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Capítulo 10: Pliegue y plegamiento

10.2 Anatomía de una superficie plegada

La ilustración esquemática en la figura 10.2 muestra los elementos geométricos básicos de un


pliegue. El área de charnela es la región de mayor curvatura y separa los dos limbos. La línea de
mayor curvatura en una superficie plegada se llama línea de charnela. Podrías pensar que el
limbo es la porción menos curvada de un pliegue. En un limbo hay un punto donde el sentido de
curvatura cambia, llamado punto de inflexión. Los pliegues con una línea de charnela recta se
llaman pliegues cilíndricos figura 10.3a cuando la superficie plegada puede envolverse
parcialmente alrededor de un cilindro (?). Si este no es el caso, y la línea de charnela se curva
entonces los pliegues son no cilíndricos (cónicos) figura10.3b. En realidad la extensión lateral
de los pliegues cilíndricos está restringida por la escala de afloramiento, porque a mayores
distancias la línea de charnela de los pliegues generalmente se curva. Sin embargo podemos
tratar los pliegues naturales como cilíndricos dividiéndolos convenientemente en segmentos con
línea de charnela rectas.

Una superficie cilíndrica consiste en un número infinito de líneas que son paralelas a una línea de
generación. Esta línea de generación es llamada eje de plegamiento, que cuando se mueve
paralela a sí misma a través del espacio, delinea la superficie plegada. En el caso de los pliegues
cilíndricos el eje de plegamiento es paralelo a la línea de charnela. Los puntos topográficos más
altos y más bajos de un pliegue se llaman cresta y artesa (trough), respectivamente, las cuales
no coinciden necesariamente con la línea de charnela. La superficie que contiene las líneas de
charnela de superficies plegadas consecutivas en un pliegue es la superficie axial figura 10.2 y
10.3. Algunos usan el término plano axial pero la superficie no es necesariamente plana como
se ve en la figura 10.3c. Además la superficie axial no siempre divide el pliegue en mitades
iguales que son especulares entre sí. El plano de referencia que se usa para describir la forma de
un pliegue se llama plano de perfil plegado (¿?), el cual es perpendicular a la línea de charnela
figura 10.2. Tener en cuenta que el plano de perfil no es lo mismo que una sección transversal
a través del pliegue, es cualquier plano vertical a través de un cuerpo. Si la línea de charnela no
es horizontal, entonces el plano de perfil no es paralelo al plano de la sección transversal, lo que
tiene implicaciones para la descripción de la geometría del pliegue.

El ángulo entre limbos medido en el plano de perfil y es llamado ángulo interlimbo figura 10.4.
Intuitivamente te das cuenta que el ángulo interlimbo estima cualitativamente la intensidad del
pliegue; entre más pequeño es el ángulo interlimbo, mayor es la intensidad del pliegue.
Finalmente reconocemos amplitud, longitud de onda y longitud del arco de un perfil de pliegue.
Estos términos se usan de igual manera a como se usan en las ondas físicas. La longitud de
onda se define como la distancia entre dos charnelas de la misma orientación, mientras que la
longitud del arco es la distancia medida sobre la superficie plegada; la amplitud es la mitad de la
altura de la estructura medida desde la cresta hasta la artesa (trough) figura 10.4.

Cuando estratos sucesivos en una pila (¿?) plegada tienen aproximadamente la misma longitud
de onda y amplitud, los pliegues son llamados armónicos. Si algunos estratos tienen diferentes
longitudes de onda y/o amplitudes, los pliegues son desarmónicos. En circunstancias extremas,
una serie de estratos plegados pueden estar totalmente desacoplados de las capas no plegadas
de arriba o abajo. Cuando esto sucede, existe un horizonte de separación (detachment) entre
las capas plegadas y no plegadas.
10.2.1 Antiforme, sinforme, anticlinal y sinclinal

Ya le hemos dado una gran variedad de términos, pero antes de explorar la importancia del
plegado, todavía tenemos que agregar algunos más. Tal vez encuentre consuelo en el
conocimiento de que generaciones de estudiantes antes de haber abierto su camino a través de
la terminología, descubriendo felizmente que al final es realmente importante para la descripción
e interpretación de la deformación regional. Dicho esto, ahora dibuje un pliegue en un trozo de
papel. Lo más probables es que coloque el área de la bisagra en la parte superior de la
estructura, delineando algo como una montaña afilada. (intro culiá xd). Esta geometría de
pliegue particular se llama antiforme, la geometría opuesta, cuando la zona de la bisagra está en
la parte inferior, se llama sinforme. La explicación para las modificadores “anti” y sin” es que las
extremidades se alejan del centro del pliegue, o hacia él, respectivamente. Encontrará que
muchos geólogos usan los términos anticlinal y sinclinal como sinónimos de antiforme y sinforme
pero es incorrecto. Los términos anticlinal y sinclinal implican que se conoce la dirección
estratigráfica de la juventud en los estratos plegados. Esta es una distinción importante para el
análisis regional, así que veamos esto con cierto detalle.

Imagine una secuencia de estratos que se colocan en una cuenca durante un periodo de muchos
millones de años. Obviamente, el estrato más joven se encuentra en la parte superior, mientras
que el estrato más viejo está en la parte inferior de la formación (Ley de superposición de
Steno). Cuando doblamos esta secuencia en estructuras de pliegues orientados hacia arriba.
Ahora invierta la secuencia original: el estrato más antiguo ahora se encuentra en la parte
superior y el estrato más joven en la parte inferior figura 10.6c y 10.6d. Mientras generamos
la misma geometría de antoforme y sinforme la dirección de la juventud es opuesta a la que
teníamos antes. En este antiforme, los estratos más jóvenes van hacia el núcleo, mientras que
en el sinforme los estratos se alejan del núcleo. Ambos casos de pliegues orientados hacia abajo
y, por lo tanto, un antiforme con esta característica juvenil se denonima antiforme orientado
hacia abajo; de forma análoga, reconocemos una sinformidad orientada hacia abajo. Recuerde
que cuando encuentra pliegues hacia abajo en el campo, inmediatamente sabe que algún
proceso secundario ha invertido la secuencia estratigráfica normal. Los pliegues hacia abajo no
son tan infrecuentes como uno podría suponer. Por lo general, se encuentran en áreas que
contienen una “generación” temprana de pliegues regionales con superficies axiales horizontales,
que son bastante comunes en los cinturones de montaña de colisión. El plegado posterior de
estas primeras estructuras genera una serie de pliegues hacia arriba y hacia abajo, como se
muestra en la figura 10.6e.

10.3 Clasificación de los pliegues

Ahora que hemos establecido un vocabulario básico, podemos clasificar aún más los pliegues. La
clasificación de los pliegues se basa en cuatro componentes:

1.- Forma del pliegue en tres dimensiones, distinguiendo principalmente entre pliegues
cilíndricos y no cilíndricos (cónicos) figura 10.3

2.- Paramento del pliegue, separando los pliegues hacia arriba y hacia abajo figura 10.6

3.- Orientación del pliegue

4.- Forma del pliegue en el plano de perfil

Ya se han introducido los dos pirmeros componentes, la forma del pliegue en tres dimensiones y
el paramento del pliegue figuras 10.3 y 10.6 respectivamente. En esta sección nos
concentramos en los otros dos componentes de la clasificación del pliegue: orientación del
pliegue y forma del pliegue.

