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TECNOLÓGICO

UNIVERSITARIO
NAUCALPAN

ALUMNO: CARLOS EDUARDO ALVARADO


BALLESTEROS
MATRICULA:17331
LICENCIATURA EN ARQUITECTURA
PROF. ARQ. IRIS EMELDA ALVARADO RIOS

EVOLUCION DE DISEÑO
CONTEMPORANEO

ENSAYO
“MEXICO: COLONIA-EPOCA ACTUAL”
MEXICO: COLONIA- EPOCA ACTUAL
En este ensayo encontraremos información sobre las etapas de la historia de
México, los acontecimientos del pasado relacionados con los habitantes en el actual
territorio de mexicano. Con el tiempo se van estableciendo grandes culturas como
la olmeca, tolteca, teotihuacana, maya, náhuatl, totonaca, zapoteca, mixteca y
tarasca, entre otras.
ÉPOCA COLONIAL (1521-1810):
El gobierno colonial de Nueva España data de 1530, cuando el primer virrey real,
Antonio de Mendoza, comenzó a poner orden en el caos. Aunque debía gobernar
lo que hoy es México durante casi 300 años y tuvo muchos logros positivos, debe
considerarse un fracaso porque puso en marcha sistemas políticos y sociales que
lanzaron la revuelta contra el gobierno español. Desde el principio, el control de la
Corona española sobre Nueva España, su colonia que se convertiría en México, fue
mínimo. Parte de esto se debió a la cantidad de tiempo que tardaron las
comunicaciones en trasladarse de España al Nuevo Mundo. Pero una razón aún
mayor fue el personaje de Hernán Cortés y los hombres que lo acompañaron
mientras conquistaba a los aztecas. No es sorprendente que Cortés, cuya completa
conquista de México fue una rebelión ilegal contra las órdenes de su superior, el
Gobernador de Cuba, optara por ignorar cualquier orden que interfiriera con su
objetivo de auto-enriquecimiento. En 1521, cuando cayó el Imperio azteca, Cortés
comenzó a gobernar la Colonia. Nombrado Capitán General, con solo una
Audencia, un Tribunal de la Iglesia, para compartir su poder, recompensó a los
españoles que lo habían ayudado a conquistar el país con vastas concesiones de
tierras llamadas Encomiendas. También les permitió esclavizar a todos los indios
que vivían dentro de los límites de estos estados. En 1493, el papa Alejandro VI le
otorgó a España el derecho de colonizar lo que hoy es México, toda América Central
y la tierra que ahora conforma Texas, Nuevo México, Arizona, Colorado y California.
Mientras lo hacía, había ordenado que los indígenas se convirtieran al catolicismo
y prohibiera su esclavitud. Así mismo, si bien Cortés estaba muy dedicado a llevar
la religión a los indios, durante la Conquista, después del bautismo, no se ofreció
ninguna instrucción religiosa a los que él convirtió. Los nuevos territorios se
extendieron por la mayor parte de América Central y gran parte del sur y el oeste de
lo que hoy es Estados Unidos. Además de establecer el control militar y económico,
los españoles también se embarcaron en convertir a la población local a la religión
católica romana. Entre 1521 y 1650, la población india se vio muy reducida, en gran
parte como resultado de los combates, las enfermedades provocadas por los
españoles contra las que no tenían defensas y los efectos destructivos de la
colonización en su forma de vida. En contraposición, la población española creció
durante ese tiempo. Para 1810, se calculaba que había seis millones de habitantes
en Nueva España, de los cuales 60,000 eran españoles nacidos en España,
940,000 eran españoles nacidos en los territorios, 3,5 millones eran indígenas
mexicanos y 1,5 millones eran mestizos, de sangre mixta española e india. Si bien
la minería (en particular la plata) era la fuente de riqueza más buscada en la época
colonial en México, la mayoría de los habitantes vivían de la agricultura y la cría de
ganado. Los españoles cultivaban grandes propiedades llamadas haciendas,
mientras que la población india trabajaba en pequeñas parcelas, o como siervos en
las tierras de propiedad de sus señores españoles. Los españoles también
controlaban el comercio. Los principales productos fueron plata, azúcar, cacao,
pieles y maderas finas. La única manufactura realmente desarrollada durante el
período fue la industria textil.

