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Fotografía: Archivo propiedad de Elia Stavenhagen

4 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


antropología mexicana contemporánea. A través
Introducción.
de sus textos y del trabajo de sus discípulos, el in-
Ideas claras, acciones signe antropólogo ha dejado una huella indeleble
contundentes y ha ejercido una influencia profunda en el tipo de

Antonio Zirión Pérez1 antropología que se enseña y se practica actual-


mente en nuestro país, y de manera particular en

Quisiera iniciar estas líneas reflexionando un ins- la UAM Iztapalapa.

tante sobre el significado de los homenajes en la Debo señalar que no lo conocí personal-

vida académica. En el Departamento de Antropo- mente, sólo me encontré con él una vez, en la

logía de la Universidad Autónoma Metropolitana Escuela Nacional de Antropología e Historia du-

(UAM), en los últimos años hemos organizado di- rante la estancia de la Comandancia Zapatista en

ferentes tipos de homenajes, algunos póstumos a 2001. Recuerdo que iba caminando y discutiendo

colegas que se nos han adelantado, como el caso con Carlos Montemayor y Luis Villoro. Mis com-

de nuestro amigo y maestro Juan Pérez Quijada, o pañeros y yo intentamos inútilmente disimular

el de Enzo Segre Malagoli. Asimismo, se ha que- nuestra admiración frente a ese trío de grandes

rido honrar a los fundadores y miembros desta- intelectuales y actores políticos. En otra ocasión,

cados del Departamento, como Andrés Fábregas quise asistir a una de sus conferencias en un audi-

Puig, Scott Robinson y Néstor García Canclini, torio rebosante y desbordado de público, lamen-

intentando recuperar sus aportes y su legado, que tablemente, la multitud y el bullicio eran tales que

forman parte de la memoria colectiva de nuestra no me fue posible ver o escuchar a cabalidad. Sin

disciplina. Todos estos homenajes han tenido el embargo, sus textos me alcanzaron, al igual que

propósito de reconocer el terreno en el que estamos a muchos otros estudiantes de antropología en

parados como institución dedicada a la antropolo- nuestro país. La cuestión étnica; Conflictos étnicos

gía social desde hace casi 45 años. Resulta crucial y estado nacional; Entre la ley y la costumbre: el de-

tener siempre presente que, como dijo Isaac New- recho consuetudinario indígena en América Latina;
ton: “si hemos llegado lejos es porque estamos pa- y, Racismo y xenofobia en tiempos de la globaliza-
rados sobre los hombros de gigantes”. Sin duda, la ción, fueron lecturas obligatorias en varios cursos
intención de todos estos homenajes ha sido, más de licenciatura y sus ideas me marcaron profun-
allá de la nostalgia, releer y actualizar las ideas de damente. Creo que hoy podemos afirmar que no
estos autores para repensar y transformar al mun- es posible pensar en una antropología mexicana
do contemporáneo. Tal es el caso del homenaje a sin tomar en cuenta la presencia de Stavenhagen.
Rodolfo Stavenhagen. Sobresale principalmente su coherencia entre
Si bien es cierto que Rodolfo Stavenhagen lo que pensaba, lo que decía y lo que hacía; su com-
no estuvo directamente vinculado con el Depar-
promiso con la aplicación del conocimiento para la
tamento de Antropología de la UAM, se trata
promoción y la defensa de los derechos humanos,
indiscutiblemente de una figura central para la
y el ejercicio de una investigación antropológica
1. Profesor-Investigador del Departamento de Antropología de la
Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Iztapalapa (ϭͱͿͻ). enfocada a la construcción de un mundo mejor.
Correo: zirion@gmail.com

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 5


La dimensión política de su pensamiento implicó Valladares (uam-i), María Teresa Sierra (ciesas),
siempre llevar el carácter práctico de la antropolo- Serena Chew (unam), Magdalena Gómez (upn) y
gía hasta sus últimas consecuencias; fue sin duda Elia Stavenhagen lo recuerdan, lo critican, dialo-
un hombre ejemplar, de ideas claras y acciones gan con él y le rinden homenaje poniendo en prác-
contundentes. Podríamos caracterizar su trabajo tica, actualizando y esparciendo su conocimiento.
como una antropología activista, aplicada, públi- En el primer capítulo, Alicia Castellanos
ca, militante; comprometida con diversas causas realiza un recorrido histórico por la obra de Sta-
como la impartición igualitaria de justicia, y el cui- venhagen y señala los aportes efectuados en lo
dado y respeto de los derechos humanos entre los que se refiere al análisis de las relaciones étnicas
pueblos indígenas de nuestro país. y de clase. Resalta los conceptos propuestos por
Tras recibir la noticia de su fallecimiento, el antropólogo, como colonialismo interno y la
la comunidad antropológica estuvo de luto. En el imbricación entre clase, etnia y raza, que nos
Departamento de Antropología, como en muchas ayudan a entender la historicidad del racismo y sus
otras instituciones, publicamos una esquela anun- múltiples expresiones en contextos nacionales y
ciando la partida de uno de los más grandes pensa- culturales específicos. Finalmente, nos recuerda la
dores de la antropología mexicana. Las preguntas, relevancia de los debates en torno a los conflictos
opiniones y comentarios de estudiantes, periodistas etno-políticos a la luz de la violencia de las políti-
y colegas de otras disciplinas, y de diferentes uni- cas migratorias xenófobas de este nuevo milenio.
versidades, no se hicieron esperar. Por ello, cuando En el segundo capítulo, Laura Valladares
la Dra. Alicia Castellanos propuso realizarle un ho- nos habla de tres áreas temáticas cultivadas o ini-
menaje desde el Departamento de Antropología, no ciadas por Stavenhagen: la primera es la antropo-
hubo el menor titubeo para organizar dicho even- logía jurídica, que se ha constituido como un cam-
to en su honor. Se buscó que en el evento tuvieran po epistémico y de activismo político muy fértil
cabida colegas que trabajaron con él de cerca, es- en América Latina; la segunda es su papel como
tudiantes que lo conocieron en persona, así como Relator Especial de la ONU sobre la Situación de
alumnos de nuevas generaciones impactados por su los Derechos Humanos y Libertades Fundamenta-
legado. El homenaje llevó por título “Racismo y de- les de los Pueblos Indígenas; y una tercera área la
rechos de los pueblos originarios en el pensamiento constituyen sus investigaciones sobre los conflic-
de Rodolfo Stavenhagen”, y tuvo lugar el 12 de mayo tos étnicos nacionales, temática muy relevante en
de 2017 en la Terraza del Edificio de Posgrado de la la que enfatizó las dimensiones supranacionales
uam-i, ante una nutrida concurrencia. La presente y extraterritoriales de los conflictos étnicos en el
compilación de reflexiones sobre sus ideas y accio- mundo, mismas que hoy es muy importante con-
nes, textos realizados ex profeso en su memoria, es el siderar ante los procesos de despojo territorial que
resultado de ese tributo. sufren los pueblos indígenas por medio del extrac-
Se trata, de manera significativa, de seis mi- tivismo vigente.
radas femeninas y/o lecturas feministas de la obra En el tercer capítulo, Teresa Sierra subraya la
de Stavenhagen. Alicia Castellanos (uam-i), Laura contribución del eminente antropólogo al estudio

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del derecho consuetudinario indígena y sus for- a cabo bajo el mandato del expresidente Carlos
mas de relación y conflicto con el derecho estatal. Salinas y posteriormente en el de Ernesto Zedillo,
Destaca su trayectoria como activista y académico y tras varios sexenios de lucha y reformas constitu-
visionario y con un profundo compromiso con los cionales, se constituye en una fuerza fundamental
derechos de los pueblos indígenas, ya fuera como para impulsar el reconocimiento de la autonomía
funcionario, investigador o en su labor como pri- y la diversidad cultural de los pueblos indígenas.
mer relator de los derechos de los pueblos indígena Algunas ideas y acciones resultan incom-
de las Naciones Unidas. De igual forma, la autora prensibles sin el contexto que las motivó. Por ello,
realza el hecho de que las aportaciones de Staven- en este libro no podía faltar una mirada íntima a
hagen en torno a los derechos humanos de los in- la historia de vida del antropólogo. Así, el capítulo
dígenas, se verán reflejadas tanto en las legislacio- final que escribe Elia Stavenhagen, explica las raí-
nes latinoamericanas que se reformaron dentro del ces y los pormenores del compromiso político que
marco de un constitucionalismo pluralista, como su esposo asumió desde muy joven, y que sin duda
en el reconocimiento de los derechos colectivos en permea la totalidad de su vida y obra.
el convenio 169 de la OIT (1989). De ese modo, los textos aquí reunidos sin
En el capítulo cuarto, Serena Chew habla del duda conforman una guía muy útil para los estu-
compromiso ético que caracterizó a Stavenhagen diantes que aún no se han acercado a la obra de
a través de sus participaciones en diversos foros, Stavenhagen, pero también para los conocedores
como por ejemplo, en la Comisión de Papaloapan; de sus trabajos, pues aportan un análisis agudo de
a partir de la cual comenzó a estudiar temas trans- sus argumentos y sus logros prácticos más rele-
versales, como: el desarrollo de los Estados-na- vantes. Este conjunto de ensayos, además, arroja
cionales; las contradicciones entre la experiencia luz sobre algunos aspectos de su personalidad y
concreta de la gente y los grandes discursos sobre su calidad como ser humano, y nos permite ver,
la modernización de América Latina; y la demo- sin ninguna duda, que Rodolfo Stavenhagen es
cratización de los países colonizados. Con ello, una de las figuras más trascendentes en la historia
colocó sobre la mesa la pregunta acerca de la res- del pensamiento y del quehacer antropológico en
ponsabilidad social del quehacer antropológico, nuestro país.
especialmente ante el actual proceder del Estado
y de las empresas privadas, que suelen contratar
profesionales del área.
En el quinto capítulo, “De la costumbre ju-
rídica al derecho indígena”, Magdalena Gómez
narra las implicaciones políticas y jurídicas de las
investigaciones y las acciones realizadas por Sta-
venhagen. Se trata de un recorrido por su trayec-
toria académica, que, en paralelo con las transfor-
maciones de corte neoliberal del Estado, llevadas

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Fotografías: Archivo propiedad de Elia Stavenhagen

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En sus estudios, es un eje articulador una
Racismo, xenofobia
postura teórica y política de reconocimiento de la
y pueblos indígenas diferencia del Otro, frente a la negación absoluta o
1
Alicia Castellanos Guerrero relativa de este derecho que destruye tanto la con-
tinuidad de la existencia y dignidad de la persona y
En este homenaje al maestro y colega Rodolfo Sta- de sus colectividades de pertenencia, como la convi-
venhagen, expongo ideas y conceptos para el aná- vencia multicultural de naciones y entre estados-na-
lisis y la lucha contemporánea contra el racismo, la cionales. La temprana experiencia del propio exilio
xenofobia y el antisemitismo, los cuales han sido familiar a causa de la persecución de judíos, de mi-
indisociables de su interés académico y político, norías, nacionalidades y naciones que la Alemania
y constituyen una notable contribución al debate nazi desencadena hasta el genocidio, deviene huella
de los derechos humanos y colectivos de las mino- indeleble en la vida de Stavenhagen y una raíz que
rías sociológicas y los pueblos originarios, que son fortalecerá la perspectiva humanista de su trabajo
ejes centrales que articulan su vida y práctica de científico. Seguramente, las luchas de liberación na-
investigación. Desde sus primeros trabajos, estos cional y descolonización en África acontecidas en la
campos problemáticos y los respectivos sujetos so- misma década en que realizó sus estudios de docto-
ciales y políticos, forman parte de sus prioridades rado en Francia, también dejarán una impronta y un
como investigador social, hasta convertirse en un conocimiento de sus pueblos y naciones.
comprometido Relator Especial de las Naciones No es fortuito entonces, que el análisis del ra-
Unidas sobre la Situación de los Derechos Huma- cismo, la xenofobia y el antisemitismo hacia diversos
nos y las Libertades de los Pueblos Indígenas. sujetos sociales, sea recurrente en su obra, y respecto
Celebro que este encuentro y homenaje lo a múltiples contextos históricos, como por ejemplo:
organizamos en la uam-i, porque provoca que los un sujeto colonizado en una región de Chiapas, que
estudiantes conozcan la trayectoria de un cien- padece una gran violencia en la cotidianidad comu-
tífico social con responsabilidad ética, en estos nitaria; los Otros internos en países de Europa y Áfri-
tiempos en que la academia es más vulnerable a ca; el inmigrante de origen multidiverso, procedente
las políticas neoliberales y la ética puede volverse sobre todo de este continente sometido por siglos a
sólo discursiva. La vigencia de sus investigaciones la esclavitud y dominación colonial y neocolonial,
sobre los derechos de los pueblos originarios y las y de naciones de países subdesarrollados que histó-
distintas formas de exclusión, es incuestionable en ricamente expulsan mano de obra barata y reciben
este período en que la expansión del capital trans- remesas estratégicas para sus economías; así como
nacional y los poderes imperiales avanzan sobre el pueblo judío, histórico chivo expiatorio que ya en
sus territorios y recursos, y los de nuestras nacio- el Estado sionista de Israel, deviene en victimario del
nes, mientras el racismo y la xenofobia se estatizan pueblo palestino; o el consabido antisemitismo, so-
con extrema violencia. bre todo, en los contextos europeo y estadounidense,
en los cuales es posible identificar procesos de colo-
1. Profesora-Investigadora del Departamento de Antropología de la
Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Iztapalapa (ϭͱͿͻ . nialismo interno y de nacionalismos excluyentes.
Correo: alicastell@yahoo.com

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En una de sus obras primigenias, Las clases conocimiento de la existencia de una de las formas
sociales en las sociedades agrarias, Stavenhagen del racismo, los prejuicios racistas hacia los pue-
(1971 3ª edición) compara estructuras agrarias en blos originarios, hoy todavía negados por la mayor
México, con aquellas de países de América Central parte de estos estados en la región latinoamerica-
y África, en un período en el cual la antropología na y apenas hace poco tiempo objeto de estudio en
mexicana cruzaba pocas veces las fronteras nacio- nuestras universidades y centros de investigación.
nales para investigar formas de vida, de explota- En este contexto político y académico, y de
ción y opresión de grupos minoritarios y/o pueblos persistencia de viejas estructuras de dominación
originarios en otros continentes. Desde la década en regiones étnicas como Los Altos de Chiapas,
de los sesenta, un período convulsionado por los introduce una perspectiva histórico-estructural
movimientos de liberación nacional en el conti- para el estudio de las relaciones sociales y étnicas.
nente africano y las luchas de las minorías étnicas Rechaza que las relaciones conflictivas son un fe-
y nacionales y de las mujeres por sus derechos so- nómeno a-histórico y resultado del “atraso de los
ciales y políticos en Estados Unidos, se origina en pueblos indígenas” y demuestra la compleja rela-
la academia mexicana una crítica a la estrecha re- ción entre estructura y subjetividad.
lación entre antropología y Estado, a sus políticas Su aportación es novedosa. Identifica la im-
hacia los pueblos indígenas, y a la perspectiva del bricación entre clase, etnia y raza, dimensiones esen-
culturalismo, teóricamente predominante, lo cual ciales en la relación con el Otro próximo y lejano, en
crea paulatinamente condiciones para una ruptura la que se ven involucrados: Estado, sociedad y pue-
de paradigma en la disciplina. blos originarios. En esta región, dichas relaciones se
La aparición en 1965 de las “Siete Tesis manifiestan en un sistema de estratificación fincado
Equivocadas sobre América Latina”, se convierte en “criterios étnicos y raciales”; en juicios y relacio-
en un aporte inédito al debate latinoamericano so- nes entre ladinos e indios marcadas por una posi-
bre desarrollo y subdesarrollo económico y social. ción social y económica diferenciada en el sistema,
El concepto de colonialismo interno que se intro- y un lugar desde donde se producen sentimientos
duce resulta crucial para entender la naturaleza de superioridad e inferioridad con base en el color,
de las relaciones y las ideologías que se establecen la sangre y la cultura; pero aclara que “los factores
entre regiones subdesarrolladas y la sociedad glo- esenciales en la estratificación son culturales y no
bal. En estas tesis hay un cuestionamiento de la in- raciales” (1971: 237-38). Esta relación entre clase,
tegración nacional como producto del mestizaje, etnia y raza, y el concepto de colonialismo interno
una falacia, escribe Stavenhagen, que oculta “un (acuñado simultáneamente por Rodolfo Stavenha-
prejuicio racista” que pretende el “blanqueamien- gen y Pablo González Casanova) forman parte de
to” de la población indígena, esto es, revela que el un cuerpo teórico-metodológico fundamental para
mestizaje tiene un componente biológico y cultu- entender la condición subalterna de los indígenas,
ral. Se trata de blanquear y desaparecer las culturas tanto así que esta tríada se sigue discutiendo en los
indígenas. Indudablemente esta tesis, formulada estudios del racismo y de género, a partir de la deno-
hace casi sesenta años, es una contribución al re- minada perspectiva interseccional.

