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PASOS HACIA EL CENTRO MISIONERO AD GENTES

DE AMÉRCIA CENTRAL.

Mons. Victorino Girardi nos recordó en el encuentro realizado en Clara María que el CAM 2 tuvo una
particularidad sobre los anteriores Congresos Misioneros: Las iglesias de Centroamérica se implicaron
mucho más en él que en los anteriores. Además, se quiso desde el principio que termináramos con unas
conclusiones que se prolongarán a través de cuatro programas muy concretos: Fortalecer la Cooperatio
Missionalis con la creación en cada país de los CONAMI, implementar el Proyecto de Diócesis hermanas,
hacer Parroquias Misioneras, crear un Centro Misionero Ad Gentes en América Central. Este último
programa compromete a las iglesias locales a un proceso de animación, promoción, selección y
preparación inicial de laicos para que estuvieran dispuestos a la misión Ad Gentes.
En 2005, aprovechando la experiencia de los Padres Javerianos en Honduras y la oferta de su Centro de
Formación (Cfam) como base para la formación de misioneros provenientes de las Iglesias de América
Central, el Sedac aprobó que la sede del Centro Misionero Ad Gentes de América Central esté en
Honduras.
Los Padres Javerianos siempre han manifestado que, dado que es un proyecto de las iglesias locales,
éstas han de ser las que dirijan este centro. Sin embargo, están dispuestos a colaborar y ponen a su
servicio toda la experiencia recogida por el CFAM así como su personal. Esta opción ha sido mantenida
por los Padres Javerianos hasta ahora… (Ver en anexo… Carta a Mons. Francisco Ulloa, presidente del
Sedac en 2006)
Hasta este momento, el nombramiento de un director centroamericano y de una directiva no ha sido
posible, por lo que hasta ahora, “ el niño no ha nacido”. Para que este Centro nazca es imprescindible que
se den los siguientes pasos:
 Nombramiento de Director y un Equipo Directivo,
 Asegurar la animación y la formación de la primera etapa en cada país, para que haya
candidatos,
 Asegurar el financiamiento.

De lo expresado aquí podemos decir que


 Se considera que el CFAM colaborará al nacimiento del Centro Misionero Ad Gentes de A.C.
 El CFAM continuará con su propia identidad hasta la Inauguración del Centro Misionero Ad
Gentes de A. C.
 El P. Andrés Dionne, director del CENTRO DE FORMACIÓN Y ANIMACIÓN MISIONERA
(CFAM) de los Padres Javerianos, no puede ser tenido como director del Centro Misionero Ad
Gentes de América Central. Él ofrece su colaboración para que pronto se pueda inaugurar el
Centro Misionero C.A., pero, él actuará como director del CFAM hasta que se nombre un
Director para el Centro Misionero de América Central (CMAAC)
¿QUÉ ES EL CENTRO DE FORMACIÓN Y ANIMACIÓN MISIONERA
La elección de Honduras como sede para el Centro Misionero Ad Gentes de América Central indica que
nuestra Iglesia considera importante inspirarse de la experiencia, de los programas y del modelo que ha
sido puesto en marcha por los Padres Javerianos y que, de algún modo, ha dado sus frutos.
Por su lado, los Padres Javerianos siempre han pensado que, el Centro de Formación y Animación
Misionera (CFAM) está llamado a ser Centro Misionero Ad Gentes de América Central. Esto significa que
este Centro será bajo la responsabilidad de la Iglesia de América Central. Los Padres Javerianos esperan
también que sus candidatos puedan recibir su formación en el Centro Misionero Centro Americano y ellos
colaborarán humildemente con ella si así se desea.
¿Qué es el Cfam de quien se busca inspiración?

BREVE RESEÑA HISTÓRICA


DEL CENTRO DE FORMACIÓN Y ANIMACIÓN MISIONERA DE LOS PADRES JAVERIANOS EN
HONDURAS.

