Una noche tan larga

El 13 de marzo del 2020, con una hermosa tarde soleada, esas las que me
encantaban. A las 5 de la tarde mi mamá, como nunca desanimada para ir a
trabajar, me informa que lamentablemente estará con el primer paciente COVID
y tendrán que atenderlo en su área. Me sentí afligida al ver a mi mamá en esa
posición, a las 7 de la noche logro observar cómo mi papá la llevaba a mi mamá a
su trabajo, con un gran abrazo le doy mi despedida para verla la mañana
siguiente, una gran espera por verla, por abrazarla y por sentir sus brazos
rodeándome, esa noche tan larga sin poder dormir, preocupada y asustada,
esperando ver a mi mamá la mañana siguiente, esperando darle un gran beso en
la mejilla como a ella le encantaba que la recibieran, sin saber que no la vería por
un gran largo tiempo.

Domenica Palomeque