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En esa misma obra, “Siete tesis…”, formula antropología comprometida con “la justicia, la
preguntas clave para pensar la historicidad del racis- igualdad, el bienestar y la dignidad humanas”, la
mo y su intrínseca metamorfosis, como, por ejem- que rechaza el concepto de raza, científicamente
plo: ¿Cuál es la fuente ideológica de esta jerarquía? insostenible, convirtiéndose tabú en la academia.
¿Sólo los criterios raciales que diferencian constitu- Lo que no significará, advierte, que el racismo no
yen el contenido único del racismo? ¿Es posible un seguirá intentando justificarse en viejos y nuevos
racismo basado en las diferencias culturales y nacio- postulados con una base pretendidamente cientí-
nales como criterios de distinción? Las experien- fica, como es el caso de la sociobiología y el revi-
cias en diversos contextos históricos y nacionales sionismo histórico, el cual reivindica el nazismo y
demuestran que éste se sustenta en muy diversas niega el holocausto, y un relativismo radical desde
ideologías y tradiciones culturales, en la natura- los nacionalismos étnicos, que reconoce el dere-
lización de la cultura y los orígenes nacionales, en cho a la diferencia que separa, segrega y argumen-
las ideologías religiosas y políticas, de modo que ta la incompatibilidad del Otro debido a la cultura.
años más tarde se define el concepto de “racismo Propone entonces abrir un debate sobre “los
cultural” en Francia y Estados Unidos, y se analizan aportes y las implicaciones” de las ciencias huma-
procesos de biologización de la cultura. Estudios nas y sociales, lo que en las actuales condiciones
posteriores demuestran, efectivamente, que las je- que vive la humanidad resulta ser un imperativo
rarquías raciales pueden tener origen en las teorías en las academias que se posicionan desde distintas
racistas decimonónicas, en los nacionalismos y las perspectivas y compromisos sobre los actos racis-
ideologías religiosas, políticas y desarrollistas, entre tas y clasistas y las nuevas violencias en América
otras. Por lo tanto, son múltiples los criterios que Latina, Estados Unidos y Europa. Una preocupa-
diferencian y dan contenido al racismo, pueden ser ción temprana que tratará en forma brillante y po-
estrictamente raciales y otros culturales, nacionales líticamente comprometida en una ponencia intitu-
y políticos. De allí que es posible un racismo basado lada “¿Cómo descolonizar las Ciencias Sociales?”,
en diferencias de diverso signo. en la que, por un lado, cuestiona la neutralidad en
En los inicios de los noventa, reflexiona la ciencia; y por otro, convoca al compromiso del
Rodolfo Stavenhagen (1992) sobre la relación en- científico social con la realidad, al necesario “aná-
tre antropología y racismo: desde el siglo XIX, la lisis socio-científico, esto es, a la constante interac-
disciplina no escapa a la influencia de las teorías ción recíproca entre teoría, hechos y práctica”, y,
racistas, surge y se desarrolla con el colonialismo en fin, en la que concibe el conocimiento como un
y las ideologías para hacer nación y se vuelve un instrumento de poder para la transformación so-
instrumento para la eliminación de los Otros, du- cial, para despertar una conciencia crítica, cues-
rante la Alemania nazi. No obstante, señala, la an- tionar, subvertir y “modificar los sistemas de do-
tropología adopta una postura crítica, demuestra minación, explotación y opresión” (1994).
la inexistencia de las razas, antropólogos rehúsan Años más tarde, en un número de la revista
a colaborar con el régimen nazi. Luego de la se- Estudios Sociológicos, que preparé gracias al inte-
gunda guerra mundial, se va configurando una rés de Orlandina de Oliveira y el decidido apoyo

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de Nelson Minello y Vania Salles, –sucesivos di- y, en Europa, a “formas residuales de la ideolo-
rectores de la revista– Stavenhagen, en su artículo gía nazi”. Con ese desplazamiento, cuestiona una
“Racismo y xenofobia en tiempos de la globaliza- larga tradición de estudios que privilegiaron esta
ción”, manifiesta particular interés por las “violacio- dimensión subjetiva y que subestiman el carácter
nes masivas de los derechos humanos” que aconte- estructural e institucional del racismo, ya que son
cen en diferentes regiones del mundo y delimita el incapaces de vislumbrar que el “comportamiento
contexto histórico en el que se producen y las causas individual y colectivo tiende a representar imáge-
que las originan. Así, su estudio contribuye a des- nes y determinaciones institucionales ideológica-
naturalizar la violencia y el racismo, a relativizar la mente estructuradas (…) y [que] los sentimientos,
idea de “la fragilidad de las instituciones humanas” actitudes y prejuicios subjetivos surgen dentro de
y a denunciar el incumplimiento de los principios un marco de relaciones interétnicas e interraciales
de la Carta de Naciones Unidas, una práctica recu- condicionadas por imperativos económicos y po-
rrente entre los Estados que la suscriben. líticos” – sistémicos diríamos nosotros. (1994: 12)
Con una extraordinaria claridad en la expo- Reconoce entonces, en ese mismo trabajo,
sición de sus ideas y argumentaciones, y una escri- que la globalización de la cultura occidental tiene
tura dirigida a todos los públicos, sin demérito a la gran impacto en las dinámicas identitarias y en la
hora de explicar fenómenos complejos, encuentra internacionalización de la economía y de las mi-
en la globalización económica y la revolución tec- graciones,2 al dar pie a la configuración de “comu-
nológica las causas de estas violencias; las que, jus- nidades” y diásporas que, pensamos, inciden en
tamente, señala, dan pie a las migraciones masivas la vida de los países de origen y de inmigración.
de trabajadores. No sólo porque los grupos dominantes encuen-
Así, según su análisis, el surgimiento del ra- tran condiciones para legitimar sus comunidades
cismo y la xenofobia se producen a partir de dos nacionales al definir las identidades nacionales en
dimensiones: en “el cambio de las relaciones entre términos raciales, étnicos, racistas o lingüísticos,
estados”, el cual provoca efectivamente el “quiebre excluyendo a otros componentes de la nación, y al
de las economías nacionales”, y en la continuidad construir “ideologías racistas y xenófobas”, como
de un concepto de Estado-nacional decimonónico, bien lo señala; sino porque, a mi juicio, paradó-
al que le es intrínseca la homogeneidad cultural, y jicamente, los migrantes intervienen en la corre-
que, en consecuencia, niega la realidad multicultu- lación de fuerzas en ambos contextos, exigiendo
ral, multiétnica, multirracial y multinacional de las derechos y estrechando vínculos tanto con sus co-
sociedades. Es ahí “en donde residen las mayores munidades de origen como con sus comunidades
tensiones y conflictos étnicos”, mismos que, según de inmigración. Esto es, por su lugar entre los esta-
su postura, podían evitarse desde el sistema inter- dos, pueden desarrollar puentes de comunicación
nacional, los Estados y las sociedades. intercultural.
Para el entendimiento de estas intoleran- En esta lógica, Stavenhagen piensa que se
cias, se opone a reducirlas al plano exclusivo de los constituye el Otro colonizado, definido racial, psi-
“prejuicios irracionales”, de la “mala información” 2. Rodolfo Stavenhagen, “Racismo y Xenofobia en tiempos de la globa-
lización”, Estudios Sociológicos XII: 34, 1994: pp. 9-16.

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cológica y culturalmente inferior al colonizador de gica del capital, en la medida en que promueve una
la metrópoli, para justificar la expansión colonial diferenciación socioeconómica “racial y cultural”..
y neocolonial. En ausencia de víctimas externas, Este lúcido trabajo, escrito a principios de los no-
la ideología nacional construye sus otros externos venta, deja asentados los rasgos del neoliberalismo
y/o internos “para desahogar sobre ellos sus frus- y las bases para el estudio de los racismos y xeno-
traciones y odios” (los pogroms, cámaras de gas). fobias del siglo XXI.
De ese modo, Rodoflo Stavenhagen identifica el En ese mismo sentido, argumentará que la
significado de una “conciencia étnica” que se for- división cultural del trabajo prepara la “racializa-
ma ideológica y culturalmente en el tiempo y que ción” de las relaciones económicas y la formación
puede promover la deshumanización de los Otros de identidades colectivas que se confrontan en
hasta justificar el odio y su eliminación, el Holo- el mercado de trabajo; lo que se conoce como la
causto, la Gran Guerra. etnicización de la fuerza de trabajo, denominada
Es la ideología que difunden los Frentes Na- así en los años noventa por Etienne Balibar y Em-
cionales que se forman en casi toda Europa desde la manuel Wallerstein. Hoy, las políticas antiinmi-
década de los noventa, los cuales encuentran chivos grantes y las legislaciones racistas contra los tra-
expiatorios en los inmigrantes, a quienes atribuyen bajadores, como la de Arizona; las propuestas de
la crisis económica y política, la inseguridad y la vio- Donald Trump: “Construir un muro en la frontera
lencia; por su parte, en el contexto latinoamericano con México”, “Deportar a millones de inmigrantes
igualmente surgen y se fortalecen fuerzas fascistas indocumentados”, “Traer trabajos de vuelta a Esta-
que actúan con creciente beligerancia. En Venezue- dos Unidos”; junto con las políticas antiinmigran-
la, estos chivos expiatorios son los chavistas pobres tes en Europa, tienen el signo de un nacionalismo
y afrodescendientes; en Brasil son negros, pobres y xenófobo que ha desencadenado discursos y prác-
jóvenes; en México, mujeres e indígenas. ticas de odio racial al inmigrante y provocado un
En esta incursión, Rodolfo Stavenhagen re- drama humano, por la violación de los derechos
laciona las modalidades del neoliberalismo y las humanos y la negación del derecho al trabajo, la
intolerancias del nuevo milenio, al puntualizar que seguridad, y dignidad de inmigrantes, refugiados,
la reestructuración económica neoliberal, por una y desplazados.
parte, provoca “privaciones excesivas” y, simultá- En años en que el estudio del racismo en
neamente acentúa diversos problemas: la segmenta- México era todavía tabú, Stavenhagen distingue el
ción de los mercados de trabajo; el desplazamiento racismo de la xenofobia y el racismo tradicional
de empresas en busca de los salarios más bajos en del moderno. Y advierte una cuestión esencial: “la
el mundo; la reducción de las estrategias de lucha xenofobia sólo puede desarrollarse en un contexto
sindical orientadas sólo a preservar mínimos ser- de racismo institucionalizado o por la presencia
vicios; la concentración de tecnología y capital que de ideologías racistas”, relación primordial para un
desecha a los “no competitivos”; y una economía análisis de las expresiones extremas xenofóbicas y
informal en condiciones de precariedad y sin de- para establecer políticas y estrategias de lucha con-
rechos laborales, pero que no logra escapar a la ló- tra estas intolerancias. En el segundo caso, iden-

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tifica una diferencia sustancial: en el racismo tra- sociológicos contemporáneos; y, en lo particular,
dicional prevalecen los atributos físicos heredados demuestra la inminencia del análisis comparati-
biológicamente y, en el moderno, “la raza deja de vo a fin de reconocer constantes y especificidades
ser una condición del racismo”, “la ideología racista de los conflictos étnicos. Es un texto estructura-
crea la raza”, el sujeto racializado es física y cultural- do con una pedagogía sui generis muy propia del
mente diferente, representa lo no-nacional o anti- maestro Rodolfo que conduce al lector por la ló-
gica inherente de cada uno de estos conflictos –to-
nacional, como escribiera Najenson, desde la idea
dos marcados por una violencia extrema–, según
de una nación homogénea. Pero hace una precisión
las particularidades históricas de los países en que
fundamental: la supuesta diferencia biológica no
surgen y se desarrollan.
desaparece, queda subsumida a lo cultural, se pro-
Es verdad que, luego de la segunda guerra
duce un proceso de biologización de la diferencia,
mundial y de los instrumentos internacionales
ya sea cultural, religiosa, social o política.
aprobados por la Asamblea de la ONU, se pensa-
En consecuencia, examina la “nueva” dife- ba no volverían a repetirse las violencias extremas
rencia racializada, la ideología nacional en Nortea- para eliminar al Otro. Sin embargo, explica Sta-
mérica y Europa, misma que arguye la incompati- venhagen, las “fuerzas sociales” que transforman
bilidad de la diferencia cultural del inmigrante con el mundo en la segunda mitad del siglo XX, de-
la cultura nacional, lo que para Stavenhagen cons- terminan nuevas condiciones para la gestación y
tituye una contradicción, pues el racismo y la divi- propagación de las violencias, entre las que destaca
sión cultural del trabajo “hacen extremadamente nuevamente: la globalización de la economía, las
difícil para el inmigrante adoptar la cultura domi- grandes migraciones en busca de empleo, educa-
nante” y asimilarse. El nacional lo rechaza, no to- ción y seguridad, y la profundización de las des-
lera la transgresión de las fronteras identitarias ni igualdades sociales.
la idea de asemejarse, y su presencia es percibida Nuevamente, los genocidios del siglo pasado
ponen en evidencia que el racismo es un poderoso
como una amenaza a su blanquitud. En el contex-
instrumento de la dominación y un fenómeno recu-
to latinoamericano, la exteriorización del Otro se
rrente en la historia, que tiene como telón de fondo:
produce de manera distinta, xenofilia y xenofobia
los nacionalismos y colonialismos, en los casos de la
operan dependiendo de los orígenes nacionales,
ex-Yugoslavia y de Ruanda; las condiciones de po-
sociales y étnico-raciales de los sujetos migrantes.3
breza y conflictos en otros países de África y de Asia;
En los tiempos neocoloniales, de resurgi-
y el neocolonialismo en América Latina.
miento de los nacionalismos y de una industria
En estos conflictos etno-políticos, Rodolfo
de guerra que se expande, Conflictos étnicos y Es-
Stavenhagen identifica actores estratégicos y en-
tado nacional, se convierte en un trabajo particu-
cuentra las semillas del conflicto en el racismo,
larmente valioso en los estudios antropológicos y
esto a la luz del discurso y las prácticas de grupos
3. Aquí cabe recordar que la etnicidad es considerada por Rodolfo
Stavenhagen como un fenómeno universal que se distingue por su supremacistas blancos en Estados Unidos que des-
lengua, religión, territorio, historia, organización social y política, mi-
tos y sentimiento de identidad; y que se relaciona con otros grupos pliegan su agresión particularmente en contra de
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una “fuerza diferenciadora que distribuye recursos” y guarda intere- los negros durante los años 70 y ochenta del siglo
VHVHVSHF¯ͤFRVHQHVDPHGLGDODHWQLFLGDGSXHGHHQWRQFHVSURIXQ-
dizar las desigualdades hasta deshumanizar al Otro. pasado. Indudablemente, su estudio hoy contri-

14 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


buye al entendimiento de su resurgimiento y la cuando se introducen políticas de discriminación
violencia de las políticas migratorias xenófobas de positiva para el ingreso de estudiantes mujeres y
este nuevo milenio. de los grupos minoritarios, y de apertura en las
Por otro lado, encuentra el carácter multi- universidades de los Departamentos de Estudios
causal de estas intolerancias y explica que la diná- Afrodescendientes, Chicanos y de Género.
mica del conflicto “contribuye a forjar identidades De acuerdo con su análisis, la formación de
étnicas y a crear imágenes, estereotipos y prejui- una base social de estos movimientos de extrema
cios”, las que a su vez inciden en la visión y acción derecha se explica a través del deterioro de las con-
de los grupos en conflicto, originando miedo y diciones de vida de los trabajadores. La percepción
odio; además de que estas “ideologías étnicas y ra- de amenaza a sus modos de vida encuentra asidero
ciales” surgen de actores con intereses propios que en períodos de cambio social, cuando los nacio-
actúan en la configuración de las mentalidades de nales luchan por preservar sus privilegios. Todas
los grupos en conflicto. estas circunstancias favorecen el surgimiento de
Recuérdese cómo los medios de comuni- “una mentalidad monista”, “absolutista”, desde un
cación en Ruanda exacerban el rechazo y el odio, fundamentalismo cristiano, señala Stavenhagen;
animalizan y reducen a los Hutus a repugnantes una situación recurrente en la historia del racis-
“cucarachas” (Stavenhagen, 2000). Transcurridos mo, la exclusión y la xenofobia del siglo xx y tam-
más de 20 años de estos hechos, actualmente se bién del xxi (2000: 285). En aquellos años, para
suscitan conflictos que reavivan las intolerancias fines destructivos, se reclutan personas entre gru-
en el siglo xxi. Donald Trump, los monopolios pos paramilitares, agricultores, presos y hombres
mediáticos estadounidenses y grupos suprema- de campos militares de Estados Unidos, Japón y
cistas blancos, como hace casi cincuenta años, di- Filipinas. Esta base social guarda un perfil de ciu-
funden un discurso racista, xenófobo y sexista que dadano muy semejante al que las encuestas iden-
moviliza conciencias y acciones directas y cotidia- tifican como el de los electores de Donald Trump;
nas contra los inmigrantes. muchos de ellos proceden de regiones que sufren
En Semillas del Conflicto examina el racis- un proceso de desindustrialización, en las que ob-
mo, la xenofobia y el antisemitismo, a la luz de tuvo una votación significativa.
los incidentes racistas y antisemitas ocurridos en Efectivamente, en tiempos de crisis econó-
ese período en Estados Unidos, los cuales se in- mica y/o de relativa bonanza y ascenso social de
crementan y son “prueba de que el racismo tie- los Otros, que entonces irrumpen en espacios an-
ne arraigo en la sociedad estadounidense”. Según tes distintivos y exclusivos, se exacerban las into-
registra, se producen 3,000 actos violentos (138 lerancias, debido a la pérdida de exclusividades;
bombazos), en campus universitarios y en más de todo esto, provocado por un proceso de igualación.5
250 universidades4 –espacios donde precisamente Estos son tiempos en que se suscita la idea
se gesta el pensamiento crítico y una ciencia al ser- de la invasión –en el caso estudiado por Rodolfo
vicio de la sociedad. Ese incremento sucede justo Stavenhagen– supuestamente llevada a cabo por
4. En los años noventa, sumaban 67 las organizaciones que predica-
ban el odio racial o étnico, y contaban aproximadamente con 20 mil 5. Cfr. Rea Campos, Cuando la otredad se iguala. Racismo y cambio
miembros y 200 mil seguidores. estructural en Oruro-Bolivia, México, El Colegio de México, 2015.

