicos, peliculas de espionaje, films de gangsters, carcela- rios, tribunalicios y ortodoxos ejemplos de cine negro. La regularidad no es una constante, ni en la produccién de un estudio ni, rando la obra de un mismo director. Esto Se debe 2 que hay figuras como Manuel Romero, \cluso, conside- Luis Moglia Berth 0 Carlos Borcosque que, aunque desarrollaron una carrera en general constante en un mismo estudio, incurrieron en diversas lineas del género. Por otro lado, hay algunos directores como Daniel Tinayre, Carlos Hugo Christensen, Antonio Momplet, Don Napy o Kurt Land que, aun cuando permiten establecer caracteristicas més constantes, tan- to en lo formal como en lo ideolégico, desarrollaron sus carreras recorriendo las distintas gale jentes en la época. Escaneado con CamScanner Escaneado con CamScanner Mujeres en sombra Borta Moss, Pola Mux, Jolia Giusti 402 Gna Goty Ala diversidad sefelada, deberén sumarse las realizaciones de las pequehas productoras to les como Sifal(Crimen a las tres, 1935, de Luis Sasiavsky), Producciones Otto Lamm (Mule res en sombra, 151, de Catrano Caran, y Esmeralda Films (La bestia debe mort, 152 de Roman Vifoly Barreto} que, con su aporte @ lo largo de todo el periodo comida mu Lncaron las variantes, proveyende, en algunos casos, efemplos de marca sgnifeain o 1 desarrollo del género policial. Resta, por dltimo, el caso de los productores inspect ‘xistenes adn en lo etop indus que enviquecieron la pantalla nacional con petiulas de ‘elovancia, Ente ellos y,# manera de ejemplo, puede citerse a Francisco Canaro (pare Conti ‘iia Argentina de Films Rio de la Plata: Turbién, 1939, de Antonio Momplet), Julio O: Villa rogrdfica Cinco: {Ceptura recomendada, 1950, de Don Napy), 0 Daniel Tinayre (para Cinematogréfica Tren internacional, 1954, del mismo Tinayrel, En el texto, organizado a partir de la produccién de los. 508 que se consideran significativos, rentesestucos, se desacan 08 asi como los ejemplos primitivos del género, “ ‘comin relegados o simplemente citados, En su mayoria, estos films establecen tnslinesey Pe tst#@8 due con posteriordad,aleanzaron madurery, con ella itsion v 89008, Po tins, restart ue aa eure cae esa pages rege # 8 tacan grupos de peliculas ‘que representan subgéneros del policial. Estos no se avienen Escaneado con CamScanner \ORIR EN 'mOR! mo LEY’ Fon WAAREO Se ett Ja ome MANUELROMERO Sistematizacion desde In produccién o lar unlit do & iz0cidn autoral. A veces parece que responden & do época, a 1a sujecién a una moda temporaria, Pero esta norma tampoco puede ead Genoralizadamonte, Esta dificultad esquematizadora fundamenta su tratamiento en ‘oma auténoma, Esto es el caso de los films de espionaje, el policial psicolégico, el film carce~ lario y las peliculas de ta candarmeria y la frontera, ta enumeracién de las comedias policia- 28 responde a quo, por su niimero y diversidad, axcede los limites del presente texto, requ fiando un oportuno tratamianto exclusive, Subgéneros El propésito de este capitulo sobre ol desarrollo dol policial argentino durante la etapa industrial pretende informar sobre el lugar que les cupo en aquel a los diferentes estudios, tratar algu- Nos titulos considerados hitos en su evolucién, distinguir rasgos estilisticos de los directores ‘mds consecuentes en su tratamiento, destacar al aporte de diferentes técnicos que contribu- Yeron a plasma una estética propia del género, y mencionar a los actores que, por su imagen Y desempefo, dieron forma acabada a una iconografia especifica, aunque en transformacién y diverse. Como se observaré a lo largo del texto, por la especificided del tratamiento de cade Uno de esos casos, es opartuno sefalar, desde un comienzo, los lineamientos generales del ci- ne policial, los subgéneros cultivados y el tratamiento por ellos recibido. Frecuentemente, se ha sefialado que la clave del género es la violencia, isica, verbal 0 men- tal, articulando la conducta entre los personajes y su entorno interpersonal, social 0 fisico. Des: de su aparicién, el thriller, suerte de supergénero que admite una gran centidad de variantes, ha tematizado la violencia, adoptando perspectives que van desde la pura fenomenologia de los hechos a la mas personal introspeccién. En flagrante oposicién a la comedia, que no pre- tende condenar un orden dado, asimilando y partiendo axiométicamente de un armonioso sta- tu quo, el policial implica una visién mas o menos critica de ese supuesto orden. Y, asi como ‘en los Estados Unidos, la ley seca, el New Deal, la guerra y la posguerra fueron signando trans- formaciones normativas e iconograficas on el género, la produccién arge 1a también fue manifestando cambios acordes con los tiempos, con la intencién de tornar verosimil lo que es tan sélo una ficcién, Por lo dicho, siempre se busca en el policial la relacién directa con la rea- lidad. Seguin las épocas, ante sus crudas imagenes, se ha visto en elas desde una simple transposicion de los hechos @ la Unica metaforizacién posible de la violencia social vigente. En relacién con esto, el cine policial argentino, si bien sigue patrones externos, les proporcio- nna elementos propios, con el afén de “verosimilizarlos", haciendo reconocibles a sus persona- jes y sus ambientes. Con ello aludit 108, por ejemplo, a la incidencia que tuvieron las letras de tango en muchas peliculas. Este es el caso de los mensajes que Dora le manda a su preten- diente en La fuga (1937, de Luis Saslavsky). La cantante advierte a su enamorado, refugiado ‘en un lejano pueblito, sobre los movimientos de la policia, entonando tangos en una emisora de radio. De esta manera, la misica no s6lo aports color local, sino que adquiere un valor fun- ional en la organizacién de la trama, Del mismo modo, los niveles de habla aportan desde un comienzo no sélo pintoresquismo sino rasgos familiares y reconocibles para la sociedad det momento, Aludimos al empleo del lunfardo, propio del malevaje y de los personajes del lum- pen, infaltables en el poliial. Natalia (Fanny Navarro}, en Morir en su ley (1949, de Manuel Romero), en duelo con otra mujer por el mismo hombre, le dice en forma ofensiva y sobrado- ra: “Guarditelo... Hay mucho atorrante en esta cueva”. Tampoco falta la prepotencia de los malevos; asi Solari (Floren Delbene), en La Vuelta de Rocha (1837, de Manuel Romero), ad- vierte autoritariamente a Dora (Mercedes Simone): "Una mujer que le interesa 2 Solari deja de tener voluntad propia”. El cocoliche caracteristico de los inmigrantes italianos y gallegos com- pleta el cuadro de los niveles do habla, Los dichos de El Calabrés (Marcelo Ruggero) en La Vuelta de Rocha 0 los de El Catalén en Loco lindo (1936, de Arturo S. Moml, a su ver sati- rizados por su propio empleado, dan cuenta de une costumbre social histérice: la burla hacia Cine potciat | 403 Escaneado con CamScanner Fuera de la ley (1937, Manuel Romero) film seiag89 a Sh "Ine vitimas seta de nhs aq ero tt Ta soviet 9 Tras Ieyornts cha xt vi vikka en aefensa de fates cade cionarios poli leer sion, Tito n.eska PO siento del Py esty manera saad 9 TaD ro crsmple com Ta prveness 8 enense, rai de risa de EL eatonero de n home- joe pica en as el orden se de altas de recuse que aM sven una pendien slesplazaran en aap rovestan solve opresives barrotes Con este comienzo de contrat ima de trigicas acciones, Juan Robes (losé Gola) cumple una conde- rade cinow aos en un reformatorio de me noms, Fue ride por su padre, el comisa- a Pxiro Robes (Luis Arata), de intachables tes. Pendenciero y vengativo, el hijo regress a a casa patera e intenta sede cir a Emilia (Irma Cérdoba, a quien los pa «dresde Juan han erindo como una hija, a pe- sor de que ella exté por casarse y de que lo rechace, Juan vuelve las vigjas andadas, or- fuera de aley cl extranjero en su dificultoso proceso de asimilacién, La adopcién del cocoliche desde otros géneros de Ie literatura y el cine busca refrendar el supuesto carécter de “reflejo social” que pretende el policial. ¥ al imitar un rasgo propio del sainete y el grotesco, intenta reeditsr su conducta critica de las costumbres, Pero, paralelamente a estos rasgos de procedencia local, persistieron los tradicionales @pu"- tes importados desde los estudios de Hollywood. Desde los tempranos ejemplos de la indus Ho (1935, de Arturo S, Mom), La fuga y Turbién (1938, de Antone nina {ria nacional, Monte or Momplet}, se desarrollé la vertiente del cine de gangsters, de los grupos © bandas orgy dos, que delinquen con fines de enriquecimiento o poder. Entre ambos objetivos, se estbes? tuna borross fusién, en donde es dificil establecor cul es primordial. De ali surgen sus prt cas delictivas basicas, la posesién de casas de juego clandestino, la venta de alcaloides © ¢! leico de sustanclas prohibidas. En la consecucién de estas metas se haré el despliegue ot habilidades y cualidades del gangster. Destreza on el juego, experiencia al hacer U observar fas, dominio de las armas, y sobre todo capacidad de mando. La actividad de los géngsters rUpal. Las condiciones del “negocio” requieren una organizacién. Segregados socislen> 2 sche Y Prestigio del gangster depende no sélo de la intrepidez de las acciones we la, sino de la ascendencia sobre ‘sus subordinados o del grado de sometimiento de (Morir en su tey) 406-1 Bena Gory Escaneado con CamScanner ay mma ls re Para flo hn dgado ha as fee ee Fora Gussy Dena quionsosoater abarety delnque ntti eae deque ln lnquiera un poo" Al her debut 2 Varela Paro Marten unvgncompae 0 del reformatorio, en el atraco. ye *, Jum es herd, Cuando supe soe 0 de la inestiaci, tsa pts coe bora su soxpcha John muevamente dea casa conn amen ce quesi no stander Buenos Ais il din siguiente, mismo lo onde prs. Vela, qu en reiad tb js pra la pln log qu lo detengan Se eter lsplnos del comienzo ys cre a rutinara vida evelaria Sucesives fandidos nen Isbregos panos de rps co. rredores,ikuminados por Infanqueables grllas que proyecan sus sombre. Peo Juan no cumple a totaled de su condena padre porsu ayetoria ogra que ego bermador To inde Al sali, dbeasionado por figura des “hermana” rapt lai jade tsa, pun poder imponer sus condo nes. Cuando Emilia, deseperda,desobe- dels diectvas del comisario y 6 por entregare a ua, a polcaode a guaga dol hompdin. Fin su ua, Jian