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En todas las producciones audiovisuales existe una variedad de ámbitos y tareas que son
fundamentales para crear un producto audiovisual ya sea en formato para TV, cine o publicitario.
Entre ellas se encuentra el diseño de producción el cual forma parte del departamento de arte y
desarrolla su trabajo principalmente en la fase de preproducción de un proyecto.
La cinta Intolerance (D. W. Griffith, 1916) es un ejemplo de los inicios del diseño de producción
ya que cuenta con impresionantes decorados, tanto así que es considerada una de las películas más
caras de la historia del cine. Sin embargo esta denominación figura por primera vez en los créditos del
film Lo que el viento se llevó (Victor Fleming, 1939) para reconocer la labor que William Cameron
Menzies había realizado en la película.
Es posible que exista cierta confusión con respecto al papel que figura el diseño de producción
y la dirección de arte dentro de un proyecto audiovisual. A pesar de que ambas disciplinas tienen una
estrecha relación, iniciando con el hecho de que ambos pertenecen al departamento artístico; el
diseñador de producción es el responsable de tomar las decisiones sobre el aspecto visual del set, a
diferencia del director de arte quien se encarga de materializar estos diseños.
Por lo tanto, se entiende que la labor del diseñador de producción es previa a la del director de
arte. En tal sentido, su trabajo consiste en planear, por medio de bocetos ilustrativos, dibujos
detallados o guiones gráficos, lo que el director de arte tendrá que realizar en la práctica.
El diseño de producción en la televisión representa una gran responsabilidad al igual que tiene
carácter de relevancia porque alberga las decisiones del apartado estético que se ocupa de organizar
y disponer la dirección de arte. Por una parte ayudar a convenir en relación al presupuesto, puesto
que a mayor cantidad de decorados el costo de la producción será elevado. Además, es un área que
se trabaja de la mano con el director, para encontrar el ambiente correcto (forma, color y estilo
plástico) donde se desarrollará el proyecto. Es ideal realizarlo previo al montaje de manera que se
obtenga una idea de cómo se visualiza la ambientación en cámara. El principal propósito de este
diseño es asegurar que el escenario sea óptimo visualmente y así evitar cambios de última hora.