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AGRADECIMIENTOS

Agradezco a mis padres Sergio Chong y Ana Luján, por siempre apoyarme
económica y moralmente, guiándome a pesar de las adversidades e inspirándome
en todo momento a superarme y seguir adelante.

Quiero agradecer también a mi hermano Sergio Chong, por ser una parte
fundamental de mi felicidad, apoyándome en cada etapa de mi vida a pesar de
cualquier situación, incluso desde su corta edad.

Gracias a mi abuelo Manuel Luján (Q.E.P.D.), por habernos brindado a mi familia y


a mí un hogar, afecto y todo su apoyo cuando más difícil fue nuestra situación.

Además, agradezco de manera sincera a mi novio Manuel Pecero, por ayudarme a


creer en mí misma, motivándome académicamente y alentándome a soñar y nunca
darme por vencida.

Muchas gracias a mis amigos, por dar un mejor toque de color a mi vida, tanto en
el aspecto académico como en general, por apoyarme, comprenderme, estar para
mí siempre que los necesito y ayudarme a ser una mejor persona.

Quiero extender un sincero agradecimiento a todos aquellos profesores que no solo


me explicaron una materia, sino que demostraron empatía, paciencia, humildad y
me enseñaron acerca de la vida. Los llevo en mi corazón.
RECONOCIMIENTOS

A la Universidad Tecnológica de Altamira y CICATA, Unidad Altamira, que fueron


las instituciones que hicieron posible el desarrollo del presente trabajo.

Gracias a la cooperación del Doctor Edgar Onofre Bustamante, director de CICATA,


Unidad Altamira, quien ha sido mi asesor industrial y apoyó con la documentación
necesaria para el proceso de estadías, con la selección de la temática principal de
la tesis y los subtemas de investigación, así como con la revisión de esta tesis.

Se agradece a la M.T.A. Greta de Monserrat Tavarez Martínez, por compartir una


parte de su tiempo en instruirme y guiarme durante todo el proceso de elaboración
del presente trabajo, así como por sus observaciones para el enriquecimiento del
mismo.

De igual manera, agradezco al profesor Iván Alejandro Muñoz Hernández, mi


asesor académico, por su valioso apoyo con la revisión y corrección de la presente
tesis, además de resolver mis dudas durante el periodo de estadías.
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN ................................................................................................... 1

CAPÍTULO 1. DESCRIPCIÓN DE CICATA, UNIDAD ALTAMIRA.......................... 3


1.1 Datos generales ............................................................................................ 3
1.2. Antecedentes ............................................................................................... 3

CAPÍTULO 2. DESCRIPCIÓN DEL PROYECTO ................................................... 7

CAPÍTULO 3. HIPÓTESIS Y VARIABLES ............................................................. 8


3.1. Establecimiento de la hipótesis .................................................................... 8
3.2. Variable independiente y dependiente ......................................................... 8
3.2.1 Variable independiente ........................................................................... 8
3.2.2. Variable dependiente ............................................................................. 8

CAPÍTULO 4. METODOLOGÍA .............................................................................. 9


4.1. Antecedentes ............................................................................................... 9
4.2. Marco teórico ............................................................................................. 14
4.2.1. Electroquímica ..................................................................................... 14
4.2.2. Corrosión ............................................................................................. 19
4.2.3. Implantes metálicos ............................................................................. 22
4.2.4. Biomateriales ....................................................................................... 23
4.2.4.1. Clasificación de biomateriales ....................................................... 24
4.2.4.1.1. Biomateriales metálicos ........................................................... 26
4.2.4.1.1.1. Aleación Ti-6Al-4V ............................................................ 27
4.2.5. Biorecubrimientos ............................................................................... 32
4.2.5.1. Materiales grafénicos.................................................................... 32
4.2.5.1.1. Grafeno ................................................................................... 32
4.2.5.1.2. Óxido de grafeno ..................................................................... 34
4.2.5.1.3. Óxido de grafeno reducido ...................................................... 37
4.2.5.1.2.1. Reducción electroquímica del óxido de grafeno ................ 40
4.3. Metodología ............................................................................................... 42
4.4. Desarrollo experimental ............................................................................. 43

CAPÍTULO 5. RESULTADOS Y DISCUSIÓN ...................................................... 45

CONCLUSIONES ................................................................................................ 55

GLOSARIO .......................................................................................................... 57

ANEXOS .............................................................................................................. 59
Anexo 1. ........................................................................................................... 59
Anexo 2. ........................................................................................................... 59
BIBLIOGRAFÍA .................................................................................................... 60

ÍNDICE DE FIGURAS

Figura 1. Organigrama de CICATA, Unidad Altamira (1) ........................................ 6

Figura 2. Pila de Daniell (2).. ................................................................................ 16

Figura 3. Ejemplo de celda electrolítica donde ocurre electrólisis del agua (3) ..... 17

Figura 4. Implante para reemplazo total de cadera (4). ........................................ 22

Figura 5. Radiografía de fémur con aguja de Ti-6Al-4V implantada interiormente


(5). ....................................................................................................................... 27

Figura 6. Microestructura de la aleación Ti-6Al-4V (6).......................................... 28

Figura 7. Estructura molecular del grafeno (57)... ............................................... 32

Figura 8. Modelos estructurales del GO que han sido propuestos con el paso del
tiempo (67). .......................................................................................................... 35

Figura 9. Modelo estructural del óxido de grafeno más aceptado actualmente (7)
............................................................................................................................. 36

Figura 10. Proceso de preparación del GO (7).. ................................................... 37

Figura 11. Aceptación de electrones por GO en el proceso de fotocatálisis sobre


TiO2 y cambio de color del GO debido a la reducción (8).. .................................. 40

Figura 12. Microestructura de aleación Ti-6Al-4V totalmente de placas α de


Winmanstatten rodeadas de fase β, según el trabajo realizado por Rodney, E., et
al. (6).................................................................................................................... 46

Figura 13. Gráfico algunas propiedades mínimas de la aleación Ti-6Al-4V en


diferentes condiciones, con base en la información del trabajo elaborado por
Rodríguez, D. (9), elaboración propia.. ................................................................ 48
Figura 14. Curvas de polarización de muestra de Ti-6Al-4V, sometida a la solución
FCS durante 0 horas, según el trabajo de investigación elaborado por Camero, S.,
et al. (10).. ............................................................................................................ 49

Figura 15. Curvas de polarización de muestra de Ti-6Al-4V, sometida a la solución


FCS durante 360 horas, según el trabajo de investigación elaborado por Camero,
S., et al. (10).. ...................................................................................................... 49

ÍNDICE DE TABLAS

Tabla 1. Características de materiales bioinertes (11) .......................................... 25

Tabla 2. Composición de la aleación Ti-6Al-4V (W%) (12).. ................................. 28

Tabla 3. Propiedades mínimas requeridas para la aleación Ti-6Al-4V según las


normas ASTM F136 y ASTM F1108, con base en la información del trabajo
elaborado por Rodríguez, D. (9) ........................................................................... 45

Tabla 4. Propiedades de la aleación Ti-6Al-4V después de tratamiento de recocido,


con base en la información del trabajo elaborado por Rodríguez, D. (9) .............. 46

Tabla 5. Propiedades de la aleación Ti-6Al-4V después de tratamiento de


nitruración, con base en la información del trabajo elaborado por Rodríguez, D. (9),
elaboración propia ............................................................................................... 47

Tabla 6. Recopilación de algunos proyectos y sus resultados con base en estudios


enfocados en pruebas sobre óxido de grafeno reducido. Elaboración propia... .... 51

Tabla 7. Propiedades físicas del titanio (9) ........................................................... 59

Tabla 8. Propiedades fisicoquímicas de la aleación Ti-6Al-4V (13) ...................... 59


INTRODUCCIÓN

Desde la antigüedad algunas personas han sufrido a pérdida de partes del cuerpo
como dientes, brazos, piernas, entre otras; debido a ello, se comenzaron a
desarrollar las primeras prótesis existentes con materiales que tenían a su alcance
como madera, cerámicos y metales. Con el paso del tiempo y la evolución de la
medicina, las prótesis se fueron mejorando y se desarrollaron materiales para
sustituir huesos y órganos, llamados implantes.

Los materiales para la creación de implantes han ido evolucionando, siendo


sometidos a diversos tratamientos para mejorar sus propiedades mecánicas y
biocompatibilidad, que es la capacidad del material de estar en contacto con el
cuerpo humano sin generar afecciones, sino que por el contrario, genere una
respuesta positiva y pueda lograrse el tratamiento. Actualmente los materiales
utilizados con ese fin reciben el nombre de biomateriales, los cuales son empleados
para la evaluación, tratamiento o reemplazo de un órgano, tejido o función del
cuerpo (14).

Entre los biomateriales que se han empleado para la elaboración de implantes, se


encuentran los metálicos (15). Las aleaciones de titanio poseen las ventajas de que
se pueden someter a tratamientos térmicos para modificar sus propiedades,
presentan una dureza adecuada, y poseen buena resistencia al desgaste y a la
corrosión. Estas son de las más empleadas, ya que el titanio produce una película
de óxido que lo protege de la corrosión y favorece la oseointegración (12).

Dentro de las aleaciones de titanio, el Ti-6Al-4V es una de las más utilizadas en


biomedicina (16) debido a su facilidad de trabajarse mecánicamente (17) y
capacidad de ser sometida a elevadas temperaturas (18), por lo que se ha sido
considerado con el paso del tiempo para su aplicación en implantes. Sin embargo,
a pesar de su resistencia a los ataques corrosivos, dicha capa de óxido de titanio
que se forma sobre el material tiende a desprenderse con facilidad, lo que inhibe
su protección la corrosión, disminuye su bioactividad y biocompatibilidad, y propicia
una liberación más sencilla de iones tóxicos (19).

1
Además de los problemas anteriores, esta aleación posee una baja resistencia
mecánica (20) y es susceptible a la formación de biofilms (17). Por ende, se ha
decidido recurrir a la búsqueda de información respecto a un recubrimiento que
pueda aplicarse sobre el biomaterial como un lubricante sólido, el cual mejore su
protección contra ataques corrosivos, biocompatibilidad y propiedades mecánicas,
y lo proteja contra el crecimiento de bacterias.

El grafeno ha resultado en varias ocasiones ser un recubrimiento efectivo para


implantes, debido a que presenta permeabilidad, elasticidad de hasta 10%, módulo
de Young de 0.5 TPA, ligereza, evita la corrosión, e incluso en diferentes proyectos
se ha llegado a mostrar que los materiales grafénicos pueden ser biocompatibles e
inhiben el crecimiento bacteriano (21). Uno de los métodos más efectivos para la
obtención de un material similar al grafeno es mediante la reducción del óxido de
grafeno (GO), lo cual es posible por medio de diferentes procesos; sin embargo, no
es posible obtener de todas las propiedades deseadas. Un método factible es llevar
a cabo un proceso de reducción electroquímica, pues resulta económico, amigable
con el ambiente, sencillo y se obtiene un material con propiedades similares a las
del grafeno prístino (22).

En este trabajo se han estudiado las propiedades de la aleación Ti-6Al-4V para su


aplicación como implante, así como de los beneficios que un recubrimiento de
ErGO podría propiciar sobre esta aleación, tomando como base trabajos e
investigaciones que se han elaborado previamente y considerando fundamentos
sobre la electroquímica y corrosión.

2
CAPÍTULO 1. DESCRIPCIÓN DE CICATA, UNIDAD ALTAMIRA

1.1 Datos generales

El presente proyecto fue elaborado con base en el trabajo desempeñado en el


Centro de Investigación en Ciencia Aplicada y Tecnología Avanzada, Unidad
Altamira, empresa del sector terciario ubicada en la Carretera Tampico-Puerto
Industrial Altamira Km 14.5, 89600 Altamira, Tamaulipas (1).

La institución ofrece los servicios de educación a nivel posgrado, así como centro
de investigación y desarrollo tecnológico (1). Las actividades a realizar durante el
periodo de estadías estuvieron bajo las instrucciones del Doctor Edgar Onofre
Bustamante, actual director del centro de investigación.

1.2. Antecedentes
En la década de 1970, el Instituto Politécnico Nacional adoptó una nueva política
para impartir educación a nivel posgrado e investigación científica y tecnológica,
con el fin de crear diferentes centros de innovación y desarrollo tecnológico. Por
ende, el 30 de agosto de 1996, fue autorizada la creación del Centro de
Investigación en Ciencia Aplicada y Tecnología Avanzada (CICATA), Unidad
Legaria, por el H. Consejo General Consultivo, ofreciendo inicialmente posgrados
de maestría y doctorado en biomedicina molecular (1).

El 26 diciembre de 1996, se creó un convenio entre el gobierno de Tamaulipas, el


Instituto Politécnico Nacional y la empresa Duport, la cual donó dos terrenos, de los
cuales uno cercano a la Laguna del Conejo, en el sector 28 del polígono 2 de la
zona urbana industrial del puerto de Altamira, fue utilizado para la construcción de
CICATA, Unidad Altamira. Dicho año se comenzó con la preparación de la
superficie donde sería construido el nuevo centro de investigación una vez
teniéndose el acta de entrega provisional de la superficie (23).

