El reino y el intruso

El reino era genial, su nombre era utopía ya que las plantas estaban tan sanas que podían realizar
cada día la fotosíntesis, aprovechando hasta el último rayo de luz.

La energía podía percibirse desde el interior de la Tierra, las bacterias contentas, aprovechaban
hasta el último regalo de la tierra para producir azúcares, usando la energía producida por los
habitantes, ya que al ellos arar y cuidar la naturaleza regresaban en cierta forma los regalos de la
naturaleza.

Todos los habitantes del reino, contribuían de manera natural transformando la energía, todo era
aprovechado en ese fabuloso reino, los nutrientes de las plantas los comían, los insectos, los
animales como los sapos y ranas, lagartijas y pájaros comían esos insectos, éstos a su vez eran
ingeridos por serpientes, las cuales eran un platillo delicioso para búhos, águilas y halcones
quienes a su vez se veían constantemente acorralados por los leones u otros animales más
grandes y feroces, manteniendo aquél hermoso paraíso equilibrado.

Un día un terrible ser extraño apareció, nadie sabía lo que era, algunos lo comparaban con una
jirafa por su altura y otros con un alienígena a pesar de que nunca vieron uno, el extraño ser
arraso con el reino, dejando así a todos sin energía ya que al no poder trabajar la tierra esta dejo
de dar los tan preciados regalos y esto paso, ya que talo árboles y construyo un gran muro para así
quedarse toda la energía para él, abarcando casi todo el reino, no importaba que hicieran el ser
siempre los dejaba sin menos energía, hasta que un día el ser sufrió un accidente quedándose así
sin energía para él ni para los animales y bacterias.

Moraleja:

Cuida la energía no solo la desperdicies y piensa solo en ti, ya que la energía es de todos y si no se
cuida simplemente se agotará, siendo un cambio irreversible