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práctica atlética
Las distancias máximas recomendadas, según la RFEA, por categorías y meses son:
SALIDA
META
CAMARA DE
LLAMADAS
SECRETARÍA
CONFIRMACIONES
ZONA DE
CALENTAMIENTO
N
POCA ACTIVIDAD ATLÉTICA
•
N N
•
N
Que sean vistosos para el público
Tablas de récords
Módulos cubiertos
La riqueza motriz del atletismo permite que sus contenidos adquieran un gran protagonismo
dentro de la esfera de la Educación Física. En este ámbito los aspectos formativos y educativos del
alumno deben polarizar la atención de los objetivos establecidos, tanto en la enseñanza Primaria como
Secundaria.
Considerando la función social que debe tener la Educación Física, es necesario que por parte
del profesor y maestro de esta asignatura, tengan un conocimiento y teórico y práctico del atletismo,
motivado por una serie de razones emanadas tanto de la propia naturaleza del deporte como de sus
posibilidades en los diferentes ámbitos de aplicación.
• La primera razón y la más convincente desde el punto de vista educativo es el valor que
representan las distintas actividades atléticas de cara a la formación psicomotriz del joven en el
proceso educativo. El efecto de la motricidad deportiva sobre el ser humano es la contribución
decisiva y constituyente para el desarrollo de una personalidad multifacética” (Meinel y
Schnabel, 1.988). Los contenidos del atletismo, al tratarse de habilidades básicas y naturales,
deben integrarse en el repertorio motriz del niño como base para todas las habilidades
posteriores más complejas, tanto deportivas como no deportivas, representando en definitiva el
soporte motriz de la futura y posible especialización del sujeto. El atletismo, como ejemplo de
deporte individual, presenta la ventaja de acentuar la importancia de la función de
interiorización (atención perceptiva centrada en el propio cuerpo) y, en consecuencia, poseen
una acción educativa dependiente del esquema corporal. (Le Boulch, 1.991).
• La segunda, es inmediata y tiene que ver con la legislación vigente en materia educativa que
exige una serie de contenidos dentro de la asignatura de Educación Física en la enseñanza
primaria y secundaria obligatoria, hasta los 16 años. El ámbito docente representa una de las
áreas más importantes para desempeñar la actividad laboral de los profesionales de la
Educación Física. Por lo tanto es necesario que los alumnos de Educación Física conozcan y
dominen las enormes posibilidades educativas del atletismo así como los fundamentos
necesarios para iniciar eficazmente a quienes tengan interés en introducirse en la parcela
competitiva.
• La tercera podemos deducirla del propio carácter y estructura que el atletismo tiene, el cual esta
compuesto por una serie de disciplinas o especialidades deportivas de distinta complejidad
técnica, que requieren cualidades distintas tanto a nivel condicional como coordinativo y de
unas características diferentes tanto morfológicas como psicológicas. Todas estas
circunstancias confieren al atletismo unas características y particularidades que lo hacen
distinto al resto de los deportes. Más que un deporte exclusivo, representa un conjunto de
deportes. Cada uno de los mismos requiere de un estudio específico y científico distinto, tanto
desde el punto de vista de la ejecución (biomecánica del gesto) como desde la perspectiva de la
condición física.
Cada uno de los "deportes" o actividades atléticas que lo forman necesita a su vez de la máxima
expresión de una determinada cualidad física, esto hace que sea el atletismo a través de sus distintas
El valor educativo que las habilidades atléticas tienen desde el punto de vista psícomotriz es
innegable y esta característica debemos orientarla en dos frentes distintos:
• Como desarrollo de la coordinación motriz básica y soporte del aprendizaje por parte
del estudiante de Educación Física.
El valor educativo del atletismo es perfectamente compatible con las intenciones educativas
de los currículos de Educación Primaria y Secundaria. “Para que sea un hecho educativo, el deporte
tendrá un carácter abierto, sin que la participación se supedite a características de sexo, niveles de
habilidad o criterios de discriminación; y debe, asimismo, realizarse con fines educativos centrados
en la mejora de las capacidades motrices o de otra naturaleza, que son objetivos de la educación, y
no con la finalidad de obtener un resultado en la actividad competitiva” (Real Decreto 245/1992 del
30 de Julio, por el que se establece el currículo en la Educación Primaria en la Comunidad
Autónoma de Galicia).
