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7.

6 Limites en el crecimiento de diaclasas

Al discutir las varias maneras en que una diaclasa se inicia, también debemos abordar el problema de por qué las
diaclasas dejan de crecer. La intensidad del stress en la punta(tip) de la grieta depende en el largo de la grieta. Así, la
intensidad del stress aumenta a medida que la grieta crece, y mientras el stress que impulsa el crecimiento de la diaclasa
no cambie, ésta seguirá creciendo. Por esta razón que las diaclasas que crecen a lo largo de cuerpos de rocas
homogéneas pueden ser enormes superficies figura 7.20. Pero las diaclasas claramente no se propagan de una parte del
continente a otra, paran de crecer por una o más de las siguientes razones.

La punta(tip) de la diaclasa puede intersectar una superficie (casi) libre. Éstas paran de crecer cuando alcanzan la
superficie de la tierra. Paran de crecer en la subsuperficie cuando intersectan con una fractura abierta preexistente
(diaclasas o fallas), un débil plano de estratificación o cuando pasan hacia abajo en una roca dúctil. Dos diaclasas que
están creciendo una hacia la otra, pero no son coplanares, paran de crecer cuando entran a la sombra de stress/tensión
de la otra figura 7.21a. En algunos casos, la interacción de las puntas(tips) de las diaclasas provoca curvaturas donde las
dos diaclasas se unen figura 7.21b. Sin embargo, si la diaclasa preexistente se comprime con tanta fuerza que la fricción
permite que se transmita el stress de cizalle a través de ella, o si ha sido sellada por una veta entonces una diaclasa más
joven puede cortarla. La formación de una diaclasa en sí puede provocar una caída local en la presión del fluido, porque
la “creación” de una diaclasa crea espacio para el fluido. Este aumento en el espacio genera temporalmente una caída
en la presión del fluido, de modo que la intensidad del stress en el tip de la diaclasa se vuelve insuficiente para
propagarse en roca non fracturada. Cuando el flujo de fluido en la diaclasa aumenta la presión del fluido a un valor
suficientemente grande, el crecimiento de la diaclasa se reanuda. Así, como se mencionó anteriormente, es
característico que las diaclasas sean impulsadas por altas presiones de fluido para crecer de una manera de inicio-fin,
por lo que sus superficies muestran muchas líneas de detención

Finalmente, si la diaclasa crece en una región donde la energía en el tip de la grieta puede ser disipada por flexibilidad
plástica(¿?), la diaclasa para de creer. Similarmente, la propagación de una diaclasa en una roca con diferente rigidez o
fuerza de tensión puede causar que pare de crecer. También si el tip de la diaclasa entra en una región donde la
intensidad del stress en el tip de la grieta se vuelve demasiado pequeño para impulsar el proceso, la diaclasa deja de
crecer. La disminución en la intensidad del stress puede ser causado por la disminución de la magnitud del stress de
tracción? en la roca, o debido al aumento en el stress compresivo que mantiene unida la diaclasa.
7.6 Vetas y formaciones de vetas

Una veta es una fractura rellena con cristales de minerales que precipitan de una solución acuosa figura 7.1b; tabla 7.2.
Los minerales más comunes que rellenan vetas son el cuarzo y la calcita, pero otros minerales se encuentran en las
vetas, incluyendo minerales de mena, zeolitas y cloritas. Algunas vetas comenzaron como diaclasas, mientras que otras
iniciaron como fallas o como grietas adyacentes a fallas. Las vetas pueden tener variadas dimensiones; algunas son mas
estrechas y cortas como un mechón de pelo, mientras que otras comprenden acumulaciones tabulares(¿?) masivas de
metros de ancho y decenas de metros de largo. Grupos de vetas se llaman conjunto de vetas y pueden tener variadas
formas (tabla 7.2).

7.7.1 Formación de conjunto de vetas

Conjunto sistemáticos planares (¿?) figura 7.22a representan la mineralización de un set de diaclasas sistemáticas
preexistentes o la mineralización durante la formación de un set de diaclasas sistemáticas. Se forman conjunto
(matrices) vetas stockwork figura 7.22b donde la roca se ha roto, ya sea por existencia de una presión de fluidos
localmente muy alta o como resultado de una fractura generalizada en asociación con plegamientos y fallas.

