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MOVILIZACIÓN DE LAS ROCAS

1- Causa Primaria de los movimientos: La acción de la gravedad
Cuando las rocas están expuestas en la superficie de la Tierra, la meteorización co-
mienza a actuar inmediatamente, para establecer un equilibrio entre el material rocoso y
su nuevo medio climático. Otros factores unen sus fuerzas, logrando que, a partir de la
roca con algún grado de alteración, se produzca el movimiento de los materiales hacia
niveles más bajos.
Dicho de otra manera, la meteorización, por sí misma no produce formas de relieve, sino
que éstas se producen cuando el material meteorizado o regolita, es removido de su
punto de origen. La fuerza que produce el movimiento es la gravedad, que actúa directa
o indirectamente mediante la intervención del agua, el viento o los glaciares.
La migración o movilización de las rocas por acción directa de la gravedad, recibe el
nombre de movimiento de masas, desgaste de masas, remoción en masa, remoción de
masas o movimientos de laderas.
Se entiende por movimiento de masas el desprendimiento y transporte ladera abajo
de suelos y material rocoso, bajo la influencia de la gravedad.
Estos movimientos pueden ser de diferentes magnitudes, desde movimientos lentísimos
y del orden de los milímetros, hasta algunos en los que el material se desplaza varios
cientos de kilómetros.
Casi siempre se piensa que la caída del material es sorpresiva y que no existen indicios
de lo que va a ocurrir, pero los especialistas afirman que siempre existen indicios de los
cambios de relación entre las partículas del suelo, las fuerzas de cohesión que las man-
tienen firmes en las laderas y la fuerza de gravedad que trata de movilizarlas.
Donde la tectónica ha elevado las rocas, y cuanto más alto es el relieve, los movimientos
de masa son importantes factores de movilización del material. De esta manera el relieve
va desgastándose y las alturas tienden a rebajarse. En algunos lugares se estima que
este desgaste alcanza valores de 0,80 a 1 metro cada 10.000 años.
Los movimientos de materiales en la ladera comienzan con pendientes que pueden ron-
dar los 4º a 6º. Se desplaza mayor cantidad de material y a mayor velocidad, cuando el
terreno es más empinado, ya que la forma vertical es donde se ejerce la máxima fuerza
de gravedad, la cual disminuye en la medida en que lo hace la pendiente.
El conjunto de partículas movilizadas, bajo diferentes formas, también modela los flancos
o laderas de los relieves, formando los llamados “taludes” o sea el modelo de declive
que existe entre las mayores y las menores alturas. También puede decirse que un talud
es una pendiente de transporte que asume el ángulo apropiado para mantener un movi-
miento del terreno cuesta abajo.
Cuando caen los grandes bloques, tienden a desplazarse, tan lejos como se lo permita
la energía gravitacional que traen, y el tipo de terreno que encuentran, por lo cual puede
ser que queden próximos a la base o bien que se desplacen lejos de ella. La continuidad
del proceso, crea un modelo de pendiente que guarda un equilibrio entre el material que
llega, los procesos de alteración que lo afectan, y el material que es retirado por la ero-
sión.
Si predominan los procesos de acumulación por sobre los de erosión, el talud alcanza
un equilibrio entre la cima y la base, se cubre de vegetación y suelos dando un modelo
ondulado al relieve. Si existen procesos que socavan la base, en el talud se movilizan

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los materiales superiores que reemplazan a los inferiores y desde la cumbre son alimen-
tados por nuevas caídas de material, con lo cual el talud se mantiene activo, y las laderas
retroceden, se mantienen empinadas, el relieve se va desgastando y se dificulta la ins-
talación de vegetación y la evolución de los suelos.
En general, los taludes cubiertos por detritos suelen tener pendientes entre 25 y 40º pero
pueden ser inferiores o se van modificando, en la medida que la meteorización altera los
bloques, los reduce en tamaño y los hace susceptibles a ser movilizados por el agua o
el viento. En estos casos, el principal factor del movimiento ya no es sólo la fuerza de
gravedad, sino que es la fuerza de gravedad actuando como energía hidráulica o eólica.
Las pendientes naturales más inclinadas, (que sobrepasan los 40º) son escasas y caen
en la categoría de acantilados.
La importancia de estudiar los movimientos de masas radica en que ellos son:
 Los principales factores del modelado en los interfluvios.
 A partir de ellos se inicia el transporte de materiales desde las áreas más elevadas
hacia las más bajas, ocupadas por las corrientes fluviales.
 Ellos aportan la mayor parte del caudal sólido transportado por los cursos.
 Ellos pueden, en consecuencia, modificar la dinámica del agua fluvial, de acuerdo
a la carga sólida que aporten.

