El fin de una etapa y comienzo de una nueva

Para empezar me siento muy contenta al dirigirme a todos ustedes compañeros, ya que cada uno es
importante y especial para mí, también me siento agradecida porque en todo estos años transcurridos
acompañada por cada uno de ustedes, ocurrieron cosas inolvidables que han marcado nuestra vida de
cierta forma.
Parece que fue hace poco cuando recién iniciábamos la secundaria, como olvidarlo, sabíamos que
nos esperaban cosas nuevas y grandes, pero no imaginábamos que tantas.
Como olvidar las reflexiones de cada vez que hacíamos quedar mal a nuestras tutoras a lo largo de los
años, o los discursos de media hora de algunos profesores al empezar sus clases, o los regaños y
muestras de afecto de nuestra querida tutora Giovanna, como olvidar las salidas planeadas y nunca
realizadas, como olvidar las altas horas de noche que nos quedábamos haciendo tareas dejadas 1
semana antes, pero siendo tan responsables nosotros las hacíamos un día antes.
“Clase unida” “¿Cómo?” “Boten a Joel” “Miss póngale 0” “¿Qué, había tarea?” son algunas frases que
escuchábamos a diario en nuestro salón, incluso son muchas más, pero este discurso no sería
suficiente para poder mencionar todas.
Poco a poco aprendimos a adaptarnos a esa “nueva etapa” que la llamábamos así en ese entonces, y
ahora en un dos por tres la estamos terminando, durante todo este tiempo de secundaria no me
imaginaba que tan rápido llegaría el momento de una despedida, o tal vez un hasta pronto, pero quiero
decirles que no se desanimen, todos tenemos la capacidad de poder llegar lejos.
Desde que somos niños deseamos lograr metas personales, obtener cosas y superarnos en la vida a
través de la culminación del colegio primero, y luego la de una carrera profesional, pero la realidad es
que muchos la inician y son muy pocos los que logran terminarla, sin embargo, gracias a Dios, a
nuestros profesores y padres hemos podido lograr un nuevo grado en nuestra formación como
personas.
“Si puedes soñar, puedes hacerlo” palabras de Walt Disney, un claro ejemplo de que nada es
imposible, anímense a soñar en grande, aun somos jóvenes tenemos mucho camino por recorrer y
durante todo ese tiempo, estoy segura q muchos lograremos llegar lejos, solo si nos esforzamos.
No nos demos por vencidos antes de comenzar la batalla, sí, estamos acabando un año lleno de
nuevas experiencias, pero esto recién empieza, empieza una nueva etapa aún más grande donde
descubriremos muchas cosas, algunas nuevas para nosotros y no todo será bueno, a veces
tendremos que sobrellevar situaciones, llegara el tiempo donde ya no decidamos continuar porque
tendremos miedo de lo nuevo que vendrá, pero si hemos sobrevivido a la pandemia, hemos
sobrevivido a la secundaria, porque no podemos sobrevivir a todo lo que nos espera
“Generación perdida” una vez lo escuche, pero al verlos a ustedes me di cuenta que no, todos están
llenos de sueños, metas, por más de que digan “no sé qué voy a hacer terminando el año” ustedes
están llenos de talentos y de habilidades para lograr lo que se propongan. ¿Quieres ser astronauta?,
hazlo, ¿Quieres ser doctor? Hazlo, ¿Quieres ser policía? Hazlo, quieres ser cirujano, veterinaria,
bailarín, cantante, abogada, profesora, estudiar gastronomía, astronomía, pediatría, nutrición, Hazlo,
que nada ni nadie te impida ir por lo que quieres, no te rindas sigue intentado, si vez una oportunidad
tómala y aprovéchala
No te amargues con tu propio fracaso ni se lo cargues a otro. Acéptate ahora o seguirás justificándote
como un niño. Recuerda que cualquier momento es bueno para comenzar y que ninguno es tan
terrible para claudicar- Pablo Neruda
El hecho de que nos queden pocos días para acabar este año académico me ponen muy nostálgica,
pero y se y confió que algún día nos reencontraremos y reiremos contando todo lo que hemos logrado
con nuestros esfuerzos.
“Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu
Dios estará contigo en dondequiera que vayas.”