robs an ea culta en un almacén 7 nes generals, Alli, un nino to reconoce y et delincuente, aunque se muestra amigable, lo mata, La Inuida contin y, también, la frenética per= secucisn dela poicia Juan les dispara hast vaciar el cargador sin darse por vencido, Cculto.en un rancho yacorralado por st pa dre, éste le da la ttima oportunidad para dignificarse, entregéndole una pistola para que se mate, Cuando el hijo restelve matar- Jo, Varela salva la vida del comisario. Violencia inusual en el cine nacional, inten- tode parricidio, asesinato a mansalva de un nif y ansias de seduccién seriincestuosas fueron las acciones de la trama hibilmente urdida por Manuel Romero y que aleanza- ron potencia y calidad por el apoyo de los actores y el fot6grafo. José Gola recrea Ia fi- gura de un psicépata resentido, cruel y des- bordado, también en duelo actoral con la la- bor de Luis Arata, en un papel mas comple- jo, que concilia la rectitud de principios, el ‘amor por su hijo y el dolor por Ia autodes- truceién de su vida y, en parte, de la familia Gerardo Hittula, responsable de la fotogra- fia, contribu com Ia luz a justo tono de la historia. Fuerteslucesdieighdas, thuminacion “comntrapicads” de rostos que genteran mue- «cas deseneajadas, posiciones bas y angula- das de la cimara que realzan el constante clima de enfrentamiento entre padre ¢ hip, ademas de las metiforas visuales citadas, ‘consolidan el film desde su aspecto visual De esta manero, Ja bonda-imagen, por sus ‘lores dramsticos, narratives yrotéricos, se impone sobre el lenguaje verbal Fuera de a ley ese policial de Manuel Ro- ‘mero que més recuerda las peliculas de ‘gingsters del cine norteamericano. Es la historia de un delincuente desquiciado. No hay apuntes de costumbrismo o de co- Tor Tocal. La casa patera, los despachos oficiales, la vivienda/aguantadero que comparte con Flora y, sobre todo, la cércel, ro remiten, como los policiales filmados hasta entonces, alo tipico porteno, como la calle Corrientes o el barrio y ei puente de Ja Boca, Lo que se recrea es el descamado y despersonalizado mundo del delito. Ade is, este film inicia una serie donde el de- Tincuente es mirado desde afuera, se lo re trata en su exterioridad y estereotipo, rei- Para que se destaque su temeridad, en el grupo habré un cobarde y, para hacer resaltar su leak tad, también habré un traidor. Asi, antitéticamente, se id forjando su imagen de mando y de do- minio, Se establece una dindmica, no sélo frente a fuerzas contrarias, las figuras de la ley u otra banda, sino en el seno mismo del grupo. Idéntica actitud predatoria y violenta hacia el afuera mi- na en reiteradas ocasiones, el nicleo de la gavila (Fuera de la ley, 1937, de Manuel Romero). En la trayectoria ascendente del jefe, su aspecto y sus posesiones darén cuenta de sus progre- ‘50s, Procedente de una condicién humilde, el géngster répidamente adquiere objetos con ta intencién de que hagan de él alguien respetable. El culdado en su peinado, la pulcritud de su atuendo, le posicién de un sombrero tendran para él la mayor relevancia y en ellos pondré ten~ to esmoro como en la planificacién de un atraco. Este es el origen de los numerosos planos de relojes,alfileres, gomelos o polainas, que lo designan metonimicamente (Con el dedo en el gatillo, 1949, de Luis Moglia Barth). En el universo gangsteril la mujer es un objeto més, otra cara posesién que pone de manifies- to la copacidad adquisitve dol tahir. La figura de la blonda sexy, cubierta en sedas y pleles, damante do las joyas, es un topos genérico. Més allé de su capacidad para simbolizar el éxito, veces adquiere un papel activo y retribuye los favores recibidos, colaborando en las sesio~ nes de juego 0 pasando informecién (Monte eriollo, La fuga) Con el correr del tiempo, la figura de la mujer se fue diversificando pero, aunque se ampli la ti- pologl,raramente dojé de ser ceo: un tipo. Figures esqueméticas, claramente reconocibes, con Cine potcial J 405, Escaneado con CamScanner (6% CIMEMATOGRAFICO ec | vn one nn gue wl DE rT ry Th LUIS ARATA- : Sag Sentence 2 ere te at aero ereeaa meee ce tee on ts empresa comer Sere tars produces. in empres ei Jtennento lo sopeions precopacioncs dl [oceans in deers comin cee ateaannen hrseserme «Selle sot SoanrearChepemnonpe — CAuee TSS pins nn Sonera MicnmccEa mms ree de MORUEL ROMERO funciones y aspecto prefijado, de inmediata decodificacién, Para la construccién de los modelos fereninos también se recurre, como en la figura del gangster, a la confrontacin y la bipolar: dad. De esta manera se opusieron la morocha de buen corazén versus la rubia mala (La Vuelta de Rocha), la mujer idealizada frente a Ia que se entrega y paga a cambio (Fuera de la ley! la mujer y la querida (Morir en su ley). Fueron pocas las excepciones a estas maquetas tan righ das; la mas destacable quizds sea la Ana Meria (Luisa Vehil) de Turbién, pero es justo reconocer que su compatiero, Pepe Pizarro (Francisco Petronel, tampoco es un “jefe” tradicional Frente ala regularidad de patrones y conductas observables en el subgénero del gangster as restanteslineas que se desarrollaron posteriormente presentan rasgos menos tpifieados. Es 21 caso de los policales psicolégices, en los que se pasa de una mirada externa, més super cial, de hechos delictivos acotados en un grupo definido y aislable de transgresores de f+ a casos individuales, a figuras reconocibles como semejantes, generalmente narrados siver~ dose de focalizaciones internas. Lo mismo puede decirse de los melodramas poticales. En ar 0s c2s0s -paliciales psicolégicos y melodramas-, se pasa dela relevancia de la histori lt Preeminencia del relato, Asi de une mirada externa fija(focaizecién c@ro), que simi 67% sistrartinealmente en el tiempo los avatares de la trama, suele pasarse a relatos profusemey te zigzagueantes en el plano temporal (Danza del fuego, 1948, de Daniel Tinayre ¥ Carmine rallied 1946, de Tinayre y Luis Saslavsky), contados desde una perspective (ocalizc6n) 2, que puede ser tanto simple (recuerdo de una sola persona) como mille vaios tigos de los hechos). eae dele Social a lo individual, a actitud normativa del género se transforma. pel / generalmente erica, de un accionar transgresor que puede responder @ C205 ioeconémi a cas, 8 pase a otra, que privilegia la mirada de individuosaislados, on 92" timas de sila ent une t patologi ; 406 | Cena oty Patologia. Desaparecen los tipos y surgen los casos. En ellos $° 0 Escaneado con CamScanner Si muero antes, de despertar Blanca del Prado, Néstor Zavarce, Floren Delbene vision negra (péraia el 9 Corloc ra tsi do un sistema de valores), como puede observarse on La trampa (1967, trate cacy nit? Christenson) y en A sangre fra (1947, de Tinnyre), hasta ol axcreme del ob r natutalista dol ascsino. Esta os la situacién de Danza del fuego, La bestia huma- Prete ot d° Tinayrely El vampiro negro (1953, do Romin Vinoly Beret) Todos son fle Protagonizaios por personajes, uo, frente a ciertas situacionss, sionten, précticamente, Ia compulsién de matar, En los molocramas policies, vstimas y asesinos suelen estar también sometidos a sus emociones, se hace dificil establecer en qué subgenera nos encontramos. fan de pos Y por allo, a veces En ambos suole reiterarso ol a sidn 0 las situaciones de sometimiento. De la vio- tencia fisica se ha pasado a una violencia sobre todo mental. Esto se observa e El dosnudo (1946, do Carlos H. Christenst En ambos subgéneros ngel fen) y Se abre ol abismo (1945, de Pierre Chenall. suele privilegiarse a mirada sobre las vietimas, favoreciendo un ma- |2 Identificacién del espectador (Si muero antes de despertar, 1951, de Christonsen). Y por to mist Yor ofectisma sobre mo, como el retrato no es el del eriminal, la fuerza normativa Parece desdibujarse. No es que desaparezca, pero lo relevante no esta alli. El sefor Uimer (Nathan Pinzén) de El vampire negro es condenado, pero lo relevante no radica en eso. A {0 largo det film, adquiore mucho més interés el deseo que siente el intachable fiscal (Rober- to Escaladal, casado con una mujer lisieda, por Rita (Olga Zubarry), una vulgar cabaretera. Por este mismo desdibujamiento, en paralalelo con los actos aberrantes claramente conde: ables, se focalize la atencién y se recrea una enorme cantidad de transgre: Cotidianas, en figuras poco extremas, pero que corren el riesgo de perderse. Este es el as: Pecto ético que, ademas del estético, se asimilé del cine negro: el riesgo, Ia equivoca diso- |ucién, la permesbilidad de los limites entre el bien y el mal (Se abre el abismo, y El pen- diente (1951, de Leén Klimovsky). Escaneado con CamScanner ‘Mercado negro Con gorra, ‘Mario Passano y Maco Lozsn De rodillas, Félix Rivero Le comedia negra cambia el tono pero mantiene esta ética proveniente del cine negro, L2 sr tootién de El muerto falta a la cita (1944, de Pierre Chenal) es paradigmética al respect Cualquiera puede ser capaz de todo en una situacién adversa, Un joven burgués, borracho Pot tne noche de juerga, puede pisarinvoluntariamente a alguien con su coche y uego hr eh beredemente, Frente a él, en equilibrada contrapartida, puede fiaber también une flsa Vet que se presenta como testigo y trata de extorsionar al responsable, agobiado por la culpa. Re latviame moral, cnismo y buenas maneras por partida doble son rasgoscaracteriios 2 comedia policial que estan presentes, en este film, de manera acabada. Siel policial psicolégico y el melodrama policial tienen en comin el franco ¥ deliberado jues? con la convencién genériea, la comedia negra marco, en relacién ellos, un sake cual For su tratamiento saree del tema, se evidencia un distanciamiento de los acortckrione 4e Ia historia que esté ausente en el policial psicolégico y el melodrama policial Le realidad dojo de ser reclamada comc' el referente privilegiado, y otras producciones culturales eee z teatro 0 la literatura, ocupan su lugar, tradicionalmente hegemonic, 8 tes subgéneros surge, hacia 1950, una nueva corriente, la del potcial ovum cence (1949, de Hugo Fregonese) establecié las bases de un? a i una gran cantidad de secuelas. Los films de Don Napy (Capture meni curt Land wdadla, de 1950, Camino al crimen y Mala gente, ambos de 1952) y !05 4° kurt a ente de prover Merca (Mercado