El marco natural del atletismo educativo puede ubicarse dentro de la esfera de la Educación
Física. El rendimiento, dentro del ámbito educativo no representa ningún fin en si mismo. No obstante
el Deporte Escolar o Deporte en Edad Escolar, con unos planteamientos adecuados, también debe ser
incluido dentro del marco educativo, siempre y cuando no se priorice el carácter competitivo. Con ello,
no deben excluirse ciertos valores educativos que se asocian al deporte de rendimiento. “ El deporte no
posee ninguna virtud mágica, puede despertar el sentido de la solidaridad y cooperación como
engendrar un espíritu individualista”... “puede educar el respeto a la norma como fomentar el sentido
de la trampa; depende del educador y de la forma de enseñar, que fomenten o no los valores educativos
que indiscutiblemente posee el deporte” (Parlebas, 1.969). Ello permite defender la tremenda
importancia que adquiere, en este sentido, el entrenador de atletas, en el ámbito del rendimiento
deportivo, de tal manera que, a los conocimientos técnicos que, lógicamente, deba de tener, se añada
una gran capacidad educativa, lo que le convertirá en un técnico-educador.
Es frecuente, a veces, encontrar actitudes contrarias a esta filosofía en los propios padres que
intentan dirigir la carrera deportiva de sus hijos con unas intenciones claramente especulativas, con
toda la presión que ello significa, con lo que se instrumentaliza la actividad deportiva del niño. Esta
consideración también transferirse al ámbito de algunos entrenadores, ávidos de resultados prematuros
y prestigio deportivo...
“Lo educativo de las prácticas deportivas, no es el aprendizaje de sus técnicas o tácticas, ni siquiera los
beneficios físicos o psíquicos de una buena preparación física que sustenta su rendimiento, sino que lo
realmente, y único educativo son las condiciones en que puedan realizarse estas prácticas que permitan
al deportista comprometer y movilizar sus capacidades de tal manera que esa experiencia organice y
configure su propio yo, y logre su auto-estructuración. El acto educativo depende y está en función del
pensamiento pedagógico que lo soporta”. (Seirul-lo, 1.995).
A continuación se relacionan algunas características que deben tenerse en cuenta para crear el
ambiente educativo en una sesión atlética.
Esta agrupación no determina métodos concretos, responde a una forma de organizar los
contenidos que deben ser abordados de una manera enlazada atendiendo a la configuración cíclica de
la enseñanza del área, construyendo unos contenidos sobre los otros, como una estructura de
relaciones observables de forma que se facilite su comprensión y aplicación en contextos cada vez
más enriquecedores y complejos. Tampoco implica una organización cerrada, por el contrario,
permitirá organizar de diferentes maneras los contenidos, adoptando la metodología más adecuada a
las características de éstos y del grupo de alumnos y alumnas.
Los contenidos del bloque común, por su naturaleza transversal, se trabajan a lo largo del curso en
combinación con los contenidos del resto de los bloques dado que trata aspectos como: los valores
que tienen por referente el cuerpo, el movimiento y a la relación con el contorno, la educación viaria, la
resolución de conflictos mediante el diálogo y la aceptación de las reglas establecidas, el desarrollo de
la iniciativa individual y de hábitos de esfuerzo, las actitudes, la confianza, el uso adecuado de los
materiales y espacios y la integración de las Tecnologías de la Información y Comunicación.
Como consecuencia de todo lo anterior, se establecen una serie de orientaciones metodológicas
para el área que favorecerán un enfoque competencial, así como la consecución, consolidación e
integración de los diferentes estándares por parte del alumnado.
La Educación física en esta etapa tendrá un carácter eminentemente global y lúdico, hasta el punto
de convertir el juego en el contexto ideal para la mayoría de los aprendizajes.
La selección de los contenidos y las metodologías activas y contextualizadas deben asegurar el
desarrollo de las competencias clave a lo largo de toda la etapa.
Las estructuras de aprendizaje cooperativo posibilitarán la resolución conjunta de las tareas y de
los problemas, y potenciarán la inclusión del alumnado.
El profesorado debe implicarse en la elaboración y diseño de diferentes tipos de materiales,
adaptados a los distintos niveles y a los diferentes estilos y ritmos de aprendizaje de los alumnos y
alumnas, con el objeto de atender a la diversidad en la aula y personalizar los procesos de
construcción de los aprendizajes. Se debe potenciar el uso de una variedad de materiales y recursos,
considerando especialmente la integración de las Tecnologías de la Información y la Comunicación.
