Está en la página 1de 3

Convenciones por la UNESCO

Convención sobre la protección y promoción de la diversidad de expresiones


culturales (París, 20 de octubre de 2005).m
La protección y la promoción de la diversidad de las expresiones
culturales presuponen el reconocimiento de la igual dignidad de todas
las culturas y el respeto de ellas, comprendidas las culturas de las personas
pertenecientes a minorías y las de los pueblos autóctonos.
presuponen el reconocimiento de la igual dignidad de todas las culturas y el
respeto de ellas, comprendidas las culturas de las personas pertenecientes a
minorías y las de los pueblos autóctonos
Convención para salvaguardar el patrimonio cultural inmaterial 2003
La Convención de 2003, que es el primer instrumento multilateral vinculante para
la salvaguardia del patrimonio cultural inmaterial, está basada en los acuerdos
internacionales, las recomendaciones y las resoluciones existentes en materia de
patrimonio cultural y natural.
Considerando la importancia que reviste el patrimonio cultural inmaterial, crisol de
la diversidad cultural y garante del desarrollo sostenible, como se destaca en la
Recomendación de la UNESCO sobre la salvaguardia de la cultura tradicional y
popular de 1989, así como en la Declaración Universal de la UNESCO sobre la
Diversidad Cultural de 2001 y en la Declaración de Estambul de 2002, aprobada
por la Tercera Mesa Redonda de Ministros de Cultural.
Declaración universal sobre la diversidad cultural 2001
Artículo 1 La diversidad cultural, patrimonio común de la humanidad.
La cultura toma diversas formas a través del tiempo y del espacio.
Esta diversidad se manifiesta en la originalidad y la pluralidad de identidades que
caracterizan los grupos y las sociedades que componen la humanidad.
Fuente de intercambios, innovación y creatividad, la diversidad cultural es, para el
género humano, tan necesaria como la diversidad biológica para los organismos
vivos. En este sentido, constituye patrimonio común de la humanidad y debe
reconocerse y consolidarse en beneficio de las generaciones presentes y futuras.
convención de la unesco sobre la protección del patrimonio cultural.
La preservación in situ del patrimonio cultural subacuático deberá considerarse la
opción prioritaria antes de autorizar o emprender actividades dirigidas a
ese patrimonio. 6. El patrimonio cultural subacuático recuperado se depositará,
guardará y gestionará de tal forma que se asegure su preservación a largo plazo.
En los últimos 20 años, la Convención de 2001 ha conseguido mejorar
significativamente el estudio y la protección del patrimonio subacuático al fomentar
la cooperación internacional, el intercambio de conocimientos y la promoción de
las mejores normas. A partir de la adopción de la Convención, la UNESCO ha
apoyado su aplicación organizando talleres de capacitación en todo el mundo.
Más de 500 participantes han recibido formación en arqueología subacuática,
conservación y gestión de este patrimonio único. La Convención de 2001 ha sido
ratificada por más de 70 Estados y ahora cuenta con el apoyo de una amplia red
de asociados, entre los que se encuentran ONG, universidades y centros de
investigación, así como autoridades nacionales, museos e instituciones. Estos
asociados trabajan mano a mano con la UNESCO y los Estados Partes en la
Convención para promover y aplicar la Convención y su Anexo, que se reconoce
como norma científica de referencia dentro de la disciplina de la arqueología
subacuática.
Convención de la unesco sobre la protección del patrimonio natural.
La Conferencia General de la Organización de las Naciones Unidas para la
Educación, la Ciencia y la Cultura, en su 17a, reunión celebrada en París del 17
de octubre al 21 de noviembre de 1972. Constatando que el patrimonio cultural y
el patrimonio natural están cada vez más amenazados de destrucción, no sólo por
las causas tradicionales de deterioro sino también por la evolución de la vida
social y económica que las agrava con fenómenos de alteración o de destrucción
aún más temibles, Considerando que el deterioro o la desaparición de un bien del
patrimonio cultural y natural constituye un empobrecimiento nefasto del patrimonio
de todos los pueblos del mundo, Considerando que la protección de ese
patrimonio a escala nacional es en muchos casos incompleto, dada la magnitud de
los medios que requiere y la insuficiencia de los recursos económicos, científicos y
técnicos del país en cuyo territorio se encuentra el bien que ha de ser protegido,
Teniendo presente que la Constitución de la Unesco estipula que la Organización
ayudará a la conservación, al progreso y a la difusión del saber, velando por la
conservación y la protección del patrimonio universal, y recomendando a los
interesados las convenciones internacionales que sean necesarias para ese
objeto,
Convencion sobre las medidas que deben adoptarse para prohibir e impedir la
Importación, La Exportación y la Transferencia de Propiedad Ilícitas de Bienes
Culturales de 1970, comúnmente conocida como Convención de la UNESCO
1970, se redactó. 
Es la pionera y la convención internacional más ampliamente ratificado que existe
sobre el tema del tráfico ilícito de bienes culturales. La Convención establece
claramente que "la exportación y la transferencia de propiedad de bienes
culturales que resulten directa o indirectamente de la ocupación de un país por
una potencia extranjera se considerarán ilícitas".
En él se definen las medidas preventivas Estados Partes deben adoptar, incluso:
la creación de inventarios, certificados de exportación, vigilancia del comercio, la
imposición de sanciones penales o administrativas, y campañas educativas.;
convencion de la haya para la proteccion de bienes culturales
La Convención fue adoptada al mismo tiempo con un protocolo destinado a prevenir
la exportación de bienes culturales de un territorio ocupado, y exige el retorno de
dichos bienes al territorio del Estado de donde fueron exportados.

Para la UNESCO la conservación del patrimonio cultural representa una gran


importancia para todos los pueblos del mundo y que conviene que ese patrimonio
tenga una protección internacional.  Los daños ocasionados a los bienes culturales
pertenecientes a cualquier pueblo constituyen un menoscabo al patrimonio cultural
de toda la humanidad, puesto que cada pueblo aporta su contribución a la cultura
mundial.

Se consideran bienes culturales, muebles o inmuebles, aquellos que tienen gran


importancia para el patrimonio cultural de los pueblos, como los monumentos de
arquitectura o de historia, los campos arqueológicos, las obras de arte, los libros, y
los edificios cuyo destino principal y efectivo sea contener bienes culturales.

También podría gustarte