Está en la página 1de 2

La Autocrítica

Rompe hielo: ¿Cómo reacciona usted ante una crítica constructiva hacia su
persona?

40
Escudriñemos nuestros caminos, y busquemos, y volvámonos a Jehová;
Lamentaciones 3:40

Introducción:
Muchos sabemos que la crítica es algo que desagrada a Dios porque puede llegar
a dañar profundamente los sentimientos de la persona a quien está dirigida.
Pero existe otra clase de crítica que es constructiva y que practicándola con
frecuencia, nos podría evitar muchos dolores de cabeza; ésta es conocida como:
"autocrítica'.
I. La Necesidad De La Autocrítica
A. La autocrítica es algo que debería hacer con regularidad cada ser humano,
porque nos ayuda a reflexionar en la forma que nos estamos conduciendo en
nuestro diario vivir; pero, lamen-tablemente, la mayoría de la gente trata de ignorar
sus debilidades o simplemente negarlas.
(Proverbios 16:2) "Todos los caminos del hombre son limpios en su propia
opinión, pero Jehová pesa los espíritus
B. Una forma que nos pudiera ayudar a no hablar o actuar precipitadamente sobre
algo es haciéndonos las siguientes preguntas:
1. ¿Decido hacer esto porque quiero que los demás piensen bien de mí? (Gálatas
1:10)
2. ¿Lo estoy haciendo porque quiero recibir ganancia económiса? (Proverbios
15:16)
3. ¿Estoy haciendo o diciendo algo malo porque pienso que nadie se enterará?
(Hebreos 4:13)
4. ¿Continúo en algún pecado sin arrepentirme?
5. ¿Tengo falta de voluntad para cambiar patrones pecaminosos?
6. ¿En cuántas ocasiones me he negado a mí mismo hoy?
7. ¿Mi vida y mis palabras han honrado a nuestro Señor Jesucristo.
Como vemos, tenemos tantas cosas en las cuales trabajar en nuestras vidas, que
sería un pecado querer arreglar la vida de los demás cuando estamos
descuidando la nuestra.
II. La Necesidad De Ayuda Divina
A. Necesitamos hacernos un auto examen para santificar nuestras vidas:
Sal. 139:23, 24. "Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y
conoce mis pensamientos; Y ve si hay en mí camino de perversidad, Y
guíame en el camino eterno"
B. Juan Wesley dijo que Juan Fletcher era el hombre más santo que había
conocido en Europa y en América; y que lo era porque diariamente se examinaba
para saber si su proceder estaba de acuerdo con los planes de Dios, para lo cual
se hacía las siguientes preguntas:
1. ¿Desperté espiritualmente y tuve cuidado de guardar mi mente de
pensamientos errantes, cuando me levanté esta mañana?
2. ¿Me he acercado a Dios en oración o he dado lugar a la pereza y a la desidia
espiritual?
3. ¿He andado hoy por fe, y he procurado ver a Dios en todas las cosas?
4. ¿Me he negado a mí mismo al usar palabras y al expresar pensamientos poco
bondadosos?
5. ¿Me he debilitado espiritualmente al ver que prefieren a otros en mi lugar?
6. ¿He aprovechado mi tiempo precioso, mis fuerzas y mis oportunidades según la
luz que Dios me ha dado?
7. ¿Qué he hecho hoy por las vidas y por las almas de los santos?
8. ¿He gobernado bien mi lengua, recordando que en la multitud de palabras no
falta pecado?
Conclusión:
Si con frecuencia tomamos el tiempo necesario para examinar nuestro corazón a
la luz de la palabra de Dios, sin lugar a duda que nos ayudará a mejorar en todas
las áreas de nuestra vida. Tome el tiempo para hacerlo, recordando siempre que
la autocrítica es necesaria para poder reconocer la condición de nuestro corazón y
mejorar nuestros caminos.
Preguntas:
1. ¿Con que frecuencia toma usted tiempo para la autocrítica?
-Respuestas variadas-
2. ¿Por qué es tan importante que con regularidad dediquemos tiempo a la
autocrítica?

También podría gustarte