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El relato que sigue explica brevemente algunos de los rasgos distintivos de los distintos
grupos que compitieron en las elecciones legislativas. Sus éxitos y fracasos son producto
de estrategias diversas, que desarrollan para sobrevivir en un entorno altamente
competitivo. Las organizaciones son distintas y su éxito sólo puede valorarse en función de
sus disímiles apuestas.
Las elecciones demostraron el éxito del grupo Nueva Generación, que lidera Dilian Francisca Toro,
por expandir su presencia en el nivel nacional aprovechando los recursos que asegura la
gobernación. Junto a ella, tres senadores de Cambio Radical lograron posicionarse como jugadores
nacionales en el valle, al imitar una estrategia cuyo éxito venía demostrando Roy barreras, al
menos desde 2010: desconcentrar la votación.
Las elecciones demostraron las dificultades que las facciones Conservadoras encuentran para
crecer. Estas son las grandes derrotadas de las elecciones. El partido liberal, sin cabeza y muy
fragmentado, siguió siendo la plataforma ideal para las organizaciones locales que quieren poner
un pie en el nivel nacional. El partido Verde sostuvo su curul en la Cámara, aunque con una nueva
titular, mientras que el Polo Democrático creció y capitalizó la movilización social de 2017 en
buenaventura. Opción Ciudadana tuvo una nueva derrota.
A continuación intentamos exponer, de manera sintética, los resultados que obtienen los
jugadores relevantes en las elecciones legislativas de 2018 en el valle del Cauca, así como las
características generales de sus estrategias. En cada caso resaltamos los nombres de los
candidatos y las cabezas de las distintas organizaciones.
1
Nueva Generación tiene al menos dos grupos. El principal es liderado por Dilian Francisca Toro. El segundo,
el grupo Palmirano, es liderado por Jorge Caicedo y basa su poder en el control sostenido de la alcaldía de
Palmira por, al menos, tres períodos consecutivos. La cooperación entre ambos grupos es un asunto aún por
estudiar en profundidad, pero optamos por presentarlos aquí como una sola organización.
Roosevelt Rodríguez, reelecto en 2018, había heredado la curul de Dilian en 2014 con una
votación inferior en 50000 votos a aquella obtenida por su jefa en 2010. En esta ocasión sostuvo
su votación anterior. Si bien su votación se haya muy concentrada en el Valle, logra obtener
alrededor de mil votos en los departamentos de Chocó, Cauca, Risaralda, Quindío, Tolima, Caldas,
Córdoba, Norte de Santander, Guaviare, Meta, Guainia, Casanare, Arauca, Atlántico y Bolivar. Pese
a ello, Nueva Generación no ha logrado desconcentrar su votación y aún sigue dependiendo de los
votos del Valle para alcanzar una presencia nacional.
Ahora bien, el rasgo más significativo en las votaciones obtenidas por Nueva Generación es la
aparente capacidad de la organización para distribuir sus votaciones a nivel municipal entre sus
distintos candidatos. Así, en cada municipio los votos se concentran en un conjunto distinto de
candidatos adscritos al grupo, lo que sugiere una disposición y una capacidad particular para
administrar sus apoyos.
En Cauca, Bogotá, Cundinamarca y Santander obtiene sus más importantes votaciones más allá del
departamento (más del 5% del total de sus votos en cada uno). La votación agregada que recibe
en estos departamentos, más la que obtiene en Antioquia, Huila y Boyacá equivale al 37% de su
votación total. Frente a las elecciones pasadas, cabe destacar que no sólo consolida sus votaciones
en los departamentos mencionados, sino que crece en otros en los que no era un contendiente en
2014 como Guajira, Casanare, Bolívar, Meta o Huila. En Vaupés, incluso, se convierte en el
principal elector en el Senado. A nivel departamental, Barreras armó una alianza con John Jairo
Hoyos, ex concejal Conservador que perdió la curul en 2015, quien obtuvo una curul a la Cámara
por el partido de la U. A
Susana Correa apostó por acoger a otros políticos locales con aspiraciones de tener presencia
nacional. John Harold Suarez, líder político de Buga, donde su grupo controla la administración
hace 8 años, obtuvo apenas 26760 votos pero logró una curul. Su votación se haya concentrada
en Buga (54,57%), Cali (9,76%) y Tuluá (14,34%). Su fórmula, el líder de los comerciantes de Cali
Edwin Ramírez, logró distribuir apenas mejor sus votos (51% en Cali), sin que fuese suficiente para
obtener una curul. La apuesta de Edwin encarna una vieja aspiración gremial de comerciantes de
Cali por alcanzar representación en el departamento.