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 15


los no blancos y los matrimonios mixtos; aunada a ventud blanca en las escuelas, apoyo a la investi-
bajos índices de natalidad de la “raza blanca”, esto gación racista en la academia para demostrar la
es, a una autopercepción de estar en peligro de “superioridad nórdica”, etc. Algo muy próximo a
extinción, que alientan ideólogos de pensamiento lo que acontece hoy en la región latinoamericana,
racista. Hoy, en Estados Unidos y Europa, la idea de manera sutil y abierta en diversos espacios, en
de invasión de mexicanos y latinoamericanos, ára- situaciones de conflicto y contra sujetos afrodes-
bes y africanos, constituye un componente de una cendientes, pobres, en Venezuela, Brasil y México.
fuerza ideológica racista y xenófoba que marca las De tal forma, lo que revela este recorrido
políticas migratorias y las relaciones entre nacio- que hace por los discursos y prácticas de organiza-
nales e inmigrantes. ciones de derecha y supremacistas en Estados Uni-
Siguiendo la dinámica de estas organizacio- dos en los ochenta y noventa, es que el racismo,
nes de supremacistas blancos en los años ochenta la xenofobia y el antisemitismo, no son ideologías
del siglo pasado, Stavenhagen observa que se apro- que puedan ser reducidas a discursos y comporta-
pian de discursos contestatarios de las minorías, mientos, sino que constituyen una fuerza política,
reivindican derechos de los blancos, proponen con capacidad de convocatoria en una sociedad
“depuración racial”, llaman a disparar a quien pre- donde las desigualdades sociales se profundizan y
tenda cruzar las fronteras y convocan al “uso de el odio racial lo difunde discursivamente el mismo
la eugenesia para el desarrollo de la raza blanca”. poder dominante, en este caso el presidente Do-
Pero también “el enemigo” de las organizaciones nald Trump.
racistas, puede cambiar. El KKK encuentra un Así, este trabajo enseña la necesidad de re-
“nuevo” enemigo: el Estado, pero controlado por conocer el arraigo del racismo, la xenofobia y el
“judíos anticristos”, quienes habrían “infestado to- antisemitismo en la sociedad estadounidense, en
das las naciones blancas”. En una palabra, se trata diversos grados y niveles en muchas sociedades,
de la contaminación del Otro, una constante en la tal vez debido a que estas ideologías son consus-
historia de la violencia racista y xenófoba (Staven- tanciales al sistema capitalista para ejercer la do-
hagen 2000: 291). minación y su reproducción en la lucha y defensa
En este contexto, los grupos dominantes a de intereses de clase y de privilegios. Asimismo,
través de los medios de comunicación –que con demuestra el sentido profundo de estudiar estos
frecuencia son poseedores del tercer poder, así de- mecanismos de exclusión, los sujetos y las orga-
nominado por Teun van Dijk– cumplen un papel nizaciones racistas, y las semillas de los conflictos
decisivo en la difusión del odio racial y de clase. sociales, en tanto pueden pasar a niveles de acción
Al respecto, señala Stavenhagen que las organiza- política que ponen en riesgo la integridad del Otro
ciones supremacistas hacen uso de múltiples me- – como lo propone Michel Wieviorka en su libro
dios de comunicación, estaciones de radio, men- clásico Espacio del racismo; sin olvidar las expre-
sajes telefónicos, anuncios electrónicos, volantes siones de violencia extrema que se suscitan cuan-
en las escuelas de educación media, programas do justamente el Estado interviene y racializa las
que llaman a estudiantes para organizar a la ju- relaciones sociales. Por lo que hay que proseguir

16 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


las tareas legadas por Rodolfo Stavenhagen, que no nos tienen derecho a vivir libres de discriminación
se reducen a la denuncia y al análisis, sino a enfren- y de disfrutar de una igualdad fundamental”. A
tar simultáneamente las estructuras de dominación partir de esta perspectiva, formula preguntas7 para
y las ideologías que propagan el odio al Otro. En discutir sobre el racismo y la xenofobia, esclarecer
consecuencia, en Conflictos étnicos Stavenhagen el alcance del reconocimiento de este derecho, re-
deja claro que el racismo es una ideología que sus- solver si estos derechos humanos son excluyentes,
tenta la creencia en la superioridad y la inferiori- si defender un derecho niega el de otros, o si son
dad racial, a partir de lo biológico, lo religioso y lo incompatibles. Estos son algunos problemas que
nacional. Esto es, en el inicio del nuevo milenio, en aquellos años consideraba había que estudiar y
distingue el racismo religioso cristiano, el racismo debatir sobre el racismo y la xenofobia, los que in-
científico y el racismo “nacionalista”; su especifi- dudablemente siguen igualmente vigentes en este
cidad reside en diversas ideologías y en la ciencia. siglo XX1.
La constante es la construcción del Otro “inferior” El libro sobre La cuestión étnica pone en evi-
con base en diferencias específicas entre un “noso- dencia el singular interés académico y político por
tros” y los otros, y la fijación de estas diferencias los derechos de las colectividades diferenciadas y de
cualquiera que sea su naturaleza (2000: 307-308). las nacionalidades mayoritarias. A partir del análi-
De allí el significado primordial que estas sis del conjunto de instrumentos internacionales y
formas de exclusión tienen en su pensamiento actividades impulsadas por la onu para combatir
y en los organismos internacionales: constitu- la discriminación racial, que comprenden desde la
yen un peligro para la paz y para el goce de los Convención Internacional sobre la Eliminación de
derechos humanos. Lo que explica la necesidad todas las Formas de Discriminación Racial (1965)
perentoria de crear “estructuras legales, educa- hasta la Declaración sobre la Eliminación de todas

tivas y culturales” para oponerse a su poderosa las Formas de Intolerancia y Discriminación Fun-
dadas en la Religión o las Convicciones (1981),
influencia. Desgraciadamente, aunque prolife-
Stavenhagen asienta que “garantizan el respeto a
ran las iniciativas de la ONU para combatir el
los derechos humanos universales individuales,
racismo, los grupos extremistas y los incidentes
pero no a los derechos específicos que demandan
racistas y antisemitas resurgen. Esto puede co-
las minorías; para combatir el racismo y la discri-
rroborarse hoy luego de casi veinte años de ha-
minación racial son insuficientes.” (2001: 110)
berse escrito este trabajo.6
De ese modo, el estudio de estas formas de
negación del Otro diferente es indisociable de su
incursión y larga trayectoria en relación con los 3UHJXQWDHODXWRU̸6LJQLͤFDHVWRTXHODVFRPXQLGDGHVLQPLJUDQ-
WHV WLHQHQ HO GHUHFKR GH ̸DVLPLODUVH̹ H ̸LQWHJUDUVH̹ R VLJQLͤFD TXH
derechos humanos, mismos que “están en el fondo tienen derecho a una identidad propia, a ser diferentes? ¿Es el dis-
frute de uno de estos derechos excluyente del otro? Si los ideólogos
de este debate”. Al respecto, señala que el derecho del nacionalismo reivindican sus derechos a la identidad nacional y a
cerrar fronteras para su preservación, ¿no están defendiendo un de-
internacional reconoce “que todos los seres huma- recho y negando a otros al mismo tiempo? ¿Son incompatibles tales
derechos? ¿Incluye el derecho a vivir libre de discriminación también
6. La Carta Internacional de Derechos Humanos proscribe la discri- el derecho a ser diferente? ¿De qué manera pueden ponerse en vigor
minación basada en la raza. Unesco concluye que la “cuestión racial” y respetarse estos derechos en el estado nacional moderno?”. Ro-
\ODLGHDGHODVXSHULRULGDGUDFLDOFDUHFHQGHEDVHVFLHQW¯ͤFDV,QQX- dolfo Stavenhagen, “Racismo y Xenofobia en tiempos de la globali-
merables iniciativas son adoptadas para combatir el racismo. zación”, Estudios Sociológicos XII: 34, 1994: 15, 16.

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 17


La onu aprueba en 1992 la Declaración El autor hace un recuento histórico del re-
sobre los Derechos de las Personas pertenecien- conocimiento del derecho a la autodeterminación
tes a Minorías Nacionales o Étnicas, Religiosas y que, desde 1952, reconoce la Asamblea General,
Lingüísticas, pero señala Rodolfo Stavenhagen se que no incluye a las minorías y pueblos origina-
logra sólo la inclusión del artículo 27 en el Pacto rios, estableciendo una distinción entre pueblos,
Internacional de Derechos Civiles y Políticos que naciones y estados. En ese esfuerzo por reconocer
protege los derechos de las minorías en forma ne- los derechos de los pueblos, distingue diferentes
gativa, “no se negará a las personas que pertene- formas de autodeterminación interna y externa,
cen a dichas minorías el derecho que les corres- en tanto derecho humano universal (Stavenhagen
ponde, en común con los demás miembros de su 2001: 235). Reitera su crítica a la resistencia de los
grupo, a tener su propia vida cultural, …”. Lo que Estados al reconocimiento de derechos colectivos,
reconoce no es suficiente para preservar las cul- a partir del argumento que no es suficiente la pro-
turas y las identidades de las minorías, tampoco tección de los derechos individuales.
convertirse en un derecho humano, colectivo y La trayectoria académica transita por el re-
universal. Además, la Declaración protege en últi- conocimiento de los derechos y contra las intole-
ma instancia la integridad territorial y la indepen- rancias; así, el denominado antirracismo queda
dencia política nacional. (2001: 103-105) De facto, implícito en sus escritos sobre la tolerancia, sobre
estos instrumentos internacionales encuentran sub- los derechos humanos y colectivos, y en sus infor-
terfugios para preservar los intereses de los Estados mes como Relator de la onu. El valor de su obra
nacionales. trasciende los tiempos, y una relectura de sus tra-
El tema de los derechos de las etnias es ob- bajos deja claro que desarrolla todo un debate ins-
jeto de análisis en el sistema internacional y na- crito en un antirracismo y contra toda forma de
cional, específicamente los derechos étnicos y las intolerancia, incluyendo el clasismo y, pese a que
políticas nacionales. En este primer nivel, incur- no se hace explícito en su obra, el sexismo, en tan-
siona en los derechos de las minorías a través de to que su violación supone ideologías que legiti-
los instrumentos internacionales y regionales de man la explotación y distintas formas de opresión.
protección de sus derechos específicos, colectivos, Los aportes y herramientas teórico-meto-
y en la argumentación de oposición a su reconoci- dológicas son innegables respecto a los horizon-
miento, dejando claro que la lucha de las minorías tes que abren los pueblos indígenas y afrodescen-
por su reconocimiento es por la supervivencia, y dientes en México y en la región latinoamericana,
que sin este reconocimiento de los derechos colec- para una comprensión del racismo, la xenofobia y
tivos es difícil la protección de los derechos huma- el antisemitismo contemporáneos, los cuales re-
nos, los cuales implican igualdad, derechos civiles surgen de manera más abierta en México, como
y políticos y no discriminación, derechos sociales, se observa en las políticas neoliberales de despojo
económicos y culturales y su compleja interrela- particularmente a los pueblos originarios, o en la
ción en el pensamiento liberal. reacción de los medios y los partidos políticos a la
iniciativa política del CNI y EZLN de integrar un

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Concejo de Gobierno y proponer una Candidata _____(1994) “Racismo y xenofobia en tiempos de
Indígena para la presidencia de la República. la globalización”. En: Estudios Sociológicos,
En suma, la obra de Rodolfo Stavenhagen Vol. XII, no. 34, pp. 9-16.
se distingue por sus importantes contribuciones al _____(2000) Conflictos étnicos y Estado Nacional.
desarrollo de una ciencia social proclive a recono- México, Siglo XXI.
cer y valorar la diversidad y la diferencia cultura- _____(2001) “Racismo y Tolerancia”. En: Memoria
les, que no es exclusivamente académica. Su pos- del Seminario Internacional sobre Tolerancia.
tura humanista es concomitante con su relación México, Comisión Nacional de los Derechos
con los pueblos, con los otros a los que trataba con Humanos.
gran respeto e interés por la persona y por la colec- _____(2001) La cuestión étnica. México, El Cole-
tividad, en un tiempo de violencias, pragmatismo gio de México.
e individualismo. Quienes le conocimos en la aca- _____(2002) “¿Qué tipo de tejido? De la línea
demia y la convivencia social, encontramos en Ro- divisoria por pigmentación a la hamaca”.
dolfo Stavenhagen a un notable académico y una Conferencia magistral en la III Conferencia
bella persona, a un científico social comprometido Mundial sobre Racismo, Xenofobia y otras
con la realidad y los sujetos de estudio, sencillo y formas de intolerancia. Durban, Sudáfrica.
consecuente en la práctica con sus ideas. _____(2008) Informes anuales como Relator Espe-
cial de las Naciones Unidas para la Situación
de los Derechos Humanos y las Libertades
Bibliografía Fundamentales de los Pueblos Indígenas.
En: Los pueblos Indígenas y sus Derechos,
Stavenhagen, Rodolfo (1971 3ª edición), “Rela- ONU-UNESCO/MÉXICO.
ciones interétnicas y relaciones de clases en Wieviorka, Michel (1992), El espacio del racismo.
Mesoamérica”. En: Las clases sociales en las Barcelona, Paidós.
sociedades agrarias. México, Siglo XXI.
_____(1972) “¿Cómo descolonizar las Ciencias
Sociales?”. En: Sociología y subdesarrollo.
México, Nuestro Tiempo, pp. 207-236.
_____(1981) “Siete Tesis Equivocadas sobre Amé-
rica Latina”. En: Sociología y subdesarrollo.
México, Nuestro Tiempo, pp.15-84.
_____(1992) “Antropología y racismo: un debate
inconcluso”. En: Antropológicas. Revista de
difusión del Instituto de Investigaciones An-
tropológicas, no. 4, México, UNAM, pp. 5-8.

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 19


Fotografía: Archivo propiedad de Elia Stavenhagen

20 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


Dimensiones ocultas mas de justicia indígena y sobre los derechos de los
pueblos indígenas, sino porque significa el ejerci-
de los conflictos étnico- cio de un activismo académico y político en defen-
nacionales en el mundo sa de los derechos colectivos en América Latina.
Laura R. Valladares de la Cruz1 Muchos son los antropólogos que segura-
mente se habrán iniciado en los estudios socioju-
El 5 de noviembre de 2016 perdimos a uno de los
rídicos a través de la lectura del libro Entre la ley y
más destacados, reconocidos y queridos antro-
la costumbre. El derecho consuetudinario en Amé-
pólogos de México: Rodolfo Stavenhagen, quien
rica Latina coordinado por Rodolfo Stavenhagen
fuera uno de los teóricos más lúcidos de América
y Diego Iturralde (1990), texto que fue el primer
Latina, defensor de los derechos de los pueblos in-
resultado del trabajo de investigación de aquellos
dígenas y minorías del mundo, pionero en la críti-
jóvenes pioneros. Inclusive podemos señalar que
ca social al colonialismo interno y al racismo en la
fue el momento fundacional de lo que después
sociedad y en la política, así como un formador de
se conformaría como un nuevo campo de inves-
grupos de investigación; siendo esta última acti-
tigación especializado. No obstante, en términos
vidad una de las más significativas contribuciones
más amplios, podríamos evocar otro momento
que hiciera a la antropología y a las ciencias socia-
histórico relevante, que marca un giro en el de-
les y políticas en las últimas décadas.
bate de la relación de los pueblos indígenas y los
De su larga trayectoria académica me gus-
Estados-nacionales: el célebre Seminario sobre la
taría destacar tres campos en donde su aporte e
fricción interétnica en América del Sur, realizado
impacto fue muy relevante. Me referiré en primer
en la isla de Barbados en el año 1971. Han trans-
lugar a su estímulo para formar el grupo de trabajo
currido 48 años desde que se logró colocar en el
sobre Antropología Jurídica, al cual Teresa Sierra
debate internacional el tema de la violencia contra
le dedica un capítulo en este mismo homenaje. Por
los pueblos indígenas, expresado, entre otras co-
lo que sobre este particular sólo quisiera expresar
sas, en el saqueo de los recursos naturales de sus
una pocas palabras para recordar que aquel peque-
territorios. Es decir que, hace ya casi medio siglo
ño grupo de antropólogos, lingüistas y sociólogos
se ha venido denunciado de forma constante la in-
que fueron convocados por Rodolfo Stavenhagen,
vasión y el acoso sobre los recursos energéticos y
en el año de 1987, para estudiar la entonces de-
el patrimonio biocultural, así como los atentados
nominada “costumbre jurídica”, floreció enorme-
contra los derechos de los pueblos indígenas y la
mente y hoy en día este campo de investigación ha
violencia etnocida que ha caracterizado al deno-
crecido a lo largo y ancho de nuestra América Lati-
minado “desarrollo” y que en la etapa neoliberal se
na y tiene una enorme importancia no sólo porque
ha recrudecido enormemente.
propone nuevas interpretaciones y metodologías
Ahora bien, el grupo de investigación sobre
en el estudio de los hoy reconocidos como siste-
los sistemas jurídicos y los derechos indígenas,
1. Profesora-Investigadora del Departamento de Antropología de la forjado hace treinta años, ha crecido como comu-
ϭͱͿͻ. Correo: lauravalladares.delacruz@gmail.com.
nidad epistémica y se ha nutrido con abordajes

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 21


teórico-metodológicos provenientes de distintas modalidades de relación que surgen en el contexto
geografías y tradiciones científicas, intentando no de la transnacionalización de la ley y los derechos.
solo entender y dar cuenta de los diferentes siste- Desde entonces, la relaju ha organizado
mas de justicia en los pueblos indígenas, sino que nueve congresos latinoamericanos (Ecuador 1997,
se ha documentado y apoyado su lucha por tener Chile 2000, Guatemala 2002, Quito 2004, México
derechos y por la defensa de sus autonomías in- 2006, Colombia 2008, Perú 2010, Bolivia 2012,
dígenas. Asimismo, el grupo se ha interesado en Brasil 2015 y el último tuvo como sede la ciudad de
analizar las democracias plurales, la creación de los Temuco, en Chile, en el mes de octubre de 2018).2
nuevos Estados-nacionales en el Sur del continen- A treinta años podemos constatar que se
te en clave pluriétnica y pluricultural, intentando logró constituir un campo de investigación muy
analizar sus avances, retos y contradicciones, así sólido en donde el diálogo interdisciplinario entre
como las formas en que se expresa la nueva rela- abogados y antropólogos ha sido muy fructífero.
ción Estado-pueblos indígenas en el post-neolibe- Los abogados se antropologizaron y los antropó-
ralismo, es decir, las temáticas se han pluralizado y logos nos derechogizamos al sumergimos en los
complejizado tanto como las realidades nacionales laberintos del derecho y las prácticas jurídicas,
latinoamericanas. en una suerte de simbiosis profundamente rica y
Uno de los hitos relevantes para el fortale- prometedora. Con el paso de los años se fueron
cimiento y ampliación de los vínculos latinoame- sumando a aquel grupo especialistas de distintas
ricanos sobre temas jurídicos desde la perspectiva corrientes, además de líderes, representantes de
antropológica; se dio en el año 1997, cuando varios pueblos y organizaciones que han jugado un rol
antropólogos dieron vida a la Red Latinoamerica- muy significativo en los procesos de reconoci-
na de Antropología Jurídica (relaju), en el marco miento de los derechos de los pueblos indígenas
del 49º Congreso Internacional de Americanistas, en América Latina y en la defensa de sus derechos
realizado en la ciudad de Quito, Ecuador. La Red violentados. Se han generado nuevos acercamien-
está integrada por activistas, antropólogos, aboga- tos teóricos y metodológicos para la construcción
dos, sociólogos y otros especialistas en ciencias so- de conocimientos alrededor de lo que en términos
ciales de diferentes partes del mundo que trabajan amplios se ha denominado como la cuestión ét-
en o sobre Latinoamérica, y ponen su atención en nico-nacional –y dentro de ésta, el pluralismo ju-
el pluralismo jurídico y su promoción con una vi- rídico–; entre ellos, abordajes interdisciplinarios,

sión crítica, social y antropológica del derecho, la sustentados en metodologías dialógicas, colabo-
rativas y comprometidas con los derechos de los
justicia y los derechos colectivos. Sus objetivos han
pueblos indígenas y la justicia. Es interesante men-
sido el impulsar el análisis, estudio y difusión del
cionar que después de que Stavenhagen sembró la
derecho indígena, del derecho popular y del plura-
semilla y constituyó el primer grupo de trabajo ya
lismo jurídico, así como de los problemas teóricos
y prácticos que surgen de la relación entre el dere- 2. El crecimiento de la Red ha sido vertiginoso como lo muestra el
hecho de que en el año 2006, la Ϝͷ;ͱͼϭ acordó la conveniencia de
cho estatal y las formas no estatales de derecho, de celebrar inter-congresos en cada país, con miras a fortalecer los la-
zos nacionales. En el caso de México, en los últimos seis años se han
sus múltiples interacciones, y acerca de las nuevas realizado cuatro congresos: 2011 Chiapas, 2013 Ciudad de México,
2016 Morelia y 2018 en la ciudad de San Luis Potosí.