10.3.1 Orientación del pliegue

Mirar la superficie curva de un pliegue natural hace que uno se pregunte si existe alguna medida
representativa para la estructura figura 10.7. Si lleva la brújula a la superficie plegada,
obtendrá una gran cantidad de lecturas diferentes para el manteo, y manteo y rumbo (o
dirección de manteo) si el pliegue es no cilíndrico (cónico). En los pliegues con extremidades que
son relativamente rectas, encontrará que todas las mediciones en una sola extremidad son
bastante parecidas figura 10.8, pero en los pliegues con extremidades curvas este no será el
caso. Entonces, ¿qué medimos si quereos dar la orientación de un pliegue a otro locoxd?. La
primera medida que tomamos es la orientación de la línea de charnela, suele ser bastante recta,
y determinamos su caída (por ejemplo, 20°) y la dirección de la caída (por ejemplo, 190°).
Ahora decimos que el pliegue se hundo poco a poco hacia el sur. En segundo lugar, medimos la
orientación de la superficie axial. Medimos una dirección de manteo/manteo de 270°/70° para la
superficie axial, que completa nuestra descripción del pliegue: un pliegue vertical que se hunde
poco al sur. Recuerde que la línea de charnela siempre se encuentra en la superficie axial.
Pruebe sus medidas en una proyección esférica para ver si esta relación se mantiene. ¿Qué
restringe términos como superficial y vertical? Como convención práctica, usamos los rangos
angulares que se muestran en la tabla 10.2. En la figura 10.10 mostramos algunas
combinaciones representativas de la línea de charnela y orientaciones de la superficie axial con
su terminología. Un pliegue con una superficie axial horizontal, por definición, debe tener una
línea horizontal de charnela, y se llama pliegue reclinado figura 10.1. En los Alpes europeos,
por ejemplo, los pliegues reclinados a gran escala a menudo se asocian con fallas inversas y se
llaman nappes figura 9.1. Un término que se usa para un pliegue inclinado y pronunciado es un
pliegue reclinado. En todos los casos recuerde que sus mediciones de campo no será más
preciso que +-2° (precisión de la brújula), pero la característica que mida probablemente variará
en un ángulo aún mayor de +-5°-10°. Por lo tanto, los valores en la tabla 10.2 sirven como
guía y no deben aplicarse de manera demasiado estricta.
10.3.2 Forma del pliegue en perfil

El perfil plano de un pliegue se define como el plano perpendicular a la línea de charnela figura
10.2. La forma del pliegue en el perfil (como se ve, por convención, hacia abajo) permite una
mayor clasificación de los pliegues. Debido a que el plano del perfil es perpendicular a la línea de
charnela, no debemos preocuparnos por la orientación del pliegue. La forma del pliegue en el
perfil describre el ángulo interlimbo y cualquier cambio en el grosor del estrato. El ángulo
interlimbo de un pliegue es el ángulo entre las extremidades. Suponemos que las extremidades
son relativamente planas o usamos la tangente en los puntos de inflexión figura 10.4. Los
valores correspondientes a los diversos términos se enumeran en la tabla 10.3. Al igual que con
los de la tabla 10.2, solo sirven como una guía aproximada.

La segunda característica de la forma de un pliegue en perfil es cualquier cambio del ancho del
estrato a través de la estructura. Si miras la figura 10.11a, notarás que el ancho del estrato no
cambia mucho si vamos de un limbo del pliegue hasta el otro. En cambio el pliegue en la figura
10.11b tiene limbos delgados y relativamente una ancha zona de charnela. Cuantificamos estas
observaciones usando el metodo llamado análisis dip-isogon (isogona de buzamiento). Las
isogónas de buzamiento (manteo) conectan puntos en el límite superior e inferior de una capa
plegada donde las capas tienen el mismo manteo en relación con un marco de referencia figura
10.12. El método de contrucción se explica paso a paso en todos los manuales de laboratorio de
geología estructural. Se reconocen tres clases: isógona de buzamiento convergentes (Clase 1),
isógonas de buzamiento paralelos (Clase 2), isógonas de buzamiento divergentes (Clase 3). Los
términos “convergencia” y “divergencia” se usan con respecto al núcleo del pliegue; cuando las
isógonas de buzamiento se cruzan en un punto en el núcleo del pliegue, el pliegue se llama
convergente, y viceversa. Las dos geometrías que se muestran en la figura 10.11 son casos
especiales. Las isógonas de buzamiento que son perpendiculares a la estratificación en todo el
pliegue deninen un pliegue paralelo, mientras que las isógonas de buzamiento que son paralelos
entre sí caracterizan un pliegue similar. Esta terminología (especialmente el uso de “paralelo”)
puede ser confusa, pero recuerde que paralela y similar describen la relación geométrica entre
las superficies superior e inferior de una capa plegada; no describen la relación entre isógonas
de buzamiento individuales en un pliegue. Pliegues paralelos y similares anclan la subdivisión
cinco veces más fina que se utiliza principalmente para una descripción detallada. En el campo,
usar libremente los términos similar (que representa la Clase 2 y 3) y paralelo (que representa
la Clase 1A, 1B y 1C) suele ser suficiente para describir la forma del pliegue en el perfil.

Entonces agregamos dos componentes más a nuestra descripción de un pliegue. Ahora, como
prueba, dibuje una sinformidad poco profunda, vertical, firme, similar, orientada hacia abajo.
Esperemos que estos términos se hayan vuelto lo suficientemente claros como para que la tarea,
a diferencia de su descripción, sea relativamente simple. El único parámetro que hemos excluido
en nuestra clasificación es el tamaño del pliegue. Para especificar esto, podemos usar términos
como micropliegue (tamaño microscópico; escala de hasta milímetros), mesopliegue (muestra
de mano a tamaño de afloramiento pequeño; escala de centrímetros a metros) y macropliegue
(tamaño de montaña y más grande; cientos a miles de metros). Aunque la larga descripción
anterior ciertamente no es bonita, termina siendo muy informativa y completa. Recuerde que el
objetivo de cualquier buena descripción es primero recordar las características por ustedes
mismo y en segundo lugar, transmitir esta información de manera comprensible e inequívoca a
otra persona.
10.4 Sistemas de pliegues

Nuestro tratamiento con los pliegues hasta ahora se ha concentrado principalmente en


antiformes y sinformes. Cuando tenemos una serie de antiforme y sinformes, llamamos a esto
un sistema de pliegues. La información que podemos obtener de los sistemas de plegado
proporciona la información más poderosa para la interpretación de la estructura regional, e
involucra elementos tales como la simetría del pliegue, la vergencia del pliegue y la superficie
envolvente.