negro, de 1953, Bacaré y La delatora, ambos de 1955) son un caro 6x0" Escaneado con CamScanner La muerte flota en el rio Eduardo Cuitino, Nelly Panizza ello. Lo mismo pues {Lo mismo puede decirse de fos incluidos on ol apartado do Ia gondarmera y la fronters: to César Vattoone), por pone : la fro 0 doa clamps, Esta nueva vartionte trata, one main ontro esos ft sogtin los casos, historias de individu principalmente, por lo wststico, Las ti © de bandas. El rasgo co- pasa storias salen realmente a la allo, al interior del pais o at dota del Parand, Deja de ser un eine de estudios con pretensio: Nos clo roalismno, Frante a casos aistados de filmacior Patormo, 1937, do Artura S, Mom) y on los lugates reales (ol hipédromo en |i constante remision al back projecting, se impone, us holtes, sus toateos, los hotel 'a vieja convencién de realismo proporcionacio por los titular ‘mento dol plano es real, Correlativ si en forma oxcluyante, la ciudad rest, , las calles. Frente @ ti diarios, ahora cada ele- nto con el ritme citadino, todo es aqily vibrante, se ace- leran tos cambios en tos planos y los tiempos dol montaje. El sonido también ecupa un lugar Folevante on esta transformacién. Didlogos, ruidos y musica contsibuyen a Ia concrecion del Ruevo efecto, Le fotografia sufre una transformacién equivalente. Fuora de las posibilidades de absoluto dominio y construccién que brindaba el estudio, se abandoné la estética expresio- niste, propia del cine negro, para adquirir una tonalidad neorrealista. Esta nueva estética, en parte, fue posible por ol desarrollo téenico de nuevas cémaras, més livianas, asi como la me Yor Sensibilidad de la pelicula, sometida a menores fuentes de luz. Desde lo ideolégico, esta nueva cortiente retomé la actitud reacionaria que pudo observarse €en algunos films de gangsters. Las realizaciones de Don Napy, que se centran en casos poli- ciales resueltos por el oficial Campos, son un claro ejemplo de ello. La historia se cuenta des de la dptica de la ley, y se enaltece a las figuras del orden, alcanzando extremos de edulacion. Estos son, suscintamente, los rasgos més destacables del policial argentino en la etapa indus: trial. Continuemos ahora con el aporte de cada uno de los estudios, para comentar mas espe: clficamente algunos ejemplos y mencionar a sus protagonistas. La pasién de Lumiton El caso més claro pera el tratamiento del género policial argentino desde la produccién por es- tudios, posiblemente sea el de Lumiton, Porque redne la produccién de Manuel Romero (No- ches de Buenos Aires, 1935,' Fuera de la ley, 1937, La Vuelta de Rocha 1937, Histori Cine pati 1 40 Escaneado con CamScanner Reportsje en 490 1 Ble Goty 1949), la de Antonio Momplet con Yo ng 0 al crimen (1951). Toda! on au ley. ateat englobadss on yet do erimones, vide (1949) ¥ ia marcadamen orto cal Las obras de Carlos Hugo Christen: to de deracha EL bnger mina en fa Huvia (1948), yL8 8FAMPA TSE), por sutgny ee roe on Por sitio, ol fm do Roman Vinoly Barsto, Repartje vy enso atipico dentro de la produccién del estudio, ts ideotool nudo (1946), La mu de las an nstituye B on un institute neuropsiquistrico donde tune infiorno (1951), £0" an ‘go comedia negra, ampiontad 1s una de las poc jinatos, 08 "nto falta a 1a ita (1944), otro policial singular de lugar .ocas experiencias emparental Pe pF iparentables con et fim de as Attistas Aegen. 7 Chenal EF do Piorte tinos Asociados: Por la cantidad do pelicu cobra de dos directores. crecimiento del estudio. uias citadas, hablar del policial de Lurniton es aludi, bésicamente ten ol caso de Romero, desarroll6 Su etapa inicial en forma parg al ta det correspon Huge ele 5s. ya filme desarto En la historia de las galerias de Munro es un lugar comiin sefalar tres periodos, diantes 2 la actividad de tres directores: Manuel Romero, Francisco Mugica y Carlos Christensen. £1 polical, absolutamente ajeno al estilo de Mugica, cultor del melodrams¥ comedia de claro corte burgués, se asocia, indiscutiblemente, a los otros dos realizadore tre las diferencias de ambos, que son muchas, se destaca el hecho de que Romero Ma do todos sus policiates en e! mismo sello (cosa que no sucedié con los otros generos Magos por), en tanto que Christensen los realizé en Lumiton y en San Miguel: COM? Ceractristoo de cada director, puede decise que, mientras Romero eplicg asus pols que podria araficat st reco ideologia gia de sus melodramas tangueros, jens maniqueos y dicotémicos, la con nee anti Yrontacién blanco/negro, paralela a la del bien y el mal, el cine de Christensen © mtipodas, dentro de la categoria del claroscuro. Escaneado con CamScanner Historia de crimenes Severo Fernandez, Bernardo Perrone, Osvaldo Miranda En cuanto a ta orienta: No 68 un rasgo exclu Si, es coincidente cor cién conservadora que se senalé en ol caso Lumiton, veremos luego que Vente do este sello, sino algo propio y dominante en el cine de la época. n la politica iniial del estudio fundado por Guerrico, Susini y Romero Ca- rranza. Desde Los tr : cea se bes tres herretines (Equipo Lumiton, 1933), que aludi a tango, el fitbol ya Gl Peril de la produccién del estudio ue de neto eardcter popular. Un cine de répida pro- duccién y de al Section Y de alto consumo, El caso de Christensen, de mayores ambieiones y bésquedas, pue le explicarse por el éxito de sus policulas, que aseguraban al estudio significativas ganancias. Manuel Romero Fuora de ta tey (1937) es un film policial emblemitico y el més logrado entre los de Manuel Romero. Hablar del género en la Argentina implica citarlo. La fuerza de la historia, las actua- clones destacables y el cuidado en la composicién de la imagen constituyen las razones basi ‘cas, De todas maneras, Romero empez6 con el género policial desde que inicié su carrera, y es oportuno contextualizerlo aqui. La serie policial del director incluye titulos tales como Noches de Buenos Aires (1935), La Vuelta de Rocha (1937), Fuera de la ley (1937), Historia de crimenes (1942), Ven, mi co- razén te Hama (1942) y Morir en su ley (1947), En todos ellos, los personajes, las situacio- nes, la estructura, los objetes y los lugares conforman el universo diegético propio del relato policial. Pero, en Romero, como en ot0s directores, muchos de los rasgos citados aparecen cuando aborda otros géneros. A lo largo de toda su carrera, que comprendié la critica en me- dios graficos, la direccién escénica, la escritura de obras de diversos géneros (178 titulos en. tre revistas, comedias, sainetes y grotescos) y de letras de tango (146, que incluyen numero sos temas cldsicos), a las que sumé la actividad cinematogréfica, tuvo como motivo central ine poticat 7 41 Escaneado con CamScanner TITO LUSIARDO y HUGO DEL CARRIL Drege ae eal eat uelta de Rocha”, que Lumiton CR Se 412 1 tera Got Escaneado con CamScanner Le Vuelta de Rocha en le portada de Sintonia, El caballo det pueblo Irma Cérdoba, Juan Carlos Thorry la noche portonny a 105 cafetines y i in ler en son gatas bigados quo desert wn Aramatiea on todas sus histori. Alls dan eit tos vcamtantes eno doe POS Con revélver o navaja y una : Conocibles: artistas novatas oternas, senoras US Protagonistas, Las boitos y club nos clandestinos nocturnos, tos baile los toa importan: juerguistas, fo barra, los ati: antes y emp: amplia gama de mujer ios, los “fulleros" y los gua ccaract inadas come “tipas” bien re oi ‘on enucho pasar, mujeres vividar inocentes © bravas, muy bravas; “queridas”, novi v 2 corna de los hombres, tant de as ei nas rj Peliculas (entre 1935 y 1953) api : Jomprende cincusnta y tras 8, pa a rnitice nache poner 7260 otro tipo de historins, personajes y espaci sabor” que deja su cine en ta memoria es, el ue contribuyé a construis, Andrés Insaurralde, en su texto” 0, fun: Sobre Manuel Romero, clasifica Ia filmografia del die cuatro categorias: el melodrama tangucro, las comedias (con Paulina Singerman) y cémicas (con Nini Marshall), el policialy los films sobre el mundo del espectéculo. Aparte, comenta las peliculas interpretadas por Luis Sandrini, que, por su mismo perfil, participa en films cémico- sentimentales; y, en todos ellos, suelen fltrarse los tipicos “motives” romerianos. Desde El caballo del pueblo (1235), en donde un delincuente presiona y mezcla en turbios negocios al duefo de un stud, @ quien luego extorsiona con la intencién de casarse con su hi- ja, aparecen en el universo recreado por el director bandos antagénicos en relacién con los te- mas de la clase social, la ley, el amor v el éxito, ya sea -este Ultimo de un artista, un caballo oun deportista. Asi, el conflicto, pintado en esqueméticos brochazos, opone valores y senti- mientos segun los pardmetros de la filosofia tanguera de la que nunca se despojé. E| motivo policial invadié otros géneros, con sus personajes y ambientes, desde el comienzo. En El caballo del pueblo aparece otra de las aficiones de Manuel Romero, ol turf, y, asi, el dromo ocupa un lugar central. Igual que en Palermo, de Arturo S. Mom, Ro- espacio del hipé Cine poticial / 443 Escaneado con CamScanner psicdn singular puna pe sical earante Daniel Tinayre oct no, De- ‘eto ve nero pe 4 cine angenti ps ddentro de 21 tor, ire ened ba eta ind sempoi multiple sn cinema tor, guionista, cab ica de x cidn activa € Fane a iasiia, seis 10s Ph crecimiento de y eventos Bis fdas por sduando Txdoya, director Y indujo a su amigo teansformacién de nericana, de simple ay, fie flo Beta yD ‘ait de aio Citi Juan fost Guthman nematic Intra tment en l dcada de 1950, cre a50c0- on go dl Cr Leas Demare, Ma- rio Sofi y Luis César Amadori, Cinemato- ‘rea Cinco, un slo sin estudios propio, po gualmente producto y dstribuidr. tr aacain de Daniel Taye con el cine csté maveada, dems, por una larga serie de cooperacions que dan cuenta de una poca, de una modalidad de trabajo y de ura concep esttica y ambien narativa delcine. Tiny se inci en Francia, su pais dlecrgen. Ali por amistad con André Mer- canton, director de la filial que Paramount arrendaba en Joinville, comenz6 como asis- tent de dirccén de versiones latinas de fms noteamericaos hata gar a la di recin. Una vez a Argentina, se vinculé con el producto Juan La Rosa, con antece- do: nero de Co cUlizindola, 1161 oa Sey @ situaciones de ries ic i : Palabra de honor, de Li ; i