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 Ponga su mano derecha en la biblia – dice un abogado, obedezco y

continúa: – Levante su mano izquierda, ¿Jura decir la verdad y nada más
que la verdad?
 Lo juro…
Todos en el estrado parecen demasiado nerviosos, miro a todos y todos me
miran, me dan ganas de sonreír al verlo ahí frente a mí, sino fuera por las
boconas envidiosas nada de esto estaría pasando, me muerdo el labio
intencionalmente, el me mira y se reacomoda en su asiento.
 Tome asiento – me ordena el juez, obedezco y sé que comenzaran las
preguntas.
 Señorita Kristen Jinks ¿Sabe porque está usted aquí? – pregunta el Juez.
 Si – mi voz apenas y se escucha.
 Responda en el micrófono – ordena.
 Si – repito cerca del micrófono.
 Abogado – dice el juez, el abogado camina seguro y se dirige hacia mí.
Idiota.
 ¿Cómo conoció al profesor Joseph Bennett? – pregunta un abogado.
 Es mi profesor de asignatura – respondo segura.
 ¿Solo es su profesor? – pregunta, su actitud me da gracia ¿Acaso es
nuevo?
 Si – respondo cerca del micrófono.
 ¡Miente! – grita una de las boconas envidiosas.
 Silencio – ordena el Juez.
 Puede describirnos ¿Cómo lo conoció? – pregunta.
Tomo aire – Bien, lo conocí cuando nos dio asignatura, él se presentó,
nosotros nos presentamos…
 Sea más específica.
  Creo que es usted quien debería ser más específico.
 ¿Qué paso el 18 de Septiembre del 2016? – pregunta frustrado.
 Asistí a mi primera clase de mi tercer año en la universidad, había caras
nuevas, algunas otras conocidas.
 ¿Ahí ya conocía al profesor? – pregunta.
 No, él nos impartía asignatura en la tercera hora, de 12:00 pm a 15:00 pm.
 Antes de ese día nunca se habían visto.
 ¿Es una pregunta? – digo, mi voz es desafiante.
 Si – responde el abogado.
 Pues haga que suene como una pregunta – lo regaña el Juez.
 Perdón su señoría, reitero mi pregunta ¿Antes de ese día nunca se habían
visto? – su voz es serena.
 No – respondo.
 Describa con totalidad lo que paso el día 18 de Septiembre del 2016, de
ser posible sin omitir ningún detalle.
 Bien, ese día entrabamos a clases, nuestro primer día me levante temprano,
desayune y fui directa a la universidad…

 , Zara mi compañera de vivienda no estaba, así que supuse que ya se había

ido, al llegar vi caras nuevas y algunas conocidas – repito y continuo: – Al
llegar entro una maestra, a ella ya la había conocido antes, se llama
Romina, nos da una materia de diseño tridimensional, las dos horas de
clase las pasamos en un laboratorio de computo, Joan un profesor de
matemáticas nos dio una hora de clase, él también era nuevo para mí,
nunca antes lo había visto, había escuchado de él, pero no lo había visto, y
cuando dieron las doce no llego ningún profesor, llego unos quince
minutos más tarde, se presente como nuestro profesor de dibujo técnico,
nos dijo su nombre, espere, antes de las doce fui a comprar un café con
Melanie una de mis compañeras de salón, bueno después de que se
presentara y nos presentáramos nos explicó la

Fleur Delacour