Debemos considerar ahora que, el desprendimiento y la caída empiezan cuando las fuer-
zas que se oponen al desplazamiento han sido vencidas. ¿Qué es lo que causa la resis-
tencia y cómo se la supera?
La intensidad de la resistencia varía según la pendiente. En las pendientes empinadas
la resistencia es leve y el material meteorizado se pone en marcha inmediatamente
cuesta abajo. Cuando la pendiente disminuye, la resistencia es mayor al punto que el
material movilizado desde las alturas, cuando la pendiente disminuye (o alcanza un nivel
crítico para el tipo de material que se está movilizando) éste puede quedar inmóvil.
Las causas de la resistencia en todas las pendientes son:
1- La cohesión: o propiedad que tienen las partículas de mantenerse juntas.
Es una fuerza que: 1- se resiste al inicio del movimiento, pero que tiene muy poco efecto
de frenado una vez que aquél se ha iniciado. 2- Es inversamente proporcional al tamaño
de los granos por lo tanto será mayor, cuando más pequeños, y alcanza su máximo en
la arcilla. 3- Es directamente proporcional a la capacidad de las rocas para absorber agua
y por lo tanto sera mayor en las montmorillonitas que en las caolinitas. 4- Es favorecida
por la presencia de agua entre los granos mientras que los espacios porosos guarden
una proporción entre su contenido mineral, de aire y de agua. Pero si, por algún motivo
esta proporción se altera y el aire es obligado a salir, se reduce la cohesión y el agua
favorece los procesos de fricción.
2- La fricción: o propiedad que depende de la presión dentro del material alterado y del
tamaño o aspereza de las partículas.
Es una fuerza que: 1- sólo resiste el inicio del desplazamiento, sino que tiende a retar-
darlo una vez que se ha iniciado. 2- Si la pendiente es suave, el material puede ser
movido fácilmente sólo cuando está suelto sino cuando está levemente compactado. Si
la capa alterada es gruesa, las partículas presionan una sobre otra y aumentan la fricción,
lo que retrasa o impide el desplazamiento. 3- Es inversamente proporcional al tamaño

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de las partículas y al número de superficies de contacto que estas ofrezcan. Cuando las
partículas son grandes, el número de contactos y de superficies de contacto son menores
y es menor la fricción. En partículas pequeñas, el número de contactos y las superficies
de contacto son mayores, por lo tanto es mayor la fricción. 4- Cuando es excesiva el
agua que embebe los espacios porosos, desaloja al aire y genera una presión que tiende
a separar los granos individuales. Al hacerlo, disminuye la fricción, la cohesión interna y
por lo tanto, la resistencia del material a serl desplazado.
3- La acción de las raíces: ejercen una acción mecánica de frenado que depende de:
1- la estructura que tengan y de la profundidad a que lleguen. 2- la constitución del te-
rreno y de la profundidad de la regolita. 3- la capacidad del suelo de contener agua.
Por lo que se acaba de ver:
La fuerza de gravedad ejerce su acción en todo momento, pero para que se
inicie el movimiento, tiene que vencer las fuerzas
que retienen in situ al material.

2- Causas Secundarias de los movimientos de masa:

1- Remoción del soporte lateral o inferior: 1- por erosión fluvial o glaciar; 2- por acción
del oleaje; 3- por meteorización o disolución de materiales; 3- por caída anterior de
rocas; 4- por construcción de canales, carreteras, canteras, minas, etc. 5- por altera-
ción de los niveles de agua en lagos y reservorios.
2- Sobrecarga en la ladera: por el peso de: 1- agua infiltrada en las rocas; 2- el peso
de construcciones, nieve, torres, tránsito y de la vegetación;
3- Cambio en las fuerzas de cohesión intra granulares por: 1- vibraciones de ma-
quinarias o del tráfico; 2- acción sísmica, fallamiento o erupciones; 3- explosiones
mineras, bélicas, etc.; 3- mecido de los árboles por el viento (continuo o esporádico
en huracanes, etc. 4- compresión o descompresión brusca en sedimentos profundos;
5- lubricación hídrica; 6- hidratación de rocas plásticas; 7- cambios en las presiones
laterales por hielo- deshielo, expansiones por descarga o por hidratación.
4- Discontinuidades: litológicas o estratigráficas.
5- Acción de fluidos en movimiento: erosión fluvial, eólica, marina y glaciar.
6- Otras: orgánicas: cuevas, madrigueras, raíces, etc...

Clasificación de los movimientos

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Considerando que los movimientos siempre se producen ladera abajo, para clasificarlos
se utilizan varios criterios.
1- Según el sentido:
 Verticales: 1- caída de materiales: rocas, suelos o complejos de detritos, 2- asenta-
mientos o hundimientos: por compactación diferencial, por disminución de fluidos, por
disolución, por fluencia, por derrumbes, por deshidratación; 3- elevaciones o expan-
siones: por congelamiento, hidratación, expansión por descarga, combamientos

 Laterales:

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1- Reptación: movimiento de la capa superficial del relieve, en la cual no puede definirse
una superficie neta de corte entre la parte que se mueve y la que está en reposo. Afecta
a pendientes aún inferiores a 5º y el material se “arrastra” o “repta” ladera abajo y como
un todo homogéneo se amolda a las irregularidades del terreno. La velocidad del material
que repta es mayor en superficie y disminuye en profundidad.
En esto tiene que ver la condición climática del área que favorezca procesos de dilatación
y contracción del suelo sea por alternancia de congelación- fusión; cambios de calor a
frío o bien de hidratación- deshidratación.

