Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
VILLEGAS
Ex profesor titular de Finanzas y Derecho Tributario de la Facultad de Derecho de la Universidad
Nacional de Córdoba (R.A.). Miembro de número de la Academia Nacional de Derecho de Córdoba.
Miembro efectivo de la Academia Brasileña de Derecho Tributario
CURSO DE FINANZAS,
DERECHO FINANCIERO
Y TRIBUTARIO
TOMO ÚNICO
«»
Edición 1975.
3a Edición 1979.
4a Edición 1987.
l"Reimpr. 1990.
^Edición 1992.
PReimpr. 1993.
2aRéimpr. 1994.
3"Reimpr. 1995.
6a Edición 1997.
7a Edición 1999.
EDICiQHisujqpaanaBUENOS AIRES
Talcahuano 494
Hecho el depósito que establece la ley 11.723. Derechos reservados.
Impreso en la Argentina. Printed in Argentina.
vn
NOTA A LA QUINTA EDICIÓN
Esta edición se anuncia como ampliada y actualizada. Quiero fijar el
contenido de estos términos, que no siempre son fáciles de separar.
A veces la ampliación implica actualizar, como
en el tema de la potestad tributaria municipal. En otros casos, el
hecho de actualizar trae la necesidad de ahondar conceptos, como
sucede con la reforma penal tributaria.
Aclarado 'lo anterior, la ampliación abarca una serie de aspectos
antes no tratados, que he creído necesario incluir en el Curso. Tales
los temas relativos a las nuevas teorías sobre el rol del Estqdo a
partir del liberalismo pragmático, los recursos por privatización de
empresas estatales, las consecuencias jurí dicas de la traslación, el
fundamento de la confiscatoriedad por un tributo y por una suma de
ellos, la inconstitucionalidad del impuesto al turismo, la potestad
tributaria municipal a la luz de las nuevas corrientes doctrinarias y
jurisprudenciales, la especial situación tributaria y financiera de la
de la República Argentina, el problema de los
Capital Federal
beneficios promo
cionales ante la emergencia nacional, los anticipos
impositivos, hs intereses resarcitorios, la situación actual del derecho
penal tributario ante la reforma por ley 23.771, análisis de esta
ultima ley en cuanto a sus figuras típicas y aspectos procesales,
nuevas consideraciones sobre el "solve et repete", tratamiento del
Pacto de San José de Costa Rica, ampliación de hs principios de la
La
imposición, y análisis del régimen de ahorro obligatorio.
actualización se debe a que las principales leyes tribu
tarias han sufrido
numerosas modificaciones desde el cierre de la edición anterior. Ello
me ha obligado a poner al día los principales textos legales del país.
Para aclarar el significado y alcance de la actualización, debo
decir que los últimos ordenamientos normativos tomados en cuenta
son la ley 23.770, configurativa de la llamada reforma tributaria
1990; la ley 23.765, introductora de la generalización del TV A; la
ley 23.871, que profundizó la generalización del
VI1J NOTA A LA QUINTA EDICIÓN
tributo últimamente mencionado; la ley 23.905, sancionada y
promulgada el 16 de febrero de 1991; la ley 23.928, llamada "Ley de
Convertibilidad del Austral", sancionada y promulgada el 27 de
marzo de 1991, y la ley 23.966, que incorporó el impuesto al
patrimonio bruto denominado "impuesto sobre los bienes personales
no incorporados al proceso económico" (título VI). Esta ley fue
sancionada el 1/8/91 y promulgada el 15/ 8/91. La fecha de su
publicación en el "Boletín Oficial" fue la del 20/8/91. En
consecuencia, ese día ha marcado el cierre de esta edición para la
imprenta.
Mucho desearía que esta edición no quedase demasiado
rápidamente desactualizada, lo cual será imposible en la medida
en que continúe la actual fiebre modificatoria que perniciosa mente
quita toda estabilidad al sistema tributario argentino.
Lástima grande que toda esta proliferación legislativa no haya
creído necesario hasta ahora incluir el instrumento con que
cuentan prácticamente todos los países de occidente: un Código
Tributario Nacional.
ACLARACIONES NECESARIAS
arbitrario), ni con el orden en que los temas están tratados, pero aun así pienso
inmodestamente que la obra puede prestar utilidad a profesores y alumnos.
Los primeros, teniendo una determinada base de elementos mínimos y
actualizados, podrán desarrollar el curso profundizando aquellos puntos tratados
demasiado superficialmente, eliminando los que se estimen superfluos y
adicionando los aspectos no tratados, pero que se consideran indispensables para
el conocimiento cabal de la materia. Desde su punto de vista, este libro no será
sino un complemento de la enseñanza a impartir.
El alumno, contando con un material donde encuentra expli cados, lo más
sencillamente posible, los temas básicos de la materia, podrá utilizar ese
material como guía de estudios, completándolo con las enseñanzas e
indicaciones que se le impartan en clase.
Teniendo en cuenta la superficialidad lógica de la obra, he incluido, al final
de cada capítulo, la bibliografía que se ha consi derado más esencial y accesible,
sin dejar de tener en cuenta que esos textos remiten, a su vez, a bibliografía más
amplia. He creído prácticamente obligatorio suministrar esos elementos
bibliográficos mediante cuya utilización puede ahondarse el estudio de los pro
blemas considerados, habiendo incluido tanto obras tradicionales como artículos
de revistas especializadas, que son de suma utilidad especialmente para la
actualización de temas.
En este último aspecto, deseo poner de manifiesto la enorme dificultad que
significa escribir algo de carácter general que sea realmente actualizado. La
movilidad constante de la legislación financiera, y especialmente tributaria,
obliga a correr una verdadera carrera contra el tiempo, casi imposible de ganar.
