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ORANDO SEGÚN LA VOLUNTAD DE DIOS

1 Juan 5:14

“Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él
nos oye. Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las
peticiones que le hayamos hecho”

Orar es hablar con Dios, eso lo sabemos. Sin embargo muchas veces nos frustramos, nos
cansamos y dudamos de lo que pedimos al Señor a través de la oración. Al orar muchas veces no
sabemos que decir, ni como conectar con nuestro Padre Celestial, esto hace difícil el que nuestras
oraciones sean efectivas e incluso contestadas. La Biblia nos da muchas pautas sobre lo que
debemos tomar en cuenta para que al orar podamos encontrar respuestas en Dios.

Hay muchos obstáculos cuando oramos, las dudas, el cansancio, el pecado, el enojo, la falta de
perdón, el no disponer de un lugar apropiado para orar, los pensamientos sucios o negativos, o
simplemente no saber que decir o que pedir, pero hoy nos vamos a enfocar en aprender como orar
de acuerdo con la voluntad de Dios.

Veamos lo que la Biblia dice al respecto:

I. En el Padre Nuestro Mateo 6:10 Jesús hablo sobre la Voluntad de Dios “ Hágase tu
voluntad, como en el cielo, así también en la tierra ”
1. La voluntad de Dios es todo aquello que obedece o cumple con el propósito divino
para el cual nosotros podamos honrar y agradar a Dios en lo que pedimos.
a) Jesús todo lo que pidió a su Padre se lo concedió porque era para
agradarle y honrarle a Él. (Juan 6:38; 4:34; 5:30)
2. Esta es la misma confianza que debemos tener nosotros al orar, Jesús sabia que
su Padre le escuchaba porque todo lo que pedía era para cumplir con los planes de
su Padre. (Juan 11:42)

II. El Apóstol Juan también no los dice con las palabras que escribió: “ Y esta es la confianza
que tenemos en el”
1. Confiar en las promesas de Dios es crucial para que nuestras oraciones sean
escuchadas. (Hebreos 4:16)
2. Si Dios ha prometido el lo cumplirá, muchos siervos del Señor sabían que si hacían
lo que Dios les había dicho a través de sus profetas Dios cumpliría a sus
promesas. (2 Crónicas 6:4; Deuteronomio 23:23; Números 23:19)
3. Las promesas de Dios son el Si y en el amen, esto nos da la seguridad que el
cumplirá lo que prometió. (2 Corintios 1:20)

III. Si Pedimos alguna cosa conforme a su voluntad el nos oye. 1 Juan 5:14
1. Cosas que son la voluntad de Dios.
 La Salvación de nuestra alma y de los demás
 La felicidad y satisfacción del hombre
 Las pruebas en nuestra vida
 El éxito en todas las áreas de nuestra vida, laborar, espiritual, emocional,
familiar.
 Tener salud es una facultad que pertenece a la voluntad de Dios. (3 Juan
1:2)
2. Todo lo que pidamos y sea conforme a estos propósitos podemos estar seguros de
que él nos oirá. (Salmos 32:6)
3. Hay cosas por las cuales no estamos seguros si son la voluntad de Dios, pero de
igual manera debemos orar para comprobar si es su voluntad. (Romanos 12:2)
 Si vas a cambiar de trabajo
 Si tienes que hacer un viaje
 Si la persona con la que deseas estar es la correcta
4. Casi siempre cuando no hay respuesta de Dios o no sentimos paz respecto a
alguna cosa que pedimos en oración es probable que no sea la voluntad de Dios.
La voluntad de Dios es agradable y perfecta.

IV. Y si sabemos que él nos oye en cualquier cosa que pidamos, entonces tenemos las
peticiones que la hallamos hecho.
1. Un hombre o una mujer que entiende esto, no estará afanada. Filipenses 4:6
 A veces pretendemos que las cosas sucedan por el producto de nuestro
esfuerzo o trabajo, sin embargo el que camina por Fe, no estará limitado a
su trabajo o a lo que dependa de él, sino que sabe que Dios abrirá caminos
donde no los hay.
2. Podemos descansar en que Dios responderá a nuestro clamor. Jeremías 33:3
 Hoy en día la falta de confianza y descanso en Dios nos enferma, nos
daña, nos limita, nos hace perder la bendición.
3. Vamos a estar seguro de que tarde o temprano el Señor nos sorprenderá por lo
cual estaremos expectantes y con gran gozo de que el conoce nuestras
necesidades y que el responderá. Mateo 6:8; Mateo 6:32

CONCLUSION

Podemos pensar que al orar Dios cumplirá algún día lo que le pedimos, pero esto puede demostrar
que no hemos entendido bien que al orar debemos hacerlo conforme a las cosas que son
agradables y perfectas delante de él, es por eso que mientras clamemos por el beneficio que honre y
glorifique el nombre de Dios, estaremos seguros y confiados que Dios proveerá conforme a sus
riquezas en Gloria. Filipenses 4:19

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