El 1 de enero de 2000, fue expedido el primer documento oficial, donde se nombró


a Juan Luis Peña Chapa como director de CICATA, Unidad Altamira (23). En julio
del mismo año, la Unidad de Servicio Civil de la Secretaría de Hacienda y Crédito
Público y la Secretaría de Contraloría y Desarrollo Administrativo, autorizaron la

3
estructura organizacional de la empresa, quedando de la siguiente manera:
Dirección, Coordinación de Enlace y Gestión Técnica, subdirección Académica y
de Investigación (con el Departamento de Estudios de Posgrado y el Departamento
de Investigación e Innovación Científica y Tecnológica), Departamento de
Vinculación y Transferencia de Tecnología y el Departamento de Servicios
Administrativos (siendo estos dos últimos dependientes de la Dirección) (1).

En octubre del mismo año, se entregó el edificio y se comenzó oficialmente con


actividades (1); sin embargo, los posgrados en tecnología avanzada no fueron
impartidos hasta agosto de 2001 (23).

En 2006 se determinó que la estructura organizacional de la empresa no cubría las


necesidades de esta, por lo que en marzo del mismo año la Secretaría Técnica del
Instituto solicitó la revisión de la estructura orgánica del centro de investigación.
CICATA, Unidad Altamira, envió el 25 de enero de 2007 un anteproyecto de la
nueva organización de la que querían disponer, propuesta que fue aceptada por la
Secretaría de Administración el 20 de agosto del mismo año (1).

En mayo de 2009 fue entregada la nueva estructura orgánica por la Dirección


General del Instituto (23); por lo que la organización fue la siguiente: Dirección,
Coordinación de Enlace y Gestión Técnica, Unidad de Informática, Subdirección
Académica (con los Departamentos de Posgrado y Unidad de Tecnología Educativa
y Campus Virtual), Subdirección de Innovación Tecnológica (con el Departamento
de Investigación e Innovación Científica y Tecnológica y la Unidad Politécnica de
Integración Social), y la Subdirección Administrativa (con los departamentos de
Capital Humano y de Recursos Financieros y Materiales); además se contó con un
Colegio de Profesores, un Comité Interno de Proyectos y el Decanato. La nueva
organización fue aplicada a todos los demás centros de investigación a solicitud de
la Dirección General (1). Sucesivamente, el 13 de noviembre del mismo año, la
Secretaría de Administración del Instituto Politécnico Nacional creó el Área de
Recursos Materiales, siendo esta dependiente del Departamento de Recursos
Financieros y Materiales, propiciándose otro cambio dentro de la organización de
la institución al cual se le asignó una plaza de confianza para entrar en función (23).

4
En octubre del año siguiente, fue eliminada el Área de Recursos Materiales de la
estructura orgánica del centro de investigación, dándose paso a la estructura
vigente proporcionada por la Coordinación de Estructuras Orgánicas y
Ocupacionales del Instituto (Figura 1) (23).

Actualmente CICATA, Unidad Altamira se encuentra bajo la dirección del Doctor


Edgar Onofre Bustamante. Además, cuenta con las líneas de investigación de
Ingeniería y Desarrollo Sustentable, Materiales Nanoestructurados y Tecnología
Láser como líneas de investigación, siendo opciones que benefician la actividad
económica del estado (1).

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Figura 1. Organigrama de CICATA, Unidad Altamira

6
CAPÍTULO 2. DESCRIPCIÓN DEL PROYECTO

La aleación Ti-6Al-4V es sumamente empleada en aplicaciones biomédicas debido


a sus propiedades (16), utilizándose para la elaboración de implantes (24).

El problema que dicho material metálico presenta es que, a pesar de ser un material
resistente a ataques corrosivos debido a la formación de una capa de óxido de
titanio (12), esta es muy susceptible a desprenderse, lo que suele detonar la
corrosión y liberación de iones tóxicos (19).

Por ende, se ha optado por la investigación acerca de recubrimientos elaborados


de ErGO, el cual al ser aplicado como un lubricante sólido podría mejorar
notablemente las propiedades del sustrato sobre el que sea aplicado.

Para ello, se busca recabar antecedentes referentes a desarrollos en la rama


médica, información básica respecto a la electroquímica y corrosión, y datos
relevantes para futuras investigaciones que involucren las propiedades del Ti-6Al-
4V, grafeno, GO y ErGO y el método de reducción electroquímica del GO, puesto
que actualmente es un material que ha generado polémica debido a sus múltiples
ventajas y ciertas desventajas que en ocasiones limitan su consideración para fines
biomédicos.

Llevándose a cabo la presente revisión bibliográfica, será posible para nuevos


investigadores informarse y discernir acerca de este material como parte importante
de la medicina o como un riesgo que debe continuar bajo observación, además de
que se continuará con la expansión de información respecto al Ti-6Al-4V como
biomaterial.

Por lo tanto, el objetivo del presente proyecto es dar a conocer los beneficios de
desarrollar un recubrimiento de ErGO sobre implantes permanentes de Ti-6Al-4V,
conociéndose de las ventajas de la electroquímica y sus aplicaciones sobre los
diferentes tipos de biomateriales y biorecubrimientos existentes, para ser
información tomada en cuenta en proyectos futuros.

7
CAPÍTULO 3. HIPÓTESIS Y VARIABLES

3.1. Establecimiento de la hipótesis


La aplicación de recubrimientos grafénicos sobre implantes de Ti-6Al-4V es una
solución viable para combatir problemas de corrosión, toxicidad y de bacterias que
se presentan en la aleación, además de que puede utilizarse como un lubricante
sólido.

3.2. Variable independiente y dependiente

3.2.1 Variable independiente


Se estudiarán las condiciones en que la aleación puede ser obtenida, métodos de
reducción del GO, condiciones de polarización, se centrará la atención sobre la
reducción electroquímica del GO, su potencial, sustrato, temperatura y electrolito
utilizado.

3.2.2. Variable dependiente


Durante la revisión bibliográfica se estudiará el efecto de las variables
independientes sobre las propiedades que adquieren el biomaterial y el
recubrimiento, como bioactividad, citotoxicidad, resistencia a la corrosión,
propiedades tribológicas, así como cantidad de grupos oxigenados presentes en
el caso del ErGO, su efecto lubricante y grado de reducción.

8
CAPÍTULO 4. METODOLOGÍA

4.1. Antecedentes

El 28 de julio de 1996, en Washington D.C., fueron descubiertos los restos de un


hombre saludable y activo que vivió hace aproximadamente 9000 años, el cual es
conocido como “El hombre de Kennewick”. Tenía la punta de una flecha clavada
en su cadera, siendo este un claro ejemplo de que el cuerpo humano puede
adaptarse a materiales extraños (25).

Los inicios de los biomateriales se remontan desde el antiguo Egipto, así como a
las antiguas civilizaciones de Roma y Grecia, donde se utilizaban metales para el
tratamiento de heridas (14).

En el siglo XVI, se comenzaron a utilizar el oro y la plata específicamente en la


odontología para la reparación de piezas dentales (por ejemplo, dientes de madera
eran unidos por alambres de oro), además de que se empezaron a usar alambres
de hierro para tratar fracturas óseas inmovilizándolas (14).

Los biomateriales comenzaron a repercutir fuertemente en la medicina hasta el


siglo XIX, ya que se presentó una serie de sucesos importantes. En 1829, H. S.
Levert realizó los primeros estudios de biocompatibilidad experimentando con
perros, utilizando plata, oro, platino y plomo; tiempo después, en 1870, el cirujano
Lord Joseph Lister introdujo por primera vez técnicas quirúrgicas asépticas,
reduciendo infecciones y siendo un gran aporte para las cirugías modernas;
posteriormente, placas de acero de fijación interna para el tratamiento de fracturas
de huesos fueron implementadas en 1886 por el médico H. Hansmann (25).

Tiempo después, en 1890, en el 19° Congreso de la Sociedad Alemana de Cirugía,


se comenzaron a desarrollar los primeros conceptos para el reemplazo articular
total y para el trasplante total de cadera; además de todo lo anterior, 1895 fue un
año en el que se suscitó un acontecimiento muy importante, ya que Wilhelm Conrad
Röntgen descubrió los rayos X, lo que fue un gran aporte para la traumatología (26).

En el siglo XX comenzaron a buscarse nuevos materiales resistentes a la corrosión


y degradación para realizar implantes, ya que los metales utilizados en aquel

9
entonces perdían sus propiedades mecánicas con el paso del tiempo. Algunas de
las primeras aleaciones utilizadas fueron de CoCr y aceros inoxidables austeníticos,
implementados en 1930. Gracias a la utilización del acero inoxidable en el ámbito
médico, se logró la primera cirugía de rodilla. Con el paso del tiempo se implementó
adicionar molibdeno al acero inoxidable, reduciendo la cantidad de carbono y
mejorando la resistencia (14).

En 1931, el cirujano Marius Smith-Petersen desarrolló un dispositivo de vidrio para


la utilización en prótesis de cadera y clavos para fijar huesos. Además, gracias a
los doctores C. S. Venable y W. G. Stuck, en 1936 se comenzaron a utilizar
aleaciones de base cobalto para cirugías en la industria ortopédica (25).

Durante la segunda guerra mundial algunos de los acontecimientos que destacan


son el primer reemplazo total de cadera en 1938, lo que abrió paso a nuevas
técnicas ortopédicas y quirúrgicas; y que en 1943, P. H. Harmon buscó utilizar
copas de acrílico para el reemplazo de la articulación de la cadera Después de la
segunda guerra mundial, en 1946, fue introducida una cadera de acrílico por los
hermanos Judet (26).

En 1949, Sir Harold Ridley (25) inventó los primeros lentes intraoculares de acrílico,
debido a que varios aviadores que fueron partícipes en la guerra sufrieron daños
en los ojos debido a fragmentos metálicos o de vidrio que fueron implantados en
sus ojos. Las primeras pruebas que realizo no fueron exitosas, sin embargo con el
tiempo fueron mejorando hasta conseguir la implantación de más de 7 millones de
lentes por año, beneficiando a las personas que padecen de cataratas.

En la década del 50 comenzaron a desarrollarse aleaciones de base titanio;


además, se implantaron caderas de acero inoxidable con mayor frecuencia (25).

Gracias a que en la década del 60, el biólogo Per Ingmar Branemark descubrió la
biocompatibilidad y oseointegración del titanio (15), lo cual quiere decir el contacto
estable que se mantiene entre el hueso viable y remodelado con la superficie del
implante, sin la interposición de otra cosa que no sea tejido óseo (27), dicho material
comenzó a comercializarse, al igual que algunas de sus aleaciones, como la
aleación Ti-6Al-4V (14).

10
En la década del 70 se implementaron materiales porosos con el fin de que hubiera
crecimiento del hueso alrededor de los implantes; además, se formó la Sociedad
de Biomateriales en 1975, en la cual científicos estudiaban la biocompatibilidad de
diversos materiales (25).

En 1984, se desarrolló el equipo necesario para medir en el cuerpo la presión de


una cadera funcional por el doctor Dr. William H. Harris e ingenieros del MIT
(Massachusetts Institute of Technology), y poco después se creó un reemplazo de
cadera, el cual era una prótesis con varias partes cambiables (26).

En 1990 comenzaron a publicarse diferentes libros acerca de la ciencia de los


biomateriales, y actualmente hay diversos grupos destinados al estudio de este tipo
de materiales (25).

Los biomateriales metálicos, sin embargo, suelen sufrir en determinado momento


problemas de corrosión, liberación de iones tóxicos o desgaste (28), por lo que se
comenzaron a llevar a cabo diferentes proyectos con el fin de aplicar recubrimientos
sobre estos para solucionar los problemas anteriores.

En 1996, Bordjih et al. (29), realizaron pruebas de biocompatibilidad mediante


algunos tratamientos superficiales utilizando osteoblastos y fibroblastos sobre
acero inoxidable 316L, con lo que se mejoró notoriamente la dureza y resistencia a
la corrosión del acero. Cabe destacar que las células osteoblásticas pueden ser
utilizadas en el área de odontología, aplicándose a la superficie de implantes
dentales de fosfato tricálcico, pero para una mejor adhesión celular se requiere de
previo tratamiento superficial (29).

Otro caso de un proyecto donde se recurrió a recubrir una superficie de un metal


utilizado comúnmente en implantes se suscitó en 2006, cuando Eisenbarth et al.
(30) sometieron muestras de titanio a recubrimientos de los óxidos Al2O3, Nb2O5,
Ta2O5, TiO2 y ZrO2, utilizando el método sol-gel con el fin de mejorar sus
propiedades. Los resultados indicaron que el recubrimiento de Nb2O5 es uno de los
más óptimos para adhesión celular debido a su incidencia de rugosidad, la cual se
encontró entre 7 y 40 nm utilizando tratamientos térmicos. Si la temperatura que se
emplea es mayor a 450 °C, a pesar de que hay una adhesión celular más lenta, hay
producción de colágeno.

11
En 1947, la Phusucal Review prublicó un trabajo de Phillip Russell Wallace (31),
donde se habló acerca de la estructura de bandas del grafito, centrándose en la
estructura de monocapa. En dicha investigación, Wallace descubrió que en una
capa individual de grafito a bajas temperaturas no se presenta conducción, pero
conforme la temperatura y energía incrementen, sería posible una transferencia de
electrones de la banda de valencia a la banda de conducción, por lo que podría
transmitir electricidad.