El conjunto (matrices) de vetas en echelon se pueden formar de varias maneras. Una de ellas puede ser rellenando las
diaclasas en echelon en la franja retorcida (twist hackle) de una diaclasa más grande. Como vimos anteriormente, la
franja retorcida (twist hackle) representa la ruptura de una diaclasa en segmentos cortos cuando ésta entra en una
región de la roca con un campo de stress diferente. El conjunto (matrices) de vetas en echelon también se pueden
desarrollar como consecuencia de cizalle dentro de un cuerpo de roca que está asociado con el desplazamiento a través
de una zona de falla figura 7.23. Las fracturas que comprenden un conjunto (matriz) en echelon se inician paralelas a σ1,
típicamente en un ángulo de aproximadamente 45° con respecto a los bordes del cizalle. Las fracturas se abren a medida
que se desarrolla el desplazamiento a través de la zona de cizalle y se llenan con material de veta figura 7.23b. Una vez
formadas, las vetas son objetos materiales dentro de la roca, por lo que el corte continuo rotará las vetas y el ángulo
aumentará. Sin embargo, si se produce un nuevo incremento del crecimiento de la veta en la punta (tip), estos nuevos
incrementos se inician a 45° de las superficies de cizalle. Por lo tanto, las vetas se vuelven de forma sigmoidal figura
7.23c. Localmente, una segunda generación de vetas puede iniciarse en el centro de las vetas originales; el segundo set
corta oblicuamente la primera generación de vetas. Debido a la relación geométrica entre vetas en echelon y
desplazamiento, la orientación de las vetas en echelon relacionadas con el cizalle se puede usar para determinar el
sentido del cizalle.

7.7.2 Relleno de vetas: en bloques y fibrosas

El relleno de vetas, cristales minerales dentro de una veta, puede ser en bloques o fibroso. En las vetas en bloques los
cristales de relleno de la veta son aproximadamente iguales, y puede exhibir caras del cristal figura 7.24a. La apariencia
de vetas en bloques significa que la veta era una cavidad abierta cuando el mineral precipitó (esto es posible solo en
vetas formadas cerca de la superficie, donde la resistencia de la roca es suficiente para permitir que la cavidad
permanezca abierta o la presión del fluido sea lo suficientemente grande como para mantener la fractura abierta), y que
el relleno previamente formado se recristalizaba más tarde para formar cristales en bloque, o que había pocos sitios de
nucleación para que crecieran los cristales durante la formación de la veta.

En las vetas fibrosas, los cristales son largos en relación con su ancho, de modo que la veta tiene la apariencia de estar
extendida por un montón de pelos figura7.24b. Los geólogos no están totalmente de acuerdo con el origen de las vetas
fibrosas, pero algunas vetas fibrosas pueden por el proceso de crack-seal (crack-seal: relleno de vetas por micro
agrietado y posterior cementación). La condición inicial para este proceso es una roca intacta que contiene fluido de
poros que a su vez contiene minerales disueltos. Si la presión del fluido llega a ser lo suficientemente grande, la veta se
agrieta y se desarrolla una apertura muy leve (solo de micras de ancho). Esta grieta se llena inmediatamente de líquido;
pero como la presión del fluido dentro de la grieta abierta es menor que en los poros de la roca circundante, la
solubilidad del material disuelto disminuye y el mineral precipita, sellando así la grieta. El proceso se repite decenas a
cientos de veces, y cada vez el ancho de la veta crece ligeramente figura 7.25. Durante cada incremento de crecimiento,
los granos existentes en la veta actúan como núcleos sobre los cuales crece el nuevo material de la veta, y por lo tanto
crecen cristales continuos. La figura 7.25 muestra evidencia microscópica de este proceso de sellado de grietas en la
formación de una veta fibrosa. Alternativamente, la formación de algunas vetas fibrosas puede ocurrir por un proceso
de difusión, por el cual los iones migran a través de películas fluidas en los límites de los granos y precipitan en las
puntas (tips) de las fibras mientras las paredes de las vetas se separan gradualmente. Durante este proceso, nunca se
desarrolla una grieta abierta a lo largo de las paredes de la veta o en la veta.
7.7.3 Interpretación de vetas fibrosas

Las vetas fibrosas, particularmente las de cuarzo y calcita, son interesantes porque pueden registrar información útil
sobre la historia progresiva del strain en un afloramiento. Hay dos tipos de vetas fibrosas, sintácticas y antiaxiales figura
7.26.