LA INDEPENDENCIA (1810-1821)

Es el proceso político, social y de lucha armada que inició el 15 de septiembre de


1810 con el Grito de Dolores y culminó el 27 de septiembre de 1821.
El resultado de la Lucha por la Independencia fue la firma de los Tratados de
Córdoba en agosto de 1821, que acordaron la soberanía de México como un país
independiente de España y la retirada de las tropas españolas. El 27 de septiembre
de 1821, la entrada del Ejército Trigarante a la Ciudad de México marcó el fin de la
Guerra de Independencia.
La pérdida de esta posesión tuvo una importancia decisiva para la economía
del Imperio Español, ya que los ingresos mexicanos representaban el ochenta por
ciento del total de los caudales americanos al final del periodo colonial. La guerra
por la independencia mexicana inició el día 16 de septiembre de 1810, hasta la
entrada del Ejército Trigarante a la Ciudad de México, el día 27 de
septiembre de 1821.
El movimiento independentista mexicano tiene como marco la Ilustración y las
revoluciones liberales de la última parte del siglo XVIII. Por esa época la élite
ilustrada comenzaba a reflexionar acerca de la ideas de soberanía popular y las
relaciones entre la España peninsular y el resto del imperio. Los cambios en la
estructura social y política derivados de las reformas borbónicas, a los que se sumó
una profunda crisis económica en Nueva España, también generaron un malestar
entre algunos segmentos de la población.
EL MEXICO INDEPENDIENTE (1821-1877)
Para el 28 de septiembre de 1821 se instaló una Junta Provisional de Gobierno,
esta estaba encargada de redactar el Acta de Independencia y además organizar
un Congreso que decidiera la forma de gobierno para México. Como los indígenas
no estaban acostumbrados a que la tierra fuera una propiedad privada, la igualdad
de todos los mexicanos frente a la ley dejaba en desventaja a los criollos. Mientras
tanto, España no reconoció los Tratados de Córdoba que O’Donojú había firmado.
No aceptaba que México era independiente y hasta el año 1825 ocupó el fuerte de
San Juan de Ulúa, en Veracruz. Además de España, otros países del continente
europeo querían apoderarse de México, para explotar las riquezas que contenía.
Los mexicanos necesitaban armas y dinero, y así debían defenderse. Lo peor es
que se encontraban divididos, porque no estaban de acuerdo en la forma de
gobierno que iba a adoptar, es decir, unos querían un república y otros una
monarquía. De estos últimos, algunos querían que reinara algún príncipe de España
y otros que fuera coronado Iturbide.
España no aceptó el enviar a un príncipe al trono de México y eso logró reforzar las
ambiciones de Iturbide, que quería ser el primer emperador de México. Sus
seguidores ejercieron presión para que él fuera coronado. El Congreso lo declaró
Emperador, con el Nombre Agustín I.

Muchos mexicanos se oponían rotundamente a Iturbide y algunos diputados


conspiraron en su contra. El emperador disolvió el Congreso e hizo los cambios
políticos. Antonio López Santa Anna, quien era el comandante general de la
provincia en Veracruz, fue destituido y se rebeló contra Iturbide. Para ello se puso
de acuerdo con Guadalupe Victoria y para febrero de 1823 Santa Anna proclamó
el Plan de Casa Mata, que buscaba establecer el sistema republicano.
En marzo de 1823 Iturbide renunció al trono y más tarde se fue a Europa. Las
provincias en Centroamérica, que se había unido al Imperio, se separaron por
completo de México. Al siguiente año Iturbide regresó, como en su ausencia el
Congreso quedó decretado que no podía volver a México, bajo la pena de muerte,
fue fusilado.

