Abinader: Incompetente en Seguridad

En Distrito Nacional, el sector Guachupita, vive desde hace tiempo inmerso en una
crisis continuada de seguridad, Luis Abinader golpea su pecho cada vez que habla de
sus éxitos contra la delincuencia. Aquí la enésima balacera, perpetrada el domingo
noche.
Calle Matías Ramón Mella
Una verdadera zona de guerra es lo que vivieron los comunitarios, sobre las 23:30
horas los líderes de varias bandas se enzarzaron en una intensa balacera.
Durante más de diez minutos se pudieron escuchar la lluvia de tiros, algo que
atemorizo a todos los residentes y los llevo a guarecerse bajo camas, mesas,
armarios y cualquier lugar donde una bala perdida no pudiera alcanzarles.

Policía Nacional
En declaraciones del residentes, piden que los antisociales sean perseguidos con
todo el peso de la ley.
“Una persona de esa la agarran hoy y ya mañana tú lo ves en la calle como si nada”,
comenta con indignación el residente, don Gregorio Soto.
Además, Soto añade el descontento con los hechos, entiende que el gobierno de
Luis Abinader les da buenas palabras y deseos, pero si no se actúa con contundencia
sobre los criminales, no sirve de nada lo anterior.

Peligro en la Noche
El horario comercial es diferente al de otros lugares, en Guachupita los comerciantes
cierran sobre las 21:00 horas, aunque existen excepciones, un par de testimonios.
Raúl Balbi, Comerciante:
“Yo aquí tengo que cerrar a las 9:30 de la noche más o menos, y aun así es tarde,
porque a veces vienen los dueños de negocios (antisociales) a joder a uno a punta
de pistola. Esa situación nos tiene en zozobra”
Luis Frías, Comerciante:
“Esto cada vez está peor, aquí los policías no hacen nada, es como miedo que le
tienen a los delincuentes. Ellos cruzan rápido y se van de una vez”
¿Refuerzo de seguridad?
Algunos testimonios, por miedo no se identifican, declaran que:
“Aquí hay que hacer un operativo, pero sin miedo, a los delincuentes no se les
puede tener miedo hay que enfrentarlos como ellos se merecen, porque a ellos no
les importa atacar a personas inocentes por conseguir lo de ellos”
Son muchos los comunitarios que saben bien “como la policía nacional” donde
están los puntos de venta de droga y donde se esconden los antisociales.
"Eso es increíble que aquí los niños entre 15 y 20 años son los que matan, roban y
tienen puntos de drogas activos. Antes esos casos se veían es verdad, pero había
códigos que se respetaban, ahora ni eso"

Un trabajador anónimo alega:

“Aquí hasta amenazas uno recibe por parte de esos delincuentes, tratan de
intimidar a las personas y hay calles de las cuales ni se puede pasar”
No se tiene constancia de una mejora real en la zona, no hay más presencia policial
y desde luego el temor a un atraco o morir en el fuego cruzado de un ajuste de
cuentas esta en el aire y los rostros de los comunitarios consultados.