FELICES LOS POBRES

Mateo 5:1-3

A. "Viendo la multitud, subió al monte; y sentándose, vinieron a él sus discípulos. Y

abriendo su boca les enseñaba, diciendo: Bienaventurados los pobres en espíritu,
porque de ellos es el reino de los cielos." (Mat 5:1-3)

1. Mateo introduce de inmediato al rey de reyes.

a. Su relato contiene la genealogía del rey, la anticipación profética del rey, el

anunciador del rey, la llegada del rey, la adoración del rey y ahora el discurso
del Monarca divino.

2. El Señor observa a las multitudes que venían a el.

a. Toda clase de personas venía al Maestro– enfermos, poseídos de

demonios, fariseos, saduceos, esenios zelotes, publicanos, escolásticos,
refinados, hombres ricos, mendigos.

b. En Cristo había una extraña atracción que no hacia caso de clases o

rangos.

3. Se sube al monte, se sienta, y sus discípulos le rodean. Les enseña a ellos con el
propósito que todos escucharan.

a. No importa cual es el monte, el un monte en la ciudad de Galilea.

b. El sentarse era la forma tradicional de los rabinos para enseñar.

c. Cuando Mateo dice que Jesús " abrió su boca," quiere decir un
coloquialismo en el griego – Se usa para describir declaraciones solemnes,
graves, dignas y serias de peso.

4. Abrió su boca para enseñar a esta gente porque al verles se quebranto su corazón
-  (Mat 9:36)  "Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban
desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor." Tenia compasión.

a. Cuando les vio hambrientos, les dio comida; cuando enfermos, los sano –
Mat. 4:23-25

b. Cuando vio el hambre espiritual en sus corazones, se extendió para darles

lo que sus espíritus necesitaban.

B. Para encontrar la felicidad divina, lo primero que tenemos que hacer es mostrar
una pobreza de espíritu, dice el Señor.
1. Es la primera bienaventuranza que comienza el Señor – ¿porque comenzar aquí?

2. Lo primero que debemos hacer es vaciarnos, es reconocer nuestra pobreza,

nuestra humildad, nuestra bajeza par ver Su gloria y su perdón.

3. "Abominación es a Jehová todo altivo de corazón; Ciertamente no quedará

impune." (Prov 16:5)

I. FELICES LOS POBRES

A. Dios no esta hablando de pobreza material.

1. La frase "en espíritu" debe de desaparecer toda duda.

2. Sin embargo, la pobreza del espíritu se compara como a un verdadero

pobre, no solo es pobre, sino es un mendigo espiritual.

3. Un error grande en el evangelismo sectario es ofrecer toda clase de bienes

materiales una vez que se conviertan en Dios. Muchos piden que les den para
ser bendecidos. Cristo no habla de pobreza material ni tampoco ofrece bienes
materiales si se allegan a el. Sus bendiciones primeramente son espirituales.

B. La palabra "pobre" viene del griego Ptokas, un sustantivo que significa pobre en los
bienes de este mundo; un mendigo, desesperadamente avergonzado hasta el punto
de no permitir su identidad sea conocida.

1. En la Biblia, hay otras palabras para una pobreza normal – penace, la cual
significa que se es tan pobre que se tiene que trabajar para mantener la vida.

2. Ptokas quiere decir que es tan pobre que tiene que mendigar, mientras que
penace significa que puede sustentar su vida.

3. Ptokas es no tener recursos por si mismo, ni aun para vivir – Significa que
usted es totalmente dependiente de otra persona. (Lucas 14:13,21)

4. Jesús dice – este es un hombre feliz.

5. El que esta vació, pobre y desvalido – pero en espíritu.

II. EN ESPIRITU

A. Se refiere al hombre interior, no al cuerpo físico.

 1. El mendiga en su interior, como dice Dios - (Isa 66:2) - "Mi mano hizo todas
estas cosas, y así todas estas cosas fueron, dice Jehová; pero miraré a aquel
que es pobre y humilde de espíritu, y que tiembla a mi palabra."

2. (Sal 51:17) -  "Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; Al corazón

contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios. "

3. (Sal 34:18) -  "Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; Y salva

a los contritos de espíritu."

B. Dios se identifica con personas que mendigan en su interior, con personas que no
son autosuficientes, que se consideran en pecado y por si mismas no pueden
salvarse. Lo opuesto es el orgullo, como el de los fariseos - (Luc 16:15) -  "Entonces
les dijo: Vosotros sois los que os justificáis a vosotros mismos delante de los hombres;
mas Dios conoce vuestros corazones; porque lo que los hombres tienen por sublime,
delante de Dios es abominación.".

1. No significa pobre en el sentido de falta de entusiasmo o indiferente o

pasivo.

C. Este es el inicio para ser feliz.

1. Definitivamente no es lo que el mundo espera. El mundo dice – "Imponte, se

orgulloso de ti mismo, hazte un lugar en este mundo." Mas dice Jesús que
cuando usted admite su debilidad, cuando usted admite su insignificancia,
usted empieza a recibir la gracia de Dios.

2. Si usted no esta dispuesto a aceptar su pecado no podrá alcanzar la

felicidad divina.

D. Ejemplos - Lucas 18 describe la mejor ilustración del contraste entre el hombre

contrito y el orgulloso. Es la historia del Fariseo quien estaba orgullosos de su justicia
y del Publicano quien suplicaba la misericordia de Dios. Lucas 18: 9 – 14.