De todas maneras, se ha intentado que la legislación incluida sea, dentro de lo
posible, la vigente en el momento en que esta obra haga su aparición. Si ello no
se logra queda un doble consuelo. Primero, que la legisla ción contenida pueda
prestar utilidad como antecedente inmediato de las innovaciones, y segundo, que
este mismo problema no ha impedido a los grandes tratadistas argentinos de la
materia (Giuliani Fonrouge, Jarach, Ahumada, de Juano) aportar sus estupendas
realizaciones.
Quiero, por último, aclarar que en los temas controvertidos se ha tratado de
plantear con la mayor objetividad posible, las diversas posiciones sustentadas,
aunque sin excluir lo que creo un deber
ACLAMACIONES NECESARIAS XI
inexcusable: hacerse responsable de una opinión propia sobre los problemas en
que existe divergencia de doctrina.
Pero tales juicios propios son necesariamente provisionales. Si nadie puede
calificar sus obras de definitivas, menos aún puede hacerlo quien ha escrito con
la intención que yo lo he hecho. En tal sentido, todas las opiniones aquí vertidas
deben considerarse sujetas a la maduración que sólo puede lograrse mediante la
ade
cuada profundización de estudios, el análisis más meditado de los problemas, la
experiencia, y la crítica tanto de quienes son sus desti natarios, como de aquellos
que tras largos años de estudios han llegado a una sólida posición doctrinal.
HÉCTOR B. VILLEGAS.
xm
PALABRAS PRELIMINARES
A LA SEGUNDA EDICIÓN
HÉCTOR B. VILLEGAS.
XV
NOTA A LA TERCERA EDICIÓN
La generosa acogida que tuvieron las dos ediciones anteriores, obligó a que se
realizaran varias reimpresiones inalteradas de ellas. Sin embargo, diversas
circunstancias han hecho necesaria esta nueva edición. Entre ellas, las profundas
modificaciones producidas
a partir de 1976 en las leyes reguladoras de los impuestos en par ticular, la
importante reforma a la mal llamada "ley de procedimien to fiscal" 11.683, por
ley 21.858, publicada en el "Boletín Oficial" el 23 de agosto de 1978, las
trascendentales variantes producidas en la jurisprudencia de la Corte Suprema
de la Nación y algunos apor tes de relevancia en el plano doctrinal. A esto se
sumó un más meditado estudio de las cuestiones por el autor y la inevitable
evolución de su pensamiento.
He puesto especial énfasis en el aspecto jurisprudencial, inclu yendo o
ampliando el tratamiento de los criterios con que los tribu nales (especialmente
la Corte Suprema) han encarado y resuelto los arduos problemas que plantea
nuestra compleja legislación tributaria.
Para realizar esa tarea he^ tenido en cuenta que como decía el gran maestro
Couture, la obra de los jueces es, en el despliegue jerárquico de preceptos
jurídicos, un grado avanzado de la obra de la ley, porque así como el derecho
instituido en la Constitución se desenvuelve jerárquicamente en las leyes, el
derecho reconocido en las leyes se hace efectivo en las sentencias judiciales.
HÉCTOR B. VnXBGAS.
XVII
PRÓLOGO A LA CUARTA EDICIÓN
HÉCTOR B. VILLEGAS.
XIX
ÍNDIC E
CAPÍTULO I
CAPÍTULO n
1. Concepto e importancias 31 IA. Principales aspectos del gasto público que estudia la
cien cia financiera 33
XX ÍNDIC E
IB. Evolución del concepto 53 1C Características esenciales 34 2. Reparto
36 3. Finalidades " 38 4. Límites del gasto público 38 5. Efectos
económicos 39 6. Comparación de los gastos públicos con los privados 40 7.
Clasificación de los gastos 41 8. Crecimiento de los gastos públicos. Causas
y teorías 44 9. El gasto público en el derecho positivo argentino 46
Bibliografía del capítulo II 47
CAPÍTULO m
CAPÍTULO IV
CAPÍTULO V
CAPÍTULO VI
1. Derecho financiero. Noción '. 119 1A. La actividad financiera como actividad
jurídica 119 IB. Campo de acción 121 1C. Definiciones doctrinales y origen 121
2. Carácter y contenido 122 3. Autonomía 123 4. Fuentes del derecho financiero 129 5.
Derecho tributario. Noción 133 6. Posiciones sobre la autonomía del derecho tributario
135 7. La unidad del sistema jurídico nacional 136
7.1. Los objetivos del legislador 137 7.2. El derecho civil como derecho común 138
7.3. El derecho, común como derecho privado 138 7.4. Las ramas del derecho 138
7.5. El derecho civil y los principios del derecho 139
XXII ÍNDIC E
8. El derecho tributario y el derecho común 140 8.1. La legitimidad de los
apartamientos 140 8.2. Igual jerarquía de las normas alterantes (El caso del
dere
cho tributario provincial) 141 8.3. Sometimiento de las normas alterantes. a las
garantías constitucionales 144 9. La autonomía del derecho tributario 144 10.
El verdadero problema que encierra la autonomía del derecho tributario 146
10.1. Solución legislativa del problema 146 10.2. El fin de las normas tributarias
147 10.3. La significación económica 148 10.4. El espíritu de la ley tributaria
149 11. El orden jurídico como unidad 151 12. El derecho tributario y los
conceptos e instituciones de derecho privado 152 13. Los caracteres específicos
y comunes del derecho tributario... 153 14. Consecuencias prácticas 158 15.
