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Te encuentras en casa, es invierno y está nevando.

Tu esposa y tus hijos no están,


completamente solo. Lo único que llega a hacer ruido son tus pensamientos
carcomientes, dolorosos y llenos de nostalgia. Piensas que esos sentimientos jamás
van a irse y has aceptado el martirio de vivir con ellos por el resto de tu vida. Lo que no
sabes es que eso está a punto de cambiar de la forma más extraña pero curiosamente
sanadora que llegaras a imaginar.

La película "La cabaña", narra el proceso emocional por el que va atravesando el


personaje principal "Mackenzie" a partir de un suceso muy doloroso que marco su vida
para siempre.

Este es un hombre que creció en una familia con costumbres católicas, pero que tenían
serios problemas dentro de su relación y convivencia. Esto causó muchas heridas en
Mack, principalmente en la relación que tenía con su padre, quien solía abusar
físicamente de Mack y de su madre. Esto hizo que Mack viera a la figura de Dios como
algo irrelevante que no hacía a su vida ni mejor ni peor.

Cuando Mack forma su propia familia, busca ser un mejor padre y esposo, sigue
practicando la religión, pero no parece que le importe realmente si no que más bien
solo sigue la "costumbre".

Un día decide salir con sus tres hijos de campamento, donde finalmente pierde a su
hija menor durante un incidente en el lago.

Es aquí donde empezamos a observar las distintas fases del duelo por las que va
pasando el personaje.

Comienza con la etapa de negación, en la que no es capaz de creer que ha perdido de


vista a su hija, la busca por todos lados, llama a la policía y no aparece por ningún lado.
Esta etapa va acompañada de emociones como desesperación, shock, angustia en el
caso de Mack

Cuando es llevado al lugar donde la policía encuentra evidencia de que efectivamente


Missy a muerto, Mack experimenta una oleada de ira y la expresa con un fuerte grito
que llega a transmitir toda la furia y el dolor de la pérdida y es aquí donde finalmente se
convence de la muerte de su hija, algo así como un golpe de realidad y caída de las
escasas esperanzas que pudiera tener de que Missy siguiera con vida. Esta es la etapa
de regresión dentro de las etapas de duelo de Jorge Bucay.

Ahora que Missy ya no está, la familia se enfrenta con su nueva realidad, de que han
perdido a uno de sus miembros y siendo conscientes de su ausencia, es algo con lo
que ahora tienen que vivir. Cada integrante de la familia a afrontado la pérdida de
maneras distintas.

Los hijos Kate y Josh tienen maneras distintas de vivir con la pérdida. Josh se ha
sentido triste pero pronto ha vuelto a seguir con su día a día, pareciera que esta todo
bien, pero ha estado escapándose de casa y mintiéndole a su papá, como si algo en la
confianza hacia su padre se hubiera perdido.

En cuanto a la hija, ha estado pasando por una profunda culpa de la que no se permite
salir. Tal vez porque cree que se lo merece. Esto se ha visto reflejado en su
personalidad y sus actitudes, ahora viste de negro, ya no sonríe, casi no habla, se ha
ido apartando de su familia poco a poco. Todo por la culpa que ella misma se ha
impuesto, ya que nadie en absoluto la ha culpado nunca.

La madre, Nan, está tratando de ser el apoyo que sus hijos y su esposo necesitan. Ella
no le guarda rencor a nadie por la muerte de su hija, pero de cierta forma se ha
abstenido de expresar y dejar salir su tristeza y su dolor para no crear un ambiente
triste en su familia. Probablemente esto no le esté permitiendo cerrar su ciclo del duelo,
a pesar de que durante toda la película se le ve como quien mejor mantiene la
"compostura".

En cuanto a Mackenzie, la pérdida de Missy le ha dejado un hueco en el corazón, una


herida que con el tiempo solo se ha ido haciendo más profunda y dolorosa. Nada
puede hacerlo sentir mejor, es como si estuviera muerto en vida. Su esposa a tratado
de animarlo llevándolo a la iglesia y diciéndole que le pida ayuda a Dios y que sane sus
heridas, pero para Mack Dios no significa nada.

La película muestra el desprecio y desconfianza que Mack tiene hacia Dios, el está en
una constante lucha del porque si Dios es tan bueno, dejo que Missy muriera. Está
buscando a quien culpar porque en el fondo el siente que es culpa suya pero no es
capaz de aceptar eso tampoco, así que culpa a Dios. Etapa de la furia

Y es en este punto de la película que Mack empieza a conocer su duelo.

Mack sale a la nieve hasta su buzón. Encuentra una carta, una invitación a un lugar del
pasado, enviada por: "papá" dos años después de la perdida.

"Papa" era el nombre que usaban Mack, su esposa y sus hijos para referirse a Dios. En
este punto Mack experimenta la confusión e incredulidad, lo cual cambia rápidamente a
molestia, impotencia y hasta un poco de tristeza por aquello que él consideraba una
broma cruel.

Finalmente va a la cabaña, donde experimenta un ataque de ira al observar la sangre y


el vestido de Missy en el suelo. Esta furioso y espera encontrarse con el asesino de
Missy porque sólo ha ido con el único fin de acabar con él (fase de regresión). En
medio de su episodio se encuentra con un hombre quien logra persuadirlo de que lo
acompañe. En el camino todo el ambiente empieza a cambiar; ya no es invierno, hace
calor, los árboles están verdes y las flores se abren a los rayos del sol. Llegan a una
cabaña en medio del bosque donde conoce a las tres entidades que ayudarían a Mack
a dejar atrás todo el sufrimiento.

Las entidades se presentan como Papá, Jesús y Sarayu. Mack sabía bien quienes
eran, aquellos de quienes siempre le habían hablado y tratado de convencer que eran
el camino a la felicidad. Al conocerlos, a Mack lo inunda una profunda tristeza, lo cual
es extraño porque les había estado guardando rencor por mucho tiempo.

Estas entidades tratan de hacerlo sentir en “casa”, diciéndole que lo aman y que puede
volver a ser feliz. A Mack esto claramente le molesta. ¿Cómo es posible que él perdone
a quien mató a su propia hija?, y más aún, ¿cómo es que DIOS le pide que haga eso?
¿Por qué no mejor hizo algo para salvar a Missy en ese momento?, ¿por qué dejó que
alguien inocente sufriera una muerte tan horrible?, ¿por qué si él es tan bueno y dice
amar a todos, deja que sus amados sufran? Entonces Papá no es bueno ni vale la
pena tratar de tener una buena relación con él, porque de todos modos vas a sufrir.
Esa es a conclusión a la que ha llegado Mackenzie y de esa forma él ha juzgado a Dios
y se encargó de hacérselo saber mientras estuvo en la cabaña con él. De alguna forma
estaba desahogándose, culpándolo.

Por momentos Mack escuchaba lo que alguno de los tres tenía que decirle e intentaba
entender, pero de nuevo recaía en las emociones negativas que no le permitían
avanzar.

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