El aumento del volumen desplaza a las partículas hacia la cara libre de la masa, en forma
perpendicular al terreno. Cuando este se contrae, la partícula no es llevada hacia atrás
a su posición anterior, sino que asienta con una componente gravitacional que al hacerla
caer en forma vertical la desplaza hacia delante algunos milímetros. De ese modo todos
los materiales se desplazan en un movimiento combinado que involucra las partículas
individuales y al total del material superficial de la ladera. Es por ello que puede recono-
cerse: 1- reptación de suelos; 2- de rocas; 3- de taludes.
2- Solifluxión: flujo lento de suelos o regolita, saturadas de agua, en el sentido de la
pendiente. Entre las condiciones que requiere pueden mencionarse: buen abasteci-
miento de agua proveniente del derretimiento de nieve o hielo del suelo; laderas de pen-
diente fuerte a mode-
rada libres de vege-
tación; un subsuelo
siempre congelado
llamado permafrost;
rápida meteorización
física que reponga el
material detrítico que
ha reptado y en to-
dos los casos, que
exista una capa lubri-
cada por el agua o el
hielo, que oficie de
plano de desplaza-
miento del material.

3- Deslizamientos: El
movimiento se pro-
duce a lo largo de una superficie de corte. Cuando es curva, produce los llamados des-
lizamientos rotacionales, en los cuales el centro de rotación se encuentra fuera de la
ladera. Si la superficie es un plano inclinado, favorecido por discontinuidades litológicas,
planos de estratificación, diaclasas o fallas, dará lugar a deslizamientos traslacionales

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o en lajas.

Esquema de Deslizamientos rotacionales

Esquema de Deslizamientos traslacionales

2- Según la velocidad:
 Lentos:
1- Corrientes terrosas o fangosas: el material meteorizado y muy hidratado, se desplaza
sobre roca sana, casi siempre arcillosa. La dificultad de infiltración produce una discon-
tinuidad, a lo largo de la cual se desplaza el material. Son propias de áreas tropicales
húmedas.
2- Pueden incluirse la reptación, solifluxión, asentamientos, etc… porque acá se destaca
la velocidad y no el sentido.
 Rápidos:
1- Individuales: Se caracterizan por un cambio instantáneo de posición de bloques, de-
tritos o granos, en forma espontá-
nea, por vibraciones sísmicas, vola-
duras, tránsito vial o ferroviario, etc.
Los materiales pueden ser bloques
individuales aislados o en conjuntos,
reciben el nombre de “derrubios”
conforman el típico talud a 45° lla-
mado “talud de derrubios”.
3- Colectivos: La diferencia esencial
con los anteriores es que toda una ladera entra en colapso y se moviliza masiva-
mente. Pueden distinguirse dos grandes grupos:

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  Encauzados: Se caracterizan porque en su desplazamiento forman una depresión
por la cual se orientan las rocas como detritos y lodo. Reciben varios nombres
locales o regionales que involucran materiales de granulometría fina, como las
coladas de barro, torrentes de barro, propios de áreas con gran espesor del
material meteorizado; los lahares conjunto de piedras, barro y cenizas asociado
a las erupciones volcánicas y otros donde la característica es la acumulación de
material rocoso, que se desplaza por las depresiones formando corrientes de
detritos o de piedras.
Todos tienen gran capacidad de erosión, y al producir el desprendimiento de mate-
riales de las laderas y los valles, se carga de más materiales que ejercen peso y los
moviliza a favor de la gravedad.

 No encauzados: Son movimientos masivos de las laderas, pero sin encauza-

miento definido, de los cuales como ejemplo puede citarse los aludes, que co-
mienzan generalmente con la caída libre de una masa de nieve o hielo que puede
o no estar asociada a detritos rocosos, todo lo cual fluyen a gran velocidad, tor-
nando la masa cada vez más fluida, en la medida que el agua y el aire son calen-
tados por la presión del descenso.

Síntesis tomada de:

GEOMORFOLOGÍA de Chorley R. y Schumm, R. Trad. del Inglés Prof. Pilar Serra. 1998
GEOMORFOLOGÍA de Margarita M. Rocha Penteado. Trad. del portugués Prof. Pilar
Serra. 2000
CLASIFICACIÓN GEOMORFOLÓGICA DE LOS MOVIMIENTOS COLECTIVOS. Popo-
lizio, E. 1981, de quien se ha tomado y modificado los dibujos para adaptarlos al texto..
LA SUPERFICIE DE LA TIERRA. Bloom, A. 1989.