10.4.1 Superficie envolvente

Dibuje un plano imaginario que sea tangencial a las zonas de charnela de una serie de pequeños
pliegues en una capa (superficie A, figura 10.13). Llamamos a esta superficie la superficie
envolvente. Contiene todas las charnelas antiformales o sinformales. La figura 10.13 también
muestra que podemos dibujar una superficie envolvente adicional (superficie B) cuando
conectamos las charnelas de la superficie curva envolvente A. Llamamos a la superficie
envolvente para los pliegues más grandes la superficie envolvente de primer orden (superficie
B). Las superficies envolventes de estructuras sucesivamente más pequeñas tienen un orden
más alto (superficie envolvente de segundo orden, superficie envolvente de tercer orden, etc.).
La superficie de envoltura de primer orden es típicamente de escala regional, mientras que las
superficies de envoltura de orden superior pueden bajar hasta la escala de sección delgada. Pero
¿cuál es el punto de determinar la superficie envolvente? Con un orden decreciente, las
superficies envolventes reducen la información estructural de un área plegada en patrones cada
vez más simples. Por ejemplo, la superficie envolvente de segundo orden en la figura 10.10
muestra que los pliegues a pequeña escala definen un patrón de pliegue a mayor escala que
consiste en antiformes y sinformes. Estas estructuras a gran escala también han sido designadas
por los términos anticlinorio y sinclinorio, respectivamente. Lamentablemente, el uso de estos
términos sugiere estructuras orientadas hacia arriba, lo que no siempre se pretende. La
presencia de anticlinoria y sinclinoria implica que muchos pliegues pequeños están relacionados
de alguna manera, a pesar de que varían en forma y posición en la estructura más grande. Es
importante darse cuenta de que las orientaciones de estos pequeños pliegues (tanto la línea de
charnela como la superficie axial) son a menudo las mismas, y también que estos parámetros
son aproximadamente paralelos a los del anticlinoria y sinclinorio. Por esta razón, estos
pequeños pliegues a veces se llaman pliegues parásitos, porque están relacionados con una
estructura más grande.

La relación geométrica entre pliegues parásitos y estructuras regionales ofrece un concepto


poderoso en el análisis estructural, que establece que la orientación de estructuras pequeñas (de
alto orden) es representativa de la orientación de estructuras regionales (de bajo orden). Por lo
tanto, las orientaciones de la línea de charnela y la superficie axial de un pequeño pliegue
pueden predecir estos elementos para un gran pliegue regional que de otro modo no estaría
expuesto; en la figura 10.13. Obviamente, esta “regla” sirve solo como una hipótesis de
trabajo conveniente, pero ha demostrado ser muy robusta en el mapeo regional.
10.4.2 Simetría del pliegue y vergencia del pliegue

La relación entre la superficie envolvente y la superficie axial de los pliegues también nos
permite describir la simetría de los pliegues. Si la superficie envolvente y la superficie axial son
aproximadamente perpendiculares (+-10°), tenemos pliegues simétricos figura 10.14a; por el
contrario los pliegues son asimétricos figura 10.14b. En el caso de un pliegue aislado, no se
puede definir una superficie envolvente. Para determinar si un pliegue es simétrico o asimétrico
utilizamos la superficie media, que es la superficie que pasa a través de los puntos de inflexión
de las limbos opuestos. Si la superficie axial es perpendicular a la superficie media, entonces el
pliegue es simétrico; de lo contrario, el pliegue es asimétrico. Existen otras definiciones de
simetría de pliegues que involucran, por ejemplo, la relativa inclinación de los limbos, pero estas
descripciones de simetría de pliegue son a menudo ambiguas y no deben usarse.

Ahora veamos una aplicación práctica de la simetría de pliegues. La superficie envolvente de


segundo orden definida por los pequeños pliegues de la figura 10.13 describre un gran par de
forma antiforme. Los pequeños pliegues (los pliegues parásitos) muestran formas y asimetrías
características a medida que nos movemos a lo largo de la superficie envolvente de segundo
orden. En el limbo oeste del antiforme, los pliegues menores son asimétricos y tienen lo que
llamamos una asimetría en el sentido de las agujas del reloj al mirar habia abajo del pliegue
(clockwise asymmetry). En el área de la charnela, los pliegues son simétricos, porque la
superficie axial es perpendicular a la superficie envolvente. De hecho, a medida que avanzamos
desde la extremidad hacia el área de la charnela, la asimetría en el sentino de las agujas del
reloj (clockwise) disminuye progresivamente, hasta que el pliegue es simétrico. A medida que
avanzamos hacia el limbo este del antiforme, la asimetría del pliegue regresa, pero ahora con el
sentido opuesto al del limbo oeste; en el limbo este la asimetría es en sentido antihorario
(counterclockwise). Tenga en cuenta que el sentido horario y antihorario se definen por la
rotación de la superficie axial en relación con un pliegue simétrico hipotético figura 10.15. En el
pasado, los pliegues parásitos recibían erróneamente nombre de “pliegues de arrastre”, porque
se suponía que la rotación aparante de las superficies axiales refleja el arrastre entre las capas
durante el plegado. Más bien, estos pliegues menores son probablemente simétricos en las
etapas incipientes del plegamiento regional y se vuelven más asimétricos cuando los pliegues
grandes se tensan. Entonces, a través de un pliegue grande, la vergencia de los pliegues
parásitos cambia de una manera característica que nos permite predecir la ubicación del área de
la charnela de gran antiformes y sinformes figura 10.16. Usando pliegues parásitos, incluso
podemos predecir la orientación de estos grandes pliegues regionales. Es necesario tener
precaución cuando los pliegues no se hundes; es decir, en pliegues verticales horizontales donde
no se pueden definir las observaciones descendentes. Si vemos la estructura en la figura 10.16
desde el lado opuesto, los pliegues en el sentido horario se vuelven en sentido contrario. Esta
situación no es tan confusa como parece al principio, Imagine un antiforme que está cortado por
una carretera perpendicular a la superficie axial. La asimetría de los pliegues parásitos en esta
gran estructura aparece en sentido horario o antihorario en lados opuestos de la carretera. Sin
embargo, en ambos casos hacen la misma predicción para la ubicación del área de charnela.
Siempre y cuando defina la dirección en la que ve la estructura menor, no hay ningún problame
en utilizar la vergencia del plegado como herramienta de mapeo en un área. En cualquier caso,
recuerde que no se puede producir un patrón de vergencia de pliegue opuesto al de la figura
10.16 (una geometría de “árbol de Navidad”) en una generación de pliegue único figura 10.17
10.5: ALGUNAS GEOMETRÍAS ESPECIALES DE PLIEGUES