En 1962, Hanns Peter Boehm et al. (31) bucaron producir los fragmentos más
delgados posibles de óxido de grafito reducido, los cuales obtuvieron mediante la
deflagración del óxido de grafito y la reducción en una suspensión alcalina.
Lograron identificar entre lo obtenido “monocapas” de óxido de grafito reducido,
hallando láminas de 3.6 Å de grosor.

En 1975 van Bommel et al. (31) calentaron carburo de silicio (SiC) en el vacío a
más de 800 °C, y en dicho trabajo observaron la formación de capas grafíticas; sin
embargo, identificaron películas de monocapa de grafito (grafeno) desacopladas
del sustrato de SiC, las cuales eran electrónicamente equivalentes a hojas de
grafeno aisladas. Fue en 1986, cuando Boehm introdujo el término “grafeno” para
referirse a monocapas de grafito.

En 2004, Andre Geim y Konstantin Novoselov (32), químicos de la Universidad de


Manchester, Reino Unido, consiguieron separar las capas de carbono en el grafito
utilizando cinta adhesiva.

El grafeno, debido a sus propiedades, tiende a ser un buen material para utilizarse
como recubrimiento, por lo que en 2013, Podila, R., Moore, T., Alexis, F. y Rao, A.,
cultivaron grafeno en sustratos de cobre por medio de deposición química de vapor
(CVD), produciéndose grafeno policristalino, para después transferirlo a sustratos
de nitinol para su aplicación como stent (33), el cual es un pequeño tubo que se
coloca en una estructura hueca como una vena o arteria (34).

Según la imagen obtenida por la imagen AFM del grafeno sobre el sustrato de NiTi,
la muestra presentó una rugosidad superficial de ~ 5 nm, además de que la
espectroscopía Raman demostró que el recubrimiento presentaba pocas capas del
grafeno preparado, indicándose naturaleza de monocapa (33).

12
Realizaron pruebas para probar el crecimiento celular cultivando células
endoteliales aórticas de rata, así como células de músculo liso, sobre sustratos de
NiTi prístino y de Ni-Ti recubierto con grafeno. Se analizaron las muestras mediante
un microscopio óptico confocal, donde se observó que la morfología de las células
de músculo liso (SMC) cultivadas sobre NiTi prístino presentó una débil adhesión
de células; en cuanto a las muestras recubiertas con grafeno, se redujeron los
gradientes de tensión en las células (33).

Además, realizaron el ensayo MTT en las SMC para medir la proliferación celular,
con lo que se dedujo que la muestra de NiTi con grafeno no indujo a toxicidad
excesiva a comparación de la muestra de NiTi prístino (33).

Se analizó también la hemocompatibilidad y adsorción de proteínas, pues la


aleación usualmente suele generar una rápida coagulación de la sangre en una vez
que entra en contacto con esta debido a que se adsorben proteínas plasmáticas
(como albúmina sérica, fibronectina y fibrinógeno) y después se reemplazan por
factores XII y quininógeno de alto peso molecular. Dependiendo de la adsorción de
albúmina y fibrinógeno que se presente es determinada la hemocompatibilidad del
material. Se demostró que el grafeno contiene una baja relación de fibrinógeno /
albúmina en comparación con el NiTi prístino; además, empleándose la
espectroscopía Raman se logó observar que la banda tangencial del grafeno no
presentó ningún cambio de frecuencia al momento de adsorber fibrinógeno: por
ende, la aleación recubierta con grafeno presentó una mejor hemocompatibilidad,
inhibiéndose la activación de las plaquetas a causa del implante. Por lo tanto, se
concluyó la viabilidad de utilizar el grafeno como recubrimiento para implantes
gracias a que son químicamente inertes, duraderos e impermeables, además de
que demostraron una buena biocompatibilidad y hemocompatibilidad (33).

En 2013, Lu, J., et al. (35), desarrollaron una película de hidrogel de grafeno
autoportante, con la cual llevaron a cabo pruebas in vitro e in vivo para evaluar la
respuesta del huésped, en este caso, ratas. Con las pruebas in vitro se obtuvo una
buena adhesión proliferación y propagación celular, mientras que al implantar
hipodérmicamente esta película en la rata, se produjo una leve respuesta del tejido
del huésped sin producir señales de toxicidad. Se produjo también la hinchazón y
agrietamiento de las películas in vivo, migrando las partículas desprendidas e

13
incorporándose al sistema circulatorio. Se concluyó que dicha película de hidrogel
podría propiciar la regeneración del hueso, debido a que es altamente
biocompatible, osteoinductora, posee una adecuada degradabilidad y buenas
propiedades mecánicas.

En 2018, fue llevado a cabo un proyecto por Xie, X., et al. (36), en el cual
desarrollaron un recubrimiento antimicrobiano para implantes artificiales, con el fin
de ayudar a la prevención de infecciones que suelen presentarse debido al
crecimiento bacteriano que se produce entre los implantes y los tejidos
circundantes.

En dicho trabajo, desarrollaron un recubrimiento híbrido de polidopamina (PDA) /


Ag3PO4 / óxido de grafeno (GO), el cual aplicaron sobre muestras de Ti y
Polieteretercetona (PEEK). Se logró observar que dependiendo de la cantidad de
GO utilizado en el recubrimiento es posible el ajuste del band gap desde 2.52 eV
hasta 2.0 eV con el fin de destruir bacterias en conjunto con especies reactivas del
oxígeno utilizando una luz visible de 660 nm, lográndose una eficacia bacteriana
repetible y sostenida (36).

Según el tamaño de Ag3PO4, las muestras fueron designadas como Ag3PO4 / GO-
1 a -4. Teniendo como base algunas imágenes obtenidas del SEM, los
recubrimientos de PDA / Ag3PO4 / GOTi-4 y PDA / Ag3PO4 / GO PEEK -4
mostraron que PDA / Ag3PO4 / GO presenta adherencia a Ti o PEEK, y las
nanopartículas de Ag3PO4 se distribuyen de manera homogénea. Por ende, se
concluyó que el recubrimiento puede ser aplicable tanto en implantes metálicos
como en biopolímeros (36).

4.2. Marco teórico

4.2.1. Electroquímica

La electroquímica es la ciencia que estudia las trasformaciones mutuas entre


energía química y eléctrica. Esta se relaciona con las propiedades físicas y
químicas de conductores iónicos, así como con los fenómenos suscitados en las
interfaces entre conductores iónicos por un lado, o entre conductores o
semiconductores electrónicos, otros conductores iónicos e incluso aislantes, siendo

14
todo estudiado tanto en condiciones de equilibrio (cuando no hay flujo de corriente
eléctrica en el sistema) como en condiciones de no equilibrio (cuando se tiene flujo
de corriente) (37).

Para que ocurra una reacción se requiere de dispositivos llamados celdas


electroquímicas. Aquellas celdas donde hay adición de energía en la muestra para
producir la reacción, son denominadas celdas electrolíticas; mientras que aquellas
donde se produce energía eléctrica como consecuencia de la reacción, son celdas
galvánicas (38).

Las celdas galvánicas se dividen en celdas de combustible, celdas primarias y


celdas secundarias. Las celdas de combustible son reactores que trabajan en
estado estacionario; en estas se dosifican los reactivos y extraen los productos de
manera continua. Las celdas primarias trabajan en estado no estacionario, donde
inicialmente hay cantidades fijas de reactivos. Por otro lado, las celdas secundarias
cumplen con el principio de las celdas galvánicas al estar en funcionamiento, sin
embargo, se puede invertir la reacción aplicando energía eléctrica (38).

Cualquier celda electroquímica debe requiere de electrodos para su


funcionamiento, los cuales deben ser buenos conductores eléctricos, ya que estos
generan reacciones iónicas que producen o consumen electrones en fase aislada
de la celda. De igual manera, para completar la reacción, se requiere de uno o más
electrólitos para la transferencia interna de la carga por medio de conducción iónica.
Estos últimos deben ser malos conductores eléctricos, pues de lo contrario podría
producirse un cortocircuito dentro de la celda (38).

En las celdas electroquímicas se producen reacciones óxido-reducción (redox),


tanto espontáneas como no espontáneas. En dichas reacciones se presenta la
transferencia de electrones entre átomos. Al oxidarse un átomo, pierde electrones;
mientras que al reducirse, los gana. El electrodo donde se producen los electrones
es el ánodo, y el que los recibe es el cátodo (38).

Un ejemplo de una reacción redox en una celda galvánica se suscita cuando al


sumergir una cinta de zinc en una solución de sulfato de cobre (II), se comienza a
depositar cobre metálico sobre la superficie del zinc, cambiando poco a poco el
color negro de la cinta a rojo dorado, ocurriendo simultáneamente una

15
semirreacción de oxidación y una de reducción; la energía eléctrica producida por
la reacción puede ser utilizada (2).

Zn0(s) + Cu2+(aq) → Zn2+(aq)+Cu0(s)

Zn0(s) → Zn2+(aq) + 2e1- Semirreacción de oxidación

Cu2+(aq) + 2e1- → Cu0(s) Semirreacción de reducción

Al separarse físicamente ambas semirreacciones, los electrones se deben mover a


través de un sistema externo de conductores para poder completarse la reacción.
Dicha separación física produce una pila electroquímica. Un ejemplo de esta es la
pila de Daniell, la cual fue la primera celda galvánica desarrollada (2).

El funcionamiento de la pila de Daniell se rige por el principio de la reacción


mencionada anteriormente (Figura 2), pues un cátodo de cobre se sumerge en una
solución de sulfato de cobre, mientras que un ánodo de zinc, cubierto por una
solución de sulfato de zinc, queda flotando sobre la solución de sulfato de cobre.
La pila debe producir un potencial eléctrico de +1.10 V (2).

Figura 2. Pila de Daniell (2).

En una reacción electrolítica, los electrones pasan a través de una corriente


eléctrica directa por un electrodo conductor de carga positiva. Si los electrones que
se producen externamente son aceptados en el ánodo o cátodo, generando una

16
semirreacción de reducción, se produce la separación de una molécula,
denominada electrólisis (2).

La electrólisis consiste en la introducción de una corriente galvánica dentro de una


solución salada. Cuando la corriente actúa, los elementos de la sal y el agua se
descomponen y forman nuevos compuestos. Al descomponer NaCl y H2O, se
pueden formar gas hidrógeno (H2), gas cloro (Cl2) e hidróxido de sodio (NaOH) (39).

En la electrólisis del agua (Figura 3), la molécula de H2O se disocia de manera que
son formados iones H+ y OH-, los cuales se dirigen hacia el cátodo y el ánodo, en
donde pasan por un proceso de oxidación y reducción, produciendo moléculas de
H2 y O2 (3). En este proceso se utilizan dos electrodos, usualmente de un metal
inerte como el platino (40).

La reacción general de la electrólisis del agua es la siguiente (3):

2H2O(l) → 2H2(g) + O2(g)

En cuanto a las semirreacciones que ocurren durante el proceso de electrólisis de


agua pura, se presenta lo siguiente (3):

Semirreacción de reducción: 2H2O + 2H++ 4e- → 2H2 + 2OH-

Semirreacción de oxidación: 2OH- → O2 + 2H+ + 4e-

Figura 3. Ejemplo de celda electrolítica donde ocurre electrólisis del agua


(3).

17
Para determinar si se tiene una celda galvánica o electrolítica es necesario obtener
la diferencia de potencial entre el cátodo y el ánodo; de obtenerse un valor positivo
se determina que se tiene presente una celda galvánica; de lo contrario, es una
celda electrolítica (38).

El potencial de la celda puede determinarse con dos fórmulas diferentes


dependiendo de las condiciones en que la reacción se presente; si esta ocurre en
condiciones estándar (presión de 1 atm, temperatura de 298 K y una concentración
de 1 M) se utiliza la siguiente ecuación (41):

ΔE0celda= E0cátodo - E0ánodo

Donde:

ΔE0= Potencial en condiciones estándar

En cambio, si las condiciones son variables, el potencial de la celda es calculado


por medio de la ecuación de Nernst (42):

R∗T
ΔE0celda= ΔE0 – lnQ
n∗F

Donde (41):

J
R= Constante de los gases (8.314 )
K∗mol

ΔE0= Potencial en condiciones estándar

n= Cantidad de electrones transferidos

J
F= Constante de Faraday (96500 V∗mol)

productos
Q= Cociente de reacciones elevado a sus coeficientes estequiométricos ( reactantes)

Los fenómenos físicos que se susciten pueden ocurrir de dos maneras diferentes:
cuando hay una liberación de energía, la cual se convierte y disipa en calor, se tiene
un proceso espontáneo. Por otro lado, si los alrededores suministran energía al
sistema físico, se tiene un proceso no espontánea (43).

18
Para determinar la espontaneidad de las reacciones, se requiere de un criterio
termodinámico, por lo se debe calcula el valor de la energía libre de Gibbs. Cuando
la energía libre de Gibbs arroja un resultado negativo, la reacción es espontánea; y
si, por el contrario, se obtiene un resultado positivo de la energía libre de Gibbs, la
reacción es no espontánea (43).

La fórmula para determinar el valor de la energía libre de Gibbs es la siguiente (43):

G= U+PV-ST

Donde (43):

G= Energía libre de Gibbs

U= Energía interna

P= Presión

V= Volumen

S= Entropía

T= Temperatura

Cuando se tienen reacciones químicas que ocurren a temperatura y presión


constantes, la variación de la energía libre de Gibbs corresponde con la energía
química de la reacción, la cual pude ser absorción o liberación de calor (43).