22 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


no siguió los trabajos directamente, aunque sí de te las recomendaciones emanadas de los informes
manera cercana, pues continuó con su labor de no estaban siendo respondidas o cumplidas cabal-
formar otros grupos de investigación y se involu- mente por los Estados involucrados, para los mo-
cró en nuevas actividades, como fue su trabajo en vimientos y pueblos indígenas se constituyeron en
las Naciones Unidas. un reconocimiento internacional de las injusticias
De aquí el segundo aporte relevante de Sta- y los problemas urgentes que padecían y, en este
venhagen para los pueblos indígenas del mundo, sentido, legitimaban las luchas por sus derechos
que se cristalizó en su rol como primer Relator Es- colectivos y brindaban un sustento jurídico para
pecial de las Naciones Unidas sobre la Situación de detener las múltiples violaciones que sufren como
los Derechos Humanos y Libertades Fundamen- pueblos al interior de los Estados-nacionales que
tales de los Pueblos Indígenas. Dichos informes los contienen.
han sido un instrumento importante para hacer El tercer aporte de Stavenhagen al que quie-
visible su situación en los espacios de trabajo con ro referirme es el relativo a la conformación del
las agencias internacionales y organismos de dere- grupo de trabajo sobre Conflictos étnicos y Esta-
chos humanos. Con esto se logró abrir espacios de dos nacionales, que inició sus trabajos en el año
diálogo entre los pueblos indígenas, los Gobiernos 1990, bajo los auspicios del Instituto de Investi-
y las organizaciones internacionales. gación de las Naciones Unidas para el Desarrollo
Como sabemos, uno de los mandatos del Social (unirsd). Este proyecto se llevó a cabo du-
Relator Especial es la realización de visitas in situ rante cinco años y generó amplios informes y pu-
a los países para iniciar un diálogo con el gobier- blicaciones diversas. Como uno de los resultados
no, las comunidades indígenas y otras organiza- de este proyecto, Stavenhagen publicó en el año
ciones sociales, e informar sobre los resultados 1996 el texto titulado Ethnic conflict and the Nation
de sus pesquisas sobre la situación de los pueblos State,3 recuperando los resultados de la amplia in-
al Consejo de Derechos Humanos de Naciones vestigación comparativa que abarcó a quince paí-
Unidas.  Durante su mandato, que transcurrió ses en seis grandes regiones del planeta: Kurdistán,
entre el año 2001 al 2008, realizó 11 visitas, que Líbano, Cuerno de África, Fiji, Guyana, Malasia,
concluyeron con igual número de Informes (Fili- Burundi, Nigeria, Guatemala y la antigua Unión
pinas 2002, Guatemala 2002, México 2003, Chile Soviética.
2003, Canadá 2004, Colombia 2004, Nueva Ze- El texto de Stavenhagen es importante, pues
landia 2005, Sudáfrica 2005, Kenia 2006, Ecuador los conflictos étnicos y nacionalistas incluidos en
2006 y Bolivia 2007). Los informes generados y los el estudio son de índole diversa: algunos eran muy
diálogos entablados han tenido impactos positivos antiguos, otros recientes; unos eran de tipo reli-
para visibilizar la situación de los pueblos indí- gioso, otros raciales, otros más lingüísticos y terri-
genas y emitir recomendaciones para el cumpli- toriales. Uno de los hallazgos más relevantes fue
miento de sus derechos fundamentales. Y si bien el el constatar que todos los conflictos étnicos son
propio Rodolfo, en una evaluación sobre el papel políticos y desafían la concepción dominante del
del Relator Especial señalaba que lamentablemen- 3. La versión en español fue publicada en el año 2000 bajo el título
Conflictos étnicos y Estados-nacionales.

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 23


Estado-nacional. Además, son multicausales, por otras formas de identidad cultural se utilizan para
lo que su explicación no se agota solamente en la distinguir a los contendientes. Pero cuyo entendi-
pertenencia étnica o en la defensa de sus identi- miento no se agota en las pertenencias étnicas, por
dades, pues sólo pueden ser explicados en térmi- lo que se deben incorporar las dimensiones que
nos históricos y contextuales. En la mayoría de los recién comenté.
casos estudiados, las historias de colonización son Ahora bien, el interés por el estudio sobre
significativas porque implican no solamente des- los conflictos violentos que tienen como una de
pojos e imposiciones que cambiaron las geografías sus dimensiones la pertenencia étnica, responde a
étnicas y políticas de los territorios colonizados. la envergadura de los conflictos en el mundo que
Lo mismo corresponde a considerar los cambios se exacerbaron en los años posteriores a la segun-
surgidos al momento de instaurarse los estados da guerra mundial. Por ejemplo, otros especialis-
nacionales y la imposición de fronteras naciona- tas en minorías de Naciones Unidas, como Eduard
les. Los estudios mostraron que las dimensiones Gurr y Bárbara Haff, quienes realizaron también
de la desigualdad –ya sea de clase, de estatus o un estudio en los años noventa, afirmaban que en
de capitales– son parámetros que nos permiten los 184 Estados independientes existían alrededor
entender el papel que juegan las desigualdades de 114 países con conflictos étnicos, es decir, pro-
económicas y políticas cruzadas por las diferen- tagonizados por etnias y/o minorías nacionales
cias étnicas y culturales. Asimismo, dicho estudio que no se sentían parte de los Estados que los con-
incorporó una dimensión que hoy pareciera im- tenían y veían con recelo las políticas impuestas a
posible no considerar y es aquella que alude a los ellas. De tal manera que fueron calificados en ese
actores externos –especialmente a los Estados ex- entonces como minorías en riesgo, en tanto que po-
ternos como coadyuvantes, cuando no promotores dían poner en peligro la estabilidad e integridad de
de conflictos, en aquellos países en donde tienen los estados nacionales. Ambos especialistas docu-
intereses geoestratégicos y políticos. mentaron que desde finales de la segunda guerra
Como sabemos, los conflictos étnicos-na- mundial se habían multiplicado los conflictos que
cionales que se registran en el mundo han sido ob- tenían como una de sus aristas la pertenencia ét-
jeto de estudio por parte de diversos especialistas y nica, religiosa o racial y evidenciaron 50 episodios
desde diferentes perspectivas teórico políticas, por de violencia o genocidio, que sumaban más de 20
lo que no existe una sola visión sobre los motivos millones de muertos. Se trataba de un tema impor-
y el papel de la etnicidad politizada para desenca- tante para el que había que buscar soluciones.
denar conflictos violentos en el mundo. El equipo Entre las soluciones emanadas desde las
encabezado por Stavenhagen partió de considerar Naciones Unidas estuvieron la aprobación de ins-
a los conflictos étnicos como la confrontación so- trumentos internacionales que protegen los dere-
cial y política prolongada entre contendientes que chos de pueblos indígenas, como el Convenio 169
se definen a sí mismos y a los demás en términos de la oit (1989) y la Declaración de las Naciones
étnicos, es decir, cuando algunos criterios como Unidas sobre Derechos de los Pueblos Indígenas
la nacionalidad, la religión, la raza, el idioma y (2007). En este sendero y después de varios años

24 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


de resistencias y debates, recién en 2016 fue apro- Como parte de este nuevo despojo, estamos
bada la Declaración Americana de Derechos de los constatando y padeciendo el giro conservador y
Pueblos Indígenas (oea), sin embargo, el panora- por tanto, fundamentalista e intolerante, que se
ma de los conflictos, las violencias y la intolerancia extiende como un cólera por nuestro planeta. Este
está lejos de resolverse. Algunos conflictos se han conservadurismo conlleva a renovadas y fortale-
resuelto, otros siguen sin solución y han surgido cidas intolerancias, en donde nuevamente, como
nuevos, por ejemplo, el rostro de las luchas actua- el siglo XIX, se vuelve a criminalizar y señalar a
les en vastas zonas del planeta tiene que ver con las la diversidad como causante de los desastres mun-
nuevas explotaciones de los recursos bioenergéti- diales: los siempre enemigos, las clases peligrosas,
cos de los pueblos, situación que se corresponde constituidas por los pobres, los desarraigados, los
con lo que Harvey ha llamado el modelo de acu- migrantes, los terroristas (los musulmanes, así
mulación por desposesión (2004). En este ámbito, como los viejos y nuevos comunistas y socialistas),
una característica de los conflictos contemporá- los indígenas autonomistas, las mujeres irredentas
neos es que tienen como contendiente no sólo a los e incluso a los ambientalistas, entre muchos otros
Estados-nacionales quienes concesionan, venden o desadaptados de la globalización.
arriendan territorios indígenas para la explotación Vale la pena preguntarnos en dónde estamos
de sus recursos, pues en este proceso ha emergi- como comunidad ampliada (antropólogos, juris-
do un poderoso actor supranacional: las empresas tas, indígenas, luchadores sociales), desde nuestro
transnacionales, que se han atrincherado jurídica- posicionamiento como académicos o antropólo-
mente construyendo lo que podemos denominar gos ciudadanos, parafraseando a Miriam Jimeno
como un nuevo “Derecho Corporativo” que está (2016), es decir, como estudiosos de una realidad
incluso por encima del sistema internacional de la de la que formamos parte, lo que a su vez nos hace
Naciones Unidas, y tienen un poder casi ilimitado ser parte de los temas que analizamos.
como empresas. (Boaventura de Souza, 1998) Me parece que si bien lo que nos ha agluti-
Sobre este proceso, nos ha correspondido nado ha sido el estudio de los sistemas de derecho
ser testigos y documentar a través de estudios de y el entendimiento del nuevo pluralismo jurídico
caso, siguiendo nuestra tradición antropológica, –especialmente ése que se construye desde aba-
una de las expresiones más ominosas de finales y jo, desde las comunidades, por diversas veredas–
principios de este milenio, en esta fase del capita- hemos estado interesados en estudiar el carácter
lismo salvaje, a saber, la violación a los derechos regulatorio o contrahegemónico de las prácticas
humanos de pueblos y comunidades indígenas, jurídicas en diversas comunidades, cuestionán-
que se traduce en el desastre socio-ambiental con- donos sobre si el derecho positivo puede tener
temporáneo a través del acoso sobre los bienes un carácter emancipador. Así, se han construido
comunes (Elinor Ostrom, 2000) de pueblos y na- modelos teóricos desde posturas con mayor grado
ciones, y que tiene su mayor expresión en los te- de inteligibilidad con nociones tales como inter-
rritorios del tercer mundo y en las denominadas legalidad, hibridez o constelaciones de derecho,
“economías emergentes”. siguiendo a autores como Boaventura de Souza u

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 25


Orlando Aragón. Esto ha sido muy rico, sin em- ros (2000), afirmaba que el rechazo a los migrantes
bargo, me parece que necesitamos ampliar nuestra en Europa obedecía no a una suerte de intoleran-
mirada analítica a la cúspide del nuevo pluralismo cia a las diferencias culturales, sino sobre todo
jurídico, no sólo al que se expresa y construye des- a las tradiciones no democráticas de los países
de abajo, pues la realidad nos convoca a estudiar musulmanes, y consideraba que Europa no debía
la nueva composición del derecho desde arriba, permitir que la democracia liberal fuera puesta en
desde una nueva cúspide todopoderosa: es decir, cuestión al imponerles la tolerancia a tradiciones
desde el Derecho Corporativo, empresarial, pues ajenas a ella.
son esos actores los que están reconfigurando la Hoy las muestras de intolerancia, xenofobia,
urdimbre jurídica desde la cual se ponen en mar- racialización y criminalización de las diferencias
cha los megaproyectos que son una de las expre- políticas, religiosas y étnicas, convierten a los mi-
siones de las nuevas invasiones y despojos. grantes, desplazados, pobres y desarraigados en
Como ciudadanos y académicos seguiremos los causantes de la violencia en el mundo. Con
apostando por los usos emancipatorios del dere- mucha razón Boaventura de Souza (2017) hace
cho, por el litigio estratégico desde abajo, en sínte- poco afirmaba que vivimos en lo que él denomi-
sis, estudiando las justicias y el nuevo pluralismo na como pensamiento anacrónico inverso, es de-
jurídico y acompañando a los movimientos socia- cir, vivimos un tiempo colonial con imaginarios
les de resistencia a los despojos del nuevo milenio, poscoloniales; vivimos un tiempo de dictadura
apelando, como diría desde la experiencia de Co- informal con imaginarios de democracia formal;
lombia, Julieta Lemaitre (2009), al derecho como vivimos un tiempo de cuerpos racializados, sexua-
conjuro contra las violencias, las intolerancias y las lizados, asesinados, descuartizados con imagina-
injusticias del novel milenio. rios de derechos humanos; vivimos un tiempo de
Me parece que como parte de nuestro com- muros, fronteras como trincheras, exilios forza-
promiso con la defensa de los derechos humanos dos, desplazamientos internos con imaginarios de
colectivos y los derechos de las minorías, siguien- globalización; vivimos un tiempo de silenciamien-
do la escuela y los aportes de Stavenhagen y otros tos –lo que denomina sociología de las ausencias–
muchos colegas y luchadores sociales, nos corres- con imaginarios de orgía comunicacional digital;
ponde: develar las dimensiones ocultas, las falsas vivimos un tiempo de grandes mayorías que solo
acusaciones sobre las denominadas, en ocasiones, tienen libertad para ser miserables con imagina-
identidades asesinas o fundamentalistas; develar la rios de autonomías y emprendimiento; vivimos un
“orientalización de los otros” en términos de Ed- tiempo de víctimas que se vuelcan contra víctimas
ward Said (1975); rechazar las visiones dicotómi- y de oprimidos que eligen a sus opresores con ima-
cas como la enarboladas por Samuel Huntington ginarios de liberación y de justicia social.
(2000) al hablar del choque de civilizaciones, o los Para levantar la voz contra los horrores de
argumentos del famoso politólogo italiano Gio- este giro post-neoliberal, autoritario, conservador
vanni Sartori, quien en su libro La Sociedad Mul- y xenofóbico que se extiende por el mundo, es ne-
tiétnica. Pluralismo, Multiculturalismo y Extranje- cesario pensar en nuevos horizontes democráticos

26 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


y plurales, en nuevas epistemologías que develen Huntington, Samuel (2001), El choque de civiliza-
los embates genocidas; es preciso combinar la plu- ciones y la reconfiguración del orden mun-
ralidad de caminos con la coherencia de un hori- dial. Buenos Aires, Argentina, Paidós.
zonte que ordene las circunstancias y les otorgue Jimeno, Miriam (2016), “La antropología en Amé-
sentido. Para pensar tal combinación y, más aún, rica Latina y la crisis del pensamiento críti-
para pensar siquiera que ella es necesaria, son ne- co”. En: Boletín ceas, México, pp. 37-42.
cesarias otras maneras de pensar, sentir y conocer. Lemaitre, Julieta (2009), El derecho como conjuro.
O sea, es necesaria una ruptura epistemológica Fetichismo legal, violencia y movimientos so-
como la que se ha denominado epistemologías del ciales. Colombia, Siglo del Hombre Editores
sur (Boaventura de Souza: 2017). – Universidad de los Andes.
Desde nuestra disciplina tenemos que con- Ostrom, Elinor, (2000), El gobierno de los bienes

tribuir con el desentrañamiento de esas dimensio- comunes. La evolución de las instituciones de


acción colectiva. México, fce-unam-crim.
nes ocultas de las lógicas invertidas, visibilizar a
Said, Edward (2000), “Orientalismo 25 años des-
las “nuevas víctimas del desarrollo”, como las de-
pués”. Traducción Ramón Vera H. Dis-
nomina Libardo Herreño (2016). Tal vez nunca
ponible en: http://blog.pucp.edu.pe/blog/
como hoy el análisis y la búsqueda de soluciones
latravesiadelfantasma/2009/02/08/orienta-
a la proliferación de conflictos étnico globales (ya
lismo-25-anos-despues-edward-said/, con-
no solo nacionales) es una tarea urgente.
sultado el 4 de septiembre de 2017.
Éste es, precisamente, uno de los retos al que
Sartori, Giovanni (2001), La sociedad multiétni-
nos convocó Stavenhagen junto con otros muchos
ca. Pluralismo, multiculturalismo y extran-
investigadores. Esperemos ser dignos seguidores
jeros. Madrid, Taurus.
de esta tradición.
Souza Santos, Boaventura de (1998), La globali-
zación del Derecho. Los nuevos caminos de
Bibliografía la regulación y la emancipación. Bogotá,
Universidad Nacional de Colombia-ංඅඌൺ.
Aragón, Orlando (2017), Entre la nueva y la vie-  (2017), “Se necesitan horizontes”. En: Re-
ja justicia indígena. México, uam-Iztapala- belión. Disponible en: http://www.rebelion.
pa-Departamento de Antropología. org/noticia.php?id=227028, consultado 4
Harvey, David, (2004) “El “nuevo” imperialismo. de septiembre 2017.
Acumulación por desposesión. En: Socialist Stavenhagen, Rodolfo (1996), (WKQLFFRQÀLFWDQG
Register. Disponible en: http://socialistregis- the Nation State. Londres, McMillan, 1996.
ter.com/index.php/srv/article/view/14997,  (2001), La cuestión Étnica. México, El
consultado el 15 de febrero de 2015. Colegio de México.
Herreño H, Ángel L. (2013), “Notas sobre el acceso Stavenhagen, Rodolfo y Diego Iturralde (1990)
a la justicia global corporativa por parte de (coords.), Entre la Ley y la Costumbre. El
las víctimas del desarrollo”. En: El Otro De- derecho consuetudinario en América Latina.
recho, Bogotá, ilsa, pp. 15-116. México, iii–iidh.