Las monoclinas son estructuras de pliegues con sólo un flanco inclinado; los estratos a cada
lado del flanco inclinado son horizontales. Las monoclinas son típicamente el resultado de un
desplazamiento vertical en el subsuelo cerca de la parte inclinada de la estructura. La falla eleva
un bloque de roca ígnea o metamórfica, y las capas sedimentarias superpuestas se extienden
sobre el borde del bloque levantado para formar la monoclina (Figura 10.18). Se encuentran
ejemplos espectaculares en la meseta de Colorado de la región occidental del país Estados
Unidos. Los pliegues de tinta K/ K ink folds son pequeños pliegues (menos de un metros)
que se caracterizan por tener los flancos rectos y afiladas charnelas. Típicamente ocurren en
laminados finos (es decir, rocas fuertemente anisótropas), como pizarras (Figura 10.19). Doblar
bruscamente una baraja de cartas es un buena analogía para el proceso de doblado, ya que los
pliegues de doblado son formado por desplazamientos entre láminas individuales (tarjetas
individuales en la analogía). Los pliegues en Chevrón (Figura 10.8) son el equivalente a gran
escala de los pliegues en curva. El pliegue de caja describe una geometría que es bastante
auto-explicativo (Figura 10.5). Para que una caja se pliegue a una capa debe separarse de la
subyacente y capas superpuestas. Por lo tanto, son comunes en áreas con capas basales
débiles. Los pliegues ptigmáticos son estructuras de pliegues irregulares y aislados que
típicamente se producen como pliegues apretados venas o capas delgadas de litología
fuertemente contrastada (y, por lo tanto, competencia contrastada; Figura 10.20). La mayor
parte de las regiones metamórficas de todo el mundo contienen pliegues ptigmáticos que, de
forma poco glamorosa, se parecen a los intestinos. Los pliegues doblemente hundidos/
doubly plunging folds. A largo según la tendencia del buzamiento los pliegues pueden
perderse o incluso cambiar de antiformes a sinformes. El punto alto de la línea de charnela en
un pliegue doubly plunging se llama culminación y el bajo punto a lo largo de la misma línea de
charnela se llama depresión. El cambio en el ángulo de buzamiento es normalmente menor de
50°. Cuando se presentan pliegues adicionales, los cambios en el buzamiento puede dar lugar a
pliegues en escalón, en los cuales un pliegue de apertura es reemplazado por un vecino,
gradualmente el pliegue se ajusta de forma opuesta. Tal geometría se produce en todas las
escalas, desde las muestras de mano (Figura 10.21) hasta eltamaño de las cadenas montañosas
(como el Valle y la Cresta delos palaquianos de la A central). Nótese que los pliegues
doblemente hundidos/ doubly plunging folds son, por definición, no cilíndricos. Los pliegues
sheath muestran una curvatura extrema de la línea de charnela, hasta el punto de que la
curvatura de la línea de charnela se aproxima al paralelismo (cambio en hundirse hasta 180°!).
Lo que típicamente se encuentra en el afloramiento es la sección transversal elíptica de la punta
del pliegue (véase Figura 12.28); sin embargo, tal patrón en sí mismo no necesariamente
implican una sección de un pliegue sheath. Un pliegue doblemente hundido puede dar el mismo
patrón de afloramiento. Sin embargo, se diferencian en que en los pliegues sheaths la línea de
charnela es muy curvada, solo así se reconocen estos últimos tipo de pliegues. Los pliegues
sheath se producen al tomar un pliegue ligeramente doblemente hundido y "tirando" en su cima,
como ocurre en zonas de alto cizalle.
10.6
PLIEGUES

SUPERPUESTOS.
Los geólogos estructurales utilizan el término generación de pliegues
para refieren a grupos de pliegues que se formaron a aproximadamente el mismo intervalo de
tiempo y bajo una cinemática similar condiciones. Comúnmente encontramos varias
generaciones de pliegues en un área, que están etiquetados con la letra F (por F antiguo) y un
número que refleja el orden relativo de su formación: Primero se forman los pliegues de F 1,
seguidos de los de F 2. pliegues, F 3 pliegues, y así sucesivamente. Varias generaciones de
pliegues pueden a su vez formarse durante una fase orogénica (como la fase silurica-devonica
de "Un cadián" en palaquiano o el terciario cretacico "L aramida" fase en la Cordillera del Norte
de América), que es anotado por la letra D (para la información D). En cualquier cinturón de
montaña pueden estar presentes varias fases, que son etiquetados D 1, D 2, etc., cada uno de
los cuales contiene un o más generaciones de pliegues. Por ejemplo, el orogenio A palachiano de
los Estados Unidos orientales contiene tres fases principales de deformación (Taconica, cadián A,
y llegheniano A). Desde el principio es importante darse cuenta de que ni una fase de
deformación ni cada una de las generaciones del pliegue individual tiene que estar presente en
todas partes a lo largo del orógeno, ni tampoco ocurren en todas partes al mismo tiempo. En
una región la deformación de la escama está distribuida irregularmente y es comúnmente
diacrónica. Puedes imaginar que las generaciones de pliegues y la fase de deformación pueden
convertirse rápidamente bastante complejo. Así que nos ceñiremos a dos generaciones para
examinar los principios del plegado superpuesto, que nos permite descifrar la secuencia (es
decir, el tiempo relativo) del plegado.
10.6.1 El principio de la superposición de pliegues
La figura 10.22 muestra una fotografía de campo de una complejo geometría de pliegue que
contiene dos generaciones de pliegue. Cómo sabemos esto mirando la foto y cómo podemos
separar los pliegues F 1 y F 2 en este patrón? La superposición de pliegue es simple en su raíz,
pero el concepto requiere la habilidad de visualizar y analizar a veces geometrías
tridimensionales muy complejas. Vamos a primero empiece con la regla: un pliegue superpuesto
debe ser más joven que la estructura que se pliega. Esto simplemente reafirma la Ley de
Superposición de tal manera que se aplica a plegado. A menos que haya habido un pliegue
anteriormente, no puede ser modificado por un pliegue más joven. ¿Cómo determinamos el
criterio por el cual se obtiene esta relación temporal? Empezamos con un ejemplo. La figura
10.23a muestra una secuencia de pliegues recostados que llamaremos F A; la superficie axial
asociada es llamado SA. Ahora superponemos una serie de verticales pliegues de
aproximadamente la misma escala (F B con axial superficie SB; Figura 10.23c). La superposición
de F B en F A produce el patrón de interferencia mostrado en la Figura 10.23b. Se conservan los
elementos de ambas generaciones de pliegues; por ejemplo, la naturaleza recostada de F A
sigue siendo allí, pero sus miembros están ahora doblados. De manera similar, los pliegues F B
verticales permanecen visibles, pero se superponen a un patrón que repite e invierte la
estratificaciones (de los pliegues F A recostados). La forma de determinar la relación temporal
de nuestro patrón de interferencia es invocar la regla de la superposición. Tanto la estratificacion
como la SA están plegadas, pero la SB es esencialmente planar. Por lo tanto, el estrato y SA ya
estaban presentes antes de la SB; en consecuencia, los pliegues verticales deben ser F 2, que
son más joven que los pliegues de la F 1 recostada. Es posible que las superficies axiales no
siempre sean visibles en el campo (aunque las foliaciones del plano axial son comunes; Capítulo
11), pero siempre puedes usar una superficie axial imaginaria para evaluar estos complejos
patrones de plegado. Ahora examine esto con un patrón análogo. Toma un pedazo de papely lo
doblamos en dos (nuestro pliegue F 1) y lo orientamos en un orientación recostada. A
continuación, doble el papel de nuevo a crear un pliegue vertical (nuestro pliegue F 2) cuya linea
de charnela sea paralela a la charnela del pliegue recostado. Voilà, obtienes el patrón de la
figura 10.23b.En este ejemplo, procederemos con los cuatro patrones de interferencia en
pliegues básicos.
10.6.2 Patrones de interferencia de pliegue
Se reconocen cuatro patrones básicos a partir de la superposición de los pliegues de F 2 vertical
sobre los pliegues de F 1 de variable orientación (Figura 10.24). Observando estos tipos de
interferencia de pliegue, notará que hemos producido el Tipo 3 usando el trozo de papel doblado
de arriba. Tipos 0 y 2 también puede ser examinado doblando un trozo de pero el Tipo 1
requiere un arrugamiento adicional. En lugar de describir estos patrones en confusas palabras,
mira la Figura 10.24 y reproduce las geometrías con una hoja de papel y tus manos.
Ahora pasamos a algunas propiedades importantes de los diversos tipos de interferencia de
pliegue. El tipo 0 es una condición especial, porque las líneas de charnela y la superficie axial de
ambas generaciones de pliegues son paralelas. Como una consecuencia, F 1 es simplemente
apretado por la superposición F 2. Se da cuenta de que, prácticamente, el Tipo 0 no puede
reconocerse en el campo como un tipo de interferencia por la geometría solo (por eso usamos el
número 0). El tipo 1 es también llamada estructura de "cúpula y cuenca" y se asemeja a una
cartón de huevos. Tanto las superficies axiales como las líneas de charnela de las dos
generaciones son perpendiculares, produciendo esta geometría característica (Figura 10.24a). El
tipo 2 es quizás la geometría más difícil de visualizar, pero el plegadoun pedazo de papel ayuda
enormemente. En el afloramiento, a menudo ver una sección a través de esta geometría que se
asemeja a un patrón de "hongo" (Figura 10.24b). Nótese que este patrón de afloramiento sólo
se genera en la superficie horizontalque se cruza con el tipo 2; si hacemos otro corte, digamos
vertical,el patrón del afloramiento es bastante diferente. Finalmente, el Tipo 3(Fig-ure 10.24c)
se denomina a veces "replegadopatrón de "pliegue", que es un nombre equivocado porque los
cuatro tipos son pliegues replegados. Sólo presentamos el nombre para que usted lo han
escuchado, y porque muy pocas personas son de otra manera capaz de recordar los números
correspondientes de latipos. Le recomendamos que utilice los términos descriptivos "domo y
cuenca", "hongo" y "redoblado". sin embargo defectuoso, en lugar del abstracto Tipo 1, Tipo 2, y
Tipo 3, respectivamente.

