PSICOPEDAGOGIA INSTITUCIONAL – PARCIAL DOMICILIARIO – 19/11

RESUMEN

Monereo Font y Sole Gallart - El asesoramiento psicopedagógico: una perspectiva

profesional y constructivista

El asesoramiento psp. siempre fue y sigue siendo concebido como un medio al servicio
de individualizar la enseñanza, es decir, ofrecer, desde la institución escolar,
respuestas educativas adecuadas a las características y condiciones de sus
destinatarios. Este asesoramiento se realiza siempre en un contexto concreto,
determinado, que es la institución educativa; esto implica la necesidad de elaborar y
disponer de conocimiento psicopedagógico especifico, concerniente a aquello que se
pretende explicar, así como instrumentos que permitan intervenir para optimizarlo. A
través de este asesoramiento, la institución educativa satisface sus necesidades y
cumple con los objetivos que socialmente tiene asignados/encomendados. El objetivo
es que la institución logre potenciar al máximo la capacidad de enseñar y también de
aprender, en un proceso que debería resultar emocionalmente gratificante para todos
los implicados.
Hay diversos factores que influyen intensamente en esto e interactúan: aspectos
organizativos, estructurales, funcionamiento de la institución, recursos de que
dispone, contexto socioeconómico, relaciones con las familias. Por esto el
asesoramiento psicopedagógico se constituye como una realidad compleja y
multiforme. POR ESTO ES QUE NO HAY UN UNICO MODO DE ASESORAR DESDE LA
PSICOPEDAGOGIA. Las necesidades de la escuela son siempre dinámicas y cambiantes,
y obedecen a las expectativas sociales.

Dimensiones del asesoramiento psicopedagógico:

Concepción epistemológica (la intervención solo puede ser valida si se realiza en los contextos
en donde el alumno se desarrolla, y a través de las personas de su entorno cotidiano;
optimización de las relaciones socio educativas en las que está involucrado). Los contenidos
curriculares son estáticos y predefinidos; el asesor actúa como resolutor de problemas de
conducta y aprendizaje

Ámbitos de intervención

Relación laboral y profesional

El constructivismo en el asesoramiento psicopedagógico, asume un conjunto de premisas
básicas que se concentran en estas 4 afirmaciones:

 El desarrollo humano supone un proceso de culturización permanente; el aprendizaje

es el motor del desarrollo y no un mero añadido de este.
 La interacción entre el aprendiz y los agentes mediadores (familia, amigos,
educadores) se da siempre en un contexto social.
 Los agentes educativos y profesores deben guiar al alumno desde sus conocimientos
previos hasta niveles más elevados de abstracción y autonomía.
 Las dificultades de aprendizaje y retrasos en el desarrollo pueden explicarse por la baja
o inexistente calidad de la interacción social recibida.

El asesor debe tratar de construir un contexto de colaboración con los profesores, padres de
los alumnos y demás profesionales, compartiendo el significado y el sentido de la intervención
psicopedagógica.

El centro escolar está formado por 6 componentes:

Objetivos (orientan la actividad de la organización y son su razón de ser)

Recursos (patrimonio con que cuenta el centro escolar para lograr sus objetivos; pueden ser
personales, materiales y funcionales)

Estructura (elementos con los cuales se ejecuta la acción institucional)

Tecnología (maneras de ordenar la acción, de planificar, ejecutar y controlar justificadamente

los procesos operativos en un centro; son las acciones y maneras de actuar propias de la
institución)

Cultura (tradiciones, costumbres, reglas, significados, valores; suele ser el elemento que tiene
una influencia más decisiva en los procesos organizativos y gestores)

Entorno

Todos estos componentes interactúan entre sí, se relacionan de manera interactiva y tienen
influencia mutua. En los procesos de intervención psicopedagógica disponemos de ellos como
puertas de acceso para ayudarnos a llevar a cabo nuestra diagnosis. El psicopedagogo debe
tener en cuenta que:

 La actitud con la que actúe es determinante (implicación activa en la resolución de

problemas, trabajo en equipo colaborativo, ausencia de jerarquías)
 La evaluación institucional no es un fin en sí misma, sino un medio para facilitar y
hacer eficaz la intervención
 Elección de determinados elementos, indicadores y procesos y descarte de otros
(discriminar entre lo que es importante evaluar en cada momento y lo que no, en
 función de las necesidades de los alumnos, de los objetivos nuestros y los del centro
escolar)
 Deben utilizarse múltiples fuentes e instrumentos
 La evaluación que realiza el psicopedagogo debería integrarse en las actividades
ordinarias del centro, y no ser algo excepcional
 La evaluación en común debería ser el primer paso para una intervención compartida
(trabajos colaborativos)
 Considerar la madurez y grado de desarrollo del centro

