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RESEÑA FINAL 2022

CARRERA : Profesorado de historia

CURSO : 3°

CURSADA : 2019

MATERIA : Investigación histórica 1

PROFESOR : Matias Alvarez

INSTITUTO 46

ALUMNO: Juan Cruz Couso


RESEÑA
El libro el queso y los gusanos es una obra del autor italiano Carlo Ginzburg, publicada
en 1976. Contexto histórico muy importante para la disciplina, ya que en los años 70 se
estaba debatiendo sobre el concepto de "clases subalternas" y su importancia para la
historiografía.Estamos hablando de una época en la que fue tema la contracultura y la
rebelión al sistema establecido, haciendo un pararelismo con lo que sucede en y se manifiesta
en la obra de Ginzburg.

En este sentido, lo primero a destacar es que esta obra pertenece a la corriente de la


microhistoria, ya que se analiza a partir de un personaje específico de las clases populares y no
un personaje tradicional de la historiografía clasica, se retrataba a la sociedad en la que este
personaje vivía. Hay una definición que interpreta a la microhistoria diciendo que esta
consiste en diseccionar una parte de la realidad, mirarlo desde un microscopio, analizar su
complejidad que de otro modo no se podría descifrar. Es por esto que Carlo Ginzburg (1976)
afirma que:

En algunos estudios biográficos se ha demostrado que, en un individuo mediocre,

carente en sí de relieve y por ello representativo, pueden escrutarse, como en un

microcosmos, las características de todo un estrato social en un determinado período

histórico, ya sea la nobleza austríaca o el bajo clero inglés del siglo XVII. (p.9)

También es importante destacar que esta obra tiene un pensamiento crítico, ya que se
analiza la cultura subalterna, es decir se estudia a las clases populares, cómo vive un campesino
a comienzos de la edad moderna, cuales eran las relaciones sociales y de producción de los
mismos y cual era la relación con el poder dominante, poder sobre el que siempre solía
escribirse la historia, clásica no teniendo en cuenta a estos sectores sociales con supuesta
menor influencia.. Del mismo modo, la obra también es una crítica a las clases dominantes y
su dominio del poder, de la historia y el relato oficial y la manera en la que impone su
hegemonía sobre las clases populares y lo dificultoso que resulta poder estudiarlas, ya que la
mayoría de las fuentes escritas están vinculadas a la cultura dominante.

Esto significa que las ideas, creencias y esperanzas de los campesinos y artesanos del

pasado nos llegan (cuando nos llegan) a través de filtros intermedios y deformantes.

(Ginzburg, 1976, p. 4)

Asimismo, se observa en los paradigmas del autor, la influencia de la corriente que


representa Nueva Historia, esta corriente que se encarga del estudio de las mentalidades, de las
representaciones colectivas y de las estructuras mentales de las sociedades, tomando aportes
también de otras disciplinas. En otras palabras, una nueva manera de contar, de contar la
historia social y cultural desde sectores excluidos, populares y darle la palabra a y su lugar en
la historia al sector mas bajo en la escala social que la historia siempre había ignorado Esta
corriente (Nueva Historia) se instauró en los años `70 de la mano de los historiadores Le Goff
y Pierre Nora quienes son parte de la tercera generación de la Escuela de Annales, la cual fue
promulgada por Marc Bloch y Lucien Febvre. De la misma forma tiene aportes de la
antropología de Clifford Geertz y la lingüística ya que se utiliza como método etnográfico la
descripción densa y se interpreta lo cultural.

La obra es de carácter obligatoria para cualquier historiador interesado en la nueva


historia. Sin embargo, está orientada a un público diverso, ya que puede ser apreciada por
otras ramas de las ciencias sociales como la antropología, filosofía, política, lingüística. Es por
esto por lo que fue un éxito, siendo traducido a más de veinte lenguas y siendo editado varias
veces.