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 27


Fotografía: Archivo propiedad de Elia Stavenhagen

28 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


El legado de Rodolfo gos a su servicio para cumplir con las exigencias de

Stavenhagen a la las consultas previas que exigen los gobiernos.

antropología jurídica Rodolfo Stavenhagen fue parte de un grupo

latinoamericana y a los de jóvenes antropólogos, formados en la Escuela

pueblos indígenas Nacional de Antropología e Historia (enah), en la

María Teresa Sierra1 ciudad de México, que en los años 60 plantearon


una crítica aguda al indigenismo oficial, al cuestio-

Es para mi un honor hacer este merecido homenaje nar las políticas integracionistas del indígena y a la

póstumo a Rodolfo Stavenhagen (1932-2016), an- antropología mexicana por su contribución a este

tropólogo mexicano, precursor de la antropología proyecto. Desde sus primeras experiencias labora-

jurídica latinoamericana. Rodolfo fue un hombre les en instituciones públicas, Rodolfo Stavenhagen

excepcional que supo combinar de manera conse- se dio cuenta de las perversidades de la política

cuente su posición como académico crítico con su modernizadora del Estado que en aras del progre-

compromiso de vida por la promoción y defensa so imponía proyectos de desarrollo que afectaban

de los derechos humanos de los pueblos indígenas directamente a los indígenas, sin consultarlos ni

y otros colectivos étnicos subordinados; siempre beneficiarlos. Recuerda que como antropólogo

preocupado por avanzar en la lucha en contra del recién egresado él mismo participó como “técni-

racismo, las exclusiones y las injusticias sociales.2 co de relocación” con el fin de convencer a fami-

Esta trayectoria de compromiso social que lias mazatecas en la cuenca del Papaloapan, para
cultivó hasta el final de sus días, es uno de los rasgos reubicarse ante la inminente inundación de sus
que lo caracterizaron como antropólogo público, tierras, todo ello en nombre del progreso (2015:
para quien siempre fue claro que las ciencias so- 25). Dichas experiencias despertaron en él una
ciales deberían estar al servicio de la sociedad. No reflexión crítica que junto con el conocimiento
dudó en señalar en una de sus últimas interven- de las realidades indígenas en el país fueron insu-
ciones el papel central de la ética en la formación mos importantes de teorizaciones que maduraron
de los antropólogos (Stavenhagen 2015a). Por eso posteriormente en varios de sus trabajos. Fue de
se preguntó en esa ocasión: “¿Sí es el consejo del los primeros académicos marxistas que vinculó el
antropólogo una mercancía más, o expresa también historial de exclusión social de los indígenas con
una visión del mundo que se traduce en un com- las estructuras asimétricas de explotación en el
promiso humano y social” (Stavenhagen 2015a: 24); campo, fundamentales para comprender la discri-
reflexión muy pertinente especialmente en estas minación y el racimo étnico y cultural de la socie-
épocas neoliberales en que se ha abierto el campo dad mexicana. El escrito que lo hizo famoso fue
laboral del expertisse antropológico vinculado a la un texto publicado por primera vez en el periódico
necesidad de las empresas de contratar antropólo- mexicano El Día: “Las siete tesis equivocadas so-
bre América Latina” (1965); critica ahí las teorías
1. Profesora-Investigadora del Centro de Investigaciones y Estudios
Superiores en Antropología Social (͵ͻͷϫͱϫ . Correo: mtsierrac@ del desarrollo modernizador aplicadas a América
hotmail.com
2. Otros textos de homenaje a la obra de Rodolfo Stavenhagen: Latina. Sus planteamientos sobre el colonialismo
Iturralde (2017); Sierra (2018); ;ͱϫͱ͸΂ϜϭͿ (2017).

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 29


interno desnudan los mecanismos excluyentes que en México y en América Latina, en el cual tuve el
sustentan la explotación de las comunidades in- privilegio de participar. Fue realmente un lujo co-
dígenas y hoy en día iluminan los debates sobre laborar con colegas como Magdalena Gómez, Die-
la descolonización y el racismo en las sociedades go Iturralde, Victoria Chenaut, Francois Lartigue,
contemporáneas. Enrique Hamel y el mismo Rodolfo Stavenhagen
Su producción académica fue recogida en en un espacio sumamente productivo y estimu-
importantes libros y artículos que abrieron nue- lante que abrió perspectivas novedosas en torno a
vas líneas de investigación y plantearon temas un objeto de estudio cuyo interés desbordaba a la
que continúan siendo de relevancia actual para las academia y lo situaba en un horizonte de debate
ciencias sociales, entre los que destacan: Las clases político por la defensa de los derechos humanos
sociales en las sociedades agrarias (1969); Derecho de los indígenas a nivel latinoamericano. Previa-
indígena y derechos humanos en América Latina mente Rodolfo Stavenhagen en un estudio había
(1987); Entre la ley y la costumbre; El derecho con- destacado que las legislaciones nacionales desco-
suetudinario indígena en América Latina (1990); y nocían la vigencia de órdenes jurídicos en socieda-
Ethnic Conflicts and the State (1996). des indígenas en América Latina lo que propiciaba
Rodolfo Stavenhagen supo combinar la pro- una violación sistemática a sus derechos humanos
ducción teórica en el campo de las ciencias socia- (Stavenhagen 1987). Por esta razón tenía un gran
les con un trabajo de activismo e incidencia en los interés por documentar el derecho consuetudina-
derechos humanos. Esto se hizo evidente de ma- rio indígena en su relación con el derecho estatal,
nera particular en dos grandes áreas de interés: los lo que resultaba fundamental para alimentar el
estudios de los conflictos étnicos a nivel mundial – debate internacional sobre los derechos colectivos
donde hizo importantes contribuciones al estudio de los pueblos indígenas, que en ese momento ya
del racismo, la intolerancia y la violencias estruc- se estaba dando en algunos foros internacionales
turales- y de manera muy especial el campo de los de la Organización de las Naciones Unidas (onu).
derechos indígenas y los derechos humanos don- Tales constataciones fueron la base de un proyecto
de concentró su trabajo en las últimas décadas. Es de investigación a nivel latinoamericano en el que
aquí donde se encuentran los aportes seminales de por primera vez se comparaban los ordenamien-
Rodolfo Stavenhagen al campo de la antropología tos jurídicos que organizaban la vida de comuni-
jurídica latinoamericana, a lo que dedico el resto dades originarias en la mayor parte de los países
de mi intervención. de América Latina así como las condiciones del
acceso a la justicia; el resultado fue el libro Entre
1. El derecho consuetudinario indígena la Ley y la costumbre. El derecho consuetudinario
en América Latina. indígena en América Latina, coordinado por Ro-
En julio de 1987, hace ya 30 años, Rodolfo Staven- dolfo Stavenhagen y Diego Iturralde (1990). Para-
hagen, convocó a un grupo interdisciplinario de lelamente, además de impulsar otro gran proyecto
académicos para impulsar investigaciones compa- de investigación sobre conflictos étnicos a nivel
rativas sobre el derecho consuetudinario indígena mundial (1996) Rodolfo participaba activamente

30 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


en el Grupo de Trabajo sobre Poblaciones Indíge- los derechos indígenas en foros nacionales e inter-
nas y Tribales de la onu junto con abogados dis- nacionales. Es en esta confluencia de tradiciones
tinguidos como el abogado guatemalteco Augusto académicas y políticas que se sentaron las bases
Willemsen – autor del Informe Martínez Cobo - de lo que hoy en día es reconocido como la antro-
cuyas aportaciones fueron clave en las discusiones pología jurídica latinoamericana. Estas iniciativas
sobre el Convenio 169 de la oit (1989). Hasta la inspiraron a la Red Latinoamericana de Antropo-
fecha el Convenio sigue siendo un referente legal logía Jurídica (relaju), que desde sus inicios en
fundamental en las luchas por la libre-determina- 1997, se propuso ser un espacio de investigación
ción de los pueblos indígenas. Era esta una coyun- crítico sobre el pluralismo jurídico y los derechos
tura – fines de los 80 y principios de los 90 –don- indígenas y de articulación con las luchas de los
de el movimiento indígena en América Latina se pueblos indígenas.
organizaba a nivel continental para cuestionar el
colonialismo y defender una agenda propia fren- 2. Rodolfo Stavenhagen y su activismo por los
te a los estados nacionales. Se apuntaba a modifi- derechos indígenas
car las legislaciones nacionales decimonónicas, lo La capacidad de Rodolfo Stavenhagen de moverse
que implicaba presionar a los estados nacionales en distintos planos nacionales e internacionales,
a abrirse al horizonte del pluralismo jurídico. Ello articulando redes académicas, defensores de dere-
más adelante se reflejó en gran parte de las legis- chos humanos y legisladores, además de generar
laciones latinoamericanas que se reformaron con diálogos y una fuerte empatía con las organiza-
alcances diversos en el marco de un horizonte de ciones indígenas y sus liderazgos fue central para
constitucionalismo pluralista (Yrigoyen 2011). avanzar en la definición de una plataforma inter-
Como bien apuntó Diego Iturralde, colabo- nacional a favor de los derechos indígenas. En ese
rador cercano de Rodolfo Stavenhagen, durante tenor Rodolfo participó en encuentros de alto nivel
las últimas décadas de fin del siglo XX, especial- con funcionarios, académicos y líderes indígenas,
mente en el contexto de las contra-celebraciones en calidad de Presidente del Consejo Directivo del
por los 500 años de la conquista en América, se Fondo Indígena en Bolivia; promovió talleres de
construyeron dos grandes agendas: una agenda capacitación a liderazgos indígenas desde la Aca-
académica centrada en documentar la particula- demia Mexicana de Derechos Humanos (de la cual
ridad del derecho propio y el pluralismo jurídico; fue su presidente ) y con el apoyo del Instituto In-
y una agenda política de las organizaciones indí- teramericano de Derechos Humanos; fue invitado
genas que demandaban a los estados nacionales por el ezln a formar parte de la Comisión para el
el reconocimiento de sus derechos colectivos y la Seguimiento y Verificación de los Acuerdos de San
libre-determinación como pueblos indígenas (Itu- Andrés para la Paz en Chiapas (1996); intervino
rralde 1990). Ambas agendas se alimentaron mu- como experto antropólogo en el juicio de la comu-
tuamente y en esa articulación fueron fundamen- nidad Awas Tingni vs Estado Nicaraguense, ante
tales las intervenciones de Rodolfo Stavenhagen la Corte Interamericana de Derechos Humanos
avanzando propuestas para el reconocimiento de (2001), caso emblemático donde por primera vez se

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 31


obliga a un Estado nacional (Nicaragua) a recono- de los derechos indígenas; así en el Informe de su
cer el derecho a la titularidad colectiva de la tierra Primer Visita Oficial como Relator Especial (2002)
de pueblos indígenas (comunidad mayagna-suma); a Guatemala retrató la violencia política y la repre-
y participó en la discusión del proyecto y posterior sión de Estado que provocó el genocidio del pueblo
aprobación de la Declaración Universal de los Dere- maya. Asimismo realizó una visita oficial a Chile, en
chos Humanos de los Pueblos Indígenas (2007) de la 2003, y recogió ahí testimonios del pueblo mapuche
onu; la Declaración constituye actualmente el mar- sobre el despojo histórico de sus tierras y la crimi-
co más amplio de reconocimiento de los derechos nalización de sus luchas; lo cual retrató fielmente en
de libre-determinación de los pueblos indígenas. su Informe al gobierno chileno. Fue también gra-
Pero fue sobre todo su participación como cias a uno de sus informes que la Corte Interameri-
Primer Relator Especial de Naciones Unidas sobre cana de Derechos Humanos adoptó el estándar del
los Derechos Humanos y las Libertades Funda- “consentimiento” como requisito previo para que el
mentales de los Pueblos Indígenas (2001–2008), Estado pueda otorgar concesiones en territorios de
lo que le brindó la oportunidad única de vincu- pueblos indígenas o tribales (sentencia del pueblo
lar su conocimiento experto con una intervención Saramaka vs. Surinam).3
de alto nivel a favor de los derechos humanos de La experiencia acumulada en esta labor
los indígenas. Esta experiencia lo marcó profun- como Relator lo llevó también a insistir en la “bre-
damente al conocer de viva voz los reclamos his- cha de la implementación” para destacar la distan-
tóricos de los pueblos indígenas, la fuerza de sus cia existente entre el reconocimiento de los dere-
identidades colectivas, y la legitimidad de sus chos en las legislaciones nacionales y su aplicación,
demandas. De ello da cuenta en un escrito testi- como constante en las demandas indígenas, lo que
monial etnográfico de gran poder narrativo don- fue motivo de varias de sus intervenciones en foros
de hace un recuento de varias de sus experiencias nacionales e internacionales. Este último trabajo
como Relator Especial (Stavenhagen 2015b). como relator fue recogido en su libro; Los pueblos
En esta función cono Relator Especial reali- indígenas y sus derechos, unesco, México, 2012; y
zó once misiones oficiales a países de África, Asia en el libro The United Nations Special Rapporteur
y América (Guatemala, Colombia, Chile, México, on the Rights of lndigenous Peoples, Londres, Rout-
Bolivia, Ecuador, Filipinas, Canadá, Kenya, Sudá- ledge Handbook on Indigenous Rights (2015c).
frica, Nueva Zelanda), más visitas no oficiales, por En uno de sus últimos escritos, que antes
invitación a Nepal, Japón, Camboya, Rusia, No- referí, donde hace un balance etnográfico de su
ruega, Botswana, Tanzania, Estados Unidos y Bra- participación como Relator de la onu, señala de
sil. En ellas documentó las condiciones estructura- manera aguda lo siguiente:
les de subordinación de los pueblos indígenas y la “Me han acompañado dos frustraciones en
violación a sus derechos colectivos. Sus informes esta experiencia. La primera, que los informes pre-
y recomendaciones, resultado de las visitas, con- parados por el relator no se transforman ipso facto
tribuyeron a visibilizar problemáticas relevantes y en mejora visible de la situación de los derechos
en algunos casos a apoyar cambios legales a favor 3. Ver Sentencia CIDH 2008; revisada el 18 de sept. 2018, en http://
www.corteidh.or.cr/docs/casos/articulos/seriec_185_esp.pdf

32 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


humanos de los pueblos indígenas y que sus reco- junto con la criminalización de sus integrantes;
mendaciones no sean implementadas de manera como parte de sus recomendaciones el Relator Es-
puntual por los gobiernos y el sistema internacio- pecial señaló: “que el gobierno de Chile ratifique el
nal. El seguimiento de las recomendaciones está Convenio 169 de la oit (…) que cumpla estricta-
fuera del alcance de la relatoría y su esfuerzo que- mente con las nuevas normas internacionales y su
da simplemente como un testimonio más en los propia legislación en materia indígena y ambiental
archivos respectivos. Con todo, para numerosos a fin de proteger adecuadamente los intereses de
pueblos indígenas los informes del relator consti- los pueblos indígenas” (Stavenhagen 2012:56). Así
tuyen un aliciente en la continua lucha por sus de- también refirió el caso de la Presa Urra que afecta a
rechos humanos, y para los gobiernos un referente los pueblos embera kaito en Colombia violando la
contra el cual pueden ser evaluadas las acciones obligación de la Consulta Previa bajo el argumen-
emprendidas en el marco de las políticas públicas” to de ser tierras consideradas de interés público;
(Stavenhagen 2015b). dada la gravedad de la situación en la que vive esta
De esta forma Rodolfo Stavenhagen de ma- población por estar ubicada en una zona de ten-
nera franca pone en evidencia los límites del tra- sión por el conflicto armado, y por los efectos de
bajo en el campo de los derechos humanos de los las grandes presas destacó que la supervivencia del
indígenas, aún si él contó con un importante res- pueblo embera katio estaba en riesgo. En su Infor-
paldo internacional. También evidenció su deci- me como relator de la onu declaró incluso que la
sión de ser un “observador activista” y no un “ob- situación del pueblo en el emberá era un caso evi-
servador neutral” de los derechos indígenas, como dente de Genocidio, por la violación sistemática
afirmó en varias ocasiones. a sus derechos humanos (Stavenhagen 2012: 60).
Una carta de la onic (Organización de las Nacio-
3. Desarrollo, extractivismo y despojo. nes Indígenas de Colombia) al Relator dejaba claro
Por último me quiero referir a uno de los temas “que los megaproyectos eran la principal causa de
más actuales que Rodolfo Stavenhagen destacó en los actuales conflictos de los embera y el Estado”
su experiencia como Relator y que en los últimos (Stavenhagen 2012: 59). La documentación de dis-
años sería el tema de sus investigaciones. Ya en el tintos casos daba cuenta de la gravedad de estos
Primer Informe temático como Relator referido mega proyectos y sus efectos sistemáticos sobre los
justamente a “Los proyectos de desarrollo y los de- pueblos indígenas amenazando su sobrevivencia
rechos de los pueblos indígenas” (2003) enfatizó y la importancia de tomar acciones al respecto;
en la grave violación a los derechos humanos de especialmente destacó la garantía del Consenti-
los pueblos indígenas producto de la imposición miento Libre e Informado previo a la operación de
de los grandes proyectos de desarrollo en distintas las empresas. Las reflexiones y recomendaciones
partes del mundo. Entre otros casos destacó el de de estos Informes dirigidas a los gobiernos y las
la construcción de presas en el sur de Chile ( Presa instancias internacionales como el Banco Mundial
Pangue y la Presa Ralco) y sus efectos devastadores y la onu, son muy actuales y dan cuenta de la mi-
en los territorios del pueblo mapuche-pehuenche, rada aguda de R. Stavenhagen para plantearlas de

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 33


forma resumida y puntual. Por ello no extraña que Michoacán que defendieron sus bosques frente al
más adelante tuviera la iniciativa de desarrollar un acoso de talamontes y el crimen organizado, entre
nuevo proyecto de investigación sobre los proyec- muchos otros, revelan la fuerza de la resistencia
tos extractivos en México. organizada de los pueblos indígenas que no están
Recientemente, a fines del mes de agosto de dispuestos a permitir que los proyectos de muerte
2018, el Colegio de México, su institución acadé- se impongan sobre sus territorios, si bien se trata
mica, inició un Seminario en el marco de la Cáte- de una lucha desigual que amenaza al conjunto de
dra en Derechos Humanos Rodolfo Stavenhagen la sociedad. Todos ellos reconocieron en la obra de
como una manera de honrar su legado. En esa Rodolfo Stavenhagen una inspiración para conti-
ocasión el Seminario se dedicó al tema de: “Los de- nuar luchando.
rechos humanos de pueblos y comunidades indíge- Rodolfo Stavenhagen fue un hombre pio-
4
nas frente a los proyectos de desarrollo”. Con una nero y visionario en el campo de las ciencias hu-
asidua participación de académicos, funcionarios manas y abrió brecha en diferentes áreas. Mantu-
públicos, representantes de organizaciones de de- vo una ética y un compromiso constante con los
rechos humanos nacionales e internacionales y pueblos indígenas y la defensa de sus derechos
miembros de organizaciones indígenas en el even- humanos contra toda forma de exclusión, subor-
to se reflexionó sobre lo que hoy en día represen- dinación y racismo; fue, en efecto, un académico
ta la amenaza principal a la sobrevivencia de los y activista de amplio espectro. La antropología ju-
pueblos indígenas y la crisis medio-ambiental que rídica latinoamericana se ha beneficiado amplia-
involucra. Serena Chew, su colaboradora y asisten- mente de sus contribuciones y tiene en su obra a
te de investigación en los últimos años, presentó uno de sus principales precursores. Fue un lujo
ahí los resultados del trabajo de investigación de para mí y varios de nosotros el compartir tiempos
R. Stavenhagen, a petición del pnud, aún no publi- de trabajo, amistad y compromiso, al lado de un
cado, donde da cuenta de la forma en que opera el hombre universal, generoso, sereno que supo ga-
despojo legalizado a favor de empresas transnacio- narse la confianza de colegas, funcionarios públi-
nales (mineras, petroleras, eólicas) incumpliendo cos y muy especialmente de los pueblos indígenas
las normas del derecho internacional y el derecho quienes estuvieron en el centro de sus preocupa-
de los pueblos a decir NO a los grandes proyec- ciones. Rodolfo Stavenhagen deja un gran vacío,
tos. Las voces de representantes indígenas como difícil de llenar, pero también un importante lega-
los pueblos zapotecos del Istmo de Oaxaca que re- do de honestidad intelectual y política que consti-
sisten a las empresas eólicas, los pueblos me’phaa tuye una inspiración para las futuras generaciones.
de la Montaña de Guerrero, que han librado una Su pensamiento resulta aún más vigente en el mo-
lucha jurídica para impedir concesiones mine- mento actual cuando enfrentamos una nueva era
ras en su territorio, los comuneros de Cherán en de neocolonialismo y despojo sobre los territorios
4. Seminario “Los derechos humanos de los pueblos indígenas indígenas, hecho que él lamentó profundamente.
frente a los proyectos de desarrollo”, ͵ͷϫ͵΂;Ϳͷϰ. Consultado 8 de
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Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 35