Los patrones de interferencia son una función de la relación entre las líneas de charnela y las
superficies axiales de las generaciones de pliegues, así como la superficie seccional en que
vemos los patrones resultantes. Por lo tanto, el análisis de la superposición de pliegues es un
problema tridimensional. Los cuatro tipos que se muestran en la Figura 10.24 son sólo
configuraciones de los miembros finales en un conjunto infinito de posibilidades. La figura 10.25
es un diagrama resumen que muestra patrones de variación de las relaciones espaciales entre
las generaciones del pliegue, así como la observación superficie (o, el afloramiento). Aún más
que antes ,La comprensión de estos patrones requiere de un auto-estudio. Últimamente, los
patrones de interferencia te recompensan con una completa información sobre la secuencia y la
orientación del generaciones de pliegue.
Los patrones de interferencia de pliegues que hemos analizado son producido cuando las
generaciones de pliegues de escala similar son superpuesto. Si las escalas son muy diferentes
allí no puede haber ningún patrón de interferencia visible en el afloramiento y sólo a través del
análisis estructural regional aparece la estructura a gran escala. Después de algún campo
trabajo, no es raro encontrar uno o más generaciones de pliegues adicionales que sólo se
muestran en el mapa escala. Una reexaminación de algunas notas de campo desconcertantes y
los bosquejos de los afloramientos pueden ser explicados de repente reconociendo esta
generación de pliegues desaparecidos. La presencia de múltiples generaciones de pliegues tiene
una gran implicaciones para la interpretación de la deformación historia de su área. Primero,
implica que las condiciones cinematicas han cambiado para producir una generación de pliegues
con una orientación diferente a la anterior (excepto el Tipo 0); por lo que el régimen de
deformación debe tener de alguna manera cambiado. En segundo lugar, los pliegues de la
primera generación tienen orientaciones variables dependiendo de donde se encuentren medido
en el patrón de superposición de pliegues. La orientación, por lo tanto, no es una característica
de las generaciones de pliegues en zonas con múltiples deformaciones y debe utilizarse
cuidadosamente como una herramienta de mapeo (ver abajo). Esto deja un última pregunta:
¿Cómo reconocemos los pliegues de una cierta generación en ausencia de patrones de
interferencia en todas y cada una de las localidades de nuestra zona? Para ello nos dirigimos a el
poderoso concepto de estilo de pliegue.
10.6.3 Estilo de plegado
Cuando nos encontramos con un número de pliegues en nuestra área de campo,surge la
pregunta lógica de su significado. ¿Forman parte de la misma generación o representan varias
generaciones? Digamos que, en una localidad de nuestra zona de estudio, somos realmente
capaces de determinar una secuencia de F 1 y F 2, por lo que sabemos que hay al menos dos
generaciones. Desde nuestra experiencia con la superposición de plegado, también somos
conscientes de que sólo los pliegues F 2 tienen un orientación que puede persistir a cualquier
distancia, y que la orientación de los pliegues de F 1 depende totalmente de suposición en el
patrón de interferencia del pliegue (medimos su orientación, sin embargo, porque la distribución
debería "encajar" en el patrón). Ahora estamos en un afloramiento donde sólo encontramos un
pliegue, que no está en el exacto en la misma orientación que F 1 o F 2 en el afloramiento
anterior. Sin embargo, queremos predecir a qué generación pertenece, y para ello utilizamos
características para cada generación de pliegues que se agrupan bajo el término estilo de
pliegue. Las características de los estilos de plegado se enumeran en Tabla 10.4. Los cuatro
elementos de la Tabla 10.4, paralelos/similares, ángulo interlínea, cilíndricos/no cilíndricos, y
foliaciones/lineamientos, se utilizan para describir el estilo de un pliegue. Los tres primeros han
sido discutidos en detalle y no necesitan más aclaraciones. Las foliaciones y lineamientos
tendrán más sentido después de leer el capítulo 11, pero esto la cuarta característica se incluye
aquí por su capacidad de discriminación. Una hendidura de crenulación en el plano axial puede
ser una característica de F 2 pliegues, y la presencia de una línea mineral puede reflejar
condiciones metamórficas especiales que sólo ocurrieron durante la primera generación de
pliegues. En particular en nuestra lista están ausentes la orientación de los pliegues y la simetría
de los pliegues, que no son criterios de estilo. Discriminación de un pliegue generación en su
orientación sólo puede funcionar para la última generación del pliegue; los más viejos
probablemente se vuelven variados. En segundo lugar, ya aprendió que la simetría de los
pliegues puede cambiar dentro de un de una sola generación, pliegue grande (Figura 10.16). Por
lo tanto,la simetría no es un criterio de estilo.
10.6.4 Algunos puntos filosóficos
Cerramos la sección de plegado superpuesto con unas cuantas consideraciones. A menudo
encontrará que no es posible en un solo afloramiento determinar la totalidad de la secuencia de
generaciones de pliegues, ya que es discriminatoria los patrones de interferencia no pueden ser
expuestos, o una o más generaciones pueden no ser visibles en absoluto. Sin embargo,
combinando la información de varios afloramientos mientras uses el estilo de pliegue
eventualmente debería ser capaz de obtener una secuencia de pliegues razonable. A medida que
se va trazando el mapa, se debe continuar probando esta hipótesis, y después de un trabajo
minucioso la base en la que se basa el plegado la secuencia será firme. Por ejemplo, usted
puede encontrar que la primera generación de pliegues es reclinada, lo que comúnmente
asociamos con el estilo de la siesta, y que la segunda la generación de pliegues es vertical,
reflejando el pliegue de la secuencia de empuje. Puede ser que aún una tercera generación
refleje una dirección de acortamiento muy diferente, posiblemente relacionados con una fase
orogénica diferente. También podemos encontrar pliegues en rocas bien foliadas que completan
la secuencia de deformación. Aunque las posibilidades parecen ilimitadas, las interpretaciones
razonables no lo son. A veces hay una tendencia a reconocer demasiadas generaciones de
pliegues por los geólogos estructurales. En fin, el número de generaciones de plegado debe
basarse en sólo en los patrones de interferencia, ya sea en el ámbito local oescalas regionales.
Prácticamente, en cualquier afloramiento se puede ser capaz de ver dos o tres generaciones, y
regionalmente tal vez un par más. Recuerde que el análisis estructural no se ve facilitado por la
propuesta de una secuencia innecesariamente larga y compleja de generaciones de pliegues,
porque cada generación debe reflejar un régimen de deformación correspondiente. Uno puede
razonablemente esperar sólo un número limitado de patrones tectónicos diferentes. Con estas
reflexiones y un ejemplo de campo de cierre de un Tipo 1 (Figura 10.26), dejamos el patrón de
interferencia de pliegue parte descriptiva de los pliegues y el análisis de campo para convertir
nuestra atención a la mecánica de plegado.
10.8 MODELOS CINEMATICOS DE PLEGADO
La distinción que hicimos anteriormente entre activo y los pliegues pasivos describen el papel
mecánico de las capas bajo un estrés impuesto, pero esto dice poco sobre la funcionamiento
interno de la capa plegada y de la capa asociada patrón de tensión. Para ello, diferenciamos
entre tres modelos fundamentales, el plegado en flexión, el plegado en superficie neutra y el
plegado en cizalla, así como la modificación de los pliegues por tensión superpuesta; cada uno
de estos tienen propiedades y características distintas. Esto se comparan con ejemplos naturales
en la sección final.
10.8.1 Deslizamiento Flexural/Plegado por flujo
Tome una guía telefónica o una baraja de cartas, y doblelo en un pliegue.La capacidad de
producir el pliegue se consigue mediante el deslizamiento de las superficies de las tarjetas
relativas entre sí, sin distorsión apreciable dentro de la superficie de cualquier tarjeta individual