Codificación 160 16. División del derecho tributario 162 Bibliografía del
capítulo VI 164
CAPtruLO VII
INTERPRETACIÓN Y APLICACIÓN DE LA LEY TRIBUTARIA
1. Interpretación. Noción general 167 2. Método literal 168 3. Método lógico
168 4. Método histórico 169 5. Método evolutivo 169 6. Interpretación según
la realidad económica 170 7. Modalidades de interpretación 174 8. La
analogía 175 9. Aplicación de la ley tributaria en el tiempo. La retroactívidad
fiscal 176 10. Aplicación de la ley tributaria en el espacio 181 Bibliografía
del capítulo VII 181
CAPÍTULO Vm
CAPÍTULO X
CAPÍTULO XI
1. Noción 373 3.. Teorías sobre la ubicación científica 373 2.1. Los problemas
de las nuevas ramas del derecho 374
3. Naturaleza jurídica de la infracción fiscal (delito o contraven ción 377 4. El
derecho penal tributario ante la ley penal 23.771 379 5. Clasificación de las
infracciones fiscales 381 6. La evasión fiscal o tributaria desde el punto de vista
concep tual 382 6A. La llamada evasión legal del tributo .." 383 6B. La
ilegalidad de la llamada elusión tributaria 386 7. Incumplimiento omisivo de la
obligación tributaria sustancial.. 388 8. Incumplimiento fraudulento de la
obligación tributaria sustan cial (defraudación fiscal) 389 9. Incumplimiento de
la obligación tributaria formal 389 10. La sanción tributaria 390 10A. La multa
390 10A1. Personalidad de la multa 391 10A2. Aplicación de multa a las
personas colectivas 391 10AS. Trasmisión hereditaria de la multa 392 10A4.
Multa a terceros 392 10A5. Convertibilidad de la multa tributaria 393 11.
Derecho penal tributario contravencional. Infracciones en la ley 11.683 393
HA. Incumplimiento de deberes formales 394 11B. Omisión fiscal (art 45) 396
11C. Defraudación fiscal (arts. 46 y ss.) 397 11C1. Defraudación fiscal genérica
397 11C2. Contravención de los agentes de retención y per cepción 398
ÍNDIC E XXVII
12. Derecho penal tributario delictual. Ley 23.771 399 13. Figuras atinentes al
régimen impositivo. Alteración de la reali dad económica (art 1) 400 44. Evasión
de tributos y aprovechamiento de beneficios fiscales (art. 2) 403 14A. Hecho
punible 403 14B. Sujetos activos 404 14C. El concepto delictual de evasión 404
14D. Elemento subjetivo 405 14E. Elemento objetivo 405 14F. Condiciones
objetivas de punibilidad 406 14G. Aplicabilidad conjunta con la defraudación
fiscal de la ley 11.683. Principio non bis in idem 407 15. Procuración
fraudulenta de beneficios fiscales provenientes de regímenes de inversión y
promoción (art 4) 408 16. Omisión de inscribirse tributariamente o de presentar
declara ciones juradas (art 5) 409 17. Insolvencia patrimonial provocada (art 9)
412 18. SobTefacturaáones o subfacturariones (art 10) 414 19. Figuras atinentes
al régimen previsional. Evasión de aportes y contribuciones (art 3) 415 20.
Omisión de inscripción previsional (art 7, primera parte) ... . 416 21. Figuras
atinentes a los agentes de retención y percepción. Omi sión de actuar en materia
tributaria (art 6) y previsional (art 7, segunda parte) 416 22. Defraudación de
y previsionales (art 8)
agentes de retención y percepción, tributarios v 418 23.
Otros aspectos relativos a la ley penal tributaria 23.771. Ámbito de aplicación en
materia delictual y contravencional 420 24. Casos especiales de penalización
423 Bibliografía del capítulo XI 424
CAPÍTULO XII
SISTEMA TRIBUTARIO
1. Noción 513 1A. Limitación espacial 513 IB. Limitación temporal 514 1C.
Importancia del estudio 514
2. Régimen y sistema tributario 514 3. Sistemas tributarios racionales e
históricos 515 SA. Sistema de impuesto único y de impuestos múltiples 516 4.
Sistema tributario y evolución histórica • • 517 5. El sistema tributario
argentino 520 6. Problemas y principios de un sistema tributario 521 6A.
Elección de la fuente económica tributaria 521 6B. Los principios de la
imposición 522 6C. Requisitos de un sistema tributario racional 523 6D. Los
principios de certeza y simplicidad 524 7. Presión tributaria 526 7A. índice de
medición 527 7B. El problema de la inclusión del gasto público 528 8.
Límites de la imposición 529 Bibliografía del capítulo XIV 529
XXX ÍNDIC E
CAPÍTULO XV
IMPUESTO A LA RENTA
(IMPUESTO A LAS GANANCIAS)
1. Distinción entre capital y renta. Diversas teorías 538 2. Ventajas e inconvenientes del
impuesto a la renta 535 3. Formas del impuesto a la renta 538 4. Vinculación con los
problemas del desarrollo económico 539 5. Antecedentes extranjeros 540 6. El
impuesto a las ganancias en la Argentina. Antecedentes na
cionales 541 6A. Características del impuesto a las ganancias 542 7. Hecho imponible
543 7A. Atribución de la ganancia 546
7B. Tratamiento de las ñliales nacionales de empresas extran jeras 548 8. Sujeto pasivo
550 9. Categorías 550 10. Sociedades de capital 554 11. Deducciones 556 12.
Deducciones personales 557 13. Período de imposición 560 14. Alícuotas 560 15.