La otra estructura local que sumó al Centro Democrático en el Valle fue la que lideró Milton Hugo
Angulo, apoyada en los esfuerzos previos de la líder Uribista Bonaverense Elvia Lucy Abonce y de
su primo, concejal en el puerto. Angulo fue una sorpresa, especialmente en tanto sus votos se
encuentran fuera de Buenaventura. Su elección fue asegurada por los más de 9000 votos (47%)
que obtuvo en Cali.
Las votaciones agregadas del CD les permiten a organizaciones o electores locales alcanzar
Representación Nacional e incluso alcanzar curules en el Senado de la República.
Tras dejar el grupo la gobernación, la votación del Senador Javier Mauricio Delgado en el Valle se
redujo en casi 32000 votos, que sólo compensaron con una pírrica ganancia de dos mil por fuera
del departamento. Pese a los esfuerzos de Ubeimar Delgado por buscar aliados más allá del Valle,
para lo que lanzó una apenas publicitada precandidatura presidencial, la organización es
esencialmente Vallecaucana y sus votos se distribuyen de manera singular en el departamento. A
diferencia de la mayoría de los grupos, la fuerza social obtiene un porcentaje bajo de sus votos en
la capital (30% para senado en promedio en las tres últimas elecciones y 25% en promedio para
sus distintas listas a cámara, en las pasadas tres elecciones). Sus votos se distribuyen con
regularidad por los municipios conservadores, particularmente en la ribera occidental del rio
Cauca (aunque también Caicedonia, al oriente) al centro y el norte del departamento.
Tras la defección de Henry Arcila, Ex Representante a la Cámara y candidato por la Fuerza Social en
2014, la organización apostó por el ex alcalde de El Dovio Gustavo Padilla para ocupar la Curul de
Álvaro López Gil, ingeniero civil que se espera sea candidato a la Gobernación en 2019. Padilla
pierde votos en todos los municipios en los que su antecesor fue una fuerza política relevante en
2014. Pierden más de 16000 votos en el valle pero logran sostener su curul, la única credencial del
partido en el departamento.
La candidatura al Senado no permitió a Coraje aumentar sus votos en el Valle. Más del 30% de sus
53718 votos vinieron de fuera. Entre el 34 y el 39 por ciento de su votación en el valle estaba
concentrada en Cali, lo que demuestra una distribución similar a la de sus pares conservadores. En
cuanto a Miller Huependo, su aspiración pierde más de 13.000 votos frente a lo obtenido por
Sanabria en 2014 y apenas supera ligeramente lo que este obtuvo en Buga y Tuluá. Los otros dos
candidatos a la Cámara obtienen votaciones inferiores a las requeridas, con Henry Arcila
perdiendo votos en todas partes frente a la elección pasada y Mario Germán Fernandez de Soto
obteniendo una importante votación en Cali, con 15650 sufragios, de los 26384 que logró.
José Luis Pérez es un político caleño que ha cobrado protagonismo en la política regional gracias a
su capacidad para apoyar a los tres últimos alcaldes de la ciudad en la construcción de los
acuerdos entre organizaciones políticas en los que descansa su gobernabilidad. Su paso del
Concejo a la Cámara en 2014 fue el preludio del salto a la arena nacional que se materializó en
2018. Su votación en el Valle, está muy concentrada en Cali, donde obtuvo más del 70% de los
sufragios. Sus votos fuera del departamento se hayan concentrados en Cauca, Nariño, Antioquia y
norte de Santander, de donde es oriundo.