Fotografía: Archivo propiedad de Elia Stavenhagen

36 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


Reconfiguraciones en que pocos investigadores muestran en su trato con

la interpretación de la la gente, con las y los alumnos, o con los campesinos

realidad: una propuesta e indígenas, con los menos favorecidos.

contra la exclusión Stavenhagen formó parte de una generación

Serena Chew Plascencia1 de intelectuales de ruptura. Habiéndose formado


en la tradición de la antropología indigenista –

Decía Rodolfo Stavenhagen que un intelectual tie- aquella que se proponía como meta la “integración

ne que ser público, y que no puede mantenerse al del indio a la nación”, en colaboración con el Esta-

margen de los grandes problemas del mundo, de do modernizador – Rodolfo fue de los primeros en

los grandes problemas nacionales, de los problemas señalar los efectos negativos que dicha visión y las

sociales de la sociedad en la que uno vive. La tra- políticas derivadas estaban teniendo precisamente

yectoria intelectual y política de Rodolfo es la de un sobre los pueblos indígenas.

hombre congruente con esa idea, que mantuvo no Una de las primeras experiencias fuera del

sólo la convicción de hacer público el pensamien- aula que Rodolfo tuvo fue en la Comisión del Papa-

to, sino que hizo de la tarea intelectual una praxis loapan, como parte de un grupo de antropólogos

comprometida con los pueblos con quienes trabajó cuya tarea era convencer a la población mazateca

toda su vida. de dicha región de los beneficios que les traería eso

Hacer una síntesis del legado intelectual de que hoy llamaríamos el desplazamiento forzado

Rodolfo es una tarea que resulta prácticamente im- por la construcción de una presa. La experiencia lo

posible. Más de medio siglo de investigación ardua marcó profundamente. Así fue como comenzó a

y comprometida deja más pistas abiertas de las que estudiar los temas transversales al desarrollo de los

una sola persona quizá podría llegar a seguir. Inten- Estados-nacionales y las contradicciones entre la

taré, sin embargo, plantear algunos puntos de este experiencia concreta de la gente y los grandes dis-

legado que me parecen particularmente pertinen- cursos sobre la modernización de América Latina

tes en el momento actual que vivimos en México, o la democratización de los países colonizados.

en América Latina y el mundo, siguiendo una re- En su generación, muchos fueron o son los

flexión que acompañó siempre la obra de Rodolfo: profesionales y burócratas que, ligados a las institu-

la importancia del compromiso social en la investi- ciones del Estado de aquel entonces, participaron

gación, particularmente en ciencias sociales. en proyectos similares convencidos de ser parte de

Los que lo conocimos y compartimos su una marcha hacia el progreso. Lo que distinguió a

creación intelectual en el día a día, sabemos que sus Rodolfo y a otros cuantos de sus compañeros, es

textos reflejan su personalidad, su sencillez, su gra- que, a partir de su propia experiencia como agente

titud por la vida y la diversidad. Stavenhagen, en su del Estado, logró construir una crítica, que fue más

trato cotidiano, ejercía ese humanismo del cual se allá de una reflexión en el escritorio, y comenzó a

habla en las aulas o en los centros de investigación y transformar, insidiosa pero radicalmente, la forma
de hacer ciencias sociales no sólo en México sino
1. Profesora de asignatura adscrita al Centro de Estudios Sociológi-
cos, Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, Universidad Nacional en América Latina y el mundo.
Autónoma de México (ϭ΁ͱͿ . Correo: schewp@gmail.com.

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 37


El desarrollo de su pensamiento siempre fue “La integración nacional en América Latina
construyéndose a partir de grupos de investiga- es producto del mestizaje”. […] “La falacia de esta
ción. De ese modo, su experiencia como investi- tesis está en que el mestizaje biológico y cultural
gador del Instituto Nacional Indigenista (ini) en (proceso innegable en muchas partes de América
1945; sus estudios en l’École Practique des Hautes Latina) no constituye, en sí mismo, una alteración
Études, de la Universidad de París, en 1960; y la de la estructura social vigente. Al igual que la tesis
oportunidad de presidir la Secretaría General del de la clase media, la del mestizaje atribuye a cier-
Consejo Latinoamericano de Investigaciones Socia- tos elementos de la población (definida arbitraria-
les (clacso), en Río de Janeiro, en 1962, lo llevaron mente, de acuerdo con criterios muy limitados)
a construir uno de los conceptos transversales a la capacidades o características que no poseen o, si
crítica al desarrollismo. las tienen, son ajenas a criterios biológicos o cultu-
Fue así, y a partir de los diálogos que sostuvo rales que sirvieron para definirlos”. (Stavenhagen
con intelectuales y luchadores sociales latinoameri- 2015a, pp22-23)
canos y de diversas partes del mundo –sobre todo El pensamiento de Rodolfo no pierde vigen-
de los países colonizados–, que Stavenhagen, al pa- cia hoy día, a pesar de que un sector importante
recer al mismo tiempo que Pablo González Casano- de la academia parece empezar a considerarlo algo
va, propone la idea del colonialismo interno como demodé. A pesar del boom que tuvieron los temas
forma de opresión determinante para entender la indígenas en la academia a partir del alzamiento
realidad de los países latinoamericanos. del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, más
El colonialismo interno, desde la perspectiva de veinte años después parece regresar la idea de
de Stavenhagen, atraviesa la cuestión cultural como que el estudio –y más aún, la investigación com-
un eje fundamental. La idea del mestizaje como ele- prometida– de estas cuestiones, es algo del pasado,
mento unificador de las naciones latinoamericanas que interesa tan sólo a unos pocos amantes de las
fundamenta la opresión de los pueblos originarios, antigüedades y románticos costumbristas.
al negar, por un lado, la diversidad cultural del mun- Los temas de las cuestiones agrarias con de-
do y, por otro, al justificar el despojo o la explotación mandas sobre la tierra, la explotación por un lado
de los grupos sociales menos favorecidos y sobre y el desprecio por el otro, del trabajo campesino,
todo del campesinado y los pueblos indígenas. son aún tan vigentes como en la época en que Sta-
En sus “Siete tesis equivocadas sobre Amé- venhagen escribió Problemas étnicos y campesinos
rica Latina”, podemos leer un ejemplo de su teoría (1979). Los temas en la actualidad sobre el dilema
situada, ya que en su análisis no sólo cuestiona las entre la propiedad privada y la propiedad colecti-
formas de la interpretación social de la realidad lati- va, la existencia de pequeños minifundios que han
noamericana, sino que gesta su crítica desde la em- servido para agudizar la pobreza campesina, etc.,
patía con los grupos sociales que habían sido borra- son problemas que se agudizan con la desintegra-
dos de los proyectos nacionales y emancipatorios, ción de las comunidades y el abandono de las po-
en particular los grupos indígenas, como lo expresa líticas sociales relativas a la producción del campo
en su sexta tesis: mexicano (Stavenhagen 1985).

38 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


Por otro lado, el tema de los derechos huma- cesidades colectivas, y no al servicio de las clases
nos como parte de la lucha incansable por la inclu- privilegiadas. Lo demás sólo son buenos deseos.”
sión de los pueblos indígenas, que Rodolfo realizó (Stavenhagen 1978: 38)
junto con un cuerpo de investigadores de todo el Un ejemplo de su vigencia es lo que ha pa-
mundo, se vio reconocido en la Declaración de los sado actualmente con el pueblo Sioux de Dakota
Derechos de los Pueblos Indígenas, aprobada en del Norte, en Estados Unidos, que celebró una
2007. La Declaración es hoy, conjuntamente con pequeña victoria en diciembre del 2016, con la
el Convenio 169 de la oit, uno de los pilares de suspensión temporal de la construcción de un
los movimientos sociales, en la medida en que han oleoducto que atravesaría sus tierras, el cual
sido tomados, ambos documentos, como banderas contravenía los tratados firmados con el Estado
para la defensa de los territorios indígenas y los re- norteamericano y que amenazaría con contami-
cursos naturales. La participación de Stavenhagen nar irreversiblemente el suministro de agua de
en la redacción y proceso de aprobación de la De- la región. La ruta había sido alterada del plan
claración fue crucial, al igual que su trabajo como original debido a peticiones y preocupaciones
Relator Especial de las Naciones Unidas sobre la de otras comunidades (no indígenas), pero los
Situación de los Derechos Humanos y Libertades Sioux y quienes los acompañaron tuvieron que
Fundamentales de los Pueblos Indígenas, que sir- recurrir a la protesta –que se encontró con gases
vió para visibilizar las condiciones de los pueblos lacrimógenos, detenciones arbitrarias, bloqueos
y comunidades indígenas en el mundo. Este tra- de alimentos, y cañones de agua en temperatu-
bajo, a mi parecer, es ejemplo de los resultados del ras cercanas a los 0°C–, para lograr siquiera que
nuevo paradigma teórico que Stavenhagen ayudó se reconsiderara la ruta del oleoducto. La fuer-
a crear, y que incluye un proceso de descoloniza- za del colonialismo interno se hizo nuevamente
ción intelectual, política y económica, mediante la patente cuando una de las primeras acciones de
inclusión de una diversidad social y cultural. Donald Trump como presidente fue una orden
El trabajo de Stavenhagen cruza todos los ejecutiva que reabre el proyecto en Dakota. El
ámbitos de la ciencia social: abarcó desde discu- oleoducto en cuestión tiene una inversión de
siones sobre racismo, cuestiones agrarias, hasta 3.800 millones de dólares, lo que responde a in-
debates sobre política y economía. A lo largo tereses de grupos económicos que han invertido
de su trayectoria, siempre buscó demostrar las en dicho proyecto.
diferentes formas en que las concepciones ra- Si bien Stavenhagen no realizó ninguna vi-
ciales condicionaban las perspectivas sobre el sita como Relator Especial de Naciones Unidas
desarrollo, y cómo estas perspectivas perpetúan a los Estados Unidos, su sucesor, James Anaya,
y agudizan las desigualdades sociales. Como es- concluyó en 2012 que los pueblos indígenas de
cribió en 1974: “El cambio en las estructuras de ese país “enfrentan retos significativos relaciona-
producción –y por ende, en las del consumo, y dos con injurias históricas, que incluyen tratados
en las mentalidades– sólo se logrará mediante violados y actos de opresión, así como políticas
una economía planificada en función de las ne- públicas mal dirigidas, que hoy se manifiestan

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 39


en varios indicadores de desventaja e impedi- entender la realidad, que los derechos humanos
mentos al ejercicio de sus derechos individuales son preocupaciones propias de los activistas y
y colectivos” (Anaya 2013: 9-10). no de la ciencia social.
En México, los pueblos indígenas enfren- Todos estos temas fueron siempre una
tan no sólo múltiples retos, sino incluso ame- preocupación que acompañó fuertemente a Ro-
nazas a su supervivencia misma, tanto en su di- dolfo a lo largo de su vida y hoy en día siguen
mensión de culturas como en su condición de vigentes en el pensamiento social y en el desa-
personas concretas. La minería y otros proyectos rrollo de la investigación social. Reflexión que
extractivos de gran afectación socio-ambiental además nos debe de acompañar con algo mucho
se han expandido sobre los territorios indígenas más importante en nuestro quehacer cotidiano:
–tema que preocupó a Rodolfo y motivó una de la responsabilidad ética del intelectual.
sus investigaciones en los últimos años que no Termino con palabras del propio Rodolfo.
ha sido publicada aún. Por mencionar tan sólo Como dijo en la conferencia magistral que im-
unos ejemplos, los pueblos me’phaa y na saavi partió al recibir el doctorado honoris causa en
de la Montaña de Guerrero se han opuesto a la la unam:
instalación de un proyecto minero; los pueblos Si en la actualidad el Estado y las empresas
nahuas de Morelos luchan aún contra la instala- privadas contratan a los antropólogos como aseso-
ción de una mina cuya concesión abarca incluso res para proyectos de desarrollo que inciden en las
la zona arqueológica de Xochicalco; los pueblos condiciones de vida de la población afectada, en
nahuas y totonacos del norte de Puebla y Vera- el medio ambiente, en la alimentación y la salud,
cruz se enfrentan a una compleja red de proyec- mientras que del otro lado se juegan los poderosos
tos energéticos, mineros y represas; los pueblos intereses económicos de las empresas involucradas
binnizá e ikoojts del Istmo de Tehuantepec han (como las mineras, o los polos turísticos por ejem-
visto sus territorios afectados por la instalación plo), ¿cómo puede o debe ejercerse la ética profe-
de parques eólicos; y la lista podría continuar y sional o bien, la responsabilidad social, de aquél
abarcar una ponencia entera. profesionista? ¿Es el consejo del antropólogo una
Más aún, una mujer indígena tiene el do- mercancía más en el mercado, o expresa también
ble de probabilidades de morir por causas rela- una visión del mundo que se traduce en un com-
cionadas al embarazo que una que no lo es (Sesia promiso humano y social? (Stavenhagen 2015b).
2013), y la tercera parte de los niños indígenas
menores de cinco años sufre desnutrición cróni-
ca –proporción que no hace más que aumentar
con la edad (Instituto Nacional de Salud Pública
2012). Pero en las aulas y pasillos pareciera que
ya no vale la pena hablar de colonialismo, que
“neolatifundismo y explotación” son sólo feti-
ches ideológicos y no categorías que ayudan a

40 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


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Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 41


Fotografías: Archivo propiedad de Elia Stavenhagen

42 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


De la costumbre jurídi- men constitucional ajeno al reconocimiento de la

ca al derecho indígena: existencia de los pueblos indígenas, en contraste

la autonomía como con la mayoría de los países de América Latina,

utopía1 que para esas fechas habían reformado sus cartas

Magdalena Gómez2 fundamentales.


A finales de 1989, asistí a dos reuniones or-

Agradezco de manera muy especial a Elia Stavenha- ganizadas por Rodolfo Stavenhagen y Diego Itu-

gen la invitación a participar en este justo homenaje rralde en el Instituto Interamericano de Derechos

a quien fuera amigo y maestro de varias generacio- Humanos (iidh), en San José de Costa Rica, sobre

nes, dentro y fuera del país. Y me atrevo a decir que derecho consuetudinario y sobre administración

en el mundo. Con esta convicción les comparto mi de justicia para los pueblos indígenas, dirigidos a

testimonio y reflexión, a partir de diferentes textos líderes y abogados indígenas de América Latina.3

que he elaborado durante dos décadas. Durante las mismas, se cuestionó radicalmen-

En 1987 inició sus trabajos un Seminario te el uso de conceptos “colonialistas” como el de

bajo los informales auspicios de diversas institucio- “Derecho Consuetudinario” en lugar de “Derecho

nes y la dirección de Rodolfo Stavenhagen. En aquel Indígena” que existe –planteaban los líderes– al

momento nos congregó la inquietud por explorar margen de que lo reconozca o no el Estado. Sin

desde diversas disciplinas el espacio de lo “consue- embargo, este señalamiento aparecía como discur-

tudinario” o de la “costumbre jurídica”, en oposición so político de reivindicación histórica, porque al

a y en contradicción con el relativo al derecho po- analizar los casos particulares observamos que el

sitivo o al llamado orden jurídico nacional. El libro ámbito de intersección entre el derecho indígena y

Entre la ley y la costumbre… es el resultado de los el nacional mostraba signos evidentes de la consa-

trabajos de dicho Seminario en México y fueron bida supremacía de éste frente aquél.

presentados en un seminario latinoamericano or- Pronto aprendí también que había que dis-

ganizado por el propio Rodolfo, que se realizó en tinguir el escenario de los indígenas frente al de-

Lima en 1988 (Stavenhagen 1989). recho nacional, y este último, en contraposición al

Este libro pionero y en muchos sentidos histórico, el cual configura propiamente el derecho

emblemático, expresa en su título y contenido el de los indígenas. Mientras en el primero sólo hay

espacio conceptual de los procesos que median espacio para los derechos individuales, el segundo

tanto en la aplicación interna de las normas de demanda la dimensión de los derechos colectivos,

control social en el entorno indígena, como el que de los derechos de los pueblos. Todo este relato

se presenta cuando, en lugar de ellas, rige plena- muestra la primera etapa del camino que hemos re-

mente el derecho nacional. Recordemos que en los corrido, en particular los abogados y abogadas en

años ochenta prevalecía en nuestro país un régi- América Latina que nos hemos propuesto acom-

3UHVHQWDGRHQHO&RORTXLRb̸/DVDXWRQRP¯DVLQG¯JHQDVHQ0«[LFR 3. Tarea que para Rodolfo fue central dentro de las actividades de la
UHWRV\SHUVSHFWLYDVb8QKRPHQDMHD5RGROIR6WDYHQKDJHQ̹b\ Academia Mexicana de Derechos Humanos y a la que veía como un
de abril de 2017, Cuernavaca Morelos. espacio de encuentros propiciatorios de vínculos en los movimien-
2. Académica de la Universidad Pedagógica Nacional (ϭЊ΁) y colabo- tos. De ahí que al elaborar agendas, él insistía en dejar recesos para
radora de la sección de Opinión en el periódico mexicano La Jornada. tal objetivo.

