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El documento habla sobre estrategias de conservación y manejo sustentable de los recursos de una cuenca hidrográfica. Presenta las causas comunes de problemas en las cuencas altas como la remoción de cobertura vegetal y sobreutilización de suelos. También analiza cómo la vegetación puede ayudar a regular el escurrimiento del agua. Propone soluciones como grupos de conservación de suelos, estudios hidrológicos y parcelas demostrativas de prácticas conservacionistas.
El documento habla sobre estrategias de conservación y manejo sustentable de los recursos de una cuenca hidrográfica. Presenta las causas comunes de problemas en las cuencas altas como la remoción de cobertura vegetal y sobreutilización de suelos. También analiza cómo la vegetación puede ayudar a regular el escurrimiento del agua. Propone soluciones como grupos de conservación de suelos, estudios hidrológicos y parcelas demostrativas de prácticas conservacionistas.
El documento habla sobre estrategias de conservación y manejo sustentable de los recursos de una cuenca hidrográfica. Presenta las causas comunes de problemas en las cuencas altas como la remoción de cobertura vegetal y sobreutilización de suelos. También analiza cómo la vegetación puede ayudar a regular el escurrimiento del agua. Propone soluciones como grupos de conservación de suelos, estudios hidrológicos y parcelas demostrativas de prácticas conservacionistas.
Instituto Tecnológico Superior de la región Sierra
División: Ingeniera en Agronomía
Alumno: Juan Ignacio Medina Zapata
Nombre del profesor: ING Álvaro Gil Álvarez
Materia: Manejo integral de Cuencas Hidrográficas
Tema: 4.-Estrategias de conservación y manejo sustentable de los
recursos de una cuenca.
Ciclo: Agosto 2022/Enero 2023
7mo Semestre Grupo “A”
4.-Estrategias de conservación y manejo sustentable de los recursos de una cuenca. 4.1. Análisis y propuestas de solución a problemas dentro de la cuenca. La problemática general que se presenta con las cuencas hidrográficas, particularmente en sus zonas altas, pueden atribuirse, por una parte, a sus características físico-naturales y en gran medida a su ocupación en forma anárquica, sin atender directrices de planificación para la ocupación ordenada del espacio y para el aprovechamiento racional de los recursos naturales. Sin embargo, las causas principales de la problemática de la mayoría de las cuencas altas son de orden estructural, las cuales dan lugar a un rápido agotamiento de los recursos y por ende a un bajo nivel de rendimiento. Al respecto, es importante reconocer la influencia que sobre esta situación tiene el modelo de desarrollo prevaleciente, que persigue la maximización de los beneficios económicos, aún en detrimento de los recursos y valores del ambiente. Son notorias las condiciones socio-económicas precarias que caracterizan a la mayor parte de la población de dichas cuencas, con alto grado de analfabetismo, problemas graves de salubridad y de seguridad social, mientras persisten las fallas en la atención y apoyo que deben recibir de los organismos del Estado. Existe además una situación indeseable por la inobservancia e incumplimiento de la normativa legal vigente en materia ambiental, como consecuencia de la débil penalización del daño ecológico, el inefectivo ejercicio de mecanismos de vigilancia y control, la venalidad que se observa en el otorgamiento de permisos. Como consecuencia evidente de lo antes expuesto encontramos una serie de problemas los cuales son comunes a muchas cuencas altas de nuestro país: Causas Remoción indiscriminada de la cobertura vegetal Sobreutilización de los suelos Concentraciones inadecuadas de población y actividades económicas Concentración de infraestructura vial sin observancia de las normas y pautas de índole ambiental recomendables. Avance incontrolado de la frontera agrícola No aplicación de prácticas conservacionistas en suelos de áreas vulnerables Explotación de minerales metálicos y no metálicos con técnicas objetables desde el punto de vista ambiental Deficiente y en algunos casos inexistente información básica ambiental, así como de investigación necesaria. Ese conjunto de problemas es generalizado en la mayoría de las cuencas venezolanas y sin temor a equivocarnos podemos hacerlo extensivo a las cuencas de la mayoría de países latinoamericanos, y han originados consecuencias negativas. Estas consecuencias negativas son: Alteración del régimen hidrológico Procesos de erosión acelerada Sedimentación y colmatación en obras hidráulicas con drástica disminución de su vida útil Inundaciones Daños y destrucción de obras hidráulicas y civiles Pérdida de vidas humanas y bienes materiales Contaminación de cuerpos de agua debido a la utilización indiscriminada de productos químicos. Insecticidas, herbicidas, fungicidas y fertilizantes. Contaminación de las aguas por descargas cloacales e industriales Modificaciones severas del hábitat natural de muchas especies faunísticas Alteración general del equilibrio ecológico con modificación de poblaciones animales y sus consecuencias en los procesos de control biológico Movimiento de tierra en masa y deslizamientos en áreas urbanas y rurales Disminución general de la capacidad de sustentación de las cuencas (merma en la productividad agrícola en el sentido más amplio). 