pars mudo y para cuyo sello Par Crt oi Sata Federai6n 2 pone 8) U8 PO a revamente con Arturo S. Mom, pe: ee ‘critica del diario La Nacién, a riedista Y wien haba ases cata dl eine sonora, como realizador de 1935). Aitos después, el mis- versién del lentes en el Monte eriolto (1 imo Tinayre dirigid una nueva fm, Vidas marcadas (1942), puesto que ambos directores consideraron que la peli- gala no habia alcanzado el éxito que sus po~ sibilidades auguraban, y adn en 1954 se- guian trabajando juntos, en el argumento de Tren internacional. Previamente, en 1946, Tinayre in fructfera cooperacién con el director y ami- go Luis Saslavsky. Juntos intervinieron en la realizacién de tres films: Camino del infier- ‘no (1945), A sangre fra (1947) y Pasaporte a Rio (1946). Esa amistad se habia gestado aifos antes, en 1942, cuando Saslavsky film6 Ceniza al viento en los estuclios de Baires, regenteados entonces por Tinayre. La altima colaboracién amistosa se inicia con La bestia humana (1954). Allf princi- pia su prolongado vinculo con Eduardo Borrés quien, en la larga serie compartida, se desemperié como adaptador, productor y guionista de varios films del director (En Ia ardiente oscuridad (1960), La patota an we ®ecion dramética, en part, lo exiga. El casamiento de a chitst Carlos rag ny 6n Su debut einematogréfico y en un papel pensado origi con el villano depende del triunfo de un caballo u otro. también aparecen la deli jempre el mismo personaje, de un rapto a la hija de un iles (1: carifio de su novia. Pero fue, '936) donde Romero se distancié de la institucién policial, bus (1961), La cigarea ta (1969), Flsentido de mareae estas ciaciones es, en part, po dina bs oe a tispntiad deme ts alas practi La eth le estas recurrentes asocag, nayre, alguien sumamene ingot ™ pom gerndola one lidades que sus proyectos requeis Alo largo del pertodo considers g rector pass por las gales delat, nadas PAF y Baies Film en foma na, menos estable, para luego tabsjaraa mente en Estudios San Miguel (Cains del infiemo), Cinematogrifica Interines cana (A sangre frfay Deshonra, 18, gentina Sono Film (Pasaporte a Rio yl vendedora de fantasias, 1950), Eno (Danza del fuego, 1955) y Cineratgs ca Cinco (Tren internacional y La besa humana, ambas de 195!) En este largo peregrina, inaye tivo oportunidad de trabajar con distin niicos con quienes elaboré un eso ins fandible, En esta tarea, los mins ‘ocuparon un lugar capital, desde Ges bichy U9, rt ry 6 as car mero, que raramente salié del estudio y a lo sumo opté por el back projecting le mente pa? 0 incuenci y la pote 6 Bi ‘aparentemant® Ine de Arturo S.No Y resulta un fete César Amadori, por citar sélo algunas) en donde Ea ; i, por citar sélo alg pa Peco convencionl. Con Manuel Romeo, actué en Dan Quijote det aio 196 nta a un galante haragén que salva su eterno ri ie ctemo rival y con quien se disputa el illo nario, haste eM bre todo, on EVA a, burst Es *0 le provocs serios problemas de censura. Escaneado con CamScanner Deshonra Filmacién: ‘actriz y técnicos Fanny Navarro, José A. Martinez Suarez (el tercero, {de pie); sentado, fen el centro, Daniel Tinayre, inelinado sobre él, Pedro Marzialett! Hattula, que fotografié Mateo (1936/1937), hasta los que siguieron en forma més con- tinua, Antonio Merayo, Alberto Etchebe- here y Humberto Peruzzi. Con una inci- dencia semejante, los escendgrafos, Raiil Soldi,-Gori Mufoz y Alvaro Durafiona y Vedia, fueron los nombres recurrentes del periode. Con argumentos, guiones © adaptaciones propios en muchas ocasiones (Camino del infieno, Pasaporte a Rio, Danza del fuego, La vendedora de fantasias, Deshonra y ‘Tren internacional), Tinayre, cultiv6 el g&- nero policial en sus distintas variantes: poli- cial psicolégico, comedia policial film carce- lario. Peliculas cuyos argumentos alcanza- ron sus plenas potencialidades por el cruce y la asimilacion de la estética proveniente del cine negro. La aficin de Tinayre por ese estilo, rico en elementos de raices expresio- nistas, Ia habia cultivado precedentemente, desde In realizacién ce Mateo, con el que inaugurs el period de las grandes obras. Asi inicia Daniel Tinayre una carrera co- mo realizador y como director de estu- dios (Baires Film), en donde la constante fue el minucioso trabajo artesanal, la cui- dadosa preparacion de grandes produc ciones, inscriptas, en la mayoria de los ca- 0s, en las lineas genéricas instauradas por el cine norteamericano, Elona Goity Con Nini Marshall reaparecen los delincuentes y villanos de Manuel Romero. En Navidad de Jos pobres (1947), Catita Pizzafrolla es la protectora de una madre soltera (Irma Cérdoba), que ha tenido su hijo con un pistolero (Fernando Lamas}. El padre rapta a su propio hijo para, asi, poder chantajear a la madre y obtener su colaboracién en el atraco que planea a la gran tien- da donde ambas trabajan. En Un tropez6n cualquiera da on la vida (1948), perteneciente al grupo de peliculas sobre el especticulo, centradas por lo general en el ascenso de una figu- 10 (Alberto Castillo), el aspecto delictivo articula un paralelo dramético: un cantante, en la no- che de su debut profesional, va preso por salvar a su hermano, que finalmente se arrepiente.* + Noches de Buenos Aires El debut cinematogréfico de Manuel Romero y e! principio de su larga colaboracién con Lumi- ton (1935-1956, 1949-50, 1962) se produce con Noches de Buenos Aires (1935), un melodra- ima policial con canciones. Los historiadores informan que el origen de este film responde @ Cine poicial 1 418 Escaneado con CamScanner Fuora de le José Gola ¥ 496-1 Bena Gory ovis, Con anterioridad, habta partcipado en Ia puesta en essen ‘ones interpretadas por Carlos Gardel en el fim Lue rodado en los estudios que Paramount arrendaba « 1 los créditos sélo figuré como ayudante de dir, tuna pelicula semejante a la anterior razones reivindicat ‘eros musicales y las canci ‘Airos (1931, Adelqui Millar), Ins cerenias do Paris Como on 8 an iton resolvié realiz re contratado por Lumit : = uenos Aires comicnza en pleno centro pores - futoria, La historia de Noches de Bue MttO Pome pang ge ios sobre el que se suceden los créditos, ue de piernas y pantorrilas que de: ‘ i equivalent pp centanTubidn, de Antonio Momplet, y La Vuelta de Rech, también de Ronee. guy tcl onsyo gneal de un tear, preva al debut del revit “Noches de Buen A ete oe cémara ip conoceme a odo los Protoss qe dein cgay te ante Cl ra CSrdoba figure dels revista y mujer de Pao Fivera Fernando ganas ce fostjaca” por Esardo Acosta (Guile Faderont) ho de ceca eon ganna El encuentro es interrumpido por la llegada de Pablo, celoso por los firteos de su m selleva, sel turo de Dor Tita Morello), escoltada por Poniano (Severo Fernénen seat sieoyoerno enamorado, débilcontincante de Pablo, que, aunque casado,es01“duha yen tax dla cantante, Cuando estén por is, el empresaro del eat 0 invita aa inaupan, do una boite ala que todos concurirén: Le Tapera. Finalmente, aparece Margot Ads Oven Dalarna del espectéculo, que se salude con Eduardo (su viejo amante) y Lopect Enrique, rrano), amigo de orreris y mantenido del “nfo bien”, que también concurren alleal Lady, Cripciénincial resulta extensa por el primitivismo de los recursos. Los profusoscilogos debe, dar cuenta de toda la situacién ante la ausencla de aportes de la imagen. Breves planos de una figura sospechosa, El Marca, amante celoso de la beilarine, a quien vi. aila desde la penumbra y quien cierra fa escena en un marcado contrapicado en contra ne talan el clima de suspenso. Sigue el estreno con todos sus niimeros musicales hasta que, Pentinamente, se da ol hecho policial. Celia, que ha ido a una cita clandestina, encuentra & Eduardo musrto. Tas breve interrogatorio pol amigos constituida por Dora y Ponciano da con el criminal y logra que lo detengan. Cel, ae- Pontida y nuevamente enamorada de su marido (puesto que se ha declarado culpable parade fenderla y protegerial, se queda con Pablo. Dora comprende que “en definitiva, un tropezin cualquiera da en le vida", elo ng, = We Buon, " Soinvite og er quien al a Pablo, acusado del homicidio, la pareja de ‘Ye en este debut, Menuel Romero pone de manifiesto lo que seré una préctica alo largo desu carrera, la “hibridacién” de géneros en aras del entretenimiento y el ritmo dramético. El ni cleo de su cine “serio” fue de neto corte melodramético. El director usa al policial, sus lemon 10s, sus personajes y, en menor grado, su iconografia, para otros fines; generalmente, cons ttuir los enfrentamientos y las rivalidades de la historia amorosa. Enel film, los aspectos policiales se suman a una historia ajena, tienen escaso desarrallo ys '0 sirven de catalizador para el reencuentro de Celia y Pablo, asi como para la eterna resign? cién de Dora. EI misterio, la violencia o ol proceso investigativo se limitan a planas 08 6s 9s acotadas que apenas se intercalan en la flexible estructura melodramatico-musical Le 6% ‘942 Panticipacién de El Marca reduce de por si el peso del policial. Sobre todo si se consie"® {2 admiracién que Romero sentia por el cine de Hollywood, donde sincrénicamente ls plc? 