• Conocer y valorar su cuerpo y la actividad física como medio de exploración y goce de sus
posibilidades motrices de relación con los demás y como recurso para organizar el tiempo
libre.
• Resolver problemas que exijan el dominio de patrones motrices básicos adecuándose a los
estímulos perceptivos y seleccionando los movimientos, previa valoración de sus
posibilidades.
• Utilizar los recursos específicos del cuerpo y del movimiento para comunicar sensaciones,
ideas o estados de ánimo y comprender mensajes en este sentido.
Al mismo tiempo, el conocimiento de todas las posibilidades que ofrecen las habilidades y
destrezas básicas y específicas del atletismo, permitirán abordar con éxito gran parte de los
objetivos generales descritos en el Diseño Curricular Base de Educación Física, relativo a la
enseñanza propia de la Educación Secundaria Obligatoria, que a continuación se indican:
• Planificar y realizar actividades que permitan satisfacer sus propias necesidades, previa
valoración del estado de sus capacidades físicas y habilidades motrices, tanto básicas como
específicas.
• Ser consecuente con el conocimiento del cuerpo y sus necesidades, adoptando una actitud
crítica ante las prácticas que tienen efectos negativos para la salud individual y colectiva,
respetando el medio ambiente y favoreciendo su conservación.
Los tres argumentos más claros para esta calificación son los que aporta L.M. Ruiz Pérez en su
libro "Desarrollo motor y actividades físicas", basándose en estudios y afirmaciones de Singer entre
otros:
Nivel cognitivo:
Nivel psicomotriz:
Nivel socio-afectivo:
Los elementos básicos para elaborar un correcto esquema corporal son: el control tónico, el
control postural, el control respiratorio, las capacidades perceptivas y la lateralización. La
estructuración inadecuada de un esquema corporal dificulta la relación del niño con el exterior,
manifestándose situaciones como:
Por su parte, Le Boulch respalda los siguientes planteamientos motores para favorecer la
orientación del esquema corporal:
• Ejercicios de toma de conciencia del cuerpo y sus segmentos (sobre todo concienciación
segmentaria de los miembros superiores).
• Ejercicios de equilibrio unilaterales.
Isidoro Hornillos Baz 38
• Ejercicios de pelota: lanzamientos - recepciones, pases de una mano a otra.
• Ejercicios de Coordinación Dinámica General: saltos y desplazamientos en diferentes
orientaciones.
• Ejercitación de las praxias de la mano y dedos: modelado, recortado, collage, ejercicios de
prensión, etc.
• Ejercitación del grafismo: bucles, copas, arcos, olas, ochos. etc.
Etapa l: (Desde el nacimiento hasta los 3 años y medio). El niño no diferencia entre los dos
lados de su cuerpo.
Etapa II: (Entre los 4 y 5 años). Tienen conciencia de que sus extremidades se encuentran
en lados opuestos pero no ubican su derecha e izquierda.
Etapa III: (Entre los 6 y 7 años). El niño advierte que los órganos y miembros izquierdos y
derechos se encuentran en lados opuestos de su cuerpo, pero no sabe que esas partes son las
derechas o las izquierdas.
Otras investigaciones confirman que alrededor de los 7 años los niños con un desarrollo
normal ya son capaces de identificar correcta y regularmente las partes y lados izquierdos y
derechos de su cuerpo.
Para afirmar la lateralidad y orientación del esquema corporal, Le Boulch propone una serie
de acciones motrices que responde a las siguientes pautas:
Mediante las grandes posibilidades que nos ofrecen las habilidades y destrezas atléticas
podremos afianzar perfectamente la lateralidad de los niños. Sin embargo, cuando abordamos una
iniciación a destrezas específicas, es relativamente frecuente que los niños nos interroguen sobre una
gran cantidad de cuestiones que afectan a su lateralidad.
Por ello es preciso distinguir dos términos diferentes: la habilidad y la fuerza. Por ejemplo, se
puede tener más habilidad en la mano izquierda, pero más fuerza en la mano derecha, o viceversa.
Algunas decisiones a la hora de abordar habilidades atléticas que afectan a la lateralidad del sujeto.
