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Monstera (costilla de Adán) cuidados y

variedades

La Monstera deliciosa, también conocida como costilla de Adán o queso


suizo, es una planta trepadora de hoja perenne nativa de América Central. Las
Monsteras son famosas por los hermosos agujeros de sus hojas que han llevado
al surgimiento de su apodo: Costilla de Adán. En este post vamos a explorar
sus cuidados y variedades principales ⬇

La Monstera aprecia un ambiente cálido y húmedo y una luz solar suave. Se


debe colocar la Monstera en un lugar donde pueda recibir suficiente luz indirecta
(de media a alta). Si bien puede llegar a tolerar condiciones de poca luz, es
posible que le originen hojas débiles y tallos más finos y frágiles, por lo que un
lugar donde reciba luz indirecta a unos pocos pies de distancia de una ventana
orientada al sur, oeste o este, es lo ideal.
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Guía rápida de la Monstera Deliciosa (Costilla de


Adán)

Monstera deliciosa, Costilla de Adán, Queso


Nombres comunes
suizo, Cerimán, Filodendro, Planta esqueleto

Nombre científico Monstera deliciosa

Mantener el sustrato húmedo. Evitar regar en


Riego
exceso.

Iluminación Abundante luz indirecta, evitar el sol directo.

Temperatura 18° C – 30° C. No dejar que baje de los 15.

Humedad Requiere una humedad alta.

Sustrato Aireado y con buen drenaje.

Toxicidad Tóxica para mascotas.

La Monstera es tóxica para gatos, perros y humanos si se


consume el follaje. Lo mejor es siempre mantener las plantas de
interior fuera del alcance de los niños pequeños y las mascotas.

La Monstera Deliciosa puede producir flores y frutos (comestibles para


humanos), aunque esto difícilmente ocurrirá en cultivo interior.
Flor de la Monstera – wikimedia commons

Variedades de la Monstera
Existen multitud de tipos de Monstera pero principalmente se utilizan estas
especies como plantas de interior: La Monstera deliciosa, la Monstera
Obliqua o la Monstera Adansonii. La Adansonii o la Obliqua, se distinguen de
M. deliciosa por tener las hojas más largas y afiladas, así como por tener los
agujeros de sus hojas completamente cerrados.
Monstera Adansonii – pexels.com

Los agujeros de la Monstera deliciosa normalmente crecen hacia el borde y se


abren a medida que maduran.
Monstera Deliciosa

Monstera Deliciosa Variegata


La sub especie Variegada de la Monstera, Monstera Variegata, se ha convertido
en una de las más deseadas por su belleza y peculiaridad. Este tipo de Monstera
destaca por las manchas o tonalidades blancas de sus hojas, en ocasiones
llegando a ser completamente blancas. Es una característica que puede surgir
tanto en la Monstera Deliciosa como en otros tipos de Monstera u otras plantas.
La Monstera variegata es una planta muy apreciada y bastante difícil de
conseguir.
Monstera Variegata – pexels.com

Hay que tener en cuenta que la Monstera Variegata necesita mucha más


luz que la variedad verde. Las partes blancas de sus hojas no pueden absorber
la luz, así que la planta necesita el doble de trabajo para realizar la fotosíntesis
correctamente y su crecimiento será también más lento. Por lo tanto, si quieres
que tu Monstera variegada sea plenamente feliz, deberías mantenerla en un
lugar muy luminoso.

Existen principalmente dos tipos de Monstera Deliciosa Variegada: Monstera


Albo y Monstera Thai Constellation.
La Monstera también es a menudo confundida con otra planta de apariencia muy
similar: la Rhaphidophora Tetrasperma. Sin embargo, es importante señalar
que son especies distintas a pesar del parecido de sus hojas.

Cuidados de la Monstera (Costilla de Adán)


Riego 
Demasiada agua puede ocasionar problemas de pudrición. Se debe regar en
función de si la luz es más o menos intensa y dejar siempre que la tierra se
seque parcialmente entre riegos, manteniendo un buen nivel de humedad en el
sustrato. Si las hojas se tornan amarillas y con manchas marrones o negras,
generalmente se debe a un exceso de riego. Si las hojas se muestran caídas y
con un color pálido, puede ser por la falta de humedad.