Exenciones y beneficios 560 16. Determinación y pago 561 17. Retención en la ftiente
562 18. Ajuste por inflación 563 Bibliografía del capítulo XV 565
CAPÍTULO XVI
CAPÍTULO XVLI
IMPUESTO AL MAYOR VALOR
(IMPUESTO SOBRE LOS BENEFICIOS EVENTUALES)
Cwtruuo XIX
IMPUESTO AL PATRIMONIO
(IMPUESTO SOBRE LOS CAPITALES, IMPUESTO SOBRE EL
PATRIMONIO NETO, IMPUESTO SOBRE LOS ACTIVOS,
IMPUESTO SOBRE LOS BIENES PERSONALES NO
INCORPORADOS AL PROCESO ECONÓMICO)
1. Noción general del impuesto al patrimonio 589 2. Antecedentes 590 3.
Estructura del impuesto 591 4. Valoración critica 592 5. El impuesto al
patrimonio en la Argentina. Antecedentes 594 6. Estructura y
características 597 7. Impuesto sobre los capitales. Hecho imponible 598
8. Sujetos pasivos 599 9. Exenciones 599
10. Capital gravado 600 11. Deudas de los socios o dueños (nacionales o
extranjeros) con sus empresas 600 12. Agrupación del activo computable y
no computable 601 13. Pasivo computable 601 14. Deducciones 601 15.
Base imponible, alícuota e impuesto mínimo 602 16. Supresión de la
información a suministrar por las sociedades y empresas 602 17. Impuesto
sobre el patrimonio neto. Hecho imponible 602 18. Sujetos pasivos 603 19.
Sociedad conyugal 603 20. Exenciones 603 21. Concepto de patrimonio neto
604 22. Activo 604 23. Valuación de bienes computable» 605 24. Bienes no
conmutables 605 25. Pasivo , 605 26. Prorrateo de las deudas 605 27.
Deducciones 606 28. Mínimo no imponible y alícuota 606 29. Pagadores de
impuesto del exterior 606 30. Actualización de valores. Suspensión de cobro
608 31. Impuesto sobre los activos. Caracterización del impuesto 608 32.
Hecho imponible 608 33. Sujetos pasivos — 609 33.1. Responsables
sustitutos 609 34. Exenciones 609
ÍNDIC E XXXIII
35. Base imponible 610 36. Alícuota 612 37. El impuesto a las ganancias como
pago a cuenta del impuesto
sobre los activos 612 38. Apreciación crítica del gravamen 613 39.
Impuesto sobre los bienes personales no incorporados al proce
so económico (impuesto sobre el patrimonio bruto) 614 Bibliografía del
capítulo XIX 617
CAPÍTULO XX
IMPUESTO AL ENRIQUECIMIENTO PATRIMONIAL A TÍTULO
GRATUITO
1. Impuesto sucesorio. Antecedentes 619 2. Fundamento y naturaleza 620 2A.
Proyectos limitativos 622 3. Derogación del impuesto en la Argentina 623
Bibliografía del capítulo XX 624
CAPÍTULO XXI
IMPUESTO INMOBILIARIO
1. Evolución y fundamento 625 2. Formas de imposición 626 3. Principales
características del impuesto en la Argentina 627 4. Hecho imponible 628 5.
Sujeto pasivo 628 6. Base imponible y alícuota 629 7. Exenciones 629 8.
Recargos o adicionales 629
8A. Baldíos 629 8B. Latifundios , 630 8C. Ausentismo 630
9. Catastro. Orígenes y operaciones 630 10. Pago 631 Bibliografía del
capítulo XXI 631
XXXIV ÍNDIC E
CAPÍTULO XXH
IMPUESTO A LA RENTA NORMAL POTENCIAL DE LA
TIERRA. IMPUESTO A LA PRODUCCIÓN AGROPECUARIA
XXXV
CAPÍTULO XXIV
CAPITULO XXV
IMPUESTO AL EJERCICIO DÉ ACTIVIDADES CON FINES
DE LUCRO (IMPUESTO A LOS INGRESOS BRUTOS)
CAPÍTULO XXVI
IMPUESTOS ADUANEROS
CAPÍTULO XXVII
IMPUESTOS INTERNOS
1. Concepto de impuestos internos 721 2. Antecedentes históricos 721 2A.
Artículos gravados 722 2B. Sistemas de recaudación 722 3. Tendencia
moderna 723
4. Los impuestos internos en la Argentina. Cuestiones constitu cionales 723 5.
Características del impuesto en la legislación vigente 725 6. Hecho imponible
726 7. Sujetos pasivos 728 8. Exenciones 728 9. Base imponible 729 10.
Privilegios 731 11. Determinación y pago 732 12. Leyes de unificación 732
13. El impuesto al gasto. Noción general 733 Bibliografía del capítulo XXVH
735
CAPÍTULO XXVm
CAPÍTULO XXIX
IMPUESTOS RECAUDADOS POR EL SISTEMA DE PERCEPCIÓN
EN LA FUENTE
1. Noción 741 2. Impuesto sobre las ventas, compras, cambio o permuta de di-
XXXVIII ÍNDIC E
CAPÍTULO XXX
CAPÍTULO XXXI
EL CRÉDITO PÚBLICO
1. Noción general 759 2. Evolución histórica 759 3. Nuevas concepciones
sobre el crédito público 760 4. Evaluación critica de las nuevas concepciones
762 5. Límites 763
5A. Conclusiones sobre el crédito público y sus límites 764 6. Clasificación de
la deuda pública 765 6A. Deuda interna y externa 766 6B. Deuda
administrativa y financiera 767 6C. Deuda flotante y consolidada 767 6D.