Las vetas sintácticas generalmente se forman en rocas donde el relleno de la veta tiene la misma composición que la
roca (wall rock), por ejemplo vetas de cuarzo en una arenisca cuarcífera. Las fibras de la veta se nuclean en la superficie
de los granos en la roca (wall rock) y crecen hacia adentro para encontrarse en una línea media. Cada incremento
sucesivo de grietas ocurre en la línea media, porque en esta localidad se encuentran fibras separadas, mientras que en
las paredes de la veta, las fibras de la veta y los granos de la roca (wall rock) forman cristales continuos únicos. Cada
incremento de crecimiento de una fibra está limitado por un rastro de inclusión de fluidos.

Las vetas antiaxiales se forman en rocas donde el relleno de la veta es diferente a la composición de la roca (wall rock);
por ejemplo una veta de calcita en una arenisca cuarcífera. En las vetas antiaxiales, los incrementos de agrietamento
ocurren en los límites entre las fibras y la pared de la veta, probablemente porque allí es donde los enlaces son más
débiles. Por lo tanto, las vetas antiaxiales crecen hacia afuera desde el centro. Los incrementos de crecimiento a veces
están limitados por rastros pequeños de escamas desprendidas de la roca de la pared. En muchos casos, el eje largo de
una fibra en una veta fibrosa rastrea la dirección de máxima extensión (estiramiento) en el momento del crecimiento, es
decir, es paralelo al eje largo del elipsoide de deformación incremental (elipsoide de strain). Cuando las fibras son
perpendiculares a las paredes de la veta, la veta progresivamente abierta en una dirección aproximadamente
perpendicular a sus paredes figura 7.27a. Sin embargo, las fibras de la veta oblicuas a las paredes de la veta indican que
la veta se abrió oblicuamente y que hubo un componente de desplazamiento de corte durante la formación de la veta
figura 7.27b. Cuando las fibras de la veta son de forma sigmoidal, la dirección de extensión gira en relación con la
orientación de la pared de la veta. Hay que tener en cuenta que para fibras de aspecto idéntico, el orden de las etapas
de movimiento depende si la veta es antiaxial o sintáctica figura 7.27c-d. Por ejemplo, si las fibras en una veta sintáctica
son perpendiculares a las paredes del centro y oblicuas a las paredes a lo largo de los márgenes, significa que en la etapa
inicial de la formación de la veta, la veta tenía un componente de apertura oblicua, mientras que en una etapa posterior
no lo hizo (recuerde que las fibras crecen hacia el centro). Sin embargo, las fibras con exactamente la misma forma en
una veta antiaxial indicarían el historial de la deformación (strain) opuesta, porque en las venas antiaxiales las fibras
crecen hacia las paredes. La presencia de una línea media lo ayuda a reconocer esta importante diferencia cinemática,
pero la incertidumbre sobre la interpretación puede permanecer.
7.8 Lineamientos

Un lineamiento geológico es una característica lineal reconocida en fotos aéreas, imágenes satelitales o mapas
topográficos. Los lineamientos generalmente se definen solo a escala regional; es decir, no son características
mesoscópicas o microscópicas. Los lineamientos estructurales, es decir, los que son consecuencia de la localización de
características geológicas conocidas, se definen por alineamientos estructuralmente controlados de características
topográficas como crestas, depresiones o escarpes figura 7.28. También pueden manifestarse por cambios en la
vegetación, que a su vez está estructuralmente controlada. La mayoría de los lineamientos son la manifestación
geomorfológica de conjuntos de diaclasas, fallas, pliegues, diques o contactos, pero algunos siguen siendo un misterio y
no parecen estar asociados a estructuras obvias. Debe mantener un escepticismo saludable al leer artículos sobre
lineamientos que no confirman xd las interpretaciones de imágenes con la verdad básica. Algunos “lineamientos” que se
han descrito en la literatura resultan ser artefactos de la interacción de la luz solar con la superficie del suelo y, por lo
tanto, no tienen importancia geológica. Sin embargo, el estudio de lineamientos estructurales verdaderos a menudo
proporciona información sobre la distribución de características estructurales regionales, depósitos de mineral y
sismicidad.

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