Iluminación
Les gusta la luz indirecta de media a alta. No llevan bien el sol intenso y directo
(puede producirle manchas en las hojas), pero puede aclimatarse para
soportarlo.

Las Monsteras son plantas trepadoras y les encanta ascender por


superficies verticales. Si quieres que tu Monstera crezca a lo alto en
lugar de a lo ancho, usa palos o tutores para guiar su crecimiento
hacia arriba.
Temperatura
18°C – 30°C. Es mejor no dejar que baje de los 15° C.

Humedad
La Monstera prefiere una humedad ambiental alta. Se puede aumentar la
humedad del ambiente pulverizando sus hojas, un par de veces por semana, en
las mañanas para dejar que se sequen durante el día. También puedes colocar
un plato con agua y guijarros debajo de la maceta o, para mí la mejor opción,
utilizar un humidificador.

Plantas y humedad ambiental: 7 formas de aumentarla

Abono
Se debe fertilizar desde la primavera hasta otoño, una vez al mes, con un
fertilizante para plantas de interior, siguiendo las instrucciones del fabricante para
la dilución y administración.

Problemas comunes de la Monstera


Monstera con manchas negras
Las hojas con manchas negras o marrones en la Monstera casi siempre son
producidas por un riego inadecuado. Regar demasiado nuestra Monstera puede
ocasionarle problemas de exceso de humedad, hongos y pudrición de las raíces.
Esta planta prefiere un riego moderado pero manteniendo el suelo ligeramente
húmedo (nunca encharcado). En función de la luz que reciba, habrá que regar
más o menos para mantener un nivel óptimo de humedad en el sustrato. A
menos luz, menor consumo de agua.

Por otro lado, si la mezcla de tierra no es adecuada, esta puede apelmazarse


demasiado y ahogar las raíces de la planta por el exceso de humedad
continuado y la falta de oxígeno. Por ello es muy importante asegurarse de que
la maceta cuente con una mezcla lo suficientemente porosa y drenante para
evitar problemas de aireación de las raíces.
Si tu Monstera tiene manchas negras y crees que puedes haberla regado de
más, suspende el riego durante unos días y deja que se seque por completo el
sustrato antes de volver a regar. Con esto deberían dejar de salirle más
manchas. Si quieres puedes podar las hojas que estén dañadas.

La calidad del agua también juega un papel muy importante en la salud de las
plantas. Trata de regar siempre con agua filtrada o al menos déjala reposar
durante la noche para dejar que se evapore el cloro.

Otras causas de las manchas negras o marrones en la Monstera pueden


ser:

Deshidratación
Quemadura solar
Bajas temperaturas
Corrientes de aire
Falta de humedad
Pulverización de las hojas
Falta de luz
Daños físicos
Plagas

Monstera con hojas amarillas


Las hojas amarillas en la Costilla de Adán o Monstera pueden ser causadas por
diferentes motivos, pero en general suelen deberse al exceso de riego o a la
falta de fertilizante. Es importante que la planta reciba suficiente luz solar
indirecta para que parte de la tierra pueda secarse entre riegos. También es
necesario fertilizar la Monstera cada cierto tiempo para evitar deficiencias
nutricionales.

Una carencia de humedad y un suelo demasiado seco, también pueden provocar


que las hojas amarilleen y se sequen por los bordes. Las plagas son otra de las
posibles causas de las hojas amarillas en la Monstera. Asegúrate de limpiarlas y
revisarlas con regularidad para tratar de prevenir estos problemas.

Monstera con hojas lacias o dobladas


Las hojas de monstera lacias o dobladas también pueden tener diferentes
razones. Con mayor probabilidad podría tratarse de un problema de exceso o
falta de agua.

Hay que mantener la tierra ligeramente húmeda y permitir que seque


parcialmente entre riegos para evitar una concentración de humedad excesiva.
Asegúrate de que la Monstera recibe suficiente luz indirecta para poder realizar
esta tarea fácilmente. Si percibes que la tierra permanece húmeda durante
mucho tiempo, tal vez sea conveniente realizar un cambio de sustrato a uno con
mejor composición y drenaje.

Las hojas lacias o dobladas en la Monstera también pueden deberse a una


carencia de luz solar. Recuerda que las Monsteras son plantas tropicales, por lo
que necesitarán abundante luz, unas 8 – 10 horas todos los días.

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