1. No encontrara otra explicación más clara.

a. Felices son aquellos cuyos espíritus están destituidos, que

reconoces sus faltas y se acercan a Dios buscando perdón.

b. Ellos son los felices porque son los únicos que verdaderamente
conocen a Dios. De ellos es el reino – allá y entonces – aquí y ahora.

c. Lo mismo lo dice Santiago (4:10) - "Humillaos delante del Señor, y él

os exaltará." ( Stg 4:10)
 d. En contraste, la actitud del Fariseo representa la soberbia porque no
reconoce su enfermedad  -  (Luc 5:31) - "Respondiendo Jesús, les dijo:
Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los
enfermos."

2. En algún tiempo debo reconocer que mi pecado me esta arruinando,

acercarme a Dios arrepentido y pedirle perdón diciendo como el publicano  –
"se propicio de mi porque soy pecador."

3. Es lo que reconoció el hijo que vivió perdidamente - (Luc 15:17-19)  "Y

volviendo en sí, dijo: ¡Cuántos jornaleros en casa de mi padre tienen
abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre! Me levantaré e iré a mi
padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti. Ya no soy digno
de ser llamado tu hijo; hazme como a uno de tus jornaleros."

a. Esto es ser pobre en espíritu.

b. Acercarnos a Dios reconociendo nuestro pecado y arrepentidos – sin

demandas y dispuestos a someternos bajo la voluntad de Dios.

c. No merecemos nada  --- "Hazme como a uno de tus jornaleros."

4. Ser pobre en espíritu es estar tan desesperado de acercarnos a Cristo como

aquel que dejaría cualquier cosa por solo llegar a Cristo.

a. Thomas Watson dijo – "un castillo que por largo tiempo ha sido
sitiado y esta listo para ser tomado hará entrega en cualquier termino
para salvar su vida. Aquel cuyo corazón ha sido una guarida para el
diablo y ha mantenido una larga oposición en contra de Cristo, una vez
que Dios le ha conducido a la pobreza de espíritu y se ve a si mismo
condenado por su pecado, deja a Dios prosperar, deja a Dios ofrecer, y
simplemente dirá: Señor, ¿qué quiere que yo haga?"

E. Debemos mostrar esta característica aun cuando estemos en el reino.

1. Las bienaventuranzas no solo son las condiciones para entrar al reino sino
también cuando este dentro del reino debo mostrarlas.

2. David peco, pero reconoció su mal y se convirtió en un bancarrota espiritual

-  (Sal 51:1-3) - "Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia;
Conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones. Lávame más y
más de mi maldad, Y límpiame de mi pecado. Porque yo reconozco mis
rebeliones, Y mi pecado está siempre delante de mí."
 a. Notese el versículo 17  - "Los sacrificios de Dios son el espíritu
quebrantado; Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh
Dios." (Sal 51:17)

III. PORQUE DE ELLOS ES EL REINO DE LOS CIELOS.

A. El maestro vino proclamando el mensaje del reino – Mat 4:17. Ahora lo esta
revelando a sus oyentes – Si ellos preguntaran – Quienes son sus ciudadanos y que
beneficios tienen? Cristo ahora les responde: Son los pobres en espíritu y de ellos es
el reino de los cielos.

1. Es de ellos solamente, a ellos les da gracia y gloria – porque ellos se han

acercado en espíritu contrito.

2. Notemos la bendición que recibió el hijo perdido -  "Y levantándose, vino a

su padre. Y cuando aún estaba lejos, lo vio su padre, y fue movido a
misericordia, y corrió, y se echó sobre su cuello, y le besó. Y el hijo le dijo:
Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, y ya no soy digno de ser llamado
tu hijo. Pero el padre dijo a sus siervos: Sacad el mejor vestido, y vestidle; y
poned un anillo en su mano, y calzado en sus pies. Y traed el becerro gordo y
matadlo, y comamos y hagamos fiesta; porque este mi hijo muerto era, y ha
revivido; se había perdido, y es hallado. Y comenzaron a regocijarse." (Luc
15:20-24)

3. Esta bendición solo se puede recibir cuando nos acercamos arrepentidos

como este hijo que volvió.

4. De otra manera, si nuestro orgullo se interpone, no podremos ser

bendecidos en su reino

B. Conclusión:

1. Todos sabemos que hemos pecado, que nuestro pecado nos ha conducido
lejos de Dios (Isa 59:1-2), pero no todos lo aceptamos.

a. Podemos justificarnos como el Fariseo – no soy tan pecador como

los demás...

b. La realidad es que somos pecadores - "Porque tú dices: Yo soy rico,

y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes
que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo. Por
tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para
que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra
 la vergüenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para que
veas." (Ap 3:17-18)

2. ¿Estamos dispuestos a convertirnos en pobres en espíritu?

3.  Cuando Pedro predico a la multitud acerca del Mesías, ellos mostraron un
corazón contrito e hicieron una pregunta dando a entender que estaban
dispuestos a hacer todo lo necesario. Ellos mostraron que fueron pobres en
espíritu -   "Al oír esto, se compungieron de corazón, y dijeron a Pedro y a los
otros apóstoles: Varones hermanos, ¿qué haremos?" 

4. La respuesta fue --  " Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el

nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del
Espíritu Santo." (Hch 2:38)

5. Vuélvanse pobres en espíritu para entrar al reino - "Bienaventurados los

pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos." (Mat 5:3)

A. Serrano