4.2.2. Corrosión
La corrosión es el ataque destructivo que sufren algunos materiales debido a una
reacción química o electroquímica, a causa del medio ambiente que les rodea, por
factores como la atmósfera, el suelo, el agua, entre otros. Esta se presenta en
metales. El proceso de corrosión es normalmente electroquímico, pues hay una
trasferencia de electrones de una especie a otra, y en ocasiones puede producirse
una pérdida del material (44); en esta, el material que se corroe alcanza un estado
de menor potencial energético (45).

19
Los materiales puros y sus aleaciones se unen químicamente al medio corrosivo
para formar compuestos estables, similares a los de la naturaleza. En cuanto a los
materiales no metálicos, estos presentan deterioro de naturaleza fisicoquímica a
causa del medio ambiente, como hinchamiento, resquebrajamiento, agrietamiento,
ablandamiento, entre otros; sin embargo, en dichos casos suele utilizarse el término
“degradación” (46).

Usualmente la corrosión solo se evalúa respecto a la superficie del metal,


denominándose esta como corrosión general; sin embargo, hay ocasiones en que
se enfoca en el tipo de ataque ambiental, el largo de la superficie o límite de los
granos. Además, existen diversos factores que influyen en la corrosión, acelerando
o agravando los ataques (46).

Para conocer la influencia del pH en el proceso de corrosión, hay tres puntos a


tomar en cuenta: en un nivel de pH que oscile entre 4 y 10, la velocidad de corrosión
del metal es controlada por la velocidad en que es transportado el oxidante a la
superficie; los metales anfotéricos (por ejemplo, el aluminio o el zinc) se disuelven
con facilidad en soluciones ácidas o básicas; los metales nobles (como oro) no son
afectados por el pH (46).

Muchas veces los agentes oxidantes son la causa de un ataque corrosivo en un


material. Sin embargo, el agente oxidante que acelere el proceso de corrosión en
un material puede retrasarlo en otro, gracias a la formación de óxidos o adsorción
de oxígeno en su superficie (46).

En cuanto a la temperatura como factor en el proceso de corrosión, conforme


aumente esta, aumentará la velocidad de ataque al metal debido a que la difusión
del oxígeno del medio hacia el material se acelera, fragilizándolo, aún con capas
de pasivación (45).

Otra de las consideraciones es el aumento de velocidad en el movimiento de una


solución corrosiva sobre una superficie de metal, lo cual tiende a acelerar la
corrosión (46).

20
Dependiendo del tipo de metal que se tenga, se formarán diferentes películas sobre
el material, las cuales tendrán la capacidad de acelerar o ralentizar la velocidad de
corrosión (46)

Otro factor que puede influir en la corrosión es la diferencia de potencial entre


metales que se encuentran expuestos a las mismas condiciones, pues el metal
que cuente con un potencial estándar de oxidación mayor se corroerá debido a que
protegerá al metal con menor potencial de oxidación (47).

Además, los organismos macroscópicos o microscópicos suelen influir en la


corrosión, absorbiendo hidrógeno de la superficie del acero u obstruyendo zonas
de la superficie del metal, produciendo celdas de aireación diferencial (47).

Entre otros efectos se encuentran la concentración de la corriente respecto a la


velocidad de corrosión, y las impurezas en un material corrosivo, las cuales pueden
ayudar o afectar al material contra la corrosión, puesto que en ocasiones retrasan
el ataque y en otras tienden a dañar el metal, por ejemplo, destruyendo sus
películas (46).

En la mayoría de los procesos corrosivos se producen reacciones de óxido-


reducción, las cuales requieren de 3 constituyentes, que son electrodos (un cátodo
y un ánodo), un electrolito que funcione como medio conductor (usualmente en
solución acuosa) y una fuente de energía eléctrica que pueda ser suministrada
entre los electrodos (45).

Este tipo de reacciones se pueden dividir en dos semirreacciones, las cuales


corresponden al cátodo y al ánodo (45).

En el caso del ánodo, se tiene la semirreacción de oxidación, la cual es (45):

M0 → Mn + ne-¯

En cuanto al cátodo, presenta reducción, y su semirreacción es la siguiente (45):

Mn + ne- → M0

21
4.2.3. Implantes metálicos
Según la definición dada por la Real Academia Española, un implante es definido
como “prótesis, tejido o sustancia que se coloca en el cuerpo para mejorar alguna
de sus funciones, o con fines estéticos” (48).

Gracias a los avances tecnológicos de los últimos años, ha sido posible el desarrollo
de implantes elaborados de materiales metálicos (Figura 4) en el área de ortopedia,
traumatología (49) e incluso implantes dentales que se colocan en los huesos
maxilares debajo de las encías (50).

Figura 4. Implante para reemplazo total de cadera (4).

Un implante metálico debe cumplir con propiedades como una buena


biocompatibilidad, elevada resistencia mecánica a la corrosión y desgaste, baja
fricción y liviandad (51).

Si el implante debe ser retirado antes de cumplir con su periodo de vida útil, este
presentó fallos. Las diversas fallas que pueden presentar este tipo de prótesis
pueden verse provocadas por dos factores, que son mecánicos y biológicos. Las
fallas mecánicas ocurren cuando se presentan fenómenos como fractura,
deformación permanente, corrosión (el cual es uno de los problemas que más se
presentan en los implantes metálicos) y desgaste. Las fallas biológicas hacen

22
referencia a problemas infecciosos, inflamación o reacciones adversas en el cuerpo
(51).

Una manera de mejorar las propiedades de los implantes, además de generar una
mejor oseointegración y biocompatibilidad, es sometiendo el material a diferentes
tratamientos superficiales, modificando la rugosidad del material o depositando
recubrimientos sobre este (51).

Los implantes pueden ser clasificados por su tiempo de funcionamiento, habiendo


biomateriales temporales y permanentes (15).

Los implantes temporales son aquellos que con el paso del tiempo se degradan o
deben ser removidos del cuerpo una vez finalizado su periodo de vida útil, por
ejemplo, como se explicó anteriormente, por liberación de cationes tóxicos en los
implantes metálicos (15).

En cuanto a los permanentes, estos pueden permanecer en el cuerpo humano sin


necesidad de ser removidos en algún momento gracias a sus propiedades, aunque
usualmente su periodo de vida útil oscila entre 15 y 20 años (15).

4.2.4. Biomateriales
En cirugía, los biomateriales pueden utilizarse en la elaboración de prótesis o
implantes (52). Los biomateriales son definidos como materiales capaces de
interactuar con un sistema biológico, con el fin de evaluar, tratar o reemplazar un
órgano, tejido o función del cuerpo. Estos materiales pueden ser de origen natural
o artificial. Para poder utilizarse como biomateriales, deben ser biocompatibles (15),
es decir, poder estar en contacto con el cuerpo llevando a cabo una terapia sin
presentar afecciones, sino que por el contrario, generando una respuesta positiva
por parte del sistema que reciba dicho tratamiento (25).

Estos son desarrollados con diferentes fines; por ejemplo, para eliminar elementos
venenosos, reducir el módulo de Young para evadir el estrés, desarrollar aparatos
médicos o desarrollar la idoneidad de los tejidos y sangre (24).

Los biomateriales pueden beneficiar diferentes zonas del cuerpo, ya que algunos
son utilizados para órganos en específico mientras que otros se implementan en

23
sistemas completos. En el primer caso, los biomateriales podrían aplicarse por
ejemplo en el corazón para producir un marcapasos o válvulas artificiales, en un
pulmón que necesite una máquina de oxígeno, en un hueso para aplicar clavos
intramedulares, en un riñón que requiera ser expuesto a una máquina de diálisis,
entre otros casos (14).

En cuanto a los biomateriales utilizados en todo un sistema, pueden ser utilizados


en el esqueleto para la creación de implantes de articulaciones, en el sistema
integumentario para la inserción de piel, en el aparato digestivo como material de
suturas, en el aparato reproductor como material para mamoplastias, etcétera (14).

Los biomateriales ha pasado por tres diferentes generaciones, siendo la primera


entre los años 1950 y 1980, donde los materiales eran bioinertes (Tabla 1),
produciendo una mínima respuesta biológica (15).

La segunda generación de biomateriales, suscitada de 1980 al año 2000, son


materiales bioactivos, en los cuales se les buscó controlar las diferentes reacciones
que tenían con el tejido, buscando distintas respuestas celulares modificando las
características superficiales del material (15).

A partir del año 2000, surgió la tercera generación de biomateriales, la cual es


denominada ingeniería de tejidos y es en la que nos encontramos actualmente. En
esta, son creados reemplazos de órganos o tejidos in vitro, para después insertarse
dentro del cuerpo, teniendo un material con propiedades de bioabsorbabilidad y
bioactividad. Estos tienen una función temporal, puesto que, una vez que el tejido
reestablezca su función, el implante es reabsorbido (15).

Tabla 1. Características de materiales bioinertes (11).

4.2.4.1. Clasificación de biomateriales

Los biomateriales se clasifican de diferentes formas, pudiendo ser estas por su


origen y función fisiológica en el cuerpo (53).

24
Por su función fisiológica en el cuerpo, los biomateriales se clasifican en: tóxico,

Requerimiento Efecto

El material no se encuentra disuelto No habrá influencia sobre el


en el organismo; la materia que sea metabolismo y proliferación de
desprendida del implante no será células, además de que no habrá
causa de afecciones en el organismo información bioquímica en las células
del paciente. acerca de la presencia del implante.

Buena absorción de moléculas del Debido a que el implante es


organismo por parte de la superficie reconocido como una parte del
del implante, quedando cuerpo, no es atacado por el sistema
completamente cubierto de tejido vivo. inmunológico.

donde muere el tejido que se encuentra alrededor del material; no tóxico y


biológicamente inactivo, donde se forma un tejido fibroso alrededor del material; no
tóxico y bioactivo, donde se forman enlaces entre el tejido y el material; y no tóxico
y soluble, donde una vez disuelto es reemplazado por el tejido alrededor (14).

Por su fuente, los biomateriales pueden clasificarse en dos tipos: naturales y


sintéticos (15).

Los biomateriales naturales presentan un gran potencial en la medicina


regenerativa, ya que al ser materiales bioactivos y bioabsorbibles, es posible
estimular de manera controlada la respuesta celular y molecular. Estos pueden ser
autógenos (el paciente recibirá el injerto de su mismo cuerpo), alo-injertos (el injerto
se obtiene de una persona para ser aplicado a otra) y xeno-injerto (el injerto
proviene de una especie no humana, por ejemplo injertos de tejido animal o tejido
vegetal) (15).

Los biomateriales sintéticos suelen ser denominados como materiales biomédicos.


Estos se dividen de acuerdo a su composición en metálicos, cerámicos, poliméricos
y compuestos (15).

25
Los biomateriales cerámicos se componen de elementos metálicos y no metálicos,
unidos por enlaces iónicos o covalentes. Son rígidos, resistentes a elevadas
temperaturas, presentan una mayor resistencia a la corrosión que metales o
polímeros, y además son resistentes a la compresión (54); sin embargo, suelen ser
materiales quebradizos, ya que tienen escasa resistencia a fuerzas de tracción,
flexión y no presentan deformación plástica (25).

Los biomateriales poliméricos se encuentran compuestos de átomos de carbono y


otros elementos unidos por enlaces covalentes (54). Son los más utilizados en
implantes e ingeniería de tejidos, puesto que presentan propiedades cercanas a los
tejidos vivos (debido a que pueden adaptar sus propiedades al tejido receptor) (53),
son muy resistentes a la corrosión y algunos son flexibles (54).

Los biomateriales composites son elaborados de varios materiales diferentes,


unidos normalmente por enlaces químicos débiles (54). En estos se pueden
aprovechar las mejores propiedades mecánicas de cada material (25).

Actualmente estos son muy utilizados en el campo de la bioingeniería, por ejemplo


para la elaboración de prótesis de brazos y piernas. Un biomaterial compuesto muy
utilizado es plástico reforzado con fibras de vidrio, y al estar combinados, el plástico
impide la rotura de las fibras, mientras que estas no permiten que el plástico se
deforme, volviéndose ambos materiales más resistentes a la rotura de lo que son
por sí solos (25).

4.2.4.1.1. Biomateriales metálicos


Los biomateriales metálicos son muy utilizados debido a su resistencia a la
corrosión, la dureza que presentan, lo cual los vuelve resistentes, y a que pueden
ser moldeados a diferentes formas deseadas. Estos son elaborados ya sea de un
solo elemento metálico o de aleaciones. La mayoría de estos biomateriales son
buenos conductores de calor y electricidad (54).

Este tipo de materiales son muy efectivos cuando el paciente requiere de un


implante que soporte cargas cíclicas. Sin embargo, algunos biomateriales
comienzan a liberar cationes metálicos tóxicos con el paso del tiempo, por lo que
debe analizarse su periodo de vida útil para ser extraídos. Una solución a este

26
último problema son los implantes biodegradables y absorbibles, pero de igual
manera, algunos presentan limitaciones, ya que liberan iones metálicos tóxicos. A
pesar de eso, se pueden llevar a cabo tratamientos sobre algunos materiales para
controlar la velocidad de degradación, estabilidad química y corrosión (15).