4.2.-Análisis de la información. Mientras mayor sea la irregularidad de los escurrimientos menor será la necesidad de construir embalses de regulación. Estos, en efecto, deben ser construidos allí donde la escasez y la insuficiencia en los periodos de estiaje lo ameriten (según criterios económicos y/o sociales), o donde el desarrollo de tierras periódicamente inundadas permita recuperar las inversiones. La construcción de tales obras, si bien puede ser fomentada por la entidad administradora del recurso, debe ser una responsabilidad de las empresas o comunidades usuarias interesadas. La irregularidad de los caudales tiene efectos, además, sobre la inestabilidad de los lechos y sobre los transportes sólidos. Los más importantes fenómenos de socavación de márgenes e incisión de lechos se producen durante las crecidas, sobre todo cuando éstas son violentas. Es necesario tener en cuenta esta situación, ya que, en no pocos casos, los más importantes focos sedimentógenos para un embalse o para un río navegable, pueden estar localizados en los propios cauces, en relación con este tipo de fenómenos. Las observaciones hechas conducen el análisis a determinar qué factores dentro de las cuencas, susceptibles de manejar, favorecen la regularidad del escurrimiento. Entre estos, el más importante es la cobertura vegetal. Las plantas constituyen un obstáculo al escurrimiento superficial del agua. Evidentemente, mientras más compleja sea la vegetación más numerosos serán los obstáculos. Al frenar el escurrimiento, la vegetación favorece la infiltración y, de esa forma, retarda la llegada del agua a los cauces principales, disminuyendo las crestas o picos de las crecidas. En este sentido, el mejor tipo de cobertura vegetal es el bosque multiestrato. Ciertos tipos de bosques monoespecíficos y monoestratos no parecen tener en este punto un valor significativamente mayor que el de cualquier otro cultivo limpio. 4.3.-Elaboración del planteamiento de solución de la problemática dentro de la cuenca. Realizar reuniones informativas con pobladores rurales, urbanos y autoridades sobre temas relacionados con el estudio de la cuenca, alertando la posibilidad de que se agraven las inundaciones y problemas asociados al uso intensivo de los suelos. Formar grupos de productores en el marco legislativo (Ley N° 8863) de “Consorcios de Conservación de Suelos” con la finalidad de llevar a cabo de manera orgánica prácticas de conservación de suelos, como ocurre en la cuenca del arroyo Tegua. Gestionar ante la Dirección de Conservación de Suelos y la Subsecretaría de Recursos Hídricos, la realización de un estudio hidrológico de la cuenca para definir la red de drenaje y definir conjuntamente con los consorcios de conservación de suelo un plan de ordenamiento y conservación de agua y suelo. Realizar parcelas demostrativas (como las que ya existe en la cuenca), con prácticas conservacionistas, para una posterior evaluación y difusión de manera que los productores se motiven y adopten estas prácticas conservacionistas, que permitan disminuir los volúmenes de escurrimiento, ya que en la actualidad son muy elevados, según las estimaciones realizadas en base a los cálculos hidrológicos. 4.4.-Elaboración de propuestas. Elaboración y aprobación de un plan para la clausura del trasvase Tajo-Segura. Dicho plan deberá contemplar la desconexión progresiva hasta conseguir la plena desconexión de las cuencas Revisión de los regadíos existentes y reducción progresiva de la superficie actual en aquellos donde el consumo, una vez excluidos los usos ambientales, supere los recursos renovables, hasta recuperar un cierto reequilibrio hídrico. Además, la superficie total de riego existente, deberá reducirse a un máximo de 3-3,2 millones de hectáreas en todo el país. Dicha cifra deberá ajustarse cada 5 años conforme evolucionen los recursos hídricos disponibles a causa del cambio climático. Revisión a la baja en un periodo de seis años, de todas las concesiones existentes (que en la actualidad en muchas cuencas superan a los recursos disponibles) para adecuarlas a la realidad.
Restauración Social de Suelos Degradados Por Erosión y Remociones Masales en Laderas Andinas Del Valle Del Cauca Colombia Con La Utilización de Obras de Bioingeniería.