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EL DESEO DE LUCHITO admiró viendo tantos niños sin poder ir al colegio

porque no podían ir solos a la ciudad, no tenían el


Cierto día en un lugar muy alejado de una pequeña
y cálida ciudad, nació un guajojó que se veía
delicado y nadie sabia si viviría o no, era más flaco y
FELIZ DÍA DEL LIBRO
pequeño de lo normal, su madre hasta ahora no se
había hecho cargo de ninguno de los hijos que tuvo, (23 DE ABRIL)
los dejaba a su suerte y todos terminaban muriendo
de hambre o frío.

Teniendo que buscar su propio alimento y aprender


las cosas solo el guajojó Luchito fue creciendo,
queriendo cada día aprender a volar, él y su madre
vivían en unos árboles frutales que habían
alrededor de la ciudad, la mayor parte del tiempo su
madre no estaba, se la pasaba intentando encontrar
un lugar para construir una casita, ella decía: no
importa si es pequeña y muy humilde lo importante
sería tener un sitio donde descansar. Anhelando un
sueño que pronto llegó, ya que se enteró que un
montón de animales de todas las especies que
también estaban en busca de casa, fueron a lotear
unos terrenos deshabitados hace ya mucho tiempo,
dejando otra

vez solo a Luchito su madre emprendió vuelo hacia


lo que sería su nuevo hogar.
material que allá les pedían, entonces se le ocurrió
Después de mucho enfrentarse y pelear además con
que él podía enseñar un poco de lo que sabía. Se
las inclemencias del tiempo en lugares desolados
puso manos a la obra, en una casucha que
consiguieron un pequeño terreno para construir su
construyó cerca de un grifo con algunos amigos,
hogar, Luchito cada día salía a recoger ramas para
Tenorio enseñaba a todos los niños a leer, escribir,
los vecinos, ellos le pagaban con alimentos que
sumar y restar; en todo lo que él hacía y decía se
servían para su madre y para él, su madre construyó
notaba el empeño de crecer y aportar a que esos
una casucha improvisada y nuevamente se perdió
pequeños crezcan teniendo conciencia de su
en fiestas nocturnas, ella decía que era su forma de
realidad, pero deseando transformarla en algo
desahogarse por la mala suerte en su trabajo, pues
mejor. Tenorio les habló a sus amigos de lo que
no podía mantenerse mucho tiempo en uno,
estaba haciendo y ellos quisieron también ayudar,
Luchito se sentía triste, quería aprender tantas
pues aquello que había empezado con unos cuantos
cosas, pero no tenía quién se las enseñe, como él
animalitos se estaba convirtiendo en algo grande,
se sentían muchos pequeños animalitos más en su
todos los niños querían ir a aprender lo que su
barrio que pasaban el tiempo jugando pelota, yendo
maestro Tenorio les enseñaba, incluyendo a Luchito
al río o trabajando para llevar la comida a sus casas.
que por fin cumplió su sueño de crecer rodeado de
Un día llegó al barrio un búho llamado Tenorio, él se
la sabiduría de sus maestros búhos, quienes
fundaron el colegio al que llamaron, “Juancito
Pinto” un maravilloso centro de saber.

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