Viernes 19/8

2022
El Espíritu Santo

Deidad
1. IMPORTANCIA

¿EMOCIONES?

¿O FRUTO?
LA PERSONALIDAD DEL ESPÍRITU SANTO
Heb.: rúaj Gr. Pneuma
aliento o viento

NO ES: Influencia, Energía, Fuerza

ES: Una Persona
1. Intelecto – (Conoce, enseña)
Jn 14:26, 15:26, Ro 8:16
2. Emociones – (Se entristece, cela, ama)
Isa 63:10, Ef 4:30, Sgo 4:5
3. Voluntad – (Obra, crea, sostiene, prohíbe, guía)
Hch 16:7, 1 Co 12:11
LA DEIDAD DEL ESPÍRITU SANTO
LA DEIDAD DEL ESPÍRITU SANTO
A. Tiene los mismos atributos divinos
1. Omnisciencia – 1Co.2.11-12
2. Omnipresencia – Sal.139.7
3. Omnipotencia – Job 33.4
4. Dador de vida – Ro.8.2
5. Verdad – 1Jn.5.6
5. Santidad – 1Jn.2.20
7. Sabiduría – Isa.40.13
LA DEIDAD DEL ESPÍRITU SANTO
A. Sus nombres: Espíritu; Espíritu de Dios; Espíritu
de Jehová, del Señor, del Padre, de Jesús, de
Cristo, del Hijo Espíritu Santo, Consolador, de
vida, de adopción, de verdad, de santidad, de
sabiduría, de fe, de amor, de revelación, de
poder, de gracia, de gloria.

Se le dan nombres divinos: Ex 17:7 vs Heb 3:7-9,

Hch 5:3-4, 2Tim 3:16 vs 2Pe 1:21.
La doctrina de la Procesión
- Es un dogma de fe expresado en varios credos: Niceano,
de Atanasio, Conf. de Westminster, etc.

- Conf. Westminster (Igl. Reformadas – Presbiterianas):

“En la unidad de la deidad hay tres personas de
la misma substancia, poder y eternidad: Dios el
Padre, Dios el Hijo, y Dios el Espíritu Santo. El
Padre no es engendrado ni procede de nadie; el
Hijo es eternamente engendrado del Padre; el
Espíritu Santo procede eternamente del Padre y
del Hijo desde toda la eternidad”.
La doctrina de la Procesión

- Procedencia del Espíritu Santo:

Juan 15.26
Del Padre
Del Hijo
Del Padre y del Hijo
La doctrina de la Procesión
Este orden no tiene que ver con conceptos como:
- Dignidad de esencia (es engendrada la Persona, no la
esencia)
- Prioridad de tiempo (son igualmente eternos. El Padre
no lo sería sin el Hijo – Jn.1.1; 10.30)

Tiene que ver con un orden lógico de derivación.

Generación y procesión tienen lugar en el Ser divino e
implican:
- Subordinación en el modo de subsistencia personal
- Pero no en la posesión de la esencia divina.