En “El queso y los gusanos'' se narra la historia del campesino italiano Doménico
Scandella (1532-1599) conocido como Menocchio, un molinero de la región de Friuli quien
fue procesado por considerarlo heresiarca por la inquisición en dos oportunidades. Este
convivió y nutrió su pensamiento en un clima de confrontación religiosa entre la Reforma
Luterana y la Contrarreforma, al tiempo que el cientificismo y el racionalismo comienza a
abrirse paso con la expansión de la imprenta. Es debido a estos cambios que el molinero tenía
una particular cosmovisión del mundo en la que comparaba al mundo con un queso, y a Dios
con un gusano.

Yo he dicho que por lo que yo pienso y creo, todo era un caos, es decir, tierra, aire, agua

y fuego juntos; y aquel volumen poco a poco formó una masa, como se hace el queso con

la leche y en él se forman gusanos, y éstos fueron los ángeles; y la santísima majestad

quiso que aquello fuese Dios y los ángeles; y entre aquel número de ángeles también

estaba Dios creado también él de aquella masa (Ginzburg.1976:94)

Menocchio a diferencia del común de la población sabía leer y escribir, la creación de la


imprenta permitió que pudiera acceder a diversos textos con los cuales logró confrontar los
pensamientos de la cultura popular con la que había crecido, a su vez estos le brindaron las
palabras con las que podía expresar sus ideas y difundirlas. La mayoría de los textos que
nutrieron al pensamiento e ideas del protagonista fueron religiosas como la biblia en lengua
vulgar. Del mismo modo, el protagonista critica a la cultura dominante, denunciaba la
opresión de los ricos a los pobres y a la iglesia como su principal promotor.

Menocchio declaró que rechazaba todos los sacramentos, incluido el bautismo, por ser

invenciones de los hombres, «mercancías», instrumentos de explotación y de opresión por

parte del clero. (Ginzburg, 1976, p . 97)


Igualmente creía en la igualdad de los hombres y argumentaba que si el espíritu de
Dios está en todos los individuos, no debería haber diferencias de clase entre ellos, porque
tienen en su interior el espíritu que Dios ha dado a todos.

Un molinero puede aspirar a exponer las verdades de la fe al papa, a un rey, a un

príncipe, porque tiene en su interior el espíritu que Dios ha dado a todos. Por el mismo

motivo puede atreverse a «decir mucho contra los superiores y sus malas obras». Lo que

impulsaba a Menocchio a negar con vehemencia en sus propios discursos las jerarquías

existentes no era sólo la constatación de la opresión, sino también una ideología

religiosa que afirmaba la presencia en todos los hombres de un «espíritu». (Ginzburg,

1976, p. 104)

El autor utiliza confesiones y testimonios extraídos de la Santa Inquisición como


fuente. Los procesos contra Menocchio se hallan en el Archivo de la Curia Arzobispal de
Udine, es gracias a esto que podemos conocer la vida y particular visión del protagonista.

Como conclusión esta obra de Carlos Ginzburg transmite la idea de un hombre


“común” dentro de una sociedad “común” de la época, pero que a su vez nos muestra y nos da
a conocer una historia regional que muy pocas veces había sido contada hasta ese entonces.
Siempre en la historia solían contarse las historia de los grandes hombres y de las clases
dominantes. En este sentido la obra permite observar cómo el poder y las clases dominantes
marcan el correr de la vida de una sociedad y de un hombre que si piensa diferente es
condenado y acallado para que no pueda contar si verdad.

Sabemos muchas cosas de Menocchio. De este Marcato, o Marco —y de tantos otros como

él, que vivieron y murieron sin dejar huellas— no sabemos nada (Ginzburg, 1976, p. 204)
Esta obra es sin lugar a dudas un gran aporte a la corriente de la Nueva historia
porque se cuenta la historia desde las clases populares relatando la vida y muerte de un
campesino italiano del Siglo XVI . También tiene mucho valor dentro de la microhistoria,
Carlo Ginzburg es una de mayores exponentes, que de otra forma la vida de este hombre
hubiera pasado desapercibida. El queso y los gusanos nos da a conocer otras ideas,
pensamientos y disyuntivas de este momento histórico.

Bibliografía

Ginzburg, C. (1976). El queso y los gusanos: el cosmos, según un molinero del siglo

XVI/Carlos Ginzburg.

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