Entre los años 70 y 80, los Padres Javerianos ya habían acogido como asociados a varios lacios
misioneros que laboraron por un período de cuatro años en distintos países de América Latina e incluso de
Asía. En los años 80-90, los laicos de nuestro país seguían solicitando a nuestra Sociedad Misionera la
posibilidad de asociarse con ella para la misión. Por eso, el tema fe tratado en Asamblea general en 1991.
1991- La Asamblea General de la Sociedad de las Misiones Extranjeras de 1991 acordó abrir dos
Centros de Formación; debido a que se estimaba que la formación impartida en “Ad Gentes”, era
insuficiente para preparar a la Misión Ad Extra.
1992- Se creó el CIFM en Montreal (Centro Internacional de Formación Misionera) con el P. Bernard
Duquette y Mposo (de Ruanda).
1993- En el mes de octubre de 1993, los Padres misioneros Javerianos recibían la visita del Padre
Francisco Lapierre, superior general de la Sociedad de Misiones Extranjeras. Siendo un hombre
visionario, nos expresó su inquietud de poner en práctica una recomendación de la Asamblea
General de 1991. Deseaba que se empezara un Centro de Formación Misionera en Centro
América, semejante al Centro Internacional de Formación Misionera (CIFM) que se había creado
en Montreal (Canadá) unos años antes. Expresaba su convicción de que, después de 38 años de
presencia misionera en Honduras, formando a los sacerdotes diocesanos, a los delegados de la
Palabra de Dios y a los agentes pastorales, la transmisión del carisma misionero exigía colaborar
en el surgimiento de una expresión misionera en nuestra Iglesia. El P. Francisco le encargó al P.
Guido Charbonneau, pme, la creación de este Centro.
1994 Los P. Guido Charbonneau y Roberto Bigras comenzaron el proceso de formación "Ad Gentes" en
Honduras; el mismo proceso que se extiende a América del Sur (Argentina, Brasil y Chile).
1995- Al final del año 1995, con la ayuda de una buena guía de criterios de vocación misionera, el P.
Guido decidió hacer una entrevista personal con cada uno de los participantes en el proyecto de
formación “Ad Gentes” que habían iniciado el proceso de formación en 1994. Seis de ellos
manifestaron el deseo de vivir un año intensivo de preparación en el nuevo Centro de Formación,
ubicado en una casa alquilada de la Colonia Residencial Plaza, en Tegucigalpa..
1996- Nace el Centro de formación en Honduras y, en su inauguración y bendición, Mons. Oscar Andrés
Rodríguez, arzobispo de Tegucigalpa, expresaba su deseo de que fuera un Centro de Formación y
también de Animación Misionera, dándole así el nombre que tiene hasta hoy.

El Centro de Animación y de Formación Misionera (Cfam) inició con la participación de seis