(permanecen del mismo tamaño). Si colocamos pequeños círculos de marcador en la superficie
superior así como en los lados de la pila de tarjetas para su uso como una galga extensométrica,
vemos que la tensión sólo se acumula en superficies que están en ángulo con las tarjetas
individuales (es decir, los lados) cuando doblamos la cubierta. Los círculos se convierten en
elipses en el plano del perfil (Figura 10.32) y en el otro lado de la cubierta plegada paralela a la
línea de charnela. Sin embargo, dentro del plano de cada tarjeta, no hay tensión, como se ve
por el hecho de que los círculos en la carta superior de la baraja quedan círculos. Dobla que la
forma del deslizamiento entre capas se llama deslizamiento por flexión pliegues. La cantidad de
deslizamiento entre las capas aumenta lejos de la zona de la bisagra y alcanza un máximo en el
punto de inflexión. Además, la cantidad de deslizamiento es proporcional a la inclinación de las
extremidades: el deslizamiento aumenta con el incremento inmersión. La analogía del mazo de
cartas destaca tres importantes características de la flexión Primero, en cada punto en el plano
del perfil la relación de deformación y la orientación difieren. En segundo lugar, en tres
dimensiones el estado de deformacióndel pliegue es la deformación plana (X > Y = 1 > Z), con
la orientación del eje de deformación intermedio (Y ) paralela a la línea de bisagra. Tercero, una
consecuencia geométrica del modelo de deslizamiento de flexión es que el pliegue es cilíndrico y
paralelo (Clase 1B); el espesor del lecho en deslizamiento a flexión los pliegues no cambian. Las
consecuencias geométricas del plegado por flexión no es un diagnóstico del modelo, porque
también se producen en otros modelos (véase el plegado de la superficie neutral a
continuación). El patrón de tensión, sin embargo, son los pliegues en forma de chevrón (Figura
10.8) y los pliegues en forma de torcedura (Figura 10.19) son ejemplos de pliegues de
deslizamiento por flexión en rocas naturales que se forman debido a una fuerte capa anisotropía.
Deslizamiento que ocurre en los granos individuales dentro de una capa, sin la presencia de
superficies de deslizamiento visibles, nosotros llaman plegado de flujo flexible.16 A pesar de que
se diferencian en pocos detalles, las consecuencias geométricas y cinemáticas tanto del
deslizamiento como del plegado de flujo flexible son iguales. Una característica de diagnóstico
del plegado de flujo flexible que puedeen el análisis de campo es que cualquier relación angular
original en la superficie de deslizamiento antes del plegado (por ejemplo, flautaen las superficies
de la cama de las turbiditas) mantendrá esta relación angular a través del pliegue, porque no
hay tensión en la parte superior e inferior de la superficie plegada.
Por consiguiente, una línea en ángulo con la línea de bisagra se distribuirá como un cono
alrededor de la línea de bisagra con ese ángulo (un patrón de círculo pequeño en proyección
esférica).
10.8.2 Plegado de la superficie neutra
Cuando doblamos una capa de arcilla o una barra metálica
obtenemos una geometría de pliegue que parece idéntica
a la producida por plegado en flexión, pero con una
tensión claramente diferente patrón. Esto se ilustra
mediante el seguimiento de la distorsión de círculos
dibujados en los lados de la capa indeformada
(Figura 10.33). En las tres superficies encontramos que
los círculos se han convertido en elipses, incluyendo
la parte superior doblada y superficie inferior. En la
superficie superior plegada, el largo del eje de cada elipse
es perpendicular a la línea de bisagra, pero en la parte
inferior el eje largo es paralelo a la línea de charnela. En el
plano del perfil el eje largo es paralelo o perpendicular a las
superficies superior e inferior de la dependiendo de
dónde nos encontremos en ese plano (Figura 10.33). Por
lo tanto, debe haber una superficie en el pliegue donde
no hay tensión. Esta superficie de cero tensión le da al
modelo su nombre, pliegue de superficie neutral.
Intentando imitar este comportamiento con la baraja
de cartas utilizada Tratar de imitar este
comportamiento con la baraja de cartas usada
anteriormente requerirá algo de fuerza muscular,
porquelas cartas en el arco exterior necesitan estirarse
mientras que las que están en el arco interno se
comprime.La forma del pliegue de la superficie neutra
es paralela y cilíndrica, con la tensión de masa
intermedia eje paralelo al eje del pliegue. Estas
características geométricas y las condiciones de
tensión plana también se aplican al plegado de
deslizamiento a flexión, por lo que no son un
diagnóstico para ningun modeloSin embargo, sus
patrones de tensión lo son. Porque la tensión acumula en las superficies plegadas durante el
plegado de las superficies neutras, la orientación de cualquier característica en estas superficies
cambian con la posición en el pliegue. En el exterior un ángulo inicial con la línea de bisagra
aumenta, mientras que en el arco interior este ángulo disminuye. Por lo tanto, el ángulo de
marcas de flauta con la línea de bisagra en la superficie superior de la capa plegada aumenta,
mientras que en la superficie inferior esta el ángulo disminuye. En ambos casos las orientaciones
en cualquier superficie individual no describe ni un cono ni un plano (o círculo pequeño y círculo
grande en proyección esférica, respectivamente). Sólo en la superficie neutra el ángulo sin
cambios y ¿la característica lineal describe un conoalrededor de la línea de bisagra. No es fácil
utilizar este criterio como una herramienta de campo a menos que se midan las líneas de capas
individuales superiores e inferiores en un pliegue. La tensión. Sin embargo, el patrón en el plano
del perfil es más característico y se llama (incómodamente) tensión longitudinal tangencial.
Nótese que la posición de lasuperficie no está restringida al medio del pliegue, ni se produce
necesariamente en la misma posición relativa a través del pliegue. En casos extremos la
superficie neutra puede coinciden con el arco exterior, en cuyo caso el eje largo de cada elipse
de tensión en el plano del perfil es perpendicular a la superficie plegada. ¿Es posible tener la
superficie neutra en el arco interior? Responda a esta pregunta para probarsu comprensión del
plegado de la superficie neutral antes de pasar al tercer y último modelo de plegado.
10.8.3 Plegado de la cizalla
Para representar el plegado de la cizalla, volvemos a recurrir a una cubierta de pero ahora
dibujamos una capa en los lados de las cartas de cubierta. Cuando movemos diferentemente las
cartas relativas a uno al otro producimos un pliegue por un mecanismo llamado plegado de
cizalle (Figura 10.34). La forma del pliegue varía con la cantidad y el sentido del desplazamiento
entre las tarjetas individuales y la capa no tienen ningún significado mecánico; es decir, los
pliegues de cizalla son características pasivas.Mientras que el deslizamiento se produce en
tarjetas individuales, la superficie de deslizamientoy el vector de deslizamiento no son paralelos
a la superficie plegada, como ocurre con el plegado en flexión. Círculos dibujados en la baraja
antes de cortar las cartas muestran que no hay tensión en la superficie de las tarjetas
individuales, pero hay tensión en las otras superficies. El estado general de tensión es tensión
plana, pero la línea de bisagra no es, por definición, perpendicular al vector de desplazamiento,
ni paralela a el eje de deformación intermedio (Y ). En particular, los pliegues que producimos
tienen una forma distinta, porque el rastro de la capa en cada tarjeta permanece igual en
longitud después de cizallamiento. Como consecuencia, producimos pliegues similares. Es cosa
de tiempo que produzcamos esta clase de pliegues, que son comunes en el campo, mientras que
nuestros modelos hasta ahora sólo generaron pliegues paralelos, que no son. Gran parte del
encanto del plegado de cizalla reside en la capacidad de formar pliegues similares, que sólo se
forman por otros dos mecanismos después de una modificación adicional (véase la sección
10.8.4).