4.2.4.1.1.1. Aleación Ti-6Al-4V


Las aleaciones de titanio son utilizadas para la elaboración de implantes debido a
su alta biocompatibilidad, resistencia a la corrosión (24), buena oseointegración,
alta fuerza específica, módulo de elasticidad similar al del hueso y su capacidad de
ser inerte dentro del cuerpo (17). En estas se suele formar una delgada capa de
óxido de titanio que protege la superficie incluso más que la capa protectora de
aceros inoxidables y ayuda a una mejor oseointegración (12) (Figura 5).

Figura 5. Radiografía de fémur con aguja de Ti-6Al-4V implantada


interiormente (5).

La aleación de titanio más común, sumamente utilizada tanto en aplicaciones


biomédicas como en industriales, es Ti-6Al-4V (Figura 6), la cual es una aleación
grado 5 perteneciente al grupo de aleaciones α + β (16). Esta representa más del
50% de la producción de aleación de titanio (55). Esta presenta como elementos
primarios de aleación el aluminio (entre 5.5% y 6.5%) y el vanadio (entre 3.5% y
4.5%) (Tabla 2) (12).

27
Figura 6 Microestructura de la aleación Ti-6Al-4V (6).

Tabla 2. Composición de la aleación Ti-6Al-4V (W%) (12).

Esta aleación es por encima de muchas aleaciones de titanio una de las que poseen

Fe Al V C Ti

0.4 6.0 4.0 0.01 Balance


mayor grado de solubilidad gracias a su morfología laminar martensitica (α’)
formada por el rápido enfriamiento provocado por la soldadura, y a sus niveles
menores de fragilidad y dureza comparándolos con las aleaciones aleaciones α+β
con más estabilizadores β. Además, presenta una buena relación de resistencia y
tenacidad, una gran estabilidad mecánica al rebasar los 400 °C y poseen un bajo
nivel de endurecimiento (16).

Uno de los problemas presentados en las aleaciones de titanio es la baja


resistencia al desgaste que poseen, lo cual dificulta el desarrollo de prótesis
articulares y aplicaciones donde el material requiera ser sometido a fricción (20).

Otra limitante es la formación de biofilms sobre el material, la cual es la principal


limitante del titanio y sus aleaciones (17). Los biofilms son comunidades de
microorganismos que crecen embebidos en una matriz de expolisacáridos y se
unen a una superficie inerte o tejido vivo (56). Estas se conforman principalmente
de bacterias Gram negativas y Gram positivas. La adherencia de una bacteria sobre
la superficie ocurre primero mediante fuerzas de Van der Waals, produciéndose
una adherencia temporal, y después, se produce una adhesión irreversible debido

28
a que se ven involucrados enlaces iónicos o covalentes. Por ende, resulta
conveniente la utilización de recubrimientos con propiedades bactericidas, con el
fin de evitar la formación de biofilm sobre el implante, evitándose el rechazo de este
(17).

Además, la capa de óxido de Ti producida sobre el Ti-6Al-4V no es muy estable, y


tiende a desprenderse fácilmente, disminuyendo la biocompatibilidad, bioactividad
y permitiendo la liberación de iones tóxicos dentro del organismo, por lo que la ruta
de los recubrimientos pueden hacer que la superficie del material sea bioactiva (19).

Las propiedades del Ti-6Al-4V dependen de la manera en que se obtuvieron,


puesto que en el material forjado las propiedades son mayores que las del material
colado. Por ende, se utiliza el material forjado para la elaboración de piezas
pequeñas de prótesis (9).

Para el material forjado o colado de Ti-6Al-4V utilizado para la biomedicina,


dependiendo del estándar que se tome como referencia serán los mínimos
requerimientos para que cumpla con ciertas propiedades. Las propiedades
mecánicas mínimas a considerar en el material forjado tomando como referencia el
estándar activo ASTM F136 son: resistencia a tracción de 860 MPa, límite elástico
de 795MPa, elongación de 10% y estricción de 25%. Si el material es colado, las
propiedades mecánicas mínimas según el estándar ASTM F1108 son una
resistencia a tracción igual a 860 MPa, límite elástico de 758 MPa, 8% de
elongación y 14% de estricción (9).

En ocasiones es necesaria la aplicación de un tratamiento térmico a la aleación. En


dichos casos las propiedades cambian dependiendo del tratamiento. Por ejemplo,
si se lleva a cabo el recocido del material, el límite elástico será de 986 MPa,
resistencia a tracción igual a 1,050 MPa y 14% de elongación (9).

El tratamiento térmico al que las aleaciones de titanio son mayormente sometidas


con el fin de aumentar la dureza superficial del material y volverlos más resistente
al desgaste son la anodización, con la cual se logra formar una capa de TiO 2 de
100 nm de espesor sobre el material, la cual logra mejorar la dureza del material;
sin embargo, dicha capa es frágil e incapaz de soportar mucho esfuerzo mecánico.
Otra técnicas que pueden incluirse son la deposición química y electroquímica de

29
cromo o níquel o la deposición física de vapor, con las cuales es posible obtener
capas de TiN, las cuales mejoran la resistencia al desgaste (18).

Sobre las aleaciones de titanio es posible igualmente efectuar tratamientos


termoquímicos por medio de difusión en estado de carbono y nitrógeno sobre el
sustrato, con los cuales se obtienen revestimientos más homogéneos y resistentes;
sin embargo, estos no se suelen emplear con frecuencia debido a que la fusión del
carbono y nitrógeno ocurre a 800 °C, y a dicha temperatura, el hidrógeno y oxígeno
pueden llegarse a integrar a la microestructura de las aleaciones, provocando
fragilidad, pasivaciones e impidiendo la incorporación del carbono y nitrógeno (18).

A llevarse a cabo un tratamiento termoquímico de nitruración, donde, en


comparación con el tratamiento de recocido, en comparación con el tratamiento
térmico de recocido, el límite elástico y la resistencia a tracción disminuyen,
mientras que el porcentaje de elongación aumenta. Al someter la aleación a dicho
tratamiento a 566 °C por 8 horas se obtiene un límite elástico de 758 MPa,
resistencia a tracción de 834 MPa y una elongación de 23% (9).

Un aspecto importante a considerar respecto a la aleación Ti-6Al-4V es que no debe


someterse a un enfriamiento rápido desde la fase β después de un tratamiento
térmico, pues se obtendría una morfología con mayor fragilidad (57).

En cuanto a sus propiedades físicas, presenta una densidad de 4.42 g/cm3, rango
de fusión de 16.49°C, resistividad volumétrica de 170 Ωcm, calor específico igual a
560 J/Kg°C y módulo de elasticidad de 114 GPa (58).

En 2015, Juan Ahuir (13), estudiante de la Universidad Autónoma de Madrid, realizó


su tesis doctoral donde analizó el comportamiento electroquímico de muestras de
Ti-6Al-4V y AA2024-T3, donde determinó la resistencia del material a ataque
corrosivos. Las muestras lisas de Ti-6Al-4V fueron sometidas a un tratamiento
electroquímico en un medio salino de NaCl a 0.6 M, con un potencial a circuito
abierto. Según los resultados, se presentó potencial inicial menor a -0.16 V con
disminución aproximada de -0.2 V vs. Ag/AgCl en 500 segundos. La velocidad de
polarización es la forma en que va variando el potencial con el paso del tiempo.
Según resultados de curvas de polarización de las muestras lisas, se obtuvieron
valores de potencial de corrosión de -0.214 V vs Ag/AgCl. Se determinó que las

30
muestras lisas presentaban baja resistencia al desgaste, por lo que para mejorar
sus propiedades tribológicas, así como para obtener un mayor potencial de
corrosión a circuito abierto, se podía optar por recurrir a la texturización superficial
por láser (TLS), ya que el mecanismo de corrosión se ve afectado por la textura
que presente y la densidad de la misma.

En 2008, Camero, et al. (10) llevaron a cabo experimentos sobre la aleación Ti-6Al-
4V, para estudiar el comportamiento a la corrosión de la aleación Ti6Al4V bajo
condiciones que simularan el cuerpo humano, verificando la resistencia la
polarización que dicho material presentaba, siendo sometidas las muestras a una
solución FCS compuesta de 7.996 g/L de NaCl, 0.350 g/L de NaHCO3 , 0.224 g/L
de KCL, 0.228 g/L de K2PO43H2O, 0.305g/L de MgCl26H2O, 0,278 g/L de
CaCl2, 0,071 g/L de NaSO4 y6,057 g/L de (CH2OH)3CNH2, durante 0, 180 y 360
horas. Los ensayos de resistencia a la polarización (Rp) se efectuaron realizando
un barrido con potencial de -10 mV a +10 mV con respecto al potencial (Eoc). Los
ensayos de polarización potenciodinámica se realizaron a una temperatura de
37°C, con un potencial inicial de -300 mV vs Eoc y un potencial final de 1600 mV vs
ECS. La velocidad de barrido de potencial fue de 0,334 mV/s. La caracterización
de las superficies de las muestras las fue llevada a cabo mediante microscopía
electrónica de barrido.

A medida que el tiempo de inmersión aumentó, incrementó la resistencia a la


polarización, y de las 180 a 360 horas, la resistencia a la polarización disminuyó;
dicha disminución ocurrió debido a la disolución del óxido de vanadio por la
presencia de iones Cl- de la solución FCS, lo cual provocó vacancias en la película
pasiva de Ti-6Al-4V, por lo que se determinó que a solución era capaz de producir
corrosión por picadura (10).

Otro tratamiento contra el deterioro, la corrosión y liberación de iones metálicos


tóxicos de la aleación al ser utilizada en el desarrollo de implantes fue llevado a
cabo por Malhotra, R., et al., en 2020 (59), el cual consistió en aplicar
nanorevestimientos de grafeno grado 5 y 23 sobre discos de Ti-6Al-4V. Las
muestras recubiertas por grafeno presentaron mayor estabilidad electroquímica, así
como una tasa de corrosión muy baja y estable; además, con la espectroscopía

31
Raman se observó una buena estabilidad estructural en el revestimiento grafeno,
así como resistencia a las tensiones mecánicas y degradación química.

4.2.5. Biorecubrimientos
Los recubrimientos son materiales que se encuentran en forma de polvo, líquido o
pasta (60), los cuales al aplicarse sobre una superficie forman una película que
protege de factores ambientales, embellece o impide el contacto entre el material
recubierto y elementos extraños (61).

Algunos recubrimientos pueden, además de proteger al material del medio


ambiente, presentan biocompatibilidad, pudiendo ser utilizados sobre biomateriales
y dotando a estos de mejores propiedades, dando como resultado un mejor anclaje
e integración dentro del organismo (62).

4.2.5.1. Materiales grafénicos

4.2.5.1.1. Grafeno
El grafeno es un material nanométrico con un espesor de 1 a 10 átomos de carbono
aproximadamente (63). Se encuentra compuesto de carbono puro, con una
estructura hexagonal similar al grafito, pero este último que posee varias capas,
mientras que el grafeno es cada lámina individual del grafito, por lo que es un
material 2D (Figura 7) (7). Recibió su nombre en 1986 por Bohem, H. P. et al.,
combinando la palabra “grafito” y el sufijo –“eno”, el cual hace referencia a los
hidrocarburos aromáticos policícicos (31).

Figura 7. Estructura molecular del grafeno (64).

32
Este material posee propiedades que lo vuelven muy estudiado y solicitado. Entre
estas podemos destacar que es hasta 100 veces más fuerte que el acero, es casi
transparente a la luz (absorbe solo el 2% de esta, sin importar si es luz visible,
infrarroja, ultravioleta o de cualquier longitud de onda) (32), presenta permeabilidad,
elasticidad de forma reversible de hasta un 10%, módulo de Young de 0.5 TPa,
ligereza, capacidad de soportar radiación ionizante y evita la corrosión (21).

Uno de los problemas que presenta el grafeno es el alto coste y volumen de


producción que se obtiene. Debido a ello, se han desarrollado diferentes materiales
grafénicos, los cuales son más sencillos y económicos de obtener. La manera más
sencilla actualmente para la producción de estos, es partiendo grafito o sus
derivados, trabajándolos por diferentes métodos químicos, obteniéndose
materiales de diferentes características, como el óxido de grafeno y óxidos de
grafeno con diferentes grados de reducción, los cuales pueden ser usados para
diversas aplicaciones (65).

Además, el grafeno ha presentado diferentes niveles de citotoxicidad en estudios


celulares, disminuyendo la adhesión celular, induciendo apoptosis celular y
entrando en varios compartimientos celulares. La citotoxicidad suele depender de
factores como la concentración, tamaño y forma del material grafénico, así como
del tipo de dispersantes (66).

Según pruebas realizadas por Wojtoniszak et al. en 2012 (67), se demostró que el
óxido de grafeno (GO) y el óxido de grafeno reducido (rGO) presentaban cierta
toxicidad sobre células de fibroblastos de ratones (línea L929), pero esta podía
controlarse dependiendo de la concentración y dispersante utilizado. Al tener una
concentración de entre 3.225 g/mL y 12.5 g/mL se demostró una citocompatibilidad
relativamente buena. En concentraciones más bajas, el GO y el rGO presentan una
mayor estabilidad, mientras que al incrementarse la concentración del material
grafénico en el dispersante, la viabilidad celular reduce. Se determinó que
manejando el GO suspendido en polietilenglicol se presenta una baja toxicidad.