Deuda perpetua y redimible 768 7. El empréstito. Noción 768
ÍNDIC E XXXIX
CAPÍTULO XXXH
EL PRESUPUESTO
,1. Noción general 789 2. Origen y evolución 789 3. Naturaleza jurídica 790
4. Principios de derecho presupuestario. Unidad 792 5. Universalidad 793 6.
Especialidad 793 7. No afectación de recursos 794 8. Modernas concepciones
presupuestarias. Presupuestos múltiples,
funcionales y por programa 794 9. Equilibrio del presupuesto. Déficit y
superávit 797 9A. Visión retrospectiva 797 10. Concepciones clásicas y
modernas 798 11. Equilibrio económico. Presupuesto económico o nacional
800 12. Dinámica del presupuesto. Preparación 801 13. Sanción y
promulgación 802 14. Duración del presupuesto 803 1'5. Cierre del ejercicio.
Sistemas 803 16. Ejecución del presupuesto 804 16A. Ejecución en materia de
gastos. Etapas 804 16B. Ejecución en materia de recursos 806 17. Control del
presupuesto. Sistemas 806
XL ÍNDICE
18. Control presupuestario en la Argentina 807 18A. Control administrativo interno 807
18B. Control administrativo externo. Tribunal de Cuentas ... . 807 18C. Control
jurisdiccional 808 18D. Control parlamentario 809 Bibliografía del capítulo XXXII 810
CAPÍTULO XXXIII
POLÍTICA FINANCIERA Y POLÍTICA
FISCAL O TRIBUTARIA
£ fcd
• Por razones metodológicas, la bibliografía de los respectivos capítulos
sido agrupada al final de ellos. En el texto se hace sólo referencias abre
viadas a
dicha bibliografía, con el exclusivo objeto de indicar el lugar preciso (tomo y
página) del cual se han extraído las citas, alusiones y trascripciones.
2
justicia, mientras que en los otros órdenes debía limitarse a disci' plinar la
iniciativa privada cuando lo requiriera el carácter especial de ciertas actividades.
B) Nuevas teorías sobre el rol del Estado. El liberalismo pragmático.— No
obstante, surgieron una serie de fenómenos económicos y sociales (principalmente
las crisis cíclicas y la desocupación) que debilitaron en los hechos los esquemas
individualistas clásicos y requirieron de una mayor actuación del ente público para
apuntalar la economía nacional y obrar como factor de equilibrio. Se pasó de la
neutralidad estatal al intervencionismo del Estado moderno.
. Estas ideas intervencionistas hicieron irrupción en el mundo occidental a
partir de la segunda guerra mundial, y la actuación estatal se extendió cada vez
más, tanto cuantitativamente como cualitativamente.
Durante aproximadamente 40 años, prácticamente todos los gobiernos
occidentales (aun guiados por partidos de distinto signo) compartieron una
ideología más o menos similar, inspirada en una misma teoría, el
keynesianismo, que pretendió justificar de manera científica las intervenciones
del Estado como garantía de empleo y crecimiento. El ideal común era atractivo
porque intentaba armonizar la prosperidad económica con la justicia social, y
los medios para lograrlo eran la centralización estatal, con el acaparamiento de
las más diversas actividades, la fiscalidad progresiva y la redistribución social.
Tampoco por ese camino fue alcanzado el ideal, y después de ciertos
períodos de bonanza volvieron a acentuarse las crisis, el subdesarrollo y
principalmente el cáncer de la inflación, que todo lo pervierte y desestabiliza.
Pero el principal fracaso fue el de constatar que el proceso de redistribución sin
la creación previa de una economía sólida se constituía decididamente en factor
de retroceso, y que cada vez había menos riqueza para distribuir. De allí la
decadencia y quiebra del Estado providencia.
Se operó entonces el retorno a las ideas liberales, aunque aggiornadas y
pragmatizadas, mediante el reconocimiento de que es necesario un cierto grado
de intervencionismo estatal y la debida satisfacción de algunas necesidades
públicas relativas, principalmente educación y salud.
Esta nueva concepción de "liberalismo pragmático" se inició en 1979,
cuando los conservadores accedieron al poder en Gran Bretaña; continuó en
1980 en los Estados Unidos, en 1982 en Alemania, en Bélgica y en
Luxemburgo. En Francia, en 1983, con un gobierno
CÜENCU DE 1A3 FINANZAS Y ACTIVIDAD F04ANC3BXA 7
en manos de los socialistas, se produjo un giro hacia una especie de liberalismo
de izquierda, y algo similar ocurrió en España. El proceso llegó incluso a los
países socialistas, y surgió la ! "perestroika" de la era Gorbachov, así como el
paulatino abandono de la teoría comunista por los países de Europa del Este. A
su vez, los países latinoamericanos, agobiados por el subde Jiarrollo y por
siderales deudas externas, iniciaron un severo camino de políticas sobre la base
de las ideas del nuevo liberalismo. Básicamente estas ideas son las siguientes:
1) Economía de mercado, aunque con intervención del Estado en ciertas
variables económicas, preferentemente indicativa. 2) Desestabilización:
disminución del sector público, intentando ' evitar que se convierta en una carga
presupuestaría insostenible para el Estado, y con el propósito adicional de una
prestación más eficiente de los servicios públicos. Un ejemplo de esto está dado
por la privatización de las empresas públicas.
3) Incentivo a la iniciativa individual en cierta manera es con secuencia
de lo anterior, ya que se trasfiere a los particulares la satisfacción de
necesidades públicas relativas que éstos están en mejores condiciones de
satisfacer. Consiguientemente se atrae a los
capitales nacionales y extranjeros, y se les proporciona nuevas oportunidades
de inversión.
4) Reducción del déficit presupuestario, lo cual implica la reducción del
gasto público en todos sus órdenes y una mayor eficiencia en la recaudación.
Las nuevas teorías no renuncian a una cierta intervención estatal, basada
principalmente en la persuasión y en el estímulo, mediante una acción que
impulse a los individuos a reactivar la economía general persiguiendo sus
propios intereses.