En la naturaleza, no hay cartas de juego que se pasen de largo uno al otro. Un corte en el plano
axial pueden actuar como planos de corte, pero las rocas en su mayoría fluyen como un
continuo. Se pueden formar pliegues de cizalla en regiones donde el campo de flujo es
heterogéneo, tales como en los glaciares (véase la geometría de pliegues en la figura 10.1). En
zonas de cizalla, regiones relativamente estrechas con alta cizalla, es común una foliación
miloníticay puede actuar como un plano de cizalla para el plegado de la cizalla. De hecho, Los
pliegues sheath son un ejemplo espectacular del desarrollo de tales pliegues pasivos.
10.8.4 Modificación de la forma del pliegue
El atractivo del plegado cizalla es la formación de similares pliegues (Clase2), mientras que tanto
el plegado en flexión como los pliegues de superficie neutra producen pliegues paralelos (Clase
1B). ¿Qué sucede en los últimos escenarios cuando permitimos modificación de la forma del
pliegue? Los experimentos y los argumentos geométricos ponen un límite al grado de tensión
que se puede acumular al apretar los pliegues en paralelo. Puede que hayas notado esto al
doblar la tarjeta cubierta, donde la región del arco interior experimenta cada vez más problemas
de espacio a medida que se aprieta el pliegue (Figura 10.11a). Material que ocupa la región del
arco interiorpuede ser capaz de acomodar esta crisis de espacio, mucho como lo hace la espuma
en nuestros experimentos de caja. Sin embargo, a medida que el pliegue se aprieta, los últimos
incrementos de tensión afectan cada vez más a toda la estructura de los pliegues (flancos y
charnelas por igual), lo que resulta en una tensión homogénea superpuesta. Este componente
de la tensión tiene un pronunciado efecto en la forma del pliegue. La figura 10.35 muestra el
efecto de la superposición de deformaciones homogéneas (volumen constante,
deformacion simple) con un 20% de acortamiento (X/Z = 1.6) y un 60% de acortamiento(X/Z =
6.3) en la forma y las distribuciones de tensión correspondientes en un pliegue de flexión y un
pliegue de superficie neutral. Usted ve que los pliegues inicialmente paralelos cambian de forma
al adelgazar las extremidades en relación con el área de la bisagra, lo que resulta enuna
geometría que se aproxima a los pliegues similares (Clase 1C). Pliegues perfectamente similares
(Clase 2) sólo se logran en una relación X/Z infinita, lo cual es obviamente poco realista.Como
recordatorio sobre la superposición de tensiones. En el capítulo 4 se aprendió que la tensión es
un tensor de segundo rango, y que los tensores no son conmutativos; es decir, aij ⋅ bij ≠ bij ⋅
aij. Este implica que obtenemos diferentes strain finitas cuando invertir la secuencia de plegado
paralelo y tensión homogénea, o añadir simultáneamente u strain homogénea durante el
plegado. Las implicaciones de estos escenarios se exploran en textos más avanzados, ya
querequieren cálculos de tensores.En todos los modelos no se producen pliegues de clase 3, que
plantean el desafío final. Un escenario probable para la formación de los pliegues de la Clase 3
radica en la interacción entrecapas de diferentes competencias en un sistema multicapa.
Considere una secuencia de capas de pizarra y arenisca (Figura 10.36). A medida que se acorta
la secuencia, el fuerte las capas de arenisca (competentes) forman pliegues de clase 1B a 1C
(como se ha descrito anteriormente). las capas de esquisto más débiles (menos competentes)
que intervienen se acomodan a la forma de la capas de arenisca plegadas cuando están en
contacto zona de deformacion. Esto significa que los pliegues de la clase 3 serán formado en el
esquisto intermedio cuando las capas de arenisca están estrechamente espaciados, y se pliega
de la clase 1C a 2 cuando las capas de arenisca están más separadas.
10.8.5 Un ejemplo natural
¿Qué tan bien se aplica toda esta teoría a la naturaleza? En respuesta a esto, miramos un
ejemplo de un pliegue paralelo en un conglomerado de púas de caliza. Los valores de tensión
que se midieron a partir de guijarros a través de la capa plegada dar una estimación del patrón
de tensión general (Figura 10.37a). Al comparar este patrón con los previsto para el plegado en
flexión (Figura 10.37c) y el plegado en superficie neutra (Figura 10.37d), se ver que el patrón
natural se asemeja más a que predijo el plegado de la superficie neutral.El eje x es paralelo a la
superficie plegada enel arco exterior y perpendicular a esta superficie en el arco interior. Y et la
magnitud de las relaciones de deformación predichas por la superficie neutra El plegado es
demasiado bajo en el patrón natural, por lo que el patrón requiere una modificación adicional
para que coincida con el pliegue natural. Una solución esque se muestra en la Figura 10.37b,
donde el prepliegue la compactación (volumen no constante, acortamiento perpendicular de la
capa) va seguida de un plegado de superficie neutra, durante el cual el material es
preferentemente removido del arco interno.La disolución y el transporte de material durante los
pliegues son bastante comunes en las rocas naturales. Las venas de cuarzo y calcita en las rocas
plegadas son ejemplos de este transporte. Otros naturales pliegues muestran que el plegado a
flexión y el cizallamiento plegado son los mecanismos dominantes, así que todos nuestros
modelos plegables ofrecen aproximaciones razonables de primer orden al funcionamiento interno
de una capa doblada.

