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Ojalá estuviera festejando tu cumpleaños, ojalá estuviera escribiendo tu carta de amor (y

mira que lo intente eh) pero en este momento lo único que siento es enojo. Enojo porque
vos, la persona que más quiero en el mundo, no podes estar feliz, no podes contestar
mensajes de cumpleaños, no podes estar abrazando a tu familia, no podes estar apagando
las velitas, ni estar recibiendo tus regalos, no podes tener un feliz cumpleaños (que, a
propósito, era la fecha que más te gustaba).

Y no, no podes, no te dejaron, porque un grupo de personas decidió cuando iba a terminar
tu vida, decidieron que no ibas a poder seguir festejando ningún cumpleaños más,
decidieron arrancarte de al lado mío, de tu familia, de tus amigos. Ese mismo grupo decidió
que no ibas a poder tener un futuro, tu carrera de abogado (o profe de educación física,
nunca se sabe), decidieron que no ibas a poder casarte, tener hijos, viajar, tener nietos,
básicamente vivir la vida.

También decidieron arruinar nuestra lista, porque nos quedó pendiente: tirarnos de
paracaídas, ver el amanecer con un fogón en la playa, sentarnos a ver fuegos artificiales,
ver el atardecer en un lugar donde el sol se esconda en el horizonte, ir a rush (las camas
elásticas), dormir en carpa en el patio de mi casa un día de mucho frio, dormir en el pasto
en verano viendo las estrellas, bailar tango en la playa, viajar a Tandil, plantar un árbol, ir
disfrazados a ver una peli, dejar algo nuestro arriba de una montaña, ir a la cueva esa de
los enamorados a poner nuestros nombres, probar más restaurantes de comidas raras y
muchas muchas cosas más.

Hoy no podes festejar nada, porque te robaron la oportunidad de todo. No puedo evitar
sentirme enojada, y estoy con todo el derecho de estarlo. Porque en este momento solo
siento odio. Odio por esos que no te dejaron seguir. Porque de todas las personas te
eligieron a vos, porque te pegaron hasta el cansancio, porque sufriste lo que nadie tiene que
sentir, porque te arruinaron de la manera más violenta, porque todo esto se pudo haber
evitado y hoy vos estarías recibiendo mi regalo sorpresa de cumpleaños y estaríamos
recordando que hace un año, yo te estaba pidiendo perdón por llegar tarde y te llevaba una
bolsa verde que adentro tenía 2 regalos, que en este momento los miro y no puedo evitar
llorar, estaríamos recordando como tu mama y la hermana de Mati nos vieron abrazados en
la plaza y yo me puse roja de vergüenza, o como nos peleábamos porque yo no quería que
abrieras mis regalos adelante mío, podríamos recordar como esa carta cambio todo y como
ese cuadro con fotos que pusiste en tu mesita de luz me hizo la persona mas feliz del
mundo.

Esto no tendría que ser así, esta todo mal, todo mal en nuestras vidas. Tal vez si
entendieran el dolor que sentimos, la angustia en el pecho, la falta de aire, la desesperación
de no estar con la persona que mas queremos, tal vez y solo tal vez, se pondrían en nuestro
lugar y no se, harían algo, ALGO para intentar arreglar todo esto y darnos un poquito mas
de paz. Lo que te hicieron es irreparable, arruinaron todo a su paso. Esos chicos que «son
jóvenes y solo querían divertirse», se divirtieron con el dolor y el sufrimiento ajeno. Esos
chicos que «no lo quisieron hacer», lo hicieron de todos modos, y habiendo querido o no, el
resultado es el mismo: te mataron. y permitime decir que, aunque no lo hayan querido
hacer, de lo que si estoy segura es que te quisieron reventar hasta dejarte en el piso y usar
tu cabeza de piñata, y perdón, pero eso, no habla de buenas personas.
Espero que donde estés, el tiempo siga pasando y puedas festejar, y si no es así, acá
vamos a estar nosotros (no festejando tu cumpleaños porque la realidad es que no
podemos) pero si festejando el día en que empezó, lo que hasta el 18 de enero del 2020 iba
a ser, tu hermosa vida.

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