Tampoco se renuncia a la idea de solidaridad, y se piensa que el ideal es
conciliar el interés general de la Nación con el particular de los individuos
aislados.
ACTIVIDAD FINANCIERA 19
mencionados (jurídicos, sociales, administrativos), no podemos sino adherirnos
a la segunda posición.
Es cierto que esencialmente la ciencia de las finanzas es ciencia de medios.
Tampoco puede negarse que dichos medios son de natu raleza económica: los
gastos públicos se efectúan para satisfacer necesidades de la colectividad con
medios escasos en relación a esas necesidades, y que en consecuencia son
económicos, por cuanto su obtención requiere un esfuerzo o actividad (ver
Raymond Barre, Economía..., t. I, ps. 29 y ss.).
Pero tanto la obtención de medios como su empleo (recursos y gastos
públicos) derivan de elecciones valorativas que realiza el Estado, y tales
valoraciones, que tienen en mira una determinada finalidad a obtener, son
necesariamente políticas.
Por otra parte, si la elección de medios supone valoración de fines, es
necesario que el estudioso de las finanzas haga sus propias valoraciones sobre
los fines que se pretende conseguir y sobre la idoneidad de los medios a
emplearse para lograr esos fines. Tanto economistas como financistas no pueden
convertirse en investiga
dores de esquemas, instrumentos o conceptos ajenos a la variable realidad
circundante. Como decía Einaudi, sería absurdo pedir al economista que viva en
"la torre de marfil" de la ciencia pura.
Es indudable, entonces, que aparte de los otros elementos men cionados,
dentro de la concepción de la ciencia de las finanzas se hallan especialmente
comprendidos estos dos grandes aspectos: el económico y el político.
El brillante profesor italiano Mario Pugliese (Corso..., ps. 5 y ss.) explica
con claridad la naturaleza tanto política como econó mica de la actividad
financiera. Afirma que la naturaleza política de los fines estatales confiere
necesariamente naturaleza política a los procedimientos adoptados para
conseguirlos, ya que aun cuando, como es bien posible, el ente público se atenga
en el desenvolvi miento de su actividad financiera al principio de la mutua conve
niencia económica, su decisión no es fruto de un cálculo económico puro, sino
simplemente de un cálculo político que no deja de ser tal si el Estado, en el caso
concreto, utiliza criterios económicos, dado que no encuentra razones políticas
para adoptar un criterio diverso. De esta tesis, tan correctamente sostenida, se
desprende que en defi nitiva el fenómeno financiero es el resultado de aplicar el
criterio político a una realidad económica determinada (conf. Sáinz de Bujanda,
Hacienda..., t. I, p. 22).
20
11. EL PODER FINANCT^J líl poder de imperio en cuya vir tud se ejerce
la actividad *lrKl 'lera puede denominarse "poder fi nanciero". Su mayor
y más*^ ca manifestación se encuentra en la autoridad que tiene el
Estado para exigir contribuciones coactivas a los particulares que se
hallan bajo su jurisdicción (potestad tribu taria), pero ésa no es su única
manifestación.
En efecto, cuando el Estado planifica su actuación financiera
decidiendo qué gastos van a efectuarse, cómo se repartirán en el espacio
y en el tiempo, mediante cuáles fuentes se lograrán ingresos, qué
medidas financieras son por sí mismas capaces de producir
28
AHUMADA, Guillermo: Tratado de finanzas pút/licas, Ed. Plus Ultra, Buenos Ai res,
1969.
BARRE, Raymond: Economía política, Ed. Ariel, Barcelona, 1958 (dos tomos).
BEBUM, Antonio: Principios de derecho tributario, Madrid, 1964. BELSA, Rafael:
Derecho fiscal, Ed. Depalma, Buenos Aires, 1951. CASADO HIDALGO, Luis: Temas
de hacienda pública, Caracas, 1978. GOSOANI, Cesare: Principios de ciencia de la
hacienda, Madrid, 1960. DALTON, Hugh: Principios de finanzas públicas, Buenos
Aires, 1948. DB JTXANO, Manuel: Curso de finanzas y derecho tributario, Rosario,
1963. D B Vrn DE MARCO, Antonio: Principios fundamentales de economía financiera,
Madrid, 1934.
DOVEHCER, Maurice: Hacienda pública, Ed. Bosch, Barcelona, 1968.
— Instituciones financieras, Barcelona, 1960.
EHEBERC - BOESLEH: Principios de hacienda, Barcelona, 1944. ETNAUDI, Luigi:
Principios de hacienda pública, Ed. Aguilar, Madrid, 1968. FASIANI, Mauro:
Principios de la ciencia de la hacienda, Ed. Aguilar, Madrid, 1962.
FLORES ZAVALA, Ernesto: Elementos de finanzas públicas mexicanas, Ed. Ponúa,
Méjico, 1970.
FRANCO, Gabriel: Principios de hacienda pública, Madrid, 1967. GANGEMI, Lello:
Tratado de hacienda pública, Madrid, 1961. GARCÍA BELSUNCE, Horacio: Política
fiscal para un plan de estabilización y des arrollo económico, Ed. Abeledo-Perrot,
Buenos Aires, 1959.
— Estudios financieros, Buenos Aires, 1966.
GERLOFF, W.: Fundamentos de la ciencia financiera, en Tratado de finanzas de
GERLOFF-NEUMARK, t. I, ps. 1 y ss., Ed. El Ateneo, Buenos Aires, 1961.
GIANNINI, A. D.: Elementi di diritto finanziario, Milán, 1945. — Instituciones de
derecho tribtttario, Madrid, 1957.
GruoANí FONROUGE, Carlos M.: Derecho financiero, 2* ed., Ed. Depalma, Bue nos
Aires, 1970.