'as de géngsters atravesaban el momento de su mayor apogeo. + Le Vuelta de Rocha Con Ia reterada colaboracicn del director de fotografie Gerardo Hattula, con quien hablo blado en Fuera de la ley, Romero retrata en La Vuelta de Rocha (1937) une Hise Ne Lene por centro al bar de El Calabrés (Marcelo Ruggero), en pleno corazén de la Boe®. OF" on Noches de Buenos Aires, [a protagonist, Dora (Mercedes Simone), es presented ante un plano de sus pantorrllas, descendiendo también por las veredas desiguotesy 4608 bulendo entre el gontio, en medio de la noche. Conoce al malevo Solari (Floren D=!e™! Escaneado con CamScanner Escaneado con CamScanner Morir en su ley Tita ttorelo, Fanny Navarro 8 1 Cana Goty cionista. Alli le presentan a las cuatro figuras que amenizan las noches del bar: Carlos Argun (Hugo del Carri y Mare degui (Tito Lusiardo), su mujer (Benita Puértolas), un joven cantan ja Fuentes (Alicia Barrié). Por otro lado, esta llegando al puerto el barco Sant 30 Gilberto (Marcos Caps bordo a Juan Carlos, un oficial joven (Pedro Maratea), y a su am quienes afioran las noches de la ribera. Al llegar, Juan Carlos poster (Maria Esther Buschiazzo) y a su hermana y parte con su amigo a lo de EI Ca do con la nueva cantante y ante la inminencia de su pronta partica ta Neva a viv La pareja dsp. ‘Abandona a Maruia y genera, de esta manera, una futura venganz lari y Maruja, urde un plan con la colaboracién de El Calabrés: robar a Juan Enterado Arguindeaui, intenta impadirto pi 1 robo ga lleva a em transporta los caudales de la compat Dora que regrese al bar y retenga a Solari hasta la salida del barco. Pero el tin. e nuevame + bo y Juan Carlos, que desconocia el plan, cree, al ver a Dora en el ca ha equivocado con las mujeres. Arguindegui y el cantorcito joven son quienes ress toria, Irrumpen cuando los ladrones reparten el botin y con Ia ayuda de una falsa arma de fee 0 (una banana en el bolsillo), los reducen. Pero descubierto el engaito, so n de ht Jos maleantes hasta el barco, a donde han ido con Ia intenci Como suele ocurrir en tos films de Manuel Romero, el orden se restablece, el dinero es dewwel to y la pareja se reconcilia Ms allé de las anécdotas, siempre simples (Romero escribié la mayoria de su parsonajes director privilegia la accién, siempre continua, y la caracterizacién de su fundamentalmente, a través del lenguaje, mediante los dilogos y los tonos. Desde ol ore chismo de El Calabrés (*2Vos té creés que estamos a’ Versalles? Estamos a fa riders. AS) gusta m'hijita. Hay que ganarse el pan con el sudor de la frente"), pasando por las Drawwons das de Solari (“Vos no te vas de la Vuelta de Rocha hasta que yo quiera, Una mujer teresa a Solari deja de tener voluntad propia”), hasta la vulgarisad y rivalaad de Newwls (Y Escaneado con CamScanner Fuera de la ley aria Vitaliar, ‘Morealo Ruggero, José Gola forceros aludo a “Ia gorda” u otros despectivos califcativos, mientras J ‘que al dialogar con Do- ra, a quien vo “cara de buena’, es caballeresco y gent, ae La divorsicad de tones de los personajes no constituye un detalle sual 0 anecdético, el ella po: ne do manifi to una modalidad de tratamiento del génoro, gal fim, ol aénoro polical se cruza con la comedia y, pr momentos, hasta com la stie,Tén en reemplazo de armas {do fuego. No obstante ollo, La Vuelta de Rocha revela una trancformacién en relacién No. jase presente la rosolucién del robo, mediante el empleo de bananas ‘chos do Buonos Aires. Entre ambas ha mediado Fuera de ta ley. El polcil mas pure tes: lieado por Romero, en ol que se atuvo férreamente a las convenciones genéricas, El director, en su torcer film policial, logra un equilibrio entre los rasgos molodraméticos y los tintes delictivos. Ambos adquieren un cardcter de necesidad y establecen una eficaz dindmica de causa-efecto. La confrontacién de los espacios el bar donde se organizan los deltos y la honorable casa materna- reitera la oposicién construida también desde el nivel de los perso: hajes: tahuires y brevucones versus madres y hermanas respetables, La fuerza del policial reside basicamente en la rica caracterizacién del mafioso, Solari. Sus di chos y sus hechos apenas tienen una tenue respuesta en unas pocas y acartonadas maximas de Pedro. El héroe no alcanza la estatura de su contrincante y se desemperia como un galén desengafiado que depende del ingenio de un dio de artistas para la resolucién del conflicto. En cuanto a los tipos femeninos, el film presenta la amplia galeria del verosimil genérico. Cin- co personajes bastan para mostrar toda la gama de comparaciones posibles. La rivalidad de Dora y Maruja por Pedro, confronta a la buena y sacrificada (morochal, que ha caido en el pe- Escaneado con CamScanner La Vuelta de Focha Mercedes Simons Floren Delbene. Cento, arriba, Hugo del Cari (con sombrero) 20-1 Ben Gory oso mundo de los bares y la cancién por desconocidos avatares de la vida, frente a la ver gativa (rubia) y seductora cantante, que no se resigna a la simple pérdida de su amor. Maru por despecho, se alia con el enemigo (Solari) e interviene activamente en la venganz®. Junto a ambas, deseables, la “gorda”, esposa de Arguindegui, completa el grupo da mujeres de® noche. Esta reprasenta, en forma especular y cémica, la contrafigura de Dora; es une pest) cantante (sin conciencia de ello), que pretende engafar inocentemente a su mari, 5°18 siona con los requiebros amorosos de Gilberto, que equilibra su ridiculo comportamienioY us emociones casi adolescentes, El grupo del bien lo integran la madre y la hermana de Fe ro: una, viuda, y la otra, abnegada compafera de su madre. En ambas ol deseo ost user {e Esperan, se conduelen y lamentan y, a lo sumo, son meras espectadoras de vides Poro la fuerza que por momentos tiene el film se debe, mas que a la caracterizacion 1° he cade de los personajes, a la puesta en cuadro de muchas de sus escenas. Nuevamens a ” ce de Ia ley, la fotografia de Gerardo Muittula provee el dramatismo caracetin eed i acién y el encuadre de la térrida cancién interpretada por Mensa een Penumbroso ambiente portuario, son sélo algunos de Jos mm‘ Practica de las convenciones del género. jena. Escaneado con CamScanner + Noorrealismo nocturnal En 1942 Romoro ostrona cuatro polic ria do crimonos; Una fuz on la vonte Elvira Fornandoz, vondodora do Seems yy no os at aio més prolifice, yn quo on 1987 y an 1929 habia Hogue tox ‘anualos, Tal productividad fomontd au fa Ing rotomas y 0 los culdados formalos, ¢ En Von, ml corazén to Il toca.’ Si so rocverda La Tapora, contro noeturme do Noa! lng, dow pollelaton: Woy cn fa quo Inlcla al cino do tortor on la Argon la, cine a ts GoModlns eon Ph 8 cinco nu clo diroctor aprosurado y desprolijo, poc nz do focto a n dia Laan ning ule una palieula an s6lo voi 11, vuwive ai torritorlo conocido do las boites, on oste es Buonos Airos, las dior no pasion sor mayoros. Es quo fa produccl6n ha camblado, y los sito pormitido Lumiton pasar dol pintorosqulsme do aquolta espocie da pulporta, atondida por con granclas moos y tronzas hasta lo cintura, al solistiendo y oxético tug figura ostolar: Sombra Roy (Elvira Rios, on of npogao do su 10s transcurrides han *chinitas” ‘-digno espacio do ma como cantan, tede bolorosi. La boite La Aztoca, suiarto do gurlto ancublorto, sutra una eampata do do tigio dosdo ol pariédico El Consor, cuyo honorabla diractor os Arturo Campos (Enrique Roldén, cen un papel atipico, puosto quo an gonoral os ol villano por antonomasia do Romero). El pe. riodista/abogaclo, quo sufro ol flagolo do tonor una esposn ndicta al juogo y, para 6}, ahora ro- cuperada (Lucila/Alicin Barri), usa como plataforma clo su campana politica ol ataque a los an- tros do juogo clandbostino, Lo clorto os quo Lucila ompoia hasta o! anillo de aniversario y cae en las rodes do Tiburén Castro, socio y compaiioro do Sombra Rey. Ante ol asesinato dol ru- {idn, on principio os acusado Goyo {Tito Li press arco), quion junto a Elisa, su mujer, a haber sido *pescado" on un intonto do robo, intoreambié amonazas con Ia victima, En Ia fla de sospecho- 508 le toca ol turno a Lucila, a cul, tras su doctara n (ineluye un flashback reconstructor ex- culpando a Goyo}, queda dotonida on su lugar. Arturo, por honorabilidad, ciorta el periédico y, por amor, asume Ia dofonsa do su mujor. Esa nocho, Sombro, a manora do despedida, entona el bolero “Ven, mi corazén to llama” y, al da siguianto, confiosa la verdad en los tribunales. Cuando Sombra recuerda, Romoro introduce un sogundo flashback sobro ol mismo hecho, en le més pura tradicién dol policial, ravalorizando un recurso dol género que flaquea por mo- mentos, ante la acumulacién do canciones y situacionos cémicas. De los policiales de Romero, esto film os ol mas prdximo a la variant tribunalicia del género. Y, por lo tanto, lo que cuenta aqui os la intriga, la rosolucién do un misterio. Con ta simplifica- cin caracteristica do sus policulas, y fronto a la ausoncia do fiscalos y dofensores on franco duclo, todo depondo aqui de la capaciciad confosional do los acusados. Nuevamente, en Ven, mi corazén to Hama la declaracién criminal os una confosién amorosa/sentimental. El recur 80 del flashback sirve escasamonto al policial y contribuye, on mayor grado, al melodrama. Ro- mero reitera, una vez mas, la integracién de géneros (molodrama, musical, policial y cémico), organizados dosdo la estructura dol recurdo y la omisién do informacién. Recurre a pistas equivocas (la amenaza do Goyo!, suporposiciones de puntos co vista (la reconstruccién do los hechos de la noche dol asosinato desde los distintos acusados), protongacios intorrogatorios y conmovedores alagatos. El ofacto os corrolativo do la astructura gonerad, El contro do la act cién lo ocupa ta rolacién entre Arturo Campos y Lucila, y ol restablacimiante lol orden sirve, ‘més quo para la condona de la culpable (Sombra), para la rostitucién del vinculo matrimonial, Sia ello so suma la constante dol diroctor do satirizar los vinculos sontimontales tanto como las practicas dolictivas, reprosontados on asto caso por la paroja do Goyo y Elisa, el efecto de Policial se desclibuja aun mas. * Morir en su loy Morir on su ley os una clara secuola do la muy anterior Fuora de ta ley. Si con la fuerza de la historia anterior, Manuel Romero veld ol tono do pelicula a favor “de los servicios", en Mo- Fir en su Loy (1949) so imponen el tono declamatorio y ta actitud abnegada hasta ol sacrificio, El peligroso dolincuente es ahora “El Pibe Amalfi” (Roberto Escalada), quo, segin informan las Gino polital J 421 Escaneado con CamScanner ela defensa di sor inhurnanos Pat mos esate ener ; prende @ SU marido y 2 son fa hija y muir o inda con la fars dételo, Lo que sobre! conti | Carlos Borcosque Polifacético,arriesgado e innovador, tales son algunos de los rasgos de este director clileno que en 1938 se radie6 nuevamente en nuestro pas, tas firmar un contrato con [Argentina Sono Film para realizar seis pe- Iiculas en dos afos. El contrato en cues- tiGn, en realidad, fue sélo el principio de tuna larga estancia; Borcosque, en esta oportunidad, no defaria el pafs salvo un breve periodo en 1949, cuando volvié a (Chile para realizar una pelicula. Si en general es relevante conocer datos de la vida de un artista para comprender su obra, en el caso de Borcosque esto adquie- re cardcter de necesidad. La primera etapa (1938/1940) en Argentina Sono Film, que incluye sus titulos mas logrados, es el re- sultado de toda la experiencia vital aquila- tada hasta ese entonces Carlos Borcosque, nacido en Valparafso el 9 de septiembre de 1894, desde su tempra- 1a infoncia entra en contacto con las artes, ‘nda un teatro infantil esribey proyecta Peliculas a sus vecinos. Radicado en la Ar- bentinn haci 1908 ya esribecuentos po- Uses. El dato La Argenta no solo pu lca ung span ne de ellos sino que le ofrece taba. como cronistapoticia, cargo que acepta 2 1 Ena Gony .g diarios, huyd de !