Cuando Iturbide dejó el trono, el gobierno del país quedó en manos del Supremo
Poder Ejecutivo que estaba formado por Nicolás Bravo, Guadalupe Victoria y
Vicente Guerrero, entre otros grandes luchadores, así se convocó el segundo
Congreso. Los diputados del nuevo Congreso decidieron que México fuera una
república, una parte querían que fuera república federalista, formada por la unión
de diferentes estados, libres y soberanos para resolver los problemas internos.

Otros buscaban que fuera republica centralista, con provincias o departamentos con
provincias o departamentos en vez de estados y un poder central que resolviera los
asuntos. La Constitución de 1824, que fue preparada por el Congreso, se promulgó
para el 4 de octubre del mismo año. Allí se decidió que México fuera una República
Federal y que se llamaría Estados Unidos Mexicanos.
Además, esta Constitución declaraba que los mexicanos eran iguales, que la única
religión del país sea la Católica Apostólica Romana y concedía la libertad de
imprenta. El Congreso convocó las elecciones, las primeras que existieron en el
México Independiente, allí resultaron electos como presidentes y vicepresidente a
Guadalupe Victoria y Nicolás Bravo respectivamente.

EL PORFIRIATO (1877-1911)
Al esparcirse las noticias sobre la caída del Segundo Imperio Mexicano, el 20 de
junio de 1867, la bandera blanca se ondeó en la capital junto con la orden de cese
de fuego, iniciando con ello, el restablecimiento del gobierno republicano. El 22 de
septiembre se dio principio a las elecciones primarias, pero no tuvieron la
convocatoria suficiente porque gran parte de la población se abstenía de votar.
En las elecciones secundarias se optó por reelegir al presidente Benito Juárez para
dar inicio con la restauración de la República (1867 a 1871), incorporó nuevas
reformas legales para sentar las bases que regirían al Estado Mexicano con la
finalidad de limitar el poder Legislativo y fortalecer al poder Ejecutivo, así como
proveer de los mecanismos de organización necesarios para alcanzar la reducción
paulatina del ejército sin afectar el orden público.
Al final de su administración Benito Juárez decidió lanzar su candidatura para un
nuevo periodo presidencial. Los candidatos para ocupar el cargo del Ejecutivo
Sebastián Lerdo de Tejada y el General Porfirio Díaz, mostraron su inconformidad
ante la determinación del presidente, porque era evidente que no estaba dispuesto
a abandonar el poder.
Razón por la que el General Díaz incitó una rebelión mediante el Plan de la Noria de
1871, que fue considerada como el primer levantamiento organizado para impedir
que Juárez contendiera de nuevo a la presidencia, sin embargo, al final su intento
no fructiferó y Juárez resultó reelecto para desempeñar esa función hasta diciembre
de 1876, eliminando toda posibilidad de una transición del poder ejecutivo.
Benito Juárez al continuar en la presidencia enfrentó movimientos armados que
intentaron deponerlo y a pesar de haberlos controlado reflejaron la inestabilidad
política que se vivía en el país, sin embargo Juárez tendría que dejar el poder a
causa de una grave enfermedad que lo llevó a la muerte. En la contienda electoral
extraordinaria se volvieron a enfrentar el General Porfirio Díaz y Sebastián Lerdo de
Tejada quien obtuvo el triunfo y asumió su gobierno a partir del 18 de julio de 1872.
Lerdo de Tejada finalmente consiguió reelegirse, pero Porfirio Díaz, no aceptó los
resultados de esta contienda y en respuesta; se levantó en armas en Tuxtepec,
Oaxaca. Las hostilidades comenzaron desde el mes de enero de 1876, además la
causa de Porfirio Díaz se propagó con rapidez porque prometió acabar con el
acaparamiento del poder.
Desde la destacada participación de Porfirio Díaz en la defensa de la Segunda
Intervención Francesa (1862-1867), adquirió simpatía entre la población y al
prometer defender a toda costa la soberanía del país, le dio la credibilidad suficiente
para que confiaran en él, al prometer garantizaría el respeto a la Constitución
