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 Introducción

El temperamento es una característica importante de la salud social y emocional. El

temperamento describe la manera cómo enfrentamos y reaccionamos al mundo. Es
nuestro “estilo” personal y está presente en nosotros desde que nacemos. Existen tres
tipos de temperamentos, que generalmente se denominan: fácil, de adaptación lenta y
activo.
Otro concepto un poco
más enciclopédico indica que se define al
temperamento como "la suma total de efectos producidos en la vida
psicológica de un individuo por los cambios
químicos o metabólicos que constantemente se
están verificando en todos los tejidos del
cuerpo humano"
(McDougal). El temperamento es el clima o medio
interno, orgánico, y está en relación
estrecha con nuestra vida afectiva.

Para el mismo LaHaye "el temperamento es la

combinación de rasgos que hemos heredado de nuestros
padres. Nadie sabe dónde reside. Es el temperamento de la persona
el que hace que sea abierta y extrovertida o tímida e
introvertida.

Como se puede apreciar los diferentes conceptos pueden ser

simples o complejos, pero todos concuerdan que el temperamento
proviene y reside en el interior del individuo.
 Temperamento Melancólico
El melancólico es profundo: gira en torno a la idea
Construir una personalidad feliz y eficaz es posible. Por esto vale la pena
conocer los puntos fuertes y débiles, y las virtudes que conviene
fomentar. El temperamento melancólico, como todo temperamento, es
un don recibido. Sobre estas características heredadas se puede hacer
surgir un carácter cada día mejor, que fomente la autoestima buena y la
vida amable con los demás.

Puntos fuertes del temperamento melancólico:

• Está inclinado a la contemplación.
• Busca la perfección en todo.
• Es independiente.
• Es paciente y resistente.

Puntos débiles del temperamento melancólico:

• Tiene tendencia a dejarse absorber por sus pensamientos y
sentimientos.
• Teme la acción, en la que irremediablemente se manifiesta la
imperfección debida a la limitación humana.
• Teme la incertidumbre, no le gusta asumir riesgos.
• Está inclinado al pesimismo.
Se inquieta por cosas sin importancia.
Es abnegado, perfeccionista y analítico. Es muy sensible
emocionalmente. Es propenso a ser introvertido, sin embargo, puede
actuar de forma extrovertida. No se lanza a conocer gente, sino
deja que la gente venga a él.
Temperamento Colérico
El colérico es enérgico: está orientado a la acción
El temperamento colérico, con su energía y fuerza, permite grandes
conquistas o desilusiones. Con esta forma de ser heredada se puede
construir una personalidad feliz que da paz a otros, o convertirse en una
carga para uno mismo y los demás. Es útil conocer los puntos fuertes y
débiles, y las virtudes que conviene fomentar.
Puntos fuertes del temperamento colérico:
• Energía, entusiasmo, decisión.
• Tiene confianza en sí mismo: es consciente de sus talentos.
• Es un emprendedor nato: empieza numerosos proyectos.
• Es un gestor nato: hace avanzar las cosas rápidamente.
• Le gusta el poder, se realiza en la competición.
Puntos débiles del temperamento colérico:
• Está inclinado al orgullo y a la ira.
• No dedica un tiempo a pensar antes de decidir.
• Está inclinado a un activismo ciego.
• Tiende a la confrontación y a la dictadura.
• No reconoce fácilmente sus errores.
• En la dirección de personas, le cuesta respetar los sentimientos de
los otros, hacerles crecer y responsabilizarse, servirles.
Temperamento Flemático
El flemático es comedido: busca sobre todo la paz
El temperamento flemático, como los otros temperamentos heredados,
puede ser un lastre o un impulso para una vida feliz. Es posible alegrar la
vida de otros o hacerles sufrir. Sufrir nosotros y hacer sufrir… Con esta
forma de ser cabe construir una personalidad feliz y ser de impulso en la
sociedad. Se necesita, para esto, conocer los puntos fuertes y débiles,
junto con las virtudes que más conviene fomentar para lograr un buen
carácter.
Puntos fuertes del temperamento flemático:
• Su forma de abordar la realidad es desapasionada y científica.
• Sabe escuchar, es empático.
• Tiene un profundo sentido del deber y un buen espíritu de
colaboración.
• Tiene una voluntad de hierro, casi siempre oculta; es constante y
perseverante.
• Es difícil hacerle perder la calma.
Puntos débiles del temperamento flemático:
• Nada en el sentido de la corriente: le gusta el statu quo.
• Evita los conflictos a cualquier precio.
• Tiene miedo a equivocarse.
• Fácilmente se siente superado.
 Temperamento Sanguíneo
El sanguíneo es espontáneo: vive de su relación con las personas
El temperamento sanguíneo se presenta con una nota de alegría. La
persona parece quizá risueña y amistosa. Como los otros temperamentos
heredados, tiene su lado bueno y su lado más complejo. Una persona
sanguínea puede alegrar la vida de los demás y brillar o no. Sobre este
temperamento es posible construir una personalidad armónica, con
rasgos fuertes y duraderos, o dejar que se desmorone poco a poco por no
cuidarla, por no perseverar. También por esto, qué importante es conocer
los puntos fuertes y los puntos débiles. Así, es más fácil ver las virtudes
que conviene fomentar especialmente.

Puntos fuertes del temperamento sanguíneo:

Ama a las personas, quiere hacerlas felices.
Es amistoso, compasivo, comunicativo.
Es emprendedor, le encanta la aventura.
Sus sentidos externos están siempre despiertos: repara en todos los
detalles.
Puntos débiles del temperamento sanguíneo:
Controla mal sus sentidos externos (el oído, la vista, el olfato, el gusto,
el tacto).
La diversión es un aspecto muy importante de su motivación.
Tiende a la superficialidad y a la inestabilidad.
Se siente atraído por todo lo nuevo.
Quiere complacer, y que todo el mundo le quiera.
Bibliografías
 Bibliografía

https://www.monografias.com/trabajos14/temperamentos/temperamento
s
https://eclkc.ohs.acf.hhs.gov/es/salud-mental/articulo/introduccion-al-
temperamento
http://www.paidopsiquiatria.cat/files/modulo-7_temperamento.pdf