personas, todas hondureñas: Ellas son Suyapa Sauceda, Juan Gilberto Funez, José Antonio
Chirinos y Alba Luz He. El P. Guido Charbonneau fue el primer director de este Centro.
1997- Junto a Guido se integró al Cfam, Margarita Reboucas (de Brasil), como co-formadora; y con el
siguiente grupo de formandos: Nelly García, Edilberto Sánchez, Walter Benavides, Napoleón *.
En los primeros años, los jóvenes seguían con sus compromisos de estudios en la universidad o
de trabajo. Tenían la misa comunitaria y una reunión de formación una vez a la semana. Todo el
grupo se involucró en la promoción del proyecto.
1998- El Centro ya adquirió carácter de internado lo que fue posibilitado gracias los P. Somascos que
prestaron una casa que tenían disponible en la Colonia Kennedy. Ese año, se formaron 4
personas, pero ya no solamente hondureños. Laura Vargas de Costa Rica, Ana Saldaña de Perú,
René Ayala de Bolivia y María Laura Joly (de origen francés).
1999- Seis personas se formaron en el Cfam; Marta Batista de Brasil, Yanina Torres de Chile, Mitzila
Moreno de Panamá, Fernando Pavón de Honduras, Carina Luque de Argentina y Hilda Esmeralda
Rodríguez C. de Honduras.
2000- Mitzila Moreno, panameña, integró al equipo de formación como co-formadora junto al P. Guido
Charbonneau. Con los formandos siguientes: Yolanda Alfaro de El Salvador, Andrés Domínguez de
Argentina, Teodoro Baquedano de Honduras, Macarena Solis C. y Yarela Alcaíno (ambas de
origen chilena).
2001- Inician el año como formadores el P. Guido y Mitzila... más tarde en el mes de Julio, se integra el P.
André Dionne como acompañante espiritual. En este año, se formaron ocho personas en el Cfam:
Luis Jara de Chile, Edgardo Espontón, Jorge Gallard y Beatriz Medina de Argentina, Beatriz
Flores de Honduras, Lidia Pozo, Frida Erazo y Reina del Rosario Bonilla de El Salvador.
2002- Se inicia el año siendo Guido director del Cfam y Mitzila como co-formadora, y el P. Andrés como
acompañante espiritual; quien, en el último semestre, asume la dirección del CFAM, en este
período se formaron cuatro personas: Fabio Lópes de Brasil, Orlando Benitez de El Salvador,
Wendy Espinoza y Osman Maldonado de Honduras.
2003- Se suma al equipo de formaicón María del Socorro, religiosa venezolana. Se formaron en el Cfam:
Jobel Carranza de Honduras, Claribel Meléndez de Él Salvador, Jorge Varas de Chile y Erlin
Perez. de El Salvador.
2004- Se forman 5 misioneros: Marcos Moda y Elizaneide Evangelista de Brasíl, Yannick Boisvert de
Canadá, Luis Hormazábal de Chile y Lucia Madrid de Honduras.
2005- Se une al equipo como co-formadora, Beatriz Medina de Argentina. Se forman 2 personas: Lilian
Carranza de El Salvador y
Francisco Pereira de Brasil.
2006- Tres persones se formaron en el Cfam Fabiola Gómez de Chile junto con Renéa Freitas y
Neudirene Da Silva de Brasil.
2007- Ingresan dos personas para el año de formación: José Domingos Barao de Brasil y Yanira Arias de
Chile.
2008- Por primera vez se acoge a personas enviadas por la Iglesia de A.C. en el CFAM. Ellas son Leonor
Auxiliadora. Roldán Carranza, Yorlene Guiselle Miranda Perez, de Costa Rica y Marisol Cañas
Abarca de El Salvador.
El Centro de Formación acogió además a Carlos Darío Mejía, Enrique Alonso Pérez Martínez,
María Elena Tovar, Aura Susana Campos Medinilla de El Salvador, Elizangela Santos Sales de
Brasil y María Esther Chacón Vallecillos de Honduras. Estos últimos recibieron la formación de la
primera etapa “Ad Gentes” en sus respectivos países.
VISION
El Centro de Formación y Animación Misionera (Cfam) es concebido para favorecer la participación, la
interrelación entre disciplinas y la vida comunitaria que proporcionan un marco de verificación y
consolidación de la vocación misionera, la madurez espiritual y eclesial, apostólica y profesional.
MISION
Se garantiza mediante la ejecución de programas de formación humana, espiritual, apostólica y académica,
el aprendizaje del Saber- Ser y del saber-llegar-a-ser. Los mismos fomentan y fortalecen nuestra identidad
de grupo, la articulación en familia de un sentido de pertenencia a la Sociedad Misionera, la apertura a la
diversidad de valores interculturales. El aprendizaje de la vida comunitaria nos abre a los valores de
equidad, igualdad y autonomía.
El ambiente intercultural de vida fraterna favorece el crecimiento humano y espiritual de adultos jóvenes,
contribuyendo a verificar el llamado a asumir un compromiso misionero “Ad Gentes” ad extra, fuera de su
país de origen.
OBJETIVOS GENERALES
Ver la misión como un proyecto que garanticé el crecimiento humano y bienestar espiritual y emocional de
cada uno de los formandos dentro de un ambiente familiar e intercultural que faciliten su adecuada
adaptación a la vida comunitaria.
Lograr que los formandos en el Cfam fortalezcan y maduren, dentro de un sentido de pertenencia (sentir la
casa que los acoge como suya), su deseo e interés por afianzar su compromiso hacia la vida misionera.

OBJETIVOS ESPECIFICOS
- Favorecer la vida fraterna y el encuentro intercultural dentro de un ambiente equitativo de amor y
respeto fraterno, aprendiendo a vivir en comunidad y a trabajar en equipo.
- Fomentar un ambiente de vida propicio para el crecimiento humano y espiritual.
- Discernir y profundizar sobre la vocación misionera
- Desarrollar una espiritualidad misionera a la luz de la palabra de Dios, del compromiso y de la
intuición personal.
- Desarrollar habilidades y actitudes prácticas, esenciales para la vida misionera.
- Suscitar una práctica misionera.
AL CENTRO MISIONERO AD GENTES DE AMÉRICA CENTRAL
El nacimiento del Centro Misionero Ad Gentes de América Central depende de nuestra capacidad para dar
respuesta a tres factores importantes que son: formación de una primera etapa en cada país, tener un
equipo directivo y asegurar medios de financiamiento.

Formación de una primera etapa de formación en cada país


 Para asegurar candidatos(as), hay que buscar coordinar e inyectar de dimensión misionera a la
Pastoral Juvenil y Pastoral Vocacional en cada una de las Diócesis.
 Se debe mejorar y fortalecer el proceso de Juventud Misionera.
 La primera etapa debe iniciarse en cada país a cargo de CONAMI y debe tener a cargo un
sacerdote que sea una referencia para los jóvenes que inician el proceso.

En 2008, se han realizado talleres para dar inicio a los equipos de formación en Costa Rica, Honduras y el
Salvador y se espera hacer lo mismo en Guatemala y Nicaragua en 2009.

Un equipo directivo
Financiamiento:

Padre André Dionne, pmé


Director del Centro de Formación y de Animación Misionera (Cfam)

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