Si comparamos la fuerza de las manos y los pies vemos que la distribución de población es:
(Luc Legros, 1.984/85)
En cualquiera de los dos casos se comprueba que el pie izquierdo, suele ser el más utilizado en:
No obstante, en el caso de las vallas, y en concreto en los 400 m.v., es muy conveniente que los
corredores desarrollen su habilidad en las dos piernas. Existen una amplia gama de tests de fuerza que
clarifican perfectamente cuál de las dos piernas es la más fuerte y que se describirán en la didáctica de
las habilidades atléticas.
La siguiente clasificación agrupa desde los movimientos más genéricos, hasta los más
específicos:
• Coordinación Dinámica General, necesaria como soporte para todo tipo de movimientos.
Tiene una gran importancia en los desplazamientos, giros y saltos.
• Coordinación Oculo-manual, como reguladora del mecanismo perceptivo. Es decisiva,
especialmente, para lanzamientos y recepciones.
• Coordinación Segmentaria, como reguladora de la intervención de algunos segmentos
• partes corporales. Por ello se manifiesta de forma principal en la motricidad fina, así como
en el afianzamiento de la lateralidad.
• Control Postural y Equilibrios, como regulador de la postura dinámica o estática.
La ejecución de las habilidades atléticas más complejas requiere de una enorme capacidad
coordinativa. A través de investigaciones efectuadas (CONI 1.983, citadas por Alberto Madella,
1.986) con jóvenes de diversas disciplinas deportivas, se ha demostrado que los practicantes de
atletismo tienen un nivel coordinativo superior al de otros sujetos que practican disciplinas
deportivas que, a priori, son más propicias para estimular la coordinación (fútbol, baloncesto, etc.).
Basándonos en la clasificación de Hirtz y Col. (1.979), citado por Meinel y Schnabel (1.987, 262),
las capacidades coordinativas fundamentales para el deporte escolar son:
El desarrollo de esta capacidad permitirá combinar con eficacia diversos gestos sucesivos o
aislados perfectamente automatizados. Esta capacidad está influenciada por diversidad de estímulos
ópticos y kinestésicos que regulan la actuación de los diversos grupos musculares y articulaciones
presentes en todas las acciones motrices. Las habilidades atléticas requieren de una gran capacidad
coordinativa para acoplar movimientos desde dos perspectivas:
Relación entre los movimientos de los brazos. Por ejemplo: la acción simétrica de los brazos
en el lanzamiento de martillo, en la batida del salto de altura, etc. Acción sucesiva en el salto
de longitud (fase aérea, estilo de tijera), etc.
Relación entre los movimientos de las piernas. Por ejemplo: movimientos cruzados en la
acción acíclica final del lanzamiento de jabalina. Movimientos en diferentes planos durante
el paso de la valla, etc.
Relación de los movimientos del tronco con otros segmentos. En especial, en las fases aéreas
de los saltos en general.
Asimismo, las opciones de combinar dos o más habilidades atléticas básicas se expresan en
el siguiente gráfico:
Dentro del ámbito de las habilidades atléticas la educación y el desarrollo de esta capacidad
es determinante para optimizar el resultado motriz en una gran cantidad de situaciones
pedagógicas o competitivas:
.
El cuerpo estático, y su reacción motora precisa, sobre la percepción de un compañero en
movimiento al paso por una referencia establecida (Relevos)
Percepción espacio-
temporal, en relación a la
dirección del lanzamiento
y secuencia motriz previa
Percepción espacio-temporal, en
relación a la posición personal y
de los contrincantes, y sus
movimientos
Un compañero que se aproxima a realizar una transmisión del testigo. El receptor, en el caso
de los relevos largos, deberá ajustar su velocidad en función de la de su compañero.
Los adversarios en las carreras de fondo al desplazarse en pelotón ante la necesidad de
ocupar el espacio más eficaz.
La distancia que reste para concluir la carrera (meta) y estado interior del atleta.
Etc.
Adquiere gran importancia en los gestos deportivos en los que la calidad de información
sensorial, (interiorización del movimiento) así como la velocidad del proceso de diferenciación
regulan y controlan la acción, por ejemplo, lanzamientos o salto con pértiga.
Supone la capacidad del sujeto para responder de forma rápida a los estímulos que perciba
del exterior, según su naturaleza. La posibilidad de combinar tipos de estímulos con acciones a
desarrollar, posibilitarán una amplia gama de posibilidades.
