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Saliendo de la Oscuridad – Orientaciones prácticas para actividades de desobsesión 2
Indice
Saliendo de la Oscuridad
Una de las mayores contribuciones de fraternidad que el
Espiritismo ofrece, son sus actividades de desobsesión y auxilio a
los Espíritus sufridos desarrollados dentro del Centro Espírita.
En estas reuniones aparecen Espíritus que viven en la
oscuridad de las tinieblas, siendo vengativos y obsesores. Otros
todavía no saben que están en el plano espiritual. Hay aquellos
que han abreviado sus vidas en el plano terrenal a través del
suicidio, creyendo que acabar con sus sufrimientos. Hay otros que
desencarnaron con deficiencias físicas y necesitan recuperar a sus
miembros atrofiados. También aparecen jóvenes madres desesperadas,
que dejaron a sus hijos aún pequeños en el plano físico, y
necesitan ser calmadas.
Todos estos Hermanos necesitan ser escuchados, recibir
nuestro amor y nuestra atención, y en algunos casos, de la
asistencia de los médicos de la espiritualidad.
Estos Espíritus necesitan sentir que son amados y son
bienvenidos.
Nada de lecciones de moral, de reprensiones, de forzarlas a
aceptar las enseñanzas de Jesús. Todo tiene su tiempo y debe ser
espontáneo. La recuperación moral y espiritual no se concreta con
una conversación de 15 minutos. Primero necesitamos conquistar la
confianza de este hermano sufriente. Es necesario recordar y
realzar sus cualidades. Incluso alguien que tenga mil defectos,
seguramente debe tener un lado bueno. Y es para ese lado que
debemos dirigir nuestras aclaraciones. Necesitamos despertar
nuevos potenciales en el individuo.
Pero, para actuar en esta área de esclarecimiento
espiritual, es muy importante que busquemos, en todo momento,
nuestro perfeccionamiento moral y nuestro estudio constante.
Aquellos que no desean educarse, no son aptos para servir.
Y la Doctrina Espírita es bien clara en este aspecto:
¿Doctrinar o aclarar?
El Doctrinador es la persona encargada de dialogar con el
Espíritu que se manifiesta, a través de un médium, en las reuniones
de desobsesión.
En rigor, adoctrinar a alguien sería pasar una doctrina, lo que
no puede ocurrir en las reuniones de desobsesión. Los Espíritus que
se manifiestan, generalmente, están en estado de perturbación, sin
condiciones de absorber un diálogo complejo y largo. En estas
reuniones, generalmente las manifestaciones son lo suficientemente
rápidas para esclarecer al Espíritu, no habiendo tiempo para
transmitir una doctrina, en el caso el Espiritismo. ¡No es el foco
de estas reuniones!
Hay casos en que el Espíritu no está en condiciones ni de
recibir una única orientación. En estas situaciones se utilizan la
oración, la energía del pase y la vibración amorosa del grupo de
apoyadores para proporcionar confort y esperanza para el Hermano
sufriente.
En este material de estudio, vamos a mantener el término
"adoctrinador", pero en el sentido de esclarecedor, consolador.
Fuentes bibliográficas