El Perú del mañana: En nuestras manos

Ya han pasado 200 años desde que el libertador Don José de San Martin, desde distintas plazas de lima,
proclamase la independencia del `Perú, en los lejanos 1821, un hecho sin precedente, para la historia
del Perú. Sin embargo, esto no hubiese sucedido sin acontecimientos previos. Desde la rebelión de
aquel valeroso curaca cuzqueño Túpac Amaru II que marcó el inicio del proceso independentista, y
claro viéndose renacida tiempo después por la revolución de los hermanos Angulo y Mateo
Punachhua. En fin, muchos actores y sectores manifestaron ideas de libertad, igualdad y derecho a la
independencia. Estoy seguro que gracias a todos ellos y todo lo sucedido somos lo que somos, la
república del Perú.

Durante este tiempo la republica peruana afrontamos diferentes problemas. Como no recordar las
duras batallas disputadas por el guano y el salitre en la guerra del pacifico y claro recordar a los
valerosos personajes icónicos en esta guerra, como Francisco Bolognesi, aquel hombre que lucho hasta
quemar el último cartucho y murió por su patria y nos dejó esta icónica frase “Tengo deberes sagrados
que cumplir y los cumpliré hasta quemar el último cartucho”, o, al caballero de los mares, Miguel
Grau, aquel marino que batallo innumerables confrontaciones en el mar contra el ejército chileno y
murió junto al Huáscar en el combate de Angamos. En fin muchos héroes peruanos que dieron la vida
por su patria y, claro como no nombrar también a las heroínas de nuestro país, como María Parado de
Bellido quien fue heroína y mártir de la independencia de nuestra patria o, Micaela Bastidas
Puyucahua, quien fue precursora, prócer y mártir de la emancipación peruana. Durante la historia han
existido héroes y heroínas que lucharon por el Perú y su gran esfuerzo es reconocido hoy por muchos
de nosotros.

En la actualidad un Perú mucho más desarrollado que alberga más de 32 millones de peruanos, una
de las siete maravillas del mundo, una biodiversidad increíble, una multiculturalidad, un Perú donde
se encuentra una de las mejores gastron0omias del mundo, los mejores paisajes del mundo. En fin el
Perú es el mejor país donde uno pudo nacer, sintámonos orgullosos de ser peruanos.

Todas las maravillas que alberga nuestro país son increíbles. Sin embargo, problemas como la
explotación laboral, la intolerancia, la discriminación, el racismo, la delincuencia, la violencia familiar y
social campean a sus anchas y nos dejan cifras espeluznantes cada mes. Es muy lamentable que un
país tan maravilloso como el nuestro se desmorone día a día por estos problemas.

Sí, es muy lamentable, ¿pero por que lamentarse? Acaso las y los peruanos no podemos cambiar esta
situación. Claro que podemos, los peruanos y perrunas han demostrado la garra que tienen, somos un
país con personas emprendedoras, innovadoras, inteligentes, creativas, perseverantes, luchadoras,
amables, etc. Un país que es cuna de grandes deportistas, artistas, literatos, científicos, políticos, en fin
el Perú está lleno de personas talentosas. Sin embargo, nos dejamos llevar por la inmundicia, rencor,
odio, ambición y demás pensamientos y acciones que dañan al semejante y, es por ello que nuestro país
va en decadencia.

Hoy es momento de abrí nuestros corazones y almas al futuro. El futuro que queremos para nuestros
descendientes. Acaso no queremos que nuestros hijos vivan y se desarrollen en un país con un sistema
educativo competente, donde se pueda acceder a un buen sistema de salud, donde exista igualdad de
oportunidades, donde no se vulneren los derechos de las personas, donde el trabajo de una mujer sea
valorado igual al de un hombre, donde una mujer pueda tener igual salario al de un hombre, donde
exista una libre democracia, donde no exista la discriminación, exclusión, racismo, delincuencia y
donde nosotros y nuestros familiares gocen de una competente seguridad ciudadana. Acaso no es el
país que queremos.
En nosotros está el verdadero cambio. Si no es ahora no era nunca, recordemos que el tiempo está en
nuestra contra, cada minuto que pasa nuestro país sigue decreciendo y desmoronándose cuando
debería ser cada vez más grande, y nosotros sin hacer nada.

Somos nosotros quienes tenemos la responsabilidad de ofrecerles un mejor futuro a nuestros hijos. Por
ello empecemos ahora, no perdamos ni un minuto más y ten encuentra siempre que luchas por el
futuro de tus hijos, por tu futuro, por el futuro de tu familia, amigos, comunidad y sobre todo por el
futuro de tu nación.

Recuerda el futuro está en tus manos.