Carlos Abraham Jiménez también es un político local, heredero de una organización que tuvo una
curul en el concejo de Cali y compitió por la alcaldía de Yumbo. Jiménez sostiene alrededor del
25% de su votación en el valle en la ciudad de Cali, cifra significativamente menor al promedio de
sus anteriores votaciones (39%) y que supone un esfuerzo por crecer en municipios pequeños. Su
paso al Senado fue el resultado de un acuerdo con el senador Juan Carlos Restrepo, que se hizo
público en 2017. Restrepo, cuya votación se encontraba concentrada en Cundinamarca, aceptó no
volver al Congreso y poner su organización al servicio de las aspiraciones de Jiménez. Al final, el
senador Vallecaucano obtuvo casi el 30% de sus votos en Cundinamarca y Bogotá, los bastiones de
Restrepo. Interesante resulta constatar que poco más de un 20 por ciento de sus votos se
encuentra distribuido entre 10 circunscripciones, en las que obtiene más de mil votos (Cauca,
Quindío, Caldas, Boyacá, Santander, Antioquia, Sucre, Bolívar, Magdalena Atlántico). Jiménez, se
convierte en el segundo congresista vallecaucano, después de Roy Barreras, cuya votación se
encuentra más distribuida por el país.
Finalmente, Carlos Fernando Motoa, logró sostener su curul incrementando su votación en casi
veinte mil votos. En Cali tuvo casi los mismos votos que en 2014, pero logró crecer
significativamente en municipios como Buga, Palmira, La Unión, Yumbo y Candelaria. En el Valle
tiene casi el 55% de sus votos, mientras que en Bogotá, Norte de Santander y Antioquia tiene el
20% de sus votos. Otros departamentos en los que consigue una votación importante son Chocó,
Cauca, Risaralda y Nariño.
7. Partido Liberal
El Partido Liberal en el valle se encontró muy fragmentado en la coyuntura electoral. Al menos 10
facciones reconocibles compitieron por votos. 2 de ellas se enfrentaron sin éxito por la curul en el
Senado, mientras que 8 se disputaron las curules de la cámara. La principal noticia fue la pérdida
de la curul de Edinson Delgado, que se explica fundamentalmente por los Diecisiete Mil votos que
dejó de obtener en el Valle, donde en 2014 y 2018 se concentró el 70 y el 56 por ciento de su
votación. La principal reducción en su apoyo electoral se presentó en cali, donde obtuvo una
tercera parte de los votos que obtuvo en 2014, si bien sus votos se redujeron dramáticamente en
casi todos los municipios del departamento. En Buenaventura, donde ya no gobernaba una facción
aliada desde 2015, su votación también fue alrededor de una tercera parte de la obtenida en
2014. El ocaso de los liberales que gobernaron Buenaventura entre el 2012 y el 2015 también
explica los pobres resultados del Representante Hernán Sinisterra, que sin este apoyo vio como
sus votos se reducían drásticamente hasta ser apenas una tercera parte de los obtenidos hace 4
años.
David Murgueitio, cuestionado ex alcalde de Yumbo por el Partido Verde, intentó sin éxito llegar
al senado y disputar la curul de Delgado. Para hacerlo, construyó una alianza con una singular
facción vallecaucana que logró en pocos años pasar del concejo de Cali a la Cámara de
Representantes y que lidera el Representante Fabio Arroyave. En esta ocasión, Arroyave logró que
su hijo fuere electo, con casi veinte mil votos más de los venticuatro mil que obtuvo en la pasada
elección. Su crecimiento se explica por el aumento significativo de su votación en todos los
municipios en los que el liberalismo fue una fuerza importante. Sólo el 40% de sus votos se
concentran en Cali, donde la organización sostienen una curul en el concejo.
Otra fuerza caleña que intentaba esta vez dar el salto a la Cámara fue el grupo que lidera Uriel
Rojas, Ex concejal de Cali (cuya curul heredó su hijo) que ahora apostaba por convertirse en
jugador regional. Uriel logró en 2015 cuasi triplicar la votación que le había dado una curul en el
concejo 4 años antes. En esta ocasión, sin embargo, sólo sumó cuatro mil votos más en Cali, donde
se concentra más del 70% de sus votos.
Los Chicango son una familia que ha intentado en varias ocasiones crecer a partir de la curul en el
concejo de Cali que la organización ostenta. En 2010, lograron alcanzar una curul en la Cámara con
la madre, Nancy Denise Castillo, posición que lograron consolidar al elegir a su hijo como concejal
en Cali, retomando una curul que su padre había perdido en 2011. Su otro hijo, que venía de ser
diputado, fue en esta ocasión candidatizado a la Cámara y logró sumar cinco mil votos nuevos a los
que había obtenido su madre. Pese a este incremento en la votación, no lograron crecer en Cali y
los resultados obtenidos en otros municipios no fueron suficientes en una lista tan competida.
