Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Lluvia de Gatos
Lluvia de Gatos
Alta noche,
una niña camina sola por la calle.
Me cruza.
No me mira.
No me habla.
Pero de algún modo
me dice:
dale, seguí,
arrancá,
tomatelás,
no te ocupes de mí,
total,
otros lo harán.
Distracción
Es mi castigo saber
que no hay modo de escapar,
y su tormento, entender
que jamás me va a alcanzar.
El pez en la pecera
me mira, a su manera,
y trato de leerlo
desde afuera.
Nunca lo entenderé
y él tampoco, a su vez;
por algo yo soy gente
y él es pez.
De ninguna
Cantinero,
sírvame hasta desbordar,
porque hoy quiero festejar.
Sí, mi amigo,
eche toda esa bebida bien servida,
total, la noche es más larga
que la vida.
Cobre, hombre,
que después voy a mamarme para siempre
y ya ni voy a acordarme
de mi nombre.
La situación es difícil
por adentro y por afuera;
como quien dice, hace tiempo
parece que pareciera.
La situación está brava
por derecha y por izquierda;
como quien dice, hace tiempo
que se pasó de relajo.
La situación es compleja
por encima y por debajo;
como quien dice, hace tiempo
que ya está espesa de más.
La situación se complica
por delante y por detrás;
como quien dice, hace tiempo
que se fue todo a la mierda.
Por afuera, por adentro,
por detrás, por adelante,
por encima, por debajo,
por derecha y por izquierda.
Tiempo
Soy personaje
de días nublados;
cuando ha clareado
me tomo el raje,
porque ya el traje
no se soporta
y no me importa
andar bronceado.
Mientras la gente
busca un motivo
definitivo
antihumedad,
yo, la verdad,
sé qué baldosas
son resbalosas,
y las esquivo.
Soy la babosa
de la garúa;
no es por dar púa,
pero mañana
va una semana
de gris hermoso,
más pegajoso
que una mamúa.
Y lo repito:
soy un molusco,
la sombra busco
por los rincones,
y en los bajones
de días soleados
ando amargado,
y no me luzco.
Ojos ladrillo,
patas negruzcas,
cuerpo amarillo
alas de azúcar.
No.
Llovía copiosamente
y, como estaba llorando,
fue y le dijo a la maestra:
¡la lluvia me está copiando!
Podría ser
Y no es que me sorprenda,
¡todo estaba tan claro!
pero clara es la luna,
y también tan cambiante,
y clara es la mañana,
y la luz del relámpago.
Y no es que me sorprenda,
¡todo siempre es tan triste!
como es triste la luna
que duerme en tu mirada.
Pajarracos
Siempre conversan
—no muy concretos—
el socotroco,
el armatoste
y el mamotreto.
Ahora bostezan;
durmieron poco,
el armatoste,
el mamotreto
y el socotroco.
Se irán volando
de poste en poste,
el mamotreto,
el socotroco
y el armatoste.
He pasado
En la caja de un camión,
de tarde, el amor partió
con rumbo desconocido,
y el gato ni se enteró.