La ayuda psicopedagógica en educación escolar será más sencilla y efectiva si somos capaces
de analizar y diagnosticar a partir de los hechos, valores, costumbres, indicios, que pueden
percibirse en el centro escolar considerado como una globalidad, mirando mas allá de cada
aula. De esta manera se podrán vislumbrar caminos más eficaces para incidir con mayor
certeza en las causas de los problemas. El asesoramiento y la intervención psicopedagógica
deben ser útiles a los centros escolares; debe centrarse en las actividades educativas,
curriculares, organizativas, en las conductas de los alumnos, en las actuaciones del
profesorado, es decir que se convierte en un soporte para toda la institución educativa

Una escuela participativa y autónoma necesita explicitar lo que desea y lo que precisa hacer
(intencionalidades y puntos de vista) desde el consenso de todos los que intervienen en el
hecho educativo; así surgen los planteamientos institucionales.

Los autores entienden por apoyo aquellos recursos y estrategias que:

 promueven el logro de los objetivos de la educación por parte de TODOS los alumnos,
con o sin discapacidades
 Permiten acceder a los recursos, la información y las relaciones propias del contexto
escolar
 Potencian la participación de los alumnos en las tareas escolares y en la comunidad,
facilitando así su satisfacción personal

Apoyos de carácter extraordinario: aquellos que no pueden ser razonablemente facilitados por
el centro y sus profesionales con los medios personales y materiales habituales.

Se clasifican en:

Personales (se requiere la participación de otros profesionales distintos al profesorado

ordinario)

Materiales / tecnológicos (apoyos basados en el concurso de diversos medios materiales y/o

tecnológicos, para facilitar el acceso del alumnado al currículo escolar)

Organizativos (son aquellos basados en el agrupamiento del alumnado, y una organización del
tiempo y de los espacios distinta a la habitual)

Curriculares (cualquier tipo de adaptación y/o modificación de los elementos prescriptivos del
currículo con objeto de ajustar la propuesta curricular a las necesidades del alumnado)
El psicopedagogo que colabora en los centros educativos debería apuntar también a la mejora
de la relación familia-escuela para así ayudar a optimizar las intervenciones educativas de los
dos sistemas y establecer una colaboración real y eficaz entre ambas. El psicopedagogo en
este sentido debe mantener la neutralidad, manteniendo un respeto real sobre sus respectivos
valores, creencias y maneras de hacer; ayudar a los miembros de estos dos sistemas a ponerse
en el punto de vista del otro, para poder entender la situación y colaborar. También destacar y
valorar las actitudes y aspectos positivos de los sistemas y las personas por sobre los negativos.

El trabajo en equipo en los centros es fundamental para impulsar la mejora de la calidad de la

enseñanza y el desarrollo profesional de los docentes (grupos operativos, Bleger); tareas
compartidas.

La intervención psicopedagógica en los centros puede orientarse hacia diferentes campos:

 Dinamización y mejora del trabajo de los equipos

 Análisis y explicitación de la práctica, y la búsqueda y valoración de criterios comunes
asumidos por el equipo
 Tratamiento de la diversidad en sus diferentes niveles

Las tareas de los asesores psicopedagógicos se vinculan a procesos de análisis, valoración y

orientación de la practica educativa. La finalidad básica de toda intervención psicopedagógica
es colaborar para contribuir a mejorar la calidad de la enseñanza y de los procesos y factores
educativos que en ellos tienen lugar; favorecer el desarrollo personal del alumnado.

Una de las prioridades de todo proyecto educativo debe ser conseguir la autonomía de
aprendizaje de los alumnos

Monereo Font y J. Ignacio Pozo – Asesoramiento educativo a examen

Desde una perspectiva constructivista, se sostiene que el asesoramiento educativo debe nacer
de una actitud colaborativa y de construcción mutua entre asesor y asesorado en la definición
y solución de problemas referidos a la educación; es una práctica social. Para la colaboración
hay que estar dispuesto a negociar, a ceder, a asumir responsabilidades.

El asesoramiento en educación consiste en ayudar a mejorar las formas de enseñar y de

aprender

(DEJE EN PAGINA 48)