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 43


pañar el proceso de juridicidad de las demandas Habría que señalar que el procesamiento de ese
de los pueblos indígenas. También muestra la in- párrafo no fue sencillo, reflejaba lo que en aquel
fluencia que en mi caso tuvo el fuerte vínculo con momento el Estado estaba dispuesto a “conceder”.
Rodolfo Stavenhagen, maestro, sembrador y pio- La enunciada ley reglamentaria nunca exis-
nero de muchos frentes, entre los que destaca el de tió y los esfuerzos del ini para su elaboración antes
los derechos de los Pueblos Indígenas en el sistema de 1994, se encontraron con la ausencia de volun-
de la Organización de las Naciones Unidas, donde tad política y también con la dificultad de regular
fue el primer Relator especial de las Naciones Uni- desde la ley derechos que requerían rango cons-
das para la situación de los Derechos Humanos y titucional para evitar conflictos con leyes que ya
las Libertades Fundamentales de los Pueblos Indí- abordan las materias relacionadas con ellos.
genas. A ello dedicó muchos de sus esfuerzos, y en En ese contexto, resultó absurdo que, ya
particular al proceso de elaboración, discusión y estallado el movimiento zapatista, el hoy ex Pre-
aprobación de la Declaración de Naciones Unidas sidente Carlos Salinas creara una Comisión, la de
sobre Derechos de los Pueblos Indígenas, sin dejar Justicia y Desarrollo Social para los Pueblos Indí-
de lado su preocupación sobre la aplicación de la genas, cuyo objetivo era lograr la Ley Reglamen-
misma. De todo ello nos dio cuenta en un texto taria del artículo 4º constitucional. Asimismo, con
clave como lo es el de su etnografía acerca de la el hoy ex Presidente Zedillo, se intentó evadir el
experiencia en la onu. (Stavenhagen 2015) planteamiento de otra reforma constitucional y se
insistió en la Ley Reglamentaria de dicho artículo
De la juridicidad inacabada constitucional.
1992 fue el año del quinto centenario y marcó el Por otra parte, durante el proceso para la
horizonte que el Estado Mexicano estaba dispues- exigua adición al 4º constitucional, se cruzó la que
to a ofrecer para el reconocimiento de derechos sería la verdadera reforma indígena del salinismo.
a los indígenas sin tocar el espacio propiamente El 6 de enero de 1992 culminó el proceso de refor-
del derecho indígena. Tras prolongados debates ma al artículo 27 constitucional. De igual modo, se
y negociaciones, se logró la adición al artículo 4º realizaron diversas reformas legales y a Constitucio-
de la Constitución General de los Estados Unidos nes locales. Destacan, entre ellas, las que se promo-
Mexicanos, formalizada el 28 de enero de 1992, de vieron al Código Federal de Procedimientos Penales
un párrafo que reconocía el carácter pluricultural y al de Procedimiento Penales para el Distrito Fede-
de la nación mexicana, pero sin asumir a ese nivel ral, el 8 de enero de 1991, las cuales establecieron:
como sujeto de derechos a los pueblos indígenas y la obligatoriedad del traductor cuando el indígena
delegando a la ley la protección y desarrollo de una sea monolingüe o “no entienda suficientemente el
serie de derechos como las lenguas, usos y costum- castellano”; la facultad de solicitar reposición de
bres, formas de organización social y política. Esta procedimiento en caso de incumplimiento a este
reforma fue rechazada por el movimiento indíge- requisito; y, la de ofrecer dictámenes periciales so-
na y se procesó desde la soledad y el aislamiento bre los factores culturales que inciden en los hechos
del entonces Instituto Nacional Indigenista (ini). constitutivos del presunto delito. Con esta reforma

44 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


se abrió la posibilidad formal de terminar con la exime su cumplimiento. Tesis que el Estado aplica
práctica de procesar a los indígenas en un idioma sin cumplir la obligación de difundir y promover
que no entienden y sobre hechos que en su comu- el conocimiento de las normas jurídicas. Para mí el
nidad suelen tener otra valoración. derecho no debe ser sólo un asunto de especialis-
Previamente se había ratificado el Convenio tas sino elemento básico de la cultura ciudadana.
169 de la Organización Internacional del Trabajo 4 Por otra parte, desde el punto de vista jurídi-
que aborda la dimensión de los derechos colectivos co, los intentos por aplicar las normas en materia
en asuntos básicos como el de tierras y territorios. penal, aún encuentran limitaciones derivadas del
A diferencia de las grandes reformas estructurales desconocimiento casi absoluto sobre las diversas
que el Estado ha decidido en la actualidad, las diri- culturas de los pueblos indígenas entre los encar-
gidas a los indígenas no expresaban un replantea- gados de procurar y de administrar justicia. De
miento del Estado para incorporar con todas sus nada servía, nos percatamos en su momento, que
implicaciones la dimensión pluricultural. se lograra conseguir un traductor si no había refe-
Este conjunto de reformas no fue asumido por rentes para una adecuada traducción cultural.
el movimiento indígena, pues ellos planteaban la ne- Todo este proceso fortaleció la convicción
cesidad de alcanzar su autonomía y reconocimiento de que los verdaderos especialistas en derecho in-
como sujetos de derecho para dejar atrás la política dígena son los propios pueblos indígenas y de que
que los ha ubicado como objetos de atención. se requiere autonomía para que tengan capacidad
En síntesis, la reacción del movimiento indí- de reconstituir su espacio de autogobierno en tor-
gena ante este bloque de reformas fue de adhesión no a decisiones fundamentales como el acceso al
política al convenio 169 de la oit y de cuestiona- uso y disfrute de recursos naturales y al reconoci-
miento a la limitada reforma al 4º constitucional. miento de sus sistemas normativos en asuntos que
Y es importante añadir que el convenio 169 se “es- vayan más allá del robo de la gallina.
trenó” con el Consejo de los pueblos nahuas del Ahí está el corazón de lo pactado y hasta hoy
Alto Balsas para apoyar su demanda de suspender incumplido, en los Acuerdos de San Andrés.6 La
la construcción de la presa de San Juan Tetelcingo. autonomía indígena, lejos de “desintegrar” al Esta-
En este marco fue que elaboré la lectura co- do mexicano, permitiría fortalecer la democracia
mentada del convenio 169 de la oit, y que contó nacional. Cabe reiterar: no habrá reforma del Es-
con dos ediciones en el hoy extinto Instituto Na- tado profunda si continúan excluidos los pueblos
cional Indigenista (ini).5 Mediante este trabajo indígenas. De tal modo, la autonomía por un lado
convalidaba mi postura contra la etnocéntrica y les permitiría retomar decisiones en asuntos bási-
muy jurídica frase de que la ignorancia de la ley no cos y, a la vez, les daría la posibilidad de garantizar
 (O YDF¯R MXU¯GLFR FRQVWLWXFLRQDO VH HPSH]µ D FXEULU FRQ OD UDWLͤ-
su participación en el conjunto de espacios de la
cación, el 3 de agosto de 1990, y el registro el 4 de septiembre del
mismo año, del convenio 169 de la Organización Internacional del
sociedad. Se rompería así el concepto formal de la
Trabajo. Así, sin consultas a los interesados, el Senado de la Repú-
blica en la sesión de la Comisión de Relaciones Exteriores del 26 de
democracia monocultural que supone que su di-
junio del mismo año, dictaminó que “el presente convenio no contie-
ne disposición alguna que contravenga nuestro orden constitucional 6. Firmados el 16 de febrero de 1996, entre el Gobierno Federal y el
ni vulnere la soberanía nacional.” Ejército Zapatista de Liberación Nacional (ͷϲ;΁), como resultado de
5. El 9 de agosto de 2017, después de 20 años, se presentó la tercera la primera mesa del diálogo y negociación en torno al derecho y cul-
edición bajo el auspicio de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. tura indígenas.

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 45


mensión representativa es la expresión más avan- cuando vivimos con cierta impotencia la imposi-
zada y que ve como una amenaza a las formas de ción de la reforma al artículo 27 constitucional;
democracia directa que se ejercen en los pueblos que fue desde mi punto de vista la verdadera re-
indígenas. forma indígena del salinismo.
Si se observa en perspectiva, damos cuen- En todo caso, en el plano teórico hay avan-
ta del avance que se ha logrado, en particular de ces y la reflexión jurídica se ha impuesto, abrien-
1994 para acá. El levantamiento zapatista colocó do paso al derecho indígena. La experiencia lati-
la agenda indígena en el escenario nacional, como noamericana ha sido muy importante tanto en la
nunca antes en nuestra historia, y si bien desper- formación de los que somos abogados como en el
tó el racismo y la discriminación presentes en la movimiento indígena. Sin embargo, nuestra agen-
cultura dominante, también ha provocado que da inmediata está llena de retos y de problemas no
crecientes sectores se involucren en una reflexión resueltos.
sobre las implicaciones de la esencia pluricultural
de la nación. Queda aquí anotado un primer ele- 2001: Los pueblos indígenas y la razón de
mento: este proceso no obedece a la preocupación Estado en México
del Estado por reformarse y dar cabida a los his- Mi punto de partida es que en 2001 cerramos una
tóricamente excluidos, y justamente ello explica el etapa muy fuerte en relación con la movilización po-
prolongado y desgastante debate donde, si algo ha lítica, la reivindicación y el debate en torno a los con-
quedado claro, es que las salidas formales, cultura- ceptos del derecho indígena (Gómez 1997; Gómez
listas y retóricas no son aceptadas como moneda 2001; Gómez 2002; Gómez 2004; Gómez 2005; Gó-
de cambio de cara a la autonomía cuyo reconoci- mez 2011) y que los saldos que tenemos con todos
miento reclaman los pueblos indígenas y que tie- los candados que en el camino se fueron colocando,
ne en los Acuerdos de San Andrés Sa’camchen su tanto a nivel nacional como internacional, le dan o
marco mínimo. no sentido a la justiciabilidad del derecho indígena.
A partir de la firma de dichos acuerdos, el Resulta necesario comprender cabalmente
movimiento indígena, agrupado en el Congreso las implicaciones de la posición de Estado que se
Nacional Indígena, mantuvo una posición firme definió en 2001 en el caso mexicano, que implicó
acerca de que los mismos ya habían sido negocia- el cierre de una etapa que se mantendrá mientras
dos previo a su firma, por lo tanto, no deberían ser subsista la hegemonía neoliberal.
susceptibles de regateos y distorsiones. Así, el cni Así, cobra relevancia la regulación sobre re-
acompañó al Ejército Zapatista de Liberación Na- cursos naturales con el consiguiente impacto para
cional (ezln) en todas las decisiones y moviliza- la posibilidad de alcanzar la reconstitución de los
ciones que en su momento generó la búsqueda de pueblos indígenas por la vía de la autonomía, pero
su cumplimiento. Para el movimiento indígena se también en el marco de una real y profunda refor-
abrieron posibilidades de fortalecimiento de su or- ma del Estado.
ganización. Es importante recordar que, en 1992,
no se vía posible un Congreso Nacional Indígena,

46 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


Con el cambio de gobierno, el Presidente Legislativo no fue capaz de garantizar el uso y dis-
Vicente Fox presentó al Senado como iniciativa la frute de recursos naturales cuando expresamente
propuesta de la Comisión de Concordia y Pacifi- no se demandaba el pleno dominio. Los conflictos
7
cación (cocopa), el 5 de diciembre del 2000. Tras con derechos de terceros se darían de entrada si se
la movilización de la Marcha del Color de la Tierra planteaban derechos sobre las tierras y los territo-
8
y la participación zapatista en San Lázaro, la Cá- rios que han ocupado. Además, de acuerdo con la
mara de Senadores elaboró un dictamen, contra- Suprema Corte, no cualquier interés de tercero es
viniendo lo pactado en los Acuerdos de San An- reivindicable, sino sólo el de aquel que demuestre
drés, con base en el cual, la comisión permanente que su derecho ha sido violado. Planteado en estos
del Congreso de la Unión declaró el 18 de julio de términos, constituye una condicionante genérica
2001 formalmente aprobada la reforma constitu- que consigna una virtual preferencia a favor de
cional y publicada en el Diario Oficial de la Fede- cualquier interés distinto al de los pueblos.
ración el 14 de agosto del mismo año. Es indudable que las inserciones de normas
Insisto en colocar la mirada en la razón de relativas a derecho indígena en el orden constitucio-
Estado que se definió para los pueblos indígenas nal expresarían avances en el terreno de las reivindi-
al decidir la mutilación y distorsión del alcance caciones de los pueblos indígenas, y su ejercicio ten-
de la reforma en materia indígena pactada en los dería a confrontar crecientemente las aspiraciones
Acuerdos de San Andrés Larraínzar en 1996, que neoliberales del Estado. Por eso han quedado atrás
presuponía una Reforma del Estado. En el texto las posibilidades que abriría una reforma congruen-
o
del nuevo artículo 2 constitucional se determinó te con los Acuerdos de San Andrés. Era importante
que la reforma en materia indígena se ejercería este tema porque existe una fragmentación legal en
“con respeto a las modalidades de propiedad y te- cuanto a recursos naturales. Lo cual contrasta radi-
nencia de la tierra establecidas en esta Constitu- calmente con el hecho de que los pueblos los asu-
ción y a las leyes de la materia, así como a los dere- men de manera integral. Así, encontramos la ley
chos adquiridos por terceros o por integrantes de agraria por un lado, la minera y forestal, la de aguas,
la comunidad”. El supuesto nuevo derecho consti- la de pesca y la de equilibrio ecológico por otro.
tucional para los pueblos indígenas nació enton-
ces supeditado a las leyes, cuestión contraria al A manera de conclusiones
principio de jerarquía de normas; esto, sin abordar A tres décadas de lucha por el reconocimiento de
las omisiones de conceptos como el de “tierras” y sus derechos, los caminos de la movilización indí-
“territorios” que fueron sustituidos por “los luga- gena se han transformado: algunos se han bifur-
res que habitan y ocupan”. De modo que el Poder cado para encontrarse en la lucha por los espacios
del Estado, mientras que otros han definido una
7. La Comisión de Concordia y Participación se integró con legis-
ladores de todos los partidos, de ambas cámaras, y fue parte de la estrategia para fortalecer su autonomía en los he-
estructura del diálogo contemplado en la ley que al efecto se emi-
tió en 1995. Dicha Comisión elaboró una propuesta de reforma para chos. También las demandas registran reacomo-
cumplir los Acuerdos de San Andrés, aceptada por el ͷϲ;΁, no así por
el gobierno del hoy ex Presidente Ernesto Zedillo. dos y redimensionamiento
$V¯VHGHQRPLQDDODVHGHRͤFLDOGHOD&£PDUDGH'LSXWDGRVVLQ
embargo, el 28 de marzo de 2001 sesionaron en ese recinto las dos
cámaras para recibir al ͷϲ;΁ y al Congreso Nacional Indígena.

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 47


En esta aparente imposibilidad hay un ele- traremos escenarios comunes, independientemen-
mento cierto: la profundización de las políticas te de la ausencia o presencia de normas constitu-
neoliberales que han hecho de los antiguos Esta- cionales, legales o de derecho internacional. Por
dos-nación una mera ficción (Assies 1999). Ahí ejemplo, paradójicamente, la tierra ya no vale tanto
se asienta el necesario redimensionamiento de las por sus fines agropecuarios como por su utilización
luchas sociales en nuestros países latinoamerica- para megaproyectos. Se impone en los Estados la
nos: pelear de cara a sus respectivos Estados, pero tendencia a ubicar en la explotación de recursos
con la mira puesta en las transnacionales, que no naturales de los territorios indígenas la vía para
han requerido un solo proceso constituyente que superar la crisis económica, por medio de con-
esté por fuera de los aparatos operativos en que se cesiones forestales, mineras, turísticas, hidroeléc-
han convertido organismos como el Banco Intera- tricas. Esto, sin garantizar siquiera el ejercicio del
mericano de Desarrollo (bid) o el Banco Mundial derecho a la consulta a favor de los pueblos indí-
(bm), entre otros. Sin embargo, felizmente la rea- genas antes de tomar decisiones que les afecten,
lidad tiene otros escenarios, “bolsones de resisten- como establece el Convenio 169 de la oit (Gómez
cia”, como les han llamado los zapatistas mexica- 2006). Mucho menos parece viable el ejercicio del
nos –porque los hay de otros países– y desde ahí y derecho al consentimiento libre e informado, re-
desde las redes que pacientemente se van tejiendo, conocido por la recientemente aprobada Declara-
se organizan para detener el empuje neoliberal ción sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas
que esta vez ya no sólo busca excluirlos sino vir- en la Organización de las Naciones Unidas (onu).
tualmente eliminarlos (Santos, 2002). En nuestros En ese contexto, observamos el reforza-
países, la aplicación de normas constitucionales está miento de la privatización mediante la emisión de
atada a la discrecionalidad que entraña “la voluntad sucesivas leyes centradas en la biodiversidad, lo
política” de aplicarlas. Esta línea se pone en crisis cual perfila la paulatina desaparición del espacio
frente a unos sujetos políticos interesados en exigir propio del derecho público al colocar al Estado
su cumplimiento. Las crecientes movilizaciones in- como simple promotor y certificador de las opera-
dígenas en regiones que conjugan extrema pobre- ciones “privadas” de los inversionistas.
za y marginación social y política, están generando Hoy está claro que el proceso de juridicidad
una tendencia muy grave y creciente que consiste en se ha topado con la indisposición de los Estados
valorar la problemática indígena bajo un esquema para optar por su profunda transformación y dar
de seguridad nacional en lugar de proponerse, in- paso plenamente al componente pluricultural his-
cluso en lógica de gobernabilidad, el fortalecimiento tóricamente negado. En lugar de ello, algunos han
del Estado de Derecho con la ampliación del marco optado por apropiarse del discurso para diseñar,
constitucional que propicie la participación directa más que un traje, un disfraz. (Lowenstein, 1965).
de estos pueblos en la definición y ejecución de po-
líticas nacionales.
Si nos acercamos a los diversos países de la
región y los vemos por la ventana indígena, encon-

48 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


Bibliografía (2005), “Pending Constitutionality: An Anal-
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Diputados,.