El ejemplo de la Figura 10.37 enfatizaque la tensión en los pliegues es muy heterogénea, pero
no obstante podemos estimar el grosor acortando la tensión de la forma del pliegueadaptando la
Ecuación 4.1. La tensión de masa esta dado por:

donde L es la longitud del arco y W es la longitud de onda. Aplicando esto a nuestro ejemplo
obtener un valor para e de aproximadamente -0,35,
o ∼35% de la cepa acortadora de strain.

10.9 UNA POSIBLE SECUENCIA DE EVENTOS


Cerramos el capítulo sobre el plegado con una secuencia interpretativa de eventos en la
formación de un pliegue de una sola capa. Inmediatamente después Inmediatamente después
de la deposición del lecho, la compactación reduce su espesor. Utilizamos un valor intermedio
del 20% de la tensión de acortamiento perpendicular de la capa para este primer componente en
nuestro ejemplo (es decir, Xc/Zc = 1,25), lo que representa una pérdida de área del 20%
(Figura 10.38b); en la naturaleza,
Los esfuerzos compactos van de 0% a 50%. Durantela primera etapa del pandeo, la capa
competente cambia dimensiones por acortamiento de capa-paralelo (lps). Usted Recuerde que el
espesamiento de la capa es más importante a bajarelaciones de viscosidad, así que en nuestro
ejemplo asumimos un 20% acortamiento de capas-paralelas.cortamiento de capas-
paralelas.Acortamiento de capas-paralelas. Este volumen constante, componente de tensión
homogéneo (convenientemente) restaura la elipse de tensión finita a un círculo (Xf/Zf = 1), pero
la correspondiente relación de deformación lps Xlps/Zlps es de 1,25 (Figura 10.38c). El
acortamiento continuo da como resultado la iniciación y crecimiento de un pliegue paralelo por
plegado en flexión, con una longitud de arco característica (L ) en función de el espesor (t) de la
capa y la viscosidad lineal ratio (ηL /ηM ). Podemos estimar la relación de viscosidad del sistema
midiendo la relación L /t y la relación de deformación Xlps/Zlps de la capa. Hasta esta etapa de
abolladura, el esfuerzo ha sido homogéneo, pero después de la iniciación del pliegue del
esfuerzo es heterogéneo, con el esfuerzo coaxial dominando la zona de la bisagra y el esfuerzo
no coaxial dominando en los flancos del pliegue (Figura 10.38d). El grosor de la tensión finita del
sistema está representada por la relación Xb/Zb (es decir, 4). Cuando la resistencia a un
plegado posterior ha sido alcanzado, el acortamiento continuo se logra mediante esfuerzo
homogéneo superpuesta (Figura 10.38e). El resultado final de estas etapas produce un pliegue
similar con un patrón de tensión que varía en función de la grado de tensión compactada, el
pliegue operatorio mecanismo, la relación de viscosidad, y el grado de superpuesta a una
esfuerzo homogénea. El esfuerzo finito De la relación Xf/Zf para nuestra historia es de 11, lo que
corresponde a un total de la capa-paralela tensión de acortamiento del 2%. Se puede variar este
escenario de muchas maneras simplemente cambiando los valores de la relación de deformación
en cada paso, pero también introduciendo la pérdida de volumen durante las etapas de pandeo y
la superposición de un esfuerzo homogénea.
Se puede variar este escenario de muchas maneras simplemente cambiando los valores de la
relación de deformación en cada paso, perotambién introduciendo la pérdida de volumen
durante las etapas depandeo y la superposición de una cepa homogénea. El examen de
escenarios alternativos le dará una buena idea de plegado y distribución de la tensión bajo
diferentes condiciones; modernos programas de imagen paralas computadoras ofrecen una
manera simple de experimentar. Paraejemplo, en las rocas metamórficas hay poco contraste de
competencia entre las capas, y las capas paralelas
El engrosamiento puede ser mucho más importante que en los lechos sedimentarios de bajo
grado. Además, las condiciones de temperatura elevada favorecen la disolución y el transporte
de los granos.de material. Por lo tanto, es particularmente instructivo examinar la historia de un
sistema que experimenta una pérdida de volumen del 50% (Δ = -0,5) durante las etapas de
pandeo y de deformación homogénea superpuesta. Esto representa una condición
geológicamente razonable a la que volveremos en el capítulo sobre tejidos de roca.
10.10 OBSERVACIONES FINALES
Esperemos que no haya perdido de vista la belleza natural de pliegues después de aprender
tanto sobre descripción, terminología y mecánica. Los pliegues son simplemente fascinantes y
cuanto más grande mejor (Figura 10.39). Nosotros los estudiamos para entender las condiciones
y el significado de las rocas y regiones deformadas. Los patrones de plegado son una buena
representación de la orientación del esfuerzo regional y podemos seguir los cambios de tensión
regionales con tiempo a través del análisis de la superposición de pliegues. El plegado
superpuesto presenta un desafío particular que despierta el rompecabezas que hay en nosotros.
Las generaciones de pliegues deben estar basado sólo en patrones de superposición de pliegues,
tal vez ayudado por el estilo de pliegue para la correlación entre los afloramientos.
Como regla de "lengua en la mejilla", el número de generaciones de pliegues debe ser siempre
mucho menor que el de los pliegues que ha encontrado en el campo.Los pliegues son
indicadores de deformacion, pero el contraste mecánico entre las capas vecinas y la matriz
implica que los datos de la deformacion son representativos de las capas no necesariamente de
la roca masiva. Esto no es una limitación paralizante para el análisis regional, ni es el problema
exclusivo de los pliegues; se mantiene para todos los marcadores de deformacion. La
deformacion dentro de un pliegue es marcadamente heterogénea y el patrón local puede ser
muy diferente de condiciones regionales. La relación de los pliegues con el estrés regional es aún
menos sencillo debido ala interacción mecánica entre capas con competencia contrastada. Sin
embargo, en muchas circunstancias, los pliegues también nos pueden informar sobre estos y
otras propiedades reológicas de las rocas.
Aunque la mayor parte de este capítulo se centra en la capa única plegada, el material debería
darle suficiente perspicacia para abordar la literatura sobre sistemas multicapa y otros temas
avanzados sobre el plegado (como material no lineal reologías). Se espera que tengas ganas de
salir a campo y probar algunos de estos conceptos e ideas; de lo contrario, unos cuantos
experimentos adicionales de laboratorio pueden satisfacer su apetito hasta que llegue el verano.
Por último, encontrará que los pliegues se asocian comúnmente con otras telas estructurales,
como foliaciones y lineamientos; estas características son el tema del siguiente capítulo.

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