GWZIOTTI, Benvenuto: Principios de ciencia de las finanzas, Ed. Depalma, Bue nos
Aires, 1959.
GROVES, Harold: Finanzas públicas, Ed. Villas, México, 1965.
HKXS, Úrsula: Hacienda pública, Ed. Aguilar, Madrid.
INGROSSO, Giovanni: Corso di finanza pubblica, Ñapóles, 1969. ITORRIOZ, Eulogio:
Curso de finanzas públicas, Ed. Macchi, Buenos Aires, 1981. JARACH, Diño: El
hecho imponible, 1* ed., Buenos Aires, 1943.
— La teoría financiera de Benvenuto GriziotH, ensayo incluido como prólogo en la
obra de GREIOTTI, Principios de ciencia de las finanzas, cit. — Finanzas públicas y
derecho tributario, Ed. Cangallo, Buenos Aires, 1983.
30
PÚBUCOS
33
^impendiente del recurso público. 4) El g.p. es indicativo de la acti- ^^fáftd,
estado social y tendencias de los países. 5) La cuantía del ~-$É9' Y s u ^a^uenc^tl
sobre la economía general tornan imprescindible $£t consideración por las
finanzas públicas. 6) Es imposible conside
fer el fenómeno del recurso público sin tener en cuenta lo que el Estado restituye
a la colectividad mediante el g.p. 7) Prescindir >éA g.p- significa excluir la
indagación de aspectos esenciales, como «l antecedente y el resultado de la
actividad financiera.
35
apara entidades descentralizadas estatales, siempre que tales eroga- ¿¿nes,
en una u otra forma, "incidan sobre las finanzas del Estado" ÍDUai.
Giuliani Fonrouge, Derecho..., t. 1, p. 194) y deban ser solventadas
mediante la recurrencia a sus ingresos.
... Así, por ejemplo, en la Argentina existen gastos relativos a las
empresas estatales nacionales cuya cobertura corresponde al Estado
Bgcional (instalación, ampliación, déficit de explotación; art. 4, igy de
contabilidad). Esos gastos, que quedan a cargo del Estado y que se
incluyen en su presupuesto financiero, son gastos públicos con
prescindencia de la personería jurídica de tales empresas. Ésta es la
posición sostenida por el Dr. Roberto Alemann y consideramos que es la
más correcta en la materia, porque, como sostiene dicho tratadista, la
inclusión de las inversiones patrimoniales efectuadas para tales empresas
permite conocer en forma efectiva cuánto se invierte en tal concepto, con
lo cual "el pueblo estará informado acer ca del esfuerzo que se le pide"
(autor cit, Reflexiones sobre él gasto publico, Bs. As., 1971, p. 16).
En definitiva, comprendemos todos los gastos del Estado, toman do
a éste en el sentido lato que le asignamos al caracterizarlo como sujeto
de la actividad financiera (supra, cap. I, punto 4) e inclu yendo la
totalidad de las sumas que salen de su tesorería.
C) En virtud de ley. — En los Estados de derecho rige el prin cipio
de legalidad en cuanto al gasto, es decir, no hay gasto público legítimo
sin ley que lo autorice.
En el derecho argentino (y en el orden nacional), la base legal se
manifiesta de una triple manera:
a) En primer lugar, el régimen del gasto público está regulado por la
ley de contabilidad pública que establece. pautas jurídicas comprensivas
de todas las erogaciones que se presuma deben hacerse en el ejercicio.
Esta ley reglamenta el gasto en sus diversos aspectos y especialmente en
su ejecución (ver punto 9 de este capítulo).
6) También surge la juricidad del gasto de la estimación y auto
rización de erogaciones que debe realizarse mediante la ley anual «el
Presupuesto General de la Nación, que estudiamos más adelante (tomo
II de este Curso).
c) Por último, la tercera manifestación de la legalidad del gasto
público está referida a un momento posterior al de su ejecución y *©
identifica con el control del adecuado empleo de los dineros públicos
(ver tomo II, cap. XVIII, puntos 17 y ss.).
36
39
nacional. Se ha elaborado un concepto que se llama el de la "utilidad
social máxima", y que puede enunciarse aproximadamente así: el Estado
deberá ampliar sus gastos hasta el nivel en que la ventaja social de un
aumento de los gastos se vea compensada por el incon
veniente social de un aumento correspondiente de las exacciones
públicas.
Otros autores, como Gangemi (Tratado..., t. I, p. 355), piensan que de
ordinario los entes públicos no pueden superar un cierto límite en la
expansión del gasto, límite que se impone ante la posi bilidad de agravar
la presión tributaria y por la necesidad de no crear una presión
inflacionista. Es necesario —se dice— tener pre sente el equilibrio entre
actividad económica y actividad financiera.
El autor francés Duverger (Instituciones..., p. 86) dice que al hablar
de límites, muchos confunden gastos públicos con cargas públicas, lo cual
es un error, ya que no todos los gastos públicos son cargas públicas, dado
que el individuo paga las imposiciones pero recibe contraprestaciones por
medio de los servicios que Je presta el Estado. Sostiene este autor, con
acierto, que ciertos gastos deben limitarse, y ellos son los gastos de mera
administración, los gastos improductivos de trasferencia, y las
sustituciones onerosas del Estado
con respecto a aquellas actividades que resultan menos gravosas en
manos de particulares.
