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EN LA HISTORIA
DE LA EDUCACIÓN
ARGENTINA
Flavia Fiorucci y
José Bustamante Vismara
(editores científicos)
FLAVIA FIORUCCI es doctora en Historia por
la Universidad de Londres, MA en Estudios
Latinoamericanos por el King’s College Londres
y licenciada en Ciencias Políticas por la
Universidad de San Andrés. Es investigadora
independiente del Conicet y forma parte del
Centro de Historia Intelectual de la Universidad
Nacional de Quilmes. Entre sus publicaciones,
pueden mencionarse Intelectuales y peronismo
y, en coautoría con Paula Laguarda,
Intelectuales, cultura y política en espacios
regionales de Argentina (siglo XX). Junto con
Laura G. Rodríguez, compiló Intelectuales de la
educación y el Estado: maestros, médicos y
arquitectos.
COLECCIÓN
PENSAMIENTO
CONTEMPORÁNEO
Fiorucci, Flavia
Palabras claves en la historia de la educación argentina / Flavia Fiorucci;
José Bustamante Vismara - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires:
UNIPE: Editorial Universitaria, 2019.
320 p. ; 24 x 16 cm.
(Ideas en la educación argentina / Pulfer, Darío; abordajes)
ISBN 978-987-3805-43-1
Edición y corrección
Diego Herrera
Diseño y maquetación
Diana Cricelli
Diseño de colección
Estudio Zky/Sky
ISBN 978-987-3805-43-1
darío PulfEr
Director de la colección
Índice*
AGRADECIMIENTOS ..................................................................................... 19
* Para limitar las repeticiones, se decidió no incluir los adjetivos “educativo” y “escolar” en varias de las
entradas. [N. de E.]
8 PALABRAS CLAVES EN LA HISTORIA DE LA EDUCACIÓN ARGENTINA
l a lEy nº 1420 dE 1884 fue el andamiaje principal del sistema educativo estatal
en la Argentina. Si bien el proceso de escolarización excedió ese marco norma-
tivo, con ese sustrato legal se definieron algunas estructuras organizativas que
perduraron durante más de cien años en el país.
La ley tenía vigencia solo para Buenos Aires y los Territorios Nacionales, y
establecía que la instrucción primaria debía ser gratuita, gradual y obligatoria
para todos los niños y niñas de entre seis y catorce años. El trayecto escolar
podía cumplirse en las escuelas públicas, particulares o en los hogares, y se pre-
veían penas ante el incumplimiento de la norma. En la práctica, la Ley tuvo
carácter modélico para todas las provincias y, a partir de 1905, se fundaron es-
cuelas nacionales en esas jurisdicciones.
Desde entonces, el sistema educativo estuvo conformado por elementos disí-
miles y contempló diferencias sustanciales entre distintos espacios regionales.
Sin embargo, la vigencia de la ley daba cuenta de algunas permanencias en la
estructuración del sistema en lo referente a la organización y a las modalidades
escolares. Con la ley se estableció un mínimo de saberes y una división del co-
nocimiento propio de los países occidentales que, con algunos matices, perdu-
raron hasta la década del setenta. Entre los aspectos que mostraron variaciones
a lo largo de la centuria cabe mencionar: la distribución de la gradualidad y la
agrupación de los contenidos, el dictado de algunas materias por género y la
administración del tiempo y de las tareas escolares.
A partir de los años setenta, el sistema educativo estatal se vio atravesado por
movimientos significativos. El primero estuvo vinculado a un proceso de descen-
tralización y el segundo, al creciente reconocimiento estatal de escuelas privadas.
Ya en las postrimerías del siglo XX, la estructura generada por la Ley Nº 1420
se vio desbordada y fue reemplazada por la Ley Federal de Educación Nº 24195
(1993), que implementó la «Educación General Básica». Como resultado, se ex-
tendió la obligatoriedad a diez años, se eliminó la división tradicional entre la
escuela primaria y secundaria, y se crearon tres ciclos de enseñanza obligatoria.
Esta entrada incluye solo algunas modalidades de las escuelas públicas: la
escuela infantil, elemental y superior; los jardines de infantes; la escuela ambu-
236 PALABRAS CLAVES EN LA HISTORIA DE LA EDUCACIÓN ARGENTINA
La Ley Nº 1420 establecía una educación común obligatoria para los niños de
seis a catorce años y tres tipos de escuelas: infantiles, elementales y superiores.
Las infantiles comprendían el primer y segundo grado; las elementales impar-
tían hasta el cuarto grado; y las superiores dictaban los seis grados de la instruc-
ción primaria. Esas modalidades podían dictarse en un mismo establecimiento
o en forma separada. En cuanto a los programas y contenidos mínimos de en-
señanza, estos comprendían nociones de lectura, escritura, aritmética, geogra-
fía, historia, moral, ciencias naturales, idioma nacional, higiene, Constitución
Nacional, dibujo, música y gimnasia. Esa arquitectura escolar dependía de un
organismo de control, el Consejo Nacional de Educación (CNE), con jurisdicción
sobre Capital Federal y los Territorios Nacionales. El CNE estaba bajo la órbita
del Ministerio de Justicia e Instrucción Pública y detentaba autonomía técnica
para la gestión del subsistema educativo.
En 1905, la ley Láinez posibilitó el establecimiento de escuelas elementales, in-
fantiles, mixtas y rurales en las provincias por parte del CNE. En esta primera
etapa de expansión del sistema educativo, predominaron las escuelas infantiles
que tenían cuatro de los siete grados. De este modo, vastos sectores de la población
solo accedieron a un trayecto educativo menor al establecido por el marco legal.
Durante el peronismo, el sistema sufrió algunas modificaciones. En el Primer
Plan Quinquenal se estableció el principio de democratización de la enseñanza,
la enseñanza de nociones de religión católica en las escuelas y se continuó con
una escolaridad primaria obligatoria entre los seis y los catorce años. En 1949,
de acuerdo con la reforma constitucional, se creó el Ministerio de Educación de
la Nación.
JARDINES DE INFANTES
ESCUELAS AMBULANTES
ESCUELAS UNITARIAS
Estas entidades eran escuelas anexas a las escuelas normales. Los primeros es-
tablecimientos datan de 1865. La mayoría de esas escuelas impartían un tra-
yecto educativo de seis años y estaban bajo la autoridad de un regente, quien
dependía, a su vez, del director de la escuela normal. En ellas, los estudiantes
normalistas realizaban sus prácticas de enseñanza y, hasta 1904, fueron escala
obligada para el ingreso a los cursos normales. Desde su creación, los progra-
mas de estas escuelas eran diferenciados y sufrieron frecuentes reformas a lo
largo del siglo XX.
ESCUELAS DE FRONTERA
REFERENCIAS
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