Los tipos de estímulos pueden ser visuales, acústicos, táctiles y cinestésicos. En el ejemplo,
los niños saltan al estímulo visual. Podrían hacerlo con los ojos cerrados, en cuyo caso se podría
utilizar un estímulo sonoro o bien táctil.
Dentro de las habilidades atléticas específicas existen gran cantidad de situaciones que obligan al
atleta a reaccionar ante diversos estímulos:
Reacciones simples:
Reacción ante posibles informaciones externas, en forma de estímulo sonoro en las carreras de
resistencia o visuales, ante las maniobras tácticas de los adversarios.
Capacidad de ritmo
Se expresa mediante una respuesta motriz del sujeto que le permite establecer un ritmo adecuado
a los gestos que debe de ejecutar mediante un proceso organizado en el tiempo de su contracción e
inhibición muscular.
En realidad, el ritmo siempre esta presente en todas las habilidades atléticas y su correcta
interpretación posibilitará el éxito del resultado. Por ejemplo, el fondista debe reproducir el ritmo
que le permita realizar el tiempo previsto ya que cualquier alteración en el mismo dificultaría el
objetivo previsto. El saltador deberá imprimir a su carrera de aproximación un ritmo que le permita
efectuar su impulso en el lugar previsto y con la velocidad precisa. Igualmente, el lanzador deberá
encadenar cada una de las fases del modelo técnico con el ritmo adecuado para transmitir al
artefacto la velocidad y angulación necesarias.
Capacidad de equilibrio
El equilibrio, tanto estático como dinámico, alcanza una gran madurez hacia los 5 años, pero no
será hasta la edad de 7 años en que ya se completa con la posibilidad de permanecer en equilibrio
Todos estos aspectos que integran la capacidad de coordinación que hemos expuesto se
encuentran íntimamente relacionados, de tal forma que la deficiencia en cualquiera de ellos,
dificultaría la coordinación global de la acción.
“La Xunta de Galicia a través de la Secretaría General para el Deporte puso en marcha en el curso
2009-2010 los Xogos Galegos Deportivos en Idade Escolar, con el programa XOGADE. Apostando por
un modelo deportivo competitivo abierto la participación, tal y como queda reflejado en la Carta
Europea del deporte, promocionando la salud, la condición física y el bienestar, buscando que todos
los escolares tengan acceso a la práctica de actividades lúdicas y deportivas, sin existir ningún tipo de
discriminación.
Cada modalidad deportiva posee su propia normativa específica, aunque con carácter general se
puede establecer lo siguiente:
Va dirigida a:
Los centros de enseñanza, ANPA, clubs, escuelas deportivas municipales, agrupaciones deportivas,
asociaciones etc. de la Comunidad Autónoma de Galicia que lo deseen.
La inscripción:
Se realizará a través de la aplicación informática www.deporteescolargalego.com, que se encuentra
vinculada a esta página web y a la página deporte.xunta.gal
La ficha de deportista escolar del curso escolar 2019 – 2020
El carnet de deportista será de carácter opcional en las fases previas (siempre que se sustituya por el
DNI u otra identificación de caracter oficial con foto) pero obligatorio en las fases provinciales y
autonómicas. Las categorías:
Benjamín: 2011-2010
Alevín: 2009 - 2008
Infantil: 2007-2006
Cadete: 2005-2004
En las edades de estas categorías existen modificaciones dependiendo de la modalidad deportiva, por
lo que será necesario su consulta en la regulación de cada modalidad.
Las modalidades de la "Actividad deportiva escolar" del curso escolar 2019-2020 son las siguientes:
1. Atletismo en pista
2. Bádminton
Isidoro Hornillos Baz 50
3. Baloncesto
4. Balonmano
5. Campo a través
6. Duatlón
7. Fútbol sala
8. Multijuego 6 a 8
9. Natación
10. Orientación
11. Patinaje Artístico
12. Piragüismo
13. Tenis de Mesa
14. Voleibol
15. Ajedrez
16. Jugando con el atletismo
Las normativas
Los reglamentos de juego, sanciones, recursos etc, serán los que figuran en las bases generales y
normas técnicas de cada deporte. Asimismo, todos los aspectos no recogidos en estas normas se
regularán por la normativa de las respectivas federaciones gallegas y los comités provinciales
organizadores.
A mayores, serán publicadas las normativas específicas para cada una de las actividades en las
modalidades que se rijan por sistema de competición o bien por encuentros lúdicos. No serán
necesarias para aquellos donde se juegue por sistema de liga.