una situación embarazosa

-hija, ¿otra vez en la ventana?

- sí, mami, este dolor me aterra, ver hacia el parque y solo reconocer celulares, Tablet en sus
manos, eso no puede ser. Decía Margarita a su madre después de sentir como todos estaban
olvidando los libros.

Margarita era una joven de 16 años, quien desde niña y llevada por un impulso entró a la
biblioteca de su pueblo Jaminul y desde ese día se enamoró de la lectura, los libros y el mundo que
en él habita.

Jaminul era pequeño, calles frías y con mucha naturaleza, donde la diversión de los niños era el
parque y la biblioteca; pero un día llegaron unos señores vestidos de ropa caqui que trajeron un
avance tecnológico llamado celular, desde ese día el uso de la biblioteca y el paruqe con sus juegos
disminuyó, ya todos querían ver y chatear con su celular, hacían lo que fuera por obtener uno.

Margarita quien amaba la biblioteca se sentaba todas las tardes a ver como habían cmabiado los
juegos del paruqe por las sillas frías para poder usar el celular, esta situación la atormentaba,
sentía que algo andaba mal pero no sabía cómo ayudar, pues la biblioteca había cerrado por falta
de público y la habían llevado a otro lugar y el parque estaba oxidado sin uso.

Un día se sentó en las gradas para entrar a la biblioteca y sintió mucho