@ ito, “regente fies vend ble del encierro indo toda infor e organiza dad”) 0 con frases jamora @ Li le un policia, con sinicamente quince aftos de edad. In- gresar en el periodismo le permite no sélo conocer personajes y Ambitos variados, si no también volear informacién sobre una de sus aficiones més marcadas, la aerondu- tica, los veinteafios ya era piloto y el cro- nista de aviacién més popular del pats. Entre 1915 y 1927 se radica nuevamente en Chile, alli contintia con su labor periodisti- ca y se inicia en el cine. Filma algunas pe- Iculas para las que desempeiia todo tipo de funciones, no sélo se dedica a la puesta en escena y a la direccién, sino que tam- bién cumple funciones de laboratorista. La experimentacién es permanente. En 1925 realiza la primera pelicula chilena de dibu- jos animados y se consagra a las actualida- des y la publicidad, En 1927 el gobiemo chileno lo envia a Los Angeles para que estudie el cine norteameri- cano. Nuevamente, la actividad desarrolla- da es miiltiple, asocia el periodismo con la labor de estudios. Escribe para Chile y la Ar- ‘gentina, tiene espacios radiales y desempefia asesorias en peliculas de tematica sudameri- cana. La primera oportunidad para filmar le leg6 con La mujer X, para Metro Goldwyn Mayer. Luego trabajé en otros estudios. carcel. Transit ‘ado” en su ausencia por Laura (Tita Mereilgy ‘arse del policfa que lo mandé a pri fanny Navarro), hija de don Andrés del delincuente, 5¢ casa con Ernesto aiyan Sibel intento de asesinato de Torres por los de la hart Mand iamente £0 refugia on jg 2 I Oc88i ny Torres (Domings «Pe 8 dog que se introduzca en Ia organizaciin seducienys oP, mmacién a su propia hija, ala ‘mediante pomposas maximas ("Nosotros 1s francamente peligrosas del jefe poticia} 1 dotender 0 lo humanidad”), Mientras El Pie "se guage it ura E plan petigra s6lo Por casualidad, cuando nq nO ta Laura en un restaurant, Pero, gracias al intinto yg Ma recuerda le foto de Laura, vista en un prontuato de vg ria de stam 08 pr (Avecee 2 * "con brusco cambio d8tono (el del malevae le espte a ta gon hombres. Hay mucho etorrante en esta ceva", Laur, eng rao Argentina Sono Film ‘Boroosque permanece en los Estados Unitas hhasta 1938, cuando se radia ena Ageia gracias al ofrecimiento dea familia Mens ti. Viene en compafia de Jack Hall ca quien habia trabajado largament,y pope re como primer film Alas demi pain Se inicia aqui su mejor etapa, Al conn puede desarrollar los temas queens, con guiones escrtos por éloafizesasuie peramento, En ellos tata temas qt dot na, que representan una novedad ent ‘medio y en Tos que aplica las conoiiets ‘téenicos aprendidos durante su epee norteamericana. De 1s vsniuee B* realizado en lps, 8 los ms be dos son Jos incials: Als de mi PT bres, y Frit reiteraré alg mient. ios de los méritos de estas ee io aque averirse as exigent gy el que tiene contrato: Por =o a peliculas para as estes & Flecha de oro, para INGEN ads ‘Arias, o Una vez en 1a vide penoe esa mujer, para Libertad nee Se anteriores habia demosttalO ses eristico consist en majiana serdn hor En [os restantes, Escaneado con CamScanner Una ver ccontiosa a Juan (Miguez) que portent , “sanguinaro y maligno", A anrio y Juan da a conocer a Aeantinett to os aprosado en Rosario y Juan da ora Laura su verdadera identided. Al sommecns te del jefe, ire tain para exigir lo ent on ay, ol onc final tano lugar en un paaje sdlo muoren un edmplice, El Bangui a to banda la tinica oportunidad de res durante su traslado, Li- a de Alvarez ‘ural. E1Pibe inicia el }0 (Severo Ferndindez), gor a Natalia do una bala, Reductdos tos delincuentes, el m: Dorado poi 5, Amalfi rapta a gual « tirotwo on ot au y Laura, al prote- atcimonio acude acude en ayuda de ta can- tnnto, poro es tarda, Con ol parlamonto finale inden un ditime homenajen Natalia: -"Era una mujor do toy. No merecta aste fin “Alvares: ~"No podia toner otto fin, Murid en su ley” Por soqundla vez, Romero sigue fiolmente los lineamientos d 105 del género policial. Elude {do romance ent la querida dl mafioso y Juan, o! travest aura 0 las escenas tido policfa, En todo momento se pone la fuerte normativa propia del género policial. Lugares, personajes y oon cciones destacan en forma subrayada ol mundo de la ley, ol ordon y el bien opuesto al del crimeny in marge fen y la margina: lidad, La estructura conformada por los personajes sostiene estas fuerzas contra 8 contratias que tie- rostros, sumamente adecuados pata los pa- ples, y tener pleno dominio en el manejo de las escenas con extras y miltiples ar as Clauio Espana, al referirse a Nosotros, los muchachos, dice: “Borcosque retoma su lk nea anterior, la que més favorecié siempre su estilo, no el espectaculo sino elcine sin es- trellas, anénimo, y en alguna medida colec- tivizado por una accién repartida entre va- rios personajes"! ‘La casa de los cuervos es la primera de las adaptaciones que realiza. Borcosque parte de Hugo Wast en dos ocasiones, en la ya ‘mencionada y en Valle negro. Sien Ta pri mera las escenas mds destacables fueron Ins que empleaban movimientos de masas durante el conato revolucionatio y los ex teriores, en la segunda, el mérito se restrin- _ge ala fotografia de los valles condobeses, por Antonio Merayo. Posteriores adapta iones fueron: Una vez en Ia vida, sobre tuna novela de Leo Perutz, 24 horas de a fa de una mujer, transcripcién de la ver si6n teatral de Enrique Walfisch de la obra de Stefan Zweig, Corazén, sobre el cisico infantil de Edmondo De Amicis, y Eramos st Ja novela de la brasilefia Maria José Dupré. 5 sogi Cine poical | 423 Escaneado con CamScanner carts Borcos Ramo Nowaro, 1 Paulino Tato aniquilacién de una de ellas, no) ica posibilidad la nica PO: eo on como ti ee eee ron come ane a a aposcn entre dol comisaro Torey gy . dos boas yes respectvos de {ETFS COTPOTtIVIS y Bandages Mt Me €1 Pie on adr mayor ners. En particular a geet, ge Rent sida por Laura y U2 ; en temperamental ce aa mar pis, ao buen corazon. Consadl de Amalfi, aunque no tanto de jg yin Yau re eprasontada or UNA NEEVDOPOTUnidd J amy rg eet jue es capaz. Juan ha trai 2B dag on eg wnganza do Gu 68 COPEE JUIN NB Leica ng gag eng ino rund da dltoY Lara responded ol doer, pee OH a siston en ro final, su nobleza de corazén y su aprendidla segs tf Seoptai lo, hacia ol obstante lO, ‘a nuova accién heroica, al salvar la vida de mueven une nueva acc ‘ena més ald de su capacided para fingir, es fa eng, inde M0 a 02 Con gu pr riqueza que presenta, anaje, imitada tan s6lo por la presencia de su mujer. Por su parte, , Mons pov, ciferencia del viejo Torres, de percbir fa nableza aun en el mung n Fal destaco, como en reteradas ocasiones, la ionta tragic caracterase res mueren, Laura y el pusilémine Benquero, eran dos descastados, Fin, de dudosa pertenencia al grupo criminal. Una vez més se impone lan (ures feo a ed raya dol erimen, sélo sobreviven los “puros”, aunque no necesariamente los b : Enos, —— oe Ila dnp oe ace desde 198 hats 1 Daten cen globo, en particular la para y terior desapariciin de EI Pamper capacitacin de los pilots en exeus ‘madas en la Escuela de Avian ca de aviones de Cordoba, y ens ddromos ce Mencioza y I Palomas envié distntas unidaes de fiasie § Dien Ia pelicula fue una de aque rodaje de los mis extensos de musts toria, esto no se debié a falta cidn o imprevisibilidad. Oto dels ie nesta cinema oo de oi tes de Borcosa} fue el empleo dela hon de 0 HY nocié en Hollywood Enel" indie decorados, elementos de ult todo to necesario para acuta Tas escenas, una 2 unt, ia eats oe inflie est" son y prever los menores ‘cuando, como en este ne hugar en diversos punts implica gran cantdad €° Escaneado con CamScanner ay Con te a Paral wy ti rigan), dda ontadt iol, no pone d val Arg vio en aoolonns, a atuondo y ais nivalas di Tanguaie, Los aspacion acon rlampre no roltara un lugar dol 0 uldn (aguantadaros”, crane da armantan) y to ambos, quia pun jontran tos parnonajas do arnbow bandos y tiene lugar ta ps Antonlo Momptoi an nlinpin, oh nor fon oupacion do diversion noe ol motodrama poticial Fey au azarona vida artiation, Antonio Momplet* se deserny aimente como ronlizador, labors qua cunplié en diveruos Fronela, ln Argantina y México, Yo no olagt mi vide (1943), fu in dol diroctor an ol pals, que se Gxtandid entre 1947 y 1952 -previarnent do a ta Argontina a ratz do Ia Gi a uno do tow tulos rionto dot cine La historia nace 9r0. div monifinato tw coneapelén dol polical de Rarnete dotinicl6n dé lon porsonajes, muy esquarnati 1 (on88 honesta, central de pole 6 6 Ging su cine en ge ioe y tipi: bn sitio de datito 6 que pertiten Is comnunicacion entre 16 como OF anistico, guionis- aises, Enpat (su lugar de rodada en ta sagun- abla ve orra Civil, entre 1936 y 1943, afio en que 56 radiod en México, vin logrados y en dl ratine alementos del drama y det policial,en su va. ‘on una suerte do road movia, la dura experiencia de Ernesto Ramirez VArtu- ro do Cordova), profugo do In justicia, quien, tras pasar siete aos en prisién sin delatar a sus gurantes, Las posibilidades que daba este Nosotros, inétod de trabajo se vier Jos muchachos, que, por el eontrario, entre Ia etapa de preprodtuccidn y el c FeNY, NO Tega los cos meses de trabajo. También en st ebut, Borcosquie dio valor enle- funcional a Ja cimara, empled free mente los travilings dando mayor conti= nusidad y evitando cortes y reiterG un sen= tido del montaje gil, como los vislos en Hollywood, En Fragata Sarmiento, ademis de reiterar st gusto por el semidocumental, aquf sobre 1a formacidin de tos eadetes dle ln Armada Agentina, muevamente sorprendi con sus alandes téenicos y escenogriticos, En el film se egistraron las primeras tomas subacute «as hechas en nuestro paisa ra del hon triento den sulbmarino; el responsable