41
gue
el
Estado gasta con recursos que en su mayor parte provienen de la coacción,
mientras que los individuos carecen de esc instru mento como forma legal de
procurarse ingresos. En cuarto lugar, se afirma que como el Estado debe
satisfacer necesidades públicas, por lo general primero conoce el gasto que va a
efectuar y en virtud de éste se procura los recursos. El particular —al contrario
— adecúa sus gastos a los ingresos con que cuenta. Sin embargo, la premisa
de que el Estado conoce antes sus gastos y adecúa a ellos sus recursos es
sumamente relativa. Con buenos argumentos, Gangemi demues
tra que no es concebible un cálculo para la elección de los gastos que deban
satisfacerse, sin admitir que el Estado haya ya examinado las posibilidades de
obtención de los medios precisos para ellos. Es decir, que tanto los gastos
como los ingresos encuentran un límite en la renta de la nación. Ninguna
finalidad seria tendría una selec
ción de gastos si no se tuviese presente un cálculo por lo menos preventivo de
los ingresos.
Por último, y en quinto lugar, el Estado se halla obligado a realizar los
gastos necesarios para cumplir debidamente sus funcio nes, estando tales gastos
previamente calculados y autorizados por la ley presupuestaria. El particular,
en cambio, goza de amplia libertad tanto en lo que respecta a la cuantía como
al destino de sus erogaciones.
43
Los
gastos de inversión son todas aquellas erogaciones del Estado que significan un
incremento directo del patriínonio público. Pueden consistir en pagos emanados
de la adquisición de bienes de produc ción (maquinarias, equipos, etc.), en
inversiones en obras públicas ínfreestructúrales (presas hidroeléctricas,
viaductos, carreteras, puen tes) o en inversiones destinadas a industrias claves
(siderurgia, petroquímica, fabricación de equipo pesado, etc.), ya sea que éstas
sean motivo de explotación pública o privada, en cuyo último caso la inversión
se hace en forma de préstamo o aporte de capital.
Según se observa, mientras los gastos d$ funcionamiento retri buyen bienes
de consumo o prestaciones de servicios, los gastos de inversión retribuyen bienes
de capital y, por consiguiente, contri buyen a aumentar el capital del sector
público de la economía. Aquí el parecido con los antiguos "gastos
extraordinarios" desaparece, ya que las erogaciones de inversión no pueden ser
consideradas excepcionales o anormales.
Otra clasificación con criterio económico divide a los gastos en gastos de
servicio (o con contrapartida) y gastos de trasferencia (o sin contrapartida). En
el primer caso se cambia el dinero del gasto por un servicio prestado o una' cosa
comprada (por ejemplo, gastos en remuneración del personal estatal como
contrapartida de su trabajo, o gastos en pago a los proveedores como
contrapartida a sus entregas de bienes), mientras que en el segundo caso no hay
contravalor alguno y el propósito de la erogación es exclusivamente
promocional o redistributivo (por ejemplo, subsidios a empresas pri
vadas deficitarias cuya producción es esencial, subvenciones a enti dades de bien
público, auxilios regionales por calamidades públicas, asistencia médica
gratuita, pensiones por accidentes de trabajo, en fermedad, vejez y muerte, etc.).
También suele clasificarse económicamente a los gastos en pro ductivos e
improductivos. Los primeros serían aquellos que elevan el rendimiento global de
la economía, posibilitando mayor produc tividad general del sistema (adquisición
de equipos productivos,
•construcción de viviendas, mejoramiento del trasporte, investigación científica,
etc.), mientras que los segundos no tienen esa cualidad (por ejemplo, los gastos
de cobertura de los servicios públicos esen ciales, como ejército, justicia y
policía).
Pero la división es relativa y de escasa validez científica. Así, por ejemplo,
los gastos destinados a los servicios públicos esenciales
44
incrementan los gastos, pero, por el otro, aumentan también los recursos.
C) Causas reales. — 1) Gastos militares. — Sin que sea nece sario hablar
de las guerras, es notorio que el equipamiento de las fuerzas armadas modernas
exige sumas extraordinarias que se incre mentan por las tensiones
internacionales, la guerra fría, los con flictos parciales, los nuevos
descubrimientos científicos en arma mentos, la carrera espacial, etc.
2) Expansión de las actividades del Estado. — Las nuevas acti vidades que debe
asumir el Estado llevan a la expansión de sus funciones tradicionales y al
consiguiente aumento de gastos; así te nemos nuevas actividades por gestiones
industriales y comerciales antes desconocidas, cargas de seguridad social
(jubilaciones, pen siones, subsidios, ayudas diversas, seguros sociales, sanidad en
gene ral, etc.), realización de obras públicas para regular la coyuntura o combatir
la desocupación, organización de control sobre las activi dades económicas
privadas, incremento de gastos de urbanización derivados de nuevos núcleos de
población y crecimiento desmesura do de los existentes (gastos de obras
sanitarias, energía, gas, etc.).
3) Aumento de los costos. — El aumento internacional de cos tos de bienes
y servicios incide considerablemente en los presupues tos públicos, aparte de que
el progreso técnico determina gastos antes desconocidos.
4) Burocracia y presión política. — Debe mencionarse final mente causas
que aun siendo morbosas, no son menos reales, como el crecimiento
desmesurado de la burocracia administrativa y la presión de grupos o sectores
con influencia política que tienden a satisfacer sus intereses particulares a costa
del presupuesto del Estado.
En cuanto a la burocracia es necesario diferenciar entre lo que constituye el
cuerpo de funcionarios y lo que corrientemente se co noce bajo dicho nombre de
burocracia. El Estado debe contar con un cuerpo de funcionarios altamente
responsables y conscientes de su función que son indispensables para mantener
un buen nivel en la prestación de los servicios estatales. Estos funcionarios
deben gozar de un "status" económico y social adecuado. Nada tienen que ver
con la burocracia, que es uno de los peores males del Es tado moderno.
La burocracia no es la simple suma de funcionarios, sino un algo intangible
pero omnipresente, que actúa a través de una mará-