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¿POR QUE NO DEJAR QUE LA FRANJA AMARILLA IMPERE EN

NUESTRO PAÍS?

“En la Colombia contemporánea, la violencia se presenta en muchos ámbitos


de la vida nacional y el conflicto armado, que tiene ya casi cuatro décadas de
duración, se encuentra en un proceso creciente de profundización”. (Pérez
Flores, 2001, p. 2)

El objetivo de este ensayo es hacer una reflexión con una mirada


restrospectiva de un tiempo no tan lejano al actual. Esta mirada que
permitirá reconocer los errores que se han cometido en el pasado, no sólo de
los dirigentes del país, sino de la mayoría de los habitantes que hacen parte
de la población colombiana.

Por lo anterior, el pasado repercute peligrosamente hacia el futuro, haciendo


que la nueva generación afronte situaciones problemáticas tanto en lo
político, en lo económico, en lo religioso y en lo social. Todas estas
reflexiones tienen como punto de partida el texto: ¿Dónde está la franja
amarilla? Que nos habla de la situación colombiana que han dejado esta
patria empobrecida y sumida en una profunda violencia.

¡Dónde está la franja amarilla, es una obra en la cual su autor hace una
especie de descripción detallada sobre esa Colombia del siglo XIX y que en
la actualidad continúa su camino sembrado de dolor, tragedia, muerte, en
una palabra, de violencia. Es un llamado a reflexionar sobre la manera en
como ciudadanos, estamos respondiendo a esa terrible realidad y qué
aportes estamos ofreciendo para hacer de nuestro país, un país con más
oportunidades, con mejores fuentes de trabajo, con más respeto hacia las
personas y hacia sus derechos.
Con su pregunta ¿Dónde está la franja amarilla? Se trata de hacer pensar
sobre esos partidos políticos que han llevado las riendas de la sociedad, los
liberales y conservadores, si están marcando un sendero por medio del cual
se pueda alcanzar sueños e ideales, si una de sus franjas podrá imperar en
algún momento y cambiar el panorama que hasta el momento han marcado
las dos franjas restantes.

Es cierto que ninguno de estos partidos ha logrado hacer algo por este país,
ninguno se ha preocupado por ofrecer bienestar, por cambiar esa cultura que
tanto ha imperado, la cual hace que predomine un pensamiento en el cual el
hombre se siente resignado ante tanta crueldad, el hombre se ha formado a
su alrededor la idea de que nada importa, de que la violencia que se vive es
el resultado de esos genes que hemos heredado y que por lo tanto resulta
casi imposible responder de otra forma que no sea asesinando o privando a
decenas de personas de uno de sus grandes derechos, la libertad.

La violencia es un fenómeno que surge con el hombre, por lo que es tan


antiguo como la humanidad. También es un problema universal, pero no
solamente es por el predominio de una de sus franjas, es todo hombre que
ha ido tomando de una forma pasiva la situación por la cual actualmente se
atraviesa.

De acuerdo a lo anterior, se puede decir que la violencia empieza desde la


niñez, ya que ellos van heredando ese espíritu violento que los mayores van
acumulando en su interior y que son causados por diferentes factores, los
cuales van arruinando la vida de aquellos que piensan de otra forma, esos
que buscan en la sociedad lo más espiritual de su alma, pero que sienten la
frustración de la impotencia, al ver que poco se puede hacer por cambiar esa
cultura arraigada en ellos por tanto tiempo.

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