enunciando la frase “Sufragio efectivo; No reelección”.
LA REVOLUCION MEXICANA (1911-1929)
El domingo 20 de noviembre de 1910, desde las seis de la tarde, iniciaba el
levantamiento armado convocado por Francisco I Madero para poner fin al gobierno
de Porfirio Díaz, y establecer elecciones libres y democráticas. Así lo establecía el
llamado Plan de San Luis proclamado por Madero desde su exilio en San Antonio,
Texas, ese manifiesto denunciaba los abusos del régimen porfirista y ofrecía, entre
otros proyectos, restituir a los campesinos los terrenos que les habían sido
arrebatados arbitrariamente. La apelación al apoyo rural significó que el
campesinado se sumara de manera unánime al alzamiento maderista, al igual que
los indígenas y los mestizos.
A finales de mayo de 1911, los generales Pascual Orozco y Francisco Villa tomaron
Ciudad Juárez, Chihuahua, lo que representó el triunfo de los rebeldes; después de
las elecciones de octubre de ese año, elevó a Francisco I. Madero a la Presidencia,
en lo que fue la primera etapa de la RevoluciónMexicana. Al serio problema de la
distribución de la tierra, se sumaba la situación de miseria de los campesinos, que
estaban prácticamente sometidos al poder de los grandes terratenientes, ya que les
regulaba el salario y, a través de las llamadas “tiendas de raya”, les proporcionaba
el alimento y el vestido al precio que deseaba.
No solo eso, se permitía a los sectores empresariales la explotación de los obreros,
con bajos salarios, largas jornadas de trabajo, nulas prestaciones, trabajo dominical
y nocturno; además de la inseguridad e insalubridad de los talleres.
El movimiento revolucionario continuó los siguientes años con descontentos entre
las distintas facciones que lo iniciaron. Uno de ellos fue Emiliano Zapata, quien al
frente del Ejercito Libertador del Sur, reclamaba a Madero haber incumplido lo
ofrecido en cuanto a la devolución de tierras a las comunidades indígenas y agrarias
del estado de Morelos; en tanto en Chihuahua, al norte, Pascual Orozco acusaba al
presidente de corrupción y traición al país.
Posteriormente, Madero fue víctima de la asonada militar conocida “Decena
Trágica”, ocurrida a partir del 9 de febrero de 1913. Venustiano Carranza y Abraham
González, como gobernadores maderistas, se pronunciaron en contra del usurpador
Huerta. Mientras González fue muerto Carranza, con el Plan de Guadalupe,
convocó al pueblo a tomar las armas para restablecer la legalidad en el país.
Se formó el Ejército Constitucionalista, con Francisco Villa en el norte, Álvaro
Obregón en el noroeste, Pablo González en el centro, y Emiliano Zapata en el sur.
Carranza y “Pancho” Villa combatieron al gobierno de facto hasta la renuncia de
Huerta en 1912, tras la invasión estadounidense a Veracruz. Se considera que la
promulgación de la Constitución de 1917 puso fin a la Revolución Mexicana; sin
embargo, la lucha se prolongó más tiempo, antes de que el país se estabilizara.
EL MEXICO CONTEMPORANEO (1929-ACTUALIDAD)
El México contemporáneo, el México de la posrevolución, es el México que surge a
partir de la reconstrucción del país, reconstrucción que implicó la cimentación de un
nuevo régimen político que creó las bases para la configuración de un Estado
moderno y democrático que proporcionó estabilidad política y social a la nación. Los
libros que se presentan en esta sección muestran algunas de esas propuestas de
reconstrucción y búsqueda de la democracia representativa.

Estas etapas nos han marcado como nación y hemos visto al paso del tiempo toda
la historia para llegar a ser una nación libre y soberana. La historia de México desde
su época prehispánica hasta su actualidad está caracterizada por estar llena de
cultura, guerras por la libertad, abuso de poder, sometimiento, desigualdad social y
grandes altibajos económicos que han terminado por dar un contexto
socioeconómico bastante diverso

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