Un factor importante en la biocompatibilidad del grafeno es la funcionalización de


la superficie. Pues esta puede reducir la interacción hidrofóbica del grafeno con las
células y tejidos (66), ya que, debido a la superficie hidrófoba del grafeno, este

33
puede interactuar con los lípidos de la membrana celular y causar toxicidad (68).
Además, gracias a la funcionalización es posible la reducción de especies reactivas
del oxígeno, las cuales propician la apoptosis (66).

4.2.5.1.2. Óxido de grafeno


El óxido de grafeno (GO) es una lámina de grafeno con algún grupo funcional
oxigenado. Este puede emplearse como precursor para la obtención de grafeno o
como un material grafénico. Este se caracteriza por ser un material aislante,
higroscópico (7) e hidrofílico, debido a que posee alto contenido de oxígeno (69).
Además, el GO es fácilmente funcionalizable, lo cual le brinda ventajas en el campo
de la biomedicina al poder por ejemplo ser portador de medicamentos. Igualmente,
se ha demostrado que las películas de GO son antibacterianas, por lo que podrían
ser utilizadas en el ámbito alimenticio o de medicina (7). Otra de las ventajas de
este material es la posibilidad de utilizarlo junto con otros materiales, formando
híbridos, de modo que puedan modificar su capacidad de adsorción y remover
metales pesados (razón por la que es utilizado para el tratamiento de aguas) (70).

El óxido de grafeno ha sido representado por diferentes estructuras propuestas


con el paso del tiempo (Figura 8). En 1939, Hofmann y Host propusieron un modelo
de la estructura del óxido de grafeno con grupos epoxi sustituidos al azar (7).
Sucesivamente, Ruess, en 1946, además de grupos epoxi, añadió a su modelo
grupos hidroxilo y éter estableciendo puentes de hidrógeno entre átomos de
carbono, demostrando una estructura tridimensional y desordenada (63). Depués,
en 1969, Scholz-Boehm crearon su modelo sustituyendo los grupos epoxi y éter de
la estructura por grupos carbonilo e hidroxi (71).

Tiempo después, en 1988, fue elaborado del modelo de Nakajima-Mutsuo, el cual


proponía una estructura en la que los átomos de oxígeno de los grupos epoxi se
encargaban de la unión de las capas adyacentes (7). En 1998 fue propuesto el
modelo de Lerf-Klinowski (69), el cual propone dos regiones distintas en la
estructura del GO, donde en una hay grupos funcionales hidróxilo o epóxido que
decoran el plano basal, los cuales son segregados entre las regiones ligeramente
oxidadas; por otra parte, los ácidos carboxílicos o carboxilatos se encuentran

34
presentes en los bordes de las hojas de GO, dependiendo del valor del pH de la
solución (72).

En el año de 2006 (69), fue desarrollado el modelo de Szabo–Dekany, el cual


incorporó las características estructurales propuestas por Sholz-Boehm y Ruess
(7).

Figura 8. Modelos estructurales del GO que han sido propuestos con el


paso del tiempo (72).

Actualmente, el modelo más aceptado (Figura 9) se encuentra conformado de


distintos grupos oxigenados distribuidos en la lámina de GO sin un orden definido.
Este puede presentar grupos epoxi o hidroxilo dentro de los dominios aromáticos
(Figura 8, A y B respectivamente), o en el borde de los mismos (Figura 8, A’ y B’
respectivamente), además de tenerse carbonilos (Figura 8, C) y ácidos carboxílicos
(Figura 8, D), de igual manera, en el borde de los dominios aromáticos (7).

No es posible tener un modelo exacto de la estructura del óxido de grafeno, ya que


esta dependerá de las condiciones del método de oxidación, así como del material
de partida, pudiendo por lo tanto cambiar los grupos funcionales y la distribución de
estos (7).

35
Figura 9. Modelo estructural más aceptado actualmente del GO (7).

Una de las mejores maneras de obtener un material similar al grafeno, es utilizando


como precursor GO y reducirlo, para de esta manera eliminar parcialmente o casi
por completo los grupos oxigenados, obteniendo parcialmente las propiedades del
grafeno prístino (22).

El GO se obtiene mediante un proceso de oxidación y exfoliación del grafito (Figura


10). Para que el grafito se oxide, debe someterse a diferentes agentes oxidantes
con los que reaccionará en un medio ácido (71). Un método útil para esto, es el
método de Hummers, el cual es actualmente el más empleado para la preparación
de GO. En este, se rompen las fuerzas de Van der Waals en los dominios
aromáticos utilizando KMnO4 y NaNO3 en H2SO4 concentrado (7), de los cuales,
deben removerse los iones excesivos de permanganato y sulfato debido a que
actúan como contaminantes (63).

El óxido de grafito debe posteriormente exfoliarse en la fase de solución con el fin


de obtener hojas de GO (22).

Como el óxido de grafito (GtO) es un material higroscópico e hidrofílico, las


moléculas de agua pueden intercalarse fácilmente entre sus láminas, pudiendo

36
aumentar la distancia entre ellas de 6 a 12 Å. Además, los grupos funcionales
introducidos entre los planos basales del grafito incrementan la distancia entre las
láminas de óxido de grafito, debilitando las fuerzas de Van der Waals que las unen,
por lo que su exfoliación es posible únicamente con la aplicación de ultrasonidos o
un disolvente apropiado, obteniéndose suspensiones estables de GO (7).

Figura 10. Proceso de preparación del GO (7).

4.2.5.1.3. Óxido de grafeno reducido


La reducción del óxido de grafeno es una técnica mediante la que se eliminan
parcial o totalmente los grupos oxigenados, restaurando parcialmente la
aromaticidad del sistema y obteniéndose propiedades mecánicas, térmicas y
eléctricas similares a las del grafeno (73).

Sobre este material se han realizado pruebas acerca de su funcionamiento como


bactericida, obteniéndose resultados favorables.

En 2010, Hu, W. et al. (74) (75), elaboraron un papel de grafeno mediante la


suspensión de derivados del mismo (GO y rGO) para finalmente proceder con una
filtración al vacío. Realizaron pruebas respecto a sus propiedades bactericidas con
la bacteria Escherichia Coli. DH5, en las cuales observaron que ambos materiales
son capaces de inhibir el crecimiento de la bacteria, mientras muestran un mínimo
nivel de citotoxicidad. Los derivados del grafeno mostraron un elevado efecto
bactericida, obteniéndose niveles de mortandad de más del 90% de bacterias, tanto
Gram-positivas como Gram-negativas, en solo dos horas utilizando una
concentración de una concentración de 0,85 mg/mL; sin embargo, se determinó

37
también que las nanoláminas de rGO presentaron una actividad ligeramente menor
que las de GO.

Muy similar al proyecto elaborado en 2010, el siguiente año Lui, S., et al. (74) (76)
realizaron pruebas sobre grafito (Gt), GtO, GO y rGO, con el fin de comparar el
efecto bactericida de estos, realizando pruebas con la bacteria Escherichia Coli,
sometiendo los cuatro materiales a condiciones de concentración e incubación
similares. Se determinó que el material que presentó una mejor actividad
antibacteriana fue el GO, seguido secuencialmente del rGO, Gt y GtO. Los
resultados apuntaron que las acciones antimicrobianas dependen tanto del estrés
oxidativo como de la membrana, y se observó que los rGO y Gt conductivos
presentaron mayor capacidad de oxidación hacia GSH, el cual es un tripéptido con
grupos tiol, que los aislantes GO y GtO. También demostraron que al haber un
contacto directo entre las bacterias y las nanoláminas de grafeno se pueden
producir daños irreversibles en las células; al haberse encontrado expuestas a
dispersiones de GO o rGO, las células bacterianas se aplanaron, perdiendo su
integridad.

Hay diversas maneras de reducir el GO, como la reducción térmica (22) o rutas
químicas, las cuales son la reducción fotocatalítica, reducción de reactivos
químicos, reducción solvotermal y reducción electroquímica (77).

La reducción térmica, como su nombre lo dice, consiste en someter el GO a un


tratamiento térmico a las temperaturas y atmósferas requeridas empleando
distintas fuentes de calor como hornos eléctricos, láser, plasma, hornos microondas
o una corriente eléctrica; por lo tanto, las propiedades y características del producto
obtenido dependerán las condiciones bajo las que fue llevado a cabo el tratamiento.
La ventajas que este tratamiento presenta son que permite la exfoliación y
reducción del GO en un solo paso; además, al no ser necesario el empleo de
reactivos químicos, no requiere de un tratamiento posterior de purificación (8).

La exfoliación es producida debido a que la descomposición de los grupos


funcionales oxigenados que se encuentran en el GO se expanden rápidamente,
generando una elevada presión que supera las fuerzas de Van der Waals, las
cuales unen las láminas del grafeno. Sin embargo, esta técnica posee el

38
inconveniente de que se presentan defectos y vacancia al suscitarse la eliminación
de los grupos funcionales, pero, si las temperaturas que se manejan son superiores
a 1000 °C, puede restaurarse la estructura sp2, obteniéndose rGO con
conductividades eléctricas de 2300 S/m (8).

La reducción de reactivos químicos se lleva a cabo utilizando agentes químicos


reductores como la hidracina, dimetil-hidracina, hidroquinona y boro-hidruro de
sodio (8), los cuales reaccionan el GO. Este tipo de reducción se puede llevar a
cabo en temperatura ambiente o por calentamiento moderado, por lo que el
requisito del medio ambiente y equipo a utilizar no es tan crítico (77). Uno de los
problemas del uso de la hidracina es que presenta una elevada toxicidad, por lo
que no es posible utilizarla para reducir grandes cantidades de GO. Por ende, esta
ha sido reemplazada en ocasiones por el boro-hidruro de sodio, pero a pesar de
ser eficaz reduciendo grupos carbonilo, no es eficaz con la reducción de grupos
epóxidos y carboxílicos, además de que tiende a reaccionar con el agua, lo que
provoca una cinética muy lenta durante el proceso de reducción debido a que esta
es el principal factor de dispersión y exfoliación del GO. Este tipo de reducción no
logra eliminar completamente los grupos funcionales e introduce heteroátomos a la
estructura del grafeno, por lo que otras personas optan por la reducción
fotocatalítica (8).

En la reducción fotocatalítica la muestra de GO se somete a reacciones


fotoquímicas con un fotocatalizador; el más empleado es el TiO 2 (Figura 11). Esta
puede trabajarse en una suspensión acuosa usando luz ultravioleta (8). Antes de
que se presente la reducción, pueden llegarse a producir una combinación entre
las nanopartículas de TiO2 y las láminas de GO debido a la interacción entre grupos
carboxilo de las hojas de GO con los grupos hidroxilo en la superficie del TiO2
debido a la transferencia de carga que hay sobre el fotocatalizador. Esta estructura
puede conservarse incluso después de la reducción (77).

39
Figura 11. Aceptación de electrones por GO en el proceso de fotocatálisis sobre
TiO2 y cambio de color del GO debido a la reducción (8).

La reducción solvotermal es llevada a cabo en un recipiente cerrado


herméticamente llevándose a cabo un tratamiento hidrotérmico a partir de una
suspensión de GO utilizándose agua como disolvente; el disolvente alcanza una
temperatura mayor a su punto de ebullición, reduciendo parcialmente el GO,
eliminándose parte de los grupos funcionales y recuperando en cierta medida la
estructura aromática (8). Esta técnica ofrece una alternativa de química verde a
solventes orgánicos al tener agua como agente reductor; además, las propiedades
fisicoquímicas del rGO pueden modificarse ampliamente cambiando la presión y la
temperatura a la es llevada a cabo la reducción (77).

La reducción electroquímica del GO resulta un método muy conveniente, debido a


que es sencillo, rápido, económico y no propicia un daño ambiental, permitiendo la
obtención de materiales de grafeno de buena calidad. Esta se puede llevar a cabo
de dos diferentes maneras: la primera consta de un paso, y la segunda de dos (22).

4.2.5.1.2.1. Reducción electroquímica del óxido de grafeno


En la reducción electroquímica por un paso se utiliza un electrolito de soporte,
usualmente un buffer fosfato salino (PBS), con la suspensión coloidal de GO para
formar en un solo paso el medio para la reducción. Las láminas de GO pueden ser
sometidas a diferentes procesos como voltamperometría cíclica, voltamperometría
de pulso diferencial (DVP) o a un potencial constante en un sistema electroquímico
estándar de tres electrodos a temperatura ambiente, para su reducción
electroquímica en la suspensión coloidal acuosa, utilizando un potencial negativo
constante hasta la reducción total de hojas de GO en la suspensión. Gracias a este
método se logra producir películas delgadas de ErGO sobre la superficie del
electrodo debido a la diferencia entre la solubilidad del GO y el ErGO obtenido en

40
el electrolito acuoso. Dos factores importantes a considerar al llevar a cabo en la
ruta de un paso son la conductividad del medio y la selección de un pH adecuado,
pues así se determinará la calidad adecuada de las películas de GO. Para un pH
neutro, los rangos adecuados de conductividad oscilan entre 4 y 25 mS/cm (22).

En la reducción electroquímica en dos pasos, un electrodo que será utilizado como


sustrato es recubierto con una fina capa de GO, pudiendo ser mediante diferentes
técnicas de autoensamblaje como la colada el recubrimiento por inmersión,
colocación de capa por capa y revestimiento por pulverización). Esta capa se debe
dejar secar, para después ser sometida a reducción en un sistema electroquímico
para producir sobre el sustrato películas de ErGO. El sistema estándar utilizado
consta de tres electrodos y un electrolito de soporte, el cual es comúnmente buffer
fosfato salino (PBS) (22).