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 49


Fotografías: Archivo propiedad de Elia Stavenhagen

50 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


de donde salieron, con rumbo a Estados Unidos,
Entre la migración,
en el último barco que partió del puerto el día de
el racismo y la
la invasión alemana a Holanda y Bélgica. Tiempo
discriminación
después, el gobierno de México les otorgó la visa
Elia Stavenhagen
para ingresar a esta tierra, motivo por el que Ro-
dolfo siempre estuvo agradecido con este país que
Dicen que infancia es destino,
les salvó la vida.
y para Rodolfo así fue.
Así llegó a la Ciudad de México, en l940,
poco antes de cumplir 8 años. La familia Stavenha-
Rodolfo nació en Frankfurt en l932, en el seno de
gen se estableció en la Colonia Hipódromo Conde-
una familia de judíos asimilados a la cultura ale-
mana, poco religiosa, culta, que vivía en una her- sa y muy pronto su casa fue lugar de reunión de los

mosa residencia en una de las avenidas principales exiliados europeos, entre los que se encontraban

de su ciudad natal. En esa casa nacieron Kurt, su judíos, comunistas, militantes políticos, antifascis-
padre; su hermana Ruth y, cuatro años después, tas y socialdemócratas. Hablaban de los terrores
Rolf Emil Stavenhagen Gruenbaum. de la Segunda Guerra Mundial, de la invasión de
La familia Stavenhagen se dedicaba al comer- Normandía, de la batalla de Stalingrado, o de los
cio de diamantes y joyas finas. Su padre Kurt, fue campos de exterminio Nazi. Estas discusiones des-
uno de los primeros graduados en psicología indus- pertaban su imaginación y estimulaban su interés
trial, con una tesis de psicología del arte, en la Uni- en la historia y la geografía universal, las cuales es-
versidad Goethe. Era un hombre culto, optimista, tudió ávidamente desde niño para poder entender
había viajado por el mundo; liberal, aunque nunca y ubicar los acontecimientos que escuchaba en las
participó políticamente. Formaba parte de un cír- acaloradas discusiones. Este interés le permitió de-
culo intelectual cercano al Instituto de Investigacio- sarrollar una visión clara de las sociedades.
nes Sociales, conoció a Adorno, Walter Benjamin y Recuerdo que me contaba cómo trataba
fue amigo de la infancia de Erich Fromm, a quien de pasar desapercibido para poder escuchar las
encontraría más tarde en México. Su madre, Lore, fascinantes conversaciones y reflexiones de estos
era una mujer elegante, hermosa, estaba interesada personajes, que hablaban de ideas libertarias, y
en las filosofías orientales y era gran aficionada a la de cómo transformarían el mundo al finalizar la
lectura. De ella, Rodolfo contaba que le leía a Goe- guerra. Reconocía una especial influencia en su
the cuando estaba en su vientre, y que ya desde esa conciencia política y en su visión del mundo, de
etapa cuidaba de su educación. André Simone, también conocido como Otto Katz
En la década de los treinta, percibiendo el –su verdadero nombre. Fue un agente encubier-
peligro que representaba el nazismo para ellos, to de la Internacional Comunista, espía ruso que
Lore convenció a Kurt de la necesidad de abando- manejaba a un grupo de intelectuales y artistas en
nar Alemania. Finalmente, lograron salir del país México. Era amigo cercano de la familia, un hom-
en el año de 1936. La familia inició entonces una bre seductor, muy articulado, cosmopolita, que se
peregrinación por Europa hasta llegar a Amberes, movía en los círculos intelectuales y políticos del

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 51


mundo. Se cree que fue el personaje que inspiró la tro de cultura del gobierno francés; Teddy Kollek,
película de Casablanca. Katz regresa a Checoslo- alcalde de Jerusalém; Nelson Rockefeller, colec-
vaquia al terminar la guerra, donde ocupa un pues- cionista de arte prehispánico; el director de cine
to importante y más tarde es asesinado en l952 por John Houston; el artista Alexander Calder; entre
órdenes de Stalin. varios personajes que disfrutaron de las entrete-
Crecer en ese ambiente cosmopolita en su nidas visitas guiadas a la colección. Todos salían
niñez, de gran riqueza intelectual y cultural, le per- fascinados y asombrados ante la visión personal y
mitió reflexionar sobre los problemas del mundo. artística del arte mesoamericano que Kurt les de-
Pienso que desde esta época viene su deseo de que- velaba. Gran admirador de Henry Moore, recibió
rer transformar la sociedad, esa necesidad de luchar con gran emoción su visita; ambos, a lo largo de
contra el racismo y la discriminación que no permi- los años, mantuvieron una correspondencia sobre
tiera repetir los horrores del nazismo. la concepción formal de las esculturas de las civili-
Unos años después de establecerse en el país, zaciones antiguas, modernas europeas, y sus reso-
los Stavenhagen descubren el arte antiguo de Mé- luciones plásticas.
xico. Lore y Kurt Stavenhagen se convirtieron en Rodolfo descubrió México con sus padres;
coleccionistas de arte prehispánico, reunieron un con ellos viajó a sitios prehispánicos: Monte Al-
acervo de más de 4000 piezas que donaron a la na- bán, Mitla, Tajín, Xochicalco, Palenque; a ciudades
ción: una de las colecciones de arte prehispánico como Oaxaca y Taxco. Vivió las fiestas tradicio-
más importantes del país, que nos permite recrear la nales de los pueblos, disfrutó de los mercados y la
vida cotidiana en el México antiguo. Vivir entonces, cultura indígena. Especial impacto tuvo en él una
precisamente, tituló Rodolfo, muchos años después, estancia de un mes en Chiapas, que realizó a los 17
al catálogo que da fe de esta enorme colección. años con Gertrude Duby y Franz Bloom, amigos
La familia tuvo la oportunidad de interac- de sus padres y grandes conocedores de la zona
tuar con el ambiente político, cultural y artístico de maya. Fue una aventura inolvidable que le hizo
la sociedad mexicana. A la casa de San Ángel, don- descubrir a los Lacandones, el México indígena y
de residían por aquellos tiempos, asistían con fre- su vocación: sería antropólogo, a pesar de la in-
cuencia artistas como Diego Rivera, Frida Kahlo, quietud de su madre, que se preocupó y le pregun-
Miguel Covarrubias, Tamayo, Siqueiros, O’Gor- tó de qué iba a vivir.
man, Wolfgang Paalen, Mathias Goeritz, William En l949, ingresó a la Universidad de Chicago
Spratling; críticos de arte o investigadores, como para estudiar el Bachellor en Liberal Arts, que era
Justino Fernández, Paul Westheim, Fernando un programa innovador en ciencias sociales. Por
Gamboa, Ignacio Bernal o Alfonso Caso. La plá- recomendación de Franz Bloom, al llegar a la uni-
tica giraba entonces sobre el arte prehispánico, el versidad se puso en contacto con Robert Redfield,
nacionalismo cultural y la construcción de la iden- quien lo aceptó en su curso sobre cultura y socie-
tidad mexicana del México Postrevolucionario. dad. Estudió entonces los modelos de la antropo-
Llegaban también a la casa, a visitar la colec- logía cultural norteamericana y la antropología
ción, personalidades como André Malraux, minis- social británica, en el que se expone la visión del

52 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


folk urbano, hacia la ciudad moderna –tesis que logía, sus estudios con Redfield y Oscar Lewis, y,
va a cuestionar más adelante. También conoció a sobre todo, que hubiera conocido al maestro Tu-
Oscar Lewis, con quien trabajó en Tepoztlán en gwell, director general del Tenessee Valley Autho-
l956. En la universidad descubrió la antropología rity; lo contrató de inmediato.
urbana y colabora con la National Association for El plan era que la Presa “Miguel Alemán”
the Advancement of Colored People, asociación impulsara un gran desarrollo regional, que al irri-
que luchaba por los derechos civiles de los negros, gar las tierras creara una gran zona agrícola pro-
acercándose así a los movimientos civiles, al racis- ductiva, al estilo del proyecto del Tenesee Valley en
mo y la discriminación. Estados Unidos. Esto nunca sucedió, el desarrollo
Al terminar sus estudios en Chicago en 1951, regional nunca se logró. Pero Rodolfo regresó 50
Rodolfo viaja con sus padres a Europa, su primer años después como Relator Especial para los Dere-
gran viaje después de la Guerra: Inglaterra, Italia, chos Humanos y Libertades Fundamentales de los
Suiza y Alemania. No obstante, decidió quedarse Pueblos Indígenas de la onu y encontró a los indí-
en París un año para estudiar el idioma. Se inscri- genas mazatecos, a los que no les habían cumplido
be en la Sorbona en el curso de lengua y literatura las promesas de desarrollo.
francesa, y toma algunas clases de sociología. Re- En 1955, dejó otra vez la escuela para regre-
gresa al país en 1952 para estudiar en la Escuela sar a trabajar en la Comisión del Papaloapan, pues
Nacional de Antropología e Historia. Rodolfo pensaba que iba a aprender más de la experiencia
comentaba que tenía la necesidad de integrarse a en el campo con un plan de desarrollo tan intere-
México, definir su identidad, de conocer y sentir sante. Entró de becario al Instituto Nacional Indi-
su país; le interesaba estudiar los problemas que genista como técnico de recolocación de los pue-
se vivían en las comunidades y en la sociedad. No blos mazatecos: le tocó convencerlos de dejar sus
quiso quedarse en Europa, escogió ser mexicano. comunidades y pueblos con sus formas de vida, su
En l953, cuando cursaba el segundo año de cultura y sus muertos.
la carrera, se entrevistó con Alfonso Villa Rojas, Vivir el desplazamiento y la reubicación de
quien estaba solicitando jóvenes estudiantes de los indígenas que no querían dejar sus pueblos para
Antropología para trabajar en la Comisión del ser trasladados a sus nuevas comunidades, fue una
Papaloapan, en donde se estaba construyendo la experiencia muy impactante para él. Como joven
principal presa hidráulica de América Latina. La antropólogo, a sus 23 años le tocó ser el cacique
idea era que elaboraran estudios de los pueblos de Nuevo Ixcatlán, un pueblo de reacomodo: Ro-
mazatecos, cuyas comunidades iban a ser afec- dolfo debía decidir dónde iba a estar la escuela, la
tadas, ya que sus pueblos se iban a inundar para iglesia, el centro de salud, el cementerio; cómo se
construir la Presa “Miguel Alemán”. debían distribuir los recursos, y resolver los pro-
En la entrevista, Villarojas quedó impresio- blemas. Entendió entonces las realidades políticas,
nado con su corta experiencia, pero muy sólida sociales y económicas del México rural e indígena.
formación: su paso por la Universidad de Chicago, Con esta experiencia descubrió las estructuras del
su contacto con la escuela americana de antropo- poder y los derechos humanos.

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 53


El trabajo en la Cuenca del Papaloapan fue ces que un grupo de antropólogos, “los antropólo-
una vivencia fundamental para su vida profesio- gos del cambio” proponen una política indigenista
nal; allí entendió los aspectos sociales de la Antro- con énfasis en el respeto cultural y la identidad
pología Aplicada al servicio del Estado, naciona- étnica: un México pluricultural y multilingüe, en
lista, progresista y modernizador; vivió la realidad el que se respete su diversidad cultural. Sostienen
del Estado autoritario, que no consulta a los ma- que México tiene muchas culturas, que no es sólo
zatecos en su desplazamiento y los moviliza a su un país mestizo, sino que está integrado por mu-
antojo en nombre del desarrollo. chas culturas que se deben respetar, promover y
Descubrió los fenómenos sociales de una difundir. Promueven que los indígenas dejen de
realidad que desconocía y así se convirtió en un ser objetos de estudio, para transformarse en suje-
antropólogo activista que reconoce que las des- tos de su propia historia. El Estado escuchó a este
igualdades sociales y económicas tienen un com- grupo de intelectuales, reconoce la diversidad cul-
ponente étnico. Empezó a reflexionar uno de los tural del país, e implementa un nuevo enfoque de
paradigmas que lo acompañará durante toda su respeto y fortalecimiento a la cultura propia.
vida profesional: que el antropólogo debe observar En este punto, y antes de seguir con el re-
la realidad, para tratar de entender estos fenóme- corrido por su actividad académica, quiero co-
nos, con una visión amplia de las estructuras que mentar algo que pienso que es clave en este re-
participan y los agentes sociales que involucran; trato de Rodolfo: era un apasionado de la lectura.
utilizando y creando nuevos enfoques teóricos y Recuerdo que, cuando lo conocí, me sorprendió
herramientas conceptuales, que ayuden a promo- que tenía siempre varios libros en la cabecera de la
ver y lograr un cambio que beneficie a las clases cama: novelas, ensayos sobre diversas disciplinas,
sociales más desprotegidas. además del New York Review of Books y diversas
Este compromiso se manifiesta más tarde en revistas. Creía en una educación a través de los li-
los años sesenta, con un grupo de amigos y colegas bros. Aprendió, durante su vida, seis idiomas. Le
antropólogos que cuestionaron la política indige- interesaba hablarlos bien y siempre los estaba es-
nista, la cual promovía la integración de los pue- tudiando y practicando. Cuando llegábamos a una
blos indios a la vida económica, social y política de ciudad, una visita obligada era pasar a las librerías,
la nación. Mientras más pronto dejaran su cultura donde compraba una novela en el idioma original:
y se incorporaran a la modernidad y a la cultura francés, alemán, inglés, italiano o portugués.
nacional, progresarían y se lograría la integración En tiempos previos al internet, compraba
nacional. La idea del Estado era fortalecer el Mé- libros sobre los temas que estuviera investigando.
xico mestizo, alfabetizar en castellano; se trataba Siempre regresábamos con una maleta de libros,
de que los indígenas abandonaran su cultura y se como lo atestiguan los 14 500 volúmenes de su bi-
incorporaran a la cultura nacional. “Mexicanizar blioteca profesional personal, que donó al Colegio
al indio”, que se integrara a la modernidad, a la de México. Viajaba por todo el mundo visitando
cultura nacional, mediante políticas inducidas de librerías de libros viejos, o a los bouquinistes1 a la
aculturación controladas por el Estado. Es enton-
1. Vendedores de libros usados y antiguos.

54 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


orilla del Sena. En el fondo, Rodolfo también fue, estudio. Más adelante presentó este trabajo como
como su padre, un gran coleccionista: logró reunir tesis Las condiciones socioeconómicas de la pobla-
más de 900 ejemplares de libros antiguos sobre la ción trabajadora de Tijuana en la enah, donde se
historia de México, que van desde del siglo XVII y recibió a los 25 años como maestro en Etnología
hasta principios del XX; así como más de 800 lito- Social. En esta investigación hace una descripción
grafías y mapas. Sentía que su labor era un rescate de las diferentes clases sociales, sus cotidianos flu-
del patrimonio nacional. Este interés por la histo- jos migratorios a través de la frontera, la economía
ria se refleja en la forma que redacta sus artículos y de la ciudad, sus actores y su organización social.
trata sus temas de una manera universal. A lo largo En 2012, El Colegio de la Frontera Norte le orga-
de su vida va a estar viajando siempre, interesado nizó un homenaje en el que recibió un reconoci-
en los problemas sociales del desarrollo, con un miento por ser un precursor en el campo de la so-
conocimiento profundo de las distintas sociedades ciología urbana y los estudios fronterizos.
y culturas del mundo. En l959, Rodolfo obtuvo una beca del go-
Dicho esto, retomo el hilo de la historia. bierno de Francia para cursar un doctorado en
Además de inscribirse a la enah, Rodolfo lo hizo L’École Practique des Hautes Etudes, en donde
también en la Escuela Nacional de Economía de la tuvo como director de tesis a George Balandier, es-
unam, así que iba por las tardes a Antropología y pecialista en temas africanos, que estaba orientado
por las mañanas a la unam, donde cursó dos años hacia la filosofía política y estudios sobre las socie-
de economía antes de decidir irse al Papaloapan. dades africanas con un enfoque marxista. Rodolfo
Regresó a la unam en l956, como asistente de Ho- descubrió el concepto de “tercer mundo” que tra-
racio Labastida, quien había sido su maestro, en bajaba Balandier: el primer mundo era el mundo
una clase de Sociología de la Familia, y a quien un occidental, las potencias capitalistas, el de los paí-
mes después lo llaman a un cargo público y lo deja ses que tenían sus colonias, el mundo industrial de
encargado de la materia. Un poco más tarde, entró los países ricos. El segundo mundo lo conforma-
a trabajar en la Escuela Nacional de Ciencias Polí- ban el bloque socialista y el comunista. Y el tercer
ticas y Sociales como asistente del director, Pablo mundo era el de los países pobres, poco avanzados
González Casanova, quien también fue su maestro tecnológicamente, los países colonizados de Áfri-
en la Facultad de Economía y con el que mantuvo ca, Asia y América Latina.
una fraternal amistad que duró más de 50 años. Rodolfo presentó un proyecto de tesis so-
González Casanova recibió una solicitud de bre una visión comparativa entre México y África.
Paquita Acosta Lagunes para que se realizara un Este proyecto no se llevó a cabo, pero representó
estudio sobre la sociedad trabajadora de Tijuana, y para él una oportunidad de acercarse al tema del
así la Secretaría de Salud pudiera implementar sus colonialismo, tema que se vivía con pasión en la
políticas de asistencia social y de salud en la zona. Francia de aquellos años. Armaba acaloradas dis-
Pablo ofreció el proyecto a Rodolfo, y éste orga- cusiones con su amigo Claude Meillassoux y otros
nizó rápidamente un equipo de investigación con compañeros de países del tercer mundo: africanos,
sus estudiantes y se trasladó a Tijuana a realizar el asiáticos y estudiantes latinoamericanos.

Racismo y derechos de los pueblos originarios en el pensamiento de Rodolfo Stavenhagen 55


Fue una experiencia de profunda riqueza Fernando Henrique Cardoso de Oliveira, Raúl
intelectual. Descubrió las luchas de liberación na- Prebisch, Ricardo Lagos, José Matos Mar, Camilo
cional de los países del tercer mundo, la descoloni- Torres o José Medina Echeverría, con los que man-
zación, las formas de dominación de las socieda- tuvo largas amistades e intercambios profesiona-
des capitalistas, el colonialismo interno y externo, les. En l964 tuvo lugar el golpe militar en Brasil, el
los derechos de las minorías étnicas, lingüísticas y Centro cerró y Rodolfo decidió regresar a México.
religiosas. Analizaban las clases sociales y su rela- Quiero dejar el presente recorrido en esta
ción con la economía capitalista, desde una visión etapa su carrera, porque es imposible abarcar su
marxista; las estrategias revolucionarias, el papel vida profesional en este artículo. Me permití na-
de la burguesía nacional y la clase obrera; las for- rrar sus primeros años, para tratar de esclarecer
mas de dominación de las sociedades, las luchas cómo la historia familiar y personal de un acadé-
contra la discriminación y el racismo. mico como Rodolfo, influyó en los temas que es-
Todos estos temas los seguirá reflexionando cogió trabajar. En ese sentido, el haber nacido en
a lo largo de su vida, conservando un análisis mar- el seno de una familia judía que tuvo que emigrar
xista al abordar los problemas del campo, la comu- dejando atrás su lugar, su familia y su cultura, ex-
nidad vinculada a la nación, la relación etnia-cla- plica su identificación con la experiencia en el Pa-
se-nación, las sociedades campesinas vinculadas paloapan, germen de su compromiso de vida con
a la estratificación social y el desarrollo del capita- los pueblos indígenas.
lismo. De ese modo, centró su interés en la crítica
de los modelos hegemónicos, analizando las des-
igualdades sociales, desde las políticas del Estado,
desarrollando reflexiones en torno de las relaciones
interétnicas y sus conflictos.
Obtuvo el grado en Doctor en Sociología
en l964 con una tesis que fue publicada como li-
bro, Las clases sociales en las sociedades agrarias.
Terminó sus estudios en Paris en l962, y otra vez
por recomendación de Don Pablo González Ca-
sanova, se le presentó la oportunidad de trabajar
como Secretario General del Centro Latinoameri-
cano de Investigaciones en Ciencias Sociales, ins-
titución creada por la unesco, en Río de Janeiro.
Esta estancia le permitió conocer Brasil con sus
profundos contrastes sociales, acercarse a los te-
mas latinoamericanos y cuestionar sus paradig-
mas de análisis y desarrollo. Entabló relación con
intelectuales y estudiosos latinoamericanos, como

56 Boletín Colegio de Etnólogos y Antropólogos Sociales, A.C. / 2020


Fotografías: Archivo propiedad de Elia Stavenhagen

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