fue lcamandgrafo Roque \ovino, Su cuida- do de los aspectos formales también es puesto de relevancia por las reconstruccio- nes que hac cn estudios, Para gsta pelfcu- la encargé réplicas de la sala de mviquinas y de Jos camarotes de la fragata verdadera, Y para obtener la conti del montaj jad y la agilidad d que la secuencia del hundi- miento exigia, hizo construir una maqueta ura del submarino, Esto no fue un hecho aislalo, ya que en 24 horas de la vi- da de una mujer, la escenografia tuvo un re! film, Borcosquee re- yor relevant ‘construy6 el camino de acceso al casino de Montecarlo y sus adyacencias, més un am= plisimo salén de juegos, Un aspecto lamentable que afecta su filmo- sgraffa,independientemente del hecho de no ‘mantener la calidad de los films iniciales, es que hoy no se conserven copias ni negativos de muchas de sus peliculas. Tal parece ser el caso de 24 horas de la vida de una mujer y de Er ‘que, aunque desconociendo lo que significa- ‘Tampoco puede omitirse ramos sei ria este hecho en ef futuro, fue la persona que vinculé a Ratil Alejandro Apold con el je Alas de mi cine. El contacto surgié a rai patria, Durante el rodaje, Borcosque recibié gran colaboracidn de diversas entidades li- sgadas a Ja avincién, una de elas fue el Aero- lub Argentino y, en particular, gracias a la labor de quien era entonces secretario de manera Apold entré Im, de la iad, diez In institucién. De es cen contacto con Argentina Sono que seria més tarde jefe de publi Aafios antes de ser nombrado en la Subseere- tarfa de Prensa y Difusién de la Nacién. Fieri Hombres de esta terra (1923, Chile Chile; Vida y milagros de Don Fas le), EL hudafano (1925, Chile: La mujer X 03, EEUU; Cherk Bibi (1931, BCU); Dos noches (0993, FEUD, The Flighing Lady (1938, EEUU: [las de mi patria (199, rg Y mafana sera hom bres (19, Ang: Flecha de ovo (1980, Arg: Fraga Sarmiento (1940, An); Nosottos los muchachos (1940, Ar La casa de los euervs 1941, Arg) Una ver em la vida (194, Arg Yo conoct 2 esa er (1941, An); Cada hogar un mundo (982 Arg cer tidumbre (942, Arg); Un nuevo amanccer (182 ‘Ang La juventud manda (191, Ang): Walle negro (1983, Angie La werdadera victoria (094, Arg Vein cuatro horas de la vida de wna mer 158, Argh La lamarga verdad (194, Chie: Ceando enelcielo pasen lista (1945, Arg Exams seis (1945, Arg); Corazéa (a6, Ang Siete para un secreto (947, Arg Eta bor de Taeuati (198, Ang) Las aventoras de Jack (0949, Ang); La mere esti intend (1950, Arg) Volver a a vids (1950, Ang) El alma de for alos (QUSI, Arg El ealavera (954 Ag Mientras haya un eco (1958, Arg); Pabres babes sempre (1958, Ags oy a hablar de esperanza (1965, AB). Elena Goity Notas ‘claudio spat ‘Ni 198,12. Molis sgl de cine. Buenos Aes: ‘ine oficial | 425 Escaneado con CamScanner Entos est timo lesa to M mio Moret Kingy Cah Se ma Turbién 28-1 Bena Go cémplices, , 8 fuge para encontrar y “ ntrarlos y “hacer justicia” por m: ano propia, La pli, it ‘en dos bandos, adoy a Eres p adopta una actitus eine =. asi, dar con sus, ompaner El primer bande, dirighdo por Vergara, propane sobre todo, sgundo, liderado por Puente ros, convencido de que no s° praei fa wo So tof, panes yet oe conn eg ae veer 0 de la busqueda d y relegar al viejo investigador poll go a cualquier fe sus eémplices, Ernesto fa ire ar del Now, to final, la vid? aso posal (erie sit estaba la i arta ban que podia ex: Fe eae me milan sta on un a (Guillermo aah ee Se an ee | hasta llegar al je hacia | Pueblo de provinei pn none la verdad y la wincia, que informa s 6 , 5 bre un prosper? ls Dispel y Aso Olga a Ernesto lo ere) era un triéngulo de Sura otra polizona conocida en el tren donde buyer fers, inadaptados por un destino injusto- relcores™ i si asta conor a paren ellos se van co bloque. nfigurando Estos vinculos listen, @ poco, entre avanet lle entre ioe mieeat ee retrocesos: ros del grupo protagénie? Es caneado con CamScanner tos domas bandos, intagrados por las dos facciones policiales y por el viejo grupo de delin- ° a ce comportan constantemente en unidad monolit ee 7 Y que también tienen como cat comin of permanecer enfrentados simulténeamente con los protagonisas, reve amente, nos ballamos anto una pelicula do interés y con muchos puntos originales, La ea , a a ver varia por las zigzagueantes peripecias de la trama. Ota ver, eo- mbidn de Momplot, las vi ‘se don historia 5 ep on Turbién (1938) 1udes no son propias de los representan- re da lay. En datos, os ms facil observar ambiciones personales, colo profesional, fatig y juici gonarados por ef aici, quo interés en descubri I vardad, projuicios asi os supussoe maleantes, Ny Weslasapostads por los desongatos, an de a gaeac domi lrnbo do vo, un goin ismo que posiblemente sea et ccausante dot dramatico final. Emosto, suporfical delincvente que oculta la méscara de un personaje trigico, ha robado con ‘el propdsito de ayudar a un grupo de pobres ca Impesinos, expuestos al desalojo y a a miseria por las presiones de un banco que les habia otorgado créditos usurarios, Hurafio, hosco y re. tontido por aftos de prisiOn, sionte sed de venganza, pero no s6lo por un afin de justicia pe- ral; Io que més padece es su pérdida de ideales, de esperanza e iusién. Por eso se resiste sis. teméticamente ala felicidad: ya no eree tener algo para dar. Dominado por una intolerable sen- sacion de vacio, acomete con celo, casi profesional, la frenética persecucién de sus rivales, Alicia, por su parte, es una candida y confundida joven que vaga erréticamente, con tan poco porvenir como pasado, Su historia se construye en el mero presente y cuando finalmente tie- ne su oportunidad de amor, se ilusiona ingenuamente con un futuro venturoso. Desconfiada por excesiva credulidad y simuladora de una independencia y de una seguridad que no tiene, renace ante la dicha del amor y la amistad. Frente a ellos, el personaje interpretado por Enri- ‘que Santos Discépolo es el del delincuente simpatico, que se encarina con su amigo y no de- ja de ayudarlo y de darle buenos consejos. Es quien se encuentra con una mujer apropiada y, al reconocerlo, con habilidad, logre imponérsela; ubica los refugios, tiene contactos generosos ¥y cordiales, conoce el horario de los trenes, sabe sobre las marias de los polizones y est pre- sente o ausente, segiin se lo necesite. Y, también es cierto, no puede dejar de robar, aun cuan- do no lo necesite, o de hacer trampas en el juego. Actitudes absolutamente minimizadas, an- te los gestos anteriormente descriptos o frente al accionar de un delincuente como Riglos. Antonio Momplet reitera la busqueda del matiz, en un cine poco habituado a ellos. Al respec- to, debe tomarse en cuenta su obra precedente: Turbién. En Yo no elegi mi ida, construye uno de los films mas negros del policial vernaculo. Tras la matanza de Ernesto y Alicia, la verdad no es revelada, los culpables quedan impunes y de las. facciones policiales se impone la mas dura, liderada por un inescrupuloso investigador, com- petitivo y ambicioso. Tras el final, nada bueno queda, sélo una larga ndmina de muertos y una historia confusa que seguramente tendra una prolija versién oficial. Carlos Hugo Christensen, contracara de Romero Los policiales de Carlos Hugo Christensen en Lumiton representan la contracara de los de Ma~ ‘uel Romero. Los tres films que integran esta etapa -El angel desnudo (1946), La muerte camina en la Huvia (1948) y La trampa (1949}- asi lo demuestran. En particular, si se pien- 8a que, en 1949, Romero presentaba Morir en su ley, su titimo policial, que es el mas duro ¥ reaccionario, Frente a la policula de Romero, La trampa de Christensen es un melodrama con intriga policial, en donde Jo relevante no es la sucesién de acciones ni el aspecto norma~ tivo de la historia sino le creacién de un elima do suspenso logrado a partir de la elaboracion Psicologica de los personajes. En oposicién a Romero, en el cine de Christensen no importa el qué sino el cémo. En el film hay un asesino (George Rigaud) de mujeres solas, un escritor francés que vive en una isla del dolte del Parana y que, mediante avisos en los diarios, logra dar con incautas y adineradas sok Cin potelat | 427 Escaneado con CamScanner El angel desnudo Guillermo Battagis, Olga Zubarry teras. Frente a las escasas oportunidades de una ordenada y rutinaria vida citadina, laisley= rio son el marco ideal para la historia de una pasién o un romance. Ambos resultan sulter tes como para seducir a cualquier heroina (Zully Moreno), fomentar su arrebato y gene's! credulidad; sobre todo si el galan, aunque perfecto desconocido, es epuesto y despliegs mejores y més cuidadas maneras. En La trampa, nos alejamos del espacio paradigmatico del policial: la ciudad. Frente sels 8 isla, igual que el mar en El Angel desnudo, provee el ambiente propicio para lives 5 P siones y permitr que los personajes jueguen sus fantasias yjustamente po allo see al terror. En el lm, se presentan formas y momentos caractertaticos de cada uno ds 106 implicados. Almuerzos en restaurantes pintorescos o balls a luz do A ma}, primeros planos con mirada inquietante del sospechoso marido o panes = subjetiva en un desesperante recorrido por los bosques de la isle en los que $? we Otros, de mirada no atibuida (terror y,finalmente, comides con terceros, en donde Cn, bre se parodia ls deducciones de investigadores privadios ose proveen pists #1" ‘es que refuerzan el clima de sospecha (policial). ean baa én Lumiten, El angel desnudo, Elsa (Olga Zuber) (9M eee an Sélo que en este caso, la pasién es la de® sxe . tar (1oen Sey eaneatT0t8 Por ello, Elsa, como Luis Santana en SimMUEFO NT + San Miguell, debe enfrentar la figura cast demoniaca, represonteds t 5 tarnbién 5 fe porsu pat os cal Escaneado con CamScanner ‘Si muero antes de despertar Rodaje Maria Angélica Troneoso, cl director Carlos Hugo Christensen, Néstor Zavarce ante el enfrentamiento entre el angel y el demonio, la sobreimpresion es la figur te a 8 perso- hajes dol melodrama, asi como lo absurdo de sus actitudes cuando son observadas desde un oalista."” Fotontza a la vor la intonsidad expresiva, fa epartcipacién» que liga alos sores Fh sentido det drama. En el momento decisive, sobre un primer pla punto de vista En roalidad este film osté mds préximo al melodrama que