Esta técnica puede llevarse a cabo sobre sustratos aislantes o conductores; sin
embargo, para los sustratos aislantes resulta necesario tener un electrodo adicional
que sea conductor, pues será el que actúe como electrodo de trabajo. Para definir
el grosor y tamaño de la película de ErGO que se desea obtener es necesario
controlar la cantidad de GO que es depositada sobre el sustrato; también es posible
controlar las variables mencionadas anteriormente si se lleva a cabo el premontaje
del GO sobre el sustrato utilizando un agente aglutinante que ayude a mejorar la
adherencia (22).

En 2018 fue realizado un proyecto por García, A., et al. (78), quienes trabajaron en
una investigación donde el objetivo fue recubrir implantes de CoCr con una capa
de ErGO con el fin de reducir la corrosión de la aleación y mejorar la portabilidad
de los implantes. Según los resultados que obtuvieron, no se logró el grosor
deseado, pues se observó que el sustrato quedó recubierto de aproximadamente
80 capas de ErGO; además, la caracterización por espectroscopía Raman
demostró un desorden estructural en las capas depositadas debido a la presencia
de residuos de CeO y O. El GO no se redujo por completo, así que las propiedades
del grafeno no se obtuvieron como se deseaba; sin embargo, se lograron obtener
parcialmente películas de ErGO sobre los sustratos de CoCr mediante la reducción
directa. Sin embargo, determinaron que se necesita más investigación para verificar
su aplicación en el campo biomédico, específicamente, el comportamiento de

41
corrosión por desgaste, la biocompatibilidad y la efectividad de una modificación
de la superficie del grafeno para inhibir la degradación de los implantes articulares
y extender su periodo de vida.

Además, en 2019, fue publicado un trabajo de Escudero ML, et al., en el cual


realizaron pruebas de biocompatibilidad del ErGO, sembrando macrófagos de ratón
J774A1 sobre la una muestra de CoCr y otra del mismo material pero recubierto
con ErGO (79).

Los macrófagos toman un papel importante en cuanto a la inflamación que tiende


a producirse y puede llegar a aflojar de los implantes, y por ende, propiciar el fallo
de los mismos (79), ya que los macrófagos pueden ser tipo 1 (M1), los cuales son
considerados proinflamatorios, o tipo 2 (M2), que secretan interleucinas
antiinflamatorias (80).

Con base en las imágenes obtenidas por microscopía electrónica de barrido se


observó que las muestras recubiertas con ErGO presentaron una mayor
adherencia, ya que además de mantener un mayor volumen, fue posible apreciar
extensiones celulares, mientras que en la muestra de CoCr se observó una forma
más redondeada y plana. Por ende, se indicó una mejor biocompatibilidad en la
muestra recubierta (79).

La uniformidad de la película depende de la técnica de depósito que se emplee,


pues si bien el método por inmersión produce capas no uniformes debido a
aglomeraciones, con el método de pulverización el espesor de la película puede
controlarse al modular el tiempo y concentración de la dispersión (22).

4.3. Metodología
La presente revisión bibliográfica fue llevada a cabo en Tampico, Tamaulipas. Se
optó por búsqueda de información referente a un proyecto que por el momento se
encuentra en desarrollo en el Centro de Investigación en Ciencia Aplicada y
Tecnología Avanzada, Unidad Altamira, titulado “Caracterización de depósitos de
óxido de grafeno reducido electroquímicamente sobre sustratos de CoCrMo y Ti-
6Al-4V para aplicaciones biomédicas”, el cual se encuentra en desarrollo por la
M.T.A. Greta De Monserrat Tavarez Martínez, bajo la dirección del Doctor Edgar

42
Onofre Bustamante y la Doctora María Cristina García Alonso. La presente tesis
tiene como sustento la recopilación de datos relevantes acerca de todo lo referente
a recubrimientos de ErGO sobre la aleación Ti-6Al-4V, partiendo del 6 de mayo del
2020, al 9 de septiembre del mismo año, indagando principalmente en diferentes
tesis de licenciatura, maestría y doctorado, libros y artículos científicos de fuentes
como SciELO y Science Direct.

4.4. Desarrollo experimental


El desarrollo del presente trabajo se encuentra dividido en 3 fases, las cuales son
delimitación del proyecto, búsqueda de información y redacción de tesis.

El periodo de estadías tuvo comienzo el 6 de mayo del 2020. Durante la delimitación


del proyecto, se optó por la modalidad de trabajo más conveniente a llevar a cabo
tomando en cuenta la situación actual debido a la pandemia. Se decidió elaborar
una revisión bibliográfica relacionada a proyectos que hasta ahora se encuentran
en desarrollo; dichos proyectos se basan en la síntesis de un biorecubrimiento
sobre implantes metálicos, con el fin de mejorar ciertas propiedades del material a
recubrir. Se optó por investigar acerca de la aleación Ti-6Al-4V y por el óxido de
grafeno reducido electroquímicamente (ErGO) utilizado como biorecubrimiento
debido a la controversia que este tiene actualmente.

Inicialmente, se comenzó con una búsqueda de información general acerca de


temas vinculados al proyecto elegido, de modo que fuera posible comprender mejor
fundamentos y antecedentes; el 12 de junio de 2020, fue entregada por primera vez
al asesor industrial la investigación generalizada, la cual abordaba temas como la
electroquímica, corrosión, tipos de recubrimientos existentes, biomateriales y
propiedades físicas, mecánicas y electroquímicas de aleaciones utilizadas como
biomateriales (específicamente CoCrMo, AZ31, Ti-6Al-4V y 316L). Dicho trabajo
fue revisado y corregido, comenzando a añadirse información referente al ErGO
como biorecubrimiento. El 10 de julio de 2020, dichas correcciones y actualización
del trabajo fueron nuevamente enviadas al asesor industrial.

El 17 de junio de 2020 se inició con la redacción de la presente tesis, tomando en


cuenta los datos recabados con anterioridad y procediendo con nuevas búsquedas
de información acerca de electroquímica, corrosión, implantes metálicos, tipos de

43
biomateriales, biomateriales metálicos, aleación Ti-6Al-4V, biorecubrimientos,
grafeno, óxido de grafeno, métodos de reducción del GO y reducción
electroquímica del GO, tomando como referencia principal diversos artículos
científicos, tesis y libros, para finalmente redactar una conclusión el 16 de agosto
de 2020 referente a todo lo que fue posible analizar acerca del tema de interés.

44
CAPÍTULO 5. RESULTADOS Y DISCUSIÓN

Según los datos recabados de las normas ASTM F136 y ASTM F1108, recopilados
del trabajo elaborado por Rodríguez, D. en 1999 (9), las propiedades a tracción
mínimas de la aleación Ti-6Al-4V establecidas varían dependiendo de la manera
en que dicha aleación es obtenida (Tabla 3) (Figura 13). Si el material es forjado,
presentará la resistencia a tracción que si es colado, pero tendrá un mejor límite
elástico y mayor porcentaje de elongación, por lo que presentará una mejor
resistencia mecánica; sin embargo, el material colado es conveniente para la
elaboración de piezas pequeñas de implantes.

Tabla 3. Propiedades mínimas requeridas para la aleación Ti-6Al-4V según las


normas ASTM F136 y ASTM F1108, con base en la información del trabajo
elaborado por Rodríguez, D. (9), elaboración propia.

Propiedades mínimas requeridas de la aleación Ti-6Al-4V dependiendo


de su método de obtención

Método de Resistencia a Límite elástico


Elongación (%)
obtención tracción (MPa) (MPa)

Forjado (Según
la norma ASTM 860 795 10
F136)

Colado (Según la
norma ASTM 860 758 8
F1108)

La microestructura de la aleación Ti-6Al-4V se encuentra conformada de granos


equiaxiales de fase α y placas de Windmanstatten de fase α de pequeño tamaño.
Si dicha aleación es sometida a un tratamiento térmico de temperaturas superiores
a 1040 °C y enfriarse lentamente la muestra lentamente, la estructura que se
obtendría sería de placas α de Windmanstatten rodeadas de fase β (Figura 12) (6).
45
Figura 12. Microestructura de aleación Ti-6Al-4V totalmente de placas α de
Winmanstatten rodeadas de fase β, según el trabajo realizado por Rodney, E.,
et al. (6)

Dicha estructura presentaría menor resistencia a fatiga y tenacidad, pero al


someterse a tratamiento térmicos, la velocidad de agrietamiento por fatiga
disminuiría, por lo que someter la aleación a dicho tipo de tratamientos, resultaría
benéfico (6).

Cabe destacar que, si la aleación Ti-6Al-4V, se somete a un tratamiento térmico de


recocido, sus propiedades incrementan notablemente, lo que lo vuelve en material
de alta resistencia tomando en cuenta las consideraciones mínimas requeridas por
las normas ASTM F136 y ASTM F1108 (Tabla 4) (Figura 13), pero es importante
considerar que al llevar a cabo dicho procedimiento, no debe ser sometido a un
rápido enfriamiento, pues de hacer esto, el material tenderá a presentar mayor
fragilidad (57).

Tabla 4. Propiedades de la aleación Ti-6Al-4V después de tratamiento de recocido,


con base en la información del trabajo elaborado por Rodríguez, D. (9), elaboración
propia.

Propiedades de la aleación Ti-6Al-4V tras ser sometida a tratamiento


térmico de recocido

Resistencia a tracción Límite elástico Elongación (%)

986 1,050 14

46
Al llevar a cabo un tratamiento termoquímico de nitruración a 566 °C por 8 horas,
el límite elástico disminuye, además de que, con respecto al recocido, el límite
elástico del tratamiento de nitruración es mucho menor; sin embargo, el porcentaje
de elongación incrementa considerablemente (Tabla 5) (Figura 13) (9).

Tabla 5. Propiedades de la aleación Ti-6Al-4V después de tratamiento de


nitruración, con base en la información del trabajo elaborado por Rodríguez, D. (9),
elaboración propia.

Propiedades de la aleación Ti-6Al-4V tras ser sometida a tratamiento


termoquímico de nitruración

Resistencia a tracción Límite elástico Elongación (%)

758 834 23

Por ende, es posible notar que un tratamiento térmico llevado a cabo


apropiadamente después de obtener la aleación podría resultar benéfico para la
creación de los implantes, pues algo importante a considerar respecto a esta es
que usualmente presenta una baja resistencia al desgaste.

47
Propiedades de aleación Ti-6Al-4V en diferentes
condiciones
1110
1080 1050
1050
1020 986
990
960
930
900 860 860
870 834
840 795
810
780 758 758
750
720
690
660
630
600
570
540
510
480
450
420
390
360
330
300
270
240
210
180
150
120
90
60 10 14 23
30 8
0
Resistencia a tracción Límite elástico Porcentaje de elongación

Forjado Colado Recocido Nitrurado

Figura 13. Gráfico algunas propiedades mínimas de la aleación Ti-6Al-4V en


diferentes condiciones, con base en la información del trabajo elaborado por
Rodríguez, D. (9), elaboración propia.

Además de lo anteriormente mencionado, cabe abordar nuevamente los resultados


de las pruebas llevadas a cabo por Camero, S., et al. (10), en la cuales analizaron
la resistencia a la corrosión de la aleación Ti-6Al-4V en una solución FCS que
simuló el cuerpo humano como medio durante 0, 180 y 360 horas.

Según las observaciones que en dicha fase experimental se pudieron analizar, a


medida que aumentó el tiempo de inmersión de la muestra, resistencia a la
polarización incrementaba, pero disminuyó entre las 180 y 360 horas; y, conforme
dicho decremento ocurría, el material se volvía más susceptible a corrosión por

48
picadura debido a la presencia de iones Cl- que indujeron la disolución de óxido de
vanadio (Figura 14) (Figura 15) (10).

Figura 14. Curvas de polarización de muestra de Ti-6Al-4V, sometida a la


solución FCS durante 0 horas, según el trabajo de investigación elaborado por
Camero, S., et al. (10)

Figura 15. Curvas de polarización de muestra de Ti-6Al-4V, sometida a la


solución FCS durante 360 horas, según el trabajo de investigación elaborado por
Camero, S., et al. (10)

Se obtuvieron valores de resistencia a la polarización de 37724 Ω/cm2 en un tiempo


de inmersión de 0 horas, 20531 Ω/cm2 en 180 horas y 99157 Ω/cm2 en 360 horas;
y una densidad de corriente de corrosión de 6.0459x10-5 A/cm2 para 0 horas,
2.4463x10-5 A/cm2 para 180 horas y 3.0405x10-5 A/cm2 para 360 horas (10).

Por otra parte, en las pruebas de polarización potenciodinámica, se observó que la


densidad de corriente de corrosión disminuyó con respecto al tiempo de inmersión
de las muestras en FCS, obteniéndose un valor mayor para las muestras expuestas
por 0 horas (7,02 x 10-5 A/cm2) y uno menor valor para las muestras expuestas
49
durante 360 horas (2,51 x 10-8 A/cm2). Tanto en los valores de resistencia a
polarización como las curvas de polarización se observó que para los tiempos de
inmersión de 180 como para las 360 horas la densidad de corriente de corrosión
fue menor que a 0 horas (10).