Juan Fernando Reyes Kury encarna las aspiraciones de grupos empresariales y élites económicas
de la ciudad de Cali, que han logrado mantener la alcaldía desde 2011, por llevar a uno de los
suyos al Congreso. Reyes Kury ha sido secretario privado de los dos últimos alcaldes y apostó por
una campaña en la que combinaba su apelación a determinados estratos sociales con las cuotas de
poder construidas en la administración municipal. Así, logró duplicar su votación en el Valle entre
2014 y 2018. Más del 60% de sus votos se encuentran en Cali. En Cali, Palmira y Tuluá obtiene más
del 80% de sus votos.
La sorpresa de esta elección fue la elección de Adriana Gómez como Representante a la Cámara.
Gómez es una cuota del alcalde de Yumbo Carlos Bejarano, como lo fuera Ana Cristina Paz, en
2014, del por entonces alcalde del municipio industrial, David Murgueitio. Sus más de treinta y
ocho mil votos deben explicarse por el músculo político que ofrece a su titular la alcaldía de
Yumbo, donde la candidata obtiene el 40% de sus votos. La votación de la Representante electa
está singularmente distribuida por el Valle. En los 6 municipios más grandes, incluido Cali, apenas
consigue el 37% de su votación. Es, de hecho, la representante electa por el Valle con la menor
votación en Cali. Tener alcaldía en Yumbo permite evitar el distrito más competido.
Otro caso singular es el de Álvaro Monedero, antiguo socio de los Abadía y representante electo.
Monedero obtiene una importante votación (más del 30% de sus votos) en Cali, que aún debemos
explicar una vez que no tenía una organización reconocible. Así mismo es el gran elector en
Guacarí y Cerrito, gracias al apoyo de las administraciones locales y de Carlos Herney Abadía,
aliado clave de las organizaciones que gobiernan estos municipios.
Finalmente, cabe destacar a John Wilson Rengifo, ex alcalde de Candelaria que apostó por dar el
salto a la arena regional a partir de las votaciones en este y los municipios aledaños. Pese a ser de
nuevo el gran elector de Candelaria y obtener importantes resultados en Florida y Palmira, su
votación fue exigua en Cali y los demás municipios del Valle.
Alexander López, quien había sido cercano a los líderes del paro en Buenaventura y había
acompañado las movilizaciones desde muy temprano se convirtió en el gran elector del Puerto,
donde obtuvo casi dieciséis mil votos. En 2010 había obtenido 283 y en 2014 446, lo que da cuenta
de la magnitud del impacto de su votación. El 54 por ciento de sus votos en el Valle los obtuvo en
Cali, donde cuenta con relaciones estrechas con distintas organizaciones sociales, particularmente
con el sindicato de Emcali, la empresa de servicios públicos de la ciudad. Su crecimiento no sólo
pasa por el importante aumento de sus votos en el Valle, donde obtiene veinticinco mil nuevos
electores, sino por su destacado desempeño electoral fuera del Valle, donde suma más de veinte
mil votos más de los que obtuvo fuera del valle en 2014. El 30% de su votación se haya distribuida
en 12 departamentos, donde obtiene guarismos significativos (Cauca, Nariño, Antioquia, Atlántico,
Bogotá, Bolívar, Cesar, Boyacá, Magdalena, Santander, Sucre y Tolima).
9. Partido Verde
Para Jorge Iván Ospina, Senador por el Partido Verde, las elecciones suponían un reto a su futuro
político. Obligado a reconstruir las bases de su poder local, anunció pronto que dejaría su curul
para buscar ser elegido en 2011 a un cargo en el nivel regional o municipal. Se rumoró que
apoyaría las aspiraciones de candidatos a la Cámara y el Senado de su partido, pero ninguna de sus
cartas resultó electa. Quien obtuvo una curul en la Cámara de Representantes fue la candidata
Catalina Ortiz, tecnócrata sin trayectoria política apoyada por antiguos verdes, fajardistas y
sectores económicos de la ciudad. El 78% de sus votos se encuentran en Cali.