al policial. La razén para inclirio aqui respond a que la historia se abre y se cierra con un flashback introducido por el padre de la vietima, quien tras asesinar al escultor, reconstruye la historia ante la policia. ¥ también, porque el tratamiento excluyente del policial puro no fue lo corriente en la produecién del di rector, salvo escasas excepciones. La muerte cami 1a on Ia Iluvia es una de ellas, junto al segundo relato de No abras nun- ca esa puerta. De todas maneras, aunque en La muerte camina en ta lluvia Christensen se circunscribe al género, lo hace bordeando, nuevamente, ol terror y la comedia negra. La his- toria es una investigacién policial donde se trata de descubrir al autor de una serie de asesina- tos que firma sus homicidios con el pseudénimo S. Lopez. La pesquisa conduce a une pensién del barrio de Palermo, que, como su nombre lo indica, Babel, esta pobleds por un grupo insé- lito y variopinto de personajes. La osadia del criminal, que asesina las noches de lluvia, se po ne atin més de manifiesto cuando mata a uno de los inquilinos recientes de la pensién, Carlos Hugo Christensen, que adapté junto a César Tiempo la novela de Stanislav Steeman ““Asesinatos en la niebla” juega de lleno con las convenciones del policial negro. Reaparecen las calles brumosas, los sospechosos personajes de impermeable, sombrero y gafas oscuras, los planos subjetivos atribuidos a la mirada del criminal que busca nuevas victimas y una es- tilizada puesta en escena “barroca”, realzada mediante el empleo de la luz. La fotografia de Al fredo Traverso, su constante colaborador en Lumiton, no alcanza, sin embargo, las estlizacio- nes extromas de Pablo Tabernero, en su etapa posterior de San Miguel. Cine pote 142 Escaneado con CamScanner Artistas Argentinos Asociados El orden singular: ae ‘donor en una clasificacién meas at so dan 62808 © ye puoden moneionarse figuran: : al ae cana vay con Edin extra (1940, de Mogia Barth, Ving rail a aon tt el uot Cag Mig : E nos Airos (1954) clo Enrique Cohen Salaberry. eis, eee va policial con EF hombre quo dobia una muerte (1954), de Maris g wel cee vratogica, con Los taltos amargos (1956), de Fernando Aya, offi, ga 2 el pono (95 co Lbn Klos. v EE racign de la produccién en Jos afios que van de 1951 a 1956, con ta tnica capa ps imate at il sors dl prodcn sada qeimprat nigger TEL Reunido el grupo fundador, conocido como ta Barra del Ateneo”, al que se suas” Gitados téenicos y, més tarde, con el apoyo financiero de Miguel y Narciso Machinanga” sires oe San Miguel, £8 propuso levar adelante un sello donde prevalcran betas una produccién de marcado carécter nacional. ee fms poliiaes de Artistas Argentinos Asociados s@ inician con El muerte fata ayy unde realizacin del francés Pierre Chenal en la Argentina. Un sho antes, Chea as ta, 50% para el mismo sello. filmedo el drama Todo un hombre, Uno de los rasgos més caractersticos y notorios de El muerto falta a la cita es, sane, te ysiguiendo los propdsitos de la compat, la imposibilidad de asemmejario a otros piss rocales realizados hasta el momento, La pelicula de Chenal inicia una linea de comea nega, poco frecuente en nuestro pais. £1 siguiente producto policial del sello es El pendiente (1951), de Leén Klimovshy Ese fx {que comparte con El muerto falta a la cita tener como Unico referente posible al vecsind genérico, se basa en un relato de la serie negra de William Irish.’ La siguiente produccién, Intermezzo criminal (1953), de Luis Moglia Barth, se instribe ens pardmetros de la comedia policial; y por ello, pone el acento en las peripecias investigivs protagonizadas por una figura de larga trayectoria en la sétira de géneros, Olinda Borin yro en cuestiones normativas 0 verosimiles del formato genético. Los cuatro policiales restantes representan una linea contraria, el polical documents BE cién extra (1949), de Moglia Barth, responde al tono de la crénica, Aunque incluido ene mbito dele fccién, continda el patron de los relatos “realistas” que se habian ines universalmente por entonces. Una suerte de alambicado neorreaismo impregn® sor general yal policial en particular, favorecido, en part, poral progreso wénio de Hse ras, mas livianas, que permitian rodar en las calles y aumentar el verismo tan buscado PH el cine policial ui El argumento del film articula una historia en la que el director de un presi Comprado mediante sobornos, induce a uno de sus periodistas més capeces vei ror contra un diputado que se opone 2 |2 P iene a que no 5° ‘montar una campaiia difamatori una ley, a todas luces perjudicial para los intereses del pais. Campati carts ot Siquiera frente al asesinato del politico. Del otro lado del puente (195 ioe oi {eure les motives sociales que generaban la detincuencis en! ican He 6 en Oe as carer anes Aires (1954), de Enrique Cahen Salaberry, film exe ig maradona corey bits dela comedia ye! melodrama-, plasma un poi urbano, #108 amorosos y enfrentamientos de pandillas. 420 | Ge cony Escaneado con CamScanner Escaneado con CamScanner olégico con brisi fas filmacas por Pierte Che Film, Se abre ef abisme Y n centralmente dr intos de poll= entra en Las dos pelicul nal para Pampa BE viaje sin regres mas psicoldgicos ¢ cial. En In primera, un caso de parricidio. re aie ’ de Pedro (Guiller- to mata y hace un ritencio. Los ejecutores del acle passano [b.D, & hie aado del ase- con eleme! Ia historia se soy In actitud desp ‘mo Battaglia, el padre, pacto de son Martin (Ricardo | varén, y Gregorio, un ¢ rradero familiar. Todos cerlo destrayen sus vidas. empl callan pero al hae Silvia ¢ Roth), una de las hijas, se casa con Eduar- do Casares (Sebastién Chiola), un brillante Abogado de buena familia, que es nombra~ do jucz a cargo de In investigacién de la ‘causa, Este descubre la verdad, el hecho por amor a renuncia al cargo y no denuncia su esposa, Su sucesor da por cerrada I ha prescripto el laine vestigacién, puesto que plazo legal. Sin embargo, la familia, que ha progtesado materialmente, y que ya no vir ve abochornada por las constantes humi- Ilaciones del padre, no puede aleanzar la id. La culpa y el temor, paz y la fel arruinan sus existencias. En El viaje sin regreso, la linea del drama psicol6gico se mantiene, sélo que ambienta- da en una lujosa estancia de Mendoza, Los licados centros de di- Copahues, y en sof versién porteia, La enmarafiada trama se centra en Ja relacién de una mujer, Isabel (Florence Marly) y dos hombres que dis- pputan su amor, Carlos (Francisco de Paula) y Fernando (Scbastisn Chiola). Ella elige por falta de confianza y no por amor a Car- los, de cuya muerte se acusa a Fernando, quien va a la cércel. Una vex liberado, por falta de pruebas, los ex enamorados reto- man la relaci6n, Pero, desde que lo hacen, el muerto es una presencia constante entre ambos. El complicado argumento fue escrito por Hugo Mac Dougall sobre una idea de Pie- tre Chenal. Lamentablemente, a este ras- 80 se sumé un diflogo con frases excesi- Yamente literarias y rebuscadas que tor- nan lenta la accién. Aunque la pelicula as de Francia | El policial psic ie we méritos en Ta flog waneis ; Cn Fart), In escenogratia Gregorio L6pen de pain . ruil, Saulo Henavente ¥ Alvaro Duran go (iggy) Mi te BO OH) ya yen ‘ona y Vedia) y el vestunrio (Olga Gori y comparativamente, este film bas, obras 6 Frill L008), ican les menor interés entre los realizades poreste Fin fa tinea del drama psicol6ico poll, cid deme debe ede pelfeutasen doje, ty etic ae EN Sil pcg gp a, Ins que, si recordamos la procedencia fran acti anes 4a pang tty, cosa de Chenal y de Daniel Vinayro, vemos de Carina de Bip que el origen extranjero de sus directores nies ta coopunyr et sin, es casi una constante. bros ett dent, Entre ellas debe incluirse Ultimo refugio Per HN Pata eh dingy oe, Bntre ellas debe incluirse Ultimo refugio Veruzen open stetidies” 8 Alva raf, (3940, primera produecion filmada en los Vadia en scan studios recientemente cxigidos por Bais Danza del epee cn Don Torcunte. El film comen6 siendo to de'Tinayre por ig 2, dirigido. por el francés Jacques Constant, complja.Sobreclann también autor del argumento, quien, por rloso André Legond a= . su impericia, fue sustituide por el nortea- mericano John Reinhardt. £1 tema del film, ‘como el de la mayorfa de los pertenecientes ‘a este grupo, es la culpa. En esta oportuni- dad, se trata de los remordimientos que su- fre un francés arruinado que, tras cometer un asesinato, se refugia en Cordoba. Alli, aunque vuelve a enamorarse, la culpa lo conduce casi hasta el suicidio. Aconsejado por un médico, se entrega a Ja policia. La opera prima de Alberto Dubois, Yo soy el criminal (1951), producida por S.LRA., tiene tun argumento de interesantes aristas: “Un psicépata le confiesa a un sacerdote varios Supuso era un pseudénin te reunir el nombre desu pty desu mujer y con a adenine ta del propio Tinayre se dikes mente, un melodrama psig Fla historia de Elena Vale cio certista de piano ques eras sin y se aleja de los hombres 22:2 tun aberrante episodio pede e's fancia: fue violada ene dese’ = ler del circo donde vii al sel niéticos compases de"La dunt cde Manuel de Fall El hcl cen una potencialaesna, pus == 16 cuando coincidan el devo eats crimenes. Después, temeroso de que éste no us cumpla con cl seecto de confesiGn y lo de-misca, El asesialo ies nuncie, intenta asesinarlo. Un periodista viejo noviosyo, sien PS que esta siguiendo los casos impide el asesi- _te, se orgaizan © ae halo y descubre que los crimenes no fueron flesibels de ls A i cometidos por el psicépata, aunque se Jos _sentante (¥ oculto vt ic adjudique. El enfermo va a parar aun insti- y lwege maridoy . tuto neuropsiquistrico, ahi mata aun médi- de la investiga ole ttl coy muereenfrentindose a la police"? _Zgzaguestl Oh yds Du Bois, que habia sido el asistente de di- 1a, scien oa reccién de Apenas un delincuente (1949), tnfos PUNT again continué trabajando en la vertiente del pose os diver a on Ticial. En 1954 realizé un mediometraje, pavileg@ Woy par Bs Horas marcadas, y el largometraje prota~ rite yo ni gonizado por Ricardo Trigo El asesino es- 4° Lie ienen 5 {4 en libertad, que no fue estrenado co- se fee? marta 8 mercialmente, Escaneado con CamScanner

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