Por lo tanto, las técnicas electroquímicas de polarización permitieron inferir la


tendencia corrosiva del material, el cual fue mayor con el incremento del tiempo de
inmersión. Además, la película pasiva de la aleación Ti-6Al-4V, se volvió inestable
en presencia de iones cloruros, lo cual resulta importante a considerar para la
aplicación de esta aleación como un implante (10).

Es necesario discutir también la susceptibilidad de esta aleación a problemas como


la formación de biofilms (17), así como a perder la capa de óxido de titanio que lo
recubre, reduciendo su biocompatibilidad y liberándose iones tóxicos, y que, a
pesar de ser un buen material contra la corrosión, se han llevado a cabo
tratamientos para mejorar su resistencia a dichos ataques (19).

Considerando trabajos que se han realizado para poner fin a las limitantes del uso
del Ti-6Al-4V, son varios los investigadores que han recurrido la utilización de
biorecubrimientos de materiales grafénicos.

La aplicación de nanorevestimientos de grafeno es capaz de proporcionar un buen


efecto anticorrosivo al aplicarse sobre el Ti-6Al-4V, así como una mejor estabilidad
electroquímica (59).

Gracias a la reducción del GO, se puede obtener un recubrimiento con propiedades


antibacterianas y sin alteración de las propiedades anticorrosivas del sustrato.
Además, la citotoxicidad del rGO puede ser controlable, por lo que podría
aprovecharse mejor este material para su estudio en la rama de la medicina (Tabla
6).

50
Tabla 6. Recopilación de algunos proyectos y sus resultados con base en estudios
enfocados en pruebas sobre óxido de grafeno reducido. Elaboración propia.

Sustrato Método de Electrodos Voltaje Observaciones


reducción

CoCr. Reducción No aplica. −2,1 V a Las películas de ErGO se


directa −0,5 V apilaron formando una
mediante en CV y cobertura de espesor no
voltampe- 2,1 V en uniforme de
rometría y CA. aproximadamente 80
cronoam- capas; por ello, no se
perometría consiguió la restauración
(78). completa de la estructura
del grafeno.
CoCr. Reducción Contrae- 2,1 a Las muestras recubiertas
electro- lectrodo de -0,5 V con ErGO presentaron una
química barra de mayor adherencia de
(81). grafito, células de macrófagos y
electrodo de mejor biocompatibilidad.
referencia La presencia de películas
de Ag/AgCl ErGO en las superficies de
3 M KCl y CoCr no provocó cambios
muestras de significativos en el buen
CoCr como comportamiento a la
electrodos corrosión de las aleaciones
de trabajo. de CoCr.

Placa de 96 Reducción No aplica. No Las células expuestas a la


pocillos. mediante aplica. suspensión de RGO / PEG
glucosa a concentraciones entre
(67). 3,125 g / ml y 25 g/ml
mostraron una viabilidad
celular relativamente alta

51
(de aproximadamente 95%
a más del 60%).
Cuando la concentración
superaba los 25 g/mL, la
viabilidad disminuía
repentinamente. Se
observaron resultados
similares para rGO
funcionalizado con DOC,
mientras que rGO
funcionalizado con Pluronic
P123 mostró ser más
tóxico.
Hubo una mayor
estabilidad del rGO en
concentraciones más
bajas, mientras que al
incrementarse la
concentración del material
grafénico en el
dispersante, la viabilidad
celular redujo.

Placas LB Reducción No aplica. No Las nanohojas rGO,


(Luria mediante aplica. exhibieron altos efectos
Bertani). hidrato de antibacterianos. La
hidracina actividad metabólica de las
(75). células de Escherichia coli
DH5 se redujo al 24% con
el tratamiento con
nanohojas de rGO de 85 µg
/ mL y menos del 10% de
bacterias sobrevivió.

52
Placas LB Reducción No aplica. No Una dispersión de rGO a
(Luria mediante aplica. 80 μg/mL mató el
Bertani). hidracina 76.8±3.1% de Escherichia
(76). coli; pero, de usarse una
dispersión de rGO a una
concentración de 5 μg / mL,
se mató solo el al 8.4±7.3%
de bacterias.

Considerando investigaciones anteriores, un recubrimiento elaborado de ErGO


mejora la biocompatibilidad del sustrato siendo tratado adecuadamente (79).

Además, cabe mencionar que el rGO ha demostrado tener efectos bactericidas (75)
(76), las cuales son una gran ventaja al buscar aplicarse como biorecubrimiento de
un implante.

A pesar de las ventajas observadas, uno de los inconvenientes encontrados en el


grafeno y materiales grafénicos, es la toxicidad que suele llegar a presentar, pero
tomando como referencia el proyecto de Wojtoniszak et al. (67), a pesar de que el
GO y rGO presentan toxicidad, utilizando un dispersante como el polietilenglicol y
controlando las concentraciones de GO y rGO es posible reducir dicho problema,
de modo que mientras menor concentración se tenga, el material grafénico
presenta una estabilidad más alta y se obtiene una mejor citocompatibilidad.

Por ello, resultaría benéfico continuar con la investigación de este tipo de


materiales, ya que los resultados anteriores han demostrado que el GO reducido
bajo condiciones apropiadas, no solo mediante el método electroquímico, logra
presentar propiedades que le podrían beneficiar al momento de querer utilizarlo
como un biorecubrimiento para una prótesis.

Según lo recabado en diversos artículos, el ErGO ha demostrado ser un material


económico y sencillo de sintetizar (22), y, según lo recabado previamente, recupera

53
parcialmente las propiedades buenas propiedades mecánicas, térmicas y eléctricas
del grafeno prístino (73).

Aun así, es necesario vigilar que se lleve a cabo una reducción adecuada y con
naturaleza de monocapa, ya que de lo contrario no se restaurarían adecuadamente
la estructura del grafeno deseada, pudiéndose tener la presencia de los grupos
oxifuncionales, lo cual provocaría un desorden estructural en la red de grafeno (78),
alterando los resultados esperados.

Tomando en cuenta que el grafeno puede mejorar las propiedades anticorrosivas


de un material (21), es de interpretarse que, mientras mayor sea la reducción y
eliminación de grupos funcionales del GO, mejor resultará para los fines propuestos
en el presente trabajo; sin embargo, es necesario continuar con la investigación
que podría tener el ErGO acerca de dicho efecto .

Además de la reducción electroquímica, las pruebas con reducción de GO


utilizando hidracina reflejaron buenas actividades contra cultivos de bacterias, por
lo que también sería conveniente estudiar diversos métodos de reducción en dado
caso de que mediante la ruta electroquímica fuese posible obtener las propiedades
deseadas (75) (76).

Algo importante a considerar, es que mientras más reducido se obtenga el rGO,


más hidrofóbico será, por lo que el equilibrio osmótico de las células y sus
capacidades se verían afectadas, lo cual indicaría una baja biocompatibilidad; pero,
al mismo tiempo, podrían llegar a mejorarse las propiedades antimicrobianas, por
lo que se debe considerar si se obtiene un material más afín a células o a bacterias,
ya que un material que afecte directamente a las células, no podría ser usado
exitosamente como recubrimiento de implantes.

54
CONCLUSIONES

La aleación Ti-6Al-4V es un buen candidato para su utilización como implante,


debido a que, además de su buena oseointegración y alta biocompatibilidad, posee
un módulo de elasticidad similar al hueso, siendo la aleación de titanio más utilizada
y muy solicitada para aplicaciones biomédicas.

A pesar de las ventajas mencionadas anteriormente, se han desarrollado proyectos


con el fin de mejorar la superficie del material para protegerlo de ataque corrosivos,
pues, aunque este produzca una capa de óxido de titanio que lo proteja de ataques,
esta no es muy estable estando en presencia de iones cloruros, los cuales se
encuentran presentes en el cuerpo humano.

Debido a dichos iones que afectan a la aleación, la capa que protege al Ti-6Al-4V,
tiende a desprenderse con facilidad y además de propiciar con mayor facilidad la
corrosión, disminuye la bioactividad y biocompatibilidad que la aleación presenta
para su utilización como implante, además de que se propicia la liberación de iones
tóxicos dentro del cuerpo. Otro problema al que este material metálico se enfrenta
es al crecimiento de bacterias Gram-positivas y Gram negativas.

Los biorecubrimientos son una solución factible para mejorar las propiedades de la
aleación Ti-6Al-4V, pudiendo llegar a proporcionándole un mayor periodo de vida
útil.

El estudio del ErGO para su aplicación como lubricante sólido sobre implantes, es
causa de controversia, puesto que, a pesar de funcionar como una capa
antibacterial y brindar estabilidad electroquímica, suele presentar citotoxicidad, lo
cual a largo plazo puede traer problemas dentro del cuerpo del huésped. Dicho
problema puede controlarse, mas no erradicarse por completo, utilizándose
dispersantes y teniéndose una baja concentración de ErGO, de modo que se
podría incluso obtener una mejor estabilidad y citocompatibilidad.

La reducción electroquímica del GO, a pesar de ser una buena opción, no ha


demostrado ser la única, puesto que, por ejemplo, la reducción con hidracina
también ha resultado benéfica, brindando al GO propiedades antimicrobianas.

55
Respecto a la controversia que genera el rGO al abordarse su biocompatibilidad,
cabe resaltar que el recubrimiento que se sintetice debe ser más afín a las células
que a las bacterias, para que pueda tener las propiedades de biocompaibilidad
necesarias, y de ser posible, ayudar con la inhibición del crecimiento de bacterias
y la erradicación de las mismas.

En cuanto a la capacidad del ErGO para proteger otros materiales de efectos


corrosivos, es necesario continuar con la investigación, cuidando el grado de
reducción y buscando la eliminación total o casi por completo de grupos funcionales
del GO, además de procurando la obtención de un recubrimiento con naturaleza de
monocapa.

Es importante continuar con el estudio del ErGO como recubrimiento para


implantes, para determinar los mejores métodos para erradicar el problema de
toxicidad, posibles problemas de biocompatibilidad, evitar la formación de
recubrimientos de baja uniformidad y conocer más acerca de las propiedades y
beneficios que este material posee.

56
GLOSARIO

Citocompatibilidad: Propiedad de un material al no producir reacciones perjudiciales


en uno o varios tipos celulares al interactuar con ellos (82).

Citotoxicidad: Daño celular generado por la acción de ciertos anticuerpos y


complemento o por células citotóxicas (83).

Colado: Vertido del material metálico fundido (colada) en un molde con la forma y
tamaño, ligeramente sobredimensionado al tamaño que se desea adaptar una vez
que pase por la solidificación y enfriamiento (84).

Cronamperometría: Técnica electroanalítica que se basa en la medición de la


corriente debida a difusión del tiempo, después de que se aplicó un escalón de
potencial. Con esta es posible evaluar los coeficientes de difusión de especies
electroactivas en solución (85).

ErGO: Óxido de grafeno reducido electroquímicamente (74).

Espectroscopía Raman: Técnica de caracterización que permite el análisis de


muestras sólidas y líquidas. En esta se produce la interacción energética con un
haz láser, lo cual provoca la vibración de los enlaces químicos de la muestra y se
obtienen los espectros característicos de los componentes (86). La iluminación del
láser se dirige hacia un separador de haz que se encuentra en el microscopio; sin
embargo, la radiación llega a la muestra por un objetivo, el cual recoge la señal
Raman y es enviada hacia el espectrómetro por medio del separador de haz,
llegando por último a un sistema de detección donde se analizan los resultados
arrojados (87).

Fotocatálisis: Aumento de la velocidad de una fotorreacción mediante un


catalizador (88).

Forjado: Aplicación de fuerzas de compresión sobre el material con el fin de obtener


la forma y propiedades determinadas de este (89).

GO: Óxido de grafeno (74).

57
Grafeno prístino: Lámina simple de átomos de carbono unidos hexagonalmente,
la cual al apilarse con otras forma grafito (90).

Gt: Grafito (74).

GtO: Óxido de grafito (74).

Higroscópico: Posee la capacidad de absorber y exhalar humedad según en medio


en que se encuentre (91).

Macrófago: Célula de gran tamaño que puede fagocitar partículas grandes y se


encarga de destruir los antígenos (y células que los transportan) y presentarlos a
los linfocitos que se encargan de iniciar el proceso inmunológico (92).

Osteoblastos: Células que forman el tejido óseo (93).

Recocido: Es un tratamiento térmico mediante el cual se busca que que el material


tratado pierda dureza, gane flexibilidad y elimine las tensiones creadas durante el
temple. Consiste en calentar el metal hasta el punto de austenización y proceder
con un enfriamiento más lento (94).

Voltamperometría de pulso diferencial: Técnica electroanalítica en la cual la forma


de la onda en la señal de excitación aumenta gradualmente en intervalos de entre
10 y 100 mV, manteniéndose una amplitud de pulso constante con respecto al
potencial base (95).

Voltamperometría cíclica: Técnica que analiza la variación de la corriente a medida


que se modifica el potencial. Consiste en un barrido de potencial al electrodo de
trajo partiendo desde un valor inicial hasta un valor corte, directamente como
inversamente. La corriente aplicada comienza a incrementar, comenzando a
producirse la reacción de oxidación hasta llegar a un punto máximo de corriente,
mientras que para que ocurra la reacción de reducción se invierte el barrido de
potencial (96).

58
ANEXOS

Anexo 1

Tabla 7. Propiedades físicas del titanio (9).

Anexo 2

Tabla 8. Propiedades fisicoquímicas de la aleación Ti-6Al-4V (13).

59
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