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TESTIMONIO DE EXPERIENCIA DE BAUTISMO EN AGUA

Testimonio 1
Es la convicción que había en el corazón de entrar a las aguas, ya que el señor
nos enseña acerca del bautismo y esa experiencia más que una experiencia
externa, es una experiencia interna dentro del corazón porque es un asunto de
Fe entonces la gente entra al agua y le dicen que sentiste y no necesariamente
uno tiene que sentir algo sino mas el gozo de hacer la voluntad de Dios,
entonces el bautismo en agua es una experiencia que el hombre lleva acabo por
mandamiento del Señor como una identificación de la muerte de nuestro Señor
Jesucristo, uno se identifica con su muerte cuando entra en esas aguas, porque
esa palabra bautismal tiene que ver con algo como lavamiento, sumergir, uno se
sumerge, se identifica con la muerte de Cristo, esto es un asunto meramente
simbólico el bautismo en agua, se identifica uno con su muerte, queda
sepultada esa naturaleza vieja y sale de las aguas una vida nueva, esto es un
acto de Fe es un paso de Fe; la experiencia es la obediencia, lo que creemos, la
identificación, es saber que he hecho la voluntad de Dios y es los primeros pasos
de la vida del creyente, el que crea bautícese y continua nuestro caminar.
(Pastor Jorge Schiantarelli).

Testimonio 2
Me bauticé sin conocer realmente lo que significaba, es un mandato que Dios
dice en su palabra que tenemos que hacerlo, claro el bautismo no salva a nadie,
pero es una confirmación en tu corazón como cristiano es algo simbólico, es una
simbología nada mas entras al agua te bautizas, mueres al viejo hombre dice la
escritura y te sumerges, no es nada que tú vas a sentir algo, es una cuestión de
Fe en tu corazón que uno siente y se bautiza, yo me identifico con Cristo, es una
cuestión de Fe, es algo que nadie te lo puede quitar de tu corazón. (Hermano
Gary).

Testimonio 3
El día que me compartieron que significaba el bautismo en las aguas, mi corazón
se regocijo porque era la confesión pública ante Dios y los hombres, de que
morí para los deseos de este mundo, para seguir lo de arriba, puesta mi mirada
en Cristo, y el comienzo de la novedad de vida eterna. (Hermano Steven Arnol
Sosa Rabines).

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